HISTORIA Y HUMANIDADES
La epilepsia en el cine. Un nuevo siglo y... ¿una misma perspectiva? Jesús Olivares-Romero
Introducción. La epilepsia es una patología neurológica ampliamente representada en el cine. En las publicaciones sobre el tema, se concluye que la imagen de la enfermedad aparece cargada de sensacionalismo e impregnada de estereotipos como la locura o la posesión. Desarrollo. Se realiza un análisis descriptivo de las crisis que aparecen en 155 películas y se comprueba si las producciones realizadas en el nuevo siglo han conseguido modificar las impresiones previas. En nuestra serie, el porcentaje de crisis que no constituyen epilepsia (pseudocrisis y crisis sintomáticas provocadas) alcanza el 37%. El análisis por grupos de edad del tipo de crisis y su etiología muestra resultados similares a los reales; sin embargo, debe tenerse en cuenta que la distribución etaria de la muestra no coincide con la de la población real. Conclusiones. La epilepsia no consigue desprenderse del componente espiritual que tradicionalmente la acompaña, y las crisis suelen utilizarse como simple apoyo visual, sin excesivo celo en su correcta representación y sin demasiado interés argumental en la enfermedad que las provoca. No obstante, en la última década parecen normalizarse algunos estigmas, como la locura, la violencia descontrolada o el victimismo, que se asociaban a esta enfermedad. Palabras clave. Cine. Crisis. Epidemiología. Epilepsia. Etiología. Pseudocrisis.
Introducción La epilepsia es una patología neurológica que aparece en numerosas producciones cinematográficas. Probablemente, este hecho haya motivado a diversos autores a revisar la relación existente entre el séptimo arte y esta enfermedad. La primera aproximación al tema la realizó Friedman [1], al analizar el asesoramiento neuroquirúrgico recibido por los guionistas de A matter of life and death. En esta película se describen con todo lujo de detalles las crisis uncinadas sufridas por Peter Carter (David Niven) y provocadas por un tumor en el ala del esfenoides. Dan y Christiaens [2] sostienen que el personaje de Dopey, en la película Snow White and the seven dwarfs, padece un síndrome de Angelman, entre cuyo espectro clínico se encuentran las mioclonías y las crisis tonicoclónicas generalizadas. Kerson et al [3] revisaron 20 películas en las que aparecen crisis epilépticas y concluyeron que la imagen de la epilepsia en el cine aparece distorsionada y cargada de sensacionalismo. En la misma línea se pronunció Baxendale [4] tras describir las características de los personajes cinematográficos en función del sexo, el tipo de crisis o el origen de la epilepsia que padecen, y concluyó que la visión que nos
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ofrece el cine sobre esta patología está muy impregnada de estereotipos clásicos, como la locura o la posesión. No obstante, Maio [5] consideró que a partir de la década de los sesenta se produjo un avance en el tema, ya que se estrenaron producciones en las que se promocionaron nuevas actitudes, más realistas, sobre la enfermedad. Recientemente, la revisión realizada por Collado-Vázquez y Carrillo [6] aúna ambas impresiones, al afirmar que, aunque en ocasiones el cine aborde el tema de manera realista, en otros muchos casos contribuye a perpetuar creencias erróneas. Desde otra perspectiva, Kerson y Kerson [7,8] examinaron cómo las crisis influyen en la relación entre los personajes, en la personalidad del que las padece, en cómo son capaces de conducir la acción narrativa del filme o, incluso, en la reacción que provocan en el espectador. En las conclusiones mostraron su preocupación por la influencia social negativa derivada de la asociación cinematográfica de la epilepsia con el victimismo, la violencia o la enfermedad mental, y demandaron que series televisivas de gran audiencia difundan una visión más realista sobre la enfermedad. El objetivo principal de este trabajo es realizar un análisis descriptivo de las crisis que aparecen en el cine, con especial atención a su semiología clíni-
Servicio de Neurología. Hospital Torrecárdenas. Almería, España. Correspondencia: Dr. Jesús Olivares Romero. Etna, 8, 3.º F. E-04008 Almería. E-mail:
[email protected] Aceptado tras revisión externa: 15.05.13. Cómo citar este artículo: Olivares-Romero J. La epilepsia en el cine. Un nuevo siglo y... ¿una misma perspectiva? Rev Neurol 2013; 57: 79-86. Nota: Material audiovisual complementario disponible en: http://youtu.be/8G_ZSK9xAB8. © 2013 Revista de Neurología
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J. Olivares-Romero
Figura 1. Distribución etaria de la muestra.
Figura 2. Comparación entre géneros cinematográficos.
ca y etiología, y comprobar si, con el nuevo siglo, ha variado la visión cinematográfica sobre la epilepsia.
Desarrollo La búsqueda se ha realizado con el apoyo de las referencias bibliográficas de las publicaciones anteriormente mencionadas, de PubMed y, sobre todo, de la base de datos cinematográfica de internet (www.imdb.com). En este sitio web se recoge la práctica totalidad de las producciones cinematográficas mundiales. La página de inicio permite realizar búsquedas a través de palabras clave relacionadas con el argumento y asignadas por el sitio web a cada documento visual. Las palabras clave empleadas han sido: seizure, epileptic fit, epileptic attacks, convulsion, epilepsy, pseudoseizure y nonepileptic attacks. Se descartaron series televisivas, cortometrajes y documentales, y se visualizaron 147 películas en las que se hace mención expresa al padecimiento de epilepsia por parte de algún personaje, en las que se ve alguna crisis epiléptica y en las que se ve una actividad motora que reproduce un ataque epiléptico, aunque el personaje que lo sufre no lo sea. De las que no fue posible ver, se obtuvo toda la información escrita publicada en páginas web de contenido cinematográfico (www.abandomoviez.net, www.rottentomatoes.com, www.filmmakers.com, etc.), y se seleccionaron para su análisis ocho películas en las que la información cotejada dejaba claro que algún personaje había sufrido una crisis epiléptica. Siguiendo los criterios de la Liga Internacional contra la Epilepsia de 1993 [9], las crisis se han clasificado en generalizadas y parciales según su tipo, y en idiopáticas, criptogénicas y sintomáticas según su etiología. La sintomáticas se denominan remotas cuando tienen su origen en una encefalopatía estática o enfermedad progresiva del sistema nervioso central, y agudas o provocadas cuando se asocian a
80
una agresión aguda en el sistema nervioso central (tóxicos, traumatismos, ictus, infecciones, alteraciones metabólicas y enfermedades sistémicas). Los eventos críticos de etiología psicógena (funcionales y por posesión) o rentista se han clasificado como pseudocrisis. La identificación del tipo y etiología de las crisis y pseudocrisis se basa en la experiencia clínica del autor (neurólogo con más de 15 años de práctica hospitalaria). El material obtenido se ha clasificado en producciones hasta el año 2000 (éste excluido) y desde el año 2000. Ambos grupos se han analizado por separado y se han comparado sus resultados. Se han revisado 155 películas, 90 realizadas antes de 2000 y 65 desde ese año hasta 2011. En ambos grupos predominan las producciones americanas, mayoritariamente estadounidenses (el 56% en el total de la serie, el 58% hasta 2000 y el 54% en el nuevo siglo). La contribución de la industria cinematográfica europea ha aumentado ligeramente en la última década (del 26 al 31%), con predominio de películas italianas hasta el año 2000 y británicas desde esa fecha. La aportación del continente asiático es escasa: el 9% hasta 2000 y el 11% desde entonces. Hong-Kong, la India y Japón son los países más representativos. Sólo hay una película oceánica en la muestra (Romper stomper) y ninguna africana. Los personajes masculinos predominan sobre los femeninos, si bien, a partir del año 2000, el porcentaje de mujeres con crisis epilépticas aumenta del 31% al 46%. No existen diferencias en cuanto a la edad, ya que el intervalo más prevalente en ambos grupos es el de 21-50 años (Fig. 1). El drama es el género más frecuentemente representado en el total de la muestra, aunque su por-
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Epilepsia en el cine
Figura 3. Comparación entre tipos de crisis generalizadas.
Figura 4. Comparación entre etiología de las crisis.
Figura 5. Distribución edad/etiología de las crisis en el total de la muestra.
Figura 6. Distribución edad/tipo de crisis en el total de la muestra.
centaje haya disminuido en la última década a costa de un aumento de las películas fantásticas y de terror, y, en menor medida, del thriller (Fig. 2). Hasta el año 2000, el tipo de crisis más frecuente es la generalizada (73%), supremacía que se mantiene en el nuevo siglo (75%). Las parciales han disminuido del 20 al 15%, y las inclasificables aumentan del 7 al 10%. El tipo de crisis generalizada más frecuente es la tonicoclónica, y se aprecia un aumento de éstas en los últimos años (Fig. 3). En las crisis parciales predominan las complejas: el 75% en el total de la muestra, el 83% hasta el 2000 y el 60% desde entonces. Algo menos de la mitad de las crisis parciales termina generalizándose, y esta circunstancia ocurre con mayor frecuencia desde el año 2000. Hasta el año 2000 se recopilaron 34 películas en las que se pudieron identificar crisis de etiología
sintomática (títulos numerados del 1 al 34 en la tabla I); 16 en las que se consideraron idiopáticas al tratarse de crisis tonicoclónicas generalizadas inequívocas en niños, jóvenes o adultos jóvenes sanos sin causa evidente y sin factor provocador reconocido (títulos numerados del 35 al 50 en la tabla I); en nueve se clasificaron como criptogénicas, por aparecer en personajes adultos con crisis parciales inequívocas (títulos numerados del 51 al 59 en la tabla I); en 15, la causa era desconocida (títulos numerados del 60 al 74 en la tabla I); y en 16 se mostraban pseudocrisis (títulos numerados del 75 al 90 en la tabla I). El 53% de las crisis sintomáticas tiene una etiología remota (títulos numerados del 1 al 18 en la tabla I) y el resto son crisis agudas provocadas (títulos numerados del 19 al 34 en la tabla I). Las causas de crisis remotas son variadas, sobresalien-
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81
J. Olivares-Romero
Tabla I. Películas realizadas hasta el año 2000 en las que aparecen eventos epilépticos. N.º
Título
1
Seizure: the story of Kathy Morris
2
An early frost
3
A matter of life and death
4
Deceiver
5
Final approach
6 7
Director
Nacionalidad
Año
Isenberg GI
EE. UU.
1980
Erman J
EE. UU.
1985
Powell M, Pressberger E
R. Unido
1946
Pate J
EE. UU.
1997
Stahl ES
EE. UU.
1991
Gods and monsters
Condon B
R. Unido/EE. UU.
1998
The winning team
Seiler L
EE. UU.
1952
8
The terminal man
Hidges M
EE. UU.
1974
9
Yugpurush
Ghosh P
India
1998
10
Snow White and the seven dwarfs
Cottrell W
EE. UU.
1937
11
Hötsonaten
Bergman I
Francia/Alemania/Suecia
1978
12
Lorenzo’s oil
Miller G
EE. UU.
1992 1999
13
Hong se lian ren
Daying Ye
China
14
Megaville
Lehner P
EE. UU.
1991
15
Saturn (speed of life)
Schmidt R
EE. UU.
1999
16
The gambler
Makk K
P. Bajos/Hungría/R. Unido
1997
17
Let him have it
Medak P
R. Unido
1991
18
Phenomenon
Turteltaub J
EE. UU.
1996
19
Federal agents vs Underwolrd Inc.
Brannon FC
EE. UU.
1949
20
A wedding
Altman R
EE. UU.
1978 1954
21
The Egyptian
Curtiz M
EE. UU.
22
Face off
Woo J
EE. UU.
1997
23
Othello
Burge S
R. Unido
1965
24
Nowhere
Araki G
EE. UU.
1997
25
Peppino e la Vergine Maria
Nasca S
Francia/Italia
1975
26
Montréal vu par… (Rispondetemi)
27
Chattahoochee
28
Lighthouse
29
C’est arrivé près de chez vous
30
One flew over the cuckoos’ nest
Pool L
Canadá
1991
Jackson M
EE. UU.
1989
Hunter S
R. Unido
1999
Belvaux R, Bonzel A
Bélgica
1992
Forman M
EE. UU.
1975 1999
31
The bone collector
Noyce P
EE. UU.
32
The Andromeda strain
Wise R
EE. UU.
1971
33
Outbreak
Petersen W
EE. UU.
1995
34
Scanners
Cronenberg D
Canadá
1981
35
Spring and port wine
Hammond P
R. Unido
1970
36
Laia
37
Fight for life
Lluch V
España
1971
Silverstein E
EE. UU.
1987
38
First do no harm
Abrahams J
EE. UU.
1997
39
La storia
Comencini L
España/Francia/Italia
1985
40
Lamb
Gregg C
R. Unido
1985
Keaton D
EE. UU.
1991
Soderbergh S
EE. UU.
1993 1986
41
Wildflower
42
King of the hill
43
Fighting choice
Fairfax F
EE. UU.
44
Romper stomper
Wright G
Australia
1992
45
Ratas, ratones y rateros
Cordero S
Ecuador
1999
82
do las postraumáticas (Finnal approach, The win ning team, Hong se lian ren y Let him have it) y las debidas a lesiones cerebrales, tanto por accidentes cerebrovasculares previos (Gods and monsters) como por neoplasias (Seizure: the story of Kathy Morris, A matter of life and death y Phenomenom). En dos casos se trata de una epilepsia posquirúrgica (The ter minal man y Megaville), y en otros dos de una epilepsia focal temporal (Deceiver y The gambler). Cuatro se relacionan con enfermedades neurodegenerativas –Yugpurush, Hötsonaten, Lorenzo’s oil y Saturn (speed of life)–, entre las que destacan una adrenoleucodistrofia (Lorenzo’s oil), un parkinsonismo –Saturn (speed of life)– y una epilepsia mioclónica progresiva (Yugpurush). Otras incluyen cuadros como el síndrome de Angelman (Snow White and the seven dwarfs) o el sida (An early frost). Las crisis sintomáticas provocadas obedecen a terapia electroconvulsiva (Face off, Chattahoochee y One flew over the cuckoos’ nest), estímulos luminosos (Light house y The Andromeda strain), traumatismo craneoencefálico –Montréal vu par… (Rispondetemi) y C’est arrivé près de chez vous–, tóxicos (Federal Agents vs Underwolrd Inc), hipertermia en el contexto de procesos sistémicos (Outbreak), estrés (A wedding y Othello) u otros desencadenantes, como un trance místico (The Egyptian), previa a la metamorfosis en una cucaracha (Nowhere) o poseer poderes mentales (Scanners). Aplicando los mismos criterios en cuanto a características de la crisis, morbilidad y edad del personaje a partir del año 2000, la etiología sintomática se identifica en 22 películas (títulos numerados del 91 al 112 en la tabla II); la idiopática en 13 (títulos numerados del 113 al 125 en la tabla II); en siete la criptogénica (títulos numerados del 126 al 132 en la tabla II); en 12 la causa es desconocida (títulos numerados del 133 al 144 en la tabla II); y 11 muestran pseudocrisis (títulos numerados del 145 al 155 en la tabla II). El 41% de las crisis sintomáticas son de etiología remota (títulos numerados del 91 al 99 en la tabla II) y las demás son crisis agudas provocadas (títulos numerados del 100 al 112 en la tabla II). Entre las primeras destacan las postraumáticas (The Jacket, Angel of death e In to the arms of strangers) y las debidas a encefalopatía estática (Tideland y 25 Watts). Otras causas son: posquirúrgica (The other half of me), una ‘disfunción cortical’ (Suden vuosi), un glioblastoma cerebral (Toutes nos envies) y una enfermedad neurodegenerativa (What if god were the sun). Las crisis sintomáticas provocadas son secundarias a terapia electroconvulsiva (Electric dra gon 80.000 V y No time to fear), estímulos luminosos (Bite marks y Stark raving mad), traumatismo cra-
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Epilepsia en el cine
neoencefálico (Hate crime), tóxicos (Harry Potter and the half-blood Prince, Hollow Man, Spiderman, Qi Jian y Splice), hipertermia (Contagion) u otros desencadenantes, como una hipoglucemia en un diabético (Panic room) o el estrés (Mum & Dad). En la figura 4 aparecen los porcentajes comparados de etiología entre ambos grupos. El análisis conjunto de todas las pseudocrisis revela que las de tipo psicógeno son más frecuentes que las simuladas (59% frente a 41%); sin embargo, al comparar los grupos, se comprueba que hasta el año 2000 el predominio corresponde a las simuladas (56%), con un descenso significativo de éstas desde ese año (18%). No existe predominio de sexos en el conjunto de las pseudocrisis, aunque las mujeres son más frecuentes en las psicógenas y los hombres en las simuladas, tanto en el total de la muestra (62,5% y 82%, respectivamente) como en el análisis por grupos (71% y 78%, respectivamente, hasta 2000, y 67% y 100%, respectivamente, desde 2000).
Tabla I. Películas realizadas hasta el año 2000 en las que aparecen eventos epilépticos (cont.). N.º
Título
Director
Nacionalidad
Año
46
La vie de Jésus
47
Epitafium dla barbary radziwillowny
Dumont B
Francia
1997
Majewski J
Polonia
48
I pugni in tasca
Bellocchio M
1973
Italia
1965
49
Mean streets
Scorsese M
EE. UU.
1973
50
Simple men
Hartley H
EE. UU./R. Unido
1992
51
Akira
Ôtomo K
Japón
1988
52
Trip with the teacher
Barton E
EE. UU.
1975
53
Vampire trailer park
Latshaw S
EE. UU.
1991
54
The ruling class
Medak P
R. Unido
1972
55
Being at home with Claude
Beaudin J
Canadá
1992
56
Apur Sansar
Satyajit R
India
1959
57
Un minuto per pregare, un instante per morire
Giraldi F
EE. UU./Italia
1968
58
Hakuchi
Kurosawa A
Japón
1951
59
Promise
Jordan G
EE. UU.
1986
60
Dang doi lai ming
Leong PC
Hong Kong
1984 1948
61
Ladri di biciclette
De Sica V
Italia
Conclusiones
62
The apprenticeship of Duddy Kravitz
Kotcheff T
EE. UU.
1974
63
Night unto night
Siegal D
EE. UU.
1949
El predominio de países como Estados Unidos o el Reino Unido en la serie se debe, en gran medida, a que poseen una industria cinematográfica consolidada que, además, cuenta con una extensa red de promoción y distribución. Otros países, como la India, Japón o Nigeria, con reconocida tradición cinematográfica o amplio consumo interno, se muestran deficitarios en la exportación de su cine, bien por limitaciones económicas o, tal vez, por contrastes culturales (idioma, costumbres, etc.). Este escenario ha podido condicionar la búsqueda realizada, por lo que no puede afirmarse que en el cine asiático, oceánico o africano existan pocas representaciones de la epilepsia ni, tampoco, que éstas sean patrimonio del cine occidental. En el nuevo siglo no se aprecian cambios relevantes al respecto, aunque existen datos de difícil interpretación, como la irrupción de películas rusas o el aumento de producciones chinas (Hong Kong), en coincidencia con el despegue económico que han experimentado estos países. En el cine, las crisis aparecen con mayor frecuencia en el sexo masculino, dato que previamente ya habían comunicado otros autores [4,7]. No obstante, en los últimos años se aprecia un incremento en el número de personajes femeninos con epilepsia, en los que tanto el propio personaje como la enfermedad desempeñan un papel destacado en el argumento. En algunas de estas mujeres, la epilepsia influye en su relación de pareja (The other half of
64
Buddy Boy
Hanlon M
EE. UU.
1999
65
Novecento
Bertolucci B
Italia
1976
66
The faculty
Rodriguez R
EE. UU.
1998
67
Cleopatra
Mankiewicz JL
EE. UU.
1963
68
T’ien hsia di yi
Hu K
Taiwán
1983
69
Priest
70
Night mother
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Bird A
R. Unido
1994
Moore T
EE. UU.
1986 1984
71
Rok Spokojnego Slonca
Zanussi K
Polonia/EE. UU./Alemania
72
Frankie and Johnny
Marshall G
EE. UU.
1991
73
Wahadelko
Bajon F
Polonia
1981
74
The Good humor man
Bacon L
EE. UU.
1950
75
Raat
Varma RG
India
1992
76
Begotten
Elias-Merhige E
EE. UU.
1990
77
Luka’s child
Louzil E
Italia/EE. UU.
1993
78
The serpent and the rainbow
Craven W
EE. UU.
1988
Spotiswoode R
R. Unido
1994
Haynes T
EE. UU.
1995
79
Mesmer
80
Safe
81
Il grande cocomero
82
The crucible
83
PCU
84
Drugstore cowboy
85
Leap year
Archibugi F
Italia
1993
Hytner N
EE. UU.
1996
Bochner H, Walters M
EE. UU.
1994
Van Sant G
EE. UU.
1989
Cruze J
EE. UU.
1924
86
The fugitive
Davies A
EE. UU.
1993
87
The brothers Karamazov
Brooks R
EE. UU.
1958
88
Eraser
Russell C
EE. UU.
1996
89
JFK
Stone O
EE. UU.
1991
90
The twelve chairs
Brooks M
EE. UU.
1970
83
J. Olivares-Romero
Tabla II. Películas realizadas desde el año 2000 en las que aparecen eventos epilépticos. Nº
Título
Director
Nacionalidad
Año
91
Suden vuosi
Saarela O
Finlandia
2007
92
The jacket
Maybury J
EE. UU.
2005
93
Toutes nos envies
Lioret P
Francia
2011
94
What if god were the sun
Tolkin S
EE. UU.
2007
95
The other half of me
Mustizer M
EE. UU.
2001
96
Tideland
Gilliam T
R. Unido/Canadá
2005
Rebella JP, Stoll P
Uruguay
2001
Etheredge P
EE. UU.
2009
97
25 Watts
98
Angel of death
99
In to the arms of strangers
100 Panic room
Harris C
EE. UU.
2007
Fincher D
EE. UU.
2002
101
Harry Potter and the half-blood prince
Yates D
R. Unido/EE. UU.
2009
102
Hate crime
Stovall T
EE. UU.
2005
103
Electric dragon 80.000 V
Ishii G
Japón
2001
104 No time to fear
Korbic M
EE. UU.
2009
Soderbergh S
EE. UU.
2011
106 Hollow man
Verhoeven P
EE. UU.
2000
107
Bite marks
Bessenger M
EE. UU.
2011
108 Stark raving mad
Daywalt D, Schneider D
EE. UU.
2002
Raimi S
EE. UU.
2002
105
Contagion
109 Spider-man 110
Qi Jian
Tsui H
Hong Kong
2005
111
Splice
Natali V
Canadá
2009
112
Mum & Dad
Sheil S
R. Unido
2008
113
The exploding girl
Bradley RG
EE. UU.
2009
114
The brothers Bloom
Johnson R
EE. UU.
2008
115
Carnages
Gleize D
Francia
2002
116
Bee season
McGehee S, Siegel D
EE. UU.
2005
117
The lost prince
Poliakoff S
R. Unido
2003
118
The machinist
Anderson B
España
2004
119
Happy campers
Waters D
EE. UU.
2001
120
Oesters van nam kee
121
Khadak
122
Disappearing acts
123
Dreamland
124
My sister’s keeper
125
The last king of Scotland
De Pimental P
EE. UU./P. Bajos
2002
Brosens P, Woodworth J
Bélgica
2006
Prince-Bythewood G
EE. UU.
2000
Matzner J
EE. UU.
2006
Nick Cassavetes
EE. UU.
2009
Macdonald K
R. Unido
2006
126
Control
Corbijn A
R. Unido
2007
127
Eight crazy night
Kearsley S
EE. UU.
2002
128
Respiro
Crialese E
Italia
2002
129
El aura
Bielinsky F
Argentina
2005
Reyes MA
Filipinas
2008
Winterbottom M
R. Unido
2002
130
My bestfriend’s girlfriend
131
24 hour party people
84
me, The exploding girl, Oesters van nam kee, Di sappearing acts, Respiro y Garden state), y en otras es consecuencia de un evento, como un tumor cerebral (Toutes nos envies) o una violación (Perfect pie), que condiciona su vida e, incluso, puede llegar a ser el nudo argumental que sostiene el film (Su den vuosi). A pesar de que la prevalencia de la epilepsia aumenta significativamente en la vejez [10], la gran mayoría de los personajes de la muestra analizada, con independencia de la época, tiene una edad inferior a los 50 años (Fig. 1). Probablemente, este dato sólo sea el reflejo de la tendencia general del cine de mostrar jóvenes atractivos. La distribución etaria de la muestra, por tanto, no coincide con la de la vida real, por lo que no sería correcto establecer paralelismos entre cine y realidad. No obstante, resulta curioso comprobar cómo, en el conjunto de la serie, la distribución del tipo de crisis y su etiología por grupos de edad coinciden con los publicados para la población real [10]: predominio de crisis generalizadas idiopáticas en edades precoces, incrementándose con el paso de los años las crisis parciales de origen sintomático (Figs. 5 y 6). Esta observación no se modifica en los últimos años. El predominio del drama en nuestra serie coincide con los resultados obtenidos por otros autores [4,7], y puede justificarse porque la epilepsia es una enfermedad y, en consecuencia, un factor generador de tensión y conflictos. El impacto provocado por el cine de terror asiático al inicio del siglo xxi motivó la proliferación de películas de dicho género en las que es frecuente observar eventos epilépticos como manifestación de posesiones espirituales (The exorcism of Emily Rose, Constantine, Gothika, Shir yôha, Muoi, Season of witch y The Simpson movie). Esta tendencia se traduce en un incremento de este tipo de pseudocrisis, que pasan del 25% hasta 2000 al 64% desde esa fecha. Por contra, con el nuevo siglo han disminuido las producciones realizadas para televisión (del 10% al 5%). En estas películas, generalmente de temática social o histórica, la epilepsia como enfermedad suele tener relevancia argumental. Al igual que en estudios previos [4], el tipo de crisis más frecuentemente observado en nuestra revisión es la crisis tonicoclónica generalizada (Fig. 3). Teniendo en cuenta la naturaleza visual del medio, es lógico pensar que los realizadores recurran a ellas, dada su espectacularidad y el potencial representativo que poseen. El aumento que ha experimentado en los últimos años va asociado al ya referido incremento de pseudocrisis posesivas, ya que en su gran mayoría tales eventos se escenifican me-
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Epilepsia en el cine
diante este tipo de crisis. En ocasiones, y desde una perspectiva científica, la representación cinematográfica de la crisis muestra algunos defectos. El más frecuente es la ausencia de poscrisis tras una actividad motora generalizada (A wedding, Face off, Othe llo, King of the hill, Dang doi lai ming, Buddy boy, Rok spokojnego slonca y Frankie and Johnny), error que se sigue manteniendo en las producciones más recientes (Splice, Dreamland, Eight crazy night, Zhit y Perfect pie), y que es habitual en las sintomáticas agudas provocadas. Desde el punto de vista etiológico, lo primero que debería destacarse es que la suma de pseudocrisis y crisis sintomáticas agudas provocadas supone el 37% de la muestra (36% hasta 2000 y 38% desde esa fecha), y que, por tanto, el porcentaje de crisis que no constituyen epilepsia es apreciable. Del mismo modo, la abundancia de este tipo de crisis, en las que la causa desencadenante es evidente, justificaría que en tres de cada cuatro películas revisadas haya sido posible establecer su origen, y que la etiología sintomática sea la más prevalente hasta el año 2000 (Fig. 4), frente a los resultados obtenidos por otros autores, que señalan la causa idiopática como la más repetida [4]. Llama la atención el descenso de las lesiones cerebrales como origen de crisis remotas en la última década, mientras que los traumatismos craneales continúan desempeñando un papel destacado, ya sea generando crisis remotas o agudas provocadas. No obstante, las referencias explícitas a la etiología de las crisis, consi derándolas como verdadera epilepsia, son escasas (Seizure: the story of Kathy Morris, A matter of life and death, Deceiver, Gods and monsters, The win ning team, First do no harm, Fighting choice, Suden vuosi, Toutes nos envies, The other half of me, The exploding girl y The exorcism of Emily Rose), aunque hay que reconocer que en los últimos años algunas películas han contado con un buen asesoramiento neurológico (Deceiver, Suden Vuosi y The exorcism of Emily Rose) y otras han mostrado personajes con un síndrome tan bien caracterizado como la epilepsia mioclónica juvenil (The exploding girl). La asociación entre crisis epilépticas y delincuencia o violencia ya ha sido analizada por otros autores [4,6]. En las películas realizadas antes de la entrada del nuevo siglo, la mayoría de las pseudocrisis simuladas se utilizaba para enmascarar un delito (Ladri di biciclette y The brothers Karamazov) o como elemento de distracción para su comisión (PCU, Drug store cowboy, The fugitive, Eraser, JFK y The twelve chairs). También podían hallarse personajes epilépticos abocados a la delincuencia por su situación social (Let him have it, Romper stomper, Ratas, ratones
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Tabla II. Películas realizadas desde el año 2000 en las que aparecen eventos epilépticos (cont.). Nº
Título
132
Gromozeka
133
Todo lo que tú quieras
134
Garden state
135
Tigerland
136
Zhit
Bykov Y
Rusia
2010
137
C+ Jing taam
Oxide PC
Hong Kong
2007
138
Perfect pie
Willis Sweete B
Canadá
2002
139
Black hawk down
Scott R
EE. UU.
2001
140 The last request
DeBellis J
EE. UU.
2006
141
The house of Usher
Cloake H
EE. UU.
2006
142
Urbania
Matthews J
EE. UU.
2000
143
Chuen jik sat sau
144
The invasion
145 146
Director
Nacionalidad
Año
Kott V
Rusia
2011
Mañas A
España
2010
Braff Z
EE. UU.
2004
Schumacher J
EE. UU.
2000
To J, Wai KF
Hong Kong
2001
Hirschbiegel O
EE. UU.
2007
The exorcism of Emily Rose
Derrickson S
EE. UU.
2005
Constantine
Lawrence F
EE. UU.
2005
147
Gothika
Kassovitz M
EE. UU.
2003
148
Shiryôha
Hayama Y
Japón
2005
Tae-kyeong K
Corea del Sur
2007
Sena D
EE. UU.
2011
149
Muoi
150
Season of witch
151
The Simpson movie
Silverman D
EE. UU.
2007
152
Ben-X
Balthazar N
Bélgica
2007
153
The Cell 2
Iacofano T
EE. UU.
2009
154
Der krieger und die kaiserin
Tykwer T
Alemania
2000
155
Book of blood
Harrison J
R. Unido
2009
y rateros y La vie de Jésus) y, en el extremo más exagerado, otros que se transformaban en violentos asesinos durante una crisis (Deceiver, The terminal man, Trip with the teacher y Being at home with Claude). A partir del año 2000, siguen realizándose películas en las que se establece esta asociación (An gel of death, No time to fear, Hollow man, Stark ra ving mad, Mum & Dad, The brothers Bloom, El aura, Zhit y Chuen jik sat sau); sin embargo, el estereotipo de enajenación mental crítica capaz de transformar en asesino al que la sufre y el recurso de simular una pseudocrisis para distraer parecen haber desaparecido de las pantallas. Un hecho conocido es la asociación real [11] y cinematográfica [6,7] de epilepsia y problemas psiquiátricos. Esta relación se consolida con el paso de los años (8% hasta 2000 a 10% desde esa fecha) y no varía en cuanto al espectro de trastornos asociados
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J. Olivares-Romero
–abusos en la infancia (Priest y Perfect pie), autismo (My bestfriend’s girlfriend y Gromozeka), psicosis ictales (The terminal man, Trip with the teacher y Respiro), obsesiones (Safe) y manía (The ruling class)–, pero sí respecto a su visión como una tara para el que los padece (The winning team, Yugpurush, La storia, Lamb, Wildflower, I pugni in tasca, Mean streets y The ruling class). En tres películas, los personajes se suicidan (Night mother, Control y 24 hour party people), decisión que conecta la ficción con la realidad, ya que las tasas de suicido son mayores en la población epiléptica que en la general [12]. La mortalidad durante la crisis queda reflejada en varias producciones. Lo más habitual es que la actividad convulsiva sea la manifestación motora que precede al fallecimiento –Montréal vu par… (Rispondetemi), Luka’s child, The serpent and the rainbow, Hate crime, No time to fear y Todo lo que tú quieras–. Otras veces la crisis provoca accidentes mortales (C+ Jing taam), posible muerte súbita (La storia y Todo lo que tú quieras) e, incluso, se utiliza como excusa para un asesinato (Lamb). Como ya han apuntado otros autores [4], la conclusión más importante que puede obtenerse de esta revisión es que, a pesar del paso de los años, la representación cinematográfica de la epilepsia no consigue desprenderse del componente espiritual que tradicionalmente la acompaña, y que las crisis suelen utilizarse como simple apoyo visual, sin excesivo celo en su correcta representación y sin demasiado interés argumental en la enfermedad que las provoca. De hecho, sólo en el 28% de las pelícu-
las realizadas antes de 2000 y en el 25% de las producciones posteriores a esa fecha, la epilepsia desempeña un papel destacado en el argumento. No obstante, en la última década, sí parecen normalizarse algunos estigmas, como la locura, la violencia descontrolada o el victimismo, que se asociaban a esta enfermedad. Bibliografía 1. Friedman DB. A matter of fried onions. Seizure 1992; 1: 307-10. 2. Dan B, Christiaens F. Dopey’s seizure. Seizure 1999; 8: 238-40. 3. Kerson JF, Kerson TS, Kerson LA. The depiction of seizures in film. Epilepsia 1999; 40: 1163-7. 4. Baxendale S. Epilepsy at the movies: possession to presidential assassination. Lancet Neurol 2003; 2: 764-70. 5. Maio G. The presentation of disease and medicine in film. Film stereotypes of epilepsy. Fortschr Neurol Psychiatr 2001; 69: 138-45. 6. Collado-Vázquez S, Carrillo JM. La epilepsia en la literatura, el cine y la televisión. Rev Neurol 2012; 55: 431-42. 7. Kerson TS, Kerson LA. Implacable images: why epileptiform events continue to be featured in film and television. Epileptic Disord 2006; 8: 103-13. 8. Kerson TS, Kerson LA. Truly enthralling: epileptiform events in film and on television –why they persist and what we can do about them. Soc Work Health Care 2008; 47: 320-37. 9. Commission on Epidemiology and Prognosis. International League Against Epilepsy: guidelines for epidemiologic studies on epilepsy. Epilepsia 1993; 34: 592-6. 10. Hauser WA, Annengers JF, Kurland LT. Incidence of epilepsy and unprovoked seizures in Rochester, Minnesota: 1935-1984. Epilepsia 1993; 34: 453-68. 11. Tellez-Zenteno JF, Patten SB, Jetté N, Williams J, Wiebe S. Psychiatric comorbidity in epilepsy: a population-based analysis. Epilepsia 2007; 48: 2336-44. 12. Christensen J, Vestergaard M, Mortensen PB, Sidenius P, Agerbo E. Epilepsy and risk of suicide: a population-based case-control study. Lancet Neurol 2007; 6: 693-8.
Epilepsy in films. A new century and… the same old perspective? Introduction. Epilepsy is a neurological pathology often represented in film. The literature on the subject concludes that the image of the disease is laden with sensationalism and imbued with stereotypes such as madness or possession. Development. We provide a descriptive analysis of the seizures that appear in 155 film and analyze whether productions of the new century have succeeded in changing earlier impressions. In our series, the percentage of seizures that are not epilepsy (pseudoseizures and induced symptomatic seizures) reaches 37%. The analysis by age of seizure type and etiology of these shows similar results to the true population, however it should be noted that the age distribution of the sample does not match the true population. Conclusions. Epilepsy has not shed the spiritual component that traditionally accompanies it and that seizures tend to be used as simple visual aids, without excessive diligence in its correct representation and without much reference in the plot to the disease that causes them. However, in the last decade stigmas associated with this disease such as insanity, uncontrolled violence or victimization tend to normalize. Key words. Aetiology. Epidemiology. Epilepsy. Film. Pseudoseizure. Seizure.
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