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IES SIERRA DE GUADARRAMA DEPARTAMENTO DE CIENCIAS SOCIALES 1º ESO
UNIDAD 3: (2ª pate) LA VIDA EN LA PREHISTORIA
1. LA PREHISTORIA. ETAPAS
2. ESTUDIO DE LA PREHISTORIA Cómo vimos en el punto anterior, el estudio de esta etapa es muy complicado, pues se conservan muy pocos restos y al no existir testimonios escritos, debemos fiarnos de los restos arqueológicos (herramientas, huesos, etc.) que arqueólogos y paleontólogos encuentran y posteriormente estudian. Su lugar de
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trabajo son los yacimientos (lugar donde se encuentran los restos) y su instrumento de trabajo los fósiles. Además, deben completar sus estudios con otros especialistas como genetistas, antropólogos, etc., son las llamadas ciencias auxiliares (ya lo vimos en la unidad 2). El trabajo en los yacimientos exige un trabajo previo de investigación y localización en el espacio. Cuadricular el terreno, excavar por estratos, catalogación de los restos, datación, obtención del ADN, limpieza y restauración de los fósiles, etc… Hay mucho trabajo hasta la presentación de los resultados obtenidos y cualquier hipótesis que surge de la investigación puede cambiar ante el descubrimiento de nuevos restos que aportan nueva información. Con respecto a nuestros antepasados, la mayoría de los restos encontrados están en África, cuna de la humanidad y lugar muy propicio para las excavaciones. En Asia y Europa también hay importantes descubrimientos, destacando en España los encontrados en Atapuerca, que es uno de los yacimientos que no sólo ha aportado muchos restos, sino que también ha abierto nuevas líneas de evolución de nuestros antepasados (homo antecesor). Trabajos en Atapuerca Principales hallazgos de homínidos en África
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3. EL PALEOLÍTICO Fue la primera etapa de la Prehistoria y abarcó desde el surgimiento del ser humano (recordad que el primer ser del género Homo es el Habilis, aproximadamente hace 2,5 millones de años) hasta hace unos 10.000 años. La palabra Paleolítico significa “piedra antigua” y hace referencia a las herramientas de piedra que los seres humanos fabricaron durante este período, durante el cual también se dominó el fuego y se establecieron las primeras creencias religiosas.
A. Vida en el Paleolítico En este período los seres humanos vivían de la caza y la recolección, eran depredadores. Por ello eran nómadas, se desplazaban en busca de frutos y siguiendo a las manadas de animales. De ellos obtenían carne, pieles para abrigarse, cuero para el calzado y huesos para elaborar instrumentos. El lugar en el que vivían dependía no solo de este desplazamiento, sino también del clima. En este periodo alternaron períodos glaciales en los que el hielo cubría grandes extensiones de terreno y períodos inter-glaciales en los que las temperaturas eran más moderadas. Su organización social era muy simple ya que los grupos humanos eran pequeños, tribus, formados por una o unas pocas familias (unas 20-30 personas) con lazos de sangre o parentesco. Aunque el trabajo esta poco especializado y todos participan en las tareas, muchas de las cuales se hacen colectivamente (como la defensa), es posible que algunos miembros tuvieran más importancia que otros, como el guerrero más fuerte o el curandero.
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La vida era muy dura y los seres humanos ocupaban casi todo su tiempo en buscar alimentos. No había protección contra las enfermedades y cualquier percance podía provocar la muerte. Además la esperanza de viada era muy corta, poco más de veinte años. Las técnicas de fabricación de instrumentos evolucionaron con el tiempo y permiten establecer tres etapas en la evolución de este período. En el Paleolítico Inferior (2,5 millones – 125.000 aprox.), el Homo Habilis desarrolló las primeras herramientas que eran cantos rodados (Chopper) de los que se aprovecha un filo cortante obtenido al golpearlo con otro (percutor). Posteriormente, el Homo Erectus utilizó piedras como el sílex, un piedra que al ser golpeada se rompe en laminas que pueden ser utilizadas como cuchillos o puntas de flecha. En el Paleolítico Medio (125.000- 35.000 aprox.), el hombre de Neandertal es capaz de fabricar bifaces, hachas de piedra que cortan por las dos caras. En el Paleolítico Superior (35.000- 10.000 aprox.), el Homo Sapiens Sapiens es capaz de fabricar instrumentos de pequeño tamaño además de objetos de hueso o madera como arpones, anzuelos o agujas para coser.
B. Las primeras creencias En el Paleolítico Medio se documentan las primeras manifestaciones religiosas a través del culto a los muertos, que se entierran con armas y adornos. Adoraban a espíritus y a las fuerzas de la naturaleza (rayos, lluvia, sol…). Realizaban ritos para favorecer la caza y la fertilidad.
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Hace unos 80.000 años el hombre de Neanthertal entierra a sus difuntos con ajuar funerarios, es decir, objetos personales (adornos, herramientas, armas, pieles…) que quizá podría necesitar en el “más allá”. Además, realizaban ritos funerarios (acompañados de flores, conchas, etc.)
C. El Arte. Hace unos 35.000 años, en el Paleolítico superior, los seres humanos empezaron a realizar pinturas y esculturas, son las primeras manifestaciones artísticas: la pintura rupestre y el arte mobiliar. Las pinturas rupestres, que hasta ahora se creían exclusivas de Sapiens Sapiens, fueron realizadas ya por neandertales (cueva de Nerja, en Málaga), y se realizan sobre los techos y las paredes de las cuevas y abrigos, en zonas de difícil acceso, lo que hace pensar que quizá fueran santuarios y que las pinturas se utilizaran para rituales mágico - religiosos. La mayoría de las pinturas se han encontrado en la fachada cantábrica española y en el sur de Francia. Representan fundamentalmente animales, por ejemplo bisontes, ciervos y caballos, realizados con gran realismo. Utilizan colores como el rojo, negro, ocre obtenidos a partir de sustancias naturales (carbón, oxido de hierro) mezcladas con grasa animal. Además, las tribus transportaban con ellas pequeñas estatuillas de piedra o madera. Algunas son amuletos y adornos, otras son figuras votivas, estatuas femeninas de pequeño tamaño que se hacían para favorecer la fecundidad.
Venus de Willendorf
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4. LA REVOLUCIÓN NEOLÍTICA. Hace unos 10.000 años, los grupos humanos dejaron de ser depredadores para ser productores, nace la agricultura y la ganadería y, con ellas una gran cantidad de cambios que nos permiten establecer una nueva etapa en la Prehistoria: el neolítico “piedra nueva”, aunque este cambio fue uno de los menos importantes. El clima cambió. Tras la última glaciación el clima se volvió más cálido y húmedo en Europa y más seco en el Próximo Oriente, provocando que algunas especies de animales y plantas desaparecieran. Los seres humanos tuvieron que adaptarse y buscar nuevas formas de alimentarse. Con el descubrimiento de la agricultura y la ganadería la economía se transformó en productora, el hombre ya no depende del medio, sino que lo domina y lo transforma. Posiblemente el descubrimiento de la ganadería y la agricultura se deba a la observación de la naturaleza. Se produce por primera vez en el Oriente Medio y posteriormente en China y América. En el resto del mundo la agricultura y la ganadería se aprenden por el contacto con pueblos que la conocen. Las primeras especies animales domesticadas fueron la oveja, la cabra, la vaca, el cerdo, el perro, el reno y el asno, dependiendo de las zonas; las primeras especies vegetales también varían de un lugar a otro, trigo en Oriente Medio y Europa, arroz y mijo en Asia y, maíz, mandioca y patata en América. El descubrimiento de la agricultura y la ganadería supuso un cambio radical en la forma de vida y en la organización social. La importancia de este cambio fue tal que suele hablarse de “revolución neolítica” para referirse a él (concepto de V. Gordon Ghilde), puesto que abarca todos los ámbitos: - Los pueblos agrícolas se hicieron sedentarios, lo que significa que se asientan de forma permanente en un lugar, permanecen cerca de los campos de cultivo. - De esta manera surgen aldeas y poblados, primero de cabañas y luego de casas de piedra y adobe. Con el tiempo muchas de ellas pasan a ser ciudades. - Al mejorar la alimentación la población aumentó. Los poblados tienen más miembros que las tribus, por lo que fue necesario crear organizaciones sociales y políticas más complejas. La necesidad de dirigentes que organizasen la vida comunitaria dio lugar a la aparición de jefes que acabaron acaparando el poder
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político y religioso. Surge así una primitiva división social entre miembros dominantes y trabajadores que pronto evolucionara hacia primitivas formas de Estado. - El trabajo se especializó. Ya no es necesaria la participación de todos los miembros en la búsqueda de alimentos por lo que algunos miembros pueden dedicarse a la elaboración de utensilios. Nacen así la cerámica, la cestería o el tejido. Las herramientas se hacen ahora con piedra pulimentada.
Con el neolítico apareció un gran número de nuevos utensilios (molino) y actividades manufactureras como la fabricación de tejidos (telares, husos) y la cerámica (decorada). - La abundancia de productos agrícolas o ganaderos favorece el intercambio de los mismos entre las aldeas, nace el comercio. Las creencias religiosas durante el Neolítico se centraron en el culto a los astros, por considerar que regulaban los ciclos agrícolas. Se conserva el culto a los muertos que se entierran con aguares funerarios cerca de los poblados. Las manifestaciones artísticas también se modificaron y ampliaron, ya que aparecen nuevas formas, como la cerámica. Perviven las pinturas rupestres, aunque ahora se realizan en abrigos rocosos abiertos al exterior y son más esquemáticas y menos realistas.
Familia neolítica. Kurkur.Talh (Egipto)
Imagen de Caza Valltorta (Castellón)
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5. LA EDAD DE LOS METALES La última etapa de la Prehistoria, y a caballo con los inicios de la escritura (y por lo tanto de la Historia en algunas regiones), recibe el nombre de Edad de los Metales por la importancia que tuvo la metalurgia, aunque no fue el único gran descubrimiento de la humanidad. Marcada por un constante perfeccionamiento del trabajo del metal, este período suele dividirse en tres etapas marcadas por el metal que se emplea en cada una de ellas.
En torno al 4.000 a de C. las sociedades urbanas del Creciente Fértil descubrieron los procedimientos y técnicas para extraer, elaborar y modelar herramientas de metal. El primer metal que utilizaron fue el cobre, un metal poco resistente, que se trabajaba de manera sencilla y se utilizaba para hacer joyas y objetos de adorno. La búsqueda de metales más resistentes llevó en el 2.200 aprox., al empleo del bronce, una aleación de cobre y estaño mucho más resistente. Esta aleación permitía crear todo tipo de utensilios, herramientas agrícolas, armas, recipientes, joyas, estatuas, etc. Finalmente, en torno al año 1.000 el hombre aprende a trabajar el hierro.
Trabajo sobre el metal: golpear el cobre con un martillo de piedra (1); forja: metal golpeado previamente calentado (2); fundición: el bronce se calienta en un horno y se pone en un molde; favorece las aleaciones (3) .
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El descubrimiento de los metales introdujo importantes novedades respecto al período anterior: 1) Aunque la economía sigue basándose en la agricultura y la ganadería el trabajo del metal cobra gran importancia. 2) El trabajo se diversificó aún más, favoreciendo el incremento del comercio. 3) La necesidad de obtener metales llevó a algunos grupos a buscarlos fuera de su entorno. Se crean las primeras rutas comerciales, las rutas de los metales, que llegan a centro Europa. 4) Los poblados crecieron en tamaño y número de habitantes, convirtiéndose algunos de ellos en ciudades, que aunque pequeñas, pudieron albergar a miles de habitantes. La mayoría de ellas se rodearon de murallas que las protegían de los ataques de los enemigos. 5) Las sociedades se hicieron más complejas. Aumentaron además las desigualdades, ya que los pueblos y las personas que poseían el metal se impusieron al resto de la sociedad y a otros territorios. Las ciudades pasaron a estar gobernadas por un rey, que junto a los más ricos, sacerdotes y guerreros, adquirieron cargos y privilegios mientras el resto de la población (artesanos y campesinos) vivían pobremente. 6) El trabajo de los metales favoreció la aparición de otros inventos como: o La rueda: que mejora el transporte al permitir el uso de carros, y mejora la alfarería al usar el torno de alfarero. o El arado: que permitió labrar una mayor extensión de terreno en menos tiempo, favoreciendo el aumento de la producción.
Durante la Edad de los Metales, los seres humanos construyeron monumentos con grandes bloque se piedra llamados megalitos (mega –grande, lithos – piedra). La función de estas construcciones es funeraria, aunque algunas se interpretan como templos. Los principales tipos de monumentos megalíticos son: a) Menhir, grandes piedras alargadas clavadas en el suelo verticalmente. El más grande del mundo mide 20 metros y pesa 350 toneladas. b) Alineamientos, son filas de menhires paralelas. c) Dolmen, construcción con grandes piedras verticales sobre la que descansa una o varias horizontales creando un espacio interior que se utiliza como enterramiento colectivo.
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d) Los sepulcros de corredor, formados por una cámara funeraria a la que se accede por un largo pasillo. Al igual que el dolmen se utiliza como enterramiento colectivo. e) Crómlech están formados por menhires dispuestos en círculos. El más grande es el de Stonehenge, en Reino Unido, que se usaba como santuario al sol o para la observación de los astros.
En la Edad de los Metales la evolución de las distintas regiones del planeta fue muy desigual, en algunos lugares las culturas evolucionaron, inventaron la escritura y avanzaron hacia la Historia, mientras que en otros permanecieron en la Prehistoria mucho tiempo. La región más evolucionada fue el Oriente Medio, donde Egipto y Mesopotamia desarrollaron, hace unos 5.000 años las primeras civilizaciones complejas que marcan el comienzo de la Historia. Poco después, en el Extremo Oriente se desarrollan las civilizaciones de China e India. Europa tuvo un desarrollo desigual. Creta, Micenas y Grecia evolucionaron en el I milenio antes de Cristo a una civilización desarrollada con una escritura propia, el resto se mantuvo en la Prehistoria ya que aunque sí trabajó el metal, no desarrolló la escritura. En América el desarrollo fue diferente, ya que no desarrollaron el metal, pero si existían grandes ciudades, importantes avances científicos y, en algunos casos, escritura.
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