Eunice Yolanda Betancourt Guerrero Universidad de Los Andes-Táchira [email protected]

¿ ¿Cómo enseñar el uso de las letras mayúsculas?

¿Cómo enseñar el uso de las letras mayúsculas?

Introducción Diseñar estrategias didácticas para incentivar el proceso de enseñanza – aprendizaje en los niños de hoy día, es una de las ventajas que ofrece una educación menos tradicionalista que se preocupa por explotar todas la capacidades y destrezas que los docentes perciben en los estudiantes. La intención de esta propuesta pedagógica es brindar la posibilidad a los jóvenes de construir conocimientos sólidos acerca de la normativa por la que se rige el uso de las letras mayúsculas.

Justificación Es cierto que la mayoría de los estudiantes de bachillerato no tienen el dominio ortográfico necesario a la hora de producir textos escritos, debido a que, quizás, el uso de la lengua escrita en el mundo de la tecnología y de las imágenes (p.e. teléfonos celulares, chats) es una de las causas por la que ha disminuido el interés por conocer y aplicar las reglas ortográficas, pero no se puede dejar a un lado el papel del educador, quien en muchos casos no sabe despertar en sus alumnos un interés genuino por el acto de leer y escribir. Es

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por esto que se hace necesario diseñar, aplicar y evaluar propuestas pedagógicas en las que se realicen diversas estrategias y se motive realmente a los jóvenes en la producción de textos escritos, con el fin de rescatar la importancia de la escritura y al mismo tiempo dar las posibilidades a los alumnos de construir aprendizajes que los ayuden a tener un mejor dominio ortográfico.

Marco teórico En el idioma español, cada uno de los signos y símbolos gráficos que se usan en el momento de escribir son llamadas letras y se dividen en mayúsculas y minúsculas. Las letras mayúsculas son las que tienen mayor tamaño, distinta forma y se emplean, con mayor frecuencia, cuando se escribe un nombre propio o si va seguido de un punto seguido o aparte, y las letras minúsculas son de menor tamaño que las mayúsculas y se emplean normalmente en la escritura, salvo en los casos que se hace necesario el uso normativo con respecto a las letras mayúsculas. Sin duda alguna, existen un sin fin de manuales de ortografía en los cuales las reglas del uso de las mayúsculas son redactadas de manera diferente, sin embargo, esto no debe causar preocupación por el hecho de que todas fueron desarrolladas con base en la normativa de Real Academia Española . La Ortografía de la Lengua Española (1999) presenta una normativa bastante extensa (43 normas) sobre el uso de las letras mayúsculas en su última edición, lo cual conlleva a que, en algunos casos, aplicar las reglas sea más complicado y difícil de lo que parece.

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El uso de la normativa establecida se empieza a conocer desde el inicio de los años escolares (a partir del 3er. grado de la 1era Etapa de la Educación Básica), pero, en muchas ocasiones, el olvido o su poco uso y el desinterés de los docentes por reforzar los contenidos conlleva a reiteradas equivocaciones en los textos escritos producidos. Por otro lado, dentro de la escritura se ha observado otro problema referente al tema en desarrollo, las personas, con el empleo de los mensajes de texto cortos por celular o con la idea

de destacar algo que tiene

importancia, abusan del uso de las mayúsculas sin hacer caso a la reglas establecidas (p.e. “Stoy en mi Ksa, Qando viene?”). Es por ello que se hace necesario exponer de manera clara las reglas del uso de las letras mayúsculas tomando como punto de referencia la Ortografía de la Real Academia Española (1999). A continuación se presentarán las reglas que se consideran más usadas por los jóvenes, ya que, en algunos casos, enseñar ciertas normas expuestas en la Ortografía de la RAE (1999) sería innecesario, porque sólo se usan en casos específicos y esto podría saturar a los alumnos con información que no aplicarán en su producción textual, por ejemplo: El uso de las letras mayúsculas en los textos jurídicos y administrativos, para el verbo que encabeza lo que se va a decir: CERTIFICA, EXPONE.

Reglas del uso de las letras mayúsculas seleccionadas para esta experiencia didáctica Se escriben con letra inicial mayúscula: La primera palabra de cualquier escrito. La primera palabra después de punto. Después de los signos de interrogación y exclamación i .

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Después de dos puntos en el encabezamiento de una carta o en las citas textuales, es decir, en la reproducción fiel de las palabras de alguien. Después de puntos suspensivos si lo que les sigue es otra oración distinta. Cuando se deba empezar con mayúscula una palabra que empiece por Ch o Ll, sólo se escribirán así la C y la primera L Los nombres propios (de personas, de animales, geográficos) y apellidos. Los nombres de divinidades y los atributos divinos, es decir, las palabras referidas a Dios o a la Virgen María. Los nombres de fiestas religiosas. Los sobrenombres y apodos. Los nombres de entidades, instituciones, organismos y colectividades. La primera palabra de los títulos de los libros, cuadros, obras musicales, películas, piezas teatrales, esculturas, entre otras. Las abreviaturas de tratamiento, aunque la palabra completa va en minúscula, ejemplo: Sr. (señor), Prof. (profesor). Los nombres de épocas, períodos históricos o hechos famosos. Si constan de más de una palabra, todas ellas se escriben con mayúscula ii . Los nombres de ciencias, técnicas y disciplinas académicas. La primera palabra de los nombres latinos de las especies animales y las plantas, que además deben ir en cursiva. Los símbolos químicos, los números romanos.

Se escribe con letra inicial minúscula: La primera palabra después de dos puntos cuando sigue una enumeración sencilla. En los diálogos, la palabra inicial de los incisos del narrador y la de los verbos de dicción (decir, preguntar, contestar). Los días de la semana, los meses y las estaciones del año. Los nombres de las religiones y de los miembros de órdenes religiosas, los gentilicios y denominaciones de razas y tribus. Los nombres de las monedas.

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Muchas de las reglas seleccionadas para la elaboración de esta experiencia se pueden encontrar en diversos libros de castellano del 8º grado de Educación Básica (Castellano y Literatura 8º de Tovar D. y González N., 2002; Castellano y Literatura tercer año Ciclo Básico de Vargas R., 1992; y Castellano y Literatura 8º grado de Casanova, M. y Pérez, C., 1989), como la número 1, 2, 5 y 11. No obstante, se hizo necesario la inclusión de otras reglas que los libros no toman en cuenta, pero, a mi parecer, son importantes a la hora de desarrollar los contenidos con respecto a la normativa por la que se rigen las letras mayúsculas, de las cuales se pueden citar la 8, 9 y 10.

Marco metodológico Recolección de la Muestra La experiencia pedagógica, “Cómo enseñar el uso de las letras mayúsculas", se inició con un diagnóstico realizado a los alumnos del 8º año de bachillerato de la sección “A” de la Escuela Básica Táchira (institución pública), en la cátedra de Castellano y Literatura. Se exploró el uso correcto de las mayúsculas a través de la producción de un texto narrativo con la intención de conocer el dominio de la normativa. Dicho texto se realizó con base en las experiencias vividas por los alumnos en su día a día, por el hecho de que manifestaron que se les hacía tedioso redactar un escrito que tuviese relación con los temas desarrollados en clase, o con alguna lectura recomendada en la que tuviesen que esforzarse por su comprensión y análisis. El día de la aplicación de la prueba diagnóstica se recolectó un total de diez y nueve (19) textos, de los cuales se usó para el desarrollo de la experiencia solo dieciséis (16). Es importante mencionar que la sección posee un total de

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veinticuatro (24) alumnos y solo se trabajó con dieciséis (16) textos, porque, para la fecha de inicio de la experiencia, cinco (5) alumnos estuvieron ausentes; y posteriormente al revisar las pruebas se observó que tres (3) textos del total recolectado no poseían suficiente extensión (por ejemplo, escribían solo tres líneas, una por párrafo) para el análisis del uso correcto de las mayúsculas. Es preciso indicar que se hizo la trascripción fiel de los textos del Corpus A realizados por los estudiantes, es decir, no se hizo corrección ortográfica y se respetó la distribución gráfica del contenido.

Análisis del Corpus A (Diagnóstico) Esta experiencia pedagógica se desarrolló con base en el análisis lingüístico del Corpus A (ver Anexo Nro. 1), en el que se observarían las diversas dificultades que los alumnos presentaron con respecto a las reglas para el uso de las mayúsculas. Este análisis se realizó texto por texto para poder identificar las dificultades individuales tomando como punto de partida la Ortografía de la Lengua Española (1999): Sin duda alguna, se observaron diversos equívocos en los textos producidos por los jóvenes. Luego de la revisión, los resultados dieron a conocer que cinco (5) escritos del total, que equivalen al (6,4%), poseían dificultades en el uso de las mayúsculas después de punto y aparte. Ejemplo tomado del Texto 8 del Corpus A: A vuelto a salir. -¿lo conoces?

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-si era muy trabajado le ayudaba a todo el mundo, se lo llevo una creciente (...)

Y luego de punto seguido. Ejemplo tomado del Texto 14 del Corpus A (...) se fue con Juan para el pozo porque: en el pozo se reflejava la Luz Dorada Te acuerdas. si claro padre yo me acuerdo de esa noche que se undieron ellos dos.

Sin embargo, existe menos dominio en el uso de las mayúsculas al referirse a nombres propios de personas, de animales, geográficos, ya que de un total de dieciséis (16) escritos, nueve (9) presentaron dificultades en este aspecto, equivalen al 22,1%. Se podría tomar como ejemplo de lo explicado

un

pequeño fragmento del Texto 2 del Corpus A, en el que el estudiante no domina el uso de las mayúsculas en el caso de nombres propios de personas: (...) ¡mira pedro hay una laguna para bañarnos! y le dice jose claro hay nos podemos bañar ¿pero mario le dice? (...)

En el siguiente ejemplo, tomado del Texto 9 del Corpus A, se puede observar que el estudiante presentó dificultades en el uso de las mayúsculas en casos de nombres de lugares: El estado tachira ha estado desde hace mucho tiempo, con sus paisajes, calles (...)

En trece (13) textos, equivalentes al 71,3%, se observaron usos de las mayúsculas sin estar apegados al uso normativo de la RAE. Los educandos le dieron uso a la mayúscula sin importar el tipo de palabra, ya que no se referían a nombres propios de personas, de animales, geográficos y tampoco se localizaban luego de punto seguido y/o aparte. Estos casos se clasificaron en el Corpus A como uso incorrecto general. Cabe mencionar que durante el

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desarrollo de la experiencia se realizaron diversas entrevistas que ayudaron a determinar algunas de las causas por las que los niños realizaban ciertos usos erróneos referentes al uso de las letras mayúsculas. El siguiente caso, referido a lo anteriormente expuesto, se presenta, ya que algunos alumnos suponen que el verbo debe ir escrito con la primera letra en mayúscula. Veamos el ejemplo tomado del Texto 8 del Corpus A: Las mulas salieron Corriendo y luego se regreso a buscar a su esposa porque se Habia quedado paralizada (...)

O en su totalidad en mayúscula por el hecho de que es quien da a conocer la acción del sujeto y, por tanto, se le debe dar la “importancia” necesaria que, según algunos, se logra con la mayúscula inicial o general, por ejemplo, en el Texto 1 del Corpus A: (...) y no deja de ser fastidiosa intenta VERSE vien pero no lo logra.

Del mismo modo, se observó que en algunos casos los jóvenes utilizan la mayúscula para iniciar una palabra, que no se encuentra después de punto seguido o punto y aparte. Ejemplo tomado del Texto 10 del Corpus A: Se enamoro por completo de ella; asi Dios creo el Dia y la Noche, creo el Ciel o y la Tierra (...)

En este caso, posiblemente le quieren dar una importancia singular o una entonación de voz más fuerte a la hora de ser leído el texto producido. Sin duda alguna, son diversas las dificultades que los alumnos presentan referente al tema de estudio. Los casos encontrados se refieren a la ausencia de las mayúsculas seguidas de punto seguido y aparte, en los nombres propios de personas, geográficos, y los problemas más notorios que se

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observaron en los textos fue el del uso erróneo de las mayúsculas en palabras que no se ajustan al uso según las normas establecidas.

Presentación de la propuesta Al tener claras las dificultades que presentan los alumnos, por medio del diagnóstico, con respecto al uso correcto de las mayúsculas se hace necesario plantear una propuesta didáctica que los ayude a mejorar notablemente su domino de la normativa. Para la elaboración de dicha propuesta se tomó como base el Programa de Estudio de 8º Grado Tercera Etapa de Educación Básica, ubicándose en el objetivo 4.1 “Redactar textos con fluidez y claridad ajustándose a las técnicas sugeridas y tomando en cuenta la coordinación y subordinación”, sabiendo que este objetivo presenta diversos contenidos que mencionan el uso de la normativa, se trabajará específicamente con los signos de puntuación enfatizándose en el uso correcto de las mayúsculas.

Desarrollo de la propuesta Para el desarrollo de la propuesta se hizo necesaria la utilización de 6 horas académicas (45 minutos), las cuales se dividieron en bloques de 2 horas por clase.

1º clase (martes 6 de marzo de 2007) Para iniciar la clase se generó una discusión acerca del tema a desarrollarse, con el fin de conocer las ideas previas que los alumnos tenían sobre del uso de las mayúsculas. Desde un primer momento se notó que algunos de los alumnos conocían con certeza las reglas del uso correcto de las mayúsculas,

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sin embargo, expresaron que muchos de los errores que cometían a la hora de producir textos se debían a que les parecía tedioso estar pendientes de la ortografía, puesto que realmente lo importante era transmitir un mensaje. Por otra parte, hubo otros alumnos que también manejaban cierta información acerca del tema, pero en ocasiones se les olvidaba utilizar las reglas ortográficas con respecto al uso de las mayúsculas. Luego de la exploración de los conocimientos previos se dio inicio a la clase teórica, realmente importante a la hora de construir aprendizajes significativos en los jóvenes, en la que se explicó oralmente de forma clara y precisa las reglas que se debían tomar en cuenta a la hora de utilizar las mayúsculas haciendo énfasis en las principales dificultades que presentaron los alumnos en el Corpus A (diagnóstico) y teniendo como apoyo ejemplos (propuestos por la docente) que los ayudasen a crear un esquema mental que les sirviese a la hora de producir sus textos escritos. Finalmente, se concluyó la clase con una actividad práctica que constó de la entrega de un texto de tres párrafos (ver Anexo Nro. 2), el cual poseía, en algunos casos, el uso correcto de las mayúsculas y, en otros, el uso incorrecto, como por ejemplo: palabras escritas todas en mayúscula, palabras con letras mayúsculas intercaladas, nombres propios con la inicial en minúscula, después de punto seguido y/o aparte palabra iniciada con minúscula. El objetivo principal era que el alumno logrará identificar con color verde los usos correctos y con color rojo los usos incorrectos. La docente evaluó los textos y detectó que algunos usos erróneos persistían, por lo que diseñó un nuevo ejercicio.

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2º clase (viernes 9 de marzo de 2007) Para el inicio de la 2º clase se retomó el tema del uso correcto de las mayúsculas. Primero, se hizo un recuento, con las intervenciones de los estudiantes, del tema desarrollado en la clase pasada con el fin de afianzar los conocimientos para de ese modo comenzar con una práctica que constó de la revisión de un minicuento de 2 párrafos (ver Anexo Nro. 3), en el que los alumnos debían argumentar por qué las palabras resaltadas en verde tenían el uso correcto de las mayúsculas y, por el contrario, las palabras resaltadas en rojo no usaban correctamente las mayúsculas. Este texto narrativo fue editado por la docente, es decir, se alteraron usos de las letras mayúsculas y minúsculas. Para la lectura y elaboración de la actividad se dio a los alumnos un máximo de 60 minutos (todos terminaron en el tiempo planificado). La corrección, por parte de los propios alumnos, se promovió con la intención de que los jóvenes observaran tanto los errores propios como los de sus compañeros, y de esa manera poder reforzar los contenidos en los que se consiguieran más dificultades de uso con respecto a las mayúsculas. Finalmente, luego de la auto corrección, se concluyó la clase de manera satisfactoria, porque los alumnos manifestaron su agrado por la actividad de coevaluación (efectuada por primera vez).

3º clase (martes 13 de marzo de 2007) Para iniciar la clase se realizó la misma estrategia utilizada en las dos anteriores, se hizo un repaso de los contenidos desarrollados en las clases pasadas con el fin de recolectar la muestra final (Corpus B) para poder observar, a través del análisis de los resultados, la influencia que tuvo la experiencia en los alumnos.

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La actividad constó de la redacción de un texto narrativo de 4 párrafos, en un tiempo de 45 minutos (todos lo hicieron en el tiempo establecido), en relación con experiencias vividas por los alumnos. Se les indicó que debían tomar en cuenta los contenidos y actividades desarrolladas en clases anteriores. Al concluir esta actividad, la docente devolvió a los jóvenes los primeros escritos que realizaron al inicio de la experiencia sin marcas de evaluación, para que ellos mismos los corrigieran en el aula de clase, y así tomaran conciencia de la evolución que habían logrado desde el inicio de las actividades. Seguidamente de la auto corrección se generó una discusión, en la cual los alumnos dieron a conocer su opinión con respecto al trabajo desarrollado durante toda la experiencia. Sus opiniones fueron bastante positivas por el hecho de que los jóvenes expresaron su interés por mejorar su manera de escribir. Con esta actividad de evaluación, se dio final a la experiencia pedagógica dentro del aula de clase.

Análisis de los datos del Corpus B La segunda muestra consta de un total de dieciséis (16) textos, la misma cantidad que en la prueba diagnóstica (Corpus A) En el uso de las mayúsculas luego de punto seguido y/o aparte no se observó ningún error en los textos, los alumnos mostraron un dominio de las regla s del uso de las mayúsculas en todos los casos analizados (ver Anexo Nro. 4), como ejemplo tomaremos un fragmento del Texto 2 del Corpus B:

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Las personas del pueblo se reian al verlo caminar y el se ponia a llorar. Un dia el niño iba caminando por el bosque y se encontro con un viejito y se asusto pero(...)

Por otro lado, el margen de error de los alumnos en cuanto al uso de las mayúsculas en nombres propios de personas y geográficos fue de dos (2) casos que equivalen al 10,5% del total. Ejemplo del Texto Nº 7 del Corpus B: Fui para Valencia con mi tio Fernando, él me llevo para el cine del(...)

Los usos generales incorrectos, en los que se encuentran las palabras escritas con la inicial en mayúscula sin estar seguida de punto seguido y/o aparte, las palabras que poseen una mayúscula intercalada y los verbos escritos con la inicial o en su totalidad en mayúscula, dieron una cantidad de diecisiete (17) casos que equivalen al 89,4 % del total de usos incorrectos de los textos del Corpus B. Luego de finalizar las sesiones de clases y el análisis del Corpus B, se inició el análisis de los resultados finales para comparar la evolución de los alumnos desde el inicio de la experiencia pedagógica hasta su culminación.

Análisis comparativo de los resultados de los Corpus AyB Luego del análisis de los resultados, hubo notables mejoras en todos los alumnos que participaron en la experiencia pedagógica. La evolución de los alumnos con respecto al uso de las mayúsculas luego de punto seguido y/o aparte fue bastante notoria, ya que en la primera muestra (Corpus A) se encontraron ocho (8) casos en los que no hicieron uso de las

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normas establecidas en la Ortografía de la RAE (1999); mientras que en la revisión de la segunda muestra (Corpus B), no se observó ningún error en los textos, mostrando los alumnos total dominio de las reglas en el uso de las mayúsculas. En relación con el uso de las mayúsculas en nombres propios de personas y toponímicos hubo un total de dos (2) casos presentados, siendo una cifra muy reducida en comparación con los resultados del Corpus A, que arrojó un total de veintisiete (27) casos. Por otro lado, una de las dificultades más notorias en los textos del Corpus A se presentó en el uso de las mayúsculas en palabras escritas totalmente en mayúscula, otras con mayúsculas intercaladas dentro de la palabra o iniciadas con mayúscula sin ser nombres propios o toponímicos y sin estar después de punto seguido y/o aparte con un total de ochenta y siete (87) casos, siendo una cifra bastante alta en comparación con los resultados del Corpus B que dieron un total de diecisiete (17). Sin duda alguna, hubo una gran disminución en los usos erróneos de las mayúsculas en los textos, aunque posiblemente, los resultados obtenidos se dieron, porque los alumnos tenían conciencia de que estaban siendo evaluados o porque en todas las clases se reforzaban los conocimientos acerca del tema de estudio. Es por ello que convendría retomar más adelante los contenidos del uso de las mayúsculas, para observar la influencia que tuvo, a largo plazo, esta experiencia pedagógica.

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Recomendaciones En los casos que se presentaron dificultades en el uso de la mayúscula, se notó que luego de las sesiones de clase dedicadas al tema de estudio, hubo notables mejoras, sin embargo, en el uso incorrecto general, las dificultades disminuyeron, pero, no se eliminaron por completo en los textos. Es por ello que se hace necesario recordar y evaluar el tema del uso de las mayúsculas en las clases posteriores sin importar el objetivo que se esté desarrollando. Asimismo, sería recomendable que el/la docente creara y desarrollara diversas

estrategias

que

ayuden a los estudiantes a afianzar los

conocimientos sobre el uso de las mayúsculas, como por ejemplo, revisar los primeros textos elaborados por los alumnos para identificar las dificultades, desarrollar actividades que ayuden a los jóvenes a construir conocimientos sólidos acerca del tema y posteriormente devolverles los textos realizados en el inicio de la experiencia y darle s la posibilidad de que se autoevalúen, para que de esa forma interioricen y resuelvan los errores cometidos en un principio. Es recomendable que los docentes tomen conciencia de que las dificultades de los educandos pueden iniciarse debido al descuido y poco interés que demuestran en la evolución ortográfica de los mismos. En fin, no sólo los estudiantes son culpables de poseer dificultades en su proceso de enseñanza-aprendizaje, esta problemática también recae sobre el docente, ya que el principal objetivo de su profesión es diseñar y aplicar estrategias pedagógicas-didácticas que ayuden en la evolución cognitiva de los jóvenes.

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Conclusión En muchas ocasiones se observa que los educadores de hoy día toman en cuentan los contenidos programáticos en diminutos lapsos de tiempo con el fin de desarrollar los temas y evaluarlos sin ningún tipo de estrategias planificadas, lo cual conlleva a que el alumno estudie de manera mecanizada y no logre construir conocimientos significativos. Si los docentes pusiesen mayor empeño en el proceso de enseñanza de sus jóvenes, si evaluarán constantemente todos los contenidos durante el año y si lograran despertar el interés de los alumnos por su educación no encontraríamos tantas dificultades en el aprendizaje de los educandos. Sin duda alguna, hubo normativas que algunos de los estudiantes no dominaron en su totalidad (los nombres propios de personas, de animales, geográficos y apellidos) luego de las clases dedicadas al desarrollo de los contenidos referidos a las letras mayúscula s, no obstante, los textos que presentaron usos erróneos no poseían más de un caso. Otro de los problemas encontrados en los textos del Corpus B se refirieron a los usos incorrectos generales que dieron un total de 17 casos,

siendo una cifra mínima en

comparación a los resultados que se obtuvieron en el Corpus A. Es importante aclarar que quizás los buenos resultados que se obtuvieron en esta experiencia se deben a la cercanía que existía entre las clases y evaluaciones, por esta razón, se debería realizar, luego de cierto tiempo, alguna actividad evaluativa en la que los docentes puedan conocer la influencia que tuvo el trabajo realizado con respecto a las letras mayúsculas en la producción escrita de estos alumnos.

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Referencias Bibliográficas Casanova, M. y Pérez, C. (1989). Castellano y Literatura 8º grado. Escuela Básica. Editorial Larense, C.A. Caracas – Venezuela. Ministerio de Educación. Programa de Estudio 8º Grado Tercera Etapa de Educación Básica (1987) Castellano y Literatura. Caracas – Venezuela. Vargas, R. (1992). Castellano y Literatura Tercer Año Ciclo Diversificado. Barcelona – España: Editorial Nueva América. Tovar D. y González N. (2002). Castellano y Literatura 8º. Editorial Básica 1. Minas de Baruta - Miranda Real Academia Española (1999). Ortografía de la Lengua Española. Madrid: Editorial Espasa Calpe, S. A. Normas para citar según APA. Consultado el 24 de marzo de 2007.http://formacionenlinea.edu.ve/formacion_educadores/formacioneducadores/curso-apa/unidad2/guion13.html

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Anexo Nro. 1: Tabla general de usos correctos e incorrectos de las mayúsculas del Corpus A (diagnóstico) Nº de texto

Nº palabras

de

Total de uso

%

Total

correcto

Uso

incorrecto

Correcto

de

uso % Uso incorrecto

1

104

6

4,4

13

10,6

2

136

6

4,4

16

13,1

3

151

11

8

5

4

4

82

7

5,1

2

1,6

5

94

7

5,1

5

4

6

189

8

5,8

8

6,5

7

219

8

5,8

11

9

8

184

15

11

11

9

9

190

10

7,3

10

8,1

10

189

18

13,2

10

8,1

11

144

2

1,4

7

5,7

12

119

8

5,8

6

4,9

13

100

7

5,1

6

4,9

14

207

9

6,6

13

10,6

15

83

8

5,8

0

0

16

65

6

4,4

0

0

TOTAL

2256

136

100%

122

100%

55

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Anexo Nro. 2 REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA Ministerio de Educación, Cultura y Deporte Escuela Básica Táchira San Cristóbal – Táchira Práctica de Castellano (Uso correcto de las mayúsculas) Identifica en el siguiente texto el uso correcto e incorrecto de las mayúsculas. Resalta con color verde los casos correctos y con color rojo los casos incorrectos. La joven del abrigo largo. Por Vicente Huidobro Cruza todos los días la plaza en el mismo sentido. es hermosa. Ni ALTA ni baja, Tal vez un poco gruesa, Grandes ojos, nariz regular, Boca de fruta madura que azucara el aire y que no quiere caer de la rama. Sin embargo, tiene un gesto AMARGADO y siempre Lleva un abrigo largo y suelto. Aunque haga un calor excepcional. Esa prenda no cae jamás de su cuerpo. Invierno y verano, Más grueso o Más delgado, siempre el sobretodo como escondiendo algo. ¿es que ella es tímida? ¿Es que tiene vergüenza de tanta calle inútil? ¿Ese abrigo es la Fortaleza de un secreto sentimiento de inferioridad? No sería raro. Por eso tiene un estilo que No Sabría definir, pero que, seguramente, cualquier Arquitecto conoce. Tal vez Tiene el talle muy alto o muy baJo, o no tiene cintura. tal vez quiere ocultar un embarazo demasiado largo, de algunos años. O será para Sentirse más Sola o para que todas sus células Puedan Pensar mejor. Saborea un recuerdo adentro de ese claustro lejos del mundo. Acaso quiere sólo ocultar que su padre COMETIÓ un crimen cuando ella Tenía quince años.

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Anexo Nro. 3 REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA Ministerio de Educación, Cultura y Deporte Escuela Básica Táchira San Cristóbal – Táchira Práctica de Castellano (Uso correcto de las mayúsculas) Con base en el siguiente texto argumente por qué las palabras resaltadas en verde son de uso correcto de mayúsculas y las resaltadas en rojo son de uso incorrecto. El hombre que aprendió a la ladrar. Por Mario Benedetti. Lo cierto es que fueron arduos años de pragmático y arduo aprendizaje, con lapsos de desaliento en los que estuvo a punto de desistir. pero al fin triunfó la perseverancia y raimundo aprendió a ladrar. No a imitar ladridos, como suelen hacer algunos chistosos o que se creen tales, sino verdaderamente a Ladrar. ¿Qué lo había impulsado a ese adiestramiento? antes sus amigos se autoflagelaba con humor: “La verdad es que ladro por no llorar”. Sin embargo, la razón más valedera era su amor casi franciscano hacia sus hermosos perros. Amor es comunicación. ¿Cómo amar entonces sin comunicarse? Para raimundo representó un día de GLORIA cuando su ladrido fue por fin comprendido por leo su hermano perro, y (algo más Extraordinario aún) él comprendió el ladrido de Leo. A partir de ese día leo y raimundo se tendían, por lo general en los atardeceres, bajo la glorieta y dialogaban sobre temas generales. A pesar de su amor por los hermanos perros, Raimundo nunca había imaginado que leo tuviera una tan sagaz visión del mundo. Por fin, una tarde se Animó a preguntarle, en varios sobrios ladridos: “dime, leo, con toda franqueza: ¿qué opinas de mi forma de ladrar?” La respuesta de Leo fue escueta y sincera: “Yo diría que lo haces bastante bien, pero Tendrás que mejorar. Cuando ladras, todavía se te nota el acento humano.”

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Anexo Nro. 4: Tabla general de usos correctos e incorrecto s de las mayúsculas del Corpus B Nº de texto

Nº de palabras

Total

de

correcto

uso

%

Total

de

uso

%

Uso

incorrecto

Uso incorrecto

Correcto 1

128

23

13,9

3

15,7

2

141

6

3,6

0

0

3

147

12

7,2

3

15,7

4

112

11

6,6

3

15,7

5

213

9

5,4

0

0

6

217

15

9

1

5,2

7

166

7

4,2

3

15,7

8

97

9

5,4

3

15,7

9

143

10

6

0

0

10

302

13

7,8

0

0

11

56

11

6,6

0

0

12

60

5

3

2

10,5

13

163

6

3,6

0

0

14

160

15

9

1

5,2

15

209

7

4,2

0

0

16

89

6

3,6

0

0

TOTAL

2403

165

100%

19

100%

Notas finales 1

Cuando estos signos van seguidos de coma, punto y coma o dos puntos se utiliza minúscula o

si la interrogación o la exclamación ocupan sólo la segunda parte de la oración. 1

Los artículos y preposiciones que se incluyen dentro de un nombre propio se suelen escribir

en minúscula, sin embargo, se debe tener en cuenta que los artículos a veces forman parte de algunos nombres propios, en cuyo caso se escribe con mayúscula (p.e. La Habana).

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