Discurso del Secretario general de la OEA en la ceremonia de toma de posesión del Presidente de AMERIPOL, Comisario Juan José Andrade Morales 15 de enero de 2014

El marco en el que esta ceremonia tiene lugar, la presencia de su Excelencia la Sra. Presidenta de la República de Costa Rica, Dra. Laura Chinchilla y su distinguido Gabinete, la participación de tan distinguidas personalidades, hablan por sí solos de la importancia y proyección que, en no más de seis años de existencia efectiva, ha alcanzado la Comunidad de Policías de América.

Felicito muy sinceramente al Sr. Comisario Juan José Andrade Morales por su elección como Presidente de esta Comunidad y le deseo el mayor de los éxitos en su labor. En particular le auguro que la relación entre la Comunidad de Policías de América y la Organización de los Estados Americanos avance se haga más intensa y más poderosa en el curso de los próximos meses.

A lo largo de sus seis años de fructífera labor, AMERIPOL ha logrado formular un Sistema Hemisférico de Acción para la Seguridad y la implementación de un “Modelo de Cooperación Policial bajo una estrategia regional enfocada en Siete Retos Estratégicos”.

Ha contribuido a la

profesionalización de más de 18.000 funcionarios policiales mediante diversos eventos académicos de capacitación y entrenamiento policial. Ha diseñado y puesto en marcha

una Plataforma para el intercambio de

información segura. Ha elaborado y difundido más de 20 publicaciones. Ha

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certificado su sistema de gestión de calidad a partir de la implementación de la norma ISO 9001:2008. Y ha puesto en funcionamiento herramientas tecnológicas que, como el Office Communicator, cuenta ya con casi medio centenar de usuarios en el campo de la seguridad pública de nuestro continente.

Han sido sin duda seis años intensos y altamente productivos, durante los cuales esta asociación voluntaria y auto convocada de instituciones policiales ha llegado a convertirse en una institución imprescindible para la coordinación y el desarrollo de capacidades de las policías de nuestro Hemisferio.

En lo personal no puedo dejar de manifestar mi profunda satisfacción por estos logros. Ellos demuestran que no estábamos equivocados en la Secretaría General de la OEA cuando decidimos, en 2011, en el marco de la reunión de la Asamblea General en San Salvador, suscribir un Acuerdo de Cooperación con esta Comunidad de Policías. Hoy día dos oficiales de policía de dos distintas instituciones policiales de las Américas se desempeñan en nuestra sede en Washington como enlaces con AMERIPOL y con ellos hemos dado un último paso en la intensificación de nuestra relación.

¿Por qué decidimos acercarnos a AMERIPOL y por qué creemos que esta Comunidad debe seguir fortaleciendo y ampliando sus actividades? Porque compartimos plenamente sus objetivos. Desde hace muchos años y en diferentes escenarios la Secretaría General de la OEA ha advertido acerca de la formidable amenaza representada por el delito transnacional organizado. 2

Hemos señalado una y otra vez que este adversario no reconoce fronteras ni nacionalidades, que coordina transnacionalmente sus actividades con una alta eficacia y que ocupa crecientemente nuevas y más sofisticadas capacidades tecnológicas.

En ese contexto es particularmente importante lograr que nuestras fuerzas policiales también tengan algún grado de coordinación y sobre todo que sean uniformes en sus capacidades. Que las debilidades de algunas de ellas no signifiquen un santuario para el delito transnacional. Que el rezago de algunas no anule las capacidades de otras. Por años desde la OEA hemos planteado la necesidad de superar asimetrías entre nuestras policías, de lograr la uniformidad de capacidades y de visiones entre ellas.

Finalmente hemos encontrado esa misma voluntad en la Comunidad de Policías de América. AMERIPOL no sólo hace de ese su primer objetivo, sino que lo ha puesto en práctica y durante los últimos años, como he señalado, lo ha traducido en la preparación de casi veinte mil efectivos policiales en diferentes actividades de formación.

Y los avances en esta materia los han logrado no sólo mediante cursos, seminarios, conferencias y especializaciones sino también mediante el intercambio de información útil para la labor policial, por intermedio de proyectos de investigación, transferencia de tecnología, intercambio de conocimiento, buenas prácticas, lecciones aprendidas y experiencias técnicocientíficas. Y además de estas actividades AMERIPOL coordina ya la asistencia judicial recíproca en materias de investigaciones, procesos y actuaciones judiciales relacionadas con los delitos transnacionales. 3

Por todo ello es que en la Secretaría General de la OEA no sólo estamos convencidos de la necesidad de nuestra relación con AMERIPOL, sino que ésta debe ser aún más intensa, hasta lograr la integración formal de la Comunidad al Sistema Interamericano. En nuestra opinión es absolutamente imprescindible que todas las importantes actividades que ya realiza la Comunidad de Policías de América cuenten con un marco jurídico adecuado y sabemos que este marco sólo puede ser proporcionado por la Organización que aglutina a los Estados de las Américas.

La integración de AMERIPOL al Sistema Interamericano debería dejar perfectamente establecida, en primer lugar, la amplitud de esta Comunidad, esto es el hecho que esté abierta a la integración de instituciones policiales nacionales o federales de todos los países de las Américas, sin distinción ni restricción de subregiones o áreas específicas. La integración de AMERIPOL al sistema Interamericano debería ser explícita, también, de la subordinación de la Comunidad a una autoridad política. Como todos sabemos en la actualidad todas las instituciones miembros de AMERIPOL están subordinadas a la autoridad política de sus respectivos países. Sin embargo la Comunidad como tal no lo está y, al carecer de una referencia en el marco jurídico interamericano, es en la práctica un organismo autónomo sujeto sólo a su propio Estatuto y normas. La integración de AMERIPOL al Sistema Interamericano debería consagrar por ello enunciados que indiquen claramente la participación y atribuciones de los Entes Gubernamentales correspondientes en materia de seguridad, de modo que las actividades de cooperación que AMERIPOL desarrolle en el

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futuro no queden circunscritas exclusivamente al ámbito policial sino que tengan un carácter gubernamental. Como es sabido, en el marco de la IV Reunión de Ministros en materia de Seguridad Pública de las Américas (o MISPA IV), los Estados participantes en esa reunión decidieron encargar a la Secretaría General de la OEA la realización de un análisis jurídico, técnico y presupuestal que permita identificar y definir una vía para que AMERIPOL sea parte del Sistema Interamericano. Quiero aprovechar el magnífico marco que me proporciona esta ceremonia para anunciar que ya hemos realizado ese estudio y que prontamente lo entregaremos a los Ministros de Seguridad de las Américas por intermedio del Sr. Ministro de Gobernación, Policía y Seguridad Pública de Costa Rica, licenciado Mario Zamora Cordero, actual Presidente de MISPA.

Esperamos que, sobre la base de este Informe, los Estados de las Américas puedan convenir en el futuro próximo alguna forma de integración de la Comunidad de Policías de América al Sistema Interamericano y, de ese modo, establezcamos el marco jurídico necesario para la importante labor de formación y capacitación que

las instituciones policiales de nuestro

continente ya están realizando.

Si ese objetivo se logra no tengo dudas que se habrá dado el primer paso para el desarrollo de una capacidad continental muy superior a la actual en materia de enfrentamiento y reducción del delito organizado en nuestro hemisferio. De esa manera estaremos dando cumplida satisfacción al deber de nuestros Estados de velar por la seguridad de sus ciudadanos, de modo

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que estos puedan vivir libres de miedos al mismo tiempo que libres de necesidades.

No tengo dudas Sr. Comisario Juan José Andrade Morales que, bajo su liderazgo en AMERIPOL, esos objetivos se verán facilitados, como tampoco dudo que las autoridades de Costa Rica contribuirán sin restricciones, como han hecho hasta ahora, a ese gran objetivo.

Felicito nuevamente al Sr. Comisario Andrade Morales por su elección y le reitero mis deseos de éxito en su gestión. Igualmente agradezco al Sr. Ministro Zamora Cordero y a la Sra. Presidenta Laura Chinchilla por el apoyo que permanentemente han prestado a la Organización de los Estados Americanos en esta y otras iniciativas en procura del bienestar de nuestros ciudadanos.

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