Lección III-2

El Plan de Dios para Nosotros: El Nuevo Pacto EL MENSAJE DE SALVACIÓN: PARTE 1 1

INTRODUCCIÓN: No hay otra cosa más importante en todo el mundo que el mensaje de salvación que Dios dio a los hombres. Al mismo tiempo, no hay cosa más mal entendida y más mal enseñada. La Biblia es bien enfática al decir que hay un solo mensaje de salvación (Gálatas 1:6-9), pero es posible encontrar muchas versiones diferentes en el mercado religioso de nuestro siglo. Es de gran importancia distinguir entre el mensaje verdadero y los incontables mensajes equivocados, en circunstancias de que el primero tiene el poder de salvarnos, mientras que los demás sólo sirven para nuestra condenación eterna. Si hay un solo mensaje, el predicado por los apóstoles y preservado para nosotros en las páginas del Nuevo Testamento, nos conviene, entonces, olvidar toda otra fuente de información, y dedicarnos a estudiarlo para asegurarnos de tener y seguir el mensaje original, el cual nos puede salvar eternamente. El propósito de estas lecciones es presentar, en la forma más clara y completa posible, el mensaje original que Dios nos ha preservado en las Escrituras. Es necesario que tengamos siempre en mente la responsabilidad de considerar los mandatos de la palabra en su conjunto, sin aislar nunca uno de tal manera que nuestra conclusión vaya en contra de lo enseñado por otros. Así estudiaremos todas las cosas por las cuales viene la salvación, así como las cosas que no la traen. Se ruega poner mucha atención a las Escrituras y a su mensaje, recordando que podemos perder nada menos que la salvación eterna por seguir (o predicar) un mensaje de salvación diferente del original. Gálatas 1:6-10 6 Me asombra que tan pronto estén dejando ustedes a quien los llamó por la gracia de Cristo, para pasarse a otro evangelio. 7 No es que haya otro evangelio, sino que ciertos individuos están sembrando confusión entre ustedes y quieren tergiversar el evangelio de Cristo. 8 Pero aun si alguno de nosotros o un ángel del cielo les predicara un evangelio distinto del que les hemos predicado, ¡que caiga bajo maldición! 9 Como ya lo hemos dicho, ahora lo repito: si alguien les anda predicando un evangelio distinto del que recibieron, ¡que caiga bajo maldición! 10 ¿Qué busco con esto: ganarme la aprobación humana o la de Dios? ¿Piensan que procuro agradar a los demás? Si yo buscara agradar a otros, no sería siervo de Cristo. 2 Juan 9-11 9 Todo el que se descarría y no permanece en la enseñanza de Cristo, no tiene a Dios; el que permanece en la enseñanza sí tiene al Padre y al Hijo. 10 Si alguien los visita y no lleva esta enseñanza, no lo reciban en casa ni le den la bienvenida, 11 pues quien le da la bienvenida se hace cómplice de sus malas obras. En las palabras sabias de Thomas Campbell, escritas en el año 1809: "No nos atrevemos a asumir ni proponer las pequeñas diferencias indefinidas que hacen que las verdades y deberes revelados sean esenciales o no esenciales; estando firmemente convencidos de que, no importa su relativa importancia, el hecho de que la alta autoridad divina los ha revelado y mandado hace absolutamente necesaria 1

nuestra creencia y obediencia, en la medida que los conocemos. Además, ser ignorantes de cualquier cosa revelada por Dios no puede ser ni nuestro deber ni nuestro privilegio." "No es la voz de la multitud, sino la voz de la verdad, lo que tiene el poder sobre la conciencia; aquella que puede producir convicción racional y obediencia aceptable." Estas palabras sirven para recordarnos de los siguientes deberes frente a Dios: 1) no asumir el derecho de decidir que algunas cosas mandadas por Dios son esenciales mientras otras no son esenciales; 2) estudiar y así conocer todo lo que sea posible sobre lo revelado; 3) creer y obedecer todo lo mandado; y 4) recordar que la verdad es lo que buscamos, no la voz de la muchedumbre.

I. LA FUENTE DE SALVACIÓN A. Salvos por la fe - Marcos 16:16 El que crea y sea bautizado será salvo, pero el que no crea será condenado. - Romanos 1:16-17 A la verdad, no me avergüenzo del evangelio, pues es poder de Dios para la salvación de todos los que creen: de los judíos, primeramente, pero también de los gentiles. 17 De hecho, en el evangelio se revela la justicia que proviene de Dios, la cual es por fe de principio a fin, tal como está escrito: «El justo vivirá por la fe.»

B. Salvos por la gracia - Hechos 15:11 ¡No puede ser! Más bien, como ellos, creemos que somos salvos por la gracia de nuestro Señor Jesús. - Efesios 2:5-8 nos dio vida con Cristo, aun cuando estábamos muertos en pecados. ¡Por gracia ustedes han sido salvados! 6 Y en unión con Cristo Jesús, Dios nos resucitó y nos hizo sentar con él en las regiones celestiales, 7 para mostrar en los tiempos venideros la incomparable riqueza de su gracia, que por su bondad derramó sobre nosotros en Cristo Jesús. 8 Porque por gracia ustedes han sido salvados mediante la fe; esto no procede de ustedes, sino que es el regalo de Dios,

C. Salvos por la confesión - Romanos 10:9-10 que, si confiesas con tu boca que Jesús es el Señor, y crees en tu corazón que Dios lo levantó de entre los muertos, serás salvo. 10 Porque con el corazón se cree para ser justificado, pero con la boca se confiesa para ser salvo.

D. Salvos por la sangre de Cristo - Romanos 5:6-10 A la verdad, como éramos incapaces de salvarnos, en el tiempo señalado Cristo murió por los malvados. 7 Difícilmente habrá quien muera por un justo, aunque tal vez haya quien se atreva a morir por una persona buena. 8 Pero Dios demuestra su amor por nosotros en esto: en que cuando todavía éramos pecadores, Cristo murió por nosotros. 9 Y ahora que hemos sido justificados por su sangre, ¡con cuánta más razón, por medio de él, seremos salvados del castigo de Dios! 10 Porque si, cuando éramos enemigos de Dios, fuimos reconciliados 2

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con él mediante la muerte de su Hijo, ¡con cuánta más razón, habiendo sido reconciliados, seremos salvados por su vida! - Hebreos 9:11-15 Cristo, por el contrario, al presentarse como sumo sacerdote de los bienes definitivos en el tabernáculo más excelente y perfecto, no hecho por manos humanas (es decir, que no es de esta creación), 12 entró una sola vez y para siempre en el Lugar Santísimo. No lo hizo con sangre de machos cabríos y becerros, sino con su propia sangre, logrando así un rescate eterno. 13 La sangre de machos cabríos y de toros, y las cenizas de una novilla rociadas sobre personas impuras, las santifican de modo que quedan limpias por fuera. 14 Si esto es así, ¡cuánto más la sangre de Cristo, quien por medio del Espíritu eterno se ofreció sin mancha a Dios, purificará nuestra conciencia de las obras que conducen a la muerte, a fin de que sirvamos al Dios viviente! 15 Por eso Cristo es mediador de un nuevo pacto, para que los llamados reciban la herencia eterna prometida, ahora que él ha muerto para liberarlos de los pecados cometidos bajo el primer pacto.

E. Salvos por el bautismo - Marcos 16:16 El que crea y sea bautizado será salvo, pero el que no crea será condenado. - 1 Pedro 3:21 la cual simboliza el bautismo que ahora los salva también a ustedes. El bautismo no consiste en la limpieza del cuerpo, sino en el compromiso de tener una buena conciencia delante de Dios. Esta salvación es posible por la resurrección de Jesucristo,

F. Salvos por el arrepentimiento - Hechos 2:38-39 —Arrepiéntase y bautícese cada uno de ustedes en el nombre de Jesucristo para perdón de sus pecados —les contestó Pedro—, y recibirán el don del Espíritu Santo. 39 En efecto, la promesa es para ustedes, para sus hijos y para todos los extranjeros, es decir, para todos aquellos a quienes el Señor nuestro Dios quiera llamar. - 2 Pedro 3:9 El Señor no tarda en cumplir su promesa, según entienden algunos la tardanza. Más bien, él tiene paciencia con ustedes, porque no quiere que nadie perezca, sino que todos se arrepientan.

G. Salvos por el nombre de Jesús - Hechos 4:12 De hecho, en ningún otro hay salvación, porque no hay bajo el cielo otro nombre dado a los hombres mediante el cual podamos ser salvos. - Romanos 10:13 porque «todo el que invoque el nombre del Señor será salvo».

H. Salvos por la obediencia - Mateo 7:21-23 »No todo el que me dice: “Señor, Señor”, entrará en el reino de los cielos, sino sólo el que hace la voluntad de mi Padre que está en el cielo. 22 Muchos me dirán en aquel día: “Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre expulsamos demonios e hicimos muchos milagros?” 23 Entonces les diré claramente: “Jamás los conocí. ¡Aléjense de mí, hacedores de maldad!” - Hebreos 5:8-9 Aunque era Hijo, mediante el sufrimiento aprendió a obedecer; 9 y consumada su perfección, llegó a ser autor de salvación eterna para todos los que le obedecen.

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I. Salvos por la fidelidad - Mateo 10:22 Por causa de mi nombre todo el mundo los odiará, pero el que se mantenga firme hasta el fin será salvo. - Hebreos 10:36-39 Ustedes necesitan perseverar para que, después de haber cumplido la voluntad de Dios, reciban lo que él ha prometido. 37 Pues dentro de muy poco tiempo, «el que ha de venir vendrá, y no tardará. 38 Pero mi justo vivirá por la fe. Y si se vuelve atrás, no será de mi agrado.» 39 Pero nosotros no somos de los que se vuelven atrás y acaban por perderse, sino de los que tienen fe y preservan su vida.

Conclusión: Las Escrituras citadas arriba confirman, sin duda alguna, que la salvación viene por la fe, la gracia, la confesión, la sangre de Cristo, el bautismo, el arrepentimiento, el nombre de Jesús, la obediencia y la fidelidad. Si, como enseñan las Escrituras, somos salvos por estas cosas, es obvio que no podemos ser salvos sin estas cosas, siendo que hay un solo mensaje de salvación. No podemos tener la salvación si se omite alguna de estas cosas, ni podemos alcanzar al perdón de los pecados antes de estos pasos. Por ejemplo, es imposible que el bautismo "nos salva" (I Pedro 3:21) o sea "para el perdón de nuestros pecados" (Hechos 2:38-39) si somos salvos y tenemos el perdón antes del bautismo. Es muy obvio. Por lo tanto, la fuente de salvación tiene que ser entendida como el conjunto de todas las cosas mencionadas arriba. Ninguna de ellas nos trae la salvación sin cumplir con todas las demás. Son pasos que llegan a un fin. Sin dar todos los pasos, es imposible llegar a la meta.

II. COSAS QUE NO NOS PUEDEN SALVAR A. La Ley Antigua ("Ley de Moisés") - Romanos 8:1-4 Por lo tanto, ya no hay ninguna condenación para los que están unidos a Cristo Jesús, 2 pues por medio de él la ley del Espíritu de vida me ha liberado de la ley del pecado y de la muerte. 3 En efecto, la ley no pudo liberarnos porque la naturaleza pecaminosa anuló su poder; por eso Dios envió a su propio Hijo en condición semejante a nuestra condición de pecadores, para que se ofreciera en sacrificio por el pecado. Así condenó Dios al pecado en la naturaleza humana, 4 a fin de que las justas demandas de la ley se cumplieran en nosotros, que no vivimos según la naturaleza pecaminosa sino según el Espíritu. - Gálatas 2:14-21 Cuando vi que no actuaban rectamente, como corresponde a la integridad del evangelio, le dije a Pedro delante de todos: «Si tú, que eres judío, vives como si no lo fueras, ¿por qué obligas a los gentiles a practicar el judaísmo? 15 »Nosotros somos judíos de nacimiento y no “pecadores paganos”. 16 Sin embargo, al reconocer que nadie es justificado por las obras que demanda la ley sino por la fe en Jesucristo, también nosotros hemos puesto nuestra fe en Cristo Jesús, para ser justificados por la fe en él y no por las obras de la ley; porque por éstas nadie será justificado. 17 »Ahora bien, cuando buscamos ser justificados por Cristo, se hace evidente que nosotros mismos somos pecadores. ¿Quiere esto decir que Cristo está al servicio del pecado? ¡De ninguna manera! 18 Si uno vuelve a edificar lo que antes había destruido, se hace transgresor. 19 Yo, por mi parte, mediante la ley he muerto a la ley, a fin de vivir para Dios. 20 He sido crucificado con Cristo, y ya no vivo yo sino que Cristo vive en mí. Lo que ahora vivo en el cuerpo, lo vivo por la fe en el Hijo de Dios, quien me amó y dio su vida por mí. 21 No desecho la gracia de Dios. Si la justicia se obtuviera mediante la ley, Cristo habría muerto en vano.» - Gálatas 5:1-6 Cristo nos libertó para que vivamos en libertad. Por lo tanto, manténganse firmes y no se sometan nuevamente al yugo de esclavitud. 2 Escuchen bien: yo, Pablo, les digo que si se hacen circuncidar, Cristo no les servirá de nada. 3 De nuevo declaro que todo el que se hace circuncidar está obligado a practicar toda la ley. 4 Aquellos de entre ustedes que tratan de ser justificados por la ley, han roto con Cristo; han caído de la gracia. 5 4

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Nosotros, en cambio, por obra del Espíritu y mediante la fe, aguardamos con ansias la justicia que es nuestra esperanza. 6 En Cristo Jesús de nada vale estar o no estar circuncidados; lo que vale es la fe que actúa mediante el amor.

B. Las buenas obras - Efesios 2:8-9 Porque por gracia ustedes han sido salvados mediante la fe; esto no procede de ustedes, sino que es el regalo de Dios, 9 no por obras, para que nadie se jacte. - 2 Timoteo 1:3-9 Al recordarte de día y de noche en mis oraciones, siempre doy gracias a Dios, a quien sirvo con una conciencia limpia como lo hicieron mis antepasados. 4 Y al acordarme de tus lágrimas, anhelo verte para llenarme de alegría. 5 Traigo a la memoria tu fe sincera, la cual animó primero a tu abuela Loida y a tu madre Eunice, y ahora te anima a ti. De eso estoy convencido. 6 Por eso te recomiendo que avives la llama del don de Dios que recibiste cuando te impuse las manos. 7 Pues Dios no nos ha dado un espíritu de timidez, sino de poder, de amor y de dominio propio. 8 Así que no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni tampoco de mí, que por su causa soy prisionero. Al contrario, tú también, con el poder de Dios, debes soportar sufrimientos por el evangelio. 9 Pues Dios nos salvó y nos llamó a una vida santa, no por nuestras propias obras, sino por su propia determinación y gracia. Nos concedió este favor en Cristo Jesús antes del comienzo del tiempo;

C. Nuestros propios medios (aunque sinceros) - Romanos 10:1-3 Hermanos, el deseo de mi corazón, y mi oración a Dios por los israelitas, es que lleguen a ser salvos. 2 Puedo declarar en favor de ellos que muestran celo por Dios, pero su celo no se basa en el conocimiento. 3 No conociendo la justicia que proviene de Dios, y procurando establecer la suya propia, no se sometieron a la justicia de Dios. - Tito 3:5 él nos salvó, no por nuestras propias obras de justicia sino por su misericordia. Nos salvó mediante el lavamiento de la regeneración y de la renovación por el Espíritu Santo,

D. Otros mensajes de salvación - Marcos 7:6-9 Él les contestó: —Tenía razón Isaías cuando profetizó acerca de ustedes, hipócritas, según está escrito: »“Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mí. 7 En vano me adoran; sus enseñanzas no son más que reglas humanas” 8 Ustedes han desechado los mandamientos divinos y se aferran a las tradiciones humanas. 9 Y añadió: —¡Qué buena manera tienen ustedes de dejar a un lado los mandamientos de Dios para mantener sus propias tradiciones! - Gálatas 1:6-10 Me asombra que tan pronto estén dejando ustedes a quien los llamó por la gracia de Cristo, para pasarse a otro evangelio. 7 No es que haya otro evangelio, sino que ciertos individuos están sembrando confusión entre ustedes y quieren tergiversar el evangelio de Cristo. 8 Pero aun si alguno de nosotros o un ángel del cielo les predicara un evangelio distinto del que les hemos predicado, ¡que caiga bajo maldición! 9 Como ya lo hemos dicho, ahora lo repito: si alguien les anda predicando un evangelio distinto del que recibieron, ¡que caiga bajo maldición! 10 ¿Qué busco con esto: ganarme la aprobación humana o la de Dios? ¿Piensan que procuro agradar a los demás? Si yo buscara agradar a otros, no sería siervo de Cristo.

E. Otros "salvadores" - Juan 14:6 Yo soy el camino, la verdad y la vida —le contestó Jesús—. Nadie llega al Padre sino por mí. 5

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- Hechos 4:12 De hecho, en ningún otro hay salvación, porque no hay bajo el cielo otro nombre dado a los hombres mediante el cual podamos ser salvos.

Conclusión: Es preciso entender que la Biblia enseña que no podemos ser salvos sin aceptar y cumplir con el mensaje de salvación entregado por Jesús. La ley no nos puede salvar, tampoco las buenas obras, ni nuestros propios medios (aunque sean sinceros) pueden traer la salvación, siendo que no hay otro salvador sino sólo Jesús. Tampoco hay otros mensajes de salvación, sino sólo él predicado por Jesús y sus apóstoles y preservado en las Escrituras.

III. LOS PELIGROS DE OTROS MENSAJES DE SALVACIÓN A. Estos mensajes no agradan a Dios (son una abominación para El) - Mateo 15:9 En vano me adoran; sus enseñanzas no son más que reglas humanas” - Gálatas 1:6-10 Me asombra que tan pronto estén dejando ustedes a quien los llamó por la gracia de Cristo, para pasarse a otro evangelio. 7 No es que haya otro evangelio, sino que ciertos individuos están sembrando confusión entre ustedes y quieren tergiversar el evangelio de Cristo. 8 Pero aun si alguno de nosotros o un ángel del cielo les predicara un evangelio distinto del que les hemos predicado, ¡que caiga bajo maldición! 9 Como ya lo hemos dicho, ahora lo repito: si alguien les anda predicando un evangelio distinto del que recibieron, ¡que caiga bajo maldición! 10 ¿Qué busco con esto: ganarme la aprobación humana o la de Dios? ¿Piensan que procuro agradar a los demás? Si yo buscara agradar a otros, no sería siervo de Cristo.

B. Engañan porque no llevan a la salvación - Mateo 7:21-23 »No todo el que me dice: “Señor, Señor”, entrará en el reino de los cielos, sino sólo el que hace la voluntad de mi Padre que está en el cielo. 22 Muchos me dirán en aquel día: “Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre expulsamos demonios e hicimos muchos milagros?” 23 Entonces les diré claramente: “Jamás los conocí. ¡Aléjense de mí, hacedores de maldad!” - 1 Timoteo 4:1-7 El Espíritu dice claramente que, en los últimos tiempos, algunos abandonarán la fe para seguir a inspiraciones engañosas y doctrinas diabólicas. 2 Tales enseñanzas provienen de embusteros hipócritas, que tienen la conciencia encallecida. 3 Prohíben el matrimonio y no permiten comer ciertos alimentos que Dios ha creado para que los creyentes, conocedores de la verdad, los coman con acción de gracias. 4 Todo lo que Dios ha creado es bueno, y nada es despreciable si se recibe con acción de gracias, 5 porque la palabra de Dios y la oración lo santifican. 6 Si enseñas estas cosas a los hermanos, serás un buen servidor de Cristo Jesús, nutrido con las verdades de la fe y de la buena enseñanza que paso a paso has seguido. 7 Rechaza las leyendas profanas y otros mitos semejantes. Más bien, ejercítate en la piedad, - 1 Juan 2:4-6 El que afirma: «Lo conozco», pero no obedece sus mandamientos, es un mentiroso y no tiene la verdad. 5 En cambio, el amor de Dios se manifiesta plenamente en la vida del que obedece su palabra. De este modo sabemos que estamos unidos a él: 6 el que afirma que permanece en él, debe vivir como él vivió.

C. Están bajo condenación los que predican estos mensajes falsos tanto como los que los aceptan - 1 Timoteo 1:3-7 Al partir para Macedonia, te encargué que permanecieras en Éfeso y les ordenaras a algunos supuestos maestros que dejen de enseñar doctrinas falsas 4 y de prestar atención a leyendas y genealogías interminables. Esas cosas provocan controversias en vez de llevar adelante la obra de Dios que es por la fe. 5 Debes 6

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hacerlo así para que el amor brote de un corazón limpio, de una buena conciencia y de una fe sincera. 6 Algunos se han desviado de esa línea de conducta y se han enredado en discusiones inútiles. 7 Pretenden ser maestros de la ley, pero en realidad no saben de qué hablan ni entienden lo que con tanta seguridad afirman. - 1 Timoteo 4:1-3 El Espíritu dice claramente que, en los últimos tiempos, algunos abandonarán la fe para seguir a inspiraciones engañosas y doctrinas diabólicas. 2 Tales enseñanzas provienen de embusteros hipócritas, que tienen la conciencia encallecida. 3 Prohíben el matrimonio y no permiten comer ciertos alimentos que Dios ha creado para que los creyentes, conocedores de la verdad, los coman con acción de gracias. - Santiago 1:22-26 No se contenten sólo con escuchar la palabra, pues así se engañan ustedes mismos. Llévenla a la práctica. 23 El que escucha la palabra, pero no la pone en práctica es como el que se mira el rostro en un espejo 24 y, después de mirarse, se va y se olvida en seguida de cómo es. 25 Pero quien se fija atentamente en la ley perfecta que da libertad, y persevera en ella, no olvidando lo que ha oído sino haciéndolo, recibirá bendición al practicarla. 26 Si alguien se cree religioso, pero no le pone freno a su lengua, se engaña a sí mismo, y su religión no sirve para nada.

Conclusión: Los llamados "mensajes de salvación" que son diferentes al único verdadero son muy peligrosos. No agradan a Dios, sino son una abominación para El. Tanto los que predican el error como los que lo creen, aunque representan a gente religiosa (y muchas veces sincera), van a la perdición, lejos de la gloria de Dios. -- Cualquier mensaje que predicamos o aceptamos debe ser: 1. todo el mensaje originalmente predicado 2. exactamente el mensaje originalmente predicado 3. solamente el mensaje originalmente predicado. Cualquier cambio en el mensaje mismo o en la manera de aceptarlo y obedecerlo nos trae solamente condenación, no salvación. SINOPSIS DE LA LECCIÓN Introducción: I. La fuente de salvación A. Salvos por la fe B. Salvos por la gracia C. Salvos por la confesión D. Salvos por la sangre de Cristo E. Salvos por el bautismo F. Salvos por el arrepentimiento G. Salvos por el nombre de Jesús H. Salvos por la obediencia I. Salvos por la fidelidad II. Cosas que no nos pueden salvar A. La Ley Antigua ("Ley de Moisés") B. Las buenas obras C. Nuestro propio medio (aunque sinceros) 7

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D. Otros mensajes de salvación E. Otros "salvadores" III. Los peligros de otros mensajes de salvación A. Estos mensajes no agradan a Dios (son una abominación para El) B. Engañan porque no llevan a la salvación C. Están bajo condenación los que predican estos mensajes falsos tanto como los que los aceptan 8

PREGUNTAS 1. ¿Puede uno ser salvo sin creer en Jesús como el hijo de Dios? (Fundamente su respuesta) 2. ¿Es necesario ser bautizado para el perdón de los pecados para ser salvo? (Fundamente su respuesta) 3. ¿Es posible perder la salvación después de haber recibido el perdón de los pecados? ¿Cómo? (Fundamente sus repuestas) 4. ¿Enseña la Biblia que los sinceros (aunque errados) que tratan de servir a Dios son salvos? (Fundamente su respuesta) 5. ¿Cuántos mensajes de salvación realmente hay? ¿Qué indica esto acerca de otros mensajes (doctrinas) levemente diferentes? 6. ¿Qué predicaron los apóstoles como el mensaje de salvación y qué ordenaron para obedecerlo? 7. Dé una síntesis de lo necesario para recibir la salvación. 8. ¿Cuál viene primero en el plan bíblico de salvación - ser salvo e hijo de Dios, o ser bautizado? ¿Qué tiene que hacer uno para mantener su estado de salvación? 9. ¿Es posible que una doctrina (o mensaje de salvación) sea aceptable sin ser "todo, exactamente y solamente" el mensaje originalmente predicado? (Explique su respuesta) 10. Dé un resumen de las palabras de Thomas Campbell citadas en la introducción. ¿Están de acuerdo con el concepto enseñado en las Escrituras inspiradas?

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