ESTEREOTIPOS EN EL CINE INFANTIL:

ESTEREOTIPOS EN EL CINE INFANTIL: AUTORAS: Rocio Illanes Segura y Rocio González de Aguilar Téllez • Introducción • Mensajes subliminales referidos

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ESTEREOTIPOS EN EL CINE INFANTIL: AUTORAS: Rocio Illanes Segura y Rocio González de Aguilar Téllez •

Introducción



Mensajes subliminales referidos al sexo en las películas Disney



Modelos femeninos a través del cine de animación



Dibujos animados: Shin Shan y Los Simpsons.



Conclusiones.



Bibliografía.



Anexos.

CUESTIONARIO ROLLO 4: SEXOS Con este cuestionario queremos obtener información de diversas opiniones sobre temas relacionados con la sexualidad, por ello necesitamos la tuya, tienes que saber que no es un examen, que no te vamos a calificar y sobre todo que es anónimo, por lo que te rogamos la mayor sinceridad en tus respuestas. Gracias por tu colaboración. 1. ¿Qué te excita más que te enseñen o que te insinúen? 2. ¿ Quién es tu actor/actriz español/a preferido/a? 3. Actor/Actriz español/a que elegirías para una noche de pasión desenfrenada: 4. ¿Consideras que el cine (las escenas) influyen en tu comportamiento sexual? 5. Ante un piropo obsceno (imagina uno facilón) como reaccionas: a) Te enfadas. b) Contestas c) Te halaga 6. Tus fantasías eróticas ¿están relacionadas con las escenas de las películas (Ej.: “Nueve semanas y media”; “Lucía y el sexo”)? 7. ¿Cuántas veces has visitado un Sex Shop? 8. ¿Practicarías sexo con un desconocido/a? 9. Lugar preferido para tener un encuentro sexual: 10. Aquí te pillo, aquí te mato o preámbulos: 11. Música para momentos especiales ¿Cuál eliges? 12. Contestar este cuestionario: a) Ha sido una experiencia divertida. b) Ha llegado a ruborizarme. c) Ha sido novedoso.

Introducción: Teniendo en cuenta la temática de las jornadas decidimos centrarnos en los espectadores más pequeños, puesto que son los más indefensos ante el alubión de información e imágenes que se vierten sobre ellos. Consideramos importante destacar que el cine para niños está realizado por adultos. Las creaciones cinematográficas obedecen a determinados intereses que imponen las productoras buscando beneficios económicos, impidiendo que los creadores busquen objetivos acordes con los del espectador. Con esto queremos decir que existe un contraste de expectativas: Los niños buscan la diversión y el entretenimiento, mientras que los adultos se guían por otro tipo de objetivos, como pueden ser el reconocimiento de su trabajo, mantener un estatus profesional… todo esto redunda en el objetivo prioritario de los adultos: el dinero. De forma inevitable cuando se habla de dibujos animados nos centramos en el público infantil, pensamos en los niños como destinatarios de estas proyecciones. A través de esta exposición, vamos a intentar dar un giro a esta perspectiva, mostrando la parte no tan inocente de estos dibujos.

2. Mensajes subliminales referidos al sexo en las películas Disney Os proponemos un ejercicio, os vamos a nombrar algunos personajes animados: Blanca Nieves, Cenicienta, Pinocho y Aladdin. Utilizad tan sólo cinco segundos y pensad en ellos ¿Qué imagen se os viene a la cabeza? Corresponden a las

diseñadas por Disney, ¿verdad? ¿A qué se debe que nuestra mente acuda inevitablemente a Walt Disney? Varias son las razones, por ejemplo, cualquier día sales de casa y observas un poco (tan sólo un poco) Te darás cuenta que por todas partes hay huellas de Disney. Supongamos que como de costumbre te acercas a un kiosko,¿qué ves? varios cuentos de Disney, revistas de Minnie, álbumes de cromos, videos de las últimas películas, coleccionables y hasta cartas infantiles de Disney. Después puede que necesites comprar comida, en cualquier establecimiento encuentras galletas con los simpáticos personajes de Disney, chocolatinas con las orejas de Mickey, caramelos en lindas cajitas Disney, así como cereales, bombones y helados Disney. Aunque no podemos reducir sus productos a comestibles también los encontramos de otro tipo como mochilas, material escolar, camisetas, vestidos, corbatas con los personajes Disney, así como platos, vasos, servilletas y biberones. Si vas a un centro escolar verás como las paredes estarán alegremente decoradas con escenas de las películas de Disney. Así vayas donde vayas encontrarás Disney, Disney, Disney,... ¿no encontramos ante una “invasión”? La imagen que hemos ido forjando a través del merchandising corresponden con los objetivos iniciales de este gran imperio, es decir hacer felices a los niños/as, crear lazos familiares, restablecer los valores de la solidaridad y la amistad, la ambición oficial de desarrollar, sobre todo en los jóvenes, el sentido de las responsabilidades sociales y el deseo de participar en la vida de las instituciones” (Eudes, 1988).. Sin embargo, en la compañía estos principios han pasado a un segundo plano, quedando como principal objetivo la rentabilidad y el éxito económico, es decir, que se diseña el nuevo producto para alcanzar la máxima audiencia posible antes que arriesgarse a crear lo que es mejor para el consumidor. Comprobamos a través de los siguientes ejemplos que algunas de las películas destinadas al público infantil contienen escenas poco adecuadas para éste:

Los rescatadores Disney produjo esta película en 1977. El argumento comienza con una niña huérfana secuestrada pidiendo ayuda en un mensaje dentro de una botella. Unos simpáticos ratones van a rescatarla. Esta inocente sinopsis no hace pensar en lo que se presenta en pantalla alrededor del minuto veintiocho. En una escena fugaz donde los ratones se deslizan en una lata de sardinas, aparece en la ventana del edificio del fondo el busto una chica desnuda. Más extraño aún que esto, es que tal imagen no es un dibujo animado, sino una fotografía. La escena sólo dura dos fotogramas; bastante corta, si se tiene en cuenta que un segundo de película tiene veinticuatro. Éste hecho fue denunciado y Disney reconoció la existencia de lo que ellos denominan “figuras de fondo objetables”

La Sirenita Se estrenó en 1989, revelándose como un gran éxito de taquilla tanto en Estados Unidos como en el resto de Europa. Salvó a Disney de una crisis que llevaba arrastrando desde mediados de los setenta, así como han hecho posteriores producciones de la compañía a costa de modificar desarrollos y finales de hermosos cuentos populares. En este caso de Andersen. Para los que no sepan, en la historia real La Sirenita muere. El mensaje sexual que se presenta en este ejemplo se encuentra en la portada, concretamente en el castillo dorado del fondo, en el centro del mismo. Al ser ampliada esta zona de la construcción, se observa una torre con un sorprendente parecido a un enorme pene en erección.

Otra escena comprometida de la película se observa en el momento de la boda, si nos fijamos atentamente en el obispo podemos comprobar que se muestra excitado por la situación. Es decir, tiene una erección. Para aquéllos que tiendan a pensar que es una casualidad o equivocación, tanto en este ejemplo como en los anteriores y siguientes, es conveniente explicar que los dibujos de una película, portada y fotogramas, no los hace un solo dibujante, sino que hay decenas de ellos inmiscuidos en cada imagen, que deben trazar, bosquejar, entintar los bordes y colorear el resultado. Así, todos los que participan en el dibujo y el que lo revisa -esto es, la productora- conocen de memoria sus formas.

El Rey León Una de las películas más vistas y elogiada tanto por mayores como por pequeños no se libra de los mensajes subliminales. Tras las investigaciones llevadas a cabo hemos descubierto numerosas críticas y ejemplos malintencionados de estos mensajes. Así, que hemos decidido que el más notable y menos malicioso es el siguiente: Cuando Simba se hace mayor, tras pasar una temporada con Timón y Pumba. Una noche se encuentra en lo alto de una montaña admirando el firmamento. Allí se le aparece la silueta de su padre. Mientras se forma la cabeza y durante una fracción de segundo, las estrellas sugieren la palabra SEX.

¿Quién engañó a Roger Rabbit? Basada en un guión de cine negro de nombre similar, trata de un detective contratado por unos estudios de dibujos animados y con la misión de conseguir pruebas de la infidelidad de la explosiva Jessica Rabbit hacia su marido. Si bien no puede considerarse una película para niños, contiene una secuencia que dio bastante que hablar hace unas cuantas ediciones de los Oscar. La presentadora de aquél, Whoopy Goldberg, bromeó abiertamente

con el asunto. La escena en cuestión transcurre en una persecución, cuando uno de los coches abandona la calzada y Jessica Rabbit sale despedida de él, dado vueltas y vueltas en redondo. Durante un morboso y fugaz instante la falda se le abre y puede observarse que no lleva ropa interior. Conociendo la influencia que tienen estas películas en las mentes de los pequeños a los que tanto respeto debemos, por ser los adultos del mañana; os invitamos a hacer una reflexión sobre los ejemplos mostrados deseando que seáis capaces de seleccionar bien las películas que vemos con ellos.

3. Modelos femeninos

a través del cine de animación

Podría parecer o quizás hasta lo pensamos que el movimiento feminista de mediados de los noventa ha llegado también a la cultura de las películas de animación, pero esto no es así, como demostrará un repaso más cuidadoso

a la imagen que nos

ofrecen las féminas que aparecen en las películas de dibujos animados. Ante la mirada de los espectadores, los personajes cinematográficos tienen capacidad para actuar como referentes: modelos de los que pueden llegar a aprenderse comportamientos diversos, valiosos o no. Estamos tan acostumbrados, que no reparamos en la influencia que estos modelos tan estereotipados causan en los más pequeños, estos terminan por identificarse con estos personajes y hacer suyas muchas de sus expresiones y de alguna forma hasta los comportamientos, se perpetúan y reafirman modelos de mujer que las mujeres se han esforzado en superar y cambiar. Es difícil encontrar una figura femenina que tenga éxito fuera de los roles tradicionales. Parece que las mujeres fuertes e inteligentes sólo pueden existir si al final se casan, con lo que su actividad es tan sólo una fase para interesar a su pareja.

A

continuación,

se

exponen

diversas

características

que

al

parecer

son

imprescindibles en una mujer o al menos esa es la imagen que se perpetúa a través de los modelos femeninos más famosos de la pantalla. La imagen que debería acompañar al modelo femenino del siglo XXI,

y que guardaría una relación más

acorde con la realidad, sería el de una mujer activa, luchadora, que realiza tareas domésticas pero que trabaja también fuera de casa, profesionales muy cualificadas, con iniciativa, perspicaces en su trato con los demás, saben valerse por sí mismas, dulces, tiernas y cuidadoras. Sin embargo lo que predomina en los modelos de animación son mujeres en las que las características predominantes son: Belleza, juventud y bondad. La mujer está aún obligada a tener un aspecto físico acorde con cánones predominantes en la sociedad actual y lejanos del mensaje que oímos años atrás en la propia factoría Disney "La belleza está en el interior". Aparecen niñas, adolescentes y jóvenes bonitas... o mujeres atractivas, seductoras en su porte, su silueta y su modo de vestir: prendas ceñidas, escotes generosos, larguísimas piernas. Se diría que el modelo femenino en boga ha de ser joven y bello. La fealdad (incluida la relacionada con la vejez y la decrepitud) se asocia predominantemente

a

personajes

sobrecogedores,

intimidatorios,

inmorales,

malvados, o ridículos. "Belleza" y "atractivo corporal" se suelen asociar a "bondad" "afecto" o a ambos. En general, en el perfil femenino conviven atributos clásicos, a veces estereotipados. Otro aspecto a tener en cuenta es la importancia que se le da al emparejamiento, tanto que se podría afirmar que es el eje central de los films, la relación entre hombre y mujer no ha sufrido cambios a través de los años por mucho que se ha modificado los efectos especiales. A grandes rasgos, se puede comprobar como los protagonistas de los films llevan emparejadas ciertas características o cualidades que se distinguen principalmente por el sexo de éstos:

Hombres - estabilidad emocional - dinamismo - tendencia al dominio - desarrollo intelectual - racionalidad - valentía - iniciativa, riesgo - mecanismos de autocontrol - agresividad - afirmación del “yo” - afectividad poco definida - aptitud para las ciencias - fuerza - franqueza - objetividad

Mujeres - inestabilidad emocional - Pasividad - sumisión - poco desarrollo intelectual - irracionalidad - miedo - intuición - falta de autocontrol - ternura - dependencia - afectividad muy marcada - incoherencia - debilidad - frivolidad -subjetividad

Los estereotipos forman parte de las definiciones sociales, evidentemente, la televisión no crea estereotipos; recoge, recrea los construidos y vigentes socialmente. En este sentido, coexiste con los estereotipos, prejuicios y creencias que se transmiten culturalmente. Es posible, pues, detectarlos y analizarlos para contrarrestarlos. Porque el impacto socializador de la televisión debe mucho a la eficacia de la transmisión estereotípica, todos podemos y debemos contribuir a que nuestros pequeños/as aprendan a analizar lo que ven y comprendan que las cualidades no se dividen en niños o niñas.

4. Dibujos animados: Shin Shan y Los Simpsons. La influencia que ejercen los programas de televisión en la adquisición de pautas culturales y conocimiento del entorno, así como en la formación de la propia identidad en las edades infantiles nos llevan a analizar dos series animadas cuyo público es el infantil a pesar de no estar dirigida a ellos, como son: las aventuras de Shin Shan y los Simpsons

SHIN SHAN

Se trata de una serie animada donde el protagonista es un niño japonés de cinco años que vive junto a su familia su padre Hiroshi, su madre Misae, su hermanita Himawari y su perro Nevado. Sus travesuras y su peculiar forma de ver el mundo que le rodea traen de cabeza a todo el mundo: es travieso, desvergonzado, gorrón y chantajista, está obsesionado con las chicas y dice en todo momento lo que piensa, sin cortarse un pelo. La serie narra la vida cotidiana de esta peculiar familia japonesa de clase media, con sus pequeños problemas de cada día (el trabajo, las tareas de la casa, el colegio, las vacaciones, la hipoteca...) añadidos a los problemas y situaciones embarazosas en las que una y otra vez se ven inmersos por Shinnosuke. A pesar de que el protagonista sea un niño, la serie no está dirigida a un público infantil, sino más bien a un público juvenil o incluso adulto. Sin embargo, son ellos los que más disfrutan de la serie. Por ello nos parece interesante comentar los estereotipos que se inculcan en los más pequeños desde esta serie: Con respecto al sexo: El padre de Shin Chan tiene el sexo establecido como prioridad de su vida, mira a todas las chicas que pasan, exige complacencia sexual por parte de su mujer y califica a las señoras en función de su cuerpo. Además, se mantiene siempre al borde del adulterio y sólo se retrae por miedo a las consecuencias que puede sufrir si se descubre. El exhibicionismo es uno de los puntos claves de esta serie animada: Algunos padres conocieron la existencia de esta serie cuando sus hijos con los pantalones bajados cantaban “culito, culito” así que las gracias exhibicionistas de Shin Chan son una de las principales críticas que recibe, aunque los pedagogos aseguran que es uno de sus menores problemas. Eso sí, desde el Seminario Galego de Educación para a Paz se dice a este respecto: «Una cosa es la naturalidad en relación con el desnudo y otra muy distinta es alentar y aplaudir el exhibicionismo», dice Manuel Dios, presidente del Seminario, quien recuerda que todos ríen las gracias del niño. Discriminación hacia el sexo femenino: La imagen que se da de las mujeres es que son seres indiscutiblemente inferiores, aprovechadas e irresponsables. Pongamos como ejemplo el personaje de la madre que se presenta como una mujer joven, dedicada a sus labores, y a la administración de la casa. Es hostigada constantemente por el niño, con el comportamiento ya descrito, además de alusiones públicas a su ropa interior y afirmaciones como que “tiene el culo gordo y los pechos minúsculos”, que “es lisa como una tabla de planchar”, que es una histérica, tacaña, agarrada, pesada, etc. Aparte de ello, sus

principales características son intentar mantener las apariencias, y perder el control en la educación del niño. Por su parte, el principal rasgo que la serie expresa de la maestra de Shin Shan es que compite permanentemente con otra educadora de la escuela, por causa de las apariencias frente a los hombres Violencia Las relaciones personales, laborales y sociales están marcadas por la violencia.El comportamiento del padre de Shin Chan con su hijo es violento al igual que con su mujer, a la que trata claramente como un ser inferior al que, en el fondo, se le teme pero se le desprecia. La madre de Shin Chan, por su parte, pega al niño en función de sus frustraciones propias. Las profesoras de Shin Chan también aplican la violencia como forma de encauzar a unos niños cada vez más desobedientes y maleducados. Mucha gente ha comparado esta divertida serie, de arrollador éxito en nuestro país, con "Los Simpson", y es cierto que hay muchas semejanzas entre ambas, sobre todo si utilizamos como comparación las primeras temporadas de la familia amarilla de Springfield. En ambos casos los protagonistas son una familia de clase media, normal y corriente, como tantos otros miles de familias de todo el mundo, con quienes el espectador puede sentirse identificado tanto en su comportamiento como en las situaciones que viven a diario. Ambas series tienen como principal protagonista de la mayoría de aventuras al hijo mayor, un gamberrete que continuamente pone patas arriba el mundo de los adultos con sus travesuras. A menudo se han lanzado críticas contra "Shin-chan" desde los sectores de siempre, que consideran que los dibujos animados son sólo para niños y que en cuanto se salen de lo que se considera apropiado para ellos hay que borrarlos de la programación. Y las críticas han venido sobre todo a cuenta de la supuesta violencia familiar que se refleja en la serie (sobre todo por parte de Misae hacia Shinnosuke y Hiroshi), las groserías de Shinnosuke (que no duda en llamar a su madre lindezas como "tabla de planchar" o "monstruo del culo gordo", y que acosa sin reparos a cualquier chica que se cruza en su camino) o las actitudes más o menos reprobables de Hiroshi (emborracharse, flirtear con sus compañeras de trabajo, etc.). Pero hay que ver todo esto dentro de su contexto, una serie de tono básicamente humorístico, que muestra ese típico humor japonés plagado de exageraciones tanto visuales como situacionales. Precisamente lo que hace esta serie es reflejar la vida normal de una familia normal desde un punto de vista de sana autocrítica, riéndose de las convenciones y de la rigidez, en ocasiones exagerada, de la sociedad japonesa, siempre a través de los ojos y la inocencia de un niño, que en el fondo lo que hace es ser él mismo y decir lo que piensa sin rodeos.

LOS SIMPSONS Es una serie que se construye en torno a una familia como personaje colectivo central, una familia media norteamericana, que vive en Sprinfield. Naturalmente, la serie añade un tratamiento transgresor, paródico, añadido al reflejo sociológico de la familia media estadounidense. En cuanto a estereotipos y roles de género podemos ver a Homer como padre de familia, que ciertamente tiene características de antihéroe (vago, egoísta, comilón, gran bebedor de cerveza, etc.), pero mantiene el rol de cabeza de familia, dedicado en exclusividad al trabajo extradoméstico, en la central nuclear. En cambio, Marge, normalmente representa el papel de ama de casa tradicional, dedicada al trabajo doméstico y al cuidado de su familia, material y emocional. Es Homer quien conduce el coche familiar, quien decide qué vídeo se ve o a dónde van a cenar, si ingresa toda la familia en una secta, quien invita a los feriantes a casa, etc. Igualmente, entre Bart y Lisa, hijo e hija mayores (la tercera, Maggie, es un bebé), se reproducen conductas modeladas por género, sin que la trangresión alcance al modelado de género: así, Bart es travieso, gamberro, mal estudiante, pero inteligente, divertido, arriesgado. Lisa, es un perfecto ejemplo de respeto de las pautas de género en una niña: inteligente, estudiosa, respetuosa con los demás, sensible, con sentido de la justicia. La serie incorpora una enorme variedad de personajes realizando trabajos profesionales, pero sólo aparecen personajes femeninos realizando el trabajo doméstico. Por otra parte, el reflejo ocupacional es muy desigual: apararece una mayoría de varones La socialización de género a través de la programación infantil de televisión con ocupaciones laborales diversificadas, en cambio, el reflejo de las mujeres es muy restringido. Las tramas de los capítulos tienen como protagonistas Homer y Bart, aunque ciertamente arrastran a toda la familia en su desarrollo narrativo. Encontramos entre los capítulos ejemplificaciones claras y evidentes del machismo de Homer destacando el trato vejatorio que éste dispensa a Marge en un episodio en el que después de hacerle un desplante público (ella quiere bailar, él se niega, hasta que se entera que es un concurso de baile y que puede ganar una moto Harley Davidson, entonces busca pareja y, como no encuentra, por fin baila con Marge), la somete a imposibles piruetas para ganar el concurso, hasta el punto que el

organizador comenta: “Vaya, vaya, vaya. No había visto tamaño desprecio por el

bienestar de una esposa en toda mi vida Acaba de ganar una motocicleta”

Obsérvese que el concurso es de baile en pareja, pero el premio es para el varón. En el mismo episodio, y después de sufrir una invasión de una pandilla de moteros, éstos se llevan a Marge, una vez descubierta su utilidad doméstica. Por la misma razón, Homer saldrá a recuperarla, incluso retará al líder de los moteros, explicándole: “Juré solemnemente el día de mi boda que la acapararía para mi solo y para siempre”.

CONCLUSIONES Nuestras investigaciones nos llevan a las conclusiones que se exponen a continuación, no pretendemos que se utilicen como pautas a seguir, son tan sólo algunos consejos que consideramos útiles para inducir una mirada crítica y constructiva hacia los modelos que se muestran tanto en las películas como en las series de animación. 1. Conviene considerar que tanto las niñas como los niños pueden aprender ante los perfiles femeninos que aparecen en las películas: ambos los ven y ambos pueden percibir y asumir algún tipo de mensaje. Es necesario tenerlo en cuenta para plantear estrategias educativas. 2. Los educadores profesionales (en ámbitos formales y no formales) pueden y deben realizar un uso pedagógico del cine: Crear cinematecas, realizar sesiones de video-forum dirigidas a niños, a los padres o ambos, utilizar el cine como recurso educativo ( modelado, clarificación de valores), crear escuelas de padres, etc. 3. El sentido crítico se presenta como una alternativa para saber disociar valores y antivalores, modelos positivos y negativos, que se presentan conjuntamente en las películas. 4. En el caso de la población infantil se hace imprescindible la intervención, por cuanto los programas específicamente infantiles presentan una concentración intensiva estereotípica, unos lenguajes visuales androcéntricos que excluyen, ocultan o minorizan la presencia femenina, con pervivencia de actitudes y formulaciones sexistas que mantienen una comunicación subliminal.

Todo los expuesto anteriormente, puede resumirse bajo un misma idea, la de fomentar el pensamiento crítico en nosotros mismos para así poderlo transmitir a nuestros menores.

bibliografía La factoría Disney del siglo XXI. Pilar M. Casares García

Addenda a la II Ponencia: Los lenguajes de las artes: escenas y escenarios en educación

PEREIRA, Mª C, y MARÍN, Mª V. (2001) Respuestas docentes sobre el cine como propuesta pedagógica. Análisis de la situación en educación secundaria, Teoría de la Educación. Revista Interuniversitaria, 13, 233-255. Eva Antón Fernández ( 2001) La socialización de género a través de la programación infantil de televisión Fernández Obregó F, 2004; Shin Chan, un compendio de contravalores, en Revista Latina de Comunicación Social, número 58, de julio-diciembre de 2004, La Laguna (Tenerife)

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