“Carácter  Piadoso”//  Evangelio//  Juan   15:8;  Gálatas  5:16–24   Leer antes del mensaje: Juan 15:2 Todo pámpano que en mí no lleva fruto, lo quitará; y todo aquel que lleva fruto, lo limpiará, para que lleve más fruto.

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O sea, que aun para un niño pequeño, era obvio que mami no había regresado a casa, porque NO había fruto de su presencia/no había fruto de que ella estaba ahí… o para decirlo de otra manera: es obvio cuando ella está en la casa xq hay fruto de eso Jesús en Juan 12 nos está diciendo, si en realidad le perteneces a Dios, si en realidad estas en Jesucristo, entonces tiene que haber fruto de su vida en ti… o pero si sigues teniendo el mismo mal genio de siempre, o si tu felicidad depende de lo que tengas o no tengas (o vives triste porque no tienes algo terrenal que deseas) Entonces ¿Quién el rey de tu vida? Porque cuando estás en Cristo Jesús, en ti hay una vida, una alegría, y una libertad que te delata como alguien que ama a Jesús. Si usted no está llevando frutos, algo anda mal en el corazón… cuando usted está en Jesús, la fragancia de Su amor en ti, es obvia.

4 Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí.

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8 En esto es glorificado mi Padre: en que llevéis mucho fruto y seáis así mis discípulos.

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9 Como el Padre me ha amado, así también yo os he amado; permaneced en mi amor.

Hay una figura que nosotros le hemos presentado en esta serie, y es nuestra rueda (Show Wheel Pic), donde el eje de la rueda es “el evangelio”, y de ese eje salen 5 expresiones de lo que el evangelio produce en nosotros (ahora, no se confunda, ninguna de estas 5 cosas pueden arreglar su problema espiritual. Usted no arregla el problema de su alma haciendo, usted arregla el problema de su alma creyendo en lo que Jesús hizo por ti – porque si usted piensa que usted arregla el problema de su alma haciendo algo, entonces su héroe y su salvador es usted mismo [por lo q usted hizo], cuando en realidad el único héroe y salvador es Jesucristo, por lo q El hizo) Ese es el evangelio, Jesús hizo por nosotros, lo que nosotros no podíamos hacer por nosotros mismos. • Ahora cuando su corazón le pertenece a Dios/cuando está en Jesús, entonces hay evidencia de de esa vida de Dios en ti, expresada en estas 5 cosas en el perímetro de la rueda… Piénselo de esta manera, somos salvos solamente por la gracia de Jesús y solo por la fe en Jesús, pero esa fe no viene sola…

10 Si guardáis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor; así como yo he guardado los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor. Seguimos en nuestra serie titulada “el evangelio”, donde estamos estudiando Juan capitulo 15… Juan 15 es el pasaje que ancla toda esta serie, xq nos da componentes esenciales de la vida cristiana… Una de las cosas que Jesús dijo es que si estamos en El produciremos frutos (v.8 …que llevéis mucho fruto y seáis así mis discípulos.) ¿Y “seáis así”, así como? Llevando muchos frutos, probando que somos sus discípulos… El llevar frutos prueba que usted está en Cristo (ahora vamos a ver qué frutos son esos) pero es imposible decir que estamos en Cristo, y no llevar frutos. • Si usted no está llevando frutos, significa que algo anda mal en su corazón… Permítame darle una analogía para que entendamos esto: Hace poco mi esposa estuvo una semana visitando a sus padres en la FL y yo pedí esa semana off para atender a los niños (yo era mami y papi esa semana… el cocinero, el que lavaba la ropa, y en fin, yo era de todo esa semana…) • Uno de esos días, cocine (o sea que me lleve mis hijos a Red Robin), cuando regresamos del restaurant, que entramos por la puerta de mi casa, mi hijo Danny dice; “papi, la casa como que no huele bien, no huele como cuando mami está en casa” 

A medida que permanecemos en el amor de Dios, ese amor de Dios crece en ti, y entonces empiezas a hacer estas cosas de forma natural. Fruto espiritual solo sucede cuando estás vivo en el evangelio. Yo le explicaba al grupo de estudio Bíblico de parejas que asisto durante la semana, que el matrimonio es una guerra, pero NO una guerra entre usted y su pareja, sino una guerra entre su reino y el Reino de Dios (hay dos reinos con el cual luchamos cada día, nuestro reino y el Reino de Dios) • una guerra entre mi “yo” y Dios.

• Una batalla entre el reino del “yo” y el Reino de Dios… • Una guerra entre mi voluntad y la voluntad de Dios… • Una batalla entre mis deseos y los deseos de Dios… • Mi plan y el plan de Dios… • Mi propósito y el propósito de Dios… • Lo que YO quiero contra lo que DIOS quiere ¿Qué quiero decir con todo eso? Que La verdadera santidad, solo empieza, cuando llegamos al fin de nuestro “yo”/de nuestro reino. Por eso no se trata de lo que usted pueda hacer, Fruto espiritual solo sucede cuando vives el evangelio. Meditando mas en lo que Dios hizo por ti en la cruz, que en lo que usted pueda hacer por Dios (de otra manera tus disciplinas espirituales son nada más que ritos…). Así que: La clave para el crecimiento espiritual no es dominar una lista de cosas que tienes que hacer para Dios, sino vivir maravillado de Dios, (in awe of God) contemplando lo que Él ha hecho por ti. 2x • Cuando tu alma es captivada por lo que Dios ha hecho por ti, estos frutos, crecerán naturalmente en ti como las uvas crecen en un viñal. Vamos a hablar un poquito de esos frutos en nuestra rueda impulsada por el evangelio, específicamente del carácter. Gálatas 5:16 Digo, pues: Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne, 17 porque el deseo de la carne es contra el Espíritu y el del Espíritu es contra la carne; y estos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisierais. 18 Pero si sois guiados por el Espíritu, no estáis bajo la Ley. 19 Manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lujuria, 20 idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, divisiones, (o ambición egoísta) herejías, 21 envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas. En cuanto a esto, os advierto, como ya os he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios. Una aclaración importante: La palabra clave aquí es “practican”, los que “practican” estas cosas no heredaran el reino de Dios… Hay una gran diferencia, entre practicar algo, y luchar con algo… • Este versículo no lo debe dejar a usted sin esperanza, porque, ¿Quién no lucha con pleitos, con iras, con envidia? Algunos luchan con el alcohol, otros con lascivia… así que este versículo NO es para excluir a todo el mundo del cielo (porque todos luchamos con estas cosas), por eso dice allí, “los que practican tales cosas” (ya no es un momento de debilidad, ya es un estilo de vida). Aclarando…

22 Pero el fruto del Espíritu es amor, (wow, que diferencia de toda esa basura que acabamos de leer) gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, 23 mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley. 24 Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos. Lo que vemos aquí es 1. La descripción de dos plantas con dos frutos diferentes, 2. Un mandamiento, y 3. Un aviso en cuanto una lucha que tendremos toda la vida. 1. La descripción de dos plantas con dos frutos diferentes La primera Pablo la llama “la carne”, ahora, la carne, no significa simplemente “el cuerpo”. La carne significa “nuestra naturaleza pecaminosa” (carne = tendencia natural de pecar). Carne es nuestro corazón separado de la vida de Dios. • Fuimos creados para Dios, y cuando no estamos conectados a Dios, nuestras vidas está llena de un montón de deseos deshornados como los que vimos en esa lista que leímos: adulterio, fornicación, inmundicia, lujuria, idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, divisiones, (o ambición egoísta) herejías, envidias, homicidios, borracheras, orgías (dicho sea de paso, orgullo es cuando usted no admite que su corazón SI desea estas cosas – usted y yo luchamos con estas cosas, porque somos pecadores, esa es nuestra condición natural); Pero estas cosas son solo frutos de un pecado aún mayor, el estar separado de Dios y adorar a algo más que a Dios. El no vivir para Dios es como jalar una carreta sin ruedas, si es cierto que sin ruedas la puedes halar tu vida así, pero le haces demasiado daño. Sin Dios, es cierto que todavía de puedes casar, tener una carrera, tener un familia, etc… pero terminas haciéndote demasiado daño porque algo vital siempre ha faltado en tu vida… terminas viviendo esta lista de cosas que leímos que te destruyen, porque con ellas intentas compensar la ausencia de Dios en tu vida. • Por ejemplo, muchas mujeres adoran la atención y la admiración de un hombre para poder sentirse feliz y bien acerca de si mismas. La atención del hombre se vuelve el dios de sus vidas, y por lo tanto tener relaciones con un hombre es solo un síntoma de un pecado más grande, adorar el amor de un hombre imperfecto, en vez de anhelar el amor perfecto de Dios. Lo mismo pasa con los hombre… (lo mismo pasa con los hombre…)

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Algunos adoran la admiración de otros: Yo les he confesado que gran parte de mi vida ha sido arruinada por el deseo de querer la aprobación de los demás… o Me ha causado muchas emociones y pensamientos malos. Me ha causado trabajar demasiado porque quiero tener éxito para que otros me admiren.... Me ha causado envidiar a otros que han sido más exitoso que yo… y hasta uno empieza a desear que ellos fracasen (fíjese usted que horrible es adorar a cualquier cosa que no sea Dios) o El desear la admiración otros en vez de descansar en el amor de Dios por ti, te hace mentir… porque la mentira es una manera de proteger tu imagen, precisamente xq busca la admiración de otros, en vez de creer que Dios te ama. o (Aun a veces adoro más la opinión de mi esposa, que la opinión de Dios… Ej. mensajes) Otros adoran el dinero, y por eso cuando algo amenaza la falta de dinero te desesperas… el dinero no es malo, pero poner tu amor y confianza en algo que sin duda te va a fallar, significa que tu mundo se derrumba cuando tu dios falso te desilusiona… (El único verdaderamente fiel es Dios, por eso es el único digno de nuestra adoración y servicio). Otros adoran el prestigio, y por eso cuando la gente no te para bola te deprimes, o te enojas… estas buscando valor en la gente, sin darte cuenta lo mucho que el Dios del universo te ama. Otros adoran sus preferencias, viven para el reino del “yo”, y por eso cuando hay un cambio que no les conviene, se retiran… porque el cambio no cuadra en los planes que ellos tenían. Viven para ellos mismos, sin darse cuenta que la vida más feliz es vivir para Dios sirviendo a otros (que cuando Jesús dijo “es mejor dar que recibir”, es porque “es mejor dar que recibir”).

Todas estas cosas son producto de la carne/de esa naturaleza de pecado en el corazón. Y todas estas cosas son impulsadas por la ausencia del control de Dios en nuestras vidas/la ausencia de Dios como Rey de tu corazón. Cuando Pablo resume todos estos pecados en el v.16, el les llama “deseos de la carne” = “epithumia”, en griego es la palabra “epithumia”, es un deseo profundo, que anhela con ansia/con muchas ganas. • Es un deseo que te lleva a toda esa lista que vimos, pero todas las cosas en esa lista son solo un síntoma NO la verdadera raíz del pecado. La verdadera raíz del problema es vivir separado(a) de

Dios, adorando a algo (epithumia) deseando a algo más que a Dios. (Por eso el primer mandamiento es “No tendrás dioses ajenos delante de mí.” Porque una cuando deseamos y amamos a algo mas que a Dios, hemos destronado a Dios del primer lugar en nuestras vidas, y la ausencia de Dios nos lleva a practicar el pecado). Algo bien interesante y triste, es que cada vez que oigo a los cristianos hablar de este pasaje, solo se concentran en la parte que dice, “adulterio, fornicación, orgias y borracheras…”, pero, ¿no se dio cuenta usted que en esa misma lista, Dios pone, “idolatría, pleitos, celos, iras, contiendas, divisiones, y envidias?” • Como que omiten esas cosas, ¿Por qué? Porque ellos quieren exaltar lo malo que ellos no hacen, culpando a los de afuera, para lucir bien… Pero acuérdese que el evangelio NO es así. En la religión tradicional usted esta apercibido del pecado del otro, pero en el evangelio, usted esta apercibido de su propio pecado. • Así que por favor NO me juzgue a otro de pecados, cuando usted contiende, tiene celos y envidias, porque están en la misma lista. (Me parece mentira como hay gente en la iglesia que tienen la cara de criticar a otros cuando ellos hablan mal de otros y tienen resentimiento hacia otras personas, con corazones se llenan de odio en vez de amor y misericordia por aquel que ha fallado…) • Imagínese que usted esté hablando de alguien en la iglesia, y usted dice, “ese hombre es un tremendo líder, lo único malo es que se emborracha y tiene orgias todos los fines de semana”; la persona que lo está oyendo salta xq esta ofendida, y le responde, “como puede ser posible que tal haga eso y sea líder…” (bien hecho, yo estoy con usted también…); • Pero lo triste es que la iglesia está llena de personas ambiciosas y egoístas, que hacen pleitos y contienden con los demás, que tienen envidia, y tristemente, nadie dice nada, nada salta ofendido, la dejan pasar… ¡NO debe ser así hermanos! Esas cosas están en la misma lista hermanos. (Por eso es que SEE es una comunidad de fe transparente, sí, yo mismo le voy a confesar mis pecados aunque yo sea el pastor, pero usted va a estar más preocupados de los suyos que de los míos, y lo que vamos a hacer es crecer juntos, en sinceridad, Amando a Dios de corazón, Amándonos unos a otros y Amando a nuestro mundo. Así que lo que cambia nuestro corazón NO son reglas, lo que nos cambia es el amor de Dios/el evangelio de Jesucristo, que NO se enfoca en el

comportamiento externo, sino que va directo al problema, nuestro corazón, y cambia lo que nuestro corazón desea; y como fruto de ese amor, nuestro comportamiento naturalmente cambia. Esa es la primera planta y los frutos que produce. Pero la Biblia no se queda allí, en los próximos versículos, Pablo describe otra planta, y otros frutos; esta planta tiene su raíz en el evangelio. • El evangelio es la realidad de que usted y yo merecemos la ira de Dios (no podemos negar que hemos ignorado y rechazado la autoridad de Dios en nuestras vidas), somos pecadores. Pero Dios, en vez de darnos Su ira que merecemos, más bien mando a su hijo Jesucristo, y venir a esta tierra a morir en la cruz que usted y yo merecíamos. Fue Jesús quien dejo el cielo que El merecía, y tomar sobre El mismo en la cruz, la ira de Dios que nosotros merecíamos. Es imposible mirar a la cruz y seguir siendo orgulloso y egocéntrico; cuando usted permanece a los pies de esa cruz, cada día, y te plantas allí; Jesús produce en ti frutos tan diferentes… mire ahora esos frutos: 22 Pero el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, 23 mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley. • Amor (en griego “ágape”) Amor es sacrificio personal voluntario por otra persona, que no demanda reciprocidad, ni demanda que la persona siendo amada se merezca tal amor” – Amar por amar, no por alguna razón egoísta o interesada. • Gozo (en griego “chara”) Deleite en Dios; es un deleite en Dios que va mucho mas allá de tus circunstancias… • Paz: (en griego, “irene”) – no se xq paciencia en griego paciencia es el nombre de un huracán… Paciencia es el descanso y la confianza en que Tu padre celestial esta en completo control de tu vida, obrando Su divino plan en ti, sin importa cuál sea tu circunstancia. • Paciencia (en griego “macrothumia”) como que para pronunciar esa palabra en griego, hay que perder la paciencia… Paciencia es lidiar con la decepción sin enojarse, incluso cuando la gente te hiere, usted todavía es bondadoso hacia ellos ¿Por qué? Porque así es Jesús contigo. • Benignidad (en griego “chrestotes”) hay una intención de bien que fluye de ti por otros. • Bondad (en griego “agathosune”) Bondad en realidad es integridad, porque su bondad por otros no es interesada ni tiene agendas ocultas, usted es bondadoso en amor por su prójimo, no x ganancia

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Fe/Fidelidad (en griego “pistis”) Esa palabra en griego le da a uno la impresión que los fieles huelen mal , una persona fiel NO es una persona oportunista, no corre fácil, no deja su compromiso fácilmente; su vida se rige por los principios de la palabra de Dios (el ejemplo perfecto de esto es Jesús de camino a la cruz, FIEL a su misión, aun cuando NO tenía que hacerlo, porque la culpa y el castigo que fue sobre él, no eran de Él, sino el de nosotros. El fue perfecto hasta que tomo sobre El tus pecados, y fue FIEL hasta la muerte, y muerte de cruz). Mansedumbre (en griego “prautas”) Significa humildad. Usted no vive reclamando sus derechos, o comportándose como si todo se tratara de usted. Templanza/Dominio Propio (en griego “egkrateia”) Cuando usted desea algo pero tiene la madurez de poner su alma en su lugar. Usted a veces es tentado a querer vengarse, a tener sexo ilícito, a querer depender del alago de los demás, pero usted pone su alma en su lugar antes de pecar, porque lo que usted más le interesa en un momento determinado es honrar a Dios a pesar de la tentación

Estos frutos dice la Biblia v.23 …contra tales cosas no hay ley. En otras palabras, una persona dominada por amor, gozo, paciencia y todos los demás, a tal personas no hay que escribirles ley, porque estas cosas son el cumplimiento de la ley. • Si estos 9 frutos existen en tu corazón, entonces usted no necesita leyes para controlar tu conducta porque usted se ha vuelto la ley de Dios (que es, Amar a Dios y amar a otros). • Ahora, sabemos que nuestro corazón no es así, sin embargo, las buenas noticias son que El evangelio de Jesucristo produce estos frutos y ese carácter en tu corazón. Segundo tenemos 2. Un mandamiento Gálatas 5:16 Digo, pues: Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne, ¿Qué significa “andad en el Espíritu”? ¿Sera tener un momento de euforia que dura unos minutos y después sigues siendo el mismo? Claro que no… • Para responder esto usted tiene que preguntarse ¿Qué hace el Espíritu de Dios? En Juan 16:14 Jesús dijo “El me glorifica”, El Espíritu de Dios glorifica a Jesús. El busca que Jesús sea más grande en tu corazón, y tu más pequeño. El hace de la doctrinas del evangelio, una realidad que puedes sentir en tu alma. El Espíritu busca darle la riendas de tu vida a Jesucristo,

Andad en El Espíritu es permanecer en el evangelio/permanecer en Cristo. Y cuando este Espíritu de Dios que glorifica a Jesús y te proclama el evangelio de Jesús cada día, toma mas y mas campo en tu vida, entonces empieza a producir en ti “frutos del Espíritu” (la buena lista que leímos). Pero tu vida en tus manos produce obras de la carne (la lista mala que leímos). Permítame rapidito ensenarle 2 términos teológicos: Justificación = declarar algo santo el acto por el cual Dios nos declara justos en Cristo. Jesús vivió la vida perfecta que nosotros deberíamos haber vivido, pero q no pudimos. Y murió la muerte con la cual nosotros éramos condenados. Por la obra de Jesús en nuestro lugar, Dios nos justifico ante El, a través de Jesucristo. • Dios NO nos justifica porque nuestro comportamiento era justo, sino que el único justo (Jesús) dio su vida por los injustos (nosotros), y Dios es su gran amor por nosotros, nos acredita la justicia de Jesucristo a nosotros. Eso es justificación (por eso Martin Lutero le llama, “el gran intercambio”). •

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justificación inmerecida que Jesús nos regalo cuando estaba en la cruz en nuestro lugar. No sé si eso le vuela los sesos pero vuela los míos y me hace sentir tan amado por Dios. Nadie te ama hoy como Dios. Escriba esto: El meditar en tu justificación es el componente más esencial para tu santificación.

Quizás usted piense, “si eso fuera cierto la gente no va a tener motivación para crecer en su devoción con Dios”, pero no amigos, todo lo contrario. La seguridad del amor y la aceptación de Dios por ti, hace que tu motivación por obedecer a Dios sea amor por El, y amor, es el corazón de todos los mandamientos. El amor de Dios por ti es tan real, tan seguro y tan fiel que te insta a vivir para Él, y cuando vives amando a Dios en repuesta a Su amor por ti, el obedecer a Dios es un deleite no un deber… vives enamorado de aquel que te amo cuando no había que amar en ti.

Santificación = hacer algo santo significa literalmente, “hacer algo santo”, o sea, que Dios va santificando, o haciendo santo nuestro comportamiento mientras permanecemos Él. Justificación es la declaración legal de Dios sobre algo que él quiso hacer santo (como el día que nos salvo), y Santificación en el proceso por el cual Dios va santificando o moldeando nuestro carácter al de El.

Todos estos 9 frutos del Espíritu que vimos, son el resultado de una relación íntima con Jesucristo.

¿Por qué les explico todo esto? Porque nuestro crecimiento en Dios/nuestra santificación, se alimenta de nuestro justificación. Dios nos santifica más y más cuando nos apegamos íntimamente más y más a nuestra justificación. • Meditar en el hecho de que Dios nos hizo santos (a través de Jesucristo) cuando NO éramos santos, es lo que nos da el deseo de conocer y servir a un Dios tan amoroso. (Por eso Martin Lutero decía “progresar, es empezar otra vez” Martin Lutero. Crecer en Jesús es regresar al principio, a la verdad de que restaura nuestra relación con Dios NO por nuestras buenas obras, sino a pesar de nuestras malas obras, por puro amor por nosotros. (La única obra que declaro santo ante Dios fue la obra de Jesús no las tuyas – por eso, “a Él sea la gloria”). • Escuche por favor, esto esta tan profundo: Los únicos que mejoraremos (santificación) son aquellos que entienden que la aprobación de Dios no depende de que ellos mejoren, sino de la

Permítame animarle: Cuando yo tenía 12 años, mis orejas y mi cabeza tenían el mismo tamaño que tienen hoy, imagínese usted que horrible (pic) el resto de mi cuerpo de 12 años, y la cabeza y las orejas en toda su madurez… hasta el día de hoy un hermano mío nunca me llama por mi nombre, sino con el apodo “cabeza”. • ¿Qué quiero decirle con eso? No se preocupe, el crecer es un proceso, no un corrientaso del Espíritu. Se llaman frutos porque toman tiempo madurar… todo lo que tiene que hacer es permancer en Cristo, bañarte de Su evangelio a cada día a través de Su palabra, y veras como creces. Así como cuando mi madre me decía, no te preocupes, un día tú crecimiento se va a emparejar, de la misma manera yo le digo, siga buscando del Reino de Dios y Su justicia, y va a emparejar también… (Gracias a Dios hoy por hoy ya empareje y mi cuerpo tomo proporción con mi cabeza y mis orejas; el único fenómeno es q por alguna razón, la pansa me sigue creciendo… todavía está tratando de emparejar)

Y quizás usted esté pensando ahorita, “¿pero sabe que pastor? yo se que le pertenezco a Cristo/yo le he entregado mi vida a Él, sin embargo me faltan tantos de estos frutos en mi carácter ¿Qué pasa?”

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Pero en serio, el ADN de mi tamaño hoy, estaba en mí a los 12 años. De la misma manera, si Jesucristo y Su evangelio es lo que está en ti y has creído, tu ADN espiritual ya está en ti, y crecerás; si estas en Cristo sin duda crecerás; no te rindas, no dejes que el enemigo te deprima, no te desalientes. El resto de tu vida es simplemente que tu carácter vaya creciendo (santificación) a lo que Dios ya te ha declarado que seas en Cristo (justificación). Y recuerda que nunca se trata de lo que tu crezcas (santificación) sino de cuanto Jesús crezca en ti (justificación). El énfasis es El, no tu.

Después de hoy ya usted no tiene que ir al seminario  Término con esto; 3. Un aviso (acerca de cosas con las cuales vamos a luchar toda la vida); escuche esto por favor: • Dios nos está diciendo aquí en Gálatas, que por el resto de nuestras vidas estamos en guerra! Una lucha hasta la muerte entre nuestra naturaleza pecaminosa, y nuestra nueva naturaleza en Cristo (una lucha entre el mi reino, y el Reino de Dios). Y estas dos demandan tu corazón… • Así que escuche, usted tiene que constantemente sacar laz raíces de su alma, de esta carne que desea a pecar, y llevar tu alma al evangelio. ¡Eso es guerra! Y es una constante. • Es como si usted tuviera partecitas en su alma que no han sido evangelizadas todavía. Y usted tiene que mandar allí misioneros para que le prediquen a esas partes de su alma que no han querido humillarse al dominio de Jesús. A veces hablamos de gente que rechaza el evangelio, ignorando esas partes de nuestra alma que hacen lo mismo. Predícale el evangelio a tu alma/predícate el evangelio a ti mismo(a). Esta es una batalla real que nunca dejara de ser en esta tierra. Ora a Dios cada día ora la oración que le entregamos que va con nuestra serie (shoud I say it?) • Todos los días es una batalla; J.C Ryle decía “El verdadero cristiano se conoce por su batalla interna” J.C. Ryle • Muchas veces Dios usa la aflicción para que nos mantengamos dependientes de El o Gálatas 5:24 Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos. A veces duele, pero Dios está sacando la raíz de aquellas cosas en la que hemos confiando más que en El. (Martin Lutero dijo, “hay 3 cosas que ensenan

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a una persona conocer a Dios: La Biblia, la oración, y el dolor” M. Lutero) Haz morir tus pasiones desordenadas, tu rencor, tu enojo, tu lascivia, porque la carne y el Espíritu compiten por tu alma (Gálatas 5:16-17 // no satisfagáis los deseos de la carne, 17 porque el deseo de la carne es contra el Espíritu y el del Espíritu es contra la carne; y estos se oponen entre sí) Resiste la tentación como hijo e hija de Dios, sabiendo que a cada tentación Dios da una salida. La meta es que estés tan lleno de Jesús, que ames lo que El ama y odies lo que El odia. Que no seas tentado(a) tanto por la impureza, porque ahora amas la verdad. Y de la misma manera que te parece que el abuso de un niño es horrible, que puedas desarrollar ese mismo sentir por todo lo que es pecado, no solo por algunos de ellos…

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El evangelio de Jesucristo produce un corazón que ama a Dios. Ten fe en Dios y arrepiéntete de tu pecado; sincérate con Dios, dile, “Señor, ¿Por qué mi corazón anhela lo malo?” Y medita en el evangelio de gracia que te dice que Dios te acepta aun cuando tu corazón está manchado, para que ese amor fiel de Dios por ti cambie tu corazón a que ame, lo que El ama.

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Tienes dos opciones, arraigar tu alma en tu carne, o arraigar tu alma en Cristo. Si es en tu carne, el fruto será pleitos, contiendas, celos, odio, y en fin, destrucción. Pero si crees y pones tu alma en Cristo, los frutos son amor, paz, paciencia, en fin, vida.

¿Por qué no oras conmigo y le pides a Dios que te de la fuerza de creer su evangelio?