TRABAJO COMUNAL UNIVERSITARIO 5 testimonios, 5 formas de expresión del aporte de la experiencia de realización del TCU por parte de estudiantes de ULACIT inscritos en el II cuatrimestre de 2014.

El TCU… mejora aspectos personales Si tuviera que enumerar las experiencias positivas que tuve serían muchísimas, pero las principales serían: Mejora en aspectos personales como por ejemplo: la comunicación, el poder generar vínculos con estas personas, la capacidad de tener un pensamiento crítico sobre la realidad que ellos viven y la importancia de vivir de manera íntegra. Como profesional he aprendido el concepto de igualdad, sin embargo es importante aplicarlo a la hora de actuar, hacerlo de manera integral. No solo creer que ellos son iguales, sino brindar igualdad de oportunidades. La experiencia vivida a lo largo del TCU me llena satisfacción, primero por haber podido ayudar y segundo por haber sido ayudada. Sí, ayudada a romper mitos, a dejar atrás barreras que me generaban temor, y la esperanza de poder seguir creando espacios de apoyo y ayuda a otros. R. V. M., estudiante de Bachillerato en Psicología

El TCU… permite aportar a otros Para finalizar, sé en carne propia cuán difícil puede ser despegarse del tiempo de labores personales como el trabajo, estudios o tiempo familiar, pero como estudiante de odontología y a lo que me inculcaron desde que empecé mi carrera en la ULACIT, comprendo la importancia del trabajo comunal universitario. Relacionarnos con todo tipo de población es un deber como profesionales, no se puede ser tan egoísta y pensar solo en los beneficios que tendremos como tales sin antes darnos cuenta de las realidades de otras personas y poner un “grano de arena” compartiendo los conocimientos adquiridos, ya que como personas privilegiadas [con la educación] tenemos las herramientas para enseñarle a los demás y que se beneficien sus vidas, sean comunicadores también con sus entornos. Puedo testificar el impacto y valor que el TCU proporciona a la vida estudiantil y a largo plazo a nivel laboral de quienes recorrimos este curso, nos convierte en artífices de conocimientos en vidas, proporcionamos “algo” que no tenían, [de la misma forma que] nos dan una perspectiva o visión diferente para continuar caminando hacia un futuro más equilibrado. A. O. G., estudiante de la Licenciatura en Odontología

El TCU… facilita desarrollo de habilidades

Para mi desarrollo como persona estar en el centro de TCU fue una experiencia grata. En este lugar aprendí mucho sobre la sociedad y las problemáticas tecnológicas que existen en estos lugares. Para un ingeniero esto es algo muy importante. Hasta el momento me había enfocado profesionalmente a solventar problemáticas para compañías multinacionales las cuales poseían necesidades ínfimas en comparación con las necesidades que poseen los chicos de esta población en el barrio del Carmen de Alajuela. Como persona aprendí un poco de habilidades blandas que sé que me servirán para cuando yo sea el que necesite tratar con personas que hayan vivido en este tipo de ambientes. Sin ninguna duda, en ningún lugar hubiese aprendido cómo se trata con las personas de una mejor manera que en este lugar. Para el futuro no seré un profesional más que pisa a sus compañeros con tal de llegar al éxito, sino que aprendí que el trabajo en conjunto con personas que no poseen mis mismas habilidades, es un trabajo que tiene altas posibilidades de éxito.

F. C. M., estudiante del Bachillerato en Ingeniería en Circuitos y Sistemas Electrónicos

El TCU… enriquece personal y profesionalmente

El trabajo comunal no solo fue una experiencia enriquecedora como profesional sino como ser humano. Una persona no puede ser cien por ciento profesional si no tiene la capacidad de ayudar a los demás y comprender que su carrera puede ser una herramienta para construir un mejor futuro. En mi caso crecí como persona, los niños del Hogar Cuna me hicieron creer en una sociedad con grandes oportunidades y comprender que existen niños que tienen la capacidad para enfrentar cualquier obstáculo y salir adelante. A nivel profesional me di cuenta que amo mi carrera y deseo seguir impartiendo el conocimiento del inglés a muchos niños. Me siento orgullosa de haber sido parte de este proyecto y muy satisfecha con todas las enseñanzas que este me dejó.

E. H. S., estudiante del Bachillerato en Enseñanza y Traducción del Inglés

El TCU… permite beneficiar a otros }

Si en Costa Rica y en toda Latinoamérica las personas tuvieran una intención más voluntaria de realmente ayudar a quienes lo necesitan, seríamos un continente del cual hablar muchas cosas positivas. No obstante, considero que es importante innovar y generar nuevos métodos de concientización, como el que se lleva a cabo en ULACIT, para crear conciencia y hacer ver a las personas lo que realmente es considerado un proyecto de responsabilidad social y diferenciarlo de los actos de caridad o donaciones. A lo largo del curso, también tuve la oportunidad de observar los proyectos de otros compañeros, que también tuvieron mucho éxito, algunos, trabajando con poblaciones de adultos, otros con niños, otros con madres solteras. Es realmente agradable saber que, gracias a las 30 personas que realizaron un proyecto al mismo tiempo que yo en ULACIT, hay cientos de beneficiados y personas agradecidas que el día de hoy son personas con muchas más capacidades en cada vocación de lo que eran en la situación sin proyecto. Realmente espero que todas o varias de las personas que fueron mis compañeros de clase durante el cuatrimestre hayan aprendido tanto como yo y tengan, en algún futuro, proyectos de responsabilidad social relaciones a sus carreras universitarias.

D. D. G., estudiante del Bachillerato en Administración de Negocios