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LAS SAGRADAS ESCRITURAS CONFIRMAN LA GNOSIS El que tenga entendimiento que entienda ‐ Apocalipsis
El Maestro Samael Aun Weor, vino a develar y a explicar los libros sagrados de todas las religiones.
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CONTENIDO Página
2 I. EL CUERPO DE DOCTRINA DE LA GNOSIS ES: NACER, MORIR Y SACRIFICIO POR LA HUMANIDAD. ..................................................................................................................................... 3 II. EL HIJO DEL HOMBRE NACE EN LA NOVENA ESFERA. EL HIJO DEL HOMBRE NACE DEL AGUA Y DEL FUEGO ......................................................................................................... 5 III. LA GRAN BATALLA .................................................................................................................................. 7 IV. MATAD NO SOLAMENTE EL DESEO SINO HASTA LA SOMBRA MISMA DEL ARBOL TENTADOR DEL DESEO ..................................................................................................... 10 V. EL MATRIMONIO PERFECTO ............................................................................................................ 13 VI. “COMER LA PASCUA DE JEHOVA” EXODO 12:11 ..................................................................... 24 VII. LOS DIEZ MANDAMIENTOS ............................................................................................................... 28 EDICION – DISEÑO PERFILES GRAFICOS – PUBLICIDAD CALLE 6 Nº 8‐59 TELEFONOS: 2281362 GUADALAJARA DE BUGA 1ª EDICION AGOSTO 9 DE 1998
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EL CUERPO DE DOCTRINA DE LA GNOSIS ES: NACER, MORIR Y SACRIFICIO POR LA HUMANIDAD.
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Para poder NACER, hay que dejar de FORNICAR y al no FORNICAR nos volve‐ mos CASTOS. La palabra Porneia en Griego quiere decir fornicación y su sig‐ nificado más amplio es Prostitución, falta de castidad, o toda clase de relaciones sexuales ilegítimas.1 En el prefacio de El Matrimonio Perfecto 3ª Edición , explican el porqué a los gallos de pelea no les permiten unirse a las hembras, ni a los caballos de carrera, potros y potrancas, jamás los juntan con yeguas o caballos, para que no pierdan su simiente Semen y así puedan rendir mucho más.
“Si los hombres supieran lo que van a perder cuando van a FORNICAR, a emi‐ tir su Semen en lugar de ir riendo, irían llorando”. NACER: “El Nacer es un problema com‐ pletamente sexual” Samael Aun Weor. Matrimonio Perfecto. Cap. 33 . Nicode‐ mo, gobernante de los Judíos, va a Cristo de noche y le dice: «Maestro, sabemos
que tú has venido de Dios, porque nadie puede ejecutar estas señales que tu eje‐ cutas a menos que Dios esté con él. En respuesta Jesús le dijo: a menos que uno nazca de nuevo, no puede ver el reino de Dios. Nicodemo le dijo: ¿Cómo puede el hombre nacer cuando es viejo? Jesús le contestó: muy en verdad te digo: a me‐ nos que uno nazca de agua y de espíritu, no puede entrar en el reino de Dios. Lo que ha nacido de la carne, fornicación 1
Ver traducción del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras. Editores Watch Tower Bible and Tract Society of Pennsylvania. P: 1575.
carne es, y lo que ha nacido del espíritu castidad espíritu es. No te maravilles a causa de que te dijera: Ustedes tienen que nacer otra vez. » Evangelio de San Juan 3: 2‐7 .
«Para llegar a ser hijos de Dios, y ejercer fe en su nombre, hay que nacer, no de sangre, ni de voluntad carnal, ni de vo‐ luntad de varón, sino de Dios». Juan 1:12‐13 .
En la página 233 del Misal Diario y Ves‐ peral Iglesia Católica se lee textual‐ mente en latín “SEMEN EST VERBUM DEI”, se traduce: el Semen es la Palabra de Dios. En Juan, 1:1 leemos: «En el
principio la Palabra era, y la Palabra es‐ taba con Dios». La Palabra, quiere decir
Verbo Semen o Logos que tiene el mismo significado. En Juan 1:14, encon‐ tramos: «De modo que la Palabra vino a ser carne y residió moró en tienda ‐ cuerpo físico entre nosotros, y tuvimos
una vista de su gloria, gloria como la que le pertenece a un hijo unigénito de parte de un padre; y estaba llena de bondad inmerecida y verdad».
La semilla de Dios, está encarnada en todo lo creado, pero el hombre la desen‐ carna cuando fornica. Toda emisión se‐ minal produce estragos en el cuerpo físico y al no ser sembrada la semilla Isaías 55:10 el espíritu del hombre se oscurece por falta de transmutación o por no encarnar al Verbo. La Palabra o Simiente que sale de Dios debe volver a Él con éxito porque para eso la ha envia‐ do Isaías. 55:11 . San Pedro en su primera epístola 1:23‐ 24, confirma el Nuevo Nacimiento:
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«Porque se les ha dado un nuevo naci‐
miento, no de semilla corruptible, sino de semilla simiente reproductiva‐ incorruptible, mediante la Palabra se‐ men del Dios vivo y duradero». Cuando la semilla sale del cuerpo, queda corrup‐ tible; engendra hijos de la carne, sujetos a muerte, pero cuando la semilla no es corruptible, o sea casta, transmutada a través del matrimonio, da hijos de Dios y da el nacimiento, al que se refiere Pedro, para poder ver el reino de Dios, o sea, ya naciendo del agua y del espíritu.
Quienes encarnan el Verbo o sea la Pala‐ bra, es porque han fijado en la Iglesia de Sardis Garganta la energía humana transmutada mediante una mágica rela‐ ción sexual espiritual y amorosa. El agua donde está envuelto el semen es el habitáculo del fuego y este alimenta al espíritu Jeremías 23:28 «¿Qué tiene que ver la paja con el grano semilla ? Es la expresión de Jehová». Continua Je‐ remías 23:29: «¿ No es mi Palabra co‐
rrespondiente como un fuego y como un martillo de fragua que desmenuza el peñasco? Es la expresión de Jehová». Nuestras obras serán manifestadas, por‐ que el día la pondrá al descubierto, por cuanto será revelada por medio de fue‐ go; y el fuego mismo probará que clase de obra es la de cada uno. Si la obra de alguien, obra que él ha edificado encima, permanece, él recibirá galardón; si la obra de alguien es quemada por comple‐ to, él sufrirá pérdida, pero él mismo será salvado; sin embargo, si así es, será como a través de fuego 1 Corintios 3:13‐15 .
¿De dónde sale el fuego? Del zoospermo y e el agua seminal, transmutado en la relación sexual matrimonial. En Juan epístola 1 3:9 define muy bien el naci‐ miento: «Todo el que ha nacido de Dios
no se ocupa en el pecado, porque la se‐ milla reproductiva de él permanece en el tal, y no puede practicar el pecado, por‐ que ha nacido de Dios».
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2. EL HIJO DEL HOMBRE NACE EN LA NOVENA ESFERA. EL HIJO DEL HOMBRE NACE DEL AGUA Y DEL FUEGO Samael Aun Weor: Matrimonio Perfecto. Cap. 2
Con el ARCANO A.Z.F. castidad , pode‐ mos retener toda esa luz maravillosa, todas esas corrientes cósmicas, todos esos poderes DIVINOS. Entonces se des‐ pierta el KUNDALINI, EL FUEGO SAGRA‐ DO DEL ESPÍRITU SANTO EN NOSO‐ TROS, y nos convertimos en DIOSES TE‐ RRIBLEMENTE DIVINOS. Pero cuando derramamos el SEMEN, las corrientes cósmicas se funden entre las corrientes universales, y penetran en el alma de los dos seres, una LUZ SANGUI‐ NOLENTA, LAS FUERZAS LUCIFERICAS DEL MAL, EL MAGNETISMO FATAL. Entonces Cupido se aleja llorando, se cierran las puertas del EDEM 2, el amor se convierte en desilusión, viene el des‐ encanto, queda la negra realidad de este valle de lágrimas. Santiago 1:18 dice cómo nos produjo Dios: «porque fue su voluntad». Juan 1:13 dice: «Y ellos nacieron, no de san‐
gre, ni de voluntad carnal, ni de voluntad de varón, sino de Dios». Santiago 1:13: «Dios los seleccionó desde el principio para salvación al santificarlos con espíri‐ tu y por su fe en la verdad. Él nos produ‐ jo por la palabra de la verdad, para que fuéramos ciertas primicias de sus criatu‐ ras». Para poder entender que quiere decir “Él nos produjo por la palabra de la verdad”, debemos remitirnos a Hebreos 4:12: «Porque la palabra Verbo de Dios es viva, y ejerce poder, y es más aguda que toda espada de dos filos, y penetra hasta dividir entre alma y espíri‐ 2
EDEM significa placer, deleite. Ver nota al pié de Génesis 2:8.
tu, y entre coyunturas y su tuétano y puede discernir pensamientos e inten‐ ciones del corazón». “Poder es energía” y perder la energía es tan grave que en Levítico 15:22 dice:
«En caso de que le ocurra a cualquier hombre un flujo de su órgano genital, su flujo es inmundo». Otras Biblias dicen
que en caso de que le salga a un hombre emisión de semen será inmundo ‐hasta el atardecer‐. En Matrimonio Perfecto Cap. 2 leemos muy claramente: “Si el hombre y la mujer saben retirarse antes del espasmo, si tuvieran en esos momen‐ tos de gozo delicioso, fuerza de voluntad para dominar al EGO ANIMAL, y si luego de retirarse del acto sin derramar el se‐ men, ni dentro de la matriz, ni fuera de ella, ni por los lados, ni en ninguna parte, habrían cometido un acto de magia sexual castidad ”. Eso es lo que se lla‐ ma en ocultismo EL ARCANO A.Z.F.. La Biblia Hebrea confirma lo antes transcri‐ to en Levítico 15:16‐18: «Ahora bien, en
caso de que le salga a un hombre “emi‐ sión de semen”, entonces tiene que ba‐ ñar toda su carne en agua y ser inmundo hasta el atardecer, y cualquier prenda de vestir y cualquier piel sobre la cual lle‐ gue a estar la “emisión de semen” tiene que ser lavada con agua y ser inmunda hasta el atardecer. En caso o en cuanto a la mujer con quien se acueste un hombre “con emisión de semen”, tiene que ba‐ ñarse en agua y ser inmundos hasta el atardecer”. » Ese atardecer es hasta que
corrijamos el vicio de derramar el líqui‐ do sagrado. “El acto sexual es muy terri‐ ble y difícil de manejar”, con justa razón dice el Apocalipsis 3:12: «Al que venza...
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lo haré columna en el templo de mi Dios, y ya no saldrá de éste nunca, y sobre él escribiré el nombre de mi Dios y el nom‐ bre de la ciudad de mi Dios, la Nueva Jerusalén que desciende del cielo desde mi Dios, y ese nuevo nombre mío». La espada de dos filos es la Palabra de
Dios, «en el principio la Palabra LOGOS ‐ Verbo ‐ Semen era y la Palabra estaba con Dios, y la Palabra era Dios» Juan 1:1‐2 , confirmado por Efesios 6:17: «También, acepten el yelmo de la salva‐
ción, y la espada del Espíritu, es decir la Palabra de Dios».
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3. LA GRAN BATALLA Samael Aun Weor. Matrimonio Perfecto. Cap. 3 En Jeremías 21:8: «Yo pongo delante de
vosotros el camino de la vida y el camino de la muerte». El hombre y la mujer pueden utilizar el contacto sexual y las delicias del amor y de los besos, para convertirse en “DIOSES O DEMONIOS”.
Desde el amanecer de la vida existe una gran batalla entre los poderes de la LUZ y los poderes de las TINIEBLAS. LA RAÍZ SAGRADA DE ESTA BATALLA ESTA EN EL SEXO. Veamos porqué el Maestro Samael dice esto: en Génesis 3:1‐7: «La serpiente
empezó a decir a la mujer: ¿Es realmen‐ te el caso que Dios ha dicho que ustedes no deben comer de todo árbol del jardín? La mujer dijo a la serpiente: Del fruto de los árboles del jardín podemos comer, pero en cuanto a comer del fruto del árbol que está en medio del jardín, Dios ha dicho: No deben comer de él, no, no deben tocarlo para que no mueran. Ante esto, la serpiente dijo a la mujer: Positi‐ vamente no morirán, porque Dios sabe que en el mismo día que coman de el, tendrán que ser como Dios, conociendo lo bueno y lo malo. Dos caminos . La mujer vio que el árbol era bueno para alimento, y que a los ojos era algo que anhelar, si, el árbol era deseable para contemplarlo, de modo que empezó a tomar de su fruto y a comerlo. Después dio de éste también a su esposo cuando él estuvo con ella, y él empezó a comerlo. Entonces se le abrieron los ojos a ambos, y empezaron a darse cuenta de que esta‐ ban desnudos». ¿Quién es la serpiente? Revelación 12:9:
«De modo que hacia abajo fue arrojado el gran dragón, LA SERPIENTE ORIGINAL, el que es llamado diablo y Satanás, que está extraviando a toda la tierra habita‐ da». La serpiente original el que es lla‐
mado diablo, lucha por sacar a EVA de su estado original de pureza, con engaños trabaja la mente de EVA, contradiciendo el mandato de Dios: “NO DEBEN TOCAR‐ LO PARA QUE NO MUERAN” Camino de la vida . Satanás representado en la ser‐ piente contradice a Dios, diciendo: “Posi‐ tivamente no morirán, porque Dios sabe que en el mismo día que coman de el, tendrán que ser como Dios, conociendo lo bueno y lo malo”. Cristo en Juan 8:44 dice: «Ustedes proceden de su padre el
diablo, y quieren hacer los deseos de su padre. Ese era homicida cuando princi‐ pió, y no permaneció firme en la verdad, porque la verdad no está en él. Cuando habla la mentira, habla según su propia disposición, porque es mentiroso y el padre de la mentira». Cristo les dijo esta recriminación tan fuerte porque creían que no habían nacido de FORNICACION Juan 8:41 , se consideraban hijos de DIOS. La mujer vio que el árbol era bueno para alimento, y que a los ojos era al‐ go que anhelar, si, el árbol era desea‐ ble para contemplarlo.
¿Por qué morimos? 1 Juan 3:8: «El que se ocupa en el pecado se origina del Dia‐ blo, porque el Diablo ha estado pecando desde el principio». Con este propósito
el Hijo de Dios fue manifestado, a saber para desbaratar las obras del diablo. ¿Y cómo se desbaratan las obras del diablo?
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Responde Juan en su epístola 1:10: «To‐
do el que ha nacido de Dios no se ocupa en el pecado, porque la semilla repro‐ ductiva de él permanece en el tal, y no puede practicar el pecado, porque ha nacido de Dios. Los hijos de Dios y los hijos del diablo se hacen evidentes por este hecho. » En Pedro 1:23, EVA fue
incitada a perder su simiente, luego in‐ dujo a ADAM a que hiciera lo mismo, por eso dejamos de ser hijos de Dios y nos convertimos en hijos del diablo. Para nacer como hijos de Dios debemos con‐ servar la semilla reproductiva Semen , continuar castos y así no practicaremos el pecado porque hemos nacido de Dios. Observemos, analicemos 1 Juan 3:10
«Los hijos de Dios y los hijos del diablo se hacen evidentes por este hecho» ¿Cuál es este hecho? Que la semilla ‐ semen reproductivo de Dios y del hom‐ bre no se emplee para pecar, sino para agradar a Dios.
La serpiente nos puso en el camino de la muerte, cuando mintió diciendo: «Posi‐ tivamente no morirán». Génesis 5:5: «Adán vivió 930 años y murió». 1 Juan 3:8 «El que se ocupa en el pecado se origina del diablo». Revelación 21:8:
«Pero en cuanto a los cobardes y los que no tienen fe y los que son repugnantes en su suciedad deshonran el cuerpo entre sí ‐fornicación‐ emisión seminal y asesinos y fornicadores inmundo y los que practican espiritismo, e idólatras y todos los mentirosos, su porción será en el lago que arde con fuego y azufre». Esto significa la muerte segunda.
Conocimiento de lo Bueno y de lo Ma‐ lo. Génesis 3:5
«El Señor hecho al hombre del Edén del placer y deleite espiritual para que no alargara la mano y tomara del fruto del
árbol de la vida el árbol de la vida es Cristo o sea el Verbo‐Simiente y viva para siempre» Génesis, 3:22 . Fuimos condenados a evolucionar conociendo primero lo malo que nos enseñó el dia‐ blo, sometiéndonos a sufrimientos y a una muerte continua hasta que alargue‐ mos la mano y cojamos del fruto del árbol de la vida, nos volvamos castos y puros para volver a Dios, la fuente de nuestra vida. Isaías 46:5: «¿a quién me
asemejarán ustedes o me harán igual o me compararán, para que nos parezca‐ mos uno a otro?». Isaías 46:9: «Acuér‐ dense de las primeras cosas de mucho tiempo atrás, que yo SOY DIVINO Y NO HAY OTRO DIOS, ni nadie semejante a mí». Acordémonos de las primeras cosas cuando éramos puros y no habíamos mancillado nuestros cuerpos con el pe‐ cado. Para permanecer en el bien, de‐ bemos mantener la actitud mental que también hubo en Cristo Jesús. Filipenses 2:5‐6: «Cristo aunque existía en la forma
de Dios, no dio consideración a una usurpación, a saber: que debiera ser Dios. El hombre por engaño de Satán quiso ser como Dios y Cristo siendo su hijo y existía en la forma de Dios. Más bien se hizo hombre, mostró humildad y luego fue elevado a la categoría de Dios». El árbol era Deseable para Contem‐ plarlo. Génesis 3:6 Eva fue provocada y cautivada por su propio deseo Eva fue atraída por la carnada de la fornicación, el deseo es lascivia ‐ lujuria . Santiago 1:14‐15:
«Cada uno es probado al ser provocado y cautivado por su propio deseo, entonces el deseo, cuando se ha hecho fecundo, da a luz el pecado; a su vez, el pecado, cuando se ha realizado, produce muer‐ te». Génesis 1:17: «Pero en cuanto al árbol del conocimiento de lo bueno y lo
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malo, no debes comer de él, porque en el día que comas de él, positivamente MO‐ RIRAS». Juan, epístola 1 2:16‐17, confirma lo di‐ cho en Génesis 3:6 y Santiago 1:14‐15: «Porque todo lo que hay en el mundo ‐el deseo de la carne lujuria y el deseo de los ojos miradas obscenas y la exhibi‐
ción ostentosa del medio de vida de uno no se origina del padre, sino que se ori‐ gina del mundo. Además, el mundo va pasando, y también su deseo, pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre». El deseo de la carne, la lujuria
es muy agradable, el placer sexual con emisión seminal es placentero, pero da luz el pecado y el pecado produce muer‐ te. La castidad produce vida cuando nos deleitamos en la transmutación sexual. Este es el árbol del bien y del mal, en el sexo está la Redención o condenación de la humanidad. De nosotros depende elegir el camino de la vida o el camino de la muerte. De modo que empezó a tomar de su fruto y a comerlo. Después dio de éste también a su esposo cuando él estuvo con ella, y él empezó a comer‐ lo. Génesis 3:6 ¿Qué fue lo que comió Adán? 2 Corintios 11:3 «Mas tengo miedo de que de algún modo, así como la serpiente ‐Satanás‐
sedujo a Eva por su astucia, las mentes de ustedes sean corrompidas y alejadas
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de la sinceridad y castidad que se deben al CRISTO». Satanás comenzó a trabajar la mente de Eva, desarrollando en ella la lujuria, lue‐ go el deseo y el deseo la excitó y vino la emisión y transmitió este deseo a Adán, cuando él estuvo con ella y fueron aleja‐ dos de la sinceridad y castidad con que Dios los había creado. En la epístola 1º Timoteo 2:14, confir‐ man lo que dice 2 Corintios 11:3: «Tam‐
bién Adán no fue engañado, sino que la mujer fue cabalmente engañada y llegó a estar en transgresión». La transgresión es que se dejo corromper la mente pri‐ mero y después fornicó dándole rienda suelta a la pasión sexual. Analicemos muy bien esta frase: «Cuan‐
do estuvo con ella. Y él empezó a comer‐ lo relación sexual . Se le abrieron los ojos a ambos, y empezaron a darse cuen‐ ta de que estaban desnudos» Génesis 2:25 . «Y ambos continuaban desnudos, el hombre y la esposa, y sin embargo no se avergonzaban no habían pecado . Después que Adán y Eva comieron del árbol del conocimiento de lo bueno y lo malo, tuvieron miedo de Dios y se aver‐ gonzaron» pecaron y tuvieron miedo . Antes de comer del árbol del bien y del mal estaban desnudos, no se avergonza‐ ban y tampoco se sentían desnudos eran puros .
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4. MATAD NO SOLAMENTE EL DESEO SINO HASTA LA SOMBRA MISMA DEL ARBOL TENTADOR DEL DESEO Samael Aun Weor. Matrimonio Perfecto. Cap. 1 El árbol tentador del deseo es el sexo, amemos castamente no apasionadamen‐ te. “Recuerda que la llama del deseo con‐ sume la vida, y queda entonces la tre‐ menda realidad de la muerte”. ¿Qué dijo Jehová a nuestros primeros padres? Génesis 2:17: «El día que coman del
árbol del conocimiento de lo bueno y lo malo, morirás».
Génesis 3:12: «Y paso el hombre a decir:
la mujer que me diste para que estuviera conmigo, ella me dio fruto del árbol y así es que comí». Santiago 1:14: «Más bien, cada uno es probado al ser provocado y cautivado por su propio deseo». Concu‐ piscencia una vez cometida engendra el pecado y el pecado produce muerte 3.
Génesis 3:13: «Ante esto, Jehová Dios
dijo a la mujer: ¿Qué es esto que has hecho?. A lo cual respondió la mujer: La serpiente diablo ella me engañó, y así es que comí»4 Génesis 3:15: «Y pondré enemistad en‐
tre Ti y la mujer, y entre tu descendencia simiente y la descendencia de ella. El te magullará en la cabeza y tú le magullarás en el talón. Pondré enemistad: Santiago 4:4: «Adul‐ teras, ¿no saben que la amistad con el mundo es enemistad con Dios?». La re‐
lación sexual fuera del matrimonio nos aleja del Creador.
Entre ti: Se hace alusión al Querubín que 3 4
Biblia Católica ‐ Santiago 1:14‐15. Leer nuevamente 2 Corintios 11:3
cayó. Isaías 28:14: «Tú eres el querubín
ungido que cubre, y Yo te he colocado a ti. En la montaña santa de Dios resultaste estar. En medio de piedras de fuego te paseabas». Y este querubín fue arrojado
a la tierra, leamos lo que dice Revelación 12:9: «De modo que hacia abajo fue
arrojado el gran dragón, la serpiente original, el que es llamado diablo y Sa‐ tanás, que está extraviando a toda la tierra habitada; fue arrojado con sus ángeles abajo a la tierra» Juan muchos años después de la caída del hombre afirma “que está extraviando a todos los habitantes de la tierra”.
Y la Mujer: Esta mujer es la Madre Divi‐ na, representada en la Biblia por la “Je‐ rusalén de arriba”, Gálatas 4:26: «Pero la
Jerusalén de arriba es libre y ella es nuestra madre». Y en Gálatas 4:31: «No somos hijos de una sirvienta, sino de la mujer libre». La sirvienta es la esclava de las pasiones, la mujer libre es casta, pura y fiel. La Gnosis en su doctrina, hace bastante énfasis sobre el poder que la Madre Di‐ vina tiene para destruir los agregados sicológicos que llevamos dentro. Solamente la Madre Divina, o sea la Santísima Virgen de Luz, puede des‐ truir el Satán interior que llevamos dentro. La mente no puede por si sola destruir a Satán, requiere de un poder superior y este poder es nuestra Divi‐ na Madre Kundalini. Revelación 12:1 confirma nuevamente
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cual es esa mujer: «Se vio en el cielo una
gran señal, una mujer vestida de sol y la luna debajo de sus pies, y sobre su cabe‐ za había una corona de doce estrellas» La enemistad que hay entre los hijos del diablo fornicación y los hijos de la Luz castidad es permanente.
Los hijos de la sirvienta son numerosos, los hijos engendrados a través de la emi‐ sión seminal somos como la arena del desierto. Los hijos de la mujer libre, los hijos en‐ gendrados a través de la castidad, transmutación sexual, son muy pocos. Y entre estas dos descendencias, hay enemistad, siendo los unos hijos del dia‐ blo y los otros hijos de Dios. La Madre de Jesucristo fue Virgen casta por eso dio un hijo solar, Ella estaba ves‐ tida del sol. Nosotros los nacidos de fornicación emisión seminal , somos lunares, fríos, necesitamos trabajar con el fuego y el agua para crear fuego y alumbrar a nues‐ tro Dios interior. Y entre su descendencia. Se refiere a la descendencia del diablo Mateo 23:33 . Serpientes, prole de víboras, quiere decir hijos de Satán. 1 Juan 3:9‐10: «Todo el
que ha nacido de Dios no se ocupa en el pecado, porque la semilla reproductiva de él permanece en el tal, y no puede practicar el pecado, porque ha nacido de Dios. Los hijos de Dios y los hijos del diablo se hacen evidentes por este hecho.
Y la descendencia de Ella. Gálatas 3:16 Y a su descendencia, que es Cristo, la semilla reproductiva de Dios, estuvo en
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Cristo, y estará en aquellos que encarnen esa semilla. El te magullará la cabeza. Él es Cristo, participó de nuestra sangre y carne, para que por su muerte eliminación del YO o EGO redujera a nada al que tiene el me‐ dio de causar la muerte, es decir al dia‐ blo Hebreos 2:14 . Él es Cristo, Juan 12: ‐37: «Tú mismo lo
dices Yo Soy Rey».
Magullará. ¿A quién magullará? A la serpiente original, es decir al diablo. Para entender esto, hay que leer Revela‐ ción: 20‐2: «y prendió al dragón, la ser‐
piente original, que es el Diablo y Sa‐ tanás, y lo ató por mil años».
En la cabeza. La cabeza del mal es el Dia‐ blo o Satanás. Cristo venció esta entidad y mostró el camino para vencerlo. Cristo es un hombre casto, por eso arrojó al que extravía a la humanidad al lago de fuego y azufre. Revelación 20:10: «Y el Diablo
que los estaba extraviando fue arrojado al lago de fuego y azufre, donde ya esta‐ ban tanto la bestia salvaje como el falso profeta; y serán atormentados día y no‐ che para siempre jamás». Y Tú. Tu se refiere a Satanás, el cual tie‐ ne el medio de causar la muerte, Hebreos 2:14 «es decir el Diablo».
¿Quién promovió la muerte de Jesús? Satanás entró en Judas y éste lo entregó a los principales sacerdotes. Mateo: 17:50 «Jesús clamó con voz fuerte y ce‐ dió su espíritu La serpiente, Satanás, magulla la cabeza de los hombres solares en el talón. Talón. Cuando el agente principal de la vida, que es Cristo, lo profanamos con la
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impureza, lo matamos permanentemen‐ te Hechos: 3:15 «Mataron al Agente
Principal de la vida» .
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5. EL MATRIMONIO PERFECTO Samael Aun Weor Capítulo 3º libro Matrimonio Perfecto, página 36 dice: «Las almas que siguen la
senda del Matrimonio Perfecto, se fusio‐ nan con su Dios Interno y se elevan al reino del Superhombre». San Pablo en 2 Corintios: 11:2 dice: «Yo
personalmente los prometí en matrimo‐ nio a un solo esposo, para presentarlos cual virgen casta al Cristo». La mujer solamente debe tener un espo‐ so, y el hombre una sola mujer, de lo contrario caeríamos en adulterio y esto es gravísimo para los hogares.
Hebreos 13:4 «Que el matrimonio sea
honorable entre todos, y el lecho conyu‐ gal sea sin contaminación, porque Dios juzgará a los fornicadores y a los adúlte‐ ros». El lecho conyugal se contamina de
dos maneras: 1º fornicando, es decir, emitiendo semen y 2º adulterando, te‐ niendo relaciones sexuales fuera del matrimonio. Es palabra de Dios, sere‐ mos juzgados por cometer ambas cosas.
«Resulte bendita tu fuente de aguas y
regocíjate con la esposa de tu juventud».
Cuando sublimamos nuestras aguas se‐ minales adviene a nosotros un arroba‐ miento y un éxtasis delicioso. Proverbios 5:19 «Que sus propios pechos te embria‐
guen a todo tiempo. Con su amor estés en un éxtasis constantemente». “En la región de la luz solo pueden vi‐ vir aquellos que han llegado a la su‐ prema castidad” “Adorar a la mujer ajena es caer en el abismo de la fatalidad” Proverbios 5:20 «Por qué, pues, debes
tú, hijo mío, estar en un éxtasis con una extraña o abrazar el seno de una extra‐ njera.
El matrimonio fue instituido por nuestro Dios Jehová Génesis 2:24 «Por eso el
hombre dejará a su padre y a su madre, y tiene que adherirse a su esposa, o mujer, y tienen que llegar a ser una sola carne.
Para que el matrimonio sea honorable, debemos beber agua de nuestra propia cisterna el matrimonio y chorrillos que salgan de en medio de tu propio pozo el sexo Proverbios 5:16.
No dice a esposas o mujeres, cuando la pareja se une forman una sola carne, un solo espíritu, una sola alma.
No debemos botar el agua en las plazas públicas adulterio . Proverbios 5:17 «Los manantiales deben ser solo para
los caminos del hombre están enfrente de los ojos espíritus de Jehová, y Él está contemplando todos sus senderos trillados».
nosotros y no para los extraños, Resul‐ ten ser para ti solo y no para los extraños contigo ». Las aguas transmutadas en el matrimo‐ nio quedan benditas: Proverbios 5:18
Todos los pasos que damos están vigila‐ dos por Dios. Proverbios 5:21 «Porque
Por falta de disciplina moriremos. El adulterio, es falta de equidad, o sea fide‐ lidad. Proverbios 25:22‐23 «Sus propios
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errores atraparán al inicuo, y en las so‐ gas de su propio pecado será asido. Él será el que morirá porque no hay disci‐ plina fidelidad y porque en la abun‐ dancia de su tontedad se descarría». Adorar a su propia esposa es andar por el camino de la vida. Adorar a la mujer ajena es andar por el camino de la muerte. Jeremías 21:8 El sexo fuera del matrimonio artificio‐ samente parece agradable. Proverbios 5:3 «Porque como panal de miel los la‐
bios de una mujer extraña siguen gote‐ ando, y su paladar es más suave que el aceite». ¿Pero cuál es el efecto de esto? Prover‐ bios 5:4 «pero el efecto que después vie‐
ne de ella es tan amargo como el ajenjo; es tan agudo como una espada de dos filos». El adulterio nos conduce a la muerte física y espiritual, Proverbios 5:5 «Sus
pies van descendiendo a la muerte, sus mismísimos pasos se asen del Seol mis‐ mo Seol, sepultura ».
Seguimos en la senda de la muerte si violamos el 9º mandamiento. Proverbios 5:6 «Ella no contempla la senda de la
vida. Sus senderos trillados han ido errantes, y ella no sabe adónde».
Debemos escuchar los dichos de Dios, Proverbios 5:7 «Ahora pues, oh hijos,
verbios 5:9 «Para que no des a otros tu
dignidad energía vital ni tus años a lo que es cruel».
Para no perder el poder castidad y estar sometidos al dolor, hay que con‐ servar nuestra energía vital. Proverbios 5:10 «Para que los extraños no se satis‐
fagan de tu poder, ni las cosas que con‐ seguiste con dolor estén en la casa de un extranjero». Ser casto, no es fácil, cuesta mucho trabajo ser puro .
¿Qué le sucede al hombre que durante su juventud se entregó al placer sexual?, Se acaba la carne y el organismo y gemimos en la vejez por falta de fuerza: Prover‐ bios 5: «Ni tengas que gemir en tu futuro
vejez cuando se acaben tu carne y tu organismo».
Dios por medio de profetas, maestros, directores espirituales, nos ha enviado su voz censurándonos, pero no hacemos caso. Proverbios 5:12‐13‐14 «Y tengas
que decir: Cómo he odiado la disciplina, y mi corazón ha tratado con falta de res‐ peto aun la censura. Y no he escuchado la voz de mis instructores, y a mis maes‐ tros no he inclinado el oído. Fácilmente he llegado a estar en toda suerte de mal‐ dad en medio de la congregación y de la asamblea». LA SAGRADA BIBLIA GIRA ALREDEDOR DEL SEXO
nuevamente recalca que debemos ale‐ jarnos del adulterio, Proverbios 5:8
El matrimonio sin impurezas, alarga la vida de la pareja, proporciona felicidad a los cónyuges, los hijos se levantan en un hogar donde hay respeto y entendimien‐ to.
Esta prohibición la hace para que no perdamos nuestra energía seminal: Pro‐
El sexo puro se hace cuando la pareja es casta. Por eso Dios prohibe desde el co‐ mienzo del Génesis, hasta el final del
escúchenme, y no se aparten de los di‐ chos de mi boca su Santa Palabra ». Y «Mantén tu camino alejado de ella, y no te acerques a la entrada de su casa».
LAS SAGRADAS ESCRITURAS CONFIRMAN LA GNOSIS
Apocalipsis, la fornicación; entendida esta palabra en su significado amplio, a saber: “Falta de castidad, prostitución adulterio , toda clase de relaciones sexuales ilegítimas”. La degeneración sexual que hay en el mundo, por la prostitución, nos está lle‐ vando a la destrucción. El divorcio es el plato favorito del día, destruye a la pare‐ ja y sume a los hijos en un caos. Génesis 20:14 «No debes cometer adulterio». Adulterio es sexo prohibido. Toda clase de relaciones Adulterio: sexuales ilegítimas. El matrimonio es la célula principal de la sociedad, si esta célula es atacada por el cáncer del adulterio, moriremos lenta y dolorosamente sin remedio.
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7:21‐22‐23: «Porque de dentro, del co‐
razón de los hombres, proceden razo‐ namientos perjudiciales: fornicaciones impurezas , hurtos, asesinatos, adulte‐ rios sexualidad fuera del matrimonio , codicias, actos de iniquidad, engaño, conducta relajada impudicia , ojo envi‐ dioso, blasfemia, altanería, irracionali‐ dad. Todas estas cosas inicuas proceden de dentro y contaminan al hombre». Leer Mateo 15:19 .
Violamos la Ley por el abuso sexual co‐ mo por cualquier otra falta. Santiago 2:11 «Porque el que dijo: No debes co‐
meter adulterio, también dijo: no debes asesinar». Siempre la falta sexual está presente como transgresión de la Ley de Dios.
Mientras vivamos seremos adúlteros si somos de otras personas. Romanos 7:3
El adulterio contamina el Santuario de Dios cuerpo humano . Ezequiel 23:37‐ 38 «Porque han cometido adulterio, y
«Así es que, mientras vive su esposo, sería llamada adúltera si llegara a ser de otro hombre» Ser, estar con otro hom‐ bre o el hombre con otra mujer .
El adulterio causa gran tribulación a to‐ do el núcleo familiar y enferma sus men‐ tes. Revelación 2:22 «Estoy a punto de
El adulterio, rompe la comunicación con Dios. Santiago 4:4: «Adulteras, ¿no saben
han contaminado mi santuario».
echarla en un lecho de enfermo, y a los que cometen adulterio con ella, en gran tribulación, a menos que se arrepientan de los hechos de ella». La única puerta que Dios no cierra, es el arrepentimiento.
Tan grave es el adulterio, que el solo hecho de mirar con deseo, hemos peca‐ do. Mateo 5:27‐28 «Oyeron ustedes que
se dijo: no debes cometer adulterio, pero yo les digo que todo el que sigue miran‐ do a una mujer a fin de tener una pasión por ella ya han cometido adulterio con ella en su corazón». ¿Qué es lo que nos contamina? Marcos
que la amistad con el mundo es enemis‐ tad con Dios?» Cualquiera, por lo tanto, que quiere ser amigo del mundo, está constituyéndose enemigo de Dios.
La Ley de Dios, castigaba el adulterio con la muerte para el hombre y la mujer; posteriormente el hombre le transfirió la culpa a la mujer. Levítico 20:10 «Ahora
bien, un hombre que comete adulterio con la esposa de otro hombre es uno que comete adulterio con la esposa de su semejante. El debe ser muerto sin falta, el adúltero y también la adúltera».
Dios se va de nosotros cuando adultera‐ mos. Jeremías 9:2 «Entonces dejaría a mi
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LAS SAGRADAS ESCRITURAS CONFIRMAN LA GNOSIS
pueblo y me iría de ellos, porque todos ellos son adúlteros». Ezequiel 23:45 «Porque adúlteras son, y hay sangre en sus manos». Los injustos no heredaremos el reino de Dios. ¿Porqué llegamos a ser injustos? 1 Corintios 6:9 «No se extravíen. Ni forni‐
cadores, ni idólatras, ni adúlteros, ni hombres que se tienen para propósitos contranaturales, ni hombres que se acuestan con hombres, ni ladrones, ni personas dominadas por la avidez, ni borrachos, ni injuriadores, ni los que practican extorsión, heredarán el reino de Dios».
•• Injuria: Es agravio, ultraje, herir con palabra a las personas.
•• Extorsión:
Arrebatar por fuerza una
cosa.
«Y, sin embargo, eso era lo que algunos de ustedes eran», 1 corintios 6:11. El
mandato es muy claro, hay que corregir, cambiar todo aquello que nos aleja del reino de Dios.
La dignificación matrimonial, se logra, cuando rendimos servicio sagrado a Dios en el lecho conyugal: Hebreos 13:4 «Que
•• Fornicadores: Los que mancillamos el
el matrimonio sea honorable entre to‐ dos, y el lecho conyugal sea sin contami‐ nación, porque Dios juzgará a los forni‐ cadores y a los adúlteros».
•• Idólatra: Los que renunciamos a nues‐
Fornicación, falta de castidad.
•• Adúlteros: Los que tenemos relaciones
Adulterio, Infidelidad, relaciones sexua‐ les fuera del matrimonio. Proverbios 5:16 «No se deben esparcir afuera tus
cuerpo con impurezas sexuales.
tro Dios Interno, para rendir culto a fal‐ sas divinidades.
sexuales fuera del matrimonio.
•• Hombres que se tienen para propósitos contranaturales: Las personas que tie‐ nen relaciones sexuales con los anima‐ les.
•• Hombres que se acuestan con hombres: El homoxesualismo o lesbianismo.
•• Ladrones: Los que se apropian de las cosas ajenas.
•• Avidez:
El deseo de poseer muchas
cosas.
•• Borrachos: Los que destruyen su cuer‐ po con bebidas embriagantes o estimu‐ lantes.
manantiales, tus corrientes de agua». Proverbios 5:20 «¿Por qué pues, debes tú hijo mío, estar en un éxtasis con una extraña, o abrazar el seno de una extra‐ njera?». Cae sexualmente el hombre y la mujer. Génesis 3:6 «De modo que la mujer em‐
pezó a tomar de su fruto y a comerlo. Después dio de éste también a su esposo cuando él estuvo con ella». Con esta fal‐ ta, quedamos sujetos a muerte y empieza la mujer a parir con dolor, comienza la descendencia del Diablo.
Génesis 3:15 «Pondré enemistad entre tu
descendencia la del Diablo y la descen‐ dencia de Ella» la descendencia de Mar‐
ía, es casta, su hijo es casto . Génesis 4:1
«Adán tuvo coito con Eva su esposa, y ella quedó en cinta. Con el tiempo dio a
LAS SAGRADAS ESCRITURAS CONFIRMAN LA GNOSIS
luz a Cían. Más tarde dio a luz a Abel». «Y entre estos dos hermanos hay enemis‐ tad, el uno hace lo bueno y el otro lo ma‐ lo» Génesis 4:7. Sigue el problema sexual, hasta para los hijos del Dios verdadero Angeles y hombres castos . Génesis 6:1‐2 «Aconteció que cuando los
hombres comenzaron a crecer en núme‐ ro sobre la superficie del suelo y les na‐ cieron hijas, entonces los hijos del Dios Verdadero los ángeles que no guarda‐
ron su posición original, su castidad Ju‐ das 6 empezaron a fijarse en las hijas de
los hombres, que ellas eran bien pareci‐ das; y se pusieron a tomar esposas para sí a saber, todas las que escogieron». La atracción sexual es tan poderosa que como un imán atrae a los Angeles y los vuelve carne. Con la caída del hombre, y de los ángeles, se desarrolló una maldad como la que tenemos ahora por la perversidad sexual que hay en el mundo. Génesis 6:4 «Los nefilim los que hacen caer a otros se hallaban en la tierra en
aquellos días y junto con los hijos del Dios Verdadero ángeles continuaron teniendo relaciones con las hijas de los hombres y ellas les dieron a luz hijos, estos fueron los poderosos que eran de la antigüedad, los hombres de fama». Génesis 6:5 «Jehová vio que la maldad del hombre abundaba en la tierra y deci‐ dió borrar todo lo viviente». ¿Qué detu‐
vo esta decisión? Un hombre casto con su familia, Noé. Génesis 6:9 «Noé fue
hombre justo. Resultó exento de falta entre sus contemporáneos entre sus generaciones . Noé andaba con el Dios
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Verdadero, por eso dijo que hiciera una arca con estas medidas: Largo 300 co‐ dos, ancho 50 codos y alto 30 codos». Analicemos estas medidas: 300x50x30 450.000 medida de ángel y de hombre. 4 5 9, el nueve 9 representa la no‐ vena esfera, el sexo. Esto era lo que Noé predicaba a los hom‐ bres de la Atlántida, que se pu‐ rificaran, dejaran de fornicar emitir semen , que se volvie‐ ran castos para no perecer. ¿Qué está haciendo hoy la GNOSIS? Pre‐ dicando lo mismo, andemos con el Dios verdadero. Dejemos la prostitución, en toda su manifestación a saber: Lujuria, adulterio, homosexualismo, lesbianismo, avaricia, envidia, gula, orgullo, pereza, etc. ¿Queremos dejar de hacer estas co‐ sas? Por el contrario, consideramos un placer vivir lujuriosamente, banquetea‐ mos, tenemos ojos llenos de adulterio y no podemos desistir del pecado, somos codiciosos, nos hemos extraviado, esta‐ mos cautivos por el deseo de la carne, la lujuria nos la muestran por todos lados en la televisión, propaganda hablada y escrita. 2 Pedro 2:13«Dios establece un pacto con Noé para que entre en el arca», Ar‐
cano A.Z.F., de la mezcla del agua y del fuego sale el azufre o espíritu . Génesis 6:18 «Y de veras establezco mi pacto
contigo; y tienes que entrar en el arca sexo puro tú y tus hijos contigo».
Esto lo confirma Isaías 26:20‐21 «Anda, pueblo mío, entra en tus cuartos interio‐ res, y cierra tus puertas tras de ti. Escón‐ dete por un solo momento hasta que pase la denunciación. Porque, ¡mira!,
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LAS SAGRADAS ESCRITURAS CONFIRMAN LA GNOSIS
Jehová está saliendo de su lugar para pedir cuenta por el error del habitante de la tierra contra El, y la tierra cierta‐ mente expondrá su derramamiento de sangre y ya no encubrirá a los de ella a quienes han matado». Estamos en la Babilonia del siglo XX Ba‐ bel, significa confusión . Las religiones leen el mismo libro, “La Biblia”, y no se pueden poner de acuerdo, por la confu‐ sión que hay en su interpretación. Géne‐ sis 11:7 «¡Vamos!. Bajemos y confunda‐
mos allí su lenguaje para que no escuche el uno el lenguaje del otro». Hay confu‐
sión política, religiosa, social, económica, familiar e individual. Sara y Agar, representan dos genera‐ ciones. Agar dio a luz hijos de la car‐ ne. Sara dio a luz hijos de la castidad tenía 90 años cuando nació Isaac . Abrán representa la humanidad fornica‐ ria, tuvo un hijo con la esclava. Abrahán representa la humanidad casta, tuvo un hijo con Sara, la mujer libre. Gálatas 4:22 . Abrán representa al hombre carnal o corruptible. Abrahán representa al hombre espiritual o al hombre incorrup‐ tible. Ismael, hijo de Agar y de Abrán, nació a la manera de la carne fornicación . Isa‐ ac, hijo de Sara y de Abrahán, nació del espíritu. Cuando Abrahán engendró a Isaac, ya era casto. Se había transforma‐ do. Abrahán no podía creer que teniendo él 100 años y su esposa Sara 90, les nacie‐ ran hijos. A Sara le había cesado la menstruación y consideraba a su esposo
gastado, no habían percibido que la cas‐ tidad prolonga la fertilidad en las pare‐ jas. Para entender lo transcrito, debemos leer a San Pablo, Gálatas 4:23 «Pero el de
la sirvienta realmente nació a la manera de la carne fornicación el otro, de la mujer libre casta mediante una prome‐ sa Transmutación ». A la mujer casta, aun cuando le cese la menstruación, no deja de ser fértil. San Pablo explica bien el simbolismo de Agar y de Sara. Gálatas 4:24‐25‐26 «Es‐
tas cosas queda como un drama simbóli‐ co; porque estas mujeres significan dos pactos, el primero del monte Sinaí, que da a luz hijos para la esclavitud, y el cual es Agar. Ahora bien, esta Agar significa Sinaí, una montaña Arabia, y ella corres‐ ponde a la Jerusalén de hoy, porque está en esclavitud con sus hijos somos escla‐ vos de las pasiones . Pero la Jerusalén de arriba es libre, y ella es nuestra ma‐ dre». La mujer cuando es casta, no tiene dolo‐ res de parto. Gálatas 4:27 «Porque está
escrito: alégrate, mujer estéril que no das a luz; prorrumpe y clama en voz alta mujer que no tienes dolores de parto; porque los hijos de la desolada fornica‐ ria son más numerosos que los de la que tienen el esposo». La lucha del hombre carnal contra el hombre espiritual continúa, Caín mató a Abel; Esaú persiguió a Jacob. San Pablo, Gálatas 4:28‐31 «Ahora bien, nosotros,
hermanos, somos hijos pertenecientes a la promesa, así como Isaac lo fue. Pero tal como en aquel entonces el que nació a la manera de la carne fornicación se puso a perseguir al que nació a la mane‐ ra del espíritu castidad así también
LAS SAGRADAS ESCRITURAS CONFIRMAN LA GNOSIS
ahora. Sin embargo ¿qué dice la Escritu‐ ra? Expulsa a la sirvienta y a su hijo los
fornicarios no entraremos al reino de los cielos porque de ningún modo será
heredero el hijo de la sirvienta con el hijo de la mujer libre. Por lo tanto, her‐ manos, no somos hijos de una sirvienta, sino de la mujer libre». La mujer casta
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luz, y tu deseo vehemente será por tu esposo, y el te dominará». Este deseo vehemente, lo explica bien en Santiago 1:15, «Entonces el deseo, cuan‐
do se ha hecho fecundo, da a luz el peca‐ do; a su vez el pecado, cuando se ha rea‐ lizado, produce muerte». El deseo, nos
da a luz sin dolor, no necesita lacerar o mutilar su cuerpo para controlar su fe‐ cundación.
lleva a la relación sexual, y esta nos hace fornicar y la fornicación, nos lleva a la muerte física y espiritual .
El procedimiento que Dios ha dado para controlar la proliferación desde toda la eternidad es la transmutación o sea la castidad.
EL ABUSO SEXUAL, HIZO QUE SODO‐ MA, GOMORRA Y LAS CIUDADES CIR‐ CUNVECINAS, FUERAN DESTRUIDAS
La mujer hoy es víctima de los medios artificiales inventado por los hombres para destruir el templo de Dios, el cual es el CUERPO del hombre y la mujer. Para no privarnos de la lujuria, recurrimos a los supositorios, a las pastas, inyeccio‐ nes, ligamentos de las trompas del falo‐ pio, amarre de los conductos espermáti‐ cos en el hombre, etc. Las mujeres castas de todas las épocas, han sido consideradas estériles‐ ellas no se llenan de hijos‐ como la mujer esclava de las pasiones sexuales. San Pablo, en Gálatas 4:27, «Alégrate mujer estéril que no das a luz; prorrum‐ pe y clama en voz alta, mujer que no tie‐ nes dolores de parto; porque los hijos de la desolada son más numerosos que los que tienen el esposo». La que no tiene dolores de parto es casta y tiene pocos hijos, la desolada es la fornicaria y tiene muchos hijos .
Cuando Eva dejó de ser casta; Dios la sentenció a parir con dolor, Génesis 3:16,
«Aumentaré en gran manera el dolor de tu preñez; con dolores de parto darás a
Fue tanta la degeneración sexual que hubo, que los varones dejaron el uso natural de la hembra y su lascivia los llevó a la relación sexual entre hombres. En Génesis 18:20, «El clamor de queja
acerca de Sodoma y Gomorra es cierta‐ mente fuerte, y su pecado es grave». Génesis 13:13, «Y los hombres de Sodo‐ ma eran pecadores en extremo contra Jehová». Con sus actos de prostitución, los habi‐ tantes de Sodoma y Gomorra, desafiaban la ley de Dios; entregándose a una con‐ ducta relajada. Hoy, el temor de Dios se ha perdido. El sexo negativo es el plato favorito del día. Como en aquel entonces, los hombres se acuestan con hombres, las mujeres con mujeres, el hombre con la mujer y el hombre, el adulterio pulula, la sociedad y las religiones lo toleran, lo fomentan y lo aprueban. La fornicación Emisión semi‐ nal se da en el 97 por ciento de las pare‐ jas. Decide Dios, exterminar a Sodoma y Go‐ morra, pero Abraham suplica para que
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LAS SAGRADAS ESCRITURAS CONFIRMAN LA GNOSIS
no arruine las ciudades, si al menos se encontraran en ellas diez justos. Y no hubo ni siquiera diez personas que obra‐ ran justamente. Jehová envió dos ángeles para advertirle a Lot sobre la destrucción de las ciuda‐ des. Génesis 19:4‐5‐7, «Antes que pudie‐
ran acostarse, los hombres de la ciudad, cercaron la casa de Lot, desde el mucha‐ cho hasta el viejo, toda la gente es una chusma, y siguieron llamando a Lot, y diciéndole: Dónde están los hombres que entraron contigo esta noche?. Sácanoslos para que tengamos ayuntamiento con ellos». Ayuntar, tener cópula carnal . «Lot salió y les dijo: Por favor, hermanos míos, no obren mal. Tengo dos hijas que nunca han tenido coito con hombre. Por favor, déjenme sacarlas a ustedes. En‐ tonces háganles lo que parezca bien a sus ojos. Sólo no hagan nada a estos hombres». Despreciaron las mujeres e iban a violar a Lot y a forzar la puerta de la casa para poseer sexualmente a los ángeles.
Estamos llegando a las mismas condicio‐ nes de antes, no queremos corregirnos, La Gnosis con su enseñanza procura lle‐ gar al núcleo familiar, sobre todo a los matrimonios para que desde allí, con una vida casta, se enseñe a los hijos el cami‐ no de la pureza y evitarles sufrimientos venideros. El mundo va a ser arruinado, pero las gentes creen que lo que se está hablando es una broma. «Que decía Lot a sus yer‐
nos: Tomen a sus hijas, ¡levántense! Sálganse de este lugar, porque Jehová va a arruinar la ciudad, pero a los ojos de los yernos parecía como hombre que bromeaba». Génesis 19:14. Si al menos imitáramos a los animales
en su reproducción, el mundo sería muy diferente. Los animales se apare‐ an para procrear‐ el hombre lo hace para satisfacer sus instintos. San Pedro en su epístola 2:10, dice: «que las personas injustas serán cortadas de la existencia, especialmente, a las que siguen tras la carne con el deseo de con‐ taminarla el ser humano se contamina con la fornicación y que menosprecian el señorío». Sodoma y Gomorra, fueron destruidas por cometer fornicación en exceso. Ju‐ das, 7: «Así también Sodoma y Gomorra
y las ciudades circunvecinas ‐ después de ellas de la misma manera como los anteriores hubieron cometido fornica‐ ción con exceso, e ido en pos de la carne para uso contranatural ‐ son puestas delante de nosotros como ejemplo amo‐ nestador al sufrir castigo judicial de fue‐ go eterno». El apetito sexual desmedido, lleva a la humanidad a la destrucción del cuerpo y del alma. ¿Cuál es la voluntad de Dios? 1 Tesalonicenses 4:3‐5, «La santificación
de ustedes, que se abstengan de la forni‐ cación; emisión seminal que cada uno de ustedes sepa tomar posesión de su propio vaso cuerpo en santificación y honra, no en codicioso apetito sexual deseo pasional tal como el que también tienen las naciones que no conocen a Dios». Hoy como en los días de Noé y Lot, los hombres se casan entre sí, las mujeres igualmente, los matrimonios intercam‐ bian sus parejas, comemos, nos embo‐ rrachamos, compramos cuerpos y ven‐ demos hasta el alma. Ojalá el día en que el hijo del hombre Jesucristo ha de ser revelado, estemos preparados para reci‐
LAS SAGRADAS ESCRITURAS CONFIRMAN LA GNOSIS
birlo.5 Sigue el asunto sexual, teniendo impor‐ tancia en la obra de Dios. Después de la destrucción de Sodoma y Gomorra, las dos hijas de Lot; lo emborrachan y tienen relaciones sexuales con él. De la relación, nacen dos hijos, la mayor fue madre de Moab. La menor fue la madre de Ben‐ ammí. Es el padre de los hijos de Ammón, hasta el día de hoy. De Moab y Ammón, nacen los hijos para la esclavitud, es decir los que se dedicar‐ ían a enseñar la fornicación. Nehemías, 13:2 «se pusieron a alquilar contra los
hijos de Israel a Balaam para que invoca‐ ra el mal contra ellos».
Los hijos de la promesa castidad nacer‐ ían de Abraham y Sara, siendo viejos engendraron a Isaac, Génesis 21:3. Isaac por destino de Dios, tomó por esposa a Rebeca. Génesis 24:67. Y Rebeca, tuvo dos hijos gemelos ‐ Esaú y Jacob, los cua‐ les representan dos naciones y a la vez dos generaciones, los fornicarios y los castos. Esaú vende a Jacob los derechos de pri‐ mogenitura por un plato de lentejas. El plato de lentejas significa la fornicación o sea la impureza. San Pablo en Hebreos 12:16, explica bien porqué Esaú, perdió los derechos de primogenitura. «Que no haya ningún
fornicador ni nadie que no aprecie cosas sagradas, como Esaú, que a cambio de una sola comida vendió regalados sus derechos de primogénito». Continua la escena sexual teniendo prioridad en el Plan Divino. 5 Leer Lucas cap. 17 v. 26‐30.
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Génesis 26:8, «Y allí estaba Isaac divir‐ tiéndose con Rebeca su esposa». Este divertirse es el regocijo que la pareja siente cuando la relación sexual es casta. Proverbios 5:18, «Resulte bendita tu
fuente de aguas y regocíjate con la espo‐ sa de tu juventud». La fuente de agua son
las aguas seminales. Le preguntan a San Pablo los Corintios: ¿es tan grave forni‐ car? ¿Es bueno que el hombre no toque mujer? Responde «no obstante, a causa
de la ocurrencia común de la fornicación, pérdida seminal que cada hombre ten‐ ga su propia esposa y que cada mujer tenga su propio esposo”. Recomienda Pablo la relación sexual al decir: «que el esposo dé a su esposa lo que es debido; pero que la esposa haga lo mismo tam‐ bién a su esposo». 1 Corintios 7:1‐3. Lo que corrige la polución nocturna y el derrame seminal, es la transmutación sexual y esta solamente se puede hacer cuando el coito es casto. De esta manera hay regulación y no desenfreno pasional. En 1 Corintios 7:5, recomienda el sexo y la oración para que haya regulación en nosotros. «No se priven del ello el uno al otro del sexo a no ser de común acuer‐
do por un tiempo señalado para que de‐ diquen tiempo a la oración y vuelvan a juntarse, para que no siga tentándolos Satanás por su falta de regulación en sí mismos». En la Gnosis se habla de “fuerza sexual” porque realmente es una terrible fuerza; la pérdida de esa fuerza en el ser huma‐ no trajo como consecuencia la pérdida de la fuerza moral. Jacob sirvió a Laban siete años para poder tener relaciones sexuales con su esposa. Génesis 29:21 “Dame mi esposa” Continua Dios haciendo engendrar dos
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generaciones, la prolifera y la casta. Dios le abrió la matriz a Lea para que diera hijos de la fornicación, mientras Jacob se castificaba para poder engen‐ drar hijos de la promesa castos. Génesis 20:22‐24, «Por fin Dios se acordó de Raquel y Dios la oyó y le res‐ pondió, por cuanto le abrió la matriz y ella quedó encinta y dio a luz a un hijo; entonces dijo: Dios ha quitado mi opro‐ bio». De modo que llamó por nombre José, diciendo Jehová me añade otro hijo». José representaría la humanidad casta; rechazaba las insinuaciones de la esposa de su amo: ¿Cómo podría yo co‐ meter esta gran maldad y realmente pecar contra mi Dios? El acostarse con la esposa de otro hom‐ bre es cometer adulterio, castigado en la antigüedad con la muerte. Si Cristo no hubiera cambiado la Ley, por la bondad inmerecida, hoy las ejecuciones por cau‐ sa del adulterio serían numerosas.6 ¿Porqué José rehusaba pecar? Prover‐ bios 1:10, «Hijo mío, si los pecadores tratan de seducirte, no consientas». Pro‐ verbios 5:20 «Porqué, pues, debes tú,
hijo mío, estar en un éxtasis con una ex‐ traña? O abrazar el seno de una extra‐ njera?». Proverbios 5:23 «El será el que morirá porque no hay disciplina, y por‐ que en la abundancia de su tontedad se descarría». Proverbios 22:5‐6, «Espinas y trampas hay en el camino del torcido; el que está guardando su alma se man‐ tiene alejado de ellas. Entrena al mucha‐ cho conforme al camino para él; aun cuando se haga viejo no se desviará de él». José sabía bien que debía respetar a la esposa ajena. Proverbios 6:29, «Así 6
Para confirmar, leer Levítico 20:10, Pro‐ verbios 2:16 y 1 Corintios 6:9.
mismo ocurre con cualquiera que tenga relaciones con la esposa de su semejan‐ te; nadie que la toque quedará exento de castigo». El adulterio llena de tristeza los hogares, la pareja pierde el encanto, se aleja la dignidad, los hijos sufren las consecuen‐ cias. Lo más grave es que Dios nos juz‐ gará por adúlteros y fornicadores. Al unirse el hombre y la mujer, hay un intercambio electromagnético que fusio‐ na no solo los cuerpos físicos, sino tam‐ bién los cuerpos espirituales que com‐ ponen al ser humano. Si en esta fusión, hay fornicación, en vez de ser provecho‐ sa, causa un corto circuito a los conduc‐ tos electromagnéticos fundiéndolos y rompiendo así la comunicación con la luz del creador. Cuando se dice que tiene que llegar a ser una sola carne, indica que tienen que fusionarse para intercambiar magnetis‐ mo y energía, el cuerpo de la mujer nutre espiritualmente al del hombre y el cuer‐ po del hombre nutre igualmente al de la mujer. Génesis 2:24, «Por eso el hombre
dejará a su padre y a su madre, y tiene que adherirse a su esposa, y tienen que llegar a ser una sola carne». Proverbios 5:18, «Resulte bendita tu fuente de aguas, y regocíjate con la esposa de tu juventud». Malaquías 2:16 «Porque el ha odiado un divorciarse». Mateo 19:5, «Y los dos serán una sola carne». Romanos 7:2, «La mujer casada está atada por la ley a su esposo mientras éste viva, pero si llega a ser de otro sería llamada adúl‐ tera». 1 Corintios 6:16, «¿ No saben que el que
se une a una ramera es un solo cuerpo? Porque: los dos dice él, serán una sola carne». Hebreos 13:4, «Que el matrimo‐ nio sea honorable entre todos, y el lecho
LAS SAGRADAS ESCRITURAS CONFIRMAN LA GNOSIS
conyugal sea sin contaminación, porque Dios juzgará a los fornicadores y a los adúlteros». Capitulo 5 del Matrimonio Perfecto: «Cuando el hombre y la mujer se unen sexualmente en matrimonio perfecto, son en esos instantes de voluptuosidad verdaderos dioses inefables. El hombre y la mujer sexualmente unidos, forman un andrógino divino perfecto. Un elohim macho‐hembra macho y hembra los formó . Una divinidad terriblemente divina. Las dos mitades separadas desde el amanecer de la vida, se unen por un instante para crear. Eso es inefable... sublime... eso es cosa del paraíso”. El lecho conyugal se contamina por la impureza y somos impuros cuando el líquido seminal lo expulsamos del cuer‐ po. La fuente de aguas es el sexo. Y el regoci‐ jo con la esposa de tu juventud es la rela‐ ción sexual con ella, pero la relación de‐ be ser casta, de lo contrario la fuente de aguas no es bendita, sino maldita.
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todos y el lecho conyugal sea sin conta‐ minación, porque Dios juzgará a los for‐ nicadores y a los adúlteros». Se juzga al
que no es casto y también al que tiene relaciones sexuales fuera de su hogar o sea con otras personas.
Gravísimo es contaminar el lecho conyu‐ gal; la mayor parte de la humanidad cree que la emisión seminal no tiene inciden‐ cia alguna. Este es el pecado contra el Espíritu Santo. Salpicar las puertas de las casas con san‐ gre de ovejas para no perecer; significa cambiar de hábitos, es decir dejar la vieja personalidad de pecado, para que haya una personalidad libre de pecado; Exodo 12:7. Al respecto dice San Pablo en 1 Corintios 5:7‐8 «Quiten la levadura vieja,
para que haya una masa nueva, según estén libres de fermento. Porque en rea‐ lidad Cristo nuestra Pascua ha sido cru‐ cificado”. 7
Después que David tuvo relaciones con Bat‐seba, exclama: Salmos 51:4, «Contra
ti, contra ti, solo, he pecado, y lo que es malo a tus ojos he hecho».
También José sabía lo inmundo que se volvería con la conducta relajada de la fornicación, si accedía a las insinuacio‐ nes de la esposa de Potifar. Gálatas 5:9,
«Las obras de la carne son manifiestas y son: fornicación, falta de castidad , in‐ mundicia, suciedad, depravación, lasci‐ via , conducta relajada, libertinaje, des‐ enfreno, conducta desvergonzada ».
Para magnificar el matrimonio y el res‐ peto que se debe tener por él, San Pablo en Hebreos 13:4, nos aclara lo siguiente:
«Que el matrimonio sea honorable entre
7 El que tenga entendimiento lea lo que dice
en: Efesios 1:7, Hebreos 11:28 y 1 Pedro 1:2.
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LAS SAGRADAS ESCRITURAS CONFIRMAN LA GNOSIS
6. “COMER LA PASCUA DE JEHOVA” Exodo 12:11 Para participar de la pascua, debemos tener ceñidas las caderas, sandalias en los pies y el bastón en la mano. Las per‐ sonas castas, sus caderas son apretadas; no están descalzos, es decir, desnudos y el bastón es símbolo fálico. Lucas 12:35,
«Estén ceñidos sus lomos y encendidas sus lámparas». Por la columna vertebral suben los cordones espermáticos y las lámparas encendidas corresponden a las siete iglesias, las cuales están dentro del cuerpo humano y hay que encenderlas con aceite y este aceite es el esperma sagrado. ¿Acaso una vela no es un es‐ perma? Efesios 6:14, «Estén firmes, por
lo tanto, teniendo los lomos ceñidos con la verdad, y teniendo puesta la coraza de la justicia». Nos manda Pedro a desechar todo malo pensamiento; Pedro 1:13,
«Por lo tanto, fortifiquen su mente para actividad; mantengan completamente su juicio». ¿Porqué debemos tener sandalias en los pies? San Pablo en Efesios 6:15, «Te‐
niendo calzado los pies con el equipo de las buenas nuevas de la paz». La sangre tiene que ser señal sobre nuestras casas cuerpos para no ser arruinados.
Y Juan 1:7, «Sin embargo, si andamos en
la luz, como El mismo está en la luz, si tenemos participación unos con otros, y la sangre de Jesús, su hijo, nos limpia de todo pecado». Exodo 12:24, «Y ustedes tienen que guardar esta observancia como disposición reglamentaria para ti y tus hijos hasta tiempo indefinido». Inde‐ finidamente debemos crear un sólo hombre nuevo, porque en nosotros exis‐ ten dos individuos, doble personali‐ dad , uno que tiende al bien y el otro al
mal. Por consiguiente, no hay paz en nosotros. Porque estamos alejados de Cristo. Efesios 2:14‐15 «Porque El es
nuestra paz, el que hizo de los dos gru‐ pos uno solo y destruyó el muro de en medio que los separaba. Por medio de su carne abolió la enemistad, la Ley de mandamientos que consistía en decretos, para crear de los dos pueblos en unión consigo mismo, un solo hombre nuevo, y hacer la paz».
Con la nueva personalidad, borramos el pecado quedando limpios; por lo tanto ya no hay ley para nosotros. Colosenses 2:14, «Y borró limpió el documento pacto manuscrito contra nosotros, que
consistía en decretos y que estaba en oposición a nosotros; y El lo ha quitado del camino clavándolo al madero del tormento». El nuevo pacto significa la pureza que debemos adquirir para hacer anticuado el pacto anterior, es decir, desvanecer nuestros errores y no recor‐ dar más nuestros pecados. Hebreos 8:13,
«Al decir El un nuevo pacto ha hecho anticuado al anterior. Ahora bien, lo que se hace anticuado y envejece está próxi‐ mo a desvanecerse». Ningún Extranjero Puede Comer la Pascua Nosotros somos extranjeros para Dios, estamos sin Cristo; por lo tanto no tene‐ mos esperanza. Efesios 2:12, «Que esta‐
ban en aquel mismo tiempo sin Cristo, alejados del estado de Israel alejados del ser y extraños a los pactos de la promesa, y no tenían esperanza, y esta‐ ban sin Dios en el mundo». Como esta‐ mos hoy, sin Dios, ni Ley.
Quien tiene a Dios dentro es feliz y se vuelve térmico.
LAS SAGRADAS ESCRITURAS CONFIRMAN LA GNOSIS
Exodo 13:21‐22, «Y Jehová iba delante
de ellos durante el día en una columna de nube para guiarlos por el camino, y durante la noche en una columna de fue‐ go para darles luz. La columna de nube no se alejaba de delante del pueblo du‐ rante el día, ni la columna de fuego du‐ rante la noche».
La persona que se realiza, se vuelve térmica. Si hay calor o frío el está cálido. Salmos 78:14, «Y continuó guiándolos
con una nube de día, y toda la noche con una luz de fuego».
Salmos 105:39, El alimento por excelen‐ cia es la transmutación sexual. Salmos 105:40, «Pidieron y procedió a traerles
codornices, y con pan del cielo siguió satisfaciéndolos».
También les abrió el sexo para que fue‐ ran puros. Salmos 105:41, «Abrió una
roca y aguas empezaron a manar, estas pasaron por las regiones áridas como un río». Nosotros somos áridos espiritual‐
mente, tenemos que abrir la roca. 1 Co‐ rintios 10:3‐4, «Y todos comieron el
mismo alimento espiritual y todos bebie‐ ron la misma bebida espiritual. Porque bebían de la masa rocosa espiritual que los seguía, y aquella masa rocosa signifi‐ caba el Cristo».8 1 Corintios 10:3‐8, «Ni practiquemos fornicación, como alguno de ellos cometieron fornicación, de modo que cayeron, veintitrés mil de Ellos en un día». Quienes no forniquen, construyen el alma espiritual, se vuelven jerarcas, por el contrario los que forniquen caerán 23.000, 3 2 5 este arcano corresponde al karma, el peso de la Ley Marte y a la 8 Para poder entender claramente el signifi‐
cado de la nube, el fuego, las codornices y el pan bajado del cielo, hay que leer dete‐ nidamente Salmos 78:14, Salmos 105:39‐ 41 y 1 Corintios 10:3‐8,
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guerra mental que padecemos. DIOS EXIGE SANTIDAD PARA EN‐ TRAR EN SU NATURALEZA 1 Pedro 1:16, «Porque está escrito: tie‐ nen que ser santos, porque yo soy san‐ to». Exodo 15:11, «¿Quién entre los dio‐ ses es como tú oh Jehová? ¿Quién es co‐ mo tú, que resultas poderoso en santi‐ dad?». Exodo 16:4 «Voy a hacer que llue‐ va para que ustedes desde los cielos, y el pueblo tienen que salir y recoger cada cual su cantidad día por día». Necesita‐
mos del pan físico para nutrir nuestro cuerpo carnal, pero necesitamos también el pan espiritual. Juan 6:31 «Nuestros
antepasados comieron el maná en el desierto, así como está escrito: pan del cielo les dio de comer». 1 Corintios 10:3 «Y todos comieron el mismo alimento espiritual». Mateo 6:11 «Da hoy nuestro pan para este día». Dios nos pone a prueba para ver si andamos en su Ley. Exodo 16:4, «A fin de que los ponga yo a
prueba en cuanto a si andarán en mi Ley o no». Los cuarenta años en el desierto, fue para que guardáramos o no los man‐ damientos. Deuterenomio 8:2‐5, «Y tie‐
nes que acordarte de todo el camino, que Jehová tu Dios te hizo andar te hizo an‐ dar estos cuarenta años en el desierto, a fin de humillarte, de ponerte a prueba para saber lo que estaba en tu corazón, en cuanto si guardarías sus mandamien‐ tos o no. De modo que te humillo y te dejo padecer de hambre y te alimento con el maná, que ni tú ni tus padres hab‐ ían conocido; para hacerte saber que no solo de pan vive el hombre, sino que de toda la expresión de la boca de Jehová vive el hombre. Tu manto no se desgastó sobre ti, ni se te hinchó el pie estos cua‐ renta años. Y bien sabes tú, con tu propio
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corazón que tal como un hombre corrige a su hijo, Jehová tu Dios iba corrigiéndo‐ te». 9 El pan que Jehová Dios daba como ali‐ mento tiene relación con Cristo. Juan 6:51, «Yo soy el pan vivo que bajo del
cielo; si alguien come de este pan vivirá para siempre; y, de hecho, el pan que Yo daré es mi carne a favor de la vida del mundo». Cuando Cristo pronuncio estas palabras, confundió a los judíos y decían:
¿Cómo puede este hombre darnos a co‐ mer su carne? Cristo se afirma en lo di‐ cho y agrega: Juan 6:53 «A menos que coman la carne del hijo del hombre y beban su sangre, no tienen vida en uste‐ des». Cristo encarnado es un verdadero alimento. Juan 6:54, «El que se alimente de mi carne y beba mi sangre tiene vida eterna, y Yo lo resucitaré en el último día». Para permanecer en unión con Cris‐ to, debes encarnarlo con la transmuta‐ ción de nuestras energías durante la relación sacrosanta dentro del matrimo‐ nio. Juan 6:55‐56, «Porque mi carne es
verdadero alimento, y mi sangre es ver‐ dadera bebida. El que se alimenta de mi carne y beba de mi sangre permanece en unión conmigo y Yo en unión con él».
¿Cómo comer o beber físicamente la car‐ ne y la sangre de nuestro señor Jesucris‐ to? Juan 6:57, «Así como me envió el
padre viviente y Yo vivo a causa del pa‐ dre, así también el que se alimenta de mí, sí, ese mismo vivirá a causa se mí». Sigue Cristo confundiendo hasta a sus discípu‐ los al decir: Juan 6:58, «Este es el pan
que bajó del cielo, no es como cuando sus antepasados comieron y sin embargo murieron. El que se alimenta de este pan vivirá para siempre». El arca del pacto es el sexo y en él debe 9 Santiago 1:3, 1 Pedro 1:7.
elaborarse oro puro, transformando la grosera personalidad en un nuevo hom‐ bre espiritual. Si el lector es capaz de entender; discierna lo que dice San Pablo en Hebreos 9:4, «Este tenía un incencia‐
rio de oro y el arca del pacto cubierta de oro por todas partes, en la cual estaban la jarra de oro que contenía el maná y la vara de Aarón que echó botones y las tablas del pacto». El incenciario, corresponde a los siete candelabros o siete iglesias las cuales están dentro del cuerpo humano. El arca del pacto es el sexo. El oro es la energía transmutada. La jarra son los testículos y ovarios que contiene el maná, la semilla reproductiva. La vara de Aarón que echó botones, es el órgano masculino y feme‐ nino. Las tablas del pacto es el propicia‐ torio o cubierta que cubre los órganos sexuales. Mandó Dios que recogieran el pan que les dio para alimento. «Recoja cada cual
en proporción con lo que coma. Han de tomar la medida de un omer por cada individuo. Y fueron recogiendo algunos juntando mucho y algunos juntando po‐ co. Cuando lo median con el omer el que había juntado mucho no tenía sobrante y el que había juntado poco no tenía esca‐ sez». Exodo 15:16‐18.
Quienes encarnan al Cristo, o sea quienes coman el maná bajado del cielo, cuando resuciten son iguales en todo sentido el uno al otro. 2 Corintios 8:14‐15, «Así
como está escrito: la persona que tenía mucho no tuvo demasiado y la que tenía poco no le faltó». REQUISITO ESPECIAL PARA VER EL REINO DE DIOS, ES LA SANTIFICA‐ CION
Exodo 19:6, «Y ustedes mismos llegarán a ser para mí un reino de sacerdotes y
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una nación santa». En Pedro 1:2‐9, El señala que seremos llamados de la oscu‐ ridad a su luz maravillosa. «Pero ustedes
son una raza escogida, un pueblo para posesión especial, para que declaren en público las excelencias de aquel que los llamó de la oscuridad a su luz maravillo‐ sa». Revelación 5:10 ratifica lo anterior. «E hiciste que fueran un reino y sacerdo‐ tes para nuestro Dios, y han de reinar sobre la tierra». EL ARREPENTIMIENTO ES FUNDA‐ MENTAL PARA PODER VER LA LUZ
Todos los que somos pecadores, pode‐ mos pasar de la oscuridad a la luz mara‐ villosa del hijo de Dios. Desde toda la eternidad Dios espera nuestro arrepen‐ timiento. Hebreos 12:14, «Sigan tras la
paz con todos, y la santificación sin la cual nadie verá al señor». Salmos 34:14, «Apártate de lo que es malo, y haz lo que es bueno; procura hallar la paz y sigue
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tras ella». Romanos 6:19, «Estoy hablan‐ do en términos humanos a causa de la debilidad de su carne; porque así como presentaron sus miembros como escla‐ vos de la inmundicia y al desafuero con el desafuero en mira, así ahora presen‐ ten sus miembros como esclavos a la justicia con la santidad en mira». 1 Tesa‐ lonicenses 4:4‐5, «Porque esto es la vo‐ luntad de Dios: La santificación de uste‐ des, que se abstengan de la fornicación; que cada uno de ustedes sepa tomar posesión de su propio vaso en santifica‐ ción y honra, no en codicioso apetito sexual tal como el que también tienen las naciones que no conocen a Dios». Mateo 5:8, «Felices son los de corazón puro, puesto que ellos verán a Dios». Romanos 8:8, «Por eso los que están en armonía con la carne no pueden agradar a Dios».
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7. LOS DIEZ MANDAMIENTOS 1º MANDAMIENTO Amar a Dios sobre todas las cosas Exodo 20:2, «No debes tener otros dioses». Debemos buscar día y noche hasta unir‐ nos con nuestro íntimo; Dios interno . Si nos fusionamos con el íntimo entra‐ remos en el absoluto. Perteneciendo a la gran realidad universal, siendo uno con Dios y Dios con uno. Esto de encarnar a Dios es a través del fuego, más claramente trabajando en la roca sexo , sin Pedro es imposible fu‐ sionarnos con nuestro dios interno. En 1 Corintios 3:13‐17, San Pablo con‐ firma que es en el cuerpo humano donde se hace la obra de Dios. El templo de Dios es el cuerpo, si lo destruimos Dios nos destruirá. 1 Corintios 3:13‐15, «La obra de cada
uno se hará manifiesta, porque el día la pondrá al descubierto, por cuanto será revelada por medio del fuego; y el fuego mismo probará qué clase de obra es la de uno. Si la obra de alguien, obra que él ha edificado encima, permanece, él recibirá galardón; si la obra de alguien es que‐ mada por completo, él sufrirá pérdida, pero él mismo será salvado, sin embargo, si así es, será como a través de fuego». Quienes ignoremos el cuerpo humano como templo de Dios; seremos destrui‐ dos. 1 Corintios 3:16‐17, «¿No saben que us‐ tedes son el templo habitación, morada divina de Dios, y que el espíritu de Dios mora en ustedes? Si alguien destruye el
templo de Dios, Dios lo destruirá a él, porque el templo de Dios es santo el cual son ustedes». Judas 23, «Sálvenlos, arrebatándolos del
fuego. Pero continúen mostrando mise‐ ricordia a otros, haciéndolo con temor, mientras odian hasta la prenda de vestir interior que ha sido mancillada por la carne». ¿Cuál es esta Mancha de la Carne?
San Pablo nos aclara cuales son las obras de la carne. Gálatas 5:19, «Las obras de la carne son manifiestas, y son: Fornicación, falta de castidad , inmundicia, suciedad, depra‐ vación, lascivia conducta relajada li‐ bertinaje, desenfreno, conducta desver‐ gonzada ». Para poder hacer la obra, tenemos que corregir primero el vicio de la fornica‐ ción, conservar el semen en el cuerpo, procesarlo en fuego y terminar el edificio o templo de Dios. Nosotros somos la habitación, la mo‐ rada divina del Dios Altísimo. ¿Porque Dios no mora en nosotros? Porque estamos destruyendo permanen‐ temente el cuerpo con: codicia, envidia, gula, lujuria, odio, orgullo y pereza. Romanos 8:9, «Ustedes no están en ar‐ monía con la carne, sino con el espíritu, si es que el espíritu de Dios verdadera‐ mente mora en ustedes. Pero si alguien no tiene el espíritu de Cristo, éste no le pertenece».
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1 Corintios 6:9‐11, «¿No saben que los
injustos no heredarán el reino de Dios? No se extravíen. Ni fornicarios, ni idóla‐ tras, ni adúlteros, ni hombres que se tienen para propósitos contranaturales, ni hombres que se acuestan con hom‐ bres, ni ladrones, ni personas dominadas por la avidez, ni borrachos, ni injuriado‐ res, ni los que practican extorsión here‐ darán el reino de Dios. Y, sin embargo, eso era lo que algunos de ustedes eran. Pero ustedes han sido lavados, pero us‐ tedes han sido santificados, pero ustedes han sido declarados justos en el nombre de nuestro señor Jesucristo y con el espí‐ ritu de nuestro Dios». ¿No es fácil adorar a Dios, verdad?
Romanos 6:16 «El que se une a una ra‐ mera es un solo cuerpo» porque los dos dice él serán una sola carne. Más clara‐ mente, el templo son los dos cuerpos unidos santamente en la cópula metafísi‐ ca. Salmos 11:4, «Jehová Dios está en su santo templo pareja casta ». Revelación 7:15, «Por eso están rindien‐ do servicio sagrado día y noche en su templo». La misma Biblia aclara que el cuerpo es la morada divina y que la pare‐ ja es el complemento del templo de Dios. Sin la pareja, o sea las dos columnas, es imposible sostener el edificio, o sea la morada de Dios. Por eso Dios le dio a Adam por compañera a Eva, este secreto sagrado ha permanecido oculto. Sola‐ mente ahora se está revelando a la humanidad, para el que quiera y pueda, construya con su pareja, el templo donde adoraremos a Dios para siempre. 2º MANDAMIENTO
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“No jurar su santo nombre en vano”. ‐
«No debes pronunciar el nombre de Je‐ hová tu Dios de manera indigna, porque Jehová no dejará sin castigo al que pro‐ nuncie su nombre de manera indigna»; Exodo 20:7. Nosotros debemos erradicar la mentira, de lo contrario, profanaremos el nombre de Dios. Levítico 19:2, «Y no
deben jurar en mi nombre a una mentira, de modo que de veras profanes el nom‐ bre de tu Dios». Proverbios 30:8, «Aleja de mi la falsedad y la palabra mentiro‐ sa». Quien juraba en vano lo castigaban con la pena de muerte. Levítico 24:16,
«De manera que el injuriador del nom‐ bre de Jehová debe ser muerto sin falta». Hoy no se castiga con la pena de muerte, pero arrastra el alma a su destrucción. 3º MANDAMIENTO “Santificar las fiestas”. ‐ Exodo 20:8,
«Acordándote del día sábado para tener‐ lo sagrado». Trabajar seis días y descan‐ sar el séptimo día. Exodo 31:13, «Espe‐ cialmente mis sábados los han de guar‐ dar porque es una señal entre Yo y uste‐ des durante sus generaciones para que sepan que Yo, Jehová, estoy santificándo‐ los». Esto de guardar el sábado es un
simbolismo de la santificación personal. Colosenses 2:16, «Que nadie los juzgue
en el comer y beber o respecto de una fiesta, o de una observancia de la luna nueva o de un sábado. Porque esas cosas son una sombra de las cosas por venir, pero la realidad pertenece al Cristo». Romanos 14:17, «Porque el reino de Dios no significa comer y beber, sino que sig‐ nifica justicia y paz y gozo con espíritu santo». De acuerdo a la mente de cada
uno debe observar el día que crea con‐ veniente. Romanos 14:5, «Un hombre
juzga un día como superior a otro; otro juzga un día como todos los demás; cada uno esté plenamente convencido en su
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propia mente». Gálatas 4:10‐11, «Están observando escrupulosamente días y meses y sazones o tiempos señalados y años. Temo por ustedes que de algún modo me haya afanado en vano respecto de ustedes». Guardar el sábado, celebrar misas, hacer rituales, celebrar semanas santas, son una representación típica y sombra de las cosas celestiales. Hebreos 8:5, «Pero
los cuales hombres rinden servicio sa‐ grado en una representación típi‐ ca ejemplo y sombra de las cosas celes‐ tiales; así como Moisés, cuando estaba para hacer la tienda hasta completarla, recibió el mandato divino; porque dice El: ve que hagas todas las cosas confor‐ me a su modelo que te fue mostrado en la montaña». Hebreos 10:1, «Porque, puesto que la Ley tiene una sombra de las buenas cosas por venir, pero no la sustancia misma de las cosas, nunca pueden los hombres, con los mismos sacrificios que ofrecen continuamente de año en año, perfeccionar a los que se acercan». Juan 14:6, «Jesús dijo: Yo soy el camino y la verdad y la vida. Nadie viene al Padre sino por mi». Hebreos 9:21‐22, «Los sacrificios y la
sangre de los torillos y machos cabríos, eran para limpiar las cosas y el perdón de las faltas cometidas». Hebreos 9:13‐ 14, «Porque si la sangre de machos cabr‐ íos y de toros y las cenizas de novillas rociadas sobre los que se han contami‐ nado, santificaba al grado de limpieza de la carne». Los sacrificios antes de la ve‐
nida del Cristo eran para limpiarnos ex‐ ternamente. Con la venida de Jesucristo y mediante su sangre, nos limpia física y espiritualmente de una vez para siem‐ pre. Quiere esto decir que fueron aboli‐ dos todos los sacrificios y Cristo no será sacrificado más; sino que cada uno tiene
que sacrificar sus malas acciones y puri‐ ficarse para resucitar como nuestro Se‐ ñor Jesucristo. Hebreos 9:14, «Cuánto
más la sangre de Cristo, que por un espí‐ ritu eterno se ofreció a si mismo sin ta‐ cha a Dios, limpiará nuestra conciencia de obras muertas para que rindamos servicio sagrado al Dios vivo». Pablo suplica por las compasiones de Dios, Romanos 12:1‐2, «Hermanos, que pre‐
senten sus cuerpos como sacrificio vivo, santo, acepto a Dios, un servicio sagrado con una facultad de raciocinio».
Es en nuestro cuerpo que tenemos que hacer el sacrificio y adoración a Dios. Continúa San Pablo en Romanos 12:2, «Y
cesen de amoldarse a este sistema de cosas, más bien, transfórmense re‐ haciendo su mente para que prueben por ustedes mismos lo que es la buena y la acepta y la perfecta voluntad de Dios». 10
Santifica las fiestas, la persona que activa las siete iglesias con el fuego sagrado del espíritu santo. Siempre que despertamos o activamos una iglesia se celebra fiesta en honor del que se está santificando. El Matrimonio Perfecto de Samael Aun Weor‐ capítulo 7 nos indica donde están ubicadas las siete iglesias: “La Iglesia de EFESO” está en el coxis y es un loto con cuatro pétalos esplendoro‐ sos. Esta Iglesia tiene la brillantez de diez millones de soles. La tierra elemen‐ tal de los sabios es conquistada con el poder de esta Iglesia. “La Iglesia de ESMIRNA”, está ubicada en la región de la próstata y ovarios. Esta 10 Los que quieran confirmar cómo se debe
santificar las fiestas, leer analíticamente Hebreos 9:1‐28.
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Iglesia nos confiere el poder de dominar las aguas elementales de la vida y la di‐ cha de crear. “La Iglesia de PERGAMO”, está ubicada en el plexo solar u ombligo. “Cuando la serpiente sagrada llega a la región del ombligo podemos dominar los volcanes, porque el fuego elemental de los sabios, corresponde a la Iglesia de Pérgamo. Dicho centro controla el bazo, el hígado, el páncreas, etc. Este centro de Pérgamo tiene diez pétalos”. “Con el ascenso del fuego sagrado a la región del corazón, se pone en actividad la Iglesia de TIATIRA con sus doce péta‐ los maravillosos. Esta Iglesia nos confie‐ re poder sobre el aire elemental de los sabios. El desarrollo de ese centro car‐ diaco confiere inspiración, presentimien‐ to, intuición y poderes para salir cons‐ cientemente en cuerpo astral, así tam‐ bién poderes para poner el cuerpo en estado de JINAS”. “La Iglesia de SARDIS” está ubicada en la garganta, este es el centro de la laringe creadora. Este es el loto de los dieciséis pétalos. Cuando el ser humano pone en actividad este loto mediante el fuego, recibe el oído mágico. El iniciado es ca‐ paz de crear cualquier cosa con el pen‐ samiento y luego materializarlo con la palabra. “Cuando el Fuego Sagrado abre el chacra frontal, la Iglesia de FILADELFIA con sus pétalos maravillosos y sus innumerables resplandores, entonces podemos ver clarividentemente”. La última flor de loto que se abre es la Iglesia de LAODICEA. Esta flor de loto tiene mil pétalos. Esta flor de loto res‐ plandece gloriosamente en la cabeza de
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los santos. Cuando el Kundalini llega a la glándula pineal se abre esta flor maravi‐ llosa. Este es el ojo de la polividencia, el ojo de diamante. Con esta facultad po‐ demos estudiar las memorias de la natu‐ raleza. Este es el ojo Divino del Espíritu. El ser humano que hace un trabajo in‐ tenso, para poner en actividad los cen‐ tros desde el coxis hasta la frente, puede descansar y santificar las fiestas para siempre, pues ha encarnado a Dios. Exo‐ do 20:11, «Por eso Jehová bendijo el día sábado y procedió a hacerlo sagrado». 4º MANDAMIENTO Exodo 20:12, “Honra a tu padre y a tu madre para que resulten largos tus días sobre el suelo que Jehová tu Dios te da”. Los padres son como brújulas para los hijos, ellos están para orientar, corregir, y encaminar a sus hijos por el camino de la santificación. Falta grave es desobede‐ cerles y aún más maltratarlos. Exodo 21:15, «Y el que hiera a su padre y a su madre, ha de ser muerto sin falta». Proverbios 1:8, «Escucha, hijo mío, la disciplina de tu padre, y no abandones la ley de tu madre». Mateo 15:4, «Honra a tu padre y a tu madre; y: el que injurie a padre o a ma‐ dre termine en muerte”» La censura de nuestros padres físicos, se relaciona con la censura que Dios da a sus hijos que ama. Proverbios 3:11‐12, «La disciplina de
Jehová, oh hijo mío, no rechaces, y no aborrezcas su censura, porque Jehová censura al que ama, aún como lo hace un
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LAS SAGRADAS ESCRITURAS CONFIRMAN LA GNOSIS
padre a un hijo en quien se complace».
Exodo 20:13, “No debes asesinar”.
Proverbios 22:6, «Entrena al muchacho conforme al camino para él; aun cuando se haga viejo no se desviará de él».
El homicidio puede ser extinguiendo una vida física o a través del odio. Quien odia no solamente mata a su hermano, sino que se mata a sí mismo.
Hebreos 12:9, «Además, solíamos tener
padres que eran nuestra carne para dis‐ ciplinarnos, y les mostramos respeto. ¿No hemos de sujetarnos mucho más al padre de nuestra vida espiritual, y vivir». Prosigue en Hebreos 12:10‐11, «Pues ellos por unos cuantos días nos discipli‐ naban según lo que les parecía bien, pero El lo hace para provecho nuestro de mo‐ do que participemos de su santidad. Es cierto que ninguna disciplina parece por el presente ser cosa de gozo, sino peno‐ sa; sin embargo, después, a los que han sido entrenados por ella, da fruto pacífi‐ co, a saber, justicia». Revelación 3:19, «A todos aquellos a
quienes les tengo cariño, los censuro y los disciplino. Por lo tanto, sé celoso y arrepiéntete».
Santiago 2:11, «Porque el que dijo: No debes cometer adulterio; también dijo: No debes asesinar». 1 Juan 3:15, «Todo el que odia a su her‐ mano es homicida, y ustedes saben que ningún homicida tiene la vida eterna como cosa permanente en él». Revelación 21:8, «Pero en cuanto a los cobardes y los que no tienen fe y los que son repugnantes en su suciedad, y asesi‐ nos y fornicadores y los que practican espiritismo, e idólatras y todos los men‐ tirosos, su porción será en el lago que arde con fuego y azufre. Esto significa la muerte segunda».
Revelación 2:5, «Por lo tanto, recuerda de qué has caído y arrepiéntete, y haz los hechos de antes. Si no lo haces, vengo a ti, y removeré tu candelabro de su lugar, a menos que te arrepientas».
Para el lector que no sabe que es la muerte segunda, significa la destrucción del alma. El mandato de Dios permanece desde la eternidad. No se anula ni una letra de la ley. El antiguo testamento como el nuevo, tienen los mismos postu‐ lados.
Timoteo 3:16, «Toda escritura es inspi‐ rada de Dios y provechosa para enseñar, para censurar, para rectificar las cosas, para disciplinar en justicia». Lo anterior
Levítico 19:17, «No debes odiar a tu hermano en tu corazón. Debes sin falta censurar a tu asociado, para que no car‐ gues pecado junto con él».
confirma que la palabra de Dios tiene dos significados, uno de naturaleza física y otro de naturaleza divina.
1 Juan 2:9, «El que dice que está en la luz
Es palabra de Dios, la honra de padre y madre en lo físico, nos conduce a la hon‐ ra de nuestro padre y madre celestial.
6º MANDAMIENTO
5º MANDAMIENTO.
y, sin embargo, odia a su hermano, está en la oscuridad hasta ahora mismo».
Exodo 20:14, “No debes fornicar”.
LAS SAGRADAS ESCRITURAS CONFIRMAN LA GNOSIS
La palabra fornicación significa “prosti‐ tución”, falta de castidad, fornicación de toda clase de relaciones sexuales ilegíti‐ mas. Este fue el primer mandamiento que Dios le dio a la humanidad en el edén. Génesis 2:6‐17, «Y también impuso Je‐
hová Dios este mandato al hombre: de todo árbol del jardín puedes comer hasta quedar satisfecho. Pero en cuanto al árbol del conocimiento de lo bueno y lo malo, no debes comer de él, porque el día que comas de él positivamente mo‐ rirás». Ezequiel 18:4, «El alma que peca... ella misma morirá». No se debe confundir el sexto man‐ damiento con el noveno. El término fornicar es amplio, puede aplicarse al adulterio, pero su real signi‐ ficación es la falta de castidad o sea la impureza, emitir semen del cuerpo; sea la persona soltera o casada . La humanidad Adámica, perdió la in‐ mortalidad cuando pecó. Cristo rescato la inmortalidad porque venció al pecado. Fue puro, por eso se levantó de entre los muertos, los cuales somos nosotros. Mateo 5:22, «Deja que los muertos entie‐ rren a sus muertos». Un cuerpo sin vida no puede levantarse a enterrar a otro cuerpo sin vida, verdad? 1 Corintios 6:18, «Huyan de la fornica‐
ción. Todo otro pecado que el hombre cometa está fuera de su cuerpo, pero el
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que practica la fornicación peca contra su propio cuerpo». Aquí el término fornicación significa emitir semen del cuerpo. «¿No saben que
el cuerpo que ustedes son, es el templo del Espíritu Santo que está en ustedes?».
Nuestro cuerpo es la habitación donde debe morar la divinidad Dios .
Para poder tener el Espíritu Santo de‐ bemos ser castos, de lo contrario sere‐ mos impuros. Y las personas impuras no heredaremos el reino de Dios. 1 Corintios 6:19, «¿ saben que el cuerpo
que ustedes son es el templo del Espíritu Santo que está en ustedes, el cual tienen de Dios?». Y recalcó Pablo, «Glorifiquen a Dios en el cuerpo que son ustedes». Para poder ser santos debemos abste‐ nernos de fornicar o sea regular el sexo. 1 Tesalonicenses 4:3‐5, «Porque esto es
la voluntad de Dios: La santificación de ustedes, que se abstengan de la fornica‐ ción; “Que cada uno de ustedes sepa to‐ mar posesión de su propio vaso cuerpo en santificación y honra», «no en codi‐ cioso apetito sexual No en pasión de deseo tal como el que también tienen las naciones que no conocen a Dios»; Génesis 39:12.
El apetito sexual desmedido, nos lleva a la inmundicia, a la vergüenza, y a la las‐ civia desenfrenada. Por eso viene la des‐ honra, el homosexualismo y el lesbia‐ nismo Hombres con hombres y mujeres con mujeres 11. Con la fornicación, estamos destruyendo nuestro cuerpo, el cual es el templo de 11 Romanos 1:24‐27.
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Dios y al destruir el templo de Dios, El destruye nuestra alma. 1 Corintios 3:16‐17, «¿No saben que us‐ tedes son el templo de Dios, y que el espíritu de Dios mora en ustedes?. Si alguien destruye el templo de Dios, Dios lo destruirá a él; porque el templo de Dios es santo el cual son ustedes». Por causa de la fornicación Dios esta muerto en nosotros, si nos volvemos castos seremos templo de un Dios vivo. 2 Corintios 6:16, «Y qué acuerdo tiene el templo de Dios con los ídolos?. Porque nosotros somos templo de un Dios vivo; así como dijo Dios: Yo residiré entre ellos y andaré entre ellos, y yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo. Dejen de tocar cosa inmunda y Yo los recibiré». Le preguntan a San Pablo, si para no for‐ nicar es conveniente no tocar mujer y San Pablo nos manda al matrimonio para que la fornicación no sea muy frecuente en nosotros. 1 Corintios 7:2, «Ahora bien, respecto a
las cosas de que escribieron ustedes, es bueno que el hombre no toque mujer, no obstante, a causa de la ocurrencia común de la fornicación, que cada hombre tenga su propia esposa y que cada mujer tenga su propio esposo. Que el esposo dé a su esposa lo que es debido sexo ; pero que la esposa haga lo mismo también a su esposo. No se priven de ello el uno al otro, a no ser de común acuerdo por un tiempo señalado, para que dediquen tiempo a la oración y vuelvan a juntarse, para que no siga tentándolos Satanás por su falta de regulación en si mismos». No se priven de ello, del sexo, el uno al otro, a no ser de común acuerdo por un
tiempo señalado, cuando el cuerpo quie‐ re desbordarse en pasión, hay que reti‐ rarse por un tiempo para calmarse y orar mucho pidiendo ayuda divina para no caer. Una vez que el cuerpo se ha calma‐ do, hay que volver a juntarse, para que no siga tentándolos Satanás por su falta de regulación en si mismos. La regula‐ ción sexual casta apaga los estertores de la pasión y se regula la energía con la transmutación. Si abusamos del sexo, nos volvemos in‐ mundos y Dios pide santificación. 1 Tesalonicenses 4:7‐8, «Porque Dios
nos llamó, no con permiso para inmun‐ dicia, suciedad, depravación, lascivia sino con relación a santificación. Así, pues, el hombre que muestra desaten‐ ción, no está desatendiendo a hombres, sino a Dios, que pone su espíritu santo en ustedes». Dios prohibe expresamente la prostitu‐ ción y la prostitución es sexo ilícito.
Jeremías 5:7, «Pero ellos continuaron cometiendo adulterio, y a la casa de una prostituta van en tropa». Jeremías 5:9. «Dios pide cuentas por el adulterio y la prostitución». La relación sexual en forma casta dentro del matrimonio produce éxtasis. Proverbios 5:19, «Una amable cierva y una encantadora cabra montesa. Que sus propios pechos te embriaguen a todo tiempo. Con su amor estés en éxtasis constantemente». ¿Que hermoso manda‐ to?.
Hebreos 13:4, «Que el matrimonio sea honorable entre todos, y el lecho conyu‐ gal sea sin contaminación, porque Dios
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juzgará a los fornicadores y a los adúlte‐ ros». “Que el esposo dé a su esposa lo que es debido; pero que la esposa haga lo mismo también con su esposo”. Para entender que es lo que es debido, hay que leer: Exodo 21:10, «Si él tomó otra esposa
para sí, no han de ser disminuidos el sustento de ella, ni su ropa, ni su débito conyugal» Relación sexual . Es manda‐
to de Dios: Querer desligar el sexo casto de la espiritualidad, es como negar la luz y el aire. Y para entender que la esposa haga lo mismo también con su esposo, leamos lo que dice:
Oseas 3:3, «No debes cometer fornica‐ ción, Impurezas sexuales, emisión se‐ minal y no debes pertenecer a otro hombre: y yo seré para ti». Hay una gran diferenciación entre FORNICACION Y ADULTERIO. Una de las normas Gnósticas es no tocar la mujer durante el embarazo. Guardar castidad, respetando el cuerpo de la mu‐ jer para no desviar las energías que se deben concentrar para la formación del niño. Esta forma la confirma... Mateo 1:25, «Pero no tuvo coito con ella
hasta que ella dio a luz un hijo; y él le puso por nombre Jesús».12
Los fornicadores no heredaremos el re‐ ino de Dios. 1 Corintios 6:9, «No se extravíen, ni for‐
nicadores, ni idólatras, ni adúlteros, ni 12 Leer nuevamente Hebreos 13:4.
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hombres que se tienen para propósitos contranaturales, ni hombres que se acuestan con hombres heredarán el re‐ ino de Dios». El sexo casto es trascendental para la vida espiritual. 1 Corintios 6:13, «El cuerpo no es para
fornicación, sino para el Señor; y el Se‐ ñor es para el cuerpo”. En cuerpos impu‐ ros, no mora Dios, verdad?.
1 Tesalonicenses 5:23, «Que el mismo Dios de paz, los santifique completamen‐ te. Y sanos en todo sentido, sean conser‐ vados el espíritu y el alma y el cuerpo de ustedes los hermanos, de manera exenta de culpa, al tiempo de la presencia de nuestro Señor Jesucristo». Tan grave es la fornicación, ni siquie‐ ra se debe mencionar. Efesios 5:3, «Que la fornicación y la in‐
mundicia de toda clase, o la avidez, ni siquiera se mencione entre ustedes, tal como es propio de personas santas».
Oseas 2:2, «Y ella debe poner a un lado su fornicación de delante de sí, y sus actos de adulterio de entre sus pechos». El mundo entero está corrompido por la prostitución, se desmorona: Gobiernos, hogares, sociedades enteras, desde el niño hasta el viejo, esta prostituido. Oseas 2:5, «Porque la madre de ellos ha cometido fornicación». El único motivo para uno separarse de su cónyuge es la fornicación. Mateo 5:32, «Sin embargo, yo les digo que todo el que se divorcie de su esposa,
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a no ser por motivo de fornicación, la expone al adulterio, y cualquiera que se case con una divorciada comete adulte‐ rio». La sociedad volvería a equilibrarse, si en los hogares se practicara la castidad y la fidelidad. Pero este mandato de Dios, por causa de la lujuria, no nos agrada ni si‐ quiera que nos lo mencionen.
Jeremías 3:9, «Y la prostitución de ella
ocurrió debido a su concepto frívolo, y siguió contaminando la tierra la tierra y cometiendo adulterio con piedras y árboles».
Oseas 6:10, «En la casa de Israel he visto una cosa horrible. Allí hay fornicación de parte de Efraín. Israel se ha contamina‐ do».
El mandato de no fornicar viene desde la antigüedad. Esto es lo que Jezabel, la hechicera, enseñaba a las personas para desviarlas del camino de Dios.
Nosotros somos Israel y nos hemos con‐ taminado. No queremos corregirnos, por el contrario día por día estamos más prostituidos.
2 reyes 9:22, «¿Que paz podría haber
Revelación 14:8, «Y otro, un segundo
mientras haya las fornicaciones de Jeza‐ bel, tu madre y sus muchas hechicer‐ ías?».
Jeremías 3:2, «Y sigues contaminando la
tierra con tus actos de prostitución y tu maldad».
Nuestro cuerpo fue formado de la tierra y la fornicación y el adulterio lo conta‐ minan, tan grave es fornicar y adulterar que si a uno lo despiden y vuelve a jun‐ tarse con otro u otra para cometer la misma falta, queda contaminado. Jeremías 3:1, «Hay un dicho: Si un hom‐
bre despidiera a su esposa y ella real‐ mente se fuera de él y llegara a ser de otro hombre, debiera él volver más a ella?. ¿Acaso esa tierra no se ha contami‐ nado positivamente?». Nuestro cuerpo es el templo del Dios vivo, si fornicamos o adulteramos, lo contaminamos.
La frivolidad matrimonial es tanta que la inconstancia en los hogares se ve casi en todas las culturas del mundo. No hay constancia matrimonial, el divorcio pulu‐ la por doquier.
ángel, vino después, diciendo: ¡ha caído! ¡Babilonia la grande ha caído, la que hizo que todas las naciones bebieran el vino de la cólera de su fornicación!». Babilo‐ nia quiere decir confusión .
El mundo entero está confundido y el sexo con su lujuria es el vino que la so‐ ciedad entrega a la humanidad para que nos perdamos. Quiera Dios permitirnos corregir vicio tan destructor. Revelación 17:1‐2, «Ven, te mostraré el juicio sobre la gran ramera que se sienta sobre muchas aguas, con quien los reyes de la tierra fueron emborrachados con el vino de su fornicación». La gran ramera es la humanidad fornicadora, prostituta y estamos borrachos con el vino de la fornicación. Esto es lo que se enseña en los colegios, universidades, radio, pren‐ sa, televisión, etc. La copa que la mujer nos brinda y el hombre también le brinda a la mujer es la pasión. Revelación 17:4, «Y la mujer que estaba
vestida de púrpura y escarlata, y estaba
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adornada con oro y piedras preciosas y perlas, y tenía en la mano una copa de oro que estaba llena de cosas repugnan‐ tes y de las inmundicias de su fornica‐ ción». Caeremos víctimas del sexo negativo si no damos un cambio. Revelación 18:3, «Porque a causa del
vino de la cólera de su fornicación, todas las naciones han caído víctimas, y los reyes de la tierra cometieron fornicación con ella, y los comerciantes viajeros de la tierra se enriquecieron debido al poder del lujo desvergonzado de ella». Es palabra de Dios que seremos juz‐ gados por corromper la tierra con la fornicación.
Revelación 19:2, «Porque verdaderos y
justos son sus juicios. Porque ha ejecuta‐ do juicio sobre la gran ramera que co‐ rrompió la tierra con su fornicación, y ha vengado la sangre de sus esclavos de la mano de ella». También nos contaminamos con el so‐ lo pensar en cosas indebidas.
Mateo 15:19‐20, «Por ejemplo, del co‐ razón salen razonamientos inicuos, ase‐ sinatos, adulterios, fornicaciones, hurtos, testimonios falsos, blasfemias. Estas son las cosas que contaminan al hombre; mas el tomar una comida con las manos sin lavar no contamina al hombre».13
13 Leer Marcos 7:21.
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Jesucristo nos llama hijos de Satanás, porque somos hijos de la fornicación. Juan 8:41, «Ustedes hacen las obras de su padre” dijeron ellos: “Nosotros no nacimos de la fornicación; tenemos un solo padre Dios». Recalca nuevamente Cristo en Juan 8:4, «Ustedes proceden de su padre le diablo, y quieren hacer los deseos de su padre». San Pablo nos manda a abstenernos de la fornicación. Hechos 15:20, «Sino escribirles que se abstengan de las cosas contaminadas por los ídolos, y de la fornicación de la co‐ munidad». 1 Corintios 5:1, «De hecho, se informa que hay fornicación entre ustedes, y tal fornicación como ni siquiera la hay entre las naciones; que cierto hombre tiene la esposa de su padre». El cuerpo físico al cual no le prestamos mucha atención es lo fundamental para que el Señor more en él. 1 Corintios 6:13, «Ahora bien el cuerpo no es para fornicación, sino para el Se‐ ñor; y el Señor es para el cuerpo». Nosotros en vez de huir de la fornicación vamos corriendo presurosos a cometer‐ la. No sabiendo que con ello estamos mancillando el templo de Dios. 1 Corintios 6:18, «Huyan de la fornica‐
ción. Todo otro pecado que el hombre cometa está fuera de su cuerpo, pero el que practica fornicación peca contra su propio cuerpo». No importa cuán pecadores hayamos sido. si nos arrepentimos y dejamos de
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fornicar no tendremos que lamentarnos de los pecados anteriores. 2 Corintios 12:21, «Quizás, cuando vaya otra vez, mi Dios me humille entre uste‐ des, y yo me lamente de muchos que hayan pecado antes, pero que no se hayan arrepentido de su inmundicia y fornicación y conducta relajada que han practicado». San Pablo expone muy bien cuales son las obras de la carne y por tal motivo no heredamos el reino de Dios. Gálatas 5:19, «Ahora bien, las obras de la carne son manifiestas y son: Fornicación, inmundicia, celos, arrebatos de cólera, altercaciones, divisiones, sectas, envi‐ dias, borracheras, diversiones estrepito‐ sas, y cosas semejantes a estas. En cuan‐ to a estas cosas les aviso de antemano, de la misma manera como ya les avisé, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios». Para poder ser santos debemos abs‐ tenernos de fornicar. 1 Tesalonicenses 4:3, «Porque esto es la
voluntad de Dios: la santificación de us‐ tedes, que se abstengan de la fornicación. Que cada uno de ustedes sepa tomar posesión de su propio vaso cuerpo en santificación y honra, no en codicioso apetito sexual tal como el que también tienen las naciones que no conocen a Dios». Hace bastantes siglos nos vienen dando tiempo para arrepentirnos de fornicar, pero no queremos arrepentirnos. Revelación 2:21, «y le di tiempo para que
se arrepintiera, pero ella no quiere arre‐ pentirse de su fornicación».
El arrepentimiento es lo fundamental para el cambio. El asesinato y las practi‐ cas espiritistas también nos aleja de nuestro SER interior. Revelación 9:21, «Y no se arrepintieron
de sus asesinatos ni de sus prácticas espiritistas ni su fornicación ni de sus robos». La Ley nos cae encima por fornicar.
1 Corintios, «Ni practiquemos fornica‐ ción, como algunos de ellos cometieron fornicación, de modo que cayeron, vein‐ titrés mil de ellos en un día». 23.000:
2 3 5. El arcano 5 es la Ley, el karma, el Jerarca. Al fornicar nuestro Dios interno Jerarca nos entrega a la Ley y pagare‐ mos con dolor, hasta que volvamos a El. La enseñanza de Balaam es fornicar y su discípulo Balac, enseñó a los hijos de Israel a cometer fornicación. Lo mismo hacen los de la secta de Nicolás. Revelación 2:14‐15, «No obstante, tengo
contra ti unas cuantas cosas: que tienes allí a los que tienen firmemente asida la enseñanza de Balaam, el cual anduvo enseñando a Balac a poner un tropiezo delante de los hijos de Israel, a comer cosas sacrificadas a ídolos y a cometer fornicación. Así tú también, tienes a los que de igual manera tienen firmemente asida la enseñanza de la secta de Ni‐ colás». Los gobernantes del mundo viven en lujo desvergonzado, cometiendo y tolerando la fornicación inclusive fomentándola por todos los medios posibles.
Revelación 18:9 nos dice al respecto: «Y
los reyes de la tierra que cometieron fornicación con ella y vivieron en lujo
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desvergonzado llorarán y se golpearán en desconsuelo por ella, cuando miren el humo del incendio de ella». Ella es Babi‐ lonia y Babilonia quiere decir confusión, la humanidad entera estamos confundi‐ dos y fornicando desmedidamente.
La humanidad cayó por la fornicación, los ángeles cayeron también cuando ba‐ jaron y fornicaron con las hijas de los hombres. Génesis 6:2, «Entonces los hijos del Dios verdadero, empezaron a fijarse en las hijas de los hombres, que ellas eran bien parecidas; y se pusieron a tomar esposas para sí, a saber, todas las que escogie‐ ron». Esto lo confirma Judas en su única carta, Versículo 6, «Y a los ángeles que no guardaron su posición original, Estado de pureza, castidad , sino que abandona‐
ron su propio y debido lugar de habita‐ ción, morada de Dios los ha reservado con cadenas sempiternas bajo densa oscuridad para el juicio del gran día». Lo que le sucedió a Sodoma y Gomorra y ciudades circunvecinas es un ejemplo de lo que nos sucederá a nosotros sino nos arrepentimos. Judas 7, «Así también Sodoma Y Gomo‐
rra y las ciudades circunvecinas después que ellas de la misma manera como los anteriores Atlantes hubieron cometido fornicación con exceso, e ido en pos de carne para uso contranatural, son pues‐ tas delante de nosotros como ejemplo amonestador al sufrir el castigo judicial de fuego eterno». Jueces 2:17, «Y ni siquiera a sus jueces
escuchaban, sino que tenían ayunta‐ miento inmoral con otros dioses come‐
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tieron fornicación, inmoralidad y se inclinaban ante ellos». Nos convertimos en hijos pródigos cuando nos comemos nuestro modo de vivir con las rameras, es decir cuando perdemos nuestras capacidades espiri‐ tuales por prostituirnos. Lucas 15:30, «Pero tan pronto como
llegó este hijo tuyo que se comió tu me‐ dio de vivir con las rameras, le degollaste el torillo cebado». Nuestros cuerpos son miembros de Cristo por lo tanto no hay que manci‐ llarlos.
1 Corintios 6:15, «¿No saben que sus cuerpos son miembros de Cristo? ¿Qui‐ taré yo, pues, los miembros de Cristo y los haré miembros de una ramera? ¡Jamás suceda eso! ¿No saben que el que se une a una ramera es un solo cuerpo? Porque los dos dice El, será una sola car‐ ne». La gran ramera, la humanidad, seremos juzgados por fornicadores. Revelación 17:1‐2, «Ven, te mostraré el
juicio sobre la gran ramera que se sienta sobre muchas aguas, con quien reyes de la tierra cometieron fornicación, entre tanto que los que habitan la tierra fueron emborrachados con el vino de su forni‐ cación». En nuestra frente se revelará si hemos prendido la lámpara de la castidad o por el contrario desarrollaremos los cuernos de Satanás.
Revelación 17:4‐5, «Y la mujer estaba
vestida de púrpura y escarlata, y estaba adornada con oro y piedra preciosa y
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perlas, y tenía en la mano una copa de oro que estaba llena de cosas repugnan‐ tes y de las inmundicias de la fornica‐ ción. Y sobre su frente estaba escrito un nombre, un misterio: Babilonia la gran‐ de, la madre de las rameras y de las co‐ sas repugnantes de la tierra». Casi todas las religiones enseñan a la humanidad a fornicar y lo dan como mandato para la perpetuación de la es‐ pecie humana. Babilonia la grande, la gran humanidad practica, fomenta y to‐ lera, más aún, enseña públicamente co‐ mo cometer fornicación y la humanidad como un río borrascoso, vamos hacia nuestra autodestrucción. Revelación 17:15, «Y me dice: Las aguas
que viste, donde está sentada la ramera, significan pueblos y muchedumbres y naciones y lenguas».
La involución y el demonio nos comerán nuestras carnes y seremos quemados en el fuego eterno. Revelación 17:16, «Y los diez cuernos que viste, y la bestia salvaje, estos odia‐ ran a la ramera y harán que quede de‐ vastada y desnuda, y se comerán sus carnes y la quemarán por completo en el fuego». La mujer vestida de púrpura y escarlata significa que el mundo entero que esta lleno de cosas repugnantes y de las in‐ mundicias de la fornicación.
ción 19:2, «Porque verdaderos y justos
son sus juicios, porque ha ejecutado jui‐ cio sobre la gran ramera que corrompió la tierra con su fornicación, y has venga‐ do la sangre de sus esclavos de la mano de ella».
Cualquiera que llamándose hermano nos incite o nos enseñe a fornicar, no debe‐ mos mezclarnos con él. 1 Corintios 5:9, «En mi carta les escribí
que cesaran de mezclarse en compañía de fornicadores, no queriendo decir en‐ teramente con los fornicadores de este mundo, o personas dominadas por la avidez y los que practican extorsión, o idólatras. De otro modo ustedes real‐ mente tendrían que salirse del mundo». 1 Corintios 5:11, «Pero ahora les escribo
que cesen de mezclarse en la compañía de cualquiera que, llamándose hermano, sea fornicador, o persona dominada por la avidez o idólatra, o injuriador, o bo‐ rracho, o que practique extorsión, y ni siquiera coman con tal hombre». Los fornicadores no heredaremos el reino de Cristo y de Dios. Efesios 5:5, «Ningún fornicador, ni in‐
mundo, ni persona dominada por la avi‐ dez, lo que significa ser idólatra, tiene herencia alguna en el reino del Cristo y de Dios». La Ley no se promulga para el justo sino para... Timoteo 1:10, «Fornicadores,
Revelación 17:18, «Y la mujer que viste significa la gran ciudad el mundo ente‐ ro , que tiene un reino sobre los reyes de la tierra».
hombres que se acuestan con hombres, secuestradores, mentirosos, perjuros y cualquiera otra cosa que esté en oposi‐ ción a la enseñanza saludable».
El mundo entero está corrompido por la fornicación, lo recalca Juan en... Revela‐
Esaú perdió los derechos de primogénito por entregarse a la fornicación. Una per‐
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sona casta es sagrada; si pierde este de‐ recho deja de ser primogénito. Hebreos 12:6. «Que no haya fornicador
ni nadie que no aprecie cosas sagradas, como Esaú, que a cambio de una sola comida, vendió regalados sus derechos de primogénito».
El lecho conyugal se contamina por for‐ nicar emitir semen o por adulterar tener relaciones sexuales fuera del ma‐ trimonio . Hebreos 13:4, «Que el matrimonio sea honorable entre todos, y el lecho conyu‐ gal sea sin contaminación, porque Dios juzgará a los fornicadores y a los adúlte‐ ros». Lo más grave de la fornicación es que desintegra el alma. Revelación 21:8’ “Es‐ to significa la muerte segunda”. Revelación 22:15, «Afuera están los pe‐ rros homosexuales y los que practican espiritismo y los fornicadores y los ase‐ sinos y los idólatras y todo aquel a quien le gusta la mentira y se ocupa de ella». Para demostrar Bíblicamente que el abu‐ so sexual nos aleja de Dios, concluiremos el sexto mandamiento citando los si‐ guientes capítulos y versículos: Ayuntamiento Inmoral Jueces 2:17, «tenían ayuntamiento inmo‐ ral con otros dioses y se inclinaban ante ellos». Salmo 106:39, «Y se hicieron inmundos por sus obras, y siguieron teniendo ayuntamiento inmoral por sus tratos». Exodo 34:15, «Puesto que ellos tendrán
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ayuntamiento inmoral con sus dioses». Exodo 34:16, «Entonces tendrás que tomar algunas de sus hijas para tus hijos, y sus hijas de seguro tendrán ayunta‐ miento inmoral con los dioses de ellas». Levítico 17:17, «Así es que ellos ya no
deben sacrificar sus sacrificios a los de‐ monios de forma de cabra con los cuales están teniendo ayuntamiento inmoral».
Móleck, un demonio encarnado exigía tener relaciones sexuales con derrame seminal. El Señor Jehová se pone muy molesto por este acto, acto que contami‐ na su santo lugar. Levítico 20:2‐6, «Cualquier residente forastero que de su prole a Móleck, debe ser muerto sin falta”. Y por contaminar el cuerpo el santo lugar de Dios . Porque ha dado su prole a Móleck con el propó‐ sito de contaminar mi lugar santo y para profanar mi nombre, cortaré de su exis‐ tencia al hombre y su familia, y al pueblo y a todos los que tienen ayuntamiento inmoral con Móleck». Muchas personas recurren al espiritismo o a pronosticadores profesionales para conseguir pareja y así adulterar y forni‐ car. Levítico 20:6, «En cuanto al alma que se vuelva a los médiums espiritistas ya los pronosticadores profesionales de acon‐ tecimiento para tener ayuntamiento inmoral con ellos, ciertamente fijaré mi rostro contra aquella alma y los cortaré de entre su pueblo». Números 15:39, «Y no deben andar si‐
guiendo sus corazones y sus ojos, a los cuales están siguiendo en ayuntamiento inmoral».
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Emisión Seminal Levítico 15:16, «Ahora bien, en caso de que le salga a un hombre emisión de semen, entonces tiene que bañar toda su carne en agua y ser inmundo hasta el atardecer». Ese atardecer es hasta que corrijamos el vicio de derramar el semen. Este manda‐ to es también para la pareja. Levítico 15:18, «En cuanto a la mujer con
quien se acueste un hombre con emisión de semen, tienen que bañarse en agua y ser inmundos hasta el atardecer». La emisión seminal contamina el ta‐ bernáculo de Dios, y el tabernáculo de Dios es el cuerpo.
Levítico 15:31, «Y ustedes tienen que
mantener a los hijos de Israel separados de la inmundicia, para que ellos no mue‐ ran en su inmundicia por contaminar mi tabernáculo, que está en medio de ellos». Ya sabemos por mandato de Dios que somos inmundos por derramar semen y que este hecho contamina el tabernáculo de Dios. Números 19:20, «Pero el hombre que sea
inmundo y que no se purifique... pues, aquella alma tiene que ser cortada muerta , de en medio de la congrega‐ ción, porque es el santuario de Jehová lo que él ha contaminado. El agua de lim‐ pieza no fue rociada sobre él. Es inmun‐ do! No se castificó». Levítico 15:32‐33, «Esta es la Ley acerca del hombre que tenga flujo y del hombre de quien salga emisión de semen de mo‐ do que llegue a ser inmundo por ella; y de la mujer en su inmundicia a causa de
menstruar, y de cualquiera de quien ma‐ ne flujo, sea varón o hembra, y sea de un hombre que se acueste con una mujer inmunda». También en Levítico 22:4 se lee que so‐ mos inmundos por la emisión seminal. Energía Vital
«No des tu energía vital a las mujeres, ni tus caminos a lo que conduce a borrar reyes». El hombre o mujer castos, son reyes y sacerdotes de la naturaleza al derramar la energía, quedamos esclavos de ella. Oseas 4:11, «Fornicación y vino dulce son lo que quitan el buen motivo». Joel 2:22, «La higuera y la vid tienen que dar su energía vital». La higuera es la humanidad y la vid es el sexo. De transmutación en transmutación nos presentaremos a Dios. Salmos 84:7, «Seguirán andando de
energía vital en energía vital; cada uno se presenta a Dios en Sión».
Sión es la santa montaña de Dios, la cual representa la columna vertebral del ser humano. Prostituciones La prostitución es lo más rechazado por Dios. Sin embargo, es lo que más practi‐ camos. El alquiler de los cuerpos de jóvenes de ambos sexos se ve por do‐ quier.
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Isaías 23:17, «Y ella tendrá que volver a
su alquiler y cometer prostitución con todos los reinos de la tierra sobre la haz del suelo».
Nahúm 3:4, «Debido a la abundancia de
los actos de prostitución de la prostituta, atractiva con encanto, maestra de hechi‐ cerías, la que está cogiendo en lazo a las naciones por sus actos de prostitución, y a las familias por sus hechicerías».
Isaías 1:21, «¡Oh, cómo ha llegado a ser una prostituta la población fiel!» Oseas 4:13, «Por eso las hijas de ustedes cometen fornicación, y las propias nue‐ ras de ustedes cometen adulterio». Nos hemos hecho tercos y no aceptamos que es la prostitución la que nos tiene sumidos en el dolor y la existencia mis‐ ma es un calvario. Oseas 4:14, «No pediré cuentas a las
hijas de ustedes debido a que cometen fornicación, ni a las nueras de ustedes porque cometen adulterio. Pues, en cuanto a los hombres, es con las rameras con quienes se apartan, y con las prosti‐ tutas del templo con quienes hacen sa‐ crificio; y un pueblo que no entiende será pisoteado». Oseas 4:15 «Aunque estás cometiendo
fornicación, oh Israel, que Judá no se haga culpable». Israel es la humanidad y fornicación es lo que estamos cometien‐ do.
Hoy como ayer se repite lo mismo, se venden niños y niñas para la prostitu‐ ción. Joel 3:3, «Y por mi pueblo siguieron echando suertes; y daban un niño por
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una prostituta, y a una niña la vendían por vino, para beber». Hoy los divorcios hacen que abandone‐ mos a nuestros hijos para irnos tras la carne para contaminarnos. Las esposas hoy no tienen ningún incon‐ veniente en prostituirse, el mundo las ha absorbido y la liberación femenina mal entendida, destrozó hijos e hijas. Amos 7:17, «En lo que respecta a tu es‐
posa, en la ciudad llegará a ser una pros‐ tituta».
Miqueas 1:7, «Porque de las cosas que se
dieron, como el alquiler de una prostitu‐ ta, ella los juntó, y a las cosas dadas co‐ mo el alquiler de una prostituta vol‐ verán».
Proverbios 7:10, «Allí estaba una mujer
que salía a su encuentro, con la prenda de vestir de una prostituta, y astuta de corazón». Lujuria
Para poder participar de la naturaleza divina debemos renunciar a la fornica‐ ción o sea a la lujuria. 2 Pedro 1:4, «Para que por éstas, ustedes
lleguen a ser partícipes de la naturaleza divina, habiendo escapado de la corrup‐ ción que hay en el mundo por la lujuria».
Tenemos que generarnos de nuevo para resucitar incorruptiblemente como Jesu‐ cristo y este nacimiento es mediante la pureza. 1 Pedro 1:3‐4, «Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, por‐ que, según su gran misericordia, nos dio
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un nuevo nacimiento a una esperanza viva mediante la resurrección de Jesu‐ cristo de entre los muertos, a una heren‐ cia incorruptible e incontaminada e in‐ marcesible. Está reservada en los cielos para ustedes». 2 Pedro 2:20, «Si, después de haber es‐ capado de las contaminaciones del mun‐ do por un conocimiento exacto del Señor y Salvador Jesucristo, se envuelven de nuevo en estas misma cosas y son venci‐ dos, las condiciones finales han llegado a ser peores para ellos que las primeras». Todavía no sabemos lo que seremos porque estamos impuros, para ser seme‐ jantes a Cristo tenemos que purificarnos. 1 Juan 3:2‐3, «Amados, ahora somos hijos de Dios, pero todavía no se ha ma‐ nifestado lo que seremos. Sí sabemos que cuando El sea manifestado seremos semejantes a El, porque lo veremos tal como El. Y todo el que tiene esta espe‐ ranza puesta en El, se purifica a sí mismo así como Ese es puro». Juan confirma que para ser semejantes a Cristo tenemos que purificarnos y mien‐ tras estemos emitiendo la naturaleza divina de Dios la cual es el semen, no hay esperanza para nosotros. La muerte segunda no tiene autoridad sobre las personas castas. Quien se castifique resucita de entre los muertos como lo hizo nuestro Señor Jesucristo. Revelación 20:6, «Feliz y santo es cual‐ quiera que tiene parte en la primera re‐ surrección; sobre estos la muerte segun‐ da no tiene autoridad, sino que serán sacerdotes de Dios y del Cristo, y reinará
con él por los mil años». Hay una vida física y otra espiritual, la primera es carnal, llena de concupiscen‐ cias y la otra es espiritual, la cual nos da gozo, paz y justicia. Hebreos 12:9‐11, «Además, solíamos tener padres que eran nuestra carne para disciplinarnos, y les mostrábamos respeto. ¿No hemos de sujetarnos mucho más al padre de nuestra vida espiritual y vivir?. Pero El nos disciplina para prove‐ cho nuestro de modo que participemos de su santidad. La disciplina parece por el presente ser penosa; sin embargo, después, a los que han sido entrenados por ella, da fruto pacífico, a saber, justi‐ cia». Y es mandato de Dios que lo mortal tiene que volverse inmortal. 1 Colosenses 5:53, «Porque esto que es corruptible tiene que vestirse de inco‐ rrupción, y esto que es mortal tiene que vestirse de inmortalidad». Somos mortales, porque somos impuros. ¿Podremos participar de la naturaleza divina así como estamos? La fornicación física, es tan grave co‐ mo la fornicación mental Marcos 7:21, «Porque de dentro, del co‐
razón de los hombres, proceden razo‐ namientos perjudiciales: fornicaciones, hurtos, asesinatos, adulterios, codicias, actos de iniquidad, engaño, conducta relajada, ojo envidioso, blasfemia, alta‐ nería, irracionalidad. Todas estas cosas inicuas proceden de dentro y contami‐ nan al hombre». Fornicación es emitir semen ‐ Conducta
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relajada es ser impuro ‐ Conducta relaja‐ da es depravación. Codiciar es desear con vehemencia riquezas u otras cosas ‐ La codicia sexual es la más grave de to‐ das, destruye la célula matrimonial que es la base de todo orden establecido. Lucas 12:15, «Mantengan abiertos los
ojos y guárdense de toda suerte de codi‐ cias, porque hasta cuando uno tiene en abundancia, su vida no resulta de las cosas que posee». Colosenses 3:5, «Amortigüen, por lo tan‐ to, los miembros de su cuerpo que están sobre la tierra en cuanto a fornicación, inmundicia, apetito sexual, deseo perju‐ dicial y codicia, que es idolatría. Por cau‐ sa de esas cosas viene la ira de Dios».
Fornicación es emitir semen, ser impuro. Inmundicia es suciedad, depravación, lascivia. Apetito carnal, es pasión carnal. Deseo perjudicial y codicia es querer tener y repetir desmedidamente cosas o actos perjudiciales. La destrucción de la humanidad se dará por no corregir nuestra conducta relajada 2 Pedro 2:2, «Además, muchos seguirán
los actos de conducta relajada de ellos y por causa de estos se hablará injuriosa‐ mente del camino de la verdad».
2 Pedro 2:14, «Tienen ojos llenos de
adulterio, y no pueden desistir del peca‐ do, y cautivan almas inconstantes. Tie‐ nen un corazón entrenado en la codicia. Son hijos malditos».
El término codicia se emplea bíblicamen‐ te para determinar todo acto desmedido. Ejemplo: Codicia sexual, codicia de bie‐ nes, codicia de poder, etc.
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Siguen exortándonos a no cometer infi‐ delidad sexual marital. Romanos 13:9, «Porque el código: No debes cometer adulterio, no debes asesi‐ nar, no debes hurtar, no debes codiciar, y cualquier otro mandamiento que haya, se resume en esta palabra, a saber: Tie‐ nes que amar a tu prójimo como a ti mismo». La fuente de las guerras y peleas entre nosotros viene del placer sensual. Santiago 4:1, «¿De qué fuente son las
guerras y de qué fuentes son las peleas entre ustedes?. ¿No son de esta fuente, a saber de sus deseos vehementes de pla‐ cer sensual que se hallan en conflicto en sus miembros?». Si muchas veces pedimos y no obtene‐ mos resultados a nuestro favor es por‐ que pedimos para propósitos malos.
Santiago 4:3‐4, «Ustedes desean, y sin embargo no tienen. Siguen asesinando y codiciando, y sin embargo no pueden obtener. Siguen peleando y guerreando. No tienen, porque no piden. Si piden, y sin embargo no reciben, porque piden con un propósito malo, para gastarlo en los deseos vehementes que tienen de placer sensual». El sexo siempre está presente en el mandato bíblico. Deseo Juan 8:44, «Ustedes proceden de su pa‐ dre el diablo, y quieren hacer los deseos de su padre». Esto quiere decir que nacimos de forni‐ cación y la pasión sexual es lo que hace‐
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mos. Timoteo 6:9, «Sin embargo, los que están
resueltos a ser ricos caen en tentación y en un lazo y en muchos deseos insensa‐ tos y perjudiciales, que precipitan a los hombres en destrucción y ruina».
Los deseos mundanos impiden nuestra salvación. Tito 2:12, «Y nos instruye a repudiar la
impiedad y los deseos mundanos y a vivir con buen juicio y justicia y devoción piadosa en medio de este sistema de cosas actual». El término deseo, también bíblicamente, es supremamente amplio, y nos lleva a la muerte física y espiritual. Santiago 1:14‐15, «Más bien, cada uno es
probado al ser provocado y cautivado por su propio deseo. Entonces el deseo, cuando se ha hecho fecundo, da a luz el pecado; a su vez el pecado, cuando se ha realizado, produce muerte». Las personas se burlan de las enseñan‐ zas que buscan restablecer el orden mo‐ ral en los hogares, la castidad en la ju‐ ventud y la regulación en los adultos”.
2 Pedro 3:3, «Porque ustedes saben esto
primero, que en los últimos días vendrán burlones mofadores con su burla, pro‐ cediendo según sus propios deseos».
2 Pedro 2:18, «Porque profieren expre‐ siones hinchadas de ningún provecho, y cautivan, por los deseos de la carne y por los hábitos relajados». todos los deseo insanos, no se originan de Dios, sino que se originan del hombre y de los placeres mundanos.
1 Juan 2:16‐17, «Porque todo lo que hay
en el mundo, el deseo de la carne y el deseo de los ojos lujuria y la exhibición ostentosa del medio de vida de uno, no se originan del Padre, sino que se origina del mundo. Además, el mundo va pasan‐ do, y también su deseo, pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre». Si queremos pertenecer a Cristo, debe‐ mos matar el deseo pasional y el deseo de posesiones en nosotros. Gálatas 5:24, «Además, los que pertene‐ cen a Cristo Jesús han fijado en un made‐ ro la carne junto con sus pasiones y de‐ seos». 2 Timoteo 2:22, «Huye de los deseos que acompañan a la juventud, más sigue tras la justicia, la fe, el amor, la paz, junto con los que de corazón limpio invocan al Señor». Siempre el placer sensual produce gue‐ rras en los hogares, Siempre el placer sensual produce guerras en los hogares, es en donde nos prostituimos y produce conflicto al cuerpo y al alma destruyéndolos si no nos purificamos Santiago 4:1, «¿De que fuente son las
guerras y de qué fuente son las peleas entre ustedes? ¿No son de esta fuente a saber: de sus deseo vehementes de pla‐ cer sensual que se hallan en conflicto en sus miembros?» Estamos siendo cautivados por los dese‐ os de la carne y por los hábitos relajados de la época presente.
2 Pedro 2:18, «Porque profieren expre‐ siones hinchadas de ningún provecho, y cautivan, por los deseos de la carne y por
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los hábitos relajados». Dice San Pedro que debemos escaparnos de estas personas. Hay una lucha permanente entre la carne y el espíritu, si somos víctimas del sexo pasional el espíritu será desalojado de su templo y la carne, el cuerpo, con la muer‐ te será reducido a polvo. Si el espíritu vence a la materia con el sexo casto, digno y enaltecedor, cuerpo y espíritu resucitarán levantándose de entre los muertos. Quiero decir que el cuerpo y el espíritu están muertos hasta que el fuego purificador los renueve para siempre. Gálatas 5:16‐17, «Pero digo: Sigan an‐ dando por espíritu y no llevarán a cabo ningún deseo carnal. Porque la carne está contra el espíritu en su deseo, y el espíritu contra la carne; porque estos están opuestos el uno al otro, de manera que las mismísimas cosas que ustedes quisieran hacer, no las hacen». Estamos bajo la Ley porque obramos impúdicamente. Si nos conducimos por el espíritu nuestro destino será placente‐ ro. Gálatas 5:18, «Además, si se les conduce por espíritu, no están bajo la Ley».
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gran paciencia, benignidad, bondad, fe, apacibilidad, autodominio». Contra tales
cosas no hay Ley.
Debemos abstenernos de los deseos car‐ nales para no perder el alma. 1 Pedro 2:11, «Amados, los exhorto co‐
mo a forasteros y residentes temporales a que sigan absteniéndose de los deseos carnales, los cuales son los mismísimos que llevan a cabo un conflicto en contra del alma». Contaminación El lecho conyugal es lo que más conta‐ minamos con la fornicación emisión seminal . Los matrimonios honorables, son muy pocos. Hebreos 13:4, «Que el matrimonio sea
honorable entre todos, y el lecho conyu‐ gal sea sin contaminación, porque Dios juzgará a los fornicadores y adúlteros».
Con el derramamiento de la energía vital y el derramamiento de sangre, estamos rindiendo servicio a demonios. Hoy en‐ tregamos a nuestros hijos a la prostitu‐ ción y a derramar sangre de nuestros hermanos, haciéndonos inmundos por nuestras obras.
Y en Gálatas 5:19, explica bien cuales son las obras de la carne. «Las obras de la
Salmos 106:38, «De modo que siguieron vertiendo sangre inocente, la sangre de sus hijos y sus hijas, que sacrificaban a los ídolos de Canaán; y la tierra quedó contaminada con el derramamiento de sangre».
También en Gálatas 5:22, explica cual es el fruto del espíritu. «Por otra parte el
Muy pocos hombres mortales quedarán sobre la tierra, por desobedecer las leyes de Dios y contaminar el pacto de dura‐
carne son manifiestas, y son: Fornica‐ ción, inmundicia, conducta relajada, etc.”. Los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios».
fruto del espíritu es: Amor, gozo, paz,
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ción indefinida. El pacto es conservar‐ nos puros . Isaías 24:5, «Y la mismísima tierra ha
sido contaminada bajo sus habitantes, porque han pasado por alto las leyes, han cambiado la disposición reglamenta‐ ria, han quebrantado el pacto de dura‐ ción indefinida». Dios exige de sus ministros, de cualquier religión, santidad para poder presentar el pan sexo puro a Dios.
dre». 1 Corintios 6:10, «Ni los que practican extorsión heredarán el reino de Dios». Efesios 4:28, «El que hurta, ya no hurte más, sino, más bien, que haga trabajo duro, haciendo con las manos lo que sea buen trabajo, para que tengas algo que distribuir a alguien que tenga necesi‐ dad». 8º MANDAMIENTO
Malaquías 1:7, «Al presentar sobre mi altar pan contaminado».
Exodo 20:16. “No Debes Dar Testimonio Falso”
Malaquías 1:12, «Pero ustedes me están profanando».
La falsedad en documentos privados y públicos es lo común en todos los ámbi‐ tos.
Tito 1:15, «Todas las cosas son limpias a los limpios. Pero a los contaminados y sin fe nada les es limpio, sino que tienen contaminada tanto la mente como la conciencia». Hemos contaminado nuestro cuerpo que es el templo de Dios y hemos profanado a Jerusalén. Nuestra conciencia . 7º MANDAMIENTO Exodo 20:15, No Hurtar. Cumplir los diez mandamientos, deman‐ da mucho sacrificio‐ Hasta nosotros mismos nos robamos tiempo. Levítico 19:11, «No deben hurtar, y no deben engañar, y no deben tratar falsa‐ mente ninguno, con su asociado». Marcos 10:19, «Conoces los mandamien‐
tos: No asesines, no cometas adulterio, no hurtes, no des falso testimonio, no defraudes, honra a tu padre y a tu ma‐
Levítico 19:11, «Y no deben tratar falsa‐ mente, ninguno, con su asociado». Deuterenomio 5:20, «Tampoco debes
testificar una falsedad contra tu seme‐ jante».
Marcos 10:19, «No des falso testimonio». Los esposos entre sí, se mienten, los jue‐ ces prevarican, los religiosos tergiversan las Sagradas Escrituras. Los hombres de negocios se mienten unos a otros para sacar provecho. Los gobernantes prome‐ ten una cosa y luego hacen otra en de‐ trimento del pueblo. Y nosotros nos mentimos, mostramos ser lo que no so‐ mos. 9º MANDAMIENTO Exodo 20:17. “No Debes Desear La Mujer De Tu Semejante” Este mandamiento se refiere al adulterio
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físico y mental. Este mandamiento difie‐ re en el fondo del sexto mandamiento fornicar, emitir semen . Si tenemos relaciones sexuales, fuera del matrimonio, hemos adulterado. y si de‐ seamos tener relaciones sexuales, aun‐ que no se cometa el acto, hemos pecado. Mateo 5:27, «Oyeron ustedes que se dijo: no deben cometer adulterio». Mateo 5:28, «Pero yo les digo que todo el
que sigue mirando a una mujer a fin de tener una pasión por ella, ya ha cometido adulterio con ella en su corazón». El Cristo nos previene para que purifi‐ quemos mente y cuerpo para no ser arrojados en el Gehena infierno . Romanos 13:9, «Porque el código: No deben cometer adulterio». No debes
cometer infidelidad sexual marital .
Malaquías 3:5, «Y me acercaré a ustedes
para juicio veloz contra los adúlteros porque no me han temido».
Jeremías 29:23, «Y siguen cometiendo
adulterio con las esposas de sus compa‐ ñeros». Es detestable para Dios adulte‐ rar.
Jeremías 7:9, «¿Acaso se puede adulte‐ rar?».
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adulterio. Y, además de eso, sus hijos que habían dado a luz para mí los hicieron pasar por el fuego a ellos Demonios como alimento». La causa de tanta amargura, la desdicha en los hogares, la falta de comprensión en las parejas nos tiene enfermos física y mentalmente. Nadie es feliz. Revelación 2:22, «Estoy a punto de
echarla en un lecho de enfermo, y a los que cometan adulterio con ella, en gran tribulación, a menos que se arrepientan de los hechos de ella». Para no contaminarnos, ni siquiera de‐ bemos pensar en el adulterio.
Mateo 15:19, «Por ejemplo, del corazón salen razonamientos inicuos, asesinatos, adulterios, fornicaciones, hurtos, testi‐ monios falsos, blasfemias». Estas cosas contaminan al hombre. En Marcos 7:22, repite lo mismo y agrega conducta relajada, quiere decir impudi‐ cia. Con el adulterio, violamos la Ley de Dios, lo mismo que asesinar. Santiago 12:11, «Porque el que dijo: No deben cometer adulterio, también dijo: “No deben asesinar”. Ahora bien, si no cometes adulterio, pero si asesinas, te has hecho transgresor de la Ley».
Jeremías 9:2, «Entonces dejaría a mi pueblo y me iría de ellos porque todos ellos son adúlteros».
Por ley los esposos estamos atados mientras vivamos.
El adulterio ha hecho que las naciones se prostituyan en detrimento de sus habi‐ tantes.
casada está atada, por ley, a su esposo mientras este viva; pero si su esposo muere queda desobligada de la ley de su esposo».
Ezequiel 23:37, «Porque han cometido
Romanos 7:2, «Por ejemplo la mujer
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Romanos 7:3, «Así es que, mientras vive
su esposo, sería llamada adultera si lle‐ gara a ser de otro hombre. Pero si su esposo muere, queda libre de la ley de él, de modo que no es adúltera si llega a ser de otro hombre». El adulterio nos vuelve enemigos de Dios.
Santiago 4:4, «¿Adúltera?, no saben que
la amistad con el mundo es enemistad con Dios?. Cualquiera, por lo tanto, que quiere ser amigo del mundo está consti‐ tuyéndose enemigo de Dios».
La mujer y el hombre adúlteros, debían morir por ésta falta. Hoy no se mata el cuerpo físico, pero si estamos matando el alma. Levítico 20:10, «Ahora bien, un hombre
que comete adulterio con la esposa de otro hombre es uno que comete adulte‐ rio con la esposa de su semejante. él de‐ be ser muerto sin falta, el adúltero y también la adúltera». En la antigüedad esperábamos la noche para adulterar, hoy se hace a cualquier hora.
mo adúlteros». 1 Corintios 6:9, «Ni fornicadores, ni idó‐ latras, ni adúlteros, ni hombres que se tienen para propósitos contranaturales, ni hombres que se acuestan con hom‐ bres, heredarán el reino de Dios». Por no arrepentirnos de la fornicación y del adulterio nos enfermamos y entra‐ mos en gran tribulación. Revelación 2:21‐22, «Y le di tiempo para
que se arrepintiera, pero ella no quiere arrepentirse de su fornicación. Estoy a punto de echarla en un lecho de enfermo, y a los que cometen adulterio con ella, en gran tribulación, a menos que se arre‐ pientan de los hechos de ella». Los actos de prostitución se han multi‐ plicado en el mundo, deseamos apasio‐ nadamente y no queremos corregir la inmoralidad, por el contrario, la fomen‐ tamos. Ezequiel 23:1‐49, aclara bien que la prostitución es la causa de todos los ma‐ les que nos aquejan.
Job 24:15, «En cuanto al ojo del adúltero, ha aguardado la oscuridad vespertina».
Toda la obra de Dios gira alrededor del sexo ‐ puede negar esto los hombres ‐ pero lo escrito en las sagradas escrituras no puede nulificarse.
Salmos 50:18, «Tu participación era co‐
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Imagen de Jesús El Cristo _______________________________________________ VIDA Y OBRAS DE JESUS EN LA INDIA. CAPITULO I.
Ravana ve a Jesús en el templo y se siente cautivado por él. Hillel le habla del niño. Ravana encuentra a Jesús en Nazareth y da una fiesta en su honor. Ravana se convierte en su protector y le lleva a la India para estudiar la religión brahmánica.
1. En una fiesta judía se hallaba un príncipe real de Orisa, en el sur de la India. Ravana. 2. Ravana era un hombre rico y justo que buscaba la sabiduría en Occidente con un grupo de sacerdotes brahmánicos. 3. Cuando Jesús leía y hablaba entre los sacerdotes judíos, Ravana escuchaba y se quedaba asombrado. 4. Y cuando preguntó quién era Jesús, de donde venía y qué era, Hillel le dijo: 5. A este niño le llamaron la Estrella de la Mañana que está en las alturas, pues ha venido a traer una luz a los hombres, la luz de la vida, para iluminarles el camino y redimir a su pueblo Israel. 6. Hillel contó a Ravana todo lo que sabía del niño: Las profecías que hablaban de él, las maravillas que aparecieron en el cielo la noche en que nació y la visita de los magos. 7. El modo en que fue protegido de la ira de los malvados, su huida a Egipto y su servicio de carpintero con su Padre en Nazareth. 8. Ravana se quedó maravillado y le preguntó cuál era el camino de Nazareth para poder ir y honrar al hijo de Dios en persona. 9. Y con su fabuloso cortejo se puso en camino y llegó a Nazareth de Galilea. 10. Y encontró al objeto de su búsqueda ocupado en construir moradas para los hijos de los hombres.
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11. Y cuando vio a Jesús por primera vez, Jesús subía por una escalera de doce escalones y llevaba en la mano un compás, una escuadra y una piqueta. 12. Y Ravana dijo: ¡Bendito seas, hijo preferido del cielo! 13. Ravana hizo una fiesta en la posada para toda la gente de la ciudad, Jesús y sus padres fueron los invitados e honor. 14. Durante algunos días Ravana fue huésped de José en el Camino el Marmón, pues quería aprender el secreto de la sabiduría de su hijo, pero era algo demasiado grande para él. 15. Entonces pidió que le dejasen ser protector del niño para llevarle a Oriente donde podía aprender la sabiduría de los brahmanes. 16. Jesús anhelaba ir allí para poder aprender, y después de muchos días, sus padres consintieron. 17. Y rayana, sintiéndose muy afortunado, comenzó el viaje con su séquito hacia el sol naciente, y después de muchos días cruzaron el Sin y llegaron a la provincia de Orisa, donde estaba el palacio del príncipe. 18. Los sacerdotes brahmánicos se alegraron de poder recibir al príncipe y acogieron al niño judío con muchas atenciones. 19. Jesús fue aceptado como discípulo en el templo de Jaganat y en él estudió los Vedas y las leyes mánicas. 20. Los maestros brahmánicos se maravillaban de la claridad de las ideas del niño y a veces se asombraban cuando les explicaba el significado de las leyes.
CAPITULO II.
Amistad de Jesús y Lamas. Jesús explica a Lamas el significado de la verdad, el poder, la comprensión, la sabiduría, la salvación y la fe. 1.
Entre los sacerdotes de Jaganat había uno que amaba al niño judío. Este sacerdote era conocido por el nombre de Lamas Bramas.
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Un día, mientras Jesús y Lamas paseaban solos por Jaganat, Lamas dijo: Maestro judío, ¿qué es la verdad? Y Jesús dijo: La verdad es la única cosa que no cambia. En todo el mundo sólo hay dos cosas: La verdad y la falsedad; la verdad es lo que es, y la falsedad es lo que parece ser. La verdad es algo; no tiene causa, y sin embargo es la causa de todo. La falsedad no es nada, y sin embargo es la manifestación de algo. Todo lo que ha sido creado, será destruido; aquello que empieza, debe acabar. Todas las cosas que se pueden ver con los ojos humanos son manifestaciones de algo, no son nada, y por eso deben perecer. Las cosas que vemos son sólo reflejos que aparecen mientras vibran los éteres de una determinada forma, y cuando cambian las condiciones, desaparecen. La verdad es el Santo Aliento; es aquello que era, es y será por siempre; no puede cambiar ni perecer. Lamas dijo: Dices bien; y ¿qué es el hombre? Y Jesús respondió: El hombre es una mezcla extraña de verdad y la falsedad. El hombre es el Aliento hecho carne: por eso la verdad y la falsedad están unidas en él y luchan entre ellas hasta que la nada desaparece y el hombre se convierte en verdad. Y Lamas preguntó otra vez: ¿Qué puedes decir del poder? Jesús contestó: El poder es una manifestación; es el resultado de la fuerza; no es nada, tan sólo una ilusión. La fuerza no cambia, pero el poder está sujeto al cambio de los éteres. La fuerza es la voluntad de Dios, que es omnipotente; el poder es esa voluntad manifestada y dirigida por el Aliento. Hay un poder en el viento, en las olas, en el relámpago, en el brazo del hombre, en su ojo. Los éteres son la causa de que existan eso poderes, y el pensamiento de Elohim, del ángel, del hombre o de cualquiera otra cosa que pueda pensar, es el que dirige la fuerza; así el poder deja de existir cuando ha llevado a cabo su labor. Y Lamas preguntó de nuevo: ¿Qué sabes de la comprensión? Y Jesús dijo: Es la roca sobre la que el hombre se hace así mismo; es el conocimiento de algo y de la nada, de la falsedad y la verdad. Es el conocimiento del ser inferior, el entendimiento de los poderes del hombre. De nuevo Lamas preguntó: ¿Qué puedes decir de la sabiduría? Jesús respondió: Es la conciencia de que el hombre es algo y de que Dios y el hombre son uno. La conciencia de que la nada es nada y el poder sólo una ilusión, el cielo, la tierra y el infierno no están arriba, alrededor o abajo, sino adentro; es aquello que ante la luz de algo se convierte en nada y hace que Dios llegue a ser todo. Lamas preguntó: Por favor, ¿Qué es la fe? Jesús dijo: La fe es la seguridad de la omnipotencia de Dios, la certidumbre de que el hombre alcanzará la vida divina. La salvación es una escalera que va del corazón del hombre al corazón de Dios. Tiene tres escalones. La creencia es el primero, y quizá el hombre cree que esto es la verdad. La fe es el siguiente escalón, y es lo que el hombre sabe que es la verdad. El goce es el último paso, y es el Hombre mismo, la verdad. La creencia se pierda con la fe y el goce; el hombre se salva cuando alcanza la vida divina, cuando él y Dios son uno.
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. CAPÍTULO VI
JESÚS EN KATAK. EL CARRO DE JAGNAT. JESÚS REVELA A LA GENTE ELVACÍO DE LOS RITOS BRAHMÁNICOS Y CÓMO VER A DIOS DENTRO DE UNOMISMO. LES ENSEÑA LA DIVINA LEY DEL SACRIFICIO.
1. Jesús enseñaba en todas las ciudades de Orisa. Enseño en Katak, a la orilla del río, y miles de personas le escuchaban. 2. Un día vio a unos hombres locos arrastrando un carro de Jaganat, y Jesús dijo: 3. Mirad, está pasando una forma sin espíritu, un cuerpo sin alma, un templo sin fuego en sus altares. 4. Este carro de Krishna está vacío, pues Krishna no está en él. 5. Este carro o es más que un ídolo de gente embriagada con el vino de las cosas carnales. 6. Dios no habita en el ruido de las palabras; él no tiene nada que ver con santuarios de ídolos. 7. El lugar donde Dios y el hombre se encuentran es el corazón; Él habla con una voz muy baja y el que escucha se tranquiliza. 8. Y toda la gente dijo: Enséñanos a conocer al Santo que habla dentro del corazón, el Dios de la voz suave. 9. Y Jesús dijo; El Santo Aliento no se puede ver con estos ojos mortales; el hombre o puede ver a los Espíritus dl Santo Supremo. 10. Pero el hombre fue hecho a su imagen, y el que mira el rostro del hombre, ve la imagen del Dios que habla dentro de él. 11. Y cuando el hombre honra al hombre, está honrando a Dios, y lo que un hombre hace por otro hombre, lo hace por Dios. 12. Debéis recordar que cuando un hombre hace daño a otro con pensamiento, palabra u obra, está agraviando a Dios. 13. Y si deseas servir al Dios que habla en tu corazón, sirve a tus parientes, a los extraños que pasan por tu puerta y a los enemigos que intentan hacerte daño 14. Ayuda al pobre y al débil; no hagas daño a nadie y o codicies lo que no es tuyo. 15. Entonces el Santo hablará por tu lengua, sonreirá detrás de tus lágrimas, iluminará tu rostro con alegría y llenará de paz tu corazón.
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16. Y la gente preguntó: ¿A quién debemos traer nuestras ofrendas? ¿Dónde debemos hacer sacrificio? 17. Nuestro Padre-Dios no quiere que se pierdan sin necesidad las plantas, semillas, palomas o corderos. 18. Lo que quemáis en los altares es arrojado después. El que coge la comida de las bocas hambrientas y la destruye con el fuego no puede gozar de ninguna bendición. 19. Cuando ofrezcáis sacrificios a nuestro Dios, coged vuestra ofrenda de granos o carne y ponedla en la mesa de los pobres. 20. De ahí se elevará a los cielos un incienso que volverá a vosotros lleno de bendiciones. 21. Destruid vuestros ídolos; ellos no os pueden escuchar; convertid todos vuestros altares de sacrificios en pasto de las llamas. 22. Haced vuestros altares en los corazones humanos y quemad sacrificios con el fuego del amor. 23. La gente estaba maravillada y deseaba adorar a Jesús como Dios, pero Él dijo: 24. Yo soy un hermano vuestro y he venido simplemente a mostraros el camino de Dios; no adoréis al hombre. Alabad sólo a Dios, al Santo de los Santos.
CAPÍTULO VII
JESÚS ASISTE A UNA FIESTA EN BIHAR, PREDICA UN SERMÓN REVOLUCIONARIO SOBRE LA IGUALDAD DE LOS HOMBRES. RELATA LA PARÁBOLA DE LAS BRIZNAS ROTAS.
1. La fama de Jesús como maestro se extendió por todo el país y la gente venía de cerca y de lejos para escuchar sus palabras de verdad. 2. En BIHAR, en el río sagrado de los Brahmanes, enseñó durante muchos días. 3. Y Ago, un hombre rico de BIHAR, hizo una fiesta en honor de su huésped, e invitó a todos a ella. 4. Vinieron muchos, entre ellos ladrones, opresores y mujeres públicas. Y Jesús se sentó con ellos y les enseñaba, pero los que seguían se sentían molestos porque se sentaba con ladrones y mujeres públicas. 5. Y le reprobaron su comportamiento; le dijeron: Rabino, maestro de los sabios, este día será malo para ti.
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6. Se ha corrido la noticia de que frecuentas la compañía de mujeres públicas y ladrones, y los hombres huirán de ti como se huye del áspid. 7. Jesús les respondió diciendo: Un maestro nunca se esconde por el bien de su reputación o de su fama. 8. Estas cosas no son más que trivialidades que duran un día; se levantan y se hunden como botellas vacías en un río. Son ilusiones y desaparecerán. 9. Son los indicios del pensamiento del que no piensa; son el ruido que hace la gente, y los hombres superficiales juzgan el valor de las cosas por el ruido que producen. 10. Dios y todos los grandes hombres juzgan al hombre por lo que es y no por lo que parece ser, no por su reputación ni su fama. 11. Estas mujeres públicas y estos ladrones son hijos de mi Padre Dios; a sus ojos, son almas igualmente preciosas que las vuestras o las de los sacerdotes brahmánicos. 12. Y están tratando de solucionar los mismos problemas de la vida que vosotros, que os vanaglorias tanto de vuestra respetabilidad y mérito moral. 13. Y algunos han resuelto problemas más difíciles que vosotros, que les miráis como desprecio. 14. Sí, son pecadores, ero confiesan su culpa, mientas que vosotros sois culpables, pero sois lo suficientemente astutos para poneros una capa muy limpia sobre vuestra culpa. 15. Y vosotros, que despreciáis a estas mujeres públicas, a estos borrachos y ladrones, que creéis que sois puros de corazón y de obras y que sois mucho mejores que ellos, suponed que aparecierais de tal forma que los hombres supieran exactamente quiénes sois. 16. El pecado está en el deseo, en la intención, no en el acto. 17.Codiciáis la riqueza de los demás; os fijáis en las formas atrayentes, y en lo profundo de vuestros corazones la anheláis con lujuria. 18.Practicáis el engaño todos los días, y deseáis oro, honores y fama, sólo por egoísmo. 19.El hombre que codicia es un ladrón, y el que siente lujuria escomo una mujer pública.. Y si hay alguno de vosotros que no sea nada de esto, que hable. 20. Nadie habló; los acusadores se mantuvieron en silencio. 21. Y Jesús dijo: Hoy la culpa recae sobre los que han acusado 22. Los puros de corazón no acusan. Los malvados que quieren cubrir su culpa en el santo humo de la piedad, siempre desprecian a los borrachos, ladrones y mujeres públicas.
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23. Este odio y desprecio es ridículo, porque si la capa adornada de la reputación pudiera ser desgarrada, el orgulloso maestro se vería descubierto con toda su lujuria, engaño y muchos otros pecados secretos. 24. El hombre que pasa el tiempo arrancando la mala hierba de los otros no tiene tiempo para quitarse las suyas, y las flores más bonitas de la vida se asfixiarán y morirán, y sólo quedará cizaña, abrojos y cardos. 25. Jesús contó una parábola y dijo: Un labrador, poseía extensos campos de gano madura, y al mirarlos vio que muchas briznas de los tallos de trigo estaban dobladas y rotas. 26. Y mandó a sus cosechadores y les dijo: No aprovechéis los tallos de trigo que tengan briznas rotas. 27. Id, cortad y quemad esos tallos. 28. Después de muchos días fue a medir el grano, pero no podía encontrar ni una semilla. 29. Entonces llamó a los recolectores y les dijo: ¿Dónde está mi grano? 30. Y le contestaron diciendo: Hicimos lo que tú nos dijiste; amontonamos y quemamos los tallos de briznas rotas y no quedó ni un tallo para guardar en el granero 31. Y Jesús dijo: Si Dios salvara sólo a los que no tienen briznas rotas, que son perfectos a sus ojos, ¿Quién se salvaría? Los acusadores bajaron sus cabezas avergonzados
CAPÍTULO VIII.
UDRAKA DA UNA FIESTA EN HONOR DE JESÚS. JESÚS HABLA DE LA UNIDAD DE DIOS Y LA HERMANDAD DE LAVIDA. CRITICA EL SACERDOCIO. ES HUÉSPED DE UN LABRADOR. 1. Renares es la ciudad sagrada de los brahmanes, y en ella enseñó Jesús. Udraka le hospedaba en su casa. 2. Renares es la ciudad sagrada de los brahmanes, y en ella enseñó Jesús. Udraka lo hospedaba en su casa. 3. Y Jesús les dijo: Voy a hablaros con mucho gusto de la vida, de la hermandad de la vida. 4. El Dios universal es uno, y sin embargo, es más que uno; todas las cosas son Dios, todas son uno sola cosa. 5. Por el dulce aliento de Dios, toda la vida es una, así que si tocáis una fibra de algo vivo, se produce un estremecimiento desde el centro de la vida hasta sus límites externos.
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6. Y cuando aplastáis al andar el gusano más diminuto, el trono de Dios se estremece y hacéis que la espada de la justicia tiemble en su vaina. 7. El pájaro canta para los hombres, y éstos vibran al unísono para ayudarle a cantar. 8. La hormiga construye su casa, la abeja su panal, la araña teje su tela y las flores despiden para ellas un aliento lleno de dulces perfumes que les da la fuerza para trabajar. 9. El hombre, los pájaros, las bestias y todas las cosas que se arrastran son deidades hechas de carne; y ¿Cómo se atreve el hombre a matarlas? 10. La crueldad es lo que hace que el mundo ande descaminado. Cuando los hombres aprendan que cuando hacen daño a su ser vivo, se hacen daño a sí mismos, seguramente no matarán ni harán sufrir a las cosas que Dios ha hecho. 11. Un letrado dijo: Por favor, Jesús dinos quién es este Dios del que hablas: ¿Dónde están sus sacerdotes, sus templos y sus altares? 12. Y Jesús dijo: El Dios del que hablo está en todas partes; no puede encerrarse entre paredes ni ser rodeado por límites de ninguna clase. 13. Toda la gente adora al mismo Dios, al único Dios, pero no todos le ven igual 14. Este Dios universal es sabiduría, voluntad y amor. 15. Todos los hombres no ven al Dios Trino. Unos le ven como el Dios de poder; otros como el Dios del pensamiento, y otros del amor. 16. El ideal del hombre es su Dios, y por tanto, a medida que el hombre se despliega, su Dios se va abriendo. El Dios que el hombre tiene hoy o será su Dios de mañana. 17. Las naciones de la tierra ven a Dios desde diferentes punto de vista, por eso no parece ser el mismo para todos. 18. El hombre pone un nombre a la parte de Dios que ve, y para él esa parte es todo el Dios que existe; cada nación ve una parte de Dios y cada una le da un nombre diferente. 19. Vosotros, brahmanes, lo llamáis Parabrahma; en Egipto es Thoth, y en Grecia Suez; su nombre en hebreo es Jehová, pero en todas partes es la Causa sin causa, la Raíz sin raíz de la que han crecido todas las cosas. 20. Cuando los hombres temen a Dios y lo consideran su enemigo, visten a unos hombres con unos atavíos muy raros y les llaman sacerdotes. 21. Y les encargan que aplaquen la ira de Dios con sus oraciones, y que cuando no consigan obtener su ayuda con oraciones, la compren con sacrificios de animales o pájaros. 22. Cuando el hombre ve a Dios como uno con él, como su Padre-Dios, no necesita ningún intermediario, ningún sacerdote que interceda por él 23. El que dirige directamente a Dios y le dice: ¡Padre mío! Y pone su mano en la mano de Dios y todo está bien.
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24. Este es Dios. Cada uno de vosotros sois un sacerdote sólo para vosotros mismos, y Dios no quiere sacrificios de sangre. 25. Dad vuestra vida en servicio a la vida en su totalidad, y Dios estará satisfecho. 26. Cuando Jesús hubo dicho esto, se retiró; la gente estaba sorprendida, pero discutían entre ellos. 27. Unos decían: Está inspirado por el Santo Brahma; otros afirmaban: está loco, y otros a su vez, decían: Esta endemoniado; habla como los demonios. 28. Pero Jesús no permaneció allí. Ente los invitados había un labrador, un alma generosa que buscaba la verdad y amaba las palabras de Jesús, y Jesús se fue con él y se quedó en su casa.
CAPÍTULO XI
LOS SACERDOTES BRAHMÁNICOS ESTÁN ENFURECIDOS POR AS ENSEÑANZAS DE JESÚS Y DECIDEN ECHARLER DE LA INDIA. LAMAS INTERCEDE POR ÉL. LOS SACERDOTES CONTRATAN UN ASESINO PARA MATARLE. LAMAS LE AVISA Y JESÚS HUYE AL NEPAL.
1. Las palabras y obras de Jesús producían inquietud en todo el país. 2. Las gentes del pueblo eran sus amigos, creían en él y le seguían en tropel 3. Los sacerdotes y autoridades tenían miedo de él; hasta su nombre aterrorizaba sus corazones. 4. Jesús predicaba la hermandad de la vida, la justicia de la igualdad de derechos y hablaba de la inutilidad de los sacerdotes y ritos de sacrificios. 5. Hacía tambalear los cimientos mismos sobre los que se asentaba la religión brahmánica; empequeñecía tanto sus ídolos y consideraba sus sacrificios tan llenos de pecado que los altares y rosarios cayeron en el olvido. 6. Los sacerdotes declararon que si este muchacho hebreo permanecía por más tiempo en el país, habría una revolución, el pueblo se levantaría, mataría a los sacerdotes y derrumbaría los templos. 7. Así pues, hicieron una llamada fuera del país y acudieron sacerdotes de todas las provincias. Benarés estaba encendida con el ardor de la fe brahmánica. 8. Lamas, que vivía en el templo de Jaganat y conocía bien el espíritu de Jesús, estaba en medio de los sacerdotes y oyó sus gritos. 9. Y se levantó y dijo: Hermanos sacerdotes, tened cuidado y considerad bien lo que hacéis; las memorias de este día quedarán grabadas.
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10. El mundo está mirando hacia delante; la misma vida del pensamiento brahmánico es puesta hay a prueba. 11. Si somos ciegos y no razonamos; si el prejuicio reina hoy entre nosotros, si recurrimos a la fuerza bruta y manchamos nuestras manos de sangre que puede ser inocente y pura a los ojos de Brahma 12. Su venganza puede caer sobre nosotros, y la roca en la que ahora nos apoyamos puede partirse bajo nuestros pies, de modo que nuestro protegido sacerdocio y todas nuestras leyes y santuarios estarán en decadencia. 13. Pero ellos no le dejaron seguir hablando. Los sacerdotes llenos de ira se precipitaron sobre él, le golpearon y escupieron, le llamaron traidor y lo arrojaron a la calle sangrando. 14. La confusión reinaba por todas partes, los sacerdotes llegaron a ser una multitud; la vista de sangre humana les llevaba a cometer actos malvados y así aumentaba su sed de sangre. 15. Las autoridades, temiendo que se produjese una guerra, buscaron a Jesús y le encontraron enseñando tranquilamente en la plaza del mercado. 16. Le instaron a que se fuese para salvar su vida, pero él se negó a hacerlo. 17. Los sacerdotes buscaban una razón para detenerle, pero él no había cometido ningún crimen. 18. Entonces le acusaron en falso, pero los soldados, cuando venían para llevárselo a la sala del juicio, tuvieron miedo, pues la gente se levantaba en su defensa. 19. Esto desconcertó a los sacerdotes, que decidieron quitarle la vida con cautela. 20. Encontraron a un hombre que era criminal de profesión y lo enviaron de noche para que matara al objeto de su ira. 21. Lamas oyó hablar de su conspiración y sus planes, y envió a un mensajero para avisar a su amigo; y Jesús se apresuró a salir. 22. Por la noche dejó Benarés y viajó hacia el norte apresuradamente; y en todas partes por donde pasaba los labradores, mercaderes y sudras le ayudaban. 23. Y después de muchos días llegó a los Imalayas y se quedó en la ciudad de Kapivastu. Los sacerdotes de Buda le abrieron las puertas de su templo de par en par.
CAPÍTULO X
JESÚS SE ENTERA DE LA MUERTE DE SU PADRE. ESCRIBE UNA CARTA A SU MADRE. LA CARTA LA ENVÍA POR MEDIACIÓN DE UN MERCADER.
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1.
Un día, mientras Jesús estaba junto al Ganges, llevando a cabo su misión, se acercó una caravana que volvía de Occidente.
2.
Y un hombre, acercándose a Jesús, dijo: Venimos de tu tierra y te traemos malas noticias.
3.
Tu padre ya no está en la tierra y tu madre está muy apenada y nadie puede consolarla. S pregunta si vives todavía y anhela verte de nuevo.
4.
Inclinó la cabeza pensativamente y escribió una carta. Este es el resumen de lo que escribió.
5.
Madre mía, la más noble de las mujeres. He sabido por un hombre de mi tierra que mi padre ya no vive y que tú sufres y está desconsolada.
6.
Madre, todo está bien. Está bien para mi padre y está bien para ti.
7.
El ya ha hecho su trabajo en esta tierra, y lo ha hecho noblemente.
8.
En ningún aspecto de la vida se le puede acusar de engaño, deshonestidad o malas intenciones.
9.
En este mundo llevó a cabo muchas tareas difíciles y se ha ido de aquí listo para resolver los problemas del mundo del alma.
10. Nuestro Padre-Dios está allí con él; como estuvo con él aquí, y allí su ángel guía sus pasos para que no se pierda. 11. ¿Por qué lloras? Las lágrimas no pueden acabar con el dolor. El dolor no puede consolar al corazón afligido. 12. El dolor está en el plano de la ociosidad. El alma ocupada no puede nunca sentirse afligida; no tiene tiempo para entristecerse. 13. Cuando venga la pena y quiera amontonarse en el corazón, olvídate de ti misma y sumérgete profundamente en el servicio del amor, y no tendrás pena. 14. Tu servicio es el del amor; todo el mundo está pidiendo amor. 15. Deja que el pasado desaparezca con el pasado; sal de las preocupaciones de las cosas carnales y da tu vida a aquellos que viven. 16. Y si pierdes tu vida sirviendo a la vida, estate segura de que encontrarás el sol de la mañana y el rocío del atardecer en el canto del pájaro, en las flores y en las estrellad de la noche. 17. Y en muy poco tiempo tus problemas en este mundo se habrán resuelto, y cuando tus cuentas estén terminadas, sentirás un placer inigualable entrando en planos más vastos de utilidad y resolviendo problemas mayores del alma.
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18. Esfuérzate en estar contenta y un día vendrá a ti y te traeré regalos más ricos que el oro o las piedras preciosas. 19. Estoy seguro de que Juan cuidará de ti, dándote todo lo que necesites. Yo estoy siempre contigo. Jeshua. 20. Y Jesús envió esta carta por mediación de un mercader que iba a Jerusalén.
CAPÍTULO IX
AJAINÍN, SACERDOTE DE LAHORE, VIENE A BENARÉS A VER A JESÚS, Y MORA EN EL TEMLO. AJAINÍN LE VISITA POR LA NOCHE EN CASA DEL LABRADOR Y ACEPTA SU DOCTRINA.
1. Entre los sacerdotes del templo de Benarés se hallaba un huésped, Ajainín, de Lahore. 2. Ajainín oyó hablar a los mercaderes del niño judío y de sus sabias palabras; se preparó y viajó desde Lahore para ver al niño y oírle hablar. 3. Los sacerdotes brahmánicos no aceptaban la verdad que Jesús enseñaba y estaban llenos de ira por lo que Jesús había dicho en la fiesta de Udraka. 4. Pero nunca habían vista al muchacho y tenían muchos deseos d escucharle; y para ello le invitaron a hospedarse en el templo. 5. Pero Jesús les dijo: La luz existe en abundancia y brilla para todos, si queréis ver la luz, venid a ella. 6. Si deseáis oír el mensaje que el Santo me ha revelado para dar a los hombres, venid a mí. 7. Cuando los sacerdotes supieron lo que había dicho Jesús se enfurecieron. 8. Ajainín no compartía su ira y envió un mensajero con valiosos regalos a Jesús a casa del labrador, y con estos regalos le mandó este mensaje: 9. Te ruego, maestro, que escuches mis palabras. La ley brahmánica prohíbe que un sacerdote entre en cada de un hombre de estado inferior, pero tú puedes venir a nosotros. 10. Y estoy seguro de que estos sacerdotes te escucharán con alegría. Te ruego que vengas y comas hoy con nosotros.
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11. Y Jesús dijo: El Santo considera a todos los hombres por igual; la morada de este labrador es bastante buena para cualquier reunión de hombres. 12. Si no os acercáis por el orgullo de vuestra casta, no sois merecedores de la luz. Mi Padre-Dios no tiene en cuenta las leyes de los hombres. 13. Os devuelvo vuestros regalos. No podéis comprar el conocimiento del Señor con oro o cosas preciosas. 14. Las palabras de Jesús irritaron más a los sacerdotes, que empezaron a tramar un plan para echarlo del país. 15. Ajainín no se unió con ellos en sus planes, salió del templo por la noche y buscó la casa donde moraba Jesús. 16. Y Jesús dijo: No hay noche donde brille el sol; yo no tengo mensajes secretos que revelar; a la luz todos los secretos quedan descubiertos. 17. Ajainín replico: Vine del lejano Lahore para oír hablar de una sabiduría antigua y del reino del Santo que tú predicas. 18. ¿Dónde está ese reino? ¿Quién es su rey y quiénes son sus súbditos? ¿Cuáles son sus leyes? 19. Jesús le respondió: Este reino no esta lejos, pero e hombre no puede verlo con los ojos mortales porque esta dentro de su corazón. 20. No tienes más que buscar a su rey en la tierra, en el mar o en el cielo; Él no está ahí, y sin embargo está en todas partes. Él es el Cristo de Dios. El amor universal. 21. La puerta de este reino no está en lo alto; el que entra por ella debe ir de rodillas. No es ancha y nadie puede atravesarla con cargas carnales. 22. El yo inferior se debe transformar en espíritu; el cuerpo debe limpiarse en las aguas vivas de la pureza. 23. Ajainín preguntó: ¿Puedo ser súbdito de este rey? 24. Y Jesús dijo: Tú mismo eres un rey y puedes atravesar esa puerta y ser un súbdito del Rey de reyes. 25. Pero debes abandonar tus ropas de sacerdote y dejar de servir al Santo por deseo de riquezas; debes dar tu vida y todo lo que tengas al servicio de los hijos y de los hombres. 26. Jesús no dijo nada más. Ajainín se fue, y aunque no podía comprender la verdad de la que Jesús hablaba, vio lo que nunca antes había visto. 27. El nunca había explorado ese reino, pero la semilla de la fe y la hermandad universal habían encontrado un terreno abonado en su corazón.
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28. Y mientras iba a casa parecía como si durmiera, pasando por la noche más oscura, y cuando despertó, había salido el Sol de la Verdad; Ajainín había encontrado al rey. 29. Y Jesús permaneció muchos días enseñando en Benarés.