El saneamiento de la cuenca Lerma-Chapala nudos tecnológicos o baches financieros?

El saneamiento de la cuenca Lerma-Chapala ¿nudos tecnológicos o baches financieros? Francisco Peña El Colegio de San Luis Este trabajo tiene como ob

4 downloads 9 Views 34KB Size

Recommend Stories


La Cuenca del Pacífico: n1ito o realidad
La Cuenca del Pacífico: n1ito o realidad • • • • • • • • • • JULIO A. MILLAN BOJALIL• En el presente s iglo las relaciones internacionales han experi

FORMACION BASICA DE NUDOS
MANUAL DE NUDOS 5 FORMACION BASICA DE NUDOS Básicamente se utilizan dos términos distintos para referirse a diferentes partes de una cuerda. En pri

Nudos de Escalada (I)
Nudos de Escalada (I) CONTENIDO Nudo siete y medio o Romano 25 Descensor Ocho 1 Nudo de tope Descensor Ocho doble cuerda 2 Nudo del fugitivo

NUDOS FACILES 1. DE ACORTAMIENTO
NUDOS FACILES 1. DE ACORTAMIENTO - Margaritas - La "margarita", o mejor dicho, las "margaritas" (ya que son varios los nudos que llevan este nombre),

Story Transcript

El saneamiento de la cuenca Lerma-Chapala ¿nudos tecnológicos o baches financieros?

Francisco Peña El Colegio de San Luis

Este trabajo tiene como objetivo ofrecer una reflexión general sobre la ejecución de los programas federales para sanear la cuenca Lerma-Chapala y los posibles motivos de su rezago. Primero –con base en los datos oficiales- ofrezco un balance global de los resultados que se han obtenido en el tratamiento de las aguas residuales que circulan por las corrientes y cuerpos de agua de la cuenca. Después, para matizar el optimismo que en general despliegan los datos de la CNA en este terreno, me detengo en lo que ha sucedido en Michoacán, lago

de

principalmente

Cuitzeo,

que

en

recibe

relación las

con

aguas

la

cuenca

del

desalojadas

por

Morelia. Por último, a manera de conclusión ofrezco unas hipótesis

sobre

el

porqué

de

los

resultados

modestos

y

desiguales en el saneamiento y lo que pueden significar para la política hídrica federal. Los distintos componentes de la política federal de manejo del agua han recibido un interés diferenciado por parte de los investigadores sociales, a menudo siguiendo el énfasis que marcan las propias agencias gubernamentales. Así, nos hemos detenido más en el caso de la regularización de los aprovechamientos y el registro de derechos de agua, la

modificación

de

tarifas

para

todos

los

usos

y

especialmente organismos

el

doméstico,

para

hacer

o

en

la

efectiva

conformación la

de

pretendida

corresponsabilidad de los usuarios en el manejo del agua. Sin embargo, otros puntos como el de la reutilización de agua en condiciones seguras y la evaluación de los avances en el saneamiento de cuencas, han permanecido en un segundo plano. De ellos, a menudo, no tenemos ni siquiera datos generales actualizados y confiables. Un propósito de este ensayo es formular una guía para investigar el tema del saneamiento en la Cuenca del Lerma.

El optimismo del Consejo de Cuenca. Cuatro años antes de que se constituyera el Consejo de la

Cuenca

Lerma-Chapala, los gobernadores de Guanajuato,

Jalisco, México, Michoacán y Querétaro firmaron un acuerdo de

coordinación

con

el

ejecutivo

federal

para

llevar

adelante un programa para sanear la cuenca. El compromiso fue

construir

residuales

48

plantas

municipales,

de

con

tratamiento el

objetivo

para de

las

aguas

disminuir

la

contaminación de lo que se consideraba como los “tramos críticos”: Toluca-Presa Alzate, Salamanca-Río Turbio y La Piedad-Río Duero. Se calculó una inversión de 292 millones de pesos1 que beneficiaría a la cuenca con una reducción del 50 por ciento en el DBO que circulaba por sus corrientes. En marzo de 1994, el Consejo de Cuenca 2 realizó un balance optimista de los resultados: estaban concluidas 42 plantas y 7 se encontraban en proceso de construcción3. El Consejo Consultivo4 había acordado también una segunda fase 1

Todas las cantidades están dadas en nuevos pesos. Creado el 28 de enero de 1993 3 Una de ellas de la segunda etapa 4 Consejo Consultivo de Evaluación y Seguimiento Ordenamiento y Saneamiento de la Cuenca 2

2

del

Programa

de

para

construir

52

nuevas

plantas,

con

un

monto

de

722

millones de pesos, más del doble de inversión que en la primera etapa. Informó también que tenía en sus manos 38 proyectos

ejecutivos

terminados

para

continuar

con

el

programa. En la primera fase el objetivo fue tratar 3,700 litros por segundo (lps) y en la segunda se previó limpiar 10,950 lps.

De

esta

manera,

con

el

programa

concluido,

se

pretendía remover el 80 por ciento de la contaminación de la cuenca. La expectativa era que al terminar 1994 estarían en operación 48 plantas de tratamiento en la cuenca: 3 en Guanajuato, 5 en Michoacán, 2 en Querétaro, 16 en Jalisco, 20 en el Estado de México, más dos plantas construidas por la industria, PEMEX y la Comisión Federal de Electricidad, ambas en Salamanca. La proyección para el año 2000 era la existencia de cuando

menos

98

plantas

de

tratamiento

para

las

aguas

municipales, con el tratamiento de 13,528 lps. Un recuento somero de los resultados que tenemos en el 2002, convoca al escepticismo. No solo por lo que vemos en las corrientes de agua, o por los testimonios que ofrecen los

agricultores, 5

oficiales .

sino

Guanajuato,

también el

por

estado

los

que

propios

tiene

la

datos mayor

proporción de su territorio en la cue nca, debería contar ahora con 15 plantas en la cuenca Lerma y estar tratando 5690 lps. Los resultados indican que ni siquiera contando la capacidad instalada de todas sus plantas de tratamiento construidas, alcanza esa cifra. Una de las plantas que fue

5

ver el “Inventario nacional residuales municipales” .

de

3

plantas

de

tratamiento

de

aguas

terminada en la primera etapa, la de Abasolo, con 70 lps de capacidad instalada, sigue sin operar. Por otra parte, la mayoría de las instalaciones que fueron planeadas para la segunda etapa, se construyeron con una

menor

capacidad

por

razones

financieras,

lo

que

significa que pronto estarán saturadas por los efluentes urbanos. La planta de Celaya, por ejemplo, se encuentra trabajando al máximo de su capacidad instalada, mientras la de Salamanca opera con 245 lps y su capacidad es de 255 lps. Para el caso de las plantas de tratamiento de aguas municipales, una diferencia muy grande entre la capacidad instalada

y

el

gasto

de

operación

puede

significar

que

existe un rezago en las obras de recolección y conducción del líquido a la planta, diríamos en rigor que están a medio

construir.

pequeña

entre

operación,

Por

la

el

contrario,

capacidad

significa

que

muy

una

instalada pronto

diferencia y

habrá

el

muy

gasto

que

de

realizar

obras de ampliación para dar servicio al crecimiento de la demanda. El

Estado

desempeño poblaciones

en

de el

México,

parece

cumplimiento

pequeñas

que

haber

de

descargan

lo

tenido

un

comprometido.

sobre

el

río

mejor Las Lerma

cuentan con lagunas de estabilización (Almoloya, Atizapán, Atlacomulco y Mexicaltzingo, entre otros), mientras que los efluentes de Toluca, de grandes volúmenes y en general más contaminados, pasan por alguna de las dos grandes plantas que incluyen el proceso de lodos activados. Una parte de la industria cuenta con una planta de tratamiento exclusiva para sus desechos. Jalisco construyó varias plantas para limpiar las aguas que descargan directamente sobre el lago de Chapala, como las

de

El

Chante,

San

Juan 4

Cosala,

Chapala,

San

Juan

Tecomatlán,

Poncitlán

y

Tizapan

El

Alto,

momento no ha resuelto el sistema de

pero

hasta

saneamiento

de

el la

capital, luego de la aventura del crédito japonés6 . Sin embargo, las diferencias entre una entidad y otra pueden

ser

menores

si

se

toma

en

cuenta

la

operación

efectiva de esa infraestructura. Para explorar ese terreno, quiero detenerme en el caso de Michoacán.

El caso de Michoacán En Michoacán, el programa de plantas de tratamiento ha ofrecido resultados bastante limitados, aunque es cierto que las construcciones más numerosas se encuentran en la cuenca Lerma-Chapala. En la actualidad, en la cuenca Lerma se localizan 11 de las 16 plantas de tratamiento de la entidad:

una

Briseñas, Sahuayo,

en

cada

Jiquilpan, Venustiano

uno

de

los

siguientes

Sixto-Verduzco, Carranza,

Zacapu

La y

municipios:

Piedad, Zamora

Quiroga, y

dos

en

Pátzcuaro. De las cinco plantas construidas en la primera etapa, tres

no

están

funcionando:

La

Piedad,

Sahuayo

y

Pastor

Ortíz. La Piedad fue el orgullo michoacano de la primera etapa; el énfasis especial que se puso en ella obedeció a la visibilidad física y social de los desechos orgánicos que la producción pecuaria de la zona aportaba al río. Su diseño es de dos módulos con lagunas anaerobias y lagunas facultativas, con una capacidad instalada para limpiar 200 lps. Para efectuar el proceso de depuración, se requiere de un equipo de bombeo que permite desplazar el agua a través de la diferencia de altitudes entre las partes del sistema.

6

ver Boehm y Durán, 1998

5

Ese equipo de bombeo ha fallado frecuentemente y ahora la planta se encuentra fuera de operación. En el caso de las instalaciones de Sahuayo, se trata de una

planta

de

lagunas

de

estabilización

diseñada

para

tratar 180 lps, que se concluyó en 1994 y que actualmente está sin operar. La tercera planta que está cerrada es la de Pastor Ortiz, en el municipio de José Sixto Verduzco. En los dos últimos casos, la falta de operación significa que, nada más en esos lugares, unas 300 hectáreas de cultivos siguen utilizando aguas sin tratamiento para riego. Pero

quizá

efectivos

en

el

el

ejemplo

más

saneamiento

claro

de

de

la

los

cuenca,

rezagos sea

la

postergación reiterada de la construcción de la planta de tratamiento de Morelia, que también apareció programada en la segunda fase del plan que hemos venido comentando. La capital estatal de Michoacán produce actualmente 1600 lps de aguas residuales, que desaloja sin ningún tipo de tratamiento sobre los terrenos de labor de los valles de Morelia -Queréndaro y que tienen como destino final el lago de

Cuitzeo.

localidades

Si más

contamos

la

población

de

las

otras

pequeñas,

al

lago

escurren

las

aguas

residuales que desecha un millón de personas, la cuarta parte de los habitantes del estado. Las aguas residuales de Morelia

llevan

revueltos

efluentes

domésticos

e

desalojadas

por

representan

una

industriales. Según Morelia fuente tierras

diversos

son

“inadecuadas

importante bajas

residuales

estudios,

de

sobre

las

para

aguas

riego”

de

contaminación

la

cuenca.

los

campos

El de

y

de

la

desalojo cultivo

es

laguna de

las

parte

y

las

aguas de

la

historia del manejo de los desechos de Morelia, que en ese

6

sentido es , en pequeña escala, una reproducción de lo que sucedió en toda la cuenca Lerma-Chapala. No es aquí el lugar para relatar el proceso mediante el cual

se

fueron

contaminando

las

aguas

de

los

ríos

que

desembocan en la laguna, lo cierto es que la ciudad se apropió de las corrientes de agua limpia que surgían de los manantiales en las partes altas de la cuenca, y de las que más tarde se almacenaron en la presa de Cointzio y dejó para la agricultura regional el uso de las aguas residuales que desechaba (Avila,

1993; Peña, 2000). Quiero referirme

nada más a un problema técnico-financiero que se ventiló en los años treinta, cuando se amplió y modernizó el sistema de

saneamiento

de

la

ciudad

y

que

a

mi

juicio

influye

actualmente en la magnitud del problema del saneamiento. En el proceso de construir una nueva red de desalojo de las aguas residuales para alcanzar a la ciudad que había crecido,

uno

de

los

temas

en

litigio

fue

si

debía

construirse un sistema para el desalojo de los desechos domésticos

separado

del

desagüe

pluvial,

o

un

sistema

combinado. Debido a que el desagüe pluvial existente era muy

deficiente

y

las

autoridades

municipales

tenían

el

imperativo de ahorrar dinero, pues no contaban más que con los

préstamos

del

gobierno

federal,

finalmente

las

autoridades federales convinieron en construir un sistema combinado, Consejo

pese

de

purificaran Grande

de

a

que

por

Salubridad las

la

aguas,

ciudad.

la

del antes

La

legislación estado de

decisión

exigiría

echarlas se

existente,

tomó

sobre para

el

que

se

el

río

ahorrar

recursos, calculando que la exigencia de tratamiento de las aguas

no

se

haría

efectiva.

Esta

decisión

de

construir

saneamientos combinados, en el curso de los años significó aumentar los volúmenes de agua que debe ser tratada, una 7

buena parte de ella arrastra desechos domésticos revueltos con desechos industriales. Actualmente, los agricultores que reciben esas aguas, están seguros que Morelia y algunas industrias tienen la principal

responsabilidad

aguas. Al inicio de los papelera

CEPAMISA

que

por

la

contaminación

de

las

años 90, señalaron a la empresa utiliza

450

litros

de

agua

por

segundo para sus procesos productivos y que hasta 1991 no trataba

sus

desechos

industriales.

De

tal

forma

que

el

“saneamiento” de esa parte de la cuenca no sólo ha sido una demanda

de

campesinos

ambientalistas, que

habitan

sino

las

también

áreas

de

donde

los

propios

escurren

los

desechos.

Las plantas de tratamiento en Morelia Cuando la Secretaría de Salud y la Comisión Nacional del Agua tomaron medidas para hacer efectiva la prohibición de

no

usar

beligerancia

aguas de

los

residuales

en

agricultores

algunos del

cultivos,

distrito

de

la

riego

aumentó. Se negaban a pagar los costos de una situación cuyo origen estaba en la contaminación del agua por otros actores. Las evidencias de la responsabilidad industrial, principalmente de CEPAMISA y urbana por los desechos de la ciudad de Morelia, estaban a la vista en el propio aspecto de las aguas que salían de la ciudad. El debate sobre la indiferencia gubernamental y privada para tratar las aguas, ganó importancia. Aunque

desde

los

años

treinta

se

reconocía,

declarativamente, que las aguas de desecho de la ciudad deberían ser tratadas antes de ser vertidas sobre el río Grande,

por

décadas

no

se

hizo

nada,

ni

siquiera

un

proyecto. En 1984 se empezó la construcción de la primera 8

planta de tratamiento de las aguas municipales que tendría Morelia,

con

tecnología

Miljoforbatring.

Fue

un

sueca

proyecto

de

la

frustrado:

empresa

la

falta

de

dinero dejó la edificación al 30 por ciento de lo planeado. Hasta

hoy,

la

edificación

inconclusa

es

la

evidencia

material de una carencia fundamental en la infraestructura urbana, que explica el uso de aguas residuales sin tratar en la agricultura de toda la cuenca de Cuitzeo. En

1987

se

intentó

recupe rar

el

proyecto,

pero

la

Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología decidió que la planta

de

patente

sueca

no

era

la

indicada

y

formuló

modificaciones que nunca se llevaron adelante. En 1991 y al calor del interés gubernamental que ya hemos mencionado, la Comisión Nacional del Agua volvió a revisar el tema; para entonces, el gasto máximo originalmente proyectado, estaba a

punto

de

ser

alcanzado.

La

planta

de

1984

se

había

diseñado para 1500 litros por segundo y en 1991 la ciudad desechaba 1331 litros por segundo de aguas residuales. A

la

fecha

han

sido

consultadas

varias

empresas

(BIMPECI S.A. de C.V., SIHASA y otras), que presentaron propuestas de nuevas plantas, modificando sustancialmente la

obra

original

o

definitivamente

abandonándola.

Sin

embargo, toda vía no ha sido aprobado el nuevo proyecto y menos se ha empezado a construir. En

cuanto

industriales, operando

a

las

en

la

(cuadro

2)

industrial

de

plantas

actualidad y

se

Morelia

de

tratamiento

existen

espera

construya

que

de

aguas

cuatro

que

están

pronto

la

otra.

En

ciudad

1991,

las

movilizaciones de los agricultores del distrito de riego se dirigieron CEPAMISA

especialmente

debido

a

la

contra

presencia

la de

empresa

abundantes

papelera restos

de

celulosa en las aguas que llegaban a la laguna de Cuitzeo, 9

que acarrearon problemas a las parcelas cultivadas y a la pesca.

Luego

de

las

protestas,

la

empresa

finalmente

construyó y puso en operación una planta de tratamiento de lagunas aireadas, que aunque disminuyó la materia orgánica disuelta, a juicio de algunos especialistas no resolvió la contaminación

por

sustancias

químicas

peligrosas

que

se

usan en los procesos de fabricación, en especial residuos organoclorados que han sido señalados como cancerígenos. Pocos meses después del conflicto más agudo, la empr esa presentó un estudio sobre la calidad del agua que vertía sobre el río grande. Según ese trabajo, las descargas de la empresa no representaban ningún riesgo para las parcelas. Según opinión de algunos funcionarios del distrito de riego y de investigadores de la universidad estatal, se trata de resultados poco confiables, debido a que no cubren largos periodos de tiempo, ni buscan rastros de las sustancias químicas mencionadas, sino que se restringen a la medición de

la

remoción

de

los

restos

orgánicos.

Para

los

agricultores, por su parte, el estudio es poco confiable porque

fue

pagado

por

la

propia

empresa,

quien

podría

manipularlo.

A manera de conclusión: ¿Soluciones técnicas o financieras? Este breve recuento nos permite suponer que los planes de saneamiento de la cuenca tienen una marcha lenta y muy desigual. Son más optimistas los planes y los informes que los

resultados,

si

consideramos

que

para

el

caso

que

comentamos, planes llevan ejecutándose 12 años. Varios puntos llaman la atención: 1.

El rezago para ejecutar las obras planeadas, que

adicionalmente

insuficientes

para 10

se

van

atender

revelando una

demanda

como que

crece.

Cuando

se

concluye

una

planta,

el

volumen de agua por tratar ha crecido tanto, que de inmediato es necesario pensar en una ampliac ión o en una nueva planta, porque el gasto

de

operación

alcanza

a

la

capacidad

instalada. Esto sucede con una velocidad poco frecuente,

y

puede

planeación

estar

está

expresando

fallando

que

o

la que

premeditadamente se están construyendo plantas de mucho menor capacidad a la necesaria. Una hipótesis para explicar la lentitud con que se asumió

la

segunda

fase

del

plan

y

para

la

reducción deliberada al mínimo de la capacidad de

las

instalaciones,

es

la

carencia

de

recursos para invertir. Hay que considerar que los

722

millones

de

nuevos

pesos

planeados

para la segunda etapa en 1993, significaban entonces

el

36

por

ciento

del

presupuesto

anual de la CNA (2,610 millones de pesos) y tres

veces

irrigación

lo en

que

se

invirtió

ese

año

(263

en

grande

millones

de

pesos)7 .

2.

Pero no solo se construye lentamente y por debajo del crecimiento previsto de la demanda, también existe el problema de que las plantas construidas

no

entran

en

operación,

tienen

interrupciones frecuentes en su funcionamiento o definitivamente dejan de operar. ¿Cuáles son los motivos?, ¿Se ha optado por las mejores

7

Aboites, 2002

11

soluciones técnicas? O han sido condicionadas por la carencia de recursos y el origen del financiamiento,

más

allá

eficiencia de operación un

tema

muy

preguntarnos

de

los

que

la

recomienda. Este es

complicado.

si

lo

Pero

niveles

de

conviene eficiencia

operativa de las plantas en la cuenca pueden ser

consideradas

dentro

de

límites

promedio

para otros países. En una conversación con el Ing. Cruickshank, me afirmó que las plantas del

lago

periodos

de

Texcoco

nunca

de

inactividad

han tan

pasado

por

prolongados,

porque escogieron bien el diseño y capacitaron al personal que las opera. ¿Cuáles son los motivos

de

ineficiencia

lo

que

a

simple

operativa

de

vista las

parece plantas

concluidas?. Sugiero explorar una combinación de

la

hipótesis

financiera

con

la

decisión

técnica. El caso japonés en Guadalajara puede ser solamente el más visible de una cadena de intermediaciones

que

se

han

construido

alrededor de este proceso.

3.

¿Puede conseguirse el saneamiento de la cuenca sin una inversión pública fuerte, sostenida y dirigida para obtener los mejores rendimientos de eficiencia operativa?. Parece que esa es la apuesta

federal,

pero

podría

ser

que

los

resultados estén señalando que justamente el saneamiento de las cuencas puede ser el gran tema del manejo hidráulico que obligue a un tratamiento distinto. Es posible que al igual 12

que las grandes obras de irrigación y energía, el saneamiento de las cuencas sea el tema que hoy

demanda

justamente

la

su

inversión

desempeño

pública

está

y

reflejando

que esa

carencia. Aboites (2002) ha propuesto que el ambientalismo gubernamental no es más que una forma

de

cubrir

responsabilidades

y

el en

abandono

particular

de

de la

inversión pública en el manejo del agua. Es posible que el tema del saneamiento permita evaluar

de

qué

gubernamental

tipo

con

la

es

el

compromiso

conservación

de

las

cuencas, si consideramos que de alguna manera podemos

considerar

a

las

plantas

de

tratamiento como las grandes obras de manejo hídrico

que

están

faltando

y

que

por

su

magnitud (no tanto física, sino financiera) y su

complejidad

técnica

y

social,

requieren

tanto de una participación social amplia, como de una inversión pública sólida.

13

Bibliografía: Aboites, Luis, 2002, “De bastión a amenaza: el agua y las políticas públicas en México 1947-2001”, en prensa. Acuerdo de coordinación entre el ejecutivo federal y los ejecutivos de los estados de Guanajuato, Jlisco, México, Michoacán y Querétaro, Guanajuato, Gto. 28 de enero de 1993 Aguilera Ríos, Silvia y Aurora Gil Arroyo, 1996, “Caracterización fisicoquímica del agua del río Grande de Morelia”, en Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo y LXVII Legislatura del estado de Michoacán, 1996,1er. Foro de análisis de la problemática ambiental del estado de Michoacán. Cuenca del lago de Cuitzeo , Morelia Avila, Patricia, 1991, “Estudio preliminar sobre el deterioro socioambiental en la ciudad de Morelia: el caso del agua”, en Gustavo López (coordinador), Urbanización y desarrollo en Michoacán, El Colegio de Michoacán, Gobierno del estado de Michoacán, Morelia CNA, Gerencia de Michoacán, 2000, Subgerencia de operación, Morelia

Estadísticas

básicas,

CNA, 2002, “Inventario Nacional de Plantas Potabilizadoras y de Tratamiento de Aguas Residuales”, www.cna.gob.mx CRISOBA, 1991, “Impacto que causan las aguas del río Grande de Morelia en el Distrito de Riego del valle MoreliaQueréndaro”, mecanoescrito, Morelia Fuerte Alvarez, Nuri C, 2000, “Continuidades y cambios en los usos agrícolas del agu a en San Bartolo-Alvaro Obregón, 1888-1946”, tesis de licenciatura en historia, Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, Morelia Lucio Martínez, Alejandra, 1999, “El abasto de agua y saneamiento de la ciudad de Morelia en los años treinta”, tesis de licenciatura en historia, Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, Morelia Peña, Francisco, 2000 “El agua que no se fue: La disputa por la desecación del lago de Cuitzeo”, ponencia al 1er. Encuentro de Investigadores del Agua en la Cuenca LermaChapala -Santiago. Uso y manejo del agua. Pasado y presente. Chapala, Jalisco, octubre

14

Secretaría de Agricultura y Recursos Hidráulicos, 1987, “Estudio de calidad del agua del río Grande de Morelia”, mecanoescrito. Trujillo, Raúl, 1996, “Panorama general del manejo y problemática del agua en la cuenca de Cuitzeo”, en Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo y LXVII Legislatura del estado de Michoacán, 1996,1er. Foro de análisis de la problemática ambiental del estado de Michoacán. Cuenca del lago de Cuitzeo , Morelia Vargas Uribe, Guillermo, 1991, “Diagnosis preliminar para el estudio de la urbanización en las ciudades de Michoacán”, en Gustavo López Castro (coord.), Urbanización y Desarrollo en Michoacán , Gobierno del estado de Michoacán, El Colegio de Michoacán, Morelia

15

Get in touch

Social

© Copyright 2013 - 2024 MYDOKUMENT.COM - All rights reserved.