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TEMA 6. LOS GRANDES IMPERIOS ANTES DE LA GUERRA MUNDIAL 1. EUROPA 1.1 Inglaterra La segunda mitad del s.XIX en Gran Bretaña se conoce como Era Victoriana por presidir la figura de la reina Victoria. Los rasgos principales de este periodo fueron: • Prosperidad económica. Fue la creadora de un inmenso impero que agrupaba países de distintos continentes. Fue dueña de los océanos y del comercio y pionera de la industrialización, además de se la principal exportadora de productos industriales y tecnología. Por todo esto, era gran defensora del liberalismo económico. Sin embargo, a partir de 1890, la competencia de EEUU y Alemania hacen que la política del país se vuelva más proteccionista. • Gran estabilidad política que se basaba en el parlamentarismo y en un fuerte bipartidismo. El Parlamento bicameral representaba a los ciudadanos y controlaba al gobierno. La reina simbolizaba la unidad nacional y religiosa. La opinión pública participaba en la Cámara de los Comunes a través de elecciones periódicas de sus representantes. En el gobierno se alternaban dos partidos: el conservador (Tories) y el liberal (Whigs). Ambos partidos aceptaban reformas y la democratización progresiva del sistema y fueron convirtiéndose lentamente en partidos de masas. • Reformas electorales y sociales. De todas las reformas electorales, la más importante fue la de 1867, que amplió el derecho a voto a todos los cabezas de familia que pagaban un alquiler. Esto daría el derecho a decidir a los habitantes de las ciudades y a los obreros cualificados. En 1911 se recortaron los poderes a la Cámara de los Lores y se eliminó su derecho a veto. A todas estas reformas políticas se unieron reformas sociales centradas en la educación, la sanidad, la justicia y las pensiones, y encaminadas a contentar a los obreros y a las clases medias. La clase obrera presionaría para conseguir estas reformas a través de sus sindicatos y, desde 1906, a través del partido laborista. • Un nacionalismo insatisfecho. Pese a su capacidad para solucionar problemas políticos, el Reino Unido no pudo solucionar el problema de Irlanda. Irlanda carecía de autonomía y durante este periodo el Parlamento británico se negó a concedérsela y lo tuvo que hacer en 1914 cuando la Primera Guerra Mundial era ya un hecho. Tanto retraso motivó el crecimiento de un movimiento republicano radical y nacionalista, los fenianos, que buscaba la independencia de Irlanda a través de la lucha armada y combatía a los ingleses con terrorismo y sabotaje. 1.2 Francia. Del II Imperio a la III República. Durante el s.XIX Francia también caminaría hacia la democracia de masas, pero su desarrollo político fue más difícil e inestable que el británico. La sociedad francesa restauró el Imperio Napoleónico y finalmente pareció encontrar cierta estabilidad con la III República. El II Imperio • En ultramar dio los primeros pasos de una política imperialista que le llevaría a África, Asia y México. • Fue una época de crecimiento económico. Francia se hizo capitalista, la burguesía se convirtió en la clase social dominante y París se transformó y se convirtió en la capital de Europa y en el prototipo de ciudad moderna. • Napoleón III intentó compaginar un gobierno autoritario y personalista con instituciones democráticas de tal manera que se mantuvo un Congreso elegido por sufragio universal masculino pero con un papel muy limitado y neutralizado por un Senado dócil y no electivo. Asimismo, 1
Napoleón III recurrió al voto personal y fue precursor de la manipulación de la opinión pública a través de la propaganda. La III República Tras la derrota ante Prusia y la abdicación de Napoleón III estalló en París una revolución impulsada por los republicanos radicales y los obreros de la ciudad, que se agruparon en lo que es conocido como Comuna de París. Este gobierno apenas duró tres meses. Finalmente, el resto de Francia eligió por sufragio universal masculino una Asamblea Nacional en Versalles que sometió a los partidarios de la Comuna a una represión terrible. La III República nació bajo signo conservador de la represión. Esta forma de gobierno terminó siendo la más duradera de la Francia contemporánea y los motivos de su éxito fueron: • Un Parlamento elegido por sufragio universal masculino con un poder mucho mayor que el del ejecutivo. Se apoyó en los acomodados agricultores de provincia y en una clase media urbana en expansión. Esto permitió que un régimen que comenzó siendo conservador, se fuese deslizando hacia posiciones políticas de centro y de izquierda reformista. • La supremacía sobre el Parlamento del poder ejecutivo provocó una inestabilidad y distintos gobiernos que duraron poco tiempo y se vieron sacudidos por escándalos. El más conocido fue el de Affaire de Dreyfus a finales del s.XIX. • Se dio un crecimiento económico modesto y una política imperialista muy activa. Además surgió un nacionalismo exagerado y revanchista frente a Alemania. • Destacaron los líderes de partidos políticos consolidados como Jules Ferrys, Jean Jaures y Georges Clemencau. • Francia entró en el camino de la reforma social y de la intervención del Estado. La educación se hizo pública, gratuita y laica, se produjo la separación entre Iglesia y Estado, la administración se profesionalizó y apareció un sindicalismo revolucionario. 1.3 Italia El sistema político piamontés fue el que se extendió al nuevo reino que tenía una constitución, una administración y un rey común. La política fue centralista y nacionalista y se encontró con graves problemas: • La integración del sur atrasada. • La integración de los católicos en la vida pública, que se vio dificultada por la desaparición de los Estados Pontificios y por la condena papal al nuevo reino. • El desarrollo de una política imperialista que resultó bastante frustrante en África. • Un movimiento obrero más cercano al anarquismo o al socialismo revolucionario que a la colaboración con las instituciones. 1.4 Alemania Tras finalizar la guerra con Francia el rey de Prusia era proclamado kaiser y nacía así el nuevo imperio alemán, que tuvo que enfrentarse a varios problemas: • Su forma. Los antiguos estados siguieron conservando una gran autonomía y Bismarck quiso mantener la hegemonía de Prusia dentro del imperio. Por esto, el nuevo estado mantuvo una estructura federal en la que Prusia llevó mayor peso. • Para satisfacer a los liberales se creó un Parlamento (Reichtag) elegido mediante sufragio universal masculino. Sin embargo, este parlamento era tan solo una cámara consultiva, pues tanto el gobierno como el canciller eran elegidos por el emperador. • Fuertes contrastes culturales y religiosos. No toda la población del nuevo estado era de lengua alemana y existían más de 10 millones de germano hablantes fuera del imperio. Además se dieron 2
contrastes religiosos entre la mayoría protestante y una minoría católica. • Grandes contrastes sociales. La industrialización en Alemania tuvo un rápido desarrollo y esto incrementó los contrastes entre las zonas industrializadas y las zonas agrarias. La industrialización promovió también la aparición de un movimiento obrero muy poderoso. Por esto, Bismarck intentó combinar una política de represión directa con una legislación social avanzada en materia de pensiones y seguridad social. • Se produce un cambio de una política exterior defensiva a un militarismo e imperialismo crecientes. Se buscaron alianzas con Rusia, el Imperio Austro−Húngaro, Italia y Gran Bretaña para mantener aislada a Francia. Todos estos acuerdos se conocen como sistemas bismarckianos. De esta forma Alemania embarcó en el imperialismo y desarrolló una fuerte política naval y armamentística, lo que provocó el recelo de Gran Bretaña y Rusia. 1.5 Imperio Austro−Húngaro Los problemas de este imperio habían ido aumentando desde 1866 hasta amenazar su supervivencia. El más importante fue el de las nacionalidades que rivalizaban entre sí, razón por la cual el emperador Francisco José I se vio obligado a conceder reformas y liberalizar su régimen. 1.6 Imperio ruso Rusia mantuvo hasta principios del s.XX un régimen absolutista donde no existió ningún tipo de órgano representativo. Finalmente, se centró en una carrera imperialista que le llevaría a querer controlar algunas zonas de Asia y gran parte de los Balcanes. 1.7 Imperio turco Durante el s.XIX fue un imperio extremadamente débil y muy codiciado por los Habsburgo y lo zares, ambos estaban interesados en los estrechos del Bósforo y los Dardanelos. Además de esto, los Balcanes eran un complejo mosaico de etnias que rivalizaban entre sí y cuyos enfrentamientos dieron lugar a numerosos conflictos. La desarticulación de este imperio estuvo marcada por los siguientes conflictos: • La independencia de Grecia. • La Guerra de Crimen • La Guerra Ruso−Turca, provocada por la rebelión de algunos pueblos eslavos apoyados por Rusia. 2. LAS GRANDES POTENCIAS EXTRAEUROPEAS 2.1 EEUU La historia de este país durante el s.XIX ofrece las siguientes características: • La expansión hacia el oeste. Esta expansión se apoyó en un enorme flujo de inmigrantes europeos. Se recurrió al exterminio de la población indígena, a la compra de territorios y a la guerra contra México en los años 40. • La oposición norte−sur y la guerra civil. La progresiva industrialización se concentró en los estados del norte, mientras que los del sur tenían una economía basada en la agricultura de plantación cultivada por esclavos. Este desequilibrio acabó desembocando en una guerra civil, pues los estados norteños realizaron campañas antiesclavistas o abolicionistas contra los estados del sur. • La reconstrucción social y política. La victoria del norte supuso el triunfo del capitalismo en EEUU y la ruina económica del sur, que conservó su carácter agrario y siguió discriminando a los negros. • El imperialismo en ultramar. A partir de 1890 se contempla un expansionismo estadounidense en ultramar respaldado por una potente flota. De esta manera, EEUU se extiende por el Pacífico y el 3
Caribe. El punto importante de la política estadounidense en este sentido será la reinterpretación de la Doctrina Monroe.
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