INTENCIÓN DE LA IGLESIA PARA EL MES DE AGOSTO

INTENCIÓN DE LA IGLESIA PARA EL MES DE AGOSTO Para que el testimonio de servicio a los pobres de nuestros santos nos vuelva más sensibles y cercanos a

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Número suelto € 1,00. Número atrasado € 2,00 L’OSSERVATORE ROMANO EDICIÓN SEMANAL Unicuique suum Año XLIII, número 35 (2.226) EN LENGUA ESPAÑOLA Non

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INTENCIÓN DE LA IGLESIA PARA EL MES DE AGOSTO Para que el testimonio de servicio a los pobres de nuestros santos nos vuelva más sensibles y cercanos a los que sufren y están excluidos

LUNES 03 SALUDO: En este primer lunes del mes de Agosto, les invito a comenzar el momento de oración con una frase que quizás muchos de ustedes han oído ¡Contento Señor, contento! O, ¿Qué haría Cristo en mi lugar? Dichos por nuestro Santo chileno, San Alberto Hurtado, un hombre de Dios que al igual que todos, se sintió atraído por proteger y cuidar al Cristo que vive en la calle, en los enfermos, los más desvalidos. Un sacerdote que encarnó el valor de la solidaridad desde el amor gratuito y despojado. Este mes completo está dedicado a celebrar la solidaridad y en este 2015 bajo el lema: “Reparando confianzas, construimos Chile, porque se hace urgente un diálogo social, transparente y desde la vida real de las personas. Las confianzas se reconstruyen cuando nos preguntamos con humildad por la rectitud de nuestra vida y nuestro verdadero amor por el otro”. 1 En un minuto de silencio pensemos en nuestro país o entorno más cercano y pensemos de qué manera podemos colaborar en construir espacios de confianzas, de paz, armonía. El Evangelio es la voz de Jesús que viene como un dulce susurro a entregarnos las pistas que nos ayudará a descubrir el camino del amor pleno. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Evangelio según San Mateo 14, 13-21 Al conocer esa noticia, Jesús se alejó discretamente de allí en una barca y fue a un lugar despoblado. Pero la gente lo supo y en seguida lo siguieron por tierra desde sus pueblos. Al desembarcar Jesús y encontrarse con tan gran gentío, sintió compasión de ellos y sanó a sus enfermos. Cuando ya caía la tarde, sus discípulos se le acercaron, diciendo: «Estamos en un lugar despoblado y ya ha pasado la hora. Despide a esta gente para que se vayan a las aldeas y se compren algo de comer.» Pero Jesús les dijo: «No tienen por qué irse; denles ustedes de comer.» Ellos respondieron: «Aquí sólo tenemos cinco panes y dos pescados». Jesús les dijo: «Tráiganmelos para acá.» Y mandó a la gente que se sentara en el pasto. Tomó los cinco panes y los dos pescados, levantó los ojos al cielo, pronunció la bendición, partió los panes y los entregó a los discípulos. Y los discípulos los daban a la gente. Todos comieron y se saciaron, y se recogieron los pedazos que sobraron: ¡doce canastos llenos! Los que habían comido eran unos cinco mil hombres, sin contar mujeres y niños. Palabra del Señor

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Mes de la Solidaridad y 10 años de Canonización. Comisión San Alberto Hurtado 2015.

REFLEXIÓN En el Evangelio de hoy, nos encontramos con que Jesús buscando un lugar tranquilo junto a sus amigos, seguramente para descansar, es sorprendido por una gran multitud de gente que lo venían siguiendo por tierra desde sus pueblos. Al verlos, “sintió compasión de ellos y sanó a sus enfermos”. Cuando ya caía la tarde, sus discípulos se le acercaron, diciendo: «Estamos en un lugar despoblado y ya ha pasado la hora. Despide a esta gente para que se vayan a las aldeas y se compren algo de comer.» Como quien dice, cuando los discípulos vieron que llegaba la hora de comer y que esa multitud hambrienta podría arruinar su paseo, le pidieron al Señor despachara a la gente. Lo que tenemos nosotros no alcanza para tanta gente. Pero Jesús, desconcertando a sus seguidores, como lo hizo más de una vez, les dice: “–Denles ustedes de comer. Ellos contestaron: No tenemos más que cinco panes y dos pescados, a menos que vayamos a comprar comida para toda esta gente. Pues eran unos cinco mil hombres”. Jesús quería que sus discípulos compartieran lo poco que tenían con aquella multitud. Estaba seguro de que cinco panes y dos peces no eran suficientes para alimentar a tantos. Sin embargo, cuando se comparte lo que se tiene, se produce el milagro de la multiplicación. ¿Qué podríamos rescatar nosotros de este mensaje de Jesús? En nuestro día a día ¿Estamos colaborando con la multiplicación de gestos de amor para los demás? ¿Compartimos de lo poco que tenemos? Un hermoso de gesto para multiplicar el amor recibido, es orar por los que sufren de distintos males y carencias. Por los amigos, los excluidos, nuestra familia… Crezcamos en este gesto y ofrezcamos la vida de quienes pienso en este día. OREMOS Padre Nuestro…

MARTES 04 SALUDO: La oración es un diálogo sencillo entre Jesús y cada uno de nosotros. Un diálogo de amor fraterno, porque primero lo reconocemos como amigo, maestro, Dios., le escuchamos en su Evangelio para conocerlo mejor y descubrir lo que espera de nosotros. Y luego le compartimos nuestros secretos, nos mostramos tal cual somos y también le confiamos a quienes amamos y sabemos que necesitan de su ayuda. Unidos en este deseo de dialogar con Jesús, invoquemos su presencia. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Evangelio según San Mateo 14, 22-36 Inmediatamente después Jesús obligó a sus discípulos a que se embarcaran; debían llegar antes que él a la otra orilla, mientras él despedía a la gente. Jesús, pues, despidió a la gente, y luego subió al cerro para orar a solas. Cayó la noche, y él seguía allí solo. La barca en tanto estaba ya muy lejos de tierra y las olas la golpeaban duramente, pues soplaba el viento en contra. Antes del amanecer, Jesús vino hacia ellos caminando sobre el mar. Al verlo caminando sobre el mar, se asustaron y exclamaron: «¡Es un fantasma!» Y por el miedo se pusieron a gritar. En seguida Jesús les dijo: «Ánimo, no teman, que soy yo.» Pedro contestó: «Señor, si eres tú, manda que yo vaya a ti caminando sobre el agua.» Jesús le dijo: «Ven.» Pedro bajó de la barca y empezó a caminar sobre las aguas en dirección a Jesús. Pero el viento seguía muy fuerte, tuvo miedo y comenzó a hundirse. Entonces gritó: « ¡Señor, sálvame!» Al instante Jesús extendió la mano y lo agarró, diciendo: «Hombre de poca fe, ¿por qué has vacilado?» Subieron a la barca y cesó el viento, y los que estaban en la barca se postraron ante él, diciendo: « ¡Verdaderamente tú eres el Hijo de Dios!» Terminada la travesía, desembarcaron en Genesaret. Los hombres de aquel lugar reconocieron a Jesús y comunicaron la noticia por toda la región, así que le trajeron todos los enfermos. Le rogaban que los dejara tocar al menos el fleco de su manto, y todos los que lo tocaron quedaron totalmente sanos Palabra del Señor REFLEXIÓN En el texto de hoy Jesús busca un lugar, sube a un monte para orar a solas con su Padre Dios. Y tú cuando haces oración ¿Cuál es tu monte, cuál es el lugar en donde te escondes para hablar con Dios? ¿Cómo te imaginas lo que sucedió después? Jesús caminando sobre las aguas, los discípulos asustados, el mar embravecido, Pedro hundiéndose en el mar por temor, Jesús salvándolo. ¿Qué le faltó a Pedro para no hundirse? …fe… Jesús te invita a depositar en Él toda tu confianza, tus miedos y necesidades. A no hundirte en el terror de la mentira, del egoísmo, de la falta de amor. También te invita a rezar como Él a Padre Dios. Al igual que Pedro ¿Has sentido alguna vez un miedo que te paraliza? ¿Qué crees que le faltó a Pedro? ¿Cómo está tu fe en Dios? ¿Te confías a Él? ¿Te sientes un anunciador de esperanzas para otros? ¿De qué manera? Ofrécele al Señor ese miedo que te paraliza y no te permite avanzar hacia la paz.

OREMOS: Padre, me pongo en tus manos. Haz de mí lo que quieras. Sea lo que sea, te doy gracias. Estoy dispuesto a todo, lo acepto todo, con tal que tu voluntad se cumpla en mí y en todas tus criaturas. No deseo más, Padre. Te confío mi alma, te la doy con todo el amor de que soy capaz. Porque te amo y necesito darme a Ti, ponerme en tus manos, sin limitación, sin medida, con una confianza infinita, porque Tú eres mi Padre. Amén. Carlos de Foucauld

MIERCOLES 05 SALUDO: Reunidos como grupo curso para alabar al Señor y pedirle su bendición a lo largo de nuestra jornada escolar, pensamos en aquellos miembros de nuestra comunidad educativa más necesitados de cariño y ayuda. Que en pequeños gestos de amor podamos hacer presente los valores del Reino de paz, justicia y solidaridad. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Evangelio según San Mateo 15, 21-28 Jesús marchó de allí y se fue en dirección a las tierras de Tiro y Sidón. Una mujer cananea, que llegaba de ese territorio, empezó a gritar: « ¡Señor, hijo de David, ten compasión de mí! Mi hija está atormentada por un demonio.» Pero Jesús no le contestó ni una palabra. Entonces sus discípulos se acercaron y le dijeron: «Atiéndela, mira cómo grita detrás de nosotros.» Jesús contestó: «No he sido enviado sino a las ovejas perdidas del pueblo de Israel.» Pero la mujer se acercó a Jesús y, puesta de rodillas, le decía: « ¡Señor, ayúdame!» Jesús le dijo: «No se debe echar a los perros el pan de los hijos.» La mujer contestó: «Es verdad, Señor, pero también los perritos comen las migajas que caen de la mesa de sus amos.» Entonces Jesús le dijo: «Mujer, ¡qué grande es tu fe! Que se cumpla tu deseo.» Y en aquel momento quedó sana su hija. Palabra del Señor

REFLEXIÓN En este texto puede parecer desconcertante el silencio de Jesús, tanto que motiva la intervención de los discípulos, pero no se trata de poca sensibilidad al dolor de aquella mujer. San Agustín comenta sobre esto: "Cristo se mostraba indiferente hacia ella, no para negarle la misericordia sino para hacer crecer el deseo" Para la mujer que acude a Jesús no la paraliza el silencio, sino que le invita a insistir ante su Sagrado Corazón. Dios siempre escucha y Jesús así lo muestra «Mujer, ¡qué grande es tu fe! Que se cumpla tu deseo.» No dejemos de gritar a Dios nuestro deseo, él es nuestro Padre y sabrá responder generosamente. ¿Qué deseo o intención traes esta mañana?¿Por quién o por quiénes te gustaría pedir? OREMOS: Señor, Padre bueno, creador del Cielo y de la Tierra, escucha nuestra oración, atiende a nuestro llamado acude a nuestro encuentro y danos tu mano amiga, envíanos tu espíritu compañero, ayúdanos a escuchar tu voz. Amén.

JUEVES 06 SALUDO: Señor Dios nuestro, en este nuevo día, con profunda fe te invocamos para que nos fortalezcas con tu Espíritu de amor, que podamos compartir con otros la alegría de conocerte y anunciarte. Porque sabemos que en la oración Tú estás presente. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Evangelio según San Marcos 9, 2-10 Seis días después, Jesús tomó a Pedro, Santiago y Juan, y los llevó a ellos solos a un monte elevado. Allí se transfiguró en presencia de ellos. Sus vestiduras se volvieron resplandecientes, tan blancas como nadie en el mundo podría blanquearlas. Y se les aparecieron Elías y Moisés, conversando con Jesús. Pedro dijo a Jesús: «Maestro, ¡qué bien estamos aquí! Hagamos tres carpas, una para ti, otra para Moisés y otra para Elías». Pedro no sabía qué decir, porque estaban llenos de temor. Entonces una nube los cubrió con su sombra, y salió de ella una voz: «Este es mi Hijo muy querido, escúchenlo». De pronto miraron a su alrededor y no vieron a nadie, sino a Jesús solo con ellos. Mientras bajaban del monte, Jesús les prohibió contar lo que habían visto, hasta que el Hijo del hombre resucitara de entre los muertos. Ellos cumplieron esta orden, pero se preguntaban qué significaría «resucitar de entre los muertos». Palabra del Señor REFLEXIÓN Pensemos un momento en este acontecimiento, imaginemos el monte, imaginemos la escena de la transfiguración, sus vestiduras blancas. Imaginemos a Elías y a Moisés conversando con Jesús. El sentimiento de paz de los discípulos, los suspiros de asombro que tienen que haber emitido…el temor… Y quedémonos un momento en la imagen de la nube que los cubre por completo, y la voz de Dios que dice «Este es mi Hijo muy querido, escúchenlo». Podríamos repetir en nuestro interior estas palabras, «Este es mi Hijo muy querido, escúchenlo». Varias veces… Disponer mi corazón para dialogar con Jesús cada mañana, escucharle, meditar su Palabra, es cumplir con el llamado de Dios, «Este es mi Hijo muy querido, escúchenlo» No dejemos de escuchar su voz, aunque a veces las ganas y las fuerzas no nos acompañen. Y cuando esto nos pase recordemos la invitación de Dios en el monte: “Este es mi Hijo muy querido, escúchenlo” Oremos juntos: Padre Nuestro…

VIERNES 07 SALUDO: Recordemos esta mañana que estamos celebrando el Mes de la Solidaridad y ofrezcamos nuestra oración para que Jesús aumente en nosotros el deseo de ser buenas personas. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Evangelio según San Mateo 16,24-28 Entonces Jesús dijo a sus discípulos: «El que quiera venir detrás de mí, que renuncie a sí mismo, que cargue con su cruz y me siga. Porque el que quiera salvar su vida, la perderá; y el que pierda su vida a causa de mí, la encontrará. ¿De qué le servirá al hombre ganar el mundo entero si pierde su vida? ¿Y qué podrá dar el hombre a cambio de su vida? Porque el Hijo del hombre vendrá en la gloria de su Padre, rodeado de sus ángeles, y entonces pagará a cada uno de acuerdo con sus obras. Les aseguro que algunos de los que están aquí presentes no morirán antes de ver al Hijo del hombre, cuando venga en su Reino» Palabra del Señor

REFLEXIÓN Hoy Jesús en su Evangelio nos hace una invitación clara, SEGUIRLE. Pero ¿cómo se le puede seguir a edad de ustedes (niños, jóvenes)? Aún no son del todo independientes como quisieran y muchos creen que las decisiones importantes las tomaran en su etapa de adulto. Sin embargo, Jesús al igual que a sus discípulos, te invita a seguirle y dar tu vida a causa suya. Llegar a la hora al colegio, participar de la oración de la mañana, saludar a todos, preocuparse del que anda triste, solidarizar con quien me pide ayuda… ¿será una buena manera de seguir a Jesús? Claro que sí, sobre todo porque cada día en su Palabra nos dice que debemos amar al prójimo, entregar el corazón en todo lo que hacemos, ser responsables para que nadie se vea afectado a causa nuestra…cada día Jesús me va dando un mensaje para seguirle y lo que estamos haciendo en este instante es caminar con él. ¿Alguna vez han sentido una profunda alegría cuando has hecho un bien para otro? De eso se trata perder la vida a causa de Jesús, cuando entregamos el corazón. Para Jesús perder la vida, es morir al egoísmo, morir a la mentira que tan esclavos nos hace, morir al odio…Y entregar a cambio amor. ¿De qué otra manera siento que sigo a Jesús? Dejémonos guiar por quien es un gran modelo en el seguimiento de Cristo, María que en su “SÍ” a Dios, se hizo también Madre nuestra.

Digamos juntos: Dios te Salve María…

LUNES 10 SALUDO: Estamos comenzando una nueva semana, se nos vienen nuevos encuentros, oportunidades, sabe- res, etc. ¿Qué intención traemos? ¿Qué soñamos vivir en estos días? Pongamos en manos del Señor lo que está en nuestro corazón. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Evangelio según San Juan 12,24-26 En verdad les digo: Si el grano de trigo no cae en tierra y muere, queda solo; pero si muere, da mucho fruto. El que ama su vida la destruye; y el que desprecia su vida en este mundo, la conserva para la vida eterna. El que quiera servirme, que me siga, y donde yo esté, allí estará también mi servidor. Y al que me sirve, el Padre le dará un puesto de honor. Palabra del Señor REFLEXIÓN Jesús en este texto nos hace ver que los frutos se producen cuando el amor triunfa, y para que el amor triunfe debemos morir a nuestro egoísmo, a nuestra falta de fe, de generosidad para con nosotros y los demás. El que ama produce frutos y nunca está solo. 

¿Habías pensado que las hermosas plantas que vemos, partieron de una simple semilla que se partió hasta deshacerse en la tierra, producto del cuidado de Dios con la ayuda del hombre?

En un gesto de amor nombremos aquellas personas que necesitan de nuestra oración OREMOS: Te quiero pedir que me ayudes a ser generoso y a compartir toda mi vida con los demás. Ayúdame a dar muchos frutos. Porque todo lo que me diste es para compartir y ofrecer a los demás. Jesús quiero ser cada día un poco más parecido a Ti.

MARTES 11 SALUDO: Dios cada día nos saluda con el amor inmenso que tiene por cada uno de nosotros. Dispongamos el corazón como niños frente a sus padres, para escucharle y decir lo que necesitamos y agradecemos. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Evangelio según San Mateo 18, 1-5.10.12-14 En aquel momento los discípulos se acercaron a Jesús para preguntarle: « ¿Quién es el más grande en el Reino de los Cielos?». Jesús llamó a un niño, lo puso en medio de ellos y dijo: «Les aseguro que si ustedes no cambian o no se hacen como niños, no entrarán en el Reino de los Cielos. Por lo tanto, el que se haga pequeño como este niño, será el más grande en el Reino de los Cielos. El que recibe a uno de estos pequeños en mi Nombre, me recibe a mí mismo. Cuídense de despreciar a cualquiera de estos pequeños, porque les aseguro que sus ángeles en el cielo están constantemente en presencia de mi Padre celestial. ¿Qué les parece? Si un hombre tiene cien ovejas, y una de ellas se pierde, ¿no deja las noventa y nueve restantes en la montaña, para ir a buscar la que se extravió? Y si llega a encontrarla, les aseguro que se alegrará más por ella que por las noventa y nueve que no se extraviaron. De la misma manera, el Padre que está en el cielo no quiere que se pierda ni uno solo de estos pequeños. Palabra del Señor REFLEXIÓN Jesús nos dice que sólo entraremos en el Reino de los Cielos si nos hacemos como niños, es decir, si en nuestro actuar tenemos esas mismas características que tienen los niños que los hacen predilectos del Señor. Y ¿cuáles son esas características? Los niños son humildes pues reconocen su fragilidad y pequeñez ante los mayores, reciben con alegría lo que se les da, porque saben que dependen de los demás. Son sencillos, espontáneos, transparentes, generosos y alegres, no tienen ambiciones, más que sentirse amados y regalar amor. En suma son sencillos y humildes de corazón, como Jesús mismo. 

¿Te consideras sencillo y humilde de corazón? ¿Qué te falta para serlo?

Pidamos al Señor que nos permita continuar siendo esos niños de corazón limpio por mucho tiempo. Oremos:

Jesús, maestro bueno, queremos seguir tus pasos. Danos tu Espíritu para aprender a vivir en la alegría.

Queremos despertar cada mañana para alabar al Padre y cantarle gracias por las cosas que ha hecho. Por la hermana creación, la hermana naturaleza, por el inmenso espacio y todas las estrellas; por el sol que nos calienta, nos abriga, y nos da la luz que nos recuerda tu sonrisa. Por las plantas que llenan de verde los sentidos, por los animales, por el trinar de los pájaros. Te damos gracias, Padre, con alegría y ganas de vivir. Amén

MIERCOLES 12 SALUDO: Ser solidarios es una invitación de cada día, y aunque estemos en el mes que celebramos la solidaridad, debemos hacernos consciente que todos los días de nuestras vidas debemos serlo, en el buen trato, en la ayuda desinteresada, en el compromiso con la familia, el país, el barrio, el colegio. Con alegría demos comienzo a esta oración. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Evangelio según San Mateo 18, 15-20 Si tu hermano ha pecado, vete a hablar con él a solas para reprochárselo. Si te escucha, has ganado a tu hermano. Si no te escucha, toma contigo una o dos personas más, de modo que el caso se decida por la palabra de dos o tres testigos. Si se niega a escucharlos, informa a la asamblea. Si tampoco escucha a la iglesia, considéralo como un pagano o un publicano. Yo les digo: «Todo lo que aten en la tierra, lo mantendrá atado el Cielo, y todo lo que desaten en la tierra, lo mantendrá desatado el Cielo. Asimismo yo les digo: si en la tierra dos de ustedes se ponen de acuerdo para pedir alguna cosa, mi Padre Celestial se lo concederá. Pues donde están dos o tres reunidos en mi Nombre, allí estoy yo, en medio de ellos.» Palabra del Señor

REFLEXIÓN En este texto Jesús nos enseña a cómo debemos enfrentar nuestros conflictos, además nos revela que cuando dos o tres se pongan de acuerdo para pedir por algo, o por alguien, Él estará presente y atenderá nuestras súplicas. 

Al enfrentar un conflicto con un compañero, un amigo, o un familiar. siguiendo el consejo de Jesús ¿Cuál sería el primer paso que debes dar para resolver el problema?



Si tú amigo no te escucha. ¿Cuál es el paso siguiente que sugiere el texto?

Busca siempre resolver los problemas como te aconseja Jesús, así estarás en paz contigo y con los demás. Estemos conscientes de la presencia de Dios en nuestra sala de clases, porque Él mismo nos dice que al estar dos reunidos en su nombre, Él se hace presente. Pidamos a Jesús que siempre nos ayude a estar alerta cuando ofendemos a nuestros hermanos para pedir perdón y a ser generosos en el perdonar. OREMOS: Amigo Jesús: ayúdame a ser humilde y sincero. A no aparentar lo que no soy ni querer ser más que los otros. Enséñame a decir siempre la verdad y a no mentir, aunque a veces cueste bastante y haya que poner mucha voluntad. Quiero aprender a ayudar y a dar una mano a todo el que lo necesite. Abre mi corazón para que viva pensando en los demás. Amén.

JUEVES 13 SALUDO: En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Evangelio según San Mateo 18, 21-19, 1. Entonces Pedro se acercó con esta pregunta: «Señor, ¿cuántas veces tengo que perdonar las ofensas de mi hermano? ¿Hasta siete veces?» Jesús le contestó: «No te digo siete, sino setenta y siete veces.» «Aprendan algo sobre el Reino de los Cielos. Un rey había decidido arreglar cuentas con sus empleados, y para empezar, le trajeron a uno que le debía diez mil monedas de oro. Como el hombre no tenía con qué pagar, el rey ordenó que fuera vendido como esclavo, junto con su mujer, sus hijos y todo cuanto poseía, para así recobrar algo. El empleado, pues, se arrojó a los pies del rey, suplicándole: «Dame un poco de tiempo, y yo te lo pagaré todo.» El rey se compadeció y lo dejó libre; más todavía, le perdonó la deuda. Pero apenas salió el empleado de la presencia del rey, se encontró con uno de sus compañeros que le debía cien monedas. Lo agarró del cuello y casi lo ahogaba,

gritándole: «Págame lo que me debes.» El compañero se echó a sus pies y le rogaba: «Dame un poco de tiempo, y yo te lo pagaré todo.» Pero el otro no aceptó, sino que lo mandó a la cárcel hasta que le pagara toda la deuda. Los compañeros, testigos de esta escena, quedaron muy molestos y fueron a contárselo todo a su señor. Entonces el señor lo hizo llamar y le dijo: «Siervo miserable, yo te perdoné toda la deuda cuando me lo suplicaste. ¿No debías también tú tener compasión de tu compañero como yo tuve compasión de ti?» Y tanto se enojó el señor, que lo puso en manos de los verdugos hasta que pagara toda la deuda. Y Jesús añadió: «Lo mismo hará mi Padre Celestial con ustedes, a no ser que cada uno perdone de corazón a su hermano.» Palabra del Señor REFLEXIÓN En el Evangelio de hoy, Jesús ante la pregunta de Pedro, nos da un mensaje que quizás es uno de los más difíciles de realizar, aprender a perdonar y hacerlo siempre. Pensemos en las veces que hemos perdonado ¿Qué es lo más cuesta? Y una vez que lo hacemos ¿Qué nos ha pasado? Perdonar, es reconocer como hermano(a) en quien me ofendió. Perdonar, es salir de nosotros mismos y mirar con ojos de Jesús, es decir, con ojos misericordiosos a quien me hizo mal. Pero también debemos crecer en humildad y cuando nos equivocamos y ofendemos pedir perdón. El perdón siempre nos regalará un fruto de amor. Pidamos a Jesús que siempre nos ayude a perdonar y pedir perdón. Señor Dios mío, enséñame a perdonar, enséñame que para saber perdonar es necesario que habites en mi corazón. Pensando en aquellas personas que aún no perdonamos, o en aquellas que aún no nos perdonan, recemos juntos la oración que el mismo Jesús nos enseñó y en donde nos invita a pedir al Padre Dios…perdona nuestras ofensas, como nosotros perdonamos a quienes nos ofenden… OREMOS: Digamos juntos, Padre Nuestro…

VIERNES 14 SALUDO: El día de mañana celebraremos la Asunción de la Virgen María. Comencemos nuestra oración teniéndola a Ella presente, Madre buena, intercesora, amada por el Pueblo de Dios. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Evangelio según San Mateo 19, 3-12 Se le acercaron unos fariseos y lo pusieron a prueba con esta pregunta: « ¿Está permitido a un hombre divorciarse de su mujer por cualquier motivo?» Jesús respondió: « ¿No han leído que el Creador al principio los hizo hombre y mujer y dijo: El hombre dejará a su padre y a su madre y se unirá con su mujer, y serán los dos una sola carne? De manera que ya no son dos, sino una sola carne. Pues bien, lo que Dios ha unido, no lo separe el hombre.» Los fariseos le preguntaron: «Entonces, ¿por qué Moisés ordenó que se firme un certificado en el caso de divorciarse?» Jesús contestó: «Moisés vio lo tercos que eran ustedes, y por eso les permitió despedir a sus mujeres, pero al principio no fue así. Yo les digo: el que se divorcia de su mujer, fuera del caso de unión ilegítima, y se casa con otra, comete adulterio.» Los discípulos le dijeron: «Si ésa es la condición del hombre que tiene mujer, es mejor no casarse.» Jesús les contestó: «No todos pueden captar lo que acaban de decir, sino aquellos que han recibido este don. Hay hombres que han nacido eunucos. Otros fueron mutilados por los hombres. Hay otros todavía, que se hicieron tales por el Reino de los Cielos. ¡Entienda el que pueda!» Palabra del Señor REFLEXIÓN Este texto nos invita a reencontrarnos con el llamado que tenemos todos a “ser familia” y a permanecer unidos en el amor. Nosotros: ¿Estamos valorando a nuestra familia? O estamos todo el tiempo criticándola? ¿Qué necesidades tiene mi familia? En un momento de silencio contémosle a Jesús. A diario vemos familias que sufren, que no se perdonan, otras en donde los padres que se encuentran sin trabajo, o han sufrido la pérdida de algún integrante. que han perdido algún integrante, o están padeciendo por algún enfermo grave, Dios que es Amor, nos invita a rezar por ellas. Oremos Te pido Señor por mi familia Y todas las familias, por mis amigos, mis conocidos. También te quiero pedir

por aquellos que sufren, o están solos, o enfermos. Danos fuerzas para construir un mundo de hermanos donde haya Justicia y Paz. Quiero vivir como Jesús. Gracias por estar junto a mí. Amén OREMOS:

Te pido Señor por mi familia Y todas las familias, por mis amigos, mis conocidos. También te quiero pedir por aquellos que sufren, o están solos, o enfermos. Danos fuerzas para construir un mundo de hermanos donde haya Justicia y Paz. Quiero vivir como Jesús. Gracias por estar junto a mí. Amén

LUNES 17 SALUDO: En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Evangelio según San Mateo 19, 16-22 "Si quieres llegar hasta el final, vende lo que tienes, así tendrás un tesoro en el cielo" En aquel tiempo se acercó uno a Jesús y le preguntó: "¿Maestro, ¿qué tengo que hacer de bueno para obtener la vida eterna? Jesús le contestó: "¿Por qué me preguntas qué es bueno? Uno solo es Bueno. Mira, si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos". Él le preguntó: "¿Cuáles?". Jesús le contestó: "No matarás, no cometerás adulterio, no robarás, no darás falso testimonio, honra a tu padre y a tu madre, y ama a tu prójimo como a ti mismo". El muchacho le dijo: "Todo eso lo he cumplido. ¿Qué me falta?". Jesús le contestó: "Si quieres llegar hasta el final, vende lo que tienes, da el dinero a los pobres, así tendrás un tesoro en el cielo, y luego vente conmigo". Al oír esto, el joven se fue triste, porque era rico. Palabra de Dios Palabra del Señor REFLEXIÓN

Jesús, el Hijo del Dios vivo, dedicó su vida a ser Obediente y cariñoso con José y María, sus padres terrenales. También dedico su vida a… - Servir - Ser solidario - Escuchar - Anunciar al Padre que está en los Cielos - Enseño a rezar - Enseñar a los que no saben y corregir con cariño - Perdonar los pecados y también a perdonar a los enemigos - Promover la justicia - Dar de comer a los que tenían hambre - Sentir compasión por el dolor de otros - Ser misericordioso con todos - Sanar a los enfermos - Liberar a los que se sentían prisioneros - Finalmente a dar la vida por sus amigos De todas las cosas que Jesús hace y que tú también estás invitado a hacer, ¿Qué es lo que más te cuesta? Oremos juntos: Padre nuestro… OREMOS MARTES 18 SALUDO

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Hoy 18 de agosto se conmemora el aniversario de la pascua del Padre Hurtado, es decir, el día que partió a reunirse definitivamente con su “Patroncito” al Cielo, así le decía a Jesús. Para conmemorar su fallecimiento, el Congreso Nacional de Chile instituyó en el año 1994, el Día Nacional de la Solidaridad. En estos 16 años que han transcurrido, se ha hecho una tradición que este día el Presidente de la República visite la tumba del Padre Hurtado y desde allí, evocando su figura, envíe un mensaje para promover la solidaridad entre todos los chilenos. Unámonos a todo el país para honrar esta visita de Dios a nuestra tierra, en la figura del padre Hurtado, proponiéndonos vivir más solidariamente en nuestra vida diaria, en el curso, en el colegio, en la calle, en nuestros hogares, etc.

“Cumple tú la misión que te ha sido confiada, tu pequeña misión, la que sólo tú puedes cumplir; tú solo en toda la creación puedes llenar esa misión. Si no la realizas quedará sin hacerse, ¡tú misión!, misión de generosidad.” San Alberto Hurtado

Evangelio según San Mateo 25,31-40 Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria rodeado de todos los ángeles, se sentará en su trono glorioso. Todas las naciones serán reunidas en su presencia, y él separará a unos de otros, como el pastor separa las ovejas de los cabritos, 33 y pondrá a aquellas a su derecha y a estos a la izquierda. Entonces el Rey dirá a los que tenga a su derecha: “Vengan, benditos de mi Padre, y reciban en herencia el Reino que les fue preparado desde el comienzo del mundo, porque tuve hambre, y ustedes me dieron de comer; tuve sed, y me dieron de beber; estaba de paso, y me alojaron; desnudo, y me vistieron; enfermo, y me visitaron; preso, y me vinieron a ver”. Los justos le responderán: “Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te dimos de comer; sediento, y te dimos de beber? ¿Cuándo te vimos de paso, y te alojamos; desnudo, y te vestimos? ¿Cuándo te vimos enfermo o preso, y fuimos a verte?”. 40 Y el Rey les responderá: “Les aseguro que cada vez que lo hicieron con el más pequeño de mis hermanos, lo hicieron conmigo”. Palabra del Señor REFLEXIÓN Jesús en este texto, continúa con las parábolas del Reino y nos pone como ejemplo, un banquete de bodas. Él nos sigue dando a conocer de cómo Dios nos llama y desea que compartamos el gran banquete de gozar la alegría de vivir en su Amor. Este día, Dios nos invita a preparar nuestro corazón para seguir a Jesús, ya sabemos cómo: actuando con amor a los demás, frecuentando la Eucaristía, que es el gran banquete nupcial, escuchando su Palabra y en el silencio de la oración. •¿Habías pensado que cuando Dios te está llamando a seguirlo, te está invitando a vivir en un gran banquete, lleno de alegrías, de encuentros, de buenas noticias, de entusiasmo ante la vida, en suma a ser feliz? Oremos: Padre Hurtado Apóstol de Jesucristo, servidor de los pobres y amigo de los niños… Bendecimos a Dios por tu paso entre nosotros. Tú supiste amar y servir,

tú nos llamas a vivir la fe comprometida, consecuente y solidaria. Haznos vivir siempre contentos aún en medio de las dificultades… Padre Hurtado amigo de Dios y de los hombres. Ruega por nosotros. Amén OREMOS: MIERCOLES 19 SALUDO: En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén. “Comencemos por practicar la justicia, pues mientras no se ha cumplido la justicia no se puede pensar en caridad. Dar a cada uno lo suyo; y no sólo pensemos en dar dinero, sino antes que todo, amor.” San Alberto Hurtado En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Evangelio según San Mateo 19, 30-20,16 Muchos de los primeros serán los últimos, y muchos de los últimos serán los primeros. Porque el Reino de los Cielos se parece a un propietario que salió muy de madrugada a contratar obreros para trabajar en su viña. Trató con ellos un denario por día y los envió a su viña. Volvió a salir a media mañana y, al ver a otros desocupados en la plaza, les dijo: “Vayan ustedes también a mi viña y les pagaré lo que sea justo”. Y ellos fueron. Volvió a salir al mediodía y a media tarde, e hizo lo mismo. Al caer la tarde salió de nuevo y, encontrando todavía a otros, les dijo: “¿Cómo se han quedado todo el día aquí, sin hacer nada?”. Ellos le respondieron: “Nadie nos ha contratado”. Entonces les dijo: “Vayan también ustedes a mi viña”. Al terminar el día, el propietario llamó a su mayordomo y le dijo: “Llama a los obreros y págales el jornal, comenzando por los últimos y terminando por los primeros”. Fueron entonces los que habían llegado al caer la tarde y recibieron cada uno un denario. Llegaron después los primeros, creyendo que iban a recibir algo más, pero recibieron igualmente un denario. Y al recibirlo, protestaban contra el propietario, diciendo: “Estos últimos trabajaron nada más que una hora, y tú les das lo mismo que a nosotros, que hemos soportado el peso del trabajo y el calor durante toda la jornada”. El propietario respondió a uno de ellos: “Amigo, no soy injusto contigo, ¿acaso no habíamos tratado en un denario? Toma lo que es tuyo y vete. Quiero dar a este que llega último lo mismo que a ti. ¿No tengo derecho a

disponer de mis bienes como me parece? ¿Por qué tomas a mal que yo sea bueno?”. Así, los últimos serán los primeros y los primeros serán los últimos». Palabra del Señor REFLEXIÓN OREMOS:

JUEVES 20 SALUDO: En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Evangelio según San Mateo 22, 34-40 Cuando los fariseos se enteraron de que Jesús había hecho callar a los saduceos, se reunieron en ese lugar, y uno de ellos, que era doctor de la Ley, le preguntó para ponerlo a prueba: «Maestro, ¿cuál es el mandamiento más grande de la Ley?». Jesús le respondió: «Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con todo tu espíritu. Este es el más grande y el primer mandamiento. El segundo es semejante al primero: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. De estos dos mandamientos dependen toda la Ley y los Profetas». Palabra del Señor REFLEXIÓN En el Evangelio de hoy, Jesús nos da un mensaje muy claro para seguir a Dios, amarlo con todo el corazón, con toda el alma y con toda la mente, y al prójimo como a nosotros mismos. Durante estos días hemos ido reflexionando con la Palabra de Dios, la que nos ha revelado los beneficios que tiene ser hijos suyos. ¿Qué te ha ido pasando en estos encuentros de oración, en donde has ido conociendo más a Dios? Oremos: Enséñanos a orar, Señor, para encontrar tu rostro. Invítanos al silencio,

Para escuchar tu voz. Aclara nuestra mirada, para descubrir tus signos. Danos valor y decisión para aceptar lo que debemos cambiar. Ayúdanos a discernir lo que realmente importa: seguir tus pasos. Enséñanos a comprometernos activos, dispuestos, alegres, en la construcción del Reino. Enséñanos a orar, Señor, nos hace falta. Queremos buscar tu rostro, encontrar tus huellas, reconocer tu paso. Necesitamos volver la mirada, descubrir tus ojos, llamarte "Padre", sentir tu aliento. Amén

VIERNES 21 SALUDO: En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Evangelio según San Mateo 22, 1-14 Jesús siguió hablándoles por medio de parábolas: «Aprendan algo del Reino de los Cielos. Un rey preparaba las bodas de su hijo, por lo que mandó a sus servidores a llamar a los invitados a la fiesta. Pero éstos no quisieron venir. De nuevo envió a otros servidores con orden de decir a los invitados: “He preparado un banquete, ya hice matar terneras y otros animales gordos y todo está a punto. Vengan, pues, a la fiesta de la boda”. Pero ellos no hicieron caso, sino que se fueron, unos a sus campos y otros a sus negocios. Los demás tomaron a los servidores del rey, los maltrataron y los mataron. El rey se enojó y envió a sus tropas, que dieron muerte a aquellos asesinos e incendiaron su ciudad. Después dijo a sus servidores: “El banquete de bodas sigue esperando, pero los que habían sido invitados no eran dignos. Vayan, pues, a las esquinas de las calles e inviten a la fiesta a todos los que encuentren”. Los servidores salieron inmediatamente a los caminos y reunieron a todos los que encontraron, malos y buenos, de modo que la sala se llenó de invitados. Después entró el rey para conocer a los que estaban sentados a la mesa, y vio un hombre que no se había puesto el traje de fiesta. Le dijo: “Amigo, ¿cómo es que has entrado sin traje de bodas?” El hombre se quedó callado. Entonces el rey dijo a sus servidores: “Atenlo de pies y manos y échenlo a las tinieblas de fuera. Allí será el llorar y el rechinar de dientes”. Sepan que muchos son llamados, pero pocos son elegidos.» Palabra del Señor

REFLEXIÓN Jesús en este texto, continúa con las parábolas del Reino y nos pone como ejemplo, un banquete de bodas. Él nos sigue dando a conocer de cómo Dios nos llama y desea que compartamos el gran banquete de gozar la alegría de vivir en su Amor. Este día, Dios nos invita a preparar nuestro corazón para seguir a Jesús, ya sabemos cómo: actuando con amor a los demás, frecuentando la Eucaristía, que es el gran banquete nupcial, escuchando su Palabra y en el silencio de la oración. ¿Habías pensado que cuando Dios te está llamando a seguirlo, te está invitando a vivir en un gran banquete, lleno de alegrías, de encuentros, de buenas noticias, de entusiasmo ante la vida, en suma a ser feliz? OREMOS:

LUNES 24 SALUDO:

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Evangelio según San Juan 1, 45-51 "Ahí tenéis a un israelita de verdad, en quien no hay engaño" En aquel tiempo, Felipe encuentra a Natanael y le dice: "Aquel de quien escribieron Moisés en la Ley y los profetas, lo hemos encontrado: Jesús, hijo de José, de Nazaret." Natanael le replicó: "¿De Nazaret puede salir algo bueno?" Felipe le contestó: "Ven y verás." Vio Jesús que se acercaba Natanael y dijo de él: "Ahí tenéis a un israelita de verdad, en quien no hay engaño." Natanael le contesta: "¿De qué me conoces?" Jesús le responde: "Antes de que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi." Natanael respondió: "Rabí, tú eres el Hijo de Dios, tú eres el Rey de Israel." Jesús le contestó: "¿Por haberte dicho que te vi debajo de la higuera, crees? Has de ver cosas mayores." Y le añadió: "Yo os aseguro: veréis el cielo abierto y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre". Palabra del Señor REFLEXIÓN En este texto encontramos el encuentro entre Jesús y Natanael, quien reconoce que Jesús es el enviado de Dios Padre. Jesús le dice a Natanael que verá cosas grandes.

Esta mañana también Jesús te dice que a lo largo de tu vida veras cosas grandes, cosas maravillosas que ni siquiera eres capaz de imaginar hoy. Jesús te invita a soñar, porque muchas de esas cosas que sueñas serán realidad a partir de tus proyectos. Él te invita a no cansarte, a que confíes en Él y en sus promesas y que te dispongas a acogerlo en tu corazón. En tu vida ¿Qué es lo que sueñas y deseas que Jesús te ayude a realizar? Oremos Quiero crecer en la esperanza. Saber que siempre estás para escucharnos. Saber que nunca nos abandonas. Saber que tu amor es más grande que todo. Señor, hace crecer la esperanza en mi corazón. Que me confíe en Ti, para aprender a esperar. Que sea paciente y nunca baje los brazos. Dame mucha fe, mucho amor ¡Gracias Señor! OREMOS MARTES 25 SALUDO En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Evangelio según San Mateo 23, 23-26 ¡Ay de ustedes, escribas y fariseos hipócritas, que pagan el diezmo de la menta, del hinojo y del comino, y descuidan lo esencial de la Ley: la justicia, la misericordia y la fidelidad! Hay que practicar esto, sin descuidar aquello. ¡Guías ciegos, que filtran el mosquito y se tragan el camello! ¡Ay de ustedes, escribas y fariseos hipócritas, que limpian por fuera la copa y el plato, mientras que por dentro están llenos de codicia y desenfreno! ¡Fariseo ciego! Limpia primero la copa por dentro, y así también quedará limpia por fuera. Palabra del Señor REFLEXIÓN Cuando nos cerramos a la experiencia de los demás, nos perdemos de su riqueza. La exclusión nos priva de la diversidad y es ésta la que nos enriquece, puesto que nos pone en contacto con aquello que nos es desconocido. El Reino de Dios es de inclusión, Jesús reconoce que el egoísmo divide y que la única manera de amarse es mirarse con cariño en aquello que nos hace distintos

OREMOS: Te pedimos Señor por todos aquellos que sufren la exclusión, por aquellos que son tildados como diferentes por nuestra sociedad. Para que sepamos reconocerte en sus diferencias y que seamos nosotros instrumentos tuyos, de manera que seamos los primeros en salir a su encuentro y unirnos a ellos en aquello que nos hace diferentes. Amén. MIERCOLES 26 SALUDO: En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Evangelio según San Mateo 23, 27-32 ¡Ay de ustedes, escribas y fariseos hipócritas, que parecen sepulcros blanqueados: hermosos por fuera, pero por dentro llenos de huesos de muertos y de podredumbre! Así también son ustedes: por fuera parecen justos delante de los hombres, pero por dentro están llenos de hipocresía y de iniquidad. ¡Ay de ustedes, escribas y fariseos hipócritas, que construyen los sepulcros de los profetas y adornan las tumbas de los justos, diciendo: “Si hubiéramos vivido en el tiempo de nuestros padres, no nos hubiéramos unido a ellos para derramar la sangre de los profetas”! De esa manera atestiguan contra ustedes mismos que son hijos de los que mataron a los profetas. ¡Colmen entonces la medida de sus padres! Palabra del Señor REFLEXIÓN En este evangelio Jesús nos invita a vivir la Justicia • ¿Nos cuesta actuar justamente? • ¿Cuántas veces hemos sido injustos? Cuando hablamos de justicia nos referimos a dar a cada persona aquello que le corresponde, por tanto, privar a nuestros hermanos de aquello que les es propio, algo que me prestaron, algo que necesitan, es actuar sin justicia. Dios nos invita a ser profetas, es decir, a vivir la justicia y a denunciar aquellos actos de injusticia de los que nuestros hermanos son víctimas. OREMOS: Te pedimos Señor, por nuestro compromiso con la justicia, para que mantengamos nuestros sentidos atentos a la realidad, denunciando fuertemente las situaciones de opresión que viven nuestros hermanos, comprometiéndonos con buscar soluciones a estas situaciones. Amén.

JUEVES 27 SALUDO: En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Evangelio según San Mateo 24, 42-51 Por eso estén despiertos, porque no saben en qué día vendrá su Señor. Fíjense en esto: si un dueño de casa supiera a qué hora de la noche lo va a asaltar un ladrón, seguramente permanecería despierto para impedir el asalto a su casa. Por eso, estén también ustedes preparados, porque el Hijo del Hombre vendrá a la hora que menos esperan. Imagínense un administrador digno de confianza y capaz. Su señor lo ha puesto al frente de su familia, y es él quien les reparte el alimento a su debido tiempo. Afortunado será este servidor si, al venir su señor, lo encuentra cumpliendo su deber. En verdad les digo: su señor lo pondrá al cuidado de todo lo que tiene. No será así con el servidor malo que piensa: «Mi señor se ha retrasado», y empieza a maltratar a sus compañeros y a comer y a beber con borrachos. El patrón de ese servidor vendrá en el día que no lo espera y a la hora que menos piensa. Le quitará el puesto y lo mandará donde los hipócritas. Allí será el llorar y el rechinar de dientes. Palabra del Señor REFLEXIÓN En este texto Jesús nos invita a prepararnos y hacer lo que debemos hacer, según la misión que hoy nos toca realizar. 

En este momento de tu vida ¿Cuál es tu misión? ¿A qué te sientes llamado?

Señor, ayúdame a servir Jesús, quiero seguir tu camino. Vivir alegre y dispuesto para servir a mis hermanos. En el lugar que me pidas.

En mi familia, con mis amigos, en la escuela, en el club o en el barrio. Quiero vivir atento a las necesidades de los demás. En especial muy atento a todas las personas que sufren. Quiero ser como Tú, servidor de todos. Ayúdame a lograrlo. Amén.

OREMOS:

VIERNES 28 SALUDO: En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Evangelio según San Mateo 25, 1-13 Escuchen, pues, lo que pasará entonces en el Reino de los Cielos. Diez jóvenes salieron con sus lámparas para salir al encuentro del novio. Cinco de ellas eran descuidadas y las otras cinco precavidas. Las descuidadas tomaron sus lámparas como estaban, sin llevar más aceite consigo. Las precavidas, en cambio, junto con las lámparas, llevaron sus botellas de aceite. Como el novio se demoraba en llegar, se adormecieron todas y al fin se quedaron dormidas. A medianoche se oyó un grito: «¡Viene el novio, salgan a su encuentro!» Todas las jóvenes se despertaron y prepararon sus lámparas. Entonces las descuidadas dijeron a las precavidas: «Dennos un poco de su aceite, porque nuestras lámparas se están apagando.» Las precavidas dijeron: «No habría bastante para ustedes y para nosotras; vayan mejor a donde lo venden, y compren para ustedes.» Mientras fueron a comprar el aceite llegó el novio; las que estaban listas entraron con él a la fiesta de las bodas, y se cerró la puerta. Más tarde llegaron las otras jóvenes y llamaron: «Señor, Señor, ábrenos.» Pero él respondió: «En verdad se lo digo: no las conozco.» Por tanto, estén despiertos, porque no saben el día ni la hora. Palabra del Señor

REFLEXIÓN Jesús al igual que en otros evangelios, nos enseña a través de parábolas, nos dice cómo debemos prepararnos para gozar de las buenas cosas que el Reino de Dios nos ofrece. Nos muestra también en el ejemplo, que prepararnos es hacer bien las cosas, no esperar que los demás la hagan por mí, no sacar la vuelta, no esperar en el mañana, sino realizar el trabajo hoy y bien hecho. 

¿Qué enseñanza te deja este mensaje?

En este momento de oración, pidámosle al Señor que nos ayude a ser buenos servidores y a no dejarnos tentar por la flojera. Ayúdame Padre Bueno a crecer. A ser más bueno cada día, y a querer a todos los que me rodean. Ayúdame a estudiar y a ser buen amigo y compañero. Quiero aprender mucho, llenarme de las cosas de Dios Enséñame a seguir tus pasos y a dejarme llenar por el Espíritu Santo. Que todo lo que aprenda, Señor, sepa transmitirlo, Amén

OREMOS:

LUNES 31 SALUDO: En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Evangelio según San Mateo 13, 44-46 El Reino de los Cielos se parece a un tesoro escondido en un campo; un hombre lo encuentra, lo vuelve a esconder, y lleno de alegría, vende todo lo que posee y compra el campo.

El Reino de los Cielos se parece también a un negociante que se dedicaba a buscar perlas finas; y al encontrar una de gran valor, fue a vender todo lo que tenía y la compró. Palabra del Señor REFLEXIÓN OREMOS

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