LA FUNCIÓN DE LA COSMÉTICA La piel es el órgano más extenso del cuerpo, y cumple diversas funciones: • Barrera: controla las pérdidas de agua, de electrolitos, etc, y protege contra la agresión de agentes físicos, químicos y biológicos •

Sostén.

•

Sensibilidad: a través de la piel sentimos frío, calor, dolor, picor y presión.

• Regula la temperatura: Aisla frente a las condiciones de temperatura externas y mantiene la temperatura interna dentro de unos límites variando el flujo sanguíneo y a través de la sudoración. •

Control hemodinámico: Cambios vasculares periféricos

• Secrección y excreción: Función glandular, crecimiento del pelo y de la epidermis, y pérdida percutánea de gases, sólidos y líquidos. La piel secreta sustancias que favorecen su buen estado físico y sirve como vía de excreción para sustancias de deshecho. •

Síntesis: sintetiza vitamina D, que no adquirimos mediante la alimentación.

•

Función inmunológica: Vigilancia y respuesta.

Además de ello, la belleza de la piel es factor fundamental de la belleza corporal. El color y sus matices, la lisura, su firmeza, la manera en que atenúa los ángulos y las irregularidades de la estructura que hay bajo ella... son los elementos plásticos que más apreciamos de la función estética cutánea. El aspecto de nuestra piel es lo que los demás ven, nuestra carta de presentación, una forma más de agradar al otro a través de la vista, lo que favorece nuestras relaciones sociales. Por esta razón solemos dedicarle muchos más cuidados a la piel que a cualquier otro órgano de nuestro cuerpo. Y esta es la razón de ser de la cosmética: a través de ella tratamos de favorecer el buen estado y funcionamiento de la piel como órgano, pero también conservar, restituir y acrecentar la belleza su belleza. Para ello utilizamos recursos higiénicos, cosméticos o terapéuticos que favorezcen el equilibrio de sus estructuras y funciones, y por tanto sus cualidades estéticas y fisiológicas. La cosmética en este momento tiene fundamentalmente dos formas de acción: POR VÍA INTERNA: NUTRICOSMÉTICA: Actualmente en una fase incipiente de desarrollo. Basa sus productos en el estudio de las propiedades de cada alimento y permite conocer los nutrientes que benefician al organismo y le aportan lo que necesita para mantenerse joven, sano y saludable que éste no puede fabricar por sí mismo o no en cantidad suficiente, y se los aporta a través de alimentos o de suplementos nutricionales. POR VÍA EXTERNA: COSMÉTICA DERMATOLÓGICA: Ayuda a la piel en sus funciones y mejora su aspecto mediante la aplicación de productos directamente sobre la misma. Nosotros vamos a centrarnos en esta forma de cosmética. De modo que la cosmética dermatológica cumple tres funciones: 1.- FUNCIÓN CONSERVADORA Sirve para mantener y proteger el estado de la piel sana y normal. Está muy ligada a la higiene y la prevención y se basa en: 1.- Limpieza minuciosa. Favorece la correcta eliminación de deshechos, siendo la piel como es una vía de excreción de toxinas, y así su correcto funcionamiento. Es el paso más

importante, siempre previo a la aplicación de cualquier otro cosmético. Una piel que no esté correctamente limpia no podrá deshacerse de las sustancias excretadas o depositadas que la lastiman, no podrá asimilar correctamente ningún otro producto que le queramos aplicar (que en realidad se utilizará como refuerzo) y acabará por tener un aspecto apagado y macilento. 2-. Protección constante contra traumatismos y agentes irritantes. Puede hacerse de forma activa (aplicando protectores solares, por ejemplo) o pasiva (evitando las prácticas o agentes que producen daño, p.e: no exponerse al sol)

2.- FUNCIÓN DECORATIVA Tiene por objeto modificar, mediante la aplicación de cosméticos, la apariencia de la belleza ya existente resaltando los rasgos más favorecedores, o creando la ilusión de belleza al disimular imperfecciones o alteraciones menores. Los cosméticos decorativos se aplican externamente y tienen una acción meramente superficial, que modifica la apariencia pero no influye mayormente sobre la estructura y funciones de la piel (aunque obviamente no debe entorpecerlas).

3.- FUNCIÓN CORRECTIVA La cosmética correctiva no actúa sólo a nivel superficial, como en los dos casos anteriores, sino que entra dentro de la dermoterapéutica porque tiene una acción definida sobre la estructura y las funciones cutáneas, aunque por hacerlo por razones estéticas se considera cosmética. Es el aspecto más médico y dermatológico de la cosmética, porque actúa sobre la piel anormal con intención curativa. Comprende alteraciones muy diversas, pero todas ellas tienen en común que son benignas, que no tienen repercusión general y que preocupan al paciente sólo porque son inestéticas, es decir: • Que sean funcionales u orgánicas, congénitas o adquiridas, modifiquen el aspecto y las cualidades estéticas de la superficie cutánea y sus faneras (tersura, coloración, grado de humedad, untuosidad, relieves y ondulaciones naturales, etc) • Que no sean de origen infeccioso, microbiano o parasitario, ni de naturaleza tumoral maligna. •

Que no estén relacionadas con dolencias internas, funcionales u orgánicas graves.

•

Que sean crónicas o más o menos permanentes.

• Que se puedan tratar o disimular con recursos cosméticos principalmente locales, aunque en ciertos casos deban acompañarse de alguna terapia.

Aunque aquí hablaremos sobre el uso de las plantas con este fin, es imprudente adentrarse en este campo sin conocimientos algo profundos sobre la piel, las sustancias a aplicar y el efecto sobre cada dolencia según su causa, porque como hemos dicho vamos a actuar sobre su estructura y funciones.

LA PIEL. ESTRUCTURA Y FUNCIONES La piel está formada por tres capas: epidermis, dermis e hipodermis.

LA EPIDERMIS 1.- Qué es y para qué sirve Es la capa superficial de la piel. Sus funciones son sobre todo de barrera:: contra agentes externos (microorganismos), contra pérdida de humedad.... 2.- Cómo es La epidermis tiene varias capas. Todas ellas están formadas por el mismo tipo de células pero en distinto momento de su desarrollo. desarrollo. Cada capa tiene una o más células de grosor, dependiendo de la zona corporal. Las células más abundantes son las llamadas queratinocitos,, pero cuenta además, aunque en menor cantidad, con otros tipos de células especializadas, que forman parte del sistema inmunitario.

Se en una

apoya

membrana que se llama “membrana basal” que la une a la siguiente capa (dermis) y permite el paso de determinadas moléculas entre las dos. La epidermis está cubierta por la llamada “emulsión epicutánea”, epicutánea”, una mezcla de sudor y lípidos que la protege de la evaporación, y por una capa gaseosa (el equivalente de lo que sería la atmósfera terrestre) que sirve para crear un microclima individual donde el aire es más caliente, más húmedo y con mayor concentración de CO2 que la atmósfera.

3.- Cómo funciona

Los queratinocitos nacen en la capa más profunda de la epidermis (estrato basal) y migran gradualmente hacia la superficie para sustituir a las células que se desprenden. Durante este viaje las células se aplanan progresívamente, producen una sustancia llamada queratina que les da dureza (en una zona que se llama estrato espinoso) y más tarde otra llamada queratohielina, proteínas y enzimas ( en el estrato granular) que ayudan a crear acúmulos de queratina que juegan un papel importante en la función de barrera (estrato espinoso, se llama así porque a los queratinocitos les salen una especie de piquitos, para mantenerse juntos, como si fuera velcro). Cuando llegan a la superficie (estrato córneo) son planas y forman una cubierta insoluble recubierta de una película grasa (hidroxiceramida) que hace de pegamento entre las células e impermeabiliza la piel, evitando además que pierda agua. En esta capa la piel tiene el aspecto de una pared de ladrillos (queratinocitos) y cemento (lípidos -o grasas- y proteínas). Las proteínas se desnaturalizan y dan lugar a lo que se llama Factor Natural de Hidratación (FNH) en el interior de las células que las hace capaces de retener gran cantidad de agua, haciendo que la piel esté hidratada, elástica y flexible. En este estrato, las células están en contacto con el exterior y se descaman constantemente. Los espacios entre las células son permeables al sudor y al sebo. El proceso de queratinización se llama “ciclo celular” y en la epidermis dura entre 26 y 42 días. Las perturbaciones de este proceso pueden dar lugar a la acumulación de queratinocitos parcialmente descamados (piel seca), o pueden acortar en demasía el ciclo, lo que da como resultado erupciones cutáneas y descamación. Además hay en la epidermis otros tres tipos de células: unas con función defensiva que son capaces de activar una defensa inmunitaria si la piel se ve atacada por agentes patógenos (células de Langerhans), otras que protegen contra la radiación solar y destruyen radicales libres (melanocitos) y otras que responden al tacto (células de Merkel). En su función de defensa es ayudada por las secreciones glandulares y el pelaje.

4.- Qué tipo de ayuda necesita la epidermis El ciclo celular tiende a alargarse con la edad, de modo que las células de la capa superior son más viejas y pueden estar dañadas. Esto da lugar a una cicatrización más lenta y a una piel de aspecto apagado y sin vida. También el FNH tiende a disminuir con la edad. Para mantener el buen estado de la epidermis es necesario mantenerla limpia para impedir la acumulación de toxinas, de suciedad exterior, y de células muertas. Esto permitirá que realice correctamente sus funciones de secreción glandular y de excreción de desechos, y favorecerá la absorción de los nutrientes que les aportemos por vía externa. Los productos que usemos para ello no deben dañar el FNH, porque actúa como cemento entre las células y mantiene su buen estado. Llevaremos a cabo esta tarea usando jabones, lociones limpiadoras, exfoliantes... Para mantener o mejorar el estado del FNH y el buen estado de las células necesitaremos productos que favorezcan y mantengan la hidratación de la piel evitando la evaporación de agua. Las cremas y lociones hidratantes contienen por lo general una fase acuosa y también una grasa (aceites), cumpliendo ambas funciones. Más adelante veremos las características de los distintos aceites y cual puede ayudar mejor según sea el estado de la piel. También serán útiles los extractos que promuevan la regeneración de las células.

LA DERMIS 1.- Qué es y para qué sirve Es la segunda capa de la piel, se encuentra bajo la epidermis, a la que está unida por la “membrana basal” y es entre 15 y 40 veces más gruesa, su grosor máximo es de 5mm. Es la

segunda línea de defensa de nuestro cuerpo, y consiste en una especie de acolchado que la protege sobre todo de los traumatismos. traumatismos

2.- Cómo es

Está

constituída por una serie de fibras que forman una especie de malla esponjosa, y que están rodeadas de una sustancia que se llama “sustancia amorfa fundamental” que está formada fundamentalmente por mucopolisacáridos. En la dermis no hay muchas células, el elemento fundamental son las fibras. Es atravesada por vasos y nervios y se localizan en ella las glándulas y los folículos pilosos. Dado que el elemento fundamental son las fibras,, vamos a ver cuales son y qué hacen: ◦ Fibras colágenas,, compuestas básicamente de colágeno. Proporcionan resistencia, firmeza. Funcionan como un muelle y hacen que la piel recupere su forma tras cualquier estiramiento o deformación. De hecho tienen forma de muelle.

◦ Fibras elásticas,, compuestas por elastina, proporcionan elasticidad a la piel, evitando su rotura. Funcionan como un tejido elástico y tienen gran capacidad de expansión. ◦

Una pequeña porción de fibras reticulares,, que forman como una malla de sostén.

3.- Qué tipo de ayuda necesita la dermis Todas las fibras que forman la dermis son creadas por unas células (fibroblastos) que hasta los 20 años están en plena actividad creando tejidos, pero a partir de esa edad se limitan a tareas de reparación, y cada vez más lentamente, lo que hace que la piel pierda firmeza. Cuando esto sucede, lo que debemos conseguir es que estas células trabajen de nuevo con más intensidad. De modo que para mantener su estado, su espesor y su elasticidad, la dermis necesita de sustancias que estimulen la producción de colágeno y elastina, que aportaremos normalmente con cremas que tengan un gran poder de penetración que las contengan

LA HIPODERMIS 1.- Qué es y para qué sirve Es la capa más profunda de la piel, algunos la consideran como parte de la demis, y cumple varias funciones: • Es un importante factor de protección frente a traumatismos • Protege de la pérdida de calor • Estéticamente da turgencia a la piel (cuando falta ésta se afloja formando pliegues y arrugas) 2.- Cómo es Está formada por fibrillas que se disponen oblicuamente formando huecos que ocupan los llamados lóbulos grasos. Estos lóbulos a su vez están divididos como en bolsitas que se llaman lobulillos adiposos. Las fibrillas son más finitas cuanto más profundas son y cada vez hay más compartimentos de grasa, hasta que llega un momento que se confunde con el tejido graso subcutáneo.

SEMIMUCOSAS Son zonas de transición entre la piel y las mucosas internas (labios, genitales..). Los cuidados que se les dispensan tienen que ver fundamentalmente con la higiene, pero cosméticamente tienen especial trascendencia los labios.

APÉNDICES CUTÁNEOS La piel contiene gran cantidad de órganos anexos y apéndices cutáneos: • • • •

Glándulas sudoríparas Glándulas sebáceas Pelos Uñas

No los vamos a tratar en detalle.

ACCIÓN DE LOS COSMÉTICOS SOBRE LA PIEL Aplicados sobre la piel los cosméticos pueden tener tres tipos de acción: 1.- FISICA: Superficial. Es la que desarrollan los cosméticos clásicos, por ejemplo: • • •

Jabones Maquillajes Cremas protectoras con función barrera.

2.- FISICO-QUÍMICA: También superficial. En este caso, el cosmético reacciona con algún componente de la piel. Son por ejemplo los: • • •

Queratolíticos (eliminan las durezas) Astringentes Emolientes

3.- BIOLÓGICA: Profunda. Provoca modificaciones metabólicas en las células. Son por ejemplo los cosméticos: • • •

Nutritivos Anhidróficos (reducen la sudoración) Despigmentadores

SI LA PIEL ES IMPERMEABLE, ¿CÓMO SE LAS APAÑAN LOS COSMÉTICOS PARA ATRAVESARLA? La vía a través de las células queratinizadas de la epidermis es prácticamente infranqueable en la piel normal para las sustancias empleadas por los cosméticos habituales. Cuanto más delgada es la capa córnea algo más fácil es la penetración de sustancias, y viceversa. Sin embargo es a través de los orificios de salida del pelo y sebo y del sudor por donde la penetración es más factible. A través de la unidad pilosebácea la entrada de agua es casi imposible, pero sí la de sustancias liposolubles. La penetración de agua en el conducto sudoríparo es técnicamente posible, pero en la práctica la corriente que impulsa el sudor hacia el exterior la dificulta. De modo que las sustancias solubles en agua sólo podrán actuar sobre la superficie de la piel, y sólo las solubles en grasa la podrán atravesar y llegar a las capas profundas. Además, es más fácil la penetración de éstas sustancias en las zonas más densamente pilosas.

¿QUÉ GRADOS DE PENETRACIÓN PODEMOS ALCANZAR? 1. Contactación: No existe penetración, los cosméticos actúan sólo sobre la capa córnea, pero para llegar a ella tienen que atravesar la capa gaseosa y la emulsionada. Cuanto menor sea la tensión superficial de la sustancia mejor conseguirá atravesarla (p.e: el alcohol la moja más que el agua). Añadir algún tipo de tensioactivo ayuda a este fin. Entre los cosméticos que actúan a este nivel están el maquillaje, los productos de limpieza comunes o las pomadas protectoras impermeables. 2.- Penetración: Alguno de los componentes del cosmético se introduce dentro de la piel y entra en contacto con las células vivas, no basta que se quede en los conductos pilosebáceos. 3.- Absorción: La sustancia alcanza las capas más profundas de la piel e incluso son absorbidas por el sistema circulatorio y el linfático, extendiéndose a todo el organismo, de modo que su acción no es sólo local, sino general.

SUSTANCIAS QUE PENETRAN A TRAVÉS DE LA PIEL •

Compuestos fenólicos

• Metales pesados como el plomo o el mercurio forman compuestos orgánicos que son liposolubles y pueden absorberse. • Metaloides. Algunos tienen efecto tóxico, como el arsénico o el talio; otros son beneficiosos, como el iodo y el azufre. Liposolventes. Penetran porque anulan la capa emulsionada y desintegran la • membrana lipídica celular. Hay dos tipos: • Origen vegetal: alcoholes, ésteres, acetonas, aldehídos... son menos enérgicos que los de origen mineral • Origen mineral (derivados del petróleo) no deben usarse en cosmética porque son desecantes e irritan. Las saponinas tampoco deben usarse en cosmética porque tienen acción hemolítica (desintegran los glóbulos rojos) • Líquidos volátiles liposolubles. Traspasan directamente la barrera epidérmica. Hidrocarburos, derivados halogenados, alcoholes, acetonas, ésteres, bases orgánicas líquidas y aceites esenciales. Gases. La mayoría de las sustancias en estado gaseoso y los gases verdaderos • penetran por difusión, especialmente el oxígeno y el CO2. • ◦

Cuerpos grasos. Las grasas animales son más penetrantes que las vegetales y éstas que las minerales.

◦ Dentro de las grasas animales y vegetales, los lípidos y los glicéridos (insolubles en agua) son menos penetrantes que los esteroides (espermaceti) • Vitaminas A, D y E y carotenos. La vitamina B6, pese a ser hidrosoluble, también ha demostrado traspasar la barrera cutánea. • Hormonas. Los estrógenos, testosterona, progesterona, desoxicorticosterona, hidrocortisona y derivados penetran con rapidez y facilidad. (Tienen indudables efectos positivos pero también indudables efectos secundarios, por lo que deben usarse con precaución).