La Grandeza y la Obra de Jesús Jesús Nuestro Sumo Sacerdote Noviembre 14-15, 2015 Hebreos 4:14-5:3 ‘Por tanto teniendo un gran sumo sacerdote que traspasó los cielos Jesús el Hijo de Dios retengamos nuestra profesión. 15 Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo conforme a nuestra semejanza, pero sin pecado. 16 Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro. 5:1 Porque todo sumo sacerdote tomado de entre los hombres es constituido a favor de los hombres en lo que a Dios se refiere para que presente ofrendas y sacrificios por los pecados; 2 para que se muestre paciente con los ignorantes y extraviados puesto que también él mismo esta rodeado de debilidad 3 y por causa de ella debe ofrecer por los pecados tanto por sí como por el pueblo.” ¿Alguna vez te has preguntado por qué Jesús no vino inmediatamente después de la caída de Adán y Eva para ahorrar toda la difícil historia desde Abraham hasta la encarnación? No fue porque Dios hizo varios intentos hasta que dio con la mejor solución. Desde el momento de la caída Dios profetizó la venida de Cristo en Génesis 3:15 “Pondré enemistad entre tú y la mujer, y entre tu simiente y la de ella; su simiente te aplastará la cabeza, pero tú le morderás el talón.” Dios tenía planeado nuestro perdón en Cristo desde el principio 2 Timoteo 1:9 “Pues Dios nos salvó y nos llamó a una vida santa, no por nuestras propias obras, sino por su propia determinación y gracia. Nos concedió este favor en Cristo Jesús antes del comienzo del tiempo.” Entonces, desde la eternidad Dios planificó la muerte de Jesús por nuestros pecados, y Dios gobierna la historia y por eso logra que sus planes se lleven a cabo sin dificultad. Jesús no vino antes porque se necesitaba un contexto para que sepamos porque vino el Hijo de Dios y que es lo que hizo y lo que hace. Si tratáramos de eliminar el Antiguo Testamento y habláramos de Jesús sin ese contexto no podría entenderse completamente Su papel. Sin el Antiguo Testamento y solo con la referencia de nuestra cultura lo podríamos darle el título de héroe, o abogado defensor, mentor, o erudito, todas estas cosas son verdad en cuanto a Él, pero Él es mucho mas que eso Él es nuestro Sumo sacerdote. De hecho ya se nos había exhortado a considerar a Jesús como nuestro Sumo Sacerdote en el 3:1 “Por tanto hermanos santos participantes del llamamiento celestial y considerad al apóstol y sumo sacerdote de nuestra profesión Cristo Jesús.” Pero aquí de nuevo se nos recuerda esta realidad tenemos un gran Sumo Sacerdote que atravesó los cielos v.14 “Por tanto teniendo un gran sumo sacerdote que traspasó los cielos Jesús el Hijo de Dios retengamos nuestra profesión [lo que confesamos].” 1

En nuestro tiempo, no conocemos un sacerdote de esa categoría, que sea un sumo sacerdote, como los del Antiguo Testamento; hemos visto lo que hacen los sacerdotes de la iglesia tradicional pero lo que ellos hacen, aun al que llaman sumo pontífice, no tienen que ver con la función que Dios instituyó, ellos no es un ejemplo adecuado. Por eso Dios planificó los sacerdotes en la historia de Israel para que comprendiéramos esta categoría de lo que es ser un Sumo sacerdote. Necesitamos volver al contexto de la historia de Dios con Israel para aprender algunas verdades profundas y maravillosas que de otra forma no alcanzaríamos a comprender completamente. El Padre considera la categoría del Sumo Sacerdote como algo verdaderamente importante. No es anticuada ni irrelevante para nuestro tiempo. Jesús dijo en Juan 5:39 “Ustedes estudian con diligencia las Escrituras porque piensan que en ellas hallan la vida eterna. ¡Y son ellas las que dan testimonio de mi!” Todo en la Escritura tiene que ver con Jesús. Dios estaba guiando la historia de Israel para ayudarnos a que la venida de Jesús tuviera sentido para nosotros. EL ANTIGUO TESTAMENTO ES ESENCIAL PARA PROFUNDIZAR EN EL CONOCIMIENTO DE JESÚS Y DE SU OBRA como le hemos puesto a esta serie de enseñanzas. Dios diseñó el sacerdocio para comprendiéramos la obra de Jesús, no es que Jesús le copiara a ellos mas bien, Él es la razón de la existencia del sacerdocio. Hebreos 5:1-3 nos empieza a dar una pequeña viso sobre quienes fueron los sumos sacerdotes en la vida del pueblo del Antiguo Testamento v.1 “Porque todo sumo sacerdote tomado de entre los hombres es constituido a favor de los hombres en lo que a Dios se refiere, para que presente ofrendas y sacrificios por los pecados.’ Fueron señalados para el bien del pueblo a fin de que ellos pudieran presentar ofrendas y sacrificios por los pecados. LO QUE NOS ENSEÑA EL SACERDOCIO ES QUE HAY UN DIOS SANTO Y HAY PECADO EN EL HOMBRE. Este pecado ha creado una barrear entre Dios y Su pueblo pero Dios proveyó un medio para que el pueblo sea reconciliados con Él. Él ordenó sacerdotes humanos que serían los intermediarios que ofrecieran los sacrificios de animales que fueran una especie de sustituto por el pecador. Pero este sistema sacerdotal que Dios ordenó no podía ser suficiente por sí mismo, porque el sumo sacerdote también era pecador y primero necesitaba ofrecer sacrificios por sus propios pecados, como lo dice Hebreos 7:27-28 “que no tiene necesidad cada día, como aquellos sumos sacerdotes, de ofrecer primero sacrificios por sus propios pecados, y luego por los del pueblo; porque esto lo hizo una vez para siempre, ofreciéndose a sí mismo.” Esta condición de los sumos sacerdotes los hacía imperfectos y su presencia ante Dios en el lugar santo también era limitada; por otra parte eran hombre mortales y tenían que ser reemplazados, como lo dice Hebreos 7:23-25 ‘Y los otros sacerdotes llegaron a ser muchos, debido a que por la muerte no podían continuar; 24 mas éste, por cuanto permanece para siempre, tiene un sacerdocio

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inmutable; 25 por lo cual puede también salvar perpetuamente a los que por él se acercan a Dios, viviendo siempre para interceder por ellos.” Los sacerdotes del AT no podían garantizar una presencia continua para intervenir por el pueblo delante de Dios. A medida que avancemos en el libro de Hebreos se aclararán todas las insuficiencias del antiguo sacerdocio. Pero ese es el propósito de toda la historia de Israel: el sacerdocio es imperfecto, inadecuado, e incompleto. Señala hacia algo mayor, al Alguien perfecto y completo. Señala hacia Jesucristo, el Hijo de Dios, nuestro supremo y perfecto Sumo Sacerdote. De hecho, incluso los sacrificios que el sumo sacerdote ofrece (5:3) señalan a Jesús, porque Jesús es un cumplimiento tan perfecto y completo del sacerdocio que él no solo es el Sumo Sacerdote, también es el sacrificio que el Sumo Sacerdote da. Entonces veamos los versículos de hoy acerca de nuestro Sumo Sacerdote y lo que Él hace hoy en nuestras vidas. 1. Jesús esta vivo: A diferencia de los sacerdotes que murieron, Jesús resucitó para nunca mas volver a morir. Por eso pudo darle fin al sistema del sacerdocio del AT. Hebreos 7:24 “Y los otros sacerdotes llegaron a ser muchos, debido a que por la muerte no podían continuar; 24 mas éste, por cuanto permanece para siempre, tiene un sacerdocio inmutable;” 2. Jesús traspasó lo cielos: En este momento esta con Dios el Padre sobre los cielos. Anteriormente los sacerdotes entraban una vez al año al lugar santísimo lo cual era sombra de la realidad que es el cielo pero ahora Jesús vive ahí nuestro Sumo Sacerdote. Él tiene acceso inmediato a Dios día y noche Hebreos 7:25 “por lo cual puede también salvar perpetuamente a los que por él se acercan a Dios, viviendo siempre para interceder por ellos.” Es glorioso saber que el mas glorioso esta delante del Padre a mi favor y a tu favor 3. Jesús es el Hijo de Dios: Como ya lo hemos visto, Jesús no es un humano exaltado a una posición sacerdotal es Dios mismo quien creó los cielos Hebreos 1:8-9 “Mas del Hijo dice: Tu trono, oh Dios, por el siglo del siglo; Cetro de equidad es el cetro de tu reino. 9 Has amado la justicia, y aborrecido la maldad, Por lo cual te ungió Dios, el Dios tuyo, Con óleo de alegría más que a tus compañeros.” Jesús no lleva la sangre de toros y cabras hacia el tabernáculo celestial. Él lleva su propia sangre (Hebreos 9:12). Y cuando Dios el Padre ve este sacrificio por mi pecado, dice: "Suficiente. La deuda ha sido pagada. Mi justicia ha sido vindicada. Mi gloria es exaltada". Y pasa por alto mi transgresión castigada y nos tiene como su hijo inocente y amado. 4. Aunque Jesús fue tentado, nunca cayó: Alguien podría decir, si Jesús nunca pecó ¿entonces como sabe que es la tentación? Existe la idea de que las personas buenas no saben lo que es la tentación pero al contrario quienes no se rinden ante la tentación saben mejor lo que es la tentación. LOS QUE HAN CAÍDO SABEN COMO CAER PERO NO COMO VENCER, JESÚS SÍ SABE QUE ES LA TENTACIÓN Y SABE AYUDAR LOS QUE SON TENTADOS. Solo los que tratan de resistir la tentación saben cuán fuerte es… Un hombre que se rinde a la tentación después de cinco minutos, simplemente no sabe cómo hubiera 3

sido una hora después. Es por esa razón que las personas malas, en cierto sentido, saben muy poco acerca de la maldad. En cambio Cristo, por ser el único hombre que nunca cedió a la tentación, es también el único hombre que conoce a plenitud la tentación y como vencerla. Jesús puede simpatizar con nuestro dolor porque el experimentó y sufrió todo lo que nosotros hemos sufrido, aun nuestra atracción por el pecado, Él fue tentado: • a mentir (para salvar su vida) • a robar (para ayudar a su pobre madre cuando su padre murió) y a codiciar (todas las cosas agradables que tenían los ricos) • a vengarse (cuando fue acusado falsamente) • a la lujuria (cuando María secó sus pies con su cabello) • y a la auto-lástima (cuando sus discípulos cayeron dormidos en su última hora de prueba) • y a murmurar contra Dios (cuando Juan el Bautista murió por el capricho de una mujer que bailó ante el rey) • y a burlarse de sus acusadores (cuando no pudieron responder sus preguntas) 5. Por eso es compasivo: Jesús fue tentado igual que nosotros pero no pecó; Él conoce la batalla contra el pecado y en cada encuentro que tuvo venció. El es compasivo, Él no es indiferente a nuestra batalla contra el pasado, sabe por lo que estamos pasando. 6. Por eso retenemos nuestra esperanza y nos acercamos a Dios: Porque Él vive y esta en la presencia de Dios con el sacrificio de Su sangre y esta lleno de compasión por Su pueblo: 1. Retenemos nuestra confesión de fe: Hebreos 10:23 “Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió.” Tenemos una esperanza inconmovible. Es lo que hemos visto no permitir la incredulidad, seguir firmes en nuestra fe en Dios y en Cristo. 2. Nos acercamos con confianza al trono de la gracia: Hebreos 4:16 “Acerquémonos confiadamente al trono de la gracia para alcanzar misericordia y hallar gracia para la ayuda oportuna.” Todos sabemos que tenemos pecados y no nos sentimos dignos de recibir la ayuda que necesitamos. Yo necesito ayuda para lidiar con mis luchas, para llevar a mi familia, mi esposa e hijas, mi salud, finanzas, los diversos desafíos de cada día. Necesito la ayuda y siento que no la merezco. ¿Qué puedo hacer? Usted puede hacer 4 cosas: • Puedo tratar de hacerme el fuerte y pretender que todo esta bien. • Puedo ahogarlo todo en una vida de placeres sensuales. • Puedo dar lugar a la pasividad y a la desesperación

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• Puedo confiar en la obra que hizo Jesucristo mi Sumo Sacerdote para destruir la desesperanza para humillar al súper héroe y rescatar al que se esta ahogando. No me voy a entregar a la lascivia ni a la desesperación. Como tengo un Sumo Sacerdote el trono de Dios es un trono de gracia para recibir la ayuda en este tiempo de necesidad. USTED NO ESTA ATRAPADO. Diga no a la mentira de que no necesita nada, reciba a Jesús como su tesoro, Salvador, Señor y Sumo Sacerdote.

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