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LA HERENCIA DE LOS BAUTISTAS AMERICANOS PROPÓSITO DE ESTE TALLER Como resultado de este taller, las y los participantes serán capaces de: •

Nombrar y describir los puntos claves de cuatro a seis de los principios de los Bautistas Americanos.

•

Compartir las maneras que esos principios pueden moldear la vida y ministerio de las iglesias.

POSIBLES CONTEXTOS Este taller puede ser usado regionalmente o en grupos, involucrando a participantes de diferentes iglesias. Este taller también podría ser usado por la congregación local que quiera explorar las dimensiones de nuestra Herencia Bautista Americana. CONSEJOS PARA EL LÍDER No se requiere ser un erudito sobre la historia y la Herencia Bautista Americana para conducir este taller. Todo lo que necesita es la información que se encuentra en los folletos que van a ser usados por los/as participantes. Usted principalmente se concentrará en guiarlos/as a través del proceso, animándoles y organizando lo que han de compartir con todo el grupo. Los recursos que sugerimos al concluir el taller, pueden ayudar a familiarizarse con la historia de los Bautistas Americanos. Estos también pueden ser una ayuda valiosa para los grupos pequeños que se han de formar durante el taller. Los folletos educativos B–G incluyen ilustraciones del libro (Guardadores de la fe: Biografías ilustradas sobre la historia bautista, escrito por Jeffrey D. Jones, Judson Press, 1999). El libro está disponible únicamente en inglés y corresponde a cada principio, como sigue: Folleto B Folleto C Folleto D Folleto E Folleto F Folleto G

Libertad de Conciencia El Sacerdocio de los Creyentes Autonomía Congregacional Libertad Religiosa El Bautismo del Creyente La Biblia

Lulu Fleming Helen Barrett Montgomery Isabel Crawford John Clarke John Smyth Adoniram Judson

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BOSQUEJO DEL TALLER I

Introducción (5 minutos)

II

Cuestionario de la Herencia Bautista (10 minutos)

III

Investigación y preparación de grupos pequeños (30 minutos)

IV

Presentaciones (30 minutos)

V

Implicaciones para nuestra iglesia (10 minutos)

VI

Conclusión (5 minutos)

MATERIALES REQUERIDOS Cada persona necesitará una copia de los folletos. Aunque los/as participantes no trabajarán con todos ellos durante el curso del taller; estos les proveerán una valiosa ayuda para ser leídos en el futuro. PLAN Y DETALLES DEL TALLER I

Introducción ( 5 minutos) Dé la bienvenida a los/as participantes del taller. Si usted está trabajando para un grupo de iglesias, pida que escriban los nombres en etiquetas para identificarlos/as. Motívelos/as a que compartan en forma breve lo que más les gusta de ser un bautista. Al hacer esto, los/as participantes comprenderán más claramente los principios bautistas como se menciona en el folleto A.

II

Preguntas sobre la Herencia Bautista (10 minutos) Distribuya el folleto A. Pida a las personas que se fijen en la lista de los principios bautistas que se encuentra en la columna de la izquierda. Pregunte cuántos de esos principios fueron mencionados durante el tiempo de apertura. Luego pregúnteles si estos principios podrían haber sido considerados como importantes aunque ellos/as nos los discutieron anteriormente. Explique que el propósito del cuestionario, es simplemente para presentar cada uno de los aspectos que tratan sobre la Herencia Bautista Americana. Con ello, no se espera que cada uno/a sepa todas las respuestas. Motive a los/as participantes que traten de responder lo mejor que puedan. Usted puede hacer esto tanto en grupos como individualmente. Proceda a revisar el cuestionario contestado. Las respuestas correctas deben de coincidir con las preguntas como sigue: 1) b. 2) e. 3) a. 4)c. 5) f. 6) d. Las respuestas

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en su orden deben ser: Obadiah Holmes, Helen Barrett Montgomery, Roger Williams, Sarah Boardman, Jitsuo Morikawa, Lulu Fleming, Joanna P. Moore, Santiago Soto Fontanez, Isabel Crawford, Samuel DeWitt Proctor. La versión en inglés del libro (Guardadores de la Fe) tiene una lista en la sección de recursos e información acerca de los personajes mencionados. Lo que resta del taller, ayudará a los participantes a aprender más sobre los principios. Felicite a los /as participantes por su buena actitud, ya que esto no es fácil. Anímeles a seguir indagando acerca de nuestra Herencia Bautista. III

Grupos pequeños, investigación y preparación (30 minutos) Dependiendo del número de personas, divídalos en grupos pequeños entre 4 a 6 participantes. Los grupos no deben contar con más de 2 o 3 personas. Asígnele uno de los seis principios a cada grupo que se ha formado. Explíqueles que deben de investigar el principio asignado con el material que usted les proveerá. Seguidamente, ellos/as procederán a estudiar el principio cuidadosamente para presentar un trabajo en conjunto ante el grupo. Si decide tener solamente entre 4 o 5 grupos, necesitará reducir el número de los principios. Proceda a distribuir los folletos B hasta el G a los grupos asignados. Explíqueles que en el primer lado del folleto, se encuentra una descripción del principio. En el inverso se halla la historia de la persona que es el vivo ejemplo del principio en estudio. Haga que el grupo lea el folleto para que ellos/as decidan cómo usar la información provista. De esta manera, ellos/as van a saber cómo planear la presentación que deberá ser compartida con todo el grupo. Los/as participantes también podrían hacer un “comercial” sobre el principio. Recuérdeles que el énfasis debe estar en el principio, más que en la persona que lo representa.

IV

Presentaciones (30 minutos) Reúna a los grupos de nuevo y pídales que compartan su presentación. Proceda a distribuir el folleto H, del cual los/as participantes pueden tomar notas de cada uno de los principios. Reciba cada presentación con afirmación y gratitud. Luego pregunte: ¿Qué aprendió acerca del principio presentado? Permítales unos minutos para entrar en diálogo y discusión.

V

Implicaciones para nuestra iglesia ( 10minutos) Pregúnteles en qué maneras y cómo esos principios impactan sus congregaciones. Esas preguntas (las cuales deben ser adaptadas cambiando “nuestro” en lugar de “su” dado el caso que los/as participantes pertenezcan a diferentes iglesias.) Usted puede ayudar a moderar la discusión. - ¿En qué maneras pueden estos principios ser evidentes en su iglesia? - ¿Cómo estos principios hacen que su iglesia sea diferente de las demás?

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- ¿Refleja alguno de estos principios, el hecho que somos una iglesia que tiene convenios y no de credos? - ¿Qué principio apoya la centralidad que tiene el sermón en la adoración bautista? - ¿De qué manera el sacerdocio de todos los creyentes impacta las expectativas de los ministros y laicos en la vida de la iglesia? VI

Conclusión (5 minutos) Revise brevemente el material expuesto en el transcurso del taller. Pregunte rápidamente de qué maneras podrían responder a la pregunta inicial: ¿Qué es lo que más les gusta de ser bautistas? Pregunte a los/as participantes si ellos/as aprendieron alguna cosa acerca de los bautistas y qué más ellos les gustaría conocer acerca de los mismos. Indíqueles la lista de recursos que está al dorso del folleto H. Concluya el taller con una oración dando gracias por la riqueza de nuestra herencia como bautistas. Pídale a Dios que nos afirme y anime a permanecer en la verdad de esa herencia en el mundo de hoy.

Escrito por Jeff Jones. Revisado por Cassandra Williams and Maria Fela Barrueta, 2006. © Ministerios Nacionales, Iglesias Bautistas Americanas, USA, 2006.

Este taller ha sido producido, traducido y contextualizado por la Junta de Ministerios Nacionales de las Iglesias Bautistas Americanas, EUA, con el apoyo de las ofrendas de Misiones Unidas América Para Cristo.

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FOLLETO A p.1

CUESTIONARIO SOBRE LA HERENCIA BAUTISTA Trazando una línea desde la izquierda, busque la respuesta correcta sobre los Principios Bautistas que se encuentran en la columna al lado derecho.

1. Libertad de Conciencia

a. El derecho de cada iglesia local de decidir el orden y prácta ministerial.

2. Libertad Religiosa

b. La responsabilidad y el derecho de cada persona de venir ante Dios y tomar sus propias decisiones en cuando a esa relación con Dios.

3. Autonomía Congregacional

c. La creencia de que cada persona puede ir directamente a Dios, sin necesidad de un intermediario; y de que cada persona tiene un llamado de Dios a ministrar en la iglesia o el mundo.

4. Sacerdocio de los Creyentes

d. La creencia de que una persona debe hacer un compromiso consciente con Cristo, basada en el poder de la experiencia transformadora de Cristo en sus vidas antes de ser bautizados.

5. La Biblia como Única Norma de Fe y Conducta

e. La creencia de que la fe verdadera depende de la ausencia de coerción de otros, incluyendo la de los gobiernos.

6. Bautismo de Creyentes

f. La creencia de que la Biblia sola tiene autoridad sobre la conducta de nuestras vidas y de las iglesias.

Ministerios Nacionales, Iglesias Bautistas Americanas, USA, 2006. Se autoriza hacer copias para uso nacional, regional y eventos educativos locales.

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FOLLETO A p.2

LLENE LOS ESPACIOS Escriba en los espacios que corresponden los nombres de las y los bautistas más prominentes: Roger Williams, Isabel Crawford, Joanna P. Moore, Jituso Morikawa, Obadiah Holmes, Samuel DeWitt Proctor, Lulu Fleming, Helen Barrett Montgomery, Santiago Soto Fernández y Sarah Boardman. ____________________ : Líder bautista del estado de Rhode Island. Fue azotado por conducir un servicio de adoración en Massachussets en la residencia de un amigo. ____________________ : La primera mujer presidente de los bautistas americanos, quien tradujo el Nuevo Testamento al inglés moderno. ____________________ : A pesar de que fue uno de los fundadores de la Primera Iglesia Bautista en América, él solamente permaneció como bautista por unos cuantos meses. ____________________ : Fue misionera en Burma con su primer esposo. Posteriormente se casó con Adoniram Judson. ____________________ : Después de haber pasado por un campo de la segunda guerra mundial, desarrolló un agudo sentido de evangelizar no solamente la gente, sino también las instituciones. ____________________ : Primera mujer misionera afroamericana. Ella cursó estudios de medicina a su regreso a Estados Unidos por razones de salud, para así poder expandir su ministerio al regresar a África. ____________________ : Instrumento en el establecimiento de la obra con esclavos libres. Ella se enfocó principalmente en las maneras de desarrollar una familia con valores. ____________________ : Nació en Puerto Rico. Sirvió como misionero en México antes de mudarse a Nueva York, donde desempeñó un papel sobresaliente como educador y ser gran ejemplo para sus colegas. ____________________ : Su efectivo trabajo con los indios americanos terminó en controversias con pastores locales acerca del servicio de comunión. ____________________ : Sirvió como profesor, educador, presidente de un collge y como oficial gubernamental.

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FOLLETO B

LIBERTAD DE CONCIENCIA Lo que nos hace bautistas, es básicamente nuestra libertad de conciencia. Nuestra creencia en el bautismo de los creyentes, la libertad religiosa y el sacerdocio de los creyentes descansa precisamente en la libertad de conciencia. Sencillamente, éste es el derecho y la responsabilidad individual que tiene cada persona ante Dios de tomar decisiones acerca de su relación con El. Esta creencia explica la diversidad que existe entre las iglesias bautistas, así como la falta de confianza en asuntos de credos. Esta práctica tanto en la vida congregacional y denominacional, permiten que El Espíritu Santo trabaje en nuestro medio brindándonos nuevas posibilidades; que nos conducen a nuevas y mejores formas de fidelidad. Entendida correctamente, la libertad de conciencia no significa vivir desordenadamente, sino por el contrario, enfatiza la responsabilidad que debe tener cada persona. Esto quiere decir, que uno mismo debe ponerse en las manos de Dios, ya sea por medio de la comunidad de fe o de manera individual, pero siempre sometiéndose a la soberanía de Dios. En inglés se usa el término alma (soul) para referirse a esta libertad. Este término es algo complicado. En nuestros días creemos que hace referencia al aspecto religioso de una persona; pero cuando los primeros bautistas tuvieron la tarea de hablar sobre la libertad de conciencia, el concepto de alma encerraba mucho más. Ellos entendían el alma como el centro de nuestra existencia, como esa parte central que nos provee la esencia de lo que somos como personas. Ese centro es libre, como afirmaban y daban por hecho los primeros bautistas. No era que debería ser libre o que debería tener leyes para garantizar su libertad, sino que el alma es libre. Así es como Dios nos creó —cada persona con un alma libre. En esa libertad cada individuo desarrolla una relación y comunión con el Creador. Es por esa libertad que las personas descubren quiénes son realmente y qué es lo que Dios desea para ellas. Libertad de conciencia no quiere decir que podemos ser o hacer lo que se nos antoje. Libertad de conciencia es descubrir y responder al llamado de Dios en la vida de forma individual. Es el buscar y seguir la voluntad de Dios. Los bautistas hemos entendido que esto no es algo que les pueda ser impuesto o que ellos puedan imponer a los demás. Para los bautistas, existen dos implicaciones importantes sobre la libertad de conciencia 1) Rechazamos cualquier cosa que implique represión a la libertad de conciencia 2) Insistimos en todo lo que implique libertad de conciencia. Es esta misma libertad la que nos hace no aceptar ninguna forma de acondicionamiento religioso. Por ende, estamos en desacuerdo en que el gobierno se involucre en asuntos religiosos, de tal manera que cada uno es libre de orar o de no hacerlo. La libertad de conciencia es lo que nos guía a aceptar un gobierno de orden congregacional, no uno de carácter jerárquico que maneje las cosas a su voluntad e imponga su voluntad o su entendimiento de Dios y de su Palabra sobre los demás. Convivir en el contexto de diferentes valores, diferentes términos de cómo es entendida la voluntad de Dios y cómo es interpretada la Biblia, no es nada fácil. No tenemos respuestas establecidas y aun hoy, el intento de llegar a acuerdos conduce a intensos debates que a veces producen desacuerdos y hasta conflictos, bien sea en la congregación o en la denominación. Pero el principio sigue intacto. La libertad de conciencia es la esencia de lo que significa ser un bautista. Ministerios Nacionales, Iglesias Bautistas Americanas, USA, 2006. Se autoriza hacer copias para uso nacional, regional y eventos educativos locales.

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FOLLETO C

EL SACERDOCIO DE LOS CREYENTES Podemos definir esto de una manera simple: “El sacerdocio de los creyentes es la convicción de que cada cristiano es un ministro de Dios para el mundo”.1 Ser sacerdote significa que estamos dispuestos y dispuestas a presentarnos ante Dios directamente. Para esto no se necesita intermediarios, nadie que nos indique lo que hemos de creer o la manera en la que debemos relacionarnos con Dios. Cada uno recibe directamente de Dios, tanto su gracia como las bendiciones de la salvación. Esto nos hace responsables ante Dios por nuestra vida y el ejercicio de nuestra fe. También quiere decir que cada uno de nosotros como creyente tiene la capacidad de realizar las funciones tradicionales del sacerdocio pudiendo desde escuchar la confesión de los demás conduciéndoles al perdón de Dios, hasta proveer liderazgo al servir la Santa Cena. Ser un sacerdote quiere decir que Dios nos llama a cada uno y cada una para hacer ministerio a toda su creación. Somos nosotros quienes representamos a Dios y somos la expresión de su amor a la humanidad. El sacerdocio de todos los creyentes manifiesta de una forma particular la manera en que se relacionan los laicos y el cuerpo clerical de las iglesias bautistas. Testifica que existe una igualdad en el ministerio que exalta a Dios. Que el ministerio se comparte en una forma integral, si existen diferencias, éstas son en cuanto a las funciones que se nos asignan; estas funciones no tienen nada que ver ni con el poder ni con el prestigio. La ordenación en este sentido, se da cuando la iglesia local hace saber que reconoce el llamado de Dios de uno de sus miembros y afirma que “reconocen los dones de liderazgo que Dios le ha dado dentro de la iglesia. Este será su ministerio”. Esencialmente, no existe ninguna diferencia entre los ministros ordenados y los laicos. Esto nos enseña que a cada uno de nosotros nos ha sido dado el don de ministrar.0 Por lo tanto, todos quienes seguimos a Cristo estamos llamados y llamadas a servir en su nombre bien sea en el hogar, en el trabajo, dentro de cada comunidad y donde nos sea posible. Pueda que exista alguna diferencia en las funciones de los ministros y los laicos. Pero debemos tener esto en claro: que todo miembro es un ministro o ministra. No todos son pastores o pastoras, pero tampoco existe una casta o clase sacerdotal, ni rango especial en las Iglesias Bautistas. El sacerdocio de los creyentes ofrece oportunidades muy grandes para cada bautista. Por lo tanto, ningún creyente debe ser un “espectador” que observa el trabajo de los demás. De ninguna manera debemos esperar que el pastor o pastora se encargue de todos los asuntos. Todos somos llamados a servir, no aceptando ningún tipo de jerarquía dentro de nuestras iglesias. 1

Tomado de “Proclaming the Baptist Mission”. Proclamando la Visión Bautista. Editado por Walter B Shurden, Smith and Helways Publishing, 1993. p.2. Ministerios Nacionales, Iglesias Bautistas Americanas, USA, 2006. Se autoriza hacer copias para uso nacional, regional y eventos educativos locales.

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FOLLETO D

AUTONOMÍA CONGREGACIONAL Las y los bautistas entienden el concepto de iglesia de una manera diferente a como la gente en general piensa. Para nosotros la iglesia local es la clave. Es ésta la que representa a toda la iglesia de Jesucristo. Ella es libre en la manera de manejar sus propios asuntos y su orden de adoración. La iglesia cuenta con el criterio de decidir con cuáles otras iglesias desea estar relacionada. A pesar de esto, las iglesias bautistas no son congregaciones separadas. Desde muy temprano, hemos visto la necesidad de agruparnos en asociaciones para llevar a cabo tareas que no podemos realizar solos. Con ello buscamos el consejo y la experiencia de los demás. Aunque han habido tiempos donde se han suscitado tensiones por asuntos que se prestan a diferencias, la verdad sea dicha: Los principios se mantienen inalterables. Esos principios son el enfoque de ésta sesión. William Keucher, Ex-Presidente de las Iglesias Bautistas Americanas lo define así: “La autonomía congregacional es el derecho que tiene cada iglesia (1) de escoger sus propios ministros y oficiales, (2) de confeccionar su propio pacto como iglesia, disciplina y confesión de fe, (3) para ordenar la vida de la congregación, cada iglesia cuenta con su propia constitución y estatutos, (4) y tiene el derecho de pertenecer a otras agencias denominacionales o cuerpos eclesiásticos, (5) es autónoma sobre sus propiedades y la administración de sus propios ingresos”1 Cada congregación bautista tiene la libertad de ser la iglesia que, ellos entienden, Dios les ha llamado a ser. Cuentan con plena libertad de conducirse como iglesia y en la manera en que se deben relacionar con los demás. Creemos que esto trae vida a la congregación, capacitándola para hacer ministerio dentro y fuera de sus paredes. No existe una orden jerárquica predeterminada que rige las congregaciones en forma dictatorial. No se cuenta con obispos o con un control ejercido desde afuera. Cada congregación cuenta con el criterio de cómo se rige su membresía. Cada iglesia local diseña su estructura organizacional y escoge el estilo de adoración que mejor le parezca. En este sentido las iglesias bautistas tienen mucho en común, pero cada una efectúa con criterio independiente los cambios que Dios les indica deben ser hechos. Esta libertad conlleva una inmensa responsabilidad. La responsabilidad de ser una verdadera iglesia. Iglesia que escucha y responde al llamado de Dios en la congregación; iglesia que permanece fiel en la vida del ministerio, que no acepta condicionamientos de ningún tipo y que solamente se sujeta a la autoridad divina. En cuanto a la membresía, ella tiene la responsabilidad de escuchar y obedecer a Dios en su total voluntad. Cada congregación es responsable de adoptar su postura de cómo escuchar a Dios y de combatir el error. Como creyentes, debemos estar atentos a los nuevos planes de Dios, siguiendo su dirección. Cada iglesia local es responsable de cómo hace las cosas y de rechazar cualquier dictadura externa que quiera interferir en su fidelidad como pueblo de Dios. La congregación debe exigirse total lealtad para con Dios.

1

“Autonomía Congregacional” por William F. Keucher, tomado de Baptist Leader marzo de 1976. P. 49.

Ministerios Nacionales, Iglesias Bautistas Americanas, USA, 2006. Se autoriza hacer copias para uso nacional, regional y eventos educativos locales.

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FOLLETO E

LIBERTAD RELIGIOSA Desde la época de la colonia, los bautistas han trabajado por establecer y mantener la libertad religiosa. Esto no siempre ha sido fácil. Nuestros predecesores fueron fustigados y encarcelados. Aun hoy, algunos que promueven este énfasis bautista son criticados y ridiculizados. Pese a eso, muchos bautistas se han mantenido fieles, siendo testigos de este principio. Cuando los bautistas hablan de libertad religiosa, entienden que los individuos toman decisiones libremente en asuntos de fe. Las decisiones deben ser hechas por el individuo y no por el estado u otra forma de gobierno. Los bautistas creen que la iglesia puede mantener su propósito e integridad, no dejando que ningún poder interfiera con su libertad. Los primeros bautistas, no vieron las cosas en forma usual o acostumbrada. Ellos tuvieron diferente nociones sobre como ser fiel y cómo responder a Cristo sobre lo que él demanda de sus vidas. Ellos muy a menudo se vieron en problemas con las autoridades, lo que sirvió como gran experiencia para enfatizar este concepto de libertad religiosa. Por la gracia de Dios, fuimos capaces de valernos de esta experiencia para forjar el ideal de libertad. Las persecuciones religiosas del pasado, solamente han conducido al establecimiento de nuevas autoridades que imponían su voluntad sobre los demás. Los bautistas buscaron e insistieron que toda religión o cuerpo eclesiástico es libre en creer, expresar y ejercitar su fe. Pensadores del siglo de las luces, tales como Jefferson y Madison, tuvieron una firme convicción de separación entre iglesia y estado. Este punto de vista esencialmente secular en naturaleza, produjo un gran muro de separación para no dejar imponer la religión por acciones respaldadas por el gobierno. Pero encontramos una segunda convicción sobre la libertad religiosa. Esta es muy evangélica en su aproximación y es, un principio bautista basado en el concepto de la libertad de conciencia. Con ello se explica el derecho que tiene cada uno de presentarse ante Dios y tomar sus propias decisiones sobre cómo relacionarse con Dios. Con este concepto no se pretende proteger a las personas de su religión, sino proteger su religión. Lo que se busca es que nada impida el desarrollo de su fe. El ideal es que no exista ninguna intervención del gobierno que interfiera en el libre ejercicio de la fe. Se busca proteger al cristiano y a la iglesia de la intervención del estado que puede desviar una fe vital y vibrante. El concepto secular de la separación se opone a que el gobierno imponga la oración para proteger a aquellos que no creen en ella. El concepto evangélico de separación se opone a que el gobierno imponga la oración porque cree firmemente en la importancia, el valor, el significado y el poder de la oración, y se niega a permitir que el gobierno determine lo que la oración es y cuándo debe hacerse. Ésta ha sido la visión bautista histórica de la necesidad de separación entre iglesia y estado. Esto nos ha colocado con aquellos que tienen un punto de vista más secular sobre algunos asuntos. También ha suscitado ataques, acusándonos de no ser verdaderos cristianos espirituales. También se dice que tomamos a medias lo que concierne a la fe. Pero este principio descansa en hechos que demuestran lo contrario. Cuidamos tan seriamente nuestra fe, que no creemos que nadie, aparte de la iglesia pretenda decirnos qué creer o practicar. Ministerios Nacionales, Iglesias Bautistas Americanas, USA, 2006. Se autoriza hacer copias para uso nacional, regional y eventos educativos locales.

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FOLLETO F

EL BAUTISMO DE LOS/LAS CREYENTES Los bautistas podemos enfatizar una fuerte tradición en cuanto al bautismo de los creyentes. Éste es para quienes han experimentado el poder salvador de Jesucristo en sus vidas; para quienes entienden el compromiso que se hace de prometerle fidelidad a Dios, de seguir el camino de Cristo y de que sus vidas sean transformadas. Afirmamos la forma como se practicó el bautismo realizado por John Smyth, en el año 1609, cuando encontrándose en Holanda, procedió a bautizarse él mismo y luego bautizó un grupo de hermanos. Ésta se parece mucho a la experiencia bautismal del etíope en el libro de los Hechos. Este pasaje ilustra algunos aspectos claves de lo que significa el bautismo para un bautista. Creemos en el Bautismo de los Creyentes. El ejemplo del etíope de preguntar e investigar para entender, nos presenta un modelo a seguir. Una vez que hemos recibido las respuestas a nuestras preguntas sobre aspectos de conducta y fe, una vez que sabemos que el Evangelio cuenta con los instrumentos para moldear nuestras vidas, es entonces cuando es posible hacer un compromiso con la profunda conciencia de someternos a Cristo como Señor de nuestras vidas. Así como el etíope que de una manera clara hizo saber que creyó en Cristo haciendo una confesión personal de su fe y pidió ser bautizado, nosotros entendemos que todo aquel que crea, puede hacer lo mismo en lo que se refiere al bautismo. Afirmamos que el bautismo es la manera como respondemos al obrar de Dios. Dios ha actuado por medio de Cristo para salvarnos. Esto es lo esencial del mensaje que Felipe le explicó al etíope. Ese mensaje es el Evangelio que compartimos. El mensaje que nos dice que el amor de Dios es grande. Un amor sacrificial que nos da la salvación. El bautismo es la manera como respondemos a esa invitación divina. Dios nos ofrece el perdón de nuestros pecados y el bautismo es señal que hemos aceptado ese perdón expresado mediante el bautismo. Dios nos ha dado el don de tener una nueva vida en Cristo. El bautismo es la señal de que nosotros hemos aceptado tan valioso don. Dios nos invita a vivir con dignidad esa nueva vida. Con el bautismo, estamos indicando que hemos aceptado y obedecido su llamado. Practicamos el bautismo por inmersión. El pasaje bíblico no nos habla de la forma como fue practicado el bautismo administrado por Felipe. Pero las indicaciones que se encuentran allí son claras. La Escritura menciona que “descendieron ambos al agua, Felipe y el eunuco, y le bautizó”. Luego el texto dice: “Cuando subieron del agua”. El pasaje indica que en ese lugar había una gran cantidad de agua. Esto, más el significado literal de bautizar, que es sumergir, nos provee bases bíblicas para nuestra práctica, ilustrándonos como debe ser administrado. Los bautistas hemos encontrado que la práctica por inmersión es la única que demuestra cómo el creyente hace morir su vieja manera de vivir y cómo se levanta para vivir una nueva vida con Cristo. Ésa debe ser la experiencia de todos aquellos y aquellas que obedecemos ser bautizados. Ministerios Nacionales, Iglesias Bautistas Americanas, USA, 2006. Se autoriza hacer copias para uso nacional, regional y eventos educativos locales.

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FOLLETO G

LA BIBLIA Posiblemente usted ha escuchado un dicho que reza: “Cuando dos o más bautistas se encuentran, seguramente van a surgir tres o más opiniones”. Los bautistas somos muy individualistas, variados y diversos. Insistimos que no existe un mediador que pueda colocarse entre Dios y nosotros, sólo Cristo; que tampoco existe un pastor o líder denominacional que nos imponga algo concerniente a la fe. Nuestros antecesores, hicieron énfasis de que cada creyente debe ser guiado por el Espíritu Santo y que cada uno es responsable de lo que piensa y cree. Lo que une a los bautistas en todas estas afirmaciones es que creemos que la Biblia es la Palabra de Dios divinamente inspirada. La Biblia es la fuente de autoridad que nos enseña la correcta manera de vivir. En su libro Historia de los Bautistas, Robert G. Torbet escribió acerca del compromiso del creyente con Las Escrituras: “Se ha observado que los bautistas en un alto grado y más que cualquier otro grupo, han reforzado las protestas del Protestantismo Evangélico contra el tradicionalismo. Los bautistas han hecho ver que son testigos fieles de la supremacía de las Sagradas Escrituras, que la Biblia es el único libro de fe y práctica que debe regular la vida cristiana. Así se demuestra en la historia de la iglesia, en donde grupos pequeños se dieron la tarea de ser fuertes en sus bases y en la enseñanza bíblica, a através de líderes como Pedro Waldo, John Wycliffe y John Huss, quienes desafiaron prácticas no bíblicas, como las misas para los muertos, ofrecer indulgencias por pecados que no se han cometido, formar peregrinaciones, adorar y buscar mediación de los santos. También rechazaron el desmedido énfasis del ritualismo. Para su propio dolor, ellos fueron perseguidos muy cruelmente por la iglesia que aceptaba el principio de la tradición opuestos a la autoridad de Las Escrituras”. ( Historia de los Bautistas, escrito por Robert G. Torbet, Valley Forge, Judson Press, 1973, P. 513) – En Inglés. En un sentido real, los bautistas son “la gente del libro”. Cuando tenemos necesidad de una respuesta, nosotros la buscamos y la encontramos en la Biblia, ya sea que tenga que ver con la iglesia, el ministerio o hacer las cosas a la manera de Dios. Lo mismo en lo que concierne a la manera en que debemos conducirnos. Sin negar la importancia de la tradición, nosotros siempre hemos tomado la Biblia como el libro en materia de fe y práctica.

Ministerios Nacionales, Iglesias Bautistas Americanas, USA, 2006. Se autoriza hacer copias para uso nacional, regional y eventos educativos locales.

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FOLLETO H

IMPORTANTES PRINCIPIOS BAUTISTAS

Libertad de conciencia

La Biblia

Autonomía congregacional

Sacerdocio de todos/as los/as creyentes

Bautismo de los/as creyentes

Libertad religiosa

Ministerios Nacionales, Iglesias Bautistas Americanas, USA, 2006. Se autoriza hacer copias para uso nacional, regional y eventos educativos locales.

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RECURSOS SOBRE LA HERENCIA BAUTISTA Brackney, William H. Vida y Pensamiento Bautista: Libro de Consulta. – Versión en InglésRevisado. Valley Forge, PA: Judson Press. Puede usarse como instrumento informático sobre las importantes creencias de los bautistas entre el siglo XVII al siglo XX. Freeman, Curtis W, James Wm. McClendon Jr. y Rosalee Velloso da silva. Baptist Roots. A Reader in The Theology of a Christian People. Valley Forge, PA: Judson Press, 1999. Versión en Inglés. Mayormente es un examen a la Teología Bautista. Contiene una relevante documentación sobre el crecimiento del Movimiento Bautista y sus diferentes denominaciones. Jones, Jeffrey D. Keepers of the Faith Illustrated Biographies from Baptist History. Valley Forge PA: Judson Press, 1999. Versión en Inglés. Contiene ocho Historias Bautistas que pueden ser incluidas en reproducidas e insertadas en boletines y panfletos. Jones, Jeffrey D. and Debra L. Sutton. We are Baptists : Studies for Youth. Valley Forge, PA: Judson Press, 1999. Versión en Inglés. Jones, Jeffrey D. and Debra L. Sutton. We are Baptists : Studies for Younger Children. Valley Forge, PA: Judson Press, 2000. Versión en Inglés. Jones, Jeffrey D. We are Baptists: Studies for Older Children. Valley Forge, PA. Judson Press, 2000. Versión en Inglés. Jones, Jeffrey D. We are Baptists: Studies for Adults. Valley Forge, PA: Judson Press, 2001. Versión en Inglés. Cada uno de estos cuatro volúmenes contiene 14 sesiones sobre tópicos de importancia de los bautistas. Se incluyen seis claves de los principios estudiados en éste taller. People with a Mission. Video. Es un documental clásico sobre la Historia de los Bautistas Americanos. Se incluye una guía de estudio. Shurden, Walter. The Baptist Identity: Four Fragile Freedoms. Macon, GA: Smyth and Helwys, 1993. Explora los orígenes históricos y contemporáneos sobre la idea de: Biblia, alma, religión y la libertad de conciencia. Una guía para el líder está disponible. Versión en inglés. Skoglund, John. The Baptists. Valley Forge, PA: Judson Press, 1967. Versión en Inglés. Libro que contiene una declaración de las doctrinas mayormente aceptadas por los bautistas.

Todos los recursos pueden ser ordenados llamando al 1-800-4-JUDSON. Vía Internet www.judsonpress.com.