Story Transcript
Lección 11 ¿POR QUÉ DEBEMOS CONGREGARNOS?
• • • •
•
PASAJE BÍBLICO “25…no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca”. Hebreos 10.25 VERSÍCULO PARA MEMORIZAR “2…puesto los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios”. Hebreos 12.2 OBJETIVOS Concientizarnos del verdadero significado y propósito de la iglesia. Conocer las características que debe tener una iglesia para elegir congregarnos en ella. Saber los motivos por los cuales debemos congregarnos. Clasificar el tipo de personas que existen en una iglesia. INTRODUCCIÓN Para comprender por qué o para qué debemos congregarnos, hay algo muy importante que hay que tener en cuenta, y es el significado de, o la razón de ser de la iglesia. ¿Qué es la iglesia? La iglesia no es el edificio físico sino las personas que se congregan para adorar el nombre de Dios. “Donde dos o más estén congregados o reunidos en mi nombre, allí estoy”. Congregar, es el verbo griego “sunago”, que significa reunirse juntos en armonía. Cada creyente debe conocer el motivo por el cual debe congregarse. Algunos lo hacen por tradición, otros por costumbres y otros simplemente, por cumplir. Es por esta razón, que debemos conocer acerca de este tópico, para que, como verdaderos creyentes, no caigamos en hacer las cosas sin saber por qué las hacemos; sino que todo lo hagamos, conociendo su base bíblica. EL MENSAJE PARA HOY. ¿Por qué debemos congregarnos? Congregarnos como un cuerpo de Cristo es un mandato del Señor. “25…no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca. 26 Porque si pecáremos voluntariamente después de haber recibido el conocimiento de la verdad, ya no queda más sacrificio por los pecados…”. Hebreos 10.25, 26
Porque es bueno adorar a Dios juntos. “1!Mirad cuán bueno y cuán delicioso es habitar los hermanos juntos en armonía! Salmos 133.1 • Cuando nos congregamos la unción corporal es mayor, debido a que todos adoramos en un mismo espíritu, al mismo tiempo. • Al reunirnos podemos recibir cobertura espiritual (en unción, oración y consuelo) • Al juntarnos accedemos a los beneficios de ser plantados, adiestrados, equipados, enseñados para servir y hacer el propósito de Dios. La persona que no se planta, obstaculiza la voluntad de Dios en su vida. ¿Qué características debemos buscar en una iglesia para congregarnos, teniendo en cuenta que es una de las decisiones más importantes en nuestra vida como cristianos? Antes de contestar esta pregunta, debemos tener en cuenta que no podemos buscar perfección. Ilustración: Si está en una iglesia que tiene buena alabanza, pero no da amor o hay buena palabra, pero no hay intercesión; o en cambio, es una iglesia amorosa, pero la palabra no es buena; o hay amor, buena palabra y buena adoración, pero no hay visión usted debe seguir buscando. Muchos van hacer atraídos a un tipo de iglesia u otros según su necesidad o por lo que les guste, pero usted no debe asistir a una iglesia solamente porque va buscando su necesidad, sino porque es la voluntad de Dios para usted asistir a esa iglesia. Las siguientes son las características de la iglesia en la que debemos congregarnos: 1. Que se predique la palabra de Dios. Un lugar donde usted se alimente con buena palabra, donde sea enseñado y corregido. Un lugar donde se le enseñe la mayor parte del consejo de Dios. Un lugar donde usted aprenda a vivir en santidad, a buscar cada vez más de Dios y de la autoridad de Jesús; un lugar donde pueda aprender a ser un verdadero adorador, etcétera. ¿Por qué colocamos la palabra de Dios como prioridad? Por que las enseñanzas y los mensajes que nos confrontan y desafían son una herramienta que Dios usa para ayudarnos a cambiar y a ser cada vez más semejantes al Señor. Si usted está, constantemente, expuesto a una Palabra, hay esperanzas de que Dios pueda cambiarlo. 2. Que estén la presencia y la unción de Dios. “27 Acontecerá en aquel tiempo que su carga será quitada de tu hombro, y su yugo de tu cerviz, y el yugo se pudrirá a causa de la unción”. Isaías 10.27. •
Si estos dos ingredientes, la presencia y la unción de Dios, están presentes, todas las demás cosas son secundarias y pueden cambiar. 3. Que haya una visión. La iglesia en la cual congregarse, debe tener muy clara su visión para que pueda cumplir su propósito. Una parte importante de la visión debe ser alcanzar a toda persona en cualquier estrato social; tocar tanto al profesional, como al drogadicto, a los jóvenes, y “toda criatura”. Debe ser un ministerio con una visión que incluya salvar almas, discipular a los nuevos creyentes, entre otros puntos importantes. Cuando la iglesia tiene visión, usted notará que puede recibir y puede dar. Sin visión, el pueblo perece y se vuelve perezoso, haragán, acomodado y chismoso. Cuando hay visión en un ministerio, no hay tiempo para chismear; de lo único que se habla es de cuántas almas se salvaron el domingo y de cómo habló Dios en el mensaje; de los cambios que Dios está haciendo en sus vidas. El pueblo que tiene visión trabaja y busca el rostro de Dios. 4. Que se viva en constante oración y ayuno. La oración es lo que mantiene a Dios actuando en nuestras congregaciones; y por esto, es de vital importancia mantenerla viva y activa en todo momento. 5. Que sea un lugar donde usted pueda dar y servir. Para que usted pueda dar y servir, debe estar bien alimentado; muchas personas están en un lugar sirviendo, pero no están siendo alimentados, y si esto ocurre, eventualmente, la persona se secará. Es importante que sea un lugar donde pueda desarrollar el llamado que Dios le ha dado. De acuerdo a las prioridades de Dios, eso es lo que todo creyente debe buscar; lo demás es secundario. 6. Que sea un lugar donde se crea en los milagros, la liberación y lo sobrenatural. Dios es un Dios sobrenatural y eso debemos verlo manifestado en la iglesia. ¿Qué tipo de personas componen la iglesia? No todo aquel que viene a la iglesia es un creyente; también, hay otros que no lo son. Algunos son “primos-‐hermanos”, otros, “medio hermanos”; es decir, son aquellos que dicen ser cristianos, pero no han tenido un nuevo nacimiento. Existe de todo en las iglesias; allí podemos encontrar los siguientes tipos de personas: v Los cabros. ¿Quiénes son los cabros en una congregación? (32 y serán reunidas delante de él todas las naciones; y apartará los unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos”. Mateo 25.32) Son personas que viene a la iglesia por conveniencia; desean, por ejemplo, que sus hijos vengan y busquen de Dios, pero ellas no han nacido de nuevo. Son personas que andan buscando algo en forma ocasional, pero al salir, continúan en su pecado y en su “poca vergüenza”.
“ 26Los corderos son para tus vestidos, Y los cabritos para el precio del campo…”. Proverbios 27.26 ¿Cuál es la diferencia física entre una cabra y una oveja? • La oveja no tiene cuernos y la cabra sí. • La oveja no tiene colmillos y la cabra sí. • La oveja solo como lo que su pastor le ofrece, mientras que el cabrito le gusta de todo. • La oveja es un animal que cuando se sale del redil, no regresa, sino es porque su pastor la va a buscar; es guardada por su pastor. La cabra se guía sola. • Lo único bueno de ser oveja es que tenemos un pastor, las cabras no tienen pastor. v Los lobos. Son los falsos profetas, satanistas e infiltrados. Hombres buscando mujeres y mujeres buscando maridos; personas con falsas doctrinas, queriendo arrastrar a otros y sacarlos de la iglesia; etcétera. “15Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces”. Mateo 7.15 v Los siervos y las siervas de la casa. Éstos son los creyentes nacidos de nuevo, pero que no están totalmente comprometidos con la iglesia y la visión. Estos siervos de la casa son los que permanecen en la iglesia mientras se les da un pago; es decir, si se les da algo, permanecerán y servirán, y eso, mientras todo esté bien, a su gusto y comodidad. Cuando la presión viene sobre los siervos o cuando son corregidos, dejan de servir, y a veces, ni siquiera están dispuestos a permanecer en la iglesia y soportar la disciplina y la presión. La mayor parte de los siervos de una iglesia son espectadores: el domingo dan su diezmo y su ofrenda, y le dicen… “!nos vemos el próximo domingo!” v Los hijos e hijas de la casa. Sobre estos cae toda la responsabilidad de una iglesia. Son los hombres y mujeres comprometidos por completo con la iglesia y la visión; aquellos que no importando lo que suceda, permanecen y dan sus frutos en la iglesia. Con los hijos es que se puede edificar un ministerio. El promedio de hijos e hijas de una iglesia local es el veinte por ciento del total de la congregación. • Éstas son las personas que ponen sus “manos en el arado”, que luchan hombro a hombro al lado del pastor, que se entregan con su vida, finanzas, dones, etcétera. También, es la gente que resulta más herida en la iglesia y que Dios usa y bendice más.
Los hijos son los que pagan el precio en una iglesia local, los que sacrifican todo por el servicio al Señor. De estas personas es de donde Dios saca los generales, tenientes y coroneles del ejército de Cristo para usarlos. • Los hijos de la casa son los que cubren las faltas y las debilidades de sus líderes. • Los hijos de la casa son los que tienen celo por la obra de Dios, son los primeros en llegar y los últimos en irse. • Los hijos e hijas de la casa son los que hacen cualquier tipo de trabajo en la iglesia. • Los hijos e hijas son los escuderos de su iglesia, pastor, líderes y hermanos. ¿Por qué razones podemos o debemos irnos o movernos de una iglesia? Podemos irnos de una iglesia sin incurrir en una falta de fidelidad contra Dios o contra nuestro pastor, cuando: • Cuando Dios nos mueve (confirmado por la cobertura o pastor y por el Espíritu Santo en nuestro corazón). • Cuando se pierde la visión. No hay salvaciones, no hay liberaciones, no hay discipulado, no hay crecimiento. • Cuando se ha ido quitando la presencia de Dios en la iglesia. • Cuando hay pecado confirmado en el liderazgo y no se busca el arrepentimiento. En dicho caso, quien permanece en esa iglesia, se hace partícipe de ello. • Cuando no estamos recibiendo el buen alimento de la palabra de Dios. Pues esto es vital para nuestro crecimiento. • Cuando Dios nos envía, por medio de nuestro pastor a abrir nuestro propio ministerio. ¿Por qué NO debemos irnos de una iglesia? • Por conflictos con hermanos (algunas veces son tratos de Dios con nuestro carácter, y al irnos interrumpimos su obra y entramos en desobediencia a la voluntad de Dios). • Porque no le llamaron cuando tuvo necesidad. • Porque se predicó algo, que es bíblico, pero con lo cual usted no está de acuerdo. ¿Qué debemos esperar de la iglesia y el pastor? • La iglesia no vive para mí, yo vivo para la iglesia. • La iglesia no es un programa de beneficencia del estado. • La iglesia no suple todas mis necesidades. ¡Solo Jesús lo puede hacer! La iglesia es una extensión de las manos de Jesús para salvar, sanar y restaurar al mundo. Es un hospital para el alma. •
¿Cuál es la responsabilidad del pastor delante de Dios? • Alimentar con un buen pasto, o sea, con una buena palabra. • Guiar al pueblo de acuerdo a la voluntad de Dios para esa iglesia local. • Vigilar que nada cause daño al rebaño; guardarlo de falsa doctrina, de los lobos rapaces, de los que andan en pecado, y de toda obra del enemigo. • Cuidar cuando lo necesiten. ¿Qué hacer cuando un líder, un hermano o el pastor nos dan mal testimonio? “2…puesto los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios”. Hebreos 12.2 “Puesto los ojos”: esto significa que nuestra atención no debe estar dividida; es alejar la mirada de todas las distracciones, con el fin de contemplar un objetivo. Nosotros les decimos a todo el mundo: “no mires a los hombres”, pero sin embargo, nosotros mismos estamos haciéndolo todo el tiempo. En este momento, hay muchas personas muertas que se fueron al infierno por no ocuparse de su salvación; hay otras que están vivas pero apartadas sin querer saber nada de Dios. Otras están frías en las cosas de Dios, otras están en el mundo, y así sucesivamente. No han puesto los ojos en las cosas de arriba y se han dejado derribar por estar mirando y juzgando el mal comportamiento de otros. Siempre hay que tener un balance, en todos los aspectos de nuestra vida. ¿Cuál es ese balance? v A veces, pasamos tanto tiempo en un lugar viendo a un sólo hombre, que llega el momento en que comenzamos a depender más de él que de Dios, y no podemos recibir de nadie más; por lo tanto, si éste falla, nuestra vida se convierte en un desastre, porque no teníamos puesto los ojos en Jesús, sino en el hombre. v Nosotros, como buenos creyentes, estamos supuestos a modelar a Jesús a otros. Sin embargo, tenga presente que hay un sólo ser perfecto y justo en el universo que es el único que puede llenar el corazón vacio y solo; el único que nunca nos dejará: ¡Jesús!
PREGUNTAS FINALES • ¿Por qué debemos congregarnos? • ¿Cuáles son las características que debe tener una iglesia para congregarse en ella? • ¿Cuáles son las diferencias entre una oveja y una cabra? • ¿Qué característica tiene un lobo, un siervo y un hijo de la casa? • ¿Qué debemos de esperar de la iglesia y el pastor? • ¿Qué hacer cuando alguien nos da mal testimonio? APLICACIÓN • El líder invitará a las personas del grupo a asistir a la iglesia y los animará a llevar a un invitado para el próximo servicio. • Hará una oración general para que cada persona sea plantada en la iglesia y se sienta identificada con ella.