HabÃ-a una vez, un viejo llamado Egeo y era el rey de Atenas, cuyo hijo se llamaba Teseo. Todos los años, Egeo le enviaba al rey de Creta 14 atenienses para alimentar a su minotauro. Esto sucedÃ-a porque años atrás, el anciano rey habÃ-a perdido una guerra con el rey Minos. Al enterarse de esto Teseo sintió que era su deber ayudar a los 14 atenienses, entonces se subió al barco y una vez en el soñó con Poseidón quien le contó que era un semidiós y que debÃ-a zambullirse en el agua a buscar un anillo que el rey de Creta habÃ-a perdido. Una vez allÃ- Teseo se metió en el laberinto y con la ayuda de Ariadna logró matarlo (1) Pero como saldrÃ-a de ahÃ-? Antes de entrar en el laberinto Ariadna le tiró un ovillo de lana del que juntos tirarÃ-an para guiar a Teseo y los atenienses a salir del mortal laberinto.Fue asÃ- como Teseo se encontró con Ariadna y juntos escaparon del Creta, pero en el camino Teseo soñó con otro dios Baco quien le dijo que debÃ-a dejar a Ariadna en Naxos, una isla, porque tenÃ-a mejores fines gloriosos para ella. AsÃ- fue, el joven dejó a la bella princesa en Naxos y volvió a Atenas, pero el olvidó que su padre le habÃ-a dicho que si estaba vivo al regreso el barco tuviera velas blancas entonces cuando llego al palacio fue notificado que su padre, el rey Egeo, se habÃ-a arrojado al mar por el dolor por la supuesta perdida de su hijo. Cierto dÃ-a, el rey de Argos, Acrisio, fue a interrogar a una pitonisa quien le contó que serÃ-a asesinado por su nieto quien ocuparÃ-a su lugar en el trono. Entonces desesperado, el rey ordenó que su hija, Dánae, fuera metida en un calabozo. Pero en el calabozo sin luz, comenzó a llover oro y se fue formando el perfil de Zeus, este le dijo que le ofrecÃ-a la manera de huir y ella aceptó. A la mañana siguiente, al despertar Dánae se dio cuenta de que estaba embarazada, y tempo después dio a luz a un bebe al que llamó Perseo. Un dÃ-a al atravesar las cárceles del palacio, Acrisio, oyó los gritos de un bebé. Interrogo a los guardias pero debió ceder ante la evidencia, solo un dios podÃ-a entrar en ese calabozo. Entonces sin más recurso, pidió a su hija que entrara en un grande baúl que fue arrojado al mar. Durante mucho tiempo el cofre flotó en el mar, a merced de las olas. El cofre fue encontrado por el pescador Dictis que cuidó durante años a los náufragos Pero un dÃ-a el rey de la isla Serifos (una de las CÃ-cladas), el hermano de Dictis, Polidectes se enamoró de Dánae y le ofreció matrimonio. Perseo enojado por esto va en busca de la cabeza de medusa pero primero se encuentra con Hermes que le da su hoz mágica, la grayas que le dan: el casco de Hades(que los hará invisible), las sandalias mágicas (que lo guiaran) y la alforja mágica(que se estira) y con Atenea que le entregó su escudo(que lo protegerá de la mirada de Medusa. Entonces entra al lugar donde se encuentran las gorgonas y decapita a Medusa, la cabeza la mete en la alforja mágica pero de la sangre se reconstruyen dos criaturas: un gigante llamado Crisaor y un caballo blanco 1

alado, Pegaso. De vuelta en el castillo, Perseo se enteró de que su madre habÃ-a escapado le mostró la cabeza de medusa al rey y este quedó de piedra en su trono mientras tanto se estaban realizando los juegos olÃ-mpicos y allÃestaba Acrisio, exiliado,−porque se enteró que sus sucesores estaban vivos− entonces el joven Perseo se decidió a participar y lanzó el disco temeroso de lastimar a algún espectador, fue entonces cuando el antiguo rey de Argos, su abuelo, se levantó de su asiento y fue decapitado, accidentalmente. Cierto dÃ-a, Zeus y su hijo Hermes decidieron bajar a la tierra a probar la bondad de los humanos, entonces en medio de el largo caminar de los dioses se largó una lluvia torrencial. Buscando refugios los dos viajeros disfrazados q en realidad eran los dioses fueron tocando de puerta en puerta buscando refugio, pero nadie les permitÃ-a pasar hasta que vieron una humilde choza sobre una colina con una tenue luz que salÃ-a por la ventana. Tocaron la puerta de dicha choza y fue abierta por una pareja de ancianos Filemón y Baucis, pero el joven Hermes querÃ-a regresar al olimpo Sin importar la opinión de su hijo aceptó la invitación de los ancianos a pasar Los dioses disfrazados se instalaron frente a la chimenea observando un altar en el cual habÃ-an depositado unas ofrendas a los dioses. El dueño de casa tomo el último leño y lo tiró a la chimenea, mientras Baucis preparaba la humilde mesa. Cuando los anfitriones contaron de su poco alimento, los dioses se dieron cuenta de la bondad de aquella pareja, fue entonces cuando los ancianos pensaron en su ganso y que lo podrÃ-an comer junto a los invitados. Pero el ganso corrió y corrió y se refugio entre las piernas de los dioses imaginando lo que le esperaba. Fue entonces cuando los dioses develaron su verdadera identidad y los ancianos se postergaron ante ellos, entonces, los dioses agradeciendo la generosidad de la pareja llenaron la mesa de deliciosos manjares, carnes, aves, etc. Pero si los dioses querÃ-an recompensar la actitud de los pobres ancianos, debÃ-an castigar a todos aquellos que los habÃ-an rechazado tal cruelmente fue asÃ- q incendiaron toda la aldea. Luego, Zeus se comprometió con los ancianos de cumplirles el deseo de morir al mismo tiempo y convirtieron esa tan humilde choza en un templo. Zeus y Hermes volvieron al Olimpo Pasaron los años, Filemón y Baucis habÃ-an sido los guardianes del templo pero no podÃ-an vivir por siempre, entonces Zeus, cuando los dos ancianos estaban agarrados de la mano, decidió q era el fin porque eran simples mortales, asÃ-, comenzaron a endurecerse como piedras declarándose el amor y ultimo adiós. Poco a poco fueron convirtiéndose en árboles y asÃ- estuvieron muchos siglos a pesar de que el templo se convirtió en ruinas Dicen que aun hoy, donde estaba Frigia se ve a un viejo tilo junto a un roble milenario

2