NSalieron innumerables notas en radio, televisión y

DE LOS DISCÍPULOS DEL MAESTRO MEHIR N os vimos obligados a realizar este trabajo editorial porque ningún medio quiso darle difusión a nuestra verdad

6 downloads 37 Views 3MB Size

Recommend Stories


Alicia en Radio Universidad
Pág. 4 Enrique Vila-Matas: un escritor activo Alicia en Radio Universidad Spector a las 9 en Foro FIL Pág. 3 Pág. 6 Pág. 8 5Foto: Jorge Alberto

Story Transcript

DE LOS DISCÍPULOS DEL MAESTRO MEHIR

N

os vimos obligados a realizar este trabajo editorial porque ningún medio quiso darle difusión a nuestra verdad. Salieron innumerables notas en radio, televisión y periódicos, condenando con mentiras aberrantes a nuestro maestro y nuestra escuela. Pero luego, nadie quiso publicar nada sobre la otra campana. Nadie se interesó por indagar la verdad, por buscar la imparcialidad. Nos cerraron las puertas, ya que toda esta campaña de difamación fue iniciada por La Voz del Interior, parte del grupo monopólico Clarín, un gigantesco Goliat contra el que decidimos ejercer nuestro derecho a réplica. Decidimos hacer “nuestro propio medio de comunicación”, el de LOS DISCÍPULOS DEL MAESTRO MEHIR. Sabemos que nuestra lucha se asemeja al combate impensable entre David y un monstruo de dimensiones desproporcionadas, Goliat. Y también sabemos que LA INTELIGENCIA DE LA VERDAD Y LA JUSTICIA ES UNA VICTORIA PRE-DESTINADA. Es necesario que muchos se unan para tener un periodismo transparente y objetivo, que respete el derecho a la información de los ciudadanos. Es necesario que muchos se unan para tener una Justicia que se rija por las leyes morales más elevadas, velando por la integridad y la dignidad de todos los hombres. Es necesario que muchos se unan para sanear la educación actual, y convertirnos a nosotros mismos, a nuestros hijos y nietos, en educadores, formando individuos plenos, amantes de la libertad de la conciencia y del derecho pleno a las propias creencias e ideologías. Si usted, lector, siente que estos anhelos también son suyos y tiene ganas de compartirlos con nosotros; si cree que ésta también es su lucha, una guerra pacífica contra todo el mal consensuado en la sociedad actual, por favor contáctenos a través de cualquiera de nuestras vías de comunicación.

www.maestromehir.com.ar | www.elcantaro.org [email protected]

E

sta revista es editada por más de cien discípulos que conforman la Escuela de Conocimiento El Cántaro, en nombre de los miles de discípulos que han seguido durante décadas las enseñanzas de Mehir. Hemos decidido imprimirla para decir lo que los medios de comunicación no nos dejan decir, porque va en contra de sus intereses y los de mucha gente más involucrada en este crimen, el intento de asesinato del maestro Mehir. El 12 de Junio de 2011, el diario La Voz del Interior dio el puntapié inicial a una ola de calumnias e injurias que se extenderían por los medios de comunicación de todo el país publicando en la primera plana del domingo y en las tres páginas consecutivas una denuncia contra la escuela de conocimiento El Cántaro y su fundador Mario Indij. La nota fue redactada por el periodista Sergio Carreras y nutrida por el resentimiento de tres mujeres. Y él no cuestionó la veracidad del relato, no investigó ni pidió pruebas, sin responsabilidad ni compromiso con su profesión puso el oído y sentenció. Ellas revolvieron todo su ser y le ofrecieron sus sentimientos más putrefactos y sus pensamientos más perversos. El periodista, se sintió extasiado por la intensidad de sus relatos, hambriento de una nota que lo llevaría a la fama y adulado por estas tres damas que atizaron su impunidad con elogios a su va-

lentía y supuesto idealismo, y así el personaje vomitó a la audiencia un río de calumnias e injurias. Si tan solo pudiéramos hacerle juicio a la Voz del Interior… pero la trama estaba previamente urdida sin omitir detalles. No era posible acceder al derecho a réplica, todo era deformado, todo era editado con una connotación negativa infame que le recordaba al lector que Mario Indij era un delincuente. No habiendo podido acceder por las buenas a un justo derecho a réplica decidimos hacer juicio a La Voz del Interior por calumnias e injurias pero para entonces ya era muy tarde... El periodista Sergio Carreras era íntimo colega de un abogado especialista en el tema: Héctor Navarro, el abogado de las supuestas víctimas. Ambos estaban hacía tiempo mancomunados en la promoción de la ley anti-sectas. Y fue el mismísimo abogado el que llevó a las señoritas hasta la prensa y luego se encargó de proteger a su amigo de que se iniciaran acciones legales en su contra y el diario, puesto que el artículo 11 de la Constitución Nacional dice que si la injuria da lugar a un proceso penal el acusado de injuria queda libre de pena.

Y ASI FUE QUE LAS TRES DAMISELAS SE VIERON ANTE UNA INCOMODA SITUACION: ESTABAN EN EL COMPROMISO DE DAR FE DE SUS CALUMNIAS ANTE LA LEY PARA PROTEGER A LA PRENSA.

2

Las calumnias e injurias como un río torrentoso y turbio se difundieron por todos los medios de comunicación y arrastraron a las calumniadoras con él. Los teléfonos empezaron a sonar, todos pedían entrevistas al abogado y a las supuestas víctimas que, desesperadas, buscaban proteger su identidad, pero Dios ya las sabía. Paranoias, pesadillas nocturnas, ataques de pánico y hasta enfermedades les fueron diagnosticadas. Sin embargo, su abogado mediador las necesitaba fuertes y les aconsejó tratarse con Myrna, una colega de la Red Anti-Sectas quien por chat les explicaría en complejos términos psicológicos, como estrés postraumático y trastorno de adoctrinamiento sectario algo que era obvio para cualquiera: el veneno de su propio corazón las estaba carcomiendo por dentro y la situación era irreversible. Mientras tanto, en Carlos Paz, el fiscal Ricardo Mazzuchi cuya jurisdicción se veía afectada, decidió tomar cartas en el asunto, una excelente oportunidad para levantar la imagen de un funcionario público investigado por corrupción en el conocido caso de “la tragedia del Ford Ka”. Así fue que ante semejante denuncia en los medios, el fiscal decidió actuar de oficio y enviar a un cuerpo especial de la policía, el Comando Cóndor -armados como para asistir a un enfren-

tamiento en Medio Oriente- y al Cuerpo Especial de Narcotráfico a seis propiedades, allanadas en forma simultánea, donde se presuponía podía haber pruebas de dichos delitos. El Comando Cóndor entró corriendo a ritmo militar, pasaron por al lado del Buda que custodiaba la casa, y tiraron la puerta abajo con una ariete. El hazme reír de los vecinos, pues cual bufones de Villa Carlos Paz, el equipo especial de narcotráfico revolvió durante cinco horas toda la propiedad sin encontrar nada. Lo más engorroso fue la biblioteca del maestro Mehir, que resultó como allanar Yenny o El Ateneo y no encontrar nada: ni drogas, ni pornografía, ni armas, ni grandes sumas de dinero, sólo libros, cuadros con imágenes de la leyenda, una guitarra y un dojo de artes marciales. A lo largo de toda la pesquisa en la casa del acusado, las de sus familiares, un restaurant, las casa de sus vecinas y las de algunos discípulos, sumaron dieciocho allanamientos en total sin encontrar nada, y luego devino una ola de allanamientos encubiertos, robos a las casas de los discípulos, a sus autos o simplemente “rateros” de la calle. Supuestos ladrones rompían la ventana del auto para llevarse un celular pero dejaban el estéreo, irrumpían en una casa para revolver papeles y llevarse una CPU vieja pero dejaban un costoso equipo de sonido; notebooks, celulares, pendrives, títulos universitarios y otros papeles fueron el objeto de su interés. Todos estos “robos” fueron debidamente denunciados ante la policía... Las líneas de teléfonos se sabían intervenidas, no había intimidad, los patrulleros nunca estaban

de más en las puertas de nuestras casas al salir a trabajar o en el trabajo mismo, donde ya estaban haciendo guardia; en una oportunidad fueron a una escuela a buscar a una profesora que era la supuesta “psicóloga” de la secta y como no la encontraron se quisieron llevar detenido al director porque vestía de negro (igual que el traje de artes marciales que usamos los discípulos de Mehir). El evento fue todo un escándalo y tuvieron que salir alumnos y autoridades a defenderlo. La policía siempre presente de pasada o apostados en la puerta de alguna casa los fines de semana cuando nos juntábamos a comer un asado, o asustando a nuestros niños en su fiesta de cumpleaños. Algo muy podrido se gestó en Villa Carlos Paz... Las calumniadoras fueron convencidas por Héctor Navarro para presentar testimonio y pertinentemente asesoradas sobre cómo hacerlo. Ellas le dijeron que no tenían modo de probar la veracidad de sus relatos y él les explicó que eso no era necesario, ellas eran la prueba y la decisión final la tomaría un juez acorde a las conclusiones de su íntima conciencia... Así fue que todas relataron anécdotas y juntos buscaron el modo de desnaturalizarlas y ponerles el nombre de un delito. Armaron un glosario de palabras clave a utilizar, cada una armó un testimonio, los corrigieron, reemplazaron una palabra por otra, y finalmente el abogado trasladó de Buenos Aires a Carlos Paz sus experiencias sufridas, que como era de esperarse, coincidían increíblemente con las experiencias que viven las víctimas de una secta destructiva. Pero esto no fue suficiente, ya se

3

habían realizado numerosos allanamientos sin resultados y los testimonios eran escritos por personas que la fiscalía desconocía, vivían en otra provincia y denunciaban delitos imposibles de probar, sucedidos años atrás... no era suficiente para abrir una causa penal. Mientras la prensa se hacía un festín con la denuncia y le adjudicaba cada vez más delitos al acusado, en el fondo la causa se caía por sí misma, porque los hechos reales desarmaban las calumnias como el mar a un castillito de arena. Para entonces La Voz del Interior era un chasco, inminentemente iban a ser obligados a retractarse públicamente y a pagar por daños y perjuicios. El fiscal de Villa Carlos Paz se había tomado atribuciones en su investigación con la confianza de encontrar allí a un delincuente, omisiones, retardos y abusos de poder que continuarían a lo largo de toda la causa. La desesperación por salvar los nombres, los puestos de trabajo y el patrimonio de los involucrados agitó las aguas y la misma fiscalía de Villa Carlos Paz ofreció costear el viaje de las supuestas víctimas para que hicieran una declaración oficial en las oficinas correspondientes. Les pagarían el viaje, alojamiento y comida, la estadía completa a cinco personas, las tres supuestas víctimas: Maria Kojan, Maya Lavayén, Estefanía Lombardi, y dos de sus maridos. No podríamos aseverar, señor ciudadano, si los viáticos se costearon de sus impuestos o del bolsillo de algún “padre preocupado”, pero que costearon los gastos de los testimonios nos consta. Y fue así que las supuestas víctimas repitieron verbalmente lo que ya habían escrito, pero con llantos y convulsiones que conmovieron al sensible fiscal, pusieron el gancho en el papel y se abrió el proceso penal que pondría a salvo a la Voz del Interior de un costoso juicio y al fiscal le resguardaría el puesto de trabajo. A partir de aquí devino una segunda ola de allanamientos que cubrió no sólo la casa del acusado sino las de sus discípulos, se pidió una orden de captura del maestro Mehir y se llevaron detenida a una mujer: Miriam Macías. Una señora inocente que vivió la degeneración del sistema judicial, cuyas atroces experiencias en el calabozo de la comisaría de Villa Carlos Paz y la cárcel de Bower -a la cual llegó sin saber de qué se la acusaba- pueden leerlas al final de esta revista...

A ESTA ALTURA PODRÁ IMAGINARSE, SEÑOR LECTOR, QUE PERDIMOS LA FE EN LA JUSTICIA, ABANDONAMOS TODA SUMISIÓN Y PROTOCOLO A LA MISMA, PUES HABÍA EN EL AIRE UN OLOR AL PROCESO, ECOS DE LA SANTA INQUISICIÓN.

4

La justicia, la libertad y los derechos individuales que tanta sangre costaron a la humanidad eran pisoteados por un grupo de gente motivada únicamente por sus propios intereses egoicos. Esta es una historia plagada de anécdotas que ejemplifican la degeneración del sistema, relatos que no entrarían en las páginas de toda esta revista. Por dar tan sólo algunos ejemplos... Hasta el mismo abogado fue amenazado de quitarle su matrícula si proporcionaba información confidencial a su clienta (encerrada injustamente en una jaula), fue maliciosamente acusado de revelar el secreto de sumario, cuando la información era de conocimiento público que la recibíamos de otras fuentes. La transa se iba aceitando y la información que corría por los pasillos de las oficinas públicas cada vez cotizaba más... También fueron llamadas a testimoniar dos discípulas del maestro Mehir, si se puede llamar testimonio al violento interrogatorio al que fueron sometidas. Allí nadie quería escuchar lo que ellas tenían para decir, sino que eran agresivamente inducidas a confirmar los hechos que ellos querían probar, les hacían preguntas rápidas y las presionaban para responder, daban por sentado hechos que ellas ya habían negado, les decían que su testimonio se contradecía con el del resto, etc. No tomaron nota del testimonio completo, sólo de partes, motivo por el cual una de ellas fue sometida más de una vez a este interminable interrogatorio que duró más de cuatro horas en ambas oportunidades. Hicimos todas las denuncias pertinentes: carta documento al periodista, descargos por los interrogatorios agresivos, denuncias por robos, denuncias al fiscal por retardo de justicia, presentamos habeas corpus de mucha gente, etc. Pero todo se pierde en la nada devoradora de la burocracia, mucha gente perjudicada, nadie responde.

Nosotros somos los discípulos del maestro Mehir, testigos de la injusticia, chantajeados, amenazados, calumniados, injuriados, allanados, robados, interrogados, perseguidos, privados de su intimidad y libertad. Si alguien quiere transformar las verdades expuestas en esta revista en algún género de delito (malintencionado y falso), deberán hacernos juicio a quienes hemos decidido afrontar los riesgos de limpiar la opinión pública, decir la verdad y pedir justicia, algo que hoy en día puede costar la vida.

5

Entérese todo sobre la historia de esta persecución. Las desventuras de la Lilith, la Lilithu y la Dakini perversa, hombres de poder mediático, político y económico subyugados por el resentimiento de tres mujeres que jamás comprendieron la enseñanza que imparte la Escuela de Conocimiento El Cántaro. Una instrucción especialmente dedicada a la mujer, base de la educación de los hombres del mañana, célula de familias de hombres nobles, éticos, idealistas, educadores de una sociedad próspera, una obra que excede a la vida misma del maestro Mehir, una obra que llevará generaciones ver florecer: una humanidad en condiciones normales de existencia.

ESTA ES LA HISTORIA DE LOS DISCÍPULOS DEL MAESTRO MEHIR.

Disfrazada de “abuso sexual” se levantó una persecución ideológica contra un sabio. Pero el supuesto delito resultó un fiasco. Al día de hoy, el maestro Mehir, Mario Indij, tiene abierta injustamente una causa penal por abuso sexual ¿Quiere saber cómo se urdió la trampa? Tres mujeres contactan a un abogado especialista en la persecución de sectas. El abogado se contacta con un periodista de La Voz del Interior y lo invita al infierno. El periodista describe una serie de presuntos delitos sin investigación, sin pruebas, sin compromiso profesional. El diario publica tres páginas de calumnias e injurias en el matutino del domingo. El fiscal de Villa Carlos Paz, sin una denuncia previa, allana de oficio la propiedad del acusado y las de sus familiares. NO ENCUENTRAN NADA. ¿DE QUÉ SE LO ACUSA ENTONCES? De un delito que no requiera pruebas para mandar a un hombre a la cárcel: abuso sexual. Un delito no excarcelable que sólo requiere de algunos testimonios para hacerse efectivo. El abogado de las supuestas víctimas prepara los testimonios alegando abuso sexual por coerción psicológica. Fundamentan ser víctimas de lavado de cerebro y haber accedido por ello a una reiterada relación sexual con el acusado, a lo largo de años. Negamos rotundamente que pueda haber existido tal vínculo sexual. Negamos cualquier tipo de coerción o persuasión psicológica. EL CÁNTARO NO ES UNA SECTA DESTRUCTIVA. Lea, analice, reflexione y discrimine: EL CÁNTARO ES UNA ESCUELA DE CONOCIMIENTO.

6

7

Se allanaron muchos hogares de familia, se robaron computadoras y teléfonos, se persiguió gente y no se encontró NADA. Al día de hoy ya todos saben que el maestro Mehir es inocente y esto evidencia que no se trataba de un abuso sexual sino de una PERSECUCIÓN IDEOLÓGICA. Saque sus propias conclusiones:

A

lo largo de toda la investigación se realizaron 18 allanamientos oficiales en busca de elementos para construir la imagen de un gurú imaginario. ¿De qué gurú están hablando? ¿Del maestro Mehir? NO. Hablan de un personaje que inventaron, que inventan los que denuncian, que inventa el periodismo, que inventa un abogado mediático. Permítanme una obvia introducción: Las instituciones policiales y judiciales organizadas en un estado de derecho debieran cumplir el rol para el cual fueron creadas: la investigación de los diferentes modos delictivos presentes en nuestra comunidad, con la obtención de las pruebas que permitan a la justicia otorgar a cada uno lo que le corresponde. El papel de los medios masivos de comunicación debería ser informar, de manera totalmente desafectada e imparcial, en pos de la integridad del pensamiento democrático, en un país esencialmente constituido como crisol de razas. Esta obvia introducción fue sin embargo necesaria para poner el cuadro de esta persecución en el contexto de lo que realmente está ocurriendo, para describir el inmenso desfasaje que existe entre la teoría y la práctica en el mal uso de los poderes públicos. “Alguien” desde su absoluta parcialidad, y avalado en la total impunidad de su difamación, prepara una denuncia en los medios. El sr. “periodista” Carreras, ansioso de fama y prestigio, se alía al sr. “abogado”

8

Navarro, conformando una alianza anti-sectas. Su objetivo: perseguir a los que piensan diferente; enmascarando su persecución con argumentos ridículos e inaplicables a una Escuela de Cono-cimiento. Luego, la supuesta justicia en manos de un fiscal allana “de oficio” (porque no existía ninguna denuncia) la casa del maestro Mehir. Buscaban drogas. ¿Existen en nuestro país traficantes que amasan fortunas a costa de la patología y el sufrimiento de los drogadictos? ¡Por supuesto! ¿Y a cuántos de esos traficantes nunca les allanaron sus casas? ¿Encontraron drogas en la casa del maestro Mehir? NO. Buscaban pornografía, o algo que denotara comercio sexual. ¿Existen en nuestro país los que regentean prostíbulos, trafican mujeres y comercian con aberraciones sexuales realizadas con niños? ¡Por supuesto! ¿Allanaron las casas de esos personajes siniestros? ¿Encontraron pornografía en la casa del maestro Mehir? NO. Buscaban armas. ¿Existen en nuestro país delincuentes de todo género que utilizan y trafican armas de fuego? ¡Por supuesto! ¿Allanan sus guaridas? ¿Encontraron armas de fuego en la casa del maestro Mehir? NO. Solo encontraron las armas tradicionales con las que se practica arte marcial desde hace milenios, armas con las que ni el maestro ni sus discípulos hizo jamás daño a nadie.

Buscaban enriquecimiento ilícito. ¿Existen en nuestro país estafadores? ¡Por supuesto! Miles de hombres y empresas que lucran por medios ilícitos de todo género, gente que dispone de muchas propiedades, muchos vehículos, muchos campos, yates, aviones, etc... ¿Cuáles son los bienes del maestro Mehir? Una casa, una camioneta, un campo donde imparte su enseñanza. Los allanaron. ¿Encontraron en esos ámbitos lujos que ostentaran medios económicos extraordinarios, muebles de ébano, lámparas de cristal, escalinatas de mármol? NO. Encontraron ambientes prolijos, limpios, luminosos. Ámbitos para entrenamientos físicos, para la práctica de disciplinas artísticas; encontraron instrumentos musicales, bibliotecas extensas y variadas; encontraron símbolos representativos de todas las grandes religiones. ¿Encontraron, acaso, un Buda de oro? NO. Encontraron Budas de yeso pintados de dorado… Entonces… si no encontraron nada de lo que buscaban, ¿Cómo es posible que hayan dictado el pedido de captura para el maestro Mehir? Porque le inventaron un delito por abuso sexual, un delito que no necesita de pruebas para mandar a un hombre a la cárcel. ¿Acaso los miembros del centro vecinal Altos de San Pedro de Villa Carlos Paz, y todos los vecinos de esa zona que participaron libremente de las “Ferias Mágicas” vieron a un líder sectario que siniestramente explotaba a sus discípulos? O, más bien, y en honor a la verdad, vieron a un grupo naturalmente organizado, con un objetivo humanitario, con el solo fin de beneficiar y disfrutar de la alegría de los beneficiados? ¿Podrían decir que la escuela El Cántaro organizó repartos de juguetes para Reyes en Villa Carlos Paz y en Parque Síquiman porque el maestro Mehir es un político demagogo buscando prensa y votos?

¿De qué gurú están hablando? ¿Del maestro Mehir? NO. Hablan de un personaje que inventaron. Que inventan los que denuncian. Que inventa el periodismo. Que inventa un abogado mediático. ¿Qué lo sustenta, además de su odio hacia los diferentes y su necesidad despótica de borrar de la faz de la Tierra a aquellos que se atrevan a usar plenamente el derecho de pensar en libertad? Es espeluznante comprobar lo indefensos que estamos los argentinos frente a este tipo de persecuciones discriminatorias. Cómo puede mancillarse la imagen de alguien que nunca buscó popularidad ni poder, sino que dedicó toda su vida a instruir, a educar, a impartir una enseñanza basada en los más altos y nobles ideales inherentes a lo humano. Alguien que no odia, que no propone persecuciones contra los que piensan diferente, que simplemente enseña lo que sabe a aquellos que quieran aprenderlo. En pleno uso de nuestras facultades físicas, psicológicas y también espirituales, declaramos libremente que elegimos recibir voluntariamente la enseñanza del maestro Mehir, que voluntariamente pagamos lo correspondiente a dicha enseñanza, y QUE QUEREMOS UTILIZAR TODOS NUESTROS DERECHOS COMO CIUDADANOS DE ESTE PAÍS PARA SEGUIR HACIÉNDOLO, por lo que pedimos a las autoridades que se expidan a la brevedad anulando los cargos y acusaciones sin sentido contra el maestro Mehir.

Pedimos también autorización formal para que no se obstaculice la concreción del proyecto de la Escuela El Cántaro, donde podremos impartir a aquellos que voluntariamente quieran recibirlo, todo el conocimiento que recibimos durante décadas.

9

MIEDO AL SEXO

EL GURÚ QUE AMA A LAS MUJERES

Castración y libertinaje, dos caras de una misma moneda, dos síntomas de una misma enfermedad de consecuencias devastadoras para una sociedad que se cree superada sexualmente hablando. Aquí damos cuenta de las causas y los efectos del MIEDO AL SEXO.

H

emos comprobado en la defensa de esta causa infame, que en la cultura, la palabra sexo o sexualidad genera pudor, vergüenza, una irritabilidad, un miedo, una reacción exagerada. ¿Han percibido íntimamente esta reacción? ¿Se la han adjudicado a algo? ¿Miedo a qué tenemos? ¿No es esta una sociedad abierta y libre? ¿No se venden preservativos en los quioscos o se expenden en los baños de bares y boliches? ¿No hay legislación acaso que permita el casamiento entre homosexuales? ¿No se venden películas pornográficas en los kioscos de diarios? ¿Acaso no hay prostíbulos y cabarets en las más grandes ciudades y los más pequeños pueblos? ¿No van especialistas a los colegios a dar clases de educación sexual? ¿No se ha vuelto el aborto la solución más común para salvar la indiscriminación sexual? ¿No fue superada ya la castración? ¿No es historia vieja el tabú del sexo? Dígame, señor lector, ¿acaso sus padres le dieron la educación sexual apropiada a la edad correcta? Recuerde, ¿acaso usted pudo hablar sanamente con sus padres , quienes respondieron a las dudas más naturales de su pubertad? Recuerde. Después de milenios de condenar la sexualidad, de gestar una sociedad castrada, y de considerar el sexo como un pecado, como un péndulo que golpea fuertemente del otro lado, el libertinaje, la indiscriminación y la supuesta libertad sexual se plantean como una solución, cuando no es más que una reacción esperable a un problema aún vigente: el miedo a la sexualidad. Con todas las expectativas depositadas en este fenómeno, lo cierto es que como tal no ha ayu-

10

Carta de una discípula

dado a superar el temor a la propia sexualidad ni a practicarla sanamente. Todo lo contrario. Las condiciones anormales de existencia plantean una sexualidad patológica que oscila entre la castración y el desenfreno e indiscriminación sexual, generando frustración en relación al sexo. Frustración que deviene del miedo a enfrentarse a la propia sexualidad, miedo a vincularse con el sexo opuesto, miedo a desplegar el erotismo, miedo a no tener una relación sexual satisfactoria. Todos estos miedos generan frustración y la frustración una profunda agresión contra uno mismo y/o contra todo aquello que actualice estos miedos y temores. En el caso de una mujer: el hombre. La ley de abuso sexual es utilizada aquí como la más poderosa herramienta para detractar el buen nombre y honor de una persona, sabiendo que esta acusación tiene un gran impacto negativo en una sociedad de estas características, que se satisface con su propio prejuicio y no con evidencias concretas. Es sumamente llamativo que se busque condenar por abuso sexual a quien señala los desvíos de una sociedad que por sus propias contradicciones no ha logrado dar con una educación sexual íntegra y curativa. Una sociedad que ha trasmitido la castración o la indiscriminación, como enfermedades contagiosas, generación tras generación. Es llamativo también que quienes hacen estas acusaciones sean mujeres, alegando ser víctimas de coerción y misoginia, cuando una de las principales ramas de la Escuela de Conocimiento El Cántaro es la educación para la mujer, la valoración del rol femenino y su gran influencia en la sociedad.

Mehir enseña que el hombre debe tornarse un verdadero hombre y la mujer debe luchar contra todos sus condicionamientos para ser una fiel representante del arquetipo femenino. Esta es su enseñanza. Aquí, un homenaje de una discípula a su maestro, en donde queda claro que con su enseñanza él ha revolucionado las vidas de sus seguidores en el sentido del bien. Esto, jamás podría ser parte del adiestramiento de un misógino…

¿

Adónde quieren llegar con esos métodos invasivos de prejuicios ideológicos enmascarados? “El gurú que odia a las mujeres”... Los grandes argumentos de la prensa amarillista son “latiguillos” que se repiten una y otra vez, sin investigación alguna, sin argumentaciones…Este tipo de periodismo es el oficio de encontrar las frases más efectistas, que repetidas hasta el cansancio no expliquen nada coherente, sino que dejen una impresión negativa, que tenga resonancia subconsciente, invocando miedos, heridas colectivas, remanentes arcaicos… Acá va la respuesta de una mujer que sigue esta enseñanza. Las Ideas que me transmitieron enseñan la percepción de “arquetipos” por detrás de las descripciones condicionadas de las épocas y contextos culturales. Sabemos que el modelo social de mujer fue cambiando, y en cada época y cultura hay un molde perceptual diferente. Sin embargo todos los seres humanos sabemos -desde un conoci-

miento silencioso, una intuición profunda, más antigua que las “épocas”- que hay valores universales. Empecé a reconocer (con el proceso de conocerme en profundidad a mí misma) que la percepción social contextual me había alejado de lo que íntimamente quería ser: una mujer amorosa, maternal, bella, erótica, intuitiva, artística, ensoñadora, de una sutil inteligencia que atrape directamente las leyes cósmicas, que pueda contemplar en el templo de la naturaleza a Dios. Una mujer numínica, mágica, que dialogue con los misterios de lo inconciente. Una mujer enamorada del Espíritu, del Hombre. ¿Hay algo malo o siniestro en que se me haya encendido el anhelo de ser más cercana al “arquetipo”, más allá de los condicionamientos de esta época? Sin embargo, reconozco que no es fácil desandar la programación sociocultural de este tiempo y que muchas veces el arquetipo puede parecer “agraviante” y me quisiera defender de esa imagen numínica, diciendo que es una “utopía”,

11

porque para realizarla requeriría de mis esfuerzos concientes y detener la inercia de mis manifestaciones mecánicas. Podría también sucederme que me enoje con los arquetipos y con quien me los enseñó a ver, proyectando que el culpable de mis impotencias es “Otro” Y ESTÁ AFUERA. Ahora… ¿no es persecución ideológica que cambiando los términos de la enseñanza, la transformen en “el gurú que odia a las mujeres”, en lugar del maestro que enseña las leyes morales universales, entre ellas el arquetipo femenino? Esa mentira es tan manipuladora y retorcida que, acompañada de otras como “reducción a la servidumbre” y “abuso sexual”, preparan a la opinión pública para una reacción mecánica de odio enceguecido y no para la pregunta elemental que yo me haría: ¿Qué habrá ofendido tanto a las mujeres o a los hombres que lo acusan para que hayan decidido mentir tan descaradamente para condenarlo? ¿Se sintieron agraviados por la enseñanza de los arquetipos? Platón enseñaba las Ideas, Leonardo da Vinci buscaba los arquetipos… ¿No se puede ser “idealista”? ¿Está prohibido creer en la evolución del hom-bre, en el perfeccionamiento de la cultura? Como decía San Pablo, el alma está llena de “dichos oscuros”, pero algún día conoceremos a Dios directamente. Estos “dichos oscuros”, un verbo mentiroso, hacen que la psique se defienda de la verdad, urdiendo nuevas y más retorcidas mentiras. Y en el camino a no querer cambiar un ápice la propia estructura y defender “lo conocido” con uñas y dientes, de pronto alguien como mecanismo de defensa se victimiza y sentencia: el culpable está afuera. Definitivamente, este Maestro, cuyo auténtico perfil es el de un Educador, me enseñó a través de décadas la pureza del alma humana, de la misma forma que Confucio enseñaba que el hombre era naturalmente bueno. Me transmitió que la esencia del hombre y de la mujer tienen una “nobleza” original que les permite ser analogías del Dios creador y ser uno con Él. Y también me transmitió que estamos llenos de “dichos oscuros” que no nos dejan fácilmente desarrollar esa esencia íntima y universal. Y que es necesario despertar del sueño de

12

la percepción condicionada para desarrollar nuestra esencia, y ser libres. Muchos discípulos entusiasmados con su enseñanza comenzaron a juntar el dinero para hacer un Instituto para la educación en estas ideas. ¿Y por qué no habríamos de querer enseñar lo que creemos es bueno y puede contribuir a mejorar el mundo? ¿No pueden darse cuenta que nos están impidiendo el derecho a la libertad ideológica a través de inflamar la mente prejuiciosa, temerosa y ciega? ¿Quién dijo que esas personas que acusan tienen autoridad moral para hacerlo y no son víctimas de su propia enfermedad psicológica? Y que precisamente por eso se alejaron de la enseñanza... Antes de investigar, ¿es “justo” que se condene mediáticamente y con pedido de captura y encerrando a una persona en la cárcel por 48 días? ¿Esta justicia se acerca al “arquetipo” de Justicia? ¿O es una parte infame del sistema con que se anestesia al pueblo con la ilusión de justicia para que el “status quo” del poder imperante siga intacto e invulnerable? ¿Por qué un sabio debería someterse a la “cicuta” del sistema como Sócrates? ¿Y si tiene otros planes que no sean demostrar a sus discípulos la inmortalidad del alma? ¿Y si quiere dejar una influencia como una levadura que vaya actuando con el tiempo a través de otro modelo de educación posible? ¿Por qué habría de someterse a tan absurdo juicio de impostores? Pedimos enfáticamente que los que no creen en los funcionarios corruptos ni quieren perpetuar su poder, levanten su voz y exijan la inmediata anulación de la orden de captura del maestro Mehir. ¿Podrá alguien frenar toda esta retrógrada impunidad y darle al fin credibilidad y constancia a nuestro sistema democrático? ¿O será que preferimos sólo “algunos tipos” de no discriminación? ¿Habrá algún perfil “político” que escuche la urgencia de nuestro reclamo? Exigimos libertad para pensar, para elegir nuestra ideología y para erigir nuestro Instituto educacional cuyos fines son exclusivamente humanitarios. Exigimos justicia, inmediata restitución de nuestros derechos como ciudadanos que creen en una sociedad libre y equitativa y una vida más natural, esencial y feliz para todos los seres.

Carta de una discípula

¿QUIÉN SERÁ EL GURÚ QUE ODIA A LAS MUJERES? En esta carta, una discípula narra el proceso personal que vivió a lo largo de su vida en relación a su feminidad. En su relato demuestra cómo se equivocó el diario La Voz del Interior cuando tituló una de sus notas sobre Mehir “el gurú que odia a las mujeres”. Sepa por qué sus seguidoras aseguramos que esta frase es un absurdo.

S

oy una mujer nacida en el 63', como Fito Páez, con los terrores de la dictadura en mi adolescencia y los horrores de las desigualdades de fin de siglo y fin de una era todavía vigentes. Mi madre me mostró con las penurias de su vida lo triste que era ser mujer, lo maltratada, postergada y menospreciada que era su tarea cotidiana de estar en la casa y criar los hijos. No quise ser eso… Entonces me dediqué a imitar un modelo más ponderado, independiente, emprendedor, autónomo. Me dediqué a pensar como un hombre, a sentir como un hombre, a actuar como un hombre, a vestirme como un hombre… a ver si de esa forma obtenía el aprecio y la valoración que nunca tendría como esposa y ama de casa. Y tuve logros, compitiendo como un hombre entre los hombres, y entonces supe que en esos logros tampoco estaba mi paz, ni mi felicidad. Harta de estar harta, de dar vueltas en la calesita de la vida sin encontrar nada que se pareciera a una verdadera salida, tuve la fortuna de conocer al maestro Mehir, hace ya muchos años. Y lo escuché hablar de la mujer... Nunca hasta ese entonces había estado contenta con mi destino “femenino”, no encontraba nada valorable en las funciones de una mujer en la cultura. Y él habló, desde su voz profunda y luminosa, del papel único que le es propio a la mujer, para la ar-

monía y el bienestar de una cultura. Relató la vida de mujeres ejemplares, madres amorosas y abnegadas, inteligentes, bellas, idealistas, que gestaron, criaron y educaron hijos en el seno de hogares plenos de libertad, de respeto y de amor. Verdaderas heroínas que comprendieron la esencia del rol que la naturaleza le dio a la mujer, el inmenso poder de su capacidad creadora de vida, creadora de hijos que den continuidad a la especie, creadora de emociones intensas y puras que inspiran la inteligencia de los altos ideales, creadora de belleza y gracia. Mujeres de distintas culturas y tradiciones. Gracias a su voz, conocí la grandeza de mujeres como Devaki, la madre de

13

Krishna, y María, la madre de Jesucristo. La grandeza de mujeres solitarias, anónimas o famosas, que aportaron lo mejor de sí mismas en pos de ayudar, de servir, de nutrir. El maestro Mehir me mostró la maravilla de las posibilidades de vivir como una mujer, de ser una mujer, en el sentido más integro que nunca antes había encontrado para esa palabra. Entonces… ¿Quién será el “gurú que odia a las mujeres”? No puede ser un maestro que siempre tuvo, y sigue teniendo, montones de discípulas mujeres. ¿O acaso es creíble para alguno de los que nos conoce, que somos mujeres degradadas y esclavizadas? ¿Alguien puede creer que una mujer con una carrera y reconocimiento profesional puede permitir que alguien la maltrate y la denigre? ¿¿¿Qué mujer pagaría por tomar clases con un maestro que la odia??? Absurdo. Tan absurdo que resulta increíble que un diario como “La Voz del Interior” se preste para semejante campaña de difamación, que encubre los oscuros intereses de Dios sabe quién… ¿Y entonces? ¿Será que el sr. Carreras es el que odia a las mujeres y por eso piensa que somos tan estúpidas como para dejarnos maltratar por “nuestro líder”? ¿Será que el sr. Navarro es un obsesivo sexual y eso explica las causas legales que lo imputan por presentarse desnudo en Tribunales? ¿Será que el fiscal nunca logró que las mujeres lo escuchen? ¿Será que alguno de ellos fue criado como pupilo en alguna institución de esas en las que a la luz del día hablar de sexo es pecado y por las noches los curas violan a los niños? Sólo desde una obvia discriminación y subestimación para con la mujer pueden estos personajes suponer que somos títeres sin pensamiento, y que por eso permitimos que el maestro Mehir nos “lave el cerebro” para lo que ellos tienen inventariado como fines delictivos. Si ellos viven recreando películas de terror, en las que jefes malvados abusan de inocentes subordinados, y aspiran ser los héroes que salvan a los desvalidos, tendrían entonces que buscar seriamente, entre los verdaderos delincuentes que abundan en nuestra sociedad. ¿O tienen miedo de enfrentarse con esos, con los verdaderos delincuentes? ¿O sucede que en verdad no les interesa salvar a nadie, más que a sus propios bolsillos, sin que ello les signifique el riesgo de enfrentarse con algún poderoso? Calumnias e injurias. Esos son los términos formales de esta difamación contra el maestro Mehir. “Calumnias e injurias”, ese será EL JUICIO, al que tendrán que enfrentarse, tarde o temprano. Y en el momento de ese JUICIO, no habrá dinero ni negociación ni mentira que los salve por haber intentado acallar la verdad.

Carta de una discípula

EN DEFENSA DEL MAESTRO Soy discípula del maestro Mehir. Mujer, 27 años de edad. Quiero compartir con ustedes algunas reflexiones, empezando por el análisis de dos palabras claves que hacen a la acusación: ABUSO SEXUAL POR COERCIÓN PSICOLÓGICA.

Abuso sexual. A mí me es obvio que un abuso sexual es la conducta propia de un enfermo, quien necesita de una extrema aberración a modo de sobre estimulación para sentir la sexualidad. O bien la conducta de un hombre que expresa a través de semejante acto su desprecio por la mujer. No es en absoluto el perfil del maestro Mehir. Respetuoso con la mujer, cariñoso en su trato, enamorado de la madre de sus hijos, paciente en la educación de sus hijas y sus discípulas.

Coerción psicológica. La acusación no se trata de un simple abuso sexual, puesto que en estos casos, por teoría, el vínculo sexual se produce contra la voluntad de una de las partes. En este extraño caso, la “víctima” de abuso alega haber participado voluntariamente de tal unión sexual pero estando ella coercionada psicológicamente, a raíz del lavado de cerebro sufrido en esta secta destructiva. Éste no es en absoluto el perfil de la Escuela de Conocimiento El Cántaro. Estamos todos los discípulos del maestro Mehir a disposición de los interrogatorios y pericias pertinentes. Si yo fuera el juez a cargo de evaluar el caso, obviamente no podría aseverar la veracidad de los he-

14

chos. Si tal unión sexual existió no podría saberlo, pero tampoco debiera importarme puesto que la relación sexual consentida entre dos personas adultas no conlleva ningún delito. Por lo tanto, me preocuparía de las condiciones en las que tuvo lugar este vínculo, suponiendo que haya existido. Evaluemos tales condiciones: durante años, una señorita adulta, educada, de clase media-alta, en pleno uso de sus facultades físicas y mentales, en pleno uso de sus derechos individuales, viaja de una ciudad a otra por sus propios medios para encontrarse con un señor de Carlos Paz, va a cenar con él, viaja con él, hace el amor con él. La secuencia se repite varias veces al mes durante muchos años. Tiempo después se junta con unas amigas y todas hacen una denuncia por abuso sexual. Alegan haber accedido todas al mismo vínculo estando bajo coerción psicológica y acusan a la Escuela de Conocimiento El Cántaro de lavado de cerebros y secta destructiva. El vínculo sexual por sus características es imposible de probar y en sí mismo no conlleva ningún delito, al margen de la mentira. Entonces, si yo fuera el juez, pediría pruebas que demuestren que el supuesto vínculo fue forzado, pruebas de la coerción psicológica, del lavado de cerebro o de la secta destructiva. Aún después de haber realizado 18 allanamientos, encarcelado a una persona inocente, sometido a interrogatorio a varias discípulas, revisado sus casas y objetos personales, pinchado sus teléfonos, revisado sus correos, etc., aun así no encuentran pruebas. Y es que, a menos que las inventen, no las van

15

a encontrar porque no existen, porque tal delito nunca existió. ¿Por qué les cuesta tanto llegar a tan obvia conclusión? ¿Les cuesta o la omiten? Y la verdad, señor lector, sinceramente, con una mano en el corazón, debo admitir que no sólo desmerezco por completo la posibilidad de un abuso sexual sino que aún más, pongo en tela de juicio la posibilidad de que tal relación sexual haya existido. Soy discípula del maestro Mehir hace años y nunca fui víctima de nada de lo que aquí se le acusa. Dudo profundamente de la veracidad de los relatos de las supuestas víctimas, no sólo porque conozco de cerca al sr. Indij, intachable en todo sentido como marido, padre, educador y ciudadano; sino porque conozco de cerca también a ellas, cuyo historial previo a la escuela le daría escalofríos a cualquiera (psicopatías, delirios fantásticos, abusos sexuales de infancia, compulsiva conducta de seducción, paranoia de acoso sexual, entre otras cositas). Y como si las pruebas de su inocencia no fueran suficientes para estas autoridades, tengo otros motivos para íntimamente desacreditar las acusaciones… La trastienda de esta causa está plagada de corrupción, la cual ha llegado tan lejos que ha confirmado la silenciosa sospecha de que esto no se trata de una acusación por abuso sexual, sino de un grupo de oportunistas con motivaciones diferentes unidos con un mismo fin: encarcelar al maestro Mehir. Inicialmente los delitos que le imputaban eran muchísimos, pero todos fueron cayendo en el camino por falta de pruebas, obviamente, hasta sobrevivir únicamente el de abuso sexual que no requiere de pruebas sino de testimonios; sabiendo fehacientemente que los testimonios fueron preparados por el mismo abogado que representa a las víctimas con el fin de describir a una secta destructiva; sabiendo que los artículos del diario fueron financiados; sabiendo que la fiscalía obró de oficio y no porque tuviera una causa penal concreta, la cual posteriormente abrió la misma fiscalía. Por esto, y por mucho más, detalles de la corrupción que pueda enterarse leyendo el resto de la revista, si fuera el juez me inclinaría a pensar que no se trata de un abuso sexual, ni de una secta des-

16

tructiva ni de ningún otro tipo de delito. Pero esto, claro está, implica muchas otras cosas, como reparación de daños, por dar tan solo un inocente ejemplo. Los dejo a ustedes sacar sus propias conclusiones...

Libertad de conciencia. Yo elijo voluntariamente la Escuela de Conocimiento El Cántaro y las enseñanzas de Mehir. El que quiera privarme de mis derechos deberá privar a cientos. A saber, la libertad religiosa supone un triple desenvolvimiento: la “libertad de conciencia” (de creer o no creer en lo que se quiera), la “libertad de expresión” de esas creencias o anticreencias (que comprende la libertad de prensa y otros medios afines) y la denominada “libertad de culto” (que abarca todo lo necesario para practicar la religión, o sea el ejercicio mínimo de la libertad de reunión, de asociación y de otros derechos afines). El Estado no puede juzgar lo que yo creo, así yo crea en una estupidez absoluta, así yo crea que Mehir es extraterrestre o que voy a alcanzar la iluminación teniendo sexo con él, que no está demás aclarar, NO LO CREO, porque ni él lo dice ni yo soy tan estúpida, y si así lo creyera, igualmente está dentro de mis derechos. Mujeres adultas, en pleno uso de sus facultades físicas y mentales, en pleno uso de sus derechos individuales y su libertad de ir y venir, hacen una denuncia inédita: se consideran a sí mismas víctimas de haber accedido a un vínculo sexual por su propia voluntad creyendo que así alcanzarían la dignidad, la iluminación… y como nada de esto sucedió ahora, cuatro años después, dicen sentirse estafadas y violadas, y parecen necesitar que la ley las proteja del ejercicio de su propia estupidez, del cual líderes sectarios malvados puedan aprovecharse. Sepan disculpar pero esto es un circo... Legalmente NO podemos considerar a una persona adulta, educada, en pleno uso de sus facultades, en pleno uso de sus derechos, de su liber-

tad de ir y venir, etc. un idiota incapaz de discernir, en este caso entre un hombre sabio y un líder destructivo, entre la voluntad y la coerción, entre una relación sexual y una violación, entre la ficción y la realidad. Una confusión así es obviamente tendenciosa. Porque si así lo consideramos, estas personas, que no pueden discernir algo tan básico, tampoco tendrían derecho a votar, serían un peligro para la sociedad porque así como eligieron quedar bajo las decisiones de un líder sectario supuestamente destructivo y carismático, también pueden quedar bajo el yugo de un representante político egoísta y autoritario pero elocuente y carismático, interesado únicamente en su propio beneficio y no en el bien de los demás. Bajo esta lógica, una persona así sería incapaz de discernir y elegir a un representante califcado, una persona así no puede ser parte de un gobierno democrático (o por lo menos no debería tener dercho al voto) o bien debe necesariamente responder a un régimen autoritario que le diga qué pensar, en qué creer y qué hacer. ¿A qué abogado se le ocurriría alegar que sus sanas clientas tienen el cerebro lavado? Ahora, ¿qué pasa si no se trata sólo de una persona o tres sino de más de 100? ¿Quién se animaría a alegar que los discípulos de la escuela de Mehir no tienen capacidad de discernimiento? ¿Quién se animaría a jugar este papel? Si quieren ir en esta dirección, díganlo abiertamente, pero no disfracen la aplicación antidemocrática de una ley de innovadora y progresista…

Yo NO quiero que me consideren a mí, miembro de El Cántaro, una idiota incapaz de discernir porque no lo soy. No lo era cuando conocí a Mehir y no lo soy ahora tampoco. No quiero que consideren a las mujeres que encabezan la denuncia unas idiotas incapaces de discernir porque nunca lo fueron, ni antes de conocer a Mehir ni después. Y si no somos idiotas, entonces tenemos capacidad de reflexión y crítica, y si tenemos estas cualidades, entonces podemos decir que somos responsables de nuestros propios actos, y si somos responsables de nuestros propios actos, que no ofenden al orden, la moral ni perjudican a un tercero y son personalísimos, entonces la ley no tiene cabida. Ahora, si por el contrario, tienen pensado demostrar que las acusadoras, yo y las más de 100 personas que siguen las enseñanzas del maestro Mehir somos todos idiotas con el cerebro lavado sin capacidad de crítica, si logran que un juez crea esto y falle a su favor, entonces inauguren su gobierno autoritario y propongan a dicho juez como su líder porque seguro que va a cumplir muy bien su papel. ¿No pueden coartar mi libertad de credo pero sí el objeto de mi creencia? Este es el propósito de meter a Mario Indij en una cárcel con la excusa de un presunto abuso sexual a probar en los próximos... 12 meses o 24... este hombre moriría allí antes de que se demuestre su inocencia. Este es un asesinato encubierto bajo la figura de la prisión preventiva. ¿Preventiva de qué? ¿Preventiva de la vida? ¿Preventiva de la justicia verdadera? ¿Preventiva del ejercicio de los derechos humanos? Y todo facilitado por una ley deficiente, la ley de abuso sexual.

17

EN HONOR A LA VERDAD Hay un clima de desesperación en el despacho del fiscal Mazzuchi: una necesidad imperiosa de comprobar la mentira. Pero en la trama, se escapan detalles una y otra vez, y todos los argumentos rebotan contra la muralla de la verdad. ¿Cuándo habla uno de abuso sexual; cuándo de coerción psicológica?

A

buso sexual es un abuso sobre la condición de otro mediante el cual se tiene acceso a una relación sexual. Es decir que para que exista un abuso sexual debe tra-

En estas condiciones puede darse un abuso sexual. De modo que si una persona NO sufrió ni padeció ni fue víctima de nada de esto… ¿cómo denuncia haber sido abusada sexualmente?

tarse de:

a. Personas que presenten cierto grado de disminución de la conciencia por consumir drogas, alcohol o alguna sustancia alucinógena; b. Personas con problemas de salud, como ser aquellos internados con cierto grado de coma o de parálisis motora general, o el caso de aquellos que padezcan algún tipo de enfermedad psiquiátrica por la cual estén privados de su juicio, voluntad o libertad; c. Niños en quienes sus facultades mentales no han madurado al punto de poder discernir entre lo que es correcto o no; d. Adultos que por necesidad económica permiten el abuso, ya que existe también la situación en que ciertas mujeres son explotadas sexualmente a cambio de un sustento mínimo; e. Bajo amenaza de muerte, como es el caso de la “trata de blancas”; f. Varias de estas opciones combinadas.

18

¿En qué inferioridad de condiciones alega haber sido abusada? La señorita alega que estaba psicológicamente privada de la libertad de elegir, entre otras cosas, sus vínculos sexuales, alega que sufría de una “cárcel psicológica”. Las cárceles psicológicas que crean las sectas destructivas mediante la persuasión psicológica o lavado de cerebro. Y yo me digo, OK ¿y dónde está la secta destructiva? ¿y la coerción psicológica? ¿y el vínculo sexual? ¿dónde está? ¿es posible poner a alguien en la cárcel a partir de abstracciones? Es el día de hoy que no puedo creer que la justicia esté considerando seriamente este alegato. No sé qué me preocupa más: si la falsa acusación, o los argumentos bajo los cuales pretenden sentar antecedente y juzgar posteriormente a otras personas del mismo modo.

un hombre es enviado a la cárcel por hacer el amor con una mujer que viajó a verlo, lo acompañó a su casa, se desnudó en su cuarto y le hizo el amor, bajo el argumento de estar ella obligada psicológicamente a hacerlo... ¿Qué nos queda después de esta sentencia? ¿Acaso todos los hombres de este país para hacer el amor deberían pedir un examen psicofísico para ver si la mujer está en pleno uso de sus facultades y hacerle firmar un documento de consentimiento? ¡Esto es peor que detenerse para usar preservativo! Es el hazme reír de la justicia argentina... ¡Hay tres mujeres que alegan haber tenido una relación sexual con otro hombre que no es su pareja sin haberlo querido! Parece la típica escena donde el hombre encuentra a su mujer con otro y ella le dice: “¡Pará! Yo te puedo explicar, no quise…” ¿de qué estamos hablando? ¿de abuso sexual inducido por hipnosis? ¿o acaso existe una mentira tal, que pueda decírsele a una mujer con poder de discernimiento para tener relaciones sexuales y esto ser considerado un abuso sexual? En la escuela del maestro Mehir todas las mujeres se encuentran sanas mental y físicamente; el cultivo de la inteligencia por medio del estudio y la reflexión queda en evidencia en el más simple diálo-

go. Bellas y vitales a los ojos de cualquiera, con total poder de discernimiento y capacidad de crítica, libres de ir y venir a donde su voluntad les señale. Nadie aquí padece una disfunción física ni mental, no hay patología psiquiátrica, no se consumen drogas ni alucinógenos de ningún tipo, no se fomenta el consumo excesivo de alcohol, ni de ninguna otra bebida ni comida en general. Se fomenta el cuidado del cuerpo como un vehículo del alma que no debe descuidarse. Y se enseña la libertad, el respeto, el altruismo y el amor como las cualidades más excelsas del ser humano. Está a disposición de todos la corroboración pertinente… ¿Cuáles habrán sido las razones que pueden llevar a una mujer a desear con todo su ser que un hombre muera tras las rejas? ¿Tan malo ha sido Mehir con ustedes como para que deseen su muerte? ¿Tienen acaso conciencia de las consecuencias de sus calumnias? Yo de ustedes no tengo seguridad ni puedo dar fe. De hecho sé a ciencia cierta que su historial al respecto da mucho qué pensar... Pero de Mehir sí puedo aseverar muchas cosas, entre ellas la integridad de su ser, su sexualidad consagrada, su moral intachable, su amor y respeto por la mujer, un cariño y una delicadeza extrema en su trato.

Es muy peligroso en un país democrático y libre, sentar el precedente de un hombre encarcelado de por vida por un delito que no cometió. Pero esto ya ocurrió muchas veces. Es muy peligroso también, en un país democrático y libre, sentar el precedente de un hombre encarcelado de por vida por hacer el amor con una mujer que voluntariamente quiso tener sexo con él. Si

19

Carta de una eterna enamorada

Yo sinceramente dudo muchísimo que esa relación haya existido, y aún si la hubieran tenido sé que no pudo haber sido jamás un abuso sexual. Sus denuncias están plagadas de calumnias y segundas intenciones y créanme que no quisiera estar en sus zapatos, porque aunque la justicia de los hombres sea un fraude, yo creo en la justicia verdadera, en la justicia de Dios. Ojalá algún día puedan redimir esta acción, puesto que no es un karma menor llevar a un hombre de conocimiento a la cárcel. Ojalá algún día no muy lejano su conciencia las devuelva al camino de lo recto. Caso contrario que la ley de karma se haga responsable de sus aprendizajes. Y quiera Dios porque, aún después de todo lo que han hecho, yo voy a rezar por ustedes para que jamás tengan que vivir un abuso sexual y saber lo que eso es verdaderamente.

LAS MUJERES QUE AMAN AL GURÚ

Creo que deberían realmente replantearse cuál es ese motivo, esa mala semilla que regaron en su interior y que hoy se ha transformado en un monstruo que las ha llevado a cometer semejante locura y arruinar su vida. ¿Qué han gestado en sus vidas y a su alrededor? Un sello doloroso, una mancha en el alma, como consecuencia de su propio odio y sus actos inmorales, bajos, que bien saben, no las van a dejar dormir ya nunca en tanto no se arrepientan, se retracten e intenten enmendar el daño causado. No es esto una amenaza, sino un llamado a la esencia más noble que vive en el interior de todo ser humano, pero que por las experiencias de la vida, en cada existencia, está más o menos rodeada de comprensión, más o menos cerca de las leyes universales y a veces escucha y nos despierta de nuestro sueño horrible. De todas maneras, y en esto tenemos plena fe, sabemos que la verdad siempre triunfa y en eso descansa nuestro corazón. Entonces, ¡despierten!, ¡despierten! y muestren un acto de dignidad.

20

A partir de la tendenciosa información que hacían los medios sobre nuestro caso, decidimos abrir una página web para contar sin filtros lo que verdaderamente ocurría. Ese espacio sirvió también para escuchar la opinión de gente que no pertenece a la escuela. Así recibimos la carta de una señora llamada Martina y quisimos compartirla con los lectores. Ojalá la disfruten como lo hicimos nosotros, una bocanada de aire puro y fresco en medio del infierno de la persecución…

M

e parece increíble la acusación que le están haciendo a Mehir: “¡abuso sexual! ¡el gurú que odia a las mujeres!”. Nunca fui discípula de la Escuela, pero viendo lo que están tratando de hacer con él, me siento obligada por el agradecimiento y animada por el amor…porque aunque ya soy una abuela puedo recordar perfectamente quién es este hombre…y nada más lejos de él que ese perfil de “abusador”. No sé si les servirá de algo y no es mi intención lastimar a nadie…les estoy contando lo que me sucedió y dejó para siempre mi corazón marcado. Porque están luchando contra tanta mentira, tanta acusación absurda, tanta maldad…

21

Hace unos 26 años tuvimos un hermoso romance. Podríamos decir que fue una relación breve que duró apenas una primavera, pero para mi vida no fue así, ya que lo que aprendí con él, aún sin querer ser su discípula, fue creciendo y creciendo en mi corazón hasta que ahora, ya con mi vida hecha, puedo decir que algo finalmente floreció y dio fruto: un “gracias a la vida que me ha dado tanto…”, una simple sonrisa de alegría y regocijo íntimo. Si quieren acusarlo de algo, en esta sociedad donde la sexualidad se hizo tan fronteriza e imprecisa, tan indiscriminada... acúsenlo de ser hombre, muy hombre, una especie casi en extinción: simple, natural y espiritualmente viril…Tal vez por eso es tan perseguido. Puedo llegar a imaginarme que las mujeres que lo acusan no habrán podido manejarlo con los típicos ardides y astucias femeninas, no habrán podido hacerlo “su posesión”…y los hombres que lo acusan no habrán soportado los celos, la envidia y la competencia…Creo que fue el único hombre con el que me sentí verdaderamente mujer. Cuando lo conocí estaba acostumbrada a ser la protectora, la madre de hombres-niños, demandantes y narcisistas, irresponsables, que a su vez eran tiranos celosos y asfixiantes. Nunca me había encontrado con un hombre con todas las letras: un hombre tan firme como tierno…tan intensamente apasionado y a la vez noble, generoso, pródigo…un devoto del amor…un enamorado del amor. Es inconcebible para mí que ese hombre con tanta fuerza y dulzura, con tanta comprensión de los más íntimos secretos de lo femenino…tan embelesado por la belleza…les diría…un exquisito, un embriagado que ama lo sutil hasta en el detalle más inconcebible…un hombre así jamás se conformaría con algo obtenido a la fuerza…es completamente absurdo. Y cuando yo era esa joven a la que le salían mariposas por el pelo y andaba a 20 cm del piso, lo que más me enamoraba extrañamente era su inaccesibilidad... ¡cómo explicarlo! Una mezcla perfecta de amante dispuesto a la locura delirante de los ebrios y a la

22

vez un ser enigmático, magnético, indescifrable, impredecible, lejano…como si sus ojos profundos y oceánicos estuvieran viendo siempre más allá. Un nostálgico…imposible de ser definido o poseído. Y esta distancia misteriosa era tal vez lo más viril…porque amaba y no mostraba apego alguno sino una incomprensible independencia de lo que tanto parecía amar. Me acuerdo que no pude rendirme ante su naturaleza…todavía estaba llena de ilusiones y quimeras. ¡Jamás podría ser ese depravado que quieren mostrar! Hacer el amor con él, era un arte que no necesitaba de ningún artificio ni estímulo raro…era un perfume que lo invadía todo…porque empezaba a hacer el amor mucho antes…la unión de los cuerpos era la consumación natural de un fuego que había incendiado el corazón, el alma, todo…y no había rincón del ser que no estuviera impregnado. Con el tiempo aprendí que de un amor así uno no regresa… que de un hombre así uno no puede despedirse jamás… lo único que cabe es hacer crecer ese amor hasta fundirlo con el infinito. Les parecerá raro mi testimonio, no me animaría a hablar como testigo, pero lo hago para ustedes, para que no los empañe una sombra de duda... un hombre así, créanme, jamás buscaría las migajas de la intención frenética de los obsesivos. ¡Jamás abusaría de una mujer! Más bien creo que está ahora seriamente abusado…sencillamente por ser una especie en extinción…un auténtico hombre. Para él, en la distancia, todo mi amor y agradecimiento. Martina.

Los testimonios que inculpan al maestro Mehir responden a tres mujeres; tres exponentes femeninos que han tenido circunstancias de vida completamente diferentes, distinta formación paterna, y marcos familiares y socio culturales con matices desiguales. Sin embargo, hay un único patrón común que las unifica: el clásico circuito frustración-agresión, propio de los casos de frustración sexual, particularmente en las mujeres. Conozca estos tres casos y descubra de dónde surgen estas falsas acusaciones.

23

UN CASO DE FRUSTRACIÓN SEXUAL... Tres casos que muestran la obstrucción del erotismo. Sus consecuencias, bien conocidas en la cultura actual: agresión y agravio con la figura masculina; el rencor y la proyección del mal vínculo con el hombre, en todos los hombres. El blanco de tiro, el maestro Mehir.

U

na escuela de conocimiento tiene por objetivo la evolución del ser, el desarrollo armónico de atributos esenciales como la vitalidad, el erotismo, la marcialidad, la inteligencia, el idealismo, el altruismo, el arte, la belleza, la disciplina, el amor... En este sentido, hay personalidades más o menos integradas, acorde a su grado de actualización y desarrollo de estas capacidades esenciales. La evolución y el perfeccionamiento de las seres humanos dependen de ello. Atributos desarrollados de forma armónica e integral, y no de la cintura para arriba… Cuando la necesidad esencial de desarrollar alguna de estas cualidades se ve obstruida ( generalmente por autolimitaciones inconscientes originadas en traumas de infancia) dicha obstrucción genera frustración y la consiguiente agresión. Cuando no se pueden desplegar las capacidades creadoras del alma humana, aparecen junto a la frustración, las tendencias autodestructivas por el miedo a no ser y los mecanismos defensivos y compensadores, como la proyección del enemigo en el “otro”, al que se ataca como si fuera el causante del conflicto. En este caso, la cualidad obstruida es el erotismo. Y particularmente en una mujer apareja muchísima frustración: complejos de inferioridad, disconformidad con su cuerpo o partes de él, negación de la sexualidad, frigidez, anorgasmia, mecanismos de compensación para suplir la natural expresión espontánea de erotismo y mucha inseguridad en la relación sexual… Estas disfunciones traen aparejadas la consecuente agresión al hombre con el que

24

debe vincularse y experimentar todas estas dificultades. Entonces surge el odio, el rencor, el resentimiento, y ni hablar de la envidia sobre otras mujeres... Este es el caso de una frustración de índole sexual. Pero cómo culparlas de ello en una sociedad castrada en su interior y corrupta en su manifestación. Históricamente la humanidad ha negado la sexualidad. Ya en la Edad Media se pretendía llegar a la iluminación espiritual negando la naturaleza inferior y entonces se consideraba al sexo como el demonio y debía ser exorcizado por métodos inconfesables que incluían la autoflagelación y el miedo al infierno. Ante la imposibilidad de los aspirantes a Dios (en ese momento bajo la institución de la Iglesia Católica) de transmutar el eros en funciones superiores del ser, estos instintos fueron extirpados por métodos coercitivos que gestaron un desvío de la vía espiritual, dando lugar así a monjas y monjes formados bajo una premisa enferma: la castración sexual. Y tal es así que como un globo que se aprieta abajo y se infla arriba, cada tanto nos enteramos del caso de algún sacerdote cuyas fantasías rumiadas en la mente encontraron una vía de canalización insana. A su vez, esta represión sexual como vía de espiritualización basada en una disociación de la naturaleza biológica, gestó un modelo de espiritualidad falsa en una cultura que avaló los métodos de tortura y crimen con total impunidad: la Santa Inquisición. La Santa Inquisición es una de las instituciones históricas más aberrantes que ha tenido la humani-

dad. Pero lejos de estar sanamente trascendida por la comprensión de los misterios de la energía sexual y una educación sana y orientadora, sobrevive en los remanentes arcaicos o residuos psíquicos colectivos. La Santa Inquisición se actualiza en nuestra cultura como un pilar oscuro y patológico sobre el que descansan venenos psíquicos, que corroen y socavan las posibilidades espirituales reales de los seres. Así es que la vía de espiritualización basada en la disociación de la naturaleza biológica gestó un modo de espiritualidad falsa de graves daños sobre la persona y la sociedad. La salida que Occidente encontró a semejante represión y disociación de los instintos fue el libertinaje y la indiscriminación sexual. El péndulo tomó fuerza y golpeó exageradamente del otro lado. Hoy en términos de sexo todo es válido. Lo que no sólo se alejó de una sexualidad normal sino que siguió potenciando la neurosis y el desequilibrio mental originado antes por la castración. ¿Pueden decir que mentir impunemente, calumniar, odiar, estar lleno de oscuras frustraciones inconscientes y prejuicios arcaicos, urdir trampas para encarcelar y matar, tenga algo que ver con la “justicia” y la “salud mental”? No, definitivamente, estos agentes de la criminalidad inquisidora son todavía los subsuelos del poder imperante, y a su vez, los pacientes crónicos de la psiquiatría contemporánea. Actúan despertando antiquísimos prejuicios colectivos y operan a través de la mentira más encarnizada y enferma y pueden ser evalua-

dos individualmente como paranoicos y psicóticos. En estas condiciones anormales de existencia no podríamos culpar a estas mujeres por su frustración sexual. No es ese su delito. Su delito es la violencia que se desprende de sus frustraciones, la agresión que encontró una vía judicial contra un hombre inocente, ícono de todas sus frustraciones, representante de todos los hombres que actualizan la herida íntima de no poder desplegar su erotismo. Su delito es la expresión de su odio, inconcebiblemente admitido por la justicia; odio que les permitió encontrar entre todas las leyes una que asesinaría a Mehir antes de que pudiera demostrarse su inocencia, la ley de abuso sexual. Una ley que encierra tras las rejas hasta que se encuentren pruebas. Una ley que considera culpable al acusado hasta que se demuestre lo contrario. Una ley que le permite a un fiscal firmar una orden de captura y privar a un hombre de su libertad sin nada más que un testimonio mentiroso, ensayado y corregido. Si se estudiara con objetividad la vida previa a su contacto con la escuela de estas acusadoras se corroboraría muy fácilmente el origen de sus calumnias. No hubo peritaje psicológico de las supuestas víctimas, mucho menos físico. Nos cansamos de pedirlo. No obstante, a esta altura, verdaderamente nos preguntamos cuán fidedigno, cuán representante de la verdad puede ser un peritaje o interrogatorio resultante de una sociedad castrada por dentro y degenerada por fuera… ¿cuál es la psi-

25

cología del individuo de esta sociedad, del psicólogo de esta sociedad, del fiscal de esta sociedad? Puede figurarse como la estructura psicológica de un monje castrado, ávido de escuchar sus relatos y alimentar sus fantasías, y desesperado por condenar afuera lo que lleva en su propio interior: la perversión sexual. Parece ser que el “peritaje psicológico” no puede tener cabida, cuando es la misma fiscalía la que está completamente enferma consensuando sin ninguna investigación seria estos testimonios. ¿En manos de quien está la vida de éste hombre…? Cuando un poder institucional pierde la objetividad y se corrompe tan fácilmente, y esta corrupción está ligada a calumnias y mentiras aberrantes de origen sexual, estamos nuevamente ante la Santa Inquisición, mezcla de mentira, crimen, impunidad, poder corrupto y frustración sexual morbosa. Estamos afirmando categóricamente que el maestro Mehir no se aproxima ni mínimamente a un depravado sexual, a un abusador. Todo lo contrario, es una persona excepcionalmente armónica, sana, y cuyo centro de gravedad está más allá de lo que llamamos “sexualidad”. Es un idealista humanitario con una consagración altruista a la educación y perfeccionamiento de los seres. Estamos afirmando que es una mentira orquestada por enfermos psiquiátricos, frustrados y resentidos que están encarnando el último refugio oscurantista de la retorcida y criminal neurosis sexual cultural.

CARTAS A LAS ACUSADORAS Presentamos a continuación cartas de distintas discípulas que tuvieron un vínculo muy estrecho con las mujeres que incriminan a Mehir, y que intentan expresar su desazón frente a estas calumnias. Estas líneas dejan de manifiesto el perfil psicológico de las supuestas víctimas de abuso sexual.

Carta a María Kojan

M

aría: Fue una sorpresa totalmente dolorosa e inesperada saber de tu participación en esta historia infame. El frío del horror estremeció todo mi ser. ¡Cuánta bajeza! ¡Cuánta degradación! Te recordaba entusiasmada en transitar el camino de una búsqueda real. ¿Dónde quedó la meta de ser una mujer digna? ¿Qué pasó con la buscadora que quería trascender sus conflictos y que no se conformaba con las mentiras e ilusiones del mundo?

26

¿Dónde quedó el ideal de formar una familia armónica dónde los padres no se hirieran, ni hiriesen a sus hijos? Te recuerdo ávida por aprender, por superarte, por mejorar. Desde niña lo único que habías visto como núcleo familiar era un ambiente hostil, donde tus padres reiteradamente discutían. Todas estas tensiones se reflejaban en una salud frágil y en un aspecto lánguido. El modelo femenino aprendido en tu casa era el de una mujer dominante, posesiva, que desvalorizaba

constantemente a su esposo, que sostenía económicamente el hogar, con maltratos psicológicos y físicos hacia el padre de su hija. Proporcionalmente al agravio vincular entre tus padres, era la simbiosis materna. Simbiosis que asfixiaba tu individualidad y de la cual querías liberarte. Este modelo de mujer se correspondía con el de un padre ausente, desdibujado, sin autoridad ni poder de decisión, depresivo, frustrado… El vínculo entre ellos era insostenible. ”Mi mamá le partió un palo en la cabeza a mi papá...” fue uno de los comentarios que me hiciste luego de una de estas lamentables disputas. Lógicamente, este no era el modelo de pareja que querías formar con Marcos (tu novio en ese momento), ni tampoco el modelo de hombre de tus sueños. A pesar de que Marcos era mayor que vos, tenía que crecer en responsabilidades, ya que dependía económicamente de su familia y aún no tenía un trabajo estable (sólo algunos extras en TV). A este cuadro se le sumaban ciertas características de inmadurez como: incapacidad de sostener un esfuerzo prolongado, falta de palabra, inconstancia. Todo esto te llevaba a que lo estimularas constantemente para que se acercara cada vez más al Maestro. De él podía aprender todos los atributos masculinos que tanto te encantaban: hombría, virilidad, inteligencia, contención. En el Maestro veías los atributos de un verdadero hombre, un hombre que no podía ser manejado y menos dominado por ningún artilugio ni histeria femenina ¡Todo un hombre! Con respecto a tu ser femenino, tu enfermedad celíaca te hacía delgada, el no tener un cuerpo curvilíneo te hacía sentir poco atractiva como mujer.

No querías ser como tu mamá, no querías llevar puestos los pantalones de la casa. Ni tampoco imitar el otro referente femenino próximo: tu media hermana, de un perfil psicológico frágil, con crisis nerviosas depresivas, tomando antidepresivos y realizando tratamientos psiquiátricos para poder mantener una cierta estabilidad emocional. Con toda esta carga psicológica, te vinculabas insanamente con el hombre. ¿Recordás cuando, temblorosa y lloriqueando, contaste cómo un instructor de artes marciales te había llamado por teléfono pasada la medianoche, para mantener una conversación pícara y sensual? Había quedado explícita en dicha conversación que al otro día te volvería a llamar para arreglar el encuentro. Cuando me relataste los detalles del desagradable evento del que habías sido “víctima”, ponías el énfasis en el comportamiento inapropiado e incorrecto del hombre. “Él era un hombre casado y además conocido de Marcos (tu novio)...” Pero, habías sido vos quien por propia elección le habías dado tu teléfono... ¿cómo se le había ocurrido llamarte pasada la medianoche, para mantener una conversación tan insinuante y sensual? Pero vos no sólo lo habías atendido por tu propia elección, sino que también habías respondido cada una de sus preguntas. Hasta llegar al punto en el que él te haría (al día siguiente) otra llamada para arreglar una cita. Vos con la actitud de “víctima sufriente” y “acosada” veías en él al culpable, sin tomar conciencia de cómo lo habías seducido previamente hasta que llevado por tu influjo te había querido conquistar. Estos mismos mecanismos compensatorios se repi-

27

tieron en Córdoba en numerosas situaciones, como cuando fuiste hospedada algunos días por un discípulo (antiguo vecino tuyo de Villa Crespo) con el que Marcos (tu novio en ese momento) había tenido vínculo laboral. Obviamente este discípulo trató de que tu estadía fuera grata en Carlos Paz. Actualmente él recuerda con toda claridad cómo te paseabas por la casa con un camisón blanco que dejaba traslucir tu ropa interior. Con estos estímulos se iniciaba el día de tu próxima víctima. ¿Qué placer insano te llevaba a continuar con estos juegos seductores? Estudiaban por las mañanas en un barcito. Vos elegías sentarte a su lado para poder apoyar cariñosamente tu cabeza en su hombro. El discípulo, que por su adiestramiento tenía observado este mecanismo enfermizo, sabía que él no representaba nada especial en tu vida. Le era claro que era tu forma patológica de vincularte con los hombres. No obstante, como educador, no podía dejar pasar por alto tal desvío, por lo que tiene una charla privada con tu novio, a los fines de que él tome conciencia de tales comportamientos. Lógicamente todo este juego se terminaba, para tranquilidad de todos los hombres (futuras víctimas) cuando llegaba la hora de prepararte para el almuerzo, donde lo veías al maestro. Todos recordamos cuánto esmero ponías en estar bella y encantadora, cómo te preparabas para resaltar tus encantos. María, ojalá tengas el valor de salir de la prisión de tus mentiras. Liberáte de tantos traumas, condicionamientos y compensaciones, y escribí un destino luminoso. Antes que sea tarde para tu alma, saltá el abismo que te separa de la dignidad femenina.

que movían las cosas y hacían ruidos en tu casa, te perseguían, te querían poseer. Y vos, en tu evasión, entrabas en trances mediumnímicos y sino, te creías ser una hechicera medieval o de alguna historia épica y realizabas amuletos y supuestas pócimas, usando plantas y piedras a las que “les conferías cierto poder”. Esta era una parte de tu “realidad” con la que vendías la imagen de débil, inocente, que cree en “cuentos de hadas y princesas” y la utilizabas para seducir y luego destruir al hombre, por el odio gestado por tus traumas de infancia, y que manifestaste con todas tus parejas. (Y las conocí a todas) Desde la imagen de la mujer que necesita protección, atrapabas a tu pareja y comenzabas tu obra de meses y años en un juego perverso de seducción para después no querer tener relaciones. Bien podemos decir una especie de “Gata Flora”. O si las tenías, no escatimabas en hacerle saber al otro que no sentías nada, que el sexo no te interesaba, que buscabas algo superior. Así pasaba el tiempo y destruías la moral de los hombres que te querían bien, poniendo como broche final, aparte de seducir a otros hombres, la infidelidad concreta, estableciendo otra relación y sosteniendo ambas historias un tiempo hasta dejar al anterior por el nuevo. Concretamente: vi cómo lo hacías, vi cómo los destruías, vi cómo quedaron ellos después de la relación. Pero claro, cómo no atacar ahora al hombre que te curó del delirio en el que vivías, y del que vos te diste cuenta, que intentó enseñarte los verdaderos valores de una mujer: la dignidad, la fidelidad, a ser correcta, pero que no quedó atrapado en tu juego siniestro de seducción. Y como ya no podes “ver espíritus por ahí” depositás los fantasmas del hombre que en tu niñez te causó dolor en Mehir y esgrimís falsas acusaciones para obtener la venganza. Dr. Navarro: ¿Sabía usted que Maya, cuando Mehir la curó de la locura le decía que él “era como el Mago Merlín, era el Mago Mehir” y ella quería ser su aprendiz? No. Posiblemente a esta altura usted ya esté “seducido por la pobre damisela” y sintiéndose el héroe que rescata a la doncella de algún otro clásico épico. ¿Qué va a pasar cuando deje de ser el héroe?

Carta a Maya Lavayén

M

aya: Verdaderamente sentí mucha tristeza de saber que vos también estabas detrás de todo este circo mentiroso y malvado que llevó a prisión a una persona inocente. Después de 20 años de conocerte no acredito que hayas podido caer tan bajo como para perjudicar al hombre que literalmente te salvó de la locura, y, de no ser por él, hoy posiblemente estarías internada en un neuropsiquiátrico. Sí, leyó bien Dr. Navarro, la salvó de la locura, ¿no le contó? Entraste a la Escuela viendo fantasmas, espíritus, entidades que te seguían, hadas, duendes, etc. Creías tener contacto con seres de otros planetas,

28

entrabas en supuestos trances por los que a veces no comías y te desmayabas, y Mehir te curó. Bien sabes que no miento. Desde chica me contabas de tus amigos invisibles, entendible para una criatura que después de la separación de sus padres, debido al sentimiento de abandono de papá y quedándose prácticamente todo el día sola, se inventara amigos para jugar. Pero llevaste a tus amigos invisibles mas allá. Vos me solías decir “me siento mas segura con mis amigos los espíritus, que con la gente”, y tu método evasivo de una realidad dolorosa, en vez de ser el whisky y los cigarrillos como lo era en tu familia, transformó a estos personajes en criaturas fantásticas, en fantasmas que te despertaban por las noches y te oprimían, espíritus

Cruzaste un límite, Maya, sabiendo de la ley de causa y efecto lo que estás haciendo es una aberración, y ahora es posible que me estés odiando. Recuerdo cuando éramos adolescentes y queríamos ser mejores personas, luchar por una verdadera causa. Veíamos la realidad que nos rodeaba y queríamos hacer algo mejor, ser idealistas, humanitarias, ayudar al prójimo… ¿Dónde quedó eso en vos? Creo que no quedó, que ya lo mataste… Si en el fondo de tu ser resuena algo de lo que te digo y sentís un mínimo de dolor moral, te aseguro: nunca es demasiado tarde para arrepentirse. Ojalá suceda por el bien de tu alma.

29

Carta a Estefanía Lombardi, al abogado Héctor Navarro y a la Justicia:

Estefi, espero sepas disculpar que haga pública tu vida privada, no lo hubiera hecho en otra circunstancia, pero dado que tu participación en el complot político destinado a promover la ley antisectas ya ha llevado a la cárcel a una mujer inocente y espera llevar a más, me parece interesante hacerle saber a quienes van a juzgar a Miriam Macías y Mario Indij, así como a todos los que conocen la fundación El Cántaro, cuál es el perfil psicológico de una de las mujeres que acusa haber sido abusada sexualmente. Héctor Navarro, como podrás deducir del párrafo anterior, tengo una opinión formada respecto a los móviles que te llevan “ad-honorem” a jugar un papel protagónico en la persecución de un supuesto líder sectario, estando en vísperas de las elecciones a gobernador y siendo éste el principal promotor de la ley anti sectas. No obstante, habiendo leído en los comentarios que publicás en la página del Cántaro que te considerás un defensor de la verdad y la justicia, quiero aportar a tu causa exponiendo todo aquello que Estefanía Lombardi compartió conmigo cuando nos unía un vínculo de amistad y que a mi entender explica el origen de sus acusaciones. Estefi: en tus primeros años de secundaria, habiendo sufrido de niña el abandono de tu padre y habiendo crecido junto a una mujer, que lejos de ocupar su rol de madre, lejos de ser nutricia y contenedora de sus hijas, vivió todos esos años ensimismada, preocupada por ella misma, interesada sólo en trepar profesionalmente como bromatóloga y cuidar de su aspecto externo, en ese contexto estableciste una relación sexual con el novio de tu madre, la cual duró toda la secundaria. Durante cinco años, en pleno uso de tus facultades mentales y físicas, y sin pertenecer a ningún tipo de secta, tuviste relaciones sexuales con el marido de tu ma-

30

dre por el mero placer de lo prohibido. Pasaron los años y un día, con una íntima decepción, te enteraste de que él no era solo tu novio y el novio de tu mamá sino también el novio de tu hermana mayor, que aun teniendo más edad que vos, que ya eras una mujer, tampoco cortó este vínculo patológico y sostuvo también durante varios años una relación con él. No está demás en este contexto aclarar que ese hombre era un degenerado, pero no es en su degeneración en la que quiero hacer hincapié, sino en la tuya. ¿Qué patología correspondiente te llevó tantos años a vivir la intensidad de un aparente abuso sexual sin denunciar semejante aberración ni ante tu madre ni ante la ley?

llo que viste y volver a sentirte una víctima. Cuanto odio alberga tu corazón que aun habiendo avanzado en el camino de la sinceridad y habiendo saneado tu situación familiar decidís mandar a la cárcel con mentiras a aquél que te ayudó, a Mehir, a aquella persona que vos misma buscaste para sacudirte el polvo de tus traumas y no repetir la historia con tus propios hijos. Lamento que la repercusión de mi exposición pueda con su verdad afectar tu vida conyugal y familiar pero te recuerdo que con tus mentiras estas mandando gente a la cárcel. Ésta es la prueba viva de que llegaste a la escuela sin un marco moral y sin hacer uso pleno de tus facultades mentales, porque de haber sido así le habrías puesto fin a tu sexualidad degenerada, la cual nunca quisiste abandonar. Sé que tu estómago debe estar retorciéndose de vergüenza y tu corazón de odio, pero ese sentimiento es sólo un grano de arena en el desierto del purgatorio que vas a vivir. Puedo también dar fe ante Dios que ni si quiera quisiste al hombre de tu elección. Él es, a los ojos de cualquiera, un hombre de psicología débil, de físico débil, lo cual a una mujer con tus antecedentes le da seguridad. Y te casaste con la tranquilidad de que las heridas de tu alma nunca se iban a ver ame-

nazadas por él. No obstante, a sus espaldas, nos decías a nosotras tus amigas que siendo una pareja joven nunca hacían el amor, te molestaba su falta de carácter, su falta de reflexión, su incapacidad de traer dinero al hogar, etc. Un desprecio por él brotaba ante cualquier estímulo y lo expresabas abiertamente. Elegiste a un hombre que gracias a sus características tu patológico gusto por una sexualidad morbosa con hombres mayores no se iba a ver tentada, y si bien eso te hacía sentir segura, por otro lado te desagradaba al punto de despreciarlo y asesinarlo psicológicamente. Vos deberías haber trabajado sobre tu trastorno psicológico y sexual, él debería haber sido un hombre verdadero respetado por su mujer. Nada de eso ocurrió. En relación a tu vínculo con Mehir puedo dar fe que tu acercamiento fue voluntario, que vos misma viniste a Córdoba e hiciste un seminario para conocerlo, que vos misma me pediste por favor que te permitiera quedarte en mi casa para pasar algunos días más a su lado, vos misma convenciste a tu novio de venirse a vivir a Córdoba para poder ver a Mehir todos los días, vos misma procurabas estar en todos los almuerzos y cenas, y vos misma te arreglabas para él como no lo hacías para tu marido, ¿o no, Miguel? Yo te vi intentando seducir a un

Cuando llegaste a la escuela buscando alguna guía y le hablaste a Mehir de esta experiencia, reconociendo allí un trauma de infrasexo, él te señalo tu responsabilidad en ello y te incitó a reflexionar al respecto y a que vos misma pensaras en qué condicionamientos te habían llevado a ser partícipe de un vínculo tan patológico: llamar la atención de padres ausentes, expresión de odio por la ausencia psicológica y el egoísmo de tu madre, complejo de Edipo, la necesidad de sentirte abrazada por un hombre mayor, etc. En ese momento decidiste con un ánimo aguerrido dejar de sentirte una víctima y hacerte responsable de tus acciones. A partir de allí pudiste entablar, después de muchos años, un vínculo con tu padre biológico. Superaste en una pequeña escala tu odio por el hombre y en el marco de escuela contrajiste matrimonio con el hombre de tu elección, tu novio, con el que llegaste a la escuela, Miguel Tarzia. Cuán difícil debe haber sido para vos enfrentarse con la realidad de lo ocurrido que decidiste alejarte de la escuela. Cuánta necesidad de olvidar aque-

31

hombre que podría ser tu padre ausente, yo te vi intentando erotizar el vínculo con alguien cuyo único interés era y es ser un educador, un corrector de una sociedad enferma y malsana. Desconozco si tuviste una relación sexual con él. Eso no lo vi. Pero de haber sido así decididamente no hubo coerción psicológica, no fue una violación ni un abuso sexual, de haber sido así no tengo dudas de que fue voluntario y de muy buen agrado, mal que le pese a tu marido. ¿Te dijeron, Estefanía Lombardi, los detentadores de poder que te “incentivaron”, que podés ir presa por falso testimonio? ¿Imaginaste si quiera como sería tu vida en una cárcel de mujeres? ¿Podés dormir por las noches sabiendo que Miriam tal vez pase los últimos años de su vida encerrada en una jaula donde se respira el aire de la degeneración humana? Sus lágrimas y el dolor de su encierro son los que deberían conmover a tu abogado y no las lágrimas ácidas de tus mentiras. Esta declaración, disponible para reproducirse en un juzgado si es necesario, no sólo tiene como propósito desacreditar cualquier acusación que pueda hacer Estefanía Lombardi, sino probar que quienes acusan a Mario Indij es gente que ha sido rechazada a formar parte de la fundación El Cántaro por no respetar la moral y las buenas costumbres de la sociedad que queremos conformar, agravado por la incapacidad de corregirse a sí mismos. Por otro lado el principal blanco de tiro no es Estefanía Lombardi ya que esto no se trata de una simple acusación por abuso sexual sino de un complot político con intereses creados en contra de Mario Indij fundador de El Cántaro, y como cualquier causa basada en la corrupción si no está la persona adecuada para acusar, seguramente habrá otra persona u otra causa. No obstante, en relación a la causa por abuso sexual, me parece interesante señalar que las leyes que rigen el procedimiento judicial son obsoletas. Y parecen haber sido aprobadas por un responsable del poder legislativo que sufrió una violación de infancia y que considera que cualquier persona acu-

32

sada de violación sea esta inocente o no, sea comprobable o no, debe estar en prisión. ¿Sabe la gente que en una acusación por abuso sexual todos los involucrados pueden legalmente permanecer en prisión como cualquier criminal hasta que la ley demuestre que es culpable? ¿No es que uno es inocente hasta que se demuestre lo contrario? En este caso, Miriam Macías, inocente, estuvo encarcelada durante 48 días mientras buscaban las pruebas inexistentes de su culpabilidad. ¿No es obvia la falencia de esta ley? Y como la acusación por un abuso sexual de estas características es imposible de probar fehacientemente, entonces la sentencia queda en verdad librada a la subjetividad (en el mejor de los casos) de un ser humano, lo cual le da al procedimiento judicial un relieve que se toca directamente con la violación a los derechos humanos. ¿Estas son las leyes de un país democrático? ¿Cómo subsiste actualmente una ley que permita encarcelar a una persona sin pruebas y someterla a la burocracia del sistema por tiempo indefinido? ¿Qué efectos se imaginan que tiene que una persona moralmente sana esté encerrada con criminales mientras espera que se demuestre su inocencia o se la condene injustamente por un crimen que no cometió? ¿Y qué efectos se imaginan que tiene encerrar a una persona enferma con otra persona enferma? Estas no son leyes justas, no son leyes que le den a cada uno lo que le corresponde, son leyes que incitan a la corrupción, a la coima, a la transa, cuando no a la violencia al ver tanta injusticia; son leyes que gestan muchos más criminales de los que encierran en sus cárceles. ¿Entienden todos que en esta causa contra Mario Indij se está echando mano de una ley con falencias para promover otra ley con falencias? ¿De qué otro modo se reproduce la injusticia sino? ¿Y el Poder Legislativo del país democrático para dónde mira? ¡Alguien que por favor que ponga un freno a este abuso!

DIAGNÓSTICO PSICOLÓGICO DE LAS SUPUESTAS VÍCTIMAS DE ABUSO SEXUAL Una causa con muchas subjetividades: las testigos incriminan a un inocente desde su psicología perturbada por antecedentes turbios. La supuesta evaluación objetiva del peritaje psicológico es para corroborar la mentira y nadie indaga en los verdaderos móviles ocultos.

E

n Psicología, como en cualquier disciplina humanística, hay diferentes formas de diagnosticar un fenómeno, dependiendo de la óptica de quien lo esté evaluando. Sin entrar en ninguna teoría del conocimiento, es bastante obvio (también para la ciencia actual) que el objeto del conocimiento no puede ser separado del sujeto que conoce. Ambos conforman el campo unificado del fenómeno perceptual. Si tratamos de hacer un peritaje psicológico de las supuestas víctimas de abuso sexual por parte del maestro Mehir, es decir, un diagnóstico psicológico de las acusadoras, estimamos que los que tuvimos una experiencia de vínculo con ellas somos los más calificados para “conocerlas”. Y sabemos de antemano que desde la perspectiva condicionada de los psicólogos que estudian estas

denuncias, se impone el marco de referencia desde donde tratan de hacer encajar las piezas: el “programa de persuasión coercitiva de las sectas”. En un atípico abuso sexual. Y digo atípico porque el vínculo sexual que declaran haber tenido con el señor Mario Indij, también dicen haber sido voluntario, aunque una voluntad víctima de la persuasión coercitiva. Evaluación que ya adolece de objetividad, en tanto identifica a una Escuela de Conocimiento con una secta destructiva de manipulación psicológica y a un sabio educador con un fanático líder manipulador y megalómano. Por lo tanto, ya encuadrado a priori el acusado en este contexto, todos los supuestos agravantes de los hechos se van a referir a los síntomas característicos de dicho crimen: la persuasión coercitiva.

33

La coerción psicológica o persuasión coercitiva es el recurso empleado por el abogado Héctor Navarro para transformas una supuesta relación sexual en un abuso, es decir en un delito. Este es también el marco de referencia de los psicólogos encargados de hacer el peritaje de este tipo de casos, si alguna vez se dignan a hacerlo. Pero vistas desde nuestro conocimiento psicológico, las mujeres involucradas en la denuncia, apartadas de la enseñanza de escuela por no poseer la suficiente madurez para conocerse a sí mismas y hacerse responsables de su propia psicología, padecen de una psicopatología que les impide reconocer en sí mismas las propias perturbaciones anímicas. Y utilizan el método defensivo de la proyección intensa del enemigo en una figura sobre la que sobre imponen sus experiencias traumáticas. Es muy ejemplificador el caso de Estefanía Lombardi, como ya fue expuesto en otras notas. Una paranoia y obsesión gestada desde el abuso sexual de su padrastro en la temprana adolescencia en donde ella “consiente” por años en una relación paralela a la de su madre y su hermana con el mismo hombre. ¿Le hicieron un peritaje psicológico a esta denunciante? En tal caso... ¿pueden desafectar su acusación de su peculiar sistema proyectivo? ¿Ahondaron en el perfil de María Kojan o de Maya Lavayén, llamado comúnmente “histeria” o “psicología de violada”? Se trata de perfiles muy característicos en los que simultáneamente a una actitud de intensa seducción histérica, compensación de conflictos de infancia por la negación de su sexualidad y su cuerpo, ejerciendo un influjo erótico con constante necesidad de reafirmación, experimentan a su vez un síndrome de “víctimas abusadas” por la supuesta obsesión sexual de terceros.

34

De tal manera que nunca llegan al orgasmo con sus parejas, sintiéndose acosadas o presionadas por su acoso. O eligen parejas en que el “sexo” no sea lo principal, basadas en alguna amistad intelectual o sublimadora. En el caso de Maya todos podemos recordar cómo percibía fácilmente “hadas y duendes” y el maestro trataba de hacerle ver esos rasgos psicóticos de falsa sublimación por negación de la sexualidad. Entonces: ¿es azaroso o casual que ella finalmente vea en su educador a un “abusador”? Desde nuestro conocimiento psicológico de años de las acusadoras, podemos realizar las declaraciones necesarias que inhabilitarían completamente la veracidad de sus denuncias. Pero si de lo que se trata es de una trampa urdida por el buen abogado Navarro, que tuvo compasión de estas víctimas (porque seguramente lo habrán seducido completamente) para sentenciar sin juicio a Mehir, está muy claro que la carátula de este caso es la más adecuada. Aunque no haya pruebas, ya que el supuesto abuso sucedió hace años, en “reiteradas ocasiones”, el objetivo del descrédito y todas las consecuencias para la escuela ya se están dando y esto les estará dando cierto “placer” morboso a estas pobres damiselas. A falta, por supuesto, de otro placer más biológico… ¿Cuándo fue el peritaje psicológico, que no nos enteramos? ¿Qué tipo de corroboraciones quieren inventar? ¿Qué legitimidad pueden tener estos perfiles enfermos…? Desde el principio este gran circo está armado por la impunidad y corrupción de un sistema completamente mentiroso e injusto. Dios les permita arrepentirse porque no saben lo que están haciendo.

La trampa urdida con la acusación de abuso sexual se fundamenta en la supuesta existencia de coerción psicológica. El Cántaro es una Escuela de Conocimiento, donde no sólo no existen las manipulaciones, sino que se busca la libertad de la conciencia. Es necesario prestar atención a cuál es la verdadera persuasión coercitiva en una sociedad donde la sugestión y la persuasión hipnótica, sostienen el sueño colectivo.

35

UNA ESCUELA DE LIBRE PENSADORES ¿Acaso la publicidad no sugestiona de manera permanente? ¿Acaso el mandato paterno no es una forma de coerción psicológica? ¿Acaso la moda no es una hipnosis colectiva consumista? ¿De qué hablamos cuando definimos la manipulación psicológica?

U

n delito de figura sumamente ambigua e incierta que fundamenta la llamada “ley anti-sectas”, es la “manipulación psicológica”. Podría considerarse como ejemplo a una persona muy carismática, paternalista, de móviles egoicos y siniestros, gestando una cierta hipnosis a una personalidad muy débil y enfermiza que por sus propias inseguridades busca compulsivamente que piensen por ella, que decidan por ella y busca a través de su devoción fanática un refugio para sus debilidades. Este tipo de vínculos es muy propio de las sectas “destructivas”. Pero se denominó “ley anti-sectas” y deberían comenzar por agregarle el adjetivo, ya que por el solo hecho de ser un sector no significa “malo”. Ya desde este nombre dado a la ley, algo huele muy mal. Nosotros somos una “Escuela de Conocimiento” y no tenemos ningún punto de contacto con una secta destructiva. Para comprobar si los cientos de discípulos de esta Escuela somos o no víctimas de una secta destructiva, ¿no deberían habernos llamado a declarar? Si nosotros somos los sujetos supuestamente damnificados… ¿por qué será que omitieron cientos de declaraciones, las de los sujetos que eligieron libremente seguir esta enseñanza? Personas que tienen una inserción laboral y profesional desde hace décadas, con una intachable interacción social (no estamos hablando de gente que evade los impuestos, mucho menos de delincuentes, estafadores, etc.) en muchos casos con un nivel educacional universitario, con solvencia económica basada en su trabajo y dedicación personal, familias

36

bien constituidas con hijos escolarizados... convengamos que no estamos hablando de “personalidades débiles” o de aquellos jóvenes de los años 70, intentando construir utopías en una comunidad hippie... gente que no tiene ninguno de los habituales vicios sociales: alcoholismo, drogadicción, etc. Si se hubiera investigado a estos sujetos, los personajes protagonistas de esta Escuela desde hace década ¿dónde entraría la figura de “manipulación psicológica”? ¡Ni somos cientos de manipuladores ni somos cientos de cerebros lavados! Las premisas completamente falsas sobre las que se basa la acusación a Mehir Indij por abuso sexual son que es el líder de una secta destructiva, que ejerce coerción psicológica sobre sus discípulos y por eso ellos lo obedecen y se someten muy convencidos de hacerlo voluntariamente. No existe una sola prueba que demuestre ese delito aberrante.

Tomemos un ejemplo de coerción educativa, teniendo en cuenta que sólo pretende ser un ejemplo, nada más, ya que la personalidad es un complejo sistema de condicionamientos, que también incluyen una estimulación positiva. Cuando un padre le dice a su hijo: “Sos un inútil, igual que tu madre... no servís para nada, ¿te crees que vas a vivir de la música? Lo único que espero es que no falles también en la Facultad... y que seas “alguien” en la vida, porque si no, olvidate... vas a tener que trabajar y no te da el cuero...”. Este es un cuadro habitual de cómo se condiciona por el temor a través de un mandato. Cuando el sujeto intenta hacer algo que responde a sus inclinaciones esenciales, se abre un abismo a sus pies, siente tanta inseguridad y compasión de sí, tal complejo de inferioridad, que inconscientemente rehuye toda acción que pudiera ser eventualmente desaprobada y se refugia en la dependencia psíquica al mandato paterno y hasta en la dependencia económica. Aunque esto signifique frustración, resentimiento, violencia interior y una especie de asfixia existencial que luego tratará de atenuar con las salidas autodestructivas que ofrece la sociedad: drogas, alcohol, etc. Es un claro ejemplo de cómo actúa la educación ordinaria “programando” por el miedo a no ser, a no poder, a no ser amado, etc. Sobre este tipo de condicionamientos inconscientes, se edifica la máscara social o “personalidad”. ¿Qué es entonces la personalidad? Una serie de mecanismos estereotipados de respuestas a estímulos externos e internos por medio de un predecible circuito de asociaciones inconscientes, a la manera de los mecanismos que estudió tan bien Pavlov en los animales. Si a la educación paterna le sumamos todos los significados sociales transmitidos como metas de una sociedad de consumo materialista, que obedece a patrones de valoración económica, manipulados para el beneficio de unos pocos, nos encontramos con un “sistema de persuasión coercitiva altamente sofisticado”. Y esto lo aclaramos con cierta ironía para que se comprenda la ambigüedad de los significados sobre los que se basa tan tremenda e injusta acusación que puede destruir una persona y una institución.

Revisemos la definición de secta destructiva: para que una creencia o fe religiosa sea peligrosa tiene que existir coerción psicológica ejercida sobre los adeptos. Entonces, ¿qué es la persuasión coercitiva o coerción psicológica? Es un influjo o sugestión que manipula mental y emocionalmente por el temor a un sujeto, condicionando sus respuestas a la realidad a través de sus debilidades. La persuasión coercitiva tiene distintos grados de manifestación, que van desde los miedos inculcados por educación a través de un sistema de valores errados hasta la caída en una secta destructiva. Todo el sistema publicitario en nuestra sociedad de consumo avasalla el subconsciente con mensajes que afirman que la felicidad es “tener cosas” y no tenerlas es ser un fracasado.

37

Pero volvamos a las “sectas destructivas”. En una secta destructiva el líder manipulador y megalómano utilizaría el conocimiento de estas debilidades del sujeto para sobreimponer sobre su figura autoritaria a su “padre interno” y de esta manera potenciar sus miedos y manejarlo para que haga lo que él quiera. Y lo que el sujeto manipulado cree “querer”, es destructivo para él y para los demás. Pero en una Escuela de Conocimiento el sujeto estudia sus condicionamientos negativos para desanudar esas oscuras frustraciones provenientes de traumas de infancia, que lo tornan autodestructivo, a la vez que inicia el proceso de descubrir sus potencialidades más íntimas, inhibidas por los traumas o heridas psíquicas, para liberar su danza con la vida. Desarrollando y armonizando sus capacidades esenciales encuentra otra fuente de entusiasmo y aprende a hacer conscientes sus más auténticos y esenciales anhelos. En este proceso irá adquiriendo confianza y comprensión de los mecanismos sabios de la vida, así como reconocerá una fuente muy profunda de alegría no condicionada que subyace en lo más íntimo de sí mismo, por lo cual comenzará a desandar el camino de los miedos y a manifestarse más seguro, abierto, amoroso, entusiasta, esperanzado. Cuando un sujeto en una Escuela de Conocimiento dice: “esta es mi voluntad” es porque ha estudiado y desandado sus condicionamientos inconscientes negativos, y por lo tanto está en situación auténtica de ejercer su capacidad de elección y decisión. Eso no es de ninguna forma “lavado de cerebro” sino acrecentamiento de su consciencia. Entonces queda bien clara la diferencia entre la acción de persuasión coercitiva sobre un sujeto, realizada habitualmente en la educación ordinaria por las condiciones anormales de existencia, a través de los padres y la sociedad en general y llevada a una escala superlativa en una secta destructiva, y la acción “pu-

rificadora” y liberadora de condicionamientos negativos que es la dinámica propia de una Escuela de Conocimiento. ¿Cómo entonces puede haber una confusión tan grave que allane todo y llegue a identificar dos fenómenos tan cualitativamente diferentes y hasta opuestos, como una secta destructiva y una Escuela de Conocimiento? Sólo la más malintencionada ignorancia puede basar sobre semejantes premisas falsas una acusación para destruir la vida de una persona y una institución humanitaria. Entiéndase bien, sólo puede suceder semejante confusión cuando deliberadamente se urde un plan siniestro y criminal, que considera peligrosa la consciencia, el idealismo y las perspectivas revolucionarias que puedan transformar radicalmente las bases del sistema. Es decir, enmascarada en una acusación de abuso sexual para injuriar y destruir socialmente a una persona y una institución humanitaria, se está desplegando el monstruo aparentemente dormido de la persecución ideológica dictatorial en un supuesto país democrático. Esta es la confusión que avala la ley anti-sectas, no discriminando de las sectas destructivas, los grupos cuya función es estimular la evolución y perfeccionamiento de los seres humanos, no reconociendo la diferencia esencial entre un líder destructivo y un sabio. Y con la subyacente fobia a toda ideología o creencia diferente. La verdadera persuasión coercitiva es la siembra nefasta del sistema, inoculando por una educación malsana el temor a no ser, a no poder, a no ser aprobado, para lograr sus frutos oscuros: ausencia de valores reales, refugio en placeres regresivos y ausencia de consciencia, capacidad de discernimiento y libertad del pensamiento. En otras palabras destruyendo las alas del alma…

DISCÍPULOS POR ELECCIÓN Cartas de discípulos a la opinión pública Hemos seleccionado dentro de las cientos de cartas de discípulos que quisieron dar testimonio sobre la completa ausencia de “manipulación psicológica” por parte del Maestro Mehir, algunas muy significativas como ejemplos de personalidades fuertemente integradas que han tenido a lo largo de su vida una importante contribución a la sociedad y que demuestran la falacia sobre las que se fundamentan las acusaciones. El Cántaro es una institución educadora y humanitaria y no tiene punto de contacto alguno con una secta destructiva.

Carta de la médica

H

ace algunos años, siete para ser más exacta, tuve el honor de conocer al Maestro Mehir y digo “tuve el honor” porque por vez primera pude dar con un ser que no sólo tenía tan nobles y altos ideales humanitarios, sino que los hacía carne en su propia vida, en sus acciones cotidianas, en su relación con todos aquellos que lo rodeaban, intentando perfeccionarse cada día, siendo intransigente consigo mismo, buscando y defendiendo la verdad, el honor y la honestidad en su enseñanza. Entregado plenamente a la tarea de educador, no vi que viviera más que para enseñar a sus discípulos, día y noche. Absolutamente todos los días de todos los años, no existía nada más para él que la enseñanza a sus discípulos. Tal es la nobleza de la que está investido, tal es la adhesión a sus verdaderos ideales y tal la fuerza de su corazón y de su amor. Desde la niñez y durante la adolescencia vivió siempre en mi corazón el hermoso anhelo de curar a las personas, soñaba con salvar vidas, sanar las enfermedades, cuidar la salud. Inmediatamente después de egresar del colegio secundario ingresé en la facultad de medicina de la ciudad de La Plata, y con suma dedicación y sin perder tiempo alguno me entregué plenamente a estudiar y enriquecerme con todo lo que la universidad me brindaba. Puedo decir que me desempeñé como una muy buena estudiante. Más tarde comencé a realizar algunas prácticas médicas ad honorem y a la vez trabajaba de forma pasajera en asistencias domiciliarias. Posteriormente, me desempeñé como Teniente Médica en una unidad del Ejército Argentino, siendo jefa de sección, en la ciudad de City Bell, donde permanecí cerca de dos años. Luego de recibir el fuerte impacto de la realidad que acontece en la medicina actual, de la frialdad con que se atiende a las personas en los hospitales, de las negligencias médicas que se cometen por el egoísmo y falta de amor al prójimo, del comercio que implica la medicina, donde lo más ausente es la contención y la intención de curar al otro, llegué a esta maravillosa Escuela de Conocimiento, donde los valores y los fines eran los del

39

verdadero humanitarismo, y entonces no tuve ni tengo dudas, con todas mis facultades mentales en orden, elegí y elijo libremente dedicarme en esta Escuela a aprender a ser un ser más humanitario, más amoroso, más contenedor. Sé que a partir de ahí voy a poder ejercer otro tipo de medicina y ser otro tipo de madre, otro tipo de mujer. Hasta ahora los títulos, diplomas y cursos, no he visto que enseñaran otra cosa más que una fría ciencia escéptica y el modo de obtener dinero más rápidamente jugando con la salud de las personas. Creo que primero deberíamos todos aprender y enseñar a ser más humanitarios. En esta maravillosa Escuela, me fue dada la oportunidad de aprender que existe otro tipo de medicina, más natural, menos invasiva. Aprendí que se está enfermo antes de estar enfermo, antes de que cualquier enfermedad, y más aún una enfermedad terminal, se manifieste, y que si uno aprende a ver los signos en la forma de pensar, en el manejo de sus emociones, en el manejo energético, en la forma de alimentarse, a lo largo del tiempo, hay mucho que se puede hacer para que las enfermedades no se manifiesten. Aprendí también a no agredir y bombardear el cuerpo físico con medicamentos pues éstos se convierten en toxinas iguales o peores a las fabricadas por nuestro propio cuerpo; y que si fuera estrictamente necesario medicar, intentar, evaluando las circunstancias, prescribir siempre los medicamentos más inocuos, con menor cantidad de efectos adversos. Aprendí también a sanear el cuerpo por los medios más naturales posibles a través de un correcto entrenamiento físico y energético que estimule al cuerpo a liberar las toxinas productoras de enfermedad y a través de una correcta alimentación. Así mismo siento que la enseñanza que he recibido del Maestro es tan íntegra y completa, que comencé a ver mi profesión como algo sagrado, por lo que no quise ya ningún tipo de remuneración económica, sino que me sentí a cargo de una tarea humanitaria estando completamente al servicio de la gente, y que más allá de que voluntariamente trabajara para los integrantes de la Escuela El Cántaro, siempre que hubiera cerca cualquier persona, conocido mío o alguien de otros ámbitos sociales que yo frecuentaba que necesitara ayuda, asistencia o asesoramiento médico, yo estaba allí presente. Y para eso me he preparado y lo sigo haciendo, para asistir y estar al servicio de la humanidad. Siento que esto es un ida y vuelta bellísimo, y que cada buena acción que realizo como profesional es una forma de agradecimiento a mi Maestro que tanto se esforzó en enseñarme. En la Escuela me dediqué plenamente a atender las consultas generales de todos sus integrantes, por lo tanto conozco y estoy al tanto de todas las manifestaciones patológicas de todos aquellos que pertenecen a la misma y me han consultado, inclusive de mi Maestro. Hace algunos meses los medios de comunicación inescrupulosos, arengados por un grupo de ex discípulos infames, lanzaron una campaña de difamación contra la figura del Maestro Mehir y nuestra Escuela de Conocimiento llenando los periódicos y titulares de los noticieros con mentiras e inventos sobre enfermedades sexuales, abusos sexuales, drogas, uso ilegal de la medicina, manejos psicológicos, lavados de cerebros y quién sabe cuántas otras cosas ridículas más inventaron y van a inventar para llevar adelante este siniestro.

40

Conocemos perfectamente el grupo de personas, si se las puede llamar así, que realizó esta difamación, con nombres y apellidos, son precisamente aquellos que se retiraron de la Escuela por inmorales y deshonestos. Se trata de un grupo de gente que a pesar de toda la enseñanza que el Maestro les ha dado, no pudieron revertir su proceder y su forma de pensar. Tampoco pudieron escuchar ni aceptar semejante verdad, e invadidos por la ira y el orgullo herido y avalados por algún adinerado detentador de poder y un falso poder judicial que ve una sabrosa oportunidad para enaltecerse, tramaron esta vergonzosa infamia contra un ser de talla tal como la que rara vez pueda encontrarse, y de inestimable valor para aquella cultura y aquella sociedad que quieran algún día esgrimir verdaderos valores humanitarios de vanguardia. Ha sido una exposición horrible la que han hecho sobre la figura del Maestro y sobre la mía como profesional. Desde que ingresé a la Escuela estoy al tanto de cualquier desequilibrio fisiológico del Maestro y puedo decir clara y conscientemente que sus manifestaciones patológicas nunca han pasado más allá de un resfrío o una simple congestión; y en estos dos últimos años, por el largo correr del tiempo sobre su cuerpo exigido por toda una vida de entrenamiento físico y en las interminables horas dedicadas a la enseñanza, sufre de hipertensión crónica y su corazón se encuentra más débil y cansado. Así mismo, es reticente a ingerir medicamentos y debido al excelente cuidado de su cuerpo, de su energía y su alimentación y los esfuerzos que realiza a diario para ejercer control sobre sí, rara vez ha llegado realmente a afectarlo. Es muy claro para mí ver como la energía curativa gestada por su disciplina sagrada y su alto nivel de voluntad gestan un dominio tal sobre su cuerpo, que esta afección en su sistema circulatorio no impide que lleve a cabo su vida con pleno ánimo y entereza. Por todo esto y por mucho más, puedo decir que el Maestro jamás padeció ni padece ninguna enfermedad de tipo infecciosa, ni venérea ni de ningún tipo en ninguna parte de su cuerpo, y nadie que pertenezca a la Escuela, presenta síntomas ni es portador de semejante enfermedad. Pero sé a ciencia cierta dónde han apuntado los criminales que calumnian en su pérfida acusación. Saben bien que encerrar al Maestro en una prisión, con su edad avanzada, su corazón debilitado, sin la medicación pertinente, sin las impresiones que le son benéficas, sin sus prácticas y entrenamientos diarios, inmerso en un mundo y una realidad que no condice con la altura de su ser, sería asesinarlo de inmediato. Por supuesto que tampoco son ciertas las declaraciones sobre prescripción de ansiolíticos de mi parte, salvo alguna vez en caso de que alguna persona los recibiera de forma crónica y con pleno control de su especialista neurólogo. Por el contrario, en la Escuela se propicia una vida sana, lo más natural posible, libre de cualquier sustancia tóxica, estimulando todo aquello que favorezca la salud del cuerpo y el pleno desarrollo del alma y el espíritu. Entonces pregunto ¿de qué se nos está acusando? ¿Por qué nos persiguen? Aquel que lee nuestras notas y tiene dos neuronas, sabe y puede darse cuenta de qué se nos acusa y por qué nos persiguen. Para nosotros es muy claro. Se nos persigue por pensar, por pensar verdaderamente, por buscar la verdad, por exponer verdades que en esta sociedad estructurada y en-

41

sombrecida serían interpretadas como una amenaza cuando en realidad son una filosofía “curativa” vanguardista, para el ennoblecimiento y enriquecimiento de la cultura. Somos, verdaderamente, la orquesta de bombos y platillos en una sociedad donde todos se tapan los oídos con los dedos y nadie, o mejor dicho muy pocos, están dispuestos a escuchar. Es claramente una persecución ideológica sanguinaria en la supuesta “Argentina de la libertad” libre de la dictadura, la que se está realizando contra la Escuela. ¿Al manejo de este tipo de justicia esperan que se haga accesible el maestro? Para ser detenido y encarcelado ¿por qué? ¿Por ser un hombre de bien, honorable, justo y sincero? ¿Por ser un educador de vanguardia? ¿Para ser apresado como Miriam Macías y demorando muchos meses en una cárcel, sin tomarle declaración, haciendo que se pierda una y otra vez el expediente hasta que se les ocurra qué excusa inventar para mantenerlo detenido? ¡No! Ruego a Dios que todo lo contempla que este caso se resuelva con la debida justicia y coherencia, de lo contrario, todos los ciudadanos deberíamos sentir vergüenza de la justicia de éste país. Pido resolutivamente que los verdaderos jueces y políticos de honor, de los cuales sé que quedan muy pocos, otorguen justicia a este caso y retiren el pedido de captura injustificado del maestro Mehir. Dra. Ana Martínez, Médica. M.N.: 109.095

Carta de Silvia

H

ace décadas que soy discípula del maestro Mehir. Soy profesora en Letras, tengo 56 años, cuatro hijos, tres nietos, y creía estar entrando en la etapa más beatífica de mi vida, con convicciones profundas, ideales que me animaron desde la adolescencia y que justamente ahora estaban a punto de concretarse en un proyecto educador “soñado”: el Instituto “El cántaro”. Pero en estos momentos me parece estar viviendo uno de esos relatos “fantásticos” que solía dar en las clases de Literatura, en los que se simbolizaba claramente la locura del sistema. Este cuento “fantástico” armado por sofistas, funcionarios corruptos y gente muy enferma mental y emocionalmente que ha manipulado a la opinión pública para que nos vean como “cerebros lavados” y que me ha hecho aislarme por un tiempo, teniendo que dejar mi trabajo como profesora de Literatura y Comunicación Social en la Escuela secundaria, trabajo que amaba profundamente, teniendo que dejar de ver a mi familia, dejando mi hogar, con el consiguiente dolor inconcebible de exilio que eso me produce, porque fui seriamente amenazada de tener el mismo destino de Miriam Macías, injustamente encarcelada, obligada por la impunidad de un poder corrupto a permanecer en la cárcel sin ninguna prueba que lo justifique, obligada a transitar un infierno nunca merecido. Cuando conocí al maestro Mehir tenía 30 años, trabajaba en la secundaria, tenía una beca de investigación en la Universidad y me preparaba para obtener una beca en EE.UU. Me había especializado en “hermenéutica simbólica” en la literatura hispanoamericana, me apasionaba encontrar el sustrato mítico- simbólico en el arte de la literatura. Soy entusiasta con el conocimiento. Me concentraba horas en un texto rastreando las huellas del inconsciente colectivo y creía estar descubriendo misterios de la psique humana a través del arte. Cuando comencé a frecuentar la enseñanza de Mehir todo lo que había aprendido y todas mis expectativas de investi-

42

gación dieron un vuelco definitivo, porque él me abría otros portales de conocimiento profundo donde, en lugar de ser la investigadora de mitos y símbolos, podía llegar a vivir en la propia experiencia existencial “una leyenda”, un mito. Pero esto no tenía nada de ensoñaciones ociosas o utópicas a la manera de los irresponsables que quieren huir del mundo por la droga o los mecanismos evasivos de la realidad. Hacerse accesible al mito como experiencia transformadora era a costa de esfuerzos conscientes en el desarrollo armónico de todo el ser, un adiestramiento diario en la purificación y desarrollo del cuerpo, la energía, las emociones y la mente. Mehir me posibilitó en los años de estudio y trabajo con él, acceder a una extraordinaria comprensión de los textos sagrados de todas las grandes religiones, penetrando en la más exquisita literatura y en la más profunda comprensión de un inconsciente arquetípico, manantial universal, atemporal y transcultural de donde surge no solamente el arte sino toda la actividad simbólica del alma humana. La diferencia cualitativa con toda la enseñanza académica, era que el conocimiento no se presentaba como un rastreo erudito de fuentes bibliográficas para hacer uno una síntesis que aportara su sello “peculiar”, sino un acto revolucionario en la consciencia, donde uno participara existencialmente de aquello que conocía. Pero no quiero quitarles el sueño a los sofistas porque no pueden ni quieren comprender el misterio. Más bien quiero atestiguar que toda esa vida profesional de investigación fue enriquecida, potenciada y llevada a una extraordinaria comprensión profunda del arte y la psique humana, gracias a la sabiduría y la dedicación incansable del más grande educador que yo haya conocido: Mehir Indij. Su altruismo y humanitarismo es y ha sido tan grande que esta misma persecución inquisidora no es más que el sello de la verdad de su ser. Hace años, cuando retomé la docencia secundaria en Córdoba, traté de darle a mis alumnos un germen, una semilla de todo ese aprendizaje invaluable, y cada día era el desafío de encontrar métodos para que aprendieran a pensar libremente, a decodificar textos con espíritu crítico en una cultura donde la manipulación mediática masifica e inhibe la capacidad de elaborar pensamientos individuales; y a la vez crecía el proyecto de una educación innovadora que iba a tener su contexto propio en el Instituto El Cántaro. Todos trabajábamos para ese proyecto común. ¿De qué manera van a demostrar que biólogos, médicos,

43

abogados, ingenieros, docentes, comunicadores sociales, etc. son coercionados y manipulados psicológicamente y tienen el cerebro lavado porque adhieren a una ideología progresista y educadoramente revolucionaria? Todo esto es un cuento “fantástico” con estrategias maquiavélicas en donde los manipuladores psicológicos que sostienen el status quo del sistema y los más criminales entre ellos, los grandes sostenedores del sueño colectivo, los “periodistas”, pretenden hacer creer a la opinión pública que una Escuela de Conocimiento es una “secta destructiva” y que un sabio educador es un “gurú abusador”. A veces me sonrío en medio de toda esta pesadilla al pensar que buscándome a mí ¡un gran peligro para la sociedad! policías de civil querían llevarse al director del colegio ¡porque estaba vestido de negro! ¡Cuánto absurdo de “realismo mágico” en un cuento de literatura argentina! Sin embargo presumo que este cuento fantástico es la antesala, el prólogo, la primera escena de una obra grande y fecunda que no será olvidada por las generaciones venideras. Que esta pesadilla donde amenazan de muerte al hombre más sabio y bueno que he conocido, mi maestro, no será más que una presentación (un poco estridente) de la necesidad imperiosa de recordar el artículo 14 de la Constitución Nacional y comprobar si verdaderamente los argentinos adherimos fielmente al ideario de libertad, equidad y justicia, que nos hizo crecer como pueblo, y queremos defender en verdad la libertad ideológica, para después no quejarnos NUNCA MÁS de padecer dictaduras... María Silvia Corina, profesora en Letras.

Carta de Gimena

M

i nombre es Gimena Cantón, tengo casi cuarenta años. Llegué a la Escue-la en el año 2006 cuando trabajaba como Directora Editorial de un área en el grupo editorial La Nación, quizás el más importante a nivel nacional. Por ese entonces vivía en una casa grande y preciosa, viajaba por el mundo gracias a mi profesión, tenía un sueldo privilegiado para una mujer de mi edad que me permitía llevar una vida social y cultural muy activa. Cenas, teatros, cine, paseos, museos... es decir, mi vida estaba muy bien así, aparentemente no tenía la necesidad de modificar nada. Poco a poco fui adentrándome en la enseñanza de Mehir, valorando cada vez más lo que recibía de la Escuela como si fuera un exquisito elixir que iba refinando mi alma. Y sucedió para mí la más hermosa de las revoluciones: comencé a entrenar mi cuerpo, a estudiar ideas abstractas de las más bellas que escuché en mi vida, y a practicarlas. Porque son muchos los que saben de la justicia, pero no obran justamente, los que saben del amor, pero no saben cómo ser

44

amorosos, los que conocen a través de las obras de los demás que existe la generosidad pero desconocen cómo ser generosos... Mehir nos enseñó acerca de los genuinos valores evolutivos para el alma y nos enseñó también cómo se vive en ellos. Eso fue lo más diferente a todo lo que había vivido hasta ese entonces; de su mano aprendí que parte de la comprensión es vivir de acuerdo a lo que se comprende. También fue de gran valor la posibilidad que me dio la Escuela de reconocer condicionamientos inconscientes que dificultaban todos mis vínculos a través de profundos complejos y vacuas compensaciones. Al poder hacer conscientes esos contenidos psíquicos velados hasta entonces, pude objetivar muchas cosas en las que había errado y que tenían ya consecuencias muy negativas en mi vida. Gracias a Dios tuve la oportunidad de librar a mis padres de todo el compendio de culpas que les atribuía hasta entonces y adueñarme de mi vida íntegramente. El trabajo interno, como lo llamamos en la Escuela, es sacrificado y muchas veces doloroso. Pero cada vez que uno da una respuesta diferente, cada vez

que una idea luminosa se hace carne y se ven los resultados, ¡resulta tan liberador! Y creo que es por eso que cada día de mi vida me levanto de la cama eligiendo ser discípula de Mehir. Hoy, revolución mediante, me encuentro en un punto interno muy lejano al que estaba cuando llegué a esta maravillosa Escuela de Conocimiento; sin cuentas pendientes con nadie salvo conmigo misma, trabajando con mis rencores, con mi ignorancia, con mis debilidades. Y se mantiene siempre vigente la ardua tarea de develar el inconsciente para ser cada vez más transparente. En relación a lo profesional, también he crecido mucho. Mehir me ayudó a dar el gran paso de ser una exitosa empleada de un exitoso grupo editorial, a tener mi propia agencia editorial. Trabajo para los diarios más importantes de América Latina, facturo más de cuatro veces de lo que ganaba antes y no tengo techo respecto de lo que puedo ganar. El dinero que genero lo utilizo muy bien para llevar una vida mejor: cambié el departamento en la ciudad por una casa con parque y pileta al pie de las sierras, viajo por el mundo, visto bien. Y además, tengo margen para ayudar a quien lo necesite en mi entorno. Todo esto, también son avances que se los atribuyo a la enseñanza de Escuela. La vida aquí, en la Escuela, es para mí saludable, intensa, rica... como jamás lo había sido: entreno mi cuerpo, estudio y ejercito la reflexión, que me ayuda a cuestionarme y cuestionar todo a mi alrededor para volver a elegir lo saludable en pos del mayor bien común; aprendí a refrenar mis impulsos pasionales, a depurar mis hábitos, a ser disciplinada. Y también a relacionarme sanamente con los demás, a ser una buena ciudadana, una profesional responsable, humanitaria, una mujer en el intento de la dignidad… Esta es la vida que llevé todos estos años junto a Mehir y la que voy a recrear dondequiera que vaya por más que él no esté presente físicamente. Mehir será mi maestro de por vida, donde quiera que esté. El periodismo, del cual como editora me avergüenzo, ha construido una mentira. El fiscal Mazzuchi ha condenado -la historia se repite- a un sabio a la cicuta. El abogado Navarro ha degenerado un conocimiento precioso... y así, la lista de los detractores de la verdad es extensa. Pero mi esperanza se renueva cada día: sé que el nombre de Mehir finalmente quedará limpio de todas las aberraciones que le han adjudicado falsamente, que será reconocido como iniciado y que volverá al país con los honores que se merece, que su enseñanza seguirá fluyendo como un río de aguas claras y prosperará en un mar de gente que busca, como nosotros, el bien y la salud. En fin, este es mi testimonio, que dista en mucho del retrato que intentan hacer aquellos que persiguen al maestro Mehir sobre los discípulos supuestamente dominados psicológicamente, sojuzgados y esclavizados por el maestro. La vida en la Escuela es muy sana, muy limpia y transparente y los únicos tormentos que existen, provienen de la propia psicología, no de la enseñanza y mucho menos del maestro. Y repito: todos los días de mi vida me levanto de la cama eligiendo, por sobre todas las opciones mundanas, vivir bajo el adiestramiento de Mehir, porque lejos de una dominación psicológica, asegura la completa libertad de mi alma. Gimena Cantón, Editora.

45

MANIPULADORES DE OPINIÓN PÚBLICA Lo que muestran los medios son los testimonios de un puñado de ex discípulos y de padres “preocupados” que, juntos, pueden contarse con los dedos de una mano. Muy diferentes a los argumentos que encontrará en las siguientes líneas…

“Carta de una madre desesperada a su hija” dice el titular del 2/07/2011 de La Voz del Interior, como si se tratara de la madre de una niñita que fue captada por una secta destructiva. La hija de la “madre desesperada”, una mujer ya adulta de 26 años de edad, con íntima vergüenza dijo ésa es mi madre y nos relató esta historia: ¿Quieren saber lo que hace una secta destructiva? Yo les cuento, lo viví en mi infancia... Primero captan a aquellos que buscan un oasis en medio del caos mundanal. ¿Cómo? Con un atractivo “speech” de promesa de paz, bienestar, silencio, etc. En segunda instancia, te invitan a desprenderte de todo lo material que te mantiene atrapado en la sociedad. Y por último, te instan a que te arrojes a la loca aventura de “vivir del aire”, alejado de todo y de todos. Y así fue que engancharon a mis padres. Tenía 12 años de edad cuando esto sucedió. Vendieron la casa que habían construido a pulmón, para llevarnos a mis hermanos y a mí a vivir en medio del monte con una casilla rodante, hasta que pudieran comprar un terreno en ese lugar y construir una casa. Y también nos alejamos de todos los seres queridos. Cabe aclarar que quien estaba a cargo de la secta, la promotora del lugar, quería formar una comunidad esenia. Y decía escuchar mensajes de Dios, que les daba a quienes pasaban por el lugar en forma de poemas. Ella decía que no cobraba por darles la palabra de Dios, solo aceptaba “donaciones”, y así fue que entre sus “donaciones”, estaba el techo nuevo de su casa, un galpón con todas las instalaciones y una especie de bunker para cuando llegara el fin del mundo. Esto sin contar que en el tiempo que vivimos allí, mis padres dormían separados, porque ella les sugería la castidad, mientras le revoloteaba a mi padre, quien en su afán de salir de la locura de una oficina, no hacía otra cosa más que dedicarse a la huerta. También les llenaba la cabeza en contra nuestra: recuerdo que les dijo barbaridades para que no me dejaran hacer arte (en ese momento me gustaba el teatro).

46

Y para no omitir detalles, nos ponía a mis hermanos y a mí a desmalezar el terreno, vigilándonos para que no nos escapáramos (en ese entonces ellos tenían 6 y 9 años de edad). Lejos de ser un “paraíso natural”, sentíamos que estábamos en un regimiento militar, coartados de la libertad de ser niños. Una locura, ¿verdad? No sé con exactitud qué pasó en el interior de mis hermanos con semejante experiencia, aunque lo intuyo; puedo decirles lo que me ocurrió a mí: complejo de inferioridad, evasión de la realidad, inmoralidad, cobardía, miedo de enfrentar el mundo, por mencionar sólo algunas con las que todavía lucho a diario. Aunque ustedes no lo crean, mis padres, quienes me llevaron a vivir esa experiencia a temprana edad, son los que hoy no están de acuerdo con la vida que llevo. Hace 6 años conocí a Mehir, y tuve la dicha de presenciar su vida, su dedicación a la enseñanza; como día a día plasmaba lo que nos enseñaba. Y tengo la certeza de que hoy, esté donde esté, sigue haciéndolo. En los años que hace que soy su discípula, aprendí a pararme sobre mis propios pies, a sentirme segura de mí misma, a ser honorable, a trabajar con honradez, a ir más allá de mis miedos, y a descubrir que no hay nada que temer del mundo, ya que es el mejor sitio para aprender a ayudar al prójimo, aparte de superarse a uno mismo. Es aquí donde les pregunto a ellos y a todos aquellos que sean dados a la reflexión: ¿Les parece que verdaderamente tienen algún derecho para cuestionar mi vida? -“Si”, dicen, “somos tus padres, nos preocupamos por vos”. Está bien, les pregunto algo más: ¿No les parece que con 25 años de edad y habiendo vivido semejante experiencia que, dicho sea de paso, dejó heridas profundas en mi psicología, tengo la madurez suficiente como para saber DISCERNIR entre una secta destructiva y una ESCUELA DE CONOCIMIENTO como lo es EL CÁNTARO? Es evidente que no me conocen, que no quieren ver que me convertí en una mujer adulta, responsable de sus decisiones. Lo que esperan es que sea la niñita simbiótica que no podía separarse de su madre por miedo a perderla, trauma que ella misma ocasionó cuando se dio cuenta de que la secta en la que estábamos era destructiva verdaderamente porque ya no le hacía bien, y decidió irse para “reflexionar” sin pensar cuánto dolor producía en nosotros que pensamos que no volveríamos a verla. Bueno, les digo que no soy más esa niñita, ni lo seré por más cartas que manden a La Voz del Interior. Decidí escribir esto para que se den cuenta contra qué lucho. Me mostraron su arrepentimiento al respecto, y eso lo valoro más que nadie, porque sé que es la base de un nuevo vínculo entre nosotros, más limpio, más amoroso, más sincero. La muerte nos acecha a cada instante, y no quiero desperdiciar ni un minuto de mi vida con rencores de ningún tipo y sé que ustedes tampoco… ¿no les parece positivo, que no perdimos ni un instante en reanudar nuestro vínculo? Anhelo que sigamos así. Nadia

47

“Carta de un padre preocupado que tiene a su hijo con Mehir” dice el titular del 15/07/2011, y un discípulo creyendo reconocer allí los pensamientos de su padre decidió compartir con nosotros la carta que le escribió en respuesta:

Desde pequeño siempre te esforzaste en que cumpla con tus directivas, ya que considerabas que era lo mejor para mí. En ese entonces era bueno que estudie, que tenga un título, que aprenda inglés, que me prepare para “triunfar en el mundo”. Estabas muy pendiente de mis resultados como si me estuvieras preparando para ocupar un lugar en tu vida, no para que, como es natural, cuando sea adulto haga mi propio camino. Yo era sólo una extensión tuya, como una posesión, algo sin criterios propios que tenía que obedecer tus premisas, como si yo estuviera inhabilitado para decidir por mí mismo, un inútil. Cuando empezamos a trabajar juntos, Dios nos puso en el camino un espejo que mostraba lo que se estaba gestando si yo seguía tus certeras convicciones: nos mostró la relación que había entre un padre autoritario y un hijo asfixiado, un hijo que no podría nunca, bajo el yugo de su padre, desarrollarse independientemente. Nos mostró la escena de tu socio H. y su hijo J., quien estaba bajo tratamiento psiquiátrico, porque estaba tan asfixiada su individualidad, su poder de expresión, estaba tan subyugado por su padre psicológicamente, que era un inútil; un hombre de 40 años que vivía como si tuviera 18, no tenía ningún tipo de poder de decisión, todo en su vida lo decidía su padre, una realidad muy triste. Yo me daba cuenta que iba camino a eso, me identificaba con esta situación. Por otro lado, veía cómo también te aprovechabas de esto, del mal vínculo que tenían padre e hijo, para sacar ventaja y beneficiarte económicamente. Siempre me decías las grandes posibilidades que teníamos en lo económico trabajando juntos, y cuando decidiste vender tu empresa a una compañía multinacional, me invitaste a que fuera socio tuyo en una nueva empresa. Tu ambición sin límites se seguía alimentando. Por un lado, trabajabas para la multinacional obteniendo un buen sueldo, y por

48

otro tenías tu propia empresa. No está de más resaltar en este punto lo poco ético de estar trabajando para una empresa y, además tener una empresa propia que competía con la compañía para la cual trabajabas, y por supuesto que aprovechabas estos contactos para hacer tus propios negocios. El punto es que nunca fuimos socios: yo siempre fui alguien a quien fácilmente podías manejar, siempre el control de todo tenía que estar en tus manos, aunque por otro lado me decías, y me hacías creer que éramos socios y que yo iba a ganar mucho dinero mientras trabajara con vos, grandes promesas. En ese entonces, cobraba un sueldo miserable y si necesitaba más dinero que el que recibía usaba tu tarjeta de crédito, y creía que podía tener el dinero suficiente para todo lo que se me ocurriera comprar. Cuando conocí la Escuela, al querer asistir a seminarios y viajar a Córdoba, pedía aumentos de sueldo. Esta situación te empezó a preocupar. Sí, hasta ahora estaba todo bajo control, todo cerraba bien, tu hijo cumplía tu decisiones sin cuestionar, además convenía no sacar dinero de la empresa, era mejor dar grandes financiaciones a los clientes, así no los perdíamos y la plata quedaba adentro, era mejor acumular. Entonces sucede que el hijo que habías preparado durante tanto tiempo, el hijo sumiso, encuentra lo que buscó durante mucho tiempo, una Escuela de Conocimiento, un lugar donde se enseñan disciplinas que alimentan el alma, y esta situación amenaza tus planes de que viva cerca de tu mirada, supuestamente para quererme. Nunca te pusiste a pensar si yo estaba eligiendo por mí mismo un camino en mi vida diferente al tuyo. Te repito: “MI VIDA”, ¿o acaso vos por haberme educado sos el dueño de mi alma? La cuestión es que cuando decidí irme de la empresa, ya viviendo en Córdoba, me dijiste que me fuera, pero que no podría llevarme dinero si no cumplía con lo que vos querías para mí; entonces no merecía la parte que supuestamente me correspondía, a pesar de ser socios legalmente. A partir de ese momento, comenzó una batalla muy fea entre un padre y un hijo. Un padre empedernido, que no acepta que un hijo pueda elegir bien, si elige algo diferente a vivir por dinero, como si no

existiesen en la vida cosas más valorables, en una ciudad aburrida y contaminada. “Si decide abandonar a sus padres a los 30 años, entonces no merece llevarse nada en las manos para seguir su vida”, esa fue tu conclusión. Por suerte en la Escuela me enseñaron a fortalecerme y poder lograr mi sustento sin depender de nadie, también me enseñaron a manejarme de forma ética en los negocios, y a desarrollarme en proyectos que sean humanitarios, algo que me da mucho entusiasmo y al mismo tiempo paz en el alma. Luego vivimos la situación del departamento, supuestamente la mitad lo había pagado con ganancias mías y la mitad era un préstamo tuyo. Al mudarme a Carlos Paz decido venderlo, y logro casi el doble de lo que había pagado. Me ofreciste acompañarme a firmar la venta y guardarme el dinero “en un lugar seguro”. Lo que sucedió es que te fuiste con todo el dinero y decidiste no dármelo; obviamente yo confié en vos, por eso te di el dinero y vos me defraudaste. Todo esto habla de tu desesperación por retenerme, manejos de dinero en los cuales querés comprar mis decisiones, a ver si prefiero quedarme a tu

lado y tener un buen pasar económico. Por suerte fui más fuerte que eso y pude tomar buenas decisiones. Así sucedió que cada vez que iba a Buenos Aires. Me ofrecían trabajos, me preguntaban si no quería vivir allí, que mi padre me necesitaba, “pobre de él, se quedó sin su hijo, ya grandecito”. Hasta el día de hoy lamentablemente no pudimos reconstruir el vínculo desde un sitio adulto. Seguramente estás pensando: “ojalá que se cierre la Escuela, así mi hijo vuelve con nosotros”. Y yo creo que este tipo de vínculos son patológicos, son relaciones posesivas en las cuales uno quiere al otro cuando hace lo que su propia conveniencia dicta, y si no sucede así, entonces hay que pelear para que se elija lo que yo quiero, “ya que seguro lo que yo pienso es mejor para él”. Espero que puedas replantearte tu accionar a partir de estos pensamientos. Espero que podamos crear un vínculo sano, basado en el respeto y el amor. Uriel

Son tantos los titulares de La Voz del Interior, o al menos lo eran mientras duró el dinero que inició la campaña de difamación: Un paseo por el infierno, El gurú que odia a las mujeres, El Maestro Mehir dirige una secta destructiva, Piden la captura del Maestro Mehir por abuso sexual, Carta de una mamá desesperada a su hija, etc. etc. etc. Estrategias mediáticas sensacionalistas que buscan captar la atención de un lector ya aburrido, que buscan entretener a unos a costa de otros. Los medios de comunicación son la versión moderna del coliseo romano… ¿Padres preocupados? Como si todos los padres, hermanos, tíos y abuelos estuvieran desesperados por ver regresar a sus hogares a los discípulos manipulados...

49

Debe saber, señor lector, que podemos contar con los dedos de la mano a las “madres desesperadas” y los “padres preocupados”, estrategias mediáticas cuyo único alcance ha sido que padres ausentes o desinteresados o simplemente personas en quienes no habitaba ninguna duda acerca de las decisiones de sus hijos, se pregunten ahora ¿Cómo yo no estaba enterado de esto? ¿Cómo yo no estoy preocupado? ¿Cómo no estoy participando de esta persecución para salvar a mi hijo? Y aun así todavía nos alcanzan los dedos de la mano para contarlos. Son los padres más mortificados, más llenos de culpa por la mala educación que les han dado a sus hijos los que apoyan “moral” y económicamente esta cacería. Arrebatados como párvulos por la opinión pública pero en su verde edad madura. Gente que no se ha detenido un instante a observar sus criterios educacionales ni ponerlos en tela de juicio, aun menos observar el fruto de su tan excelsa educación: víctimas de abusos sexuales en su infancia, drogadictos en su adolescencia, incapaces de sostener a una familia en su adultez, por dar tan solo algunos ejemplos. Niños aun de adultos, debido al incompleto y condicionado desarrollo de su personalidad, frustrados, inseguros, demandantes de atención, dependientes de aprobación. Niños criando niños. Hombres que buscan por esposa a una madre. Mujeres que buscan por esposo a un padre. Niños educando niños. Padres que tratan a sus hijos como juguetes de su propiedad. Este es el perfil de la madre desesperada y el padre preocupado. Perfiles que no son representativos de los padres y familiares de los discípulos de Mehir, sino representativos de una sociedad decadente, preocupada y desesperada. El Cántaro es una Escuela de Conocimiento que lejos de provocar la destrucción de la familia, apunta a la conformación de un núcleo familiar sano. El Cántaro considera un núcleo familiar sano aquel donde se procura el desarrollo individual de cada uno de sus miembros, se le da lugar y apoyo en el desarrollo de sus inclinaciones naturales, sin dejar por eso descuidado el desarrollo de otras cualidades: físicas, artísticas o intelectuales ni la responsabilidad de generarse su propio sustento y abrazar así a una familia propia, a sus

50

progenitores y a toda la humanidad. Se enseña aquí también el correcto rol de un hombre, las responsabilidades como padre de familia, educador de sus hijos, responsable no solo de alimentar sus necesidades físicas sino también morales y espirituales. Se enseña el rol de la mujer, base de la sociedad, nutricia y contenedora, abnegada, constante y tenaz en la educación de sus hijos, dulce y amorosa, ejemplo de belleza, vitalidad e inteligencia. Se enseña a los hijos a respetar a estos padres y a quienes en su sacrificio y dedicación se han desarrollado más que uno y están en condiciones de ser sus educadores, padres, profesores, etc. Ahora bien, si su madre ha abandonado a sus hijos en manos de tíos o abuelos, sumida en su pleno egoísmo y negación del rol materno, es posible que no se aconseje imitar este papel, origen de una sociedad de parias. Si sucede que su padre es un mercader obsesionado por el dinero, egoísta y miserable cuyo único objetivo es transformar a su hijo en un ser igualito a él, con sus mismos gustos y propósitos, aunque esto sea a costa de todas sus inclinaciones esenciales, adinerado a costa de su formación moral y ética, es posible que no se aconseje copiar este modelo. El individuo, condicionado por la mala educación, crece obedeciendo al mandato paterno pero con una profunda frustración por no hacer lo que anhela íntimamente, por no obedecer a sus inclinaciones naturales; o bien en su rebeldía hace exactamente lo contrario pero con un gran sentimiento de culpa y desaprobación paterna, guardando en ambos casos cuentas pendientes con la familia y dificultando un vínculo sincero y fluido. Estos son sólo un par de ejemplos no groseros. Quienes han sido educados por ladrones o estafadores, quienes han sido abusados sexualmente en su niñez, quienes han presenciado por sí mismos vicios en sus padres tales como alcoholismo, drogadicción u otras degeneraciones es obvio que no deben seguir su educación. No obstante, las aspiraciones de El Cántaro son más elevadas, busca hilar más fino, aspira a perfeccionar al individuo, a la mujer como mujer, al hombre como hombre, a la familia como célula de una sociedad en condiciones normales de existencia.

Carta de Virginia

Este comentario de una madre y discípula de escuela fue posteado en nuestra página web como respuesta a estos “padres preocupados”.

M

e parece increíble… ¡¡¡Leo todas las cartas de estas personas ADULTAS!!! ¡¡¡Todos hombres y mujeres de casi 30 años!!! No se puede controlar a un hijo como si fuese un perro… que sale cuando yo quiero, come cuando yo quiero y vive como yo decido!!! ¡¡¡No son mascotas señores!!! Son personas que encima de todo eligieron un camino SANO para sus vidas. No fuman, no se drogan, no viven de forma indigna, ¡¡¡ni cometen ningún delito!!! ¡¡¡Solamente quieren hacer otra vida que no es la que sus padres deciden!!! Soy madre de hijos mayores de edad… Y sé que ellos tienen que decidir por sí mismos su camino. Que puede ser diferente del que yo elegí para mi propia vida… El amor, se basa en el respeto…y así fuese que se “equivocan”… ¡¡¡Tienen derecho!!! Vivir y dejar vivir... Si sus hijos hiciesen lo que ustedes quieren, pero fuesen unos enfermos infelices y frustrados… ¿¿¿A quién le echarían la culpa??? Seguramente que ustedes no se sentirían responsables de su infelicidad ¿no? Por favor, si quieren realmente acercarse a ellos, escuchen sus motivos, escuchen los anhelos que tienen... Velen por sus hijos de una forma más digna, menos obsesiva… y van a encontrar seres maravillosos, que los quieren, pero que necesitan un cariño que no asfixie. Estén al pie del cañón como todo padre que siempre está atento, con una palabra de aliento, para dar y recibir cariño… ¡¡¡para ayudar o dejarse ayudar!!! “Tus Hijos, no son TUS hijos…” uno tuvo la hermosa dicha de traerlos a este mundo, para que aprendan y crezcan en su propia aventura de vivir… (Sobre todo cuando ya son ADULTOS) Paradójicamente, yo deseo que mis hijos permanezcan en la escuela… Sé que bajo esta enseñanza van a estar a salvo de la locura del mundo… Pero los dejo libres… que decidan lo que realmente les dicte su razón, o su intuición… y voy a estar cerca de corazón decidan lo que decidan…La enseñanza de la escuela es un camino que requiere de la propia elección y voluntad para realizarlo. No se puede obligar a nadie a recorrerlo… Con todo respeto, piensen… Reflexionen… ¿¿A dónde los lleva esa coacción que están ejerciendo sobre sus vidas?? Tal vez sientan que El Maestro les “robó” el poder sobre sus hijos…Esto es ridículo. Si le profesamos tanto cariño, es porque sentimos el bien que ejerce sobre nuestras vidas. Porque sus consejos, siempre “dan en el clavo” para nuestro beneficio. Porque sentimos que su sabiduría nos conduce, nos ayuda en nuestro propio perfeccionamiento…Pero jamás ni él ni su enseñanza tienen por objetivo alejar a nadie de su familia, sino que los lazos sean sinceros, sin más interés que el verdadero amor filial… “sin comercio”… Señores padres, la batalla no es contra Mehir ni contra sus hijos; es contra ese deseo de poder, posesión, y de controlar la vida de sus propios hijos… Acérquense desde otro sitio, y van a encontrar mucha virtud, y mucha nobleza en la búsqueda, en el camino que ellos eligieron.

51

Carta de Pablo

Ana es una madre y abuela de escuela que se dirige en esta carta a los padres prejuiciosos que están atacando.

Recibimos esta carta en nuestra página web, pertenece a Pablo, un joven cuyos padres frecuentaron la enseñanza de escuela cuando él era pequeño. Estos son sus recuerdos:

N

ací en la Escuela de Conocimiento de Mehir hace 22 años. A la edad de 10 u 11 años mis padres decidieron partir para aplicar en la vida los conocimientos aprendidos durante muchos años. Los recuerdos vagos de la niñez se arremolinan en mi mente y puedo percibir la magia de las Navidades donde un ser misterioso, fantástico y jupiteriano llamado Mushkil Gushá nos llenaba de dicha y alegría con sus regalos; el cultivo de la bondad y la benevolencia en las noches de los jueves, el LienChi para luchar contra nuestra propia sombra y la inconmensurable sensación de pureza y búsqueda de la perfección en cada acto de la vida. Palabras mágicas provenientes de alguna leyenda lejana y la música profunda de las tumbadoras en la entrada al dojo reverberan en mis oídos desde la niñez señalándome el camino de la lucha, pero de la lucha contra uno mismo en búsqueda de un espíritu puro y noble. Mis padres pertenecieron a la escuela de Mehir y día a día veo reflejado en su accionar el comportamiento de un guerrero, aquel que persevera pese a las circunstancias más adversas aplicando un “intento inflexible” y viviendo de acuerdo a las leyes divinas. Esto fue lo que ellos me enseñaron y esto fue lo que yo viví de niño en la escuela, y estos son los guerreros, auténticos buscadores de la verdad. Desde ya envío toda mi energía al universo para que la búsqueda feroz por parte de la “¿¿¿Justicia???” y las acusaciones contra Mehir se retiren de inmediato.

52

Ten la plenitud de un horizonte amplio; Eleva tus brazos a lo alto abrazándolo en tu noble intento; Posee una base firme; Busca armonizar ambas sendas, como la palabra a la acción; Y solo luego despliega tus alas; Unifica la Tierra al cielo; Esquiva lo que te perjudique sin temor; Aprende a discriminar lo inferior de lo superior, sin violencia; Y sigue el camino luminoso del Sol, Desde el Amanecer al Crepúsculo del Misterio. Pablo

S

oy una mujer que encontró al maestro ya adentrada en mi vida adulta, con hijos chicos y adolescentes. Quiero dirigirme a esos padres tan preocupados por sus hijos y les digo con gran experiencia al respecto y conocimiento de causa, muy a pesar, que se han empezado a preocupar tarde por ellos, los que por destino gracias a Dios han encontrado a Mehir. Y ustedes con sus actitudes no hacen más que confirmar a sus hijos su hipocresía e incomprensión. Y les prueba también en qué sistema perverso los han criado, que ya adultos todavía inciden en sus vidas de esta forma y me refiero a su participación directa, aportando dinero para esta trama siniestra, arriesgándolos con causas penales y cárcel. Tal vez sus hijos no han logrado trasmitirles realmente nuestros anhelos, nuestros intentos y la necesidad de vivir mejor, por la falta de comunicación preexistente, lo que ya debería ser una prueba para ustedes de sus errores como padres. ¿O aún se engañan a sí mismos con la mala calidad de sus vidas sólo compensada por sus bienes materiales? Deberían ponerse la mano en el corazón y plantearse si por su orgullo o por su ceguera quieren para sus hijos una vida igual a la suya. ¿O cualquier cosa que no sea su propio modelo de vida es malo? Desde el prejuicio y la discriminación están atacando las libertades individuales de sus hijos, intentando no dejarlos ser las personas que eligen ser. Despierten padres, sean sinceros consigo mismos, toda esta proclama de amor y preocupación por

Carta de Ana

sus hijos es una falacia de su propia incapacidad de haber sido buenos padres. Dense una oportunidad a ustedes mismos y a sus hijos, replanteándose sus motivaciones y confiando en las elecciones libres de sus hijos adultos, a muchos de los cuales Mehir y su enseñanza los sustrajo de la droga, de caminos equivocados, en fin, de una mala vida. Y si logran despojarse de su orgullo equivocado y empecinamiento, traten de saber realmente de qué estamos hablando. De otra forma les digo que su amor por sus hijos no es tal, sino que oculta otros sentimientos y proyecciones que harían muy bien en observar por sus hijos y por ustedes mismos. Esto pasará, como todo es efímero en esta vida, pero vivirán el resto de sus días con el gusto amargo y frustrante del desamor y la incomprensión. Apelando a lo que Mehir propició siempre en nuestras vidas: no envenenarnos con odios huecos y malos sentimientos, les reitero este llamamiento a la sensatez, para que den marcha atrás a esta parafernalia absurda y maliciosa que solo dejará oscuridad en sus vidas. Con mi fe en Dios y en la bondad del hombre reflexiono sobre todos ustedes y espero una instancia mejor para sus vínculos con sus hijos. Y que se levanten los cargos mentirosos contra nuestro Maestro y tengamos el permiso oficial para el Instituto El Cántaro, que es la aplicación práctica en la sociedad de todos los propósitos de la enseñanza bienhechora de esta Escuela de Conocimiento.

53

Carta de Juana Una abuela discípula de Mehir deja su testimonio.

Carta de María del Carmen La madre de una seguidora del maestro nos hizo llegar este comentario.

Carta de Ana María La abuela de un discípulo de Mehir reflexiona sobre las actitudes de los padres preocupados.

54

S

oy una más de las abuelas de esta Escuela. Tengo seis nietos que se educan en esta enseñanza. ¿Y cómo podrían llegar a concebir esos padres que acusan y no comprenden que yo aceptaría para la formación de mis nietos las enseñanzas de un depravado? Todo lo contrario, se crían sanos, con buenos propósitos, recibiendo una formación que sin él no hubiéramos conocido. Si no hubiera amor en este maestro, si como lo acusan odia a las mujeres: ¿Qué estaría haciendo yo en la Escuela, una mujer de más de 70 años? Muy por el contrario, él me enseñó a vincularme mejor con mis hijos, mis nietos, con el mundo. Me enseñó también secretos de la ciencia de la energía y como instructora puedo ser útil a la comunidad y sentir el entusiasmo del servicio. Maestro Mehir, mi corazón está con vos estés donde estés.

S

oy madre de una discípula del maestro Mehir. Hace doce años que mi hija tomó la firme determinación de seguir la enseñanza del maestro. Al principio tenía dudas de que ese camino fuera el correcto. Luego, al conocerlo personalmente, me dio la absoluta tranquilidad en el alma. Lejos de lo que los “padres preocupados” expusieron, mi hija logró vincularse con su propia familia desde un sitio de comprensión, tolerancia y respeto. Y sé que eso fue gracias a lo que le inculcó el maestro Mehir. Les digo a esos padres que escruten su corazón, que piensen y se hagan cargo de sus propios errores y falencias como progenitores, como yo me hice cargo de los míos. Hoy en día tengo dos nietos en esta Escuela y me siento tranquila de que sea así, que ellos puedan ver y asimilar otra enseñanza, que estén cerca de un verdadero guía, lejos de este mundo hostil que cada vez está más alejado del camino recto. Gracias maestro por estar cerca de mi hija y de mis nietos que sé que te aman profundamente.

E

Aquí presentamos algunas de las miles de cartas de gente que no pertenece a la escuela que han llegado a nuestra página WWW.MAESTROMEHIR.COM.AR. Hicimos una selección de las más significativas, ya que en 50.000 visitas no podemos abarcar todos los comentarios recibidos. De todas formas, agradecemos de corazón el enorme apoyo de todos aquellos que han contribuido a la defensa de nuestra causa.

l mundo cambió demasiado rápido en los últimos 30 años, no todos los mayores pudimos actualizarnos y romper con los modelos preestablecidos.

Tal vez, sea tarea de ustedes, los más jóvenes, establecer las bases de una nueva civilización…. ¿no lo han pensado? A nosotros, los mayores, nos enseñaron a priorizar lo económico, no a buscar la felicidad realizándonos. En mis 35 años como profesora en secundarios, aprendí mucho más de mis alumnos, de lo que ellos, supusieron que yo les enseñaba.

55

GUSTAVO del bar de la galería La Strada, Villa Carlos Paz. 18 JULIO 2011 Trabajo en una de las confiterías que mejor frecuentaba el señor Mehir y era testigo de su generosidad y respeto hacia mis compañeros y compañeras, así como a los que venden rosas y los chicos que piden por las mesas, y siento que subestiman a las mujeres cuando escribieron con letras grandes en las tapas de los diarios “el maestro que odia a las mujeres” sin poner una razón, o cuando dicen “hombres con computadoras portátiles” como si fueran mafiosos y muchos de nosotros las tenemos y no somos de ninguna secta. Sólo es gente que trabaja o escucha música y la vemos en todos lados. Ojalá todo se aclare.

MICAELA 22 AGOSTO 2011

Hola. Soy camarera de dos de los bares de Carlos Paz. Muchas veces atendí al señor Indij y a su grupo, sólo tengo recuerdo de su amabilidad, respeto y gentileza. Las veces que hablábamos siempre correcto y servicial. Cuando supe lo que ocurrió no logré entender por qué gente buena tiene que ser atacada con mentiras, desprestigiado el grupo, sin tener la Justicia pruebas concretas. Me asombra la Justicia de hoy y de este país.

56

JULIA BOEDO 24 JULIO 2011

Durante 20 años conviví en la escuela de conocimiento Sil-Lum, soy una persona adulta, tengo 63 años y nadie me lavó el cerebro, todo lo contrario, adquirí una formación sobre diferentes disciplinas: artes marciales, filosofía, historia de las religiones, psicología, música, pintura, ciencia de la energía que me sirven actualmente para llevar una vida digna y de mejoramiento individual. Solo puedo estar agradecida a Mehir que siempre dio lo mejor de sí mismo sin pedir nada a cambio, cosa que ninguna de las personas que acusan pueden decir de sí mismas. En cuanto me llegaron noticias de esta aberrante situación escribí a la radio que propagó la noticia y al mail de Carreras, para que, si realmente eran periodistas, publicaran también, los descargos y opiniones de personas que no pensaban como ellos. Pero como ya sabía de antemano, no son verdaderos periodistas sino mercenarios vendidos a la prensa sensacionalista. Entre al site de Carreras y también vi que hay muchas personas que son víctimas de sus acusaciones y que tiene juicios por perjurio. Por ahora sigue impune pero algún día llegará en donde pague las mentiras y los daños que ha causado a personas inocentes.

TOMAS MORAL 7 SEPTIEMBRE 2011

Hola, mi nombre es Tomás Moral, antes que nada, quiero aclarar (para denotar mi imparcialidad al respecto) que yo NO SOY de la Escuela del Cántaro, pero sí tengo muchos buenos amigos en ella, y son buenas personas, muchos de ellos las mejores personas que conocí. Pero sobre todo, soy EX alumno de la profesora Silvia Corina. Silvia era y es una profesora excepcional, fomentó en mí y en mis compañeros a lo largo de mis años de literatura en la secundaria, no sólo el ojo crítico, sino también la búsqueda de lo simbólico en los libros, nos enseñó los trasfondos y las connotaciones más profundas que existen en donde antes sólo veíamos páginas y una historia. Nos dio una capacidad de comprensión más allá de lo literal. En mi experiencia personal, cada trabajo práctico significaban horas de interesantísima investigación, evaluación de los textos e introspección. En síntesis, y sin entrar en valoraciones subjetivas y personales, ya que para mí Silvia es una persona muy querida, que me enseñó mucho y no sólo en el ámbito de la literatura, lo que quiero denotar con esto es que la Profesora Siliva Corina, era y es un ejemplo de educadora y persona. Es indignante cómo esta sociedad compra lo sensacionalista, amarillista y repugnante de las falacias que se están diciendo en contra de estas personas. Y pese a saber que muchos sabemos que esto es una GRAN falencia del sistema de "justicia", la gran mayoría elige hacer caso omiso, y quedarse con lo que le venden. Como si un romano dijera "ya sé que está mal ver cómo se comen a los cristianos en el Coliseo, pero es que es tan divertido..." Yo creo que esto es una etapa oscura, y que la lluvia de desinformación y banal ignorancia en las mentes de los individuos va a cesar, y pronto saldrá el sol para la conciencia humana.

BELEN GRIMAL, La Plata. 23 JULIO 2011

Quisiera levantarme y leer el diario y que haya poemas como en las revistas Ecos de la Leyenda, ir al colegio, contenta por haber leído un lindo poema, una linda noticia que me inspire aunque sea una parte del día. Pero nunca fue así, la mayoría de las cosas que leí en el diario o vi en el noticiero fueron y son robos, muerte, violaciones, y encima acusaciones falsas y terribles injusticias. Me lavaba el cerebro leer el diario, ver el noticiero, porque después me daba miedo todo. Día a día se iba acumulando el miedo y uno vive así, vive mal, sin poder disfrutar de la vida y pensando que le va a pasar algo malo. Era una película de terror todos los días. Tal vez peor. Verdadera justicia, educación armónica, calorcito en el corazón, amistad verdadera. Esa amistad tan fuerte, que defenderá a sus amigos siempre. Honor verdadero, unión, verdad. Intento inflexible hasta lograr todo aquello que sea benévolo, esto es lo que quiere la gente que se regocija en el bien, y lo que a muchos nos enseñó a querer, a apreciar, a valorar el maestro Mehir. Más que mil palabras valen los hechos. Y todos aquí pueden ver cómo se defiende a Miriam quedando totalmente al descubierto la enseñanza del maestro sobre la verdadera amistad llevada a la acción. Que se haga justicia, verdadera justicia, y que ojalá esos lugares de poder algún día los dirija gente humilde y honorable, no como toda la manga de corruptos que hay ahora. El bien está destinado a triunfar.

57

CARINA 18 JULIO 2011

Con mucho pesar, he leído y escuchado los argumentos que se esgrimen contra Mehir y su Escuela. Yo no formo parte del grupo, pero he tenido la oportunidad de compartir con ellos más de una reunión y el clima en que se vive es de armonía y felicidad. Me pregunto, ¿qué altura moral nos atribuimos como sociedad para señalar con el dedo la forma de vida de otros, cuando cotidianamente aplaudimos el circo de horrores que nos ofrecen los medios de comunicación? ¿Con qué cara un periodista “serio” nos invita a reflexionar sobre los abusos que comete Mehir y luego, nos muestra otro episodio más de “bailando en el caño”? Cuánta tristeza provoca la intolerancia! Pero, cuidado! Como señaló Brecht: “Ahora me llevan a mí, pero ya es tarde!”. Ojalá que este espacio se difunda y pueda superponerse al poder hegemónico de unos pocos con intereses no santos.

FEDERICO, Productor de TV 1 AGOSTO 2011

Estoy mirando la página y me sentí con ganas de escribir lo que fue mi experiencia en este lugar. Recibí la enseñanza de Mehir más de 8 años y si bien ya no concurro más al instituto de cierta forma Mehir sigue siendo mi Maestro. Hace ya un tiempo largo que no voy pero hasta la fecha sigo recordando muchas enseñanzas que me dio. Dejé de ir por circunstancias de la vida, pero jamás vi nada oscuro, nada ilegal, nada podrido, más bien lo contrario.

58

Vi Conciencia, vi Respeto, vi Contención, vi Comprensión, vi Amor. Como dije, por circunstancias de mi vida ya no voy pero no dudaría en volver ni en recomendar la enseñanza a quien busque la armonía real. Respecto a la difusión del “escándalo”: Trabajo en medios de comunicación hace más de 15 años, y casi que puedo apostar que ningún medio (ni de los serios prestigiosos ni de los otros) va interesarse de forma objetiva en el caso, nunca me creí periodista, siempre digo soy productor .Un poco porque así lo siento y otro poco porque los vi de cerca y a veces el periodismo huele a podrido. Me genera risa que los formadores de opinión sean los que señalan horrorizados un problema teóricamente ético. Ellos que no chequean previamente, que no quieren realizar ninguna entrevista escuchando las otras voces del caso sin tener en la galera cientos de recursos televisivos radiales que dejarían mal parado hasta al Perro Lassie, que ellos sean los que señalan con dedo acusador es como que el Coco Basile acuse a alguien de fiestero. Y lo digo porque traté de ser puente con algún medio de comunicación y no les interesa nada de nada escuchar la otra parte de la historia. Miente, miente hasta que sea verdad, decían los nazis, ojalá no suceda eso, pero como conozco de cerca al inmaculado periodismo no soy muy optimista al respecto. Bueno me fui un poco de lo que quería decir... Quería dejar mi testimonio acerca de lo que fue mi experiencia personal sobre la enseñanza de Mehir, no estoy muy al tanto de lo que se lo acusa pero si estuve / estoy muy al tanto de todo lo bueno, honesto y real que me enseñó. Paz, Amor y Beatitud a todos los seres... inclusive a los periodistas.

EMILIANO 7 AGOSTO 2011

Sr. Navarro: conozco por experiencias del pasado a otros que como usted ahora, dicen que “sólo quieren ayudar a los desvalidos” denostando y asesinando las ideas de sus opositores. Fue Sarmiento el que dijo “bárbaros, las ideas no se matan”, y por supuesto que tenía razón, porque ese principio universal se expresa desde tiempos inmemoriales, y son muchos los hombres de todas las culturas que se inmortalizaron por su lealtad a las ideas que pueden darle sentido a la vida de los hombres. Su sentido, el único sentido de su vida, Sr. Navarro, es perseguir a los que piensan diferente a como usted piensa, por más que lo quiera disfrazar de humanitario. Nuestro sentido, el sentido de nuestras vidas, es otro. El único sentido de la vida del maestro Mehir es enseñar. El único sentido. Por eso tengo absoluta certeza que esté donde esté se las va a ingeniar para seguir enseñando, como sea, mientras mantenga la vida. Ya sé que usted “no cree” en eso. Usted cree en oscuros sentimientos egoístas, como los suyos y los de esa gente que usted representa, cuyo sentido, cuyo motivo, cuya intensidad de vida, está en querer destruir a otros. Usted dice que cree en una ley que es mentirosa por definición. Y la utiliza como le conviene. Yo creo, porque formó parte de mi experiencia diaria durante muchos años de estudio con el maestro Mehir, en que existe quien pueda dar mucho a cambio de nada, porque nada de lo que pude pagar ni ninguna forma de colaboración con su proyecto fue suficiente para devolver lo que hizo por mí, lo que él hace por todos. Yo creo, porque lo vi. Y no lo vi con una

imaginación delirada en un lindo poster con lagos y montañas, lo vi en el accionar cotidiano de los días y los años, desde que conocí al maestro Mehir, sin flaqueza, sin bajezas, sin dobles intenciones. Sin dudar de que ese es el único sentido: educar a esta humanidad plagada todavía de seres bárbaros y primitivos (de los que usted es un muy buen ejemplo) a establecerse en un sitio de mayor armonía, a establecerse en los valores que distinguen al hombre de las bestias, y que lo acercan a los ángeles. Ojalá usted y todos los que lo acusan puedan alguna vez encontrar un sentido a su vida basado en el amor, y no en el odio.

ALEJANDRINA 4 AGOSTO 2011

Hace días que estoy elaborando este testimonio en mi corazón pero he tenido que acallar en mi espíritu fuertes emociones para no menospreciar ni ofender a nadie y así reflejar verdaderamente la enseñanza de la Escuela de Conocimiento del Maestro Mehir. Durante más de doce años fui su discípula y transité la época más consiente y verdadera de mi vida. Allí se me adiestró en diferentes disciplinas que fueron formando mi espíritu: artes marciales, música, danza sagrada, yoga, la esencia última de todas las religiones, el misterio de la femineidad e infinitos caminos que guardo en la parte más sagrada de mi corazón. Si bien tuve que alejarme “externamente” de la Escuela y seguir otros caminos, no hay un solo día que no trate de comportarme acorde a lo aprendido y desde mi humilde lugar transmitir lo que me fue enseñado. Eduqué a mis hijas en dichos preceptos y

59

hoy buscan pulir su espíritu con su propia individualidad. Comencé mi camino siendo una mujer adulta, profesional (soy antropóloga especializada en arqueología y hoy instructora de yoga) y nadie “me lavó el cerebro” con ideas traumatizantes, sólo se me enseñó cómo ser una mujer digna: buena hija, buena amiga, buena esposa y buena madre y si hoy soy lo que soy se lo debo a la enseñanza. Con profundo dolor e indignación he visto como la “manipulación mediática” amparada en el poder de turno y a través de sus inconcientes marionetas, ha intentado destruir lo construido. Lo que no pueden matar son las ideas que conforman la Magna Doctrina y que cada uno de nosotros lleva en su espíritu, brindadas tan amorosamente por el Maestro, la semilla ya está plantada en nuestros hijos y es su legado. Imagino la siguiente escena: Imperio romano: letrados erigidos en “defensores de la verdadera moral” y “paladines de la justicia”, pseudo periodistas extorsionadores, cazadores de “brujas” en busca de fama, defendiendo en Jerusalem a las “supuestas víctimas” (mercaderes, fariseos y escribas)de la violencia de un personaje temible llamado Jesucristo, que se erige en Maestro, cabecilla de una secta que se hacen llamar “cristianos”, quien los ha echado del Templo, dejando profundas heridas en sus psicologías y que merece ser crucificado por hereje(cuanta ignorancia!). Pero, que comprendan algunos personajes sería “pedirle peras al olmo”. El buscador genuino sabe que el verdadero Conocimiento no se “adquiere” sino que es revelado a través de la experiencia sensible de un nuevo nacimiento. Por último mi repudio genuino a la terrible situación de Miriam quien ha sido mi compañera de camino y hoy está soportando las incoherencias e imperfecciones de la justicia de los hombres.

60 58

MARIANA, Bióloga. 10 SEPTIEMRE 2011

En la Escuela de Conocimiento El Cántaro he visto a mucha gente enferma transformarse en personas sanas, gente apática en vital, estériles en fértiles, gente con su razón obnubilada en personas con capacidad de discernimiento y razonamiento, gente disipada y viciosa transformarse en personas disciplinadas, personajes solitarios transformados en seres sociales, etc... Cómo podría, entonces, ser una “secta destructiva”? Obviamente estos procesos de transformación no ocurren de la noche a la mañana ni por “simples encantamientos” sino con esfuerzos continuos hechos durante mucho tiempo. En el transcurso de esos procesos van surgiendo aspectos indeseables, tal como en los tratamientos homeopáticos; se recrudecen primero los síntomas, se produce una crisis, y luego comienza la curación. Los personajes que hoy en día tan llenos de resentimientos vuelcan su odio en la figura de quien les enseñó a aplicar sobre sí mismos dichos “tratamientos homeopáticos”, muestran no solo que no comprendieron absolutamente nada acerca de estos procesos sino también que quedaron atrapados en el recrudecimiento de sus síntomas. Y en su locura quedaron estancados en su enfermedad, y en su malicia impiden que otros continúen libre y voluntariamente con su curación.

Cuando el mundo más lo necesita, cuando el alma de los hombres pide a gritos una escalera que la ayude a ascender, cuando los valores están aplastados por el materialismo desgajado del espíritu, cuando en las calles todo es lloro y crujir de dientes… surge desde las mismas llamas negras de la oscuridad un germen del pasado más aterrador: la Santa Inquisición. No es una persona sino muchas, pero mancomunadas por una única inteligencia, la de la fatalidad; las que traman la negra urdimbre para atacar al sabio. Un abogado, un fiscal, un periodista, tres mujeres acusadoras, algunos padres heridos en su orgullo por ser, precisamente, malos padres y varios detentadores de poder que cobardemente desdibujan su persona detrás de estas marionetas visibles… todos ellos encarnan en esta obra de teatro que han montado el personaje antagónico de EL SOFISTA. Mientras el hombre siga ambiciosamente buscando construir telescopios más poderosos para ver más lejos, en vez de volver su mirada hacia su propio interior, seguirán existiendo estos personajes oscuros, eternos enemigos de la Luz. Lea, digiera, analice y discierna. Luego, saque sus conclusiones más lúcidas. Conozca la trama de LA NUEVA SANTA INQUISICIÓN.

61

ZOOFISTAS Son el paralelo humano del animal depredador. Destruyen las verdades absolutas, las ideas abstractas, todo lo bello que resulta inexplicable para su estrechez mental; no conciben al sabio ni a la sabiduría. De inteligencia desprolija y facilista, aplanan todas las ideas a su propio nivel de comprensión. Fueron, son y serán, los detractores del Verbo y de la Luz a lo largo de la Historia. Conozca a esta raza depredadora.

EL ORIGEN

L

a palabra "sofista" está emparentada con sophia, término griego que se traduce comúnmente por "sabiduría". Sucede que ellos se creen algo parecido a un sabio, sin notar que son en realidad una deformación siniestra de la verdadera inteligencia, comerciantes corruptos de sabiduría. En la antigua Grecia, los verdaderos filósofos caricaturizaban al sofista como un hombre con habilidad para pronunciar un discurso justo y otro injusto sobre el mismo tema, es decir, sin verdaderas convicciones ni valores. Los sabios como Platón y Sócrates definían a los sofistas como "vendedores caros de ciencia no real sino aparente", poniendo al descubierto su superficialidad. Y es increíble cómo tal definición, miles de años después, aún sigue vigente.

62

PERFIL DEL ZOOFISTA

E

l sofista de hoy es, como los de antaño, principalmente escéptico, y se jacta de eso; aprensivo de todo excepto de su propio entendimiento. Pero, carente de rigor científico y de amor por la verdad, en su análisis superficial jamás pone en juicio la legitimidad de sus pensamientos. Es un relativista tibio que rechaza toda verdad absoluta, toda ética objetiva, toda ciencia divina y que se ubica él mismo en el centro del Universo. De esta forma, para ser coherente con su incoherencia, necio y obstinado, no puede dar crédito a la existencia de Dios como sublime Creador porque no lo puede inventariar con su escaso vocabulario intelectual. El sofista desdibuja la distinción entre ser y apariencia, no va más allá de su muy limitada experiencia humana, y no da lugar a la posibilidad de que existan los sabios, los Iluminados, los despiertos. Es un cobarde intelectualmente hablando, que sólo cree en lo que ve, como si el origen del agua fueran las canillas, que es todo lo que llega a percibir, y negara la existencia de las vertientes. Poco indagador, es más dado a buscar en Wikipedia que a investigar en los principios de la ciencia objetiva. El mundo se reduce así a su nivel de comprensión que, por ser intrínsecamente egocentrado es, por supuesto, muy limitado.

En conclusión, así como la sabiduría siempre fue sabiduría más allá del hombre que la encarnara a lo largo de la Historia, en el correr del tiempo el sofista siempre fue el enemigo del sabio; un expositor poco inteligente, sin ideales y con una única meta siniestra: destruir la Verdad y borrar el Verbo de la faz del mundo. Un símbolo más de la eterna lucha del Bien y el Mal en el plano del hombre. Como un loro, rápido para hablar, muy lento para pensar, refutador compulsivo que no digiere un pensamiento sutil o exquisito porque su combustible es denso y su cerebro pastoso.

Gracias a Dios -porque a pesar de ellos Dios existe- más allá de los sofistas hay mentes superlativas como la de Mehir, que fácilmente puede establecer analogías de lo abstracto para ayudar a comprender los fenómenos cotidianos a quienes no tienen tal agudeza. Ellos, los sabios, son los capaces de establecer puentes entre lo visible y lo invisible, de forma tal de acercar los grandes misterios a la comprensión humana. Con “grandes misterios” nos referimos a los enigmas cotidianos como la muerte, la psicología y su inconsciente o el origen invisible de lo que vemos con nuestros ojos. Un sabio le preguntaría a un sofista, ¿con qué parte de tu cuerpo creés que amás? Y el bruto quedaría mudo. Tristemente, el sofista siempre se sostuvo y hoy mismo es así, porque le habla a las masas menos preparadas que él, que creen que su interlocutor es una persona autorizada para hablar de tal cosa, simplemente porque sale en televisión, o porque usa corbata, o porque tiene un título de abogado o un cargo público, o porque tiene dinero o porque firma una nota en un periódico. ¿Y si el abogado defensor de la Justicia miente y arma una trama funesta para que la mentira parezca verdad? ¿Y si el fiscal imparcial se vuelve un enemigo subjetivísimo de una de las partes implicadas? ¿y si el periodista no investiga, es coimeado y escribe sobre lo que su “tutor” le indica? ¿y si quien acusa saca de contexto, tergiversa y deforma la realidad para que parezca lo que su abogado mentiroso le aconseja? Y, finalmente, ¿qué pasa cuando todo esto sucede y el individuo que lee o escucha o se entera no discierne una cosa de otra y termina siendo cómplice del sofista? Así murieron Sócrates, Pitágoras, el Cristo, Galileo Galilei… entre tantos otros. Condenados por un puñado de sofistas que fueron seguidos por una masa ignorante. Nosotros, discípulos de Mehir no vamos a permitir que esto mismo suceda con nuestro maestro. Él no morirá en manos de zoofistas depredadores de la Verdad, del Amor, de la Justicia y de los altos Ideales.

63

CARTA ABIERTA A UN NECIO El Dr. Héctor Navarro es un ciego perseguidor de sectas, que no distingue entre un líder destructivo y un maestro, que cree que el I Ching es un libro machista, que con la muerte se termina todo, que jamás existieron ni existirán los sabios y que Pitágoras era un seudo científico, entre otras barbaridades. A través de esta carta, entérese cómo piensa el nuevo Poncio Pilatos.

S

eñor Navarro, ¿Leyó el texto que retrata a los “zoofistas” a lo largo de la historia? ¿Logró verse en el espejo? Lo extraño, lo sé, es que usted se siente orgulloso de tan detallada descripción del hombre que todo lo reduce a su escueto entendimiento. A mí, por el contrario, se me revuelve el estómago de saber que es gente así, tan ignorante, la que a lo largo de la Historia siempre detractó las verdades objetivas alejando así al hombre de su camino evolutivo. Mi consuelo es la certeza de que en la ley de Dios todo está contemplado, incluso los destructores del conocimiento como usted, Sr. Zoofista Navarro. Y sé que para usted es motivo de orgullo porque es de los que me dirían a mí, buscadora eterna de la verdad, algo como “te podría dar mil datos y enseñanzas para que te vuelvas escéptica como yo”, como un “maestro ciruela” del arte del escepticismo. Pero sé que esos “datos y enseñanzas” serían sacados de Wikipedia; mientras tanto, los discípulos de un sabio como Mehir recibimos verdadera enseñanza, conocimiento objetivo que fue transmitido silenciosamente generación tras generación desde el fondo de los tiempos por quienes intentaron e intentan preservar siempre la verdad, el amor y la fe sobre la faz de la tierra. Muy a pesar suyo se los llama “iniciados”. No son seres sobrenaturales ni extraterrestres sino hombres que han emancipado su Voluntad a fuerza de trabajar sobre sí, perseverar en lo recto y, sobre todo, de esfuerzos conscientes. Pero, ¿qué podrá comprender un dormido que se jacta de su sueño sobre el esfuerzo “consciente”?

64

No lo conozco personalmente pero me he cansado de leer sus pensamientos brutales (de bruto, grosero) y sé que hasta la gente que usted pretende “ayudar” (Lombardi, E. Sluszky, Vecino, Lavallén, Kojan, etc.) están avergonzados de su verborragia incoherente e incontinente. Es una pena que hayan encontrado un defensor tan dispuesto a dejar la vida por su causa y que tenga tan pocos recursos válidos para hacerlo... aunque, por ser yo defensora de Mehir, me alegro secretamente de que así sea. No entraré en debates absurdos con usted sobre la existencia de Don Juan, los atributos del señor Gurdjieff, la legitimidad de Pitágoras como matemático y como iniciado, etcétera. Aunque admito que su teoría sobre que el I Ching se forjó en tiempos en los que predominaba el machismo y que de ahí se desprende que el Libro de las mutaciones “le adjudique al hombre todo lo mejor y a la mujer todo lo peor“, me ha movido a risa. Lo dejo con esta inquietud para que investigue por sí mismo el tema, pero por favor no lo haga en Wikipedia porque es poco serio, y no haga más eso de reducir la Magna

Doctrina a sus límites de interpretación, mucho menos si ésta es meramente literal. Atrévase, vuele en el caballo alado de las ideas (me aventuro a escribirle este giro poético a riesgo de que una vez más haga una interpretación textual y crea que lo invito, tal vez, a un parque de diversiones). Hasta el menos preparado de los discípulos de Mehir puede enfrentarse con usted en un debate y dejar en ridículo sus teorías “seudo racionalistas”, y no al revés como usted cree. Usted considera que las personas son dignas de respeto, no las ideas. Yo considero que las ideas que responden a una verdad objetiva son dignas de res-

peto, y por ley de simpatía, también son respetables aquellas personas que las encarnan. No todas las personas son dignas de respeto. Dígame, Navarro, ¿qué personas son dignas de respeto para usted? ¿O acaso lo son todas, incluidas las que mienten en una declaración, las que arman una trama con el periodismo y la fiscalía para mandar preso a un inocente, las que inventan un delito de abuso sexual que jamás existió para disfrazar una persecución ideológica?; en ese “caso al azar” ¿usted también cree que los conspiradores son respetables? Sin embargo, en algo sí estamos de acuerdo: ambos creemos que las maravillosas historias ocultistas, que prometen grandes revelaciones e iluminaciones pueden ser muy atractivas, pero luego uno encuentra que son mera purpurina. Aunque, finalmente, nuestros caminos se separan una vez más: no toooodas son sectas destructivas, no toooodo es mera purpurina. Ahí es donde usted todo lo aplasta al mismo nivel. Existen las escuelas de conocimiento, como la de Mehir, en las que no caben las promesas de grandes revelaciones e iluminación. En nuestra escuela trabajamos internamente sin promesas externas. ¡Ojo con la literalidad!, no vaya a decir luego que esto es una prueba de reducción a la servidumbre, porque con “trabajo interno” me refiero a los esfuerzos voluntarios que cada uno hace en su propio interior en pos de la evolución de su alma, la retracción de los rencores, de la ira, del orgullo, de la mentira y la verborragia compulsiva… nada que ver con lavar platos durante 48 horas y cosas por el estilo. Por lo tanto, sepa usted que las tres mosqueteras mienten cuando dicen que Mehir les ofreció sexo a cambio de la Iluminación. Es una atrocidad, ya que él siempre instruyó que la propia evolución únicamente se consigue por méritos objetivos personales. Ojalá fuera tan fácil y placentero iluminarse. Usted tiene un móvil político muy claro y es lograr una jurisprudencia respecto a esta lucha enferma que usted se planteó fervientemente contra “las sectas”, unificando todo en el mismo engrudo: la secta destructiva y la escuela de conocimiento, la verdad y lo que parece verdad. Y ese móvil poco inteligente, sin discernimiento es lo que lo está haciendo errar el tiro. Usted podría hacer algo grande: luchar contra las sectas destructivas verdaderamente, porque que las hay las hay. Pero valiéndose del apoyo de una escuela de conocimiento que le proveería los argumentos verdaderos para su lucha. Es una pena que usted esté equivocando su estrategia y quiera destruirnos, podríamos ayudarlo mucho. Finalmente, le aconsejo que no indague más en Internet los principios objetivos del esoterismo, no continúe echando agua al vino, no perjudique a toda la sociedad leyendo porquerías. Remítase a las fuentes originales o haga un seminario con el Maestro Mehir.

65

COMENTARIO POSTEADO EN WWW.MAESTROMEHIR.COM.AR POR PARTE DE UN DISCÍPULO

T

¿Cómo ejercen la persecución ideológica los que intentan poner en uso la ambigua ley anti sectas? Armando premisas falsas, sacando de contexto textos de conocimiento e interpretando literalmente el lenguaje simbólico. Así creen fundamentar su gran calumnia: el “abuso sexual”. Es decir, con los mismos métodos de la Santa Inquisición histórica. Entérese aquí de todos los detalles.

e imagino, Walter Navarro, en la corte del rey Wen, en la antigua China, explicando que “las tortugas gigantes no existen” y que “por lo tanto el I ching no puede haber surgido de ahí”. Creyendo, entonces, que con eso irías a desacreditar el libro y su enseñanza.

Te imagino, Navarro, hasta pidiéndole un examen clínico a María, para que demostrara “fehacientemente” su pureza. Te imagino con el ojo atento para descubrir el truco del mago, y señalárselo a tus hijos, “ves? ves? así lo hace”, y recibiendo el desdén eterno de ellos.

Te imagino, Héctor, merodeando el templo de los pitagóricos, tratando de descubrir si Pitágoras les cobraba a sus alumnos y explicando que lo que enseñaba ese maestro, en ese caso, no sería válido. Creyendo en tu interior y pronunciando a los necios de la época, que la enseñanza de Pitágoras no prosperaría.

Te imagino ahora, fumándote un habano y recibiendo las palmadas complacientes de otros escépticos como vos, riendo, sacudiendo levemente la cabeza, como no dando crédito a lo que “cree esta gente”, y hasta creyéndote el paladín de la justicia, “cumpliendo con tu deber” por haber “desenmascarado” a un “supuesto maestro”.

Te veo allí en La Meca, muy seguro de que si Mahoma no sabía leer, era imposible que hubiera escrito el Corán, y que seguramente alguien lo había escrito, y que se lo había pasado, pero que ya irías vos a descubrir la asociación ilícita y todo saldría a la luz y los que te financiaban podrían dormir tranquilos.

Te imagino, Héctor Walter Navarro, como un pobre tipo del cual no quedará ni el más mínimo rastro en la siguiente generación. Mientras que la verdadera enseñanza seguirá los caminos de la Tradición viviente. Es tan fácil ser escéptico. Y tan triste. Conocer no es saber. Leer no es entender.

Te imagino investigando si Galileo tenía un amor prohibido, o si tenía la cuota al día de su telescopio. Te veo, doctor, al pie de los Andes, fijándote si el Libertador cruzaba a lomo de burro o si lo llevaban en camilla detrás. Creyéndote que eso invalidaría la Libertad de los pueblos.

66

LAS MENTIRAS DE LOS SOFISMAS ANTI-SECTAS

E-

l pensamiento sofista tradicional, con el objetivo de demostrar una premisa, que por supuesto no necesita ser verdadera, utiliza diferentes estrategias argumentativas, entre ellas, el sacar a los textos de su contexto original. Por ejemplo, imaginemos un militante de la secta anti-sectas tratando de demostrar ante el Sanedrín porque hay que crucificar al Cristo, que para gran parte del pueblo judío de la época, era el líder de una secta... El diría: “Escuché con mis propios oídos que ese que se hace llamar rabí (maestro) decía: “No crean que yo he venido a traer la paz al mundo, no he venido a traer paz, sino guerra. He venido a poner al hombre contra su padre y a la hija contra su madre y a la nuera contra su suegra, de modo que los enemigos de cada cual serán sus propios parientes.” “Es evidente”, seguiría argumentando el sofista, “que ese tal Jesús, que dice ser el Mesías, quiere separar a los hijos de sus padres y eso va contra los manda-

mientos dados por Moisés…” y haciendo gestos grandilocuentes se rasgaría las vestiduras, mientras otros obsecuentes gritarían enfervorizados: “¡hay que dictar orden de captura!” “¡debe ser crucificado…!” La primera aclaración que cabe es que no identificamos en absoluto al maestro Mehir con el Cristo, nunca él ha dicho nada semejante ni ha querido hacernos creer tal cosa. Tampoco nos dijo que es el “Avatar” de la nueva era, ya que siempre explicó que el Aguador no debe ser considerado como una persona sino que es el “espíritu renovador” de la era de Acuario. Pero lo que sí podemos afirmar es que estos sofistas anti-sectas actúan de la misma manera que los que condenaron y crucificaron al Cristo. Que el proceso de la mente literal, sofista, manipuladora y mentirosa que utiliza cualquier argucia para lograr su fin, actúa de la misma manera que Pilatos relati-

67

vizándolo todo cuando pregunta “¿Qué es la verdad?”, sin reconocer niveles superiores de conciencia, o que los escribas y fariseos cuando lo sentenciaron en el Sanedrín. No es una mente al servicio de la verdad, sino al servicio de los prejuicios y categorías rígidas o dogmáticas que se pretenden defender, y usa como estrategia principal sacar los textos de su contexto, de manera que puedan ser usados para tratar de demostrar muchas veces lo contrario de lo que se quiso decir. Es una mente literal o sensorial que no comprendería jamás por qué Jesús hablaba en parábolas, es decir, en un lenguaje analógico-simbólico. De la misma manera, los sofistas de la secta antisectas han creído demostrar, sacando de contexto ciertas frases, cosas tales como que Mehir es un maestro misógino y odia a las mujeres y el libro de cabecera de los cerebros lavados y zombis de sus discípulos es el libro Brujas. Y como fundamento de la spuesta coerción psicológica que lleva al supuesto abuso sexual, esgrimen: “Para que las mujeres pudieran dejar de ser brujas y alcanzar la iluminación, tenían que hacer el amor con él...” No sólo la premisa es tan absurda que parece sacada de una pésima novela gótica, sino que nunca fue éste nuestro libro de cabecera, sino que es una recopilación hecha entre otros, con extractos de Eliphas Levi (Dogma y ritual de la Alta Magia), uno de los miles de libros de la biblioteca del maestro, que es por esencia un sabio recopilador. Y lo más increíble es que fue redactado por un discípulo, no por Mehir. Por otra parte, el texto, precisamente tiene una advertencia preliminar: debe ser leído en forma completa, porque si se leyera parcialmente se corre un

68

grave riesgo: el de la semiformación que puede ser más perjudicial que la ignorancia. Es exactamente lo que hicieron los inquisidores, sacaron frases sueltas del contexto en donde son usadas, y sin el menor asomo de pensamiento coherente y respeto a la verdad, las usaron para demostrar sus premisas completamente ambiguas del “adoctrinamiento” para lavar cerebros, sentenciando: es un gurú que odia a las mujeres y las convence de que son brujas. Y si hacen el amor con él pueden dejar de ser brujas y obtener la iluminación... Cuando en realidad se trataba de describir simbólicamente en el texto, el método evolutivo que va de lo degradado, sombrío o irredimido a lo puro, trascendente o superior en el alma, tanto en la mujer como en el hombre, considerando en estas fases evolutivas: la mujer infiel, retorcida, banal, materialista, simbolizada en el término de resonancia social: “bruja”, que puede evolucionar a la mujer digna y a la mujer espiritualizada. De la misma manera que el hombre evolucionaría de: el hombre vulgar, donde predominan sus pasiones egoístas, la compulsión de placer por encima del idealismo, la avidez de materialismo o poder, al hombre noble, y de éste al hombre espiritual. Además de que es una estrategia muy mentirosa afirmar algo, sacándolo de su contexto original, interpretan literalmente y sin ninguna comprensión simbólica ideas como bruja, demonios, etc. Por ejemplo la palabra “bruja” cuando es usada en los cuentos de hadas ¿es tomada literalmente? ¿No será que la mente de los niños menos deformada por el patrón sensorial y literal de interpretación

de la cultura, capta directamente la “verdad” que encierra el símbolo? ¿O hay que salir a prohibir los cuentos de Andersen, Perrault, etc. por ser sectarios misóginos? La palabra bruja fue utilizada en el texto con el mismo valor simbólico que en el mito de Lilith, del contexto hebreo: una energía que en lugar de estar al servicio del Espíritu, está al servicio del placer egoico, las pasiones. Los taoístas la llamaban “energía exiliada”, y esto acontece tanto en mujeres como en hombres. Para entender esta idea, hay que ubicarla en su contexto: todos los seres humanos tenemos un lado masculino, nuestro espíritu y un lado femenino: nuestra energía. Antiguamen-te se llamaba “consagración” a esas bodas internas de la energía con el Espíritu. Los grandes místicos de todos los tiempos hablan en este lenguaje simbólico. Les aconsejamos a los señores literales y malintencionados que cuestionen también al Rey Salomón en el Cantar de los Cantares. Para quienes aprendimos por el ejercicio de la filosofía a cuestionarlo todo y someter a crítica nuestra propia estructura de pensamiento condicionado, todo este circo nos resultaría hilarante y reiríamos con ganas de tanta ignorancia malintencionada, si no fuera porque están hiriendo nuestros derechos elementales a elegir nuestras creencias y han vulnerado gravemente el buen nombre y honor de un sabio, obligado a dejar el país por persecución ideológica. Un hombre de edad que sufre una enfermedad cardíaca no soportaría el ultraje de la injusticia y el encierro arbitrario, por lo cual si lo encerraran en una cárcel por más de un día podría morir, y estimamos

que eso es lo que buscan estos asesinos sofistas, lo mismo que llevó a Sócrates a morir por la cicuta, lo mismo que llevó al mismísimo Cristo a morir crucificado. La premisa de estos sectarios agnósticos destructivos es que no existe la sabiduría, el conocimiento es relativo y nadie puede hablar la verdad. Por lo tanto ¿qué es un sabio? ¿Existe esa palabra en su inventario? ¿Qué es un nivel superior de conciencia? Todo lo allanan, todo lo relativizan, todo lo sacan de su contexto... ¿Podrían diferenciar entre la ignorancia y la sabiduría? ¿Podrían diferenciar entre palabras mezcladas sin ton ni son y palabras emanadas desde la más íntima comprensión del ser? ¿Podrían comprender que es sabio porque su palabra está encarnada en todo su ser? El trasfondo turbio de la ley anti-sectas desconoce la existencia de sabios y no diferencia una secta destructiva de una escuela de conocimiento, y se basa en afirmaciones sumamente ambiguas. La forma de actuar de los que se escudan en esa ley es peligrosa y utiliza la sofística más maquiavélica para sentenciar y condenar. Es muy penoso descubrir que en la humanidad, después de siglos, sigue teniendo el poder la misma actitud ciega del sofista Pilatos cuando decía ¿Qué es la verdad? Mientras se lavaba las manos y condenaba a la crucifixión al Amor encarnado.

69

HISTORIA DE UNA PERSECUCIÓN Un iniciado cuya intención más profunda era transmitir su enseñanza esotérica a un grupo cercano e influir sobre la educación de toda la sociedad. Un discípulo rechazado por falta de moral. Una persecución encarnizada. La historia se repite cíclicamente y cualquier parecido con la realidad actual no es ninguna coincidencia.

F

ue mediante la aplicación de este teorema que Galileo Galilei en el siglo XVI pudo calcular por triangulación las alturas de algunas montañas lunares; y el mismo teorema una vez más es usado actualmente en lo que conocemos como GPS para nombrar algunas de sus aplicaciones. Aunque Pitágoras aparezca bajo el pleno día de la historia, es un personaje casi legendario. En la primera época en diversos puntos del globo, grandes reformadores vulgarizaban doctrinas análogas. Lao Tse, salió en China del esoterismo de Fu- Hi, y el último Buda Sakyamuni predicaba en las orillas del Ganges. Y no es casualidad que estos reformadores aparezcan al mismo tiempo en pueblos tan diversos. Sus misiones diferentes concurren en un objetivo común. Ellas prueban que en ciertas épocas, una misma corriente espiritual atraviesa misteriosamente toda la humanidad. Pitágoras era hijo de un rico comerciante de sortijas de Samos y de una mujer llamada Parthenis. La pitonisa del Delfos le había vaticinado a Parthenis “un hijo que sería útil a todos los hombres y en todos los tiempos”. Cuando ya era un joven, el sacerdote de Juno dijo a Pitágoras: “El Cielo de los Dioses que fue antes que la tierra. Tu alma de él viene. Ora ante

70

ellos para que ascienda de nuevo”. El problema estaba ante él más punzante más agudo. La Tierra decía: ¡Fatalidad!, el Cielo decía: ¡Providencia! Y la humanidad que entre ambos flotaba respondía: ¡Locura! ¡Dolor! ¡Esclavitud! Pero en su interior, Pitágoras, escuchaba una voz que respondía con un grito: ¡Libertad! En la síntesis de estos tres mundos estaba el secreto del cosmos. ¿Mas dónde encontrar la ciencia necesaria para llevar a cabo tal labor? Contar su vida sería extenso, baste decir que se inició en Egipto, que fue llevado a Babilonia y allí permaneció durante 12 años iniciándose en el magismo persa y el esoterismo hebreo. Decía Pitágoras: “El iniciado atrae la muerte o la rechaza a voluntad, formando la cadena mágica de las voluntades, los iniciados prolongan también la vida de los pueblos. En vosotros está el retrasar la fatal hora, en vosotros hacer brillar a Grecia, en vosotros hacer irradiar en ella el oro de Apolo, el verbo del Dios único”. Luego de muchos años y muchos viajes, partió hacia Crotona (Italia). Su objetivo no era solamente enseñar su doctrina esotérica a un círculo de discípulos elegidos, sino también aplicar sus principios a la educación de la juventud y a la vida del Estado. Aquel plan, contenía la fundación de un instituto para la iniciación laica, con la segunda intención de transfor-

mar poco a poco la organización política de las ciudades a imagen de aquel ideal filosófico y religioso. Aquella cofradía de iniciados laicos llevaría la vida común en un edificio construido ad-hoc, pero sin separarse de la vida civil. Había en el instituto una sección para las mujeres, con iniciación paralela, pero diferenciada y adaptada a los deberes de su sexo. Fue en Crotona donde su enseñanza brilló, reformando todo alrededor. Pitágoras estampó el sello de la realización a su obra. La influencia soberana de un gran espíritu y un gran carácter, esa magia del alma, de la inteligencia, excita celos tanto más temibles, odios tanto más violentos, cuanto que es inatacable. Un cierto Cylón se había presentado en la Escuela; Pitágoras, muy severo en la admisión de sus discípulos, le rechazó a causa de su carácter violento e imperioso. Aquel candidato despedido era un adversario venenoso; cuando la opinión pública comenzó a agitarse contra Pitágoras, organizó un club opuesto al de los pitagóricos, una gran sociedad popular. Una tarde que los cuarenta principales miembros de la orden estaban reunidos en casa de Milon, Cylón amotinó a sus bandas. Cercaron éstas la casa. Los pitagóricos con el maestro entre ellos, atracaron las puertas. La multitud furiosa prendió fuego la casa. Treinta y ocho pitagóricos, los mejores discípulos del maestro, y el mismo Pitágoras perecieron. La flor de la orden, unos en las llamas del incendio y los otros asesinados por el pueblo. Sólo Archippo y Lysis escaparon del degüello. De este modo murió este gran sabio, un hombre divino, que había tratado de hacer entrar su sabiduría en el gobierno de los hombres. Las ciudades de Italia arrojaron de sí a los desdichados discípulos del maestro, otros murieron de hambre en algún templo. Me pregunto ¿hasta cuándo la humanidad se arrobará para sí el derecho de perseguir, encarcelar o matar a aquellos que vienen a ayudarnos? A Pitágoras lo mataron como a tantos otros pero su enseñanza sigue viva en cada claustro de estudio, no sólo en la matemática abstracta, sino también en su matemática sagrada de la cual poco se sabe.

Soy discípulo de Mehir. Maestro a quien respeto y amo profundamente. Y es lo único de lo cual puedo sentirme orgulloso. Me declaro humildemente guerrero porque trato de no buscar la certeza en los ojos de los demás. Porque, me duela o no, me hago responsable de mis actos y no culpo a nadie de lo que me toque en suerte y porque tengo a la muerte como consejera. Nuestra enseñanza, digo: El Cántaro, llegará a la humanidad a pesar de los detractores y las persecuciones. Porque el odio que se rebela contra el odio, sucumbe ante el mayor de los bienes: “el Amor”, y porque sencillamente, amar, es estar vivo en lo que uno ama. Llegará el tiempo de la verdadera religión, aquella que tenga dulces mitos y leyendas aleccionadoras para los niños, una filosofía profunda para el hombre maduro, y tierno consuelo para los ancianos. La enseñanza llegará, aunque no lo presencie, dejaremos de ser por fin hijos de guarderías donde nos arrojan cuando niños y ancianos de geriátricos a donde nos arrojan cuando envejecemos. Si a los 57 años que tengo, después de haber pasado por la universidad como estudiante, y luego de 15 años como docente de la UTN, luego de 30 años como profesional y empresario y de haber viajado por el mundo, me dicen que estoy alienado, que me lavaron la cabeza; pienso en Nietzsche cuando decía: “Hay gente que es tan conservadora, que prefiere morir todos los días sobre una nada segura a un algo probable”. Bueno, yo elegí vivir en “un saludable algo probable”. Manuel Arias, Ingeniero Químico.

Mehir no es Pitágoras, ni tampoco el Cristo. ¡Pero qué mucho! ¡Qué mucho que se parecen los Mazzuchi, los Silletas, los Carreras, los Navarros y Cía. a los bárbaros que persiguieron y crucificaron a Uno y quemaron en la hoguera al Otro!

71

¿ES SIEMPRE JUSTA LA JUSTICIA? Nuestra Constitución garantiza que no puede encerrarse a un hombre por su ideología. Sin embargo, a lo largo de la historia existieron muchas persecuciones ideológicas disfrazadas de otros rótulos para que pudieran darse en un marco “legal”. ¿Qué sucede cuando quien administra justicia es injusto y corrupto?

CARTA AL FISCAL DE VILLA CARLOS PAZ Señor fiscal de Villa Carlos Paz, Roberto Mazzuchi:

D

eje su café de lado por un momento. Apoye la taza sobre el escritorio y cierre sus ojos. Relájese, relájese... imagine que a dos metros frente a usted se erigen estoicos unos barrotes, de pared a pared. Ahora imagine que a ambos lados tiene usted dos muros, mudos y sucios de dolor. Imagine bajo sus pies descalzos un piso frío y áspero, rugoso, en cuyos pliegues se anidan pelusas duras de tanto estar allí. Imagine un colchón en el piso a sus pies, con la forma de su fisonomía, y la de muchos otros, calada en su lana vieja. Resista, intente estar cómodo en el sillón de su despacho pero no deje de imaginar... imagine detrás suyo un orificio amarillento, con rastros de orín en todo su alrededor y con un olor rancio y abrasivo, insoportable. Imagine que allí mismo usted orinó hace algunos minutos. Resista, señor fiscal, resista, ya termina esta pesadilla... Imagine su ropa, cuyo color ya ni usted puede distinguir: ¿tiene el color del orificio en el suelo, el del colchón agujereado, el de las paredes sucias… o una mezcla de todos ellos? Señor fiscal, no desespere, esta no es su realidad. Aunque podría serlo… ¿Imagina usted este cuadro

72

de situación cada vez que baja su pulgar frente a algún desconocido del cual no conoce nada más que lo que le ha dicho algún extraño agraviado? ¿Qué sucedería si yo fuera la agraviada con usted? ¿Qué si me acerco mañana mismo al juzgado para denunciar, sollozando y con cara de víctima, sus reiterados abusos sexuales, en varias oportunidades, hace algunos años atrás y sin testigos ni pruebas que puedan confirmarlo? ¿Piensa usted que me creerían? ¿Iría usted preso aún si nadie puede comprobar estos delitos? ¿Qué cree usted; viviría los horrores que le describo más arriba en una cárcel olvidada por todos excepto por quienes viven ese infierno? Yo creo que no, que no iría preso. Incluso, tal vez, usted buscaría la forma de indagar más sobre mí, la acusadora, buscando los sombríos móviles que me llevan a inculparlo con tan viles calumnias. ¿Acaso terminaría yo presa y usted libre? Es probable. Entonces, ¿por qué Mario Indij es buscado por la justicia sin siquiera conocer la legitimidad de los cargos en su contra, sin declaraciones, sin la posibilidad de un juicio previo, sin pruebas? Usted no irá preso, señor fiscal, ambos lo sabemos... pero qué incómodo se siente el encierro, aunque

más no sea imaginario, ¿verdad? Las cárceles, tal como las conocemos, no deberían existir. Tampoco la supuesta justicia. Y mucho menos los fiscales corruptos. Sin ánimo de subestimarlo, me permito una reflexión al respecto: es muy obvio que detrás de todo esto hay intenciones ocultas y que lo que se está desplegando aquí no es un caso contra un abusador sino una persecución ideológica. El señor Indij, Maestro Mehir para sus seguidores, es una incómoda piedra en su zapato y en el de muchos otros, y es preferible preso que libre ¿Pero de qué se lo puede acusar? De libre pensador... mmm, no, no sería suficiente para llevarlo a la cárcel. De idealista, tampoco; de ¡filósofo abstracto!, no... de humanitario, de artista marcial, de justo, de sabio... Mucho menos de maestro de conocimiento, la gente ni siquiera sabe bien lo que eso significa pero no suena a nada malo. ¡Ah! ¡Claro! De abuso sexual, que no es excarcelable. Eso le asegura a usted su prisión por tiempo indefinido, ¿verdad? Las falsas acusaciones por asociación ilícita, la reducción a la servidumbre, la estafa, son delitos considerados menores, excarcelables y que sólo funcionan en este caso como agravantes.

No son lo suficientemente contundentes como para que un juez decida condenarlo de por vida. De todas formas, sepa usted señor fiscal, que cualquiera de los cargos por los cuales usted está persiguiendo al Maestro Mehir son terribles falacias, mentiras voluntarias, originadas por el rencor, la ira y el resentimiento de un puñado de vulgares que no soportaron que la mirada de Mehir dejara al descubierto su inmoralidad y falta de principios. Y es justamente esta carencia de valores primordiales la que los lleva a acusarlo hipócritamente de delitos que solamente han cometido ellos mismos en su imaginación. ¿Y dígame, cuál sería el calificativo para usted si envía a un hombre inocente a la cárcel de por vida? Usted no sabe nada de Mario Indij, pero yo sé que en lo más profundo de su ser, en un recóndito sitio escondido de su conciencia, usted, como quienes lo acusan falsamente, también teme encontrarse con la verdad de su mirada.

LA LIBERTAD DEL CONOCIMIENTO Los absurdos inconcebibles que se atribuyen al maestro Mehir no son más que una maniobra desesperada de gente que quiere encerrar, no al maestro, sino a la idea. Pero, bárbaros, las ideas no se matan, y lo que han hecho deja a la luz que todo este circo no es más que una persecución ideológica irracional. ¿Qué sucedió con la libertad de culto, qué con la Democracia?

P

rimero intentaría aclarar que cuando las personas no pueden asimilar el conocimiento de la verdad suelen sentir que el culpable de los conflictos y tensiones inconscientes que los perturban, está afuera, es “otro”. Este mecanismo hace que, por ejemplo, algo tan obvio para nuestra cultura actual, como la afirmación de que la tierra gira alrededor del Sol, haya condenado a la hoguera a ciertas mentes vanguardistas en la Edad Media europea. Eran culpables porque socavaban un sistema perceptual impuesto a través de miedos y supersticiones, un sistema de poder que sostenía el orden imperante.

73

Ahora… ¿alguna mente despierta puede sospechar que la preciosa vida humana puede tener otra finalidad además de comer, copular, poseer ávidamente objetos que la muerte va a arrebatar, y que puede ser libre más allá de los condicionamientos materiales y heredados? Sí, sabemos que hay mentes vanguardistas que piensan críticamente y ponen en duda las bases cognoscitivas de nuestro sistema perceptual. A ellos nos dirigimos, porque necesitamos ayuda de lo más noble de la inteligencia humana. Y también sabemos que algunos librepensadores no son bien comprendidos y buscan un “hábitat” estratégico en su existencia, para poder pensar y vivir más libremente y estar más allá de la locura del siglo. Muy lejos de ser gente con el “cerebro lavado” son vanguardistas que sometieron a crítica la cultura. Es posible que los agentes activos transmisores del “status quo” cultural se sientan muy amenazados por estos “raros sujetos nuevos” que ELIGEN, DECIDEN, NO CONSIENTEN Y VIVEN con otros sujetos análogos. Entonces se levanta la Santa Inquisición retrógrada tratando por todos los medios de silenciara estos “raros sujetos nuevos”. Nos allanan nuestras casas buscando… ¿qué secreta prueba…? El conocimiento no se puede “allanar”, no está en algún libro secreto escrito en la casa del supuesto “líder sectario”. El conocimiento real es la capacidad de adentrarse en las profundidades oceánicas de la propia psique y descubrir en un proceso cuyos pasos son inalterables, en un develamiento progresivo, los dinamismos psíquicos propulsores del plan cósmico de integración del ser. Una escalera al Cielo, un plan universal que subyace detrás de los distintos lenguajes míticos y simbólicos, trasfondo común de las grandes religiones. Esta psicología profunda, esta “psicología de la posible evolución del hombre”, es la genuina enseñanza del “conocimiento”. Esta idea del conocimiento como un manantial que fluye desde los más profundos estados de conciencia, implica una psicología de trascendencia de todos los inútiles sufrimientos “personales” y el reencuentro con el “Sí Mismo”, el despertar de una alegría y un amor no

74

condicionado que están en el trasfondo velado de cada uno de nosotros como seres humanos. Desde esta perspectiva, puedo aseverar con total justicia que jamás un auténtico maestro de conocimiento, como lo es Mehir, “lava el cerebro” o “manipula” a un discípulo, sino que lo guía en un proceso de conocimiento profundo de sí, con el objetivo de liberarlo de todas las improntas oscuras depositadas en él por una educación traumática e inhibidora de sus auténticas e íntimas potencialidades individuales. Ahora...¿Por qué le dio la “justicia” tanto crédito a estas acusaciones ridículas, al punto de sentenciar que son culpables antes de investigar auténticamente? Estos procedimientos discriminatorios son inquisidores, dictatoriales y completamente persecutorios de una ideología. ¿Cómo puede un fiscal hacer tanta “mala praxis” si no estuviera avalado su poder por un estrato político de mayor jerarquía? Un pueblo de mente libre y democrática no puede permitir esta “orden de captura” a un maestro de conocimiento con argumentos tan absurdos y retrógrados. No podemos hacernos otra vez los sordos, ciegos y mudos. Que se levanten, por favor, todas las voces que aman la libertad y edifiquemos juntos el derecho inalienable de todo individuo a elegir su ideología. Respetemos como pueblo el derecho a pensar diferente y no nos creamos más ese: “si lo acusaron por algo será…”. ¡Que los auténticos idealistas, levanten con nosotros la bandera histórica de la libertad, la justicia, la equidad, en un pueblo que no quiere más impunidad dictatorial!

Los medios hoy tienen el poder construir y destruir, decidir, influir, condenar, apresar, erigir y derrocar. Con una calumnia bien escrita -o no tanto, porque ni siquiera es necesario que sea un gran literato-, un periodista puede manchar el buen nombre de un hombre, iniciar una persecución encarnizada y lograr que toda la sociedad señale al supuesto con el dedo al grito de “¡aprésenlo!”. La pregunta es, ¿quién les da tanto poder a estos informadores deformadores? El derecho a estar informado y el deber de informar… una relación de equilibrio que fue mutando macabramente hasta llegar al punto en que hoy nos encontramos. Los medios abusan y se aprovechan del derecho a estar informado de los ciudadanos hasta influir sobre ellos, hipnotizándolos con sus engaños y deformando la verdad. Un negocio. Cruel, mentiroso, corrupto. ¿Tenemos la prensa que nos merecemos? Pues sí, así es, ciudadanos, ocupémonos de lo necesario para merecer algo mejor.

75

UNA TORRE DE MENTIRAS Un domingo trágico se publicaba una nota en un periódico que transformaría para siempre la vida de un hombre y la de cientos de sus seguidores. Todo por una granada de mano llena de mentiras, arrojada por un periodista poco ético que tiñó de sangre la ciudad de Villa Carlos Paz. Así obran, así escriben. Dese cuenta, no nos informan. Nos manipulan.

E

l periodista se ha vuelto un traficante de palabras, un estafador de la realidad, un tránsfuga que se vende al mejor postor. Él, que debería ser el transmisor objetivo e imparcial de lo que sucede, un heraldo digno que nutre el derecho a estar informado de cualquier ciudadano, él se ha convertido en un enemigo solapado, un hombre sin escrúpulos que simplemente vende su alma al mejor pagador. A veces del lado del bandolero, otras del justiciero, a veces con el inocente, otras con el culpable... todo depende de la suma de dinero y de la cantidad de luminarias que ofrezca el cartel. Gurdjieff dio en llamar a este perfil psicológico “hassnamus”, uno de los dos principales destructores del conocimiento, junto con la psicosis de guerra. También habló de la “mentalidad de periodista”. Y con este término, no pretendía encerrar únicamente a los periodistas propiamente dichos, sino a todos los “aparatos formatorios” que jamás podrían tener un pensamiento propio fuera del inventario restringido que se armaron, a lo escaso que conocen del mundo y que únicamente pueden citar lo que leen o escuchan sin someterlo a crítica, e incluso, tergiversarlo aún sin entenderlo. Si un hombre quiere destruir el buen nombre de alguien, basta con que compre a un periodista. Y ese será el principio del fin. Unos meses atrás un ignoto periodista del diario cordobés La Voz del Interior se encegueció con la

76

posibilidad de que su nombre trascendiera las páginas del periódico local, respondiendo a los intereses ciegos de un grupo de fanáticos antisectas (el Sr. Alfredo Silleta, el Dr. Walter Navarro, los miembros de RAVICS, etcétera) y con el apoyo del Dr. Ricardo Mazzuchi, fiscal de Villa Carlos Paz. No se sabe cuál fue la cifra que lo tentó para descender a los infiernos ni exactamente quién de todos la puso, pero fue suficiente para inspirar un titular contundente: El gurú que odia a las mujeres, que más que título sonó a sentencia. Para sorpresa del propio maestro Mehir y de sus seguidores, el artículo se refería a él, aunque lejos de reflejarlo, retrataba a un hombre vil, abusador, degenerado, ambicioso, siniestro... un absurdo impensable para cualquiera que conozca a Mario Indij, el maestro Mehir. El guiso se había cocinado de antemano y sólo necesitaba el último fuego para servirlo: un argumento que parecía extraído del peor culebrón venezolano en donde el malo era muy malo, el corrupto muy corrupto y el periodista nada más que un tarado al servicio del mal. Veamos algunos detalles de la trama: el código penal establece que una persona injuriada y calumniada en un medio de comunicación está en su derecho de iniciar un juicio por calumnias e injurias para reparar el daño… salvo que exista una causa penal que implique al injuriado. Hasta ese momento, Mario Indij era un hombre libre, que circulaba alegremente por las calles de Villa Carlos Paz dando muestras de su generosidad e integridad a cada paso. Pero bastó que la nota se publicara para que en ese mismo momento el fiscal decidiera actuar de oficio ante “pruebas” tan contundentes como las que daba el artículo del diario... entonces él mismo abrió una causa en contra del maestro Mehir. Ya no era posible exigir al periódico que desmintiera las falsas acusaciones con una demanda. Todo había sido planeado con antelación: el fiscal Mazzuchi había abierto una causa motivado por las acusaciones que hacía el periodista, a su vez motivado por el dinero que puso un fulano de tal, que a su vez estaba motivado por... y así se cocía el guiso. En pocos días, ya no era posible reclamar nada ante nadie, porque la sentencia estaba dada: pedido de captura contra el maestro Mehir por... “¿¡abuso sexual!?”

El periodista que a partir de esta nota se creyó el personaje del paladín de la justicia se llama Sergio Carreras. Y en realidad es en gran parte responsable de muchas injusticias que se sucedieron a partir de esa terrible nota plagada de mentiras, propia de un sofista, llena de ideas sacadas de contexto y testimonios falsos de personas maliciosas inyectadas de ira. El personaje en cuestión, el periodista, no sería culpable si no fuera porque pudo evitar que tanta iniquidad llegara tan lejos. Tal vez si hubiese escuchado las denuncias y acusaciones de los agraviados, y, buscando el fondo de la cuestión, indagado a los discípulos para ver qué tenían que decir al respecto, pesquisado... en fin, investigado. Pero simplemente se limitó a lo parcial, a lo fácil, sin verificar siquiera su legitimidad. Periodistas como éste -y son muchos- resultan una amenaza para toda la sociedad. A partir de ese domingo negro comenzó la persecución infundada del maestro Mehir por supuestos abusos sexuales que no son más que la fantasía morbosa de un manojo de gente; también en la nota se lo acusaba de lavado de cerebro, asociación ilícita, contagio consciente de enfermedades venéreas y otras atrocidades que hicieron que el maestro de conocimiento se convirtiera para los lectores en un monstruo degenerado. ¿Tendría Mehir tantos seguidores -familias enteras- si todo esto fuera verdad? ¿Quién podría llamarse discípulo de un depravado?

77

CÓMO SE CONSTRUYE LA REALIDAD Los medios engañan, desvirtúan y deforman la opinión pública. Hipnotizan y encadenan al lector a sus mentiras. ¿Quién pone en tela de juicio la coerción psicológica que ejercen los medios de comunicación?

C

Hoy a usted no le toca, pero establezcamos una analogía que le permita ver cómo rápidamente cualquiera puede caer en las redes de un periodista. Imaginemos que usted vive en el piso tercero de un edificio. El señor del cuarto hace un ruido particular cuando camina sobre su parquet de madera que le molesta. Usted no puede dormir, se exaspera, vive muy incómodo. Pero claro ¿de qué puede quejarse ante su vecino? ¿de que camina dentro de su propia casa? Entonces, obnubilado en una noche de desvelo, irritado, trama un plan. Y al día siguiente se presenta ante el periodista Carreras y le ofrece una suma de dinero para que escriba sobre su vecino. La idea es difamarlo, presentarlo a la sociedad como un degenerado para que el fiscal correspondiente no tenga dudas: ese personaje es un peligro, debe estar preso. Así usted se librará de los incómodos pasos de su vecino. Y entonces, el matutino publica el siniestro: “Vecino jubilado viola a todas las jovencitas del barrio a la hora de la siesta”. Y si, un poco morboso y amarillista, porque el argumento debe ser contundente como para que nadie cuestione que el fiscal deba obrar de oficio, aun sin existir pruebas. Ya ve, es sencillo. El periodismo de hoy nos facilita

78

mucho la vida. Ya no es necesario tener un arma ilegal en casa. El periodista dispara y usted queda limpio (ante la sociedad, claro. Porque en su conciencia, seguramente por las noches no pueda dormir). No vamos a profundizar en los errores de Sergio Carreras como exponente del periodismo que hoy nos toca analizar, porque todos ellos devienen del gran error, que es su intelecto mal formado, y de ahí para abajo, todo es desastre. Y lo grave, gravísimo, es que él no es más que uno más del montón de periodistas poco serios de hoy. Es hora de que las audiencias dejen de ser subestimadas, de que los lectores agucen su seso, sepan cómo es construida la información que le dan digerida ciertos medios y dejen de comprar basura. ¿Hasta dónde puede llegar una mentira cuando se hace pública y masiva a través de la prensa? ¿Cuánto daño puede causar un periodista de mente limitada? El periodismo actual no toma en cuenta ni le importa cuál será el efecto de la noticia irreflexiva que vomita y es hora de que los lectores exijamos una prensa a la altura de las necesidades evolutivas actuales, imparcial, justa y honorable, verdaderamente al servicio de la humanidad.

uando pienso en los latiguillos en que se fundamentó la acusación y sentencia mediática del maestro Mehir, que fue atizando los miedos y las expresiones proyectivas de tanto veneno agazapado, de tantos prejuicios ciegos, veo que uno de los pilares de la denostación pública fue “el gurú...” que “odia a las mujeres, que estafa, que droga a sus discípulos, que hace uso ilegal de la medicina...”etc. No voy a analizar los predicados porque son tan aberrantes, tan impunemente mentirosos, que los vamos a dejar de lado, total, todos los días agregan una locura nueva. Hasta padres que parecían medianamente honorables se dejan llevar por las presunciones más descabelladas y siniestras, es más que evidente que quieren atribuirle el tacho de basura del inconsciente negro de la cultura. Me propongo analizar “el sujeto” al que se atribuyen todas las barbaridades macabras, porque ese sujeto utilizado por los “latiguillos” amarillistas tiene un objetivo preciso para taladrar los prejuicios inconscientes. No se lo llama maestro, porque eso es lo que realmente es: un Educador. Se lo llama “gurú”, aludiendo con esa utilización, acorde al inventario asociativo de significados de nuestra cultura, a “chanta”, “manipulador psicológico que estafa, engaña, obtiene riquezas económicas prometiendo sanación psicológica o corporal, hace culto de su persona y requiere total devoción fanática de las mentes débiles y sugestionadas que lo siguen”. Por supuesto que esa palabra y su connotación en nuestra cultura tienen un significado peyorativo, hasta

79

irónico, y completamente escéptico de la existencia de “iluminados” que puedan fecundar el alma de los que siguen su enseñanza. Muy diferente sería el valor connotativo de la misma palabra en la India, por tomar un ejemplo de Oriente. Pobre señor Silleta, en la India se moriría de hambre porque su oficio de “investigador de sectas” y de “gurúes” no tendría ninguna receptividad en la opinión pública. Tal vez en la India lo veríamos dedicarse a trabajar en serio en lugar de lucrar con falacias filosóficas. ¿Quién le prestaría atención cuando hay millares de sectas religiosas y conocer un “gurú” es el máximo honor que uno pueda tener en la vida? Lo mirarían como a un loco, a alguien trastornado por complejos paranoicos o persecutorios. Le aconsejarían con una sonrisa beatífica que trate de limpiar su alma de tantas impurezas que le impiden percibir libremente la Luz y a todas sus magníficas manifestaciones. Pero en esta era del “significado” y la “comunicación” en Occidente, se puede también “asesinar” a través de un valor connotativo usado en forma muy manipuladora, sin tener ningún asidero con la realidad, con la verdad. Eso es lo que hacen los medios de comunicación más siniestros y solapados, al servicio de quién sabe qué intereses. Lo único indiscutible para cualquier semiólogo o estudioso del fenómeno comunicacional, es que no están al servicio de la Verdad. ¡Qué increíble es atestiguar cómo la utilización manipuladora y falaz de un verbo oscuro, quiere intentar la destrucción de un proyecto humanitario y altruista! Que parte de la opinión pública acepte pasivamente, sin someter a ninguna crítica ni investigación previa esas afirmaciones, porque su subconsciente ha sido digitado en una dirección específica: sus propias asociaciones mecánicas inconscientes creadas por una cultura informacional determinada desde la más temprana edad. Parte de la opinión pública aprende a “soñar” el sueño, a interpretar la realidad, tal como conviene a oscuras improntas de significado. Hasta tal punto que he escuchado a profesionales, “intelectuales”, responder directamente “creyendo las acusaciones” sin elaborar ningún pensamiento activo, dominados por los prejuicios ciegos. Pero también tuve la suerte de escuchar a un jardinero, a un mozo que lo atendía en un café o a un cuidador de autos de co-

80

chera decir: ¡Por qué no se dedicará la Justicia a meter presos a los delincuentes que andan todos libres y se dejará de calumniar y lastimar a gente tan buena…! Gente que “intuye” la verdad sin tan sofisticado sistema de asimilación de significados falaces. Y también todos los días veo con esperanza levantarse la voz de los que están completamente indignados y decididos a unir “todas las voces” del legítimo proceso de pensamiento y conocimiento, para revertir inmediatamente el poder de la Mentira y la Calumnia. A ellos me dirijo, a la inteligencia que siempre hace brillar a este pueblo argentino, y les pido, les ruego, que detengamos ya tanta impunidad, que se retiren inmediatamente los cargos que se hacen a un maestro educador. Que luchemos todos juntos con las voces que reconocen tanta injusticia, para terminar con esta infamia y esta forma de obrar que es el verdadero “opio” de los pueblos, el verdadero lavado de cerebro con que anestesian a multitudes y preparan las dictaduras atroces enmascaradas de democracia.

FORMADORES DE DEFORMADORES Para estas empresas privadas, el Estado y la democracia son socios minoritarios, y sus ciudadanos adictos a una droga que ellos mismos fabrican: la información. Conozca la trama del negocio de la educación y del negocio de los medios de comunicación.

¿Cómo se construyen las dictaduras? Con la Ignorancia. Se construyen con el miedo a la libertad de la mente.

S

Y lo que nos sucede a los miembros de la Escuela El Cántaro es atestiguar en pleno siglo XXI en un país democrático, la dinámica de una verdadera “PERSECUCIÓN IDEOLÓGICA” propia de las más abyectas dictaduras. No estamos hablando del sistema legítimo democrático ni del gobierno nacional, estamos hablando de algunas personas que encarnan la mente inquisidora y oscura con la que se construyen tiranías y utilizan el poder que les ha conferido el pueblo, minando las raíces verdaderas de nuestra Constitución.

oy discípula del maestro Mehir, esta es mi historia... Habiendo terminado el secundario conseguí una beca para estudiar Ciencias de la Comunicación en la Universidad de San Andrés, provincia de Buenos Aires, una de las más costosas y prestigiosas del país, destinada a transformar a los hijos de las familias más importantes y adineradas de la Argentina en economistas, contadores, políticos, especialistas en educación y comunicadores, básicamente los cimientos de la sociedad moderna.

Pido que se alcen las voces de todos los que “conocieron” alguna vez al maestro Mehir y a la señora Miriam y den testimonio de su experiencia. Porque contra el poder aparentemente impune de la mentira tiene que levantarse el Verbo de Luz y con su fuerza natural liberar la Verdad. Sepan, silenciadores del Verbo: “LAS IDEAS NO SE MATAN”.

Yo, ex alumna de la Universidad de San Andrés y habiendo cursado la carrera de Comunicación con especialización en Periodismo, fui formada por docentes que ocupan altos cargos en importantes medios de comunicación, directores de diarios, asesores de prensa de numerosos políticos, investigadores reconocidos y consultados internacionalmente y muchos periodistas, redactores y editores del

Grupo Clarín, con el cual la universidad tiene un convenio. Mis profesores: Eliseo Verón, Nicolás Nóbile, Florencia Garramuño, Sonia Jalfin, Alberto Quevedo, Marcelo Leiras, Carlos Acuña, son sólo algunos de los nombres que quedaron grabados en mi memoria. Todos conocemos el poder que ejercen los medios de comunicación, eso nos enseñan en la facultad, pero verlo en acción es algo absolutamente distinto. Recientemente fui testigo de cómo La Voz del Interior, uno de los diarios del grupo Grupo Clarín, inició una campaña de difamación en contra de un ciudadano inocente, motivada por intereses económicos y políticos. Esta cruzada, que me consta que fue financiada, contenía acusacio-

81

nes como abuso sexual, asociación ilícita, reducción a la servidumbre, misoginia y una lista de delitos que jamás vi ni en las películas, y todos ellos le eran adjudicados al redactor de la revista para la cual yo trabajaba: Mario Indij. Las calumnias trascendieron a todos los medios de comunicación del país, se propagaron como una plaga y presencié personalmente cómo en una semana arruinó la obra de toda una vida de trabajo de una persona inocente (Mario Indij). Vi cómo encarceló a una amiga (Miriam Macías) y perjudicó gravemente a sus allegados, entre los cuales me incluyo. Las aberraciones a las cuales nos sometieron por sus calumnias son incontables. Los invito a leer el resto de esta revista para enterarse, puesto que no voy a poner el foco de atención en los daños. Pero sepan que no son pocos ni menores. Un día suena el teléfono de una integrante de la Escuela de Conocimiento El Cántaro y un periodista de la Voz del Interior dice que pronto se va a publicar una denuncia contra toda la Escuela y contra su fundador Mario Indij, para sus discípulos maestro Mehir. Y como si fuéramos criminales, ante una oportunidad increíble y única nos ofrecieron “negociar” la información a publicar. Actitud que nos exasperó por demás, y oferta que rechazamos rotundamente por una cuestión de principios. ¿Encima de que uno es recipiendario de una avalancha de calumnias y perjuicios tiene que “negociar”? NO. Y así le va a la gente ética cuando no transa con los poderes monopólicos...

82

Un viaje espiritual con parada en el infierno Sergio Carreras, La Voz del Interior, 12 de Junio del 2011 El gurú que odia a las mujeres Sergio Carreras, La Voz del Interior, 12 de Junio del 2011 También denunciaron a Mehir por abuso deshonesto La Voz del Interior, 23 de Junio del 2011 El Maestro Mehir dirige una secta destructiva Sergio Carreras, La Voz del Interior, 24 de Junio del 2011 Piden la captura del Maestro Mehir por abuso sexual Sergio Carreras, La Voz del Interior, 24 de Junio del 2011

Estos son sólo algunos de los titulares de un listado larguísimo, publicados a lo largo de meses, hechos en base a calumnias e injurias. Si estos son los titulares, imaginen las barrabasadas de los contenidos, porque no cabe otra palabra para este tipo de literatura bizarra.

Parecen los titulares de Crónica TV, con fondo rojo y letras blancas, que buscan con un par de palabras taladrar la cabeza de la gente. Amarillista y sensacionalista. Sergio Carreras. ¿Es este un periodista serio? ¿Esta persona está calificada para ser un docente en investigación periodística –como dice en su curriculum? ¿Esta persona se considera apta para informar a la sociedad de un país democrático? Una falta de respeto a la verdad, a los lectores, a los injuriados, a su misma profesión, a sus colegas y, fundamentalmente, a sus alumnos. Formador de deformadores, de futuros manipuladores de la opinión pública. Su slogan: “miente, miente y miente hasta que sea verdad”, como decían los nazis. Una sociedad no muy prometedora…. Presencié la teoría viva de la aguja hipodérmica de la cual tanto nos hablaba Eliseo Verón; un público pasivo, en estado vegetativo, absorbía las calumnias e injurias que verborrágicamente escribía el periodista Sergio Carreras, alimentado por intereses que no responden a la ética ni a la verdad. Sin mediar ningún tipo de investigación periodística ni compromiso profesional, arruinó la vida de una persona inocente. Pero esto no le preocupa en absoluto ni a él ni al diario, porque en este rubro es moneda cotidiana hacerle frente a la reacción de los damnificados, y en tanto sea más redituable la noticia que los gastos del juicio por calumnias e injurias, sigue siendo negocio. Hecha la ley hecha la trampa. Estimados profesores de la Universidad de San

Andrés, ustedes que trabajan en los medios de comunicación que saben bien cómo funcionan en la práctica, no me educaron a mí en la corrupción del sistema, no me enseñaron que los medios de comunicación son cómplices de grandes movimientos políticos y transas económicas, que engordan los bolsillos de unos a costa del buen nombre y honor de otros, que entretienen a millones a costa de la vida de una persona; no me dijeron que los medios de comunicación son la versión moderna del coliseo romano... Miren a los ojos a sus alumnos y háblenles como a mí de la responsabilidad moral que conlleva ser un periodista, de lo importante que es la comunicación imparcial, de lo importante que es la investigación de los hechos, etc., etc. Vayan a los hechos y vean en clase lo que es capaz de hacer un periodista que tiene subyugados a millones de lectores, sometidos a lo que él piensa, a lo que él dice… ¿Con qué autoridad? Vayan a los hechos y vean lo que es capaz de hacer un monopolio, que informa a todo un país acorde a sus intereses o desintereses; lo cual explica por qué todos los medios de comunicación de su propiedad dicen lo mismo cada uno a su manera. ¿Y a esto le llaman “pluralismo”? Río para no llorar... El hecho de que Sergio Carreras sea profesor de investigación periodística, me da mucho que pensar acerca de los educadores de este sistema, ¿quiénes son los formadores de los futuros comunicadores? ¿Quiénes son los educadores de esta so-

83

ciedad? Yo sé qué educación impartieron en mí ustedes. Yo sé qué educación imparte Carreras cuando va a dar clases... Cuánta hipocresía! Y a los verdaderos educadores los acusan de abuso sexual. Y la gente se lo cree porque lo dice el diario, y ustedes siguen llenando sus aulas con jóvenes que inocentemente se entregan a utópicas descripciones del rol fundamental de los medios en la democracia y a traficantes de información, formadores de deformadores… Yo, verdaderamente, pregunto: mis profesores, mis educadores ¿son capaces de poner en tela de juicio el desempeño de un reconocido medio de comunicación como La Voz del Interior, perteneciente al Grupo Clarín, el que los emplea a muchos de ustedes fuera de sus horarios de docencia? Tal vez lo hagan en su fuero interno, pero ¿serían capaces de hacerlo mirando a los ojos de sus alumnos o de sus hijos? Todos son cómplices de un sistema que saben corrupto, sin embargo todos hacen la vista gorda. Ojos que no ven, corazón que no siente. Y así estamos donde estamos. Corrupción que no nos importa ni interesa en tanto no se metan con nosotros. Pero este monopolio no tiene escrúpulos y algún día les va a tocar a ustedes también. Yo, por lo pronto, no pongo nunca más las manos en el fuego por una noticia que haya salido en los diarios. Y les recomiendo a ustedes hacer lo mismo.

Una secta destructiva, a través de métodos coercitivos que privan de la libertad psicológica y social de los individuos, es una asociación con fines perversos o inmorales. Seguramente debe haber una ley que proteja contra este tipo de delitos. Pero no una ley que allane y desconozca de manera ignorante la diferencia cualitativa esencial entre una secta destructiva y una escuela de conocimiento.

84

85

LOS INCRÉDULOS DE LA ILUMINACIÓN En pleno siglo XXI se levantan las voces de una nueva Santa Inquisición: ¿qué sabe usted sobre la ley antisectas?

E

l abogado Navarro, tristemente conocido por ser un perseguidor encarnizado de ideologías diferentes al agnosticismo escéptico, pretende utilizar la atmósfera intolerante de la ley-antisectas en Córdoba, para urdir una trampa siniestra: acusar a un sabio de “abuso sexual” por coerción psicológica, argumentando que es el líder de una secta destructiva. No sólo toda la acusación es una calumnia, sino que se apoya sobre una premisa falsa: la identificación de una escuela de conocimiento con una secta destructiva, premisa que cuenta con el marco ineficaz y carente de discernimiento de una ley anticonstitucional: la ley anti-sectas. Si toda una ley se basa en una premisa equivocada, la no diferenciación entre secta y secta destructiva, entre secta destructiva y escuela de conocimiento, y por esto mismo vulnera el artículo 14 de la constitución nacional, debe ser considerada un marco legal ineficaz que vulnera nuestras garantías constitucionales y nuestro derecho inalienable a la libertad de creencia e ideología. No negamos la necesidad de prevención y castigo a las sectas destructivas, pero estos delitos ya están ampliamente considerados en el código penal. Lo que esta ley quiere proteger no son los derechos humanos, sino el avance de nuevas ideologías. Quiere ser un instrumento lo suficientemente ambiguo y contradictorio para ejercer una persecución ideológica con el aparente amparo legal. Un horror

86

muy semejante al de las dictaduras. Crimen muy enmascarado por la manipulación de la opinión pública y que ya está cobrando las primeras víctimas: Mehir Indij, Miriam Macías y todos los integrantes de la Escuela “El Cántaro”. Gente inocente, que no cometió ningún delito, en completa salud mental, a la que se les está negando el derecho a sus propias creencias y asociación, y a las que se las está persiguiendo y afectando su vida cotidiana, familiar, social y laboral. Una imputación propia de la Santa Inquisición que pide orden de captura a un sabio por “abuso sexual”, armando testimonios con palabras claves, un glosario preparado de antemano por Navarro, y una estructura de exposición y anécdotas que coincidan perfectamente como un rompecabezas con la dinámica de una secta destructiva y un delito por coerción psicológica, de tal forma que si no fuera por esa supuesta “persuasión coercitiva”, no habría delito alguno, ya que si hubiera habido relaciones sexuales, está de antemano

demostrado que fueron consentidas. Por lo tanto, al amparo de esta ley anticonstitucional y la atmósfera inquisidora y discriminadora que se fue gestando, sin el discernimiento básico de las diferencias cualitativas entre una escuela de conocimiento y una secta destructiva, entre un líder destructivo y un sabio, se desprestigia completa e impunemente a un maestro, con acusaciones aberrantes, se pone en serio riesgo su vida y se mantiene a una mujer inocente 48 días viviendo el infierno social instituido, llamado cárcel... Una ley que no sólo no agrega ninguna protección efectiva, sino que está siendo el marco sórdido, por ambiguo y maquiavélico, de crímenes contra los derechos humanos y la constitución nacional. La ley anti-sectas se ha gestado bajo premisas muy equivocadas. Es un instrumento de persecución ideológica y no preventivo o correctivo de la delincuencia. Desde su título, ya adolece de una correcta discriminación. La palabra “secta” no es una “mala palabra”, todo lo contrario, es una palabra clave del sistema democrático que, precisamente, debe tratar de contemplar y respetar el derecho de expresión y participación de todos los actores del escenario social, de todos los sectores que componen el pueblo. Como gobierno del pueblo, la democracia no puede tener una “ley anti-sectas”. No sólo es un nombre muy poco feliz, sino anticonstitucio-

nal. Debería llamarse en todo caso, ley anti-sectas destructivas. La ambigüedad connotativa y carencia de discriminación eficaz, la tornaron instrumento maquiavélico de la corrupción judicial y la manipulación mediática, y por detrás, de la santa inquisición retrógrada y anquilosada de ciertos factores de poder. Una secta es un sector de la sociedad con pleno derecho a sus creencias propias, derecho inalienable defendido por la Corte interamericana de derechos humanos de la OEA (Artículo 12.- Libertad de Conciencia y de Religión): In. 1. Toda persona tiene derecho a la libertad de conciencia y de religión. Este derecho implica la libertad de conservar su religión o sus creencias, o de cambiar de religión o de creencias, así como la libertad de profesar y divulgar su religión o sus creencias, individualmente, tanto en público como en privado). Una secta destructiva, a través de métodos coercitivos que privan de la libertad psicológica y social de los individuos, es una asociación con fines perversos o inmorales. Seguramente debe haber una ley que proteja contra este tipo de delitos. Pero no una ley que allane y desconozca de manera ignorante la diferencia cualitativa esencial entre una secta destructiva y una escuela de conocimiento. Las escuelas de conocimiento fueron, desde el principio de la historia, importantísimos factores de renovación de la cultura de los pueblos. Faros de luz, vanguardias de iluminación en las tinieblas incons-

87

cientes del mundo. De una “logia” idealista, precisamente, emergieron los héroes que construyeron los cimientos de nuestra patria y de tantas otras, como nuestro Libertador, el general San Martín. Una escuela de conocimiento tiene fines exclusivamente humanitarios, benevolentes y progresistas. Su perfil auténtico es el de la creencia en la posible evolución del ser humano individual y en la renovación de los pueblos. Y este perfeccionamiento del ser hacia lo verdadero, lo bueno y lo bello, es el motor luminoso de toda su dinámica y actividades. No tiene ni punto de contacto con una secta destructiva. Muy lejos de un líder sectario destructivo, de móviles egoístas y materialistas, el perfil de un sabio es el de un altruista que dedica enteramente su vida al bien del prójimo. ¿Y cuál es el fundamento de la ley anti-sectas? Cada vez más corroboramos que ese poder oscurantista que está detrás está vinculado a lo más conservador y retrógrado de la cultura histórica, el pensamiento medieval que acusa de “herejía” a todo pensamiento que vaya más allá de una osamenta doctrinaria anquilosada y dogmática, carente de toda luz filosófica, reducto de ideología fascista, discriminadora, verdadera tiranía para el libre pensamiento, a años luz de la palabra viva, de los ríos de agua viva del Verbo hecho carne en el amor incon-

dicional del Cristo, la Santa Inquisición antisectas, quiere destruir en la hoguera la libertad de pensamiento. ¿Están perdiendo acaso convocatoria de prosélitos y temen el poder de las filosofías ecuménicas verdaderas? ¿No será que temen que una filosofía verdadera y universal que busque la unidad de todas las religiones sea peligrosa para el poder concentrado en occidente por intereses económicos y políticos?

enajenación de las grandes ciudades se instalaron buscando un ámbito natural para vivir ideas de filosofías alternativas al materialismo egoísta y decadente del sistema? El sistema las usó como atractivo turístico pero de pronto y a continuación de la cacería retrógrada que nosotros estamos padeciendo ¿no se volverán demasiado peligrosas? Yoga, reiki, artes marciales, budismo zen, etc, etc ¿no son acaso “sectas”? ¿No son sistemas “alternativos” de terapias, de ver y experimentar la realidad? Mientras que en el primer mundo grupos ecologistas o de filosofías alternativas ya constituyen un poder político sectorial, se erige en Argentina, Córdoba, ¡una gran propuesta innovadora para alcanzar rédito político con procedimientos nazis! ¡La ley antisectas! Una ley que protege de cualquier tipo de pensamiento “diferente” al sistema imperante. ¡Gran cosa…! es un momento doloroso como pueblo descubrir que hay un remanente vivo del oscurantismo inquisidor que construye dictaduras... Y que las dictaduras no surgen por “azar” o “casualidad” sino del imperio abusivo de la ignorancia antievolutiva y el miedo a los que un pueblo comienza a CONSENTIR.

Reiteramos una y otra vez: este es un caso de discriminación ideológica, encubierto en acusaciones mentirosas y en calumnias. Esta es una persecución nazi, oscurantista, fuera de época, que intenta frenar la línea del progreso hacia un mundo sin fronteras ni intereses concentrados en unas pocas manos. Un mundo donde la única bandera sea la libertad de los pueblos, la libertad de la mente y la libertad del corazón en el amor, la fraternidad más allá de culturas, razas y religiones, la justicia verdadera de la moral objetiva. Cuanto más profundiza uno en la esencia de una religión, más evidentes resultan los nexos conciliatorios con las demás religiones y la posibilidad de que todas puedan armonizarse en un todo único. Hay una filosofía perenne que las sustenta y está en el inconsciente sabio de todos los seres. La verdad no es patrimonio exclusivo de ninguna religión, son diferentes caminos, diferentes lenguajes de un mis-

88

mo Verbo de luz por medio del cual se manifiesta el Único, el Altísimo, Dios, Tao, Aláh, la Luz increada. La idea de una Filosofía perenne o Magna Doctrina es una fuerza mediadora para unir, no para separar, para amar a nuestros hermanos, no para discriminar, para religar todas las bellas y exquisitas religiones y profetas, para propiciar una apertura mental profunda… es una fuerza conciliadora más allá de los opuestos, no es para hacer la guerra.

Estas ideas universalistas constituyen una fuerza de renovación en la cultura de todo lo oxidado, cerrado, dogmático, formal, vacío de sentido, rancio, falso y estancado. No hay en el mundo poder sectario más destructivo que el que quiere impedir la libertad del alma humana, pero nunca pudo triunfar este oscurantismo retrógrado y conservador por sobre las alas de Psique. La evolución es una poderosa corriente de agua viva que elimina todo estancamiento malsano en su camino, la victoria está predestinada porque la ley eterna del alma humana es la evolución. Contra esta ideología renovadora se está levantando la Santa Inquisición anti-sectas ¿No cae de maduro quienes son los sectarios destructivos?

Las dictaduras surgen como retroalimentación entre los poderes ciegos y tiránicos y un pueblo adormecido e inerte que ladea la cabeza con mirada distraída y cómoda cuando comienzan las evidencias estridentes del ocaso de la democracia y de las libertades individuales. ¿Acaso las desapariciones, muertes, torturas del proceso nos habrán lavado el cerebro y se habrá instalado sin que nos demos cuenta el dispositivo inconsciente del MIEDO?

La Escuela de Conocimiento “El Cántaro” está viviendo en la Argentina, en Córdoba, hoy, una persecución ideológica completamente fuera de época, que está utilizando la calumnia y la mentira para encarcelar a su maestro y quebrarnos como “sector” libre de nuestro país.

¿Se pusieron a pensar en todas las escuelas que hay en la provincia de Córdoba quienes huyendo de la

89

AMBIGÜEDAD Y FALTA DE DISCERNIMIENTO Una escuela de conocimiento provee a la sociedad los métodos evolutivos e integradores para la armonía del hombre. La ley antisectas tiene como objetivo destruirlas. Conozca el precio que la humanidad debe pagar con este equívoco.

L

o incauto y poco preciso de ciertas definiciones o fórmulas que pretenden, a manera de receta de cocina, explicar o clasificar fenómenos complejos que requieren un estudio de mayor hondura, por ejemplo, en el caso de lavado de cerebro, llevan a calificar también como secta destructiva a grupos cuyos intereses son precisamente todo lo contrario: ayudar al crecimiento armónico y consciente del ser, al perfeccionamiento de la cultura, y cuyos móviles son de servicio humanitario: las escuelas de conocimiento. El fenómeno de las sectas destructivas existe, y su peligrosidad puede reducirse a los siguientes términos: - Obediencia total a un líder carismático y fanático. - El ingreso a una vida en comunidad luego de haber roto todos los lazos sociales. - Supresión de las libertades individuales y el derecho a la intimidad, junto con un rechazo por la sociedad y sus instituciones. - El lavado de cerebro o proceso de reforma del pensamiento. - Reducción a la esclavitud luego de la apropiación del patrimonio de los afectados. Todo esto matizado con promiscuidad, corrupción, drogas, orgías, con el consiguiente daño físico, psíquico y moral.

90

Semejante flagelo ha aumentado de forma alarmante los últimos años, como lo atestiguan numerosos investigadores, posiblemente como consecuencia de la crisis de valores en la que vive confuso y desorientado el hombre actual. Las definiciones de los investigadores fueron algunas correctas, otras ambiguas, clasificaciones incompletas o demasiado generales como para precisar algo. La intención inicial fue correcta; alguien tenía que poner límites a estas manifestaciones desequilibradas. Pero hubo un error común en todos estos investigadores, ninguno tuvo en cuenta en su actitud indiscriminada, la posibilidad de existencia de grupos con finalidades evolutivas. Escuelas de conocimiento cuyas metas son la búsqueda de la armonía y el servicio a la humanidad. Tal vez motivados por

desconocimiento, ignorancia, falta de conciencia, o simplemente por la antinomia de lo que se quiere combatir, se gestó también la figura de un líder fanático antisectario que pervierte sus móviles originales de investigación y los transforma en una persecución indiscriminada con metodología fascista de la Santa Inquisición. La cuestión es que la falta de discernimiento fue creando en la opinión pública una especie de obsesión neurótica antisectaria que raya en la psicosis, y que como toda media verdad o conocimiento parcial está destinada a engendrar error y ser contraproducente. Debido a la ambigüedad en el lenguaje respecto la coerción psicológica, toda una ley puede estar desacreditada y ser poco efectiva, o causar daños irreparables por falta de justa discriminación entre una secta y una secta destructiva, o más específicamente entre una secta destructiva y una escuela de conocimiento.

cimiento, es diluir demasiado un crimen de características bien definidas y entrar en un terreno paranoico donde todo pasaría a ser adoctrinamiento. La sugestión, la persuasión, la imposición, la reforma del pensamiento, el adoctrinamiento, son fenómenos interrelacionados. Las masas responden a la sugestión del momento. El hombre masa puede ser convencido por cualquier teoría, por irracional o ridícula que sea, si la misma está bien llevada. En la escala individual es válido decir que un hombre siempre intenta convencer o ser convencido, persuadir o ser persuadido. Todo el mundo sugestiona o es sugestionado. Recordemos que las opiniones de las personas son el resultado de contenidos adquiridos (algunos en la infancia) y fijados por repetición. Y por este mismo fenómeno se mantienen los parámetros culturales, la moral convencional y la moda.

Por ejemplo, únicamente se podría diagnosticar exposición intensa a un programa de Persuasión Coercitiva si la mayoría de los miembros de este tipo de agrupación sufre los síntomas característicos de dicho crimen:

Las sectas destructivas se manejan con este tipo de psicologías influenciables, víctimas de cualquier tipo de adoctrinamiento. Un gran porcentaje de la humanidad responde a estas características psicológicas. Debemos prestar atención al fenómeno de la sugestión, porque casi todo el material de pensamiento del hombre ordinario tiene esta fuente externa. En él nada es propio, todo es adquirido. Sin embargo, se hace evidente la necesidad de una diferenciación: hay sugestiones benéficas y otras que producen daño, que mantienen al hombre dormido, que lo llevan a la destrucción. Entre las primeras, las benéficas, es innegable que podemos ubicar la sugestión positiva que ejerce un médico sobre su paciente. Si bien este aspecto no es tenido en cuenta por todos los profesionales aún, es bien conocido el hecho de que una persona enferma tiene más posibilidades de curarse si cree en el médico. Los métodos pedagógicos que incentivan el desarrollo de determinadas facultades en los niños trabajan sugestionando positivamente en pos de que el niño venza posibles autolimitaciones. Los medios masivos de comunicación ejercen gran poder a través de la repetición, que graba en el subconsciente todo tipo de información. Este material subconsciente guía la vida de un individuo que aún no logró el pleno desarrollo de sus funciones. En este sentido es valioso el aporte de los programas

1. Deterioro físico. 2. Mirada en blanco, extraviada o evasiva. 3. Respuestas estereotipadas e irracionales. 4. Desórdenes disociativos. 5. Alucinaciones. 6. Reducción de la capacidad cognoscitiva. 7. Inadaptabilidad. Es posible que para llegar a producir semejante cuadro psicopatológico se hayan producido los siguientes pasos previos: adoctrinamiento, debilitamiento orgánico, supresión de la individualidad, manipulación de la sexualidad, etc. llevados a extremos y de una forma premeditada por un organismo perverso de poder, lo cual no es el caso de la mayoría de las actualmente consideradas sectas destructivas, donde se producen otros fenómenos psicológicos relacionados con infrasexo, fanatismo, megalomanía, etc. Ahora bien, tratar de hacer extensible este Programa Coordinado de Persuasión Coercitiva a fenómenos más generales de sugestión, imposición, conven-

91

de divulgación científica, por ejemplo, de corte ecológico, que introducen y graban la idea del respeto por la vida y el medio ambiente. La iglesia católica, así como todas las grandes religiones tradicionales intentan acercar nuevos fieles y reforzar el convencimiento de los ya devotos a través de la repetición incesante de la doctrina, con el afán de introducir datos espiritualizantes en un hombre preso de los intereses materiales. Muchas veces, la posibilidad de introducir nuevos datos en el bagaje de pensamiento de una cultura, de reformar los pensamientos de toda una época, ha permitido un impulso nuevo para toda la humanidad. Recordemos en este sentido las modificaciones que siguieron a teorías como las de Einstein en Física o Freud en Psicología. Los medios publicitarios, los entes políticos, introducen a través de la sugestión, la reforma del pensamiento, como un líder sectario. El tan generalizado consumo de cigarrillos y alimentos artificiales que perjudican la salud, hasta el punto de provocar la muerte, no es más que un lamentable ejemplo de una actitud fomentada por la sugestión por repetición. Innumerables empresas comerciales internacionales con gran poderío económico aumentan sus ingresos llevando a un alarmante porcentaje de la humanidad a consumir productos de dudoso beneficio. Una nueva “elección” del hombre masa que no tuvo origen en la propia iniciativa. En el ámbito político, centenares de personas se ven arrastradas a comportarse como bárbaros siguiendo a un líder que asegura preocuparse por el bienestar del pueblo. Mentes sugestionadas que no miden las consecuencias de sus actos. Los medios de comunicación también actúan como factores de adoctrinamiento, fijando por repetición y muchas veces intencionalmente, datos de degradación de la cultura a través de la selección parcial de escenas de violencia, corrupción, infrasexo y caos y sepultándolas en la mente subconsciente de la gente. De esta manera se fija en el pensamiento una impotencia e imposibilidad de introducir cambios constructivos en la sociedad. Actualmente hay más corrupción, violencia, ilegalidad e infrasexo en las calles, revistas, cine, televisión, radio, diarios, publicidad, etc. que en todas las

92

sectas destructivas que existieron a lo largo de todos los tiempos. Entre el lavado de cerebro o Programa Coordinado de Persuasión Coercitiva y todos los fenómenos generales de sugestión, hay una gran diferencia de escala. El crimen de la violación física, psíquica y moral que comprende el lavado de cerebro propiamente dicho fue realizado, por ejemplo, en campos de concentración, adiestramiento de grupos guerrilleros, terroristas, prisioneros de guerra y excepcionalmente en sectas como la protagonista de la matanza de Guyana, es decir, grupos que no vacilarían en cometer los crímenes más bárbaros e irracionales justificándolos en pos de un ideal. Como vemos, la ambigüedad y falta de discriminación en una ley que pretende combatir el delito, puede llegar a ser tan criminal o más aún de lo que pretende eliminar, y si a eso le sumamos la actitud de ciertos sectores de poder inconfesable que temen el avance de una ideología intrínsecamente revolucionaria, ya que intenta no un cambio intrascendente sino la transformación de un ser egoico y materialista sumido en un sueño colectivo de felicidad consumista, en un hombre libre y consciente, se aclara perfectamente la relación entre la manipulación mediática del grupo monopólico Clarín, el juicio de Santa Inquisición que se ha hecho con la escuela El Cántaro y el maestro Mehir, la corrupción judicial y los sectores rancios y conservadores a ultranza, utilizando un instrumento maquiavélico, la ambigua ley anti-sectas, para eliminar de la faz de la tierra todo asomo de idealismo. Si deseamos auténtica democracia, si creemos en la posibilidad de libertad y justicia, urge la revisión de un instrumento falso, ambiguo y de oscuras intenciones inquisidoras: la ley anti-sectas.

EL SABIO ¿Cuál es la diferencia entre un líder sectario destructivo y un sabio? Aquí la respuesta…

L

sobre la base de un autoritarismo verticalista que imponga a mentes muy débiles y conflictuadas, premisas de adoctrinamiento y métodos coercitivos de persuasión. Sus móviles son egoicos, compensatorios de sus propias debilidades, y materialistas.

El estudio, la preparación, el adiestramiento de un hombre armónico es un proceso de años en el que se logran acrisolar y perfeccionar atributos del ser, desplegando todas las potencialidades arquetípicas de la psique en un proceso de integración mandálico hasta que resuenan todos los armónicos de sus funciones humanas esenciales, orbitando alrededor de una nota clave: la realización de su Sí Mismo. El Espíritu ha devenido el centro de gravedad de todas sus manifestaciones. En una determinada fase de su trabajo evolutivo crea una escuela para transmitir la enseñanza a quienes quieran voluntariamente recibirla, como servicio a la humanidad. Sus móviles son altruistas, educadores y humanitarios. Un líder fanático por motivaciones psicopatológicas necesita el ejercicio de un poder que manipule la psicología de los otros, un poder basado en la megalomanía como compensación de impotencias íntimas y oscuros complejos de inferioridad. Crea una secta

En la historia del mundo siempre existieron seres con una visión más objetiva o conciencia más acrecentada, la razón más esclarecida, Gandhi, Fromm, Gurdjieff, Rumi, Confucio y tantos otros... podríamos decir que hay una escala vertical de niveles de conciencia y ser en los que esos hombres destacan por su idealismo, convicciones internas profundas, el logro de un pensamiento independiente de las corrientes colectivas de opinión, un accionar valiente y coherente con sus ideas que le dan una autoridad natural devenida de su nobleza y honorabilidad. Y son líderes naturales que pueden guiar a otros porque conocen cada rincón del camino del ser, las posibilidades para sortear las dificultades e inconvenientes, los lugares de riesgo y peligro o desviación por falsos senderos. No hay lugar alguno para la frustración en sus actitudes porque han desplegado lo más genuino de sus potencialidades y su individualidad creadora. Son naturalmente magnéticos, carismáticos, confiables y poseen la claridad, serenidad y firmeza propias de quienes son capaces de conducir conscientemente su vida y ayudar por lo tanto a los otros. Son sabios, su vida es coronada con una entrega a una misión educadora para enriquecimiento de la cultura y de la humanidad. Han existido en la historia de la humanidad grandes

os investigadores del tema de las sectas, los responsables de movimientos anti-sectarios y quienes han creado en Córdoba la ley anti-sectas, han omitido por ignorancia, falta de conciencia o mera oposición ideológica, la posibilidad de grupos cuyos objetivos reales sean los intentos de evolución del ser, las escuelas de conocimiento. Y en ese contexto, suponen la inexistencia de personas equilibradas, armónicas, que pueden ser denominadas “sabios” y deben ser cualitativamente diferenciadas de sus definiciones de “líder destructivo de secta”.

93

criminales que poseen una enorme capacidad de sugestionar no sólo grupos pequeños sino también a grandes masas. Los líderes sectarios destructivos reemplazan la capacidad inteligente que abarca múltiples variables, por un fanatismo dogmático unilateral y rígido que imponen por repetición y coerción psicológica y física, ya que sus métodos son violentos, sometiendo al dominio por el miedo, vulnerando la libertad individual de las personas. Su violencia es proporcional a sus frustraciones o impotencias. A los líderes idealistas los siguen personas buscadoras de la verdad que buscan trascendencia de las opciones egoicas, materialistas y destructivas de los caminos laberínticos del mundo. A los líderes fanáticos destructivos los siguen personas de psicología muy débil y conflictuada que buscan por caminos regresivos identificarse con un gran padre autoritario que anule su capacidad de pensamiento y libre elección, y les de la seguridad de un marco de referencia fundamentalista en el que disolver su individualidad con todos sus tensiones y conflictos insolubles. Los integrantes de la Escuela de Conocimiento El Cántaro atestiguamos por experiencia de décadas en un proceso de aprendizaje que Mehir Indij, calumniado, injuriado por los medios de comunicación de manipulación oscurantista y abusado por la mala praxis jurídica con un pedido de captura, es completamente inocente de los cargos que le imputan, y afirmamos, en total salud mental y uso de nuestras facultades de sana inteligencia y discernimiento espiritual, que es un Sabio, no un líder sectario destructivo. Un educador, no un fanático adoctrinador. Un altruista, no un psicópata cruel y perverso. Un guía luminoso, no un impostor. Un faro de luz para quien quiera libremente seguir su enseñanza, no un falso mesiánico de móviles egoicos. Y creemos imperioso y fundamental que los argentinos reclamen la revisión de una ley que no solamente es ambigua sino extrañamente inquisidora: la ley anti-sectas. Sabemos que la fiscalía de Villa Carlos Paz, asesorada por el especialista en persecución de agrupaciones religiosas y filosóficas Héctor Navarro, va a tratar de demostrar por todos los medios que en la Escuela de Conocimiento El Cántaro se cometen delitos y que todos estamos coercionados psicológicamente para ser víctimas de ellos. Su fin último: promover la ley anti-sectas a nivel nacional. Una

94

ley de precario desarrollo, sin bases sólidas, ambigua, incapaz de diferenciar una secta destructiva de una escuela de conocimiento, capaz de violar numerosos derechos humanos en su necia aplicación. No negamos la existencia de sectas destructivas. No negamos la necesariedad de esta ley. Por el contrario, El Cántaro pasó de ser una presunta secta destructiva a ser la prueba viva de la inaplicabilidad de esta ley anti-sectas. Y estamos dispuestos a contribuir en su reforma y reglamentación, precisamente por tener el “conocimiento” necesario para un correcto discernimiento. No insistan en esta insensata búsqueda de delitos y métodos coercitivos donde no los hay. Abandonen la ambición y la insensatez. Han cometido vergonzosos desaciertos en este caso. Reconozcan el error y enmienden los daños cometidos y los que van a cometer: 1) Retiren los cargos en contra de Mario Indij, 2) Permitan la habilitación oficial del instituto educativo El Cántaro y, 3) Revisen la reglamentación de la ley anti-sectas sobre la cual peligran los derechos humanos de todos los ciudadanos argentinos. Ahorren tiempo, energía y por sobre todas las cosas DINERO. Porque de lo contrario, no nos dejan otra opción que apelar a una Justicia superior para enjuiciar a todos los involucrados en la causa, a cada uno por la corrupción que le corresponda, con el fin de sentar precedentes y proteger a otros ciudadanos que deseen hacer uso de sus derechos de libre pensamiento, expresión, culto, agrupación y creencia. Ustedes saben que carecen de pruebas de los supuestos delitos, a nosotros nos sobran las pruebas de su corrupción. No queremos desemplearlos, ni que pierdan sus bienes; nuestro fin es simplemente que se corrijan y que construyan lo que han destruido. Tampoco deseamos la cárcel a nadie, saben que la prisión no debería ser una morada permanente para ningún hombre. Allí la gente muere en vida, se desarrollan nuevas cualidades criminales para sobrevivir y se sufren heridas psicológicas irreparables que impiden una reinserción social sana. No obstante, queremos señalar la injusticia y los intereses creados detrás de esta persecución destructiva de gente sana. No vamos a dejar de perseguir el anhelo de tener con nosotros, libre y en ejercicio al maestro Mehir, un baluarte en la historia de la educación.

Todos los días suceden robos, fraudes, asesinatos, violaciones, mueren adolescentes por sobredosis… todos los días desaparece una jovencita en una red de trata de personas…Todos los días un funcionario corrupto acepta una coima, todos los días nos quedamos perplejos ante un policía que genera más miedo que un presunto criminal... Una penosa desazón argentina, tener que aceptar como forma de vida la inseguridad en las calles, los barrios, los propios hogares ¿qué sucede con el sistema judicial argentino? Hoy, como víctimas, nos toca cuestionarlo.

95

ALGO ESTA FUNCIONANDO MUY MAL

Carta de una mujer inocente

La crisis es más que obvia y muy profunda. Los delincuentes siguen con extraña impunidad, el sistema carcelario no es correctivo y los funcionarios se corrompen por dinero. Si existe aún un juez noble e imparcial, a él están dirigidas estas palabras.

¿

Qué le pasaría a usted si intentara llevar una vida lo más sana y digna posible, a pesar de la locura de este mundo, y un día, sin saber por qué, se lo llevaran preso? Una señora mayor, profesional, bióloga, que ama el estudio y la investigación, que hace años está buscando una fuente de paz en lo más profundo de sí misma, dedicada al arte plástico, que ama la naturaleza y cuida con dedicación su jardín, que trata de ser buena y amable con sus semejantes, idealista, con fe en la renovación de la cultura por una educación de vanguardia. No porta armas, no se droga ni alcoholiza, no cometió jamás ningún delito, no le hizo mal a nadie… Como pertenece a una escuela de conocimiento que es ciegamente tildada de “secta”, allanan su casa y se la llevan presa. ¿Es la época del Proceso? ¿Es acaso una militante política como aquellas que eran llamadas “subversivas” por la dictadura militar? No. Estamos en el 2011 y dicen que en democracia. Después de 20 días recién le toman declaración. Permaneció 48 días presa en el infierno social instituido llamado cárcel. Este es su relato, con pocos adjetivos, sólo hechos enumerados como una paradoja sin resolución, sin agregarle a la descripción del infierno arbitrario de la impunidad corrupta, otra cosa más que su dolor.

96



Hubo dos allanamientos al lado de mi casa y uno en la mía, ambos con gran despliegue: policías de civil, otros uniformados, otros encapuchados, con perros rastreadores. Las preguntas se caracterizaban por ser insidiosas y prejuiciosas. Al segundo allanamiento se suman tres mujeres policías. Antes de llevarme me trasladan a un cuarto donde me requisan. Soy transportada, escoltada por un oficial y esposada, hasta la comisaría de Carlos Paz. Una médica me hace preguntas de rutina y controla si tengo marcas y cicatrices en el cuerpo. Tengo que entregar todo aquello que sea metálico. Pido que me dejen tener el rosario pero no es posible. Todo parece un feo sueño… Me toman los datos y sacan las huellas. Veo las caras de los policías: algunas endurecidas, muy pocos parecían “normales”, “comunes”. Me da temor estar sola con ellos. Luego me llevan a una celda pequeña casi sin luz (solamente llegaba algo de luz desde un pequeño patio central), fría y húmeda. Por ser la única mujer me encierran con candado y los detenidos caminaban por el pequeño patio (sólo desde el patio se podía ver el cielo).El aire invernal entraba por éste hasta la celda. Todo me

asustaba, los detenidos, los policías. Desde este patio los detenidos veían mi celda, no tenía intimidad. Luego dos de ellos (un señor de edad y un joven) me traen dos frazadas; también me explican cómo tapar con una de ellas las rejas para aislarme del frío. Así pude estar fuera de las miradas extrañas a costa de perder la poca luz que podía entrar a la celda. Dana, la abogada, me traía abrigo, comida caliente, bebida. Pero comer me era muy dificultoso. Me esforzaba en hacerlo porque sabía lo importante de estar fuerte. Ir al baño tenía su complicación: tenía que gritar muy fuerte para que me escuchara algún oficial. Éste encerraba a todos los hombres en las celdas: “adentro, la señorita tiene que ir al baño”. El baño era un retrete sucio sin puerta ni luz. Mientras yo lo usaba el policía se quedaba a un costado. Fue una situación muy incómoda, me sentí denigrada. Volver a pasar por esta situación me daba mucha resistencia, por lo que trataba de tomar poco líquido. Para higienizarme diariamente pedía un balde con agua caliente. Esperaba el momento en que encerraban a los hombres para dormir. De los cinco días

97

que estuve en la comisaría de Carlos Paz sólo uno estuvo una oficial que me facilitaba las cosas y con la que me sentí más cómoda. Como no podía tener los anteojos me llevaron unas fotocopias ampliadas de los cuentos de “El Blanco Invisible”. La lectura era una caricia para el alma, me devolvía a mi verdadero mundo. Me devolvía cierta fortaleza, ordenaba mi mente. Calmaba el frío del alma. Este frío en lo corporal se manifestaba en un temblor difícil de controlar. Me explican que iba a tener que pasar el fin de semana en esas condiciones. Me parecía imposible de soportar. Una de las noches escucho muchos gritos, eran dos mujeres. Uno de los detenidos me dice que eran conocidas, una pareja de lesbianas con alto grado de locura y tal vez con SIDA. Y que tal vez tenga que compartir la celda con ellas. ¿Cómo afrontar esta nueva situación? Tengo palpitaciones, intranquilidad, miedo. Estas emociones duraron hasta el otro día en el que me entero que se las habían llevado a un “loquero”. Desde la celda escuchaba la conversación de los hombres sobres sus necesidades sexuales… Otra noche una pelea entre ellos que no llegó a agresiones físicas porque son separados del resto de los compañeros. Después de cinco días me trasladan a la cárcel de Bower. De nuevo firmo papeles, huellas, fotos… Mi sensación era que cada trámite burocrático sellaba cada vez más el encierro. Después de cinco días pude ver por primera vez el sol y sentir el calorcito de la mañana. Cuando llegamos a Bower me sorprenden las dimensiones, una pequeña “ciudad carcelaria”. Nuevamente datos, firmas, huellas. Soy tratada con cierta hostilidad. Me preguntan por el “abuso”, ¿hacia un menor? ¿Un familiar? “A nadie, no sé de qué se me acusa”. No me creen. Desconfían. Me llevan por galerías semicubiertas hasta uno de los pabellones. Camino por primera vez desde que empezó la pesadilla, respiro aire fresco, siento que recupero algunas unidades de vida. Me dan un reglamento penitenciario y me explican que si tengo algún problema con las carcelarias tengo que avisar a la “Burbuja” (lugar blindado donde hay una policía vigilando el pabellón). Esto me pone una alerta. La diferencia de impresiones es tan contrastante

98

con lo que hasta ese momento había vivido que siento una inesperada alegría. Tengo un colchón para dormir, sábanas limpias. Me baño (con agua caliente) por primera vez, un cuarto con inodoro y lavamanos limpio. Algo se relaja adentro. Eran condiciones más humanas. Pero una nueva situación me tensiona: tengo que convivir con aproximadamente 24 mujeres. Algunas caras son muy hostiles, algunas mujeres parecen hombres, cabezas rapadas, miradas poco amistosas… ¿Cómo sobrevivir? Lo primero que pensé fue en la supervivencia física. Observé a la que me parecía “más peligrosa”. Tal vez tendría que usar el lien chi para defenderme. Luego aprendí que había cosas peores que un enfrentamiento. Existían “castigos” y “celdas de aislamiento” para aquellas que producen alboroto. Decido que ante cualquier situación hostil no me iba a defender, esto era preferible a las sanciones disciplinarias. En una tercera instancia veo que yo no era la única que tenía miedo. Yo era un elemento nuevo y desconocido para ellas y esto también las atemorizaba. Miedo a sufrir por lo adverso, lo hostil. El miedo prehistórico de una humanidad instintiva, agresiva, desprotegida. No era en ellas donde estaba el peligro, tal vez el peligro estaba en mi mente invadida por todos los horrores y temores de una humanidad abismada. Después del primer impacto veo a través de la ventana de mi cuarto. Veo el cielo, las palomas, los teros y también los barrotes que me separan de ellos. Más allá un alambrado alto con alambres de púas, y más allá de éste otro igual pero electrocutado con torres de control alrededor. En un momento sentí cómo la supuesta coherencia se podría romper, estaba al borde la locura. Tenía los poemas, los repetía y repetía, ellos me rescataban. Convivía con la locura interna, no caer dependía de mi decisión... No conozco los códigos de convivencia, soy rechazada por un grupo (cada grupo psicológico ocupaba una mesa en el momento de comer). Alguien que vio la escena se me acerca y me dice que estoy invitada a su mesa. Y me da un plato para que pueda hacer la cola para recibir la cena. Luego una de las señoritas de la mesa me cuenta que acostumbran reunirse todas las noches para rezar. Acepto la invitación. Lo que parecía esperanzador no siempre lo era; entraban en llanto, en catarsis

por las acciones cometidas. Almas gimientes, estertores de almas abismadas…. Sí, estaba con el estrato más bajo de la humanidad. Dolor, mucho dolor. Convivía con el estrato más bajo de la humanidad. Asesinas de sus propios hijos, prostitutas, drogadictas… almas atormentadas, mujeres impotentes y violentas que se golpean contras las paredes o se hieren los brazos o se quieren suicidar con sus propias sábanas. En este abismo también hay “escala de valores” por los cuales había comentarios y cierta marginación hacia mí por ser de una “secta”. Cuando las turbulencias internas eran muy fuertes y ni el entrenamiento ni las plegarias me devolvían al centro, pensaba en mi maestro. Veía su alta dignidad, su espíritu de samurai que ningún temor doblega, su sabiduría. Mi alma lo reconocía y en ese reconocimiento me llevaba a otro mundo. Después de 21 días, llega el momento temido y esperado, el día en el que me iban a leer el expediente y me iba a enterar de qué se me acusaba. La noche anterior me avisan: -Salís de comisión (o sea, salía de la cárcel al tribunal). Era enfrentar a la ley sin justicia. En estas circunstancias (al igual que cuando llegaba el día de visita) tenía que pasar por requisas muy desagradables, que incluían mostrar el ano en una posición también muy desagradable. Viajo en una camioneta obviamente sin ventanas que me permitieran ver el exterior, ni luz, con las manos encadenadas, y además encadenada al asiento. Me sentí desprotegida y con un poco de as-

fixia, claustrofóbica. Me llevan a la fiscalía (único momento en el que me sacan las cadenas), otros papeles que firmar... sólo me tranquilizaba la presencia de mis abogados. Escucho el expediente en estado de “conmoción” (el mismo estado que se repitió cuando me llevan de mi casa, el mismo estado cuando me dan la libertad). Las situaciones vividas eran tan fuertes que rompían el orgullo, la soberbia… ablandaban mi corazón de muchos sentimientos desagradables. En este estado no había gusto – disgusto, ni juicios ni prejuicios. Mi corazón estaba más sensible, parecía haberme sacado corazas, costras. Podía sentir el corazón de cada hermano de camino cuando los repasaba con el recuerdo. Pero luego fui aprendiendo códigos de convivencia en la cárcel y empecé a “acomodarme”, y en ese acomodarme el corazón se defendía y rearmaba. Un sabor desagradable volvía a aparecer… ¿Cómo volver al estado anterior? ¿Cómo cambiar el estado de conciencia más allá del dolor? La última noche en Bower me avisan: “salís de comisión”. Otra vez la desagradable requisa, el traslado, las cadenas, los candados… me llevan a la fiscalía frente al fiscal:” –señora, está en libertad.” Salgo sin saber dónde estaba ni hacia dónde ir. Camino y camino sin rumbo… hasta que encuentro a la primera persona conocida y querida, Uriel... cada encuentro con un hermano era un calorcito para el corazón...”

99

REPARACION DE DAÑOS

Y sin mencionar todas las acciones no oficiales: amenazas a ex miembros de El Cántaro, a familiares y a discípulos, periódicos llamando para negociar la calumnia, robos o allanamientos encubiertos en la casa de los discípulos de Mario Indij, ladrones que lejos de llevarse objetos de valor o simplemente una garrafa para pasar el invierno revuelven papeles, se llevan el CPU pero dejan el plasma, rompen autos para llevarse celulares pero dejan el estéreo ¿No es raro? ¿Nadie se va a hacer cargo de estos daños? Que nos digan quién, cómo y cuándo van a resarcir lo que es posible resarcir. Y aún así...

La falta de pruebas, luego de cuatro meses, es la prueba más contundente: Mario Indij es inocente. ¿Quién lo hará recuperar el tiempo perdido? ¿Cómo se le devuelve la vida perdida a un hombre desterrado?

T

arde o temprano, desde donde está planteada la acusación, no pueden atribuirle ningún delito a Mario Indij ni prohibir la Escuela de Conocimiento El Cántaro. Mientas tanto, en busca de pruebas, siguen cometiendo abusos e incontables perjuicios ¿Y quién va a responder por eso? ¿Quién paga los delitos cometidos por esta injusta acusación? Cuando la Convención Americana sobre los Derechos Humanos dice en el art. 13 inc.2 que la libertad de prensa no está sujeta a censura pero sí a las responsabilidades ulteriores cuando afecta la reputación de los demás, ¿Significa que La Voz del Interior y todos los medios de comunicación que injuriaron el nombre y la reputación de Mario Indij van a pagar con dinero por eso? ¿Cómo se paga un bien intangible como la reputación de una persona por demás inocente, un ciudadano intachable que no debe ni un solo impuesto y nada a nadie, de una conducta social ejemplar que cualquier ciudadano de Carlos Paz puede atestiguar? ¿Cómo se paga eso? ¿Hay un monto de dinero equivalente a toda una vida de trabajo sobre sí, educación y perfeccionamiento del ser ahora embarrado por una denuncia infame? ¿Quiénes se hacen cargo? ¿Quién responde por el quiebre económico sufrido por el acusado que tuvo que detener su actividad económica y vender sus bienes para pagarle al abogado que demuestra su inocencia? ¿Quién responde por todo los ahorros que sacrificó para sos-

100

tener a su familia cuando le era imposible seguir trabajando? ¿Quién responde por los ahorros despilfarrados que le permitieron tener la libertad que la justicia injustamente no le permitía tener? ¿Quién paga por los daños que sufrió su salud? ¿Cómo se paga la vida de una persona? ¿Quién responde por los abusos de poder autorizados por la fiscalía de Villa Carlos Paz a cargo de Ricardo Mazzuchi quien tuvo a una mujer inocente detenida durante 48 días en una cárcel? ¿Quién responde por el daño psicológico sufrido por Miriam Macías quien en condiciones deplorables y sin haberle tomado indagatoria ni explicado el motivo de su prisión fue privada de su libertad?

Aún así, la calumnia sobre el nombre de Mario Indij se ha sembrado ya en la opinión pública. Así La Voz del Interior publique en primera plana del domingo y sus tres páginas consecutivas una nota hablando bien del señor Indij y el Cántaro. Así Telefé vuelva a pasar nuestros videos sin subtítulos morbosos y promocione nuestra escuela. Así Canal 13 diga que se equivocaron al decir que era un degenerado que trasmitía enfermedades venéreas y publicite nuestros seminarios de educación sexual. Así vaya el mismo periodista Sergio Carreras a pedirle disculpas a la familia del acusado, a su esposa y a sus hijos, aun así la herida psíquica y moral está hecha.

¿Por qué tiene un ciudadano que hacerle juicio (con todos los gastos que ello implica) a un funcionario público para que sea ético, honesto, correcto y no corrupto? ¿No debería el Estado hacer este juicio? ¿Por qué un ciudadano tiene que hacerle un juicio a la provincia y al estado por ser víctima de una legislación deficiente? ¿No le corresponde al poder legislativo revisarla espontáneamente? ¿Por qué un ciudadano debe hacerle juicio a un abogado, supuestamente defensor de la ley y la democracia, para que no siga atentando contra la misma? ¿No es responsabilidad del Estado poner en tela de juicio su matrícula y privarlo de ser necesario de tal infame ejercicio? ¿Por qué un ciudadano al que ya lo han despojado de todos sus bienes materiales –para no hablar de los intangibles- a causa de esta injusticia tiene que seguir invirtiendo de su bolsillo para que este país sea JUSTO y no perjudique a otros? Esta pareciera ser la regla implícita: si quiere un país mejor hágalo usted mismo. ¡Pero ojo que si no nos gusta lo que hace lo mandamos preso por abuso sexual!

Aún así, la legislación sobre abuso sexual, que ante una denuncia permite la prisión preventiva por tiempo indefinido de un hombre que puede ser inocente y cuya culpabilidad no se puede probar, va a seguir existiendo.

¿Quién responde por los daños sobre el nombre de Miriam Macías injuriada públicamente?

Aún así fiscales como Ricardo Mazzuchi que no respetan los límites que la ley impone sobre su poder van a seguir en ejercicio.

¿Quién se hace cargo de los abusos de poder del fiscal de turno? 18 allanamientos vacíos, pertenencias y herramientas de trabajo confiscadas, invasiones a la privacidad, teléfonos intervenidos, casillas de e-mail intervenidas, patrulleros en las puertas de nuestras casas, gente detenida, expedientes perdidos y demorados, interrogatorios violentos y tendenciosos, pedido de captura sobre una persona acusada de un crimen que no cometió y sin pruebas que respalden las acusaciones...

Aún así abogados como Héctor Walter Navarro van a seguir luchando por mandar a la cárcel a los que ellos consideran criminales y no a los que verdaderamente lo son, aún si esto significa pasar por arriba de la ley (como lo han hecho), aún si esto significa buscarle la trampa a la ley (como es el caso de la denuncia por abuso sexual), aún si esto significa sacar una ley nueva para que se haga su voluntad y no la de un gobierno democrático (como lo es la ley anti-sectas).

101

¿JUSTICIA?

SOBRE LA IDEA DE JUSTICIA

Esta es la carta de un abogado, cercano a la escuela y al maestro Mehir, en la que analiza la justicia a la Luz de la Verdad.

L

uego de mis largos años de ejercicio de la profesión como abogado y considerado por las leyes como auxiliar de la justicia, debo confesar que la duda ha habitado en mí, respecto de eso que llamamos JUSTICIA…hoy no me caben dudas que ha sido siempre una incomprensión de su más íntima naturaleza. Haber aprendido con Mehir la simbología más excelsa ha logrado desentrañar y desbaratar aquellas dudas que motivaban sin rumbo los pensamientos más escépticos, gracias a la reflexión, anotación y a poner las cosas en su verdadero orden sin automatismo a control remoto. Enfocado en la imagen de la Justicia: una dama con los ojos vendados, con una balanza en su mano izquierda y una espada en su diestra, me da a pensar y reflexionar en los más antiguos arcanos y en aquellos arquetipos que desde muy antiguo así fueron representados. La venda que exige la abstención de los sentidos de: “este me agrada o este me desagrada”, de los prejuicios y de los que otros dicen, inventan, fantasean y sobre todo de los hoy formadores de opinión con datos al boleo, amparados en lo que pareciera ser un invulnerable derecho casi divino de libertad. La balanza en su mano izquierda y una espada en la derecha como aparentes opuestos pero complementarios al fin, en un equilibrio absoluto dado

102

Así como lo hizo Confucio en la antigua China, para nosotros también ya es hora de “rectificar” los nombres.

C

por esa contención que hablaba recién y, por sobre todo como superior, la inteligencia que se eleva más allá de las situaciones enmarañadas y confusas que oscurecen el más mínimo juicio. La severidad y la misericordia equilibradas por la indulgencia. La imagen de la VERDAD. Ahora bien, esto, como dijera anteriormente, representa el arquetipo. Pero también está el opuesto como en todo orden, y si está la VERDAD, está inevitablemente la MENTIRA. Cuando la venda de la dama llamada JUSTICIA y VERDAD se saca para que el agrado o desagrado, el prejuicio y la corriente de opinión circule y abra sin más el juicio sin JUSTICIA, se desenvaina la espada con crueldad y con la frialdad de la insensibilidad, sin corazón, sin inteligencia y la balanza ya es el argumento obsceno que encuentra su fundamento en el orgullo que no permite reconocer que fue víctima de su propia debilidad conformando el DESEQUILIBRIO. Pero así y todo la VERDAD es fuerte y logra quebrar el brazo de aquel que como verdugo de turno empuña la espada para castigar sin razón, y permitir que otro con mejor tino ocupe el lugar de lo que es inmutable y permanente que es la JUSTICIA.

uando vemos lo que está sucediendo con las calumnias y la orden de captura al sabio Mehir, el descrédito generalizado al que lo han condenado los medios, el hecho inconcebible del encarcelamiento de Miriam Macías, nos duele en el alma seguir hablando de la “justicia” y nos resulta imprescindible intentar llamar a las cosas por su nombre. A su vez nos preguntamos ¿habrá dentro del sistema judicial un hombre libre de condicionamientos políticos, un hombre que ame la verdad por encima de los intereses creados, en fin, un hombre justo? Si observamos el tradicional símbolo de la justicia, podemos ver la ley del equilibrio cósmico y humano plasmada en esa balanza. Cuando una acción rompe ese equilibrio vuelve sobre uno mismo la reacción que se puso en movimiento. En esta idea de lo justo como equilibrio se basaba toda la tragedia clásica griega que intentaba demostrar poniendo en escena los mayores laberintos de la condición humana, las consecuencias de romper el orden, la mesura, la medida justa de las cosas. Intentaba suscitar en los espectadores la catarsis o purificación anímica necesaria para volver a reencontrar el equilibrio perdido. La justicia era la ley inmanente del cosmos: el logos. ¿Cuál es la diferencia entre la venganza, el ejercicio del rencor o el odio y la justicia?

La Justicia en realidad es la ley de retribución donde cada uno atrae indefectiblemente los efectos que pone en movimiento con sus jugadas o acciones en el teatro de la existencia. Si uno actúa con odio o rencor, por necesariedad, llegarán conmociones en la vida que teatralizarán afuera lo que se puso en movimiento por ideas equivocadas, obsesiones, ideas fijas, que vienen de no poder asimilar ciertas impresiones. Cuando una verdad no se puede metabolizar se produce una especie de indigestión anímica o toxicidad. Queda circulando un veneno, pensamientos y sentimientos equivocados, una mácula en el alma, que atrae finalmente en el mundo de los aconteceres una conmoción, una escena donde la sabiduría de la vida misma intentará descristalizar a través del sufrimiento esos estancamientos anímicos que impiden la evolución natural del ser. ¿Cómo se resuelve un caso de calumnias o injurias como el que está viviendo el maestro Mehir y la Escuela El Cántaro? Nosotros, en nuestra Idea de Justicia, creemos en la fuerza motriz o dinámica del arrepentimiento, como parte de la conciencia moral que debe ser despertada para reencontrar el equilibrio perdido, y no creemos en las penalidades abusivas del encarcelamiento. No desearíamos ni a nuestro peor enemigo, el que intenta destruirnos, un sistema tan retrógra-

Sergio Casado, Abogado.

103

do y oscuro como un encierro prolongado. Creemos que cuando existen delitos reales que agravian a la moral verdadera debe haber una enseñanza y experiencia correctiva para que la persona tenga una posibilidad de redención. El sistema carcelario actual fija y potencia la oscuridad irredimida del sujeto que erró la senda esencial del hombre. La cárcel actual es un hábitat para todos los abismos del alma, un encierro asfixiante en lo más abyecto de la condición humana, donde no se deja entrar la luz de la esperanza, el amor y la fe. Donde no se deja actuar la luz de la redención. Los antiguos decían: “las cárceles no deben ser moradas permanentes para los hombres”. No desearíamos jamás la cárcel para aquellos que hoy están mintiendo y calumniando como tampoco usaríamos la calumnia para defendernos, actuando de la misma manera reprochable de la jauría ciega. Sabemos que los que hoy injurian con tanto veneno al maestro Mehir van a vivir sus propias consecuencias desventuradas sin necesidad de que nosotros forcemos nada al respecto. Jamás nos guiarían el odio, la violencia, la venganza. Lo que nos guía es el intento de contemplar las leyes que sustentan todos los fenómenos, y adiestrarnos en fluir con los aconteceres comprendiendo el Sentido. Por eso, la adversidad para nosotros es una forma de fortalecimiento en la fe, buscando un estrato muy profundo del alma que es superior a cualquier contingencia. Es la constancia que es más fuerte que el destino. Es la paciencia que aguarda con tranquila fortaleza, basada en la luz de la verdad. Es la inocencia, la certeza de lo recto que concuerda con la voluntad del Cielo. Este es un doble llamado: a aquellos seres que erraron mal su camino, para que busquen un sincero arrepentimiento y pongan en movimiento otros efectos para su propia vida. Que recuerden que es muy grave la Mentira. Es una traición a su propio Espíritu. Que cuando uno, por su necedad, se choca contra su propio muro carcelario, no puede escaparse de verse en el espejo de la retribución por el sufrimiento. Y por otra parte es un llamado a la “justicia”, una invocación para que responda un hombre auténticamente justo. El maestro Mehir es completamente inocente de los cargos que se le adjudicaron y es im-

104

perativo que se retiren esas acusaciones falsas y esa orden de captura. No sólo para que pueda libremente regresar al país sino por la necesidad imperiosa de concreción de una obra importantísima para el bien de la humanidad: el instituto educador El Cántaro... La señora Miriam Macías es completamente inocente y estuvo en la cárcel “secuestrada” y su alma fue seriamente agraviada por un encierro infame e injusto... Señores representantes de la Justicia: los antiguos en las culturas sagradas le daban una alta investidura a su función, era una mediación entre las leyes del Cosmos y las leyes de la tierra, para restablecer el equilibrio moral que se había dañado. La Justicia no estaba separada de la Verdad, el Bien, la Armo-nía. En las culturas materialistas y escépticas, cuando las leyes no se sustentan en las verdades objetivas y universales del alma humana, y los jueces no tienen capacidad de adentrarse en las profundidades del Amor y las costumbres auténticamente morales, no son legítimos a los ojos de un sabio. Sepan todos: un sabio no huye, se retira del mundo, cuando el mundo intenta destruirlo. Y esa retirada es signo de fortaleza, para provocar, gracias a su inaccesibilidad, estar más allá del avance de la oscuridad. Señores jueces: este es un llamado que también quiere ser un voto de confianza en su honorabilidad y en la capacidad de redimir todo este escarnio. Esperamos sinceramente que alguien que tenga poder para ayudarnos escuche este llamado y haga retornar la luz al sitio de la Justicia. Que algún auténtico mediador demuestre que en el sistema puede haber conciencia, rectitud, capacidad de enmendar los errores, voluntad para el Bien y amor a la Verdad. Le pedimos a ese ser que coloque en los platillos de la balanza los testimonios de las 4 o 5 personas convocadas para calumniar en esta trampa, y los cientos de testimonios que van a pesar en el otro lado de las cosas, testimonios con nombre y apellido, dispuestos a dar fe de la inocencia absoluta del Maestro Mehir y que jamás fueron solicitados para hacer ninguna declaración. ¿No es evidente que no hay justicia alguna? ¿Habrá alguien dispuesto a restablecer el equilibrio? Porque una cultura donde se llama justicia a la impunidad de un poder corrupto está destinada a sucumbir en su propia iniquidad. Es necesario llamar a las cosas por su nombre. Justicia es Verdad.

Presentación realizada al fiscal general de la Provincia de Córdoba de los discípulos de la Escuela El Cántaro. Presentada en la carpeta que dejamos el 19/9. Sr. Fiscal General de la Provincia JORGE SANTIAGO PEREZ Y RAINIERO PALACIO, abogados defensores de la Sra MIRIAM M. MACIAS, en la causa “INDIJ DARIO MARIO Y OTRA p.ss.a Abuso Sexual” Expte nº 294.373, que se tramitan por ante la fiscalía nº 2 de la ciudad de Villa Carlos Paz, y los abajo firmantes manifiestan: Que atento las irregularidades del proceso llevado adelante por el Sr. Fiscal Ricardo Mazzuchi se interpuso formal denuncia por ante esta Fiscalía General por retardo de justicia enmarcando un supuesto del art. 146 del CPP. Que venimos a solicitar PROTECCIÓN Y JUSTICIA ante la persecución ideológica a la que estamos expuestos increíblemente en éstos tiempos y en esta tierra de paz y libertad. Que, previa la poco seria e irresponsable publicación del 12 de Junio del corriente por parte del periódico La Voz del Interior, que diera pie a la orquestada y triste intervención del Fiscal Mazzuchi en semejante falacia, hemos recibido amenazas vía e-mail de un tal Lotso quien no se ha dado a conocer, pero suponemos de las personas que actúan bajo tal seudónimo. Como también conocemos del paso a paso de los testimonios que guió el abogado Navarro con colaboración de la Red de Apoyo para Victimas de Sectas (RAVICS) los que “casualmente” coinciden con sus argumentos de sectas destructivas, sacando de contexto ideas y hechos que luego plasman en La Voz del Interior; quien hace 20 años atrás ya intentó desacreditar nuestra Escuela de Conocimiento, encontrando eco en el “periodista” Carreras, quien sumándose a la orquesta seguramente viendo la posibilidad de reconocimiento periodístico dejando de lado toda ética y responsabilidad que debiera llevar la publicación de una nota que va a afectar el nombre, el honor y la vida no de una persona sino de un gran número de familias, mantiene comunicaciones previa la publicación del 12 de Junio del corriente advirtiéndonos del riesgo de la publicación para luego comunicarse otros miembros del mismo periódico, entre ellos el superior jerárquico de Carreras, ofreciéndonos “negociar” (y no la réplica) a lo cual obviamente nos negamos porque no acostumbramos a “negociar”, la verdad no negocia con la mentira. Es así como publicada la grotesca nota, y adelantada la misma, para que estando de turno el Fiscal Mazzuchi pueda intervenir con su lamentable circo, no queda muy claro si inicia todo el día 15 de Junio por diligencia o para tapar la nota publicada de la remisión efectuada por el Fiscal Caballero a la Fiscalía Anticorrupción de una actuación para que sea investigado por el supuesto delito de “omisión de los deberes de oficio” y así olvidando por completo que el poder que se le atribuye es para representar y servir a la Justicia y no a la búsqueda de créditos personales a cualquier costo, con un accionar que más bien parece el hombre manos de tijeras que el de una persona con un raciocinio tal que denote responsabilidad y sapiencia en el ejercicio de las facultades con las cuales ha sido investido; de este modo rápidamente inicia una “investigación” de oficio basado en no se sabe qué porque lo mencionado en las notas periodísticas desacreditan la persona del Maestro Mehir y a nosotros como sus seguidores pero no mencionan la comisión de delito alguno salvo que exista un nuevo código penal del cual ignoramos su existencia. Es así que con nueve primeros allanamientos sin resultados que indiquen la comisión de delito alguno, pero puesta en marcha la parafernalia, en base a los dichos en un testimonio se decide la detención de Miriam Macías mujer ya mayor con una vida tranquila y la orden de captura de nuestro maestro, el Sabio Mario Indij, cariñosamente llamado por nosotros Mehir, un hombre de perfil bajo, que no buscó el reconocimiento público sino simplemente enseñar a quien quiera acercarse, lo que él mismo practica y de lo que tenemos como ejemplo su propia vida, absolutamente co-

105

rrecto, idealista, de conducta intachable, generoso, amoroso y firme en la práctica de lo verdadero, lo ético real y no convencional acomodaticio a conveniencia, prolijo en cada aspecto de su vida, por lo cual seguimos su enseñanza, somos también idealistas y vemos la necesidad de una vida más real y plena en la que se rescaten los verdaderos valores tan olvidados y necesarios en nuestra sociedad llena de frustraciones, odios, resentimientos, abandonos, irresponsabilidades y de oportunistas; por eso nos resulta inexplicable que el sistema de justicia sea usado por esta orquesta disonante y bajo la infame carátula de “supuesto abuso sexual con acceso carnal”, lo que no podría ser más supuesto que en la mente retorcida de quienes por despecho y sabiendo del delicado estado de salud de nuestro maestro buscan su muerte, pues bien saben que por su idiosincrasia no resistiría un segundo en prisión. Se involucra a Miriam de manera ridícula e injusta causándole un perjuicio irreparable en sus derechos y en su psicología, detenida un día viernes sobre el mediodía, a 2 días de comenzar la feria judicial, pareciera estar todo milimétricamente calculado para que invocando tiempos procesales, feriados, “fallas administrativas” como traspapelarse el expediente, hacer un pasamanos sin decisión entre fiscalía y juez de control, todo tenga como resultado que esté 21 días sin ser indagada, no es necesario mencionar el derecho vulnerado ni la norma procesal infringida; y un total de 48 días bajo el sistema carcelario, experiencia traumática el que deja secuelas irreparables en la psiquis y en el alma. Más allanamientos sin resultados, 18 en total, somos “custodiados” por patrulleros y policías de civil, luego de su “custodia”, “robos” en nuestras casas de tan solo computadoras, teléfonos en su mayoría de los más básicos, agendas; evidentemente una nueva generación de delincuentes a los que las joyas y el dinero no les interesa… policías apostados en una casa donde se celebra cumpleaños de niños, los cuales como tales piden explicaciones de tal presencia…, una embarazada que va con su niño a hacerse un control médico y de pronto se ve rodeada de uniformados hostigándola con preguntas cuyas respuestas desconoce. La búsqueda en el lugar de trabajo de una docente en reiteradas ocasiones, la cual por temor a un encierro injusto visto lo acontecido con Miriam Macias, decide exiliarse, perdiendo de este modo su trabajo. Existen datos que ingresan a la causa por llamadas de personas dejando tan solo un nombre y que podríamos llamar desconocidas, o tal vez para nosotros desconocidas, por ahora, personas estas que dejan un listado de diez 17 números de nuestros teléfonos para ser investigados. Se han registrado intentos de jackeo de claves de ingreso de internet de nuestras cuentas bancarias, o las recurrentes anomalías en nuestras líneas de teléfonos, serán pinchados sin la debida orden legal?, esto es a los fines de mencionar el proceder investigativo con el cual convivimos a diario y hacer notar que se está intentando la CONSTRUCCIÓN de la causa, con esta PRUEBA que pretenden incorporar por la ventana. O acaso pretenden probar un abuso sexual por teléfono y la web. En las notas periodísticas se mencionó a la parrilla “Lucero del Alba” que era fuente de trabajo para siete personas con sus respectivas familias, y tuvo que cerrar. También fue mencionado el negocio “Chipa” que se vio perjudicado en las ventas. El criterio impuesto por la fiscalía interviniente al momento de receptar los testimonios dista mucho de una conducta conforme a los parámetros constitucionales y legales para una investigación en tiempos democráticos, hecho este que fuera denunciado y puesto en conocimiento tanto de la Cámara de Acusación y esta Fiscalía General por intermedio de los fundamentos de la Apelación interpuesta, y que en este caso se reitera, que quien tiene el deber de esclarecer la verdad y llevar adelante la investigación no puede intentar torcer la voluntad del declarante en su testimonios y pretender que manifieste algo distinto de lo que es su voluntad declarar por más que esto sea contrario a la subjetividad de quien le pretende extraer los dichos. A los fines de confirmar lo manifestado se encuentran a disposición las testigos Yanina Igich y Mariana Gomez, y se deja a salvo para su oportunidad dilucidar el accionar del Sr. Mazzuchi ante el testimonio de las supuestas víctimas. Tal vez sirva de entremés leer

106

los muy formados ANTICIPOS de los testimonios de estas víctimas que se encuentran acompañados por el Dr. Navarro y que constan en autos. Mediáticamente, para alimentar el asunto nos mezclan con el maestro Amor, con consumo de drogas, con rumanos tantra, y nada de eso tiene que ver con nuestra idiosincrasia… es evidente que no saben diferenciar una secta en sentido peyorativo como lo usara el Fiscal Mazzuchi en la nota a cadena 3, de lo que es una Escuela de Conocimiento como es el verdadero título en su contenido semántico, filosófico axiológico.… ha cobrado trascendencia pública nacional, como la causa de la Secta del MAESTRO MEHIR. La vorágine periodística, escrita, radial y televisada, ante esta MEGA CAUSA SIN FUNDAMENTOS SÓLIDOS comenzaron a hacer mención de un grupo acusado de ASOCIACIÓN ILÍCITA, ESTAFA, REDUCCIÓN A LA SERVIDUMBRE. Asimismo en los noticieros nacionales (Telefe Noticias, A24, Canal 13) se hacía mención en off de estos delitos mientras se proyectaba una filmación con integrantes de la ESCUELA DE CONOCIMIENTO DEL MAESTRO MEHIR (Mario Dario Indij)… ¿Puede usted imaginarse cuán afectadas se encuentran nuestras vidas? No sabemos bien si estamos dentro de una película de terror, un juego tenebroso o qué… una causa justa no necesitaría de tal circo mediático ni buscar desintegrar una escuela por medio del terror al mejor estilo medieval de la época inquisitorial, lo intentó hace 20 años atrás el mismo irresponsable medio periodístico “La Voz del Interior” solo que en ese momento las órdenes fueron de otro Fiscal y la causa no prosperó porque simplemente no hay nada de delictivo en nuestras vidas… ¿Cómo se explica que una institución que pretende defender a víctimas de sectas destructivas utilice métodos dictatoriales?, no es posible defender las libertades individuales haciendo todo tipo de ilegalidades para encarcelar a un hombre inocente a sabiendas de que no tienen la más mínima posibilidad de demostrar delito alguno tan simplemente por su inexistencia. ¡BASTA YA!, pedimos PROTECCION Y JUSTICIA, ¡CUÁNTO MAS DEBEMOS SOPORTAR ÉSTA SAÑA!!!... SOMOS IDEALISTAS NO DELINCUENTES, desde cuándo el sistema de justicia se dedica a la persecución de idealistas y no de delincuentes…? Vivíamos de manera tranquila, aprendiendo de una filosofía excelsa a despertar los valores de verdad, justicia, ética, moralidad, dignidad, prolijidad en cada ámbito de nuestras vidas, a ser mejores hombres y mujeres para bien de nuestras familias y por lo tanto de nuestra sociedad, para aportar nuestro granito de arena desde nuestras propias vidas, saneando nuestros vínculos, aprendiendo a ser más amorosos con el prójimo… ninguna idea que se jacte de ser verdadera puede ser impuesta, no hay lavado de cerebro que lo haga posible, la verdad se aprende por voluntad de hacerlo y se trasmite sólo con el ejemplo en uno mismo, lo que uno quiere o no ser sólo depende de la propia elección libre, con pleno respeto por los demás, con una auténtica capacidad crítica no inducida… vivíamos tranquilos… aprendiendo las ideas de quien las ha hecho carne en su propia vida…, nos lo han arrebatado, estamos temerosos ante la incertidumbre de lo que puede suceder, con lo hasta aquí relatado de lo que acontece día a día, no sabemos que esperar de quienes hasta ahora se no se rigen por la ley, como en los tristes tiempos de dictadura ya vividos por nuestro país y que uno piensa superados pero subrepticiamente perpetuados por quienes evidentemente creen más en métodos despóticos que en la verdadera ley, consensuada, sometida a un análisis de mentes lúcidas antes de su implementación; si bien padecemos esta situación estamos Firmes, sabemos cuál es la verdad y creemos que hay guardianes de esa ley consensuada, de un sistema cuyo objetivo primero es la protección integral de los hombres de bien, y así nos consideramos, hombres de bien e idealistas, nunca buscamos perjudicar a ser alguno, siempre buscamos y seguiremos buscando el modo de ser cada día mejores ciudadanos y beneficiar a quien quiera beneficiarse con lo aprendido por nosotros de un ejemplo vivo como es nuestro maestro y que sabemos, por aplicarlo, que es bueno, y por eso ahora queremos el apoyo para la construcción del Instituto El Cántaro al que tendrán la posibilidad de acceder a las disciplinas que nos han sido enseñadas, mediante las cuales uno logra liberarse de condicionamientos y frustraciones y tener una mayor confian-

107

za en sí mismo y un modo único de manifestarse de acuerdo a su propia naturaleza a través de la música, el arte, la danza, las artes marciales… Somos una secta constructiva, una Escuela de Conocimiento, NO una secta destructiva, nadie es sometido a “Sesiones de largas horas diarias para reprimir la crítica consciente”, al contrario se promueve el libre pensamiento, un razonamiento crítico, valoración de uno mismo no como ego autocentrado sino con capacidad para contemplar la posibilidad de beneficiar a otros. Ahora bien, ¿cuánto tiempo más se va a sostener el capricho y saña de quien decide seguir con esta gran falacia, involucrando recursos humanos y técnicos, que todos como ciudadanos solventamos con nuestros impuestos? ¿Quién va a reparar el daño sufrido por nuestro Maestro en su buen nombre y prestigio ante la opinión pública? ¿Qué garantías tenemos cuando él regrese? ¿Será tan claro para alguien como para nosotros que se persigue al Sr. Indij por una causa irreal? Que se ha buscado el artilugio del supuesto abuso y no se ha probado nada al respecto? Hasta cuándo se debe tolerar la INJUSTICIA de la justicia? En definitiva, se solicita audiencia a los fines de que tome conocimiento personalmente de la causa, examine las actuaciones y requiera informes de los métodos investigativos que se llevan a cabo, de la persecución ideológica de la cual somos víctimas, y que tan solo somos víctimas de un Fiscal que inicio un proceso judicial y que se lleva adelante irregularmente, y no del Noble que nos instruye y nos ayuda a perfeccionarnos a diario, quien es nuestro Maestro el Sr. Mehir. Para poner en conocimiento que es de nuestro mayor interés dicte el inmediato sobreseimiento al Sr. Indij por el Supuesto e Irreal Abuso Sexual y se brinden garantías legales a su regreso. SÍNTESIS DE LO OCURRIDO: 1- AMENAZAS previas a la publicación, con comunicación de Sergio Carreras y posterior ofrecimiento de “negociación”. 12 de Junio publicación difamatoria en La Voz del Interior. 2- 15 de Junio Inicio de Investigación de Oficio por el Fiscal Mazzuchi, Allanamientos (9) con resultado negativo. El caso es difundido Mediáticamente a nivel nacional. 3- Presentación de Habeas Corpus a favor de Mario Darìo Indij y su familia. Es contestado un mes después manifestando que “se ha tornado abstracto”. 4- La fiscalía toma Testimonios preparados con argumentos de la Red de Apoyo de Victimas de sectas de Puerto rico (RAVICS) en base a los cuales el Viernes 1 de Julio al mediodía se detiene a Miriam Macías y se libra orden de captura de Mario Indij. 5- Errores procesales de fondo y forma. a) Detención y orden de captura por delito de acción privada sin denuncia. b) Se toma indagatoria a los 21 días de detención por orden del juez de control de feria. Entre otros errores denunciados. 6- Presentación de Pronto Despacho y Denuncia por retardo de justicia en solicitud de excarcelación y definición de prisión preventiva. 7- Más allanamientos con resultado negativo –vigilancias constantes a varios de nosotros por patrulleros y policías de civil. Extraños “robos” en casas y sitios públicos de agendas sadas, notebooks y teléfonos de poco valor económico. Intentos de jackeos a cuentas bancarias. 8- Presión a testigos e incorporación al expediente de información contenida en los teléfonos “robados”. 9- Liberación de Miriam Macías por falta de mérito con fundamentos desconocidos por encontrarse bajo secreto de sumario. Esto luego de 5 días de detención en la comisaría de Villa Carlos Paz y 43 días de prisión en Bower. 10- Solicitud de varios Habeas Corpus. Recusación del Fiscal Mazzuchi.

108

Get in touch

Social

© Copyright 2013 - 2024 MYDOKUMENT.COM - All rights reserved.