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Biblioteca
(nuestros)
pero sí todos los que están. Con motivo del Día Internacional de la Poesía, (21 de marzo), desde la Biblioteca del Instituto nos propusimos editar este folleto que tienes en las manos, con nuestros diez principales poemas de amor. 1.- Te quiero (Mario Benedetti) 2.- Advertencia (Felipe Benítez Reyes) 3.- Nunca más volviste (Almudena Guzmán) 4.- Para vivir (Pedro Salinas) 5.- Puedo escribir... (Pablo Neruda) 6.- ¿Por qué...? (Ernesto Noboa) 7.- ¿Recuerdas aquel cuello...? (Miguel Hernández) 8.- Llora mi corazón (Anónimo bereber) 9.- La noche oscura (San Juan de la Cruz) 10.- Vida (José Hierro) 11.- Balada o epigrama (Luis García Montero) 12.- Peter Punk (Leopoldo Mª Panero) 13.- Rima XVII (Gustavo A. Bécquer) 14.- Pienso (Gloria Fuertes) 15.- Pasaré por Piazza di Spagna (Cesare Pavese) 16.- Ciegamente (Blas de Otero) 17.- Si el hombre pudiera decir lo que ama (Luis Cernuda) 18.- Soneto LVII (Francisco de Quevedo) 19.- Desmayarse (Félix Lope de Vega) 20.- Razón de amor (Leoplodo Alas) 21.- Háblanos del matrimonio (Khalil Gibran) 22.- Libre te quiero (Agustín García Calvo) 23.- El último amor (Vicente Aleixandre) 24.- Soneto V (Garcilaso de la Vega) 25.- Ahuyentemos el tiempo (Gioconda Belli)
Ya sabemos que te preguntarás "¿y por qué estos, y no otros?" La explicación es sencilla, pero el proceso complicado: como la oferta de poemas de amor es, afortunadamente, tan amplia, no ha habido más remedio que cortar por algún lado. En primer lugar hicimos una selección de 25 poemas que nos gustaban a las personas del equipo de Biblioteca. (Son los que tienes en la página de al lado). Después imprimimos un folleto con estos 25 poemas en el que, intencionadamente, no se indicó el nombre del autor, para que no hubiera influencias por fama o época. Por último, todos hemos podido votar a los cinco que más nos gustaban. Los poemas más votados figuran en las páginas que siguen, por orden de votos, formando nuestra "lista de éxitos", como la de "los 40 principales" a los que, por cierto, pedimos disculpas por haberles copiado el logotipo sin permiso. Nuestro objetivo es fomentar la lectura entre los jóvenes, por lo que hemos utilizado una imagen conocida por los estudiantes y "con gancho". S ólo nos queda desearte que disfrutes con la lectura de "(nuestros) 10 principales poemas de amor" tanto como nosotros hemos disfrutado preparándola. El equipo de la Biblioteca
Pablo Neruda
1904-1973. Poeta chileno, nacido con el nombre de Neftalí Reyes Basoalto. Recibió el premio Nobel de Literatura en 1.971. “Poeta más cerca de la muerte que de de la filosofía, más cerca del dolor que de la inteligencia, más cerca de la sangre que de la tinta”. Así presentaba García Lorca a su amigo chileno. Pablo Neruda comenzó desde muy joven a escribir poesía. Su producción poética estuvo dominada, en una primera época, por una transición del modernismo a formas vanguardistas influidas por el creacionismo de Vicente Huidobro. Progresivamente, sus poemas experimentaron una transición hacia formas herméticas y un tono más sombrío, que se transformaría al final de su vida en una poesía de gran intensidad lírica y simplicidad formal. El conjunto de su obra fue reconocido con el Premio Nobel de Literatura. “Puedo escribir los versos más tristes esta noche” es el poema número 20 de su libro Veinte poemas de amor y una canción desesperada (1924). Poco después publicó Residencia en la tierra (1925-1933) tras su estancia como cónsul en Extremo Oriente. Después seguirán años de intensidad vital y abundancia poética, siempre mantenida por un sentimiento de unidad con el cosmos y con el pueblo americano (Canto general, 1950) En la biblioteca: Veinte poemas de amor y una canción desesperada, Cien sonetos de amor, Odas elementales, Los versos del capitán, Canto general. También puedes encontrar poemas suyos en varias antologías de poesía que encontrarás en la biblioteca.
Puedo escribir... Puedo escribir los versos más tristes esta noche. Escribir, por ejemplo: "La noche está estrellada, y tiritan, azules, los astros, a lo lejos". El viento de la noche gira en el cielo y canta. Puedo escribir los versos más tristes esta noche. Yo la quise, y a veces ella también me quiso. En las noches como ésta la tuve entre mis brazos. La besé tantas veces bajo el cielo infinito. Ella me quiso, a veces yo también la quería. Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos. Puedo escribir los versos más tristes esta noche. Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido. Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella. Y el verso cae al alma como al pasto el rocío. Qué importa que mi amor no pudiera guardarla. La noche está estrellada y ella no está conmigo. Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos. Mi alma no se contenta con haberla perdido. Como para acercarla mi mirada la busca. Mi corazón la busca, y ella no está conmigo. La misma noche que hace blanquear los mismos árboles. Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos. Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise. Mi voz buscaba el viento para tocar su oído. De otro. Será de otro. Como antes de mis besos. Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos. Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero. Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido. Porque en noches como esta la tuve entre mis brazos, mi alma no se contenta con haberla perdido. Aunque éste sea el último dolor que ella me causa, y éstos sean los últimos versos que yo le escribo. Pablo Neruda
Gloria Fuertes
Pienso Pienso mesa y digo silla, compro pan y me lo dejo, lo que aprendo se me olvida, lo que pasa es que te quiero. La trilla lo dice todo; y el mendigo en el alero, el pez vuela por la sala, el toro sopla en el ruedo.
Gloria Fuertes (Madrid, 1917- Madrid 1998). Esta poeta es conocida sobre todo por sus obras para niños, pero también tiene una extensa poesía para adultos, en la que se repiten temas como el pacifismo, la protesta contra la injusticia y el amor. Entre su obra poética destacan la antología Obras Incompletas (1980), libro al que pertenece el poema “Pienso” , e Historia de Gloria (1983). En la biblioteca puedes encontrar Obras Incompletas y Mujer de verso en pecho. Como anécdota de Gloria Fuertes, que era conocida sobre todo por sus apariciones en televisión, diremos que no le gustaba hablar de su vida, y en las entrevistas cambiaba datos como su fecha de nacimiento o el número de sus hermanos.
Entre pasa pasa pasa
Santander y Asturias un río, pasa un ciervo, un rebaño de santas, un peso.
Entre mi sangre y el llanto hay un puente muy pequeño, y por él no pasa nada, lo que pasa es que te quiero. Gloria Fuertes
Algunos de los alumnos que han votado el poema “Pienso” en primer lugar han dicho: “Es un poema muy bonito”, “Porque pienso mucho, y creo que pensar es la solución para todo”, “Porque es el que mejor rima” “Es un poema que hemos leído en clase y me resultó bastante interesante”
José Hierro
Vida Después de todo, todo ha sido nada, a pesar de que un día lo fue todo. Después de nada, o después de todo supe que todo no era más que nada.
José Hierro (1922-2002), poeta español, formó parte de la primera generación poética tras la Guerra Civil española. Nacido en Madrid, era santanderino de adopción. En Santander pasó su infancia y parte de su juventud hasta que fue encarcelado tras la Guerra Civil. José Hierro, miembro de la Real Academia Española, es una de las más destacadas figuras de ese grupo de poetas que comienza a abrirse camino en los difíciles años de la posguerra y mantiene en la actualidad una indiscutible vigencia. Su obra abarca temas sociales y de compromiso con el hombre, el paso del tiempo y el recuerdo como puede observarse en su “Cuaderno de Nueva York 1998” al cual pertenece el poema VIDA y “Alegría “ dos de sus publicaciones más importantes. Ha recibido, entre otros, los siguientes galardones: Premio Adonais por su obra Alegría (1947), Premio Nacional de Poesía (1953), Premio de la Crítica (1958,1965 y 1999), Premio Príncipe de Asturias de las Letras (1981) Premio Nacional de las Letras Españolas (1990) Premio Reina Sofía de Poesía (1995) y Premio Cervantes (1998). En 1998, Salvador Victoria, pintor que da nombre a nuestro instituto, ilustró con dos grabados cinco poemas de "Agenda".
Grito «¡Todo!», y el eco dice «¡Nada!» Grito «¡Nada!», y el eco dice «¡Todo!» Ahora sé que la nada lo era todo, y todo era ceniza de la nada. No queda nada de lo que fue nada. (Era ilusión lo que creía todo y que, en definitiva, era la nada.) Qué más da que la nada fuera nada si más nada será, después de todo, después de tanto todo para nada.
José Hierro
Los votantes han destacado este poema por el juego de palabras que utiliza para describir el desamor.
Te quiero Mario Benedetti
Nació en 1920 en Paso de Los Toros (Uruguay). Recibió su formación primaria y secundaria en Montevideo. En 1945 formó parte del famoso semanario “Marcha”, donde se formó como periodista y que fue clausurado en 1974 por la dictadura de Bordaberry. Ocupó el cargo de director del Departamento de Literatura Hispanoamericana en la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales de la Universidad de Montevideo. En 1973. tras el golpe militar y debido a su activo respaldo a la subversión marxista, tuvo que renunciar a su cargo en la Universidad y exiliarse, primero en Argentina y luego en Perú, Cuba y España. Fueron diez largos años en los que vivió alejado de su patria y esposa, ya que no pudo regresar a Uruguay hasta 1983. Su vasta producción literaria aborda todos los géneros: es autor de novelas, cuentos, poesía, teatro y ensayos. Ha publicado más de 40 libros y ha sido traducido a 18 idiomas. Nuestra biblioteca cuenta entre sus fondos con una de sus novelas, El porvenir de mi pasado, y dos de sus libros de poesía, Inventario uno e Inventario dos. Desde 1983 reparte su tiempo entre sus residencias de Uruguay y España, pero después del fallecimiento de su mujer en abril del 2006, Benedetti se traslada definitivamente a su residencia en Montevideo.
Tus manos son mi caricia mis acordes cotidianos te quiero porque tus manos trabajan por la justicia. si te quiero es porque sos mi amor mi cómplice en todo y en la calle codo a codo somos mucho más que dos tus ojos son mi conjuro contra la mala jornada te quiero por tu mirada que mira y siembra futuro tu boca que es tuya y mía tu boca no se equivoca te quiero porque tu boca sabe gritar rebeldía si te quiero es porque sos mi amor mi cómplice y todo y en la calle codo a codo somos mucho más que dos
y por tu rostro sincero y tu paso vagabundo y tu llanto por el mundo porque sos pueblo te quiero y porque amor no es aureola ni cándida moraleja y porque somos pareja que sabe que no está sola te quiero en mi paraíso es decir que en mi país la gente viva feliz aunque no tenga permiso si te quiero es porque sos mi amor mi cómplice y todo y en la calle codo a codo somos mucho más que dos. Mario Benedetti
“ He votado este poema porque quien lo ha escrito ama y lucha por un futuro mejor”
Luis Cernuda
Luis Cernuda, (Sevilla, 1902- México, 1963), poeta perteneciente a la Generación del 27. Su producción literaria y su vida se encuentran íntimamente unidas; así pues, desde que descubre la poesía a través de los poemas de Bécquer, siendo un niño, hasta que muere su obra nos habla de acontecimientos vitales y desgarradores para él: su soledad, su terrible exilio y la disconformidad con la realidad que le toca vivir. Entre sus obras destacan: Perfil del aire, de 1928, Los placeres prohibidos, de 1931, La realidad y el deseo, de 1936, donde reúne parte de su poesía y donde manifiesta la lucha interior entre sus anhelos y el mundo que le rodea. En el exilio escribirá Ocnos, de 1942, Como quien espera al alba, entre 1942- 49 y Desolación de la quimera, de 1962. Toda su obra desprende una autenticidad y sensibilidad extraordinaria; de ahí que, poeta silenciado para algunas generaciones de españoles, hoy día está considerado como uno de los poetas más importantes e influyentes. Si quieres conocer a Cernuda, puedes leer La realidad y el deseo en la biblioteca del Centro.
Si el hombre pudiera decir lo que ama Si el hombre pudiera decir lo que ama, si el hombre pudiera levantar su amor por el cielo como una nube en la luz; si como muros que se derrumban, para saludar la verdad erguida en medio, pudiera derrumbar su cuerpo, dejando sólo la verdad de su amor, la verdad de sí mismo, que no se llama gloria, fortuna o ambición, sino amor o deseo, yo sería aquel que imaginaba; aquel que con su lengua, sus ojos y sus manos proclama ante los hombres la verdad ignorada, la verdad de su amor verdadero. Libertad no conozco sino la libertad de estar preso en alguien cuyo nombre no puedo oír sin escalofrío; alguien por quien me olvido de esta existencia mezquina por quien el día y la noche son para mí lo que quiera, y mi cuerpo y espíritu flotan en su cuerpo y espíritu como leños perdidos que el mar anega o levanta libremente, con la libertad del amor, la única libertad que me exalta, la única libertad por que muero. Tú justificas mi existencia: si no te conozco, no he vivido; si muero sin conocerte, no muero, porque no he vivido. Luis Cernuda Comentarios de los alumnos que eligieron el poema: “Me ha parecido muy profundo”; “Me identifico mucho con él”; “Me ha trasmitido unos sentimientos muy bonitos y me ha recordado momentos hermosos”
Pedro Salinas
Para vivir Para vivir no quiero islas, palacios, torres. ¡Qué alegría más alta: vivir en los pronombres!
Pedro Salinas (Madrid,1891- Boston,1951) es un poeta que pertenece a la Generación del 27, el grupo poético más relevante del siglo XX. Este poeta fue profesor de universidad, y destaca especialmente por su poesía amorosa. Entre sus obras más importantes destacan La voz a ti debida (1933), libro al que pertenece el poema “Para vivir no quiero”, y Razón de amor (1936). Puedes encontrar otros poemas de Pedro Salinas en las antologías de la Generación del 27. Por cierto, el título La voz a ti debida procede de un verso de Garcilaso de la Vega, otro gran poeta del Renacimiento.
Quítate ya los trajes, las señas, los retratos; yo no te quiero así, disfrazada de otra, hija siempre de algo. Te quiero pura, libre, irreductible: tú. Sé que cuando te llame entre todas las gentes del mundo sólo tú serás tú. Y cuando me preguntes quién es el que te llama, el que te quiere suya, enterraré los nombres, los rótulos, la historia. Iré rompiendo todo lo que encima me echaron desde antes de nacer. Y vuelto ya al anónimo eterno del desnudo, de la piedra, del mundo, te diré: "Yo te quiero, soy yo" Pedro Salinas Una lectora confiesa que ha votado “Para vivir " "porque al leerlo veo recuerdos de mi vida, porque me identifico”.
Leopoldo Alas
Razón de amor No es sólo la pasión de los abrazos, la saliva, el aroma, el vértigo, los besos o el plácido desvelo de tu ausencia.
Leopoldo Alas (Arnedo, La Rioja, 1962) fue incluido en la antología de poetas Postnovísimos realizada por Luis Antonio de Villena, quien atribuía a nuestro autor “la utilización personalizada de la tradición clásica, amalgamada con la sensibilidad del rock”. Entre sus libros, encontramos dos de cuentos (Africa entera tocando el tam tam y Descuentos), varios de poesía (Los palcos, La condición y el tiempo, La posesión del miedo), el libreto de ópera Sin demonio no hay fortuna y, además, ha dirigido la revista literaria Signos. “Razón de amor” está incluido en el libro La posesión del miedo (1996) en el que el poeta logra cierto equilibrio y una marcada sensualidad con lenguaje simple y frase casi coloquial. “Mi poesía soy yo. Es lo que tengo más claro. Mi poesía es el resultado de mi manera de ser y de mirar, de las posiciones que he ido adoptando a lo largo de mi vida. Hay una coherencia entre mis cuatro libros publicados y el próximo, Concierto del desorden. La hay porque soy coherente, y lo soy sobre todo con mis contradicciones. Mi poesía es existencialmente crítica porque tengo conciencia. Y claro que busco respuestas. ¿Quién no lo hace?”
Mi amor es la fábula y la trama, el relato interior que sigue a cada encuentro, la glosa que acompaña los adioses, el minucioso examen de tus frases y el eco que tu voz pone a mi silencio. Mi amor es ser feliz y no engañarme anticipando el daño del negro desengaño, cuando el sexo se esfume en el recuerdo remoto y resentido de un orgasmo. Es consentir la calma en las mareas y atesorar las horas y los días de la fiesta de luz que celebramos, del banquete voraz de los sentidos. Y abolir la frontera de los cuerpos, detenernos, subiendo la escalera, a besarnos en todos los peldaños. Leopoldo Alas
Felipe Benítez Reyes
Felipe Benítez Reyes (Rota, Cádiz, 1960) es autor de una obra versátil que abarca la poesía, la novela, el relato, el ensayo y el artículo de opinión. Es conocido sin embargo sobre todo como poeta; como tal se le suele adscribir a la corriente de la Poesía de la experiencia o Nueva sentimentalidad. Sus libros han sido distinguidos con numerosos premios: 1992, Premio Fundación Loewe por Sombras particulares; 1994: Premio Internacional de Poesía Ciudad de Melilla por Vidas improbables; 1995: Premio Nacional de Literatura por Vidas improbables. 1995: Premio Nacional de la Crítica por Vidas improbables. 1995: Premio Ateneo de Sevilla de Novela por Humo. 1997: Medalla de Andalucía a su carrera literaria. Premio Luis Cernuda. Premio Hucha de Oro. Premio de Periodismo El Torreón. Premio Viaje del Parnaso. Este año, su novela Mercado de espejismos ha recibido el Premio Nadal de Novela 2007. En su obra lírica, casi siempre asoma el deseo insatisfecho, el desengaño o la ilusión frustrada. Evoca los recuerdos de una juventud que se acaba “con el sabor amargo de lo efímero” o la emoción de los encuentros fortuitos que deslumbran instantáneamente y se esfuman en su fugacidad irrecuperable. “Advertencia” está incluido en uno de sus primeros libros: Los vanos mundos (1985)
Advertencia Si alguna vez sufres -y lo haráspor alguien que te amó y que te abandona, no le guardes rencor ni le perdones: deforma su memoria el rencoroso y en amor el perdón es sólo una palabra que no se aviene nunca a un sentimiento. Soporta tu dolor en soledad, porque el merecimiento aun de la adversidad mayor está justificado si fuiste desleal a tu conciencia, no apostando sólo por el amor que te entregaba su esplendor inocente, sus intocados mundos. Así que cuando sufras -y lo haráspor alguien que te amó, procura siempre acusarte a ti mismo de su olvido porque fuiste cobarde o quizá fuiste ingrato. Y aprende que la vida tiene un precio que no puedes pagar continuamente. Y aprende dignidad en tu derrota agradeciendo a quien te quiso el regalo fugaz de su hermosura. Felipe Benítez Reyes
Gustavo A. Bécquer
Rima XVII Es una de las figuras más importantes del romanticismo y sus Rimas supusieron el punto de partida de la poesía moderna española. Nació en Sevilla en 1836, fue hijo de un célebre pintor. Cuando tenía tan sólo cinco años de edad, muere su padre, dejándolo al cuidado de un tío, con su hermano Valeriano, que sería un pintor como el padre, con quien recorrerá luego gran cantidad de ciudades españolas. De esos viajes surgirían, más tarde, sus famosas Leyendas, ambientadas en las diversas tradiciones regionales. En 1864 se retira al Monasterio de Veruela, para reponerse de su delicada salud física y emocional. Desde allí remitirá al periódico sus famosas cartas Desde mi celda, en las que, además de hacer reportajes sobre tipos y paisajes, hace un repaso de su vida pasada y actual, marcada por un profundo desencanto. El dolor y el placer, la esperanza y el desengaño, el sueño y la pesadilla, lo normal y lo increíble se dan la mano en la obra de las Rimas que son la promesa del autor de que “mientras haya un misterio para el hombre, habrá poesía”. Y la seguridad de que mientras haya poesía, se leerá a Gustavo Adolfo Bécquer. En la Biblioteca del centro puedes encontrar Rimas y Leyendas
Hoy la tierra y los cielos me sonríen, hoy llega al fondo de mi alma el sol, hoy la he visto... La he visto y me ha mirado... ¡Hoy creo en Dios! Gustavo A. Bécquer
“ He votado este poema por la musicalidad, por la expresividad y por la originalidad”
Lope de Vega
Desmayarse Desmayarse, atreverse, estar furioso, áspero, tierno, liberal, esquivo, alentado, mortal, difunto, vivo, leal, traidor, cobarde y animoso:
Poeta, novelista y el más grande dramaturgo español, conocido como el Fénix de los ingenios. Nació en Madrid, el 25 de noviembre de 1562, en el seno de una familia artesana. Su vida fue muy azarosa. En particular, siguió una vida llena de aventuras amorosas, pues estuvo casado varias veces y tuvo muchas amantes. Fue soldado, secretario de varios diplomáticos y, finalmente, sacerdote. En cuanto a la producción literaria, fue ciertamente un fenómeno de productividad. Desde muy niño mostró gran disposición y facilidad para las letras. Escribió en todos los géneros literarios: novelas, dramas y poesía, tanto lírica como dramática. Escribió unas 1.500 obras teatrales, entre las que se encuentran auténticas joyas de la literatura universal como Peribáñez y El comendador de Ocaña, El caballero de Olmedo, El perro del hortelano, Fuenteovejuna, que se encuentran entre sus mejores obras. Lope de Vega abruma en su grandeza y hoy se le sigue considerando como el primer dramaturgo español moderno que supo establecer una dialéctica con el público por medio de la tensión dramática y del talento y belleza de sus versos. En la Biblioteca del centro podrás encontrar las obras citadas anteriormente.
no hallar fuera del bien centro y reposo, mostrarse alegre, triste, humilde, altivo, enojado, valiente, fugitivo, satisfecho, ofendido, receloso: huir el rostro al claro desengaño, beber veneno por licor süave, olvidar el provecho, amar el daño: creer que el cielo en un infierno cabe; dar la vida y el alma a un desengaño, ¡esto es amor! quien lo probó lo sabe. Lope de Vega