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Propuestas para el Plan Nacional Simón Bolívar 2013-2019 del colectivo
Alianza Sexo Genero Diversa Revolucionaria (ASGDRe) Las siguientes páginas son el resultado de un proceso de construcción colectivo de la Alianza Sexo-Género Diversa Revolucionaria (ASGDRe), organización juvenil conformada en el año 2009 con el firme propósito de lograr el pleno derecho de nuestro pueblo a una sexualidad sana, responsable, liberadora y placentera, combatiendo la discriminación que a diario sufrimos las personas homosexuales, lesbianas, transexuales, transgéneros, bisexuales e intersexuales y reconociendo la formación como el único camino posible para lograr nuestros objetivos. Esperamos que pueda nutrir las propuestas del Plan de Gobierno 2013-2019, como un aporte de la comunidad sexo-género diversa combativa y revolucionaria.
Somos personas sexo-género diversas que nos reconocemos como seres sociales, críticos, que acuñamos la diversidad de “ser” “de expresarnos” y de entender las manifestaciones afectivas, eróticas y sexuales como posturas y asuntos políticos, que asumimos la sexo-género diversidad como una identidad de resistencia, contra-hegemónica a los valores burgueses, a la moral religiosa opresora y castradora. Cuestionamos el patriarcado, la heteronormatividad como modelos culturales de dominación. Promovemos la defensa de los derechos humanos, las afectividades de otras sexualidades emancipadas no alineadas a una forma única. Asumimos nuestras preferencias sexuales, identidades y expresiones de género sin prejuicios, sin imposiciones, no aceptamos más presiones ni de la sociedad, del estado y mucho menos del sector médico. Respetamos la heterosexualidad de los y las demás como parte de la diversidad sexual y de género. Estamos conscientes de que vivimos en una sociedad patriarcal, capitalista y heteronormativa que va en vías de la construcción del socialismo democrático, protagónico y participativo, para que no exista exclusión social en la Venezuela que todos y todas deseamos, consolidando el poder popular, sin excluir a la población perteneciente a la comunidad sexo-género diversa, dándole una respuesta ofensiva a la Guerra de 4ta. Generación, que estigmatiza y aliena a todas las personas, sin importar su raza, su sexo, su orientación sexual, identidad de género y/o expresión de género, pero sí recrudeciendo su ataque mediático, económico, religioso, educativo, social hacia las personas más necesitadas, vulneradas y de clase obrera. Al capitalismo le conviene tener pueblos sexualmente reprimidos, la sociedad socialista no puede repetir esto, pues su esencia liberadora debe tener una concepción distinta del cuerpo y el deseo humano. Es necesario que comprendamos que la propiedad privada contra la que lucha el dirigente campesino opera en el mismo sentido que el control sobre nuestros cuerpos y deseos ante el cual se rebela una mujer transexual, el primero es al sistema capitalista lo que el segundo al sistema patriarcal, ambos dimensiones diferentes pero articuladas de la opresión. El nivel de conciencia y sistematicidad que tenga cada lucha no puede ser argumento para considerar que una tenga más mérito o virtud revolucionaria que otra, pues la trampa está en que el género, la sexualidad y el deseo han estado relegados a una dimensión intima de las individualidades que no tienen porque ser debatidas, entendidas ni defendidas en nuestros espacios de lucha.
Por ello, asumimos que todas las personas que militan en las filas de la revolución deben sumarse a estas trincheras de lucha, sin importar su orientación sexual o identidad de género, pues el derecho a una sexualidad sana, responsable, liberadora y placentera es asunto de todas y todos. •
Objetivo 2.2: Construir una sociedad igualitaria y justa.
En el Artículo 20 de la Constitución Bolivariana afirma que: Toda persona tiene derecho al libre desenvolvimiento de su personalidad, sin más limitaciones que las que derivan del derecho de las demás y del orden público y social. Y el articulo 21 1. No se permitirán discriminaciones fundadas en la raza, el sexo, el credo, la condición social o aquellas que, en general, tengan por objeto o por resultado anular o menoscabar el reconocimiento, goce o ejercicio en condiciones de igualdad, de los derechos y libertades de toda persona. La construcción de una sociedad que respete y reconozca la diversidad de cada venezolano y venezolana debe garantizar el derecho del pueblo a una sexualidad responsable, sana y placentera, entendiendo que la sexo-género diversidad incluye a las personas heterosexuales, como una oportunidad para combatir temas de salud pública como el embarazo adolescente no planificado, la infecciones de transmisión sexual, las muertes por abortos clandestinos, entre otras cosas. Como pueblo organizado nuestra participación protagonice, reconocemos que debemos promover la formación popular en sexo-género diversidad no solo para la población no heterosexual sino que debemos sensibilizar y profundizar en el debate político dentro de todas las instancias del poder popular. Nuestros aportes a los procesos populares de lucha y cambios que vive actualmente Venezuela parten desde una visión pedagógica popular, crítica y constructiva, por eso las acciones se deben enfocar a la formación colectiva de organizaciones y el pueblo organizado, promoviendo el cambio estructural desde estos espacios. Por ejemplo, la lucha por el hábitat y la vivienda digna en la actualidad no debe interpretarse en un sentido restrictivo simplemente de cobijo sino, que debe considerarse más bien como el espacio donde los individuos o las familias puedan vivir en seguridad, paz y dignidad. Para muchos y muchas de la población no heterosexual todavía es una dificultad acceder a una vivienda, por múltiples factores como el núcleo familiar que no acepta la libre expresión de la sexualidad, mucho menos otra que no sea la heterosexual, convirtiendo a personas de temprana o parejas del mismo sexo que no tienen vivienda en víctimas de desalojos forzosos o cualquier otro tipo de discriminación. El derecho Constitucional de tener una vivienda se nos ha negado simplemente por ser lesbianas, homosexuales, transexuales, transgeneros o bisexuales, como se evidencia en la no priorización de las parejas del mismo sexo de la Misión Vivienda. Para nosotros y nosotras la vivienda debe ser fija, habitable, asequible, protegida y contar con la seguridad jurídica de tenencia para obtener una Vivienda Digna.
El Estado venezolano, así como los movimientos sociales organizados, debemos ser intransigentes ante cualquier actitud que promueva o se base en valores discriminatorios hacia las mujeres, sexo-género diversidad y demás grupos históricamente excluidos. Así como este, creemos importante retomar los otros principios para el desarrollo del PNSB con la finalidad de que sirvan de argumento para incluir directamente las propuestas de la sexogénero diversidad: I. Política educativa que combata los prejuicios hacia la sexo-género diversidad y promueva principios de respeto, empatía y reconocimiento mutuo en el cuerpo docente del sistema educativo en todos sus niveles, en los servidores públicos de todas las instituciones y en la comunidad en general. II. Política comunicacional del Estado incluyente, respetuosa y formativa en sexo-género diversidad. III. Política de seguridad que fortalezca los programas de formación en derechos humanos a los cuerpos de seguridad del Estado y concrete mecanismos de contraloría y denuncia ante violaciones cometidas por los mismos hacia la comunidad no heterosexual. IV. Una vez conquistado el reconocimiento político de la población sexo-género diversa, podemos avanzar en el reconocimiento económico con programas dirigidos a satisfacer las necesidades autogestionarias de las organizaciones que luchamos por la soberanía sexual y autodeterminación de nuestros cuerpos y territorios. V. Política económica que contemple y priorice en los planes de financiamiento de las instituciones del Estado a pequeñas y medianas iniciativas de colectivos y proyectos en sexo-género diversidad, que apunten a procesos de producción y autogestión comunitaria. •
Objetivo 2.2.1.23 Consolidar la equidad de género con valores socialistas.
Impulsar nuestra ética, que se fundamenta en cinco categorías morales: el deber, el honor, la dignidad, la conciencia, la felicidad y el amor. Por la necesidad de visibilizar los valores socialistas, y así lograr que nuestra población entienda con especificidad el socialismo incluyente por el que estamos luchando. Sin prejuicios, ni discriminación ni odio entre nuestro pueblo. La violencia de género no es solo contra la mujer (hembra biológica), es contra un hombre femenino o contra una transexual o transgénero, constituyendo un grave problema de violación sistemática de derechos humanos, que muestra en forma dramática los efectos de la discriminación y subordinación de la mujer y lo femenino ante una sociedad machista, misógina y patriarcal. Otro ejemplo de las omisiones hacia la sexo-género diversidad es cómo en la legislación que contempla a violencia doméstica se establece sólo el espacio heterosexual como posibilidad única, siendo excluidas y excluidos los homosexuales, lesbianas y
transexuales como integrantes de un posible núcleo familiar no heterosexual donde ocurra violencia doméstica, en virtud que la autoría del hecho corresponde a la pareja, ex pareja o a una persona perteneciente al ámbito doméstico. Para estas familias no convencionales, no hay políticas de estado para abordar la denuncia de las victimas Sexo-género diversas. Exigimos que la figura del femicidio y los crímenes de odio deben incorporarse en la legislación. Hoy un varón machistas o misógino. Puede asesinar a una mujer, a un homosexual, a una lesbiana o una trans sin tener una pena estipulada, quedando en impunidad un ser humano que mata a otro o a otra por prejuicio, por una cuota de poder y por odio. Eso promueve francamente el femicidio y los asesinatos a la población sexo genero diversa, por lo que debe implementarse como figura penal autónoma la condena máxima de 30 años. A la vez, que se modificarse el Código Civil, para que los femicidas pierdan la patria potestad de los niños que quedan. A ello, hay que agregarle grandes campañas de difusión con apoyo institucional para romper el miedo, y un teléfono gratuito de emergencia. • Objetivos 2.2.1.30: Combatir la impunidad, el retraso procesal de pena y de otros beneficios, en coordinación con el Ministerio Público, Defensa Pública y Poder Judicial. La heteronormatividad es transgredida por la existencia de personas transgéneras y transexuales. Estas han existido en todas las culturas de una u otra manera, tal cual como las personas heterosexuales, lesbianas o gays, sin embargo, el régimen de heteronormativo cada vez más las ha ido relegando a una permanente invisibilidad, centrado en la vulneración de sus derechos, en donde la posibilidad de educarse en un sistema pluralista y respetuoso de la diversidad no es una opción sino prácticamente una imposibilidad. En Venezuela la comunidad transexual, transgénero, travesti ha vivido años de asesinatos con total impunidad, incluyendo aquellos casos donde la propia comunidad se ha visto implicada como responsable directa. Además, los asesinatos de mujeres heterosexuales a manos de sus parejas son otro motivo de alarma para la sociedad, en donde en la mayoría de los casos que son denunciados no se traducen en castigo para los culpables, y cuando el imputado, por lo general un hombre, es imputado, son liberados rápidamente. No todos los casos de muerte y violencia dirigida a sujetas trans, homosexuales y lesbianas son denunciadas y no todas las denuncias realizadas son consideradas. El estigma y discriminación ejerce fuerte traba a la aplicación de la justicia. El 30 de abril de 2011 ocurrieron un par asesinatos a dos personas por orientación sexual e identidad de géneros, hechos cometidos por una banda de exterminio de personas trans llamada La Prince. El 3 junio de 2012 fue asesinado en la avenida libertador de varios impactos de bala el transexual José Antonio Suárez, de 34 años de edad. El asesino de transexuales de av. Libertador volvía a atacar para el 13 de mayo de 2011 una de sus víctimas fue Luis Alberto Valera, de 18 años, mejor conocido como “Luisa” y ya había matado a tres transexuales en ese mes. Para 2011 se contabilizaron 8 asesinatos impunes a la población trans de caracas. Otro aterrador caso sucedió en el estado Barinas, donde Luis Enrique Montilla y su amigo,
Baudilio Ramón Gallardo Bastidas, fueron asesinados de manera espantosa al ser tiroteados, degollarlos e incinerados, el 16 de enero de 2011. Pero la impunidad que denunciamos es también, por ser víctimas de violencia, persecución y hostigamiento policial que sufre con frecuencia la población no heterosexual en todo el país. Funcionarios del Instituto Autónomo de Policía Municipal de Mariño del estado Nueva Esparta, activaron un operativo en distintas calles del Municipio, para combatir el flagelo de los travestis que va en contra de la moral y buenas costumbres, según información reseñada en medios locales en mayo de este año. El subdirector de Polimariño hace un llamado a estos ciudadanos a que respeten las ordenanzas, debido a que serán sancionados y trasladados hasta la sede de la Institución Policial, como último recurso para poner orden en el Municipio. Recordando que el 29 mayo de 2008 en Puerto La Cruz el Jefe policial Hernán Rosales y el alcalde Nelson Moreno fueron implicados en la violación a los derechos humano de una mujer transexual, quien fuera detenida por la policía municipal del Municipio Sotillo, obligándola a desnudarse, mostrar sus senos y demás partes intimas para ser grabada pro las cámaras de decenas de agentes de policía uniformados, los cuales aparentemente fueron congregados en ese recinto con el fin de humillar a la detenida. Para muchos, esto fue solo un hecho bochornoso, sin tomar en cuenta que fue desde todo punto de vista suficiente para destituir a todos los policías que aparecen en el video que circulo por internet. Estas situaciones hacen que muchas y muchos personas no heterosexuales, teman denunciar las agresiones o simplemente no confían en los procedimientos policiales. Esta situación proviene de los constantes acosos y agresiones que sufren por parte de esta Institución, lo que se refleja en los casos detallados más arriba. Para lograr cambiar esto debemos reconocer que la violencia es un grave obstáculo para alcanzar los objetivos de igualdad, desarrollo y convivencia ciudadana, por ello es necesario la elaboración y aplicación de estrategias y políticas que aseguren la obligatoria diligencia para impedir todas las formas de violencia contra las mujeres, niñas, hombres homosexuales, transexuales y transgéneros de cualquier edad, brindando protección a las víctimas además de la investigación, procesamiento y castigo de los autores u autoras de los actos en cuestión. • Objetivo 2.2.1.24 Profundizar la participación política y protagónica de las mujeres en el poder popular. En palabras de Nuestro Comandante Hugo Chávez: "La mujer sólo puede
liberarse en medio de una revolución socialista" Los resultados del censo 2011 de la distribución de la población por sexo, dio como resultado que un 50,3% fueran mujeres y 49,7% fueran hombres, es decir, que por cada 100 mujeres hay 98 hombres. Es evidente las desigualdades de género en la participación política y de las demandas sociales que vienen desde las mujeres. Sobre todo en los espacios de construcción del poder popular cuando la mujer tiene hijos y debe quedarse en el hogar en la crianza, labores domesticas y mantenimiento del hogar.
La mujer tiene oportunidades en el mundo laboral, político, público, cultural, pero sigue estando comprometida con sus roles en la vida doméstica, intransferibles al parecer y limitantes del resto. Continúa siendo mostrada, hasta en los medios de comunicación, como la subordinada al «macho», y sigue enfrentándose a la condena popular cuando intenta cambiar sus roles. En este sentido buscamos la promoción de cambios culturales que tiendan a la formación de conciencia sobre las brechas de género existentes y hacia la eliminación de los estereotipos basados en la asignación de roles de mujeres y hombres. La cultura es el conjunto de los modos de vida y las costumbres de un grupo social. Para que la igualdad entre los hombres y las mujeres sea real, se debe construir conciencia. Esto significa influir en la forma de pensar y de hacer las cosas que tienen las personas que forman un grupo social. En el caso de Venezuela, nuestra sociedad es profundamente machista y patriarcal y nuestro principal enemigo influyente en esta situación son los medios masivos de comunicación, tanto privados como públicos. Pese al hecho de que desde hace tiempo se reconoce el derecho fundamental de las mujeres y los hombres de participar en la vida política, en la práctica la brecha en materia de equidad en la esfera del ejercicio del poder y la adopción de decisiones sigue siendo amplia. Como resultado de ello, los intereses y las preocupaciones de la mujer no están representados a los niveles de la formulación de políticas y la mujer no tiene influencia sobre las decisiones fundamentales en las esferas social, económica y política que afectan a la sociedad en su conjunto. Las principales inquietudes de nuestras mujeres son los derechos de la mujer que faltan por conquistar y el favoritismo en las leyes que siguen teniendo los hombres por sobre las mujeres. Se requiere de un número suficiente de mujeres en el poder para lograr representar los intereses y los problemas de las mujeres. Pero también existe la realidad de nuestros ministerios e instituciones gubernamentales y cargos públicos que demuestran que una vez en el poder, estas se masculinizan y reproducen los modelos construidos por los hombres. Las políticas de igualdad se relacionan, por un lado, con la igualdad de oportunidades; y, por otro, con el diseño, la aprobación, la aplicación y la evaluación de las políticas públicas. Más mujeres en los espacios políticos darán lugar a un mayor empuje a la solución de las preocupaciones y problemáticas femeninas. Necesidades e intereses prácticos y de género. Pero además, en las cuestiones generales, las mujeres aportan su punto de vista para contribuir a la agenda política, económica y social del país. Entre los obstáculos podemos mencionar los problemas socioeconómicos –pobreza, desempleo, falta de recursos financieros, doble y triple jornada de trabajo derivados del machismo existente en nuestra sociedad que afectan especialmente a las mujeres y dificultan su acceso al mundo político. La revalorización de la participación de las mujeres en política se ha incrementado al calor de la llegada a la Presidencia de Michelle Bachelet y Cristina Fernández. Gestando una revolución profunda en los roles de género que está feminizando la política latinoamericana.
Impulsar el financiamiento suficiente para la elaboración de políticas y programas de desarrollo que tengan en cuenta las cuestiones de género y para los mecanismos de fomento de la igualdad entre los géneros y asignar fondos suficientes para la adopción de medidas encaminadas específicamente hacia la mujer, para las organizaciones de base que constituyen el poder popular. Asegurar la voluntad política necesaria para reconocer el papel de la mujer en el desarrollo en todas las esferas de la vida, promover la igualdad entre los géneros y favorecer la participación de las mujeres en puestos de adopción de decisiones. La sexo Genero Diversidad también es socioproductiva • Objetivo 2.2.1.25 Incentivar una cultura económica productiva, solidaria, de base socialista, con la inclusión de todos quienes estén en edad productiva, que promuevan la inserción en el sistema productivo nacional. • Objetivo 2.3.6.10 Garantizar la inclusión socio-productiva, el trabajo emancipado, la transformación del ejército de reserva del capitalismo en fuerza social creadora a través de la organización de las fuerzas productivas, generando una nueva cultura del trabajo. El Estado debe tener programas para capacitar a las personas lesbianas, gays, transexuales y bisexuales que se encuentran en situación de desempleo para su acceso al mundo laboral. No queremos que sean empresas privadas, reconocemos la revolución socialista y apostamos a la inclusión en instituciones gubernamentales y a la oportunidad de presentar nuestros proyectos socio productivos. Sin discriminación por parte de los entes del Estado encargados, en aprobar las solicitudes de créditos a organizaciones y colectivos sexo genero diversos. La principal fuente laboral de las personas trans es el comercio sexual, que se impone como la única posibilidad frente a un sistema que censura su identidad, basado en prejuicios que se han establecido desde los discursos de la cultura dominante que discriminará a todo lo concebido como anormal e inferior. Este proceso de inclusión laboral socio productiva debe estar acompañado por la formación política de esta población, ya que en su mayoría son despolitizados y necesitamos formarlos y formarlas como sujetas y sujetos políticos. Para asegurar la participación protagónica de esta población que ha sido invisibilizada. La relación del pueblo organizado y el MERCOSUR • Objetivo 3.2.3.1 Establecer alianzas estratégicas en un mundo pluripolar que garanticen la transferencia tecnológica y la mejora de los procesos productivos. • Objetivo 3.2.4.3 Mantener e incrementar los sistemas de compras públicas como flujo circular del capital, conglomerados, pequeñas y medianas empresas, empresas comunales, como motores de la ubicación directa de los bienes y servicios producidos, saliéndose de los canales de lógica del capital.
• Objetivo 4.2.1.1 Consolidar y crear la institucionalidad nacional nuestramericana en las organizaciones de cooperación e integración como la ALBA, UNASUR, CELAC, MERCOSUR. El MERCOSUR tiene como principal objetivo aumentar el grado de eficiencia y competitividad de las economías involucradas, ampliando las actuales dimensiones de sus mercados y acelerando su desarrollo económico mediante el aprovechamiento eficaz de los recursos disponibles, la preservación del medioambiente, el mejoramiento de las comunicaciones, la coordinación de las políticas macroeconómicas y la complementación de los diferentes sectores de sus economías. La conformación de un mercado común es una respuesta adecuada a la consolidación de grandes espacios económicos en el mundo y a la necesidad de lograr una adecuada inserción internacional. El ingreso de Venezuela al Mercosur debe servir, además de potenciar las relaciones bilaterales y acuerdos de complementación entre los países que integran el bloque subregional, para estrechar las relaciones entre los pueblos en el ámbito económico, político, social, educativo y cultural. Es el pueblo organizado, desarrollando su producción y estableciendo acuerdos de solidaridad e integración, el llamado a garantizar, aguas abajo, la conciencia revolucionaria y productiva. Nuestras Empresas de Propiedad Social (EPS) son entidades económicas dedicadas a la producción de bienes o servicios en las cuales el trabajo tiene significado propio, no alienado, donde no existe discriminación social en el trabajo, no existen privilegios en el trabajo asociados a la posición jerárquica, con igualdad entre sus integrantes, basadas en una planificación participativa y protagónica y bajo régimen de propiedad social directa, indirecta, grupos de intercambio solidario y unidades de producción familiar. Las empresas de producción social, gracias a los instrumentos legales proporcionados por el Gobierno Revolucionario, tienen la misión de establecer nuevas formas de producción social y eficientes con una distribución en base a principios de justicia, equidad y reciprocidad para toda la comunidad que participa y el uso de técnicas y tecnología de punta en el contexto del socialismo bolivariano. Será el modelo de gestión de nuestras empresas EPS, el que definirá la verdadera transformación en las relaciones entre los productores y productoras y el modo de producción. Respaldamos el modelo que la ley Orgánica del Sistema Económico Comunal y su Reglamento sugieren, es corresponsabilidad entre el Estado y el Poder Popular, garantizar, además de promover la constitución de 30.000 EPSD en el período 2013-2019 (Objetivo 2.3.6.2), la profundización de la conciencia revolucionaria. Las EPSD serán la plataforma para desarrollar una nueva estructura productiva únicamente cambiando el modelo de gestión capitalista a uno verdaderamente solidario, en armonía con el ambiente, que satisfaga verdaderas necesidades y que cuente con el acompañamiento técnico y político de instituciones del Estado. Priorizando la calidad antes que la cantidad, podremos promover con eficiencia las EPS en el período establecido. Entendemos que el Mercosur, al igual que la ALBA, busca el desarrollo económico de los países del sur, para lograr un gran mercado, aprovechando los recursos disponibles. Para las EPS, representa una solución para aumentar la productividad con máquinas de tecnologías de punta, con el apoyo de nuestros aliados. Exigimos que a los proyectos sociales se les otorgue una participación significativa en las políticas económicas en que se maneje el libre comercio con los países del sur
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Objetivo 2.2.1.6 Promover la armonización de la vida familiar y laboral.
En el capitalismo las relaciones familiares son relaciones económicas, el sistema establece vínculos de financiamiento y dependencia económica. Históricamente se ha establecido la figura del hombre como quien aporta monetariamente a la familia, por lo tanto se le asigna todo (o gran parte) del poder de decisión, y por otro lado se le excluye del trabajo doméstico; trabajo que es invisibilizado y asignado exclusivamente a las mujeres y a lo femenino, de forma esclava. Y en el socialismo reivindicamos a la familia por vínculos emocionales y sentimentales más allá de lo monetario y del nexo consanguíneo, para trascender nuestra percepción de familia desde el capital y lo material y rescatar que en revolución las relaciones se establecen desde la cotidianidad, la comunidad, organizaciones de base y camaradas, estableciendo la camaradería revolucionaria como lazo familiar desde los valores y la moral socialista. En Venezuela no existe un solo modelo de familia nuclear, tenemos otras manifestaciones de familia, como madres solteras, la crianza asumida por tías o abuelas o hermanos y hermanas, así como también familias homoparentales no reconocidas. Es fundamental profundizar y avanzar en el reconocimiento de la sexo-género diversidad en la legislación venezolana, superando el enfoque enunciativo del principio de no discriminación y precisando niveles más concretos, como el reconocimiento de parejas del mismo sexo. Como ejemplo de ello tenemos el artículo 77 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y el artículo 411 de la LOPNA, que especifican que el matrimonio y la adopción conjunta, respectivamente, pueden ser solo entre un “hombre y una mujer”, en contraste con el artículo 4 de la Ley del Poder Popular, que solo contempla la no discriminación por orientación sexual e identidad y/o expresión de género. En estas condiciones, se trata de superar la igualdad declarativa de la norma, para lograr la igualdad efectiva ante la vida. Objetivo 2.3.4 Garantizar la plena inclusión social: El poder popular como garante del reconocimiento de la dignidad del ser humano, como sujeto en ejercicio pleno de sus derechos, reconociendo a la familia como un factor determinante de protección y base fundamental del nuevo andamiaje social, cuyas premisas han de ser la armonía, la solidaridad, la complementariedad y la corresponsabilidad como vía hacia el vivir bien. •
Proponemos incluir las fechas de 17 de mayo día contra la homo-lesbo-transfobia y el 13 de octubre como día de la rebeldía y visibilidad lésbica como fechas conmemorativas en la ley de fiestas nacionales laborables. Fechas conmemorativas necesarias, como el dia del trabajador y trabajadora, docentes, policías entre otras. El 17 de mayo de 1990, la Organización Mundial de la Salud eliminó a la homosexualidad de la lista de trastornos mentales cuando aprobó una nueva versión de la Clasificación Estadística Internacional de Enfermedades (CIE).
El documento de la OPS señala que existe un consenso profesional en que la homosexualidad es una variación natural de la sexualidad humana y no se puede considerar como una condición patológica. El 13 de octubre es el Día de la Visibilidad Lésbica en parte de Latinoamérica porque las mujeres lesbianas reivindican la salida del armario como paso necesario para vivir con plenitud. Defendiendo que las mujeres lesbianas vivan su orientación sexual con la misma libertad que las personas heterosexuales: contra los prejuicios, el machismo y la discriminación. Implicación que debe desarrollar programas de salud para ponerle fin a la discriminación en el acceso a técnicas de reproducción asistida a las mujeres lesbianas y bisexuales con pareja femenina, a las lesbianas solteras y en general a cualquier mujer que decida empezar una familia sin un compañero masculino por cualquier razón que ella tenga . La visibilidad que combata los prejuicios hacia la sexo-género diversidad y promueva principios de respeto, empatía y reconocimiento. También una política comunicacional del Estado incluyente, respetuosa que vaya formando a la población sobre las luchas y derechos de la sexo genero diversidad. Objetivo 2.2.2.4 Disminuir el número de personas en situación de vulnerabilidad. Objetivo 2.2.3.2 Crear nuevas grandes misiones en aéreas, temas o problemas priorizados de acuerdo a los objetivos estratégicos. • Objetivo 2.3.4.3 Afianzar las políticas especiales, desde la comunidad, para la población en mayor nivel de vulnerabilidad: niños, niñas y adolescentes, adultos y adultas mayores, personas con discapacidad, personas en situación de calle, personas con adicciones, población sexo-género diversa, entre otros. • •
Planteamos que todos y todas tenemos un lugar desde el que hablamos, pensamos y hacemos, y que nada en este mundo esta dado por obvio y natural. La homo-lesbotransfobia no escapa a esto. Como personas transgéner@s, lesbianas, homosexuales, bisexuales, intersexuales, entre otros, somos también revolucionari@s, trabajador@s, artistas, cultor@s populares, afrodescendientes, estudiantes y por tanto sujet@s polític@s de este proceso de revolución. Soñamos, peleamos y demandamos no un simple reconocimiento legal y un respeto diplomático que disfrace el prejuicio y el rechazo, necesitamos reconocimiento como parte del pueblo venezolano en igualdad de derechos.
Exigimos una misión para la sexo genero diversidad. Los objetivos de la misión serán la inclusión en todos los ámbitos: social, político, educativo, laboral, económico, recreativo y el derecho a una vida libre de violencia para toda aquella persona no heterosexual. Nos referimos concretamente, a reconocer la seguridad social de las personas no heterosexuales, tanto las solteras como las homoparentales y las que viven en concubinato legitimo, así como el derecho al trabajo a personas que decidieron asumir un género distinto al impuesto por la sociedad (transexuales y transgéneros) y que en su mayoría están sumidas al trabajo y comercio sexual haciendo muy difíciles sus condiciones de vida.
La Gran Mision, viene por la necesidad de la inclusión social de las personas sexo genero diversas mas allá de una ayuda económica, la inclusión laboral y educativa limitadas por prejuicios y burlas de compañeros y compañeras de trabajos, jefes, profesores, profesoras y/o estudiantes, que hacen imposible la convivencia entre ambas partes dejando asi los estudios y el trabajo. Esta política se enmarca en el espíritu de "Gran Misión", concepto que ha venido posicionando el Comandante Presidente, Hugo Chávez y queremos recordar que nuestras peticiones no son hechas a capricho, son exigencias históricas, y con conciencia de clase, de un sector de la sociedad que ha visto poco, o nada, de las reivindicaciones políticas y económicas dentro del sistema neoliberal y que ve en la propuesta socialista que lidera el comandante Chávez una posibilidad de inclusión así como la clase obrera, los trabajadores y trabajadoras en general, el campesinado y otras capas de la sociedad han alcanzado y materializado desde lo económico, político y social. Los espacios públicos Todavía en nuestras instituciones públicas hay profundos prejuicios religiosos que pueden retrasar o engavetar los proyectos de organizaciones o colectivos de diversidad sexual. Desde la alianza sexo-género diversa luchamos por la erradicación de prejuicios de toda índole y la doble moral de funcionarios, funcionarias incluso movimientos sociales de izquierda que no permiten que por criterios personales nos sumemos a la vida pública económica y política de nuestro país. Rechazamos actitudes y normativas retrógradas, propias del pasado adeco y copeyano pero que aún permanecen vigentes en el criterio de uso de algunos de los espacios públicos argumentando “moral y buenas costumbres”. Esos patrones mellan el camino para alcanzar los principios de igualdad y libertad de derechos y continúan reforzando los tabúes que impiden que como nación avancemos hacia la Suprema Felicidad Social, como lo establece el Proyecto Socialista de la Nación “Plan Nacional Simón Bolívar”. La aberración de incluir conceptos morales como “el decoro” en la normativa de uso de espacios públicos como ministerios, instituciones gubernamentales y de recreacion y la grave interpretación dada a esta palabra por la directiva que administra dichos espacio, nos motiva a denunciar el hostigamiento a las parejas o grupos que deciden venir a disfrutar de las actividades, instalaciones y que al demostrarse su amor y afecto de la manera mas humana y natural, son violentados institucionalmente al ser señalados, alertados e incluso expulsados del recinto con argumentos vacíos y controvertibles. Hay que tomar en cuenta que también se vulnera el respeto al ejercicio de la personalidad cuando se limita el acceso a edificios públicos en sandalias o pantalones cortos, criterios que obedecen a una política de exclusión y negación del pueblo mismo. Es fundamental para avanzar en la revolución bolivariana que debatamos y construyamos colectivamente los criterios y argumentos con los cuales se están construyendo nuestros códigos de conducta, para que respondan a la labor reivindicativa de los colectivos que luchan por la transformación social a través de la promoción del respeto mutuo y la solidaridad, valores en los cuales debe reposar la convivencia popular.
Recordamos que nuestra legislación contempla y penaliza diferentes modos de ejercer la violencia, incluso la violencia institucional, de la que fuimos y somos víctimas cada vez que se nos pide desalojar ilegalmente espacios públicos por besar, abrazar, acariciar o reposar junto a otra persona que amamos o deseamos, uno de los derechos más básicos que tenemos como pueblo y seres humanos. Fuera la mojigatería y el machismo de la Revolución, es hora de acabar las normativas retrógradas y burguesas en los espacios que nos pertenecen y que deben servir a los intereses del pueblo en la construcción de una sociedad más justa. Exigimos la derogación de todo artículo que se tomen la moral y las buenas costumbres, como normas para aplicar sanciones y castigos. Pues históricamente ha sido utilizado para perseguir y hostigar a la población no heterosexual. La necesidad de un Estado Laico para personas libres Tomando en cuenta que la constitución bolivariana de Venezuela en su Artículo 59 reseña que: El Estado garantizará la libertad de religión y de culto. Toda persona tiene derecho a profesar su fe religiosa y cultos y a manifestar sus creencias en privado o en público, mediante la enseñanza u otras prácticas, siempre que no se opongan a la moral, a las buenas costumbres y al orden público. Se garantiza, así mismo, la independencia y la autonomía de las iglesias y confesiones religiosas, sin más limitaciones que las derivadas de esta Constitución y la ley. El padre y la madre tienen derecho a que sus hijos o hijas reciban la educación religiosa que esté de acuerdo con sus convicciones. Venezuela es un Estado laico donde la ley se promulga con criterios de equidad, buscando el bien común sin interferencias de las distintas creencias religiosas, lo que no impide la práctica y libre expresión de éstas. Velamos por el reconocimiento de la autonomía de lo político y lo civil respecto de lo religioso y, a su vez, el respeto para los que profesan cualquier religión y para los que no practican ninguna. En una sociedad laica bien entendida todos podemos y debemos construir una sana convivencia, en libertad, pluralidad, respeto y colaboración, apoyados y protegidos por las leyes. No queremos que los curas sean políticos, y los gobernantes sean obispos. Una religión no debe exigirse a todos y todas, sino que se deben respetar las conciencias de cada individuo. Nuestro gobierno es socialista y no debe estar ligado a una religión particular sino que debe respetar la libertad religiosa y el derecho individual de practicar o no algún dogma. Muchos religiosos y religiosas temen a la palabra laico. Ser laico es respetar el pluralismo de la sociedad, la necesidad de entender la diversidad sin llamar a todo pecado. Ser laico es admitir que en todas las religiones hay tendencias plurales. El laicismo es un movimiento emancipatorio, que combate la dominación, nuestra población necesita vivir su sexualidad sin culpa, miedos ni odios. Hacemos especial énfasis en esto porque históricamente se han utilizado las religiones como una herramienta para condenar las distintas orientaciones sexuales e identidades y/o expresiones de género como conductas
reprensibles, legitimando históricamente la violencia que hacia nosotros y nosotras se ha cometido. La necesidad de La Educación Sexual desde temprana edad. No existe en Venezuela una educación sexual oportuna, la misma ha sido objeto de grandes polémicas y discusiones por parte de los educadores, que son a quienes se ha pensado tienen toda la responsabilidad de orientar la sexualidad en los educandos, pero no solo son maestros y maestros, es también una política de estado, puesto que el derecho a la salud, la información y la educación sexual permanecen en nuestras leyes. Principalmente se dificultad la información porque todavía es considerado tema tabú. Se considera que el conocimiento de la matemática y las ciencias es importante por sí mismo y que por eso los jóvenes deben adquirirlo. La misma importancia debería otorgarse a la educación relativa a la sexualidad, que vaya más allá del ámbito reproductivo y que le permita entender a nuestros niños, niñas y adolescentes el derechos que todos y todas tenemos a una sexualidad libre, sana, responsable y placentera. En un mundo en el que tantos niños niñas y jóvenes corren el riesgo de los embarazos no deseados, el abuso y la violencia sexual, el VIH u otras enfermedades de transmisión sexual, es una falta grave que por no contar con políticas oportunas no podamos facilitarle la información necesaria sobre la sexualidad, las relaciones y la salud sexual. La sexualidad es uno de los fundamentos de la experiencia humana. No es algo que tenemos, sino algo que somos. La sexualidad es la forma en la que cada cual expresa, comunica, siente, intima,da y recibe placer con la palabra y los cinco sentidos de su cuerpo sexuado. La sexualidad va del nacimiento a la muerte. Debemos empezar la educación sexual, mediante la aplicación de un enfoque gradual, para enseñar a los niños de los 5 a los 8 años la terminología correcta acerca de las partes del cuerpo y de sus funciones, de manera que dispongan del lenguaje necesario para formular preguntas o denunciar los abusos, la coerción o la violencia sexual pero que también les permita explorar sus cuerpos sin tabués, miedos o culpas. La educación de la sexualidad y la equidad de género en el Nivel Inicial cobra particular importancia, ya que es en esta etapa donde niños y niñas tienen menos barreras socio culturales para expresar sus inquietudes. En la cotidianidad sin prejuicios y temores, que puedan perturbar el crecimiento y desarrollo armónico. Se nace con el sexo biológico ya determinado, pero el psicológico y social ha de ser aprendido; éste se va formando poco a poco con las interacciones, las vivencias, los modelos. Los y Las representantes deben formarse también para poder explicar a hijos e hijas, pues dejar todo el peso sobre educadores y educadoras no es una buena estrategia. La LOPNA en su Artículo 43. Derecho a Información en Materia de Salud. Todos los niños y adolescentes tienen derecho a ser informados y educados sobre los principios básicos de prevención en materia de salud, nutrición, ventajas de la lactancia materna, estimulación temprana en el desarrollo, salud sexual y reproductiva, higiene, saneamiento
sanitario ambiental y accidentes. Asimismo, tiene el derecho de ser informado de forma veraz y oportuna sobre su estado de salud, de acuerdo a su desarrollo. Artículo 50. Salud Sexual y Reproductiva. Todos los niños y adolescentes tienen derecho a ser informados y educados, de acuerdo a su desarrollo, en salud sexual y reproductiva para una conducta sexual y una maternidad y paternidad responsable, sana, voluntaria y sin riesgos. A través de las manifestaciones sexuales, roles infantiles y especialmente a través de sus preguntas, podemos orientar las dudas que sobre finalidad, funcionamiento sexual, comportamientos sociales y otros temas de educación sexual presenten los niños y niñas. Como ya vimos es su derecho y nuestro deber es escuchar. La única idea preconcebida que ha de primar cuando nos dediquemos a esta noble labor ha de ser la del respeto. Sin embargo, una educación sexual no esta completa sin la explicación concreta y desprejuiciada de las orientaciones sexuales no heterosexuales. Sin que signifique promover homosexualidad entres menores de edad. La necesidad de una explicación es su derecho y así facilitaríamos el camino al descubrimiento de la orientación sexual, sin culpas para el niño o la niña visiblemente homosexual como por ejemplo: varón afeminado o hembra masculina. Es necesario recordar que la educación debe evolucionar de forme acorde con los cambios sociales, dando voz y presencia a la distintas vivencias en materia de orientación e identidad sexual, que experimentan los alumnos y alumnas. ¿Cómo lograr su pleno desarrollo si negamos la existencia de su diversidad?
Por una sexualidad sana, responsable y liberadora y por el derecho de las mujeres a decidir sobre sus propios cuerpos La soberanía del cuerpo ha sido secuestrada por el sistema capitalista patriarcal y machista, que prohíbe a la mujer siquiera pensar en la masturbación como medio exploratorio y de autoconocimiento, pues el hombre es el único medio para el placer sexual. El cuerpo de la mujer ha estado históricamente asociado con una serie de connotaciones negativas, que condenan actos como la masturbación a ser un privilegio al que pocas mujeres pueden tener acceso. La masturbación no implica ningún problema de carácter moral, los prejuicios son sociales por la cultura machista y androcentrica que tenemos aún, a pesar del proceso revolucionario y socialistas. La creencia sigue siendo que las mujeres deben ser sometidas por el hombre. Vemos como han cambiado los tiempos y como se suman al debate de la diversidad sexual y la masturbación femenina nuevas consciencias como la de Sor Margaret A. Farley monja y teóloga que recientemente escribió un libro titulado “Sólo amor: Un marco para la ética sexual cristiana", una de sus declaraciones más polémicas dice: "Las relaciones homosexuales pueden ser justificadas de acuerdo a la misma ética sexual de las relaciones y los actos heterosexuales". Además, Margaret es profesora de ética y defiende la masturbación, que permite "a las mujeres descubrir su propia capacidad para el placer, algo que algunas no han
descubierto y ni siquiera conocido en sus relaciones sexuales ordinarias con sus maridos o amantes", escribió. Otra dimensión fundamental que debe ser tomada en cuenta es el derecho de las mujeres a decidir sobre sus propios cuerpos, al poder tener la capacidad de interrumpir un embarazo no deseado cuando consideren necesario. Históricamente, los sectores más conservadores y excluyentes señalan con odio a quienes defendemos estas posturas, esgrimiendo una falsa y desfasada defensa a la vida como argumento para condenar este acto. El asunto está en que la penalización del acto no ha impedido ni impedirá nunca que está práctica continué, pues solo la mujer que gesta en su seno a otro ser humano entiende las implicaciones que dicha situación conlleva, y sólo de ella es la decisión de asumirlo o no. Se trata de un tema de salud pública a travesado por una condición de clase, donde las mujeres pobres mueren anualmente por practicarse abortos clandestinos, mientras que las mujeres ricas pueden costear uno en las mejores clínicas privadas. Necesitamos una política educativa en materia de sexualidad para que como seres humanos podamos vivir y expresar plenamente la propia orientación e identidad sexual, sin temor a sufrir discriminaciones, con toda la libertad y con la plena convicción de que nuestros derechos van a ser respetado. Necesitamos anticonceptivos gratuitos para no abortar, necesitamos abortos seguros para no morir. Consideraciones fundamentales concluyentes: • Prevenir el acoso, el sexismo, el abuso sexual y la homofobia. • Educar en la sexualidad y en la afectividad de manera normalizada. • Favorecer el respeto a las diferencias afectivo-sexuales personales y familiares. • Atender a la diversidad afectivo-sexual de las escuelas y de sus familias con la orientación de colectivos de diversidad sexual. En décadas pasadas y latitudes lejanas los movimientos antiimperialistas y anticapitalistas estuvieron abrazados con la lucha por una sexualidad plena y soberana de nuestros pueblos, Venezuela tiene que encarnar de nuevo ese espíritu maravilloso que duerme en nuestros corazones combativos. Ya defendemos con conciencia el carácter contra-hegemónico que hemos logrado alcanzar en nuestra Revolución, ahora debemos atender el llamado que han hecho diferentes grupos feministas principalmente a avanzar y decretar el carácter anti-patriarcal de nuestro proceso bolivariano. El camino está, solo tenemos que andarlo y abrirnos paso ante las adversidades, dándonos cuenta que lo importante no son las respuestas, sino las preguntas.