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1.
NOMBRE DEL MEDICAMENTO OxyContin comprimidos 10 mg, 20 mg, 40 mg y 80 mg.
2.
COMPOSICIÓN CUALITATIVA Y CUANTITATIVA Los comprimidos de 9.0 mg de oxicodona. Los comprimidos de 18.0 mg de oxicodona. Los comprimidos de 36.0 mg de oxicodona. Los comprimidos de 72.0 mg de oxicodona.
3.
10 mg contienen 10 mg de clorhidrato de oxicodona equivalentes a 20 mg contienen 20 mg de clorhidrato de oxicodona equivalentes a 40 mg contienen 40 mg de clorhidrato de oxicodona equivalentes a 80 mg contienen 80 mg de clorhidrato de oxicodona equivalentes a
FORMA FARMACÉUTICA Comprimidos de forma redonda, convexos, de liberación modificada. Los comprimidos de 10 mg son de color blanco, grabados en una cara con OC y en la otra, con un 10. Los comprimidos de 20 mg son de color rosa, grabados en una cara con OC y en la otra, con un 20. Los comprimidos de 40 mg son de color amarillo, grabados en una cara con OC y en la otra, con un 40. Los comprimidos de 80 mg son de color verde, grabados en una cara con OC y en la otra, con un 80.
4.
DATOS CLÍNICOS
4.1.
Indicaciones terapéuticas Tratamiento del dolor severo
4.2.
Posología y método de administración Los comprimidos OxyContin se deben tragar enteros, sin masticar. Adultos y ancianos: OxyContin comprimidos deben tomarse a intervalos de 12 horas. La dosificación depende de la severidad del dolor, el historial previo del paciente, necesidades analgésicas, peso corporal y sexo del paciente (las mayores concentraciones en plasma se dan en la mujer). En pacientes ancianos debilitados, pacientes que no han tomado opioides, o pacientes que presentan dolor severo no controlado con opioides más debiles, la dosis inicial usual es de 10 mg cada 12 horas. Por ello, se deberá titular la dosis cuidadosamente, diariamente si es necesario, para conseguir que el dolor remita. Se puede aumentar, siempre que sea posible, en incrementos del 25% - 50%. La dosificación correcta para cualquier paciente individual es aquella que controla el dolor y que es bien tolerada, durante un total de 12 horas. La necesidad de una medicación de escape de más de dos veces al día indica que debe aumentarse la dosificación de OxyContin comprimidos.
Conversión de morfina oral: A los pacientes a los que se les administra morfina oral antes de la terapia con OxyContin deberán recibir su dosis diaria en base a la siguiente proporción: 10 mg de oxicodona oral equivalen a 20 mg de morfina oral. Se debe subrayar que esto es una guía para la dosis requerida de OxyContin comprimidos. La variabilidad entre pacientes requiere que cada paciente sea titulado cuidadosamente para la dosis adecuada. Pacientes ancianos: Los estudios farmacocinéticos controlados en pacientes ancianos (de más de 65 años) han mostrado que en comparación con adultos más jóvenes, el aclaramiento de oxicodona se reduce sólo ligeramente. No se han observado efectos secundarios no deseables en base a la edad, por tanto, las dosis de adulto y los intervalos de dosificación son adecuados. Dolor no-maligno: El tratamiento con OxyContin deberá ser breve e intermitente a fin de minimizar el riesgo de dependencia. La necesidad de un tratamiento continuado deberá ser evaluada a intervalos regulares. Los pacientes no deberán precisar, en general, más de 160 mg por día. Dolor oncológico: Se evaluará la dosis hasta que se consiga suprimir el dolor en el paciente, salvo que lo impidan unas reacciones adversas al fármaco incontrolables. Pacientes con deterioro o insuficiencia renal o hepático: A diferencia de los preparados de morfina, la administración de OxyContin comprimidos no causa niveles significativos de metabolitos activos. No obstante, la concentración de oxicodona en plasma en este grupo de pacientes puede verse aumentada en comparación con pacientes con una función renal o hepática normal. Por tanto, la iniciación de la dosis deberá seguir un planteamiento conservador en estos pacientes, es decir, de un tercio a la mitad de la dosis habitual con una meticulosa evaluación de la dosis. En la insuficiencia hepática severa, puede que sea necesario reducir la frecuencia de la dosificación. No existen datos sobre el uso de OxyContin en pacientes sometidos a hemodiálisis. Adultos menores de 20 años y niños: No recomendado 4.3.
Contraindicaciones Depresión respiratoria, lesiones en la cabeza, íleo paralítico, abdomen agudo, vaciamiento gástrico retardado, enfermedad obstructiva severa de las vías respiratorias, asma bronquial severa, hipercarbia, sensibilidad conocida a la oxicodona, morfina u otros opioides, enfermedad hepática aguda, administración concomitante de inhibidores de la monoamino oxidasa o en las dos semanas siguientes a la discontinuación de su uso. No se ha establecido la seguridad de OxyContin utilizado pre-operatoriamente y hasta 24 horas de post-operatorio, y no puede ser recomendada.
4.4.
Advertencias y precauciones especiales de empleo Al igual que con todos los narcóticos es aconsejable una reducción de la dosificación en caso de hipotiroidismo. Utilizar con precaución en pacientes opioide-dependientes y en pacientes con elevada presión intracraneal, hipotensión, hipovolemia, y enfermedades del tracto biliar, pancreatitis, trastornos inflamatorios del intestino grueso, hipertrofia prostática, insuficiencia adrenocortical, alcoholismo agudo, enfermedad hepática y renal crónica y pacientes débiles. OxyContin comprimidos no deberá utilizarse mientras exista la posibilidad de íleo paralítico. Si se sospecha de íleo paralítico o se produce durante su utilización, deberá discontinuarse OxyContin comprimidos de forma inmediata. Al igual que con todas las preparaciones opioides, aquellos pacientes que se sometan a una cordotomía u otros procedimientos
quirúrgicos que alivien el dolor, no deberán recibir OxyContin comprimidos durante las 24 horas previas a la intervención. Si se indica un tratamiento posterior con OxyContin comprimidos, la dosis deberá ajustarse a las nuevas necesidades post-operatorias. Al igual que con todas las preparaciones opioides, OxyContin comprimidos deberá administrarse con precaución tras la intervención abdominal, ya que se sabe que los opioides causan disfunción de la motilidad intestinal y no deberán utilizarse hasta que el facultativo esté seguro de una función intestinal normal. Puede producirse dependencia física en pacientes tratados con oxicodona. Una supresión drástica del fármaco o la administración de un opioide antagonista puede ser causa de síndrome de abstinencia. Cuando los pacientes ya no necesiten terapia con OxyContin comprimidos los sometidos a dosis de 20 – 60 mg/día pueden normalmente detener la terapia de forma drástica y sin consecuencias. Las dosis más elevadas deberán reducirse a lo largo de varios días, de forma que la dosis diaria se reduzca en aproximadamente el 50% durante los dos primeros días y luego en adelante un 25% cada dos días, hasta que el total de la dosis diaria alcance la dosis recomendada para pacientes intactos a los opioides, es decir, 10 mg cada 12 horas. En ese momento la terapia puede discontinuarse. OxyContin comprimidos 80 mg está indicado para su uso solamente en pacientes con tolerancia a los opioides y que requieran dosis diarias de oxicodona de 160 mg o más. Se deberá tener cuidado en la prescripción de la concentración de este comprimido. Los comprimidos contienen 69.25 mg (comprimidos de 10 mg), 59.25 mg (comprimidos de 20 mg), 35.25 mg (comprimidos de 40 mg) y 78.50 mg (comprimidos de 80 mg). de lactosa por comprimido. 4.5.
Interacciones con otros medicamentos y otras formas de interacción OxyContin deberá utilizarse con precaución y se reducirá la dosis en pacientes que usen depresores del sistema nervioso central, ya que los opioides potencian los efectos de las fenotiacinas, antidepresivos tricíclicos, anestésicos, hipnóticos, sedantes, alcohol, miorelajantes y anti-hipertensivos. Se sabe que los inhibidores de la monoaminoxidasa pueden modificar la acción de los analgésicos narcóticos produciendo excitación del SNC o depresión con crisis hiper o hipotensiva. La oxicodona es metabolizada por el sistema enzimático citocromo P-450, pero no se ha establecido una evaluación completa de las interacciones con otros fármacos metabolizados por esta vía. La administración concomitante de quinidina, un inhibidor del citocromo P450-2D6, resultó en un incremento del 11 % de la Cmax de Oxicodona, del 13 % del AUC y del 14 % en el t½ de eliminación, observandose también un aumento en el nivel de noroxicodona. No resultaron alterados los efectos farmacodinámicos de Oxycontin. Esta interacción puede observarse para otros inhibidores potentes del enzima citocromo P450-2D6. La cimetidina y los inhibidores o sustratos del citocromo P450-3A4, tales como el ketoconazol y la eritromicina pueden inhibir el metabolismo de la oxicodona.
4.6.
Embarazo y lactancia OxyContin comprimidos no está recomendado para su uso durante el embarazo. La oxicodona se excreta con la leche materna y puede causar depresión respiratoria en el lactante. OxyContin comprimidos no deberá por tanto utilizarse en madres en periodo de lactancia.
4.7.
Efectos sobre la capacidad para conducir y utilizar maquinaria La oxicodona puede modificar las reacciones del paciente en diversos grados, dependiendo de la dosis y de la susceptibilidad individual. Los pacientes afectados no deberán conducir o manejar máquinas.
4.8.
Reacciones adversas Las reacciones adversas del fármaco son las típicas de los agonistas opioides y tienden a disminuir con el tiempo, a excepción del estreñimiento. Una previsión de las reacciones adversas del fármaco y un tratamiento adecuado del paciente pueden mejorar la aceptabilidad. Al igual que con otros opioides, el efecto secundario más severo es la depresión respiratoria, más probable en ancianos, y en pacientes débiles o que no toleran los opioides. Las reacciones adversas más frecuentes (más de un 10%) observadas durante los ensayos clínicos fueron estreñimiento, somnolencia, náusea, mareo, vómitos y prurito. Si la náusea y el vómito son molestos, la oxicodona puede combinarse con un antiemético. El estreñimiento debe tratarse con los laxantes adecuados. Ocasionalmente (1-10 %) dolor abdominal, astenia, edema, fiebre, cefaleas, vasodilatación, anorexia, diarrea, sequedad de boca, dispepsia, sueños anómalos, ansiedad, confusión, depresión, insomnio, parestesia, falta de fluidez en el pensamiento, síndrome de supresión, disnea, escozor, sudoración y trastornos urinarios. Raramente se registraron los siguientes efectos adversos (