Pensamientos y Cosas. El Gran Secreto de Rafael. por Dr. Jean Mallinger, F.R.C

Pensamientos y Cosas El Gran Secreto de Rafael por Dr. Jean Mallinger, F.R.C. Revista “El Rosacruz” Enero 1949 Este artículo revela por primera vez e
Author:  Jorge Murillo Rey

4 downloads 75 Views 416KB Size

Recommend Stories


LOS PENSAMIENTOS SON COSAS
Los Pensamientos son Cosas LOS PENSAMIENTOS SON COSAS ERNEST HOLMES Y WILLIS KINNEAR ...las cosas que hay en tu vida y los pensamientos que hay detr

El Secreto Conozca el poder de los pensamientos positivos para lograr resultados positivos por Rhonda Byrne
Libros de Gerencia Resumidos El Secreto Conozca el poder de los pensamientos positivos para lograr resultados positivos por Rhonda Byrne RESUMEN EJE

Primer gran secreto de persuasión
                  EL  SECRETO  OCULTO:  LA  PERSUASIÓN     En  este  primer  módulo  de  Persuasión-­‐X  hablaremos  de  este  misterioso  secreto  oc

Sr. Dr. Rafael Montoro
Sr. Dr. Rafael Montoro Mi ilustre amigo: Al dedicarle a usted Las impuras, cumplo gustoso el deber que me he impuesto de unir el nombre de cada uno de

y el antidoto secreto
VEGETTA-Wigetta y el antidoto secreto.indd 2 2/10/16 11:42 AM VEGETTA-Wigetta y el antidoto secreto.indd 1 2/10/16 11:42 AM y el antidoto secret

Story Transcript

Pensamientos y Cosas

El Gran Secreto de Rafael por Dr. Jean Mallinger, F.R.C. Revista “El Rosacruz” Enero 1949 Este artículo revela por primera vez en español la gran lección esotérica que contiene el famoso fresco “La Escuela de Atenas”, pintado por el célebre artista e iniciado, Rafael. El autor, Jean Mallinger, es canciller de la FUDOSI, la federación de las órdenes esotéricas, arcanas, auténticas, del mundo. Él preparó este artículo con información que se conserva en los archivos de la FUDOSI en Bélgica. Para poder apreciar bien las extraordinarias revelaciones que contiene el texto de este artículo, el lector puede contemplar la reproducción del cuadro de Rafael que se incluye. LA REDACCIÓN

E

del arte que haya tenido la suerte de visitar el Palacio del Vaticano en Roma, donde tantas obras de arte maravillosas se ofrecen a su vista, no puede menos que sentir una especial emoción interna cuando entra al Cuarto de la Gracia1, edificado por el Papa Nicolás V y decorado por Rafael2 entre 1508 y 1511. L AMANTE

El amante del arte sentirá no solamente una admiración reverente que surge en su interior ante tan magníficas obras maestras, sino que, además, algunos de los cuadros tendrán un efecto extraño e inexplicable en él. El alma de quien contempla percibe en esas obras de arte las vibraciones espirituales del artista, un mensaje sutil y a veces difícil de interpretar.

Camera della Segnatura di Grazia. Raffaello Sanzio (Urbino, 6 de abril de 1483 – Roma, 7 de abril de 1520), también conocido como Rafael de Urbino o, simplemente, como Rafael; fue un pintor y arquitecto italiano del Alto Renacimiento. Además de su labor pictórica, que sería admirada e imitada durante siglos, realizó importantes aportes en la arquitectura y, como inspector de antigüedades, se interesó en el estudio y conservación de los vestigios grecorromanos. A los 25 años obtuvo su primer encargo oficial, la decoración de las Estancias Vaticanas, donde pintó algunos frescos como La escuela de Atenas, considerado una de sus obras cumbre. Es célebre por la perfección y gracia de sus artes visuales, destacando en trabajos de pintura y dibujo artístico. Nació en Viernes Santo y falleció en esta misma festividad el día que cumplió 37 años. 1 2

El Gran Secreto de Rafael

Pero en este salón hay algo más que nos impresiona y despierta nuestras emociones. Después que hemos admirado la bóveda donde están representadas la teología, la poesía, la justicia y la filosofía, y el muro donde está el memorable fresco titulado La Controversia del Santísimo Sacramento, si nos volvemos nos hallaremos cara a cara con el misterioso fresco titulado La Escuela de Atenas, que para el Iniciado Místico es la confesión del gran secreto de Rafael. Es en esta obra imperecedera donde el gran artista, que desgraciadamente iba a morir pronto3, abrió por primera vez su alma a los visitantes capaces de comprender el lenguaje secreto de los símbolos. En este cuadro de la imponente reunión de los grandes filósofos de la Antigua Grecia, los Iniciados han podido descubrir algo más que la simple glorificación de sus conocimientos, algo más, además de la exaltación de la espiritualidad griega. Por medio del lenguaje inequívoco de los signos y de los movimientos de las manos, por medio de la elección profunda y juiciosa de símbolos y alegorías, por medio del orden en que están dispuestos los personajes, por medio de la intención oculta de los menores detalles, Rafael nos reveló así su gran secreto. 3

El Viernes Santo de 1520, cuando sólo tenía 37 años de edad.

El Gran Secreto de Rafael En esta ciudad de Roma, que fue al mismo tiempo cristiana, mística y caballeresca, a la vez que profundamente imbuida de humanismo y de cultura clásica, Rafael dio pruebas incuestionables de que era un verdadero iniciado. Como el número de iniciados es muy limitado en la masa de la humanidad, solamente muy pocos han percibido los signos y han contestado a su llamada. Pero los iniciados Pitagóricos sintieron inmediatamente un profundo y vivo placer al leer este libro oculto del Maestro y al reconocer su confesión de afiliación fraternal. Cuando el no iniciado, el profano, mira La Escuela de Atenas, contempla un inmenso salón donde las personalidades más eminentes de la Antigua Sabiduría están presentes, los unos junto a los otros, como si todos hubieran sido contemporáneos. El visitante profano reconocerá fácilmente algunos filósofos célebres. En el centro del cuadro, el “Divino Platón4” tiene en su mano izquierda su interesante tratado pitagórico llamado El Timeo5. Con su mano derecha señala hacia el cielo, el asiento de las Ideas Eternas y la morada de los Inmortales. Cerca de ética al tener esencial

de él, Aristóteles6, que tiene en su mano, cerca de su rodilla, su curso titulado Principios Éticos a Nicomaco, nos recuerda el mundo material en su brazo derecho horizontalmente, señalando así la importancia de la experiencia humana en las cosas sensibles.

Sentado en las gradas, frente a ellos, el famoso Diógenes7, el Cínico, semiPlatón (Atenas o Egina, ca. 427–347 a. C.) fue un filósofo griego seguidor de Sócrates y maestro de Aristóteles. En 387 fundó la Academia, institución que continuaría su marcha a lo largo de más de novecientos años y a la que Aristóteles acudiría desde Estagira a estudiar filosofía alrededor del 367, compartiendo, de este modo, unos veinte años de amistad y trabajo con su maestro. Platón participó activamente en la enseñanza de la Academia y escribió, siempre en forma de diálogo, sobre los más diversos temas, tales como filosofía política, ética, psicología, antropología filosófica, epistemología, gnoseología, metafísica, cosmogonía, cosmología, filosofía del lenguaje y filosofía de la educación; intentó también plasmar en un Estado real su original teoría política, razón por la cual viajó dos veces a Siracusa, Sicilia, con intenciones de poner en práctica allí su proyecto, pero fracasó en ambas ocasiones y logró escapar penosamente y corriendo peligro su vida debido a las persecuciones que sufrió por parte de sus opositores. 5 El Timeo (Τίμαιος) es un diálogo escrito por Platón en torno al año 360 a. C. Precede al Critias o La Atlántida, y es considerado como el más influyente en toda la filosofía y ciencia posteriores. Su contenido profundiza esencialmente en tres problemas: (1) el cosmogónico, sobre el origen del universo; (2) el físico, sobre la estructura de la materia; y (3) el antropológico, sobre la naturaleza humana. 6 Aristóteles (384 a. C. – 322 a. C.) fue un polímata: filósofo, lógico y científico de la Antigua Grecia cuyas ideas han ejercido una enorme influencia sobre la historia intelectual de Occidente por más de dos milenios. Aristóteles escribió cerca de 200 tratados (de los cuales sólo nos han llegado 31) sobre una enorme variedad de temas, incluyendo lógica, metafísica, filosofía de la ciencia, ética, filosofía política, estética, retórica, física, astronomía y biología. Aristóteles transformó muchas, si no todas, las áreas del conocimiento que tocó. Es reconocido como el padre fundador de la lógica y de la biología, pues si bien existen reflexiones y escritos previos sobre ambas materias, es en el trabajo de Aristóteles donde se encuentran las primeras investigaciones sistemáticas al respecto. Entre muchas otras contribuciones, Aristóteles formuló la teoría de la generación espontánea, el principio de no contradicción, las nociones de categoría, sustancia, acto, potencia, etc. Algunas de sus ideas, que fueron novedosas para la filosofía de su tiempo, hoy forman parte del sentido común de muchas personas. 7 Diógenes de Sínope, también llamado Diógenes el Cínico, fue un filósofo griego perteneciente a la escuela cínica. Nació en Sínope, hacia el 412 a. C. y murió en Corinto en el 323 a. C. No legó a la 4

El Gran Secreto de Rafael vestido, lee con expresión desdeñosa un escrito que se está preparando a refutar con una de esas réplicas feroces por las que tan bien se le conoce. El famoso Sócrates8, vestido de verde, es también fácil de reconocer, de pié hacia el lado izquierdo de Platón, dando la espalda a él, mientras hace una exposición de sus teorías. Vemos que el artista pintó a Sócrates tal como era en Atenas: corpulento, con la parte anterior de la cabeza calva y su nariz redonda no muy hermosa a la vista. Entre los que lo escuchan hay un joven con traje de soldado, que parece ser Alcibíades9; todos conocen el bello elogio que hizo él de Sócrates en el Symposium de Platón. Más abajo, hacia el lado izquierdo, está el grupo de los matemáticos, físicos, músicos y psicólogos. Entre ellos es fácil reconocer al gran Pitágoras10. Está sentado a la izquierda y está escribiendo notas en un libro; un hombre de Oriente está atisbando hacia el libro, tratando de leerlo, probablemente Nicómaco de Gerasa11, el matemático; cerca de él, de pié, hay un joven hermoso, de traje blanco, que representa a Lisis12, el amanuense y discípulo favorito del Maestro de Samos13. Detrás de Lisis está un anciano arrodillado, tomando notas; es Filolao de

posteridad ningún escrito; la fuente más completa de la que se dispone acerca de su vida es la extensa sección que su tocayo Diógenes Laercio le dedicó en su Vidas, opiniones y sentencias de los filósofos más ilustres. Según él, la virtud es el soberano bien. La ciencia, los honores y las riquezas son falsos bienes que hay que despreciar. El principio de su filosofía consiste en denunciar por todas partes lo convencional y oponer a ello su naturaleza. El sabio debe tender a liberarse de sus deseos y reducir al máximo sus necesidades. 8 Sócrates de Atenas (470 – 399 a. C.) fue un filósofo clásico ateniense considerado como uno de los más grandes, tanto de la filosofía occidental como de la universal. Fue maestro de Platón, quien tuvo a Aristóteles como discípulo, siendo estos tres los representantes fundamentales de la filosofía de la Antigua Grecia. 9 Alcibíades Clinias Escambónidas (c. 450 – 404 a. C.) fue un prominente estadista, orador y general ateniense, hijo de Clinias y miembro de la familia aristocrática de los Alcmeónidas, del demo de Escambónidas, que tuvo un papel destacado en la segunda fase de la guerra del Peloponeso como consejero estratégico, comandante y político. 10 Pitágoras de Samos (ca. 580 a. C. – ca. 495 a. C.) fue un filósofo y matemático griego considerado el primer matemático puro. Contribuyó de manera significativa en el avance de la matemática helénica, la geometría y la aritmética, derivadas particularmente de las relaciones numéricas, y aplicadas por ejemplo a la teoría de pesos y medidas, a la teoría de la música o a la astronomía. Es el fundador de la Hermandad Pitagórica, una sociedad que, si bien era de naturaleza predominantemente religiosa, se interesaba también en medicina, cosmología, filosofía, ética y política, entre otras disciplinas. El pitagorismo formuló principios que influyeron tanto en Platón como en Aristóteles y, de manera más general, en el posterior desarrollo de la matemática y en la filosofía racional en Occidente. 11 Nicómaco de Gerasa (también Nicomachus, c. 100 d.C., Gerasa, actualmente Jerash, en Jordania), fue un filósofo y matemático neopitagórico. Autor de la obra de gran influencia Arithmetike eisagoge (Introducción a la aritmética), un tratado en donde aborda la teoría de los números. El tratado se constituyó en manual de base de las escuelas platónicas; traducido en varias ocasiones, fue considerado una autoridad durante diez siglos. Poco se sabe de la vida de Nicómaco con certeza, excepto que venía de Gerasa y que era pitagórico. 12 En orden a Lysis, se sabe que vivió en Tebas y que fue maestro de Epaminondas. 13 Francesco María de la Rovere posó para este personaje.

El Gran Secreto de Rafael Crotona14, cuyas obras compró Platón. De pié, con el pié izquierdo apoyado sobre un bloque de mármol, “tallado y pulido”, Arquitias de Tarento15 tiene en sus manos el libro secreto de las enseñanzas místicas, cuya cubierta tiene cuatro sellos. Finalmente, perdido en su meditación, apoyado con el codo sobre una mesa de mármol, el célebre Empédocles16 escribe su Katharmoi17. Hacia el lado derecho del cuadro podemos ver, en la parte superior, vestido de rojo, a Pirrón el Escéptico18, que señala con la punta del dedo la Tierra, reino de la materia. Más abajo, varios geómetras y astrónomos están atareados trabajando: vemos a Arquímedes19 exponiendo un teorema geométrico a varios discípulos20; Zoroastro21, de pié, tiene en la mano la esfera celestial, mientras que Ptolomeo22, cuya cabeza lleva, por error, una corona real23, tiene un globo terráqueo24. Filolao de Crotona (h. 470 – h. 385 a. C.)1 fue un matemático y filósofo griego pitagórico y presocrático. Consideró que toda la materia está compuesta por cosas limitantes e ilimitadas, y que el universo está determinado por números. Se le atribuye haber originado la hipótesis de que la Tierra no era el centro del Universo. Fue discípulo de Pitágoras y participó y desarrolló la cosmología pitagórica entendiendo un universo regular, predecible y aritmético en el cual giran planetas y astros. 15 Arquitas de Tarento (c. 430 a. C. – c. 360 a. C.) fue un filósofo, matemático, astrónomo, estadista, general y contemporáneo de Platón. Perteneció a los Pitagóricos, alumno de la escuela de Filolao de Crotona. Fue amigo de Platón, al que conoció durante el primer viaje que éste realizó al sur de Italia y a Sicilia en 388/7 a. C., tras la muerte de Sócrates. 16 Empédocles de Agrigento (Agrigento, h.495/490 – h.435/430 a. C.), fue un filósofo y político democrático griego. Cuando perdió las elecciones fue desterrado y se dedicó al saber. Postuló la teoría de las cuatro raíces, a las que Aristóteles más tarde llamó elementos, juntando el agua de Tales de Mileto, el fuego de Heráclito, el aire de Anaxímenes y la tierra de Jenófanes las cuales se mezclan en los distintos entes sobre la Tierra. Estas raíces están sometidas a dos fuerzas, que pretenden explicar el movimiento (generación y corrupción) en el mundo: el Amor, que las une, y el Odio, que las separa. Estamos, por tanto, en la actualidad, en un equilibrio. Esta teoría explica el cambio y a la vez la permanencia de los seres del mundo. 14

17 18

Las Purificaciones.

Pirrón de Elis (Elis, ca. 360 – ca. 270 a. C.) fue un filósofo griego de la Antigüedad clásica, y se le considera el primer filósofo escéptico, y la inspiración de la escuela conocida como pirronismo fundada por Enesidemo en el siglo I a. C. Era natural de Elis –ciudad provincial al noroeste del Peloponeso, Grecia–. Hizo de la duda el problema central de toda su filosofía. 19 Arquímedes de Siracusa (Siracusa (Sicilia), ca. 287 a. C. – ibídem, ca. 212 a. C.) fue un matemático griego, físico, ingeniero, inventor y astrónomo. Aunque se conocen pocos detalles de su vida, es considerado uno de los científicos más importantes de la antigüedad clásica. Entre sus avances en física se encuentran sus fundamentos en hidrostática, estática y la explicación del principio de la palanca. Es reconocido por haber diseñado innovadoras máquinas, incluyendo armas de asedio y el tornillo de Arquímedes, que lleva su nombre. Se considera que Arquímedes fue uno de los matemáticos más grandes de la antigüedad y, en general, de toda la historia. 20 Posó para él Bramante. 21 Zoroastro es el nombre del profeta fundador del mazdeísmo (o zoroastrismo). Se sabe poco o nada de él de manera directa, y las pocas referencias que se conocen están rodeadas de misterio y leyenda. Durante su vida, Zoroastro se mostró fuertemente en contra de las religiones politeístas presentes en la zona del valle del Indo, la meseta oriental del Gran Irán y las márgenes y oasis del río Oxus. 22 Claudio Ptolomeo, llamado comúnmente en español Ptolomeo o Tolomeo (Tolemaida, Tebaida, c. 100 – Cánope, c. 170), fue un astrónomo, astrólogo, químico, geógrafo y matemático greco-egipcio. 23 Porque no debe confundírsele con los reyes de esa dinastía. 24 Las facciones de Zoroastro nos recuerdan al Cardenal Bembo.

El Gran Secreto de Rafael Lo que los críticos de arte no iniciados también han descubierto es que, en este fresco maravilloso, Rafael no vaciló en pintarse a sí mismo. Puede vérsele a la extrema derecha con una capa blanca, cerca de su amigo Sodoma25, que lleva una capa de color rojo oscuro. Tales son, más o menos, los puntos principales que la ciencia histórica genuina ha podido hallar en este célebre cuadro. Pero de lo demás, de la parte esencial, no ha descubierto nada, pues toca a los iniciados el revelarlo. Θ

Θ

Θ

Por primera vez, hemos recibido autorización para revelar en parte el maravilloso secreto de Rafael. En esta obra hay una revelación cuádruple: (1) La de la asociación del joven pintor con la Orden de Pitágoras; (2) la del principio de la Iniciación Tradicional; (3) la de la intención de recordar los mayores secretos de la Tradición Egipto-Helénica; (4) la de recordarnos los signos principales de reconocimiento de las órdenes iniciáticas tradicionales. Ahora, acerquémonos para recoger este instructivo tesoro de flores ocultas. ¿Fue Rafael un Pitagórico? Lo ha demostrado de manera obvia. Comienza por pintarse a sí mismo en el fresco, para que no hubiera duda acerca de la realidad de su afiliación en la orden iniciática. En vez de pintarse él mismo con el traje pintoresco de su época, se exhibe modesta y sencillamente ataviado con la capa blanca, la vestidura obligatoria y ritualística de la Orden en todas partes del mundo donde floreció y donde florece todavía. No nos sorprenderemos de que fuera él un iniciado cuando sepamos que dio hospitalidad en su casa a un viejo filósofo pitagórico al que había escogido como su maestro: a Fabio Calvo26, de Rávena, de quien fue al mismo tiempo huésped generoso, discípulo sincero y amigo fiel. Como una prueba más de su infinita gratitud para con su viejo iniciador, el joven artista no vaciló en inmortalizar su rostro en el propio centro del cuadro. Si miramos atentamente a la hermosa cabeza de Platón, veremos que es, en realidad, el rostro noble, hermoso, imponente e inspirado del amable sabio Calvo de Rávena, arqueólogo, físico, filólogo27 y padre espiritual de Rafael28.

Giovanni Antonio Bazzi o Giovanni Antonio de' Bazzi e incluso Giovanni Antonio Razzi, más conocido por el apodo de El Sodoma (Vercelli 1477 – Siena, 15 de febrero de 1549). Pintor italiano ubicado entre el Renacimiento y el manierismo. El papa Julio II le encomendó la decoración de la Estancia de la Signatura en el Palacio Vaticano; en el fresco La escuela de Atenas (1509 – 1511) el Sodoma está representado próximo a Rafael. 26 Marco Fabio Calvo (Ravena, c. 1440 – Roma, 1527), fue un filólogo, anticuario, matemático, humanista y médico italiano. 27 filología. (Del lat. philologĭa, y este del gr. φιλολογία). f. Ciencia que estudia una cultura tal como se manifiesta en su lengua y en su literatura, principalmente a través de los textos escritos. 25

El Gran Secreto de Rafael Por otra parte, para establecer de manera irrefutable el perfecto conocimiento que tenía de los secretos de la Orden de Pitágoras, Rafael llenó el cuadro con los símbolos privados de la Orden. Es un hecho que la Orden incluía cuatro grados de estudios graduados. Estos cuatro escalones de la sabiduría están claramente señalados en los cuatro escalones de mármol que conducen hasta Platón; están también simbolizados en las cuatro bóvedas sucesivas que, desde el fondo del fresco hasta el primer término, se siguen unas a otras sin ser iguales. La más lejana, con la forma sencilla de un arco de triunfo, no tiene adorno ni símbolo, porque el iniciado que comienza los estudios filosóficos es, todavía, inculto, y debe poblar su mente de conocimientos útiles. La segunda bóveda lleva dos columnas en su parte superior, que nos recuerdan al Binario Tradicional de todas las sectas. La tercera muestra las dos divinidades principales del Olimpo, a la izquierda, el Dios del Sol, de las Artes, de la Luz, de la Poesía, del Amor: Apolo29; al lado derecho, con su casco, Minerva-Atenea30, diosa de la sabiduría y de la lógica. Finalmente, bajo la cuarta bóveda están los personajes del mundo antiguo, y esta bóveda tiene un dibujo que amplifica a la famosa esvástica iniciática. Es también un hecho que el Pitagorismo contenía un símbolo secreto: La sagrada Tetraktys, Década, “el principio y la raíz de la Naturaleza Eterna”, según se lee en los Versos Dorados. Este símbolo esencial del Pitagorismo está claramente representado en el fresco, pero, por ser un símbolo secreto, está hábilmente disimulado. A primera vista no lo veremos; pero si observamos con cuidado veremos la Santa Tetraktys en la parte inferior de una pizarra que está a los pies de Pitágoras, bajo la forma de diez puntos encerrados en un triángulo y, detalle precioso, el efecto de esta disposición es transformar el dibujo de un tubo en forma de U en la famosa letra Y, que es otro símbolo que pertenece a los secretos esenciales de la Orden. Por otra parte, el cuadrado, que es un símbolo exotérico de la Orden, está representado claramente en el piso del Templo de la Sabiduría. Los Rasgos Característicos de la Iniciación y los Signos de Reconocimiento Este valiosísimo fresco es algo más que una simple reunión de filósofos. Debe agregarse que el iniciador sobrevivió a su discípulo favorito, pues falleció siete años después de la muerte de Rafael, como mártir, bajo los ataques de la soldadesca española que saqueó a Roma en 1527. 29 Apolo es uno de los más importantes y polifacéticos dioses olímpicos de la mitología griega y romana. El ideal del kuros (joven imberbe), Apolo ha sido reconocido variadamente como dios de la luz; la verdad y la profecía; el tiro con arco; la medicina y la curación; la música, la poesía y las artes; y más. 30 En la mitología griega, Atenea o Atena, también conocida como Palas Atenea, es la diosa de la guerra, civilización, sabiduría, estrategia, de las artes, de la justicia y de la habilidad. Es una de las principales divinidades del panteón griego y una de los doce dioses olímpicos. En la mitología romana Minerva es la diosa de la sabiduría, las artes, las técnicas de la guerra, además de la protectora de Roma y la patrona de los artesanos; se corresponde con Atenea en la mitología griega. 28

El Gran Secreto de Rafael Rafael quería señalar claramente la iniciación tradicional. Al lado izquierdo del cuadro vemos claramente la figura de un joven neófito que es introducido a sus maestros. No está “ni desnudo ni vestido”, esto es, exactamente como debe estar un postulante; tiene en la mano su testamento filosófico, donde ha inscrito la historia de su vida, una confesión de lo que es, en su yo interno; sus dos padrinos lo protegen, lo acompañan y lo presentan; uno de ellos lo lleva del brazo y parece estar proclamando: “Aquí está el candidato”. Y, para que no haya duda alguna acerca de este significado, Rafael muestra, directamente debajo del neófito, el símbolo más preciso de la iniciación: Un antiguo sacerdote coronado de laureles, leyendo la fórmula de admisión en un gran libro litúrgico; y el nuevo nacimiento del candidato está claramente representado por el niño a quien el anciano sostiene en sus brazos al presentarlo. Ese es, en verdad, el fruto inmediato de la iniciación: Es una nueva vida; y el neófito nace a un nuevo concepto del mundo, a una existencia espiritualizada. Para probar, esta vez de manera incuestionable, que él conoce todos los signos secretos por medio de los cuales pueden reconocerse los iniciados de todos los tiempos, aunque haya presencia profana, Rafael ha pintado varios de sus personajes haciendo signos precisos y definidos con la mano que serán reconocidos inmediatamente por quienes los conocen y a quienes han sido dados de acuerdo con la regla tradicional: “De maestro a discípulo”. Desgraciadamente, aquí estamos limitados por el secreto tradicional y no podemos revelarlos, porque estaríamos entonces traicionando la ley iniciática del silencio; pero los Martinistas, Hermetistas y Rosacruces reconocerán inmediatamente y sin esfuerzo, diez signos inequívocos que pertenecen a los secretos históricos de estas Hermandades. Ningún profano31 puede sospecharlos o verlos, y por consiguiente este significado del cuadro queda oculto para él. Es ciertamente aquí donde el genio de Rafael acumuló un sumario único de la mayor parte de las enseñanzas iniciáticas tradicionales. Como ejemplo podemos citar el Binario. El mundo está regido por dos fuerzas contrarias y opuestas. Estas dos polaridades están representadas en la vida diaria por los dos sexos, los dos polos de un imán, atracción y repulsión, vida y muerte, alegría y dolor, día y noche, bien y mal. Los Antiguos nos recordaban la existencia Cósmica de estas dos corrientes por medio del Yang-Ying32, o por las dos columnas de los Templos33, o por los dos Dadóforos34; también por el Sol y la Luna, las dos torres de las catedrales, o los dos Pilones de los Templos Egipcios. Siguiendo cuidadosamente las lecciones recibidas en el momento de su iniciación, Rafael muestra la existencia de esta gran ley cósmica cuando sitúa 31 32 33 34

No iniciado. China. Templos Esenios. Culto Mitraico.

El Gran Secreto de Rafael dos columnas en el aire, por encima del segundo arco o bóveda. Este Binario está también simbolizado por las dos grandes divinidades iniciáticas: Apolo al lado izquierdo, y Atenea hacia el lado derecho. Si dividimos imaginariamente el fresco en dos partes iguales, nos sorprenderá observar cuán exacta y armoniosamente ha colocado el pintor a los filósofos, ya en la corriente solar y activa35 o en la corriente opuesta36. Apolo está con su lira; su cuerpo lleno de gracia se apoya ligeramente en una columna; está cantando o recitando versos. Él significa la inspiración, la poesía, la iniciación. Bajo su irradiación es que el neófito es introducido a la vida espiritual, y que el sacerdote coronado lee su santa liturgia; y bajo su irradiación es también como Platón, Sócrates, Pitágoras y Empédocles37, padres del idealismo, están colocados, trabajando o discutiendo. Por otra parte, el lado pasivo, el de la diosa Atenea, nos recuerda no la espiritualidad, sino la materia. La diosa no está desnuda ni parcialmente descubierta; al contrario, lleva su casco y está armada con una lanza y un escudo. Simboliza la lucha por la vida diaria. El sentido común, los cuidados materiales, útiles y necesarios de la vida. Bajo su influencia están los viajeros, los matemáticos, los astrónomos, los eruditos que se ocupan de las aplicaciones concretas, Pirrón, que señala a la Tierra, antítesis del cielo, y hasta el ciego que va a tientas en la oscuridad, buscando vanamente la luz. Es también en el lado de ella donde Diógenes está sentado y niega todo lo que es elevado, y donde está Aristóteles, que lleva todas las cosas al sentido común y a la realidad estricta. Es una verdad psicológica que el hombre es llevado a menudo hacia el sentimentalismo, hacia el lirismo,38 haciéndose inapropiado para las contingencias materiales, desarmado para las dificultades terrenas, desanimado, demasiado idealista y amable; y que, por el contrario, su joven esposa tiene el sorprendente don del manejo enérgico de la casa, de comprender rápidamente las cosas, habilidad para luchar y trabajar con obstinación y brío, para tener una desconfianza espontánea e intuitiva de los adversarios, y también el verdadero don para todo lo que se refiere al dinero. Algunas personas podrían decir: ¿Pero por qué Rafael, el pintor, se situó en el lado negativo y no en el lado solar, donde representó a su iniciador, el lado de Apolo, el lado positivo? Nos basta estudiar la vida de Rafael para comprenderlo. Él fue siempre modesto, tímido, suave, a veces débil: nunca quiso descollar demasiado, ni ocupar el primer puesto; era un idealista, indudablemente iluminado, pero ligado a los poderosos de la Tierra que, por bien de la humanidad, le encomendaron obras maravillosas; pero él compensa el lugar humilde en que

35 36 37 38

Apolo. Atenea. Para citar sólo los principales. lirismo. m. Expresión profunda de emoción y exaltación de la intimidad, generalmente en literatura.

El Gran Secreto de Rafael se colocó39 ataviándose con la capa blanca de los Iniciados. Por otra parte, es bien sabido que durante toda su vida muchas personalidades importantes se sintieron atraídas hacia Rafael por su carácter encantador, y porque tenía el precioso don de hacer amigos con facilidad. Era lo contrario de Miguel Ángel40, que era algo agresivo, celoso y arrogante. Rafael tenía vivacidad y era amable con todos, y Roma se sumió en el dolor cuando él falleció. El Iniciado se conoce, en verdad, por esta aura de amor que lo rodea, por esta radiación de amabilidad y de pronta compasión. Rafael es el verdadero tipo del artista lleno de simpatía, de ojos puros, rodeado por una especie de vibración angelical. ¿Hay otros factores en la vida de Rafael que nos permitan confirmar nuestra afirmación Pitagórica? ¿Se ocupó él de otras cosas iniciáticas? A esto también contestaremos en la afirmativa. Recordemos que es autor también de otras obras iniciáticas importantes, como el Apolo y Marsias41, que es uno de los mitos del Pitagorismo menos velados que podamos hallar. En especial, en los muros de la Basílica Pitagórica de Porta Maggiore, descubierta en Roma en 1917, y que procede del primer siglo después de Cristo, Apolo figura como el símbolo del Iniciado que condena al profano Marsias, que se atrevió a desafiarlo, y que fue derrotado en el encuentro. El cuadro fue inspirado en los versos del poeta pitagórico Ovidio42, quien narra el suceso en el Canon Sexto de sus Metamorfosis. Rafael pintó también la encantadora historia de Eros y Psyche43, que fue Sodoma también era un pintor contratado, y lo colocó a su lado. Michelangelo Buonarroti (Caprese, 6 de marzo de 1475 – Roma, 18 de febrero de 1564), conocido en español como Miguel Ángel, fue un arquitecto, escultor y pintor italiano renacentista, considerado uno de los más grandes artistas de la historia tanto por sus esculturas como por sus pinturas y obra arquitectónica. Triunfó en todas las artes en las que trabajó, caracterizándose por su perfeccionismo. 41 Marsias (Μαρσύας), en la mitología griega, era un sátiro que desafió a Apolo en un concurso musical. Se creía que había nacido en Celenas (Frigia), en la fuente principal del río Meandro. Marsias era un experto tocando el aulós, una especie de flauta doble. Había hallado el instrumento en el suelo, donde lo dejó su inventora Atenea, después de que los demás dioses se burlaran de cómo hinchaba las mejillas al tocarlo. 42 Publio Ovidio Nasón (Publius Ovidius Naso, Sulmona, 20 de marzo del 43 a. C. – Tomis, actual Constanza, 17 d. C.) fue un poeta romano. Sus obras más conocidas son Arte de amar y Las metamorfosis, obra esta última en verso que recoge relatos mitológicos procedentes del mundo griego adaptados a la cultura latina de su época. 43 Psique (en latín Psyche, en griego Ψυχή), divinidad griega y protagonista de un mito latino, es la personificación del alma. Según la historia, inmortalizada por Apuleyo en su Metamorfosis (El asno de oro), Psique era la menor y más hermosa de tres hermanas, hijas de un rey de Anatolia. Afrodita, celosa de su belleza, envió a su hijo Eros (Cupido) para que le lanzara una flecha que la haría enamorarse del hombre más horrible y ruin que encontrase. Sin embargo, Eros se enamoró de ella y lanzó la flecha al mar; cuando Psique se durmió, se la llevó volando hasta su palacio. Para evitar la ira de su madre, una vez que tiene a Psique en su palacio, Eros se presenta siempre de noche, en la oscuridad, y prohíbe a Psique cualquier indagación sobre su identidad. Cada noche, en la oscuridad, se amaban. Una noche, Psique le contó a su amado que echaba de menos a sus hermanas y quería verlas. Eros aceptó, pero también le advirtió que sus hermanas querrían acabar con su dicha. A la mañana siguiente, Psique estuvo con sus hermanas, que le preguntaron, envidiosas, quién era su maravilloso marido. Psique, incapaz de explicarles cómo era su marido, puesto que no le había visto, titubeó y les contó que era un joven que estaba de caza, pero acabó confesando la verdad: que realmente no sabía quién era. Así, las hermanas de Psique la convencieron para que en mitad de la noche encendiera una lámpara y observara 39 40

El Gran Secreto de Rafael inmortalizada por Plotino44 en su Tercera Enneada y por el pitagórico Apuleyo45 en su obra El Asno de Oro. Cuando el joven Rafael murió, en brazos de su viejo Maestro, Fabio Calvo, el Viernes Santo, 4 de abril de 1520, toda la nación estuvo de duelo. El Papa León X, cuyo carácter altivo era bien conocido, rompió a llorar; el Cardenal Bembo compuso su epitafio; y ocurrió en el Vaticano un fenómeno muy extraño: un temblor de tierra sacudió todo el Palacio y cuarteó sus muros. “La naturaleza”, como dijo Fred Berence46, “se unió así al dolor del pueblo de Roma”. Pero si el célebre artista tuvo que abandonar prematuramente este mundo de dolores para gozar de una vida superior, en un plano más elevado donde estaban reunidas las almas de los Sabios, su inmortal Escuela de Atenas todavía nos comunica su secreta lección, cuya grandeza no ha disminuido con el tiempo. Fue él, en verdad, no solamente un gran artista, un amigo fiel, un hombre amable y agradable, compasivo y generoso, sino también fue para nosotros algo más: ¡Un Iniciado y un Hermano!

a su amado, asegurándole que sólo un monstruo querría ocultar su verdadera apariencia. Psique les hace caso y enciende una lámpara para ver a su marido. Una gota de aceite hirviendo (de la que Apuleyo hace un tópico medieval: stilla olei ardentis) cae sobre la cara de Eros dormido, que despierta y abandona, decepcionado, a su amante. Cuando Psique se da cuenta de lo que ha hecho, ruega a Afrodita que le devuelva el amor de Eros, pero la diosa, rencorosa, le ordena realizar cuatro tareas, casi imposibles para un mortal, antes de recuperar a su amante divino. Como cuarto trabajo, Afrodita afirmó que el estrés de cuidar a su hijo, deprimido y enfermo como resultado de la infidelidad de Psique, había provocado que perdiese parte de su belleza. Psique tenía que ir al Hades y pedir a Perséfone, la reina del inframundo, un poco de su belleza que Psique guardaría en una caja negra que Afrodita le dio. Psique fue a una torre, decidiendo que el camino más corto al inframundo sería la muerte. Una voz la detuvo en el último momento y le indicó una ruta que le permitiría entrar y regresar aún con vida, además de decirle cómo pasar al perro Cerbero, Caronte y los otros peligros de dicha ruta. Psique apaciguó a Cerbero con un pastel de cebada y pagó a Caronte un óbolo para que le llevase al Hades. En el camino, vio manos que salían del agua. Una voz le dijo que les tirase un pastel de cebada, pero ella rehusó. Una vez allí, Perséfone dijo que estaría encantada de hacerle el favor a Afrodita. Una vez más pagó a Caronte y le dio el otro pastel a Cerbero para volver. Psique abandonó el inframundo y decidió abrir la caja y tomar un poco de la belleza para sí misma, pensando que si hacía esto, Eros le amaría con toda seguridad. Dentro estaba un «sueño estigio» que la sorprendió. Eros, que la había perdonado, voló hasta su cuerpo y limpió el sueño de sus ojos, suplicando entonces a Zeus y Afrodita su permiso para casarse con Psique. Éstos accedieron y Zeus hizo inmortal a Psique. Afrodita bailó en la boda de Eros y Psique, y la hija que éstos tuvieron se llamó Placer o (en la mitología romana) Voluptas. 44 Plotino (205 – 270), filósofo griego neoplatónico autor de las Enéadas (en latín, Enneades). 45 Apuleyo (Madaura, 123/5 – en torno a 180), a veces llamado Lucio Apuleyo –si bien el praenomen Lucio se toma del protagonista de una de sus obras, El asno de oro–, fue el escritor romano más importante del siglo II, muy admirado tanto en vida como por la posteridad. Posiblemente un bereber muy romanizado, nació en Madaura (ciudad romana de Numidia en la frontera con Getulia), en la actualidad conocida como Mdaourouch (Argelia). En su tiempo fue una zona alejada de los principales centros culturales de la latinidad, radicados en Italia, aunque el desarrollo urbano y económico de la misma permitieron que, hacia el siglo II, importantes intelectuales y políticos romanos procedieran de la zona. 46 Fred Berence fue un autor de libros biográficos; escribió, entre otros, sobre Lucrecia Borgia y Leonardo Da Vinci.

Get in touch

Social

© Copyright 2013 - 2024 MYDOKUMENT.COM - All rights reserved.