IV Congreso Internacional de Plantas medicinales Universidad Nacional de Colombia 16 al 18 de Septiembre de 2010 – Palmira (Valle), Colombia

PODER HEMOSTATICO Y CICATRIZANTE DE LA ESPECIE VEGETAL CÚRCUMA LONGA EN EL TRATAMIENTO DE HERIDAS EN LA PIEL Chaves MF, Miranda LF Agroindustria Lumin / CIAP y MAYU Inc. Centro de Investigaciones Agroecológicas y Pecuarias (Quindío-Colombia) – MaYu Natural Way (Florida-USA) Armenia (Quindío). Carrera 16 # 7-48. [email protected], [email protected]

INTRODUCCION: La Cúrcuma longa es una planta silvestre originaria de la India, crece hasta un metro de altura y pertenece a la familia de las zingiberáceas a la que también pertenece el muy conocido Ginger o Zingiber officinalis. Por centurias la cúrcuma ha sido empleada como tinte o colorante tanto industrial como alimentario, como conservante, -ya también modernamente es aceptado por las autoridades internacionales como la FDA- y saborizante de comidas (es la base del famoso Curry). Se considera una planta condimentaría, aromática, cosmética y tanto medicinal como preventiva. En la farmacopea ayurvédica (sistema de curación milenerio de la India que data de más de 6.000 años) se prescribe en problemas gastrointestinales, dolores articulares y musculares, dolencias hepáticas, pancreáticas y falta de energía, además de usarse como coadyuvante en la cicatrización de heridas y problemas de piel como psoriasis y dermatitis. Estudios recientes la encuentran muy promisoria en tratamientos para varios tipos de cáncer (como prostata, mama, cervix, colon, pulmón, garganta, naríz, leucémia, mieloma multiple y de piel como el melanoma), alteraciones cardiovasculares, renales, pulmonares, neuronales (Alzheimer) e incluso sida.

OBJETIVOS: Demostrar y evaluar la capacidad y rápido poder hemostático y cicatrizante de la especie vegetal Cúrcuma longa, sobre heridas abiertas de piel (como cortaduras, picaduras, rasguños, mordiscos, llagas y úlceras), algunas difíciles de tratar.

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MATERIALES y METODOS: Después de evaluar varias plantas antisépticas, desinflamantes y cicatrizantes hemos seleccionado algunas como la caléndula, la cola de caballo, el jengibre, el bledo, el cundeamor, el árbol del paraíso y, desde luego la cúrcuma. La cocción de éstas o, en su ausencia, de solo cúrcuma, se aplica como limpieza de la zona afectada de la piel. Se seca con gasa o naturalmente, muchas veces exponiéndola simplemente a los beneficiosos rayos UV del sol y se aplica tópicamente la cúrcuma en polvo a personas con problemas de piel, como heridas abiertas, llagas, cortaduras, peladuras, tratamientos post-quirúrgicos, aunque también contamos con experiencias en animales (perro herido por guadaña, vaca con problemas de mastitis, caballo con herida crónica en una de sus extremidades y heridas por accidentes y en diversas patologías en otras mascotas). Por el demostrado amplio espectro antimicrobiano de la cúrcuma la hemos encontrado útil incluso para subir las defensas de ejemplares del reino vegetal. El emplasto se debe cambiar cada 4-6 horas. También recomendamos administarse la cúrcuma oralmente como parte de su ingesta alimenticia (como color de sopas, arroz, granos o guisos en general), o como bebida diaria en jugos, aromáticas o en té incluso de sus hojas. Para acelerar el proceso de cicatrización, en algunos casos, especialmente los crónicos, la usamos en combinaciones fluídicas especiales y/o cremas únicas desarrolladas por el grupo investigativo CIAP-MAYU, pues el Atharva Veda de la cultura Hindu de donde sale la aplicación clínica de la cúrcuma, también enseña el uso combinado de las plantas medicinales en asocio con “potenciadores” terapéuticos como el famoso “ghee” y cierta ceniza obtenida de fuegos especialmente diseñados como son los de la ya reconocida Terapia Homa.

RESULTADOS: Todos los individuos tratados con el sistema desarrollado por el Grupo CIAP-MAYU han mostrado una total mejoría en los síntomas inflamatorios, cicatrizantes y hasta necróticos tras el tratamiento. No hemos encontrado diferencias significativas entre grupos. Acerca de los tiempos de recuperación podríamos decir que hemos tenido casos de apenas horas hasta la más prolongada de 3-4 meses (como un caso de cáncer abierto de mama en Duitama, Boyacá y dos úlceras –una en el empeine de una mujer mayor diabética en Armenia, Quindío y otra, en la parte alta del tobillo en una jóven tras picadura de insecto y complicación vascular en Aguazul, Casanare), cuyos registros fotográficos se anexan en este trabajo. Otras afecciones relacionadas con la piel como procesos alérgicos, psoriasis, vitiligo, cané, envejecimiento prematuro, manchas, arrugas, verrugas, hongos, erisipela y alteración de la

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estructura por intenso resecamiento de la epidermis o herpes (labial, zoster y vaginal) han sido tratados con similar éxito a corto o mediano plazo (2-6 meses).

CONCLUSIONES: Se ha logrado demostrar que la harina de cúrcuma (Curcuma longa) aplicada a heridas abiertas, detiene las hemorragias y se comporta como un excelente cicatrizante y regenerador cutáneo. La cúrcuma ayuda contundentemente a sanar los problemas de piel. Los trabajos de investigación recientes donde se demuestra y entiende científicamente las razones del poder cicatrizante y regenerador de la estructura de la piel, así como de otras dolencias donde ella se halla comprometida, nos dan suficientes razones y entusiasmo para continuar nuestra labor de ayuda que ya data de 20 años de experiencia naturista. Según los últimos estudios la cúrcuma se perfila como excelente alternativa para sanar y curar serios problema de salud en general y a nivel de piel en particular. Comercialmente superan las cien las patentes logradas por la manipulación de esta planta milenaria, muchas de ellas con aplicaciones cosméticas. Se demuestra así como un recurso natural adaptado a nuestro medio, puede ser de gran ayuda para los nuevos enfoques de la medicina moderna en humanos y especies animales (medicina y veterinaria alternativa u holística.

REFLEXION FINAL: Ya lo dice el viejo adagio: “En los libros viejos hay cosas nuevas y en los libros nuevos hay cosas viejas”. Con las evidencias de esta ponencia, elevamos una invitación a todos aquellos que estan siendo tocados profundamente por nuestra Madre Tierra (Pacha-Mama), para que revisemos juiciosamente los textos antíguos o nos unamos a los más ancianos (indígenas nativos y campesinos sabios) y asi hagamos re-surgir sus “secretos” saludables tan necesarios en un mundo que se sume en la desesperanza y la contaminación a todo nivel. Como escribí en un artículo que pretendió hace unos 13 años llevar la esperanza de la cúrcuma al Instituto Colombiano de Cancerología, hagamos de la cúrcuma el “antioxidante del siglo XXI”. Gracias a las indicaciones de nuestro maestro el destacado etno-botánico Hindú y humanista Dr. Kashava Bhat, exasesor de FAO y OMS, cuando nos enseño este “milagroso camino dorado” de la Cúrcuma longa y las evidencias acumuladas, han hecho que médicos como en su época el director del departamento de ginecología de una prestigiosa clínica de la capital

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colombiana, tras un caso de reversión total de una lesión por papiloma cervical, sentenciara que “por no querer ver otros lados, estamos mutilando tantas mujeres”. Para finalizar, entender que la curación es integral, no solo el tratamiento de una zona del cuerpo afectada. Especialmente los problemas de piel, másalla de las heridas por accidentes, son el reflejo de una intoxicación crónica especialmente una afección del colon, hígado, páncreas y riñón. Siendo uno de los pioneros en el uso de la cúrcuma en Colombia, agradezco la labor de compañeros de viaje que creyeron en su poder y fueron sus primeros cultivadores en la zona de Santander del Sur, el Valle del Cauca, Cauca y recientemente el Quindío.

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