QUIROMASAJE Y FIBROMIALGIA

QUIROMASAJE Y FIBROMIALGIA Un aliado para el cuerpo, la mente y el espíritu. por Antonio José Pérez Castellano. “Los átomos de mi cuerpo son los tuy

0 downloads 173 Views 608KB Size

Story Transcript

QUIROMASAJE Y FIBROMIALGIA Un aliado para el cuerpo, la mente y el espíritu.

por Antonio José Pérez Castellano.

“Los átomos de mi cuerpo son los tuyos y vibran juntos para querernos”, Frida Kahlo . Excepcional pintora mexicana. Sufría fibromialgia, y así lo expresaba en su obra.

“CUANDO LAS MANOS BIEN ENTRENADAS Y DIRIGIDAS POR LA MENTE CREAN UNAS ONDAS CURATIVAS DE EFECTOS MARAVILLOSOS, SI LAS RADIACIONES MENTALES SE CONCENTRAN AL TRATAR LA REGIÓN DETERMINADA”, por lo tanto, “NO PODRÁ EXISTIR UN BUEN MASAJE SIN CONCENTRACIÓN MENTAL Y PODER CURATIVO EN LAS MANOS”. Dr. Vicente Lino Ferrándiz García

En pocas palabras, profundos conocimientos anatómicos junto a la verdadera intención de consolar y acompañar en la sanación del que confía ponerse en nuestras manos. Estas palabras del Dr. Lino Ferrándiz creador del Quiromasaje junto a las teorías de Charlotte Server sistematizadas en su Sensory Awareness (Conciencia Sensorial), con la que trata de ayudarnos a tomar conciencia directa con nuestras vidas, a través de la propia experiencia sensorial, para fluir con mayor naturalidad y entrar en contacto con la realidad de forma más directa, para que así surja el movimiento espontáneo, y por ende la comunicación con nuestra conciencia profunda, método muy influenciado por la Gestalt1 de Fritz Perls, formación que estoy cursando actualmente y mi experiencia en las prácticas realizadas en Agrafim con mujeres diagnosticadas con fibromialgia y el efecto de las técnicas del Quiromasaje en ellas han hecho que me decida a escribir sobre esta terrible dolencia, no sólo para describir los beneficios de las manipulaciones a nivel fisiológico sino también a nivel psicológico ya que a mi parecer y gracias a las conversaciones que he podido vivir con las personas afectadas gran parte de los motivos que hacen disparar esta enfermedad parece tener también un origen psicosomático. Muchos frentes son los que debemos afrontar para mejorar la calidad de vida de los afectados, y no sólo son físicos para así evitar la costumbrista visión sesgada. Es para mi el psicológico junto con un correcto acompañamiento emocional, empático y constante los más apremiantes. Por esto que mi intención es la de unir el Quiromasaje con lo Psico/Social a través de la Fibromialgia. Todo es unidad, no hay separación. En mi opinión tanto las disciplinas más especificas como las integrativas tienen espacio para la aportación y sanación, aún así de forma personal me declino por las revolucionarias técnicas integrativas como el Quiromasaje, la Osteopatía y la Psicología Gestalt precisamente por entender al ser humano como un todo físico, metal/emocional y espiritual y con esta conciencia y visión más amplia intentar llegar a un nivel superior de entendimiento y autoconocimiento.

La Fibromialgia, fue identificada por primera vez por Sir William Gowers en 1904, la denominó fibrositis para describir alteraciones de las vainas tendinosas, músculos y articulaciones, asociadas a una fase inflamatoria que no manifestaban los pacientes. En 1939 se define como dolor miofascial2 y la aparición de puntos triggerts3 o puntos gatillo. A primera vista da la impresión de una epidemia, temible además, pues nadie conoce sus causas ni su tratamiento adecuado. La fibromialgia es una dolencia poco conocida y con una importante repercusión sociosanitaria y psicosocial; la investigación en torno a su etiología4 ha evolucionado históricamente desde hace más de 150 años. El concepto de fibromialgia se extendió en la década de 1990, pero no fue reconocida por la OMS como enfermedad hasta 1999 ante la necesidad de clasificar un tipo de paciente cada vez más frecuente en los servicios sanitarios: personas con dolor generalizado, fatiga crónica, falta de vitalidad... Estas personas típicamente peregrinan de médico en médico, sin encontrar explicación a su malestar. Pero a pesar de los resultados negativos de las pruebas diagnósticas, sus dolores son reales. ¿Qué les está ocurriendo?, ¿Cómo viven sus vidas?. Es necesario superar el concepto de fibromialgia, incidiendo en las razones reales que subyacen al mismo.

Revisión de las teorías oficiales • Diagnóstico El principal síntoma de la fibromialgia es el dolor generalizado, acompañado de mialgias5 que se entienden a otras partes del cuerpo. Los afectados, constantemente sienten dolor difuso musculoesquelético acompañado de otros síntomas como rigidez matutina o durante todo el día, contracturas musculares, dolor puntual, vértigo, trastornos psicológicos, estrés emocional, intestino irritable, intolerancia a fármacos etc. Durante los últimos años la definición de fibromialgia se ha ido ampliando. En su descripción de 1990, el Colegio Oficial de Reumatólogos de los EEUU la definía por los siguientes criterios: Presentar 11 puntos dolorosos de un conjunto de 18 descritos previamente. Presentar dolor disperso en diferentes puntos del cuerpo, sin otro motivo conocido, durante un tiempo superior a 3 meses.

Con motivo del cumplimiento de los 20 años desde la descripción del síndrome éstos criterios diagnósticos se han revisado, dando cabida a las incontables variantes registradas y los diferentes síntomas asociados que desde entonces se han descrito, incluyendo las esferas cognitiva y somática. Y es que dentro del saco de la fibromialgia se han introducido cuadros clínicos de características muy diferentes: dolores tanto dispersos, como localizados; cansancio desde ligero hasta incapacitante; falta de vitalidad y de motivación para trabajar; insomnio; problemas intestinales (estreñimiento, diarrea, cólicos...); sensación opresiva en tórax o vientre; náuseas; bruxismo6; dolor menstrual; dolor articular; contracturas musculares; edemas en las extremidades; problemas de coordinación motora; problemas de memoria; problemas de vejiga; mareos; sequedad de mucosas; cambios en la graduación óptica... Además, todos estos síntomas pueden cambiar de intensidad según diversos factores: tiempo atmosférico, fases hormonales, trabajo físico, estrés, depresión... Los criterios diagnósticos publicados en 1990 motivaron duras críticas desde la propia comunidad científica por varias razones: Empleo de un argumento circular tautológico7, por medio del cual los mismos síntomas que definían la enfermedad eran tomados como prueba de la misma. Inespecificidad de los puntos dolorosos (los fibromiálgicos comparados con el grupo de control presentaban dolor en muchos otros puntos). Falta de definición sobre el grado de dolor que presentaban dichos puntos, lo que dejaba campo libre a cualquier interpretación. Sesgo en la selección de casos y controles, dirigido a la confirmación de la hipótesis previa (argumento éste de suficiente entidad como para invalidar un estudio por completo). Defectos en la estandarización de medidas y en su tratamiento estadístico. Es evidente que estas críticas no tuvieron mucha repercusión, dado que actualmente la mayoría de las investigaciones sobre la fibromialgia están dirigidas a la identificación de sus causas y desarrollo de sus tratamientos. Entre tanto, los enfermos que reciben este diagnóstico siguen sin recibir una respuesta satisfactoria, a la luz del dramático final de muchos casos. • Origen El origen de la fibromialgia se desconoce a ciencia cierta. Se han mencionado diversos factores que pueden favorecer su aparición: genéticos, epigenéticos8, infecciosos, accidentes, traumas psicológicos, enfermedades

reumáticas y endocrinas, desequilibrios de neurotransmisión, sistema inmunitario, desórdenes del sueño, respuestas patológicas ante el estrés... No obstante, no se ha identificado claramente ninguna causa directa. Y es que, a pesar de que son muchos los estudios sobre el tema, la tendencia es a considerar el problema de forma analítica y fragmentada, sin una visión global. No se ha estudiado, por poner un ejemplo, la influencia del estilo de vida que llevamos en el mundo «civilizado». Y eso que la aparición de la fibromialgia en los países ricos, y especialmente en la población femenina, no parece una casualidad. Entre el 85 y el 94 % de los casos se dan en la mujer. Se calcula que en España existen unas 800.000 personas afectadas por esta enfermedad, lo que significa que es entre un 2- 6 % de la población. Su incidencia por edades va, de 30 a 50 años en su forma más común, pero también en pacientes más mayores, que generalmente va asociada con artrosis. La cuestión es que casi cualquiera que sufra de estrés cumple los criterios de diagnóstico de la fibromialgia. Cualquier persona con problemas familiares, falta de descanso, exceso de trabajo, tensión psíquica... puede presentar la mayoría de los síntomas descritos como propios del síndrome fibromiálgico, y por tanto recibir dicho diagnóstico. Por el contrario, prefiero pensar que estas personas mantienen un modo de vida perjudicial para la salud a muchos niveles, y que comprender esto es el primer paso para resolver sus síntomas. Lo que si parece claro es que los pacientes supuestamente aquejados de fibromialgia presentan una hipersensibilidad al dolor. Es decir, que perciben dolor frente a estímulos que normalmente no lo producen. Actualmente el modelo vírico de la Fibromialgia está desestimado y no se cree que exista una relación directa entre infección y enfermedad. La etiología de la Fibromialgia es desconocida aunque los investigadores coinciden que se trata de un problema de origen cerebral y no una enfermedad del sistema periférico, implicándose diversas anomalías neuroquímicas, neuroendocrinas, inmunológicas, musculares, psicológicas alteraciones del sueño etc. ya mencionadas. • Tratamiento La mayoría de los tratamientos que se están aplicando para la fibromialgia son sintomáticos, es decir, dirigidos a aliviar cada uno de los síntomas que hemos listado por separado.

En este capítulo entran los somníferos, antiinflamatorios, analgésicos, antidepresivos...

No obstante, algunos estudios han subrayado la importancia del factor psicosocial. Más concretamente, los mejores resultados se han obtenido al intervenir psíquica y socialmente (meditación, thaichi, yoga, chi kung, quiromasaje, técnicas de relajación...) con una mejora notable en el 67% de los pacientes tratados de esta forma. En la práctica diaria, en cambio, el tratamiento de la fibromialgia se encamina a favorecer el sueño nocturno y reducir el dolor. El factor psicosocial se tiene raramente en cuenta, entre otras cosas por reticencia de los propios pacientes «¡yo no estoy loco!». • El Cerebro Sensibilizado La Fibromialgia es una enfermedad real, física y potencialmente invalidante, valorada como “reumática”. Existe consenso general en señalar al cerebro como responsable por lo que lo correcto sería situarla en el campo de la patología neurológica. Existe un estudio muy reciente a cargo del NBIC (Centro Nacional de Información Biotecnológica Norteamericano) que señala como culpable a la alteración de la temperatura corporal. Nuestro cuerpo se mantiene en una media de 37º C, y esto se debe a que nuestra sangre actúa como un refrigerante corporal, igual que lo hace el agua en los radiadores de los coches. Pero en la Fibromialgia, los enfermos no pueden mantener su temperatura corporal de forma constante.

Es por esto que se señala al hipotálamo, el núcleo cerebral responsable de regular la temperatura de nuestro cuerpo. Existen unas comunicaciones y válvulas entre los vasos sanguíneos, los shunts arterio-venosos9, controlados por el hipotálamo para abrirse o cerrarse cuando convenga, manteniendo así el equilibrio corporal. Y finalmente tenemos los capilares sanguíneos, la forma de los vasos más pequeña de nuestro cuerpo que también ayuda a mantener la temperatura, entre otras funciones. Anteriormente se sabía que en los pacientes diabéticos los capilares sanguíneos acaban lesionándose, ocasionando pérdida de sensibilidad, y también alteración de la temperatura en manos y pies. Pero la fibromialgia va más allá, pues lo que se lesiona en esta enfermedad son las válvulas entre vasos, los shunts arterio-venosos, que a su vez interfieren en la actividad de los capilares y también ocasionan una alteración de la nutrición de músculos y tejidos de la piel, además de lesionar el sistema de refrigeración corporal. A causa de este mal funcionamiento se acumula ácido láctico en el músculo y los tejidos profundos, afectando así al sistema muscular y causando dolor, llegando finalmente a la fatiga, ambos síntomas típicos de la fibromialgia. Por otra parte, el sistema nervioso somático, responsable de la sensibilidad, también se ve afectado por el mal funcionamiento de los shunts arterio-venosos y al encontrarse hipersensibilizado envía señales de dolor al sistema nervioso central, agravando más los síntomas. La fibromialgia pertenece a un cada vez más extenso grupo de etiquetas diagnósticas que muchos autores proponen sea englobado como Síndromes de Sensibilización Central. La Sensibilización Central establece un modo patológico de gestión cerebral de la defensa del organismo en el que se activan los programas de enfermedad aun cuando esta no exista. Sería una situación similar a la de las enfermedades autoinmunes en las que el sistema inmune activa los programas defensivos de la inflamación o la muerte celular programada en ausencia de peligro. La fibromialgia, la migraña, el colon irritable, el síndrome de fatiga crónica… serían entidades debidas a dicha disfunción evaluativa por parte del Sistema Nervioso (cerebro). Cerebro no es sinónimo de psicológico, Cerebro no es sinónimo de consciente ni voluntario.

La disfución evaluativa inmune no admite, hoy por hoy, actuaciones que modifiquen el error evaluativo. Debemos limitarnos a neutralizar sus efectos con inmunosupresores o fármacos antagonistas de los mediadores de la respuesta inmune. Sin embargo, la disfunción evaluativa neuronal (cerebral) si admite una actuación dirigida a modificarla. Hay dos opciones: 1. Considerar el problema como una enfermedad similar a las enfermedades autoinmunes y administrar “neurosupresores” (neuromoduladores) y/o fármacos que antagonicen los mediadores de la alerta nociceptiva (antinflamatorios, antidepresivos) complementando la terapia farmacológica con ayuda fisioterapéutica y psicológica cuyo objetivo es buscar alivio en el sufrimiento físico y psicológico que la enfermedad genera a través de la pedagogía de la gestión del paciente. 2. Considerar el problema como un error evaluativo cerebral y tratar de corregirlo con Pedagogía en Neurofisiología de la percepción somática y de la gestión cerebral de la enfermedad. Se intentan retirar los fármacos y las ayudas externas y potenciar los recursos de afrontamiento activo. Lo ideal es desactivar la evaluación cerebral (lo que no es sinónimo de psícológico ni de conciente/voluntario) de la enfermedad. La ayuda de un fisioterapeuta es fundamental pero, en este caso, su estrategia será la opuesta a la ofrecida por la opción anterior. La Fibromialgia es una enfermedad real, física y potencialmente invalidante, el cerebro es un órgano físico, real y potencialmente invalidante, la información, la cultura es un agente físico, real, biológico y potencialmente invalidante. El programa de “Respuesta de Enfermedad” responsable del sufrimiento e invalidez contiene un componente cognitivo que impone un modo sensible, catastrofista y rumiativo10 sobre la situación. El afectado está sensibilizado y forzado por su cerebro a una conducta de enfermedad e invalidez impuesto por este programa. El organismo evalúa amenaza donde y cuando no la hay (disfunción). Es un organismo sano pero ha cometido un error evaluativo. Las consecuencias derivan de la activación de programas defensivos que debieran estar desactivados. El sistema neuroinmune es un sistema evaluativo que procesa datos con el objetivo de anticipar estados de amenaza.

Aprende con errores y no siempre los corrige. Es fundamental adquirir consciencia de ese sometimiento del individuo a su cerebro. Si no hay rebelión, reprogramación, no conseguiremos nada. Si, además hay resignación, refuerzo del error el padeciente está condenado a vivir a perpetuidad el infierno de la enfermedad. • Psicológica/mente “Una colección de pensamientos debe ser una farmacia donde se encuentra remedio a todos los males”. Voltaire Tras ser diagnosticada la enfermedad, existe la posibilidad de que nuestro médico nos aconseje que, de forma adicional, acudamos a tratamiento psicológico, el cual es un tratamiento complementario en el complejo abordaje de la enfermedad, pero es mucho más que eso. Nuestro modelo de salud actualmente se engloba dentro del denominado modelo biopsicosocial. Este modelo o enfoque participativo de salud y enfermedad postula que el factor biológico, y psicológico (pensamientos, emociones y conductas) y los factores sociales, desempeñan un papel significativo de la actividad humana en el contexto de una enfermedad o discapacidad. De hecho, la salud se entiende mejor en términos de una combinación de factores biológicos, psicológicos y sociales y no puramente biológicos. Este modelo es igualmente aplicable a todo tipo de enfermedad, tenga o no un origen claro establecido desde el punto de vista médico. Con este modelo, la Fibromialgia, como casi cualquier otra enfermedad debería ser tratada simultáneamente y de manera interdisciplinar por los diferentes especialistas de los anteriores factores: medicina, fisioterapia, enfermería, terapias, y psicología entre otros. Son numerosos los trabajos científicos que coinciden en señalar que el tratamiento médico (incluyendo el farmacológico prescrito por facultativo), el ejercicio físico aeróbico moderado y el tratamiento psicológico constituyen, hoy en día los pilares básicos de tratamiento para la mejora de la calidad de vida en la Fibromialgia. Por lo tanto, el tratamiento psicológico no ha de interpretarse como una terapia alternativa, sino como una terapia esencial, junto con las dos ya comentadas, en un tratamiento global y completo. La psicología no sólo trabaja con personas con problemas o trastornos mentales.

La Psicología puede ofrecer herramientas de gran utilidad en las dolencias fibromialgicas, como en los aspectos que afectan al dolor. Determinados pensamientos negativos acerca de uno mismo, creencias personales acerca del control personal sobre la enfermedad, y el cómo aceptamos y afrontamos el dolor, son aspectos psicológicos que establecen claras diferencias en la sintomatología y calidad de vida de diferentes pacientes, que desde un punto de vista estrictamente médico, tienen el mismo diagnóstico. Es por ello que el tratamiento psicológico aporta herramientas para conocer y modificar aquellos factores que contribuyen a incrementar la sintomatología, aprendiendo nuevos patrones de pensamientos y de comportamientos. Igualmente, el aprendizaje de técnicas que contribuyan a disminuir la respuesta fisiológica como la respiración, la relajación, la meditación, visualización y masajes son de gran ayuda para la disminución de la ansiedad, estrés y para la distensión músculoesquelética contribuyendo a disminuir el dolor, estableciendo herramientas de regulación emocional adaptativas y saludables a través de nuestra “farmacia” de pensamientos amortiguadores del dolor (optimismo inteligente, percepción del dolor y reevaluación positiva, entre otros). La persona con bloqueos e incapacidades de expresar abiertamente sus necesidades, se ve con serias dificultades para dar satisfacción a las mismas, quedándose detenida en la realización de la necesidad, permaneciendo enganchada. Este enganche le resta energía a la nueva necesidad que aparece, interfiriendo con su clara expresión y con el darse cuenta de lo que necesita en el momento. Esta represión emocional en psicología de la Gestalt se concibe como una inhibición del proceso muscular. Es decir, cuando existe un estímulo, ya sea interno o externo, que induce al organismo a responder a través de una respuesta muscular, y esta respuesta se inhibe mediante un proceso motor de contracción de los músculos antagónicos, se produce una inhibición que impide que el impulso se exprese claramente. Este tipo de inhibiciones a nivel muscular, si se repite continuamente para sujetar y detener la misma respuesta, queda grabado en la configuración física, dando lugar a rigideces y alteraciones orgánicas. Un ejemplo de esto lo tenemos en la expresión de la rabia. Cuando una persona, por diversos motivos, inhibe la expresión de la rabia, lo hace mediante la contracción de los músculos del mentón, de los brazos y de aquellas otras zonas inhibidas se hace repetidamente, se convierten en crónica, llegando incluso a la persona a ignorar lo que bloquea y quedando fijadas estas reacciones en su cuerpo, dando lugar a somatizaciones.

Esta represión de las emociones de rabia, tristeza, así como de los sentimientos cariñosos o de odio, mediante contracciones motoras, puede, a la hora de dar una respuesta adecuada a los estímulos, fijarse en formas habituales de conducta no consciente, y localizarse en diferentes partes del organismo. Esta idea de fijación de las emociones en la estructura física, cuando son reprimidas, fue mencionada por W. Reich y posteriormente retomada por la Dra. Ida Rolf para desarrollar la técnica de Rolfing o de integración estructural (es una técnica de manipulación profunda del tejido conectivo que busca alinear el cuerpo con la gravedad. Mejora la postura y el aspecto físico, alivia tensiones y dolores, aumenta la flexibilidad y el bienestar personal). Ésta es una técnica, que basada en el masaje profundo de la aponeurosis, tiene como finalidad liberar al organismo de aquellas anomalías posturales que se han producido en el cuerpo, unas veces a causa de traumas físicos y otras por traumas emocionales, que han acabado por grabarse y deformar partes del cuerpo. Con este masaje profundo se trata de aflojar los músculos, liberando al cuerpo de las distintas tensiones, al poner en funcionamiento la energía estancada con el fin de que fluya libremente. De esta manera el cuerpo va alineando progresivamente sus distintas partes, actuando y organizándose de acuerdo a la gravedad y al equilibrio, haciendo permanecer erecto al cuerpo con el gasto mínimo de energía. En la fibromialgia la ausencia de una causa establecida y la incertidumbre de asociada, provocan desilusión, tristeza ansiedad o ira. A lo largo de nuestra vida, culturalmente nos enseñan a ocultar emociones tanto agradables como desagradables, y sin embargo, en la actualidad se conoce la importancia de identificar y expresar estas emociones, regulándolas y canalizándolas. La emoción desagradable, al igual que el dolor, debe de entenderse como un aliado, como una señal que me indica que se debe realizar algún ajuste en mi organismo. Hay que escuchar a la emoción, hay que identificarla. Igualmente, numerosos estudios ponen de manifiesto que la inhibición emocional provoca un incremento de sintomatología, dado que aquello que no se expresa se acaba somatizando. Lo más importante es descubrir el importante papel que tenemos en los resultados de la enfermedad, asumiendo nuestra responsabilidad en el proceso a través del compromiso y de la aceptación. Aceptar el nuevo estado tras el diagnóstico reciente es fundamental para establecer ámbitos de mejora y de cambio personal, para modificar nuestro estilo de vida anterior. Aceptar no es sinónimo de resignación; todo lo contrario: aceptar para establecer nuevas metas desde la aceptación. Esta actitud tiene especial relevancia en las primeras fases de la enfermedad pero también en cualquier momento del proceso que se viva en ella.

• Beneficios Físicos y Psíquicos del Quiromasaje. La fibromialgia afecta a la capacidad funcional y el ejercicio físico es imprescindible para mantener o mejorar los beneficios que este conlleva en el desarrollo de la vida diaria y en el binestar psicológico y social. El tratamiento fisioterápico alivia el dolor y mejora la calidad de vida de forma clara y junto al Quiromasaje abarcamos una buena preparación de los tejidos y las articulaciones para el necesario ejercicio físico y los estados de relajación que permiten alcanzar beneficiosos efectos psicofisiológicos mediante la disminución de la tensión muscular/emocional, estrés, o ansiedad que presenta el fibromialgico y que le impide o dificulta el desarrollo de sus actividades de la vida diaria. El Quiromasaje es una de las técnicas más usadas en las personas con Fibromialgia, ya que resulta de las más eficaces para aliviarlas, mejorando considerablemente tanto aspectos físicos como psíquicos. El Quiromasaje mejora la circulación sanguínea en las zonas trabajadas, oxigenando tejidos y ayudando al retorno venoso eliminando más eficazmente los deshechos del organismo influyendo en una más pronta recuperación, mejora la flexibilidad del cuerpo y el rango de movimiento, a través del Quiromasaje se disminuyen la rigidez articular y el dolor, cubre tanto músculos como tendones y ligamentos y estimula la producción de histaminas, endorfinas y serotonina, analgésicos naturales que alivian el dolor, estrés y estados de ánimo depresivos. La esencia de los efectos del Quiromasaje repercute en primera instancia de manera mecánica y por fenómenos físicos en los tejidos; y en segundo lugar (pero no menos importante) su acción neurorefleja al estimular los receptores cutáneos (exteroceptores), los ubicados en músculos, tendones y ligamentos (propioceptores), y los alojados en las paredes de los vasos del sistema circulatorio. Por las vías sensitivas los impulsos pasan al sistema nervioso central alcanzando distintas zonas en médula espinal, hemisferios y corteza cerebrales, y provocando entonces cambios funcionales en el organismo. Veamos a continuación tales cambios en las distintas organizaciones anatomo-funcionales: • Piel La manipulación de la misma estimula la producción y liberación local de un neurotransmisor llamado Sustancia P11, el cual produce vasodilatación local y, por ende, un aumento de temperatura de 2 a 3 ºC.

El calor lleva a un ablandamiento de los tejidos y el estiramiento de los tegumentos relaja sus fibras, estos dos elementos inducen a aumentar la elasticidad de la piel. • Sistema Circulatorio Las formaciones de histamina y sustancias derivadas que se presentan bajo la acción de los estímulos cutáneos del masaje viajan por el torrente sanguíneo y linfático a todo el organismo ejerciendo cambios benéficos en los vasos de diferentes órganos y sistemas, aumentándose significativamente la circulación en piel y músculos; resultado que también se consigue gracias a la apertura de los capilares por la acción mecánica del masaje. Esta modificación benéfica colabora con el retorno sanguíneo al corazón, ayuda a la oxigenación y alimentación de los tejidos optimizando el metabolismo celular y favoreciendo la eliminación de desechos celulares. La circulación linfática también se ve beneficiada. Estos efectos llevan a una mejor relajación corporal, a una baja del gasto y ritmo cardíaco, y a una disminución de la presión sanguínea. También está comprobado que aumenta el número de glóbulos rojos y blancos (neutrófilos y linfocitos del tipo “células asesinas naturales”). • Sistema Muscular Las manipulaciones tiene un papel crucial en la nutrición de los músculos importantísimo para la recuperación en la capacidad de trabajo neuromuscular. Este proceso se debe al mejoramiento del metabolismo en los músculos y a la acetilcolina12, liberada por la estimulación propioceptiva, que eleva la velocidad de transmisión de la excitación nerviosa a las fibras musculares. Los vasos musculares se dilatan por la liberación de histamina, aumentando la temperatura de los tejidos sometidos al masaje lo cual activa los procesos de glucogenolisis13 y gluconeogénesis14 elevando así la velocidad de contracción de los músculos. Esto se traduce en una reducción de la fatiga, una más veloz recuperación de la fatiga y en una actividad y coordinación muscular más efectiva al mejorar la capacidad de mantenimiento neuromuscular. El Quiromasaje también logra relajar los músculos tensionados, los cuales a su vez dejan de ejercer presión sobre los vasos linfáticos y sanguíneos, ayudando a la expulsión de histamina y adrenalina (elementos químicos causantes del cansancio muscular). Entonces tiene un efecto calmante selectivo, porque al eliminar los deshechos de las células hace que los sistemas venoso y capilar se abran, entrando simultáneamente gran cantidad

de oxígeno y nutrientes, que mejorarán ampliamente el estado funcional de los músculos. Por eso las manipulaciones ayudan a lograr mayor fuerza muscular, disminuye los dolores musculares y también la intensidad del dolor. • Sistema Osteoarticular Mejorando el suministro sanguíneo de la articulación y los tejidos que la rodean, eleva la formación y circulación del líquido sinovial. Aumenta la elasticidad del aparato ligamentoso, dando lugar a la distensión de las fascias o aponeurosis contraídas. Al sumar esto a la relajación de las tensiones y contracturas musculares obtenemos mejoras en la amplitud del rango de movimiento articular. El Quiromasaje beneficia al sistema óseo favoreciendo la absorción de calcio por el mismo. • Aparato digestivo En los intestinos aumenta la motilidad gastrointestinal mecánicamente y por incremento del tono vagal. También es sabido que una de las ramas del vago se extiende por el tracto gastrointestinal controlando la secreción de la insulina y la glucosa, hormonas que intervienen en la absorción de nutrientes. Por eso las manipulaciones mejora la nutrición y optimiza el proceso de digestión. • Sistema Nervioso Favorece la capacidad para recibir estímulos por aumentar el umbral de excitación; excepto para el dolor, cuya percepción se disminuye. Está comprobado que el Quiromasaje incrementa las conexiones neuronales (sinapsis). Ambos efectos favorecen el surgimiento de impulsos aferentes o sensitivos del sistema nervioso, dando una mejor respuesta eferente o motora hacia todo el organismo, con lo que también se logra una mejor conciencia corporal útil para una relajación optimizada y un aumento en la efectividad de las funciones del cuerpo. Además el Quiromasaje aumenta la actividad parasimpática y mejora las habilidades cognitivas y de aprendizaje. • Metabolismo Hemos visto que las técnicas del Quiromasaje aumentan la temperatura de la zona tratada, incrementando el flujo sanguíneo por vasodilatación aportando más oxígeno, mejorando así la actividad metabólica. También ocurren, gracias a esta terapia, cambios beneficiosos en el equilibrio de hormonas y neurotransmisores.

Disminuye los niveles sanguíneos de cortisol (hormona del estrés) y el exceso de catecolaminas (relacionadas con la hipertensión arterial y el estrés). Disminuye los niveles sanguíneos de residuos de creatinquinasa15 tras el ejercicio. Aumenta la serotonina (neurotransmisor). Aumenta la melatonina (que se cree que regula los períodos de sueño). Es muy interesante el hecho de que las manipulaciones aumenten la producción de endorfinas (la llamada “morfina interna” por sus estructura química similar y, por ende, sus mismos efectos de analgesia y bienestar), pero de que esto solo sucede cuando en el paciente existen dolores; está demostrado que en personas sin ninguna queja álgida el masaje no aporta un aumento significativo de sustancias opiáceas endógenas. Es como si el cuerpo supiera cuándo se necesitan de verdad. Se ha demostrado que el Quiromasaje tiene un efecto positivo en prácticamente todos los sistemas. Y resulta beneficiado tanto el que lo recibe como el que lo da. Teniendo estos conocimientos, podemos utilizarlos como base para entender los fundamentos científicos de la acción terapéutica del Quiromasaje en diferentes patologías y afecciones y como no puede ser de otra forma en la Fibromialgia. Amoldándonos a las características de la Fibromialgia, las manipulaciones deben resultar agradables, ya que la persona afectada presenta las vías sensitivas alteradas y al mínimo estímulo doloroso se desencadena un reflejo antiálgico16. El tratamiento miofascial y la presión sobre los tenders points (puntos triggerts) favorece la movilización de los líquidos intersticiales17 y la eliminación de metabolitos que se depositan en el músculo. La presión alivia las restricciones de los tejidos conectivos que ejercen sobre los huesos permitiendo que se relajen y se distiendan las fibras musculares. Dentro de los efectos fisiológicos o mecánicos del Quiromasaje podemos distinguir entre el efecto local, que es el que se produce en la zona dolorida o tratada y el efecto reflejo, que es el que se produce en una zona distante a la tratada. Por ejemplo, al actuar en las vértebras lumbares, se producen efectos en la zona intestinal y viceversa, que puede ser de ayuda en casos de estreñimiento, como ejemplo de la amplitud de los efectos beneficiosos de esta técnica. Algunos autores apodan al Quiromasaje como el “masaje dulce” debido a la suavidad con la que se debe realizar en personas que padezcan Fibromialgia. Nada de manipulaciones fuertes, enérgicas ni vigorosas (cacheteos), haciendo del masaje una maniobra general envolvente y relajante. Las manipulaciones que se realizan son fricciones, roces, amasamientos, vaciados/isquemias etc.

Para hablar de los efectos psicológicos de las manipulaciones del Quiromasaje deben darse antes una serie de condiciones propicias para su correcta aplicación, como son las de una comunicación agradable y empática con el paciente donde exista una auténtica escucha por parte del terapeuta antes y después de la sesión, temperatura agradable, un espacio limpio y libre de ruidos con iluminación natural no directa y a ser posible música y aromas relajantes para producir dicho efecto en los cinco sentidos. Todo esto proporcionan las condiciones necesarias para que existan efectos psicológicos que influyan en la eficacia general de las manipulaciones. La reducción de la ansiedad, y la evasión de los problemas cotidianos, se consiguen mediante las manipulaciones lentas y prolongadas. A mayor relajación del paciente mayor efecto de las técnicas manuales. Los efectos sedantes y psicológicos del Quiromasaje están demostrados y no sólo en personas que sufren esta patología, toda persona enferma o sana puede disfrutar de sus efectos benefactores. Todos sabemos la sensación agradable que nos produce un simple roce o caricia, un abrazo, etc. Pero además de esta sensación, el tacto, el ser tocado, comprende mucho más. La humanidad precisa del contacto interpersonal. El contacto sana. Sabemos que en la piel se halla la sensación del tacto, que es el primer sentido que desarrollamos y por el que en nuestra infancia tomamos referencias del mundo a la vez que alimentamos nuestra autoestima por las caricias que nos ofrecen nuestro padres. La piel está íntimamente relacionada con el mecanismo psicológico del individuo, que actúa como reflejo de las emociones. El rubor que acompaña a la vergüenza, o la palidez con el miedo nos lo demuestran. El hecho de ser tocado puede transmitirnos diferentes sensaciones. No son iguales todas las formas de tocar. El contacto puede ser cariñoso o tierno, indiferente como en algunos actos sociales o iracundo, sexual, curativo como en el Quiromasaje o la imposición de manos del Reiki etc. El miedo, la anticipación y la preocupación contribuyen a las reacciones físicas que el cuerpo experimenta cuando es golpeado con sensaciones cargadas psicológicamente. La respuesta de lucha o huida entra en acción, la adrenalina se acelera y la presión arterial se eleva como preparación para la acción. Los investigadores de NCCAM (Centro Nacional para la Medicina Complementaria y Alternativa) informan que las técnicas manipulativas revierten esas condiciones psicológicas ayudando:

• A disminuir la presión arterial y la frecuencia cardíaca, aliviando la ansiedad (preocupación por el futuro). • Facilita el equilibrio emocional. • Aumenta los niveles de energía, ya que menos energía es utilizada en mantener el cuerpo tenso y estresado. • Desarrolla la receptividad y conciencia en el cuerpo haciendo darse cuenta de ello, por lo que mejora la autoestima. • Ayuda a desbloquear emociones reprimidas. • Puede servir como introductor a estados meditativos. • Disminuye el estrés al facilitar el acceso a una relajación profunda física y mental. • Aumenta la capacidad de percepción. • Aumenta la conciencia del propio esquema corporal, etc… Las manipulaciones del Quiromasaje sobre el cuerpo causan que la serotonina y las endorfinas se liberen en el torrente sanguíneo, elevando el estado de ánimo. Estas técnicas estimulan los bloqueadores del dolor y reducen los sentimientos asociados con el dolor crónico. Los sentimientos de ira se reducen durante la sesión que puede durar de 30 a 90 min. Doctores del University of Maryland Medical Center informan que el Quiromasaje alivian los sentimientos de depresión en las personas con enfermedades crónicas como el Cáncer y la Fibromialgia. Definitivamente, el contacto físico sana, comunica sin palabras, y se convierte en la expresión física de nuestra actitud hacia el mundo. ¿No es cierto que un individuo reservado en su expresión oral, también mostrará cierta reserva en el momento de tocar o ser tocado? El tacto calibra nuestra capacidad de amar y ser amados. En realidad, necesitamos el contacto físico por sí mismo. Es más difícil que nos engañe otra persona si le mantenemos cogido del brazo o del hombro (como han demostrado algunos estudios). De forma que es casi imposible fingir emociones cuando se toca a alguien, excepto si el receptor quiere ser engañado. Es imposible tocar con indiferencia mientras decimos que nos importa mucho el receptor, o tocar sexualmente mientras se manifiesta un sentimiento de amistad con la intención de que se crea. El tacto simboliza la forma mediante la cual nos relacionamos con la vida, la experiencia, el amor y la amistad. Las relaciones en general.

Atacar a la raíz del problema En este texto de principios del s. XX podemos encontrar algunas pistas sobre la posible solución de la «fibromialgia». El escritor se pone en la piel de un polinesio que, tras viajar a Nueva York, da a sus paisanos las primeras noticias sobre el hombre blanco: «Los papalagi (...) sienten pasión por una cosa que no podéis comprender y que, sin embargo, existe: el tiempo. Se lo toman muy en serio y dicen muchas tonterías sobre él. A pesar de que nunca habrá más tiempo entre el alba y el ocaso, esto no les resulta suficiente. Los papalagi nunca están satisfechos con su tiempo y culpan al Gran Espíritu por no darles más. Sí, difaman a Dios y a su gran sabiduría dividiendo cada nuevo día en un complejo patrón, y lo cortan a trozos, de la misma forma que nosotros cortamos el interior de un coco con el machete. (...) Es ésta una historia increíblemente confusa de la que yo mismo no he entendido aún los puntos más sutiles porque es difícil para mí estudiar esa tontería más de lo necesario. Pero los papalagi le atribuyen mucha importancia. Hombres y mujeres e incluso niños demasiado pequeños para caminar, llevan una máquina pequeña, plana y redonda bajo sus vestidos, atada a una cadena de metal pesado, colgada alrededor del cuello o la muñeca, una máquina que les dice la hora. (...) He dicho que es una enfermedad porque cuando el hombre blanco desea hacer alguna cosa, cuando por ejemplo su corazón desea caminar al sol o navegar en un bote por el río, o hacer el amor con su amiga, frecuentemente se priva de la alegría porque es incapaz de encontrar el tiempo. (...) Y, cuando, de súbito, descubre que de hecho sí que tiene tiempo o los otros se lo dan -los papalagi se dan con frecuencia tiempo unos a otros y ningún regalo es más precioso que éste- entonces descubre que no sabe qué hacer durante este tiempo en particular o que se encuentra demasiado cansado de su trabajo sin alegría. Y siempre está dispuesto a hacer cosas mañana porque hoy no tiene tiempo. (...) Con todas sus fuerzas y todas sus ideas, los papalagi intentan ampliar el tiempo tanto como pueden. Ponen ruedas de hierro bajo sus pies y dan alas a sus palabras, sólo por ganar tiempo ¿Y para qué sirve todo este trabajo y todos estos problemas? ¿Qué hacen los papalagi con su tiempo? No he recogido nunca suficientes datos, pero según sus palabras y sus gestos se diría que están invitados personalmente por el mismo Gran Espíritu a un gran fórum».

Los achaques de la vida moderna La fibromialgia, el cansancio muscular crónico, la colitis ulcerosa, la enfermedad de Crohn, las esclerosis múltiples y laterales, la artritis reumatoide, el lupus eritematoso, la depresión, la soriasis, las úlceras gastroduodenales, el cáncer... son enfermedades que, a pesar de estar presentes en el mundo entero, se dan con más frecuencia en los países civilizados. ¿Por qué? Fijémonos en las enfermedades que acabamos de mencionar: las personas que las padecen comparten frecuentemente un perfil nervioso, no pueden llegar a todo, los problemas les producen ansiedad excesiva... Son factores que producen un gran desgaste físico y psíquico, y que afectan por igual tanto a un trabajador, como a un empresario o a un ama de casa. La locomotora del Primer Mundo va cada vez más deprisa. El éxito en nuestra pudiente sociedad se mide en que una persona o empresa llegue cada vez más alto, más lejos o más rápido; estabilizarse se interpreta en clave de fracaso. Pero las locomotoras sufren un desgaste, y requieren sustituir las piezas estropeadas. El problema es que esas piezas... somos nosotros. Efectivamente, la locomotora del Progreso busca avanzar a toda costa, aunque para ello deba destruir personas y sustituirlas periódicamente por otras.

Un cúmulo innombrable de enfermedades Las máquinas se estropean por su parte más débil, que en esta máquina del Primer Mundo son las personas. ¿Estamos dispuestos a sacrificarnos por el Progreso? ¿Quién nos lo agradecerá? Imaginemos a Susana: su calidad de vida es alta (vacaciones fuera de casa, dos coches, calefacción central, empleada doméstica...) y tiene una hipoteca, dos niños... Para mantener todo ello necesita trabajar intensamente, metiendo horas extras, y apenas le queda tiempo libre. A pesar de su juventud, tras unos años a este ritmo ha empezado a tener problemas de espalda, migrañas, dolores articulares, nota un nudo en la boca del estómago... También se encuentra triste; en realidad, algunas mañanas no tiene arrestos ni para levantarse. En fin: no se encuentra bien, y decide acudir al médico; pero éste no le ve nada raro.

Decide ir en busca de una segunda opinión, y lo mismo: las pruebas diagnósticas y análisis no dejan ver anomalía alguna. Nadie es capaz de encontrar el origen de sus molestias... La respuesta podría ser que Susana, simplemente, debe trabajar demasiado para mantener su nivel de vida y la falta de descanso la está destruyendo tanto física como psicológicamente. Pero... ¿quién se atreve a explicárselo? Esto supondría un cataclismo en la vida de Susana (que tendría que cambiar radicalmente), y tampoco sería una cosa deseable para el Sistema. Y es que, el nivel de vida del Primer Mundo no es gratis; se mantiene a base de sudor y sangre. ¿Y si no somos nosotros quienes lo ponemos, el sudor y la sangre lo proporcionarán rumanos, chinos o ecuatorianos?. Siempre será necesaria carne humana, es decir: alguien que esté dispuesto a perder su salud por dinero. ¿Qué ocurriría si en Europa todos los trabajadores comenzaran a consumir menos? Y por tanto necesitaran menos dinero. Y por tanto necesitaran trabajar menos... ¡Un desastre! Pero ¿un desastre, para quién? No para los trabajadores, ya que cambiar el paradigma de vida les comportaría tiempo para vivir más tranquilos, para disfrutar y para cuidarse mejor. El desastre sería para un modelo de economía que funciona perjudicando a las personas, ya que no habría personas dispuestas al sacrificio. Y lo peor es que las ventas caerían o se estabilizarían; pues todos sabemos que en este modelo económico no crecer es un fracaso... Pero nosotros, en tanto que como terapeutas de la salud, no deberíamos tener en mente el modelo económico imperante sino la mejora de la salud de las personas, así como la enseñanza de la autogestión de la misma. Y para ello es necesario entender el problema lo mejor posible y desde todos los planos.

¡Al fin encontraron lo que tengo! Recuperemos a Susana donde la habíamos dejado: saltando de consulta en consulta con sus dolores de espalda, de cabeza, de articulaciones... sin que le encuentren enfermedad alguna. Su médico también lo está pasando mal: Susana se ha enfadado mucho cuando le ha mencionado que «en la radiografía no se ve nada» y que »seguramente es un tema psicológico»... Además no es el único caso.

Este médico ve cada vez más casos como el de Susana: la incidencia de la fibromialgia aumenta, con mayoría de mujeres, y el Centro de salud local está comenzando a verse colapsado. Un día, el médico informa a Susana de que existe un posible diagnóstico para su caso. Lo suyo puede ser fibromialgia. Se trata de un misterioso síndrome: nadie sabe sus causas, pero se está extendiendo cada vez más por el mundo; y de momento no tiene cura. ¡Al fin! Una explicación clara. Los dolores de Susana no tienen que ver, entonces, ni con la falta de descanso, ni con el estrés, ni con trabajar 14 horas al día. No: su malestar se debe a esta enfermedad desconocida e incurable. Ha sido una noticia dura, pero en cierta medida tranquilizadora. Tanto para el médico, como para el jefe de Susana y por supuesto para ella misma. Una vez identificada la enfermedad, el médico puede recetar las medicinas adecuadas; controlados así la depresión y los dolores corporales, Susana puede trabajar sus 14 horas; y a trancas y barrancas podrá mantener su calidad de vida, sin cambiar de hábitos. Pero... ¿hasta cuándo será?

A modo de conclusión Ciertamente existe un grupo de pacientes que no recibe respuesta adecuada de los Sistemas de Salud y se quejan de que los médicos no les prestan suficiente atención. Por eso, los fibromiálgicos han comenzado a agruparse en asociaciones para pelear por unos objetivos comunes: atención específica y sobre todo un reconocimiento por parte de la Administración, que les permita recibir bajas, pensiones o certificados de invalidez como cualquier otro enfermo. Si alguna vez somos diagnosticados con esta enfermedad debemos saber que es un problema profundo, que ha venido desarrollándose a lo largo de muchos años, y que para darle la vuelta precisará también de años y paciencia. En ese proceso, será importante que sigamos los consejos del médico; pero sin perder de vista que no debemos delegar en él la responsabilidad de nuestra salud. Y es que los profesionales de la salud no son más que ayudantes: porque curarte, te curarás tú. Es por ello la importancia de que el afectado incorpore a su vida los regalos que suponen rodearse de personas que la apoyen y comprendan ya sea a nivel familiar y profesional como en una terapia Gestalt como de hábitos y actividades que le supongan confort, bienestar y relajación física y emocional como es con el Quiromasaje o el Yoga.

En definitiva crear los espacios para cuidarse y amarse para en la medida de lo posible mejorar nuestra auténtica calidad de vida. Tal como las investigaciones están probando de forma repetida, los mejores resultados en el tratamiento de la Fibromialgia se están produciendo con la participación activa del paciente, e interviniendo en las esferas físicas, psíquicas y sociales. Para ello es imprescindible avanzar en el conocimiento y la observación de nosotros mismos, prestando atención a nuestro mundo interior llevando el correcto equilibrio entre las emociones, deseos, necesidades y frustraciones... para ser capaces de ver con claridad las cosas que deben cambiar en nuestra vida, y lo más difícil, tener la valentía para afrontarlas.

La encrucijada de OSHI

El Quiromasaje es un arte. Combina técnica y sensibilidad. El contacto de dos personas, a nivel físico y también psíquico/energético, con fines terapéuticos o bien equilibradores. Transciende la propia técnica para alcanzar el contacto con nuestro propio cuerpo. Vivimos separados de nuestro cuerpo y de nuestra verdadera esencia. Esto nos mantiene atados a la vida cotidiana, al estrés y los problemas que agotan el 100% de nuestra energía. La tensión emocional puede hacer que un músculo o un grupo de ellos se tense, se contraiga y se acorte causando rigidez y el dolor. La tensión también crea un desequilibrio de fuerzas en la columna vertebral, que producirá dolores de espalda, cuello y cabeza que aceleren el proceso de envejecimiento. Las técnicas manipulativas del Quiromasaje son herramientas para traer conciencia al cuerpo físico, relajarlo y traer de vuelta el flujo libre y espontáneo de energía, acompañando la sanación. El resultado, en general, será la liberación de la rigidez, la atenuación o eliminación del dolor crónico y la liberación de los problemas y dificultades emocionales. Así pues, tenemos un conjunto de técnicas de probada eficacia que nos puede ayudar en grandísima medida. Además de eficaces, son altamente gratificadoras. Por tanto, son muy recomendables en todos los procesos vitales que estemos transitando. Nos ayudarán a ayudarnos a nosotros mismos. Nos daremos mucha mayor calidad de vida y progresaremos hacia un mayor bienestar con mucha mayor facilidad y rapidez. Evitaremos los momentos de excesos de sufrimiento y alcanzaremos mucho mejor nuestros objetivos resolviendo e integrando muy eficazmente nuestras necesidades. Sólo queda ponerse en movimiento y recibir esta gran y gratificante ayuda.

“Un buen profesional no trata la enfermedad, sino a la persona que la padece”. Moshé Maimónides. Granada, 12 de Mayo del 2016 Día internacional de la Fibromialgia.

• Terminología y Nomenclatura. 1 Gestalt: La Terapia Gestalt es algo más que una simple psicoterapia, se presenta como una verdadera filosofía existencial, un "arte de vivir", una manera particular de concebir las relaciones del ser humano con el mundo. La Gestalt se sitúa en la encrucijada entre el psicoanálisis, las terapias psicocorporales de inspiración reichiana, el psicodrama, el sueño dirigido, los grupos de encuentro, los enfoques fenomenológicos existenciales y las filosofías orientales. Pone el acento sobre la toma de conciencia de la experiencia actual ("el aquí y el ahora", que engloba el resurgimiento de una vivencia pasada) y rehabilita el sentimiento emocional y corporal, generalmente censurado en la cultura occidental. La Terapia Gestalt desarrolla una perspectiva unificadora del ser humano, integrando a la vez, sus dimensiones sensoriales, afectivas, intelectuales, sociales y espirituales, permitiendo una experiencia global donde la vivencia corporal puede traducirse a palabras y la palabra pueda ser vivida corporalmente. Favorece un contacto auténtico con los otros y con uno mismo. La Terapia Gestalt no sólo tiene como objetivo simplemente explicar los orígenes de nuestras dificultades sino experimentar y "experienciar" los indicios de las soluciones nuevas: a la búsqueda dolorosa y, generalmente, evitativa del 'saber por qué', ofrece la alternativa del 'sentir cómo', dando paso así a un proceso de movilización que favorece el cambio. 2

Miofascial: El síndrome miofascial es un cuadro de dolor regional de origen muscular, localizado en un músculo o grupo muscular, que consta de una banda tensa, aumentada de consistencia, dolorosa, identificable por palpación y en cuyo seno se encuentra el punto gatillo (PG) y dolor referido a distancia, espontáneamente o a la presión digital. 3 Puntos Triggerts: Se define como un punto hiperirritable dentro de una banda tensa de un músculo esquelético. 4 Etiología: Designa, en el lenguaje médico a la vez el estudio de las causas y fastores de una enfermedad y el conjunto de estas causas por ellas mismas. Esta disciplina médica se basa para la investigación de las causas en el estudio de signos y síntomas de una patología (semiología). También utilizamos esta término en el campo de la psiquiatría para definir los factores potenciales de una enfermedad mental. 5

Mialgias: Designa un dolor más o menos intenso y prolongado, puede ser localizado o difuso y afectar a cualquier músculo estriado esquelético del cuerpo humano.

6

Bruxismo: Hábito inconsciente de apretar o rechinar los dientes que puede provocar molestias en diferentes partes de la cabeza.

7

Tautológico:Hace referencia a la repetición de un mismo pensamiento a través de distintas expresiones.

8

Epigenéticos: Se refiere a los cambios heredables en el ADN que no implican alteraciones en la secuencia de nucleótidos y modifican la estructura y condensación de la cromatina, por lo que afectan la expresión génica y el fenotipo.



9

Shunts Arterio-Venosos: Son la comunicación entre arterias y venas, formando parte de la red vascular corporal, controlados por el hipotálamo para abrirse o cerrarse cuando convenga, mantienen un equilibrio corporal y también una de sus funciones es asegurar la correcta termorregulación corporal, han descubierto que existe una disfunción de estas derivaciones, en los afectados por la fibromialgia, realizando el estudio solo a mujeres y en el tejido palmar, se ha descubiertos que en los afectados se ve limitado el aporte sanguíneo a los músculos periféricos. De este modo explican la presencia de ácido láctico y ausencia de inflamación en los músculos, causante del dolor y una alteración en la termorregulación del SNA y esto a su vez repercute en una hiperactividad cerebral con los procesos de dolor, fatiga, alteraciones del sueño, encajados con los síntomas de la Fibromialgia.

10

Rumiativo: Patrón mental obsesivo en el que una persona oscila entre los distintos aspectos de una cuestión, pasando de un pensamiento a otro sin soluciones.

11

Sustancia P: La sustancia P (SP), es un neuropéptido que pertenece a la familia de neuropéptido taquiquininas. Está estrechamente relacionado con el neuropéptido neuroquinina A (NKA). Es una cadena de los aminoácidos que está implicado en la transmisión del dolor y la ansiedad. Esto significa que su función es llevar a cabo la comunicación entre las células nerviosas. Una de sus principales funciones es la sensación del dolor. Se tiende a transmitir la información relacionada con el dolor en alguna parte del cuerpo para el sistema nervioso central. Los estudios han demostrado, que no sólo está asociada con el dolor, sino también con otros procesos neurológicos. Los neurotransmisores ayudan en la regulación de los trastornos del humor, la ansiedad, el estrés, el ritmo respiratorio, la neurotoxicidad, las náuseas, etc. Los neurotransmisores son liberados en las terminales periféricas de la piel, los músculos y las articulaciones.

12

Acetilcolina: Sustancia química que actúa en la transmisión de los impulsos nerviosos. 13 Glucogenolisis: Proceso por el cual el glucógeno presente en el hígado se transforma en glucosa que pasa a la sangre. 14

Gluconeogénesis: Proceso de formación de carbohidratos a partir de ácidos grasos y proteínas, en lugar de hacerlo de carbohidratos. Intervienen, además del piruvato, otros sustratos como aminoácidos y glicerol.

15

Creatinquinasa CPK: Enzima que se encuentra principalmente en el corazón, en el cerebro y en los músculos esqueléticos. Cuando aparece elevado es porque estos tejidos han sufrido algún daño.

16

17

Antiálgico:

Que hace que un dolor o molestia sea menos intenso o desaparezca.

Líquido Intersticial: Filtrado del plasma proveniente de los capilares. Su contenido es casi igual al plasma, pero diferente de él en una concentración más baja de proteínas, debido a que éstas no logran atravesar los capilares con facilidad.

Get in touch

Social

© Copyright 2013 - 2024 MYDOKUMENT.COM - All rights reserved.