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Relatos del Barrio Tarapacá Oriente (sector Adrián Barrientos)

Recopilación de historias realizada por el Programa “Quiero mi Barrio” del Ministerio de Vivienda y Urbanismo

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Agradecemos la participación, amabilidad y cooperación de todos los vecinos de este barrio. Aparezcan o no en estas páginas.

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Índice

6……………………………………………………………………………………………………… Prólogo 7…………………………………………………………………………………………………….Introducción 9……………………………………………………………………………………………..Relatos del Barrio 10……………………………………………………………………………………………..“Sueño Cumplido” 11…………………………………………………………………………………………………………“Unidos” 15…………………………………………………………..“Y de cómo llegaron Cultura y Quiero mi Barrio” 16………………………………………………………………………………“El mentolato del grupo juvenil” 17……………………………………………………………“Me avisaron que había una toma de terrenos” 18……………………………………………………………………………......“50 carpas hechas de cartón” 19…………………………………………………………………………………….. “¡Qué sea una felicidad!” 20….………………………………………………………………………………… “Peñascazos de infancia” 21………………………………………………………………………………………….. “El día del incendio” 22………………………………………… “Les podría contar más cosas pero el tiempo no me alcanza” 23…………………………………………………………………… “De castigo nos llevaron al cementerio” 24…………………………………………………………………………………….. “Empréstame los Platos” 25…………………………………………………………………. “Me gustó Arica por lo hermosa y barata” 26………………………………………………………………………………….. “Mi historia es muy buena” 27………………………………………………………………………………………….. “Mi sueño de niñez” 28…………………………………………………………………………………... “¿Dónde dejaste tu ropa?” 29…………………………………………………………………………………………… “La vulcanizadora” 30……………………………………………………………………………………... “Seré una anciana feliz” 31………………………………………………………………. “Soy familiar de un detenido desaparecido” 4

32………………………………………………………………………………… “Conociendo a mis vecinos” 33……………………………………………………………………………………………………… “Vuelvan” 34……………………………………………………………………………….. “Eran dos piezas de madera” 35………………………………………………………………………………………….. “Esa fue mi historia” 36…………………………………………………………... “La anécdota de cuando me llevaron detenida” 37……………………………………………………………………………………………. “Hace 40 años… ” 38…………………………………………………………………………………….. “Soy de pocas palabras” 39……………………………………………………………………………………………. “La bajada del río” 40………………………………………………………………………………………………. “Mira Sergio… ” 41………………………………………………………………………………………………………. “Amigos”

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Prólogo Nos llena de satisfacción como seremi de Vivienda y Urbanismo de la región de Arica y Parinacota, que hayan sido los vecinos del barrio Tarapacá Oriente (sector Adrián Barrientos) quienes postularon y fueron favorecidos con esta nueva política como lo es el Programa de Recuperación de Barrios, junto a otros dos barrios ariqueños. Es una alegría a la vez poder decir que estamos terminando de cumplir el Contrato de Barrio, un acuerdo de voluntades entre los vecinos y el ministerio, donde los primeros se comprometieron a participar a través de su Consejo Vecinal de Desarrollo en la recuperación de su barrio, y el Minvu a ejecutar obras junto a un plan de gestión social. Estamos concluyendo con nuestra parte, con la ejecución de las obras comprometidas que significan una inversión sectorial cercana a los mil millones de pesos. Esto involucró una cancha multipropósito; la remodelación de las plazas Amatista y de Juegos; la construcción de espacios de circulación vinculante, convirtiendo los pasajes de este barrio en verdaderos boulevards que ya los quisiéramos en el centro de Arica; el recambio de más de 100 ganchos de luminarias más la instalación de focos tipo pulpo que sin duda son un gran aporte para la seguridad; además de la repavimentación de la avenida Rodrigo de Araya y de los principales pasajes, que sabemos ha generado el interés de las empresas del transporte colectivo (cuyo servicio habían interrumpido por el mal estado de los pavimentos) de volver a pasar por el barrio. A esto hay que sumar la pronta construcción de la nueva sede social, un inmueble que seguramente será lejos el de mayor jerarquía en Arica, tanto por su modernidad y calidad. Pero lo más importante es que durante este proceso hemos visto un barrio comprometido, gente que sale de su casa, que participa y organiza actividades, que le da un uso a las obras en cuyos diseños participaron, niños que salen a jugar en espacios que anteriormente lucían deteriorados o eran derechamente “peladeros”. Este libro es precisamente una muestra de aquello: de cómo los pobladores pueden reunirse a rememorar historias acerca del lugar donde habitan, plasmándolas en este trabajo, rescatando la identidad que hace de este barrio uno de los lugares emblemáticos de la ciudad de Arica, desde sus orígenes en tomas de terreno efectuadas por los mismos vecinos en los años ’60. Para el futuro quedan las obras, los recuerdos de una época muy bonita en que el CVD junto al equipo regional de QMB, trabajó en conjunto en la recuperación de su barrio. Nuestra invitación como ministerio es a seguir participando tan organizadamente como lo han demostrado, postulando a proyectos porque el Minvu tiene líneas de financiamiento, independiente de Quiero mi Barrio, a las cuales pueden acceder: Pavimentos Participativos, mejoramiento del entorno, ampliaciones y mejoramiento de las viviendas, entre otros. Las puertas del Minvu siguen abiertas para todos los vecinos. Atte Ricardo Chameng Cornejo Seremi de Vivienda y Urbanismo Región de Arica y Parinacota 6

Introducción El Gobierno de Chile se ha propuesto mejorar la calidad de vida de los habitantes de barrios que se encuentran con deterioro urbano y en vulnerabilidad social, es por eso que crea el Programa de Recuperación de Barrios “Quiero mi Barrio” dependiente del Ministerio de Vivienda y Urbanismo, interviniendo a través de un proceso participativo de recuperación de espacios públicos y entornos urbanos de las familias y fortalecimiento de la organización social. Quiero mi Barrio es un programa de tipo participativo que incorpora a los vecinos y vecinas como actores relevantes en el proceso de regeneración del barrio. Todo esto hace de éste un programa innovador en la aplicación de políticas públicas de responsabilidad compartida con la comunidad. La población Tarapacá Oriente fue seleccionada por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo para mejorar sus espacios públicos en el polígono comprendido entre las calles Capitán Ávalos, Balmaceda, Joaquín Aracena, Las Acacias y Loa. El Programa se encuentra trabajando desde el año 2006 en la población Tarapacá Oriente (sector Adrián Barrientos). En la primera etapa de la intervención se realizó un estudio técnico de base en el que se estableció una descripción de la población, analizando el barrio desde un punto de vista urbano territorial, medioambiental, social y de seguridad ciudadana. También se realizaron actividades con los vecinos: un hito inaugural y talleres de autodiagnóstico comunitario destinados a realizar el levantamiento de las necesidades del barrio, culminando con la propuesta técnica con las iniciativas urbanas y sociales prioritarias. En julio de 2007 se firma el Contrato de Barrio, documento que contiene los compromisos establecidos en términos de gestión social y gestión de obras para la recuperación del barrio de acuerdo al marco presupuestario definido por el Programa, el cual tiene tiempos asociados a la ejecución de la cartera de proyectos que lo componen. Para el logro de los objetivos propuestos se plantearon distintas gestiones a nivel de obras y gestión social. Para el primero se propuso la recuperación física del barrio a través del mejoramiento de los espacios públicos deteriorados y subutilizados y el mejoramiento de las condiciones físicas y ambientales del entorno. Las áreas de intervención propuestas fueron: áreas verdes, equipamiento, circulación y obras complementarias. El Plan de Gestión Social se propuso fortalecer el tejido social y mejorar los niveles de integración social del barrio, además de promover la participación de los vecinos en la recuperación de los espacios públicos y mejoramiento de las condiciones de su entorno. Las áreas de intervención propuestas fueron: participación ciudadana, seguridad ciudadana, identidad barrial, medio ambiente y conectividad digital. Además se creó el Consejo Vecinal de Desarrollo (CVD), organización que promueve el desarrollo sustentable del barrio y una mejor calidad de vida de sus habitantes, potenciando la integración, participación de los vecinos y el desarrollo de proyectos físicos y sociales que colaboren a su mejoramiento. En la segunda etapa del programa se ejecutó el Contrato de Barrio, iniciándose la construcción de la cancha multipropósito. En esta etapa, el Consejo Vecinal de Desarrollo tiene una participación activa involucrándose en el monitoreo de la ejecución de la obra y finalmente en su inauguración en junio del año 2008. Actualmente la cancha se ha convertido en un lugar de encuentro para los niños, jóvenes y adultos del sector, realizándose diversas actividades masivas. 7

En el segundo semestre del 2008 comienzan a ejecutarse las obras mejoramiento del sistema de alumbrado público y pavimentación de la avenida Rodrigo de Araya y pasajes en mal estado. Ambas fueron entregadas en diciembre de 2008, logrando cambiar la visibilidad y accesibilidad de la población, permitiendo entregar mayor seguridad a los transeúntes. La inauguración de la Plaza Amatista se concreta en abril del año 2009. El mejoramiento de los espacios de circulación vinclante veredas y espacios públicos de Rodrigo de Araya, Onix, Azucenas, Loa, Amatista, Topacio y Azabache se entregarían el mes de noviembre de 2009. La Plaza de Juegos en tanto se entregó en el mes de julio del presente año, destacando por su áreas verdes y la calidad de los juegos instalados. Las obras construcción de la sede social y telecentro se entregarán al finalizar el 2009. Durante el período de ejecución de todas las obras se realizó monitoreo con los integrantes del CVD, quienes manifestaban sus inquietudes y aclaraban dudas. Las obras son un bien de uso público que beneficia a toda la población por lo tanto todos los pobladores deben aportar para su cuidado y mantención. Con respecto a la ejecución del plan de gestión social se trabajó en áreas de intervención de participación ciudadana, seguridad ciudadana, medio ambiente, conectividad digital e identidad barrial. Dentro de esta última área uno de los propósitos fue reconstruir la historia del barrio relatando los inicios de su conformación, las transformaciones que ha tenido en el tiempo tanto físicas como sociales y los hechos más relevantes del barrio. En el presente libro, los habitantes de la población Tarapacá Oriente dan a conocer historias del barrio a través de sus relatos, contando cómo fueron los inicios de la población y su proceso de transformación a través de sus vivencias personales y colectivas. Las historias contadas surgieron a partir de una serie de talleres literarios realizados en el año 2008 con vecinos y vecinas de distintas generaciones y con la participación del escritor local Floridor Pérez, quien dirigió la actividad. Estos talleres fueron instancias de encuentro de los habitantes de la población para recopilar la información necesaria y conocer más detalles del nacimiento de su barrio y al mismo tiempo compartir sus experiencias de vida. El presente libro pretende ser un aporte a las vecinas y vecinos, y principalmente a las futuras generaciones del barrio para que puedan conocer algunas miradas acerca de los orígenes de éste, junto con historias cotidianas que al leerlas sin duda lograrán más de alguna identificación o añoranza del pasado.

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RELATOS DEL BARRIO La población Tarapacá Oriente nace a partir de tomas de terrenos que comenzaron el año 1969. Luego, en 1978, parte su urbanización con el traspaso de 667 sitios, de los cuales 118 correspondían al Plan 20.000 y el resto a la autoconstrucción. Los relatos que a continuación se presentan fueron escritos por vecinos y vecinas del barrio Tarapacá Oriente (sector Adrián Barrientos) en sesiones de talleres literarios realizadas entre los meses de abril y noviembre de 2008. Las sesiones tuvieron en un inicio la participación del escritor local Floridor Pérez, quien guió la actividad.

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“Sueño cumplido” (Sabina Salinas Bravo) Este libro es la culminación de un sueño, que poco a poco se está haciendo realidad. Hecho por los vecinos, amigas, padres, hermanos, hijas, nietos, abuelos, que han pasado por muchísimas emociones, sensaciones y diversas situaciones que vivimos no sólo individualmente, sino como familias, comunidad, población, manzanas o cuadras. Cada lugar tiene una historia, cada historia se ha hecho colectiva, Y también, ¿por qué no?, va un recordatorio para aquel arrendatario o allegada, que ha vivido y experimentado algunas de las emociones del barrio de “La Villa Adrián Barrientos”. En este gran Programa “Quiero mi Barrio” surgió un espacio llamado “Café del Recuerdo” en donde nos encontramos haciendo añoranzas, aflorando las vivencias llenas de sentimientos. Historias, algunas conocidas y casi olvidadas, otras que no imaginábamos que hubieran ocurrido, aquí, en la “pobla”. Fue en esas noches que, junto al café, recordamos cómo fuimos llegando, unos primero, otros después, unos por “tomas de terreno” otras, a través de comités de allegados creados en distintas instancias, de lo cual la “Corporación de la Vivienda”-CORVI, se hizo cargo, entregando los terrenos. De repente, alguien recordó que antes nos llamábamos “Villa Adrián Barrientos” en homenaje al gobernador de aquella época (1969), fecha en que empezamos a llegar a este lugar, en donde había piedras por doquier, sin agua ni luz eléctrica, terrenos sin urbanizar, pero… ¡nuestros! Esta persona, el gobernador, nos ayudó en todo momento de su mandato, siempre estuvo presto a escucharnos como personas, nunca nos dejó de lado, tal vez, en más de algún relato se iba conociendo algo más de lo mucho que por nuestra “villa” él hizo. Sin embargo, por alguna razón legal, que desconozco, no se pudo seguir usando el nombre que habíamos elegido, sino que legalmente pasó a llamarse Población “Tarapacá Oriente”. La razón principal del sueño de hacer un libro, es para dejar plasmado en él, las memorias colectivas de nosotros sus habitantes, que con las fuerzas de nuestras manos fuimos creando, este “nuestro barrio” y para que sepan y conozcan nuestras raíces ¡¡nuestros hijos, nietos y los hijos de nuestros nietos!!

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“Unidos” (Carmen Guerra) Yo llegué a la Población Villa Adrián Barrientos, porque así se le puso; llegué dos meses después de las tomas, y alcancé a ver como la gente estaba, y todos llegamos a la onda de los cartones y ya no se llamaba Villa Barrientos, se llamaba Villa los cholgüanes, villa los cartones; no teníamos luz, ni agua. Para mí fue un impacto bastante grande porque era primera vez que vivía en la población, siempre he vivido en el centro en la capital y más encima yo venía de Argentina de luna de miel, y luego vi el terreno y me gustó acá. Lo que sí lloraba todos los días a las 6 de la tarde porque no había luz, no había agua, todo era piedra, era muy triste y nos quedaba frente a la casa una pampa hasta la Población Chile, lugar donde conocí a la mamá de la señora Julia Godoy con la cual nos hicimos muy amigas. Ella siempre nos convidaba agüita, no le gustaba que yo llorara, y siempre venía con mi hijo chiquito, Juan Carlos que tenía un año y 2 meses más o menos y ahora tiene 40 años y siempre quise tener algo bonito así que en la población hice una plaza y siempre plantaba árboles y me los robaban allá en Amatista, hay unos árboles que tienen una historia acá que están desde que llegué, unos pimientos. Éramos muy unidos y a mi marido no le gustaba que yo me metiera en nada, porque era muy celoso y yo era muy buenamoza y todavía lo soy y lo más lindo de todo con la gente, es que éramos muy unidos, a pesar de que estábamos con penas, habían hoyos, todos nos cuidábamos, la gente era más conocida, más abierta, más de confianza, nadie robaba, dejábamos las puertas abiertas, nadie entraba, sin cierres, sin nada y se nos agrandaban nuestras casas con nuestros hijos y era muy bonito. De ahí ya empezamos a luchar pero yo siempre escondida de la casa, por la luz, el agua con la señora Teresa Podestá que fue la primera presidenta y hacíamos las reuniones arriba de un camión, hasta que se construyó esta sede con la ayuda del señor Barrientos, la Junta de Adelanto, lo más pesado y los vecinos que ayudaron a parar los ladrillos, inauguramos con un pie de cueca y seguí escondida, porque no me dejaban salir. También trabajaba en las tiendas, en la Casa Ventura, me iba en bicicleta al centro porque quedaba muy lejos, después iba en la micro “3 A” que estaba frente a mi casa, hasta que se pusieron las otras tomas al frente de mi casa. Después nos dieron los terrenos con 115 cuotas y empezamos a trabajar por el famoso plan 20.000, y nos ayudábamos, trabajamos por el agua y la luz, éramos muy unidos, a veces llorábamos por los niños que peleaban, era muy bonito, nos íbamos a acampar a la playa todo el barrio, con un caballero que tenía micro, íbamos todos y dejábamos las casas solas y volvíamos y las casas estaban iguales. Hacíamos campeonatos de los hombres con las mujeres, las solteras con los casados, era muy bonito. Después trabajamos cuando ganamos el proyecto “Entre Todos” para hacer nuestros cierres que nos dieron 10 metros primero, luego otros 10 más; hacíamos picantes, estuvimos 3 años haciéndolos; empezamos 100, luego quedamos 44 y esas 44 personas trabajábamos mucho y era bonito. 11

Y después la que hablaba en mi casa, empezó a hacer grupos, deportivos, juveniles, elegimos la reina de la Población y saqué la primera reina; que era Edith Santibáñez que era nuestra arquera, ganábamos en todo, apoyábamos a Deportes Arica en Primera, jugábamos fútbol, llenábamos el estadio, fuimos al Coliseo a Tacna, les ganamos a las peruanas en fútbol, fuimos a Lluta, Putre; hacíamos actividades para comprar los zapatos de fútbol, las chiquillas primera vez que usaban zapatos de fútbol, era algo muy bueno. Y fue así, logramos muchas cosas. En la Junta vecinal tuvimos muchos presidentes, estaba el señor Urrutia, después vino el golpe militar, que nos quitó acá la sede y nos llegó un Parvulario que se llamaba “El Dumbo”, así que hicimos una sede de una pieza de madera allá donde está la cancha de baby fútbol en Sierra con Caolí, estaba el señor Grafo de Presidente, después estuvo el señor Jorge Morales, ahí estuve de presidenta, después nos echaron de ahí y nos fuimos a Loa a una sede que le decían la sede sin techo, ahí teníamos reuniones, la gente participaba mucho, era muy trabajadora. Y así sucesivamente, después estaba la Isabel Riquelme, la Villa Suecia, la Planta Telefónica y nosotros éramos la Población Barrientos, de Joaquín Aracena para arriba era la Ampliación Barrientos. Formamos dos bailes religiosos uno para la Tirana y otro para Las Peñas, actualmente sólo funciona el de La Tirana. Pasaron “n” cosas, dos jóvenes que salieron de curas, el Pato Gámez y el Patricio Salazar, que salieron del grupo juvenil de curas. Y así fuimos siempre haciendo Yingas, participábamos en la Yinga, con cartones, con todo, era muy bonito; pero una cosa que no me gusta es el estilo de ahora que todo es plata y es mucho de pasacalles, de comparsas que tienen buena situación, al poblador no se le toma mucho en cuenta. En ese tiempo era hacer cosas con papel celofán, con mallas, con lo que sea y hacer sus propios trajes, participaban, ganaban, los premiaban y los incentivaban más para que la juventud no estuviera metida en la droga, cosa que ahora en la juventud se ve. Ahí sacamos la reina y así pasó el tiempo. Ahora soy presidenta de la junta vecinal hace siete años, asumí en octubre. Hice el aniversario por primera vez en nuestra Junta de Vecinos y elegimos reinas por sector y una reina por la Junta de Vecinos y un Rey adulto mayor por sector y por la Junta de Vecinos, que es Evita Concha que fue la reina de toda la Población y las otras chicas fueron por sector y don David Soza también fue Rey, pero del sector. Fundamos también el Club con David Soza y la señora Gina que vive en la esquina y hartas cosas que se han hecho con mucha gente que ya no vive acá, como la señora María Castillo, la señora Olivia, la señora que falleció, don Roberto Cisternas que también fue presidente de la Junta de Vecinos, él fue el secretario de la Junta de Vecinos, cuando se fueron se perdieron muchas cosas, se quitaron muchas libertades.

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También fundamos los Bomberos acá en la Punta de Diamante, me acuerdo que la Citroen le regaló un jeep, y le pusieron la “pinina”, porque era una cosa bien chiquitita y bautizábamos a todos acá a los bomberos. Y nos quitaron también a los bomberos, la gente de ese entonces cooperaba con $ 300 pesos y salíamos los delegados de cuadra a hacer un puerta a puerta; porque habían muchos delegados de cuadra, participaba mucha gente, pagaban sus cuotas; ahora se ve mucho que te den, si me dan yo voy y si no me dan no voy, o sea ya obtuve lo que quería y ya no voy más. La población ahora está bien bonita, falta que la gente sepa cuidar lo que tiene. La banda: la Carmen Guerra formó la banda con una niña de aquí, la señora María Zavala, hicimos la Banda de los Cortapalos, primero empezamos con niños de todos los colegios y después formamos ya la Banda de Guerra y la Municipalidad nos apoyó y le pusimos la Banda Municipal, ya que fue muy bonito, nos apoyaban con instrumentos, nos llevaban a pasear a Poconchile, a Molino, a las caminatas, me acuerdo de una anécdota muy buena cuando estaba el señor Pinochet, en el desfile del 7 de Junio. Nosotros habíamos caminado toda la noche con los niños para una competencia que había y teníamos que desfilar al otro día, así que nos tenían en el puerto y de repente uno de estos gallos que estaban dirigiendo el desfile, dice “¡No! ¡ustedes no salen!”. Y bueno como yo soy Carmen Guerra, fui y dije “¡Al compás!”, y me abren el puerto. Estaba lleno y todos los que estaban eran los papás de los niños y no era gente que iba a ver el desfile del señor Pinochet, sino que iban a ver a sus hijos, y viene alguien y pasa la voz de que los niños no van a desfilar. Y lo más lindo es que sacamos la banda tocando, pasamos por la plaza, interrumpimos el desfile, nos quedaron mirando, con instrumentos y todo con una radio grabando. Nos apoyó el A-5, el A-1 y el B-4. El A-5 nos prestó su liceo para refugiarnos, porque si no nos hubieran llevado a todos presos. Eso fue lo más lindo, de verdad, que todos nos apoyamos. Así que de ahí se formó la banda. Ahí me pasaron cosas, mis hijos tenían que estudiar y me tuve que retirar de lo que estaba y seguir en mi casa con los Club, ya que ahí siempre me juntaba. La plaza, la que habla la tiró pah arriba puro regando con la poca agüita y bueno eso es lo más lindo y que la gente era muy unida y nos apoyábamos los unos a los otros, siempre se pasaba y bueno todavía, fuimos la primera población que se corría lista para cuando alguien fallecía, o había un incendio apagábamos el incendio en cadena, porque no habían agua en las cañerías, con agua de los tambores. Y estaba la señora de acá a la vuelta, al frente de la plaza, la casera, el niño le estaba quemando la casa, y todos corriendo. Después al otro caballero de más allá, yo me acuerdo que mi hijo iba hacer la primera comunión y venía con pantalones blancos y se estaba quemando la casa y entró a la casa a cortar la luz y quedé negra, y sacó un televisor de adentro y no sé a quién se lo pasé, hasta que me lo robaron, pero el abuelo tenía cualquier plata abajo del colchón, de billetes y la casa quemándose, esa son cosas que

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dan para pensar; que a veces la gente es muy desconfiada y no depositan su plata y creen que la plata abajo del colchón la valoriza más. Y así sucesivamente, todavía queda aquí muy poca gente, pero ya no tan unidas como antes. Eso es lo que le puedo decir en cuanto a la banda, las reinas, y bueno el año antepasado ganamos de nuevo con la reina vecinal, derrocamos a la hermana, que ayudé que saliera el año anterior y después la derroqué, colocando a su propia hermana y el año pasado ya no participamos, ya que me pasaron cosas con mi hijo de sus tumores y viajé y no hice el aniversario de la Junta de vecinos tampoco. Y así he tenido harta ayuda con las autoridades, autoridad que está yo la respeto, las quiero mucho y no tengo un color político, la política para mi es ayudar al poblador y todo. Me encanta no sólo con esta comunidad, sino con todo Arica. Son cosas especiales, hago visitas especiales a la cárcel, al Qhantani, a los abuelitos, también ayudo a los niños del Ampárame que son una fundación con los papás enfermos terminales que tienen cáncer avanzado, entonces se protege a los niños. Más me gusta lo social, me encanta. Eso es lo que puedo decir.

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“Y de cómo llegaron Cultura y Quiero mi Barrio” (Carmen Guerra) Para nosotros es un privilegio que nuestro barrio haya sido focalizado a nivel de todo Arica como “la piloto”, de lo cual nos sentimos muy orgullosos porque estamos trabajando con Cultura e Ing proyect- Quiero mi Barrio. Los jóvenes, adultos, todos los vecinos estamos participando en nuestro barrio. Hemos tenido talleres, danza, folclor, teatro infantil, aeróbica, el vivero. A pesar de los imprevistos. Un día, los de Cultura llegaron a mi casa y se presentaron y la sorpresa más grande fue cuando era el profesor, encontrarme con gente que hacia tiempo que no veía. El profe que había sido de folclor de los niños y mío. Me alegré encontrarme de nuevo con ellos y todo ha funcionado bien, tenemos una buena comunicación y se han integrado los vecinos y han aparecido algo muy distinto y ahora está participando gente que nunca había participado en los tour, Cultura e Ing proyect.

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“El mentolato del grupo juvenil” (David Pérez Guerra) Todos los días de mi vida comienzan con etapas y propuestas diferentes, no por lo que yo quiero sino porque vivo con muchas personas en mi barrio y eso hace que cada día comience y termine de forma variada. Quizá una de las etapas más gratificantes que quiero recordar es como se da inicio a la agrupación juvenil a la cual pertenezco. Mi experiencia nace con la antigua agrupación juvenil “Fe y Esperanza”, donde recupero algunos recuerdos de mi infancia. Participé en muchos eventos como festivales, fútbol, en sketch humorístico. Con aquellos inolvidables ejemplos de buenas personas como el Freddy Dubo, el multifacético Richi, la Pamela, mi hermana la cual salió reina de la Primavera del Barrio, la Paulina, y muchos más, con los cuales viví momentos muy gratos. Me acuerdo de uno de los más divertidos es sobre el Richi, él es multifacético y cantaba muy bien y uno de sus cotidianos personajes era hacerse el gay lo cual era muy divertido y un día por ser muy sobreactuado con este tema fuimos a una competencia de grupos juveniles en el Fortín Sotomayor y nos toca a nosotros y sale el Richi ya conocido por muchos medios locales y al hombre le salió el tiro por la culata. El Richi sube al escenario y empiezan a lanzar gritos apasionados “¡Richi, Richi te amamos!”, y era un grupo de fans de gay, a él no le salía ni el habla, todos se reían y para él fue muy difícil cantar. Quizás hay muchas cosas divertidas que pasaron pero como todo comienza también termina y así fui creciendo. Era el mentolato de la Básica y la Media. Participaba en muchos sketch y en mi población ocurrían eventos a los cuales me sumé. Comencé apoyando a mi mamá Carmen, presidenta actual de la J. V., y conseguí el apoyo de algunos como la Nidia, el Yiyo, el Chino, el Nico, el Tule, el Francisco, el Choclo, el Papa Frita, la Garza y así se empezaron a integrar más personajes y nos apoderamos de los eventos como el Día de la Madre, el Día del Niño, Fiestas Patrias, que creo que en Chile somos los únicos que las celebramos el 30 de septiembre. También fuimos contaminados con Hallowen y la Navidad. Jamás por el afán de ganar renombre sino con las ganas de ser personas que querían cambiar la imagen del barrio que caía en las drogas. Un día nos juntamos a hablar en serio y quisimos darle un nombre a nuestro grupo y nos llamamos “Grupo Juvenil Al Son De Los Jóvenes”. Un 23 noviembre del 2006 nos conformamos con nuestra personalidad jurídica y actualmente seguimos trabajando. Actualmente más potenciado con la llegada del Proyecto Quiero mi Barrio y Creando Chile en mi Barrio.

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“Me avisaron que había una toma de terrenos” (Emilia Patelena) Fue un día cualquiera, llegando del trabajo… me avisaron que había una toma de terrenos, eso empezó como a las cinco de la tarde y vino a hablar el presidente que en ese entonces, no me acuerdo de su nombre… y me dijo que si pero tenía que conseguirme una bandera, sino no se podía participar. En ese entonces decían que con una bandera chilena no lo podían a uno echar, me conseguí la bandera, estaba yo tan contenta, por fin iba a tener mi casa que tanto deseaba y así empezó mi historia, con reuniones todos los días y después nos dijeron que las personas casadas solamente tenían derecho, esa fue la parte mas triste al desearlo yo tanto, que luego me dije que no, pero como Dios es tan grande, me dio lo que yo quería y de ahí estoy todavía, fueron momentos malos, momentos buenos…alegrías y penas. Lo otro son detalles -como que aquí en la junta de vecinos no he obtenido ayuda- que de repente no vale la pena contar… ¡eso sería!

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“50 carpas hechas de cartón” (Seferina Apata Luna) En 1970 vivía con mi mamá y con tres familias más, y un día en la tarde como a las siete, llegó mi (ex) marido corriendo. Dijo: “están tomando terrenos allá arriba”; yo no lo podía creer, vinimos corriendo y vimos que había 4 personas; volví corriendo a avisarle a mi hermana, trajimos uno palos y unos cartones y nos instalamos ahí; dormimos en una carpita chica; con puros cartones, como una semana. Teníamos mucho miedo de que nos echaran los carabineros. Venían a cada rato, pusimos banderas chilenas. A la semana había más de 50 carpas hechas de cartón. Todos juntos, dormíamos sentados, nos turnábamos para ir al baño a la casa de mi mami; los carabineros decían que tenían que sacarnos, porque no era legal. Yo tenía 23 años, era bonita; tenia muchos pretendientes; y me ofrecían el mundo, pero yo les dije que no. Mi esposo tomaba mucho, le pegaba mucho a los niños; ya tenía la casa, de madera. Los niños crecieron; pero un día saqué fuerzas y le dije a mi esposo “chao pescao, hasta aquí no más llegamos”.

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“¡Que sea una felicidad!” (Margarita Gómez Moscoso) Tomaron el terreno, tuvimos un día lunes que conseguirnos carpas, banderas y en las noches nos amanecíamos ahí haciendo barrias (guardia), entre nosotros nos vigilamos porque había robos. Al final tuvimos que hacer con maderas, con cartones para poder sobrevivir, después nos entregaron el sitio; hasta el final, seguimos adelante, sacamos la escritura, ahora somos dueños y propietarios. Ahí tuve a mi hija, en la casa tuve a mi guagua, mi mamá la levantó, mi hija tiene más de 37 años. Un día en la noche, tuve un dolor fuerte y no quise ir al hospital y tuve a mi guagua en la casa y ahora es una persona adulta y después fui al policlínico y me retaron porque no había ido al hospital. No quise ir, y la tuve ahí, con el dolor como tres días, lo pensé entre mi que no iba nacer, no tenía movilización y ahí nació, y no sé como pero la tuve ahí. Mi hija es adulta, también mi hija mayor la tuve en el campo, lo primero que tuve no sabía como iba a hacer, con el otro yo sabía, me desmayé y cuando desperté estaba mi guagua afuera, ella nunca tuvo control de peso, lo tuve en el valle arriba, antes no tenía vacunas, después ya se empezó a controlar, después a los seis años tuvo control, antes los niños no tenían eso.

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“Peñascazos de infancia” (Daniel Vargas) Recuerdo cuando a los 10 años aproximadamente jugábamos a la guerra de pandilla, con tapas de tambores de industrias electrónicas que eran nuestros escudos. Como era este sector zona de áridos la guerra romana se transformaba en guerra de peñascazos, una forma de diversión sana donde predominaba la camaradería y convivencia entre los muchachos de esa época. ¿Qué emociones fluían? Risas y gritos. Estábamos en la época de mayor auge de una pujante industria, casi toda Arica está abocada a esta particularidad. Por ello quedaban muchos desechos, y muchos materiales que servían para inventar usanzas romanas, pintábamos las tapas para nuestros escudos, sin embargo, destacando (paz, kiss, etc.) en el tiempo del hipismo también símbolos comunistas de Rusia, China Comunista, Che y Fidel Castro. Nos reuníamos casi todos los días, teníamos un refugio, en una ex - cantera de áridos, ripio y arena y allí teníamos guardado nuestro arsenal. También las niñas participaban entusiasmadas. Habíamos descubierto el modo de capear las piedras y los del medio protegían arriba los que no participaban en el cuadrante tiraban las piedras, cuidando que fueran pequeñas y livianas y luego les tocaba a ellos protegerse. Cuando ya eran muchas piedras (100 aproximadamente), arriábamos la bandera blanca y nos rendíamos. Como fuimos adolescentes teníamos otras aficiones, conversábamos, no mucho rato porque en esa época había toque de queda. Era algo que inventamos entre todos y aprovechamos el material y fue una etapa creativa, sirvió para fortalecer los lazos íntimos entre los niños y niñas de este barrio y población. Resumen: Podemos concluir que en esta aventura destaca el compañerismo, trabajo de equipo, disciplina para evitar daños. También se destaca pensar en los demás y el ánimo recreativo y sano. Se llevaba a estimular una visión de país y de mundo y de historia a la vez. Con la participación de personajes importantes como: Nerón, David, Goliat, y de la Historia Bíblica, Apocalipsis.

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“El día del incendio” (Sabina Salinas Bravo) En aquel entonces, 1977, trabajaba yo como asesora del hogar puertas adentro, mi mamá cuidaba de mi hija y de la casa, para ayudarnos, arrendaba unas piezas, en una vivía un joven, chofer de micro. Solo. Por esos días había quedado sin trabajo, y empezó a cocinarse en su pieza, la cual era entera de madera, incluido el piso. Un día domingo, que era mi día de salida, estando en casa, mamá me cuenta que esta persona está cocinando en un anafre pero con bencina, me asusté tanto y le pedí que en cuanto lo viera le quitara esa cocinilla y que ella le hiciera la comida porque lo que estaba usando de combustible era altamente inflamable y en cualquier momento se podía producir un incendio. Por la noche regresé a mi trabajo, igual preocupada en que si mamá lograría quitar el famoso artefacto, pasaron los días cuando de repente un jueves sonaron las sirenas, anunciando algún incendio como siempre que esto sucedía, puse la radio para saber el lugar del siniestro y Dios, no lo podía creer, ¡Era frente al colegio F-22! Justo donde se ubicaba mi casa, desde el lugar de mi trabajo, al salir a la calle se veía la humareda, corrí adentro y le avisé al hijo de mi patrona que me iba a mi casa, que por lo que se veía era la que se estaba incendiando y él me dice “llévese un balde de agua para que lo apague”. Tomé la locomoción que llevaba hasta la calle que quedaba cerca de donde yo vivía, ésta estaba cortada por el incendio, me bajé, no pude correr, caminé muy lentamente mirando las llamas que salían de mi casa, me atajó un carabinero, no sé que cara tenía y me dejó pasar, más me acercaba, más lento caminaba y… cuando por fin llego ¡el incendio era al lado! Lo causó un chico enfermo, con una flecha prendida que lanzó a una pieza que tenían al fondo del patio. Por segunda vez, mi casa se salva de quemarse. Espero no haya tercera. Sólo hubo daños por el agua, gracias a unos profesores que se apuraron en lanzarla, protegiendo hacia mi lado.

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“Les podría contar más cosas pero el tiempo no me alcanza” (Nolbio Tapia Van Gurp) Mi familia llegó a este barrio hace en 35 años atrás, cuando todavía habían pozos negros y el agua la traían camiones aljibes o los camiones municipales, y en ese entonces existía la 5ª Compañía de Bomberos que estaba ubicada en Capitán Ávalos con René Schneider. Mi madre compró la mejora que no tenía luz ni agua. En esas condiciones comenzaron nuestras vidas en este Barrio. Nuestras familias eran de escasos recursos, pero a través de la Junta de Vecinos tuvimos la eliminación de los pozos negros. Participábamos con los vecinos en diferentes actividades recreativas y culturales organizadas por la Junta de Vecinos y la población mejoró. A mi madre le dio un cáncer de mama, cuando yo quise llevármela a mi hogar ella no quiso irse y seguimos aquí en este Barrio donde ella vivió 15 años más. Después de 15 años le pronosticaron cáncer del colón, ya fue una enfermedad terminal y falleció. Nosotros como hijos hemos tenido buena convivencia y con nuestros vecinos en especial con Julia Godoy e igual con otros en particular.

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“De castigo nos llevaron al cementerio” (Carla Betsabé Navarro Cea) Soy ariqueña neta; yo acá conozco a todas las personas del barrio; mi mamá llegó cuando esta población era un peladero: era como un desierto; mi mamá me contó que esto era como un pedregal, como un río; me crié en Joaquín Aracena y siempre viví ahí; yo me acuerdo que mi mamá nunca tuvo medios como para arreglar la casa y por eso sufrió harto. Me acuerdo que la cancha de Joaquín Aracena era muy grande y todos nos subíamos arriba; me acuerdo de otra vez que nos llevaron a Poconchile; no teníamos que meter bulla, me puse a gritar y apareció la jefa y castigó a mi grupo; no se imaginan adonde nos llevaron: al cementerio. Cuando entramos, al ver una tumba que estaba destruida, salimos arrancando… Después de eso, no nos quedaron ganas de seguir molestando.

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“Empréstame los platos” (David Astorga Valdés) Un día, no me acuerdo fecha, pasaba por Amatista, pasaje de la Población “Adrián Barrientos”, de repente escucho música en vivo, me acerqué al lugar y conocí a David Pérez alias “El Shaggy”. Con este señor que acabo de nombrar congeniamos al instante. Me contó que organizaba una tocata o concierto de música en vivo con bandas de rock de Arica y por supuesto su banda llamada “Aneurisma”. Entre la conversación salió “Empréstame los Platos”, ya que me fijé que no tenia platillos para la batería y se los ofrecí. Cuando me dijo “Empréstame los platos”, yo de inmediato le dije que “SI” pues me cayó bien, después de ese día iba a todos los ensayos de su banda y nos hicimos muy buenos amigos. Ya con el tiempo me contó que tenía una agrupación juvenil llamada “Al Son de los Jóvenes” y me invitó a participar. Yo acepté al instante, participé en eventos tales como “Star Wars”, “18 de Septiembre”, “Paseos Interactivos”, “Hallowen”, “Camping” y así hasta la actualidad. Ya han pasado dos años desde la famosa frase “empréstame los platos” y creo que logramos una amistad que hasta ahora sigue unida.

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“Me gustó Arica por lo hermosa y barata” (Herna Henríquez) Mi nombre es Herna, soy casada y tengo cuatro hijos los cuales están todos casados. Tengo nietos y bisnietos los cuales son todos muy hermosos. Les contaré algo que me sucedió: yo soy nacida en Tocopilla y resulta que yo vine a pasear y a la vez a bautizar a un sobrino mío. Mi esposo y yo fuimos los padrinos y resulta que fue en el año ´73 y justo nos pilló el golpe de estado porque el bautizo era el 18 de septiembre y como había toque de queda no se pudo hacer fiesta ni nada. Decidí quedarme en Arica porque me gustó la ciudad, así que decidimos vender en Tocopilla y comprar una casita en Arica. La cual me costó mucho conseguirla. Estoy acostumbrada en mi barrio y he conseguido muchos beneficios de la junta vecinal como del comité en el cual pertenezco, y soy feliz de vivir en una ciudad que es hermosa y la vida es barata.

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“Mi historia es Muy Buena” (Ariel Araya) Yo nací en 1989 y quería hacer hartas cosas. Cuando era chico me gustaba jugar. Cuando llegué a Arica en 1992, me gustaba jugar a la pelota y en 1998 me propuse ir a la biblioteca y allí empecé a estudiar computación, me gustaba la computación, desde que era chico siempre me ha gustado la computación. En 1999 salí con un diploma. En 2002 empecé a estudiar en una escuela básica, yo estudie 2002 – 2004. 2004 – 2008 Después me fui a estudiar a un liceo para sacar una profesión. Me trasladé a Iquique a trabajar en Computación, he viajado hartas veces a competir. Ojalá que algún día llegue hacer un verdadero técnico en Computación. Yo soy un niño muy ejemplar.

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“Mi sueño de niñez” (Soñadora) Fue un día 13 de Septiembre de 1994 cuando me invitaron a participar en una Sociedad de Baile Religioso del Pueblo de Socoroma, para subir el día 3 de octubre del mismo año. Era la oportunidad que yo había esperado por mucho tiempo desde mi niñez, porque yo me crié desde los tres meses de vida con mis tíos, a los que llevo muy dentro de mi corazón porque ellos son mi papá y mamá. Claro que él ya no está conmigo. El para mí fue el que me enseñó a creer y tener fe porque él le bailaba a la Virgen de las Peñas. En esos tiempos yo era una niña y soñaba con cantar y vestirme así tan elegante con esos trajes y encintados. Después que nos preparamos, en menos de un mes llegó el gran día para subir al pueblo de Socoroma. Éramos, no recuerdo, 16 ó 17. Nos pasaron las canciones, eran las mismas que cantaba mi papá cuando era chica. Y ese 3 de octubre de 1994 fue el más importante porque hubo llanto y risa por el sueño cumplido de mi niñez.

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“¿Dónde dejaste tu ropa?” (Víctor Manuel Riquelme Fuentealba) Un día sábado fuimos con el 1/2 pollo, el flaco, cogote de gansa, pollo entero, el Cabezón Vélez y otros a jugar una pichanga en la Población Chile donde estaba el guatón que nos preparaba esos ricos picantes de machas. Nos tapamos haciéndonos sombras unos con otros, nos desvestimos y nos pusimos el equipo del club. Y dejamos colgadas las ropas en unas ramas y nos fuimos a jugar. El cogote de gansa metió el primer gol, luego el pollo lanzó la pelota y metió el gol del triunfo. Terminó el partido, fuimos a vestirnos y no encontramos la ropa por ningún lado. Como teníamos mucho frió fuimos a tomar unas cervezas. Cuando llegué a la casa, mi mujer me miró por la ventana y no me reconoció, cerró la cortina enojada y yo por más señas que le hacía ella no me pescaba. Me reconoció cuando le seguí gritando. Abrió la puerta apenas entré me dijo “vos, ¡como venís llegando! y la ropa ¿dónde la dejaste?”. Por más que le explicaba no me creyó y esa fue la primera pelea después vino lo mejor, la reconciliación.

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“La vulcanizadora” (Giovanna) Mi esposo tuvo un accidente, tenía un taller de vulcanización. Luego del accidente, él no podía trabajar y las máquinas quedaron abandonadas oxidándose. La situación económica empeoró; tenía 20 años, era joven; y me desesperaba la idea de no poder trabajar. Entonces un día, él decidió abrir nuevamente nuestro taller. Contrató un joven para el trabajo pero eso no resultó. Faltaba mucho y tomaba. Yo fui viendo como se hacía la operación de cambiar neumáticos; entonces decidí realizar yo misma el trabajo; al principio para los clientes, que eran en su mayoría hombres. Era súper raro y me miraban con desconfianza, pero con el tiempo empezaron apreciar mi labor como vulcanizadora. Para mí era difícil, porque pasaba con los dedos machucados; las uñas quebradas; las manos manchadas de grasa mecánica; la ropa manchada. Por otro lado mi esposo me alentaba, eso para mí era reconfortante, a veces terminaba muy agotada. Hoy en día, gracias a esta decisión tenemos bastantes clientes, a los cuales les damos mucha confianza. Hoy podría decir que no temo enfrentar el futuro.

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“Seré una anciana feliz” (Carla Vanessa Hernández Torres) Quiero comenzar esta historia escribiendo que yo nací en esta población. Ya son 33 años, de los cuales he pasado los mejores momentos de mi vida, actualmente mi madre una participante activa de nuestra población, con amigos desde chicos y seguimos viéndonos, nos juntábamos y jugábamos al trompo, a las bolitas y como era una de las más chicas siempre perdía, un día quedamos asombrados con mi hermano de ver a un hombre vestido de mujer, pero nuestra madre nos explicó que cerca de casa funcionaba un centro nocturno que le llamaban casa del Toño, él era una buena persona, mi madre le hacia los trajes de noche y se quedaba hasta muy tarde haciéndolos. También, hacíamos ramadas en nuestro patio junto con otros vecinos, con ellos nos juntábamos también para hacer ollas comunes y cuando pasaban cosas malas todos ayudaban a pasar las penas, cuando chica también me tocó vender pescado, porque mi padre siempre ha sido pescador y para ayudar, a los tres hermanos nos pedían que saliéramos a vender y ganábamos plata que para nosotros era mucha, y quedábamos muy contentos. Así fui creciendo, cuando me casé y nació mi primer hijo seguí viviendo en esta población, mi hijo mayor siempre ha participado igual que su madre y su abuela en esta población, desde chico le he enseñado a vivir lo que yo viví, a tener amigos a ser una buena persona. ¿Saben? si volviera el tiempo atrás, viviría lo mismo, no cambiaria nada, porque: Fui una niña, soy una mujer, seré una anciana realmente feliz.

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“Soy familiar de detenido desaparecido” (Irene Torres M.) Bueno, les contaré que en aquellos años en la década de los ´80, en una oportunidad, llegó Julia y me dijo “¡Irene! ¡Irene! Esta noche haremos sonar las cacerolas porque tenemos que seguir luchando por una Democracia libre”. De ahí en adelante vinieron protestas en diferentes partes, marchas, quema de neumáticos, etc. En estas tantas protestas una vez hubo un incendio en el Pasaje Onix y Topacio, todos los vecinos corrimos para ver si éramos útiles en algo. Cuando todo terminó llegamos a nuestras casas tristes y preocupados por nuestros vecinos en desgracia, pero, ¿cuál fue el dolor grande? cuando dieron en la televisión la inmensa noticia que habían encontrado a los tres profesores que habían desaparecido: Degollados. Ellos eran opositores del gobierno militar. Me quedé impactada hasta ahora lo recuerdo con mucho dolor. Tantas anécdotas en nuestra querida población, pero ésta es la que tengo en mi mente hasta la muerte. SOY FAMILIAR DE UN DETENIDO DESAPARECIDO. En estos momentos al recordar se me han llenado los ojos de lágrimas y tristeza en mi corazón. Por esta oportunidad que me dan para escribir estas líneas, gracias, muchas gracias, perdonen mi letra pero mi vista, no me acompaña mucho. Gracias y hasta siempre.

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“Conociendo a mis vecinos” (Francisca Araos Araya) Yo solamente le puedo contar que llegué a la Población hace 14 años. Me sentí muy feliz aquí porque salí de un barrio donde empezaba a verse la droga, ya que contaba con 4 hijos y no quería que tuvieran amistades que se iniciaban en la drogadicción. Con el tiempo fui conociendo a mis vecinas y una de ellas me conversó de la junta vecinal Nº 31, que había mejoramiento de casas y empecé a participar en ella. Ahora soy delegada de manzana y pertenezco al Club de la 3era.edad “Sol del Pacífico” y pertenezco a varias agrupaciones del “Quiero a mi Barrio” y al club de cuecas. La pena que más tengo, es que mi esposo no disfrutó la casa que me compró, ya que al año falleció de un paro cardíaco. Mis hijos están todos casados, y gracias a Dios que están bien encaminados, por un buen futuro. Sin más que contarle me despido. Y que mi relato tenga una buena acogida.

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“Vuelvan” (David Astorga Valdés) Hace un año atrás había un grupo de amigos, no voy a decir nombres por miedo a represalias de parte de ellos, eran niños tranquilos… pues voy a ir al grano, este grupo conoció las drogas y con el tiempo se han ido alejando de este grupo juvenil, pero cuando están, están. Yo también me he ido alejando de ellos porque a mí no me gusta ese tipo de cosas, pero sin perder el saludo y cariño de ellos. Me gustaría volver a tenerlos junto al grupo juvenil.

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“Eran dos piezas de madera” (Soñadora) Hace tres décadas que llegué a esta población, fue el año que nació mi primer hijo que este año cumplirá 30 años. Luego vinieron otros dos hijos más, de 27 y 20 años. En esta población en la casa que he vivido se han tejido muchos sueños. Algunos cumplidos, otros por cumplirse. La casa donde yo vivo es todo lo que tenemos mi esposo e hijos. En un comienzo eran dos piezas de madera sin tener nada de lo que tiene ahora, como agua potable y alcantarillado. Recordar ahora es como si todo hubiera ocurrido ayer. Antes no participaba en las actividades de la población, pero hace tres años me integré a un comité, donde he aprendido muchas cosas. Espero seguir participando y aprender a compartir y trabajar para ser mejores.

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”Esa fue mi historia” (Margarita Gómez Moscoso) A mi, mi papá me puso en la escuela pero después nunca más me pusieron, es lo más triste. Yo no sé nada, que recuerdo tan doloroso, no puedo firmar y hay personas que se fija en uno, es triste no puedo hacerlo, yo trato de juntar las letras. Es bueno saber por qué las autoridades le meten el dedo en la boca, atornillan al revés como uno no sabe, así será… a uno le cuentan el cuento, la lectura le hace falta por todo eso uno se siente mal, no viene a las reuniones, así es mi personalidad, no sé leer, ni escribir, junto las letras, por eso no vengo, pero es un problema tan grande para uno, como que puedo hacerle, pero no puedo, es como un peso, es por descuido.

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”La anécdota de cuando me llevaron detenida” (Carmen Guerra) Me llevaron… hicimos un amago de incendio porque no había agua, a esos personajes nosotros invitamos, a los bomberos, al Chuchoca Pérez, al gobernador Puga, no vino y empezamos a hacer un amago de incendio y los encerramos a todos, era mentira y los encerramos a todos y llegaron los carabineros y nos daban un minuto para desalojar la sede, a lo cual salieron todos arrancando. Quedamos Julia, la sra Blanca, la Dolores y la Carmen Guerra y estaba mi hija de tres meses, que actualmente tiene 30 años. Todos los vecinos arrancaron y queríamos hablar con el gobernador Puga y se encontraba en el África 2000 y como los carabineros no nos dieron el tiempo, nos llevaron a la comisaría que estaba cerca del Teatro Nacional y nos sentaron en el suelo, “las personas con guagua pueden salir” y nos soltaron. Ese fue el amago de incendio por falta de agua. Estaba preocupada, porque mi marido iba a llegar del trabajo en la General Motors y me tenía prohibido, y después nos dieron la solución.

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“Hace 40 años…” (Evelyn Godoy Tapia) Nuestra familia llegó a este barrio cuando ya estaba formada la Junta Vecinal. Eso hace ya unos 35 a 40 años cuando hubo entregas de terreno. No había agua, los camiones aljibes nos abastecían y había pozo séptico. En ese entorno no había luz, había una compañía de Bomberos que estaba ubicada en René Schneider y ahora esa avenida se llama Avenida Balmaceda. Mi abuelita compró este terreno y era una mejora donde ella no tenía agua, ni luz. La casa de mi abuelita esté ubicada en pasaje Diamante Nº 2513 y donde viví mi infancia con amigos, amigas y buenos vecinos.

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“Soy de pocas palabras” (Rosa Plaza Maturana) Les contaré en pocas palabras mi pequeña historia acerca de donde vivo. Nosotros con mi esposo e hijos llegamos de la Oficina Alianza, en donde fuimos muy felices y tuvimos que venirnos a Arica, en donde tuvimos que empezar a vivir de otra manera ya que todo en nuestras vida cambiaría. Llegamos a la población Tarapacá Oriente comprando una mejora donde actualmente vivimos. Nos costó mucho para construirla. Por lo menos ya tenemos una casa más cómoda y con pequeños conforts. En todo caso aquí en la población hay tantas cosas para participar y tratar de pasarlo bien en los club de los abuelitos “Sol del Pacifico”.

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“La Bajada del Río” (David Sossa Bautista) El día 3 de marzo de 1971 bajó el río y como damnificados llegamos a la población Barrientos junto con mi familia y tenía una señorita allegada y ella quería tener su casa. Ya que había sitios sobrantes, consiguió su sitio. Con el tiempo ella se casa, tuvo tres hijos, las tías han sido mis ahijadas. Esta señorita se llama Herminia Riera y somos compadres y vecinos. Esta es la historia más feliz de mi vida.

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“Mira Sergio…” (Sofía Saravia Ferrada) Les cuento, yo sufrí mucho. Cuando llegué aquí con mi esposo y mis dos hijas. Después nació mi otra hija, la Dani que está en Argentina. Cuando llegué, una abuelita que vivía aquí en la población me llamó y me regaló una carpa. Para que se haga una sombrita. El terreno era muy duro, pura piedra. Apenas pudimos armar la carpa. Yo estaba embarazada, por eso la abuelita me la dio. Menos mal que los carabineros no nos vinieron a botar. Allá en Loa los botaron. Me había dado la influenza y embarazada y durmiendo en la pampa. Menos mal que en esos años no había tanta gente mala como ahora. Al otro día entregaron los sitios; los midieron y los entregaron a cada familia. Después le regalaron maderas a mi marido y con eso cerró el sitio, porque para la casa no teníamos madera. Luego empezó mi esposo a comprar maderas y cholgüanes para hacer una pieza. Primero se fue formando la casa. Estábamos mal porque mi marido ganaba poco dinero. Mira Sergio, te voy a contar algo. Yo soy Sofía, tu señora. Tú sabes que antes sufrimos mucho. Con la toma de terreno, que antes no teníamos nada, ahora lo pasamos mejor. La hicimos a las tres de la mañana. Éramos tres familias no más. Al otro día empezó a llegar más gente. Con mis hijos grandes y con casa propia en el Pasaje Topacio 2383, y nietos y tenemos seis nietos, tres en Buenos Aires y tres aquí. En casa estamos mucho mejor y yo me encuentro más alegre con esto, porque en este lado ya no sufrimos. Antes sufrimos mucho porque mis hijas no podían salir a jugar allá donde arrendábamos. Sufríamos mucho allá en la calle Germán Riesco. Mi hija me alegra cuando llega a casa. Espero que tú estés bien, yo estoy bien de salud y te extraño mucho. Yo he pasado días muy felices cuando tú estabas aquí y nos juntábamos a comer asados, con los amigos de mi hijo, eran jóvenes buenos de la población, y las hijas. Este año no pude salir a pasear en las vacaciones a Buenos Aires a ver a mi hija. Puede ser que el próximo año pueda salir. No pude salir porque mi nieto estaba enfermo y tuve que llevarlo al médico. El ha sufrido mucho y es muy inteligente, tiene beca presidencial. Yo lo quiero harto. Me da pena que no estés aquí. Cuando voy al cementerio me da pena, pero que se le va a hacer, así es la vida. Luego iré donde tú estás…

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“Amigos” (Nicolás Macías Flores) Existen muchas personas que se sienten afortunados por tener todo en la vida, pero hay algo en este planeta que no se compara con nada, y se llama amistad, respeto, fidelidad y por sobre todo cariño. Existe un grupo de jóvenes, bueno, que se puede afirmar es real, pero como en todas las historias siempre hay algo de ficción, se formaron en Arica en un lugar llamado “Población Adrián Barrientos”, ¿sería este un lugar perfecto para encontrar lo que les mencioné anteriormente? Bueno, este relato no es ficción, es real aunque ustedes no lo crean. Conciente o inconcientemente, todos o la mayoría de los jóvenes se formaron en este lugar, les puedo mencionar algunos de ellos: el David es el típico joven que piensa en todo y en todos; también está el Peter o Cristián, que es la misma persona, este es un real personaje ya que desapareció por años de su lugar de origen, pero volvió años más tarde contando historias increíbles; también existe uno de ellos que no puedo recordar, pero en fin, se encuentra Nano, el típico chico introvertido, lo digo así ya que es muy difícil describirlo; también apareció en el grupo el Gordo David, esa es la diferencia del primero con éste (risa). Que les puedo decir, la gente siempre pensó que estos jóvenes no tendrían futuro, pero aunque no lo crean, ya son todos unos hombres, algunos con familia y otros con muchas más historias que Papelucho (risas). Aún no conozco a un grupo de jóvenes que se ayuden tanto; y que ayuden y participen en todo lo que les pidan, hasta de payasos han aparecido, es gracioso si uno lo mira de otro punto de vista, pero yo que logré conocer a cada uno de ellos, no les podría explicar lo gratificante que es sentir tanto cariño de tan buenas personas. El futuro de ellos es parte del futuro y soy el personaje que no se nombra, pero se asombra de la calidad de sus amigos y el resto de nuestra historia será parte del destino, ya que aún somos los mismos, aunque con nuevos integrantes que enriquecen esta linda amistad de la que hoy me siento orgulloso de compartir. La siguiente historia se las contaré algún día, ya que hay partes que no creerían si se las cuento, pero, así es la vida corta y con hechos increíbles. Hasta pronto.

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EQUIPO REGIONAL PROGRAMA RECUPERACIÓN DE BARRIOS, SEREMI DE VIVIENDA Y URBANISMO REGIÓN DE ARICA Y PARINACOTA

Ricardo Chameng Cornejo, Seremi Minvu Región de Arica y Parinacota Luis Marín Muñoz, Coordinador Regional QMB Ester Linares Hormazábal, asistente social Alvaro Fritz Cáceres, arquitecto Pamela Balmaceda Fernández, asistente social Patricia Jiménez Rojas, asistente social Daniel Salgado Vásquez, periodista

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