ROMANOS 3:21-31 LA JUSTICIA DE DIOS SE REVELA EN LA JUSTIFICACION (3:21 – 5:21) En la condenación que se encuentra la raza humana, Dios revela su justicia infinita. Esto va junto con el hecho que ningún ser humano, excepto Cristo Jesús, podrá cumplir con el estándar de Dios y ser aceptado delante de El por sus propios meritos. Ahora, en la segunda parte principal de Romanos, Pablo discute el tema de ‘la justicia proveída’ de Dios para el mundo a través de Jesús en la justificación. La justificación es la declaración de que el ser humano es justo como resultado de que Dios toma la justicia de Cristo y se la atribuye al hombre cumpliendo con cada requisito de la ley. Dios provee esto a través de Su gracia por medio de la fe. A. Explicación de la Justicia Prevista (3:21-31)

3:21 Pero ahora, aparte de la ley, la justicia de Dios ha sido manifestada, atestiguada por la ley y los profetas; A través de las palabras, ‘Pero ahora,’ Pablo introduce un contraste fuerte con lo anterior. El acaba de afirmar, ‘porque por las obras de la ley ningún ser humano será justificado delante de El’ (v.20). Ahora, le sigue a esto ‘aparte de la ley, la justicia de Dios ha sido manifestada.’ En esencia esto repite las palabras de Rom.1:17, ‘Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe; como está escrito: MAS EL JUSTO POR LA FE VIVIRA.’ La única diferencia es que Pablo agrega el hecho: ‘atestiguada por la ley y los profetas.’ Lo que Pablo estaba introduciendo acerca de la justicia de Dios, no era ajeno al Antiguo Testamento. El termino ‘La Ley y los Profetas’ se usaba frecuentemente para referirse al Antiguo Testamento entero (Mateo 5:17). ‘La Ley’ refiriéndose a los primeros 5 libros y ‘los Profetas’ al resto. En Romanos 4, Pablo ilustra esta verdad usando ‘la Ley’ (Abraham: Gen.15:6; Rom. 4:1-3, 9-23) y ‘los Profetas’ (David: Salmo 32:1-2; Rom. 4:4-8).

3:22 ‘es decir, la justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo, para todos los que creen; porque no hay distinción;’ La primera parte de este verso no es una nueva oración en el Griego; es una cláusula ortográfica que se puede traducir, ‘la justicia de Dios a través de la fe.’ Estas palabras le recuerdan a Pablo de la insistencia de los judíos sobre su posición especial delante de Dios. Como resultado, el añade, ‘no hay distinción.’ Cualquier privilegio previo que tenían los judíos ya no existe en esta apoca en la cual Dios esta ofreciendo una posición delante de El a todo ser humano sobre la base de fe en Cristo solamente. Como todos están ‘bajo pecado’ (3:9), la salvación esta disponible ‘para todos’ por igual. 3:23 ‘por cuanto todos pecaron y no alcanzan la gloria de Dios,’ Pablo explica que no existe diferencia entre los seres humanos por que ‘todos han pecado.’ Como todos los humanos fueron sumergidos con Adán en pecado, todos (Gentil y Judío) son pecadores. Es imposible decir que hay ‘una diferencia,’ o privilegio (2: 12-21;3:1) el cual excluya a los judíos de la condenación de Dios. No solamente pecaron todos, sino ‘no alcanzan’. Este verbo esta en un presente continuo en el lenguaje Griego afirmando acción continua. Puede traducirse ‘continúan no alcanzando.’ El hecho simple es este, que como pecadores no hay ningún ser humano que por sus propios esfuerzos puedan medirse a la ‘gloria de Dios’. La gloria de Dios es Su esplendor, la manifestación externa de Sus atributos. Dios desea que los humanos compartan ese esplendor, que sean hechos como El, eso es, como Cristo (‘gloria’ en Rom. 5:2; 2 Cor. 3:18; Col. 1:27; 2 Tes. 2:14). Aunque su pecado los impide de poder compartirla. 3:24 ‘siendo justificados gratuitamente por su gracia por medio de la redención que es en Cristo Jesús’ ‘Siendo justificados’ se aplica a los “todos” de los dos versículos anteriores: todos los que han creído, de quienes todos eran pecadores. Así como no hay distinción entres quienes necesitan la salvación, no hay distinción alguna entre los que la reciben, porque todos ellos han sido ‘justificados gratuitamente por su gracia.’

‘Siendo justificados’ en su lenguaje original significa que ‘son declarados justos continuamente.’ Justificar (dikaioo) es un termino legal que significa declarar la probidad de algo o de alguien. ‘Declarar’ no ‘hacer’ (Deut. 25:1). Dios justifica ‘gratuitamente’ a esos que creen ‘por su gracia.’ Dios para poder justificar usa un instrumento llamado ‘gracia,’ Su favor inmerecido. La palabra ‘gracia’ es una de las favoritas de Pablo ya que la usa 24 veces en la epístola a los Romanos. Dios no declararía a una persona justa sin una base, sin encargarse de su pecado. Esa base es ‘la redención que es en Cristo Jesús.’ La palabra ‘redención’ en Griego es ‘apolytrosis’ que significa ‘pagar un rescate por…’ Esta palabra ‘apolytrosis’ es usada 10 veces en el Nuevo Testamento (Lucas 21:28, Rom. 3:24; 8:23; 1 Cor. 1:30; Efesios 1:7, 14; 4:30; Col. 1:14; Heb. 9:15). La muerte de Jesús en la cruz del Calvario fue el precio por el pecado del ser humano, el cual fue hecho libre de la esclavitud a Satanás, del pecado y la muerte. Cada persona que confía en Dios por medio de la fe, le es otorgada salvación y perdón. La deuda que teníamos con Dios esta pagada. 3:25ª “a quien Dios exhibió públicamente como propiciación por su sangre a través de la fe,” La palabra ‘propiciación’ es un sustantivo solamente usada dos ves en el Nuevo Testamento, aquí y en el libro de Hebreos. En Hebreos 9:5 se menciona el ‘propiciatorio’ del Arca del Pacto que estaba en el Tabernáculo de Dios. Una vez al año en el Día de Expiación, el sumo sacerdote sacrificaba un macho cabrio y lo presentaba delante de Dios como expiación de los pecados del pueblo. En ese momento se rociaba el ‘propiciatorio’ con la sangre del macho cabrio satisfaciendo a Dios por un año mas. La muerte de Jesús fue el sacrificio final el cual satisfizo los requisitos de Dios contra el ser humano y aparto Su ira de esos que creen. Ese sacrificio no fue hecho en lo oculto, en contraste al ‘propiciatorio’ del Arca del Pacto que estaba en el Lugar Santísimo, donde solamente el sumo sacerdote tenía acceso una vez al año. El sacrificio de Cristo fue a la luz pública sobre el monte Calvario para que todo el mundo fuese testigo de lo ocurrido. ‘Dios exhibió’ a su Hijo a la vista de todos ‘como propiciación.’

Esta obra de Cristo es ‘por su sangre a través de la fe (Rom.5:9).’ Uno se apropia de este sacrificio por la fe (Rom.3:22). Por la muerte de Cristo y el derramamiento de Su sangre la penalidad por nuestros pecados ha sido paga y a Dios se satisfizo (Col. 2:11-14). 3:25b – 26 ‘como demostración de su justicia, porque en su tolerancia, Dios pasó por alto los pecados cometidos anteriormente, para demostrar en este tiempo su justicia, a fin de que El sea justo y sea el que justifica al que tiene fe en Jesús.’ El propósito de Dios con la muerte de Cristo fue ‘como demostración de su justicia, porque en su tolerancia, Dios pasó por alto los pecados cometidos anteriormente (Hechos 17:30). ¿Por que no castigo Dios los pecados en el pasado? ¿Significa esto que El no es justo? Anteriormente Pablo dice que Dios fue tolerante porque El quería guiar las personas al arrepentimiento (Rom. 2:4). Pero aquí, Pablo dice que Dios tolera porque El anticipo Su provisión por los pecados en la muerte de Cristo Jesús. Tal ‘tolerancia’ fue una evidencia de Su gracia (Hechos 14:16; 17:30), no de Su injusticia. Pablo insistió tanto para que la justicia de Dios fuera reconocida que nuevamente el repite las palabras ‘para demostrar en este tiempo su justicia’. El propósito de Dios con la muerte redentora y propiciatoria de Jesús fue para que El ‘sea’ visto ‘justo y sea el que justifica al que tiene fe en Jesús.’ El ‘dilema’ divino de Dios era como satisfacer Su propia justicia y su demanda contra todo pecado y al mismo tiempo demostrar Su gracia, amor y misericordia para restaurar a un ser humano rebelde y alienado a si mismo. La solución fue el sacrificio de Cristo, el Hijo encarnado de Dios, y la aceptación por fe de esa provisión por cada pecador individualmente. La muerte de Cristo vindico la justicia de Dios (El es justo porque el pecado fue pagado) y permite a Dios declarar a cada pecador que crea, justo. 3:27-28 ‘¿Dónde está, pues, la jactancia? Queda excluida. ¿Por cuál ley? ¿La de las obras? No, sino por la ley de la fe. Porque concluimos que el hombre es justificado por la fe aparte de las obras de la ley.’ Después de explicar la justicia provista por Dios para los pecadores, Pablo considera cinco preguntas las cuales el anticipa que sus lectores puedan

hacer: Dos están en el verso 27, dos en el verso 29 y la ultima en el verso 31. 1) ‘¿Dónde está, pues, la jactancia? ¿Cómo pueden tener jactancia los judíos en su ‘posición especial’ (Rom. 2:17-20, 23)? La respuesta de Pablo es cortante: ‘Queda excluida’. Como la justificación es por gracia (3:24) a través de la fe (3:22, 25-26), el jactarse por los meritos personales (obras) no tiene lugar. Esto levanta una segunda pregunta: 2) ‘¿Por cuál ley? ¿La de las obras? Pablo responde ‘No (De ningún modo), sino por la ley de la fe. Hacer obras (observar la ley) no es una base para jactarte porque la Ley no puede justificar. No fue dada para ese propósito (3:20). El apóstol resume, ‘Porque concluimos (en el Griego ‘una calculación resuelta’) que el hombre es justificado (‘declarado justo’) por la fe aparte de las obras de la ley.’ 3:29 -30 ‘¿O es Dios el Dios de los judíos solamente? ¿No es también el Dios de los gentiles? Sí, también de los gentiles, porque en verdad Dios es uno, el cual justificará en virtud de la fe a los circuncisos y por medio de la fe a los incircuncisos.’ 3) ‘¿O es Dios el Dios de los judíos solamente? 4) ¿No es también el Dios de los gentiles? Estas dos preguntas cubre nuevamente el punto de la distintiva de los judíos pero de otro ángulo. Ya que los gentiles adoraban a dioses falsos a través de ídolos, los judíos concluyeron que Jehová, el Dios verdadero y viviente, era ‘el Dios de los judíos solamente.’ Esto estaba correcto en el sentido que los judíos eran el único pueblo que reconocían y adoraban a Jehová (excepto de algunos gentiles prosélitos que se unieron al judaísmo). Pero la realidad es que Jehová como Creador y Soberano de todo el mundo, es el Dios de toda persona. Antes que Dios llamara a Abraham y sus descendientes en la nación de Israel para ser Su Pueblo Escogido (Deut.7:6), Dios trataba a todos de la misma forma. Aun después de que Israel fuera escogido como Su Pueblo, Dios fue claro (ej. Libro de Jonás) que El es El Dios de todos, Gentiles y Judíos. Como ‘no hay diferencia’ ahora entre las

personas, porque todos son pecadores (3:23) y como la base para salvación ha sido provista en la muerte sacrificial de Jesús Cristo, Dios trata a todo el mundo de la misma forma. Do modo que ‘en verdad Dios es uno.’ No hay duda que Pablo tenia en mente aquí la verdad fundamental del judaísmo “Jehová nuestro Dios, Jehová uno es” (Deum.6:4). Este Dios único sobre ambos Judíos y Gentiles ‘justificara’ a todos los que vengan a El sin importar su trasfondo (circuncidado o no) ‘en virtud de la fe’. 3:31 ‘¿Anulamos entonces la ley por medio de la fe? ¡De ningún modo! Al contrario, confirmamos la ley. La ultima pregunta es: 5) ‘¿Anulamos entonces la ley por medio de la fe? Pablo contesta de una forma ya característica y enfática, ¡De ningún modo! y después explica ‘Al contrario, confirmamos la ley’. El propósito de la Ley Mosaica es cumplido y su lugar en el plan perfecto de Dios es confirmado cuando guía a un individuo a poner su fe en Cristo Jesús (3:20, Gal. 3:23-25). Pablo afirma repetidamente que la fe, no las obras de la Ley, es el camino a la salvación. Ocho veces el escribió la palabra ‘fe’ en Romanos 3:22-31.