Salvador Torres El zoo que habitamos
Sala Muralla Bizantina
Cartagena, del 15 de Abril al 17 de Mayo
AYUNTAMIENTO
DE
CARTAGENA
Pilar Barreiro Álvarez Alcaldesa de Cartagena
Rosario Montero Hernández Concejala de Cultura
Isidro Pérez Director de Cultura
MURALLA BIZANTINA Lolo Galindo Coordinadora Municipal de Artes Plásticas
Luis Vitaller Prieto Coordinación Técnica
EDITA Ayuntamiento de Cartagena Concejalía de Cultura
TEXTOS Luis Artés© Salvador Torres©
FOTOGRAFÍAS Virginia Bernal
MONTAJE Sonora
DISEÑO
DEL CATÁLOGO
Salvador Torres, Virginia Bernal y Luis Artés©
AGRADECIMIENTOS Galería Bambara. Cartagena
IMPRIME LOYGA. Artes Gráficas. Cartagena DEPÓSITO LEGAL: MU-957-2008
El verdadero placer de la contemplación del arte es poder reflexionar y disfrutar sobre las imágenes que los artistas plásticos nos presentan con sus propuestas. En este caso, es el pintor cartagenero Salvador Torres quien nos sumerge en una interesante exposición El zoo que habitamos, su primera individual en la Muralla Bizantina, en la que enlaza de forma natural la trama estética de sus trabajos anteriores. La muestra plantea cómo los seres humanos y los animales - en muy diversas pinturas y esculturas - se relacionan y se distancian, se miran y se tantean para conocerse y quizás acortar diferencias, no quedando claro el resultado final de estos intentos que deja a merced de la imaginación del observador. Es ésta una exposición con la misma gama cromática y la misma luz que tanto caracteriza a su autor. Está repleta de escenas con irónicas historias y curiosos planteamientos, con agudas sugerencias y elegantes secuencias, en los que sin duda, más allá de la relación humano-animal, define metáforas de la sociedad actual y su relación de pulso constante con la naturaleza. En suma, El zoo que habitamos es una invitación velada a viajar a nuestras estructuras interiores que diluyen la frontera de lo salvaje, lo artificial y lo natural.
Pilar Barreiro Alcaldesa de Cartagena
El zoo que habitamos
Parece claro que la historia de la fauna discurre en los últimos 10.000 años estrechamente vinculada a la humana y casi podemos afirmar que apenas existen aspectos de nuestro mundo en donde, de una forma o de otra, no se incluya la presencia animal. Sin embargo, en todos estos años el hombre se ha convertido en un agente de alteración faunística de primer orden en virtud de todos y cada uno de los periodos económicos de su historia y de las necesidades que en ellos han cubierto las distintas especies. El estudio de las relaciones hombre/animal queda claramente reflejado en la historia por las representaciones faunísticas en el mundo del arte: bodegones, cacerías, paisajes, fotografías… Así habría que distinguir en el arte la categoría de no ficción, de gran interés para los tratados de zoología, como la categoría de ficción influída por el mundo mental de los símbolos. La iconografía se convertiría así dentro de la tradición del arte en una importante fuente histórica, en su aspecto más descriptivo y en las representaciones imaginarias o simbólicas de los animales. De esta forma podemos encontrar dentro de la literatura del medievo una línea realista que nos muestra
la incidencia de la fauna en el mundo del hombre. Algunos autores llegan a otorgar a los animales el papel protagonista para ridiculizar a la sociedad humana. Un ejemplo claro son las colecciones de fábulas de animales de Marie de France en el siglo XII. Este tipo de literatura inspiró la sátira Le Roman de Renart, una alegoría animal en la que se critica cautelosamente a ciertas clases de la sociedad medieval francesa. El proyecto titulado El zoo que habitamos engloba una serie de obras que hablan de la relación hombre/ fauna hasta el punto en que se torna ridícula por la incapacidad de las sociedades humanas de controlar la naturaleza. Las obras escenifican la domesticación por el hombre de todas las especies animales posibles como si tratara de crear un zoo global. También se nos enseña en estos trabajos la incapacidad humana para conseguir tal fin. Asimismo, el proyecto realiza un paseo irónico por la iconografía tradicional de la historia del arte y los géneros que tratan la relación del hombre con la fauna en: las cacerías medievales, los bodegones barrocos, la naturaleza en el romanticismo, las aguadas chinas y cierta fotografía contemporánea. Salvador Torres
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El pelícano sedentario. 2008 Óleo sobre lienzo. 146 x 114 cms.
La llegada de los pingüinos. 2008 Óleo sobre lienzo. 73 x 92 cms.
Kenia es sólo para nosotros. 2008 Óleo sobre lienzo. 73 x 92 cms.
Pasar por el aro. 2007 Óleo sobre lienzo. 73 x 92 cms.
La austera dieta del rumiante. 2008 Óleo sobre lienzo. 73 x 92 cms.
Cuando lo consumimos nos gustó mucho más. 2007 Óleo sobre lienzo. 89 x 116 cms.
Las ventajas del deshielo. 2008 Óleo sobre lienzo. 89 x 116 cms.
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La migración de las jirafas. 2008 Óleo sobre lienzo. 146 x 114 cms.
El último caimán. 2008 Óleo sobre lienzo. 89 x 116 cms.
El nuevo darwinismo y la selección natural. 2008 Óleo sobre lienzo. 89 x 116 cms.
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La especie extinguida. 2008 Óleo sobre lienzo. 146 x 114 cms.
No se experimentó con animales. 2008 Óleo sobre lienzo. 27 x 41 cms.
El palo y la zanahoria. 2008 Óleo sobre lienzo. 27 x 41 cms.
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Zoología revisada. 2008 Óleo sobre lienzo. 146 x 114 cms.
Casa para pájaros I. 2008 Óleo sobre aluminio y madera. 30 x 23 x 27 cms.
Casa para pájaros II. 2008 Óleo sobre aluminio y madera. 30 x 23 x 27 cms.
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El tiempo comprimido. 2008 Óleo sobre lienzo. 146 x 114 cms.
Fauna y ocio. 2008 Videocreación. Formato DVD. Duración: 3’50”.
La poética de los mitos “Pintar me procura un placer infinito, pero también angustia; es el pasaje del caos de las emociones al orden de los posibles”. Balthus
Es fascinante contemplar el paso del tiempo sobre las obras de arte y más aún sobre la plástica contemporánea. El tiempo es un sabio e insobornable maestro a la hora de decidir lo auténtico y válido de una obra de arte. Poco a poco, nos vamos alejando de los días de la primera exposición individual de Salvador Torres (Cartagena, 1971) que trasladó en 1999, ya pintada, desde sus últimos días en la Universidad de Valencia hasta sus primeras jornadas en nuestra galería de su reencontrada ciudad natal. Bambara estaba recién inaugurada. Esa ópera prima fue Acerca de Lawrence (2000) y resultó impactante por su temática, su luz y su gran unidad narrativa. Descubrimos a un joven heredero cualificado de la gran tradición pictórica metafísica. Se sentía que la serie era un homenaje al excepcional y ambiguo aventurero inglés desde el fondo de su corazón. Dicho personaje se desenvolvía en unos lienzos y maderas que recorrían escenas de su apasionante vida con una enriquecedora visión creativa. Allí anotamos el interés del pintor por la arquitectura, sobre todo por la de Aldo Rossi y las visiones clasicistas de Etienne Louis Boullée, que tanto le influían. En esa primera muestra estableció una relación atemporal entre la re-
“Clouds hill” (2000).
construcción del mito de Lawrence de Arabia y la obra de arquitectura efímera El teatro del mundo de Aldo Rossi, que se edificó para la Bienal de Arquitectura de Venecia de 1979. Aún hoy esta es una exposición muy recordada y referente continuo para los que admiramos su obra. La siguiente muestra individual fue Chinese Restaurant (2001), con una personal introspección al mundo más interior de los restaurantes chinos de provincias, esos espacios culinarios, más o menos teatrales, más o menos escenográficos, plenos de orientalismo y envolventes atmósferas, inundadas de detalles, olores y sugerentes historias. Esos escenarios, en los “Doble felicidad” (2001) que se cruzan tantas historias, rezuman una poesía de tiempo detenido, de anhelos sorprendidos y de perfume envolvente de chop suey. Fue un paso adelante en su Gran Marcha hacia la composición, el tono cromático y la inmersión en temas urbanos. En esa exposición, a diferencia de la anterior, una inmensa mayoría de obras mostraban espacios interiores donde, entre miradas directas y huidizas y entre nostalgias imposibles, se cocinaba una inquietante pintura metachina, con especiales apariciones fugaces, entre los platos cocinados, por ejemplo la del
edificio del Banco de China, obra del arquitecto Ming Pei, en alusión al también origen teatral y turbio de estos locales. Y así llegamos a Fútbol Utópico (2003), su tercera muestra individual, que nos sumerge de nuevo en el corazón del mito, en las entrañas de sus aficiones más recónditas; es un homenaje y un paseo por los tiempos pasados (años treinta y cuarenta) de este deporte de masas, “Jugador y balón” (2003) cuando la actitud y ética de los jugadores y aficionados era otra a lo que hoy se vive, cuando el fútbol era una contienda deportiva entre iguales. En esta exposición las escenas de ese pasado reciente están pobladas de playas y pintadas en rojo y blanco, estructuras sin puertas y con vallas de aeródromo delimitan el terreno de juego, así como el cielo y la tierra. Los personajes allí dispuestos parece que atisbaran kiplingnianamente los niveles del placer del éxito o del miedo al fracaso. Era una exposición en la que no solamente había pinturas, sino que también se exhibían por primera vez originales esculturas de metal pintado; en ambos medios continuó siendo muy cuidada la utilización de la materia, el color y el misterio. En esa colección brillaba el esplendor de tantos y tantos héroes anónimos de ayer y de siempre. Su cuarta exposición individual fue una serie de fotografías Iconografía privada (2006), técnica en la que ha trabajado siempre de forma privada y que expuso por primera vez en la galería en el marco del prestigioso Fotoencuentros´06.
Se trataba de una aventura visual y urbana acerca de sus mitos, sus amores y desamores estéticos y viscerales acerca de su ciudad natal; era una especie de álbum privado lleno de cianotipias y “La sombra de la senda” (2006) gomas bicromatadas, en las que el autor se contemplaba y autorretrataba a sí mismo como personaje de ficción, un extraño viajero de mil personalidades. Así, las imágenes obtenidas resultan cercanas a la técnica del daguerrotipo y de la obra gráfica, tan cercanas y estimadas por el autor. Era un análisis de la realidad como una dimensión fragmentada y de la identidad personal como un producto permeable, heredero de unos factores culturales e iconográficos concretos que la conformaban. Ha sido una de las exposiciones más personales y cercanas a su intimidad. La ciudad vivida apareció analizada en una encrucijada de poesía y de rechazo, de pasión y de odio. En 2007 conocimos otra individual: El sastre olvidado, exhibida primero en la Sala de las Caballerizas de Murcia y después en la cartagenera galería Bambara, en la que, a través de numerosas pinturas y de nuevo algunas esculturas, conocimos la relación del autor con su abuelo, un extraño sastre que vivió la Guerra Civil española y la posguerra en circunstancias extrañas, “Hilvanar” (2006)
ya que además de sastre viajaba a menudo a Sudamérica y cuando murió aparecieron sospechosos documentos, varios pasaportes distintos y otros objetos que nos acercan a adivinar una vida oculta más o menos aventurera. La exposición resultaba muy interesante, ya que en ella abundaban por primera vez los grandes formatos de pintura, a los que no estábamos acostumbrados, y que resultaron muy atractivos, plenos de personajes enigmáticos, de escenarios fragmentados y de fantasmas flotantes. Se cumplían todas las reglas metafísicas. La serie El zoo que habitamos (2007–2008) es muy rica de imágenes potentes, optimistas y con un cierto surrealismo en el diálogo e interrelación entre los humanos y los animales, sugiriendo una gran fluidez de conocimientos, experiencias y sabidurías. ¿Quienes están en el zoo y quienes están fuera?, ¿quienes contemplan a “La llegada de los pingüinos” (2007) los otros, supuestamente prisioneros?. Son imágenes de una sutil poética e iconográficamente muy vinculadas al autor. Actualmente (2008) trabaja en una serie titulada La iniciación urbana. París 1967– 1970 en la que se confrontan dos intensas experiencias parisinas: la de un joven emigrante español (su padre), entre 1967 y 1970, y la de un joven pintor (él mismo), muchos años des-
pués, con un gran contraste temporal de imágenes, experiencias y emociones en los ritos de la vida de un ciudad fascinante. No podríamos dejar de anotar también su participación en varias Exposiciones colectivas, tanto en Bambara como fuera de ella, en las que ha mostrado Series que reflejan su más íntima cosmogonía creadora y mítica: son las dedicadas temáticamente
“Pascua” (2004)
- a los diferentes Viajes internos y externos que desarrollamos en nuestros caminos (1999). - a los marítimos Faros de la vida (2000). - a Tintín y a sus mundos. - a las Ciudades soñadas y literarias (2002). - a epopéyicos y líricos temas históricos. - a las Ventanas de un discreto voyeur erótico (2003). - al amor de la vida en los Hoteles (2004). - a la retención que tenemos del Paisaje en nuestra mirada y en nuestra mente (2005). - a la relación que tenemos con nuestra solidez física en El cuerpo del sentimiento (2006). - a nuestras contemplaciones espirituales del Bodegón infinito (2007).
“Champs - Élysées” (2008)
Todas estas series (y las que vendrán) se estructuran y se fijan en latitudes y coordenadas espaciales concretas, que conforman paso a paso su cartografía plástica, vital y espiritual.
Asimismo hay que resaltar su labor en la campo de la obra gráfica, tanto en grabado como en serigrafía ha realizado numerosas obras, con muy diversas técnicas y variaciones, dedicadas a numerosas series, algunas mencionadas anteriormente; son obras densas, compactas y a la vez delicadas, muy cuidadas y bien resueltas. Pocos autores desean enfrentarse hoy con valentía y sinceridad a ese mundo perfumado de papeles, tintas, ricas técnicas, máquinas y roces táctiles que tanto nos atrae. Salvador Torres ha sido seleccionado en diversas e interesantes exposiciones colectivas, que por sus circunstancias y detalles resultaron ser cánones estéticos en nuestra región: - “Germinal” en la Sala Verónicas en Murcia, seleccionado por Mara Mira e Isabel Tejeda (2000). - “Los quince de La Opinión” en la Casa Díaz Cassou de Murcia seleccionado por Antonio Parra e Isabel Tejeda (2003).
“Perturbación” (2007)
- “Cien años, cien artistas para el diario La Verdad” en las salas de Las Claras de Murcia, seleccionado por Martín Páez (2004). Con obras de Salvador Torres, y otros artistas de la galería, ha acudido Bambara a varias Ferias de arte: ARTEXPO en Barcelona (en 2001), LINEART en Gante, Bélgica, (en 2002 y en 2003) y ART MADRID (en 2007), con resultados muy interesantes. En Salvador Torres, desde su adolescente labor en el atractivo mundo del cómic hasta hoy, discurre lenta pero firmemente un río de imágenes metafísicas, que
han ido distanciándose definitivamente entre sí, tanto espacial como temporalmente, cumpliéndose así los ritos de la evolución. Son esas mismas imágenes las que van conformando día a día su geografía estética, plena de realismo y de magia, de figuración y de lirismo, de verdad y de ficción, de valor y de sentimiento, de levedad y de nostalgia. Su plástica está inmersa en un rico cosmos privado que se expande en toda la energía y el lirismo de su obra. El suyo es un canto plástico a la poética de sus mitos. Luis Artés Director de la Galería Bambara (Cartagena) www.galeriabambara.es
[email protected]
Curriculum vitae SALVADOR TORRES VERA. Cartagena (Murcia) 1971. Licenciado en Bellas Artes en la Universidad Politécnica de Valencia. Pintor, grabador y fotógrafo. Director del taller de grabado de la Galería Bambara. Cartagena.
TALLERES Y BECAS
EXPOSICIONES COLECTIVAS
Becado por la Comunidad Autónoma de Murcia en el Taller Internacional de Paisaje de Blanca, Murcia 2004.
2007 - EL BODEGÓN INFINITO. Galería Bambara. Cartagena. Catálogo CD-Rom.
Taller de Serigrafía de Pepe Jiménez. Torre Pacheco 2005.
- ARTMADRID 07. EL CUERPO DEL SENTIMIENTO. Stand Galería Bambara .
EXPOSICIONES INDIVIDUALES 2008 - EL ZOO QUE HABITAMOS. Sala de Exposiciones Muralla Bizantina. Cartagena. Catálogo 2007 - EL SASTRE OLVIDADO. Sala Caballerizas. Murcia. Catálogo. - EL SASTRE OLVIDADO. Galería Bambara. Cartagena. CD-Rom. 2006 - ICONOGRAFÍA PRIVADA. Fotoencuentros-06. Galería Bambara. Cartagena. Catálogo. 2003 - FÚTBOL UTÓPICO. Galería Bambara. Cartagena. Catálogo. Elaboración de un grabado titulado Tiempo de fútbol. 2001 - CHINESE RESTAURANT. Galería Bambara. Cartagena. Catálogo. Elaboración de una serigrafía titulada Momentos chinos y un grabado titulado Fin de año chino, editados por la galería Bambara. 2000 - ACERCA DE LAWRENCE. Cervecería Principal. Cartagena. Elaboración de grabado titulado El sueño de T.E Lawrence. Editado por la Galería Bambara.
2006 - FONDO FOTOGRÁFICO. Galería Bambara. Cartagena. - EL CUERPO DEL SENTIMIENTO. Galería Bambara. Cartagena. Catálogo. - LOS COLORES DE LA INMIGRACIÓN. Palacio Pedreño. Cajamurcia. Cartagena. Sala Cajamurcia Madrid. Catálogo. 2005 - EL TIEMPO DE LA SERIGRAFÍA. Sala Vicente Noguera. Torre Pacheco. Catálogo. - EL PAISAJE. Galería Bambara. Cartagena. Catálogo. - EL FIL DAURAT. Can Fondo. Alcúdia. Mallorca. Catálogo. - Elaboración serigráfica. Taller de Pepe Jiménez. Murcia. 2004 - 100 AÑOS CIEN ARTISTAS del Diario La Verdad. Centro de Arte Palacio Almudí y Centro Cultural Las Claras. Murcia. Catálogo. - HOTELES, HOTELES. Galería Bambara. Cartagena. Catálogo.
- Elaboración de grabado titulado Regalo, edita Galería Bambara.
- Elaboración de un grabado titulado Amazona africana.
2003 - LOS 15 DE LA OPINIÓN. Sala Díaz Cassou. Murcia. Catálogo.
- MAC21 Feria Internacional de Arte Contemporáneo de Marbella. ART-e-MAIL. 2002 Seleccionado. Colectiva. Marbella. Catálogo.
- LINEART 2003. Feria Internacional de Arte de Gante. Bélgica. Stand Galería Bambara. Catálogo. - VENTANAS. Galería Bambara. Catálogo. - LA VISIÓN METAFÍSICA. Sala Caballerizas. Murcia. Catálogo. - XXIV Certamen Internacional de Minicuadros de Elda. Alicante. Seleccionado. Catálogo. - VII Premio de grabado El Caliú. 2003. Olot, Gerona. Seleccionado. 30 Días de grabado de Olot. Colectiva de Grabado en Gäule (Suecia). Catálogo. - IV Premio de Pintura de la Cámara de Comercio de Murcia. Seleccionado. Cátalogo. 2002 - LINEART 2002. La Ciudad Metafísica, Feria Internacional de Arte de Gante, Bélgica. Stand Galería Bambara. Catálogo. - MÚLTIPLES IMPRESIONES. Obra gráfica. Sala Muralla Bizantina. Ayuntamiento de Cartagena. Catálogo.
- XXIII Certamen Internacional de Minicuadros de Elda. Seleccionado. Alicante. Museo de Elda. Catálogo. - III Premio de Pintura del Aula de Artes Plásticas de la Universidad de Murcia. Seleccionado. Sala Caballerizas de los Molinos del Río. Murcia. Catálogo. 2001 - DÍAS METAFÍSICOS. Galería Bambara. Colectiva. Obra gráfica. Cartagena. Murcia. - ARTEXPO 2001. FONDO METAFÍSICO. Feria de Arte de Barcelona. Stand Galería Bambara. Barcelona. Catálogo. - VISIONES DE SAN JUAN. Palacio Pedreño. Cajamurcia. Cartagena. Murcia. Catálogo. - Muestra de Artes Visuales Murcia Joven ´01. Seleccionado. Murcia. Catálogo. 2000 - GERMINAL organizada por la Consejería de Educación y Cultura. Sala Verónicas. Murcia. Edición de catálogo en CD-ROM.
- 22 MINI PRINT Internacional. Galería Fort, Cadaqués, Barcelona. Seleccionado. Catálogo. Itinerante.
- Elaboración de grabado titulado Máquina para iluminar, edita Galería Bambara.
- Galerie L´Etang d´Art. Bages, Francia.
- Artes Plásticas Murcia Joven ´00. Finalista. Murcia. Catálogo.
- Wingfield Arts & Music Festival 2002. Inglaterra. - LA CIUDAD SOÑADA. Galería Bambara. Cartagena. Catálogo.
1999 - EL VIAJE. Galería Bambara. Cartagena. Catálogo. Elaboración de un grabado titulado El viajero que pintaba las lunas.