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Secuencia (1998), 42, septiembre-diciembre, 216-220 ISSN: 0186-0348, ISSN electrónico: 2395-8464 DOI: http://dx.doi.org/10.18234/secuencia.v0i42.633

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discrepancia entre ambas figuras dio lugar a seis cartas que se publicaron en El Siglo XIX, mismas que Munoz reline en este apartado. Gracias a la lectura de estas leccio­ nes y a la controversia que suscitan, surge el interes de seguirle la pista al conde de la Cortina, personaje al que se percibe polerntco y hrillante. A fin de que los investigadores in­ teresados en conocer cada una de las lecciones, las puedan localizar facil­ mente, Munoz incluye una lista de los titulos tal y como se publicaron en El

Museo Mexicano.

Una mlrada a los escritos histori­ cos de Lacunza nos perrnite ver que este confiere a la historia una validez redentorista necesaria para el pals. Para el, la historia era un reclpiente cuyos ejemplos contenidos tendrian como misi6n demostrar al estudiante mexicano una manera sana, digna y sobre todo, benefactora para gober­ nar a la naci6n. Su metodo consistia en la exposici6n de extensos discur­ sos histortcos, formadas con una se­ lecci6n de acontecimientos, llevada a cabo cuidadosamente por el. Es importante Hamar la atenci6n sobre la participaci6n de Lacunza en el Diccionario Universal de Historia y de Geografia publicado entre 1853 y 1856 y a la que Munoz Fernandez no hace alusi6n. En un libro reciente­ men te publicado,3 Antonia Pi­Sufier 3

Antonia Pi­Sutler Llorens, "Estudio preli­

minar", en Catalogo de los articulos sobre

Me­

xico en el Diccionario Universal de Historia y de Geografia, Facultad de Filosofia y Letras, Direccion Genera! de Asuntos del Persona! Aca­ demtco-uxoa, Mexico, 1998.

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nos dice "en la realizaci6n de dicha obra enciclopedica colabor6 la flor y nata de nuestros hombres de letras de mediados del siglo pasado",4 entre ellos estaba Jose Marfa, y fue, segun Pi­Sufier, la empresa editorial mas ambiciosa realizada hasta el momento en nuestro pals "ya que reunio, por primera vez, la mayor cantidad posi­ ble de informaci6n sobre su hlstorla y geografia, asf como acerca de sus tradiciones culturales, lo que signific6 una invaluable aportaci6n al coriocimiento cientffico y hurnanistico de los mexicanos al mediar el siglo. 5 El Iibro de Angel Mufioz Fernan­ dez nos invita a conocer, no solo los escritos de Jose Marla Lacunza, sino de toda la generaci6n de Letran, base de la Iiteratura nacional. Lilia Guiot de la Garza Instituto Mora

Salvador E. Morales, Espacios en dispu­ ta. Mexico y la independencia de Cuba, Centro de Investigaciones Ta­ mayo/SRE, Mexico, 1997, 524 pp.* Con material abundante para futuras investigaciones y con una vision am­ plia de un proceso de trascendencia para la historia regional, este trabajo viene a contribuir de manera signi­ .( Ibid.' p. s Ibid.

VII.

* Texto leldo en el Instituto de Investiga­ ciones Hist6ricas en la presentaci6n de! libro organizada por la Universidad Michoacana de San Nicolis de Hidalgo.

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ficativa a la aun escasa historiografia conternporanea sobre una epoca y un tema que esta despertando el interes de varies acadernicos: el de las rela­ ciones de Mexico con el Caribe en el siglo XIX, por mucho tiempo ni siquie­ ra mencionadas, en contraposici6n a otros temas considerados como de mayor importancia. Aunque el texto reline una gran cantidad de informaci6n y ofrece pers­ pectivas variadas, se refierc en particu­ lar a la polittca exterior de Mexico ante la independencia cubana, y pre­ tende destacar "la percepcton oficlal de un proceso revolucionario que im­ plicaba una convulsion socioracial y politico­social novedosa" segun con­ fiesa el propio autor. Escrito con un lenguaje sencillo y sin ambages, al mismo tiempo, deja entrever que detras de esa llaneza en el relato hay una gran cantidad de datos que el autor recogi6 en los ar­ chivos de la ciudad de Mexico y de La Habana. Con el manejo de la riqueza documental, proporciona al lector una vision mas amplia que incorpora mu­ chos elernentos y da cuenta de la com­ plejidad del fen6meno estudiado. El libro, de dimensiones considera­ bles, es un testimonio de la historia de Cuba y de Mexico, asi como del esfuerzo del Instituto Tamayo y de la Secretaria de Relaciones Exteriores para publicar un ejemplar de factura agradable y de calidad tanto en la for­ ma como en el contenido. De hecho, podriamos hablar de un doble libro: por una parte, es un estudio pensado mas ambiciosamente que una intro­ ducci6n hist6rica y por otra, una re­ copilaci6n de un significativo numero

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de cartas proveniences de un "extraor­ dinario fondo", como el au tor llama ­con justa raz6n­ a la colecci6n orde­ nada de documentos escrltos par cl consul mexicano en La Habana en las ultimas decadas del siglo XIX y de la cual solo toma las redactadas una vcz iniciada la campafi.a emancipatoria. El estudio introductorio no se circunscri­ be al contexto que requieren las notas del c6nsul, es en esa medida un libro autonorno. Por su parte, la correspon­ dencia se sostiene por si misma como fuente documental, con una cohcrcn­ cia interna y una 16gica propia, Podrfa ser tambien, por lo canto, un texto in­ dependiente. Sin embargo, encuentro que uno al lado del otro ofrecen mas elementos al lector y se cornplemen­ tan: el primero proporciona un marco referencial de gran utilidad para entender el contenido del epistolario de un hombre sensible, acucioso y com­ prornetido con el pais al que servia, mientras estas ofrecen informaci6n que profundiza en lo afirmado por S. Morales. El autor recurre a la bibliografia re­ ciente ya sea para apoyar sus propios sefialamlentos, para discutir los plan­ teamientos previos o para ampliar lo que los libros citados esbozan en cicr­ tos temas. De hecho, el ensayo histori­ co que antecede a la antologia docu­ mental cumple con sus objetivos de profundizar analisis anteriores y am­ pliar las ternaticas. Por ejemplo, res­ pecto las acciones espafiolas; al papel de la prensa "de vital influencia en la polarlzacion de los suietos en discor­ dia" y revelador del poder de los inte­ reses particulares en juego; a la opi­ nion de los hispanos acerca de la

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situaci6n que se vivia en el Caribe; al menosprecio que tuvieron hacia Esta­ das U nidos: a la exaltaci6n del valor espafiol; al desden par los paises his­ panoamericanos; a la simpatfa de estos con la causa cubana par razones ideo­ 16gicas pero su poca disposici6n para actuar realmente en favor de la inde­ pendencia (a excepci6n de Ecuador); al manejo de Espana de la campafia de propaganda en su favor proyectando la imagen de una relaci6n amistosa con Mexico y desalentadora de las expecta­ tivas de los cubanos respecto a la con­ ducta oficial mexicana. Los dos primeros capitulos ofrecen suficientes elementos para no descar­ tar la interpretaci6n geopoHtica evi­ dente en el trasfondo del analisis y para reconocer que no se trat6 de re­ laciones bilaterales sino que las rela­ ciones de Mexico y Cuba respondie­ ron a un entramado regional en el que las potencias jugaron un papel y nuestros paises otro. Estos capitulos son, tambien, un recuento de la histo­ ria cornpartida par Cuba y par Mexico desde la epoca colonial, SUS estrechos vinculos econ6micos, los niveles de in­ tercarnbio y comunicaciones y de co­ mo debemos ver la actitud de Mexico hacia la isla en el marco mis amplio de las relaciones con Espana y con Estados Unidos. Queda constancia de la dicotomia entre el gobierno y el pueblo mexicanos ante la problernati­ ca cu ban a a lo largo del slglo XIX, y de la incllnacion del segundo por la cau­ sa libertaria mientras la postura oficial respondi6 siempre a la defensa del interes nacional. El estudio del Partido Revoluciona­ rio Cubano ocupa gran parte del tra­

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bajo yes, tal vez, lo mis novedoso, lo mas original. Basado en una exhaus­ tiva busqueda en el Archivo Nacional de Cuba esta dividido en dos perio­ dos. El primero se refiere a las tiem­ pos de Marti (capitulo III) y el segun­ do a los de Estrada Palma (capitulo VII). En ambos se ocupa de las activi­ dades y objetivos del Partido y de sus vinculos con los clubes cubanos. En el capitulo VII destaca las opiniones que tuvieron los emigrados en torno al proyecto de Cuba mexicana califlcan­ dolo ­atinadamente­ coma "poco se­ rio". En el estudio introductorio se abor­ da, tambten, el contexto internacio­ nal, el significado de la cercanfa de Es­ tados Unidos a Cuba y la lejania de esta a Espana y en ese gran esccnario se menciona la situacion, realidad y opciones de la isla, Espana y Mexico. El autor se pregunta acerca de cuan­ tos paises supieron encontrar rapida­ mente un modo nuevo de encarar la realidad cambiante con una politlca exterior en funcionamiento 6ptimo a sus intereses espedficos y, con sus re­ flexiones, contesta a lo largo del tex­ to que Mexico fue uno de los que lo hizo. Hacia el final del escrito hay una especie de reflexion acerca del desern­ pefio de Vazquez en el amblto cubano y se cierra con un capitulo sabre 1898 y sus consecuencias. En la segunda parte, el material re­ copilado nos permite hacer un reco­ rrido por los afios 1895 a 1898 y cono­ cer la evolucion de la actitud asumida por Mexico frente a la independencia de Cuba, a traves de los informes coti­ dianos de don Andres Clemente Viz­

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quez, el consul que a pesar de haber nacido en la Gran Antilla, por la forma en que trabajaba y defendia los intere­ ses de Mexico, se revelaba como me­ xicano, desernpefiando su labor con lealtad y entusiasmo. La lectura dete­ nida de los fragmentos seleccionados de sus largas cartas resulta de suma relevancia porque la secuencia de su pensamiento retleja la que vivio el go­ bierno mexicano y nos da una pauta certera de las transformaciones de la postura oficial. Tambien porque su mirada y su pluma nos trasmiten una vision fidedigna del estado interno de la isla, de las fuerzas politicas en jue­ go y de c6mo interactuaban. La correspondencia de nuestro con­ sul es una fuente importante de infor­ maci6n para diversos temas. Su orde­ namien to, transcripci6n y cementa­ rios facilitaran y alentaran, sin duda, el trabajo de otros investigadores que abriran nuevas Iineas de reflexion. El texto, como tantos otros, tiene aciertos y desaciertos. Entre los pri­ meros podemos mencionar el trata­ miento amplio que da el autor al tema de la independencia de Cuba, ana­ lizandola desde diversos angulos, Una de las partes que despierta mas inte­ res es la que se refiere a las activida­ des del Partido Revolucionario Cuba­ no, y en particular a sus vinculos con los clubes politicos que actuaban en territorio nacional. Adernas, la vision mas amplia, objetivo del autor, pre­ tende rebasar el marco geopoHtico en el que se inserta la relaci6n Mexico­ Cuba y conduce a abordar cuestiones relacionadas con el financiamiento na­ viero, la circulaci6n monetaria y la competencia entre los territorios e in­

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tereses involucrados. Otro de los acier­ to s se refiere al tratamiento de la personalidad de Porfirio Diaz y a su desempefi.o en la poHtica exterior, intimamente vinculada a la politlca y necesidades internas de Mexico. Po­ driamos sefialar otros elementos posi­ tivos, pero quedan coma retn para aquellos que se acerquen a la lectura de este importante trabajo. Evidentemente hay varias cuestio­ nes puntuales que deben ser reflexio­ nadas y discutidas, pero me parcce, al igual que con los aciertos del tcxto, que tienen que ver mas bien con los dlalogos personales de cada lcctor con el autor, los que servlran para dar inicio o cauce a otras indagacio­ nes y a nuevos planteamientos. En mi opinion, una de las afirmaciones que debe ser discutida es la que dice: "El equipo mexicano en el poder tcrria sus intereses externos confusamcntc definidos, pues mientras abria mas las puertas a la dependencia econo­ mica con Estados Unidos, se sacudia de temor ante unas implicaciones politicas tan impopulares y riesgosas" (se refiere a las vivas a Espana, p. 76). Tampoco comparto la poca valora­ ci6n que da al papel de Estados Uni­ dos en el dlsefio de la politica mexi­ cana hacia Cuba y que sostenga que lo que mas ternia Diaz de Estados Unidos eran las actividades que estos permitieran realizar a sus opositores en los hordes fronterizos (p. 90). Sin embargo, coincido con el autor cuando concluye que "son muchos los elementos que concurren a des­ tacar la signtflcacion geohist6rica del movimiento cubano de liberaci6n na­ cional y social de 1895 a 1898. Signifl­

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caci6n de orden interno, obviamente, pero sobre todo internacional, como se desprende con indudable fuerza de la documentaci6n", misma que nos entrega "una marafia de interconexio­ nes de diverso grado de importancia, pero que en nada es desdefiable por mas remoto que parezca en tiempo y espacio" (p. 175). A partir de Jo que aporta este libro quedan abiertos al analisis varios temas entre los que podriamos sefialar el de las relaciones con Espana, un estudio biograflco y curricular de don Andres Clemente Vazquez, la vinculacion de los clubes politicos de cubanos con la poblacion mexicana, especialmente con los intelectuales, etcetera. Para finalizar, queda solamente re­ comendar la consulta de este libro ya sea por las razones expuestas en estas breves Iineas, ya sea porque los lee­ tores esten interesados en encontrar respuestas a diversos temas relaciona­ dos con la guerra de independencia cubana, la diplomacia mexicana, la union de politica intertor/polltica ex­ terior, el papel de Porfirio Diaz en la formulacion de la politica mexicana, la ambici6n estadunidense en las pos­ trimerias del siglo XIX, los juegos de

poder desatados, el papel del Partido Revolucionario Cubano y, entre otros, las labores y fines de los clubes patrio­ ticos. Laura Mufioz M. Instituto Mora

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Javier Delgado, Ciudad­region y trans­ porte en el Mexico central. Un largo camino de rupturas y continuidades, UNAM/Plaza y Valdes, Mexico (Colee­ ci6n Ciudad y Region). Un mundo que conjuga tendendas globalizantescon historias locales obli­ ga a recuperar tiempo y espacio en cl analisis que de el desee hacerse. Talcs nociones lejos de constituir meros re­ ferentes fisicos o categorias filos6ficas utilizadas para enmarcar fen6mcnos sociales, aparecen como elementos di­ namicos que participan activamentcen cualquier intercambio societal. Los hlstortadores se han encargado ya de mostrar que adernas de duraci6n o transcurrir, el tiempo implica inten­ sidad y no linealidad; el otro elemento del binomio ha generado menos con­ sensos y la mayoria de las veces los investigadores interesados en la di­ mension territorial de los procesos so­ ciales parten de conceptos polisernicos capaces de generar confusiones cuan­ do de pensar a la region se trata. Esta ultima lejos de representar en abstracto una categoria preestableci­ da, debe construirse como objeto de estudio, de alli la importancia del tra­ bajo que bajo el titulo Ciudad-region y transporte en el Mexico central. Un largo camino de rupturas y continui­ dades, ofrece Javier Delgado dentro de una colecci6n editorial impulsada por el Instituto de Geografiay el Pro­ grama Universitariode Estudios sobre la Ciudad. Entre los principales aportes del texto destaca la capacidad mostrada por su autor para retornar Iineas de analisis provenientes de diversas dtscl­

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