BATAVIA Historia de un naufragio
ErrEquEErrE TEATro presenta
BATAVIA Historia de un naufragio una obra dirigida por David Barrocal Escrita por David Barrocal y Almudena ocaña Elenco: ruth Carreras Samad Madkouri Nuria Landete Iñaki Díez Juan Carlos reina Adrián San Juan
Cuaderno de Bitácora 13 de junio de 1695. En algún punto desconocido en la ruta hacia Java. Primera jornada de nuestra travesía. Yo, el Capitán Pelsaert y siete de mis hombres, navegamos sin rumbo en una vieja chalupa. La esperanza de encontrar a alguien que nos auxilie es nuestro único timón.
El destino se nos torció hace hoy seis noches, cuando el Batavia naufragó en un archipiélago desconocido. De todo el pasaje y la tripulación, conseguimos sobrevivir 154 personas, mujeres y niños entre ellos. Dejo al cargo de los supervivientes en la isla a Jeronimus Cornelisz, contramaestre y hombre bien formado. Que Dios le ilumine para cuidar de ellos hasta mi ansiado regreso…
I. EL HECHo HISTÓrICo
“¡Mi bebé no está muerto, sólo duerme! Jeronimus le dio una medicina…” “No era medicina, Maiken,sólo la mierda que echaban en el barco para matar a las ratas” El 7 de Junio de 1695, el gran buque Batavia, de la Compañía de las Indias, naufraga en el archipiélago de las Abrolhos, al sudeste de Australia. Viajaba en una ruta comercial que había partido de Holanda ocho meses antes. Tras la colisión con un arrecife de corales que no aparecía en las cartas de navegación, el buque se hunde. Hasta 154 personas consiguen abandonar el barco y alcanzar varios islotes a nado. rápidamente se improvisan tiendas, se busca alimento y se recoge agua de lluvia. El Capitán zarpa en una chalupa en busca de ayuda. Los náufragos tenían suficientes suministros para sobrevivir hasta el rescate, apenas tres meses después.
Sin embargo, a su regreso, el Capitán Pelsaert encuentra un panorama bien distinto: de los 154 supervivientes, sólo quedan 34. Amparándose en lo extremo de las circunstancias, Jeronimus Cornelisz, el contramaestre al cargo, lideró la masacre sistemática de los náufragos. Sólo sus ansias de poder justifican en realidad el régimen del terror que allí instauró. Batavia, historia de un naufragio cuenta lo que sucedió durante la ausencia del capitán. Éste es el relato de cómo esa isla se convirtió en un infierno.
II. uNA HISTorIA DE FINAL A PrINCIPIo
“¿Por qué mataron entonces a cien de los suyos en menos de 80 días? ¿Es cierto que atendían órdenes de Jeronimus Cornelisz? ¿Qué les dijo ese monstruo?¿Qué ha pasado aquí? ¿Qué hay en esta isla?” ¿Cómo más de 100 personas sucumbieron ante unos pocos asesinos sin rebelarse, aun cuando sabían que eso les costaría sus vidas? Buscando dar respuesta a esta pregunta, Batavia estructura su narración a la inversa, comenzando el relato en el final: el juicio y condena a muerte de los asesinos; y retrocediendo escena a escena hasta llegar al principio de los acontecimientos que se presentan: el naufragio en la isla. Y es que lo que nos interesa no es la sucesión cronológica de los hechos, sino desentrañar las causas que llevaron a la tiranía de Cornelisz y su trágico desenlace.
Así, retrocedemos paso a paso, para comprender mejor la corrupción del individuo, su proceso de descomposición, hasta llegar a ese momento en el que pudo decir: No. Batavia es una reflexión crítica sobre un grupo de individuos que tuvo la opción de unirse contra el tirano que los sometió. queremos llegar a ese día en que pudieron unirse contra él, enfrentarse a sus métodos… Pero no lo hicieron. Ese día triunfó el estado del terror de Jeronimus Cornelisz.
III. JEroNIMuS CorNELISZ: uN TIrANo CoNTADo A TrAVÉS DE SuS VÍCTIMAS
“¡No vais a huir de nosotros! ¡Somos los reyes de esta isla! ¡Qué digo reyes! ¡Somos los Dioses de este lugar! Jeronimus Cornelisz es el puto Dios supremo de esta isla de mierda! ¡Y yo soy David Zevank, el lugarteniente de Dios!” A la hora de acercarnos a los hechos acontecidos tras el naufragio real, no nos interesaba entender al tirano que los provocó (todo apunta a que Cornelisz era un psicópata no diagnosticado) sino al entorno que le rodeaba y que le permitió llevar a fin su régimen de terror. Al igual que un tirano como Hitler fue elegido democráticamente en una situación extrema, Jeronimus Cornelisz fue alzado como líder de los náufragos, que confiaron en él llevados por el miedo, las falsas esperanzas de salvación, la amenaza de un futuro peor... Batavia es un recorrido por las diferentes posiciones que adoptan los individuos ante una injusticia inducida
por un loco. Desde el corrupto al oportunista, el rebelde aplastado por el sistema, el convencido o las víctimas anónimas…
IV. PArALELISMo CoN LA CrISIS ACTuAL
“¿Acaso creéis que a Jeronimus le gustó ordenar la muerte de todos los enfermos? ¡Por Dios bendito, claro que no! ¡Pero es lo que hay! La realidad manda. Unos tendrán que sacrificarse para que el resto salgamos de este trance. Es tiempo de sacrificios…” Hoy, al igual que les sucediera a los náufragos del Batavia, un contexto de crisis está llevando a la imposición de medidas injustas en pos de una solución intangible, de una salvación. Desde 2008, el miedo al desempleo o la acusación de haber vivido por encima de nuestras posibilidades son el perfecto caldo de cultivo para el desarrollo de un sistema injusto que somete al individuo. Da igual que haya cuatro siglos de diferencia y miles de kilómetros de distancia entre la tragedia del Batavia y la actual crisis, los mecanismos y su evolución son los mismos: la amenaza de un futuro peor, la culpabilización
del ciudadano, la resignación ante una situación vendida como inevitable... Los mismos mecanismos que nos llevan a la misma conclusión: el pueblo es sometido a la voluntad de unos pocos gracias al miedo, y sólo la unión de todos puede llevar a la salida.
V. LA ProPuESTA ESCÉNICA: LA HISTorIA CoMo ESPEJo
“Todos llevamos el mismo monstruo dentro… Jeronimus, usted, yo… todos los que pusimos un pie en esta isla… Por un tiempo fuimos libres, Pelsaert… pero ese monstruo está dentro de todos… de los vivos… pero también de los muertos…” Batavia emplea el hecho histórico como excusa para llevar al espectador a la reflexión sobre nuestra situación actual. Por ello, la propuesta escénica persigue igualmente trascender de la historia concreta de la isla hasta un concepto más general. Buscamos poner al espectador ante un espejo, situarle en el centro de unos acontecimientos que de alguna manera son los que él mismo está viviendo hoy en día. Y el principal elemento que empleamos para ello es el uso de las sombras. Por medio de un ciclorama retroiluminado situado al fondo del escenario, marcamos un contraluz dramático
que transforma a los actores en sombras en diferentes momentos de la obra. Así, los náufragos del Batavia se convierten en individuos anónimos que experimentan dramas muy parecidos a los que el espectador sufre hoy en día: les prohíben manifestarse o protestar, les despojan de sus bienes, les venden medidas injustas como las únicas posibles… etc.
ErrEquEErrE TEATro Errequeerrees una compañía teatral independiente creada por David Barrocal en 2006. quizá porque venimos del mundo de la televisión y del cine, entendemos el teatro como una forma de explorar más allá de las posibilidades del audiovisual. Para nosotros, el teatro debe ser una experiencia estética y sensorial, un medio que transporte al espectador. queremos hacer teatro que se huela, que se toque, que se sienta… De La Celestina a La Tempestad de Shakespeare, pasando por Wilde y su Salomé, el inmenso Océano Mar de Alessandro Baricco o Batavia, historia de un naufragio, nuestro primer texto propio, cada montaje es para nosotros un nuevo punto de partida, una excusa para reunir a distintos artistas dispuestos a jugar, a escuchar, a modelar universos plásticos, buscando con el actor desde un lugar diferente. Contacto:
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