Cómo comunica la comida? Una perspectiva semiótica

XII JORNADAS DE INVESTIGACIÓN Revista Investigación Científica, Vol. 4, No. 2, Nueva época. Mayo - Agosto 2008 ISSN 1870-8196 ¿Cómo comunica la comid

0 downloads 105 Views 93KB Size

Recommend Stories


COMUNICA DIGITAL 360 COMUNICA DIGITAL 360 COMUNICA DIGITAL 360
COMUNICA DIGITAL 360 COMUNICA DIGITAL 360 COMUNICA DIGITAL 360 Síntesis informativa actualizada con lo más reciente en materia de telecomunicaciones

Una perspectiva histórica
Evolución y retos del marco normativo migratorio en México: Una perspectiva histórica Evolución y retos del marco normativo migratorio en México: Un

Sexualidad: Una perspectiva cristiana
Colección Convenciones N.º 8 Sexualidad: Una perspectiva cristiana Marcel Fernandez 1996 Baños de Montemayor Editado por: Edita Traducción oral

Story Transcript

XII JORNADAS DE INVESTIGACIÓN Revista Investigación Científica, Vol. 4, No. 2, Nueva época. Mayo - Agosto 2008 ISSN 1870-8196

¿Cómo comunica la comida? Una perspectiva semiótica Tania Karina Silva Garay Carmen Fernández Galán M Unidad Académica de Letras Universidad Autónoma de Zacatecas

Dentro

de

las

sociedades

constantemente

están

ocurriendo

actos

comunicativos, desde los más habituales, como lo es hablar, hasta la creación de una obra de arte, plástica o sonora. Este ir y venir de mensajes a través de distintos medios, sucede una y otra vez, volviéndose un fenómeno de naturaleza cotidiana al grado que resultan imperceptibles el sinfín de actos comunicativos. Por ejemplo, ¿se puede considerar a la comida que se consume todos los días o platillos gourmet como un texto que cuenta con la capacidad de comunicar? La comida de cierta manera no es como un discurso escrito, que se puede leer sin mayor dificultad, o uno de tipo hablado, que al escucharlo el receptor reaccione después de comprenderlo, su interpretación se logra por medio de los sentidos, principalmente, el olfato, la vista y por supuesto, el gusto. Por lo tanto, se puede considerar la comida como una forma de comunicación en la que están en juego signos icónicos e indicios que son codificados desde la tradición. El discurso culinario ofrece una gran variedad de posibilidades que permiten tener un conocimiento más extenso de los usos y costumbres de la cultura. El mensaje culinario, se encuentra ahí, sobre las mesas, en los mercados y restaurantes, está por todos lados y a diario es posible tener contacto con él. La acción de comer no sólo es ingerir, masticar y tragar, sino que cada vez que se mire un platillo, se olfateé y se deguste, también se está teniendo contacto directo con el pasado, con la herencia cultural y con los caminos recorridos por un pueblo a lo largo de la historia.

1

XII JORNADAS DE INVESTIGACIÓN Revista Investigación Científica, Vol. 4, No. 2, Nueva época. Mayo - Agosto 2008 ISSN 1870-8196

La presente investigación tiene como propósito analizar la comida desde la perspectiva semiótica a partir del discurso culinario. Palabras clave: códigos, signos, tradición. Dentro de la vida cotidiana ocurren varios fenómenos de la comunicación ya casi imperceptibles por el ojo humano a causa de la rutina, la costumbre y el tedio que las ciudades en la actualidad generan en sus habitantes. Con frecuencia pasan desapercibidas ciertas implicaciones significativas de carácter profundo de algunos actos tan usuales para el hombre como beber, comer, vestir y hablar, fenómenos cotidianos cargados de significación. Es sabido que dentro de cada uno de estos rubros se esconden datos de importancia antropológica, de los cuales se puede determinar un perfil social, religioso y étnico. El pueblo mexicano, por su parte se ha caracterizado desde sus inicios por contar con una larga tradición en cuanto a comida y antojitos se trata, la cual de manera silenciosa habla mucho de él, sin embargo a la par se ha visto envuelto por el velo de la pobreza. Desde antes de la conquista la dieta del indígena era limitada, pero gracias a ella lograron sobrevivir. El maíz como base de la alimentación, preparado de distintas formas les proporcionaba saciedad en el estómago y a la vez los nutría, ya sea en forma sólida como tortillas, elote o pinole mezclado con otras cosas o en su modalidad líquida, como en atole. Así pues, el maíz además de alimentar tiene muchos otros usos más, es materia prima para fabricar artesanías, alimenta al ganado, es posible transformarlo en alcohol, además de ser venerado como sustento de vida en el ámbito religioso y formar parte de narraciones y mitos.1 Ahora bien, retomando el aspecto comunicativo de la rama culinaria, de ella se derivan los platillos regionales que vistos como un texto, cuentan con la habilidad de comunicar rasgos de una cultura, por supuesto no de la misma 1

Arturo Lomelí, La sabiduría de la comida popular, Grijalbo, México, 2004, pp. 125-131

2

XII JORNADAS DE INVESTIGACIÓN Revista Investigación Científica, Vol. 4, No. 2, Nueva época. Mayo - Agosto 2008 ISSN 1870-8196

manera como lo haría el discurso hablado o escrito en sí, sino por medio de un texto visual o icónico (forma, color, dimensión y ubicación espacial) en principio, e indicial, olfativo y gustativo. De modo que un platillo puede ser visto como texto en el que participan distintos signos y códigos. Entonces, ¿es posible que un platillo regional o algún tipo de alimento lleguen a comunicar algo de la misma manera en que quizás lo haría un texto escrito? Sin duda es posible, pues todo antropólogo sabe que conocer la alimentación de una sociedad es conocer varios aspectos desconocidos de ella. Con intención de explicar cómo funciona esta forma de lenguaje, se recurre al esquema de la comunicación para hacer visibles los aspectos del tema en cuestión.

Emisor

Texto

Receptor Mensaje

Cocinero Comensal Tradición Prácticas culturales

Tradición Código

Consumo

Icónico (color y formas) Indexical (olor y sabor) Simbólico (convenciones) Canal Sensorial

3

XII JORNADAS DE INVESTIGACIÓN Revista Investigación Científica, Vol. 4, No. 2, Nueva época. Mayo - Agosto 2008 ISSN 1870-8196

Cada uno de los puntos mencionados en el esquema tienen relación entre sí y en conjunto pretenden explicar con detenimiento lo complejo que puede resultar el acto de comer, cocinar y degustar. No sólo se trata de introducir el alimento en la boca e ingerirlo, es comer tradición y valores. Este será un breve recorrido por los mensajes secretos de la cocina mexicana y algunos detalles que comparte con otras cocinas, todo enfocado al plano de la comunicación.

Emisor El emisor en términos simples es aquel que transmite el mensaje al receptor, como sucede en la pragmática (acto de habla), alguien emite un mensaje cualquiera y el receptor lo escucha, comprende y reacciona ante él, pero ¿qué es lo que sucede cuando el proceso se complica y en lugar de un solo emisor se cuenta con varios a la vez? En el arte al igual que en la cocina estas complicaciones suelen ser más frecuentes de lo que se piensa. Una obra literaria tiene un autor, una pintura también, entonces ¿el emisor de ambas obras son sus autores? Si, aunque falta tratar un aspecto importante. Detrás de la obra de arte llámese pintura, novela u otras, se encuentra una larga cadena de corrientes, influencias, rupturas y sobre todo costumbres de uno o varios pueblos que se han transmitido a lo largo de la historia de la humanidad, a esta cadena se le denomina tradición. La tradición habla no solo por medio del arte, sino también a través de los sucesos culturales. Al igual que ocurre en el caso de las artes, en la cocina, se puede identificar a más de un emisor: cocinero, tradición y prácticas culturales (donde se incluyen los productos de la cultura). Las dos últimas se complementan entre sí, pues una forma parte de la otra. La elaboración del mensaje no comienza como pudiera pensarse, con el cocinero, él solo recrea algo ya antes determinado por la tradición y la cultura (mitos y rituales) aunque también es cierto que en algunos casos, suele incorporar algunos elementos característicos de su propia inventiva,

4

XII JORNADAS DE INVESTIGACIÓN Revista Investigación Científica, Vol. 4, No. 2, Nueva época. Mayo - Agosto 2008 ISSN 1870-8196

los cuales enriquecen al platillo. Aquí sucede algo parecido a lo que ocurre dentro del plato de grabación de una película, el director se lleva el crédito principal de la cinta, pero tras bambalinas se encuentra un equipo conformado por guionistas, fotógrafos, diseñadores, editores, publicistas entre otros, los cuales se encargan de crear el mensaje que es en este caso la película terminada. En cuanto a cuestiones culinarias, la cultura y la tradición determinan el principio y parte del trayecto que el mensaje debe atravesar antes de llegar a su destino, la comida es parte esencial de la cultura y por ello está ligada a la identidad y a la esfera religiosa; podría decirse que los platillos regionales o cierto tipo de alimentos son un reflejo fehaciente de la historia de un pueblo, posiblemente de su cosmogonía y símbolos de identidad. Por ejemplo, Francia no existiría sin la presencia del vino, bebida que los franceses han adoptado como propia, como parte de su cultura e identidad. El vino como bebida tótem, por supuesto que ha tomado su lugar siendo parte del mito. Esta bebida es ingerida para calmar la sed, la cual por su naturaleza color rojo oscuro, tiene similitudes con la sangre líquido denso y vital. Por otra parte es considerado como un objeto de conversión que cuenta con la propiedad de cambiar situaciones y extraerle a las cosas su contrario, de allí proviene su vinculación con la alquimia2. Es por eso que se dice que una persona que ha bebido de más es capaz de hacer cualquier cosa que sobrio no haría. Asia sin lugar a dudas es identificada con el arroz, que equivaldría al pan y al trigo en Europa. El arroz constituye el alimento esencial para los orientales y es de origen divino. En la gran mayoría de las leyendas se cuenta como el arroz, al igual que el maná en el desierto, crece y llena los graneros de manera espontánea. Es un símbolo de ruptura entre el cielo y la tierra, objeto de un rito de comunión en el cual el emperador al ingerirlo, lo hace en compañía de la diosa solar, para los japoneses simboliza abundancia debido al poder del sol. El arroz es la riqueza, la

2

Ronald Barthes, Mitologías, Siglo veintiuno editores, México, 2002, p.75

5

XII JORNADAS DE INVESTIGACIÓN Revista Investigación Científica, Vol. 4, No. 2, Nueva época. Mayo - Agosto 2008 ISSN 1870-8196

abundancia, pureza, incluso en occidente significa felicidad cuando se lanza el cereal crudo en las bodas. En América, el alimento que identifica a los mexicanos, equiparable con el vino y el arroz, es el maíz que representa más de la mitad de calorías que se ingieren a diario en la dieta y más de seiscientos de los platillos tradicionales lo tienen como base. También su consumo es asociado con los grupos de nivel socioeconómico bajo y en comunidades campesinas, pues en estos dos rubros de la sociedad en particular la adquisición aumenta considerablemente. La planta del maíz es aprovechada en su totalidad desde tiempos remotos; las hojas se usan para preparar tamales, los granos de colores se utilizan para diseñar mosaicos o pinturas, los cabellos de elote funcionan como diuréticos y tranquilizante, la masa cura heridas e incluso cuando se infesta produce un hongo que también es comestible llamado huitlacoche. Sin duda son rasgos de un pueblo pobre, todo se aprovecha, nada es desperdiciado. Contrario a lo que se piensa en el mundo del mexicano acerca de su renuencia al trabajo, por medio del maíz se puede llegar a la conclusión de que el mexicano no es holgazán, sobre todo en el campo, en donde las personas en situaciones precarias no gozan del beneficio de la industrialización, de máquinas para levantar la cosecha. El maíz es una de las plantas más evolucionadas y de exclusiva creación humana, no existe en estado silvestre, esto indica que si se desea el grano en la mesa será necesario cultivarlo, cuidarlo y cosecharlo. Según la mitología náhuatl esta planta fue regalada por Quetzalcoátl al pueblo y desaparecería de inmediato de la faz de la tierra si el hombre no la sembraba y cultivaba3. Irónicamente México a pesar de su inmensa gama de platillos tradicionales, que datan desde la época prehispánica hasta nuestros días, ha mantenido una constante lucha por combatir el hambre, suceso reflejado una vez más en la dieta, pero entonces, ¿de dónde surge el mito de “el cuerno de la abundancia”? 3

Arturo Lomelí, op.cit.pp. 125-136

6

XII JORNADAS DE INVESTIGACIÓN Revista Investigación Científica, Vol. 4, No. 2, Nueva época. Mayo - Agosto 2008 ISSN 1870-8196

Se piensa que en un principio, cuando los mexicas emprendieron aquel largo peregrinaje rumbo a la tierra prometida, sufrieron de hambre, miseria y enfermedades, pero aún con todo eso, encontraron la manera de alimentarse. Su enorme fe y el dios Huitzilopochtli, fueron lo que los condujo hacia donde se encontraba el águila sobre un nopal devorando a una serpiente. Después de haber encontrado la tan esperada señal, luego de doscientos años de deambular por lo que se conoce ahora como territorio mexicano, dio pauta para la formación de uno de los más fuertes imperios conocido hasta entonces. Tenochtitlan de inmediato se convirtió en una ciudad avanzada que logró desarrollar tecnologías agrícolas desconocidas hasta el momento, cosa que contribuyó a que los mexicas obtuvieran poder y riquezas. Al momento de la conquista, los españoles se llevaron esta impresión a España y todavía hasta los años cuarenta se conservaba en nuestro país. Luego de la caída del imperio, la hambruna volvió a tierra mexica y la alimentación se basó en plantas silvestres principalmente; la chaya que es una especie de acelga o espinaca por crecer alrededor de los arbustos se le considera “alimento de pobres”, sin embargo comenzó a consumirse. Así fue como en un principio el hambre gobernaba al pueblo, por desgracia esa no sería la última. Cabe mencionar algunos periodos históricos de México: la época novohispana en donde la clase social era decisiva al momento de probar o no bocado, la revolución en donde el tráfico y robo de alimentos mermaba la armonía de los ciudadanos y esta crisis fue prolongada hasta mediados del siglo XX. Varios presidentes han intentado eliminar el hambre de la nación sin conseguir resultados hasta nuestros días. En 1965 Díaz Ordaz funda la Compañía Nacional de Subsistencias Populares (Conasupo) con la finalidad de regular los precios en alimentos básicos, en 1970 Echeverría desarrolló planes agropecuarios, en 1977 José López Portillo buscó una alianza para la producción, bajar precios y combatir el desempleo y así sucesivamente muchos más han propuesto, pero el problema continúa. No por nada en el siglo XIX

7

XII JORNADAS DE INVESTIGACIÓN Revista Investigación Científica, Vol. 4, No. 2, Nueva época. Mayo - Agosto 2008 ISSN 1870-8196

Humboldt estableció que el principal obstáculo contra el progreso era el hambre, y estaba en lo correcto. Hoy en día debido a la globalización la dieta del mexicano está siendo transformada paulatinamente, dándole un giro vertiginoso al mensaje. La voz de la comida tradicional se confunde con la de los vecinos del norte, fenómeno que no sólo está ocurriendo en México, sino en todo el mundo. La influencia dietética se ha incrementado considerablemente en el último siglo a causa de la obsesión del mundo por lucir una apariencia casi perfecta. También se debe tomar en cuenta el contexto de industrialización donde los productos y técnicas poco a poco han transformado el estilo de vida y este suceso se ve reflejado en los hábitos alimenticios. El escenario actual es también un determinante de importancia para la modificación o evolución de una cultura. La comida rápida es solo un síntoma de la aceleración de la época actual, el hombre ya no tiene tiempo para comer, por lo que las masas acuden a restaurantes de “comida rápida” y los hacen famosos. Ahora bien, dentro de este tipo de restaurantes todo es superficial, pues ofrecen por medio de espectaculares fotografías un producto que no es real. En las imágenes del menú la carne de las hamburguesas luce jugosa, gruesa, colorida, el pan es esponjoso, los vegetales frescos y cuando es entregada la orden, se recibe algo diferente, un objeto aplastado y cuyos ingredientes no están frescos, pues provienen de una bolsa donde se encontraban congelados. Reiterando, todo es de plástico, desde sus empleados, hasta las instalaciones, ¿no es acaso esta una fotografía de la sociedad norteamericana? Volviendo a la rama de la tradición como emisor del mensaje, debe quedar claro que su principal objetivo es comunicar y transmitir los valores de un pueblo, prevalecer tanto las manifestaciones culturales como artísticas, además de hacer historia viviente de alguna manera. Por medio de la tradición, el hombre crea un vínculo íntimo con su pasado, con sus raíces, creando una especie de

8

XII JORNADAS DE INVESTIGACIÓN Revista Investigación Científica, Vol. 4, No. 2, Nueva época. Mayo - Agosto 2008 ISSN 1870-8196

paralelismo entre su presente y pasado respectivamente. La tradición no es tan solo de dimensiones sociales y geográficas, sino también temporales. En México la gran mayoría de las tradiciones se encuentran ligadas con la comida y se manifiestan durante todo el año. Las más importantes están acomodadas de acuerdo al calendario de fiestas de la religión católica, ya que después de la conquista cabe recordar que hubo una fusión entre la cocina indígena y la de los evangelizadores españoles, pero no solo se fusionaron ideas y técnicas, sino también ambas partes conocieron ingredientes desconocidos según sus lugares de origen. El calendario de festividades marca también los ciclos alimenticios. En México, día de reyes, cuaresma, día de muertos, posadas y navidad, son fechas importantes que ilustran el sincretismo con la tradición cristiana donde se incorporaron elementos prehispánicos, pues resaltan los ingredientes de origen autóctono como nopales, flor de calabaza, huazontles, verdolagas, papas, moles, flores de xempazuchitl, pan de muerto, camote, calaveritas de dulce por mencionar algunos. La tradición, la cultura y la historia, de forma indirecta envían un mensaje por medio de la comida al receptor, pero entonces ¿que papel juega el cocinero, creador directo del mensaje en este proceso?, el cocinero es el que directamente dialoga con el código y lo maneja, incluso lo elige de acuerdo a ciertas normas correspondientes al tipo de cocina.

Código Un código es un alfabeto de correspondencias institucionalizado en el cual se basa el emisor para formular el mensaje y el receptor para decodificarlo, en suma es un repertorio de signos y sus reglas de construcción. Dentro del código que el emisor utiliza, en este caso, se encuentran inmersos varios tipos de signos

9

XII JORNADAS DE INVESTIGACIÓN Revista Investigación Científica, Vol. 4, No. 2, Nueva época. Mayo - Agosto 2008 ISSN 1870-8196

que hacen posible la transmisión del mensaje; estos fueron clasificados por Peirce en tres categorías básicas que son el icono, el índice y el símbolo. El icono, a diferencia del índice que cuenta con una forma de semiosis más compleja, se encuentra vinculado al canal visual, es decir con los colores, formas, espacio y texturas. El icono no se basa propiamente con su semejanza con la naturaleza, ya que según Umberto Eco, estos se encuentran codificados culturalmente y son convencionales. Se considera icónico al signo cuando tiene semejanza topológica con lo que está tratando de representar. Peirce hizo una distinción en la cual hace notar que el icono o representación, cuenta con tres subclases que son la imagen, el diagrama y la metáfora4. La imagen se ha confinado de manera errónea y simplista solo a una equiparación con el icono, suceso que no es así del todo, ya que podría decirse que uno se encuentra dentro del otro, en cuanto a clasificación se trata, es como ir de lo particular a lo general.5 En la cocina, el elemento icónico es muy importante y va conectado con el simbólico, un ejemplo de platillo mexicano: los chiles en nogada son decorados de manera que cada elemento representa un objeto específico, de acuerdo a su origen; este diseño del platillo fue el resultado de un concurso, que consistía en crear un plato que contara con los colores de la bandera (verde, blanco y rojo) y que a la vez la representara. Así la granada representa al rojo de la bandera que a su vez simboliza la sangre que derramaron los héroes por la patria, lo mismo sucede con el resto de los ingredientes, el chile ancho (verde) significa la esperanza del pueblo en el destino de su raza y la crema (blanco) la pureza de los ideales del pueblo, ambos manifestados respectivamente de la bandera6. La noción de icono se ha discutido bastante a lo largo de la historia, desde Platón hasta Peirce. La tendencia de asociar una idea con otras por medio de la 4

Thomas A. Sebeok, Signo: una introducción a la semiótica, Paidos, Barcelona, 1996. pp. 44 - 45 Ídem. 6 Significado de los colores de la bandera consultados en www.paises.com.mx/mexico/bandera 5

10

XII JORNADAS DE INVESTIGACIÓN Revista Investigación Científica, Vol. 4, No. 2, Nueva época. Mayo - Agosto 2008 ISSN 1870-8196

semejanza o mimesis, marca un capítulo crucial en la historia de las ideas. Otro de los signos que es indispensable tomar en cuenta para la lectura del mensaje culinario es el índice. Este se relaciona principalmente con la percepción de las cosas por medio del resto de los sentidos, no solo el visual, podría decirse que es el más arraigado en el ser humano en el sentido primitivo. Este signo es natural o físico, ya que tiene sus orígenes dentro del campo de la medicina (sintomatología) y en las primitivas costumbres del hombre antiguo. Según Ginzburg, las dos principales fuentes asociadas del índice son: las primeras prácticas de caza y las técnicas adivinatorias mesopotámicas7. La primera hace referencia al lado primitivo del hombre, al lado animal, donde debía aprender a leer los indicios agudizando sus sentidos para poder sobrevivir. Se basaba en una sucesión de causas y efectos, rastros de animales y otras pistas como huellas, árboles destruidos o ramas en el piso, plumas, excrementos, olores, sonidos, etcétera. La segunda fuente tiene más que ver con la magia, el porvenir, las creencias de un pueblo, con la mezcla de pócimas; como una especie de técnica de deducción que tiene la finalidad de adivinar el futuro o cambiar el destino8. Entonces el índice puede ser tomado como síntoma, indicación, indicio o rastro, pero sin ser una misma cosa. A su vez los indicios han formado parte de la vida cotidiana e incluso contamos con la habilidad de leerlos inconcientemente desde el momento en que nacemos como un mecanismo de supervivencia. Lo anterior queda mejor explicado en el caso de la ingestión alimentaria, es decir, por qué se prefieren unos alimentos sobre otros. Un bebé va a preferir un alimento dulce sobre un alimento amargo, porque la amargura captada por las papilas gustativas le indica que ese alimento puede estar podrido o puede ser venenoso, por lo que de inmediato lo expulsa. El sabor dulce es bien recibido porque indica que contiene calorías indispensables para el crecimiento y además generan grasa 7

Sebeok, op.cit.p. 86. Las manifestaciones indexicales más consultados o utilizados de la magia y la adivinación son las estrellas, animales, aceites o movimientos involuntarios. 8

11

XII JORNADAS DE INVESTIGACIÓN Revista Investigación Científica, Vol. 4, No. 2, Nueva época. Mayo - Agosto 2008 ISSN 1870-8196

necesaria para soportar los tiempos de hambruna. Lo mismo ocurre con la preferencia por los alimentos grasosos a los bajos en grasa y calorías en los adultos. El hombre primitivo se inclinaba a los alimentos grasosos por cuestiones climáticas o de escasez de animales que cazar, ya que la grasa ayudaba a soportar las inclemencias sin llegar a morir. Otros sentidos como el olfato, la vista y el tacto funcionan de la misma manera que el gusto para detectar indicios de peligro en lo que se traga; de allí proviene también la repulsión por lo viscoso, por lo maloliente e incluso por ciertos colores como el azul y el negro. Hoy en día las preferencias continúan vigentes como una herencia instintiva de nuestros antepasados,

aunada

a

otras

preferencias

modernas

por

la

comida

industrializada sobre la “natural”. El símbolo se encuentra relacionado directamente con la tradición como vía de comunicación, porque es un signo que funciona por convención. El símbolo no es un concepto plano, sino al contrario, cuenta con un número ilimitado de significados y estos remiten al conocimiento de nosotros mismos. Por esta razón el símbolo se encuentra profundamente ligado al mito, pues ambos nos ayudan a explicar el origen de aquellos fenómenos naturales difíciles de comprender. Para conseguir una interpretación exitosa del símbolo no se deben dejar de lado tanto la tradición como las relaciones históricas que el signo pueda tener. Dentro del símbolo se encuentran varios términos subordinados que son la alegoría, insignia, marca, emblema (heráldica), señal y estigma (siempre y cuando no se consideren síntomas, de lo contrario formarían parte de otra clasificación). Entonces el símbolo es pues “un signo sin semejanza ni contigüidad, sino solamente con un vínculo convencional entre si significante y su denotado”9 y son solo de uso exclusivo de los seres humanos. Los alimentos sin duda cuentan con una carga simbólica considerable e inherente a ellos. Las galletas son uno de los apaciguadores de hambre más consumidos por la población de más bajos recursos. Estos snaks son un símbolo 9

Sebeok, op.cit, pp. 49-50.

12

XII JORNADAS DE INVESTIGACIÓN Revista Investigación Científica, Vol. 4, No. 2, Nueva época. Mayo - Agosto 2008 ISSN 1870-8196

de recompensa, el cuál se encuentra asociado a la infancia cuando al niño se le premia con galletas si su comportamiento es adecuado tanto en el hogar como en la escuela. También tienen otros significados como el calor familiar, el afecto, la generosidad y abundancia. Todas aquellas personas que comen galletas de cualquier tipo buscan ante todo deleitarse, darse gusto. El pueblo mexicano se ha caracterizado desde la época prehispánica por ser muy antojadizo, es quizás por esta razón que no es una sorpresa que en México se consuman altas cantidades de comida chatarra o industrializada, incluidas las galletas y no precisamente por la clase alta. De cierta forma esto es un síntoma de que los consumidores pertenecen a un pueblo indulgente e incluso hasta infantil10. Al igual que las galletas los pastelitos industrializados forman parte importante de la dieta de miles de mexicanos todos los días y también simbolizan una dulce recompensa. “En un

nivel psicológico profundo, los

pastelitos están más cerca de los significados rituales originales de la cocina, donde morder, partir y desmenuzar las imágenes simbólicas y fetichistas formaban parte de las ceremonias”.11 En otros casos algunos alimentos y bebidas han tomado la función de distintivos nacionales, significan más de lo que se puede ver a simple vista. Esto por supuesto forma parte del imaginario cultural y de estereotipos marcados por el cine, los medios de comunicación, publicidad entre otros. En pocas palabras estos alimentos se identifican con determinada nación solo por convención, no por que realmente le pertenezcan al país por decreto mundial. Tal es el caso de la hamburguesa, emblema del país de las barras y las estrellas, de los Estados Unidos. Casualmente este alimento no es originario del país y ha sufrido varias transformaciones al pasar de los años. Son los inmigrantes alemanes quienes introducen a los Estados Unidos un plato llamado filete americano al estilo Hamburgo, que más tarde sería llamado hamburguesa. Con este gran invento

10 11

Lomelí, op.cit., p. 96. Lomelí, op.cit., p. 103

13

XII JORNADAS DE INVESTIGACIÓN Revista Investigación Científica, Vol. 4, No. 2, Nueva época. Mayo - Agosto 2008 ISSN 1870-8196

aparece otro de gran importancia en nuestros tiempos, que son los restaurantes de fast food, sin duda un claro reflejo de la sociedad norteamericana. De manera que el código culinario está conformado por una multiplicidad de signos visuales, olfativos y táctiles que permiten a su vez múltiples combinaciones y donde también están en juego formas de preservación como los alimentos salados o enlatados, y de creatividad como lo agridulce u otras combinaciones exóticas.

Receptor El ámbito de la recepción es correlativo al de la tradición, donde habrá que diferenciar las formas de consumo, ya que es muy distinto comer por hambre y necesidad a comer por placer. El fenómeno del marketing permite vislumbrar como se da el salto del instinto al deseo, por ejemplo en el uso de los colores que antes se asocian alimentos venenosos y después a alimentos libres de calorías. Los sentidos forman parte importante en la recepción de mensaje culinario, además del contexto. Es cierto que para poder comprender un mensaje es necesario manejar, en primer término, el código que se está usando y contar con una serie de referentes que el mensaje demanda para su comprensión, lo que está estrechamente relacionado con la cultura. Por ejemplo una persona de nacionalidad mexicana que come por primera vez sushi y no sabe nada acerca de porqué el pescado se sirve crudo, quizás le parezca repulsivo en un principio e incluso inconcebible la idea de comer un producto marino crudo. En cambio una persona, de nacionalidad mexicana u otra, que se encuentra relacionada con el contexto del platillo oriental, ya sea por medio de conocimiento o la experiencia directa en el escenario oriundo, entiende con mayor facilidad el mensaje, sabe que en los rollos de sushi va el pescado crudo por cuestiones históricas y de adaptación en los pueblos de

14

XII JORNADAS DE INVESTIGACIÓN Revista Investigación Científica, Vol. 4, No. 2, Nueva época. Mayo - Agosto 2008 ISSN 1870-8196

oriente12. Sin embargo comprender el contexto no siempre es sinónimo de aceptación de la prácticas culturales de un pueblo y

por consiguiente la

comprensión del mensaje. Aún hoy en día en pleno siglo XXI donde la tecnología se reinventa minuto a minuto, para occidente resulta incomprensible que en oriente coman carne de perro y diversas variedades de animales exóticos como ballena, huesos de tigre, manos de gorila, entre otros. Esto sólo demuestra que las costumbres alimenticias son las más antiguas y arraigadas de una cultura, incluso, de acuerdo a datos históricos, son los más difíciles de modificar.

Conclusión Una vez más se comprueba que la sabiduría popular no se encuentra tan errada al decir que eres lo que comes. La comida al estar directamente ligada con la cultura, define el temperamento y la personalidad de ésta, además de ser un efectivo medio para conservarla. Quizás lo anterior funcione para reflexionar más acerca de que es lo que se está llevando a la boca, las raíces de una cultura que enriquece el conjunto de elementos formativos del individuo o la marca corporativa de un producto que daña directamente la salud física y la económica de la gente.

12

El producto marino va crudo en los rollos de sushi porque en la antigüedad envolverlo en arroz lo conservaba por más tiempo, de esta forma podían viajar sin que la comida se echara a perder.

15

Get in touch

Social

© Copyright 2013 - 2024 MYDOKUMENT.COM - All rights reserved.