[ SEGURIDAD VIAL ]

Conducción segura

• Accidentes graves por tipo de traza Recta

68% Curva

19%

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Un sobrepaso en falso, banquinas descalzadas o la presencia de agua, nieve o hielo en la ruta obligan a tomar decisiones en muy poco tiempo. Cómo actuar frente a estas situaciones que se presentan de manera inesperada.

Intersección

12% Pendiente

1%

Conducción segura

Recomendaciones para evitar accidentes en ruta • En ruta, la maniobra más frecuente y peligrosa es el sobrepaso

• Accidentes graves por tipo de camino

• Accidentes graves por tipo de calzada

Ruta nacional

Pavimento seco

82%

52% Ruta provincial

25% Autopista

10% Avenida

7% Calle

6%

Pavimento mojado

9% Pavimento húmedo

4%

Sobrepaso en falso Es la situación que genera más accidentes. En base a las estadísticas de CESVI, el 68% de los siniestros se produce en sectores de rectas, lo que implica que muchos de los accidentes se producen en los sobrepasos. Al momento de realizar este tipo de maniobra, en primera instancia, recuerde que si el vehículo que viene de frente inició su maniobra de sobrepaso y usted aprecia que la acción puede llegar a generar un riesgo, señale su presencia con una guiñada de luces y reduzca la velocidad. Si ve que el vehículo tarda mucho en realizar el adelantamiento, adviértale con el giro a su derecha que usted va a ser el que baje a la banquina para evitar el choque. Recuerde que su única vía de escape es hacia la derecha, es decir, hacia la banquina correspondiente a su carril de circulación, pero hágaselo saber al vehículo que viene de frente, realizando el sobrepaso ya que muchos accidentes se ocasionan en la banquina fruto de la confusión de los conductores a la hora de elegir la vía de escape.

Tierra/ ripio seco

3% Pavimento con hielo/nieve

2%

Advierta con guiño a la derecha que bajará a la banquina.

• La mayor cantidad de accidentes graves se produce en rutas nacionales, en sectores de rectas y con pavimento seco. De esto se desprende que la maniobra de sobrepaso es la de mayor riesgo para los automovilistas.

Siempre es mejor manejar de tal forma que se evite quedar enredados en un accidente de tránsito, pero si la situación ocurre es importante que el conductor sepa cómo debe operar para evitar el siniestro. Distintas maniobras evasivas para distintas situaciones de riesgo. En esta nota nos vamos a concentrar en las situaciones más peligrosas que pueden aparecer en la ruta, dado que el 52% de los accidentes se producen en rutas nacionales y un 25% en rutas provinciales. Manejar en la ruta puede parecer, por momentos, aburrido y monótono. Pero para que el viaje sea sólo una transición para llegar a destino y que no se convierta en tragedia, no hay que dejarse llevar por el aburrimiento y

no se debe bajar la guardia en ningún momento, ya que siempre hay que estar listo para resolver de inmediato alguna situación adversa e imprevista. Toda aquella persona que alguna vez “salió” a la ruta (de cualquier tipo), sabe que la maniobra más frecuente y peligrosa es el sobrepaso. El problema es cuando ese adelantamiento se convierte en una mala maniobra y el conductor que circula por su carril debe bajar a la banquina para impedir un accidente. Cuando se debe realizar una maniobra arriesgada para evitar la colisión, es posible que los conductores no actúen de la mejor forma y durante el esquive pierdan el control de su vehículo, generando otra colisión, un despiste o un vuelco. Por esta razón, es necesario recordar instantáneamente la manera ade-

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Conducción segura

A la banquina parcialmente

A la banquina Si el vehículo que está realizando el adelantamiento no llega a completar la maniobra y usted debe tirarse a la banquina, debe tomar ciertas precauciones, especialmente cuando se trata de superficies de menor adherencia (pasto, ripio, tierra). La maniobra debe ser lo menos brusca posible, sin un accionamiento del freno en el instante que se cambie de superficie (durante el ingreso a la banquina), no se debe girar el volante durante la entrada y no se debe realizar una contramaniobra abrupta al reingresar rápidamente a la calzada para no perder el control del auto. Esto suele suceder muy frecuentemente en banquinas con superficies con bajo nivel de adherencia. Lo más aconsejable es poner el auto recto sobre la banquina, reducir la velocidad de forma moderada y volver a la ruta cuando se encuentre despejada y el vehículo circule a una velocidad precautoria. Recuerde: No gire el volante mientras esté frenando bruscamente, ya que no podrá doblar y, en el momento que suelte el pedal de freno, el vehículo recuperará bruscamente la trayectoria que le indica el volante, pudiendo generar el derrape y posterior vuelco.

No gire el volante mientras esté frenando.

Si decide hacer la maniobra de forma parcial, es decir, bajar sólo con las ruedas del lateral derecho y transitar con las del lateral izquierdo sobre la ruta, se debe tener en cuenta que usted estará circulando con los neumáticos sobre distintas superficies, una de ellas de menor adherencia. Cualquier accionamiento del freno en estas circunstancias, puede llegar a generar la pérdida de control del vehículo, debido a que las ruedas derechas se bloquearán con mayor facilidad, provocando el conocido trompo. Otro factor a tener en cuenta, es que en muchos casos, las banquinas se encuentran a distinto nivel con respecto a la calzada (banquina descalzadas). Es factible ver zonas que se hallen unos 10cm por debajo de la línea de la ruta, lo que genera un movimiento brusco al momento del ingreso. La clave esta en hacer la maniobra a baja velocidad (tanto la de ingreso a la banquina como la de reingreso a la ruta) y con precaución.

Debe tener en cuenta que las banquinas muchas veces se encuentran descalzadas.

Ponga el auto recto y disminuya la velocidad de forma moderada.

No accione el freno, ya que la diferencia en las superficies puede provocar pérdida de estabilidad.

cuada de actuar en momentos límite, en donde lo que menos hay es tiempo para pensar cuál es la forma correcta de resolver el problema. Para ello, es imprescindible una capacitación previa del conductor en manejo defensivo con el fin de contar con las técnicas de esquive y bloqueo, que aseguran justamente el permanente control de vehículo, evitando una colisión. Tal como se presenta en los cursos de manejo defensivo que se brindan en CESVI ARGENTINA, dictados por nuestros especialistas del Dpto. de Seguridad Vial.

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Cuando una persona debe ingresar rápidamente a una banquina debe considerar que, por lo general, en nuestro país estas zonas presentan una superficie diferente a la ruta. Hay banquinas de pasto, de tierra, de ripio, con pastizales o de lo que se le ocurra. Estos espacios son de menor adherencia con respecto al asfalto, por lo que si se produce en forma brusca el cambio de área, con accionamiento del freno, con dos ruedas o si se desea reingresar rápidamente a la ruta, se puede generar un accidente.

Por todo esto, en esta nota encontrará una guía práctica que le permitirá resolver de manera correcta y segura las situaciones peligrosas más frecuentes que se le pueden presentar mientras conduce en la ruta.

• Curso de manejo defensivo dictado por CESVI ARGENTINA.

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Apoyacabezas

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Hielo

Agua en la ruta Otra situación imprevista que se puede generar es cuando hay agua acumulada en la calzada. Con lluvia, se recomienda una velocidad máxima de 80 km/h, pero depende de la zona por la que se transite, de la cantidad de agua que se acumule en la ruta, la intensidad de la lluvia y las cubiertas del vehículo. Frente a esto, la recomendación es disminuir la velocidad todo lo necesario y moderar mucho las maniobras. Pero si un conductor pasa por encima de un charco y siente que el vehículo se le mueve es porque está perdiendo adherencia la cubierta. En ese instante, un neumático (o más de uno) está literalmente separado del asfalto por una película de agua. En estos casos no se debe hacer demasiado, sólo afirmar bien el volante para que el vehículo no se mueva, no girarlo, sacar el pie del acelerador y no tocar el freno para que el auto disminuya su velocidad en forma gradual. De esta forma, si la acumulación de agua es muy extensa, al ir bajando la velocidad las cubiertas girarán más despacio y empezarán a desagotar nuevamente el agua acumulada, recuperando la adherencia a la calzada.

Cuando se transita por zonas oscuras en donde suele haber nevadas o lugares muy fríos se puede llegar a formar hielo sobre la calzada. El hielo es la superficie con menor adherencia, por lo que es determinante transitar a baja velocidad. Este tipo de superficie provoca la pérdida de control del vehículo y bloquea con facilidad las ruedas al frenar. Para evitar un despiste o accidente, reduzca la velocidad en puentes, lugares con sombras o próximos a arroyos, donde es probable que encuentre hielo. Si transita sobre el hielo, para frenar hay que pisar el pedal con suavidad y así evitar el bloqueo de ruedas, a menos que tenga ABS. Si pierde el control no frene. Levante el pie del acelerador e intente controlar el vehículo usando el volante.

Al pasar por un charco de agua sujete bien firme el volante y no accione el freno.

Con el agua las cubiertas pierden adherencia.

El hielo es la superficie con menor adherencia. Circule a baja velocidad.

Banquinas con serrucho En la mayoría de las rutas de nuestro país, las banquinas no se encuentran pavimentadas. Desde el punto de vista de la seguridad, es una desventaja porque el cambio de superficie puede producir la pérdida de control del vehículo. Sin embargo, en las rutas que hay banquinas asfaltadas suelen verse conductores irresponsables circulando por este lugar que sólo es una vía de escape. Por eso, muchas veces se recurre a colocar serruchos para evitar que se utilice esa zona como un carril adicional. Una vez más, se debió buscar una solución de compromiso que no representa la mejor opción, en virtud de que si un auto debe ingresar necesariamente a este carril se encontrará con estos dispositivos reductores de velocidad que pueden incrementar el riesgo.

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• Los serruchos en las banquinas también pueden incrementar el riesgo de accidentes si el auto se descontrola.

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Niebla

Animales sueltos

Antes de ingresar a un banco de niebla, debemos chequear que se encuentren encendidas las luces de posición y las luces bajas (que son de uso obligatorio en nuestro país) y, en caso de tenerlas, accionar las luces antinieblas. Nunca usar las luces altas, puesto que pueden provocar deslumbramiento y un acortamiento del campo visual. Al mismo tiempo, se debe disminuir la velocidad de nuestro vehículo, dando la posibilidad al conductor que transita por detrás nuestro a reducir su velocidad, ya que en muchos casos se producen reacciones bruscas al adentrarse en estos bancos que, luego, son generadoras de choques en cadena. Siempre se debe circular ceñidos sobre la derecha de la cinta asfáltica, evitando los encajonamientos. Es muy peligroso estacionarse sobre la banquina ya que la misma suele utilizarse de vía de escape en caso de colisiones en cadena. De tener que hacerlo, corresponde realizarlo en zonas seguras donde nuestra detención no implique un riesgo mayor para nosotros ni para los demás. Dentro de nuestras posibilidades, debemos viajar expectantes a las situaciones que se puedan generar delante de nuestro vehículo, circulando con las ventanillas abiertas a fin de poder escuchar los sonidos provocados por otros vehículos (frenadas, impactos, etc).

Circulando por las rutas argentinas es común ver carteles que indican la presencia de animales sueltos. Si hubiese alguno sobre la calzada y usted lo percibe a la distancia, ante todo disminuya la velocidad y haga sonar la bocina, porque quizás el animal se vaya y nos ahorre la maniobra. Si es de noche, hágale una “guiñada” de luces, siempre mientras desacelera progresivamente, pero no en forma excesiva porque puede deslumbrar al animal y quedarse inmóvil. Si la presencia del animal es totalmente repentina, frene intensamente, sin llegar a bloquear los neumáticos y trate de esquivar hacia su izquierda, en el caso de que no venga ningún vehículo de frente. Si debe desviar su trayectoria hacia la derecha tenga en cuenta las recomendaciones enunciadas de ingreso a la banquina. Al momento de esquivar al animal, ceda un poco la intensidad de frenado, para que la dirección responda de mejor manera. Hay un sinfín de recetas para esquivar diversos tipos de animales que responden a los mitos populares, pero lo único recomendable en este caso es disminuir la velocidad.

tu

tu

tu

Antes de ingresar a un banco de niebla verificar tener encendidas las luces bajas y disminuir la velocidad. Nunca usar luces altas.

Disminuya la velocidad y toque bocina. De necesitar esquivarlo utilice la mano contraria, siempre que no venga nadie de frente.

QUE TIENE QUE HACER SI... El auto cae al agua. Antes de que su vehículo se hunda, quítese el cinturón de seguridad y trate de salir por una puerta o por una ventana. Mientras que el auto flote, puede romper una ventanilla con un objeto duro. Si el auto se hunde y todavía no logró salir, tome el mayor aire posible, aguarde que se igualen las presiones para poder abrir la puerta del auto y salga. El vehículo se para en un paso a nivel.

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Si el motor de su vehículo se detiene sobre un paso a nivel y el auto aún está en movimiento, debe tratar de poner en marcha el automóvil de inmediato. Para ello, con el auto moviéndose, coloque la segunda marcha, suelte el embrague, bombee el acelerador y accione de

forma continua el motor de arranque. Si las barreras están levantadas, el tren no está en las proximidades y el vehículo no arrancó, empuje el auto para sacarlo de las vías. En cambio, si tiene cerca el tren, abandone el vehículo rápidamente y aléjese de la zona.

• Cuando ve un animal en la ruta, baje la velocidad todo lo posible.

Cae un peatón abajo del vehículo. Antes del atropello frene lo máximo posible para tratar de evitar la colisión o que el impacto se produzca a la menor velocidad posible. Pero si el siniestro ocurre y si el peatón quedase bajo el auto luego del impacto, suelte el freno, ya que es preferible que los neumáticos pasen rodando sobre la persona a que sea aplastado y arrastrado por el vehículo.

Joaquin Dias [email protected]