Descubriendo Nueva Zelanda Dos millones de turistas internacionales visitan Nueva Zelanda cada año: eso significa un turista por cada dos habitantes locales. Aún así, Nueva Zelanda sigue siendo una gran desconocida para la mayoría del mundo. Su situación, realmente en la "otra punta del mundo", influye en esa percepción, así como su novísimo origen histórico. Atraídos por la belleza natural del país, encontraremos una cultura urbana floreciente y una sociedad que acompaña las últimas tendencias mundiales. Sus increíbles paisajes que abarcan casi todo lo que de contraste puede ofrecer la naturaleza de nuestro planeta. Montañas cubiertas de nieve en sus cimas, fuentes termales naturales, géiseres activísimos, doradas y solitarias playas, lagos brillantes y selvas antiquísimas. Todo ello, tal como aparece en las postales, y en las recientes películas que todos tenemos en mente, y que han puesto de moda este destino. Es por esta variedad tan contrastada de naturaleza que bien podemos decir que Nueva Zelanda es un planeta en miniatura: todos los paisajes de la Tierra encuentran una muestra allí. Su tamaño y su eficiente infraestructura hacen que sea fácil de explorar. Más allá del interés que cada uno tenga, cuando regresa todo el mundo coincide: querrían pasar más tiempo en Nueva Zelanda. Por todo ello nuestra propuesta es conocer el país "a su aire".

Itinerario Días 1, 2 y 3 - Rumbo hacia Nueva Zelanda Salida a última hora de la tarde. Después de realizar las escalas oportunas, llegaremos a Auckland. La diferencia horaria y la distancia que nos separa de las antípodas hace que no aterricemos allí hasta el tercer día de viaje, por la mañana. Nos estarán esperando para llevarnos hasta nuestro lujoso y céntrico hotel, y poder descansar de tan pesada etapa. A salvo los privilegiados que puedan viajar en club o primera clase, este desplazamiento es sin duda lo más duro de este viaje. Hacia la tarde y una vez repuestos, sería bueno "estirar las piernas" y dar una vuelta por la llamada "Ciudad de las Velas" para comenzar a conocerla. Y para ello, sugerimos subir a la Sky Tower, con sus magníficas vistas de Auckland entre el Pacífico y el Mar de Tasmania. Además, a la hora de la puesta del sol, podemos cenar en uno de los dos restaurantes panorámicos de la parte superior (clientes convencionales) o, si se es suficientemente osado (Andrómeda se exime de responsabilidad en esta opción), "tirarnos" desde la propia torre, en un "Skyjump", en el que el atrevido se arroja desde una altura de 192 metros... Días 4 - Auckland (Ta-maki Makau Rau en maorí) Es el área metropolitana más grande de Nueva Zelanda y el mayor núcleo de población del sur del Pacífico. Aunque Wellington es la capital de Nueva Zelanda, Auckland es la ciudad más importante, poblada y la capital económica del país. En el tour visitaremos los puntos claves de la ciudad como el histórico barrio de Parnell, Mt. Eden, Auckland Domain y el magnífico museo con sus piezas maoríes y polinesias. Seguidamente, continuaremos a lo largo de la orilla del golfo de Hauraki y de la bahía de Waitemata. Por la tarde, continuaremos a las afueras de Auckland, concretamente al parque regional en los Waitakeres. Allí visitaremos el Arataki Visitor Centre. Seguiremos hasta las playas de arena negra en la costa occidental. Nuestro guía nos introducirá en la ricas flora y fauna de esta región. Día 5 - Auckland - Waitomo - Rotorua (Hamurana) Hoy recogeremos nuestro vehículo de alquiler con el que iniciaremos el recorrido a nuestro aire. Salida en dirección a Waitomo, recorriendo 200 kms., a través de las colinas de Bombay y el fértil valle del Waikato. Sugerimos visitar las cuevas de Waitomo en lancha a través de un río subterráneo hasta la llamada gruta de las luciérnagas, donde centenares de estos insectos iluminan sorprendentemente el lugar. Continuaremos hasta Rotorua (166 kms.) donde nos alojaremos en una finca campestre de los alrededores. Esta tarde podremos relajarnos del viaje viendo las actividades ganaderas del Agrodome. No deja de ser un espectáculo para turistas, pues no es una granja o finca ganaderas auténticas, pero si se viaja con niños puede resultar entretenido.

Rotorua es el mayor centro turístico de la Isla del Norte, así como el de mayor actividad volcánica, que origina casi todos los atractivos fenómenos naturales y los bellos y agrestes parajes de la zona: géiseres, formaciones volcánicas, baños termales,...Por ejemplo, el Kuirau Park está lleno de lagos de agua hirviente, pozos de lodo burbujeante, etc. Además existen baños públicos tipo Spa, donde un "cansado" viajero se puede relajar (gratis). Otro gran atractivo de Rotorua es la cultura Maori, de gran influencia en la cultura local, tendremos oportunidades de contacto directo, que podremos aprovechar. Día 6 - Entre volcanes Si madrugamos, podemos acercarnos a ver salir el sol en el lago Rotorua: tendremos uno de los panoramas más bonitos y curiosos ya que el agua caliente del lago forma una cortina de vapor, consiguiendo que, con los primeros rayos de sol, gran parte del lago parezca en ebullición. Inmediatamente deberíamos salir hacia el cercano (27 kms.) valle volcánico de Wai-o-tapu, el más colorista y quizá espectacular de todos los de la región, con sus piscinas naturales de lodo hirviente, sulfataras, manantiales y ríos de agua hirviendo, sin olvidarnos de Lady Knox, su famoso géiser, aunque para verlo, tendremos que estar allí a las 10'15, hora en que diariamente lo activan?!!!. Si se desea completar el recorrido de valles termales, puede visitar Waimanyu a 15 kms. de la ciudad y uno de los más bellos. O bien acercarnos a Rainbow Springs, donde poder sumergirnos en la flora y fauna autóctonos como el kiwi, ave nocturna convertida en símbolo del país. Por la tarde una opción más "antropológica", para variar de tanto paisaje natural, sería visitar alguna de las reservas maorís de la zona. Recomendamos dos de las varias que existen: la reproducción de la aldea maorí fortificada de Te Puia; y la quizá más auténtica, de la Thermal Village de Whakarewarewa que ofrece la oportunidad de ver el día a día de una aldea maorí. El famoso géiser Pohutu también se encuentra dentro de esta reserva. Muchas de estas familias maorís son descendientes de la tribu que antes habitaba la aldea de Wairoa, de ello le hablaremos con más detalle en su itinerario. Podremos completar nuestra velada maorí, asistiendo a una ceremonia de bienvenida, seguida de una cena "huangi", en la que se cocina con el tradicional método polinesio de las piedras calientes en el suelo, al tiempo que se interpretan cantos y danzas del folklore maorí. Si se desea comer el huangi, basta también con pagar un pequeño extra en alguno de los varios locales en la ciudad que también lo ofrecen.Hay muchísimas opciones de visitas y excursiones, pero aún lo son más las versiones "aventureras" de las mismas o de otras posibles: escaladas y trekkings por volcanes o zonas termales, sobrevuelos en avioneta o helicóptero, ascensiones en el teleférico "Skyline Skyride" con una vista espectacular de Rotorua, excursiones en motos o 4X4, safaris en lancha rápida por ríos y aguas termales, o descensos en rafting o kayaks por los mismos. Todo es posible si nos lo pide al organizarle el viaje.

Día 7 - Rotorua - Taupo - Wellington (460 kms.) Sugerimos salir temprano hoy para poder aprovechar la jornada y hacer paradas en ruta, por ejemplo en el lago Taupo, el mayor del país, y los parajes del Tongariro National Park, que alberga los volcanes Tongariro, Ngauruhoe y Ruapehu. Toda esta región es el paraíso de las truchas y de los aficionados a la pesca, además de ser una zona vinícola. Continuaremos nuestro camino hasta llegar a Wellington, donde llaman la atención las coloridas casitas de madera en las colinas que rodean su magnífico puerto natural. Si tenemos tiempo, estaría bien visitar el museo Te Papa Tongarewa. No hay muchas más cosas de interés destacado en Wellington, salvo quizá alguna reserva natural y/o jardín botánico de especies autóctonas o en vías de extinción. Día 8 - De la Isla Norte a la Sur por el Estrecho de Cook Dejaremos nuestro coche en la terminal del ferry una hora antes de la salida del mismo. El primero zarpa a las 08'25 hrs. Dadas las distancias a recorrer este día, es aconsejable tomarlo. El estrecho de Cook tiene unos 90 kms. y su travesía hasta Picton en la Isla Sur dura unas 3 horas: es bonita pero algo pesada también. Si alguien tiene poco tiempo, el trayecto en avión es de sólo 35 minutos y no es mucho más caro. Recogeremos el nuevo coche de alquiler en la terminal de ferry y nos dispondremos a partir para Kaikoura (157 kms. de recorrido). Nos alojaremos en los alrededores disfrutando de un entorno montañoso, privilegiado para el descanso. Día 9 - Kaikoura - Christchurch (183 kms.) Esta mañana va a resultar casi ineludible realizar una excursión en barco para avistar ballenas...y es que Kaikoura es famosa en el mundo entero por ser uno de los mejores lugares para ver ballenas en su hábitat natural. Aunque la verdad es que la excursión vale la pena con o sin ballenas pues el espectáculo natural del resto de la fauna (focas, delfines y aves acuáticas) así como del paisaje costero montañoso de Kaikoura hacen de esta población una de las verdaderas sorpresas del viaje. Para aquellos que no disfruten navegando, también se realizan excursiones de avistamiento de ballenas en helicóptero o en avión. Y los aventureros de siempre, pueden practicar buceo, kayak o nadar entre delfines; o bien hacer surf: hay muy buenas olas aunque se ha de tener en cuenta la fuerte corriente y las aguas realmente frías. Salida para Christchurch a 183 kms., la mayor ciudad de la Isla Sur. Según la hora de llegada puede darnos tiempo de hacer un paseo por sus calles: sus edificios de estilo georgiano y victoriano, sus jardines y árboles le dan un aire especial, de ahí su sobrenombre de "Ciudad Jardín". Es considerada la población más inglesa fuera de Inglaterra. La mejor forma de recorrer Christchurch es en tranvía que en 2'5 kms. para en los lugares de más interés: el Arts Centre, Art Gallery, la bella y céntrica Catedral Square y Hagley Park. También podemos coger el teleférico del Mount Cavendish y tomar unas buenas fotos de la ciudad y su región desde las llanuras hasta los Alpes del Sur.

Día 10 - Christchurch - Dunedin (362 kms.) Conduciremos rumbo al "Lejano Sur", atravesando las verdes llanuras de Canterbury, donde se cría el mejor cordero del país. Llegada a Dunedin. Recomendaríamos salir temprano para llegar a tiempo de realizar un crucero de una hora y poder ver los cormoranes a lo largo de la Península de Otago. Una buena manera de disfrutar del entorno natural de esta magnífica costa. Se acaba la excursión visitando la cercana colonia autóctona de pingüinos de ojos amarillos. Como ciudad universitaria que es, Dunedin tiene mucho ambiente y animación, por lo que no es difícil encontrar locales y bares económicos, además de tener óptimos restaurantes con excelentes mariscos. Día 11 - Dunedin - Queenstown (283 kms.) Antes de salir hacia Queenstown, pasearemos por el centro de Dunedin. Conocida como la "Edimburgo del Sur", combina paisajes forestales con edificios de estilo victoriano y neogótico, destacando el Larnach Castle, el único castillo de Nueva Zelanda, situado en un paraje de vértigo. Salida a través de Milton y Alexandra para cruzar la Garganta de Cromwell antes de llegar a Queenstown. Se trata de una ciudad, tranquila y bonita, con tráfico discreto y calles peatonales. En la zona turística que rodea al lago encontraremos cafés y restaurantes que ofrecen bebidas y comidas típicas de Nueva Zelanda. Igual de animada, pero más económica es la zona más alejada del lago, donde hay restaurantes sobre todo de cocina asiática. Día 12 - Día de emociones "fuertes" Queenstown es conocida como la capital mundial de los deportes extremos, por lo que hoy tendremos un amplio abanico de posibilidades a realizar: carreras en lancha o helicóptero por el cañón del río Shotover, safaris en canoa, rafting, parapente, así como deportes acuáticos o esquí, dependiendo de la estación. Para los que prefieran algo más relajante, hay paseos en barcos más tranquilos, así como el inevitable teleférico de casi todas las ciudades neozelandesas...Allá en la cima, se encuentran otras atracciones "fuertes", que permiten ahorrarte el descenso de nuevo en teleférico: el Bungy Jump ("puenting"), el descenso rápido en "luge" (una especie de "car"), o practicar un vuelo doble en parapente, ala delta o cualquier otro "invento" similar. Y para relajarnos al atardecer, tenemos dos sugerencias: una cena en el restaurante en la cima junto al teleférico, o una travesía de 1 hora 30 min. en el vapor TSS Earnslaw por el lago Wakatipu contemplando en la lejanía las luces de Queenstown.

Día 13 - Hacia la Tierra de los Fiordos: Queenstown - Milford - Te Anau (291 kms.) Cogeremos nuestro coche temprano en dirección a Fiordland con el fin de evitar las colas de autocares en nuestra misma dirección. El área donde se encuentra el parque nacional de Fiordland, el segundo en tamaño en el mundo, es una de las más escarpadas y remotas del país. Fiordos de belleza incomparable sobre los que se despeñan numerosas cascadas. Llagos y lagunas naturales de origen glaciar se encuentran dispersos entre las montañas. Ríos caudalosos de aguas cristalinas, valles cubiertos de vegetación nativa y bosques extensos de hayas, caracterizan esta región de la Isla Sur. Tomaremos hacia las 12'00 hrs. el crucero por el magnífico Milford Sound. En el que le sugerimos comer a bordo admirando las vistas desde grandes ventanales panorámicos. El Milford Sound es uno de los 14 fiordos de esa costa. Continuas cascadas de agua congelada nos sorprenderán, al tiempo que delfines seguirán nuestro paseo y las focas nos observarán desde sus atalayas rocosas. Indescriptible. Finalizada la travesía, continuaremos hacia la bonita población de Te Anau, junto al lago del mismo nombre. Este recorrido es calificado por muchos como la carretera más bonita del mundo. Vamos realmente a disfrutar de estos 121 kms. (dos horas buenas de viaje). Día 14 - Montañas y glaciares: de Te Anau a Mount Cook - (429 kms.) Salida hacia Mount Cook rehaciendo el camino hacia Queenstown, vía la garganta de Kawarau y luego por el Lindis Pass, para entrar al Mackenzie Country. Los Alpes de la Isla Sur se extienden por más de 540 km desde Blenheim hasta los fiordos, bien al sur del país. El punto más alto es el Mount Cook, además de más de 20 picos por encima de los tres mil metros. La cordillera sólo puede atravesarse en coche por tres puntos menos elevados, en los cuáles fueron construidas carreteras y vías, conectando un lado al otro de la isla del Sur. Son: Lewis Pass, Arthur Pass y Haast Pass. Sobrevolar la zona es una opción si el tiempo lo permite: volando en avioneta equipada con esquís para poder aterrizar, si el tiempo lo permite, sobre el Glaciar Tasman, el mayor glaciar de montaña del mundo. También cabe el helicóptero. Nos alojaremos en la pequeña villa de Mount Cook. Ofrece pocos atractivos en términos de ciudad, pero el paisaje alrededor es espectacular.

Día 15 - Mount Cook - Christchurch (331 kms.) - Europa Hoy ya nos despedimos de Nueva Zelanda. Emprendemos el camino de vuelta por carretera hasta Christchurch, para dejar nuestro vehículo de alquiler en su aeropuerto. Una vez allí, procederemos a los trámites de facturación y embarque en nuestro vuelo de regreso. Nos espera una noche de viaje muy larga a bordo. Días 16 - Europa - Barcelona Llegada a nuestro destino vía una ciudad europea. Hoteles Los hoteles de este programa se han escogido según la opción más adecuada a la población visitada. Así pues en una gran ciudad como Auckland se ha optado por un muy buen hotel de lujo, situado en el centro y con buenos accesos a las autopistas para facilitar tanto la visita de la ciudad como la salida de la misma. En el resto de alojamientos ha primado la elección de establecimientos con "encanto" y/o situados en parajes de máximo interés natural. Desplazamientos Como ya avanzamos en la introducción de este viaje, Nueva Zelanda es un país para recorrerlo por carretera. Tanto por sus buenas infraestructuras como por su idiosincrasia y sus paisajes asombrosos: es la mejor manera de disfrutarlos. De ahí que se proponga un viaje en coche "a su aire", para que el viajero pueda parar donde le apetezca, hacer fotos, practicar cualquier actividad de la zona, etc. También durante la ruta detallada hemos sugerido en cada punto de qué manera y en qué transporte sería la mejor opción de visita: este país ofrece un gran abanico de posibilidades para todos los gustos!!!.

RESUMEN DE DATOS Destino: Nueva Zelanda Duración del Viaje: Más de doce días Duración del Vuelo: Más de veinte horas Temporada recomendada: Invierno, Otoño, Primavera Clima: De templado a frío con grandes contrastes regionales. Desde el clima subtropical que se presenta en el verano del norte hasta un clima polar, presente en los inviernos de los Alpes del Sur. Las variaciones estacionales no son tan marcadas como en otros países. Los veranos rara vez son demasiado calurosos y, en las regiones costeras, los inviernos son cortos no muy crudos. Las precipitaciones lluviosas se presentan más en invierno que en primavera. La nieve de invierno se limita a las montañas. Hora Local: Doce horas más que en España Visado: pasaporte en vigor si su estancia no supera los 3 meses. Moneda: dólar neozelandés Idiomas: inglés y maorí Gastronomía: Existe un estilo distintivo propio de Nueva Zelanda, hay cordero, cerdo y venado, salmón, langosta, ostras, paua (abalone), mejillón, vieiras, pipi (vívalo típico de Oceanía) and (ambos son moluscos típicos de Nueva Zelanda); kumara (batata), kiwi, tamarillo, feijoa, Hokey Pokey Ice Cream y la afamada pavlova, el considerado como postre nacional. Sanidad: no es obligatoria ninguna vacuna. Hay que llevar el botiquín habitual. Rango de Precio: Entre tres y cinco mil euros Diseño itinerario: Javier Benavides Redactor: Eva Millán Tipo de viaje: paisajístico y adecuado para la práctica de deportes extremos y de aventura.