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Doctrina de la Salvación
Parte 2: La Santificación
Colosenses 2:6-7 Por lo tanto, de la manera que recibieron a Cristo Jesús como Señor, ahora deben seguir sus pasos. 7 Arráiguense profundamente en él y edifiquen toda la vida sobre él. Entonces la fe de ustedes se fortalecerá en la verdad que se les enseñó, y rebosarán de gratitud.
¿Cuándo soy aceptado como hi jo o hi ja de Dios?
¿Cuándo soy aceptado como hi jo o hi ja de Dios? • En el mismo momento en que creíste en Jesús, recibiéndolo en tu vida como Señor y Salvador.
– pero a todos los que creyeron en él y lo recibieron, les dio el derecho de llegar a ser hi jos de Dios. (Juan 1:12)
• El hombre es regenerado por la aceptación personal de Jesucristo como su Señor y Salvador—nada más y nada menos.
¿Qué comienza a occurir en mi vida una vez que soy hi jo o hi ja de Dios?
¿Qué es la santificación? • El significado principal de la santidad es un acercamiento a Dios, pero no podemos pensar en este significado principal como algo que exista aparte del significado secundario que es la separación del pecado. Estos dos son conocidos como “hacernos más como Jesús.” (Juan 17:15) • Moverse hacia Dios, es ir apartándose del pecado. Los dos funcionan en conjunto.
¿Cómo llama la Biblia a esa transformación interna y progresiva?
¿Cómo llama la Biblia a transformación interna y progresiva?
• A ese proceso la Biblia lo llama, santificación. – Hazlos santos con tu verdad; enséñales tu palabra, la cual es verdad. (Juan 17:17)
• ¿Qué es la santificación?
¿Qué es la santificación? • Existen dos aspectos del pecado: la culpa y la depravación.
– El pecado como culpa hace que una persona esté expuesta al castigo. – El pecado como depravación es un poder dentro de la vida de una persona que le obliga a cometer pecado.
¿Qué es la santificación? • Existen dos aspectos de la salvación que están diseñados para tratar los dos aspectos del pecado: la justificación y la santificación. – La justificación resuelve el problema de la culpabilidad. Hace que nuestra posición cambie delante de Dios. – La santificación trata el problema creado por la depravación. Hace que cambie nuestra experiencia con Dios y con el pecado.
¿Qué es la santificación? • La santidad es más que un término moral. También habla de una relación con Dios. Puede que haya una medida de moralidad sin una consagración a Dios, pero no puede existir la santidad sin una consagración a Dios. – El tipo de persona a la que llamamos "una persona buena" que no está consagrada a Dios, no es santa. – La santidad abraza la piedad (vivir reverentemente ante Dios) y la justicia (la conformidad a la norma moral de Dios).
¿Es algo que ocurre de un día para otro?
¿Es algo que ocurre de un día para otro?
• La santificación comienza con la conversión.
–Esto significa que todo el que pertenece a Cristo se ha convertido en una persona nueva. La vida antigua ha pasado; ¡una nueva vida ha comenzado! (2ª Corintios 5:17)
¿Es algo que ocurre de un día para otro?
• La santificación comienza con la conversión (2ª Corintios 5:17). –En aquel mismo momento una persona empieza a experimentar la santidad.
• Una vida cambiada es el fruto esencial de la conversión.
¿Es algo que ocurre de un día para otro?
• La santificación sigue progresando en esta vida por el proceso del crecimiento.
– En cambio, crezcan en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. (2ª Pedro 3:18a). – Cada reto al creyente en cuanto a su consagración o a su separación del pecado, es evidencia del hecho que el Nuevo Testamento trata la santificación como progresiva e involucrada en el crecimiento.
¿Es algo que ocurre de un día para otro?
• La santificación se completará en la resurrección.
– El espíritu será completamente santificado en la muerte. – En la resurrección, se completará la santificación en cuanto al cuerpo. – Después de la muerte, seremos completamente santos. Nunca jamás tendremos algo en nuestra personalidad que no sea compatible ni aceptable a Dios.
¿Significa que tengo una lista de qué hacer y qué no hacer y voy mejorando poco a poco?
¿Significa tener una lista de qué hacer y qué no hacer?
• No, pues es interno.
• No es hacernos religiosos por fuera. • Significa que Dios nos separa poco a poco del poder del pecado, siendo transformados en nuestro corazón y mente a ser como él (Romanos 12:1-2).
¿Significa tener una lista de qué hacer y qué no hacer?
• No. Es ser transformado.
• Así que, hermanos, les ruego por las misericordias de Dios que presenten sus cuerpos como sacrificio vivo, santo y agradable a Dios, que es el culto racional de ustedes. 2 No se conformen a este mundo; más bien, transfórmense por la renovación de su entendimiento de modo que comprueben cuál sea la voluntad de Dios, buena, agradable y perfecta. (Romanos 12:1-2).
La Meta de la Santificación • Es el diseño de la santificación es tal para que cambie nuestros pensamientos, palabras y acciones a la semejanza de Cristo. • La Biblia enseña claramente que hay un cambio básico en la personalidad de la gente redimida en los niveles consciente y subconsciente. (Romanos 8:29, 2 Cor. 3:18)
La Meta de la Santificación • La renovación de la mente se abarca en el cambio interior y básico de la mente. (Romanos 12:2)
• En nuestra relación con Dios, somos dependientes de él para poder ser cambiados.
¿Y esto lo puedo lograr con mis fuerzas?
¿Yo puedo lograrlo por mis fuerzas? • No. No se trata de hacer lo que pueda para ser más limpio, se trata de que cada día me pongo a los pies de Cristo en oración para que yo muera, y él viva en mi – Hay solo un Dios, y él declara justos a judíos y gentiles únicamente por medio de la fe. (Juan 3:30).
¿Y todo esto, lo hago para que Dios me ame?
¿Y todo esto lo hago para ganar el amor de Dios? • No. Lo hago con la total confianza
de que Dios me ama, que Cristo murió y resucitó por mí, y que nada me puede separar de él (Romanos 8:31-35). • Dios no puede amarnos más ni menos de lo que nos ha amado por toda la eternidad. Dios es inmutable y Él no cambia—ni en la naturaleza ni profundidad de su amor para con nosotros.
¿Qué formas me ha dado Dios para obrar mi santificación?
¿Qué formas hay para obrar mi santificación? • Por lo menos, podemos nombrar 6 medios: – El Espíritu Santo – La Oración
– La Palabra de Dios
– La Confesión Personal
– La Conexión con otros hi jos de Dios
– El ministerio personal y familiar
¿Qué formas hay para obrar mi santificación? • El Espíritu Santo – El lado negativo
• Por un lado, el Espíritu Santo obra en nosotros para ayudarnos a vencer al pecado. • La presencia del Espíritu Santo es una relación restrictiva que nos guarda o nos previene para que no hagamos las cosas que haríamos sin su presencia.
¿Qué formas hay para obrar mi santificación?
• El Espíritu Santo – El lado positivo
• Al otro lado, el Espíritu Santo obra en nosotros para producir la virtud que es representativa de los valores cristianos. • Él obra para producir fruto en nosotros. – Pablo dice, “Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza [dominio propio]" (Gálatas 5:22, 23). – En Efesios 5:9, el fruto del Espíritu incluye “toda bondad, justicia y verdad”.
¿Qué formas hay para obrar mi santificación?
• Oración.
– Es la forma en que me comunico con el Padre, y crezco en intimidad con Él.
• Oren en el Espíritu en todo momento y en toda ocasión. Manténganse alerta y sean persistentes en sus oraciones por todos los creyentes en todas partes. (Efesios 6:18)
¿Qué formas hay para obrar mi santificación? • Oración
– Durante tiempos de tentaciones, tenemos una invitación a acercarnos con confianza al trono de gracia. Allí, hallaremos a un Sumo Sacerdote compasivo que puede ser tocado con los sentimientos de nuestras enfermedades y debilidades. Él nos entiende y nos ama. Él puede ayudarnos (Hebreos 4:14-16).
¿Qué formas hay para obrar mi santificación? • La Palabra de Dios
– Lectura diaria de la Palabra, sabiendo que es la forma en que Dios habla a mi corazón (Juan 17:17) y dejando que me transforme desde dentro (Salmo 119:911) – En su oración de Juan 17, Jesús oró: “Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad” (v. 17). Di jo: “y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres” (Juan 8:32).
¿Qué formas hay para obrar mi santificación?
• La Palabra de Dios
– El conocimiento está muy relacionado con la verdad. (2ª Pedro 1:2, 3) – La necesidad de meditarla
• En Filipenses 4:8, “en esto pensad”. • Dice así porque el acto de pensar transforma el comportamiento. Pensar en estas cosas es meditar en ellas. Hay varias referencias en la Biblia que se refieren a la meditación (Josué 1:8; Salmos 1:2; 19:14; 63:6; 103:4; 119:15; 143:5; 1ª Timoteo
4:15).
¿Qué formas hay para obrar mi santificación?
•Confesión personal con Cristo
–Necesitamos una confesión continua de pecados para mantener relación transparente con Él (1 Juan 1:9) –Este es un acto personal con Jesús sólo y no requiere otro intermediario (Romanos 8:27, Romanos 8:34, 2:1, Hebreos 7:25)
•Entonces, ¿quién nos condenará? Nadie, porque Cristo Jesús murió por nosotros y resucitó por nosotros, y está sentado en el lugar de honor, a la derecha de Dios, e intercede por nosotros. (Romanos 8:34)
¿Qué formas hay para obrar mi santificación?
• Conectándome con otros
– Es importante conectarme con otros hi jos de Dios durante la semana para edificarnos juntos en el amor del Señor.
• Así que aliéntense y edifíquense unos a otros, tal como ya lo hacen. (1 Tesalonicenses 5:11)
• En el Nuevo Testamento la responsabilidad de la santificación de los miembros no perteneció únicamente a los líderes, sino a todo el cuerpo. (Hebreos 10:24, 25)
¿Qué formas hay para obrar mi santificación?
• El ministerio personal y familiar – Priorizando en mi vida, en los domingos, el reunirme con el resto de la familia de Cristo para alabar a Dios, edificar a otros, y escuchar la Palabra
• Todos los creyentes se dedicaban a las enseñanzas de los apóstoles, a la comunión fraternal, a participar juntos en las comidas (entre ellas la Cena del Señor), y a la oración. (Hechos 2:42)
¿Qué formas hay para obrar mi santificación? • El ministerio personal y familiar
– La obra de los ministros se diseña a fin de equipar a los santos para la obra del ministerio (Efesios 4:12) y para ayudar a los cristianos a moverse hacia la madurez espiritual (Efesios 4:13, 14). – El ministerio de la predicación está planeado para contribuir a nuestra santificación moral. (2ª Timoteo 4:2)
¿Se puede lograr estar perfectamente apartado del pecado en esta vida?
¿Se puede lograr estar perfectamente apartados del pecado en esta vida?
• No. Siempre habrá pecado con el que luchar con el poder de Dios (Romanos 7:21-25).
– He descubierto el siguiente principio de vida: que cuando quiero hacer lo que es correcto, no puedo evitar hacer lo que está mal. 22 …. hay otro poder dentro de mí que está en guerra con mi mente… ¡Gracias a Dios! La respuesta está en Jesucristo nuestro Señor. …quiero obedecer la ley de Dios, pero a causa de mi naturaleza pecaminosa, soy esclavo del pecado.
¿Se puede lograr estar perfectamente apartados del pecado en esta vida? • Un Cristiano no se caracteriza por practicar el pecado
– 9Los que han nacido en la familia de Dios no se caracterizan por practicar el pecado, porque la vida de Dios está en ellos. Así que no pueden seguir pecando, porque son hi jos de Dios. (1ª Juan 3:9) – El versículo se refiere a “Los que han nacido en la familia de Dios”. Se trata de cada cristiano porque cada cristiano es nacido de Dios. En cuanto a aquel que es nacido de Dios, Juan dice que éste “no practica el pecado y no puede pecar”.
¿Se puede lograr estar perfectamente apartados del pecado en esta vida? • Un Cristiano no se caracteriza por practicar el pecado (1ª Juan 3:9)
– El significado de estas palabras basado en el sentido gramático del tiempo de los verbos griegos es: "El no continúa pecando y no puede continuar pecando". – No quiere decir que nunca peque; pero quiere decir que el pecado no es la costumbre de su vida, y que no puede ser la costumbre de la vida de uno que es nacido de Dios.
¿Cuándo se completará para siempre esta obra de Dios en mí?
¿Cuándo se completará para siempre esta obra de Dios en mí?
• Cuando Jesús regrese por segunda vez.
– Queridos amigos, ya somos hi jos de Dios, pero él todavía no nos ha mostrado lo que seremos cuando Cristo venga; pero sí sabemos que seremos como él, porque lo veremos tal como él es. (1 Juan 3:2). – La santificación se completará en la resurrección. Después de la muerte, seremos completamente santos. Nunca jamás tendremos algo en nuestra personalidad que no sea compatible o aceptable a Dios.
¿Y cómo ocurrirá esto?
¿Y cómo ocurrirá esto? • Los que han muerto habiendo creído en Cristo, resucitarán y serán transformados (1 Tesalonicenses 4:16)
• Los que estemos vivos para su venida, seremos tomados por él y seremos también transformados para siempre y así estaremos para siempre con el Señor. (1 Tesalonicenses 4:17)
¿Y qué pasará con los que murieron sin haber creído en Jesús, cuando Jesús regrese?
¿Y qué pasará con los que murieron sin haber creído en Jesús, cuando Jesús regrese?
• Ellos también resucitarán, y luego del Juicio Final ante Dios, serán echados de la presencia de Dios para siempre (Daniel 12:2; Apocalipsis 20:11-15).
¿Y qué pasará con los que murieron sin haber creído en Jesús, cuando Jesús regrese?
• Aunque la salvación es universalmente disponible, no es universal. No todo el mundo será salvo. …es fiel al testimonio bíblico. Nos debería servir como impulso evangelístico…” — M. Erickson, CHRISTIAN THEOLOGY, tomo 3, p. 1015, 1022