Autorizado Por La Gracia El Evangelio de Verdad-Parte V Romanos 1:7b Introducción La siguiente historia ha sido contada en una variedad de formas y es sin duda, apócrifa. Si usted la ha oído, de seguro no la ha olvidado; si no la ha oído, es tiempo que lo haga. La analogía de la historia con nuestra propia salvación es poderosa e inolvidable. Hubo una vez un hombre muy rico que poseyó una inmensa hacienda y tenía los sirvientes necesarios, desde mayordomos hasta jardineros para mantenerla en una bonita condición. Era viudo con un solo hijo, quien se había ido hacia muchos años para pelear en el ejército del rey. Para consolarse a sí mismo, este viudo rico tenía el retrato de su hijo colgado sobre un manto y a menudo se sentaba cerca a la chimenea en las noches y simplemente recordaba. Cada vez que un visitante venía a su hacienda, él les presentaba el retrato, antes de mostrarles cualquiera de sus más peculiares pinturas hechas por grandes pintores como Rembrandt. Cuando llegó la noticia que su hijo había fallecido en la batalla, esto quebró su corazón. Unos pocos meses después de la terrible noticia de la muerte de su hijo, el anciano murió. El abogado del hombre anunció que ya que no había herederos de la hacienda, la subastaría. Todos los cuadros, la propiedad y muebles serían subastados. El día de la subasta llegó y cientos de personas millonarias y de influencia se reunieron. Estuvieron emocionadas de tener la oportunidad de comprar uno de los más peculiares cuadros del hombre, así como algún mueble hecho a mano, uno de los exquisitos juegos de comedor de plata o una alfombra importada tejida a mano. Se le pidió al público que tomara asiento mientras el subastador estaba de pie en la grada de descanso de una extensa escalera. Al lado del subastador, sobre esa grada había una pintura. Era el simple retrato del hijo del hombre, pintada por un artista desconocido, que una vez había adornado el manto sobre la chimenea. El subastador golpeó su martillo y dijo “empezaremos la subasta con este retrato. “¿Quién hace una oferta por este cuadro?”

Hubo un silencio. Luego una voz al final del salón grito: “Queremos ver los otros cuadros. Ya pase este.” Sin embargo, el subastador persistió “¿alguien hará una oferta por este cuadro?¿quién empezará la oferta en 100 dólares, 200 dólares o más?” Otra voz gritó con enojo “nadie quiere esa cosa, vinimos a comprar cosas de valor. Ahora, continúe”

Sin embargo, el subastador, aún continuó diciendo “el retrato del hijo… el hijo. “¿Quién hará una oferta por el hijo?” La multitud se estaba poniendo más enojada y más inquieta por el momento. Luego, vino una voz desde el mismo fondo del salón “disculpe”. Era la voz del jardinero de la familia, quien había trabajado en la hacienda por casi 25 años. Había entrado sin que nadie lo notara, cuando iba camino a otra habitación y se había detenido para escuchar y observar. Era un hombre de mediana edad, con hijos y había lamentado con su amo cerca al fuego por la muerte del único hijo de su amo. El jardinero no podía imaginarse que el retrato sea menospreciado o peor, descartado. Este había significado tanto para su antiguo patrón y amigo. Entonces, dijo “puedo hacer una oferta por el retrato, pero no tengo nada de dinero para ofrecer.” Una mujer dijo “déjelo que se lo lleve gratis. De todas maneras, ninguno de nosotros lo quiere.” El subastador dijo “ciertamente, si nadie hace una oferta por el retrato, entonces su deseo solo será el pago suficiente.” Un hombre gritó “sólo déselo y continúe con la subasta.” La gente se estaba enojando e impacientando. Habían viajado muchos kilómetros para valiosas y costosas inversiones para sus propias haciendas y colecciones. El subastador golpeó el martillo “vendido a la una, vendido a las dos, vendido al jardinero.” Un hombre sentado cerca del primer escalón de aquella gran escalera gritó al subastador. “ahora, continuemos con la colección.” El subastador puso a un lado su martillo y dijo “lo siento, la subasta terminó.” La gente gritaba con incredulidad “¿terminó?” “¿qué quiere decir?” El subastador dio un paso fuera del pódium, mientras que el abogado de la hacienda dio un paso al frente. Calmó a la enojada multitud y dijo “hemos llevado a cabo esta subasta, sabiendo que había una cláusula secreta en el testamento. Sin embargo, no se nos era permitido revelarla hasta este

momento. Nuestras instrucciones fueron que solamente el cuadro del hijo fuese subastado. Quien comprara ese cuadro heredaría la hacienda entera, incluyendo todos sus muebles. El finado propietario quiso que su hacienda entera quedara en manos de la persona que se interesara lo suficiente en su hijo como para querer su retrato. La cláusula en el testamento decía: “quien quiera que elija al hijo se lleva todo”. En nuestro estudio hasta aquí, de Romanos capítulo 1, he expuesto el evangelio de verdad como lo presenta el apóstol Pablo, el siervo de de Jesucristo. El evangelio, declara Pablo en el verso 1, fue originado e iniciado por Dios. El evangelio de verdad fue también algo que había sido anunciado, siglos antes por los profetas en las escrituras del A.T. el personaje central del evangelio, Pablo continúa diciéndonos en el verso 3, es el Hijo de David, el heredero físico con todo el derecho al trono y también en el verso 4, el Hijo de Dios, quien reveló su poder divino y naturaleza por su resurrección de los muertos. La pasión de Pablo para presentar este evangelio fue revelado en el verso 5 donde él define la fe verdadera en el evangelio como algo que se revelará así mismo en y a través de la vida del verdadero creyente. El verdadero creyente es llamado a pertenecer a Cristo, es el amado de Dios y tiene el lugar de un santo, quien es más, se revela a sí mismo en su vivir como un santo. Estos son los que Dios ha elegido y quienes han elegido al Hijo de Dios como su Señor y Salvador. Desde la perspectiva del cielo Dios nos ha elegido, desde nuestra perspectiva limitada y finita, nosotros le hemos elegido. Y, el que elige al Hijo, se lleva todo. El que quiere al Hijo sobre todo lo demás, aunque no tenga nada que ofrecerle, al final, hereda todo. El mundo diría “mire, continuemos con lo que realmente importa de la vida. Vivamos más, hagamos más, juguemos más, construyamos más, viajemos más, tengamos más… ¿quién quiere al Hijo?” ¿no han oído ellos lo que Marcos nos dice en el capítulo 8 verso 36? Porque ¿qué aprovechará al hombre si ganare todo el mundo, y perdiere su alma?

¡Al final, el hombre lo pierde todo! Sin embargo, hay algunos entre nosotros “…no muchos poderosos, ni muchos nobles…” no muchos bien contactados como dice 1 Cor. Capítulo 1 verso 26, pero muchos los mayordomos y los jardineros de este mundo, que se han deslizado en la presencia del divino subastador y han susurrado “no tengo nada que ofrecer sino sólo mi deseo, tomaré al Hijo.” A aquel, Pablo le anuncia la imponente noticia, parafraseada de Romanos capítulo 1 verso 7 “mire lo que también ha obtenido- gracia y paz de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo.” Esta es otra forma de decir “usted ha heredado todo lo que realmente importa en la vida- gracia y paz.” Echemos una mirada más cercana al versículo 7 A todos los que estáis en Roma, amados de Dios, llamados a ser santos: Gracia y paz a vosotros, de Dios nuestros Padre y del Señor Jesucristo. La construcción griega de la última frase del verso 7 está ordenada de una manera que revela igualdad entre estas dos personas. Podría leerse de esta manera: “Dios, quien es nuestro Padre, y Dios, quien es Jehová, o el Señor, Jesucristo.” Usted tiene a Dios el Padre y a Dios Jehová lado a lado. Son distintos en personalidad, pero igual en esencia. No son dos dioses, sino dos personas de un triuno Dios. Sucede que la oración de apertura de la carta del apóstol Pablo a los Romanos, es de aproximadamente 95 palabras, dependiendo de la traducción y la oración de apertura más larga de cualquier libro de la Biblia. De hecho, usted se comienza a preguntar si Pablo tuvo algo en contra del punto a parte. ¿En algún momento tomo un aliento? En esta oración, Pablo informa a aquellos que han elegido la persona del Hijo de Dios, quien es 100% Dios y 100% hombre y es igual a Dios el Padre y a Dios el Espíritu Santo, que han heredado todo lo de valor eterno; han llegado a ser los poseedores de gracia y paz.

Hoy veremos la primera palabra relacionada a la herencia del verdadero creyente que ha aceptado el evangelio de verdad. Pablo escribe, …Gracia… El Significado de la Gracia Ahora, exactamente ¿Qué es esta gracia?

”para mucha gente” escribió un autor “gracia es una palabra que usan para definir el aspecto de algún dignatario, o la habilidad y movimiento de una bailarina o hasta los movimientos de un mono en su jaula del zoológico”. Ciertamente, la palabra tiene un amplio espectro de significados. En el A.T y en el N.T. el significado fundamentalmente se refiere a “bondad al que no lo merece”. En el A.T. la palabra hebrea es “che” o “chesed” la que a menudo se traduce “bondad o gracia”. En el N.T. la palabra primaria traducida “gracia” es “charis”. Varias definiciones de la palabra gracia de autores incluye: - Dr. Snaith quien definió gracia como bondad mostrada por un superior a un inferior cuando no hay obligación de parte del superior en mostrarla; significa condescender a favor, inclinarse, rebajarse. - John MacArthur la define como la influencia libre y benevolente de un Dios santo operando soberanamente en las vidas de pecadores inmerecedores. - Donald Barnhouse escribió: amor que sube en adoración; amor que se muestra en afecto; amor que se rebaja es gracia. La ilustración más elaborada de “gracia que se rebaja” está probablemente en el libro del A.T. II Samuel. David ha subido el trono, finalmente, ya que Saúl y su hijo Jonatán habían sido muertos en una batalla contra los filisteos. Usted puede recordar que Jonatán era el querido amigo de David. David es ahora rey y establece su reino en Israel. En 2 Samuel capítulo 9, él sorprende a todos preguntando en el verso 1 …  ¿Ha

quedado alguno de la casa de Saúl, a quien haga yo misericordia por amor de Jonatán?

Finalmente, encuentran a un antiguo sirviente de Saúl llamado Siba y David le pregunta en el verso 3 … ¿No ha quedado nadie de la casa de Saúl, a quien haga yo misericordia de Dios? Y Siba respondió al rey: Aún ha quedado un hijo de Jonatán, lisiado de los pies. Ahora, usted recordará que cuando la noticia sobre la muerte de Saúl y Jonatán llegó, la criada del hijo de Jonatán corrió, cargándolo para esconderle. Ella asumió que David haría lo que otros reyes normalmente hacían, que era matar cualquier descendiente del rey anterior que podría amenazar su reino. Sin embargo, cuando la criada salió volando con el pequeño Mefiboset de 5 años, ella accidentalmente lo derribó, lo que le causó una lesión grave en ambos pies. No sabemos si se le cayó bajando una escalera o accidentalmente se le cayó desde un carro a caballo o lo que ocurrió. Tal vez sus piernas fueron ambas quebradas y no se soldaron apropiadamente mientras permanecían escondidos. Tal vez ellos estaban demasiado asustados como para llamar un médico. No sabemos los detalles, solamente sabemos que este joven lisiado ahora vivía en Lo-Debar, lo cual literalmente significa “estéril, tierra desolada”. Continuando en el verso 5 Entonces envió el rey David, y le trajo de la casa de Maquir hijo de Amiel, de Lodebar. El verso 6 nos informa que cuando Mefiboset vino a David, él inmediatamente cayó ante él, esperando que lo peor suceda. Pero en el verso 7 Y le dijo David: No tengas temor, porque yo a la verdad haré contigo misericordia por amor de Jonatán tu padre,… y tú comerás siempre a mi mesa. Qué increíble demostración de gracia. Qué mejor ilustración podríamos tener de lo que nosotros como hijos de Dios hemos recibido de Dios en nombre de Cristo.

Un autor, tan maravillosamente capturó la analogía entre la gracia de David a Mefiboset y la gracia de Dios hacia nosotros que todo lo que quiero hacer es leérselo a usted. Él escribió: - Cuando el desastre golpeó, el miedo apareció y Mefiboset sufrió una caída que le lisió los pies por el resto de su vida. De manera similar, cuando el pecado llegó, la humanidad sufrió una caída, que nos ha dejado inválidos permanentemente. - Por el amor a su amigo Jonatán, David buscó alguien a quien podría extender su gracia. Así también, Dios el Padre, a causa de su amor por su Hijo, busca a aquellos a quienes él podría extender su gracia. - El hombre minusválido era indigente y sin mérito. Todo lo que podía hacer era aceptar el favor del rey. Así también, nosotros, como pecadores no tenemos mérito y estamos sin esperanza. En ninguna manera somos dignos del favor de nuestro rey. Todo lo que podemos hacer es aceptar humildemente su gracia. - El rey tomó al lisiado Mefiboset de una tierra inhóspita y lo sentó a la mesa del banquete real en el palacio. Dios, nuestro Padre, nos ha rescatado de nuestra propia tierra inhóspita del pecado y nos ha sentado en el lugar de nutrición espiritual e intimidad. - La cojera de Mefiboset fue un recordador constante de la gracia de David. Así también, nuestra debilidad nos evita olvidar que donde el pecado abunda, la gracia sobreabunda. - Cuando Mefiboset se sentó a la mesa del rey, fue tratado con el mismo respeto y se le dio los mismos privilegios que a los propios hijos de David. Y cuando nosotros, un día, asistamos a la gran fiesta de las bodas del Cordero, lo mismo será verdad para nosotros también. Nos sentaremos con los profetas y sacerdotes, apóstoles y evangelistas, pastores y misioneros. Cenaremos con todos ellos desde el apóstol Pedro hasta David Livingstone y los 5 misioneros que fueron asesinados por los aucas en la selva del Ecuador. Y estaremos allí con ellos porque el mismo mantel de gracia cubre todos nuestros pies. Recuerde, cuando usted tiene al Hijo, usted hereda todo lo demás. Pablo escribió en Romanos capítulo 1 verso 7 … gracia…

Creo que se estaba refiriendo a todos los beneficios de la bondad de Dios otorgados a ellos como hijos e hijas amadas de Dios.

El Modelo de la Gracia Diferentes tipos de Gracia Ahora, en realidad hay diferentes tipos de gracia que necesitamos distinguir en nuestro estudio. Gracia Común 1.- Los teólogos se refieren a gracia común como la gracia de Dios que afecta a toda la raza humana. La gracia común de Dios contiene la expresión total del pecado e impone obligación moral en la conducta de la gente. La gracia común hace valer un sentido de correcto e incorrecto a través de la conciencia y el gobierno civil. La gracia común permite a los no creyentes tener la habilidad de apreciar y disfrutar la belleza y la bondad. Mateo capítulo 5 verso 45 dice que

… (Dios) hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos. Esa es gracia común. Gracia especial o salvífica 2.- Luego hay, en segundo lugar, gracia especial o salvífica. Esta gracia salva, santifica, y lleva el alma a la gloria. De hecho, el término “gracia” en el N.T. es a menudo usado como un sinónimo del proceso entero de salvación. Pablo estaba tan cautivado por la obra redentora llena de gracia de Cristo que usó la palabra “gracia” para referirse al proceso entero de la salvación. Escribió en Efesios capítulo 2 verso 8 Porque por gracia sois salvos por medio de de la fe…

En 1 Corintios capítulo 1 verso 4 Pablo escribió Gracias doy a mi Dios siempre por vosotros, por la gracia de Dios que os fue dada en Cristo Jesús La gracia salvífica especial es efectiva en la vida del creyente solamente. Es una palabra que encierra en ella la suma y la sustancia de la obra redentora de Cristo. Gracia barata 3.- Finalmente, hay una gracia barata. Este es un término que solía decir un pastor, llamado Dietrich Bonhoeffer, muchos años atrás. Era una pastor luterano en Alemania, que fue ahorcado guardias del servicio secreto en 1945. Sus escritos estuvieron disponibles antes de su muerte. Mucha de las enseñanzas místicas de Bonhoeffer es correctamente rechazada por la iglesia evangélica pero Bonhoeffer hizo una maravillosa contribución por advertir a la iglesia de la tendencia de la secularización y la vida mundanal. Escribió: La gracia barata es la predicación del perdón sin el requerimiento del arrepentimiento, comunión sin confesión, bautismo sin disciplina eclesiástica. La gracia barata es gracia sin discipulado, gracia sin cruz. En tal iglesia el mundo encuentra una cubierta barata para sus pecados; la contrición no es requerida, menos aún cualquier deseo real de ser liberado del pecado. Dejan al cristiano vivir como el resto del mundo, le dejan moldearse bajo los estándares del mundo en cada esfera de la vida, y no aspiran vivir una vida diferente bajo la gracia lejos de sus viejas vidas bajo el pecado. Otro autor añade: La gracia barata es un ticket súper natural de “libérese de la cárcel” – no hay límites adheridos al ticket, un paquete abierto de amnistía, indulgencia, abstención, inmunidad, aprobación, tolerancia y privilegio auto otorgado divorciado de cualquier demanda moral.

Este es un seudo cristianismo sobre el cual Pedro advierte, cuando dijo en 1 Pedro capítulo 2 verso 16 ...pero no como los que tienen la libertad como pretexto para hacer lo malo,… En otras palabras estos hablan de su libertad en Cristo y luego excusan su pecado; hablan de gracia pero la gracia ha llegado a ser la fachada que esconden detrás mientras continúan viviendo en pecado y compromiso. Como veremos en un momento, la gracia fue dada para que usted pudiera perseguir santidad y pureza, no para que pudiera tener seguro contra incendios del infierno y luego vivir como si perteneciera allá. Este tipo de gracia no es gracia salvífica verdadera, es una falsificación barata por la cual muchos, temo, están siendo engañados. Lo que la gracia hace en y a través de la vida del creyente ¿Cómo sabe usted si tiene la gracia genuina? ¿Cómo se ve la gracia bíblica en la vida del creyente? ¿cómo actúa la gracia? ¿cómo vive y brilla la gracia a través de la vida de un verdadero creyente? Déjeme darle 6 maneras: La gracia capacita al creyente para sufrir con contentamiento 1.- La gracia capacita al verdadero creyente para sufrir con contentamiento. Pablo escribió a los creyentes de Corinto en 2 Corintios capítulo 12 versos del 7 al 10 Y para que la grandeza de las revelaciones no me exaltase desmedidamente, me fue dado un aguijón en mi carne, un mensajero de Satanás que me abofetee, para que no me enaltezca sobremanera; respecto a lo cual tres veces he rogado al Señor, que lo quite de mí. Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo. Por lo cual, por amor a Cristo me gozo en las debilidades, en afrentas, en necesidades, en persecuciones, en angustias; porque cuando soy débil, entonces soy fuerte. En otras palabras, el creyente que está permitiendo que la gracia de Dios lo permee y envuelva finalmente se contentará con la soberanía de Dios y su plan para él, aunque esta pueda significar sufrimiento y dificultad.

Es la gracia de Dios que da poder al creyente que sufre para permanecer sumiso y contento ante su Padre celestial. Y si usted ha caminado, como yo lo he hecho muchas veces, por las habitaciones de un hospital, o se encontró con un creyente a quien pensó que necesitaría animar pero en lugar de eso él sin saberlo le animó y por su comportamiento le dio convicción de gracia y confianza en el Señor, entonces usted ha visto la gracia obrando en la vida de un santo sufriente. La gracia capacita al creyente a hablar con claridad 2.- En segundo lugar, la gracia no solamente le da poder al creyente para sufrir con contentamiento sino también le capacita para hablar con claridad. Pablo escribió a los Colosenses en el capítulo 4 versos 5 y 6 Andad sabiamente para con los de afuera, redimiendo el tiempo. Sea vuestra palabra siempre con gracia, sazonada con sal, para que sepáis cómo debéis responder a cada uno. ¿Qué es aquello en la vida del creyente que le capacita para hablar como debería a los de afuera (los no creyentes)? Es la gracia. De la misma manera en que usted pasaría la sal, así usted debería también pasar la gracia, y rociarla en sus labios. Tacto es obra de la gracia. Alguien dijo que tacto es “hacer que alguien se sienta en casa deseando en realidad que esta fuera su casa.” Tacto con gracia y diplomacia verbal espiritual son pruebas de la gracia obrando en su vida. La gracia capacita al creyente para pararse con convicción 3.- En tercer lugar, la gracia capacita al creyente para pararse con convicción. Mire Romanos capítulo 5 versos 1 y 2 Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo; por quien también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, ... Otro versículo que se refiere a nuestra posición doctrinal está en Hebreos capítulo 13 verso 9

No os dejéis llevar de doctrinas diversas y extrañas; porque buena cosa es afirmar el corazón con la gracia… No solamente podemos pararnos firmemente en la doctrina por la gracia sino que Pablo escribió en Tito capítulo 2 versos 11 y 12 Porque la gracia de Dios se ha manifestado para salvación a todos los hombres, enseñándonos que … (note que la gracia de Dios nos enseña) … renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, vivamos en este siglo sobria, justa y piadosamente, Muchos hoy, dirían que la gracia capacita al creyente para vivir en el pecado “! No se preocupe por ello amigo… gracia!” La Biblia en realidad revela que la verdadera gracia en la vida de un creyente genuino capacita a ese hombre o a esa mujer no para vivir en el pecado, sino para vivir sin el pecado. Entonces, la gracia capacita al creyente a pararse con convicción teológica y moral. La gracia capacita al creyente para rendirse con conformidad 4.- En cuarto lugar, la gracia capacita al creyente a rendirse con conformidad. Santiago escribió en el capítulo 4 verso 6 … Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes. Pedro escribió en 1 Pedro capítulo 5 versos 5b y 6 … y todos, sumisos unos a otros, revestíos de humildad; porque: Dios resiste a los soberbios, Y da gracia a los humildes. Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte cuando fuere tiempo. Rendirse a la voluntad y al plan de Dios con contrición y humildad es el resultado de la obra interna de la gracia.

Total rendición es un concepto olvidado en el cristianismo de hoy. Me gusta esta pequeña historia que ilustra el concepto muy bien. Una gallina y un cerdo ambos vivían en la misma granja. Un día el granjero entró donde estaban ambos y le dijo a todos los animales que la familia quería jamón y huevos para el desayuno. ¿hay voluntarios? La gallina codeó al cerdo y le dijo “vamos, seamos voluntarios.” El cerdo declinó diciendo “es fácil para usted sugerir. A usted le piden una pequeña contribución. A mí me piden compromiso total”. La verdad es que el compromiso a Cristo es más que una pequeña contribución; es una rendición sacrificial de todo a su voluntad. La gracia capacita a un creyente a sacrificar con celebración 5.- La gracia también capacita al creyente a sacrificar con celebración. Una de las cosas que un verdadero creyente hace es invertir sus tesoros en la obra de Dios. Pablo en realidad se refiere al acto de dar como un acto de gracia. Y, la prueba que el dar fue hecho en el espíritu de gracia es el hecho que el gozo acompaña el acto. Pablo escribió en 2 Corintios capítulo 9 versos 7 y 8 Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre. Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda gracia, a fin de que, teniendo siempre en todas las cosas todo lo suficiente, abundéis para toda buena obra; Dar es el resultado de la gracia de Dios obrando en la vida. La acción de gracias y el gozo acompañan el acto del verdadero dar. Pablo escribió en el verso 7 “…Dios ama al dador alegre.” La palabra “alegre” es la palabra griega “hilaros” de donde obtenemos nuestra palabra hilarante. Esta literalmente podría leerle “Dios ama al dador hilarante”. Imagínese eso. El tiempo de la ofrenda en la iglesia local debería ser el tiempo más hilarante en el servicio.

Esto significa que en el servicio de la iglesia, cuando se recibe la ofrenda, si usted no está contentísimo en dar algo a Dios, no importa lo que haga, no de. La iglesia estará ahí la próxima semana, no va a quebrar pero tome conciencia que su falta de deseo de dar es la manifestación que la gracia no está obrando en su corazón. Pero si usted desea dar, ese deseo que le mueve a usted a dar algo, en vez de retenerlo para sí mismo, es la obra de la asombrosa, transformadora gracia de Dios. Entonces, la gracia capacita al verdadero creyente a sufrir con contentamiento; a hablar con claridad, a pararse con convicción; a rendirse con conformidad y a sacrificar con celebración. Finalmente, hay un resultado más de la gracia. La gracia capacita al creyente a servir con confianza 6.- La gracia capacita al creyente a servir con confianza. ¿Usted piensa en el apóstol Pablo como alguien que tenía todas las condiciones? ¿Usted cree que él seguramente era una persona que sabía que tenía las destrezas y el trasfondo y la habilidad para servir a Dios? Escúcheme, cuando manifiesta a sus amigos en Corinto cómo se siente realmente. Mire 1 Corintios capítulo 15 versos 8 al 10 y al último de todos, como a un abortivo, me apareció a mí. Porque yo soy el más pequeño de los apóstoles, que no soy digno de ser llamado apóstol, porque perseguí a la iglesia de Dios. Pero por la gracia de Dios soy lo que soy; y su gracia no ha sido en vano para conmigo, antes he trabajado más que todos ellos; pero no yo, sino la gracia de Dios conmigo. ¿Alguna vez sintió que usted no es la persona indicada para desempeñar el papel en el que ahora se encuentra? ¿piensa que no tiene lo que se requiere? ¿adivine qué? No lo tiene. Pero, la gracia de Dios le equipa, lo capacita, le autoriza para cumplir cualquier rol o tarea en la que se encuentra hoy. Entonces, deje de huir de la tarea. La verdad es que, es demasiado grande para usted. Usted no puede criar sus hijos; no puede lograr ese puesto de servicio; usted nunca podrá defender el nombre de Cristo en esa universidad; no sabe cómo responder con claridad; no será capaz de sufrir con la actitud correcta; nunca será capaz de mantener sus convicciones o sacrificar tiempo y dinero para Cristo. Usted no puede hacerlo.

Por la gracia de Dios, sin embargo, no solamente puede, usted lo hará ¿cómo? Como dice Filipenses 4:13 Todo lo puedo en Cristo que me fortalece. Recuerde, usted elige a Jesucristo como su salvador, entonces todo lo demás acerca de la vida que realmente importa le pertenece a usted. Conclusión “Gracia…” Pablo escribió siglos atrás para ellos y para nosotros. Usted ha elegido al Hijo, y cuando usted elige al Hijo, usted recibe gracia. Era una tarde calurosa en Dallas, Texas en Mayo de 1951. Una clase de alumnos que se graduaban estaba escuchando al fundador y presidente del Seminario de Dallas, Lewis Sperry Chafer, entregando su último discurso sobre el tema de la gracia. Él había estado enseñando este tema por casi 50 años. Recuerdo personalmente sentarme a escuchar a hombres quienes se habían sentado a los pies de Chafer. Les oí hablar de la manera en que el Dr. Chafer disertaba sobre el tema de la gracia, para luego trasladarse solo con su silla de ruedas a la cual estaba confinado y dejar tras él una clase de hombres llorando asombrados por la gracia. Bueno, ese día, sacó su pañuelo y secó la transpiración de su rostro. Este sería su último discurso sobre su tema favorito- la gracia de Dios. Cerró sus ojos mientras estos se llenaban de lágrimas y sus últimas palabras para ellos y para el resto del mundo fueron: “caballeros, la mitad de mi vida he estado enseñando sobre la gracia de Dios pero recién estoy empezando a entenderla. Y caballeros, es magnífica… es magnífica.” Mi amigo, cuando usted elige al Hijo, usted hereda la gracia… y cuando usted posee esta magnífica gracia de Dios, usted lo tiene todo.