CONTROL DEL PICUDO EN PASTOS DE CLIMA CÁLIDO NUEVAS INVESTIGACIONES DAN LUZ PARA MEJORAR EL CONTROL DEL PICUDO EN PASTOS DE CLIMA CÁLIDO Por Dra. Diane Silcox Reynolds y Dr. Rick L. Brandenburg

El picudo, conocido como “hunting billbug” (Sphenophorus venatus vestitus Chittenden), es una de las plagas más comunes del césped, que comúnmente se alimenta sobre Bermuda (especies del género Cynodon) y pasto Zoysia (especies del género Zoysia), pero no evita otras variedades de césped de clima cálido o de clima frío. Su hábitat se extiende desde Nueva Jersey, atravesando los estados del Atlántico medio, los estados del golfo y hasta Texas. El picudo produce una sola generación en climas al norte, pero en la zona de transición y climas del sur, puede producir varias generaciones al año, lo que significa que las larvas y adultos están presentes durante toda la etapa de crecimiento. La oviposición tiene lugar en los períodos de actividad de adultos, desde la primavera hasta el otoño, con larvas que se han encontrado hasta 9 pulgadas de profundidad en el suelo.

es

El daño al césped más evidente,

durante los picos de actividad adulta y, regularmente se presentan como áreas circulares o elongadas de pasto café y seco. Estos síntomas pueden ser confundidos con un lento desarrollo del césped después del invierno, incidencia de enfermedades, stress por sequía o falta de nutrientes, o incluso daño por invierno severo.

CONTROL DEL PICUDO. La mayoría de la investigación sobre el control químico del picudo en el césped, se ha hecho sobre picudos del bluegrass, que son biológicamente y ecológicamente muy diferentes del “hunting billbug”. Así que, necesitamos echar un vistazo más a detalle para determinar programas de manejo más adecuados para esta especie, antes de sentar toda nuestra confianza en información sobre el picudo del bluegrass. Sólo se han hecho tres estudios en campo sobre pastos de clima cálido, que se refieran al control del picudo. En todos estos estudios, no se relacionaron resultados concluyentes sobre poblaciones larvales, ni se encontraron diferencias de eficacia en los diversos productos estudiados (cuando se compararon con el control) sobre poblaciones adultas (básicamente debido al poco número de individuos presentes en dichas investigaciones). Las

larvas

del

picudo pueden ser muy difíciles de localizar usando la técnica de muestreo tradicional, usando un cortador de copas, debido a que con frecuencia se las encuentra más profundo que el alcance de la herramienta (observación personal). Además, el hacer muestreos de poblaciones adultas en campo nos puede llevar a conclusiones erróneas porque es imposible determinar si los adultos colectados en las diferentes parcelas de estudio, estuvieron presentes cuando se aplicaron los insecticidas o migraron a las áreas tratadas antes de hacerse los muestreos. Debido a lo anterior, buscamos un método que pudiera determinar de manera precisa la eficacia de los productos, tanto en adultos como en larvas de “hunting billbug”. El diseño de un ensayo que nos ayudara a medir la eficacia de los insecticidas, usando un número predeterminado de individuos que permanecieran en el área tratada en la duración del estudio, sería invaluable.

Con la información de un ensayo de estas características, podríamos emitir recomendaciones de control que resultaran económicas y redujeran efectos negativos en el ambiente, a través de la selección del insecticida y tiempo de aplicación adecuados. El objetivo de esta investigación, fue el desarrollar este ensayo de insecticidas, que nos permitiera determinar la eficacia de los mismos en poblaciones de picudos, tanto adultos como larvas. MATERIALES Y MÉTODOS. Picudos Adultos. Bermuda Tifway en rollo (C. dactylon x C. tranvaalensis), fue colocado en contenedores de 950 ml y se dejaron madurar un mes bajo condiciones de invernadero. El pasto en cada contenedor se regó manualmente tres veces por semana, se podó una vez a la semana a 1.5 pulgadas de altura usando tijeras y se fertilizaron una vez en el mes, con fertilizante 20-20-20 de Miracle Grow (The Scotts Co). Posteriormente, se recolectaron manualmente picudos adultos durante la noche, del campo de golf de la Universidad Estatal de Carolina del Norte, ubicada en Raleigh, N.C., donde las poblaciones de picudo no han sido expuestas a aplicaciones de químicos. Se iniciaron tres estudios paralelos de 2011 a 2012: Julio 8, Agosto 18 y Septiembre 9 del 2011 y, Mayo 3, Mayo 11 y Mayo 26 del 2012. Cinco picudos adultos se colocaron en la superficie de cada contenedor y se les permitió que se enterraran en el suelo. Cada contenedor representó una réplica y cada tratamiento, consistió de 4 réplicas por insecticida aplicado. Los insecticidas que se probaron para el control del picudo adulto fueron: Acelepryn, 50 WDG, Ference, Imidacloprid 2F y Talstar P en el 2011 y Aloft GCSC, Allectus SC, Arena 50 WDG, Imidacloprid 2F, Talstar P y Zylam Liquid en el 2012. Se aplicó una solución acuosa de cada insecticida, usando una aspersora manual. Los contenedores se regaron con 10 ml de agua después del tratamiento y cada 2 días durante la duración del estudio. Después de la aplicación, el pasto se cubrió con malla de tule, para evitar que los insectos escaparan. El contenido de los contenedores fue muestreado 7 días después de la aplicación y los adultos que fueron encontrados se contabilizaron como muertos o vivos. Larva del Picudo. Contenedores de plástico transparente de 32 onzas, se rellenaron con una muestra del tamaño de un cortador de copas, con pasto

centipede (Eremochloa ophiuroides (Munro.) Hack), de un vivero ubicado en Arapahoe, Carolina del Norte, con arena más o menos fina. Se recolectaron manualmente larvas de picudo, de medianas a grandes, del mismo vivero mencionado y posteriormente usadas en los experimentos, para mantener el mismo hospedero y condiciones de campo para la larva. Se condujeron 3 experimentos por separado el 3 de abril, 24 de abril y 1 de mayo del 2012. Cada contenedor representaba una réplica y cada experimento incluyó 5 réplicas por cada insecticida aplicado. Se colocaron 5 larvas en cada contenedor, usando los mismos métodos que se emplearon con los adultos. Los tratamientos también fueron aplicados de la misma forma, que en los experimentos de los adultos, con el mismo régimen de irrigación y métodos de recopilación de datos para análisis de resultados. Se probaron 4 insecticidas para el control de larvas: Acelepryn, Arena 50 WDG, Imidacloprid 2F y Talstar P. RESULTADOS. Picudos adultos. La recuperación de individuos adultos fue mayor del 90%, indicando que esta técnica es adecuada para evaluar la mortandad del adulto del picudo, en experimentos sobre eficacia de insecticidas. En el 2011, Talstar P, Arena 50 WDG y Ference, produjeron una mortandad de más del 80% (Cuadro anexo). Imidacloprid 2F y Acelepryn no fueron tan efectivos. La mortandad en los controles fue muy baja, lo que indica nuevamente que los métodos usados fueron adecuados. Es importante hacer notar que, aunque la aplicación de Imidacloprid no produjo una mortandad mayor del 80%, no hubo una diferencia significativa respecto de Arena 50 WDG y Ference (Ver cuadro anexo). En el 2012, Aloft GCSC y Arena 50 WDG produjeron una mortandad mayor del 80% (Cuadro anexo). Talstar P, Imidacloprid 2F, Allectus SC y Zylam líquido, reportaron mortandades más bajas. No hubo bajas en los controles. Como se mencionó anteriormente, los tratamientos de bifentrina e imidacloprid no reportaron diferencia significativa, respecto de los tratamientos con bifentrina + clothianidin o clothianidin solo, y el tratamiento de bifentrina + imidacloprid no tuvo diferencia significativa con el de clothianidin (Ver cuadro anexo). Combinación de Productos. Para los productos que contienen 2 ingredientes activos, es importante hacer notar las cantidades que se aplicaron

de cada uno. El tratamiento de Aloft GCSC comprendió de 0.1 libras/acre (112.8 gramos por hectárea) de bifentrina y 0.2 libras/acre (224.17 gramos por hectárea) de clothianidin, que es similar a la aplicación individual de estos químicos (Talstar P y Arena 50 WDG). En el tratamiento con Allectus SC se aplicaron 0.1 libras/acre de bifentrina y 0.13 libras/acre (145.7 gramos por hectárea) de imidacloprid, lo que es similar a la aplicación individual de bifentrina (Talstar P), pero es 44% menos respecto de la aplicación individual de imidacloprid (Imidacloprid 2F). La combinación de ingredientes activos no tuvo algún efecto significativo en el control del picudo adulto, comparados con los productos con un solo ingrediente activo.

Larvas de Picudo. La recuperación de larvas fue mayor a un 85%, lo que nos indica que esta técnica también es adecuada para el registro de mortandad del insecto. En los experimentos hechos en el 2012, Imidacloprid 2F tuvo la mayor mortandad, seguido de Arena 50 WDG, Talstar P y Acelepryn (Ver tabla anexa). Sin embargo, la mortandad en general no excedió el 34% - mucho menor que la mortandad encontrada en los experimentos del 2011 hechos con individuos adultos. Intervalos de Valoración. Una explicación viable a esta baja mortandad en los contenedores tratados, pudiera estar relacionado con los “intervalos de valoración”. Productos como el Acelepryn, quizá requieran un período más largo de contacto que los 7 días del experimento, por lo que serían una mejor opción como tratamiento preventivo. En varios ensayos experimentales el

ingrediente activo chlorantraniliprole (Acelepryn) obtuvo de un 79.9% a un 100% de efectividad en el control de larvas de picudo, en pastos de climas fríos, de uno a tres meses después de la aplicación, teniendo un mayor control en las últimas fechas de valoración (5, 6, 7). En estos experimentos, las aplicaciones de insecticida se programaron para coincidir con el comienzo de la actividad de los adultos, para controlar las larvas recién nacidas de los huevecillos puestos por los adultos. El chlorantraniliprole, es poco soluble en agua y debe ser aplicado antes de que las larvas estén presentes, de manera que el químico tenga tiempo suficiente para traslocarse dentro de la planta, de manera que esté presente cuando el insecto se alimente de las plantas tratadas. Sin embargo, cuando en experimentos con estas técnicas se valoraron a los 14 días después de la aplicación, hubo una mortandad significativa en los controles, presumiblemente causada por el calentamiento de los contenedores plásticos. De esta forma, determinamos que éste técnica era ideal para probar productos de acción

rápida, tratamientos de choque con objetivos curativos. Adicionalmente, la mayoría de los superintendentes esperarían tener un control del insecto en un lapso de 7 días, en aplicaciones de rescate y cualquier tratamiento que tome más tiempo, se consideraría inefectivo. Tamaño y Localización de Larvas. Una segunda explicación a la baja mortandad de larvas, pudiera estar relacionada al tamaño y localización de las mismas. Durante el período de evaluación, la mayoría de las larvas se encontraron aproximadamente a 4 pulgadas (10 cm) de profundidad en el suelo. El mayor tamaño de las larvas y su habilidad de desplazarse más profundo dentro del suelo, donde no entran en contacto con el insecticida, parece ser que tiene el potencial de hacer la aplicación de cualquier insecticida, menos efectiva. La posición de las plagas en el perfil del suelo, deberá de ser considerada en la decisión de cuándo aplicar el insecticida. Si las larvas están a una profundidad en el suelo donde el químico no las alcance, entonces la aplicación no será efectiva ambientales y económicas.

y

definitivamente,

tendrá

repercusiones

CONCLUSIONES. Los resultados de este estudio indican que sí es posible hacer un experimento con pasto en contenedores, con un número predeterminado de adultos o larvas de picudo presentes, para evaluar el desempeño de los insecticidas. La alta recuperación de individuos en sus dos etapas (larva y adulto) durante el período de evaluación, fue lo suficientemente adecuada para determinar los porcentajes de mortandad. Debido a que las larvas del picudo suelen ser difíciles de localizar o rastrear en el suelo y también, porque el control de larvas mayores nos es fácil de lograr, las aplicaciones de insecticidas deben coincidir cuando los adultos están más activos. Adicionalmente, se han documentado más altos niveles de control en las poblaciones adultas. Para el control del picudo adulto (hunting billbug), productos con el ingrediente activo bifentrina (Talstar P), clothianidin (Arena 50 WDG), cyantraniliprole (Ference), o una combinación de bifentrina y clothianidin (Aloft GCSC) lograron un control por arriba del 80%. Sin embargo, el control de las larvas del insecto fue bastante más ineficiente, dado que no hubo algún producto que lograra un control mayor del 34%.

Existen dos métodos para rastrear la actividad de los adultos, así como su número. El primero y probablemente el más completo consiste en escudriñar la superficie del césped al atardecer (unos 30 minutos antes de la puesta del sol), con una buena lámpara de mano. Si los picudos están activos, podrán ser detectados fácilmente, particularmente en áreas con alturas bajas de corte (por ejemplo greens y collares). El

segundo

método para seguimiento a

dar la

actividad del picudo adulto, es colocar trampas en el suelo, haciendo un hoyo con una herramienta para cambiar hoyos estándar y colocando un recipiente plástico de las mismas dimensiones. Siempre y cuando el recipiente esté colocado justo debajo de la superficie del suelo, los picudos caerán en la trampa mientras caminan por el césped durante la noche, de manera que serán fácilmente encontrados al checar las trampas al día siguiente. De ser posible, será mucho mejor colocar la mayor cantidad de trampas que se pueda, para ser más precisos al momento de estimar la abundancia del insecto y temporada de actividad. Las trampas deberán checarse con regular frecuencia (al menos una vez por semana), para determinar la actividad de los adultos. Si la presencia de adultos hace necesaria una aplicación de insecticida, elija un producto que contenga bifentrina, clothianidin o cyantraniliprole, y sincronice la aplicación con la mayor actividad de adultos, para lograr un control con el mayor porcentaje de éxito. FINANCIAMIENTO. Esta investigación fue posible gracias a las donaciones del Centro Estatal de Investigación Ambiental, Césped y Educación de Carolina del Norte, USA.

AGRADECIMIENTOS. Los autores agradecen a Terri Billeisen y Alli Duffy por el soporte técnico. La información en este artículo, fue publicada originalmente el 15 de Mayo del 2015, como “Respuesta del picudo (Hunting billbug, Sphenophorus venatus vestitus) a la aplicación de insecticidas, en pastos de climas cálidos y sus implicaciones para el manejo”, de Diane Silcox Reynolds y Rick L. Brandenburg, en el diario online “Crop, Forage and Turfgrass Management. El contenido de este artículo fue usado bajo permiso de la Crop Science Society of America, Inc., ubicada en Madison, Wisconsin, USA.

AUTOR: Diane Silcox Reynolds era una estudiante graduada de la Universidad Estatal de Carolina del Norte, cuando se realizó esta investigación. Actualmente, ella es líder de innovación tecnológica en insecticidas, en Adama, USA. Rick L. Brandenburg es profesor en el departamento de entomología en la Universidad Estatal de Carolina del Norte, ubicada en Raleigh. TRADUCTOR: Ing. Mauricio Aguirre García. GCS, Country Club de Chapala. Chapala, Jalisco, México. PUBLICACIÓN: Golf Course Management. Julio 2015. Volumen 83. Número 7. Título Original: Insecticidal Control of Hunting Billbug in warm season grasses. Págs. 82-87.