La inocencia de los moustros Damaris Alvarez

Capítulo 1 Después de llorar por mucho tiempo me doy cuenta que es hora de ir a ducharme, debo limpiar cualquier evidencia que tenga en la piel, debo limpiar aquella culpa que comienzo a sentir, prometí no hacerlo ni repetirlo en mis pensamientos pero soy tan débil que debí saber de ante mano que algo así pasaría. Me quito la ropa lentamente con mucho cuidado ya que no quiero lastimarme más de lo que estoy, las rodillas me sangran pero no siento más que un calor que adormece mi piel, abro la llave y espero que el agua esté caliente, necesito relajarme. Entro al agua con la esperanza de que esta se lleve mis pensamientos y limpie un poco mi alma, pero no sucede, todas las imágenes inundan poco a poco mi cabeza, me ahogan y no tengo manera de respirar. Una vez que termino me visto con lo primero que encuentro en el closet, ni siquiera me miro en el espejo por qué ya sé que me veo fatal, mi pómulo sigue muy hinchado, puedo verlo si bajo un poco la mirada, busco en el refrigerador un poco de hielo que me ayude con la hinchazón pero solo encuentro un pedazo de carne que está completamente podrido. Umm no funcionará, digo para mis adentros Aún tengo náuseas y no me apetece comer el helado que acostumbro, me siento en el viejo sofá y enciendo el televisor, no cambio el canal, ni siquiera presto atención a lo que sale en la pantalla. Aquellas imágenes regresan a mi mente con la velocidad de una bala y se meten en lo más recóndito y profundo de mi cerebro, comienzo a sentir más culpa, pido perdón a los creadores del universo y sin alguna razón aparente comienzo a llorar, un gran vacío se instala en mi interior, pido a gritos en mi interior que no me encuentren, pido despertar de la pesadilla que he creado, cierro los ojos tan fuerte que me duele, sin poder explicármelo me quedo profundamente dormida. Los sueños que vienen a visitarme son horribles, temo que todo lo que veo se vuelva realidad, temo que vengan por mí, temo que me descubran, no es la primera vez que hago esto pero sí será la última. No volveré a asesinar a nadie más, debo encontrar la manera de escapar de este lugar, he sido tan descuidada que seguro por la mañana ya estarán en mi puerta. Sellarán mi destino aunque tal vez yo lo selle desde hace mucho tiempo

con la primera vez que lo hice. Nunca había sentido el final tan cerca de mí… Está a la vuelta de la esquina, sé que vendrá por mí tan súbitamente como yo he ido por mis victimas… Ahora yo tengo miedo de lo que pueda pasarme…

Capítulo 2 ADVERTENCIA Lectura para mayores de edad El siguiente escrito contiene situaciones y descripciones gráficas que pueden ser hirientes o pueden afectar la sensibilidad de algunas personas, se recomienda  discreción.  

Capítulo 3 Primera parte Bonnie Rodger  I La pesadilla Nunca antes me había asustado la muerte, mi vida ha estado llena de situaciones peligrosas que me han hecho una persona mucho más fuerte, pero ahora todo eso parece un simple pensamiento, mi familia viene a mi mente como una bala, miro  por la ventana mientras enjuago los últimos trastos que quedan en la tarja, miro la espuma que se desvanece lentamente mientras es arrastrada por el agua del grifo, sé que hay alguien detrás de mí y mientras miro por la ventana busco la valentía para poder encarar a quién busca hacerme daño. *** Miro a mi madre asustada, me reflejo en sus ojos grises mientras me lanza una sonrisa tranquilizadora, sé que también se encuentra muy asustada aunque intenta no mostrarlo, mi abuelo platica con un hombre mientras se encuentran agachados detrás de algunos matorrales un poco secos. Hace meses que mi madre y mi abuelo planearon ir a los estados unidos, ahora estamos a punto de lograrlo pero una patrulla fronteriza se encuentra merodeando la zona, el hombre que nos ayudará a cruzar intenta calmar a mi abuelo que luce tan viejo mientras los débiles rayos del sol le dan directamente al rostro. Gira a mirarme fugazmente y puedo notar que suda como todos. -Bonnie, debes estar muy callada en el momento que ellos se vayan debemos correr muy rápido y lo más agachada que puedas…Las palabras de mi madre se graban en lo más profundo de mi mente, no quiero que nos hagan daño ya que estamos demasiado cerca para no conseguirlo. Una vez que llega la noche y nos arropamos caminamos con cuidado por el desierto siguiendo al hombre que se adelanta unos metros, de vez en vez nos pide que nos detengamos y guardamos silencio por unos

momentos. Puedo sentir como algo camina por mi mano y no puedo evitar gritar del susto que me ocasiona la araña, mi madre me agarra fuertemente pero corro sin detenerme. -¡Niña vuelve acá!- la voz del hombre se vuelve un susurro mientras corro despavorida por el desierto Me detengo de golpe al ver que un hombre está de pie frente a mí, trae un arma y me apunta directamente, escucho disparos y puedo ver que mi madre y mi abuelo están muertos junto a mí, el hombre me apunta directamente a la cabeza y está a punto de apretar el gatillo. -Bonnie, Bonnie- mi madre me sacude para despertarme -¿Estás bien?-Solo tuve una pesadilla…- me siento mientras puedo notar que la habitación sigue en oscuridad, mi abuelo duerme en su catre viejo plegable, nos da la espalda y puedo escuchar cómo ronca. -¿De nuevo?-Sí…-¿Es la misma?-Siempre es la misma, estamos en el desierto y una araña me asusta haciéndome correr y los agentes nos encuentran y nos matan-Tranquila, ya sabes que no es real, las cosas fueron diferentes, hace dos años que logramos pasar, debes intentar olvidar…-Está bien…Me froto el rostro mientras miro la vieja cortina que deja entre pasar la luz de la mañana, mi madre y yo debemos alistarnos para ir a trabajar, mi abuelo ya es demasiado viejo y por más que lo intenta no puede conseguir un trabajo, me alisto rápido y vamos a la casa de las personas con las que trabajamos, para nosotras fue sencillo conseguir un trabajo, debo atribuirlo a los encantos de mi madre, una mujer tan guapa que nadie puede resistirse a ella, aquellos ojos grises desvían la mirada de cualquiera que la mira por la calle. Ella y yo somos trabajadoras domésticas en una gran  casa que está en una zona muy elegante de los ángeles, los dueños de la casa son amables y generosos, son dos hermanos que poseen una empresa muy exitosa,

nos dan una buena paga y nos dejan descansar los fines de semana, a pesar de esto casi siempre me siento nerviosa al ver a un policía, temo que nos deporten ya que no contamos con papeles que nos den permiso para estar en el país. Desearía ir a vivir a un lugar mucho más tranquilo en el que no llamemos mucho la atención, así podríamos salir sin mucho miedo a la calle, al regresar mi abuelo ya ha hecho algunas cosas de la casa y ha preparado un poco de comida, comemos mientras escuchamos el viejo radio de mi abuelo, al terminar platicamos un rato y vamos a dormir, sin importar lo mucho que lo intento  aquella pesadilla regresa y me hace despertarme a mitad de la noche. Mi abuelo me mira fijamente con los mismos ojos grises que tiene mi madre, las arrugas de su rostro son mucho más marcadas y forman extrañas sombras en su rostro al estar en la oscuridad. -Pesadillas otra vez, no puedo creer que ahora te hayas despertado…-Perdón abuelo, volveré a dormir…-¿Sabes por qué duermo hasta tarde?Sacudo la cabeza mientras no puedo evitar sentirme apenada. -Te miro dormir todas las noches, es extraño que tengas pesadillas sobre aquel día, sé que fue una experiencia muy abrumadora pero no puedes vivir por ese día, ¿te das cuenta el peso que tiene en ti un día?-No puedo evitar sentirme asustada…-Deberías, dejamos la vida que teníamos para estar aquí, escapamos del desgraciado de tu padre para estar mucho mejor y tú solo te comportas como un conejo asustado que sabe que el coyote se ha ido, todo lo que pasas debe hacerte fuerte, no debes sentir miedo por avanzar y por vivir, todo lo que te ocurre te debe hacer fuerte y muy valiente, la vida es un riesgo pero es abrumadora si recuerdas que estás asustada todo el tiempo, ahora duerme…Mi abuelo me sonríe antes de abrazarme, después se acuesta en su ruidoso catre que no quiere soltar y se queda dormido en seguida. Lo miro dormir mientras las arrugas de su rostro se hacen menos visibles, me recuesto y al cabo de un rato miro el techo que es completamente blanco, me quedo dormida lentamente mientras recuerdo las palabras de mi abuelo, de ahora en adelante debo quitarme el miedo que tome y ser muy fuerte y valiente por mi familia.

Capítulo 4 II Una vida mejor Mi abuelo ha muerto después de que llevamos aquí justo cuatro años, ahora tengo dieciocho años, continuo trabajando en la casa de aquellos hombres, las pesadillas se han marchado pero ahora veo a mi abuelo en mis sueños, siempre me dice palabras envueltas de enseñanzas que me ayudan a sobrellevar su partida. Mi madre sigue hermosa como siempre que me sorprende, a pesar de su aspecto se encuentra muy triste por mi abuelo, se la pasa en cama mirando el catre viejo de mi abuelo en el que solía descansar, me levanto muy temprano para ir a  trabajar mientras mi madre se queda en casa escuchando el radio, al regresar por las noches preparo comida para mi madre y comemos en silencio, poco a poco se va demacrando hasta que ha perdido mucho peso. -Deberías buscar alguna actividad para distraerte…-¿Quieres que vuelva a trabajar?-No, puedo hacerlo sola, solo quiero que enfoques tu mente en otras cosas, no es bueno que pases el día entero mirando la cama de mi abuelo y escuchando el radio…-Ahora resulta que amar a mi padre no es bueno…-No me refiero a eso, pero te hace daño, yo también amo mucho a mi abuelo y lo extraño pero también te amo a ti y no puedo permitir que te pase algo maloMi madre parece tan molesta que se marcha a la habitación y deja de hablarme por varios días, sé que no debo presionarla a sentirse mejor pero debe encontrar la manera de sobrellevar la pérdida de mi abuelo, comienzo a sentirme sola y sé que ver a mi abuelo en mis sueños no es de gran ayuda y menos mientras nos encontramos en un lugar dónde no podemos pedir ayuda. Estamos en las sombras, sufrimos en silencio y somos ignorados, sé que saben de dónde vengo pero no me pedirán que me vaya por qué hago el trabajo que nadie quiere, acepto su ignorancia y mi sufrimiento por unos cuantos dólares al día, para tener una vida mejor, pero sinceramente no veo que esto mejore, acudo a trabajar a diario con unas personas buenas que me han prometido protección pero lo que quiero es que mi madre

este mucho mejor y poder platicar con ella para poder estar en las sombras juntas y protegernos de cualquier peligro que nos aceche. Para relajarme miro el cielo por las noches al regresar a casa, sé que las sombras se disipan al llegar la noche y puedo sentirme un poco más tranquila. -Son hermosas…-¿Disculpe?-No quise asustarla, me llamo Ader-Bonnie…Un hombre muy bien parecido me habla a mí, trae puesto un traje negro parece que es costoso y no comprendo por qué razón me habla a mí. -No tengas miedo, no soy un secuestrador  o un asesino simplemente todas las noches te miro pasar por aquí y bueno hasta ahora me atrevo a hablarte-No tienes pinta de ser mala persona… bueno es que yo…-¿De dónde eres?-Yo…-Sé que no eres de aquí y sé que posiblemente no estás de manera legal pero eso a mí no me interesa en lo más mínimo, con el hecho de ser humanos deberían dejarnos vivir en cualquier lugar-Creo que eso es verdad-Bueno, yo me voy no quiero parecer un hombre acosador-No… yo no quiero caminar sola por las calles…Ader es una persona muy amable, trabaja todos los días en una oficina muy importante, al salir va al pequeño restaurante por el que paso, toma un café y lo acompaña con un pan, me ha dicho que al mirarme le cause mucha curiosidad, no solo por mi físico que es muy parecido al de mi madre, le atrajo mi expresión, una combinación de tristeza, miedo y angustia. -Una mujer tan bella y agradable no puede tener esa combinación en su

vida…Las palabras de Ader me acompañan el resto de la noche y los días siguientes, lo veo todos los días por unos momentos para ir a mi casa, le he hablado de todo lo que siento y de dónde vengo realmente. Le he platicado que mi madre dejo a mi padre por los tratos horribles que recibía, le hablo de mi abuelo y se lamenta por no poder conocerlo, el ya no tiene familia, sus padres han muerto y nunca tuvo hermanos, es un solitario como yo. Tengo tantas ganas de platicarle a mi madre de Ader, pero ahora ha empeorado, no come, no habla y casi no duerme, llora casi todo el tiempo y tengo miedo todas las mañanas antes de marcharme, la abrazo y le digo lo mucho que la amo, temo que al llegar ella ya no esté como mi abuelo. Ader ha conocido a mi madre y dice que es encantadora, ella apenas y lo miro, no estoy enojada, ni siquiera estoy triste, ya han pasado seis meses desde la muerte de mi abuelo y creo que ese día también murió una parte de mi madre que nunca más recuperaré y nunca más volveré a ver. *** -Muchas gracias por aceptar salir conmigo…-Ader, no tienes que agradecer nada, yo tenía ganas de salir contigo y bueno que mejor que aprovechar este día ya que mañana descanso y puedo dormir un poco más tarde-Amo los viernes desde ahora si tú sales conmigo todos los viernes y los sábados y los domingos puedo verte durante el día-¿Qué?-Bueno supongo que le pido a una mexicana guapa, inteligente y muy valiente que sea mi novia-¿De verdad?Ader me toma de la mano y la besa, sus ojos cafés son muy lindos, su cabello rizado y su piel blanca me han hipnotizado. -Sí quiero…Ader me abraza con fuerza. -Debo decirle a tú mamá, quiero pedirle permiso y que vea que realmente

me interesa algo serio con su hermosa hija de ojos clarosLa felicidad puede verse opacada de una manera muy sencilla, de un momento a otro todo cambia, en un momento ves todo de una manera y al cabo de quince segundos el mundo se derrumba, las sonrisas se marchan y amenazan con no volver. Mi madre está apacible en la cama, nunca había visto su piel en esa tonalidad, su cuerpo inmóvil y la frialdad de su mirada me lo dicen todo, Ader me abraza con fuerza al percatarse que ahora estoy en peligro, de alguna manera tenemos que hacer que mi madre en un país al que no pertenece tenga un funeral y una sepultura, pero no podemos seguro tendremos que hacer lo mismo que con mi abuelo, llevarla a una calle solitaria para que alguien la encuentre y puedan quemarla o sepultarla en una fosa común. Tengo miedo, estoy aterrada, estoy sola y no dejaré a mi madre aunque eso signifique que me meteré en muchos problemas. 

Capítulo 5 III Airwood Irnos fue mucho más difícil de lo que pensé, me recosté por un momento a lado de mi madre y la abrace mientras lloraba en silencio, Ader se sentó en el viejo catre de mi abuelo y nos miró en silencio por mucho tiempo. -No te dejaré sola Bonnie, tú eres mi novia y lo que dije es en serio, quiero estar contigo y no te dejaré, no lo haré…Me aferro al cuerpo de mi madre hasta que Ader tiene que separarme de ella, tomo una de las viejas maletas de mi madre y guardo las pocas cosas que tengo, miro la habitación en silencio mientras que Ader cubre el cuerpo de mi madre y cierra sus ojos, antes de marcharme tomo la cadena de mi madre que contiene la imagen religiosa de un santo, el viejo radio de mi abuelo parece tan frágil que lo tomo con cuidado. Apago las luces de todas las habitaciones y regresando a las sombras me marcho del lugar con Ader, tal vez no es la mejor decisión pero no puedo quedarme sola y menos ahora que mi madre también ha muerto, vamos a la casa de Ader que luce silenciosa. -Tal vez deba irme…Abrazo asustada la radio de mi abuelo mientras algunas lágrimas ruedan por mis mejillas, Ader puede notarlo y se acerca para abrazarme. -Bonnie, no tengas miedo…-Es que, en mi país cuando el novio se lleva a la mujer ella debe…-No digas eso Bonnie, tú eres una mujer muy bella que merece respeto de todas las formas que se puedan, yo dormiré en el sillón y tú puedes dormir en la cama, yo de verdad estoy enamorado de ti…-Duerme conmigo y abrázame por favor, tengo mucho miedo y no quiero que las pesadillas vengan a buscarme-Bonnie…-Por favorAder accede y las noches siguientes duerme conmigo sin causarme ningún tipo de daño, acudo a trabajar como siempre y Ader parece contento

conmigo, dice que ya no tiene que estar solo en aquella casa fría. -Estamos destinados a hacernos compañía, Bonnie cásate conmigoMe comprometo con Ader pero temo no poder casarme con él, aún sigo siendo invisible para este país y yo no existo en ninguno de sus registros. Decidimos que lo mejor que podemos hacer es ir a vivir a otro lugar, un lugar en el que yo no corra peligro por estar de manera ilegal: Airwood, un lugar que Ader visito siendo un niño, a penas y había diez casas en ese lugar, es un lugar muy pequeño con personas amables. -¿No me llevarán a la policía?-No, podemos comprar un pequeño terreno y construir una casa con nuestras propias manos, luego iremos con el sheriff o el encargado de los registros y le diremos que perdiste todos tus documentos-¿Crees que funcione?-Tiene que funcionar y si no podemos dar dinero a quién sea para que nos ayudeSolo tuvimos que ahorrar dinero por unos meses, Ader puso en renta la casa de sus padres y  a los nuevos propietarios les pidió que mandaran el dinero por correo cada vez que tocará la paga. Al llegar a Airwood  ya no era tan pequeño como me dijo Ader, ya había pequeños fraccionamientos con pequeñas casas acogedoras a muy buen precio, casi nadie quería ir a vivir a un pueblo tan pequeño, era perfecto ya que nadie me miraba como en la ciudad, podía salir de las sombras sin miedo. Acudimos al registro civil y el juez nos ayudó con todo lo de mis documentos por una paga adicional, ya no eran necesarios mis documentos de soltera, ahora era. Bonnie Rodger Tendría documentos con mi nacionalidad de estados unidos, al parecer y a lo que nos dijo el juez nadie le prestaba mucha atención al pequeño pueblo y todos los trámites eran aprobados. -Ya sabe, la gente de los pueblos no se registran hasta pasados muchos años, algunas veces ni lo hacen, no necesitamos esas cosas, vivimos en un lugar hermoso y tranquilo donde las personas confían, usted parece ser

una mujer muy buena-GraciasComo agradecimiento Ader tuvo que trabajar en ese lugar, el juez no podía arriesgarse a que divulgará que hacía trámites a cualquiera que lo pidiera, un gran alivio ya que no tuvo que buscar trabajo por el pueblo, nosotros éramos nuevos y el juez fue de gran ayuda. Los sobres llegaron puntuales cada mes y la vida en Airwood fue mucho más tranquila, solo faltaba algo que no tardó en llegar, estar con Ader era agradable en todas las formas y un bebé fue la mejor noticia que pudo tener. Formar una familia era lo que siempre había soñado, temía estar solo para siempre y no dejar una huella en el mundo. -El destino me puso a la mujer más hermosa del mundo, tengo un empleo, tengo un hogar y ahora tendré un hijo contigo…El embarazo fue muy tranquilo y cuando nació Ann la luz en nuestra vida cobro mucha más fuerza, de no ser por las pesadillas que siempre venían por las noches.   *** Mi madre me mira fijamente, la vida se ha marchado de sus ojos, son opacos y me miran fijamente, al cabo de unos momentos parpadea y me siento aterrada, mi abuelo entra por la habitación y cuando habla salen miles de insectos de su boca, todos suben por mis piernas y aunque los sacudo con fuerza no puedo quitármelos de encima. -Tranquila Bonnie…Ader se levanta de la cama y me trae un vaso con agua. -Odio las pesadillas-¿La misma?-No, son diferentes en unas mi madre solo parpadea mientras la miro en aquella habitación,  en ocasiones aparece mi abuelo y los bichos me atacan, otras me dice el odio que me tiene por marcharme de ahí solo con mis cosas, el viejo radio de mi abuelo y su cadena-

-No podías hacer más…-Lo sé-Iré a ver a AnnVivir en Airwood desde hace años está bien, ser la esposa de Ader Rodger también es perfecto, tengo la hija más hermosa que es la viva imagen de mi madre y mi abuelo. Tiene los ojos grises, grandes y unas pestañas rizadas que tocan sus cejas, la piel blanca como su padre y el cabello rizado, las facciones son mías, podría reconocerla en cualquier lugar, sin duda ella es mi hija, pero verla me hace recordarlos y ese recuerdo es doloroso. Todavía puedo recordar como aquella noche tuve que tomar mis cosas para irme con Ader, no podíamos hacer nada ya que éramos invisibles, creo que todo sucede por una razón, sé que por algo Ader se cruzó en mi camino y gracias a él ahora la vida es mucho mejor, dejo su empleo y sin miedo al cambio nos mudamos a Airwood. -¿Ann está bien?-Está perfecta, una niña de cinco años que abraza su oso de peluche sin darse cuenta que su madre está asustada-Nunca dormí así, es tan hermosa agradezco por ti y por esta vida-Qué romántica señora Rodger, podría abrazarte muy fuerte así se irán las pesadillas-Sí, por favor…-

Capítulo 6 IV Sueños Mi vida ha sido un sueño eterno en el que las personas que están se marchan cuando menos lo espero, mi abuelo, mi madre y Ader son esas personas que se han marchado de mi vida. Cuando Ann era solo una niña y las únicas preocupaciones que tenía era la perfección de sus dibujos, acudió un policía a la puerta para avisarme que su padre Ader estaba muerto. Fue tan difícil decirle a Ann lo que sucedió, decirle que su padre fue asesinado por una mala persona con malas intenciones cuando volvía a casa, verla llorar noche tras noche y tener que abrazarla para ahuyentar las pesadillas a pesar de tener las mías, al menos compartíamos una y con eso me basto para salir todos los días a trabajar para darle una mejor vida a Ann, ya que la casa de los padres de Ader la perdimos y su trabajo no iba nada bien, quedamos solas en la completa pobreza sin nadie que pudiera ayudarnos, aun así siempre recordaba las enseñanzas de mi abuelo y sé que él me animaría de todas las formas posibles para salir adelante. Mirar a tanta gente venir a vivir a Airwood hasta que se ha convertido en una ciudad que no deja de crecer, Ann tan estudiosa y sedienta de saber de todo, pero siempre molesta por el asesinato de su padre. Verla crecer sin un padre, con una creciente molestia y ganas de justicia por aquel que nos arrebató a su padre aquella noche. -Te juro que si tuviera a ese hombre frente a mí lo haría pagar por lo que hizoLa molestia de Ann creció mucho más al conocer a Ernest, un carnicero que nos permitió ir a vivir a su hogar cerca del centro de Airwood, un nivel económico mucho mejor que el que yo podía darle a Ann, aunque las cosas cambiarán al ir mal el negocio. Fue tan duro ver a Fatty tan triste y deprimido por un buen tiempo y al final término por marcharse como todas las personas de mi vida, desapareciendo sin dejar un solo rastro más que deudas y  peleas que tengo con Ann. -Por favor Ann, sigue estudiando falta poco para que salgas de la high

school…-No lo haré, no quiero ver como trabajas doce horas al día para mantenernos, ya tengo la edad suficiente para trabajar-Solo tienes diecisiete años, puedes tener un futuro mejor-Puedo ayudar a Madrina en su tienda-Por favor, Madrina está de acuerdo conmigo-Todo por el estúpido gordo-No hables así de Fatty el busco darnos lo mejor…-Claro, sentado frente al televisor tomando cerveza, han pasado tantas cosas que no puedes verlas frente a tiSiempre que discutimos Ann se va a casa de Madrina, una mujer de la tercera edad que me ha ayudado tanto con la educación de Ann. -Cristin, nos has ayudado tanto desde que llegamos aquí…sin duda que eres una Madrina-Oh Bonnie, ustedes son tan lindas conmigo que darme ese rango en tu familia me llena de orgulloEs tan triste que ahora los días de descanso sean solo para pelear y discutir, lo mejor que puedo hacer es arreglar la casa que luce fatal. Nunca antes me había asustado la muerte, mi vida ha estado llena de situaciones peligrosas que me han hecho una persona mucho más fuerte, pero ahora todo eso parece un simple pensamiento, mi familia viene a mi mente como una bala, miro  por la ventana mientras enjuago los últimos trastos que quedan en la tarja, miro la espuma que se desvanece lentamente mientras es arrastrada por el agua del grifo, sé que hay alguien detrás de mí y mientras miro por la ventana busco la valentía para poder encarar a quién busca hacerme daño. El sueño eterno al fin está por terminar, mi abuelo, mi madre y Ader me esperan, puedo verlos en la habitación de mi memoria esperando mi regreso, giro para mirar a la persona que causará mi muerte, deseo que venga por mí, ya quiero reunirme con aquellos que tanto amo. Deseo no haber peleado con Ann, me gustaría verla antes de morir, tener alguna manera de llamarla para que me ayude a salir de este problema, el asesino de Fatty está frente a mí y pesar de estar congelada ante su

imagen no titubeo ni un poco. -Sabía que también vendrías por mí, la amante de Fatty, la mujer que heredo todas sus deudas y sus problemas, por qué sé que no se fue, sé que tú lo mataste y a pesar de todo no quise decir nada por qué pensé que todo con él desapareceríaLimpió las últimas lágrimas que derraman mis ojos y los llamo a todos para que vengan a buscarme no quiero perderme en una nueva pesadilla de la cual no pueda despertar. 

Capítulo 7 Lam Wanderley I Recuerdos Todavía recuerdo muy bien el día que supe lo que quería hacer por el resto de mi vida, tenía apenas nueve años y jugaba en el jardín con mi mejor amigo, unos chicos con unas pistolas de juguete que corren por todo el jardín mientras hacen los sonidos de las armas, algo que parece tan inocente pero que en algunas ocasiones tiene repercusiones en la vida tal como lo tuvo en la mía. Nací en Colombia en el núcleo de una familia excelente, mi madre una ama de casa dedicada y mi padre un abogado con buena reputación, mis abuelos con una larga vida trabajando para dar lo mejor a sus hijos, al final dio resultado y tres de mis abuelos pudieron descansar en paz al cumplir su misión en el mundo. Fue algo muy triste y lamentable pero mi madre me lo explico todo desde el primer momento, la muerte es algo que ocurre y puede llegar en cualquier momento, a cualquier persona en cualquier lugar. Por esa razón uno debe estar en paz con todas las personas que lo rodean y dejar todo en orden en la tierra. Mi padre jugando conmigo en todo momento enseñándome y explicándome todo lo que captaba mi atención, sin duda un niño no puede pedir nada más, el amor y la calidez de una familia lo es todo. A pesar de todo, los problemas surgieron justo cuando yo tenía ocho años de edad, uno de los casos en los que trabajaba mi padre era difícil, involucraba droga y algunos asesinatos. Al escuchar a mis padres hablar del asunto no espere para poder preguntar que era un asesinato. -Un asesinato Lam, es cuando una persona que no tiene paz en su interior toma la vida de otra persona…- mi padre siempre hablaba con términos que podía entender -¿Por qué las personas no tienen paz en su interior?-Por qué dejan que todo lo que digan y hagan los demás les afecte- mi

madre siempre sonriendo con calidez -Además no se conocen, conocer cada detalle de tu alma te hace tener paz, si conoces tu alma no importará lo que los demás te digan para perder la paz…-Comprendo, asesinan por falta de paz…Esa falta de paz fue lo que hizo que mis padres junto con mi abuela decidieran salir de Colombia, tanto mi padre como nosotros corríamos peligro por unas personas inconformes ante el veredicto del juez, días después apareció muerto en un lote baldío con señales claras de tortura. Como nuestra paz se vio en peligro tomamos nuestras cosas y nos marchamos a E.U. a un pequeño pueblo donde era muy seguro no nos buscarían: Airwood. Gente amable, gente buena, era el lugar perfecto para comenzar de nuevo los cuatro juntos, instalarse fue sencillo y más al encontrar una casa linda en un pequeño fraccionamiento, casi no había flujo de autos en el lugar y frente a nuestra casa una familia muy agradable con un hijo de mi edad. Mi abuela salía casi todos los días a leer a un pequeño parque cerca de la casa, tomaba el sol y observaba a las personas que paseaban por ahí, le fue sencillo hacer amistades y vivir su vejez con plenitud en paz con todo lo vivido. Incluso incluirme en la escuela fue sencillo, un chico de mi apariencia fue muy bien aceptado, mi madre dice que la belleza de mi interior no solo se veía a simple vista. -Mentiras mujer, nuestro hijo es guapo y es todo un rompecorazones, solo mira esos ojos cafés claro, sin duda al crecer podrá comerse el mundo si quiere…- mi padre leyendo el periódico por las noches mientras mi madre prepara de comer es la imagen que siempre tengo en la memoria. Al cabo de un año las cosas estaban completamente normales, mi padre trabajando como abogado aunque los casos siempre fueron menores y casi siempre por turistas que no sabían cómo iba la dinámica del pueblo. Mi madre arreglando cada rincón de la casa para sentirnos cómodos aunque no debía hacerlo, estar juntos era más que suficiente para sentirnos en nuestro hogar. Aquel año fue de los mejores en mi vida, la pasaba jugando y paseando con mi amigo, comiendo golosinas a escondidas de nuestras madres por miedo a la reprenda, andando en bicicleta hasta el anochecer y mirar las

estrellas en alguna de nuestras azoteas. Pero aún en un lugar que parece tener la perfección existe un momento en el que las cosas se empañan y cambian, es increíble que aún a las personas que llegan de manera legal a otro país llenas de paz, les ocurran las cosas más lamentables. El día era caluroso y mi madre apenas preparaba la comida para que al llegar mi padre pudiéramos comer juntos, el sudor rodaba por nuestros rostros mientras que un leve aire nos golpeaba para detenernos. -Lam, vamos a mi casa-Pero vamos a comer con mis padres y mi abuela-La comida aún no está lista y tengo mucho calor, podemos jugar un rato en mi casa y regresar para comerMi madre se encontraba en la cocina tarareando una canción, siempre lo hizo, decía que le ayudaba a concentrarse mientras preparaba los alimentos, una mujer tan atractiva que siempre hacía a todos girar la mirada, mi padre nunca se molestó, sabía que tenía a la mujer más guapa de todo el pueblo. Llenos de vida y amor. -Bien Lam, deben regresar en una hora para comerMi madre me da un abrazo y me sonríe mientras me mira salir de la cocina, si de alguna manera hubiera sabido lo que pasaría no me hubiera ido de la casa, tal vez de alguna al verme se habrían detenido. -Mira Lam, este es el nuevo comic que recién ha llegado a Airwood, ¿puedes creer que algunas personas saben que este lugar existe?-¿Por qué no lo sabrían? -¿Acaso no te das cuenta?, vivimos en un pueblucho o al menos eso dice mi madre-A mí me gusta-Lo sé, mi padre dice que es un lugar tranquilo para vivir-Pues claro que lo es podemos salir a jugar hasta tarde, podemos regresar solos de la escuela y no hay tanto ruido como en la ciudad-

-¿Cómo es Colombia?-Bueno no es la gran cosa a mí me gusta más aquí, allá no visitaba lugares como los de aquí, solo veía ciudad por todos lados,  recuerdo ciudad y ruido-Entonces agradezco vivir en este puebluchoReímos a la par mientras tomamos unas monedas para ir por unas golosinas, las calles solían lucir tranquilas la mayor parte del tiempo, si existía la maldad nunca la habíamos visto cerca, las golosinas eran nuestra mayor preocupación. Un día tranquilo como todos en el que el camino a la dulcería estaba lleno de pláticas sobre comics o sobre lo desagradable que suelen ser las tareas, el hombre de la tienda nos atendió como siempre y al regresar pudimos verlos.  

Capítulo 8 II Falta de paz  Puedo recordar a aquellos sujetos que caminaban frente a nosotros unos cuantos metros mientras nosotros caminábamos comiendo golosinas. No había manera de saber que algo malo pasaría, no teníamos los conocimientos necesarios sobre maldad para evitar algo. -Mira Lam, ellos van para tu casa…El sol comenzaba a perder fuerza tal como todos los días a esa hora, mi padre ya había llegado, podía ver su auto estacionado en la casa, aquellos sujetos avanzaron rápido y tocaron la puerta de mi casa. -¿Quiénes son?-No lo sé, nunca los había visto- nos sentamos en el jardín de enfrente para comer más golosinas, mi padre abre la puerta y aquellos sujetos entran, puedo notar que mi padre me mira y no tiene intenciones de llamarme, me mira fugazmente mientras cierra la puerta, al cabo de unos momentos podemos escuchar disparos que vienen de la casa. Me pongo de pie y un escalofrío recorre mi cuerpo, no puedo moverme y aquellos sujetos salen corriendo, se llevan el auto y una vez que se van camino lentamente a mi casa, puedo escuchar cada latido de mi corazón, siento como se mueve la sangre en mi interior, tengo un leve temblor que puedo notar una vez que intento abrir la puerta que está entre abierta. El cuerpo de mi padre está en medio del pasillo mirándome fijamente, un poco de sangre sale de su boca. -Pa…- me acerco pero no responde, recuerdo entonces a mi madre y corro a la cocina pero no la encuentro, está justo a un lado de la mesa, puedo ver los trastos que están acomodados en la mesa. -Lam…- la voz de mi madre apenas es audible, me acerco rápidamente y la tomo de la mano -Ma… vas a ponerte muy bien-Lam… por favor cuídate mucho y prométeme que serás bueno….-

-No ma, por favorMe lanza una última sonrisa antes de morir, abrazo a mi madre por mucho tiempo hasta que los policías me obligan a dejarla, mi abuela llega y se queda conmigo hasta que el cansancio me vence. Nunca creímos que algo malo pasaría en este lugar, se supone que todo sería mucho más fácil y mucho más tranquilo, estábamos lejos de las personas faltas de paz, pero parece que no fue suficiente, las personas sin paz están en todas partes y de alguna manera las personas que tienen la suficiente atraen a los que no tienen ni una pizca en su interior. 

Capítulo 9 III Vocación Nunca me he sentido con un lugar en el mundo, puedo mirarlos y me causan nauseas, lastiman su existencia, tengo una ola creciente en el pecho que me dice lo que debo hacer, por ahora soy un mar tranquilo pero siento que pronto no podré controlarme. Me miran y no saben lo que pienso, me gustaría que pudieran saberlo y de alguna manera controlarlos, miro la temblorosa cuchara que sostiene mi mano y la aprieto tan duro que me duele…. Los miro y lo saben… Lo que ignoran es lo que quiero hacerles… *** -¡Lam!Mi abuela me sacude levemente mientras miramos las tumbas de mis padres. -Perdón recordaba lo sucedido…-Oh Lam, ya han pasado muchos años ahora estás por acabar la high school y estoy segura que están muy orgullosos de ti-Lo sé, lo estarían pero lo estarán mucho más cuando atrape a esos idiotas-Lam por favor, sabes que el sentimiento de venganza no es bueno-No es venganza, es justicia, recuerdo bien sus rostros, tengo grabado en mi memoria cada detalle y los voy a encontrar-No dejes que terminen con tu paz Lam…Nunca atraparon a los responsables del asesinato de mis padres pero los recuerdo muy bien y sé que me cueste lo que me cueste podré encontrarlos y darles el castigo que merecen, ningún niño debe ver morir a sus padres y ninguna madre debe ver morir a su hija a manos de

delincuentes. Mataron a mis padres por no tener el dinero suficiente, por no tener lo que ellos esperaban, todo por ser solo una familia que esperaba la hora de comida, mis padres esperaban verme esa tarde con mi mejor amigo para comer juntos, el único recuerdo que tengo es la mirada de miedo de mi padre, las últimas palabras de mi madre y a mi abuela destrozada por la noticia. Nos mudamos a otra parte de Airwood, en la que la única meta era comenzar de nuevo, el dinero de todo lo que vendimos nos ayudó a comprar todo, una nueva casa no muy grande solo para los dos y los materiales necesarios para mi abuela. Trabajando de costurera hasta altas horas de noche, desde ese momento supe que mi misión era atraparlos no solo por lo que le hicieron a mis padres, sino por lo que nos hacían a mi abuela y a mí, no era posible que nadie fuera capaz de ayudarnos ante la desgracia que vino a visitarnos. Me propuse ser el mejor en todo lo que pudiera, justo un año antes de terminar a high school era el mejor de la clase y si ponía empeño sería el mejor de la generación, muchos de los alumnos no se empeñaban, vivían en Airwood, muchos ya sabían lo que harían al salir, estar en los negocios de sus padres o trabajar un tiempo para juntar el dinero suficiente, irse de Airwood aunque es un lugar que no deja de crecer. Mis planes son completamente diferentes, no planeo irme de Airwood quiero quedarme y ayudar a mi abuela después de todo lo que ha hecho por mí, deseo que el tiempo pase a gran velocidad para que ella al fin deje de trabajar, no me gusta verla trabajar hasta tarde o verla deshacerse de sus cosas para tener un poco más de dinero. -Oh Lam, las cosas materiales no tienen importancia para mí, lo que más importa es que podamos salir adelante, todo los recuerdos que tengo con aquellas cosas siguen dentro de mi memoria, tenerlas o no, no hace gran diferencia-Sé que las cosas materiales para ti no tienen importancia, para mí tampoco pero quiero que tengas un poco más de tranquilidad, me has cuidado y ayudado tanto tiempo que quiero corresponderte de alguna manera…Abrazo a mi abuela que sonríe como siempre, no dejare que nada le pase, no dejare que la lastimen más, quiero protegerla y que viva tranquila llena de paz.

Esa paz que nos quitaron hace un tiempo… -Haré que tengas paz de nuevo…-No puedo tenerla si piensas en venganzaMiro la compasión de sus ojos, me encantaría tener un poco pero debo atrapar a esos tipos de alguna manera. -Sé cómo puedes hacerlo….-¿Atraparlos?-Lam, toma la justicia y hazla tu aliada, con las calificaciones que tienes estoy segura que podrás prepararte para atraparlos como dice la ley…-¿Policía?-El mejor policía de Airwood…-Pensaba en algo más…-No por favor Lam, no vayas a decir que pensabas cazar delincuentes y matarlos por tu propia mano-   -Es buena idea…- mi abuela me da un golpe en el brazo pero no me causa daño -Ten a la ley de tu lado, tendrán el castigo que merecen, morir sería sencillo para ellos, terminarías con su infelicidad, déjalos vivir en una celda por el resto de su vida, que la paz que les falta los torture todos los días de su vida-Lo haré…-Ese es mi muchachito, tus padres estarían muy orgullosos de ti, un hombre de justicia en la familia-El segundo, el primero fue mi padre…-El segundo y el mejor, atraparas a todos los maleantes y asesinos de este lugar…-Atrapare a esos idiotas…-No es lo importante Lam… si no los atrapas podrás al menos dar justicia a la familia, saber que un delincuente menos nos acecha es bueno, nadie

sufrirá su dolor….Las palabras de mi abuela se meten en lo más profundo de mi mente, de ahora en adelante buscaré justicia para los inocentes, castigo para los culpables y paz para mi alma…