FEPPA COLEGIO “SAN IGNACIO” “Un fuego que enciende otros fuegos”

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Dr. Bismarck Pinto  Las relaciones humanas y el cambio desde la perspectiva de  Virginia Satir 

LAS RELACIONES HUMANAS Y EL CAMBIO DESDE LA PERSPECTIVA DE VIRIGINIA SATIR Por: Dr. Bismarck Pinto Tapia Doctor en Psicología Social por la Universidad de Granada Magíster en Psicología de la Salud por la Universidad Católica Boliviana 1. Viriginia Satir Virginia Satir (1916 – 1988) es considerada una de las pioneras en terapia familiar1, además de ser la primera mujer en introducirse en el movimiento de la terapia familiar, fue la primera profesional que no estaba dentro del gremio de la psicología ni de la psiquiatría, puesto que tenía la profesión de asistente social; inicia su trabajo con familias en 1951. Ingresa al Mental Research Institute (MRI) de Bateson y Watzlawick en 1956, para contribuir en las investigaciones sobre la comunicación humana. En los años sesenta viaja a Esalen para compartir un taller en Terapia Guestáltica con Fritz Perls2. Publica en 1964 “Terapia familiar conjunta”3, donde expondrá sus ideas más importantes sobre la terapia familiar. Satir no ha influido solamente en el campo clínico de la psicología, hoy en día se llevan a cabo sus talleres en la escuela y en organizaciones laborales4.Se la considera dentro de la escuela sistémica con una visión humanista comunicacional de los pronlemas humanos. 2. Las relaciones humanas Para Satir, las relaciones humanas se establecen en un marco de comunicación, la forma de comunicarnos es el resultado de nuestra capacidad de contacto, dice: “Al transcurrir los años he desarrollado una imagen de cómo son los seres humanos que viven humanamente. Veo a individuos que comprenden, valorar y desarrollar sus cuerpos al hallarlos hermosos y útiles: son reales y sinceros consigo mismos y quienes les rodean. La gente que vive con humanidad está dispuesta a correr riesgos, a ser creativa, a competir y a cambiar cuando la situación así lo amerita. Siempre encuentran medios para adaptarse a cosas nuevas y distintas, conservando la parte útil de su antigua personalidad y desechando lo que no sirve. Si sumamos todo estos, tendremos seres humanos físicamente sanos, de mente alerta, con sentimientos amorosos, alegres, auténticos, creativos, productivos y responsables. Son éstas las personas que pueden valerse por sí mismas, amar con 1

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Goldenberg,I. Goldenberg, H. (1996) Family Therapy. An overview. Pacific Grove: Brooks| Cole Naranjo (1997) Fritz Perls. Santiago: Cuatro Vientos Satir, V. (1986) Psicoterapia familiar conjunta. México: La Prensa

Satir, V., Schwab, Baldwin,M.,Gerber,J., Gomori,M. (1991) Talleres de comunicación con el enfoque Satir. México: Pax

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profundidad y luchar justa y eficazmente. Son capaces de encontrarse en buenos términos con sus rasgos de ternura y rudeza, y conocen la diferencia entre estas características.”5 Para Satir, la persona mentalmente sana reconoce sus estados emocionales, para ello debe tener en cuenta a su cuerpo, quien no toma conciencia corporal no ha de poder entender sus emociones. Además de tener plena conciencia de sí mismo, es necesario valorarse de manera realista, reconocer sus roles y aprender a comunicarse con efectividad. El siguiente poema sintetiza de la mejor manera la idea que Satir tiene sobre la relación íntima: Mis Metas Quiero amarte sin absorberte, Apreciarte sin juzgarte, Unirme a ti sin esclavizarte, Invitarte sin sentirme culpable, Criticarte sin herirte, Y ayudarte sin menospreciarte. Si puedes hacer lo mismo por mí Entonces nos habremos conocido Verdaderamente y Podremos beneficiarnos mutuamente.6 Más adelante concluye: “El estar en contacto incluye dos personas simultáneamente y tres partes. Cada persona en contacto con él o ella misma y cada uno con el otro”. La compleja dicotomía de las relaciones humanas ocasionan un encuentro entre espejos, además donde cada uno cree saber lo que el otro ve de uno, cuando en realidad el otro ve sólo lo que aprendió a ver. Esta compleja manera de relacionarnos fomenta la confusión a la hora de comunicarnos. Para Satir una comunicación satisfactoria debe permitirnos cinco libertades: • La libertad de ser y escuchar lo que está aquí en lugar de lo que debería ser, fue o será. • La libertad de decir lo que uno siente y piensa, en lugar de lo que uno debería sentir y pensar. • La libertad de sentir lo que uno siente, en lugar de lo que uno debería sentir. • La libertad de pedir lo que uno quiere, en lugar de esperar el permiso para hacerlo. • La libertad de correr riesgos por tu propia cuenta, en lugar de elegir lo que es “seguro” y no arriesgarse. 7 Nuestra capacidad para reclamar nuestros derechos y para reconocer la del otro, es la humanización de las relaciones, otorga congruencia, permite el cambio.

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Satir, V. ( 1989 ) Nuevas relaciones humanas en el núcleo familiar. México: Pax. Pág. 17

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Satir, V. (1978)

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En contacto íntimo. México : Concepto. Pág. 2

Satir, V. (1978) Op. Cit. Pág. 11

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3. Cambio Cuatro son las áreas que debemos revisar para producir cambios en nuestras relaciones interpersonales e intrapersonales:

Figura 1. Las áreas para promover el cambio en la teoría de Virginia Satir El cambio en una de las áreas afecta al resto, por ello basta analizar una de ellas y comenzar a modificarlas. • Autoestima. La autoestima es la manera cómo nosotros nos valoramos, la pregunta que debemos hacernos es: ¿Cómo me siento respecto a mí mismo (a)? Satir consideraba al concepto de autoestima muy difícil de explicar, de ahí que escribió: “La autoestima: la olla que nadie vigila. La autoestima es un concepto, una actitud, un sentimiento, una imagen, y está representada por la conducta. De niña viví en una granja en Winsconsin; en el patio trasero había una enorme olla de hierro negro, con los costados redondeados y tres patas. Mi madre hacía su propio jabón, así que, durante una parte del año, la olla estaba llena de jabón. Cuando llegaban los grupos de trilladores en verano, llenábamos la olla de cocido; en otras ocasiones, mi padre almacenaba en ella estiércol para los lechos de flores de mamá. Con el tiempo llegamos a llamarla la olla de “tres usos” y cualquiera que quisiera utilizarla debía enfrentar dos interrogantes: ¿De qué estaba llena la olla en ese momento? Y ¿Qué tan llena estaba?”8 Nuestra autoestima es como la ollita de Satir, a veces la llenamos de jabón, otras de estiércol, alguna vez la utilizamos como florero. Cuando nuestra olla está con flores, emana de 8

Satir, V. ( 1989 ) Nuevas relaciones humanas en el núcleo familiar. México: Pax. Pág. 34

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nosotros perfume y todos quieren estar con nosotros, pero cuando tiene estiércol huele horrible y espantamos a las personas. ¿Qué hacer? Para llenarla de flores, valorar nuestros logros, y para llenar las ollas de otros con flores, también valorarles, como dice Shinyashiki9, las caricias no hacen daño a nadie. Parece que es más fácil llenar nuestra olla y la de los demás de estiércol, para eso lo único que necesitamos es llenarnos de amargura y dispersarla por el mundo. Lo peor sin embargo, es tener una ollita rota, no recibe flores ni estiércol, todo se sale por el agujero, entonces nos convertimos en personas incongruentes y los demás no sabrán que esperar de nosotros. •

Comunicación. Es la habilidad para hacernos comprender y comprender a los demás. La pregunta es: ¿Cómo me doy a entender a los demás? Satir opina que es importante evitar los errores típicos de la comunicación: telepatía, interrupción, imposición, falta de preguntas para retroalimentarnos. Otro problema consiste en no saber identificar el rol que estamos desempeñando durante el proceso de comunicación, o de no reconocer el rol que el otro está utilizando. Para explicar el proceso Satir nuevamente recurre a una metáfora. Los roles son como sombreritos de papel, nos sacamos y ponemos los sombreros dependiendo de las circunstancias. Hay sombreros para todos los gustos: sombrero profesional, sombrero conyugal, sombrero para jugar, hasta sombreritos para hacernos invisibles. Existen personas que se colocan el sombrero con pegamento, y son incapaces de cambiar de rol, otros no saben hacer coincidir su sombrero con el sombrero del otro.

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Correr riesgos. Las personas neuróticas piensan que es posible la absoluta certeza, de ahí que hacen todo lo posible para evitar los riesgos, por ello se estancan en la vida. La pregunta que debemos hacernos es: ¿Cómo reacciono al hacer cosas nuevas y diferentes? Debemos atrevernos a romper la rutina, correr riesgos racionales, no esperar estar a punto de morir para reconocer que perdimos el tiempo. Debemos hacer lo que nos permita explotar todo nuestro potencial.

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Reglas. Es la forma en que nos ponemos límites y ponemos límites a los demás. La pregunta que nos debemos hacer es: ¿Qué es lo que hago con mis sentimientos? La manera en que manejamos nuestros sistemas de autocontrol definen nuestra capacidad de expresar nuestros sentimientos, sin desafueros ni extrema represión. Una de las emociones más difíciles de reconocer y de manejar es el enojo, sobre todo porque lo asociamos con violencia, el enojo no es malo, es una señal para que reconozcamos el riesgo de la frustración, la manera como expresamos el enojo puede ser buena o mala. La manera mala de expresar el enojo es la violencia, convertir la agresión en acciones destructivas. La manera buena de expresar el enojo, es convertir la agresión en expresiones de rabia constructivas, las mismas que tendrán palabras antes que golpes o insultos. Debemos ponerles reglas a nuestras emociones, también debemos clarificar las reglas de nuestro entorno. Las cuatro áreas sólo pueden modificarse si existe una relación entre el cuerpo y la mente coherente, puesto que el centro de todo individuo es su “yo”, síntesis de las relaciones físicas, emocionales, sensoriales, interactuantes, nutricionales, contextuales y espirituales.10

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Shinyashiki, R. (1993) La caricia esencial. Bogotá: Norma.

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Satrir, V. (1995) Terapia familiar paso a paso. México: Pax

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La ansiedad es producto de anteponer el futuro al presente, y la depresión el pasado al presente. La óptica de Satir coincide con la de la escuela guestáltica, al plantear que sólo es posible vivir en el presente, quien se escapa del presente genera estancamientos en su “yo”, de ahí que baja o sube la autoestima, se evitan los riesgos, la comunicación es muy pobre, y las reglas se establecen para evitar el cambio. Dice Satir: “ Nuestra naturaleza, lo que somos, nos permite manejar el tiempo. No el ayer, sino el hoy y el mañana. Y podemos decir más: Cuando vivimos plenamente el presente, el aquí y ahora, vamos con paso firme hacia un futuro mejor.” 11 4. Juegos en la comunicación. Las personas recurrimos a papeles durante nuestras relaciones, Virginia Satir identifica cuatro padrones de comunicación “neuróticos”12 PAPEL APLACADOR

ACUSADOR

SUPER RAZONABLE

DISTRACTOR

PALABRAS Aceptación: lo que quieras me parecerá bien. Sólo vivo para hacerte feliz. Desacuerdo: nunca haces algo bien. ¿Qué te sucede? Suoerrazonables: si alguien observara con detenimiento, podría notar que uno de ustedes tiene las manos maltratadas por el trabajo. Irrelevantes: las palabras carecen de sentido o no tienen relación alguna con el tema.

CUERPO Apacigua: soy un desvalido, reflejado en la postura de víctima.

INTERIOR Siento que no soy nada, sin ti no vivo. No tengo valor alguno

Acusa: Yo soy el que Me siento solo e inútil manda aquí. Calcula: soy sereno, Me siento indefenso. frío y controlado.

Desaliñado: voy a otra A nadie le importo. parte Aquí no hay sitio para mi.

Estos padrones de comunicación patológicos son consecuencia del miedo al contacto íntimo. Temor que aparece por experiencias vividas en la infancia, las que han generado una actitud de continua desconfianza en los demás, de ahí que estas personas aprendan a manipular a los otros para “ganar puntos”, produciendo juegos de manipulación en la comunicación. Las personas íntegras, no recurren a los juegos de manipulación, simplemente se hacen caso a sí mismas y discriminan racionalmente los eventos exteriores, son capaces de amar:

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Satir,V. (1996) Vivir para crecer. México: Pax. Pág. 57

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Satir, V. ( 1989 ) Nuevas relaciones humanas en el núcleo familiar. México: Pax.

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“Creo en el amor: en amar y ser amada. Considero que el amor, incluyendo el sexual, es lo más gratificante y satisfactorio que puede sentir el ser humano. Sin dar y recibir amor, el alma y el espíritu del hombre se marchita y muere. Pero el amor no puede llenar todo lo que la vida exige; también son fundamentales la inteligencia, la información, la conciencia, la paciencia y la eficiencia...”13 5. Conclusiones Satir nos ofrece una forma optimista de ver el mundo, recupera al ser humano de los intrincados juegos de poder de hoy en día. Piensa que si somos conscientes de nuestro cuerpo y de nuestros sentimientos seremos capaces de comunicarnos mejor, y la comunicación diáfana favorecerá a los sistemas donde nos desenvolvemos. “Ábrete a un nuevo día, un día que puede traerte muchas cosas no esperadas. No conoces este día. Ni lo negativo ni lo positivo que puede haber en él. Date la oportunidad de aceptar lo que te traerá. Date permiso también de quedarte sólo con lo que puedas asimilar. No sentirse mal por abandonar aquelloque sencillamente no es para ti. Tener conciencia de esto es una manera de amar y amarnos a nosotros mismos.”14

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Satir, V. (1996) Vivir para amar. México: Pax. Pág. 23

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Satir, V. (1996) Op.Cit. Pág. 42