Antonio Linares*

TODO LO QUE SIEMPRE QUISO SABER SOBRE INVERTIR EN RUSIA Y NUNCA SE ATREVIÓ A PREGUNTAR El texto intenta acompañar al lector, de manera práctica y sin academicismos, a través de algunos de los miedos y hacia muchas de las preguntas que han acompañado y seguirán acompañando a cualquiera que se proponga invertir en Rusia. Pretende también mostrar que invertir en Rusia no es algo que deba considerarse particularmente difícil frente a otras opciones que, por diversas razones, el inversor español considera más «a mano», lo cual no significa que sea fácil. Y todo ello repasando de manera somera los datos e indicadores que permitirían construir un estudio de viabilidad y recordando algunas obviedades que a veces se quedan dentro del armario.

1. Introducción Empezar es siempre el paso mas difícil, con los escritos como con tantas otras cosas, incluida la empresa. Y por eso mismo me he quedado bastantes minutos pensando en qué es lo que yo, empresario por cuenta ajena, esperaría de un artículo de este tipo. Y en las líneas que siguen intentaré describir lo que hubiese deseado que alguien me explicase cuando, hace años, empezamos esta aventura apasionante que ha sido y sigue siendo invertir en Rusia. El prejuicio En primer lugar una afirmación contracorriente y probablemente un poco provocadora: invertir en Rusia no es más difícil –o no mucho más– que hacerlo en cualquier otro lugar. Sí, muchos estarán recordando las clasificaciones de países más corrup* Miembro del Consejo de Dirección (Executive Board) de la Asociation of European Businesses (AEB). Versión de abril de 2011.

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tos y pensando en si vale la pena seguir leyendo. Un poco de paciencia, por favor. Procedo a elaborar. Y empiezo por el contraejemplo: la cabra de la inversión española ha tirado tradicionalmente al monte hispanoamericano. ¿Se trata acaso de países fáciles? ¿Qué es un país fácil? Si los atributos que definen fácil son: seguridad jurídica, seguridad ciudadana, clases medias desarrolladas y demográficamente significativas –consumidores, vaya– en ese caso permítanme que desde el respeto absoluto ponga en duda que lo sean. Más bien parece que nos han empujado el idioma y la certeza de que eran mercados con gran potencial de desarrollo y, por tanto, con menos competencia: más tiempo para nacer, establecernos y desarrollarnos. Lo del idioma como criterio decisorio me parece un error que se comenta por sí sólo. La madurez del mercado, en cambio, me parece un argumento fundamental y comprensible. Pensemos en países que nadie podría describir como difíciles: Alemania, Francia, Austria. ¿Quién se atreve a invertir en esos países? Si le echamos valor, ¿será fácil? Habrá, 

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Palabras clave: inversión, mercado, oportunidad, logística, diversidad, Rusia. Clasificación JEL: F21, L21, D21.

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sin duda, muchas dificultades, algunas veces de mercado (está muy saturado); otras veces prejuicios: una empresa española en Alemania ¿para qué? No digamos el idioma. Las mismas dificultades se pueden aplicar a los otros países mencionados. En definitiva y simplificando, ¿qué diferencia a Rusia de Hispanoamérica? Un idioma algo más difícil de aprender, más seguridad ciudadana y un invierno más largo y frío. ¿Y qué les une? Un mercado sediento de productos de consumo, falta de mano de obra, en algunos casos cualificada y en otros sencillamente suficiente, dificultades a la hora de obtener licencias y permisos y una cierta inestabilidad e inseguridad jurídicas. Y sí, al invertir hay que ir con precaución pero, ¿dónde no?

lo que ya tenía pensado hacer antes de enviarle a hacer el análisis (estamos en la era de la información y ahora todo el mundo puede saberlo todo de un país o región yendo al World Factbook de la CIA o leyendo el periódico o googleando).

2. Negocio Ahora podemos empezar a pasar revista a las esencias del negocio. Partamos para el estudio de viabilidad de una estructura que seguro que resulta familiar.

2.1. Costes Las dificultades

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Entorno laboral

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De las dificultades que he mencionado anteriormente hay algunas sobre las que no vale la pena extenderse. Por más que lamentemos la dureza del invierno no lograremos que amaine. Pero por seguir un criterio cronológico me atreveré a empezar describiendo un fenómeno que muchas veces condena a los proyectos antes de que nazcan: – Una empresa se plantea invertir e inicia la fase que podríamos llamar «de tanteo». Elige a un becario que esté dispuesto a pasar largos períodos viajando para recabar información. – El becario hace su trabajo y aquí se produce la primera bifurcación: puede haberlo hecho bien o puede haberlo hecho mal (para simplificar no analizaremos aquí la gama de grises). – Pero que nadie se asuste, después de esta primera bifurcación todo vuelve al cauce principal. – Si el becario lo ha hecho bien, nadie se fiará del resultado, total, era un becario y qué sabrá él. – Si el becario lo ha hecho mal, nadie se fiará del resultado, total, era un becario y qué sabrá él. Para seguir con el análisis supondremos, y ya es mucho suponer, que hemos superado el obstáculo inicial al que podríamos llamar, con cariño y respeto «el del becario». En muchos casos la empresa vence este obstáculo haciendo exactamente

Las dimensiones de Rusia hacen difícil hablar de un entorno laboral único. Depende fuertemente de la región (Oblast) o república que se analice. En algunas zonas la gran presencia de inversores extranjeros ha convertido la falta de personal y la inflación salarial en un gran problema. En otras, todavía faltas de tejido industrial, la situación es más estable. Además, hay que tener en cuenta que en Rusia el paro encubierto, que no figura en las estadísticas, distorsiona el mercado laboral. Y cambiar la situación requeriría de pasos muy medidos para evitar el descontento social. Los dos escondites en los que se camufla la realidad del mercado de trabajo ruso son el empleo público, sobredimensionado en todas las administraciones y especialmente difícil de gestionar en Defensa e Interior, qué hacer con policías y militares desempleados y en la calle, y la bajísima productividad en la mayoría de las empresas rusas. En general, la productividad es baja, pero es posible alcanzar niveles razonables si se cuenta con personal capacitado para dirigir y explicar y si se ha acertado con una región en la que el entorno laboral permita fijar al personal durante el proceso de mejora y aprendizaje. Es muy importante tener paciencia y realizar un esfuerzo pedagógico continuado que compense 

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Energía Pues sí, Rusia es la gran reserva de energía de Occidente. Y eso significa que los costes eran, y todavía son, muy competitivos si los comparamos con los europeos. Desgraciadamente, esta ventaja va desapareciendo año tras año a gran velocidad. La subvención al consumo interno va desapareciendo en los últimos años con incrementos en los precios muy por encima de la inflación y con la práctica desaparición de la diferenciación entre las tarifas comercial e industrial para el mercado interno. Además, la infraestructura energética se encuentra en condiciones precarias y requiere inversiones importantes. Estas inversiones, la mayoría de las veces, no llegan ni a la velocidad ni en la medida necesaria para poder garantizar la calidad del suministro, o si llegan desaparecen, no se sabe muy bien dónde ni cómo. En muchos casos el inversor se convierte en la solución. En general, conseguir las cuotas de gas y electricidad es un proceso largo y caro si se hace todo bien, y más largo y caro si se hace mal, independientemente del apoyo de la Administración. Desgraciadamente, los monopolios que controlan gas y electricidad ejercen su poder sin demasiado rubor.

blemas con bastantes características comunes. Tanto si hablamos de materias primas y recambios como si lo hacemos de servicios de diferente tipo, la falta de competencia en Rusia hace que cueste encontrar ofertas que cumplan con los criterios de coste, calidad y servicio. El estado de la industria local, en muchos casos con edificios y equipos obsoletos, no da para muchas alegrías. La importación, con aduanas de por medio, tampoco es una solución demasiado competitiva. Estas son algunas de las razones por las que muchas industrias en Rusia han optado por la integración vertical del negocio dedicándose a la producción no sólo del producto acabado, también de muchos productos auxiliares con impacto en coste y difícil externalización. Hay empresas, sobre todo en regiones, donde el negocio incorpora cantina para los trabajadores (y eso incluye compra de ingredientes, almacén, cocina, etcétera), servicios médicos propios, incluso equipamiento y material sanitario, pero también abundan los casos en los que la empresa se produce las cajas de cartón, recambios y piezas en inyección de plástico. En resumen, los problemas a los que hay que hacer frente en este apartado otros son: en primer lugar los derivados de la ausencia de una industria local desarrollada y competitiva –hay algunas, no muchas, excepciones– y, relacionado con lo anterior, los costes que supone importar la solución que no se puede encontrar localmente. Después de describir este panorama en relación con los costes, muchos pensarán que son muchas las dificultades. Pues sí, nadie dijo que fuese fácil instalarse en un mercado en desarrollo. La cuestión es si vale la pena y si las dificultades son inabordables. La mayoría de los problemas mencionados son la derivada primera del hecho mismo de tratarse de un mercado en desarrollo y, en mayor o menor medida, serán comunes con otros mercados del mismo tipo.

Otros 2.2. Entorno fiscal Es una solución un poco grosera englobar en otros todo lo que no es laboral y energía. Pero el grueso del resto de costes sufre una serie de pro-

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La fiscalidad rusa es el resultado de tensiones en diferentes direcciones, por un lado la inercia 

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la falta de referencias de la mayoría. Así como en los países de nuestro entorno las relaciones laborales se han regido por unos estándares conocidos y estables desde hace ya varias generaciones, en Rusia se han producido cambios dramáticos y ahora conviven formas de relación laboral muy diversas que hacen que el empleado no tenga referencias. La única solución es hacer un esfuerzo pedagógico y compensar toda la falta de referentes con disciplina y esfuerzos de comunicación interna y recursos humanos.

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del pasado, por otro la voluntad de rebajar presión para hacer aflorar el fraude, y todo eso sin despreciar una cierta voluntad de moverse hacia la modernidad, sea eso lo que sea. El resultado resumido (hay otros impuestos menores) es el que se describe en el Cuadro 1. Los impuestos descritos resumen la carga fiscal principal que soporta una empresa en Rusia. Lo que no describen estos impuestos son los muchos documentos necesarios para documentar las transacciones, las contradicciones legales y en muchos casos el exceso y la superposición de normas que crean vacíos que se van rellenando con jurisprudencia. Todo eso genera, sin duda, una cierta incertidumbre, y dificultades a la hora de afrontar la decisión de qué hacer: una empresa, por más que se precie de actuar de total acuerdo con la legislación vigente, se encontrará en situaciones en que deberá elegir cuál de las normas debe romper. Pero la experiencia muestra que si se ha actuado de buena fe los problemas que puedan aparecer serán de rango menor. Claro está, salvo que el sector en el que hayamos decidido invertir sea considerado, por el Gobierno o por alguna Administración o por algún grupo con recursos para presionar, como estratégico o de especial interés, en cuyo caso, el análisis será otro. También el tamaño y la visibilidad influirán. En general, una empresa con cierto volumen e importancia y que tenga apoyos y relaciones con la comunidad de negocios internacional podrá sentirse razonablemente tranquila.

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2.3. Entorno jurídico

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Mucho de lo explicado en el punto anterior podría aplicarse al entorno jurídico. En Rusia el problema no es la falta de imperio de la ley, más bien es el contrario: el imperio absoluto de la ley, una ley en permanente situación de «en obras», con cambios y modificaciones y desarrollos que la adaptan siempre a algo que se pretende mejor pero sin haber acabado de corregir o prever los problemas previsibles. Hay un sinnúmero de ejemplos en los que se desarrolla y

CUADRO 1 PRINCIPALES IMPUESTOS (En porcentajes) Denominación Impuesto de sociedades................ Impuesto sobre activos fijos .......... VAT................................................. IRPF (empleados).......................... Costes laborales (empresa)...........

Federal

Regional

Total

2,0 – 18,0 – –

18,0 2.2 – 13,0 34,0

20,0 2.2 18,0 13,0 34,0

Fuente: elaboración propia.

aprueba una norma sin haber formado a los que deberán aplicarla o sin que la tecnología que permita su puesta en práctica se haya ni siquiera empezado a desarrollar. Ante todo eso sólo cabe encomendarse a la suerte y, por si acaso, como dice el chiste, a un buen abogado. Dicho lo cual, conviene destacar que hay un trasfondo positivo y es la voluntad de mejora. Y la de ayuda si se afrontan los problemas con el tono adecuado: nunca con el de ordeno y mando que lo más probable es que resulte con el desplazamiento del expediente al último nivel del paquete.

2.4. Mercado Aquí está la gran ventaja competitiva de Rusia. Es posible que después de leer los apartados anteriores muchos no hayan llegado hasta aquí. Si usted lo ha conseguido, en primer lugar bienvenido y en segundo, enhorabuena. Esto es un ejemplo a escala de lo que significa invertir en Rusia. Muchos obstáculos que superar y al final del camino nuestro premio: el mercado. Un mercado relativamente escaso de productos de calidad producidos localmente. Un mercado en el que el precio medio de muchísimos bienes de consumo es muchísimo más alto que el que tienen sus equivalentes en países con mayor capacidad adquisitiva por habitante. Un país en el que un viaje con los ojos abiertos muestra que, si se superan las dificultades iniciales con esfuerzo, comprensión y respeto por la diferencia y se deja de lado la ingenuidad nos encontraremos un mercado todavía muy necesitado de productos de calidad, con diseño y con compromiso con el medio ambiente. 

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2.5. Inversiones Llega el momento de plantearse la pregunta definitiva: ¿nos arriesgamos a invertir o no? A estas alturas su equipo le ha presentado información de detalle sobre el país. Si usted decide hacerlo y va a construir una fábrica desde la nada, ármese de paciencia y piense que le llevará dos años. Si lo hace muy bien le costará caro y le llevará dos años. Si lo hace muy mal le costará muchísimo más caro y le llevará los mismos dos años. Sobre este plazo de dos años y dependiendo de la suerte, el tamaño y los aciertos y/o errores que cometa, podrá ahorrarse dos meses o extenderse dos meses. De qué depende hacerlo bien o mal: de la elección de la empresa constructora, de la calidad del proyecto, del tiempo que esté dispuesto a perder en discutir aspectos no esenciales, de la relación que establezca con la Administración, de su capacidad para mostrar paciencia aunque la haya perdido hace días. Si muestra prisas le costará dinero. Las principales dificultades: de nuevo encontrar una buena empresa de proyectos (fíese de ella o no la escoja), encontrar una buena constructora con presencia en la zona donde pretenda construir (nunca se fíe de una constructora, se lo dice alguien del sector, no importa el país), elegir bien la región, planificar

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bien el proyecto, conseguir las cuotas de gas y electricidad. Y en cuanto a la consecución de permisos y licencias, recuerde lo descrito en entorno laboral y en entorno fiscal: se encuentra usted en un entorno de bajos impuestos y, desgraciadamente, con mucho fraude fiscal; y con un sector público sobresaturado de personal y con sueldos muy por debajo de los del sector privado fruto, entre otras cosas, de la falta de recursos del Estado para pagar a tantos con tan poco. En definitiva, tendrá que llamar a muchas puertas y conseguir muchas firmas. Y la única manera de tener éxito pasa por planificar bien, no mostrar demasiada prisa, ser respetuosos y comprensivos y sí, importante, no buscar atajos. Se le aparecerán muchos aventureros con acceso y amistad con todo el mundo. Siempre será mejor que su equipo construya sus propias relaciones que ponerse en manos de un desconocido que, en algunos casos, podría ayudarle, pero en muchos otros será el que se encargue de crearle el problema cuya solución le venderá después a buen precio. Otras alternativas que pueden reducir los plazos de retorno de inversión: – Comprar un edificio industrial con cuotas de gas y electricidad suficientes para sus necesidades. – Comprar una empresa de su sector y reformarla o reconstruirla, según se encuentre en mejor o peor estado. Se puede hacer y es una manera más rápida de entrar en el mercado. Sobre todo si la empresa adquirida es saludable y su estado permite acercarla a los estándares del comprador con cierta facilidad. – Joint venture. Esta opción no es de mi agrado, ni en Rusia ni en ningún otro país, es más, ni siquiera en el caso de que las dos o más empresas participantes sean del mismo país. Supongo que muchos podrán entender mis razones, más aún si han participado de alguna.

2.6. Logística Supongo que antes de leer este artículo le habrán echado un vistazo al mapa. Y por poco bueno que 

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Un mercado de gente educada y ansiosa por disfrutar de productos de calidad. Un mercado que valora y aprecia la marca. Un mercado en el que el sector de la distribución todavía se esta inventando y en el que hay que estar atento cada día a lo que sucede alrededor si no se quiere perder algún tren. Y aún así algún tren se perderá. Un mercado no apto para los que aprecien entornos estables y con pocos sobresaltos. En cualquier sector, expresiones como «el canal tradicional» pierden sentido: el país se reinició hace muy poco tiempo y los programas no se han acabado de cargar todavía. Pero, por eso mismo, se puede participar de la creación de lo que está naciendo y sentirse partícipe del resultado. Y si eso se hace bien y no se cometen errores de bulto, el resultado puede ser sólido y duradero.

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sea, habrán apreciado que Rusia no es pequeña. Más bien enorme. El último imperio más que un país. Pues bien, ahí es donde tendrán que vender y hacer llegar sus bienes. Y para hacerlo con éxito será importante definir la geografía posible de sus ventas y cómo pretenden que lleguen. Hay muchas soluciones en función de la estructura de cada negocio y mercado y éste no es el formato en el que se puede entrar a discutir cada una de las variantes, baste decir que las carreteras son malas, el invierno duro y que la solución de que todo el mundo se venga a vivir a Moscú para tenerlos más a mano no vale. Aunque al ver el tamaño de la ciudad, el estado de las carreteras en cuanto nos alejamos de ella y la cantidad de gente en provincias que intenta huir hacia ella, cuando no al extranjero, pudiera hacer pensar por un momento que esa es la solución que se está poniendo en práctica. También los hay que proponen poner una cremallera en los Urales y cerrar lo que quede más al Este. Pero no, hay vida al este de los Urales. Y ventas y mercado también. Una última cosa que conviene tener en cuenta: el tren es muy importante aquí. No caigan en el error de considerar que es una opción del pasado y que ya no se lleva ni es rentable. Lo es, y más en Rusia, y aún más si se quiere llegar a los países CEI (Comunidad de Estados Independientes), y más a las materias primas.

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3. Conclusiones

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No se sorprenda, Rusia es diferente a lo que conoce. Por eso se llama Rusia y no, digamos, Albacete. No pretenda que Rusia adapte su normativa y funcionamiento para su comodidad. No va a funcionar. No se asuste. Hay solución. Si todavía está pensando y no ha gastado demasiado dinero, hay solución. Y la solución no es ponerse por las malas. Napoleón y Hitler lo intentaron y ya sabrán cual fue el resultado. Respeto. Escuche, intente comprender, respete las razones y solicite las mismas comprensión y

respeto para las suyas. Evite convertir las discusiones en una cuestión de lucha de egos: no está en su país, lo más probable es que pierda. Infórmese, sobre el terreno. Escuche a quien se deje escuchar. Y déjese en casa lo que ya sabía. Muchos se van habiéndose escuchado solamente a sí mismos. Escoja un equipo competente. Y asegúrese de que puede fiarse de él. Y entonces fíese de él (no pasa nada si hay un becario en el equipo). Utilice los apoyos que le pueden prestar distintos organismos: embajada, asociaciones de negocios (la AEB, Asociation of European Businesses, es un buen ejemplo). No es lo mismo defraudar a una empresa que a un país o a una asociación con muchas empresas. Si no habla ruso, elija muy bien a su intérprete. Tómese su tiempo y pruebe varios. Si no habla el idioma, el intérprete es su vínculo con el mundo. Es importante que sea capaz de transmitir no solamente el significado, también el tono y la emoción adecuados. Un buen intérprete no asegura el éxito del proyecto, pero uno malo es muy probable que se lo cargue. Prepárese para un viaje apasionante. Y disfrute cuando llegue. Durante el camino será difícil, hay curvas y puede marearse. No pague sobornos. Si las cosas se están haciendo bien, no sirven. Si se han hecho mal, como mucho pueden resolver algo a corto plazo a riesgo de complicarlo todo a medio y largo.

4. Epílogo A estas alturas, mi mayor ilusión sería haber conseguido que alguno de los que hasta ahora han estado contentos viendo como subían sus exportaciones a Rusia y pensando muy superficialmente sobre la posibilidad de llegar a invertir se haya empezado a plantear seriamente el proyecto de hacerlo. He visto desde mayor o menor distancia como muchas empresas, desde la exportación, maduraban un mercado, conseguían una cuota importante y 

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En todos los años que llevo en Rusia puedo decir muchas cosas buenas y muchas malas. También de otros lugares donde he vivido y trabajado podría decir lo mismo. Pero una cosa que creo que es importante, sobre todo, para finalizar con un razonable buen gusto en la boca: en todo este tiempo haciendo negocios nunca nos han engañado en nada significativo o material. El balance ha sido bueno. Y con precauciones razonables es un esfuerzo que, sin duda, valdrá la pena. Les esperamos.

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preparaban el terreno para que llegase un competidor avispado y recogiese los frutos instalándose. La exportación es un buen primer paso. Sirve para conocer, para sustentar los primeros viajes y las primeras exploraciones, para relacionarse con gente que podrá ayudarnos en el futuro. También reporta unos buenos beneficios, bienvenidos sean. Pero finalmente, al menos en muchos casos, la diferencia entre el ser y el no ser radicará en el estar. Si estamos, seremos alguien.

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