QUINCE

EL GRAN CAMBIO ANUNCIADO POR LOS MAYAS “LOS MAESTROS DEL TIEMPO” PARA EL 2012 Una nueva Era de luz comenzará. Los tiempos de oscuridad y bajezas terminarán.

Los Mayas Galácticos o los Señores del Tiempo, como se les reconocía, pronosticaron con miles de años de antelación el final de un ciclo, no el final material de la Tierra sino el fin de un tiempo de bajas energías, de un concepto o visión de la vida muy material y superficial. A este final de un tiempo de tanta oscuridad y de guerras le llamaron: “El fin del tiempo, del no tiempo”. Éste duraba 20 años, desde 1992 al 2012. En la actualidad, ya nos queda muy poco para llegar a su final. Al mismo tiempo anunciaron que, a continuación, empezaría una Nueva Era de elevación de conciencia de gran energía, con una nueva visión de la vida llena de luz, armonía, paz y amor que llamaron la del “El sexto sol”.

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-La cuenta larga o el Gran Ciclo. Como hemos dicho, los sacerdotes-Astrólogos Mayas, sabían, debido a su gran experiencia en el seguimiento de los ciclos orbitales de los planetas a través de los signos zodiacales y de los ciclos rítmicos, que los ciclos se repetían rítmicamente. El “Ciclo Anual” en nuestro sistema solar es el tiempo que tarda la Tierra en dar la vuelta alrededor del sol, cuya duración es de un año. El ciclo solar tiene los cuatro ritmos de las cuatro estaciones. Ellos, al observarlos durante muchísimo tiempo, sabían perfectamente los cambios que acontecían después de cada estación, igual que lo sabemos nosotros. De igual manera, durante muchísimo tiempo (miles de años), estuvieron observando el gran ciclo, tomando notas de lo que acontecía en la gran eclíptica. De ese modo pudieron predecir acontecimientos futuros. El “Gran Ciclo” es el tiempo que tarda nuestra sistema solar en dar una vuelta alrededor “del sol central de la galaxia”, formando una eclíptica muy alargada, que pasa por los 12 signos zodiacales. Su duración es de 25625 años. Este “Gran Ciclo”, está subdividido en 5 subciclos, cada uno con una duración de 5125 años. En la actualidad, nos encontramos en el último subciclo de 5125 años, que comenzó el 19 de agosto del año 3113 antes de Cristo y que termina el 21 de diciembre del 2012. También coincide con el final del calendario Maya y que, al mismo tiempo, cierra también el “Gran Ciclo de los 25625 años”. Cada cierre de un subciclo, -5125 años-, ha terminado con una catástrofe o evento natural destructivo. Así aconteció en los anteriores, de los cuales aún permanecen algunos en nuestra memoria, como el diluvio universal.

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-¿Qué acontecimientos sucederán al final del Gran Ciclo? A partir del 21 de diciembre de dicho año 2012, empieza nuestro sistema solar a iniciar una nueva vuelta alrededor del Gran Sol Central, pasando por todas las Eras Zodiacales, cuya duración será la misma 25625 años. En esta ocasión empezará el recorrido por la Era de Acuario que durará 2120 años, en los cuales permaneceremos dentro de la Luz, esto es, dentro de La Banda de Fotones. La luz de la Banda de Fotones es energía que nos llega del centro de la Galaxia y lo que nos hace es una apertura de conciencia, para reconocer y asimilar todo lo que está pasando en estos momentos, como recordar quienes somos y que tenemos que elevar nuestra conciencia, aumentar nuestras vibraciones, preparándonos para ascender a nuevas dimensiones en unión con la Tierra. Los astrónomos Mayas, lo que constataron con claridad meridiana, fue que la energía tan baja que iban registrando a través de todo el último subciclo, iba aumentando a medida que se acercaba su final, (21 de diciembre 2012), reconociendo en este final una cantidad de energía nunca manifestada. Percibieron la gran cantidad de energía y de luz que del centro de nuestra galaxia se dirigía a nuestro sol, y que esta energía nos llegaría a inundar con su luz a finales del 2012. Los Mayas sabían muy bien que, en el cosmos, energía y luz significan apertura de conciencias, elevación del espíritu, preparación para pasar a dimensiones más elevadas, cambio total en la percepción de la vida en todas sus facetas, esto es, un cambio radicalmente diferente al anterior, en la manera de vivir.

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Podríamos deducir que su mensaje sería este: el día 21 de diciembre del año 2012 termina el tiempo de oscuridad en que los pobladores de este planeta Tierra han vivido y se han desarrollado bajo una concepción materialista y egoísta. Es un tiempo en que la Humanidad en general ha vivido de espaldas a la naturaleza, debido a su superexplotación y a la contaminación de todos sus elementos, contaminando aire, tierras y aguas. Nosotros tenemos una mentalidad terrícola al pensar con la falsa percepción de que somos los únicos habitantes del cosmos, y con la errónea creencia que la Tierra es el centro de un universo sin vida. Con la mala costumbre de mirarse el ombligo, se nos ha pasado desapercibido el papel que realmente realizamos en el Universo. Mientras no nos creamos de verdad, que nosotros somos parte importante de un universo en expansión y experimentación, no comprenderemos nunca nuestro papel en el aquí y ahora. Mientras no estemos plenamente convencidos que nosotros, como seres humanos, y la Tierra como planeta vivo que nos sustenta formamos un conjunto, en el cual se están experimentando nuevos modelos de vida que pasarán a formar parte de otros universos en creación, no entenderemos, desgraciadamente la realidad tan espectacular que vamos a vivir en los próximos años. Ahora, todo depende de nosotros, de nuestra capacidad de percepción interior, de nuestra grandeza de espíritu, de nuestra convicción de que somos seres divinos, no de nuestro raciocinio mental, sino el aceptar la riqueza y grandeza de estos momentos presentes. Tenemos la libertad más absoluta para querer realizarlo o no, pero también la responsabilidad más digna de participar en este profundo cambio evolutivo.

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Recuerda, Tú eres siempre quien decide. -¿Qué acontecimientos dijeron los Mayas sucederían con anterioridad a finales del 2012? Los sacerdotes astrónomos predijeron desastres naturales en cada final de esos 5 subciclos de 5125 años de duración. A éstos los podríamos llamar “catástrofes cíclicas”, ya que se repiten al finalizar cada uno de los subciclos. Ellos pronosticaron en sus textos sagrados, que al final de este último subciclo acontecerían grandes terremotos y activación de volcanes. Como veis, el panorama no es muy alentador, si a todo esto sumamos lo que estamos viendo cada día en muchas partes de nuestro planeta. - ¿Qué piensa el mundo del espíritu, o metafísico, de todos los fenómenos naturales, que están aconteciendo y que se van a incrementar? Debemos reconocer con total sinceridad que vamos a entrar en una época un tanto difícil de vivir y de comprender, el por qué de tanta naturaleza desatada contra los seres que habitamos este planeta. La verdad, nosotros no somos masoquistas, no nos apetece en absoluto lo que parece va a acontecer, pero hay que reconocer que el ser humano ha realizado un ciclo de casi 26000 años, avanzando en total desarmonía, con el mundo natural que le rodea y sustenta. Pero pensemos aunque sea unos momentos con total serenidad, antes de que nos pongamos rojos de vergüenza y de indignación contra nosotros mismos, ¿qué sistema de alerta tiene este planeta para avisar a los humanos ante tales

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barbaridades, sino despertar, poner en acción, las fuerzas telúricas de la segunda dimensión? Los desastres que se producen como son las lluvias torrenciales, las sequías extremas, los huracanes, los tifones, ciclones, los terremotos, los volcanes y los tsunamis... son para purificar la atmósfera, las tierras y aguas contaminadas. No son castigos contra el ser humano por contaminar, no. Todo este tipo de desastres, estamos tan acostumbrados a verlos a través de los medios de comunicación que, para reaccionar, nos tiene que dar una vivencia, un zarpazo personal profundo, para que reconozcamos la verdad de lo que nos está sucediendo. Los científicos dan la voz de alerta y hasta nos han dicho que el agua de los océanos puede subir varios metros. Todos dicen, ¡qué barbaridad!, pero ni los políticos se mueven, ni los de a pié nos echamos a la calle para exigir nuestro derecho a la vida. Todos, absolutamente todos, nos hemos convertido en miopes e irresponsables, queremos que la naturaleza nos arrolle con sus fuerzas telúricas y le estamos dando pie para que lo haga. ¿Acaso nos gustaría continuar con nuestros desmanes, sin ningún grito de queja de este planeta y morir con él en el intento? Nuestro cuerpo tiene sus reacciones cuando abusamos de él. La Tierra también, no olvidemos es un ser vivo. - ¿Qué hacemos ahora?

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La mejor respuesta es sin duda y nunca mejor dicho: ¡A mal tiempo, buena cara! Pero vamos a reflexionar un poco, para quitarnos el miedo del cuerpo. Pensemos, que la tecnología que existe hoy en día, puede ayudar muchísimo para sortear muchos problemas que se nos van a presentar. La siguiente reflexión ya la hemos comentado aquí, pero creemos que es interesante matizarla un poco. Para eliminar un miedo, lo mejor es reconocer cómo se produce y para qué. Las respuestas salen al paso por si mismas sin ningún esfuerzo en razonamientos. El cómo se produce el miedo es evidente, es por los desastres naturales que nos pueden afectar. El reconocer la causa ya nos alivia y el poner la tecnología a su servicio ya disminuye mucho los riesgos. No obstante aquello que nos da poder, fuerzas, ilusión y esperanza de superar todo lo que pueda venir, es el reconocer la verdad de, ¿por qué suceden todos los desastres naturales que nos pueden afectar? Y su respuesta es sencilla y ya explicada: porque la Tierra está purificándose. Y el reconocer quiénes somos nosotros y cuál es nuestro destino también está dicho: nosotros somos parte de Dios que formamos la Unidad, y vamos a pasar a partir de ahora a mundos más elevados, más bonitos y mucho más armónicos. Si reconocemos lo dicho y lo trabajamos, es como echar raíces aquí para que nada, ni nadie nos arrastre y nos saque de este juego, un poco peligroso, pero espectacular y alucinante que todos queremos experimentar libremente en primera línea. No queremos que nos lo cuenten. Queremos ser actores principales y contárselo al Universo.

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Yo estuve allí. Yo ayudé a hacer el cambio. ¡Yo me realicé como Ser Divino! -¿Qué nos dicen los Mayas astrónomos, una vez superado, el período de fenómenos naturales, esto es a partir del 2012? A partir del final del 2012, y al entrar en la Era de Acuario, los seres humanos vamos a comenzar a experimentar poco a poco una nueva Era, desconocida por completo para nosotros, empezando un gran período de armonía y de Paz. Será la Era de Acuario, la Era de la Luz, la Era de la Abundancia, que tendrá una duración de 2120 años donde la espiritualidad será el punto de partida, la realidad necesaria para la elevación a planos superiores. Será la Era de la Mujer, la mujer intuitiva, sensitiva y con coraje, la que irá delante abriendo nuevos caminos, vislumbrando horizontes de futuro llenos de Luz y Esperanza. Transformando con su feminidad, esa nueva Era de la Abundancia, en donde la Armonía, la Paz y el Amor, nos acogerá a todos los que luchamos por alcanzar mundos superiores, más acordes con nuestra Divinidad. A este nuevo Gran Ciclo que empieza de nuevo, los Mayas le llamaron: “La Era del Sexto Sol”, que durará un subciclo, es decir 5125 años. Nunca más volverá esta Humanidad que asciende a Mundos superiores, a conocer mundos de oscuridad y de bajas vibraciones.

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