EL JURAMENTO DE INDEPENDENCIA DEL PERÚ : TRES ACTAS INÉDITAS Y OTROS DOCUMENTOS Por

Elisa

Morales

Flores,

Directora

de

Bibliotécnic Consultores

Morales Flores, Elisa. El juramento de la Independencia del Perú :tres actas inéditas y otros documentos. Lima :Bibliotécnic Consultores, 2002. 59 h. en 6 partes. (Serie Bibliotécnic Consultores, 7) Resumen Se transcribe el texto de tres actas originales inéditas del Juramento de la Independencia del Perú: El acta del Cabildo Eclesiástico de Lima Metropolitana, de la Congregación de San Felipe Neri y del Ramo de Correos; actas que fueron remitidas en Julio de 1821 al General José de San Martín, dando cumplimiento al Plan de consolidación de la Independencia del Perú. Están precedidas de un comentario acerca de la Declaración, La Proclamación y el Juramento de la Independencia y de una reseña del acontecer histórico de las tres instituciones. Se anexa la trascripción de otros documentos originales y una Cronología de la Emancipación del Perú1. TABLA DE CONTENIDO Primera Parte Introducción 1 Antecedentes 2 La Declaración 3 La Proclamación 4 El Juramento Segunda Parte 5 Las actas inéditas del Juramento de Independencia 6 El Acta de Juramento del Cabildo Eclesiástico Metropolitano 7 Transcripción del Acta (Doc. 1) Anexo 1: El Clero y la Independencia del Perú Tercera Parte El Juramento la Congregación de San Felipe Neri 8 El Acta de Juramento 9 Transcripción del Acta (Doc. 2) Anexo 2 Historia de la Congregación Cuarta Parte 10 El Juramento de la Administración General de Correos 11 Transcripción del Acta (Doc. 3) Anexo 3: Historia de la Administración de Correos

1

Las palabras y frases claves se subrayan para facilitar la búsqueda y ubicación temática en índices bibliográficos.

Quinta Parte Transcripción de otros documentos originales 12 Acta del Juramento de los párrocos, capellanes y clérigos de la Capital2 (Doc. 4) 13 Acta de Declaración de la Independencia del Perú3 (Doc. 5) 14 Oficio del General José de San Martín de 23 de julio de 1821 (Doc. 6) 15 Proclama en quechua a la población aborigen (Doc. 7) Sexta Parte 16 Cronología de la Emancipación 17 Bibliografía.

El Juramento de la Independencia : tres actas inéditas Primera parte Introducción Estamos divulgando en esta oportunidad tres actas del Juramento de la Independencia suscritas; la primera suscrita por el Dean y Cabildo Eclesiástico, el 29 de julio de 1821, las siguientes, por la Congregación de San Felipe Neri y la Administración de Correos, el 30 del mismo mes y año. Cada acta está acompañada del oficio de remisión dirigido al General en Jefe del Ejército Libertador, don José de San Martín. Estos documentos inéditos hasta la fecha, se encuentran en la Biblioteca Nacional del Perú; dan testimonio de una de las etapas finales del proceso de nuestra emancipación del dominio español; el mismo que somos conscientes tuvo su inicio en el temprano siglo XVIII, con los memoriales dirigidos al Rey en 4 1722 por el curaca de Chicama Vicente Mora Chimo Capac ; se vigorizó con la heroica Revolución del cacique Inca Túpac Amaru II entre 1780 y 1784; se vivificó a comienzos del siglo XIX a través de casi todo territorio, con la participación del pueblo mestizo, criollo e ilustrado, culminando con las operaciones del Ejército Libertador al mando del General don José de San Martín5, que marcan el fin de esta etapa y el inicio de la República. Reconocemos con gratitud la acción decisivo de don José de San Martín y el Ejército Libertador; la historia reconoce también que el impulso libertario recibido desde entonces (1820) -sin mediar mayores derramamientos de sangre- a lo largo del territorio, nueve ciudades del territorio, antes que la Capital, proclamaron su independencia: en octubre Guayaquil e Ica, en noviembre Tarma, Lambayeque y Cajamarca, en diciembre Trujillo, y entre enero y junio del año siguiente la proclamaron las provincias de Jaén, Maynas y Piura. En tanto que la ciudad de Lima, sede del gobierno, del clero y residencia de las personas más encumbradas política y socialmente, su actitud y voluntad por ganar la independencia se diluía entre el control ejercido desde el gobierno y los temores a perder el bienestar y el liderazgo sobre el resto del país. Pedro M. 6 Rodríguez , casi testigo y contemporáneo de los acontecimientos, comenta acerca de la actitud reacia y temerosa de la sociedad limeña por la Independencia: 2

Mundial del Centerario. – Lima, 1921. Transcripción de la edición facsimilar. 4 Roel Pineda, Virgilio. – La Independencia : historia general del Perú. – Lima : Labor, 1988. 5 San Martín que vivió en España durante su infancia y juventud, luchó por la libertad de España del dominio francés, posteriormente en 1808, libera a su tierra la Audiencia de La Plata del dominio español; en 1818 junto a O´Higgins consigue la independencia de Chile. El 5 de febrero de 1819, firma -previo consentimiento de los “prominentes de Lima- un “Tratado con el gobierno de Chile”, para “poner fin a la tiranía del gobierno español en el Perú; para independizar al vecino de ambos, con el objeto de dejar establecido un gobierno dirigido por criollos y mestizos encumbrados que tuviera objetivos y características similares a aquellos de los países del Acuerdo. 6 Rodríguez, Pedro M. – Memoria sobre las causas que prepararon la independencia. – Lima : Imp. del Estado, 1877, p. 80. 3

“El entusiasmo y los gritos y conquistas de independencia no llegaron a influenciar profundamente en la sociedad limeña, que permanecía tranquila, sus habitantes mantenían en mismo lujo y el mismo carácter de negligencia hasta el día en que el General San Martín tocó sus puertas de oro”. Esta apatía de la aristocracia limeña, pudo ser vencida recién el 14 de julio de 1821, por obra de la pericia, la astucia y el ingenio político del General San Martín, quien consiguió vencer la inercia de la sociedad limeña, y lograr el consentimiento, la participación y la colaboración del Ayuntamiento de la ciudad al Plan de Independencia del General y el Ejército Libertador7. 1.

Antecedentes

Existe una copiosa y variada bibliografía sobre la Independencia, pero observamos que poco se ha insistido – a excepción del importante, sagaz y 8 reflexivo trabajo de Fernando Gamio Palacios- en clarificar y precisar con puntualidad los primeros actos fundamentales de este proceso, proyectados magistralmente por la habilidad y la pericia del Libertador; de suerte que la fundación de nuestra Independencia fuera definitiva e inobjetable, desde los puntos de vista legal, jurídico e histórico. Los tres actos fundamentales, la Declaración, la Proclamación y el Juramento, fueron proyectados en una secuencia lógica y racional: la Declaración de Independencia, sería redactada por el Cabildo Abierto, convocado por los miembros del Ayuntamiento de Lima –supuestamente, la autoridad civil elegida por el pueblo-, con el apoyo moral del Clero en la persona del Arzobispo de Lima, don Bartolomé María de Las Heras. El segundo, la Proclamación de la Independencia, la efectuaría el General San Martín, Jefe del Ejército Libertador, ante la sociedad civil, los miembros del Clero y los títulos de Castilla. El tercero, la Jura de la Independencia, sería efectuada por los peruanos y sus instituciones, comprometiéndose a respetarla y a velar de hacerla cumplir con su vida y sus propiedades. 2. La Declaración de la Independencia El 14 de Julio –previas conversaciones preparatorias efectuadas desde el día 6 por don José de San Martín con el Alcalde de Lima, conde de San Isidro, el 9 Arzobispo don Bartolomé María de Las Heras, y otros “vecinos notables”– . El Libertador, basándose en el principio de la libre determinación de los pueblos, se dirigió oficialmente al Ayuntamiento encomendándole convocar a una “Junta general de vecinos honrados, de conocida probidad, luces y patriotismo”, para que a nombre de todos los habitantes de la ciudad declarasen que la voluntad general se decidía por la independencia. Recomendó asentar el acta de la Declaración en el Libro de Actas del Ayuntamiento y entregarle una copia certificada. En efecto al día siguiente 15 de julio, en sesión de Cabildo abierto presidida por el Alcalde del Ayuntamiento, el Arzobispo a nombre de la Iglesia, y el pueblo 7

No obstante el pueblo tenía dudas sobre si apoyar la independencia o al antiguo régimen, por el temor a las represalias, o a que si triunfara la causa de la Independencia, el nuevo gobierno les confiscaría sus bienes. 8 Gamio Palacio, Fernando. El proceso de la emancipación nacional y los actos de la declaración, proclamación y jura de la independencia del Perú. Lima, 1971. Publicado en conmemoración del Sesquicentenario de nuestra Independencia. 9

El 13 de noviembre de 1818, El General San Martín, dirigió una proclama “A los limeños y habitantes del Perú”, precisando que “Los estados independientes me mandan entrar en vuestro territorio para defender la causa de vuestra libertad ... Las legiones que tengo el honor de mandar no pueden promover sino amistad y protección a los hermanos que la victoria ha de librar de la tiranía. Yo os empeño mi mas sagrado honor en que esta promesa sera cumplida infaltablemente ...”.

representado por los “vecinos notables”, aprobaron el Acta de Declaración de 10 la Independencia . En el oficio de entrega de la copia certificada, el Alcalde manifiesta al Libertador la “decidida adhesión de los que componen esta Capital, á que se proceda a la “Jura11 de la independencia cuyo voto ha de servir á V.E. de norte para los ulteriores procedimientos que anuncia en su oficio de ayer”, firman el documento el conde de San Isidro Francisco de Zárate, Simón Rávago y los miembros del 12 Ayuntamiento . La Gaceta de Gobierno del 16 de julio, informó sobre el 13 acontecimiento en estos términos : “... la reunión de vecinos en cabildo abierto, y la declaración pública de la voluntad universal hizo advertir que se entraba por la primera vez en 14 el exercicio de los derechos de un Pueblo independiente y libre” ... después de hacer logrados elogios al Libertador y a los demás protagonistas de la acción libertadora, señala que “Lima respira finalmente, sostenida por sus virtudes patrióticas” ... describe como el pueblo agolpado aunque sin desorden ni alboroto, alrededor de la Sala Capitular ... pronunció y sancionó su necesidad y voluntad de ser libres”. Continúa afirmando que esta voluntad del Cabildo Abierto fue transmitida por el Ayuntamiento al Libertador el día 14 de julio, manifestándole la “decidida adhesión de los que componen esta 15 Capital.. Sobre este importante suceso, el historiador Rubén Vargas Ugarte16 que recoge versiones de testigos contemporáneos a los hechos, comenta: “... mientras tenía lugar este cabildo abierto en las casas consistoriales, el pueblo arremolinado en la plaza daba con sus vivas a la patria y sus ademanes manifiestas señales de su sentir, avivando aun mas con los volantes impresos que circulaban entre la multitud y en los cuales se hacia constar que el voto del pueblo no era otro que el de la independencia y libertad y se comunicaba a los ... a seguir en pos de los tiranos, sino mudaban de parecer. Cuando supieron de la decisión del Cabildo, el entusiasmo creció y se derribo el busto del monarca y se echaron a la plaza las armas reales que decoraban las fachadas del Cabildo y otras oficinas públicas, sustituyéndolas por letreros : Lima independiente En el capítulo 4. Otros documentos originales, se transcriben: el ”Oficio dirigido por el General San Martín” al Ayuntamiento, invitándolo a proceder a la Declaración de la Independencia, el “Oficio de aceptación” y el “Acta de la Declaración de Independencia“. 3. La proclamación de la Independencia Continuando con el Plan de la Independencia, el General San Martín por medio 17 un “bando ” y el Cabildo a través de “invitaciones personales” convocan a los 10

El Acta de Declaración, fue redactada por los juristas Manuel Pérez de Tudela, en representación del Ayuntamiento y el Regidor José de Arriz, por el Cabildo. Incluimos , en 3.1, una transcripción de la edición facsimilar que publicó el Consejo Provincial de Lima en homenaje al Cincuentenario de la Independencia (ver Documento Nº 5). 11 Podemos observar que desde la primera comunicación se considera el acto de la Jura, y se omite el de la Proclamación, que San Martín tenía proyectada para el 28 de julio dentro de su plan de Independencia. 12 El Cabildo acordó dejar el Acta abierta hasta que hubieran firmado todos aquellos que se aunaran a la causa de la Independencia; interés que superó las expectativas puesto que hubo que reabrirlas el 17 de julio y más tarde el 4 de agosto, hasta completar tres mil quinientas firmas.. 13 Gaceta de Gobierno. Lima, 16 de julio, 1821. Nº 1. 14 Ibídem. -- p. 8-9 15 Obra del gobierno y epistolario de San Martín. Lima : CNSIP, 197 . v.1:7. ( Col. Doc. de la Independencia del Perú, t.XIII- ) 16 Vargas Ugarte, Rubén. -- De la conquista a la república (artículos históricos). – Lima : Imp. Gil, 1942. – p. 235 y siguientes

residentes de Lima a los actos de la Proclamación para el sábado 28, los que tendrían lugar en las plazas principales, donde cotidianamente el gobierno español les informaba de sus obligaciones para con el Virreinato – En el referido bando, San Martín se dirige al pueblo en los términos siguientes: “... acudan a los lugares públicos en que en otro tiempo se os anunciaba la continuación de vuestras tristes y pesadas cadenas”; [esto es los nobles, y criollos distinguidos, a la Plaza Mayor, los mestizos a la de La Merced, a Santa Ana, los negros y, a la Inquisición, los indios. Además advierte] “que el pueblo adorne e ilumine sus casas en las noches del viernes, sabado y domingo: para que con las demostraciones de júbilo se den al mundo los mas fuertes testimonios del interes con que la ilustre Capital del Perú celebra el dia primero de SU INDEPENDENCIA y de su incorporación á la gran familia 18 americana” . Para este acto y el siguiente repetimos, circularon entre las instituciones y personas de mayor rango social y político invitaciones con el tenor siguiente: El AYUNTAMIENTO DE ESTA CAPITAL “Pone en noticia de V. que el sábado 28. del que rige, á las diez de la mañana se proclama su Independencia de la dominación Española, y de mas naciones, y en el siguiente se da gracias al Altísimo por tan inestimable beneficio con una misa solemne en la Santa Iglesia Catedral, para que sirva acompañarle en uno y otro acto, en señal de su patriotismo, y concluida la misa; asistir a la Sala Capitular á prestar el juramento 19 sinó hubiese firmado la acta del 15. del corriente . La Gaceta del miércoles 23 transcribe y explica el texto del bando firmado por en General San Martín el día anterior, en el que anuncia que el día 28 había sido designado “para el acto solemne de proclamar nuestra gloriosa INDEPENDENCIA20. Continuando con el proceso independentista, el Libertador en cada una de las plazas, proclamó solemnemente la independencia, pronunciando las palabras que todos hemos aprendido desde la infancia: “El Perú es desde este momento libre e independiente, por la voluntad general de los pueblos y por la justicia de su causa que Dios defiende. Viva la patria, Viva la libertad, Viva la independencia”. 21 El padre Rubén Vargas Ugarte , continúa describiendo el magno acto, efectuado con el mismo derroche de fastuosidad y boato con que se celebraba la entrada de cada nuevo Virrey, el mismo que se había repetido cuando se aprobó y juró fidelidad a la Constitución española de 1812:

“[...] La iluminación y fuegos de la noche y el general repique de las campanas habían contribuido esparcir en el ambiente general sentimiento de alegría. En la mañana salió por las puertas del viejo palacio de Pizarro una de las mas lucidas cabalgatas que vio la ciudad virreinal, tan hecha a la ostentación y a la pompa.

17

Bando: Edicto o mandato solemnemente publicado de orden superior, sobre temas e informaciones de interés general (Diccionario de Bibliotecología / Buonocuore) 18 : Copia del Bando emitido por San Martín el 22 de julio, en : Obra del gobierno y epistolario de San Martín. Lima : CNSIP, 197 . v.1:7. (Col. Doc. de la Independencia del Perú, t.XIII- ) 19

Transcrito de Obra del gobierno y epistolario de San Martín. Lima : CNSIP, 197 . v.1:7. ( Col. Doc. de la Independencia del Perú, t.XIII- ) Ibídem. Nº 4, 23 de julio de 1821 21 Vargar Ugarte, ibídem. 20

Presidía la Universidad y los colegios a ella incorporados, luciendo los doctores sus clásicos bonetes; siguiendo los prelados y miembros de las comunidades con sus hábitos diversos, los militares con sus lucientes casacas y áureos entorchados, los graves oidores con sus garnachas y los títulos de Castilla con los mantos y veneras de las ordenes a que pertenecían y, finalmente los miembros del Cabildo con el Alcalde y Regidores . San Martín en brioso corcel iba acompañado por el Marques de Montemira, el cual conducía el pabellón nacional blanco y rojo, tal como lo había diseñado el General, poco después de llegar a las playas de Pisco. El Estado Mayor del Ejercito les hacia escolta y, cerrando la comitiva marchaban los Húsares, el batallón n.8 y un grupo de artilleros con sus cañones, en tanto que a los flancos caminaban desplegados los alabarderos de Lima, a las ordenes de su capitán D. Ignacio Córdova [...].” Al término de su periplo, el General y su séquito retornaron a la plaza Mayor y de allí al Palacio de Gobierno, donde le habían acondicionado “habitaciones 22 especiales a su investidura” . En la noche del sábado 28 se celebró un baile en la sede del Ayuntamiento, al que fueron invitados los “vecinos distinguidos”. 3. El Juramento de Independencia Al margen de las invitaciones personales como de la popular, efectuada por el General San Martín a través del bando trascrito en La Gaceta del día 23, el Libertador ofició al Ayuntamiento y a cada uno de los representantes de las instituciones civiles, el Cabildo Eclesiástico y el Clero, para comprometer su participación en los actos de Jura de la Independencia, advirtiéndoles acerca de la obligatoriedad de su cumplimiento. En él subraya que los ciudadanos deberán comprometerse “con la cabal responsabilidad que impone un juramento- a asumir el deber de respetarla y hacerla respetar”. En el oficio incluye además del texto o fórmula del juramento, los procedimientos a seguir y la obligatoriedad de remitir a su gobierno las actas originales. Recomendando que éstas fueran transcritas antes en los libros de actas de cada institución. Reitera que la “Jura de la Independencia” tendrá lugar el día 29 después de las ceremonias del “Te Deum y la Misa de Acción de gracias por la Independencia”, el siguiente es el texto del Juramento: “¿Juráis a Dios y a la patria, sostener y defender con vuestra opinión, persona y propiedades, la independencia del Perú del Gobierno español y de cualquier otra dominación extranjera? Si así lo hiciereis, Dios os ayude, y si no, él y la patria os lo 23 demanden”. La Gaceta de Gobierno del día 23 informa a la colectividad sobre “la Jura de la Independencia” en estos términos: “S.E. ha oficiado á las corporaciones y comunidades, á fin de que el día inmediato después de la misa de gracias que ha de celebrarse el domingo 29, en la Iglesia Catedral, presten el debido juramento; y quede así consolidada la base de la 24 INDEPENDENCIA que debe ser eterna” .

22

El Virrey después del fracaso de las Conferencias de Punchauca y Miraflores, dejó la Capital el 6 de julio dirigiéndose con el Ejército la sierra central , estableciendo su cuartel general en Jauja. 23 Texto que con las variantes que impone cada caso continúa siendo protocolar en todas las ceremonias de juramentación . 24 La Gaceta de gobierno. N. 4, Lima, julio 23 1821.

Continuando con el Plan de la Independencia, al día siguiente de la Proclamación, el domingo 29 después del Te Deum, el Ayuntamiento y las instituciones representativas de la civilidad, el clero, la intelectualidad y el pueblo en general, acudieron a los actos de la Jura o el Juramento, que sellaría jurídica y legalmente la Independencia del Perú, comprometiéndose solemnemente a sostenerla y defenderla. La Gaceta del 28 de agosto informó al respecto: “[...] cada individuo de las corporaciones, así eclesiásticas como civiles en sus respectivos departamentos prestáron á Dios y a la patria el debido juramento de sostener y defender con su opinion, persona y propiedades la INDEPENDENCIA DEL PERU del gobierno español y de qualquier otra dominacion extranjera, con lo cual finalizó este primer acto de 25 ciudadanos libres cuya dignidad hemos recuperado [...]. En efecto con este último acto público, el pueblo peruano representado por los miembros de los ayuntamientos, la Iglesia, las instituciones de gobierno, la Universidad y demás instituciones civiles y de cultura de Lima y de todos las provincias libres, se consolida realmente la Independencia del Gobierno colonial español, pasando el Perú a ser estado soberano. Se cierra también el círculo jurídico que se inicia con la Declaración por El Cabildo abierto, como autoridad representativa de la sociedad limeña, que continúa con la Proclamación, efectuada por el Libertador, con la aprobación de las multitudes, y concluye con el Juramento, acto por el cual el Perú representado por sus instituciones soberanas cerraron la época del coloniaje. Después de las ceremonia, la política de San Martín fue de conciliar las opiniones desavenidas entre los españoles y los criollos nacidos en el Perú, así como de hacerles pensar que la causa de ambos era una sola. Prometió respetar sus bienes y sus personas, a efecto de que no fueran en contra de la nueva Administración. Declaro que los españoles continuarían ejerciendo pacíficamente sus industrias, y que quienes no estuvieren de acuerdo con el nuevo sistema, se presentasen ante las autoridades para recibir sus pasaportes y dejar el país, aseguró que podían llevar sus bienes muebles. Dijo que a cualquier español que después de haber aceptado el gobierno establecido se le encontrase culpable de maquinaciones contra la estabilidad del nuevo Gobierno, se le aplicaría irremisiblemente todo el rigor de las leyes. Fin de la Primera Parte vea Segunda Parte

25

Ibídem., agosto 28 1821