El museo
como una herramienta
de enseñanza y aprendizaje Manuel Guerrero Villagrán
Licenciado en Ciencias Sociales Universidad Nacional de Colombia Especialista en Planeación para la Educación Ambiental Universidad Santo Tomás Magíster en Geografía, Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia Docente Fundación Universitaria Los Libertadores
[email protected] Recepción: 2 de Octubre de 2009 Aprobación: 24 de Noviembre de 2009
RESUMEN La realización del trabajo extra clase (visitas a los museos) es una de la labores que deja como experiencia del conocimiento una realidad inmediata tangible y que genera un mayor conocimiento. Tal como afirmaron los estudiantes de Antropología de la Universidad Nacional en su revista Arqueología (1988) “Los museos facilitan una nueva concepción y se convierten en un organismo ideal para reforzar la educación y la comprensión de nuestra propia realidad”.
Palabras clave Museo, Patrimonio Cultural, Salida Pedagógica, Observación, Descripción, Análisis, Vivencia.
Manuel Guerrero Villagrán
El museo como una herramienta de enseñanza y aprendizaje (p. 151 - 156)
Enero/2010
151
El Museo debe entenderse como el instrumento que da información de una manera ordenada y que facilita una apreciación profunda del arte, del saber, de las culturas de los diferentes pueblos que han habitado el planeta a lo largo de la historia. Por eso, es el lugar en donde se tratan de recoger los conocimientos materiales de la humanidad. Cada Museo tiene su propia identidad, donde cada uno se ha adaptado a las nuevas y diversas situaciones del mundo contemporáneo. Un Museo debe ser un agente dinámico, que enseñe, y demuestre una realidad lejana fácil de comprender; en fin, donde cada persona se adentre en esos tiempos lejanos y se pueda entender las formas de vida, formas de pensar, formas de relación con el medio, técnicas y procedimientos de transformación de la naturaleza, entre los más significativos. El Museo como lo cita Laceuturo debe ser: “una Institución que promueva el dinamismo cultural, que facilite la investigación, la catalogación, la conservación, la presentación, la educación y la evaluación”. Mientras tanto Huges de Varine (1974) señala, que:
Los Museos siguen siendo instituciones dedicadas a la recolección, conservación, presentación y educación en el sentido didáctico de la palabra, pero en ningún caso desempeñan un papel activo en el sentido de dar al público la iniciativa cultural. El concepto de museo La definición de “Museo”, en forma sencilla, se explica cómo las colecciones de objetos realizados por el ser humano y que son el testimonio de su desarrollo cultural. En otras palabras los museos, junto con las bibliotecas y los archivos contienen los evidencias del trabajo realizado por el hombre a través de la historia. Para algunos, el Museo está en vías de desaparecer debido a la difusión de nuevas técnicas estable-
152
Enero/2010
cidas por las publicaciones ilustradas, el cine, la televisión, y una nueva modalidad que se está dando en estos días como lo es la venta de videos para ser difundidos a nivel familiar o escolar. En este sentido H.de Variene-Bohan comenta:
La significación histórica de la institución denominada “museo” está en vías de desaparición. La conservación de la herencia cultural de la humanidad no se justifica por el simple placer de rememorar el pasado ni por la investigación hecha por los intelectuales para los propios intelectuales teóricamente el museo está destinado a desaparecer coincidiendo con el fin del contexto cultural y de la clase social que lo crearon” (Variene, 1974, p. 23) El término “Museo” es una derivación de la palabra griega museo que era el nombre de un templo de Atenas dedicado a las musas. En el siglo tercero antes de Cristo la misma palabra se uso para designar un conjunto de edificios construidos por Ptolomeo en el palacio de Alejandría, y que más tarde se conocería como la Biblioteca de Alejandría. En Dicho lugar y época se reconocieron la existencia de la biblioteca, un anfiteatro, un observatorio, varias salas de trabajo, un jardín botánico y un zoológico. No siempre los museos están ubicados en edificios concebidos para este fin. En ocasiones se trata de palacios, casas antiguas. El Museo Nacional de Colombia, era una cárcel que luego se acondicionó para ser un centro de difusión cultural. Ante este hecho y las nuevas políticas dadas por los directores de los museos. Estos han tomado la decisión de impulsarlos, y que tengan estas connotaciones:
Manuel Guerrero Villagrán
El museo como una herramienta de enseñanza y aprendizaje (p. 151 - 156)
Todo museo debe tener una dimensión pedagógica. El museo debe proyectarse hacia la comunidad. Debe intentar por todos los medios de romper con el modelo tradicional, monótono como frío. Debe intensificar las relaciones público-museo. El museo debe renovar en forma permanente la presentación de la información. La importancia del museo Los museos y casas de la cultura se constituyen en entidades piloto para el estudio y difusión de los valores autóctonos; además, aseguran la recuperación de la memoria colectiva y la revaloración del pensamiento, lo mismo que el rescate de la cultura popular. Aunque el museo tradicional, guiado por estructuras rígidas y centralizadas, ha sido dominante en Colombia, es importante destacar la labor que han venido cumpliendo los museos regionales como el de San Jacinto (Bolívar) y el de Pasca (Cundinamarca). Por consiguiente los museos juegan un papel importante en la ampliación del concepto de “patrimonio cultural”. De esta manera toma fuerza la cultura popular y crea su propio espacio frente a la “cultura oficial. El museo por tanto como ente vivo y dinámico debe expresarse socialmente. Debe ser un centro de investigación, de recolección de datos, de coloquios y seminarios, debe contar con una biblioteca y promover publicaciones. El museo debe vincular a los estudiantes de diversos niveles (primaria, secundaria y universidad) para que lo conozcan y en él puedan realizar sus trabajos. Este sitio debe tener las puertas abiertas a la participación, debe tener sus instalaciones abiertas para que lo conozcan, sus funcionarios deben ir a los diferentes barrios, y veredas para que participen de su saber. Esto lo está realizando en este momento el “Museo de Oro” con sus maletas pedagógicas, que puedan ser solicitadas en ciudades como
Manuel Guerrero Villagrán
Santafé de Bogotá, Cartagena, Santa Marta, Armenia, Pereira, Manizales, Pasto, Ipiales y Leticia. Los materiales difundidos constan de réplicas elaboradas en cobre, mapas, grado al cual sirve el material y una cartilla guía para el profesor.
El museo como una herramienta de enseñanza y aprendizaje El presente trabajo se sustenta en la salida a diferentes museos ubicados en Bogotá y que se reconoce con el nombre o denominación de “Salidas de Campo”. Por ello a continuación se explica en una forma sencilla esta actividad y en qué consiste. El trabajo de campo es una alternativa de enseñanza – aprendizaje que se proyecta hacia la comunidad educativa y se convierte en una de las mejores propuestas de trabajo activo que complementa las experiencias ya elaboradas en el aula de clase. Gabriel San y Holtzer (1971) afirman en su libro “El papel de la Educación al aire libre”:
Lo que se puede aprender mejor en la sala de clases debe aprenderse allí lo que se pueda aprender mejor al aire libre por medio de experiencias directas concernientes a los elementos naturales y situaciones reales, debe aprenderse allí. Cuando se habla de la interacción e integración de varios elementos de una práctica de campo se debe señalar que el observar las cosas y tener contacto directo con ellas, le permitirá tanto al educando como al educador encontrar una serie de relaciones de elementos, tanto naturales como atópicos, en los cuales se puedan dar la comparación la generalización, la casualidad, la localización y el análisis.
El museo como una herramienta de enseñanza y aprendizaje (p. 151 - 156)
Enero/2010
153
Retornando al concepto “trabajo de campo”, éste se explica como el aprendizaje que parte del contacto directo con la realidad ampliando y profundizando los conocimientos, las destrezas y valores que se pueda adquirir al observar, descubrir e interpretar el sistema de interacción de cualquier fenómeno social. Se habla de contacto directo con todos los elementos de que dispone la tierra en relación con el ser humano y que se han impuesto a lo largo de los tiempos, imposiciones que se han convertido en unas verdaderas experiencias vitales observables, sobre las cuales se espera que actúe. Este tipo de contacto directo con el medio real aminora la enseñanza verbalística que se da en el aula de clase. Luego el trabajo de campo permite y facilita el despertar un mayor interés por la materia y en definitiva acercará al educando a una mejor asimilación de los contenidos a través de la experiencia directa la cual puede aplicar a su vida cotidiana. Esta metodología contribuye a satisfacer muchas necesidades de orden sicológico – deseos de conocer algo nuevo – prioridades orgánicas – ponerse en contacto con otra realidad –, en fin, al estudiante se le da la oportunidad de vivenciar una nueva experiencia, de valorarla, de respetar el lugar donde vivimos y del cual dependemos totalmente. Este tipo de experiencias le permite al educando retornar al conocimiento concreto, donde se pueden conectar todos los procesos prácticos y activos de los cuales es capaz la juventud actual, por ello se recurrirá a la utilización de sus sensaciones, pensamientos y acciones, con el fin volver a retomar los lazos de la comunicación directa con la naturaleza, con sus compañeros, y hasta con los mismos maestros que los forman en las diversas áreas. Todo trabajo de campo incluye cuatro fases que son la observación, la descripción, la interpretación y el análisis, todo esto se verá reflejado en el entender como cada estudiante va a tener la oportunidad de edificar espíritus capaces de entender lo que debe ser la tarea del ser humano en la vida. Por consiguiente, el trabajo de campo, deben buscar un puente y relaciones con otros elementos del saber humano como son las ciencias de diversa índole.
154
Enero/2010
Con todo lo anterior, se puede afirmar que el trabajo de campo tendrá en cuenta las “espacialidades”. Construyendo su propio discurso, su propia teoría para explicar y comprender su dinámica y evolución de ella misma, como su relación con otras ciencias que contendrán un refuerzo representado en los siguientes aspectos.
Objetivos de la salida de campo a museos Destacar las importancias culturales del patrimonio Colombiano que se exhibe y se detalla con orgullo en los diferentes museos ubicados en la ciudad de Bogotá o fuera de ella. Reconocer cómo los museos bogotanos son los lugares más importantes para aprender aspectos relacionados con la historia, la geografía y la cultura de nuestro país. Mostrar a los educandos para que aprendan en forma creativa aspectos relacionados con los temas vistos en clase. Valorar el patrimonio cultural que reposa en sitios como la Candelaria el Museo Nacional, el Parque Jaime Duque, entre otros.
Logros y alcances en la salida de campo a museos Una vez seguidos los objetivos propuestos en la práctica se pudo reconocer, cómo este tipo de trabajo acrecienta el sentido de patriotismo, amor y arraigo nuestro país. Por lo tanto existen numerosos espacios tanto geográficos como históricos que pueden ser estudiados y que han sido creados para integrar a las personas con su entorno. Realizada las salidas de campo, se logra establecer una dinámica de aprendizaje activo, ya que relaciona dos componentes, que en sí mismos son dinámicos. El ser humano y el medio natural, todo lo demás es producto de la integración a través del tiempo y del espacio que se han atravesado por un sinnúmero de cambios. Dichos fenómenos no aparecen como procesos aislados, sino que se convierten en elementos dinámicos de paisajes que interactúan mutuamente.
Manuel Guerrero Villagrán
El museo como una herramienta de enseñanza y aprendizaje (p. 151 - 156)
Ejemplo vivencial de lo que existe en el Museo Nacional A continuación se hace un breve comentario de lo que se puede aprender en un museo como el Nacional. El Museo Nacional se localiza en el Centro Internacional de Bogotá en la carrera 7ª: entre calles 28 y 29. Consta de tres pisos, los cuales están distribuidos de la siguiente manera. El primer piso alberga un vestíbulo, un auditorio y dos salas para proyectos administrativos como de pintura. Acompañan este conjunto la sala de poblamiento temprano, la sala de sociedades complejas, la sala de sociedades indígenas y afroamericanas contemporáneas. También está la tumba de la cultura Nariño, la momia y la bóveda de orfebrería. El Museo Nacional se creó por ley de la República el 28 de julio de 1823 y abrió sus puertas al público el 4 de julio de 1824. El Museo Nacional ha ocupado varias instalaciones siendo las más conocidas la Casa Botánica el Museo de Arte Colonial, el Banco Cafetero, hasta llegar a ocupar la denominada Penitenciaria de Cundinamarca conocida como PANOPTICO. Esta construcción fue diseñada por Thomas Reari en la década de 1850 y fue prisión durante 72 años. Los presos del Panóptico fueron llevados después a la Picota, cárcel que se ubica al sur de Bogotá. El Museo fue restaurado por varios arquitectos –Vargas y Vengohechea – y en el año 1875 fue declarado como Monumento Nacional. Desde 1889 sigue siendo restaurado por el patrocinio de Colcultura y el Ministerio de Educación Nacional. El recorrido debe iniciarse por la izquierda pasando luego a la derecha para con ello seguir la historia lineal que es la filosofía de todo Museo.
Manuel Guerrero Villagrán
Conclusiones Una experiencia realizada en un museo se define en términos generales como el resultado de la interacción entre el sujeto (visitante) y un objeto (el museo) con el propósito de reconocer unos campos específicos del conocimiento y la acción (saber y saber – hacer) que están socialmente diseñados y reconocidos como un objeto de valor. Esta relación supone la actualización en situaciones espacio-tiempo sucesivo y acumulativo. Al hablar de las experiencias didáctica estamos suponiendo no sólo la conjunción sincrónica de los elementos que son consecutivos, sino que también se debe tener en cuenta como los procesos de enseñanza – aprendizaje como resultados de una dinámica productiva como interactiva. El visitante del museo es un “Lector Leal” que pone en juego sus expectativas y competencias para realizar una serie de operaciones que propicien una “lectura” interpretativa y analítica de lo que aparece en las exposiciones del museo.
El museo como una herramienta de enseñanza y aprendizaje (p. 151 - 156)
Enero/2010
155
BIBLIOGRAFÍA Bermúdez, Á. et al. (1993) Exposición permanente de arqueología Milenios de diversidad Catálogo-guía Instituto Colombiano de Antropología. Colombia: Museo Nacional de Colombia. Burks, I. et al. (Ed.) (1974). Biblioteca Salvat de Grandes Temas. (Vol. 26). Barcelona: Espasa. Correal, G. et al. (1990). Historia de Colombia (Vol.1). Colombia: Salvat. Zavla, L. et al. (1993). Posibilidades y límites de la comunicación museográfica. México: Universidad Autónoma de México.
156
Manuel Guerrero Villagrán
El museo como una herramienta de enseñanza y aprendizaje (p. 151 - 156)