Estudio de la motivación en neuróticos y psicóticos Dr. Dieqo J. González Serra, Investigador Titular, ICSO Academia de Ciencias de Cuba, Lic. Armando Alonso Álvarez, Profesor Asistente, Facultad de Psicología, Universidad de La Habana. RESUMEN En el presente trabajo se exponen inicialmente algunas concepciones teóricas sobre la caracterización y diferencias de la motivación en el hombre sano y enfermo. Se presentan los resultados obtenidos en el estudio de la motivación de tres grupos: psicóticos, neuróticos y normales, constituido cada uno por 50 sujetos igualados en sexo, edad y nivel de escolaridad, a los que se les aplicó el RAMDI (Registro de la Actividad y Método Directo e Indirecto). Se encontró en los diferentes tipos de psicosis una orientación individual extrema, caracterizada más claramente en el método indirecto en los deseos de posesión, actividad. física y comer, los cuales se asemejan a las aspiraciones de niños de siete a nueve años. Los neuróticos se caracterizan por una orientación más individual que los normales y están centrados en los deseos de recuperar la salud y el equilibrio psíquico, de contacto interpersonal y afecto. ABSTRACT In the present work some theoretical concepts about the characteristics and differences of human motivation in the sane and insane are analized. The results of technique RAMDI (Activity Register-Direct an Indirect Method) applied to 50 psychotics, 50 neurotics and 50 normals are revealed. The groups were equivalents in age, sex and grade. We found that differents types of psychosis are characterized by a definite individual orientation in the personality, clearly expressed in desires such as: eat, possession and physic activity, like childrens 7-9 years old.

Neurotics's desires are more individual than normals's. Tle principals are refered to recever one's mental health, human relations and to demand love. INTRODUCCIÓN El objetivo del presente trabajo es exponer los resultados teóricos y empíricos obtenidos durante varios años de investigación dirigida a descubrir la dinámica motivacional que caracteriza a los enfermos mentales neuróticos y psicóticos a diferencia de sujetos normales. Entendemos por enfermedad psíquica a aquella que se caracteriza por un funcionamiento anormal de la psiquis, lo que presupone un reflejo inadecuado de la realidad y una alteración de los aspectos anátomo-fisiológicos implicados. La enfermedad psíquica surge en la interacción individuo-medio y conduce a una pérdida por déficit o insuficiencia, del nivel social típico para unas condiciones sociohistóricas concretas, de las capacidades, motivaciones y otros procesos psíquicos, que impide al ser humano desempeñar normalmente responsabilidades en la vida social y a la vez satisfacer sus requerimientos biológicos e individuales necesarios al cumplimiento de estos deberes. En cuanto al problema de la similitud o diferencia entre la jerarquía motivacional del hombre normal y la del enfermo mental, nuestro punto de vista es que dicha diferencia es tanto cuantitativa como cualitativa. Entre la salud y la enfermedad mental existe continuidad y discontinuidad. Lo más adecuado es plantearnos la existencia, en mayor o menor medida, de momentos anormales y de situaciones, aspectos y tendencias patógenas en la personalidad normal que están en contradicción y lucha con los aspectos y tendencias sanas, las cuales resultan predominantes. Igualmente podemos encontrar tendencias y circunstancias en el enfermo mental que favorecen su recuperación, aunque estas no son las que caracterizan su estructura psíquica. Veamos entonces en qué consiste la diferencia cualitativa que hemos señalado entre la motivación del hombre normal y la del enfermo mental. Para esto tenemos que explicar primeramente los conceptos que participan en nuestra hipótesis. Llamamos necesidades sociales personalmente significativas a aquellas necesidades de la sociedad que ha asimilado el individuo, a los requerimientos que la vida social, las diferentes clases sociales, instituciones y grupos plantean al individuo, que son asimiladas por el hombre en forma de principios morales o en conexión estrecha con éstos y se convierten en necesidades de la personalidad individual. A su vez, las necesidades individuales (orgánicas, psicológicas, etcétera) tienen un carácter social, pues se han concretado en los objetos y normas morales que existen en el medio social. Se trata de la relativa

contraposición que opera en el ser humano entre las necesidades y exigencias de la sociedad con las cuales se ha responsabilizado y las necesidades que son fundamentalmente de él en cuanto individuo. Partimos de la hipótesis de que el equilibrio de la motivación y de la actividad motivada del hombre normal consiste en: Primero: una relativa armonía, integración y correspondencia recíproca entre las demandas, tanto del medio social como del organismo biólogo del hombre, en correspondencia con su actividad, los resultados de ésta y sus necesidades sociales e individuales y demás rasgos de personalidad. Segundo: el predominio de las necesidades sociales y de los ideales, proyectos y aspiraciones sobre aquellas necesidades individuales y exigencias o posibilidades del medio social que orienten la actividad de una manera inadecuada a las responsabilidades asumidas y a los ideales y proyectos planteados. Por el contrario, lo típico de la motivación del enfermo mental es: Primero: la disminución anormal de la eficiencia en la tendencia a la integración o armonización de las demandas. tanto del medio social como del organismo biológico del hombre, y de su propia personalidad. Segundo: la pérdida anormal del predominio de las responsabilidades sociales asumidas, de los ideales y proyectos, sobre aquellas tendencias inadecuadas a los mismos. En los trastornos neuróticos apreciamos fundamentalmente una desintegración, separación o distancia anormal y extrema de las distintas instancias de la personalidad, el yo ideal y el yo real, las necesidades sociales y las individuales, las tendencias conscientes y las inconscientes, como resultado de lo cual predomina en éstos un estado de ansiedad, una desorganización emocional que repercute nocivamente en los procesos psíquicos y en la actividad social de estos enfermos. En la psicosis se agravan las alteraciones motivacionales. El paciente no es capaz de cumplir normalmente sus deberes de trabajo y las normas morales que exige la convivencia social, a la vez que su tendencia a la integración o armonización se ve dificultada gravemente por su reflejo marcadamente tergiversado del medio que le rodea y de su propia personalidad.

Con el fin de constatar empíricamente estas consideraciones teóricas hemos venido realizando diversas experiencias dirigidas a estudiar la jerarquía de las necesidades en sujetos neuróticos, psicóticos y normales. Se han realizado un total de seis investigaciones de las cuales expondremos la última, realizada bajo nuestra dirección por C. Alonso, L. Presmanes y M. Montes de Oca (1982) a la vez que tendremos en cuenta los resultados obtenidos anteriormente. II, POBLACIÓN Y METODOLOGÍA Fueron seleccionados tres grupos: psicóticos, neuróticos y normales, cada uno de los cuales compuesto por 50 sujetos y fueron igualados en sexo, edad y nivel de escolaridad. El grupo de sujetos neuróticos presentaba las siguientes patologías: neurosis de ansiedad, depresiva, histérica y obsesivo compulsiva. El grupo de sujetos psicóticos estuvo integrado por las siguientes patologías: esquizofrenia, psicosis paranoide crónica, psicosis afectiva y psicosis reactiva. Consideramos sujetos normales a aquellos que no han recibido tratamiento psiquiátrico y que en la actualidad no refieren síntomas de índole psicológica o fisiológica y mantienen una integración adecuada a la vida social. Utilizamos la técnica denominada Registro de la Actividad y Método Directo e Indirecto (RAMDI) la cual consta de los siguientes cuestionarios: El registro de la actividad es un cuestionario cerrado que indaga con qué frecuencia se llevan a cabo las diferentes actividades. El método directo, que le pide al sujeto que exprese 10 deseos suyos: y el método indirecto, en el cual se solicita al sujeto que imagine un personaje y diga 10 deseos del mismo. Las respuestas obtenidas fueron sometidas al procedimiento de análisis del contenido y estos resultados fueron procesados estadísticamente utilizando la prueba de chí cuadrado y la prueba de los signos. El objetivo de la presente investigación fue estudiar la orientación motivacional, la diversidad y la jerarquía de las necesidades expresadas tanto de manera directa, como indirecta y en la actividad que caracteriza a sujetos psicóticos, neuróticos y normales.

Como resultado de la investigación realizada llegamos a las siguientes conclusiones: III, CONCLUSIONES Diversas investigaciones anteriores (véase Hernández, Alvarodías y Pereira, Díaz y Sosa 1980: Hernándes y ALvarodíaz, 1981; y M. Nacka, 1981), habían señalado las diferencias entre los grupos de sujetos neuróticos, psicóticos y normales en las respuestas al método directo e indirecto. La investigación de M. Nacka (1981) había destacado la orientación predominantemente individual de los sujetos esquizofrénicos que aumentaba en el método indirecto y en el tipo de esquizofrenia con mayor deterioro. También se señalaba el predominio de algunas categorías individuales como son los deseos de posesión de bienes o dinero (PS), de comer (CM), de diversión (DV) y de actividad (AC) sobre todo en el método indirecto y en los grupos más deteriorados, como eran los crónicos indiferenciados. En la presente experiencia se ha podido constatar que lo que fue dicho para los esquizofrénicos no es algo específico de ellos, sino que es propio de las psicosis funcionales estudiadas (esquizofrenia, psicosis afectiva, reactivas y paranoides crónicas). Este es el primer dato de interés que aporta. la presente experiencia. Aquí encontramos en diferentes tipos de psicosis una orientación individual extrema, caracterizada más claramente en el método indirecto por los deseos de posesión, de diversión, de actividad física o artística y de comer, jerarquía que tipifica las aspiraciones de niños de siete a nueve años, aunque también en los psicóticos encontramos deseos eminentemente adultos, como son los de casarse, los deseos sexuales, etcétera. Los psicóticos también se caracterizan, a diferencia de normales y neuróticos por expresar en mayor proporción los deseos de mantener una buena presencia física y de no estar ingresados. (Véase la tabla No. 1 que aparece al final). En cuanto a las respuestas típicas de los neuróticos, las investigaciones realizadas por M. Alvarodíaz, T. Hernández, A. Pereira, C. Sosa, A. Díaz (1980) y de M. Alvarodíaz y T. Hernández (1981) habían planteado numerosas diferencias entre ambos grupos que han sido confirmados, tales como: (Véase tabla No. 2) a) Los neuróticos mencionan mayor proporción los deseos de salud y de equilibrio psíquico. b) Los neuróticos se caracterizan por una orientación más individual que los normales, pero menos individual que los psicóticos.

c) Los neuróticos ofrecen en mayor proporción respuestas referidas a las relaciones interpersonales (deseos de contacto y de afecto). (Ver tabla No. 2). Otro interesante dato que aporta esta experiencia es relativa a la discrepancia entre las respuestas a los métodos directo e indirecto. Por primera vez se plantea el hecho de que los psicóticos manifiestan muchas más discrepancias que los neuróticos y estos a su vez más discrepancias que los normales. No podemos valorar la significación de estos hechos y sólamente la investigación ulterior puede decirnos si ésta constituye o no una regularidad en las diferencias entre los grupos estudiados. Esta investigación aplica por primera vez de una manera sistemática el registro de la actividad al estudio de las diferencias entre psicóticos, neuróticos y normales. Aquí se apreciaron notables diferencias: los normales muestran una actividad más intensa y multifacética que permite, en mejor medida, la satisfacción tanto de las necesidades sociales como de las individuales. En las neurosis se disminuye esta diversidad e intensidad de la actividad, la cual queda reducida a un mínimo en los sujetos psicóticos. El análisis cualitativo de las diferencias entre las respuestas de los distintos tipos de psicosis y neurosis nos conduce a plantear algunas hipótesis que deben ser fundamentadas en futuras experiencias. Se constató que los esquizofrénicos y los psicóticos afectivos manifiestan contenidos opuestos: los psicóticos afectivos expresan más deseos referidos a sus trastornos psíquicos y presentan una orientación más social. Esto ocurre a la inversa en los esquizofrénicos. Los otros dos grupos estudiados (paranoides y psicosis reactiva) no tienen una clara diferenciación. En las neurosis, la obsesivo compulsiva es la más diferenciada respecto al resto de los grupos y los contenidos expresados marchan en dirección opuesta a lo que caracteriza a los histéricos. Mientras los obsesivos expresan en mayor proporción los deseos de equilibrio psíquico y diversión, y en menor proporción los deseos de contacto sexual, los histéricos responden de manera inversa. Los otros dos grupos de neurosis (de ansiedad y depresiva) no tienen una clara diferenciación. Los hechos aquí constatados estimulan en la dirección de investigar especialmente estos grupos aparentemente opuestos, tanto en la psicosis como en las neurosis. Volviendo a las consideraciones teóricas inicialmente expuestas sobre la diferencia y a la vez la unidad que existe entre la jerarquía motivacional del.

hombre normal y la del enfermo mental podemos decir que los hechos constatados en diversas experiencias con la técnica Registro de la Actividad y Método Directo e Indirecto favorecen los criterios expuestos sobre la naturaleza de la diferencia cualitativa que separa al normal del enfermo. En la medida en que las alteraciones son más graves, como es el caso de la psicosis, la orientación social disminuye y la actividad encaminada a satisfacer sus necesidades se hace cada vez más limitada, menos diversa. Se confirma así la definición de que la enfermedad mental implica una pérdida, por deficit o insuficiencia, del nivel social normal para unas condiciones socio históricas concretas. Igualmente los hechos constatados favorecen el criterio de que la técnica utilizada (el Registro de la Actividad y Método Directo e Indirecto) permite obtener información que guarda una correspondencia con los datos clínicos obtenidos al estudiar estas patologías. Nuestra línea de investigación va dirigida precisamente a considerar el papel importantísimo que juega la motivación en la aparición y tratamiento de las enfermedades mentales, sobre todo en aquellas enfermedades psicógenas como la neurosis, las alteraciones psicofisiológicas, los trastornos de la personalidad y otras. Sin embargo, a diferencia de la psiquiatría dinámica, no pretendemos dar una explicación absoluta de la enfermedad mental a partir de factores motivacionales, sino que consideramos que en ella inciden muy diversos factores como son, por ejemplo, el tipo de actividad nerviosa superior, los trastornos de las capacidades y funciones psíquicas intelectuales y otros, integrados en un complejo sistema. La motivación no sólo es un factor de la enfermedad, sino además, un efecto de ella, que a su vez recibe la influencia de otros factores de la personalidad, del funcionamiento psicofisiológico del enfermo, los cuales condicionan su contenido y características. Las investigaciones realizadas con el RAMDI han evidenciado que el contenido y jerarquía de las necesidades cambian en función del tipo de trastorno psíquico. En unas enfermedades se aprecia el predominio de una motivación, en otras se destacan otros contenidos. No se puede decir que la motivación sexual o la tendencia agresiva sean los factores motivacionales decisivos en toda enfermedad. Es cierto que en la neurosis histérica los deseos de contacto con hijos y cónyuge y sexual pueden ocupar un importante lugar, pero esto no ocurre así en otros trastornos. No se puede decir que la alteración en las relaciones interpersonales, que la necesidad de contacto y afectos sea la motivación que explica todo tipo de trastorno psicógeno. Hemos encontrado esta motivación en los neuróticos, pero no así en los psicóticos.

Sólo la investigación empírica de las características motivacionales de cada tipo de trastorno nos podrá conducir a una teoría general sobre la dinámica motivacional en la enfermedad mental. Las consideraciones teóricas expuestas y los hechos constatados nos inducen a proseguir esta línea de investigación. BIBLIOGRAFÍA Alonso, C.R.; L. Presmanes; M. Montes de Oca. Estudio comparativo de la esfera motivacional de sujetos psicóticos, neuróticos, delincuentes y normales. Trabajo de diploma. Facultad de Psicología. Universidad de La Habana, 1982. Cardentey, O.; M. Rodríguez Respuesta de un grupo de enfermos mentales al método directo e indirecto. Trabajo no publicado presentado a la Jornada Científica Estudiantil, Facultad de Psicología, 1976. González, D. La Jerarquía de las necesidades en sujetos normales, esquizofrénicos y neuróticos. Artículo no publicado, ICSO. Academia de Ciencias de Cuba. Agosto, 1981. González, D.; A. Alonso Estudio motivacional de las Enfermedades Psicógenas. Rev. Hospital Psiquiátrico de La Habana. enero-marzo, 1983. Hernández, T; M. Alvarodíaz. Estudio comparativo de la esfera motivacional de sujetos normales, neuróticos y delincuentes. Trabajo de Diploma. Facultad de Psicología. Universidad de La Habana 1981. Hernández, T.; M. Alvarodíaz; A. Pereira; C. Sosa; A. Díaz Los deseos expresados por sujetos psicóticos, neuróticos y normales. Trabajo presentado a la Jornada Científica Estudiantil, Facultad de Psicología, 1980. Kerbikov, D.V. Manual de Psiquiatría. Editorial Pueblo y Educación. La Habana, 1965. Koubassana Nacka, Marcellin

Estudio de la motivación en sujetos esquizofrénicos y normales. Trabajo de diploma. Facultad de Psicología, Universidad de La Habana, 1981. 9. Sviadosch, A. Las Neurosis y su Tratamiento. Editorial Chagre, 1961. Buenos Aires Tabla No. 1 Comparación de los grupos: psicóticos, neuróticos y normales. Diferencias en las respuestas al método indirecto. Porciento de sujetos que respondieron las diferentes categorías. Psicóticos

(N = 50)

Neuróticos

(N = 50)

Normales

(N = 50)

Categoría s

%

Categoría s

%

Categoría s

%

DV AC PS C2 CM SX CN OP VJ PR DI DS TR

74 70 70 46 46 46 44 30 26 26 24 24 20

TR C2 DV PS CN SX ES VL F2 AC OP AF DI

60 54 50 46 44 44 38 32 32 30 28 28 24

DH C2 TR DV ES RV DI AC PS SX F2 CN VJ

52 48 46 44 42 40 40 36 34 32 30 30 28

Tabla No. 2 Comparación de los grupos: psicóticos, neuróticos y normales Diferencias en las respuestas al método directo. Porciento de sujetos que respondieron las diferentes categorías: Psicóticos

(N = 50)

Neuróticos

(N = 50)

Normales

(N = 50)

Categoría s

%

Categoría s

%

Categoría s

%

PS

64

SL

64

TR

58

DV C2 CM SL AC TR SX PR NHS C1 DI FL EP CH VJ

60 56 50 46 44 44 40 38 36 30 28 26 24 24 22

F2 TR C2 CN EP PS DV FL DS DH AF ES AC SX CM

54 54 50 46 44 44 44 42 36 32 30 28 28 26 14

DI ES DV RV DH F2 C2 PS OP SX AC VJ VL DS CM

52 52 50 50 46 40 40 32 32 30 28 28 26 26 20

Tabla No. 3 Código para el análisis del contenido de los deseos

A. Categorías sociales personalmente significativas CL - Colectivismo ES - Estudio DH - Deber y Humanitarismo EF - Estudios Futuros CP - Compañeros OP - Oficio y Profesión TR - Trabajo F1 - Deber Familiar Primero CT - Centro de Trabajo F2 - Deber Familiar Segundo RV - Revolución B. Categorías individuales de carácter social DS - Descanso C3 - Contacto con Novio (a) SL - Salud CN - Contacto SX - Sexo ID - Independencia CM - Comer Af - Afecto OS - Otras Satisfacciones VL - Valoración IT - Intereses PR - Presencia DI - Diversión-Interés EP - Equilibrio Psíquico VJ - Viajar FL - Felicidad

AC - Actividad VV - Vivir DV - Diversión PS - Posesión C1 - Contacto Familia Primera AG - Agresión C2 - Contacto Familia Segunda