EXPERIENCIAS EDUCATIVAS EN DERECHOS HUMANOS

1 EXPERIENCIAS EDUCATIVAS EN DERECHOS HUMANOS Luces y Sombras ( Una mirada para aprender) VÍCTOR VACAFLORES PEREIRA Consultor La Paz – Bolivia Agos

2 downloads 160 Views 123KB Size

Recommend Stories


VACIO ESPIRITUAL EN EXPERIENCIAS EDUCATIVAS
Revista de Comunicación de la SEECI. (Diciembre 2014). Núm ero ex traordinario, 59-66 ISSN: 1576-3420 http://dx.doi.org/10.15198/seeci.2014.35E.59-66

Derechos Humanos en Chile
Derechos Humanos en Chile Resumen Mensual Publicado por FASIC – Noviembre 2011 Suprema revisa condena por crimen de Matías Catrileo 02 de noviembre:

Story Transcript

1

EXPERIENCIAS EDUCATIVAS EN DERECHOS HUMANOS Luces y Sombras ( Una mirada para aprender)

VÍCTOR VACAFLORES PEREIRA Consultor

La Paz – Bolivia Agosto 2002

2

INDICE Presentación. Introducción. Capítulo I. La experiencia educativa del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos A. B. C. D.

Antecedentes. El Proyecto – Plan Actividades ejecutadas Luces y sombras.

Capítulo II. La experiencia educativa del Defensor del Pueblo. A. Nuevo escenario y nuevo actor en derechos humanos. B. Proyectos y programas educativos 1. Los primeros pasos 2. Acciones educativas 3. El programa Quinquenal 4. Marco lógico C. Luces y sombras. Capítulo III. La experiencia educativa de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia. A. Toda una historia B. Acciones y procesos educativos 1. El “extencionismo” 2. La educación popular 3. Proyecto “ Formación y Capacitación en derechos humanos” 4. La Escuela de derechos humanos de la APDH La Paz 5. Técnico Superior en derechos humanos 6. Proyecto Yungas 7. Viendo el futuro C. Luces y sombras. Capítulo IV. Conclusiones y recomendaciones.

3 PRESENTACION.

LA MUCHA LUZ ENCEGUECE TANTO COMO LA OSCURIDAD Hemos titulado al presente trabajo de investigación Experiencias Educativas en Derechos Humanos. Luces y Sombras, por que somos unos convencidos de que los procesos educativos implican claroscuros, matices que se conjugan para dar sensación de volumen y profundidad muy lejos de lo que podría ser la percepción de una imagen en un solo plano, una imagen plana. Y es que la educación de, en y para los Derechos Humanos, no puede ser plana. No puede concebirse como un proceso cognoscitivo de acumulación de normativas, mecanismos y sistemas, ausente de la historia, de la política, de la ética, de sueños y posibilidades. Por eso, la importancia de las luces, por eso, la importancia de las sombras. La Educación de, en y para los Derechos Humanos ha de contemplar la pedagogía del error y la pedagogía de la crisis como métodos de conocimiento. El superar el miedo a equivocarse (uno de los derechos humanos no consagrados) y el entender la crisis como una oportunidad de transformación, deben hacer parte de nuestro horizonte de visibilidad. Entonces, lo que busca la investigación que se presenta, no pretende tomar un examen, evaluar (calificar) las diversas prácticas de los actores que la produjeron, sino sistematizarla para aprender de ellas. En ese convencimiento, creemos que es necesario hacer un alto, mirar, mirarnos y de ser posible, acompañarnos en el camino que nos toca transitar. Ser capaces de producir el sentido de profundidad. Por que la Educación de, en y para los Derechos Humanos, si bien debería ser política pública por compromiso de Estado (Conferencia Mundial de Derechos Humanos, Viena 1993), en nuestro país a recorrido diferentes senderos según los momentos históricos que le tocó atravesar, haciendo mayor o menor énfasis en los actores que abanderaron el proceso. Esa es una de las razones que justifican la selección de las instituciones de la sociedad civil y el Estado, que tienen mucho que compartir de su experiencia educativa en materia de Derechos Humanos. El Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, la Defensoría del Pueblo y la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia, son una muestra

4 representativa de instituciones que en diferentes momentos de nuestra historia desarrollaron prácticas educativas en derechos humanos, para contribuir en la construcción de una cultura de derechos humanos. Para ellas nuestro agradecimiento porque nos permitieron bucear en sótanos de archivos, bibliotecas bien organizadas y hasta en la memoria de actores directos de estos procesos, para organizar la información de base que nos permite llegar a ustedes con este producto. Esa muestra de voluntad política para hacerlo, constituye por sí misma, un importante indicador de confianza en el deseo de reflexionar sobre las experiencias desarrolladas. Saludamos este gesto. Esta investigación, realizada en el marco del Programa País del Programa Andino 2001-2003 de Derechos Humanos Democracia de la Comunidad Europea, pretende aportar en uno de sus objetivos: La construcción de una cultura política y de derechos humanos. Por eso, nuestro deseo de buscar espacios de contacto entre sociedad civil y Estado para reflexionar juntos sobre sus específicos aportes, en este caso de la Educación en derechos Humanos. Finalmente, nuestro agradecimiento a Baco (Víctor Vacaflores Pereira) viejo militante de los derechos humanos, quién con mucha pasión realizó este trabajo. Felicitamos su esfuerzo para alcanzar la “objetividad” que los cientistas sociales se imponen al momento de enfrentar su objeto de estudio, que en este caso, fue, es y será su propia causa. Bienvenidas las luces, bienvenidas las sombras y a no olvidar jamás que la mucha luz enceguece tanto como la oscuridad.

Fernando Rodríguez U. A. SECRETARIO TÉCNICO CBDHDD

INTRODUCCIÓN.

5 La Educación en Derechos Humanos (EDH) es una práctica educativa relativamente reciente en nuestros países y especialmente en Bolivia, pero con una rica experiencia que debe ser leída desde el punto de vista de su complejidad, no sólo desde el enfoque académico general.

La tendencia internacional, viene como aporte del desarrollo de la educación en general y eventos de derechos humanos promovidos por las NN.UU. con una recomendación importante sobre educación en 1974, pero cuya carta de ciudadanía la adquiere desde el Congreso Internacional sobre la Enseñanza de los Derechos Humanos, celebrado en Viena, en septiembre de 1978.

En Bolivia, la Educación en y para los Derechos Humanos ha sufrido un proceso de cualificación gradual y variada, comenzando con las acciones pioneras de la Asamblea Permanecen de Derechos Humanos de Bolivia ( APDHB) desde fines de la década del 70 en el marco de una dictadura secante. La apertura del proceso democrático conquistado con creces por los sectores populares (1982), introdujo condiciones nuevas que provocaron escenarios en los que distintos sectores y movimientos fortalecieron su lucha y demanda, como el de las mujeres, de los niños (as), de los trabajadores, de los indígenas, en general, de los derechos civiles y políticos y de los derechos colectivos.

El pueblo boliviano, siempre fue un testarudo luchador por sus reivindicaciones, es decir por sus derechos, entendidos y canalizados desde el ángulo político, desde el enfrentamiento con el Estado. De ahí, que discursivamente, la restitución de la legalidad, no es precisamente su que demanda, sino la defenestración del poder vigente y la consecución de otro. El tránsito de la dictadura a la actual democracia, hace virar la modalidad de hacer derechos humanos.

Una vez consolidada la apertura democrática y la gradual vigencia de los derechos constitucionales, especialmente civiles y políticos, se descubre que paralelamente corre una pronunciada cultura totalitaria, punitiva y racista del orden para conquistar la paz, de

6 otra forma no podría explicarse el respaldo ciudadano a los agentes dictatoriales reciclados en la democracia. Subyace una cultura punitiva, una cultura autoritaria en el ceno del pueblo. Entonces, los derechos humanos, para dejar de ser formales en una democracia excluyente, sin

justicia social, recién habían comenzado.

Los derechos

humanos son de y para todos, sin discriminación alguna; deben ser integrales y deben ser asumidos con plenitud. EL país es testigo de que la violación de los derechos y garantías es una práctica sistematizada incluso en los 20 años de democracia.

Una necesidad emplaza acercar los postulados a la vida cotidiana de la población. Es preciso desencadenar procesos educativos que modifiquen los compartimientos, los valores, los hábitos de una población que por momentos parece haber asimilado la desgracia como un designio de fuerzas desconocidas y en total contradicción con su rebeldía permanente. El camino: la educación, en y para los derechos humanos; la educación para generar una cultura colectiva de respeto al ser humano como parte de su ser, inmanente a su naturaleza y a su dignidad. Precisamente, la EDH entendida como acciones educativas y procesos sistemáticos trata de llenar este vacío.

La educación en general y la EDH tienen un carácter instrumental, per-se, no crea conciencia, no libera, no transforma. Puede cultivar el individualismo, el afán de lucro, la convicción de que existen privilegiados que deben dirigir e imponer sus razones “para el bien de la sociedad”; pero puede también, cultivar sujetos solidarios, seres nuevos y personas con profunda convicción social.

La educación puede ser liberadora y es el camino que ha escogido la EDH. Conceptualmente es el proceso de generación de valores, cambio de compartimiento, una forma social de pensar, actuar y vivir. La EDH busca un desarrollo integral, teórico y práctico de los derechos; que informe, que forme y capacite. Es decir que transmita datos, conocimientos, instruya, forme cualidades, visión crítica,

principios, actitudes,

formas de vida (afectiva e intelectual), pericias, capacidades, habilidades, destrezas. La

7 educación de, en y para los derechos humanos en nuestro país, viene enriquecida con la educación popular, aunque son dos procesos distintos.

Este desafió de la EDH ha sido implementado en el país por varias instituciones, como componente central, como acompañante en la actividad organizativa o social, como tarea permanente o transitoria. EDH hacen muchísimas instituciones sectoriales, ONGs., y el Estado,

proyectos de mujeres por la equidad,

de niños(as) contra la violencia, de

pueblos indígenas contra la discriminación y la exclusión, del adulto mayor, llamado comúnmente tercera edad, de grupos por la libertad sexual, etc. Todos y todas, en busca del ejercicio pleno de los derechos, de las cuales sin desmerecer a ninguna, se han recuperado tres experiencias educativas que son emblemáticas y proporcionan insumos que nos permitirán mirar mejor el futuro.

La experiencia de la Asamblea Permanente de los Derechos Humanos de Bolivia, la del Defensor del Pueblo y un intento importante del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos,

cada una de ellas cuenta con valiosas contribuciones, nos dan luces y

sombras, para aprender y acercarnos cada día a una utopía que la queremos construir acá, en este mundo.

Los problemas sociales como la pobreza, injusticia social, exclusión, desempleo, etc. hace mucho que se han convertido en pedagógicos, en materia de reuniones, talleres y seminarios; hoy –como dice un estudioso de los DD.HH.- necesitamos que los problemas pedagógicos se conviertan en sociales, no solo de las instituciones que trabajan en derechos humanos.

Aun estamos en la Década de las NNUU para la Educación en Derechos Humanos 1995- 2.004 declarada por la Asamblea General en 1.994, tiempo que puede ser utilizada para darle un mayor impulso a la EDH en Bolivia.

8 Capitulo I.

LA EXPERIENCIA EDUCATIVIVA DEL MINISTERIO DE JUSTICIA Y

DERECHOS HUMANOS.

B. ANTECEDENTES. Desde el punto de vista doctrinal, el encargado de la vigencia, promoción y protección de los derechos humanos es el Estado. El estado que vía sus organismos y aparatos, debe proteger y garantizar la plena vigencia de derechos, si no quiere convertirse en responsable de la conculcación por su acción directa, o en su caso, por omisión.

Este principio asimilado por los gobiernos democráticos del país, como efecto de la conquista democrática lograda por el pueblo boliviano y por el fortalecimiento mundial de las corrientes pro–derechos humanos en el mundo y, la consiguiente adscripción de los países occidentales del orbe capitalista para equilibrar la gran apertura económica y comercial (neoliberal), agendó en el discurso y en las propuestas político–sociales, la defensa y respeto por los derechos humanos. Con mayor razón, en países como el nuestro que vivió décadas de dictadura y sañuda represión política, persecución y muerte.

La responsabilidad estatal en cuanto a la protección, promoción y defensa

de los

derechos humanos, fue convirtiéndose en parte de un rol necesario y obligatorio. Demás está decir, que las reformas sociales y jurídicas agendaron líneas de defensa y promoción de los derechos humanos, como un componente de gobernabilidad, de diálogo y negociación en un escenario de permanente crecimiento de pobreza y exclusión.

Para decirlo en otros términos, no sería posible el desarrollo de la democracia boliviana, si este no incorpora el discurso y la política de los derechos humanos “desde el Estado”, desde los organismos del Poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial. Ya no puede concebirse procesos democráticos, sin derechos humanos, en virtud del ejercicio ciudadano que demanda progresivamente nuevas competencias y hace que el Estado de mutuo propio o bajo presión tienda a encontrar su razón de ser: el bienestar de la población.

9

En esta línea, en 1994 el gobierno boliviano solicita una asistencia técnica a la Oficina de la Alta Comisión de Derechos Humanos (OACDH) y al Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) para desarrollar un programa–proyecto de Promoción y Protección de los Derechos Humanos desde el interior del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos. Iniciativa importante e histórica para el cumplimiento de una de las más grandes responsabilidades del Estado con la ciudadanía.

Una Misión de la OACDH llega a Bolivia en enero de 1995 y otra en 1996 y, junto al gobierno central identifican la necesidad de ejecutar un plan nacional de acción a mediano y largo plazo en materia de derechos humanos. Esto coincidía con el proceso de reformas judiciales que estaban en agenda y un necesario reforzamiento de la democracia en el país. Así, de esa manera, se fue convirtiendo la idea en un proyecto que terminó haciéndose realidad en la gestión del gobierno siguiente, es decir, durante el gobierno de Banzer Suárez. Los trámites burocráticos se alargan hasta 1998 cuando los organismos internacionales y el gobierno boliviano vía el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos lo firman.

Como son las cosas, se fijó noviembre del 98 la fecha de inicio, pero efectivamente el proyecto se puso en funcionamiento en mayo de 1999. Se trata del primer intento en Bolivia, de desarrollar políticas de promoción de los derechos humanos desde el Poder Ejecutivo.

C.

EL PROYECTO – PLAN

El Proyecto conocido como PROY/BOL 97/015 ó PROYECTO DE PROMOCIÓN Y DEFENSA DE LOS DERECHOS HUMANOS, está sustentado en un documento donde se analiza la situación y necesidad de fortalecer los derechos humanos (DD.HH.) y la democracia; propone estrategias, objetivos, resultados y un plan.

10 Resumidamente, el Proyecto justifica su ejecución en la necesidad de que el “goce efectivo de los derechos humanos se convierta en una condición indispensable para garantizar el crecimiento económico, la gobernabilidad y la democracia” 1. Afirma que la actual administración de justicia, vulnera los derechos humanos y las garantías judiciales mínimas; que “la justicia parece incapaz de satisfacer principios bien establecido en... juicio justo y... una justicia... independiente e imparcial”. Algo más, se afirma que “existen demoras en el desarrollo, entendido en el sentido amplio, debido a la existencia de factores negativos que no pueden ser ignorados”, que, “existen situaciones de urgencia en materia

de derechos humanos, como consecuencia del atraso estructural de la

formación social boliviana... y de los nuevos fenómenos resultantes del ajuste estructural que han producido entre otras cosas desempleo y migraciones internas”

Se insiste en el “desconocimiento de la población sobre sus derechos y las instancias a las cuales podrían acudir en caso de que éstos se violen”.

Define 6 resultados: 1. Viceministerio de Derechos Humanos reforzado y equipos de trabajo organizado para atender problemas de DD. HH., de los pueblos indígenas, de la mujer y niño 2. 2. Un Centro de Investigación en DD. HH. 3. Un Centro de Documentación, Publicaciones y Difusión. 4. Un Centro de Educación y Capacitación en ejecución de Programas. 5. Dirección de Defensa Pública reforzada. 6. Coordinación entre sector público y sociedad civil en DD. HH. mejorada.

Especifica que los destinatarios o beneficiarios del proyecto debían ser: a.

Por una parte, toda la población en general y

b.

Especialmente, los grupos más vulnerables de nuestra sociedad: Pueblos Indígenas, Mujer y Niño.

1

Documento Proyecto: Promoción y Defensa de los Derechos Humanos. s/f. Archivo PNUD.

11 Las estrategias son variadas como: •

Creación de grupos de trabajo en la instancia gubernamental para desarrollar áreas de pueblos indígenas, mujer, niño, investigación.

• Creación de un grupo interministerial en materia de DD. HH. • Capacitación de capacitadores. • Difusión de nuevos códigos de conducta y principios básicos. • Hacer posible el acceso a la justicia y a la protección y defensa de los DD. HH. a amplios sectores postergados de la población. • Apoyo al proceso de reforma legislativa. • Programa nacional de educación. • Medidas contra la discriminación contra la mujer. • Prioridad en el ordenamiento jurídico legal relativo a los Pueblos Indígenas. El objetivo central, reza ”contribuir a la vigencia efectiva de los DD. HH.: civiles y políticos, económicos, sociales y culturales, así como de los llamados de tercera generación como el derecho a un medio ambiente sano y el derecho al desarrollo para todos los bolivianos y especialmente de los grupos más vulnerables de ellos 3”.

De cuatro resultados y dos Objetivos Inmediatos propuestos, el resultado 3, es el referido al “Centro de educación y Capacitación en derechos humanos en funcionamiento en el Ministerio de Justicia”. Finalmente, adjunto el proyecto, se añade un Plan de Trabajo de abril 1999 a marzo 2001.

Razones desconocidas hacen luego que el documento guía de este Proyecto sea otro denominado “PLAN NACIONAL DE ACCIÓN PARA LA PROMOCIÓN Y PROTECCIÓN DE LOS DERECHOS HUMANOS” fechado y rubricado en marzo del 99 por un nuevo Viceministro de Justicia y Derechos Humanos.

2 3

En los documentos se utiliza en algunos momentos niño, en otros menor. Documento Proyecto.

12 Este documento tiene otra estructura aunque las mismas líneas matrices. Según el cual, la tercera actividad específica es la relacionada a la Educación, Capacitación, Difusión y Documentación, que se afirma es esencial e indispensable para la promoción y defensa de los derechos humanos y de relaciones estables y armoniosas. Comprende, programas radiales, en TV y periódicos, edición de cartillas y afiches y una publicación periódica, todo esto conforme a una estrategia.

Delimita los destinatarios de la educación en derechos humanos: -

Público en general, es decir sectores no especificados.

-

Sectores específicos: •

Operadores de justicia (Jueces, Fiscales, Abogados)



FF. AA.



Policías



Personal misiones.



Organizaciones de la sociedad civil con efecto multiplicador (mejer, niño, pueblos indígenas).

Operadores de justicia

Currículum Educación Formal

FF. AA.

Policías

Mujer

Personal Prisiones

Niño

Con efecto multiplicador ó capacitación a capacitadores

ONGs. de la Soc. Civil

Pueblos Indígenas

13 El nuevo Plan de Trabajo del “Plan Nacional de Acción” en su resultado 3, prevee varias actividades (Ver Anexo 1). Actividades que son parte de un diseño metodológico de mayo 2000 adelante, es decir, para el segundo período, en realidad el más significativo de este proyecto. Existe adicionalmente otro Plan de Trabajo más específico por meses, correspondiente a este período y al que tenemos que remitirnos.

Finalmente, señalar que el Proyecto y el Plan fueron respaldados técnica y financieramente por la OACDH y PNUD, con una contraparte del gobierno boliviano. Todo para un programa de 2 años de duración.

El proyecto finalizó en abril del 2001, sin haber concluido con el desarrollo de objetivos, planes y metas y, sin la seguridad de su continuidad como estaba pensado.

D.

ACTIVIDADES EJECUTADAS Y PRODUCTOS.

Durante el primer año de este proyecto, la conformación de su equipo de “expertos”, la formación de estos por instructores internacionales y el ordenamiento administrativo consumieron gran parte de las energías.

Por deducción del informe final, puede concluirse que las actividades en materia educativa durante del primer año, se ciñeron al bosquejo, a los contactos internacionales del proceso de reforzamiento institucional del Ministerio de Justicia que era uno de los objetivos centrales del proyecto, a concebir y tratar de organizar el Centro de Investigación, el de documentación, firma de convenios y problemas organizativos internos. Talleres, seminarios, sensibilización y cursos externos no aparecen, hasta abril del 2000, salvo estos: • Encuentro Nacional de Docentes de DD. HH., dirigido a catedráticos de universidades públicas y privadas de 1 día (nov/99). • Seminario Nacional: “La protección de los DD. HH. y la FELCN”, para 30

14 funcionarios, de 2 días (ene/2000). En el segundo año, se anotan los siguientes acontecimientos: • Seminario: “Los DD.HH. en la Educación Universitaria” para docentes y autoridades Universitarias públicas y privadas, de 2 días (mayo/2000). • Jornada para la incorporación de la temática de DD.HH. en la educación inicial, primaria y secundaria, con ONGs y Ministerios del Poder Ejecutivo, de 1 día (jun/2000). • Curso de capacitación: “Los DD. HH. y la formación policial” para policías de todo el país, de 5 días (jun/2000). • Curso capacitación “Las fuerzas Armadas y la protección de los DD. HH.” dirigido a Jefes y Oficiales de las FF. AA. a nivel nacional, 5 días (jul/2000). • Seminario Taller: “Los DD. HH. de grupos específicos” dirigido a 32 funcionarios/as del Poder ejecutivo, 3 días (jul/2000). Con organizaciones de la sociedad civil: • Seminario talleres: “El rol de las organizaciones de la sociedad civil en la exigibilidad y defensa de los derechos humanos de las mujeres”, 3 días (jul/2000) • seminario taller: “Mecanismos de Protección de los DD. HH. de los Pueblos Indígenas”, de 3 días (agto/2000) Otros: • Seminario taller de Capacitación para facilitadores de DD.HH. de las FF.AA. y Policía Nacional de Tarija, para 30 facilitadores, 2 días (dic/2000) • Seminario taller de Capacitación para facilitadores de DD.HH. de las FF.AA. y Policía Nacional de Santa Cruz, para 30 facilitadores, 2 días (dic/2000) • Seminario taller de Capacitación para facilitadores de DD. HH. de las FF.AA. y Policía Nacional de Sucre, para 30 facilitadores, 2 días (dic/2000)

PRODUCCIÓN DE MATERIAL EDUCATIVO: • Cartilla “Conociendo y reflexionando sobre los Derechos Humanos.

15 •

Cartilla “Conociendo y reflexionando sobre los Derechos Humanos de las

mujeres”. • Cartilla “Conociendo y reflexionando sobre los Derechos Humanos de la niñez” • Cartilla “Conociendo y reflexionando sobre los Derechos Humanos de los Pueblos Indígenas”. • Currícula sobre DD.HH. para Centros de enseñanza de las FF. AA. • Currícula sobre DD.HH. para Centros de enseñanza de la Policía Nacional. • Currícula sobre DD.HH. para la enseñanza de los DD.HH. en universidades públicas y privadas. • Manual: Instrumentos metodológicos dirigidos a educadores y capacitadores en las diferentes temáticas. • Documento de Sugerencias Metodológicas para la Enseñanza Académica de los DD.HH. en Universidades. • Dossier de bibliografía para la materia de DD.HH. dirigido a Centros de Formación de las FF.AA. y de la Policía Nacional. • Currícula de DD.HH. en la educación inicial, primaria y secundaria4. • Guía metodológica para facilitadores de Derechos Humanos de la Policía Nacional. • Guía metodológica para facilitadores de Derechos Humanos de las FF.AA. • Guía metodológica para técnicos de ONGs y activistas de Derechos Humanos. • Manual: “Cómo hacer una denuncia por violación a los Derechos Humanos”. Destaca las currículas para las FF.AA, Policía Nacional y Universidades, que fueron validadas y trabajadas de manera conjunta con dichas instituciones.

Existen otros

materiales internos programados para su elaboración, algunos de los cuales no fueron ejecutados y otros que no se pudo ubicar;

se tratan de materiales que están

programados como: 4

Trabajada para la Reforma Educativa con el “Equipo Técnico de transversales” del Ministerio de Educación.

16 •

Inventario y análisis de las normas internacionales referente a pueblos

indígenas, género, familia y niño. • Diseño de metodología e instrumentos para dar seguimiento y evaluar el impacto de los seminarios. • Diagnóstico de la problemática de los DD.HH. y de las necesidades de los beneficiarios. • Plan de capacitación. E.

LUCES Y SOMBRAS.

1. El mayor logro del Programa de Promoción y Defensa de los Derechos Humanos (PROY/BOL 97) es haberlo concebido desde el Estado, desde el Gobierno como secuencia del influjo de los derechos humanos como paradigma; así sea, en la corriente dominante de los derechos civiles y políticos.

El tradicional Estado

conculcador y represor de los derechos humanos que conocía la ciudadanía,

de

pronto, al asumir tareas de promoción y difusión y ejecutar directamente programas de DD.HH ha dado un giro que se espera sea sin retorno.

Es una respuesta a los movimientos sociales, a la “sociedad civil” en general y las ONGs ligadas a la defensa de los Derechos Humanos, que estuvieran permanente exigiendo a los administradores del Estado, la protección y defensa de los derechos constitucionales consagrados en la C.P.E. y en la normativa internacional ratificada por el Estado Boliviano en su desarrollo.

2. El proyecto partió desde su concepción, asimilando las tendencias actuales de la Educación en Derechos Humanos y los procesos sistémicos y sostenidos para generar valores y nuevos comportamientos, así lo atestigua el primer documento Proyecto. Teóricamente no se queda en la emisión de cartillas, difusión de spots publicitarios, afiches por doquier, campañas de sensibilización y declaraciones

17 gubernamentales como ocurre corrientemente en otras actividades en los ministerios. La idea está enmarcado en lo más avanzado de la EDH.

3. En propósitos y avances, son significativos los niveles de coordinación y trabajo conjunto con las FF.AA., la Policía Nacional, el Ministerio de Educación, el sistema de la Educación Superior y algunas instancias del Poder Ejecutivo y Judicial en materia de derechos humanos.

Como eje estatal de la política de justicia, la

coordinación en la esfera gubernamental, para una acción conjunta en derechos humanos, es un esfuerzo plausible.

4. Son rescatables los trabajos denominado currícula para las FF.AA., Policía Nacional, Universidades y Educación Formal. La institucionalización de la enseñanza, formación y capacitación de los derechos humanos con una mirada académica tuvieron sus frutos parciales pero importantes, es el caso de la currícula para los Institutos de las FF.AA. que vía resolución Nº 504/2000 del Comando en Jefe se incorporó oficialmente en su Pensum de formación militar.

Para los casos de la Policía Nacional, Universidades Públicas y Educación Formal, quedó sujeto a un proceso acorde a sus normas internas y dejando en manos de estas instituciones. En el de las Universidades Privadas, el Ministerio de Educación instruyó la incorporación de la materia de derechos humanos en los programas de las carreras de Ciencias Jurídicas y Sociales.

5. Más de 200 oficiales de niveles medios y superiores (FF.AA. y Policía) fueron capacitados en condición de replicadores al interior de sus guarniciones. Los seminarios talleres de 5 días

acompañados de expertos internacionales,

permitieron el desarrollo de contenidos teóricos nacionales e internacionales, el análisis de casos y la reflexión de las causas y consecuencias de la violación estatal de los derechos humanos.

18 6.

La elaboración de 4 cartillas de amplia difusión, el Manual de Instrumentos

Metodológicos para Capacitadores, el Dossier de bibliografía de DD. HH. dirigido a Centros de Formación de las FF. AA. y Policía Nacional, la Guía Metodológica para la capacitación en DD. HH. para ONGs y el Marco de Procedimientos para hacer denuncias ante el Sistema Interamericano de protección de los derechos, son sin duda aportes a la escasa producción de materiales especializados en educación en y para los derechos humanos.

La calidad de los mismos, como las iniciativas currículares, es materia de otro análisis.

7. El esfuerzo de capacitación a 70 autoridades y docentes de la materia de DD.HH. y materias vinculadas en las Universidades públicas y privadas; la generación de reflexión y debate sobre la formación académica de futuros profesionales, quedará como un aporte, digno de emulación.

8. Se destaca, el trabajo con la reforma Educativa en la provisión de insumos sobre derechos humanos de grupos específicos, para la educación formal primaria y secundaria. Se elaboró una propuesta de capacitación para Asesores Pedagógicos en derechos humanos.

9. En el propósito de conformar un equipo permanente para el Centro de Educación y Capacitación dentro del Viceministerio de Justicia y Derechos Humanos, se capacitó profusamente a dicho equipo, con el apoyo de asesores y expertos internacionales. No cabe duda que este debe ser uno de los logros nítidamente consolidados, así lo grafica los cursos, seminarios y talleres diversos.

10.

Metodológicamente, los seminarios y talleres en todos los casos, enriquecieron a

los participantes por el manejo de materiales y medios, por la presencia y aporte de expertos internacionales.

La información y teoría

estuvo complementada con

19 talleres participativos, con interacción educativa, con estudios de casos concretos de la realidad boliviana e internacional. Este es un intento por cierto, por entrar en procesos educativos más compactos, con talleres de 3 a 5 días continuos, para superar las charlas y disertaciones aisladas. Los programas de los Seminarios–Taller tenían diseño de temas integrales.

11.

Quedan algunas memorias de los Seminarios–Taller como fuente para estudiar la

experiencia con mayor detenimiento.

De las sombras se tiene la obligación de aprender, más aún, cuando el país tiene un corto recorrido en educación en derechos humanos con relación a otros países latinoamericanos y cuando se vislumbra nuevos intentos por venir. Se pudo identificar: 1. Proy/Bol 97 tuvo dos fases, la primera de avance lento e incierto 5, de planes en permanentes modificaciones y de diferencias de coordinación interna y externa. De acefalía

de dirección de un Coordinador que articule el equipo técnico

multidisciplinario. Una segunda fase (en el segundo año) con mejores resultados, período en el que se desarrolla básicamente el 70% de las actividades ejecutadas. Razones de organización interna, como contínuos cambios de la coordinación y equipo técnico, fueran los enemigos de este proyecto educativo. Si a ello, se agrega la conocida inestabilidad y cambios permanentes en el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, propio del Poder Ejecutivo por razones políticas, puede deducirse las dificultades para sostener una línea y una dirección en el Proyecto.

Cinco visitas de evaluación externa que no lograron armonizar y consolidar el proyecto. Con razones propias, los financiadores cubren una presencia que según los protagonistas activos, obstaculizaba la responsabilidad del sujeto ejecutor que era el Ministerio de Justicia.

5

Informe de coordinación (octubre 2000 – mayo 2001)

20 Se valora que el Proy/Bol 97 no cumplió ni con el 20%, si se evalúa por resultados. El mundo administrativo es un mundo en el que este proyecto se fue enredando, situación que no es materia de nuestra atención, pero que corresponderá al Ministerio de Justicia, releer el

proceso con detenimiento si se pretende la

reformulación del proyecto en el futuro.

2. El proyecto de Promoción y Defensa de los DD. HH. era en realidad un proyecto mega. Pretendía al mismo tiempo de estructurar un Centro de Educación en DD. HH., el fortalecimiento del Viceministerio de Justicia y DD.HH., el funcionamiento de un Centro Documental, un Centro de Investigación, reforzar la Dirección de Defensa Pública y mejorar la coordinación institucional gubernamental e institucional con ONGs de la sociedad civil.

Objetivos ambiciosos al mismo tiempo, respaldado por un mega financiamiento, neutralizó la tarea educativa y la articulación de un verdadero Centro de Educación al punto que no que daba claro que quería el proyecto 6. Por ello los resultados fugases de la educación en derechos humanos para semejante proyecto.

3. De los mismos protagonistas se deduce que hubo muchas deficiencias en el diseño del proyecto mismo. Los planes cambiaban permanentemente los formatos de trabajo y los diseños metodológicos, revisados hoy provocan gran confusión. El Proyecto y luego el Plan Nacional de Acción, sufre de deficiencias en el momento de definir actividades, de plasmar sus objetivos; la lista de estrategias quedó en la mención.

4. Más allá de las declaraciones, esta experiencia en EDH fue implementada pensando en el desarrollo de la normativa vigente, en la difusión de los mecanismos, de conocimientos, antes que en la generación de procesos de reflexión de carácter ético. 6

Testimonio de protagonistas.

21

5.

La amplitud de temas abordados en los Talleres, si bien permiten una amplia

información, no da lugar a procesos de

capacitación en determinados temas

específicos que un sector determinado requiere en su acción diaria.

Una

multiplicidad de temas nacionales e internacionales juntos, son materialmente difíciles que pasen del mero hecho de informar, ilustrar, desarrollar conocimientos y saberes, pero nada más que eso.

6. La incorporación de derechos específicos, indígenas, mujer y niño no quebraron el sesgo hacia los derechos civiles y políticos. Por la naturaleza del gobierno vigente (Banzer), el desarrollo de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales (DESC) equivaldría a poner en tela de juicio el modelo económico, la exclusión social y las causas de la pobreza extrema.

7. No hubo seguimiento a la acción de los replicadores en las FF.AA., Policía Nacional u ONGs. No se tiene constancia alguna de las mismas.

8. El Proyecto tuvo permanentes “problemas de coordinación, gestión y planificación estratégica” 7, incluso en comunicación interna y previsión para el seguimiento de actividades.

9. El Plan de Acción no contempla indicadores de progreso ni actividades de seguimiento de las mismas. La ausencia en mecanismos de seguimiento y evaluación se dejan notar.

10.

La coordinación y relación con ONGs de la sociedad civil fue intranscendente, sin

ningún efecto posterior. Para la sociedad civil, con cierta desconfianza de que un despacho del gobierno de Banzer haga promoción de los derechos humanos. 7

Informe N° 25/2001, Min. Justicia. Hace referencia al criterio del PNUD. Junio 2001

22

11. El equipo técnico, sobre el que se vació grandes esfuerzos, fue disgregándose antes de la misma culminación del proyecto.

12.

Ha transcurrido más de un año de este esfuerzo y queda de él muy poco:

materiales en un sótano y ninguna experiencia que pueda ser reciclada al interior del Ministerio.

13.

Finalmente, un proyecto de educación en derechos humanos de 2 años, con 1

efectivo, no puede desarrollar con seriedad proceso educativo alguno.

Capítulo II. LA EXPERIENCIA EDUCATIVA DEL DEFENSOR DEL PUEBLO.

A. NUEVO ESCENARIO Y NUEVO ACTOR EN DERECHOS HUMANOS. Conciencia colectiva de la necesidad de reformas jurídico–constitucionales para garantizar el pleno ejercicio de los derechos humanos y profundizar el sistema democrático actual, dieron origen al Defensor del Pueblo, para resarcir una larga historia de abusos indiscriminados del Estado contra una población que resistió desde la sociedad civil. Con la Ley 1818 desde abril de 1998 y efectivamente desde octubre, concluida la etapa organizativa, el Defensor del Pueblo se enfrascó en el cumplimiento de su mandato, dentro del cual, está la “promoción, vigencia y divulgación de los derechos humanos” y según el inciso 13 del artículo 11º “diseñar, elaborar, ejecutar y supervisar programas para la defensa promoción y divulgación de los derechos humanos, así como establecer, mecanismos de coordinación con organismos gubernamentales y no gubernamentales para estos efectos”.

23 El acceso a la información y conocimiento de los principios y normas nacionales e internacionales que garantizan los derechos de las personas, constituye uno de los imperativos focalizados para el ejercicio en los hechos de los derechos humanos que le son innatos a la población.

La idea troncal de educar, formar y capacitar para lograr cambios de conducta, para generar valores y hábitos de solidaridad, fue trabajada por el Defensor del Pueblo desde su inicio mismo, bajo la convicción de que los alcances de su gestión defensorial tendrían mayor impacto en la medida de que la ciudadanía sea parte activa y conciente de la defensa de los derechos humanos.

El período iniciado en 1982, de apertura democrática, ha articulado un nuevo escenario en el que un nuevo actor como el Defensor del Pueblo está implementado programas educativos en derechos humanos que busca enriquecer la experiencia boliviana en esta materia.

B. PROYECTOS Y PROGRAMAS EDUCATIVOS. La línea de promoción y divulgación de los derechos humanos y ciudadanos, considerada de importancia estratégica, organizativamente está ordenada en el Área de Promoción y Análisis, dependiente de la Adjunta primera. No por ello obvio, pues la acción del Adjunto de Atención de Quejas, desarrolla una permanente orientación y atención de casos o demandas de los afectados que produce acciones educativas que gradualmente contribuyen en la información de los derechos que tiene la ciudadanía. La atención y canalización

de miles de denuncias respaldan este cometido, mas aun, cuando las

mismas salen de la oscuridad y se hacen públicos. La cultura del silencio fomenta los atropellos y conspira contra la dignidad humana. Ser escuchado, saber que las agresiones, abusos y omisión estatal está penado por leyes nacionales y respaldado por una normativa internacional, tiene efectos importantes en las víctimas; efectos posiblemente limitados, pero de significación en el descubrimiento de posibilidades en su imaginario y en sus hábitos. Todo sin duda tiene

24 repercusión en el proceso cognitivo del sujeto que descubre la injusticia habitual y se va reconociendo como ser humano “con derechos”. El Área de Programas Especiales, la otra Adjuntoría que vigila y defiende los derechos humanos de sectores mayoritarios como el de la niñez–adolescencia, tercera edad, mujer, campesinado y pueblos indígenas, que están expuestos a situaciones de riesgo, desarrolla por su propia dinámica otras acciones que tienen frutos educativos. Específicamente, esta área impulsa escenarios de análisis, debate, encuentros, producción, coordinación, difusión en derechos humanos. Talleres y seminarios son parte también de su accionar que en coordinación interna, contribuyen en la estrategia institucional de educación en derechos humanos.

La “Política y estrategia de comunicación” del Defensor del Pueblo (enero 2001) en ejecución, es otro de los mecanismos que refuerzan la estrategia de educación, en virtud del “uso privilegiado de la comunicación en el desempeño de la oferta educativa... Si bien educación y comunicación tienen aspectos metodológicos específicos, la comunicación ofrece al ámbito de la educación, principalmente en materia de derechos humanos y ciudadanos, una serie de técnicas e instrumentos que potencian sus resultados“ 8. La estrategia educativa para los derechos humanos del Defensor del Pueblo, precisamente “esta formulada desde una perspectiva comunicacional”.

Materiales informativos e ilustrativos de toda naturaleza y en todas sus formas, para distintos sectores, respaldan todo el proceso educativo.

Todo muestra que las acciones educativas cruzan a todas las Unidades organizativas del Defensor del Pueblo, aunque la educación

en y para los derechos humanos

entendida como proceso sistémico, que requiere una atención sostenida para producir cambios cualitativos en la conducta, en el comportamiento de la población, está materializada en un proyecto específico.

25 1.

LOS PRIMEROS PASOS.

Durante el primer año de gestión (oct. 98 – marzo 99) el Defensor del Pueblo definió los objetivos y líneas de acción de la promoción y divulgación de los DD.HH., el carácter estratégico de las mismas, lo esencial del conocimiento de los derechos humanos y la definición de que los resultados de la educación en derechos humanos “sólo pueden ser vistos en el mediano y largo plazo 9”.

Cuatro líneas de acción: Difusión de los derechos humanos, Capacitación, Diagnóstico y análisis y Centro de documentación e información. Este diseño grueso fue respondiendo en razón de la demanda poblacional que volcó sus expectativas en el nuevo organismo.

Antes de la “capacitación”, hubo información, difusión intensiva y extensiva sobre la “misión y los procedimientos centrales” del Defensor del Pueblo. Rol, funciones, atribuciones, limitaciones, etc., que la Ley 1818 le confiere, es decir, tareas y actividades de difusión y su atención a la demanda social y a los compromisos y convenios firmados con ONGs, fue lo dominante en esta primera fase.

Resalta una encuesta nacional encargada sobre percepción ciudadana sobre los derechos humanos y ciudadanos en el país, con una muestra representativa, insumo que orientó el desarrollo institucional.

2. ACCIONES EDUCATIVAS. Durante el segundo año (abril 99 – marzo 2000) se desarrollan muchos proyectos de difusión y comunicación interactiva, que son acciones educativas (Ver Anexo 2).

8

“Política y Estrategia del defensor del Pueblo”.

26 Es decir, las labores de información y sensibilización con los instrumentos y medios pedagógicos y didácticos más convenientes, extensos y variados, constituyen acciones

educativas y contribuyen a un mayor acceso de la población al

conocimiento de sus derechos; pero son acciones limitadas por sus objetivos, por sus contenidos, por la ausencia de sistematización, seguimiento y evaluación de resultados.

En correspondencia, el Defensor del Pueblo se dotó de un Programa educativo de mediano plazo y concebido como proceso sistémico, continuo y sostenido. 3. PROGRAMA QUINQUENAL. Elaborado como trabajo de consultoría, el “Programa de Educación en Derechos Humanos y Ciudadanos 1999 – 2004”, fue presentado y compartido con instituciones públicas y ONGs que trabajan y cuentan con experiencia en derechos humanos (mayo 99).

Este documento concluye precisamente en un Plan General y arma los principios y visión educativa del Defensor del Pueblo en educación en y para los derechos humanos. Delinea necesidades, concepto de la EDH, los desafíos, el contexto, los asuntos más sensibles, objetivos, metas. Sostiene que el mandato emanado de la Ley 1818 en promoción, “implica el desarrollo de actividades educativas sistemáticas a fin de que la población tenga conciencia plena sobre sus derechos y obligaciones y pueda, en consecuencia, ejercitarlos apropiadamente”. Para ilustrar propone 2 objetivos generales: •

Promover el respeto y la protección de todos los derechos humanos mediante actividades educativas destinadas a los miembros de la sociedad boliviana.

9

Informe Anual del Defensor del Pueblo 98 – 99. Pág. 222

27 •

Promover la interdependencia, la indivisibilidad y la universalidad de los

derechos humanos, incluidos derechos civiles, culturales, económicos, políticos y sociales, así como el derecho al desarrollo. Y como objetivos específicos: •

Fomentar la importancia que reviste la enseñanza de los derechos humanos para fomentar de la democracia, el desarrollo sostenible, el impacto de la ley, la convivencia pacífica, así como para la protección del medio ambiente;



Reconocer el papel de la enseñanza de los derechos humanos como estrategia para la prevención de las violaciones de esos derechos,



Incorporar los derechos de la mujer como parte integrante de los derechos humanos en todos los aspectos de la educación en y para los derechos humanos;



Alentar el análisis de problemas crónicos e incipientes en materia de derechos humanos, para encontrar soluciones compatibles con las normas a ese respecto.



Fomentar los conocimientos sobre instrumentos y mecanismos para la protección de los derechos humanos y la capacidad de aplicarlos en el ámbito nacional y local;



Dotar a las comunidades y a las personas de los medios necesarios para determinar sus necesidades en materia de derechos humanos y velar por su satisfacción;



Alentar las investigaciones y la elaboración de material didáctico que sustente estos objetivos;



Establecer vínculos de cooperación y comunicación permanentes con las instituciones internacionales dedicadas a la educación y capacitación en derechos humanos.

Define como población objetivo, primero a “grupos específicos cuyos derechos son violados en forma persistente”, los más vulnerables como niños (as), jóvenes, mujer,

28 pueblos indígenas y “grupos en los que se genera más continuamente acciones conculcadoras de los derechos humanos”, como municipios, cuarteles, prefecturas, escuelas, centros de salud, etc.

Luego está el grupo de personas que pueden

“mediar o influir con su opinión entre los actores directamente involucrados” radio, televisión y medios de comunicación social.

Cuatro resultados propuestos en el Plan con sus respectivas actividades, pueden dar la dimensión de la presente propuesta:

Resultado 1:

Formación, educación e investigación.

Actividades: • Centro de educación e investigación en DD. HH. • Revisión de la currícula escolar. • Apoyo a la educación universitaria en DD. HH. • Curso de Postgrado de educación en DD. HH. Resultado 2:

Capacitación y actualización

Actividades: • Seminarios y Talleres. Resultado 3:

Comunicación interpersonal y grupal.

Actividades: • Talleres de Comunicación Comunitaria • Convivencia para los DD. HH. Resultado 4: Información y difusión Actividades: • Elaboración, producción y difusión de materiales.

29 Complementan este programa,

módulos y/o áreas temáticas lo suficientemente

simples como para ser replicadas: –

Normatividad internacional en DD. HH.



Responsabilidad pública y privada.



Cultura ciudadana.



Transparencia y control social.



Educación en DD. HH.



Comunicación, medios de comunicación y DD. HH.



Desarrollo humano, derechos económicos y reformas del estado.



Educación para la paz y prevención de conflictos.



Promoción institucional del Defensor de Pueblo.

Culmina el programa con un componente de seguimiento y evaluación de las actividades, otra de organización y las fases de implementación, a saber: Introductoria, de Profundización y de Consolidación;

del que seguramente se

desprendió matrices de planificación, matrices de resultados y/o diseños metodológicos.

Resumiendo, la línea, la propuesta educativa del Defensor del Pueblo esta diseñada en este “Programa de Educación en Derechos Humanos y Ciudadanos 1999 – 2004”, conocido como Programa Quinquenal y sobre la base de la cual se elaboró el Marco Lógico para hacer operativo el programa

4. MARCO LÓGICO PARA EL PROGRAMA DE CAPACITACIÓN EN DERECHOS HUMANOS Y CIUDADANOS DEL DEFENSOR DEL PUEBLO. El Programa quinquenal se fue plasmando en el Marco Lógico, base para la elaboración de los siguientes proyectos en el segundo año de la gestión (1999 – 2000):

30 •

Educación en Derechos Humanos y Ciudadanos en las Fuerzas

Armadas (oct. 99) •

Educación en Derechos Humanos y Ciudadanos en la Policía Nacional (feb. 2000)



Educación en Derechos Humanos y Ciudadanos a servidores públicos (sept. 99)



Capacitación para la Formación de Educadores en Derechos Humanos y Ciudadanos (agt. 99)

A estos cuatro proyectos, se añadió en el último año los: •

Talleres de Capacitación con Ciudadanía en Derechos Humanos y Defensor del Pueblo, dirigido especialmente al área rural y periurbana

Estas 5 líneas de acción son las que en la actualidad se vienen implementando: 4.1 Educación en Derechos Humanos y Ciudadanos en las FF. AA. Respaldado por un Convenio Interinstitucional que incorpora a sus 3 fuerzas y sus direcciones de Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario, en trabajo coordinado, se desarrolló un ciclo de talleres, que para mediados del 2002, llegaban a 1.200 oficiales capacitados. Los talleres destinados a oficiales están diseñados para tener efecto multiplicador con la Tropa, Sargentos y Suboficiales, contando como educadores, a los oficiales ya capacitados, en labor replicadora, bajo la supervisión del equipo del Defensor del Pueblo.

El acuerdo que rige hasta el 2003 permite un compromiso conjunto sobre la “aprobación institucionalizada, seguimiento, evaluación y control de los programas de capacitación en los planes de estudio” 10. Comprende asimismo implementar un programa con varios proyectos de capacitación y educación en los planes de estudio de formación 10

académica militar y en los planes de

Informe Anual del Defensor del Pueblo 1999 – 2000 Pág. 141.

31 instrucción del Servicio Militar Obligatorio y Premilitar. Al respecto, se ha avanzado en un borrador de currícula que debe ser validado por las instancias superiores de las FF.AA. Preveen 3 niveles: Preformación (Clases), Formación (Colegio Militar, las 3) y Especialización (Academia Superior), con 40 Hrs de carga horaria para los cuales se elaborará materiales especiales.

Los objetivos, buscan la información integral, la capacitación y resultados en cuanto al cambio de actividades para un mejor y humano trato dado a la población juvenil y población en general, disminuyendo de esta manera la violación ostensible de los derechos en los cuarteles. Se define formar formadores, instruir a instructores en Derechos Humanos, capacitar a capacitadores.

Este proyecto y convenio tiene un alcance nacional, y como tal, incorporó a oficiales de las 3 fuerzas, de todas las unidades de los 9 departamentos del país.

Metodológicamente, los talleres de 3 días incorporan “casos reales propuestos por las instituciones, de acuerdo a su propia experiencia”, donde los participantes ”trabajan activamente en el análisis, discusión y solución de casos. Esto permitió generar una visión crítica y reflexiva respecto al papel de las fuerzas Armadas en el espacio democrático”11.

Otros elementos llaman la atención de este proyecto, es haber logrado el reconocimiento de parte de las FF. AA. a los oficiales que realizan acciones destacadas en DD.HH., el mismo que aun no está instituido, pero se aplica felicitaciones escritas a los oficiales

que difunden los derechos humanos,

reconocimiento que sirve para el puntaje de su carrera militar.

11

Informe Anual del Defensor del Pueblo 1999 – 2000 Pág. 126

32 Se recurre a un sistema de evaluación de los participantes del proceso educativo a la culminación de los talleres, de los que no se conoce sistematización, es decir, resultados y evaluación de la evaluación. El plan de supervisión de la réplica o reproducciones se iniciará desde agosto del 2002. El control global del proceso se la realiza vía Talleres de Planificación y Evaluación anual de las partes.

En cuanto a producción de materiales, se editó 2.000 ejemplares del “Manual sobre el ejercicio de los Derechos Humanos en las FF. AA” destinada a instructores, como guía de capacitación y consta de 7 módulos. Se imprimió 25.000 cartillas para la tropa, un rotafolio: ”Derechos Humanos en los cuarteles” y un afiche como material complementario al Manual. También acompañan

como

materiales

didácticos,

cuñas

radiales

y

videos

de

sensibilización con los mensajes de la Defensora del Pueblo. 4.2 Educación en Derechos Humanos y Ciudadanos en la Policía Nacional. Este Proyecto que va desde el año 2.000, tienen como referencia un Convenio firmado en marzo del 2002, donde la capacitación de oficiales y la elaboración de las currículas unificadas para sus institutos policiales, son las ideas troncales.

Se trabaja más directamente con los Comandos Departamentales. A la fecha, sujeto a un cronograma, se implementó 5 talleres de los 10 que están programados.

Con relación a la producción de materiales didácticos, está en elaboración un Manual Instructivo en la educación de los derechos humanos en la Policía Nacional

dirigido a oficiales e instructores que puedan replicar los cursos

asimilados. Se elabora también una cartilla de Principios Básicos de derechos humanos, para acompañar precisamente el proceso de reproducción o réplica con clases o tropa de la institución.

33 4.3

Educación en Derechos Humanos y Ciudadanos en Servidores Públicos. El sistema de quejas del defensor del Pueblo y la frecuencia absoluta considerable de casos violatorios originados en la administración pública por desconocimiento de sus responsabilidades constitucionales, de la Ley 1818 y los principios del servicio público y función social, permitió proyectar información y capacitación en este sector.

La Ley 1818 faculta al Defensor del Pueblo velar por el cumplimiento y vigencia de los derechos y garantías de la población en su relación con la administración pública, así como promover y divulgar los derechos humanos. Precisamente bajo este mandato, se consumó Convenios con el Servicio Nacional de Administración de Personal (SNAP) y con el Centro de Capacitación de la Contraloría (CENCAP). Con el SNAP, organismo estratégico por su responsabilidad en la política de formación y capacitación de funcionarios del Estado, se elaboró un módulo pedagógico en derechos humanos para ser incorporado en el sistema de capacitación de los funcionarios de la administración pública. La incorporación de dicho módulo, tiene significación para el Defensor del Pueblo, en la medida en que la instancia nacional de capacitación de la administración pública, permanente y regularmente desarrolla cursos de mejoramiento con todos los sectores gubernamentales.

Emergente de estos acuerdos, se desarrollan cursos de capacitación, como los realizados con el personal del Ministerio de Trabajo, de la Dirección de Pensiones, de la Alcaldía de la Ciudad de El Alto y del Servicio Nacional de Impuestos;

algunos se han extendido a todas las oficinas departamentales

(Contraloría y Servicio de Impuestos). Con la Federación de Municipios, se ha iniciado un cronograma de eventos, como el programado para alcaldes.

34 Metodológicamente los cursos cuentan con un diseño participativo y reflexivo y con un sistema de evaluación, como: •

Evaluación de la adquisición de conocimientos, destrezas y aptitudes de los participantes.



Evaluación de la eficacia operativa de las entidades a las que pertenecen los participantes.



Evaluación de la satisfacción ciudadana al calificar la prestación de servicios12.

Materiales de apoyo producidos para este proyecto específico, acompañan los cursos, tales como un afiche de deberes y derechos de la ciudadanía en relación con servidores públicos; una cartilla de responsabilidades de los servidores públicos y, recientemente el

Manual en Derechos Humanos y Ciudadanos

para Servidores Públicos de 5 módulos. 4.4 Capacitación para la Formación de Educadores en Derechos Humanos y Ciudadanos. Esta línea de acción parte de la voluntad de incorporar la temática de los derechos humanos y Defensor del Pueblo en la currícula escolar de educación formal, capacitar a la planta docente y a la propia estructura del Ministerio de Educación. Este proceso de largo aliento como señala el informe 2000–2001 ha comenzado con la Normal Simón Bolívar, con un Módulo que cuenta con tres manuales: •

Uno para alumnos



Otro para docentes en aula y



Otro para alumnos de primaria en aula.

Se viene desarrollando talleres de capacitación para profesores del ciclo básico, como los 8 eventos con Fe y Alegría, en los cuales se utiliza videos y juegos 12

Informe Anual del Defensor del Pueblo 1999 – 2000 Pág. 143.

35 didácticos. Según el informe anual mencionado del Defensor del Pueblo, autoevalúa su acción con estos resultados: •

Convenio con el Ministerio de Educación.



Organización y funcionamiento de equipo técnico institucionalizado.



Manual de enseñanza de derechos humanos para la formación de alumnos normalistas validado.



Validación con el Ministerio del ramo, de una cartilla específica para alumnos (6 a 12 años) de primaria con dibujos y ejercicios a ser impreso.



Se propuso para validación una guía de Capacitación Docente para el trabajo de maestros con el alumnado en el ejercicio de los derechos humanos y ciudadanos.

4.5 Capacitación ciudadana. En respuesta a la demanda social de información y capacitación en derechos humanos y atribuciones del Defensor del Pueblo, en

abril del 2001 pasó a

constituir una línea que está dirigida básicamente a la promoción en el área rural y cordones suburbanos de la ciudad de La Paz.

Se la ha denominado Talleres de Capacitación en Ciudadanía en Derechos Humanos y Defensor del Pueblo y es parte de la estructura como está organizado hoy el equipo educativo de la institución.

Con una metodología participativa, los talleres básicamente de 7 hrs., es decir de un día, aborda 2 temas troncales: •

Derechos Humanos, historia, concepto, desarrollo, convenio 169, situación grupos vulnerables.



El Defensor del Pueblo, antecedentes, reformas de la CPE 1994, Ley 1818, atribuciones.

36 Por lo estrecho del tiempo, este esfuerzo no provoca dinámica de grupos, pero incluye en algunos casos sociodramas, la utilización de afiches, trípticos, papelógrafos, videos y grabaciones cuando las condiciones lo permiten. Acompaña siempre los talleres, un abogado que recibe quejas y orienta a los asistentes en el desarrollo del taller. La media de reclamos, anda por los innumerables problemas emergentes de la ausencia de certificados de nacimiento y/o su erróneo llenado y sobre los abusos de las autoridades.

Los talleres que se realizan de 2 a 3 por mes, congregan de 60 a 80 asistentes, pasando los 100 en algunos casos. Todos se desarrollan en bilingüe, aymara ó quechua, donde existen personal del municipio, maestros, jóvenes y policías; lugar donde también se busca relación con las denuncias recurrentes antes y después de los talleres, allí donde el Defensor del Pueblo cuenta con oficinas.

Son parte de esta línea de acción, las Ferias educativas realizadas en algunas ferias campesinas, donde se reciben quejas, se explica el rol del Defensor y se distribuye materiales; y, el programa de radio semanal de ½ hora de carácter informativo y educativo. c.

LUCES Y SOMBRAS.

1. La visión del Defensor del Pueblo, al considerar los resultados en educación en, de y para los derechos humanos sólo puede apreciarse en el largo plazo. De ahí, su aporte en procesos educativos sin abandonar todas las acciones de difusión posibles.

2. Conceptualmente la visión de la educación en derechos humanos del Defensor del Pueblo como conjunto de procesos de formación y capacitación para el desarrollo de actitudes, valores y creencias de solidaridad y compromiso con la dignidad de las personas, es la expresión de la asimilación de los aportes de las corrientes más progresistas en la educación.

37

3. Su experiencia educativa visto hasta acá, muestra indicios y repercusiones positivas. No debe olvidarse que se trata finalmente de un emprendimiento de los derechos humanos desde el Estado; las personas acostumbradas a ver el rol de los organismos estatales, sienten a la Defensora como divorciada de la política oficial, seguro por cierto, por el ejercicio de su autonomía y la peculiar conducción actual.

4. Una concepción humanista marca la propuesta educativa en derechos humanos del Defensor del Pueblo, en la línea de las Naciones Unidas, de la experiencia educativa de la UNESCO y la importancia de los derechos humanos en democracia.

5. El “Programa de Educación en Derechos humanos y Ciudadanos 1999–2004” como materialización de la visión del Defensor, constituye un buen referente, un buen inicio en la medida que no esta divorciado del rol institucional y refleja coherencia en principios y percepción del futuro.

6. La diversidad de materiales impresos, los manuales y cartillas, afiches, videos y otros específicos para los talleres y cursos, son valiosos recursos didácticos de calidad en su contenido y forma. Especialmente el Manual para las FF.AA. y el de Servidores Públicos son resaltantes.

7. En el Defensor del Pueblo, las acciones y procesos educativos van juntos y se hace compleja, por cuanto todas las adjuntorias cruzan su labor con la educativa; por ello Programas Especiales, por ejemplo, implementa talleres con el respaldo del equipo de educación y viceversa; la estrategia de comunicación respalda y se combina también en el desarrollo de las acciones. Sumamos a esto, el despliegue de eventos de sus oficinas regionales y de las oficinas donde se ha instalado.

8. Los talleres en el área rural, en aymara y/o quechua, en co-auspicio de municipios y autoridades comunitarias, son esfuerzos por incorporar a la población y autoridades a

38 la vigilancia al compromiso de los derechos humanos. Exposiciones (disertaciones) en quechua ó aymara son muestras de la superación en los hechos de la discriminación y del respeto por las culturas diversas de Bolivia.

9. Los pasos dados en la elaboración y validación de la currícula para la educación primaria, para los institutos militares y para la capacitación de servidores públicos en el SNAP, son importantes avances por la institucionalización de la enseñanza de los derechos humanos.

Todos los proyectos pasan por fases y períodos que requieren la mirada crítica para superar las sombras, que en este caso, supone una sistematización más atenta, producto de la diversidad de programas que se desarrolla. El seguimiento pudo captar: 1.

Buenos manuales, 3 días consecutivos de taller y Convenios institucionales, no hacen precisamente a un proceso

educativo, a un proceso sistémico. Los

procesos son hechos más complejos. Como el mismo Plan Quinquenal señala, los resultados en materia educativa solo pueden ser vistos en el largo plazo, por lo tanto difíciles de percibir resultados elocuentes. El seguimiento no pudo obtener referencias sobre el seguimiento al plan de réplicas de los talleres programados.

2.

Han transcurrido más de tres años de la aprobación del Programa Quinquenal de educación donde se programó la articulación de un Centro

de Educación e

Investigación en Derechos Humanos a corto plazo. Lo amplio de los objetivos, retraza en muchos casos las acciones.

3.

Existe ausencia de instrumentos de evaluación y seguimiento de los sujetos participantes en los talleres, posibilidad de medición o apreciación del cambio de actitudes y también, instrumentos de evaluación del proyecto implementado. El proceso de evaluación de los distintos proyectos educativos componentes, cuenta con un circuito algo complicado que no permite una llegada fácil al mismo.

39 4.

A 3 años del Programa educativo, sería importante una evaluación de los

procesos educativos implementados, como insumos para la reproducción de los mismos.

5.

La falta de coordinación de la experiencia educativa del Defensor del Pueblo, de las otras experiencias que se implementan en el país, es algo visible. No se conoce antecedentes de la socialización, sea sobre contenidos, metodologías, curriculas y otros de la materia.

6.

Visto desde lejos y quizá por la ausencia del Ministerio de Justicia, parecería que el Defensor del Pueblo estaría definiendo políticas públicas, es el caso de las curriculas con las FF.AA y la educación formal.

Capitulo III.

LA EXPERIENCIA DE LA ASAMBLEA PERMANENTE DE DERECHOS HUMANOS.

A. TODA UNA HISTORIA. Desde la fundación de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (APDHB), en 1.976, se desarrolló una gama interminable de acciones educativas en derechos humanos como: charlas, cursos, talleres, seminarios, espacios de reflexión, encuentros, etc., que tenían como finalidad el cumplimiento de uno de sus objetivos institucionales: La educación de la población en el campo de los derechos humanos, sean estos individuales o colectivos.

Luego de 25 años de vida y práctica educativa, tiene en su haber un sin número de éxitos y errores que francamente son difíciles de sistematizar y cuya misión nuestra no llega a tanto, en parte por las condiciones adversas en las que se desarrollaron, así como por el escenario múltiple, todo el territorio del país donde existía y existen núcleos de activistas. Un componente de las Asambleas Departamentales, Distritales y Locales fue

40 siempre el de la educación, aunque los mismos no hayan llevado el membrete de “Programa de Educación”. La defensa y la denuncia como roles centrales de la APDHB tuvieron resultados históricos en la conciencia y en la actitud de la población frente a la violación de los derechos humanos, como efecto de bregar por años y años, cual mejor escuela y educación formativa.

En la lógica de la educación no formal o alternativa, con posterioridad en la Educación Popular, su imaginario se desplazó en la educación en y para los derechos humanos, ajeno a los códigos usuales, que son la clase con pizarra, disertación magistral, alumnos con cuadernos, sino más bien, un conjunto de actividades de información, formación, capacitación y explicitación que buscan el pleno ejercicio de los derechos y una cultura de los derechos humanos.

Han pasado generaciones en la APDHB difundiendo a los sectores más vulnerables de la sociedad boliviana, la Declaración Universal de los Derechos Humanos (DUDH), la filosofía y principios que la sostienen, las razones históricas que la impulsaron, su historia en el país, la utopía posible, etc. Esta riqueza educativa se pierde en la variedad de protagonistas y acciones, pero explica las razones por las cuáles la APDHB antes de ser una institución en el sentido semántico, es un movimiento, una organización, una asamblea plural, donde los individuos (activistas) y las organizaciones populares y sindicales se entrecruzan en un tejido de difícil asimilación.

Puede afirmarse que la APDHB mas que procesos sistémicos en educación en derechos humanos, implementó acciones educativas y, sin estar alejado de la verdad –como categoría-, no debe perderse de vista que si la educación busca generar valores, actitudes de solidaridad, compromiso y dignidad, es precisamente lo que provocó en su militancia y ésta, en los lugares a los que pudo llegar.

Las condiciones políticas previas a 1982, de por sí, estimularon la conciencia de los derechos humanos; la Nueva Política Económica implementada en 1985 construyó

41 nuevas relaciones en democracia y ésta llevó a la militancia de la APDHB, a la reflexión sobre la necesidad de trabajar en educación, de una manera sistemática, llamada en ese momento Educación Popular. Las libertades democráticas de la que fue un importante artífice la APDHB, no tenían su correlato en la economía y en el campo social; la lógica popular creía que derrotada las dictaduras y alcanzada la democracia, vendría un proceso gradual de superación de las formas de opresión y sojuzgamiento de las mayorías del país. Pero el 21060, la democracia pactada y el modelo económico neoliberal –pero con libertades políticas- impondrían un nuevo escenario que impedía la realización plena de los derechos.

Esto mostró que los valores y los cambios de actitud son procesos más complejos y requieren también procesos educativos más complejos. Tal como se concibe, la educación en derechos humanos, no termina nunca y

precisamente, esta será la

orientación que la APDHB dará a su labor desde 1988. Por su dinámica propia, las charlas, los talleres, los debates internos y externos debían seguir su curso, pero se había entendido que era necesario organizar su acción educativa de manera más sostenida.

Eventos internos y externos de carácter jurídico, social, político, ideológico, cultural contribuyeron y contribuyen en la formación de su militancia y de las organizaciones que trabajan y coordinan con la APDHB. Las reuniones semanales de “las comisiones” comprendían de manera regular disertaciones de una variedad de temáticas. O, atender denuncias, acompañar a las víctimas, canalizarlas, interpelar a las autoridades, resolver conflictos son en los hechos, clases de una escuela en la vida, en la lucha misma por la defensa y promoción de los derechos humanos. Dos orientaciones han estado siempre presentes, la labor educativa hacia fuera, hacia los sectores sociales y la dirigida hacia su interior, hacia la cualificación de su militancia.

42 La Asamblea Permanente de Derechos Humanos es en sí misma una escuela, así lo atestiguan mujeres y hombres que pasaron por ella y son un aporte a la intransigente defensa de los derechos humanos en Bolivia.

Para la APDHB y para el país constituye un orgullo el haber recibido el Premio UNESCO 1988 de enseñanza de los Derechos Humanos, como reconocimiento a su labor en la educación no formal, a su contribución a la democracia y a la educación popular. B. ACCIONES Y PROCESOS EDUCATIVOS. Acciones educativas son lo que se hizo y continua desarrollando la APDHB, como señalamos anteriormente. Quizá en correspondencia a la naturaleza del trabajo de voluntariado y al flujo dinámico del recambio de la militancia que va reciclándose en otras de la sociedad civil.

Acciones educativas son precisamente lo que no le falta a la APDHB. No es solo todo lo que hizo de mutuo propio, sino lo que se hizo contra la Asamblea, como los atropellos a la organización y otros dirigidos contra sus dirigentes destacados, todos abonos de fortalecimiento político y mística interna, por tanto, de mayor decisión y entrega por los derechos humanos y también de reconocimiento y solidaridad del pueblo.

Acciones de trascendencia nacional como un Curso internacional de Formación en Derechos Humanos, realizado en la ciudad de La Paz en 1986, al que asistieron dirigentes nacionales y departamentales de las organizaciones

populares más

representativas y de la propia Asamblea, con disertantes de la Comisión de DD.HH de las NN.UU llegados de Ginebra,

continuaban siendo acciones que no eran parte de un

paquete educativo sostenido. 1.

El Extensionismo.

Llamado así al proceso por el cuál se desarrolla los primeros desplazamientos educativos que tenían

finalidad organizativa. La idea era básicamente extender los niveles

43 organizativos de la APDHB, para el cual, se organizaba seminarios en todas las regiones y comunidades posibles, donde se formaba y capacitaba en derechos humanos, para materializar la estructura Local y/o Provincial. Acá la educación es francamente instrumental, no tiene sentido en sí misma, sino es para organizar y para fundar asambleas. Son “cursos” hacia fuera de la Asamblea.

Esta etapa no cuenta con una reflexión sobre la educación en derechos humanos como la conocemos hoy, no se detienen en evaluaciones, diseños y otros elementos pedagógicos y didácticos.

La lógica es básicamente política: hay una dictadura y una cultura punitiva a la que debe resistirse.

Extensionismo era educar, significaba “concienciar” como se llamaba en ese entonces, para captar personas e instituciones para ser organizadas. Talleres, charlas, seminarios y encuentros eran la vía donde actores sociales, sindicales, juntas vecinales, comunidades campesinas y otros participaban. Esta acción de “concientización” era desarrollada en todas las Asambleas Departamentales en dirección a sus sectores populares, al área rural y sectores

marginales, que llevó incluso a la organización

de asambleas en

algunos barrios. Por ello, en la conformación orgánica de la APDHB, en las carteras aparece la “Secretaría de Extensionismo”

como una de las responsabilidades más

importantes, que con el tiempo se convertiría en Secretaría de Educación Popular. 2.

La Educación Popular.

La cualificación conceptual interna de las acciones educativas, llevó a la APDHB, a la asimilación de la educación popular como discurso, como metodología y como concepción. Se asimila que educación popular es una manera de leer la realidad, que requiere un posicionamiento frente a los problemas y a los intereses que definen esa realidad. Conocer la realidad es comprender las razones, las causas estructurales que someten a

44 los seres humanos a una degradante vida, a una perdida de la dignidad y de los derechos que se dice son innatos a todo ser humano.

Pretende construir un

pensamiento crítico, de tolerancia por las diferencias, de respeto de la dignidad, del ejercicio de la crítica y la autocrítica como hábito dialéctico para construir hombres nuevos.

Esta percepción da lugar a que las charlas y seminarios, ya desde principios de la década del 80, den paso en 1987 a una manera distinta de ver la labor educativa de la APDHB, en dirección a procesos más sistémicos, más sostenidos, de mediano plazo, de resultados más óptimos y de un perfil más científico. Había cambiado la coyuntura política y nuevas demandas interpelaban a la Asamblea que no podían ser respondidas con la práctica anterior.

En este período (1987-1988) la APDHB implementa un proyecto pionero de educación popular a través de un equipo técnico a tiempo completo, a dedicación exclusiva y rentado. Esto último, que parece una banalidad no lo era, aunque significaba un viraje cualitativo en la labor educativa, pues se trataba de encarar con mayor profesionalismo las tareas en esta materia. Se había comprendido que la generación de procesos educativos, requería un tratamiento sistemático.

Las líneas de acción del proyecto de educación popular, eran: - La capacitación - La comunicación - La autocapacitación y - El apoyo a la organización

El proyecto de “Educación Popular” así conocido, tenía dos dimensiones: Implementar talleres de formación y capacitación a nivel nacional, con las secretarías de educación popular de las Asambleas Departamentales y Locales para desarrollar destrezas en planes y programas educativos, en metodologías y técnicas en derechos humanos, en la

45 educación a educadores, a replicadores. La otra, a nivel departamental, respondía a la demanda de capacitación de sectores sociales, resorte del cual, se hicieron en algunos casos diagnósticos de la situación de los derechos humanos regionales y se respaldó la difusión de documentos de la Declaración Universal.

Dos talleres se pueden recuperar de la memoria de uno de sus protagonistas, talleres dirigidos a las Comisiones y comités ejecutivos

departamentales, es decir para los

cuadros. A saber:

-

Taller Nacional de Comunicación, de 5 días, donde se proporcionó instrumentos y recursos comunicativos, se socializa experiencias y planifica actividades educativocomunicativos, se capacita en teatro, boletines y títeres.

-

Taller de Perfil del Educador Popular, de 3 días, para establecer el rol de los educadores populares en su acción, para definir cuál debía ser el perfil de los educadores populares de la APDHB y para estructurar la relación de la Educación popular (EP) en derechos humanos.

Sobre esta base, cada Asamblea Departamental implementaba planes de educación acomodado a su propia realidad regional, consensuado con los sujetos educativos de la región. Estos talleres y otros que fueron organizados por el equipo nacional de educación popular, estaban acompañados de planes de contenido, planificación y materiales didácticos. Sus planes comprendían la definición de instrumentos jurídicos, gestión (cómo evaluar), aspectos pedagógicos, metodológicos y diseños educativos. Así, se comenzó a trabajar de manera sistemática, con planes, objetivos, metas, informes, diseños, metodologías y evaluaciones.

Las comisiones departamentales de educación comenzaron a seguir esta modalidad y a potenciarse, a tal punto que en todos los lugares, la Comisión de Educación Popular, no

46 solo era la más importante, sino que gran parte de las tareas y militancia, giraba en torno de ella.

En cuanto a los contenidos de los talleres propiciados por las comisiones de educación popular, se destacan temas sobre la APDHB, la DUDH, temas jurídicos, económicos y políticos de la realidad boliviana. Estos espacios, eran intensos en discusión política, así la razón del evento sea técnica.

Parte de este proyecto, fue el programa radial en San Gabriel (emisora de línea abierta a mundo rural aymara) que promovió y difundió en el área rural las tareas educativas de la APDHB. Quedan como testigos de este pionero proyecto sistémico, las Memorias de los talleres que ilustran los enfoques, las técnicas y propósitos, cualitativos con relación al período anterior.

Todo este esfuerzo de educación popular, se da en un momento de reorganización democrática de la APDHB, donde el equipo nacional debía atender las demandas pedagógicas y respaldar a su vez los procesos organizativos. De sus testigos se recoge, la importancia vislumbrada en ese período, a la capacitación a su interior, a la discusión interna.

Este proyecto de proceso sostenido, solo duró año y medio, luego del cual, se regresó a las acciones educativas que caracterizan a la APDHB. 3. Proyecto “Formación y Capacitación en Derechos Humanos”. Es el Comité Ejecutivo Nacional de la APDHB el ejecutor de este proyecto durante la gestión enero 2.000–enero 2.001, de alcance nacional y bajo la lógica de proceso educativo.

El proyecto era parte de un Plan Trienal de la APDHB y programó la realización de 45 Seminarios-Talleres en los 9 departamentos del país con los siguientes sectores:

47

-

Activistas de derechos humanos - Fuerzas Armadas - Policía nacional - Sindicalistas - Jóvenes y niños (as)

Esto quiere decir, 5 eventos en cada región o si se prefiere, 9 talleres con cada sector en los distintos departamentos del país.

Cuatro fases recorrían el proyecto en correspondencia con los objetivos, con una metodología interactiva, plan operativo, cronograma y evaluación. Comprendía un taller nacional para capacitadores departamentales que se realizó con el apoyo de experimentados educadores y donde

se capacitó en metodologías, técnicas y

procedimientos de la educación interactiva.

Cada Seminario-Taller tuvo una duración de 7 horas, con 40 participantes promedio. Las temáticas abordadas, entre 5 a 6 acorde al sector, estaban referidas a:

- ABC de los Derechos Humanos - Historia de los Derechos Humanos - Resolución de Conflictos - Derechos Civiles y Políticos - Género y Derechos Humanos - Problemática Generacional y Derechos Humanos. - Derecho Internacional Humanitario - Historia de los Derechos Humanos en Bolivia - Derechos Económicos, Sociales y Culturales (DESC) - Metodologías para el análisis de la situación e los derechos humanos.

48 Los eventos tuvieron el aval de convenios interinstitucionales y fueron dirigidos a oficiales de las FF.AA. y la policía Nacional, a dirigentes, a líderes institucionales, en la idea de que puedan ser elementos que generen, que irradien influencia en su entorno. Un Cuaderno de Formación y Capacitación en Derechos Humanos acompañó el proceso, donde se encontraban las guías didácticas de parte de los temas a desarrollar y documentos analíticos en la primera parte y, los Instrumentos Internacionales de derechos humanos, en la segunda. Todos materiales para trabajar en los SeminariosTalleres.

Fueron beneficiarios del proyecto, en total 1.788 participantes de ellos 328 activistas, 277 sindicalistas, 317 policías, 462 jóvenes, 193 militares de las FF.AA, 62 periodistas y 149 de otros sectores (indígenas y trabajadoras del hogar).

La evaluación tabuladas por evento arrojó conclusiones positivas. La evaluación por objetivos y por indicadores verificables compartida en una reunión nacional de toda la dirigencia, concluyó en la valoración de los impactos y perspectivas; en la conclusión satisfactoria de dicho proyecto.

Con este proyecto, la APDHB dio inicio a un ciclo en educación de derechos humanos como procesos que tendrá continuidad en dirección a empresas cada vez más complejas y de mayor envergadura. 4.

La Escuela de Derechos Humanos de la APDH- La Paz.

Dos escuelas a la fecha ha implementado la Asamblea de Derechos Humanos de la ciudad de La Paz. Una, en el año 2.000 y la segunda en el 2.001. Esta experiencia única en el país y por referencia, inexistente en otros lugares, promocionó a 30 participantes por curso, a quienes los certificó como: Técnico en Derechos Humanos, certificado avalado por una Universidad Privada.

49 Cada escuela de derechos humanos tenía una duración de 6 meses con clases de 2 ½ hrs., una vez por semana, contando como alumnos especialmente a jóvenes, sean estos universitarios, de institutos, amas de casa y funcionarios públicos. La escuela tiene un costo para respaldar su autofinanciamiento.

Cuenta con un Diseño Curricular que fue ajustándose en el tiempo y cuyo pensum o plan de estudios comprende los siguientes temas:

- Sistema democrático - Promoción del desarrollo - Derechos Humanos y sus instrumentos - Políticas - Economía - Derecho Internacional Humanitario - Mujer y Género - Ancianos - Cortes Internacionales - Resolución de Conflictos

Los instructores o docentes de la Escuela de Derechos Humanos son en parte especialistas académicos en

su materia respectiva y, en parte, conocidos actores

sociales ligados a determinada problemática, que hacen de expositores de vivencias, de experiencias directas, que apoyados por un equipo educativo, dan la proyección y el sustento que necesita los testimonios. Visto de otra manera, la Escuela esta dividida en 2 niveles: •

Nivel Académico y



Trabajo con ejes prácticos

50 De la teoría y del enfoque de temas vivenciales, los participantes deben realizar tareas prácticas, gestiones concretas, participación en conciliación de casos, atención de denuncias, etc. Es decir, participar en casos reales.

Los resultados se verán a la larga, pero de las 2 Escuelas han quedado 5 participantes promedio en calidad miembros militantes de la APDH-La Paz. 5.

Técnico Superior en Derechos Humanos.

Este proceso educativo impulsado desde el CEN de la APDHB esta dirigido solo para militantes de la Asamblea y se trata de un curso excepcional. Se trata de sistematizar la experiencia diaria de los activistas y darle un nivel académico. Para ello, se estableció un convenio con la UMSA de La Paz y busca jerarquizar la acción de los activistas con una mención que reconocida por la Universidad Estatal más importante, permita a los graduados de este nivel académico, la posibilidad de continuar su formación en la Carrera de Ciencias Políticas de la UMSA, durante dos años, para luego obtener la licenciatura en Mención en Derechos Humanos.

Este programa se dio inició a fines del 2001 y cuenta con 125 alumnos. Se trata de un curso de 4 hrs./día, 4 veces por semana durante 3 meses; cada capítulo o módulo tiene un sistema de pruebas o evolución. Se utilizan variedad de textos de la bibliografía sobre normas y procedimientos internacionales, materiales nacionales sobre los derechos humanos y un texto de Fundamentos Básicos para conocer los Derechos Humanos de la APDHB.

Este proyecto tiene el acompañamiento de tutores de la APDHB y de la UMSA. La militancia del interior del país de la APDHB, ha sido incorporada a través de un módulo educativo especial.

51 6.

Proyecto Yungas.

Viene a constituirse en un nuevo esfuerzo que se ejecuta en la presente gestión y abarca a Nor Yungas, Sud Yungas e Inquisivi. De manera concentrada y sostenida, se materializa un proyecto en las provincias para trabajar en la educación en derechos humanos con sectores que están excluidos de posibilidades de capacitación.

Se trata de talleres que está programado alcanzará a 500 beneficiarios, en especial jóvenes y dirigentes campesinos, de una duración de 6 meses.

De un diagnóstico realizado en la región, se detectó bolsones de violación de derechos humanos con características generalizadas y específicas, problemas aflictivos sobre los que precisamente giran los temas que se desarrollan en los talleres, como los ligados a la mujer, abuso de autoridad, coca y represión. La línea es informar, formar y capacitar en competencias y capacidades, en y sobre las necesidades concretas de su entorno: - Cómo debe levantarse las denuncias? - Cuáles son los procedimientos legales de la FELCN? - Cuáles son los procedimientos legales de un allanamiento? - Qué, quién, cómo se desarrolla la orden judicial?

Se insiste en la oportunidad (problemas reales y concretos del sector) y la utilidad de la capacitación, como herramienta eficaz para resolver conflictos y asumir la defensa de derechos. Se afirma y subraya que la co-financiación de los talleres de parte de las comunidades, es un componente educativo. 7.

Mirando el futuro.

Se encuentra en mesa, otras iniciativas en las que se trabaja en la actualidad, como una Escuela de Derechos Humanos para niños(as), y adolescentes; otra con jóvenes; la Tercera Escuela que prepara su inicio en co-auspicio con la Universidad Aquino; un Diplomado sobre Procedimientos Internacionales avalado por la FIDH; otro Diplomado de Resolución de Conflictos avalado por el CEAAL y la Comisión Andina de Juristas y, un

52 sueño que ronda desde hace tiempo, la idea de crear una Instancia Académica Superior especializada en educación en derechos humanos.

C. LUCES Y SOMBRAS. De la larga experiencia educativa en derechos humanos de la APDHB, muchas son patrimonio de la misma Asamblea, especialmente los éxitos y los fracasos de su desarrollo interno, pero otras, la mayoría, son de carácter social, en tanto fueron desarrollados en complicidad con el movimiento popular y con los más afectados por los gobiernos de facto, pero también, por los gobiernos de la democracia actual.

Por ello, sus luces, son también los del movimiento popular.

1. La diversidad de experimentos educativos que emprendió la Asamblea de Derechos Humanos en su larga vida, constituye un acerbo que debe ser estudiado por las iniciativas y esfuerzos nuevos, por cuanto fueron realizados desde la sociedad civil, desde las víctimas directas e indirectas de la conculcación de los derechos humanos, es decir desde el pueblo mismo.

Acciones y procesos

prolongados, de largo aliento.

2. La visión de educar para la acción, para la resolución de problemas, para superar y cambiar las relaciones de sometimiento de los más vulnerables y para identificar los mecanismos violatorios, es central para hacer de los sujetos sociales protagonistas de su propia vida.

3. La relación física de los activistas de la APDHB con las realidades más crudas de violación masiva y sistemática de los derechos individuales y colectivos, forjó conciencia y consecuencia, cual mejor escuela de la vida, la misma que se reprodujo sistemáticamente a lo largo de su práctica educativa.

53 4.

La educación popular siempre fue entendida más allá de su acepción

corriente, es decir, como técnica y metodologías participativas y democráticas, sino, en su significado político, en el descubrimiento de las causas, de las razones de los problemas y en la necesidad de cambiarlas.

La educación popular como

instrumento de un proyecto popular, no como una simple mecánica pedagógica; entendida en su amplitud, en su triple significado: político, pedagógico e instrumental (didáctico).

5.

La EDH a través de la educación popular es autoeducativa, así lo fue para los activistas del APDHB y para los sujetos destinatarios. Se educó, no para, sino, con los sectores más necesitados en el ejercicio de derechos; tan así que la propia Central Obrera Boliviana en uno de sus congresos nacionales estatuyó la “Secretaría de Derechos Humanos” al interior de todas las organizaciones populares para reproducir la defensa de los DD.HH. en su lucha reivindicativa.

6. Combinar expositores-disertadores teóricos y vivenciales en la educación en derechos humanos en todos los eventos, es un acierto que ha promovido mejores destrezas, habilidades y competencias en los participantes.

Similar efecto tiene el desarrollo de contenidos que hacen a la realidad nacional, a las condiciones coyunturales y estructurales de las cuales se derivan las condiciones que permiten la conculcación de los derechos humanos.

7. La APDHB siempre encaró la educación en derechos humanos, desde en punto de vista crítico de la realidad boliviana, interpeladora del poder, desde una lógica política y no meramente humanista. Se ha insistido en reiteradas oportunidades que la perspectiva política con la que encara la EDH la diferencia de las demás.

8. Puede afirmarse que la educación para cambiar actitudes y comportamientos, tuvo buenos resultados por la influencia social que provocó y provoca y, por la camada

54 de militantes que pasaron y pasan por su estructura y hoy contribuyen a diversas instituciones.

9. En los últimos años, se distingue un afán por la diversificación de su labor educativa, en acciones educativas, en procesos, dentro los sectores populares, en el nivel académico, en las ciudades, en el campo, hacia personas de la tercera edad y jóvenes, etc.

10. Haber introducido cursos con costo de matrícula para autofinanciar los mismos, como los talleres de los Yungas, tiene un mensaje de corresponsabilidad y autoapropiación.

11. En general, los grandes emprendimientos educativos de la APDHB, fueron sobre la base del voluntariado, en ausencia de recursos que podrían administrativa y técnicamente haber mejorado los resultados.

De las sombras: a. Para una experiencia tan rica como la que trae la APDHB en la educación en derechos humanos, la ausencia de sistematización y monitoreo como política corriente, deja ver su parte frágil. Los materiales, archivos, documentos que son la fuente de investigaciones, de estudios y recuperación de la historia, no han sido ordenados, no están al alcance de los investigadores como material sistematizado.

b. Contenidos y objetivos sociales y políticos fueron dominantemente importantes en la práctica educativa, descuidando las formas, las metodologías. Situarse por encima de los “dinamiqueros” -en alusión a las dinámicas de grupo- era fundamental, por ello la poca relación con instrumentos metodológicos de evaluación, con medición de impactos, de sistematización de los impactos, trabajado muy poco.

temas sobre los que se ha

55 c.

Ausencia de cuadros especializados, experimentados en educación en general y

en educación en derechos humanos, tienen su peso a la hora de implementar procesos educativos permanentes, complejos sostenidos. Combinación armónica del voluntariado con el apoyo profesional en algunos niveles, es un dilema no resuelto, pero pendiente. La verdad es que existen determinadas actividades y en determinados períodos que requieren

profesionalismo en la implementación de

acciones, es el caso de los procesos educativos.

d. Enormes complicaciones tiene la voluntad de desarrollar EDH en una estructura tan grande y en un territorio tan extenso como el nuestro. Asecha siempre el peligro del diluimiento de esfuerzos parciales –que existen y seguirán existiendo- que no se reciclan.

e. No se conoce de documentos de reflexión escrita, de teorización sobre la experiencia educativa de la APDHB. Referido no solo a las metodologías y medios de la EDH, sino a la concepción, al rol social y político sobre el cual, la APDHB ha producido una práctica novedosa y única.

f. La ausencia de respaldo financiero, por cierto es una limitación con la que lidia siempre la APDHB. Otro panorama es cuando se tiene recursos, respaldo financiero para trabajar con equipos a tiempo completo en la EDH, cualificando la formación y capacitación de sectores populares y la suya propia y que se retroalimenta en un círculo virtuoso.

g. Una Estrategia Educativa de largo plazo, al que responda los actuales esfuerzos y proyectos darían como resultado mejores productos.

h. La APDHB cuenta con una lista abundante de materiales de derechos humanos producidos para la divulgación, pero contados los referidos a la educación como tal. Contradictorio, si gran parte de la historia de la APDHB fue educar.

56

La experiencia de la APDHB,

las luces y sombras

deben ser vista como la

experiencia de los movimientos sociales, como la experiencia del pueblo mismo y no como la de una institución, como la de una ONG, que no la es.

Capítulo IV.

CONCLUSIÓN Y RECOMENDACIONES.

A esta altura de la historia, los derechos humanos se han convertido en un paradigma, en un modelo a seguir. Incomprensible para algunos, cómo es que las víctimas de la violación de los derechos humanos y los sustentadores y financiadores de las sociedades que conculcan los derechos humanos, llegaron a un mismo punto: A exigir su vigencia y a reclamarla como políticas de Estado respectivamente.

Los derechos humanos constituyen una avanzada ideológica para los sectores populares, para los marginados, para las víctimas. Y, ha calado tan hondo en los otros sectores de la nación, hasta el punto de hacerse universal e incuestionable y luego políticas públicas. ¿Existe alguien que esté en desacuerdo con los derechos humanos?.

Se ha dado un punto de encuentro histórico entre la demanda social y el proyecto del modelo vigente para combinar esencialmente libertades individuales, derechos civiles y políticos con una forma nueva de organizar los factores productivos; es decir, armar el régimen político, la democracia representativa, con la corriente neoliberal en la economía y con el “buen gobierno”. Así se entiende la proliferación de organismos de derechos humanos en el Estado y en la sociedad civil. No habría necesidad de mas instrumentos si la democracia aplicase estrictamente la Constitución Política del Estado y la normativa internacional a la que está obligada.

20 años después, se sigue insistiendo en la vigencia de los derechos humanos, por ello, la acertada tarea de trabajar y duplicar los esfuerzos en la Educación de los Derechos Humanos.

57

En Bolivia, si bien la Educación en Derechos Humanos no era conocida con ese nombre, sino hasta hace unos años, no menos cierto es, que la esencia troncal se la practicó ya a través de la educación popular. Existe un mar de casos sobre los que se puede trabajar y desafíos que emprender, que no es incoherente afirmar, que recién se empieza en la educación de, en y para los derechos humanos.

De la revisión de las experiencias bolivianas más representativas en EDH, puede extraerse algunas conclusiones y recomendaciones para mejorar nuestra acción.

CONCLUSIONES:

1.

Se constata un avance en la educación en derechos humanos en Bolivia, una tendencia que va en dirección a procesos sostenidos que efectivamente contribuyan a la generación de una cultura de los DD.HH. A pesar de los pocos años de esta materia, existe un camino recorrido que proporciona insumos para la reflexión y la reproducción.

2.

Acciones educativas en derechos humanos no solo constituyen los talleres, seminarios, charlas, conferencias, es decir todas las acciones ligadas al aula, a la pizarra, a la disertación. Son acciones educativas la relación física, la relación política de los activistas de derechos humanos con la realidad palpable de las víctimas de la violación de los derechos humanos; son acciones educativas, la identificación, la solidaridad, la atención, la orientación, la convivencia con los que sufren la conculcación de sus derechos.

Las acciones educativas entendidas así, con su naturaleza esporádica, coyuntural, no sistematizada y sostenida, son y deben seguir siendo parte de los procesos educativos. Acciones y procesos educativos no se excluyen.

58 3. Los esfuerzos por desarrollar procesos sistémicos en la educación en derechos humanos, cualificaron los recursos empleados y optimizaron los resultados. No cabe duda que la tendencia en la EDH es la de procesos sostenidos, procesos que permitan lograr la finalidad de la educación, cual es, la de construir cualidades, valores, actitudes de convivencia solidaria y de justicia social.

Los procesos

educativos son un fenómeno social, no coyunturales, por tanto de mediano y largo plazo. La educación a corto plazo difícilmente tiene resultados.

Convertir de manera gradual a una parte de las acciones educativas en procesos, debe ser lo ideal; es como convertir la solidaridad como desprendimiento humano, en una obligación, en una acción de justicia.

4. Talleres implementados de 3 e incluso de 5 días, no dan la garantía de que los mismos evolucionen más allá de la información y formación, más allá de la parte cognoscitiva.

La generación de valores, de actitudes requieren

no solo de

procesos más complejos, sino, de una visión ética y crítica de la realidad y de un acompañamiento social.

5. Emprender labores educativas en derechos humanos desde una instancia promovida por la administración del Estado, como es el Defensor del Pueblo, con autonomía en su gestión y decisiones, es singular, por la atención y el respeto que ha despertado. El devenir del tiempo dirá, si el actual empeño en acciones y procesos educativos, son parte

de la naturaleza del organismo o de la

administración y dirección que la dio inicio.

6.

El PROY/BOL 97 es un intento que debe recuperarse y en su caso reemprenderse, en la medida que es el primer intento de abordar los derechos humanos, precisamente desde el Poder Ejecutivo. Obviamente reconceptualizado, sujeto a las verdaderas atribuciones que tiene en este caso el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, cual es el diseño y gestión de políticas públicas,

59 políticas estatales y en este caso, políticas educativas en derechos humanos, para la vigencia plena y efectiva de los mismos, antes que organizar talleres o cursos. Estos, bien pueden delegarse a organismos de la sociedad civil. La Ley 1565 de la Reforma Educativa no incluye la EDH y es precisamente lo que deben hacer los administradores del Estado.

7. Una variedad de programas y voluntades en materia de EDH se mueven sin coordinación alguna, cada una produciendo y reproduciendo su propia experiencia en un acto de dispersión. Se han duplicado esfuerzos y recursos en algunos casos en los mismos sectores e incluso con los mismos sujetos. Las 3 experiencias analizadas, contaron con programas para las FF.AA y Policía Nacional en el año 2000, sin coordinación alguna. Los “beneficiarios” deben tener su propia lectura.

8. Las 3 experiencias educativas observadas parecen similares, debido al manejo de las mismas categorías, terminología, la misma percepción de los procesos educativos, de los objetivos y finalidades de la EDH, aunque diferentes en la ejecución, en la práctica y especialmente en la concepción que las guía. Precisamente, la forma distinta de ver al país, la valoración de las causas que dan origen a la exclusión, la pobreza y ostensible conculcación de los derechos humanos, hacen a prácticas distintas, a visiones ideológicas distintas.

9. Las llamadas cirriculas requieren un trabajo más sistemático, más compartido y de intercambio, pues, ocurre que los materiales trabajados por ejemplo por el Ministerio de Justicia, no es precisamente eso, sino lo que viene a llamarse Pensum. El curriculum o diseño curricular es un cuerpo de objetivos, que tiene un Plan de estudios, un Programa (cartas descriptivas) y un sistema de evaluación. Este tiene que estar en sintonía con el perfil del profesional y no ser una carga horaria formal.

60 10. Los materiales, testigos en parte de la EDH y que deben dar constancia de las acciones educativas aplicadas, no están siempre dispuestas para la investigación o no han sido sujetas del cuidado necesario para que sirva al conocimiento indirecto.

11.

En todas las experiencias lo menos desarrollado viene a ser la parte de la evaluación, de los mecanismos y de las metodologías, los instrumentos

de

medición de resultados y productos esperados.

RECOMENDACIONES:

1.

La educación en y para los derechos humanos no puede ser neutra, debe ser transformadora, debe ser interpeladora del poder, de las causas estructurales que permite que la sociedad actual excluya a la gran mayoría de la población del ejercicio pleno de sus derechos. Debe ser generador de información, formación y capacitación para descubrir el entramado de.... la injusticia como sistema, aunque su resolución se libre en otros escenarios.

2.

La EDH, esencialmente debe “empoderar”

-aberración idiomática pero muy

usada- al pueblo, a la colectividad, a los movimientos sociales, a las víctimas de la violación de los derechos, a las víctimas de la exclusión y de la pobreza. Empoderar pueblo para que ejerza plena e integralmente sus derechos; empoderarlo para evitar la conculcación de sus derechos y la impunidad.

3.

La educación debe formar educadores, sujetos de los derechos humanos que expliciten en su vida el cambio de actitudes, el desarrollo de valores y el fortalecimiento del compromiso. La mejor enseñanza es el ejemplo. La mejor manera de enseñar los derechos humanos, es vivir los derechos humanos.

61 El proceso aprendizaje de los DD.HH. debe ser un proceso activo (teórico-práctico) y evitar el abismo entre el conocimiento y la acción.

4.

No se debe confundir procesos educativos, sistemáticos, sostenidos y cualificados con el academicismo formal. Contar con Diplomados, Maestrías, Escuelas, títulos especializados en derechos humanos no responde precisamente a la finalidad pedagógica y política de la educación para los derechos humanos. La fiebre de extensión de cartones no es precisamente la vía para cambiar la actual cultura excluyente.

5.

La integralidad de los derechos humanos debe ser la matriz sobre la que se trabaje en la EDH, superando una cierta parcialidad con los derechos civiles y políticos en los programas que hasta el momento se ejecutan. En democracia, pero sin Derechos Económicos, Sociales y Culturales (DESC) no puede afirmarse que exista vigencia de los derechos humanos. A 20 años de democracia, quizá ha llegado el momento de priorizar los DESC que cuestionan precisamente las condiciones de pobreza.

6.

Es preciso mecanismos de consulta, de coordinación, de reflexión mutua entre todas las instituciones y organizaciones que hacen acciones educativas en el país, no solo para no duplicar esfuerzos., sino para crecer, para enriquecer y para ampliar la cobertura del servicio que no llega a otros que son los excluidos de los excluidos.

Es preciso estimular y fomentar

el intercambio de materiales de

enseñanza, métodos, planes de estudio académicos y no académicos, evaluaciones, sistematizaciones y propuestas alternativas.

Recuperar y socializarlas distintas experiencias es un imperativo y hasta una necesidad útil.

Los aportes que pueden ofrecer las ONGs que trabajan con

sectores específicos como mujeres, niño (a), indígenas, campesinos, tercera edad, migrantes, etc. son considerables.

62

7.

Queda pendiente en el país, la elaboración de un diagnóstico actualizado y exhaustivo de los derechos humanos en Bolivia, del cual se desprenda las prioridades educativas en derechos humanos. Ministerio de Justicia13,

El intento realizado por el

la encuesta del Defensor del Pueblo de 1998 y el

documento de Situación de los Derechos Humanos en Bolivia de 1998 de la APDHB, son materiales parciales o desactualizados que hacen ver la urgente necesidad de asumir el desafío. Los pasos dados por el Capítulo Boliviano de Derechos Humanos, Democracia y Desarrollo (CBDHDD) en la elaboración de una Estrategia de Derechos Humanos para el país, es otro desafió.

8.

La EDH en dos grandes escenarios de la sociedad boliviana: La sociedad civil y los organismos y aparatos del Estado; la presencia de varios actores y varios proyectos globales y sectoriales, debe concluir con la elaboración de un Plan Nacional de Derechos Humanos, en el que se articulen esfuerzos, se definan roles, se convine la preservación física y emocional de la ciudadanía, con el desarrollo socio-económico y ambiental, se impulse la investigación de las causas que impiden el pleno ejercicio de derechos y garantías, bajo una concepción de universalidad, integralidad e interdependencia de los derechos humanos.

Capacidades, recursos, experiencias bien pueden articularse para lograr resultados más efectivos, sin dejar de diferenciar los ámbitos de responsabilidad institucional: La del gobierno informar, regular, normar; la de la sociedad civil, la exigibilidad.

9.

La EDH requiere de recursos humanos con la capacitación y solvencia necesaria, equipos estables a quienes debe dotarse de todas las posibilidades para su permanente cualificación en el país y fuera de él. Parte del éxito o fracaso de los proyectos en EDH pasa por ellos.

13

Documento elaborado en el desarrollo del PROY/BOL97

63

10.

Los programas y proyectos en la educación en derechos humanos deberían ser diseñados con objetivos alcanzables, posibles y sostenibles que culminen plasmados en realidades.

11. Las experiencias educativas no formales o alternativas en ejecución muestran lo perseverantes que deben ser los esfuerzos, el carácter de largo plazo de los resultados, en tal sentido, debe priorizarse

la formación de educadores en

derechos humanos, la capacitación de líderes con sólidas competencias, la educación de educadores que reproduzcan en cascada y en el quehacer diario de cada uno de los rincones del país, que los seres humanos tenemos derechos que no son dádiva de nadie y que no solo es un derecho, sino una obligación defenderlos.

12. Debemos propender a que la evaluación sea también un proceso, sea integral. Que reflexione momentos y factores, medios, métodos, resultados, el propio proceso educativo, el proyecto, la participación de los sujetos, la interacción didáctica, contenidos, etc.

La Paz, agosto del 2001

64 ANEXO 1. Plan de Trabajo del “Plan Nacional de Acción” en su resultado 3 : • Elaboración de lineamientos metodológicos. • Diagnóstico de la problemática de los DD. HH. y de necesidades de los beneficiarios. • Elaboración de un Plan de Capacitación. • Seguimiento y evaluación de los seminarios e impacto de los mismos • Diseño de instrumentos de seguimiento y evaluación. • Diseño de módulos a ser incluidos en el currículum de primaria, secundaria y universitario. • Elaboración de un perfil de propuesta de incorporación del tema DD. HH. en la Reforma Educativa. • Seminarios internos para el equipo del proyecto.

Dicho Plan de Trabajo en materia educativa, programó las siguientes actividades: •

Seminario sobre DD. HH en la Educación Formal.



Seminario sobre DD. HH. en la Educación Universitaria.



Campaña de difusión de los DD. HH.



Elaboración de plan y cronograma para la campaña de DD. HH.



Seminario sobre DD. HH. y la función policial.



Seminario sobre DD. HH. de grupos específicos (niñez, mujer, pueblos indígenas)



Seminario sobre Sistemas de Protección de DD. HH. en pueblos indígenas.



Seminario sobre tratamiento de las comunicaciones por parte del Estado en violación de DD. HH.



Seminario sobre Mujeres y DD. HH. y equidad de género con ONGs.



Jornada sobre currícula de DD. HH. en la Formación Policial.



Jornada sobre currícula de DD. HH. en la Formación Militar.



Concurso de Ensayos sobre Derechos Específicos en el marco de los DESC.



4 módulos sobre DD. HH. y pueblos indígenas con ONNGs.



Otros.

65 Anexo 2. Acciones educativas del Defensor del Pueblo durante la gestión 1999-2000: -

Desayuno trabajo con conductores de programas radiales y de televisión con audiencia juvenil, con quienes se elaboraron convenios para la difusión de materiales de promoción del Defensor.

-

Ciclo de cine sobre derechos humanos para estudiantes, acompañado de debates.

-

Exposición y difusión de materiales del defensor del Pueblo en parroquias y centros de la Iglesia Católica.

-

Varias exposiciones de la Defensora en programas de Postgrado de unidades estatales y privadas, ante alumnos de carreras de ambos sistemas universitarios, sobre los derechos humanos y sobre competencia del Defensor del Pueblo, abiertas al análisis y debates participativos.

-

Incorporación de la temática de los derechos humanos y el papel del Defensor del Pueblo en la formación de comunicadores sociales especializados en radio con el Servicio de Capacitación en Radio y televisión (SECREAD) de la U. Católica.

-

Se participa en el entrenamiento a comunicadores nativos del área rural aymara, como parte de su currículum institucional.

-

Se capacitó en DD. HH. a estudiantes universitarios de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA) que participaron en las Brigadas Defensoriales de difusión de los derechos humanos, quienes colaboran en la promoción de eventos denominados “El Defensor en tu Zona”. Estos eventos realizados en distintos distritos de la ciudad de La Paz, sirven para desarrollar promoción y orientación pública a la población en general.

-

Otras.

66 Anexo 3. LISTA DE INFORMANTES CLAVES ENTREVISTADOS.

• Susana Eróstegui : Ex -funcionaria de PROY/BOL 97 del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos. • José Carlo Burga : Funcionario del PNUD, delegado • Guillermo Vilela : Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia. • Mónica Calasich : Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia. • Benito Fernández : Ex – Secretario de Educación Popular Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia 1988 • Erico Antezana : Educador del Proyecto de Educación popular de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia. 1988 • Donato Ayma : Miembro del equipo de educación del Defensor del Pueblo. • Luis Vásquez : Miembro del equipo de educación del Defensor del Pueblo. • José Maria Paz : Miembro del equipo de educación del Defensor del Pueblo.

Get in touch

Social

© Copyright 2013 - 2024 MYDOKUMENT.COM - All rights reserved.