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Introducción Folclore, este término general abarca creencias, costumbres y conocimientos de cualquier cultura transmitidos por vÃ−a oral, por observación o por imitación. Este conjunto de material se conserva y transmite de generación en generación con constantes cambios según la memoria, la necesidad o el propósito de la transmisión Por medio de este trabajo, analizaremos nuestro folklore; el folklore paraguayo mi objetivo es dar énfasis fundamentalmente en la música y la danza, sin dejar de mencionar los mitos y las leyendas Esperando, satisfacer las expectativas en cuanto a este trabajo, y que todos aprendamos a valorar, y conocer algo que como paraguayos nos pertenece y debemos enaltecerlo; nuestra cultura. Acompáñenme en el interesante análisis de este tema. El Folklore El folclore,1 folclor, folklore o folklor, (del inglés folk, "pueblo" y lore, "acervo" "saber" o "conocimiento") es la expresión de la cultura de un pueblo: cuentos, música, bailes, leyendas, historia oral, proverbios, chistes, supersticiones, costumbres, artesanÃ−a y demás, común a una población concreta, incluyendo las tradiciones de dicha cultura, subcultura o grupo social. Folclore es el término general que abarca creencias, costumbres y conocimientos de cualquier cultura transmitidos por vÃ−a oral, por observación o por imitación. Este conjunto de material se conserva y transmite de generación en generación con constantes cambios según la memoria, la necesidad inmediata o el propósito del transmisor. El término folclore fue acuñado en 1846 por el anticuario inglés William John Thoms para sustituir el concepto de antigüedades populares. El folklore y su origen Folclore y cultura popular Los folcloristas actuales distinguen entre el folclore auténtico y otras manifestaciones culturales como las canciones populares o las historias o leyendas del pasado. Este tipo de material, considerado a menudo por los medios de comunicación como parte de la herencia folclórica, es definido por algunos folcloristas como conocimiento popular o cultura popular. Sin embargo la tradición folclórica y la popular se solapan, las formas populares utilizan de modo continuo formas genuinamente folclóricas para inspirarse y el conocimiento popular a veces llega a ser tan conocido que los grupos folclóricos lo adaptan a su tradición oral. OrÃ−genes y tipos de folclore Los estudiosos consideran que el folclore no se limita a las comunidades rurales, sino que también aparece en las ciudades y que, en vez de extinguirse, continúa siendo parte activa del aprendizaje de todos los grupos, desde las unidades familiares a las nacionales, aunque con formas y funciones diferentes. El folclore como actividad recreativa y conjunto de afirmaciones y creencias no verificables sigue vivo. Los diferentes objetivos y procedimientos de investigación de antropólogos, sociólogos, psicólogos, lingüistas y escritores han modificado considerablemente la tendencia anterior a considerar la literatura y las costumbres folclóricas como algo extravagante y romántico o como algo inferior a la cultura tradicional. El folclore ha llegado a ser considerado como parte del proceso de aprendizaje humano y como fuente importante de 1
información para la historia de la humanidad. El material folclórico puede clasificarse en cinco grandes áreas: creencias, costumbres, relatos, canciones y refranes, y arte popular. Las creencias populares engloban todo tipo de ideas sobre los temas que por tradición han preocupado al hombre, desde la causa y curación de enfermedades hasta la especulación sobre la vida después de la muerte, asÃ− como supersticiones, magia, adivinación, brujerÃ−a y apariciones fantasmales o de criaturas fantásticas y mitológicas. Las costumbres comprenden todo el material relativo a modos en festejos, juegos y danzas, aunque también se refieren a las relativas a cocina y vestimenta. Los relatos abarcan baladas y diferentes formas de cuentos tradicionales y música tradicional, basados a veces en personajes reales o acontecimientos históricos. Entre las canciones y refranes se encuentran nanas y rimas infantiles, trabalenguas y acertijos. El arte popular abarca cualquier manifestación artÃ−stica creada por el pueblo de forma anónima y que expresa el carácter de su vida en comunidad. El folklore -Temas El folclore es muy extensa por lo que resaltaremos en nombrar y hablar de la música paraguaya, la danza paraguaya los mitos y las leyendas. La Música Paraguaya La música paraguaya es uno de los aspectos más particulares de la cultura del paÃ−s ya que siendo el único de Sudamérica donde la mayorÃ−a de los habitantes habla el idioma de origen nativo, su música es totalmente de origen europeo. Esto se debe a la influencia que tuvieron los jesuitas durante los siglos XVII y XVIII al notar que los guaranÃ−es poseÃ−an buen talento musical. De esta manera los interiorizaron en la música europea, aunque nunca compusieron. Desde tiempos remotos, los guaranÃ−es han utilizado instrumentos primitivos de viento y de percusión, principalmente flautas de carrizo, silbatos, sonajas y campanas. Las guitarras y arpas, introducidas por los españoles, son los instrumentos básicos de la música paraguaya contemporánea. Uno de los estilos más antiguos de música popular paraguaya es la polca; las baladas y otras canciones conservan gran parte de la historia y tradiciones del paÃ−s. La guaranÃ−a, canción de fluida melodÃ−a lÃ−rica introducida a principios del siglo XX, es la primera variación propia de la tradición colonial española. Los instrumentos más populares son el arpa y la guitarra, el arpa tuvo mucha difusión y es conocida en muchos paÃ−ses del mundo. La polka (purahéi) y la guaranÃ−a son las expresiones musicales más populares. Los ritmos del primer género son una invitación a la danza. El segundo, desarrollado por José Asunción Flores cerca del año 1920, es más bien lento y melancólico. Algunos ejemplos son: “India”, “Recuerdos de Ypacarai”, “MÃ− dicha lejana”, etc. Las composiciones preferidas para ser ejecutadas en arpa son los onomatopéyicos y fuertes “Guyra Campana”, “Tren Lechero”, entre otros. INSTRUMENTOS MUSICALES INDà GENAS Para la construcción de los mismos utilizaban toda clase de materiales que el medio les proveÃ−a: cuero, pieles, pezuñas de animales, fibras, cañas, calabazas, etc. - Mimby guasu: Flauta grade - Mimby chue: Silbatos esféricos 2
- Mimby tarará: casi una trompeta - Turu - Sonajas: Elaboradas con pezuñas de venado, caparazón de tortuga. - Maracas: Hechas de porongo o mate relleno de piedras pequeñas o semillas. - Bastones de ritmo: Largas cañas de tacuara o bambú. Se utilizan para golpear el piso. Es de uso exclusivo femenino. En guaranÃ− se los llama takua pu (tacuara que suena). - Arco de boca: Instrumento muy pequeño, que se apoya en la boca del ejecutante. Es de uso personal y la boca modula el sonido. - Gualambáu: Su caja de resonancia es una calabaza y es puesto en vibración por golpecitos de una varilla. TAMBORES Existen de diferentes materiales, las aberturas son cubiertas con piel de animales. Pueden ser tocadas con la mano o palillos. INSTRUMENTOS MUSICALES TIPICOS PARAGUAYOS En el Paraguay son dos los instrumentos que se adoptaron como propios para la interpretación de nuestra música. EL ARPA: Instrumento de cuerda, de forma triangular, se ejecuta con ambas manos. Los sacerdotes de las misiones jesuÃ−ticas trajeron a nuestras tierras. Clases de arpas - Popular: Tienen afinación diatónica, consta de 36 de hasta 42 cuerdas. - De concierto: Surge por la incorporación de los pedales y tiene más cuerdas que la popular. Se la utiliza en la orquesta sinfónica. LA GUITARRA: Es de origen árabe, de la transformación del laúd. Llegó a América con los conquistadores. De acuerdo a la forma de ejecución se clasifica en: - Culta: Al mismo tiempo se ejecuta la melodÃ−a y el acompañamiento. Requiere años de estudio. - Popular: Es la más difundida debido a la facilidad de su ejecución, siendo esta la utilizada en la música popular paraguaya. Representantes del folklore paraguayo La música paraguaya tuvo varios representantes el principal es LuÃ−s Alberto del Paraná, que a continuación conoceremos un poquito de el, además de otros autores. LuÃ−s Alberto del Paraná
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Nació en Altos (Paraguay), el 21 de junio de 1926, a las 14:30 h., y fue anotado en el Juzgado de Paz el 14 de agosto de 1926, por su madre, Jacinta Mesa (no Meza). Hizo sus cursos primarios en Ypacarai. "Nació para el Arte en 1942, durante el Primer Certamen de los Barrios; el mozalbete de dieciocho años, de timbre de voz sorprendente, representó a Campo Grande, acompañado de Humberto Barúa, y otro nombre mayúsculo de la música paraguaya, el arpista Digno GarcÃ−a. AllÃ− en el viejo cine Rex, el público empezó a asombrarse con un jovencito que prestaba el servicio militar, entre tÃ−mido y decidido, a medio camino entre la parquedad del campesino y una sonrisa grande abierta hacia nuevos horizontes". Murió en Londres (Inglaterra), de derrame cerebral, el domingo 15 de septiembre de 1974, en el Prembridge Court Hotel (34 Prembridge Garden, Londres, W2 4DX Reino Unido), 1er. piso, habitación No.8, Edad: 48 años. Paraná estrecha la diestra de la reina Juliana de Holanda. En este libro que se comenta, se puede ver la entrega de un poncho tÃ−pico paraguayo a su marido, el prÃ−ncipe Bernardo, durante una visita al Paraguay. Su sepelio en Asunción, la capital paraguaya, constituyó un acontecimiento pocas veces visto en la vida de la Nación. La ciudadanÃ−a se volcó en las calles, espontáneamente, sin invitación alguna, para testimoniar el último adiós a uno de sus hijos más queridos. Catalizador de aquella inquietud ciudadana fue la llamada "Cadena del Dolor", donde la casi totalidad de las emisoras radiales del Paraguay (y paÃ−ses aledaños), se unieron para transmitir minuto a minuto, antes de la llegada del féretro de Paraná al aeropuerto de Asunción; su velatorio en el Teatro Municipal, y luego, hasta el Cementerio Italiano (Cementerio de la Recoleta) Remberto Giménez Se puede considerar a Remberto Giménez como un pionero de la música culta entre los directores compatriotas. Organizó la primera orquesta sinfónica completa en el paÃ−s, fue el primer paraguayo que dirigió una sinfónica europea y formó a muy buenos intérpretes. Entre sus alumnos se cuenta a su sobrino Herminio Giménez. Remberto nació en Coronel Oviedo el 4 de febrero de 1898. Como todo buen músico paraguayo, se inició en la Banda de la PolicÃ−a, bajo la dirección de Nicolino Pellegrini y Salvador Dentice. Luego completó su formación con Vicente Macarrone. En 1920, becado por el gobierno, Remberto Giménez viajó a Buenos Aires, donde estudió en el Conservatorio Nacional con Alberto Williams, Andrés Gaós y Celestino Piaggio. En 1922 recibió su tÃ−tulo de profesor superior de violÃ−n como mejor alumno. En 1924 fue nuevamente becado por el gobierno, esta vez a Europa. Estudió en la Schola Cantorum de ParÃ−s, donde durante dos años ahondó sus conocimientos de violÃ−n. En La Sorbona estudió luego Estética e Historia de la Música. En 1927 estuvo en el Stern Ches Conservatorium de BerlÃ−n, donde perfeccionó sus conocimientos de violÃ−n y música de cámara. En 1928 regresó al Paraguay y formó con Manfred Kamprad, Enrique Marsal y Erik Piezunka el Cuarteto Asunción, considerado el más importante grupo de cámara durante mucho tiempo. Ese mismo año, organizó el primer concierto con una sinfónica nacional, con motivo del centenario de Franz Schubert. Remberto Giménez fue miembro del Ateneo Paraguayo, producto de la fusión - en 1934 - del Gimnasio y del Instituto Paraguayo. En 1940 fundó la Escuela Normal de Música, que se convirtió en el más importante centro de enseñanza musical del paÃ−s. En 1957 la Municipalidad de la Capital creó la Orquesta Sinfónica de la Ciudad de Asunción (OSCA), de la que fue director hasta su muerte y al frente de la cual se mantuvo pese a las crÃ−ticas por no permitir que ningún otro músico - paraguayo o extranjero pudiera tan siquiera dirigir un ensayo.
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En 1958 dirigió a la Orquesta Sinfónica de la Radio de Bonn en la ejecución de su obra Rapsodia Paraguaya. Fue el primer paraguayo que dirigió una sinfónica europea. En 1963 condujo conciertos de la Orquesta Sinfónica Brasileña en el Teatro Municipal de RÃ−o de Janeiro y en el Teatro TupÃ− de Canal 7 de Säo Paulo. Como compositor, se pueden señalar entre sus principales obras el ya citado poema sinfónico Rapsodia Paraguaya, el arreglo del Himno Nacional, las composiciones Kuarahy oike jave, Conscripto, Marcha del Mariscal López, Nostalgia del terruño, Ka'aguy ryakuä, Himno a la juventud, Canción de paz. Remberto Giménez se hizo acreedor de varias distinciones durante su vida. AsÃ−, el gobierno nacional le otorgó en 1949 la Orden Nacional del Mérito en el grado de Caballero. Igualmente obtuvo la Cruz del Defensor por su actuación en la Guerra del Chaco y la Medalla de Honor al Mérito Educacional. Remberto Giménez falleció en Asunción el 15 de febrero de 1977, pocos dÃ−as después de haber cumplido 79 años de edad. Mauricio Cardozo Ocampo Mauricio Cardozo Ocampo, referente ineludible de la música paraguaya de la que es uno de los creadores más fecundos y difundidos, nació en YbycuÃ− el 14 de mayo de 1907. Sus primeros maestros en el arte fueron el flautista Eloy MartÃ−n Pérez y Juan J. Rojas, con quienes dio en YbycuÃ− los pasos iniciales para su posterior carrera. Luego continuó su aprendizaje en la Banda de Músicos de la PolicÃ−a de la Capital con los maestros Nicolino Pellegrini y Salvador Dentice, forjadores de los mayores talentos musicales de nuestro paÃ−s. Desde un primer momento los instrumentos preferidos de Mauricio fueron la flauta y la guitarra. Mauricio participó en la fundación de la Agrupación Folklórica GuaranÃ−, la más importante sociedad artÃ−stica paraguaya que hubo en Buenos Aires. En ella no habÃ−a sólo músicos sino también escritores, actores, profesionales compatriotas. Estaba gente como Hérib Campos Cervera, Augusto Roa Bastos, Andrés Guevara, Jacinto Herrera, Osvaldo Chaves, Carlos Federico Abente, Concepción Leyes de Chaves y más. En nuestro paÃ−s fue socio fundador de APA, miembro de la Academia de Lengua y Cultura GuaranÃ−, de la Asociación Indigenista del Paraguay, de la Asociación de Músicos del Paraguay, del APROFON (Asociación Paraguaya de Productores de Fonogramas). Las composiciones de Mauricio Cardozo Ocampo son muchÃ−simas y muy variadas, pero algunas son: Chokokue purahéi, Mensú resay, Chokokue kera yvoty, Paraguaya linda, Che morena'imi, Guavira poty, La carreta campesina, Mombyry guive, Morena, Mi destino, Sé que te perdÃ−, Regalo de amor, Galopera, Kamba La Mercé, San Baltasar, Josefina. Mauricio Cardozo Ocampo falleció en Buenos Aires el 5 de mayo de 1982. La Guarania Una de las formas musicales más significativas, que identifican el Paraguay es la Guarania, de ritmo lento, nostálgico y meditativo, surgida en el seno mismo de nuestro paÃ−s. José Asunción Flores, fue su creador. Aunque fue Manuel Ortiz Guerrero quien captaba las monotonÃ−as de los largos viajes realizados a diario por los carreteros del campo, en las horas de la madrugada, cuando los sueños querÃ−an impedir seguir el camino. Ortiz Guerrero, de aquello se inspiraba, pero como no manejaba los elementos de la escritura musical ni de componer, a su manera empezaba a dar forma a su idea en el papel. 5
Posteriormente, años después, estos elementos cayeron en manos de José Asunción Flores, interpretando aquello del sentir y soñar de Ortiz Guerrero, dio origen a un nuevo género musical denominado “Guarania”. JejuÃ−, Kerasy y Arribeño Resay, fueron las primeras guaranias escritas en el año 1928. El nombre de la guaranÃ−a se debe a Manuel Ortiz Guerrero, el poeta que tanta influencia tuvo en el desarrollo de la vida artÃ−stica de José Asunción Flores. Ortiz Guerrero quiso sustituir el nombre de “polka” por el de guaranÃ−a. Según Mariano Godoy, maestro de Flores, Ortiz Guerreo quiso escribir una obra teatral con el nombre de guaranÃ−a, un tipo de zarzuela paraguaya, cuya música querÃ−a confiar a Flores, quien declara: “HabÃ−amos planeado juntos la realización de una pauta de ópera, en tres actos sobre la leyenda del Urutaú, proyecto que solo fue realizado en parte”. Flores, dice: “La palabra guaranÃ−a es el derivado de la palabra guaranÃ− que a su vez pertenece el acervo común del vocabulario popular. Por lo tanto, no es una creación; sino un nombre genérico para denominar el tipo y género de nuestra música…”. Hoy el nombre de guaranÃ−a es especÃ−fico de una canción paraguaya con ritmo y caracterÃ−sticas propios y que se deben a Flores. La guaranÃ−a surgió como reacción a la falta de una canción lenta, melancólica, adecuada a ciertos estados de ánimo del pueblo Flores sintió esa necesidad, interpretando exactamente el sentir del paraguayo. Sus autores José Asunción Flores Nació en Asunción el 27 de agosto de 1904, hijo de Ma. Magdalena Flores, una lavandera de un barrio marginal llamado Chacarita. Es probable que su afición por la música haya heredado de su padre, el guitarrista Juan Volta. El propio maestro Flores refiere que su historia musical empezó "por robar un pedazo de pan" de un negocio de las cercanÃ−as de la parroquia de San Roque, donde, con otros niños, gustaba de corretear y jugar. Aquel mendrugo determinó que el niño fuera a parar a una comisarÃ−a y de allÃ−, como "castigo", en el carácter de aprendiz en la Banda de Música de la PolicÃ−a. Su primera composición, una alegre polca dedicada a su padrino, "Manuel Gondra", data de 1922. En 1925, experimentando sobre una vieja canción popular, Maerãpa reikuaase, logró llegar al género de la Guarania, ritmo que convierte al Paraguay en uno de los pocos paÃ−ses del planeta que tiene una música propia cuyo autor se conoce. El mismo Flores dirá, andando el tiempo, que "la Guarania es de mi pueblo, fue escrita para y por mi pueblo". En 1928 conoció al poeta guaireño Manuel Ortiz Guerrero quien serÃ−a el autor de los versos de sus más famosas obras e influirÃ−a de manera decisiva en la vida personal del músico. Un año después recibió de manos del presidente de la Rca. Argentina el premio al mejor instrumentista del certamen internacional de Bandas realizado en Buenos Aires. En 1932 se alistó en defensa de su patria y combatió en el frente de batalla en la Guerra del Chaco contra Bolivia. Vivió en Buenos Aires, hacia la mitad de los años '30, ocasión en la que formó una agrupación propia, la "Orquesta Ortiz Guerrero" con la cual, en 1934, grabarÃ−a un disco absolutamente antológico. En 1936, cuando el triunfo de la Revolución del 17 de febrero, regresó al paÃ−s y fue designado director de la orquesta Folklórica GuaranÃ−. Se desempeñó asimismo como profesor de la Escuela de Enseñanza 6
Primaria Musical. Por avatares polÃ−ticos tan propios del turbulento Paraguay de aquel tiempo, volvió al exilio en la Argentina. En su paÃ−s, mientras tanto, sus guaranias alcanzaban gran popularidad y difusión y, en este marco, "India", con letra inicial de Rigoberto Fontao Meza y luego con la definitiva de Ortiz Guerrero, se convertirÃ−a en "Canción Nacional" por decreto del año 1944. En 1949 rechazó la condecoración "Orden Nacional del Mérito" en protesta contra el asesinato del joven estudiante Mariano Roque Alonso. Este hecho le valió, bajo el mote de "traidor a la patria" la imposibilidad absoluta de regresar al paÃ−s durante el gobierno de Alfredo Stroessner (1954-1989). El ingreso se le negó incluso cuando ya muy enfermo y en los últimos años de su vida pidió retornar y establecerse en un pequeño rancho. Fue designado miembro del Consejo Mundial de la Paz. En 1954 comenzó una etapa de "jerarquización de la guaranÃ−a" a partir del trabajo sinfónico sobre sus principales obras ya escritas y creando sus célebres poemas sinfónicos, VÃ−ctima del mal de Chagas, falleció José Asunción Flores en Buenos Aires, el 16 de mayo de 1972, tres meses antes de cumplir 68 años. Entre sus obras: Arribeño Resay, Nerendápe aju, Jejuy, Gallito Cantor, India, à ane Aramboha, à asaindýpe, Kerasy, Nde ratypykua, à emitÿ. Indiscutiblemente uno de los más grandes músicos que tuvo el Paraguay. Nació en La Chacarita (Bo Ricardo Brugada). Ingresó a la Banda de la PolicÃ−a de la Capital a los 11 años de edad. Tuvo la suerte de contar con un instructor como Félix Fernández. Por decreto gubernamental India y Cerro Corá (esta última de Herminio Giménez y Félix Fernández) fueron declaradas "música oficial" el 24 de julio de 1944. Otras obras incluyen: Nde Ratypykua (Tus Hoyuelos), Salud, Kerasy, Obrerito, Gallito cantor, Purahéi paha, Mburikao, à ande Aramboha, Choli, Musiqueada che ámape. Compuso también 12 sinfonÃ−as, entre éstas Pyhare pyte, à ande Ru Vusu y MarÃ−a de la Paz. Este maestro compatriota fallece en el exilio, en la ciudad de Buenos Aires el 16 de mayo de 1972. Fue repatriado en 1991. Descansa en la plaza que lleva su nombre y el de su amigo Manuel Ortiz Guerrero en la ciudad de Asunción. Manuel Ortiz Guerrero Villarrica tiene el particular don de prohijar artistas. Y uno de los artistas de esa región del paÃ−s cuya poesÃ−a, por sublime y expresiva, tiene dimensión universal, es Manuel Ortiz Guerrero. Nacido en la capital del Guairá en 1894, su infancia fue acunada por los sones milenarios de la brisa del Yvytyrusú, y la poesÃ−a del paisaje enmarcado por los cerros, fue palabra para pintar un paisaje, fue verbo para el amor y fue alegato que marcó un camino, cuando exhortó a atreverse siempre, pues es ese un culto que pocos profesan. La lÃ−rica de Manuel Ortiz Guerrero es un marco referencial para estudiar a todos los poetas lÃ−ricos connacionales. Su vida fue rara y embellecida mezcla de grandeza y dolor. Cuando madura el poeta y sus versos brotan a borbotones como un acto fisiológico de vivir; cuando el alma viste el ropaje de la virtud y el talento, la carne sufre el látigo de una enfermedad incurable y el destino sella la fatalidad de una temprana muerte. Ese es otro de los méritos que, en justicia, acreditamos al poeta del Guairá, quien tempranamente, a los 39 años, apagó su vida en Asunción, cuando corrÃ−a el año 1933. Se suma al aporte poético-cultural de Manuel Ortiz Guerrero, sus obras para teatro escritas en verso, destacándose El Crimen de Tintalila, tragedia en tres actos, escrita en Asunción en el año 1922, y Eireté, en Villarrica, en 1920. Ortiz Guerrero fue hijo de Vicente Ortiz, Juez de Paz de distintos pueblos, y doña Susana Guerrero, fallecida al dar a luz a Manuel, quien fue confiado a la crianza de su abuela paterna, doña Florencia Ortiz. Cursó la primaria y parte de la secundaria en Villarrica. Fueron sus compañeros, relevantes figuras de las letras paraguayas, como Natalicio González, Leopoldo Ramos Giménez, Facundo Recalde. Sus restos descansan en Villarrica. La Polka Nuestra música, de gran riqueza rÃ−tmica y melódica, es madre de canciones y danzas. La danza polka 7
paraguaya dio origen a la polka canción, canción polka (purahéi) o simplemente canción paraguaya, el compuesto, la guaranÃ−a, la galopa y el chamamé. Todas ellas tienen un ritmo de 6/8. Músicas derivadas de la polka paraguaya Mà SICA FOLKLà RICA La música es un fenómeno universal que tiene manifestaciones similares en las más diversas regiones del mundo, aunque estén separadas por grandes distancias. Es un hecho bastante conocido que la guitarra, preciado instrumento que nos parece tan nuestro y representativo de nuestra música, forma parte de la música folklórica de América y de muchas otras naciones del mundo. La heredamos de España, esta, a su vez, la tomó de los moros, habitantes de las tierras del Oriente milenario. Otro ejemplo es el siku o flauta del dios Pan, de la mitologÃ−a griega. Tiene amplia difusión entre las más diversas culturas del mundo. Debemos entender que las tradiciones de todos los paÃ−ses están relacionadas más o menos directamente en la historia de la gran familia humana. LA CANCIà N PARAGUAYA El ritmo, un tanto menos rápido, hace factible la vocalización de las palabras y expresar asÃ− sentimientos de tristeza y alegrÃ−a. Esto dio origen a la polka canción (purahéi) que no es tan lenta como la guaranÃ−a. Su esencia es la expresión, el sentimiento, por eso decimos “canción” y luego “polka” (canción-polka). Generalmente costa de dos movimientos. El primero semi lento y el segundo más rápido, como es el caso de la canción Cerro Corá, oficializada por el Poder Ejecutivo el 24 de julio de 1944, declarándosela Canción Nacional, cuya letra es de Félix Fernández y la musicalización de Herminio Jiménez. Existen otras canciones como Alondra feliz, Asunción, Tardes asuncenas, etc. POLKA CANCIà N Probablemente surgió antes que la canción polka. El solo movimiento rÃ−tmico no satisface a todas las necesidades artÃ−sticas del hombre. Por lo tanto, la esencia es el ritmo rápido, pero cantada. Es danza y canción a la vez, por eso gusta mucho. Ejemplos: à anderogami, Felicidades, Colorado (cantada), etc. EL COMPUESTO Es una polka canción de carácter épico-satÃ−rico. Su esencia es relatar hechos reales o imaginarios; algunos tienen lÃ−neas melódicas libres, semi rrecitativas, por la mayor relevancia del texto. Ejemplos: Vapor Cué, Mateo Gamarra, El casamiento del tarave, Veterano del '70, etc. LA GALOPA Es una polka con acentuaciones más marcadas en el ritmo, con grandes intervalos en la melodÃ−a y notas prolongadas. Es una danza tradicional paraguaya cuyo nombre deriva de la danza alemana galop. Galoperas son las bailarinas que generalmente bailan con botellas o cántaro sobre la cabeza. Ejemplos: Tren lechero, Pájaro Campana, Cascada, Misionera, etc. La Danza Paraguaya La Danza Paraguaya, de gran sentido rÃ−tmico, gracia y flexibilidad, forma parte de nuestro folklore. Es una manifestación cultural espontánea de nuestro pueblo, que tiene caracterÃ−sticas y elementos propios, y que 8
se transmite de una generación a otra La danza paraguaya busca desarrollar criterios propios de relación del patrimonio cultural y mantener el contacto con nuestras raÃ−ces, con nuestra esencia y con nuestra historia, como también las manifestaciones artÃ−sticas de otras culturas. Para la danza existen unas vivas polkas y polkas galopadas. La polca es una danza de parejas, en tanto que las galopas son danzadas por un grupo de mujeres llamadas galoperas que giran formando un cÃ−rculo, balanceándose de un lado a otro con un cántaro o un jarrón en sus manos. Otra variante es la danza de la botella, donde la principal bailarina danza hasta con 10 botellas en la cabeza, una sobre otra. También están los Valseados, una versión local de los valses, como por ejemplo “El ChopÃ−”, “Santa Fe”, “Taguató”, “Golondrina, Solito, etc. Existen dos estilos de polkas en la danza paraguaya, y son el syryry y el jekutu. La polka syryry es deslizada y la jekutu es clavada, pero ambos estilos conservan la cantidad de movimientos del paso básico de la polka, solamente adquieren una u otra caracterÃ−stica, es por eso que llamamos estilos de bailar la polka. Cuando se baila en parejas, se utilizan diferentes estilos de enlace, como el chipa aku rerahaha, ryguasu ajuravóka, ryguasu pepo, ka'i mano, poste ñenohë, entre otros. Las danzas tradicionales requieren destrezas para bailar, especialmente de parte de los caballeros, que en los toreos demuestran grandes habilidades para los arrodillados y acuclillados. Origen Cuando los conquistadores llegaron a América, introdujeron su forma de bailar, la cual se mezcló con las danzas indÃ−genas, y dio lugar a las caracterÃ−sticas propias de la tradicional danza paraguaya. Pero esta fusión entre la danza nativa y la española ocurrió en todos los pueblos conquistados y no solamente en Paraguay. Por tal motivo, muchos paÃ−ses americanos tienen las mismas danzas, con variaciones en la coreografÃ−a que lleva implÃ−cita la particularidad de cada paÃ−s. Las formas que ejercieron influencia en las danzas paraguayas son las españolas y las francesas, tales como: zapateos, castañetas, denominaciones de algunas figuras, como el toreo, los palmoteos y gritos. Pero aun cuando estas formas de bailar provienen de las corrientes europeas, es importante destacar que las danzas paraguayas tienen un carácter tÃ−pico que las distingue. La danza paraguaya no es una copia fiel de las europeas; el criollo paraguayo le dio vida, nueva identidad, hasta convertirla en verdadero arte nacional, en la cual se refleja el carácter del pueblo: alegre, chispeante, romántico, melancólico, guerrero, tierno, tÃ−mido, agresivo y picaresco. Agrupación de la danza paraguaya En la danza paraguaya predominan los nombres de pájaros. Por ejemplo, están las danzas del chopÃ− (tordo), palomita, golondrina, mainumby (picaflor, colibrÃ−) y taguató (gavilán). Otras danzas son: el solito, cazador, polka, galopa, danza de la botella, londón karapé y otros. Cada una de estas danzas tiene caracterÃ−sticas propias, por o que se agrupan de la siguiente manera: DANZA DE LAS Mà SICAS POPULARES: Polka, Galopa y Valseado. Su forma de danza es de parejas enlazadas. DANZA DE TIPO COLECTIVO: Danza de las galoperas. Es la manifestación pura del pueblo, improvisada, tradicional, sin coreografÃ−a fija.
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DANZA INDIVIDUAL: Danza de las botellas; es la única danza individual que se encuentra en vigencia. DANZA TRADICIONALES: El ChopÃ− o Santa Fe, Palomita, Golondrina, Londón Karapé, Solito y Cazador. Son las más numerosas, tienen coreografÃ−as y músicas fijas. Son de pareja suelta e interdependiente, y en algunos casos, independientes. Existen varias formas de bailar, las variaciones están en la forma o estilo y en la coreografÃ−a o figuras que se usan durante el baile: Traje tradicional femenino TYPà I: Se confecciona en tela de ao po'i, amplio escote bordado de color negro o rojo, mangas de encaje ju. FALDA: Amplia, fruncida, larga hasta los tobillos. Lleva en la parte inferior uno o dos volados fruncidos. La tela es suave, liviana, color tenue, preferiblemente blanco. ENAGUAS: Fruncidas y almidonadas, adornadas con encajes, puntillas que terminan en un moño a un costado. Se acostumbra levantar un poco la falda al danzar, para lucir sus adornos. PEINADO: Dos trenzas sueltas, llevando un moño en las puntas. Lleva variadas flores. ACCESORIOS: Oro de aro de tres pendientes con piedras o de filigrana. Peinetas con incrustaciones de piedras. Rosario de oro o plata, collares de coral y de filigrana y cadenas de oro. Mantilla con motivos florales en hilos de colores. Se lleva en el hombro y anudado en el costado. Traje tradicional masculino CAMISA: Blanca, confeccionada en ao po'i, bordada en blanco en el pecho, puño y cuello. PANTALà N: Recto, de color negro. FAJA: De seda o lana negra con flecos en los extremos. En la actualidad se usa la faja de varios colores, trenzado de algodón que confeccionan los indÃ−genas. PAà UELO: En color blanco o negro anudado al cuello. SOMBRERO: Piri con cinta negra. PONCHO: De 60 listas. La proyección folklórica Es el patrimonio cultural que toma el espÃ−ritu de lo folklórico, pero no se encuadra en lo puramente folklórico por falta de alguna caracterÃ−stica para considerarla como tal, como por ejemplo, el ser anónimo, de transmisión oral, etc. Las danzas inspiradas en un personaje popular o en un hecho folklórico, cuyas coreografÃ−as están creadas por un profesional son de proyección folklórica. La proyección folklórica contribuye a la difusión de los hechos folklóricos, pero debe tener un fundamento real, 10
verdadero, para no desvirtuar la esencia de lo que se proyecta. Mitos y Leyendas Otra parte de nuestro folklore paraguayo son los mitos y leyendas El Paraguay, además de ser un paÃ−s rico en fauna, flora, artesanÃ−a y música, es además exquisito en el ámbito cultural. Esta tierra cuenta con mitos y leyendas que la hacen aún mucho más exótica y mÃ−stica. La mitologÃ−a guaranÃ− presenta una gran profundidad y variedad, pero lo más resaltante de estos mitos y leyendas es que no son sólo personajes netamente ficticios, difÃ−ciles de imaginar y adaptarlos a la vida cotidiana, sino que no cuentan con poderes que sobrepasen el lÃ−mite de lo que podÃ−a ser real. Los mitos guaranÃ−es son algo más creÃ−ble, animales extraños, personas que sufren maldiciones, historias que pueden ser adaptadas a la vida cotidiana. Son un tesoro nacional, parten de una nación especial que resultó de la unión de americanos y europeos, es decir, guaranÃ−es y españoles. Estos mitos son muy conocidos, modestos y no estaban desviados a los vicios. Entre las leyendas más conocidas están: la leyenda de la Yerba Mate, la leyenda del Karau, el à anduti, Tupi y GuaranÃ−, Tupa ha Aña (Dios y el diablo), Ka`a, Urutau, leyenda de la Virgen de Caacupé y otras más. De la leyenda de Taú y Keraná, nacieron los 7 mitos del Paraguay, que eran sus hijos. Ellos son: • Teju Jaguá • Jasy Jateré • Moñái • Mbói Tui • KurupÃ− • Ao ao • Luisón Otros mitos famosos son Yaguareté Abá (El indio tigre) o “tigre-capiango”, Póra(fantasma), ka`aguy póra (fantasma del bosque), Mbói Tata (serpiente de fuego) y Pira à u (pez del campo). Keraná, que significa dormilona, era una bella mujer que se pasaba el dÃ−a durmiendo, vivÃ−a en una tribu y era la hija de Marangatu. Tau, era un espÃ−ritu malo que se enamoró perdidamente de Keraná. Para poder estar junto a ella, se transformó en un joven e intentó raptarla. Katupyry, que era el espÃ−ritu del bien, se interpuso para defenderla. Tau y Katupyry se dieron a una pelea que duró 7 dÃ−as y 7 noches en la que finalmente venció Katupyry. Tau fue exiliado por Pytajova'i (diós del valor y de la guerra). En su desesperación, Tau raptó a Keraná y por esto Arasy lo maldice. Tau y Keraná tuvieron 7 hijos con apariencia de monstruos o fenómenos: los 7 mitos. Teju Jaguá fue el primer hijo de Tau y Keraná. Se dice que es un gran lagarto con siete cabezas de perro, de allÃ− deriva su nombre:teju: lagarto, jagua: perro. Según el mito vagaba por el cerro de Yaguarón y era amo de las cavernas del lugar, a donde arrastraba a sus vÃ−ctimas para engullirlas.
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Otros afirman que era pacÃ−fico y que sólo se alimentaba de frutas y miel. Es considerado guardián de las riquezas de la tierra guaranÃ−. Mbói Tui fue el segundo hijo de Tau y Keraná. Tiene cuerpo de vÃ−bora y pico de loro. De estas caracterÃ−sticas también proviene su nombre:mbói: vÃ−bora, tu`i: loro. Es respetado como dios de los anfibios, la humedad y el rocÃ−o. Moñái fue el tercer mito engendrado por Tau y Keraná. Es el protector de los ladrones y las picardÃ−as. Tiene la forma de una serpiente corta, menos de un metro de largo y con el grosor de un tronco. Vive en pantanos y esteros del Paraguay, no se le atribuye el tÃ−tulo de protector de alguna otra especie de animal o plantas, es un mito de apariencia horrible que asusta a la gente. Algunos afirman que ver el Moñái produce la muerte. Su nombre significa fragmento de luna. Jasy Jateré es un pequeño duende de rubios y ondulados cabellos y ojos azules que vaga desnudo por las plantaciones del campo en horas de la siesta, posee además un bastoncito de oro, una especie de varita mágica, con la que atrae a su vÃ−ctima, a quien luego lleva a su hermano Ao ao (que es antropófago). Otra manera de atraer a sus vÃ−ctimas es el silbido que produce imitando el canto de un pájaro. Es considerado como el cupido guaranÃ−. Se dice que Jasy Jateré rapta niños, los alimenta con frutas, miel y gusanos, luego los deja libre, pero éstos regresan a sus casas ya tontos. Por esto, las madres paraguayas advierten y prohÃ−ben a sus hijos salir a jugar en horas de la siesta, ya que corren peligros de ser llevados por Jasy Jateré. KurupÃ− se lo considera dios de la sexualidad. Es el mito sátiro de la tierra GuaranÃ−. Sus caracterÃ−sticas son muy extrañas, ya que es famoso por su miembro viril, que es tan largo como un lazo y lo lleva atado a su cintura. Con este miembro enlazaba a niñas y mujeres, las secuestraba y las poseÃ−a. Se lo considera protector de animales de la selva, especialmente sementales. Tiene la piel negra como un carbón. Ao ao es una especie de animal de cuatro patas, semejante a las ovejas, aunque es más grande y cruel. Se traslada en manada y su nombre se debe a la manera en que se llaman unos a otros “ao ao”. Es considerado dios de la fecundidad, ya que tuvo muchos hijos. Estos se trasladaban en manadas y comÃ−an personas. Se dice que la única manera de salvarse de Ao ao es trepando un mbokaja o palmera. Luisón es el séptimo hijo de Tau y Keraná; considerado señor de la muerte, debido al gusto que tiene por rondar cementerios y alimentarse de la carne de los cadáveres. Es uno de los mitos más terrorÃ−ficos del folklore guaranÃ−. Se dice que los martes y viernes, Luisón pierde la forma humana y se convierte en un perro de apariencia lúgubre, con grandes colmillos y que emana un olor muy desagradable. Recupera sus formas humanas al aclararse el nuevo dÃ−a, donde es hombre nuevamente, pero de apariencia triste; está sucio y cansado. Se dice que el séptimo hijo de cada mujer será luisón Pombero El pombero es un hombre bajo, feo, de piel morena, manos y pies peludos, se dice que sus pisadas no se sienten y es considerado como el protector de las aves de la selva. Habita en el bosque o en casas abandonadas, y vaga durante las noches. En la comunidad paraguaya, el 12
Pombero es relacionado con los hijos nacidos fuera del matrimonio, ya que éste entra a las casas de mujeres que viven solas y si ellas no le dan vino o cigarrillos quedan embarazadas con el simple hecho de que el Pombero les toque el vientre. Mientras que con los hombres, el Pombero puede convertirse en un perverso difÃ−cil de soportar, asÃ− como un valioso aliado en las relaciones con las mujeres y en sus cultivos. Entre las habilidades más resaltantes del pombero están la facilidad de mimetizarse, hacerse invisible, deslizarse por espacios estrechos como el ojo de una cerradura, puede correr de cuatro patas e imitar el silbido de los hombres, el canto de los pájaros y el sonido de las vÃ−boras. Dicen que para ganarse su respeto tenemos que dejarle en la cocina: tabaco, una botella de wiski, etc. Si lo acepta podemos caminar en los senderos mas oscuros y nunca nos pasara nada porque el pombero nos defenderá y si no lo acepta nos odiara como ninguna otra persona Museo Mitológico Ramón ElÃ−as En este museo, su fundador, Ramón ElÃ−as, ha creado un espacio en el que se encuentran representadas las imágenes de todos los personajes de la mitologÃ−a guaranÃ−. El mismo está ubicado en la ciudad de Capiatá El Paraguay cuenta con gran cantidad de leyendas las cuales son el ingrediente especial en el folklore de este paÃ−s, son vivas muestras de las creencias, el arte y la imaginación de los pobladores de la zona. AsÃ− también, son los principales temas que manifiestan la belleza literaria de los pueblos. Estas leyendas fueron creadas para argumentar hechos difÃ−ciles de explicar. Entre las leyendas más conocidas se encuentran: la leyenda de la yerba mate, la del ñanduti, del Karau, la leyenda de los hermanos TupÃ− y GuaranÃ−, la leyenda de la Virgen de Caacupé, del chajá, de la azucena, etc. La leyenda de la Yerba mate En una gran selva, cerca de los Saltos del Guairá, vivÃ−a un señor con su esposa y su hija. La muchacha era muy buena y hermosa. Un dÃ−a llegó al rancho una persona de aspecto agradable. Con buenas palabras pidió al dueño de casa que le cediera permiso pasar la noche con ellos, habÃ−a caminado mucho y estaba cansado. Prometió que al dÃ−a siguiente, al salir el sol, iba a seguir su camino. El dueño de casa aceptó y lo atendió como un miembro más de la familia. Cuando amaneció, el forastero tomó sus cosas para seguir su camino, pero antes de irse dijo al dueño de casa que él era un enviado del cielo, que habÃ−a venido a la tierra para premiar a los buenos. Afirmó que sabÃ−a que la familia era de escasos recursos y agradeció que de igual manera le dieran de cenar la única gallina que tenÃ−an y una cama, esto no lo harÃ−a cualquier persona, sólo los de buen corazón. Como premio a su amabilidad, hizo que su hija no muriera jamás, la convirtió en una planta. Dijo que los hombres cortarÃ−an sus ramas y le arrancarÃ−an las hojas, pero que ella volverÃ−a a brotar más frondosa y bella. El viajero se despidió y siguió su camino. Fue hacia el lado del alba, caminando de la mano de Dios. Desde aquel dÃ−a, las ramas y las hojas cortadas de la yerba mate son tostadas y molidas para que después sean utilizadas como bebida estimulante en el mate y tereré. 13
Karau fue un joven que, en una noche en que su madre estaba muy enferma, éste salió a buscar remedios para ella. Pero en el camino encontró una fiesta y allÃ− se quedó a bailar con la señorita más hermosa de la noche, prometiéndose que sólo se quedarÃ−a un momento. A la medianoche, cuando la diversión empezaba a aumentar, se le acercó un amigo que muy serio le empezó a hablar. Le dijo que deje de bailar, que traÃ−a la noticia de que su madre habÃ−a muerto. El joven, como si no le importara lo que habÃ−a escuchado, pidió que siguiera sonando la música, pues seguirÃ−a bailando, y dijo a su amigo que el que murió ya murió y que habrÃ−a tiempo para llorar. Ya por la madrugada, el joven preguntó a su dama dónde quedaba su casa, a lo que la mujer le respondió que su casa quedaba muy lejos, pero que podrÃ−a ir a visitarla los dÃ−as en que extrañe a su madre. Luego de escuchar estas palabras, el joven se dio cuenta de lo que habÃ−a hecho y se arrepintió. Salió del lugar llorando amargamente, repitiendo que su madre ya se murió. Dijo que desde ahora vagarÃ−a sin rumbo por los esteros y en esos lugares se vestirÃ−a por siempre de luto. Por haber sido un mal hijo, Tupã lo castigó; lo vistió con un plumaje negro y lo condenó a llorar. à anduti Cuenta la leyenda que existÃ−a una mujer morena, muy bella y amable llamada SamimbÃ−. Dos hombres, bravos guerreros guaranÃ−es, luchaban por su amor. Uno de los jóvenes se llamaba Yasyñemoñare (hijo de la luna) y el otro à anduguazú (araña grande). Una noche en que Yasyñemoñare suplicaba a Tupã (Dios) que lo ayude a conquistar el amor de SamimbÃ−, vio en lo alto de un enorme árbol una especie de encaje de color plateado, era perfecto y la luz de la luna lo hacÃ−a aún más bello. Esto deslumbró a Yasyñemoñare y entonces trepó al árbol para bajarlo y regalárselo a su amada. En ese momento también pasó por allÃ− à anduguazú, que al ver aquel tejido tan hermoso, se puso furioso por los celos al saber que su enemigo lo conseguirÃ−a antes que él. Sin pensarlo dos veces, le disparó una flecha. Yasymoñare cayó muriendo en el acto. Entonces, rápidamente à anduguazú trepó al árbol, pero cuando quiso tomarlo, sólo quedó en sus dedos el tejido que se desgarró al instante, comprobando que se trataba de una tela de araña. El remordimiento persiguió por varios meses a à anduguazú, hasta que un dÃ−a su madre logró sacarle el terrible secreto. La mujer pidió entonces a su hijo que la llevase hasta aquel árbol. AsÃ− lo hizo à anduguazú, y cuando ambos llegaron hasta el lugar, vieron con sorpresa que en ese mismo sitio se encontraba un tejido idéntico al anterior. La mujer, queriendo consolar a su hijo, que desde la muerte de Yasyñemoñare vagaba sin rumbo por la selva, decidió regalarle un tejido igual al de aquel árbol. Para esto, la anciana se puso a estudiar con mucha atención la ida y venida de las arañas mientras hilaban con tal perfección hasta lograr aquel encaje. Entonces tomó sus agujas de tejer y empezó a copiar los cÃ−rculos y rectas que las arañas dibujaban, y utilizando como hilo las hebras blancas de sus cabellos, logró reproducir aquel singular tejido. Conclusión Con este trabajo se puede analizar diversos puntos acerca de nuestro folklore, por citar, hemos estudiado la música y danza paraguaya los mitos y las leyendas, asÃ− como sus precursores. Mi objetivo es que conozcan un poco del folclore paraguayo, tratar de estudiar, fomentar e imitar a los que lo practican y tratan de trasmitirnos siempre. En la actualidad las músicas y la danza paraguaya forman parte todavÃ−a de la tradición paraguaya con sus 14
melodÃ−as contagiantes de las músicas y colores vivos de los trajes Esperando, que se haya sacado el máximo provecho de este trabajo y que haya podido mostrarles lo lindo de nuestra cultura, con el fin de valorar lo que nos pertenece y poder fomentarlo un poco de ello dÃ−a a dÃ−a. Anexo
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BibliografÃ−a • Biblioteca Premium Microsoft Encarta 2006 [DVD] • 100 Paraguayos Del Siglo XX, editado por el diario à ltima Hora • El ABC Escolar • El ABC Estudiantil • Escolar, editado por el diario à ltima Hora • www.anselm.edu/homepage/tmfaith/diccio • www.musicaparaguaya.org • www.uni-mainz.de • Libro de Educación ArtÃ−stica: “La Música en las Aulas”, 7mo, 8vo y 9no grado. • Wikipedia.com à ndice Portada……………………………………………...………..Pág. 1 Introducción…………………………………………………..Pág. 2 El folklore……………………………………………………..Pág. 3 La Polca……………………………………………………….Pág. 10 La Danza paraguaya………………………………………....Pág. 11 Mitos y Leyendas……………………………………………...Pag. 14 Conclusión……………………………………………………...Pág.18 Anexo…………………………………………………………..Pag 19 18
BibliografÃ−a…………………………………………………...…Pág.22 23
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