Story Transcript
Luis O. Liberti svd (ed.) Participaciones del Cardenal Antonio Caggiano, Arzobispo de Buenos Aires, en los Períodos I (1962), II (1963), III (1964) y IV (1965) del Concilio Vaticano II
Luis O. Liberti svd (ed.) Participaciones del Cardenal Antonio Caggiano, Arzobispo de Buenos Aires, en los Períodos I (1962), II (1963), III (1964) y IV (1965) del Concilio Vaticano II Primer período 1962 ASSCOVS1 Volumen I Parte I página 11 (I-I 11) figura en la nómina de la Presidencia del Concilio Vaticano II. I-I 28 figura como miembro de la Comisión Central de las Comisiones Preparatorias del Concilio Vaticano II. [Elenchus Patrum qui partem habuerunt in Commissionibus Praeparatoriis Concilii, Commissio Sodales del 11-10-1962]. I-I 118 figura como Presidente de la Congregación General IX del 29 de octubre de 1962. I-I 118 figura como Presidente de la Congregación General XVII del 12 de noviembre de 1962. I-I 131 figura en el elenco de oradores en la Congregación General XX del 16 de noviembre de 1962 sobre el esquema de Las fuentes de la revelación. I-I 137 figura como Presidente de la Congregación General XXV del 23 de noviembre de 1962. I-I 147 figura como Presidente de la Congregación General XXXIII del 4 de diciembre de 1962. I-I 559 figura como Presidente de la Congregación General IX del 29 de octubre de 1962. I-I 592 indica al orador que se ha finalizado su tiempo, en la Congregación General IX del 29 de octubre de 1962. I-I 594 indica que da la palabra a un Padre conciliar, en la Congregación General IX del 29 de octubre de 1962. I-I 598 indica que da la palabra a un Padre conciliar, en la Congregación General IX del 29 de octubre de 1962. I-II 587 figura como Presidente de la Congregación General XVI del 12 de noviembre de 1962. I-II 628 indica al final de la Congregación General XVI del 12 de noviembre de 1962, que sea retirado el libro de los Santos Evangelios. 1
Acta Sinodalia Sacrosanti Concilii Oecumenici Vaticano Secundi.
1
Luis O. Liberti svd (ed.) Participaciones del Cardenal Antonio Caggiano, Arzobispo de Buenos Aires, en los Períodos I (1962), II (1963), III (1964) y IV (1965) del Concilio Vaticano II
I-III 71-74 pronuncia una Exposición oral en la Congregación General XX del 16 de noviembre de 1962, sobre el esquema de Las fuentes de la revelación. 2 Luego de reconocer y elogiar la redacción de este esquema por diferentes autores comprende que en este esquema debe hablarse sobre la revelación en el sentido dado tan claramente por el Papa Juan XXIII en el discurso inaugural del Concilio, investigando y explicando la doctrina íntegra e inmutable de la Iglesia. Esto por cierto se propusieron todos los que trabajaron duro e inteligentemente para elaborar el esquema en cuestión. Entiende que la dificultad de admitir el texto del esquema de esta constitución dogmática sobre las fuentes de la revelación se debe a que en la misma se habla explícita y formalmente sobre la doble fuente de la revelación, lo que daría innecesariamente lugar a discusiones sobre cosas debatidas. Aunque reconoce que entre los católicos esta cuestión de la doble fuente de la revelación no es una cuestión suficiente debatida. Aprueba el tratamiento en el aula del esquema. I-III 373 figura como Presidente de la Congregación General XXV del 23 de noviembre de 1962. I-III 423 indica que da la palabra a los Padres disertantes de la Congregación General XXV del 23 de noviembre de 1962. I-III 449 indica al orador que se ha finalizado su tiempo, en la Congregación General XXV del 23 de noviembre de 1962. I-III 454 indica al final de la Congregación General XXV del 23 de noviembre de 1962, que sea retirado el libro de los Santos Evangelios. I-IV 217 figura como Presidente de la Congregación General XXXIII del 4 de diciembre de 1962. I-IV 227 indica que los Padres no deben aplaudir en el aula conciliar. I-IV 249 indica al orador que se ha finalizado su tiempo, en la Congregación General XXXIII del 4 de diciembre de 1962. I-IV 259 indica al orador que se ha finalizado su tiempo, en la Congregación General XXXIII del 4 de diciembre de 1962.
2
Cf. Disceptatio Schema Constitutionis Dogmaticae de Fontibus Revelationis, en la Congregación General XIX, del 14 de noviembre de 1962, en ASSCOVS Volumen I Parte III páginas 14-26. El esquema consta de cinco capítulos. 1. Las dos fuentes de la revelación. 2. Inspiración, inerrancia y composición literaria de la Escritura. 3. El Antiguo Testamento.4. El Nuevo Testamento. 5. La Biblia en la Iglesia. Hasta que no se indique lo contrario seguirán otras intervenciones sobre el mismo documento.
2
Luis O. Liberti svd (ed.) Participaciones del Cardenal Antonio Caggiano, Arzobispo de Buenos Aires, en los Períodos I (1962), II (1963), III (1964) y IV (1965) del Concilio Vaticano II
I-IV 262 indica al final de la Congregación General XXXIII del 4 de diciembre de 1962, que sea retirado el libro de los Santos Evangelios.
Segundo período 1963 II-I 133 figura en el elenco de oradores en la Congregación General LIII del 22 de octubre de 1963 sobre el esquema de la Iglesia, capítulo tres (sobre el Pueblo de Dios y especialmente de los laicos). II-III 173-175 pronuncia una Exposición oral en la Congregación General LIII del 22 de octubre de 1963, sobre el esquema de la Iglesia,3 capítulo tres (sobre el Pueblo de Dios y especialmente de los laicos). «El orador manifiesta su adhesión al nuevo orden de capítulos propuestos por el Card. Suenens para la Constitución Dogmática sobre la Iglesia. Pero pide que el IV Capítulo no se titule simplemente "de laicis" sino "de laicis in Ecclesia Christi" ya que la vida cristiana y la acción apostólica de los laicos es esencialmente social y está encuadrada en la Iglesia. Insistió en la necesidad de evitar toda confusión entre el Sacerdocio de los fieles y el jerárquico. Se trata de un problema en el que hay que profundizar aún más para presentar una solución satisfactoria. Propone que al sacerdocio de los fieles se lo denomine "incoativo" para distinguirlo del "ministerial" propio de la Jerarquía. El sacerdocio de los fieles es real y se confiere a todos los cristianos de una manera incoativa en el bautismo para ser luego perfeccionado y completado con el Sacramento del Orden en los miembros de la Jerarquía. En cuanto a la vida apostólica, es necesario que los laicos tengan conciencia no sólo de su derecho sino también de su deber de ejercer el apostolado. Su labor es muy importante en la difusión del Evangelio en el mundo. Todo el pueblo de Dios ha de ser misionero. Sin embargo, para ejercer esta misión se necesita una adecuada preparación. El deber de proporcionar esta formación incumbe a la Jerarquía y a ellos mismos. Es importante que el capítulo de los laicos explique bien la teología del Apostolado de los laicos».4 II-III 181 Mons. José Ruotolo, Obispo de Ugento-Santa María di Leuca, Italia, nombra al Cardenal Caggiano durante su Exposición oral en la Congregación General LIII del 22 de octubre de 1963, sobre el esquema de la Iglesia, capítulo tres (sobre el Pueblo de Dios y
3
Cf. Disceptatio Schema Constitutionis Dogmaticae de Ecclesia, en la Congregación General XXXVII, del 30 de septiembre de 1963, en ASSCOVS Volumen II Parte I páginas 215-281 (Incluye los comentarios). Emmendationis a Concilii Patribus scripto exhibitae super schema Constitutionis Dogmaticae de Ecclesia, en la Congregación General XXXVII, del 30 de septiembre de 1963, en ASSCOVS Volumen II Parte I páginas 282-336. El esquema reelaborado consta de cuatro capítulos. 1. El misterio de la Iglesia. 2. La constitución jerárquica, especialmente de los obispos. 3. Del Pueblo de Dios, especialmente de los laicos. 4. De la vocación a la santidad de la Iglesia. Hasta que no se indique lo contrario seguirán otras intervenciones sobre el mismo esquema. Hasta que no se indique lo contrario seguirán otras intervenciones sobre el mismo documento. 4 L’Osservatore Romano edición semanal en lengua castellana, año XIII, número 585, página 4, del 7 de noviembre de 1963. Los destacados son del texto.
3
Luis O. Liberti svd (ed.) Participaciones del Cardenal Antonio Caggiano, Arzobispo de Buenos Aires, en los Períodos I (1962), II (1963), III (1964) y IV (1965) del Concilio Vaticano II
especialmente de los laicos). Manifiesta que coincide con las observaciones que éste expresara en la misma Congregación General. II-III 221 el Cardenal José Lefebvre, Arzobispo de Burdeos, Francia, nombra al Cardenal Caggiano durante su Exposición oral en la Congregación General LIV del 23 de octubre de 1963, sobre el esquema de la Iglesia, capítulo tres (sobre el Pueblo de Dios y especialmente de los laicos). Manifiesta que las expresiones del Cardenal Caggiano en la anterior Congregación General fueron confusas o ambiguas. II-VI 439 firma la Constitución Sacrosanctum Concilium el 4 de diciembre de 1963 en la III Sesión pública. II-VI 505 firma el Decreto Inter Mirificat el 4 de diciembre de 1963 en la III Sesión pública.
Segunda intersesión 1963-1964 III-III 894-896 junto a Mozzoni,5 Fasolino, Rodríguez y Olmos, Plaza, Esorto, Aramburu, Castellano, Vicentín, Buteler, Tortolo, Tato, Marengo, Rau, Devoto, Vénnera, Cafferata, Menéndez, Bolatti, Raspanti, Pérez, Kemerer, Chalup, Mayer, Aguirre, Scozzina, Marozzi, Primatesta, Iriarte, Schell, Lira, Bonamín, Blanchoud, Rodríguez, de Nevares, Gottau, Magliano, Muguerza, Rosch, Rossi, Quarracino, Sansierra, Segura, Carreras, Cárdenas, Ponce de León, Torres Farías y Tomé suscribe Observaciones escritas bajo el nombre de Conferencia Episcopal Argentina6 antes del 10 de julio de 1964, sobre el esquema de la Revelación Divina.7 Se indica que el esquema de la constitución dogmática sobre la « Revelación Divina » responde bien, en términos generales, a la finalidad de presentar íntegramente la verdad
5
Mons. Humberto Mozzoni, era Nuncio Apostólico en Argentina durante los períodos conciliares y consta que participó en el III y IV Período del Concilio Vaticano II. 6 Esta Observación escrita fue analizada en la Reunión Extraordinaria de la Conferencia Episcopal Argentina del 6 al 10 de agosto de 1963, Acta 1 del 6 de agosto de 1963, según Actas de la VII Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Argentina, agosto de 1963. Según consta en dicha acta el estudio preliminar del Esquema “De divine revelatione” fue confiado a la Provincia Eclesiástica de Buenos Aires. En dicha reunión leyó la relación correspondiente el Cardenal Caggiano: “en el decurso de esta lectura hubo frecuentes cambios de ideas sobre la conveniencia, oportunidad o expresión de alguna expresión, pero sin encontrarse objeción alguna de importancia que formular, quedando en cambio la impresión que el referido Esquema en su formulación actual responde bien a su finalidad de presentar íntegramente la verdad católica en una forma más accesible a la mentalidad moderna y con un sentido profundamente pastoral”. Acta 1 del 6 de agosto de 1963. 7 En este caso las Observaciones escritas corresponden al Schema Constitunionis de Divina Revelatione, en Apendix-Schema de Divina Revelatione, en ASSCOVS Volumen III Parte III páginas 783-791. Consta de un proemio y cinco capítulos. 1. La Palabra de Dios revelada. 2. La inspiración y la interpretación de la Sagrada Escritura. 3. El Antiguo Testamento. 4. El Nuevo Testamento. 5. El uso de la Sagrada Escritura en la Iglesia.
4
Luis O. Liberti svd (ed.) Participaciones del Cardenal Antonio Caggiano, Arzobispo de Buenos Aires, en los Períodos I (1962), II (1963), III (1964) y IV (1965) del Concilio Vaticano II
católica en una forma más asequible a la mentalidad moderna y con un sentido prevalentemente pastoral. Hay un esfuerzo evidentemente logrado de síntesis de doctrina, de claridad en la presentación y con marcado acento escriturístico que fácilmente puede ser asimilado como la eterna «Buena Nueva» renovadamente joven y despojada de elementos expresivos inactuales a la mentalidad moderna. La lectura del proemio y de los primeros capítulos aisladamente, deja insatisfacción y hasta la impresión de disconformidad algunas veces. Sin embargo, la lectura continuada de los Capítulos a medida que avanza, disipa insatisfacciones, disconformidades e incógnitas y al terminar el capítulo V que es el último, el panorama se aclara, completando los conceptos que, al comienzo del esquema, parecían exigir mayor amplitud. También indican algunos modos para enmendar el texto.
Tercer período 1964 III-I 92 figura en el elenco de oradores en la Congregación General XCVIII del 9 de octubre de 1964 sobre el esquema del apostolado de los laicos. III-I 107 figura en el elenco de oradores en la Congregación General CX del 27 de octubre de 1964 sobre el esquema de la Iglesia en el mundo contemporáneo. III-I 126 figura en el elenco de oradores en la Congregación General CXXIII del 16 de noviembre de 1964 sobre el esquema de la formación sacerdotal. III-II 181-182 suscribe junto a Fasolino, Esorto, Vicentín, Schell, Aramburu, Raspanti, Pechuán Marín, de Nevares, Cafferata, Muguerza, Chalup, Marengo, Deane, Di Stéfano, Blanchoud, Magliano, Gottau, Borgatti, Rodríguez, Menéndez, Peyrou, Pérez, Torres, Sapelak, Mayer, Bolatti, Segura, Tomé, Vénnera, Sansierra y Tortolo Observaciones escritas a nombre de Muchos Padres Conciliares de Argentina, pos Congregación General LXXXIII del 18 de septiembre de 1964, sobre el esquema de la Iglesia,8 capítulo octavo (La Bienaventurada Virgen María, Madre de Dios, en el misterio de Cristo y de la Iglesia). Expresan el firme deseo de que en la redacción definitiva del Esquema de la Constitución de Ecclesia, se restituya al capítulo VIII, dedicado a la Santísima Virgen María, el primitivo título del anterior proyecto de Esquema sobre la Santísima Virgen, a saber: «De Beata Maria Virgine, Ecclesiae Matre».
8
Cf. Disceptatio Schema Constitutionis de Ecclesia, en la Congregación General LXXX, del 15 de septiembre de 1964, en ASSCOVS Volumen III Parte I páginas 158-377, incluye las notas explicativas de los nuevos números y las relaciones correspondientes a los capítulos. Consta de ocho capítulos: 1. El misterio de la Iglesia. 2. El Pueblo de Dios. 3. La constitución jerárquica de la Iglesia y particularmente del episcopado. 4. Los laicos. 5. La vocación universal a la santidad en la Iglesia. 6. Los religiosos. 7. De nuestra vocación escatológica y de la unión con la Iglesia celestial. 8. La Beata Virgen María, Madre de Dios, en el misterio de Cristo y de la Iglesia. Hasta que no se indique lo contrario seguirán otras intervenciones sobre el mismo documento.
5
Luis O. Liberti svd (ed.) Participaciones del Cardenal Antonio Caggiano, Arzobispo de Buenos Aires, en los Períodos I (1962), II (1963), III (1964) y IV (1965) del Concilio Vaticano II
III-II 107 figura en el elenco de oradores en la Congregación General XCVIII del 9 de octubre de 1964 sobre el esquema del apostolado de los laicos. III-IV 108-111 pronuncia una Exposición oral en la Congregación General XCVIII, del 9 de octubre de 1964, sobre el esquema del apostolado de los laicos (en general).9 «El esquema es substancialmente bueno y merece nuestro asentimiento. Es oportuna y justa la mención particular reservada a la Acción Católica en el párrafo 16; sería no sólo incomprensible, sino además inconveniente e injusto pasar en silencio la definición dada por Pío XI y perfeccionada por Pío XII, en virtud de la cual los obispos y los laicos de muchos países, dóciles a las directivas de los Pontífices, se comprometieron viril y eficazmente por el Reino de Cristo. La formación para el apostolado es fundamental, debe ser lograda desde la infancia, debe resultar completa y fundada sobre una sólida doctrina teológica, debe presentarse no solamente como teoría sino más bien como una práctica cotidiana y requiere para llegar a ser eficaz una recíproca confianza entre el clero y los laicos».10 III-V 561 figura en el elenco de oradores en la Congregación General CX del 27 de octubre de 1964 sobre el esquema de la Iglesia en el mundo contemporáneo. III-V 563-565 pronuncia una Exposición oral en la Congregación General CX del 27 de octubre de 1964, sobre el esquema de la Iglesia en el mundo contemporáneo,11 capítulos 9
Cf. Schema Decreti de Apostolatu Laicorum, en la Congregación General LXXIX del 2 de diciembre de 1963, en ASSCOVS Volumen III Parte IV páginas 669-710. Consta de un proemio y de dos partes, dividas ambas por títulos y luego por capítulos. I Parte: El apostolado de los laicos en general; I Título: Los diversos modos en que puede deducirse el apostolado de los laicos, 1 capítulo: el apostolado ejercido a todos y en singular; 2 capítulo: las formas asociadas de apostolado; II Título: El recto ordenamiento que se debe observar en el apostolado de los laicos; 1 Capítulo: Las relaciones con la Jerarquía; 2 Capítulo: La coordinación mutua; III Título: Algunos que tienen una preocupación eclesial para el apostolado de los laicos en las actuales circunstancias de la vida; 1 Capítulo: El apostolado de los laicos de acuerdo a varias condiciones en la vida; 2 Capítulo: Algunos de los campos del apostolado de los laicos en las condiciones presentes del mundo en particular encomendados; IV Título: La formación de los laicos para el apostolado. II Parte: El apostolado de los laicos en particular; I Título: El apostolado de los laicos en directa promoción con el Reino de Dios; 1 Capítulo: El apostolado de los laicos en las comunidades de la Iglesia; 2 Capítulo: Las variadas formas del apostolado de los laicos en directa promoción con el Reino de Dios; II Título: : El apostolado de los laicos en la acción caritativa; 1 Capítulo: La naturaleza de la acción caritativa; 2 capítulo: Las variadas formas de la acción caritativa; III Título: El apostolado de los laicos en su acción temporal; 1 Capítulo: La acción de los laicos en el orden temporal y su consumación cristiana; 2 Capítulo: La relación en este orden de los laicos y la jerarquía; 3 Capítulo: Los laicos y el desarrollo temporal de su acción; 4 Capítulo: La aplicación de la doctrina social de la Iglesia en diversos campos de los negocios. Conclusión. Hasta que no se indique lo contrario seguirán otras intervenciones sobre el mismo documento. 10 L’Osservatore Romano, edición semanal en lengua castellana, año XIV, número 634, página 4, del 27 de octubre de 1964. 11 Cf. Disceptatio Schema De Ecclesia in mundo huius temporis, en la Congregación General CV, del 20 de octubre de 1964, en ASSCOVS Volumen III Parte V páginas 116-142 y Adnexa en ASSCOVS Volumen III Parte V páginas 147-200. Contiene un proemio, cuatro capítulos y un
6
Luis O. Liberti svd (ed.) Participaciones del Cardenal Antonio Caggiano, Arzobispo de Buenos Aires, en los Períodos I (1962), II (1963), III (1964) y IV (1965) del Concilio Vaticano II
segundo y tercero (2. La Iglesia al servicio de Dios y de los hombres. 3. Modo de vida de los cristianos en el mundo en que viven.); se atiene el capítulo tercero, número 17 “De la comunión fraterna que ha de ser edificada en el espíritu de pobreza”. «La comunión fraterna, que hay que realizar con espíritu de pobreza, es una cuestión muy importante para los hombres de nuestro tiempo. Todo lo que diga o haga la Iglesia para resolver el problema social será recibido muy bien por el mundo y contribuirá a la paz social de todo el género humano. Por esto es conveniente y necesario que el esquema parta del orden natural y pase luego al orden sobrenatural para que, iniciando el diálogo fundados en las verdades y principios naturales, lo confirmemos después con los mandatos evangélicos. Ahora bien, si el Concilio quiere hablar ecuménicamente a todos los hombres de nuestro tiempo, no bastan las palabras que se dicen en el esquema sobre el espíritu de pobreza, que son ininteligibles para la mayor parte de la humanidad formada por obreros. El título del párrafo en cuestión debería ser el siguiente: "La Comunión fraterna debe fundarse en la justicia, en la caridad y en el espíritu de pobreza". Los hombres de nuestro tiempo tienen sed de justicia y son hacia ésta más sensibles que a ningún otro valor tanto de orden natural como sobrenatural. Para edificar un mundo mejor, en el cual participen todos de una manera justa en los bienes comunes de la familia humana, los cristianos han de tener no sólo espíritu de pobreza, sino también el sentido humano de la justicia, que es fundamental. Hay que insistir en esto pues frecuentemente falta en muchos, incluso en los eclesiásticos, el sentido humano de la justicia. Hable el Concilio de la justicia social a todos, patrones y obreros, legisladores y gobernantes, para que cumplan su deber en este campo, y así, con la aplicación de la doctrina social de la Iglesia, mejore cada vez más la situación de los proletarios».12 III-VI 41 Mons. Santo Quadri Obispos Auxiliar de Pinerolo, Italia, en su Exposición oral durante la Congregación General CXII del 29 de octubre de 1964 sobre el esquema de la Iglesia en el mundo contemporáneo, nombra al Cardenal Caggiano en referencia al tema de la justicia social señalado por éste en su Exposición oral en la Congregación General CX del 27 de octubre de 1964. III-VIII 13 figura en el elenco de oradores en la Congregación General CXXIII del 16 de noviembre de 1964 sobre el esquema de la formación de los sacerdotes.
anexo con cuatro capítulos. Luego del Proemio, el 1. La vocación de todo hombre. 2. La Iglesia al servicio de Dios y de los hombres. 3. Modo de vida de los cristianos en el mundo en que viven. 4. Deberes principales de los cristianos de nuestro tiempo: A. Dignidad de la persona humana. B. Matrimonio y familia. C. Cultura. D. Vida económica. E. Solidaridad del género humano. F. La paz. El Adnexa se integra por 1. La persona humana en la sociedad. 2. El matrimonio y la familia. 3. La adecuada promoción del desarrollo de la cultura. 4. La vida económica y social. Hasta que no se indique lo contrario seguirán otras intervenciones sobre el mismo documento. 12 L’Osservatore Romano, edición semanal en lengua castellana, año XIV, número 636, páginas 5 y 6, del 10 de noviembre de 1964.
7
Luis O. Liberti svd (ed.) Participaciones del Cardenal Antonio Caggiano, Arzobispo de Buenos Aires, en los Períodos I (1962), II (1963), III (1964) y IV (1965) del Concilio Vaticano II
III-VIII 14-16 pronuncia una Exposición oral en la Congregación General CXXIII del 16 noviembre de 1964, sobre el esquema de la formación de los sacerdotes (en general). 13 «La renovación de los estudios eclesiásticos debe mirar a la formación íntegra de los sacerdotes, para que resulten ministros idóneos del Evangelio. La formación de los seminaristas debe ser al mismo tiempo tradicional y nueva, atendiendo a las exigencias de nuestro tiempo, combinando lo antiguo con lo nuevo. Esto es una ley de vida. Hay que coordinar mejor el ciclo filosófico con el teológico. La filosofía debe ser una propedéutica para la teología. Para esto se requiere que la filosofía sea recta y auténtica, es decir que sea la filosofía cristiana adoptada por la Iglesia desde hace siglos y que fue expuesta por Santo Tomás. Es evidente que la doctrina de Santo Tomás contiene cosas disputadas; la Iglesia no intenta imponer estas cosas sino que se acepten las que son verdaderas y objetivas. El orador cita pasajes de Juan XXIII y Paulo VI sobre Santo Tomás. La formación teológica debe enseñarse recurriendo siempre a las fuentes de la teología. Ayudará mucho para esto la Suma Teológica de Santo Tomás que los Papas han recomendado. Los abusos que pueden haber habido en la deformación de la auténtica teología tradicional no pueden achacarse a los grandes doctores que son nuestros guías en esta materia».14 III-VIII 860 firma la Constitución Lumen gentium y los Decretos Orientalium Ecclesiarum y Unitatis redintegratio el 21 de noviembre de 1964 en la V Sesión pública.
Cuarto período 1965 IV-I 123 indica que concelebra junto al papa Pablo VI y otros 24 padres conciliares la Misa del 14 de septiembre de 1965, en la VI Sesión Pública, en el inicio del Período IV del Concilio Vaticano II. Fiesta de la Exaltación de la Santa Cruz. IV-I 421 indica que acompañará al papa Pablo VI en la visita a la sede de las Naciones Unidas el 4 de octubre de 1965. IV-V 621 firma los Decretos Christus Dominus, Optatam totius y Perfectatae caritatis y las Declaraciones Gravissimum educationis y Nostra aetate, en la VII Sesión pública del 28 de octubre de 1965.
13
Cf. Schema Propositionum de Institutione Sacerdotali, en Congregación General CXXI del 12 de noviembre de 1964, en ASSCOVS Volumen III Parte VII páginas 498-502. Este segundo esquema constaba de un proemio y 19 proposiciones. Cf. Textus emendatusm en Congregación General CXXI del 12 de noviembre de 1964, en ASSCOVS Volumen III Parte VII páginas 538-551. El mismo consta de un proemio y siete capítulos. 1. La naturaleza de la formación sacerdotal en lo que respecta a los países en particular. 2. La urgencia de promover las vocaciones sacerdotales. 3. La organización de los seminarios mayores. 4 El cuidado de cultivar la formación espiritual. 5. Los estudios eclesiásticos reconocidos. 6. Promover una formación rigurosamente pastoral. 7. La formación a completar luego del seminario. Hasta que no se indique lo contrario seguirán otras intervenciones sobre el mismo documento. 14 L’Osservatore Romano, edición semanal en lengua castellana, año XIV, número 639, del 1 de noviembre de 1964, página 8.
8
Luis O. Liberti svd (ed.) Participaciones del Cardenal Antonio Caggiano, Arzobispo de Buenos Aires, en los Períodos I (1962), II (1963), III (1964) y IV (1965) del Concilio Vaticano II
IV-VI 633 firma la Constitución Dei verbum y el Decreto Apostolicam actuositatem, en la VIII Sesión pública del 18 de noviembre de 1965. IV-VII 805 firma la Declaración Dignitatis humanae, los Decretos de Ad gentes y Presbyterorum ordinis y la Constitución Gaudium et spes, en la IX Sesión pública del 7 de diciembre de 1965. IV-VII 872 nombrado al recibir de manos de Pablo VI una contribución destinada a los emprendimientos de los sectores confiados a los Hermanitos de Jesús del P. Foucauld en Argentina, durante la X Sesión pública del 8 de diciembre de 1965. IV-VII 876 nombrado al asistir al Cardenal Emilio Léger, al orar por los hombres de las ciencias e investigadores, durante la X Sesión pública del 8 de diciembre de 1965.
9