Story Transcript
invertir en la
Primera
infancia
Producción: UNICEF/Bolivia • fotografías: UNICEF/Bolivia • diseño: salinasanchez.com La Paz – Bolivia
2
EMPEZAR BIEN PARA VIVIR BIEN
¿Por qué invertir en la primera infancia?
L
a primera infancia es la etapa de la vida que comprende a niñas y niños menores a los seis años.
Es el periodo más importante en la vida de las personas, pues durante el mismo se desarrollan las bases sociales, afectivas y neurobiológicas. En esta etapa:
»» Se
realiza la socialización primaria en la cual la persona va aprendiendo acerca del sistema de valores, las pautas de comportamiento, los hábitos y la
cosmovisión que caracterizan la cultura y el contexto social en el que crece.
»» Se
construye la base de la identidad personal y social. La convivencia en esta etapa posibilita que los modelos de interacción aceptados en la comunidad sean asimilados como pautas de relacionamiento social.
»» Se
conforma la estructura básica del cerebro, en base a esta estructura se posibilitará el funcionamiento del organismo humano y los aprendizajes de toda la vida. (Ver cuadro No.1).
INVERTIR EN LA PRIMERA INFANCIA
1
Cuadro Nº 1/ Red Neuronal Recién nacido
Un mes
Tres meses
Seis meses
Crecimiento y desarrollo de la red neuronal cerebral durante los seis primeros meses de vida (Richmond 2001).
2
EMPEZAR BIEN PARA VIVIR BIEN
La mayoría de las personas nacen con potencialidades similares, sin embargo el desarrollo de las mismas depende de que las niñas y los niños desde el principio de sus vidas tengan la opción
para desarrollarlas, es decir que crezcan en ambientes favorables que les permita capturar óptimamente los momentos de oportunidad que la vida les da. (Ver gráfico No. 1).
Gráfica Nº 1 / Momentos de oportunidad
El desarrollo del cerebro es no lineal: existen momentos claves para la adquisición de diferentes tipos de conocimientos y habilidades. Cuando los niños cumplen los tres años, su cerebro es doblemente más activo que el de los adultos. Los niveles de actividad descienden durante la adolescencia. (Mary Eming Young/Gaby Fujimoto Gómez. Desarrollo Integral Temprano: Lecciones de los Programas No Formales 2007).
INVERTIR EN LA PRIMERA INFANCIA
3
Los niños de dos años ya han alcanzado el 75% del tamaño de su cerebro adulto. Esta es un prueba notable de que el crecimiento biosocial es la base de la cognición y la madurez social. (Kathleen Stassen Berger. Psicología del Desarrollo: Infancia y Adolescencia 2004).
4
EMPEZAR BIEN PARA VIVIR BIEN
Entornos favorables para la primera infancia
S
e entiende por entornos favorables a los espacios sociales, afectivos y físicos en los cuales las niñas y los niños viven e interactúan cotidianamente y brindan a esta población condiciones para que desarrollen todas sus potencialidades motrices, afectivas, sociales y cognitivas posibilitando así el pleno goce de sus derechos, aspecto que contribuye a que tengan un buen inicio de sus vidas. El Estado, como responsable de generar condiciones para el “vivir bien” de todas las ciudadanas y ciudadanos, es el responsable de garantizar las inversiones destinadas a la primera infancia, así como la delimitación de estructuras y mecanismos que posibiliten que las niñas y niños, desde el principio de sus vidas, tengan todas las oportunidades para desarrollar sus potencialidades en la familia, la comunidad o los servicios establecidos. La comunidad es el ambiente que genera condiciones para que las familias gocen de servicios y apoyo para favorecer el
desarrollo de todas las niñas y niños. Esto implica que la comunidad se movilice para procurar que el Estado desarrolle políticas sociales que garanticen que las familias y sus niños y niñas cuenten con servicios de protección, salud, educación, acceso a servicios básicos de saneamiento, agua y alumbrado, así como que cuenten con espacios de recreación e interacción entre familias que sean seguros y saludables. La familia, es el primer ambiente socializador de niñas y niños y, por lo tanto, la encargada de darles protección, desarrollar interacciones positivas con ellos, así como generar condiciones óptimas de salud, nutrición, buen trato y estimulación para favorecer su desarrollo integral. Las entidades que prestan servicios a las familias y la comunidad, constituyen un entorno que favorece al desarrollo de niñas y niños, de tal manera que las familias se sientan acogidas, protegidas y apoyadas para garantizar el desarrollo integral de sus hijas e hijos.
INVERTIR EN LA PRIMERA INFANCIA
5
La familia, la comunidad y las entidades que prestan servicios a la primera infancia, deben generar condiciones favorables que brinden a niñas y niños todas las oportunidades para desarrollar sus potencialidades.
6
EMPEZAR BIEN PARA VIVIR BIEN
La primera infancia tiene cara de pobreza
B
olivia es un país eminentemente joven, así lo señala el cuadro de distribución poblacional y en ese contexto según proyecciones 2010 del INE,
1.560.441 habitantes son niñas y niños menores a los seis años, constituyendo el grupo etario mayoritario con un 15% del total. (ver gráfica 2).
Gráfica 2 / Pirámide por rango de edades (Proyecciones INE 2010)
En los últimos años, en Bolivia se han desarrollados algunas políticas destinadas a mejorar la calidad de vida de los menores de edad, permitiendo abordar de manera más efectiva las necesidades de esta población.
INVERTIR EN LA PRIMERA INFANCIA
7
En Bolivia, cinco de cada diez personas viven en la pobreza y de esas cinco personas, una está en la extrema pobreza (Informe de Progreso 2010. Objetivos de Desarrollo del Milenio en Bolivia, 2010). Según datos nacionales, 69 de cada 100 niñas y niños menores de seis años viven en la pobreza y la mayoría de ellos vive en las áreas rurales. (Estudio sobre Pobreza y Disparidades /UNICEF 2010). Eso significa que siete de cada diez niños, niñas y adolescentes inicia su vida con desventajas, afectando claramente en su desarrollo integral pues la pobreza está íntimamente relacionada con la disminución de oportunidades. Alrededor de un millón de niños y niñas bolivianos, menores de seis años, viven en la pobreza.
8
EMPEZAR BIEN PARA VIVIR BIEN
Esta pobreza está relacionada con la disminución de oportunidades para contar con una buena salud, nutrición adecuada, protección y acceso a educación, aspectos que contribuyen al desarrollo integral de las personas, Mejorar las condiciones de vida de las niñas y niños en la primera infancia, abre oportunidades para que en su vida futura tengan mayores probabilidades de tener una vida sana, culminar sus estudios, formar familias estables y participar activamente en su sociedad. Por ello es importante invertir en la implementación de políticas públicas que garanticen para los niños y las niñas todas las oportunidades para tener el mejor comienzo en sus vidas.
Muertes que pueden evitarse
E
n nuestro país, según la ENDSA 2008, de 1.000 niñas y niños que nacen, 27 mueren antes del primer mes de vida, 50 mueren antes de cumplir un año y 63 mueren antes de cumplir 5 años. La mayor parte de estas muertes se deben a causas que pudieron ser prevenidas. (Ver gráfica No. 3).
que las niñas y niños desnutridos han cursado tres años menos en primaria y secundaria que los que se encontraban bien nutridos. (“El costo del hambre en Bolivia: impacto social y económico de la desnutrición infantil/ 2009” del Programa Mundial de Alimentos, la CEPAL y el Gobierno de Bolivia).
Existe relación entre desnutrición y abandono escolar, pues se ha establecido
El beneficio que significa el tener una niñez sana y bien nutrida en Bolivia, se
Gráfica 3 / Mortalidad Neonatal e infantil (ENDSA/Bolivia)
INVERTIR EN LA PRIMERA INFANCIA
9
traduce en garantizar los derechos que tiene esta población, favoreciendo al país con la disminución del costo en atenciones curativas, garantizando la supervivencia
de la población en las comunidades, fortaleciendo la estructura de las familias y previendo posibles problemas de aprendizaje en la escuela.
En Bolivia la mortalidad infantil es elevada y la mayoría de estas muertes son por causas prevenibles.
10
EMPEZAR BIEN PARA VIVIR BIEN
El rostro infantil de la educación
P
ese a que Bolivia tiene una considerable población menor a los seis años, desde la mirada de la educación se ha convertido en un grupo humano que requiere aún mucha atención. La insuficiente existencia de indicadores educativos relacionados con las niñas y niños menores de seis años, como son el nivel de desarrollo, cobertura de servicios educativos y de cuidado diario, entre otros, dificulta la toma de decisiones para generar políticas públicas.
El país presenta una tasa de escolaridad primaria del 90%, con una tasa de término de 75%. (SIE 2008). El bajo o nulo acceso a programas de educación inicial o desarrollo infantil ha sido identificado como uno de los factores asociados al bajo desempeño escolar. Estudios como el de High Scope/ Perry, señalan que “la ganancia que produce una inversión en la primera infancia son de 7 a 1, es decir, que por cada dólar invertido, hay siete dólares ahorrados o de beneficio para la sociedad”.
INVERTIR EN LA PRIMERA INFANCIA
11
Educar a un niño no es llenar su mente con información, sino construirla a través de actividades acordes con sus necesidades internas a medida que éstas van surgiendo. Esas necesidades están directamente relacionadas con sus estados de maduración física, mental y emocional. (Beatriz Amorin: Educación emocional en la primera infancia 2009).
12
EMPEZAR BIEN PARA VIVIR BIEN
Violencia hacia la primera infancia, la amenaza constante
N
iñas y niños menores a los seis años son víctimas silenciosas de la violencia que se ejerce en el hogar, tanto por acción, omisión o supresión, quedan desprotegidos y sus derechos son vulnerados. La violencia intrafamiliar es un problema de salud pública ejercida por cualquier tipo de abuso de poder de parte de un miembro de la familia sobre el otro que afecta al desarrollo físico, psicológico y social armonioso de mujeres y hombres de todas las edades. Según información emanada del Ministerio de Salud, siete de cada 10 mujeres son víctimas de violencia. Esta cifra se redujo en 10 puntos entre los años 2008 y 2009, de estos casos, sólo el 0,01% de las denuncias terminó con una sentencia.
Estas situaciones extremas ponen a las niñas y los niños en situación de estrés dificultando sus posibilidades de desarrollo integral, ya que el estrés daña la construcción de la autoestima, genera dificultades en las interacciones sociales y en las posibilidades de aprendizaje e influye negativamente en la asimilación de macronutrientes y micronutrientes que tienen relación directa con el desarrollo del cerebro. El que una niña o niño sea considerado “ciudadano con derechos”, pasa por el reconocimiento legal de esta población a través del registro y certificado de nacimiento que expende el Estado. La violencia deja huellas en niñas y niños y en muchos casos los torna también seres violentos o por las experiencias vividas la resiliencia es difícil de alcanzar.
INVERTIR EN LA PRIMERA INFANCIA
13
En la actualidad en ocho de cada diez hogares se ejerce violencia contra niños, niñas y adolescentes. (Declaración de Carola Siñani, Responsable de Área Funcional de Buen Trato para la Prevención de Violencia del Ministerio de Salud y Deportes 2010).
14
EMPEZAR BIEN PARA VIVIR BIEN
La primera infancia necesita de usted para “vivir bien”
E
n Bolivia, los derechos de niñas y niños están legalmente protegidos por los Tratados Internacionales así como por la propia Constitución. Programas nacionales de países vecinos como Perú, Ecuador y Colombia, entre otros, coinciden en afirmar que la inversión en programas de calidad para la infancia, implica un retorno económico entre dos y siete dólares por cada dólar invertido. Según estudios longitudinales realizados en distintos países La inversión en la primera infancia tiene réditos relacionados con mayores probabilidades de que las niñas y los niños:
»» Tengan éxito escolar. »» Permanezcan en el sistema educativo y culminen sus estudios.
»» Conformen familias estables. »» Sean productivos y mantengan trabajos estables.
»» Participan activa y productivamente en su comunidad y para la sociedad. La solución a muchos problemas sociales está en el apoyo que tengan las niñas y los niños en sus primeros años de vida para alcanzar un desarrollo integral. Trabajar en beneficio de la primera infancia es un reto que involucra a diversos actores como son la familia, la comunidad, las autoridades nacionales, departamentales, municipales y los pueblos indígenas originario campesinos, así como el sector privado, las universidades y la sociedad civil en general.
INVERTIR EN LA PRIMERA INFANCIA
15
16
EMPEZAR BIEN PARA VIVIR BIEN
Lo que pueden hacer las autoridades nacionales, departamentales y municipales En política pública:
»» A
nivel nacional, departamental, municipal y entidades autonómicas indígenas originarias campesinas, garantizar el apoyo a la comunidad para que genere ambientes favorables al desarrollo de la población infantil y promover que mejoren los indicadores relacionados con salud infantil, nutrición, acceso a servicios básicos y acceso a servicios de cuidado diario.
»» Insertar en sus estatutos autonómicos y
cartas orgánicas municipales, artículos que respalden la implementación de servicios de atención a niñas y niños menores a los seis años.
»» Desarrollar y aprobar políticas sociales orientadas a fortalecer la inversión en la primera infancia y normar los servicios educativos y de protección para la niñez y sus familias en alianza con los sectores de salud y protección.
En estrategias y planes:
»» Desarrollar
acciones sostenidas para mejorar los entornos donde crecen y
realizan actividades niñas y niños desde temprana edad.
»» Fortalecer
acciones preventivas y promocionales en la comunidad para generar hábitos que favorecen al desarrollo integral de las niñas y los niños desde su nacimiento.
»» Fomentar
la creación de centros educativos infantiles de calidad que realicen actividades que fortalezcan el desarrollo integral de niñas y niños menores a los seis años, garantizando así su cuidado y educación en tanto las madres y padres trabajan.
»» Dotar de agua segura a las comunidades para garantizar salud y protección a las niñas y niños desde su nacimiento así como a la comunidad en general.
»» Fortalecer el control social para que los
derechos de niñas y niños desde sus primeros años de vida no sean afectados negativamente.
»» Promover
la formación de recursos humanos especializados en la atención y educación de la primera infancia.
INVERTIR EN LA PRIMERA INFANCIA
17
18
EMPEZAR BIEN PARA VIVIR BIEN
En desarrollo de normativas:
»» Delimitar
de los sectores de educación, protección y salud con relación a la atención a la niña y el niño menor de seis años.
el liderazgo sectorial e institucional para establecer la normativa, planificar, desarrollar y evaluar servicios relacionados con el desarrollo integral infantil.
»» Normar la constitución de redes sociales
línea base y metas a conseguir en beneficio de la primera infancia a nivel nacional, departamental, municipal y de la comunidad, en el marco de las necesidades detectadas.
En inversiones:
»» Establecer normativa sobre indicadores,
»» Definir con claridad las atribuciones y las instancias y momentos de coordinación
de vigilancia y fortalecer la referencia y contrareferencia entre servicios y así garantizar la integralidad en la atención a las niñas y niños menores de seis años.
»» Asignar
recursos financieros para la
atención educativa y de protección a la primera infancia y sus familias.
Lo que pueden hacer las organizaciones sociales
»» Mantener
vigilancia y realizar consejería para velar por la seguridad de niñas y niños menores a seis años de la comunidad.
»» Demandar
a que los niños crezcan en entornos que favorezcan el desarrollo armonioso de las niñas y niños desde su nacimiento.
»» Hacer
»» Apoyar
»» Motivar
a la participación de las familias en los servicios ofrecidos para
la atención y educación de los niños pequeños en tanto los principales cuidadores trabajan. y promover políticas, estrategias y planes de acción en beneficio de niñas y niños menores a los seis años. seguimiento al cumplimiento de la normativa nacional y local relacionada a la primera infancia.
INVERTIR EN LA PRIMERA INFANCIA
19
Lo que debe motivarnos a trabajar por la primera Infancia »» El máximo potencial del desarrollo del cerebro se da en la primera infancia y en esta etapa se sientan las bases para el futuro desarrollo de las capacidades físicas, cognitivas, sociales así como las afectivas.
»» Cuando
las y los menores a seis años reciben atención adecuada en salud, viven en ambientes protegidos, aprenden valores, no son discriminados, son reconocidos legalmente por el Estado y la sociedad y son estimulados física y mentalmente, aumenta considerablemente su probabilidad de:
20
EMPEZAR BIEN PARA VIVIR BIEN
~~ Crecer saludables. ~~ Ser respetuosos con los otros. ~~ Tener óptimo desempeño escolar. ~~ Tener autoestima elevada. ~~ Tener capacidades para el logro de emprendimientos.
~~ Tener las bases para respetar y hacer respetar los valores humanos.
~~ Tener la capacidad de participar en las actividades de la comunidad.
~~ Tener la capacidad de luchar vehementemente por sus derechos y constituirse responsablemente en garantes de los derechos de otros y de las siguientes generaciones.
Si trabajamos todas y todos por impulsar acciones de calidad destinadas a mejorar el desarrollo integral de niñas y niños menores a seis años, estaremos aportando a la disminución de la pobreza en el país.
Calle 20 Nº 7720, Calacoto Casilla: 3-12435 Central piloto: (591-2) 2770222 La Paz / Bolivia
22
www.unicef.org/bolivia EMPEZAR BIEN PARA VIVIR BIEN