La Hispania del Bajo Imperio. Relaciones con Oriente

[Publicado previamente en: G. Pereira Menaut (ed.), Actas del I Congreso Peninsular de Historia Antigua. Santiago de Compostela 1-5 julio de 1986, San

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bibliografía la caída del imperio romano por Aitor Fernández Delgado Bravo, G.: La caída del Imperio Romano y la génesis de Europa: cinco nuevas vers

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[Publicado previamente en: G. Pereira Menaut (ed.), Actas del I Congreso Peninsular de Historia Antigua. Santiago de Compostela 1-5 julio de 1986, Santiago de Compostela 1988, vol. 3, 177-186 (también en Aportaciones al estudio de la España romana en el Bajo Imperio, Madrid 1990, 187-204). Editado aquí en versión digital por cortesía del autor, bajo su supervisión y con la paginación original]. © J.M.ª Blázquez

La Hispania del Bajo Imperio. Relaciones con Oriente José María Blázquez Martínez

S. Jerónimo en su Diálogo contra Luciferian, col. 177.15, considera a Hispania luridos homines et inopem provinciam. Una excelente especialista del Bajo Imperio, C. Craco Ruggini (l), cree que la Península Ibérica en el Bajo Imperio estaba un tanto __________ (1) Strutture socioeconomichedella Spagna tardoromana, Athenaeum 34,1965,432 ss. Sobre el Bajo Imperio en Hispania, véase J.M. Blázquez: Economía de la Hispania romana, Bilbao, 1978, 485 ss. Idem: Historia económica de Hispania, Madrid, 1978, 242 ss. Idem: La Romanización II, Madrid, 1975, 253 ss. Idem: Historia social y económica. La España romana (Siglos IIIV), Madrid, 1975. Idem: Arte y sociedad en los mosaicos romanos del Bajo Imperio, Bellas Artes, 1975, 18 ss. Idem: «Rechazo y asimilación de la cultura romana en Hispania (Siglos IV y V)», Assimilation et résistance á la culture gréco-romaine dans le Monde Antique, Bucarest-Paris, 1976, 63 ss. Idem: «Conflicto y cambio en Hispania durante el siglo IV», Transformation et conflits au IVe siècle ap. J.C., Bonn, 1978, 52 ss. Idem: «La Bética en el Bajo Imperio», Latomus 37, 1978, 335 ss. Idem: «Die Niederlassungen der Barbaren im Okzident und ihre sozialokonomischen Nebenwirkungen», Actes du VIIe Congres de la F.I.E.C., Vol. II, Budapest, 1983, 73 ss. Idem: «Problemas económicos del Bajo Imperio en España», Estudios en Homenaje a Don Claudio Sánchez Albornoz en sus 90 años, I, Buenos Aires, 1983, 137 ss. Idem: «Arte y sociedad en los mosaicos hispanos del Bajo Imperio», Bellas Artes, 1975, 18 ss. J.M. Blázquez et alii: Historia de España. España Romana, Madrid, 1983, I, 260 ss. 525 ss. II. 523 ss. Idem et alii: Historia de España. España Romana, Madrid, 1983. A. Tovar, J.M. Blázquez: Historia de la Hispania Romana, Madrid, 1982, 143 ss. 319 ss. Idem: Historia de España Antigua II. Hispania Romana, Madrid, 1985, 449 ss. L. García Moreno: «España y el Imperio en época teodosiana. A la espera del bárbaro», I Concilio Caesaraugustano. MDC Aniversario, Zaragoza, 1981, 27 ss. Idem: «Idacio y el ocaso del poder imperial en la Península Ibérica», RABM 79,1976, 27 ss. C. Molé: «Uno storico del V secolo. II vescopo Idacio», S.G. 2, 1974, 279 ss.; 28, 1975, 58 ss. J. Sayas: El Bajo Imperio, II Romanismo y Germanismo. El despertar de los pueblos hispánicos (Siglos IV-X), Madrid, 1981. P. de Palol: «Romanos en la Meseta: El Bajo Imperio y la aristocracia indígena», Segovia y la arqueología romana, Segovia, 1977, 287 ss. Idem: Castilla la Vieja entre el Imperio Romano y el Reino visigodo, Valladolid, 1970. A. Balil: «Aspectos sociales del Bajo Imperio», Latomus 34, 1965, 886 ss. J. Fontaine: Études sur la poésie latine tardive. D 'Ausone á Prudence, Paris, 1980, 267 ss. R. Teja: «Las villas de Hispania y Capadocia en el siglo IV. Su entorno económico y social», XII Congreso Nacional de Arqueología, 1971, 161 ss. M. Bendala: La Antigüedad. Historia de Andalucía, I, Barcelona, 1980, 169 ss. A. Montenegro et alii: Historia de Burgos, I. La edad antigua, Burgos, 1985, 355 ss. L.J. Balmaseda, en J. González: Historia de Palencia, I. Edades Antigua y Media, Palencia, 1984, 67 ss. J. Mangas, J.M. Solana: Historia de

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marginal, pues caía fuera del eje Rhin-Danubio-Constantinopla-Asia Menor, donde acabó por gravitar el capital, la corte y el ejército. En este trabajo nos proponemos estudiar brevemente las relaciones entre Hispania y el Oriente, tema no tratado hasta el momento presente. Una serie de datos hablan de unas relaciones, que, si no intensas, si son significativos, entre Hispania y el Oriente. Baste recordar algunos de los aspectos más importantes, que son los siguientes: 1) La correspondencia de Jerónimo desde Palestina con hispanos, como con Lucino, a quien dirige su carta 71. Lucino vivió en la Bética. Era rico, ya que abundantia tua multorum inopiam sustentauit, ut et horum diuitiae in tuam indigentiam redundarent. Fecisti tibi amicos de iniquo mammona (Epist. 71.4). Envió amanuenses a Palestina a copiar las obras de Jerónimo. Opuscula mea, quae non sui merito, sed bonitate tua desiderare te dicis, ad describendum hominibus tuis dedi, et descripta uidi in chartaceis codicibus, ac frequenter admonui ut conferrent diligentius et emandarent. Ego enim tanta uolumina prae frequentia commeantium et perigrinorum turbis relegere non potui. Esta carta está escrita el año 398. Al año siguiente envía una segunda, la 75, a su viuda, de nombre Teodora. Por esta carta se sabe que Lucino envió seis amanuenses a copiar todas las obras de Jerónimo (Epist. 71.4). Por ella conocemos también las relaciones de este varón con las iglesias de Alejandría y de Jerusalén, a las que tantum auri, quantum multorum possit inopiae subuenire. Este mismo año redactó una tercera carta a un hispano, un sacerdote ciego de la Bética (Epist. 76). 2) Las informaciones que el propio Jerónimo proporciona en su obra de viris illustribus, redactada en el Oriente, el año 393, sobre hispanos contemporáneos. Esta obra la escribió a instancia de otro hispano Numio Emiliano Dextro. En ella menciona al presbítero Juvenco (84), que "puso en hexámetros casi literalmente los cuatro evangelios"; a Dámaso, "que poseía un refinado talento para versificar" (103), a Gregorio, obispo de Iliberi, que "compuso tratados en estilo poco elaborado" (105); a Paciano, obispo de Barcino., "incansable en depurar su estilo" (106); a Acilio Severo, que "bajo la forma de un relato de viaje, narra toda su vida combinado la prosa y el verso" (111); a Prisciliano, obispo de Ávila, que "publicó numerosos opúsculos, de los que algunos han llegado a nuestras manos" (121); a Latroniano, "hombre muy erudito y comparable a los antiguos en la técnica métrica de sus versos" (122); a Tiberiano de la Bética, que "redactó en lenguaje pomposo y muy rebuscado una Apología defendiéndose de la acusación de herejía, que se le hizo a él y a Prisciliano" (123); a Dextro, hijo de Paciano, "Tengo noticias de que compuso una Historia General, y me la dedicó, pero todavía no la he leído" (132); a Valeriano, obispo de Calahorra, "un hombre más que elocuente, no escribió mucho" (136); y finalmente a Prudencio, "poeta muy destacado, compuso en metros distintos muchos poemas contra herejes y paganos y cantó en tonos muy brillantes los misterios de nuestra fe" (137). Jerónimo no sólo conocía bien los hispanos __________ Castilla y León, 2. Romanización y germanización con la Meseta Norte, Valladolid, 1975. A. Rodríguez Colmenero, en M.A. Rabanal et alii: Historia de la provincia de Alicante, II, Murcia, 1985, 394 ss. F. Beltrán: Historia de Aragón, 2, Zaragoza, 1985,110 ss.

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eclesiásticos contemporáneos suyos, sino que conocía directamente su producción literaria para emitir un juicio acertado. Alguno de ellos, como Dextro, le dedicó su obra (2). 3) El conocimiento que Jerónimo tiene de los sucesos de Hispania, como la llegada de un Marco, egipcio, que confunde con un discípulo de Basílides, que de la Galia aquitana "pasando al Pirineo, vino a las Españas, poniendo, sobre todo, empeño en penetrar en las casas de los ricos, y en ellas, atacar particularmente a las mujeres" (Epist. 75.3). Quizás se refiere Jerónimo a las priscilianistas, ya que el santo alude a herejías contemporáneas de Lucino (3). En la carta 71.6 informa Jerónimo sobre costumbres de la Iglesia hispana, como la de que en Roma e Hispania se recibía la comunión diariamente. 4) Los viajes de personas eclesiásticas al Oriente, como Avito de Braga, que residió en Jerusalén, desde el año 409, y tradujo el texto griego de Epistola de inventione corporis S. Stephani martyris (PL. 41.805), y la envió con reliquias del santo a Palconio, obispo de Bracara Augusta, por mediación del futuro historiador Orosio. Ambos participaron en Jerusalén en las disputas con Juan, obispo, sobre el pelagianismo, en el año 415. Probablemente este Avito es el mismo que se carteó con Jerónimo desde Constantinopla, mencionado en tres cartas de este autor: la 79.1 del año 400 ó 401; la 106, de la misma fecha, y la 124. Toda ella dirigida a Avito, donde corrige errores de Orígenes en su Periarchon. Melania, la Joven, después de peregrinar por África, siete años (Ger. V M 34), acabó asentándose y fundando en compañía de su esposo, Piniano, dos monasterios de hombres y de mujeres en Palestina (Ger. V M 34-37, 40-41). El monasterio de Melania albergaba 90 vírgenes, y el de Piniano 30 varones (Pall. HL 61). Melania también viajó a Constantinopla (Ger. VM 50-56), donde se desplazó a visitar a la emperatriz Eudosia (4). La dama Eteria, probablemente oriunda de Galicia, que visitó el Sinai, Jerusalén, el Mar Rojo, Gessen (1-9), el monte Nebo (10-12), Idumea (13-15), Mesopotamia, y Constantinopla, pasando por Tarso, Seleucia y Calcedonia (16-23). Ha dejado un delicioso relato de sus viajes, obra fundamental para el conocimiento del latín vulgar del Bajo Imperio, y para la liturgia cristiana. Sus viajes se suelen fechar a comienzos de la década del 380(5). 5) El número relativamente grande de hispanos, que desempeñaron cargos importantes en la administración del Oriente. El tema ha sido estudiado bien por Chastagnol (6) y Stroheker (7). Estos son los siguientes: __________ (2) J. Abeal et alii: Bibliografías literarias latinas, Madrid, 1985, 205 ss. Sobre estos escritores véase: C. Codoñer: Historia de España, España romana, II, 523. (3) J.M. Blázquez: «Prisciliano, introductor del ascetismo en Hispania. Las fuentes. Estado de la investigación moderna», I Concilio Caesaraugustano. MDC Aniversario, 65 ss. J. Cabrera: Estudio sobre el priscilianismo en Galicia, Granada, 1983. (4) D. Gorce: Vie de Sainte Mélanie, París, 1962. J.M. Blázquez: «Problemas económicos y sociales en la vida de Melania, la Joven, y en la Historia Lausiaca de Palladio», MHA 2, 1978,103 ss. (5) A. Arce: Itinerario de la virgen Egeria (381-384), Madrid, 1980. (6) Les espagnols dans l'aristocratie gouvernementale a l'époque de Théodose, Les empereurs romains d'Espagne, Paris, 1965, 269 ss. (7) «Spanien im spä'trömischen Reich (284-475)», AEspA 45-47,1972-1974, 587 ss.

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Flavio Eucherio, tío de Teodosio I, que en 395 vivió en el Oriente, posiblemente en Antioquía, donde tuvo un conflicto con Luciano, cónsul del Oriente (Zos. 5.2.3.). Basilio, procónsul de Acaya, entre los años 372 y 382. Flavio Timasio, pariente de la emperatriz Flaccilla, que desempeñó los cargos de magister peditum y de magister equitum, entre los años 386 a 394 (Zos. 4.45) y el consulado en compañía de Promoto. Ambos fueron famosos generales de Teodosio. Después de morir este emperador marchó a residir a Panfilia. En el año 396 fue acusado de lesa majestad (Zos. 5.8-10). Nebridio, comes rerum privatarum en 382-384, y prefecto de Constantinopla en 386. Materno Gynegio, enterrado en la iglesia de los Santos Apóstoles en Constantinopla. Desempeñó los cargos de quaestor sacri palatii en 383, y prefecto del pretorio de Oriente desde comienzos del 384 a su muerte. Nummio Aemiliano Dexter. Fue procónsul de Asia entre los años 379 y 387 y comes rerum privatarum de Oriente en 387 (8). De todos estos datos concluye acertadamente Chastagnol (9) que: "On entrevoit donc que Théodose a permis l'ascension de certains membres de sa famille et de celle de son épouse Flaccilla dans les hautes fonctions civiles ou militaires d'Occident (Flavius Syagrius, Flavius Eucherius et peut-être Magnus Maximus) et d'Orient (Flavius Timasius, Nebridius). S'il n'est guère permis pour l'instant de tirer d'amples conclusions à propos du cas des fonctionnaires de Gratien ou Valentinien II que furent Basilius junior, proconsul d'Achaie, puis comte des largesses sacrées, et Sallustius Aventius, préfet de la Ville, il est par contre révélateur de découvrir deux Espagnols auprès de Théodose dans les charges civiles les plus prestigieuses de l'Orient, avec Cynegius Maternus, comte des largesses sacrées, questeur du palais, préfet du prétoire, et Nummius Aemilianus Dexter, proconsul d'Asie et comte des choses privées. Nous sommes ainsi parfaitement en droit d'affirmer qu'on rencontre un petit clan espagnol dans l'entourage de l'empereur à Constantinople, mais il serais sans doute dangereux d'exagérer l'importante de ce fait, vu l'état très lacunaire de notre documentation". 6) La venta de productos hispanos, como el garum gaditano, que Oribasio, médico y amigo del emperador Iuliano, alaba como el mejor (4.1.40). Los barcos orientales que frecuentaron los puertos de Huelva, Málaga y de Carthago Nova en busca de metales o de salazones, en época imperial, llegaban aún a las costas hispanas en busca de productos o de aquí iban al Oriente (10). 7) La llegada de orfebres orientales, que trabajaron en la Península Ibérica, a los que se deben las joyas de Ilici, fabricadas sobre el lugar, ocultadas probablemente con motivo de la invasión de los pueblos bárbaros (409-412) (11). 8) Algunos sarcófagos hispanos acusan influencia del arte oriental, bien porque llegaran a la Península Ibérica artista orientales o porque hubiera importantes comuni__________ (8) A. Chastagnol: op. cit., 289 ss. (9) Op. cit., 290. (10) J.M. Blázquez: Economía de la Híspanla Romana, passim. (11) H. Schlunk, Th. Hauschild: Hispania Antiqua. Die Denkmäler der frühchristlichen und westgotischen Zeit, Maguncia, 1978,150 ss., láms. 49b, 42-43, 45.

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dades de orientales, principalmente sirios, que existieron en época imperial y visigoda (12) y que gustara de este arte, como los sarcófagos de Écija, de la primera mitad del siglo V, de Alcaudete (Jaén), de la segunda mitad del s. V-VI (13), y de Singilia Barba. H. Schlunk (14) señala otros influjos orientales, como en el sarcófago de Puebla Nueva en Toledo, donde el estilo de las figuras con las manos transparentadas bajo las vestiduras, indica un centro oriental, Constantinopla; en las representaciones de los sarcófagos de Tarragona con elementos tanto orientales como occidentales; en los sarcófagos de tipo griego con tapa y doble vertiente, y en el hecho de que numerosas figuras estén delimitadas mediante una ranura, como en el Oriente, sin analogías en relieves provinciales de la región; en el sarcófago de Écija en el que el estilo ofrece ciertos parecidos con relieves de Constantinopla, pero es obra surgida en Occidente bajo la influencia de modelos orientales, ya que en Constantinopla no existen sarcófagos con escenas paleo-cristianas, y con escenas bíblicas; en las escenas de resurrección de Lázaro, y del combate entre David y Goliath, que sólo tienen paralelos en manuscritos del Oriente cristiano; en los fragmentos de Singilia Barba y de Monte Chimona en Córdoba, que reflejan una traducción muy arraigada en esta área, que opera bajo los estímulos del Oriente cristiano; en los relieves de San Pedro de la Nave, que no se pueden explicar sin modelos orientales (la escena de Felipe deriva de los apócrifos griegos de los siglos IV-V, y los santos o mártires presuponen el conocimiento de los iconos) a partir del IV Concilio de Toledo del 634. En la liturgia, en la arquitectura, en las formas decorativas, y en las representaciones figuradas, se reciben estímulos del Oriente. 9) D. Fernández Galiano ha señalado que algunos mosaicos hispanos obedecen a prototipos orientales; concretamente dos mosaicos de la villa de Fraga y datables en la segunda mitad del s. IV, demuestran ser obras de un artesano formado en los centros del Oriente helenístico. Este autor escribe al respecto: "Muchos de los rasgos que presentan se vinculan de hecho mucho más estrechamente a la tradición clásica de los talleres de la parte oriental del imperio que a las obras contemporáneas de Hispania. Estos dos pavimentos, hasta ahora mal interpretados, representan dos cuadros, con la temática de Eros y Psique y la de Eros y Venus. El tratamiento puramente pictórico de las escenas, el canon de las figuras y la rigidez de sus actitudes inclinan a pensar en obras de los siglos IV y V de Antioquía y Siria; los temas geométricos y vegetales, que los encuadran llevan asimismo a los mosaicos de esa zona, donde existen abundantísimos paralelos, mientras que son prácticamente únicos en la Península Ibérica". Otras piezas que cita D. Fernández Galiano son las inscripciones griegas de la Iglesia de Elche, en las que "la sintaxis decorativa y el tratamiento de algunos motivos geométricos del pavimento recuerdan desarrollos contemporáneos de la parte oriental del Imperio, lo que invita a pensar que el dato de la inscripción griega no está aislado; un mosaico de la villa de Daragoleja (Granada) (15), de cronología tardía, pero imprecisa, con __________ (12) J.M. Blázquez: Economía de la Hispania Antigua, 640 ss. L. García Moreno: «Colonias de comerciantes orientales en la Península Ibérica», Siglos V-VII, Habis 3,1972,127 ss. (13) H. Schlunk, Th. Hauschild: op. cit., 22.150 ss. (14) «Las concepciones del cristianismo hispano, a través de la iconografía», II Reunió d'arqueologia paleocristiana hispánica, Barcelona, 1982, 55 ss. (15) J.M. Blázquez: Mosaicos romanos de Sevilla, Granada, Cádiz y Murcia, Madrid, 1982, 44 s., n. 35.

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un tema muy utilizado en el Oriente, el de los pavos reales afrontados a un cántaro, composición muy del gusto de los musivarios del Oriente, en campo de círculos secantes. La técnica de este mosaico de disponer un tema figurado en un campo geométrico sin separación, ni marco, es característica de los mosaicos de Siria, como el mosaico del Ave Fénix de Dafne, datado a finales del s. V y los ejemplares de Antioquía y Apamea, para los que se supone un origen oriental. Este ejemplo de Daragoleja es el primero de esta técnica en Occidente. D. Fernánez Galiano enumera otros mosaicos, que siguen modelos orientales, entre los que recuerda a los de Bellerofonte y la Quimera de Puerta Oscura (Málaga) (16) y uno procedente de Córdoba con las Cuatro Estaciones (17), relacionados con mosaicos tardíos de Grecia y de Siria-Palestina. Según este mismo autor, otros pavimentos, como los hallados en las villas de Las Tiendas (18), de Solana de los Barros (19), o de Pedrosa de la Olmeda (Palencia) (20), acusan una mezcla de estilos orientales y norteafricanos. La villa de Baños de Valdearados (Burgos) muestra una fuerte influencia oriental en sus mosaicos y es un buen ejemplo de una serie de esquemas que derivados del repertorio geométrico romano, responden a una elaboración compleja, que refleja un sentido estético basado fundamentalmente en el entrelazado. Piensa D. Fernández Galiano, que su misma complejidad apunta hacia centros de creación determinados desde donde serían exportados, más que al resultado de procesos autónomos que coincidieran casualmente. Cita a este respecto uno de los pavimentos datables en el s. V, que presenta un esquema circular, con ocho escudos con los extremos orientados hacia el centro, esquema, como muy bien señala este autor, único no sólo en Hispania, sino en todo el Mediterráneo Occidental. El tema se documenta en un mosaico de la basílica de Misis-Mop-suhestia (Cilicia), incluso se usan los mismos motivos de relleno. Idéntico esquema simplificado se repite en un pavimento del palacio de Galerio en Tesalónica. El mosaico encontrado en la Almunia de Doña Godinia (Zaragoza), del s. V., muestra otro esquema único en Hispania y en Occidente, pero que tiene paralelos en Basílicas paleocristianas de Grecia y de Palestina, como las de Esmirna, Kos y Belén. El mosaico de Dulcitius (21), El Ramalete, Navarra, está rodeado de un esquema compositivo con un círculo central, acompañado de otros ocho círculos de menor tamaño, rodeados de una circunferencia excéntrica. Esta composición, única igualmente en Occidente, salvo en un mosaico de Lérida, se relaciona con pavimentos orientales, e itálicos de los s. V y VI. Paralelos próximos aparecen en el Odeón de Tesalónica, e idénticos en un mosaico de la Iglesia de __________ (16) J.M. Blázquez: Mosaicos romanos de Córdoba, Jaén y Málaga, Madrid, 1981. (17) J.M. Blázquez: Mosaicos romanos de Córdoba, Jaén y Málaga, passim. J.M. Blázquez, J. González Navarrete: Mosaicos hispánicos del Bajo Imperio, AEspA 45-47, 1972-74, 149. (18) A. Blanco: Mosaicos romanos de Mérida, Madrid, 1978, 5 ss., láms. 91-98. (19) E. García Sandoval: «Villa romana del paraje de Panes Perdidos en Solana de los Barros (Badajoz)», AEspA 39,1966. (20) P. de Palol, J. Cortes: La villa romana de la Olmeda. Pedrosa de la Vega. Excavaciones de 1969-1970, Madrid, 1974,37 ss. (21) J.M. Blázquez: «El mosaico de Dulcitius (villa "El Ramalete"Navarra) y las copas sasánidas», Estudios en memoria del prof. D. Salvador de Moxó, IUCM 1982, 177 ss. J.M. Blázquez, M.A. Mezquíriz: Mosaicos romanos de Navarra, Madrid, 1985, 64 s. láms. 39-40.

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Hezbet Muqa, fechado entre los años 378 y 385. Como el mosaico de Ramalete se data entre los años de finales del s. IV y los comienzos del s. siguiente, no cabe pensar en un intermedio itálico, pues los paralelos son ya del s. VI: Basílica de Sta. María delle Grazie, en Grado, Basílica de S. Eufemia, entre 571-586, Basílica de San Canzian d'Irondo, de la segunda mitad del s. V, y Palacio de Teodorico en Ravena, de la segunda mitad del s. V. En los mosaicos de Quintanares de Rioseco (Soria), y en los de Santervás del Burgo (Soria), se colocaron entre motivos geométricos un busto de la Abundantia y otra alegoría femenina semejante (22), que son un reflejo de concepciones orientales de los s. IV y V, de Siria, Antioquía, siendo en Italia, Palacio de Teodorico, y en Cartago, s. V ó VI, mucho más raros. Todos estos datos son un claro exponente de la corriente oriental, que aparece en otros muchos mosaicos hispanos de. esta época de modo mucho más camuflado. Otros temas, que cuentan con una gran tradición en la musivaria hispana de antiguo, ahora se acercan a mosaicos orientales en su tratamiento, donde son muy numerosos. La aparición de algunos temas geométricos nuevos en Hispania, aportan datos suplementarios a esta corriente oriental, como los marcos florales de los cuadros con divinidades de la villa de Fraga, prácticamente únicos en la Península Ibérica, que son muy frecuentes en mosaicos de Siria y de Palestina. Las hojas de hiedra dispuestas alternativamente dos a dos por los picos y los extremos, de la villa de Baños de Valdearados, se repiten en pavimentos de Antioquía, Jerusalén, Sofía, Gerasa, Jericó, Gaza, Tesalónica, etc. Es decoración prácticamente inexistente en Occidente. Las orlas de círculos imbricados, de otros mosaicos de esta villa, que no se encuentran en los mosaicos occidentales, se hallan en pavimentos de Khaldé en el Líbano y de Nea Paphos en Chipre. La orla con dos barras paralelas enlazadas, con una línea ondulante de la villa de Albadalejo en Ciudad Real (23), sin paralelos en Hispania ni en Occidente, se encuentra en basílicas de Grecia, como en las de Tebas, Ermione, Kos y Efeso. D. Fernández Galiano encuentra, pues, tres corrientes de esta influencia oriental sobre Hispania, y cree en la presencia de artesanos orientales en Hispania, o al menos de gentes de formación artística en estrecho contacto con las creaciones del Mediterráneo oriental durante la segunda mitad del s. IV y del siguiente, basado en la complejidad de los ornamentos con empobrecimiento de los temas figurados. Estos motivos a veces están vinculados a monumentos paleocristianos. Hasta aquí el pensamiento de D. Fernández Galiano, pero se pueden añadir otros ejemplos, como dos mosaicos de Fraga, datados hacía el 400, con pavos reales, cántaro, cesta con frutos y erotes (24), que ofrecen un impresionante paralelo con un mosaico de Sardes, hoy conservado en el Museo de Bursa en Turquía. Uno de los temas decorativos de la iglesia paleocristiana de Elche, de la segunda mitad del s. IV, con tema de rectángulo con un segundo de lados curvos inscrito, ofrece un __________ (22) J.M. Blázquez, T. Ortego: Mosaicos romanos de Soria, Madrid, 1983, 16 ss. 43 ss. lám. 1,18. (23) J.M. Blázquez: Mosaicos romanos de la Real Academia de la Historia, Ciudad Real, Toledo y Cuenca, Madrid, 1982, 29 s. (24) H. Schlunk, Th. Hauschild: op. cit., 24,137,162 ss.

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paralelismo notable, con pavimentos de la basílica de Ilissos, de la mitad del s. V (25). Un esquema de Rielves (Toledo) (26), entre octógonos, cruces gamadas continuas y rombos, es una decoración musivaria muy del gusto de los orientales, que aparece en la basílica de Delfos (27), fechada a finales del s. V o a los comienzos del s. siguiente. Los mosaicos de Rielves (28) acusan las características orientales de estas nuevas corrientes señaladas por D. Fernández Galiano (29), "en lo ornamental se va a centrar en la creación de una nueva sintaxis decorativa, basada en el entrelazado, aportando esquemas compositivos nuevos que muestran una complicación creciente, desarrollo no ajeno, probablemente, al decaimiento que experimentó la iconografía clásica". Los ejemplos se podían aumentar; así, los mosaicos de las Islas Baleares, sobre los que escribe P. de Palol (30), "creemos del todo evidentes las relaciones del esquema musivario de Menorca con los conocidos de las sinagogas de Palestina... Nos parece muy evidente si colocamos de lado el mosaico de Torelló y el mosaico de Mahón en Norim... Pero la verdad, que podemos sacar de estos mosaicos, es que en sus composiciones, lo mismo que en sus detalles figurados, está patente un amplio mundo oriental, palestiniano o de Transjordania, con contactos muy claros con los pavimentos tardíos de las sinagogas, que muestran un claro sustrato que los mosaistas baleáricos tenían delante de los ojos. El África cristiana pudo ser un punto intermedio de motivos, temas y ordenaciones que podemos cifrar en el pavimento de Hammam-Lif, por ejemplo. Son temas y composiciones enteramente distintos a lo que se representa en la Península, como pertenecientes a un mundo lejano y distinto de ella, y con evidente y extrañas coincidencias con los llamados programas hebreos. Semejanzas, éstas, que podrían explicarse por la composición demográfica de las islas de este siglo VI" (31). A parte de las relaciones de Hispania con Palestina, de la que son buena prueba el número relativamente crecido de hispanos, que visitaron el Oriente, las Islas Baleares contaron con una importante comunidad judía, a la que en la primera mitad del siglo V, se la obligó a bautizarse (32). Los judíos hispanos debían ser muchos e importantes, pues a ellos dedica cuatro cánones el concilio de Elvira y cuatro homilías Gregorio de Iliberi. Dos de los mosaicos de Pedrosa de la Vega, hallados en la galería oeste del peristilo y en la habitación n. I (33), presentan un esquema figurativo muy próximo al de la Basí__________ (25) M. Spiro: Critical Corpus of the Mosaic Pavements on the Greek Mainland. Fourth/Sixth Centuries, with Architectural Surveys, Nueva York, 1978, 35 ss.lám. 34. (26) M.C. Fernández Castro en J.M. Blázquez: Mosaicos romanos de la Real Academia de la Historia, Ciudad Real, Toledo y Cuenca, 70, fig. 36. (27) M. Spiro: op. cit., 245 ss. láms. 269-271, 273-286. (28) M.C. Fernández Castro: op. cit., 61 ss. figs. 35,42. (29) Op. cit. 201. (30) «En tomo a la iconograffa de los mosaicos cristianos de las Islas Baleares», I. Reunión nacional de arqueología paleocristiana, Vitoria, 1967, 131 ss. Idem: Arte paleocristiano, Barcelona, sa. 180 ss. Según H. Schlunk (H. Schlunk, Th. Hauschild: op. cit. passim) para los pavimentos de la Isla de Rei y de Es Fornás de Torelló, donde se representan leones, hay paralelos en Palestina y en el Norte de África, Cartago. Piensa este autor que los artesanos proceden de esta última ciudad. El mosaico de la nave central de Son Peretó tiene un parentesco muy próximo en Bir Ftouha en Cartago. (31) Sobre el arte judío es fundamental por sus ideas nuevas el reciente trabajo de Ovadiah, «Arf of Ancient Synagogues in Israel», Gerión 4,1986,111-127. (32) S. Segni Vidal, J. Hillgarth: La "altercatio" y la basílica paleocristiana de Son Bou, de Menorca, Palma de Mallorca, 1955. (33) P. de Palol, J. Cortes: op. cit., 64 s. 86 ss. figs. 10, 21, láms. 73-82.

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lica Gamma de Amphipolis, fechada a finales del siglo V o a los comienzos del s. VI (34). A este respecto P. de Palol (35) escribe: "En Oriente, no sólo existen las piezas inventariadas por Levi, en Antioquía, sino que hay otros muy variados ejemplos, incluso en el Líbano, pero todos ellos generalmente muy tardíos". Sin embargo, también hay paralelos en África, como apunta P. de Palol. El reciente mosaico aparecido en las proximidades de Valladolid con escenas de la Ilíada e inscripciones en verso, de próxima publicación por T. Mañanes, procede de un artista oriental o los cartones vienen del Oriente. Hemos (36) insistido en los volúmenes aparecidos del Corpus de Mosaicos romanos de España (Vol. III-VII) y en otras publicaciones nuestras sobre mosaicos en el africanismo de los mosaicos hispanos del Bajo Imperio, más en los temas de las orlas, como ya apuntaron Barral y Balil, que en las composiciones figurativas, donde también se documenta: mosaicos citados de Dulcitius; de Villavidel en León, con el mismo tema del jinete cazando; de Dueñas, con thyasos marino (37) y los de la pompa triumphalis báquica (38). El influjo africano en los mosaicos hispanos del Bajo Imperio ha sido señalado igualmente por K.M.D. Dunbabin (39), en los pavimentos hispanos, y por nosotros en las laudas sepulcrales paleocristianas, en los sarcófagos de La Bureba con la visión de Santa Perpetua, y del taller de Cartago, que trabaja en Tarragona, y en otra serie de elementos del cristianismo hispano del Bajo Imperio (40), tesis que no ha tenido aceptación por nuestra mayor autoridad sobre el cristianismo primitivo de la Península Ibérica, M. So__________ (34) M. Spiro: op. cit., 624 s. láms. 693-695. (35) P. de Palol, J. Cortes: op. cit., 97. (36) J.M. Blázquez: Mosaicos romanos de Córdoba, Jaén y Málaga, passim. Idem: Mosaicos romanos de Sevilla, Granada, Cádiz y Murcia, passim. Idem: Mosaicos de la Real Academia de la Historia, Ciudad Real, Toledo, Madrid y Cuenca, passim. J.M. Blázquez, T. Ortego: op. cit., passim. J.M. Blázquez, M.A. Mezquíriz: op. cit., passim. (37) P. de Palol: «Das Okeanos-Mosaik in der römischen Villa zu Dueñas (Palencia)», MM 8, 1967,196 ss. (38) El mosaico con el triunfo de Dionysos de la villa romana de Valdearados (Burgos), Homenaje a Saenz de Buruaga, Madrid, 1982,407 ss. (39) The Mosaics of Roman North Africa. Studies in Iconography and Patronage, Oxford, 1978, 220 ss. Lo mismo sucede con mosaicos sicilianos: R.J.A. Wilson: «Roman Mosaics in Sicily: The African Connection», AJA 86, 1982,413 ss. G. Voza: «La villa romana del Tellaro e di Patti in Sicilia e il problema dei rapporti con l'Africa», 150-Jahr-Feier Deutsches Archälogisches Institut Rom. Aussprachen und Vorträge, 196 ss. Idem: «Aspetti e problemi dei nuovi monumenti d'arte masiva in Sicilia», III Coloquio internazionale, 5 ss. Este mosaico con escena de cacería en algunas escenas ofrece un parentesco notable con detalles muy concretos como el de la gran caza de Pedrosa de la Vega, que da la impresión que se han copiado los cartones sin darles una unidad (P. de Palol, J. Cortes: op. cit., 82 ss. láms. 50-72, fig. 30). M.K.D. Dunbabin defiende la llegada de artesanos africanos a Hispania durante el Bajo Imperio, lo que no descarta la venida de cartones, que se copiaban (R.J.A. Wilson: «Mosaics, Mosaicists and Patrons», JRS 71,1981,176), algo parecido debió suceder con el Oriente. (40) J.M. Blázquez: Imagen y mito. Estudios sobre religiones mediterráneas e ibéricas, Madrid, 1977, 467 ss. Idem: Historia de España, España Romana, Madrid, 1983, 415 ss. Sobre las relaciones con África, con los judíos y con Siria de la Hispania en general, véase J.M. Blázquez: Economía de la Hispania Romana, 619 ss. L. García Iglesias: Los judíos en la España Antigua, Madrid, 1978.

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tomayor (41), en las cerámicas de aplique, importadas en Hadrumetum, en la sigillata clara, etc. etc. Junto a muchos elementos hispanos, que llevan al África Proconsular, que estaba en un gran momento económico y cultural, otros muchos llevan al Oriente, donde estuvo la capital del Imperio hasta la muerte de Teodosio. Este hecho hay que valorarlo debidamente, que es lo que nos proponemos con este estudio. A los paralelos, ya recordados por H. Schlunk, de influjo orientales en la arquitectura, cabe añadir los aducidos por H. Hauschild (42), como la villa de Centcelles, Tarragona, de mediados del s. IV con nuevas tendencias constructivas, levantada con la misma técnica que el mausoleo de Galerio en Tesalónica, y los sótanos del palacio dioclecianeo de Spalato. Las juntas pintadas de los muros de Marialba, León, tienen un único paralelo en la iglesia de Studios en Constantinopla. La pila bautismal de la basílica de Son Bou, en Menorca, tiene paralelos en Grecia y especialmente en el Monte Nebo en Palestina, datada en 597. Todavía es posible espigar en la Historia y en la Arqueología algunos otros datos de relaciones entre Hispania y el Oriente, como la mención en Prudencio (Hamart. 287) de las sedas del Oriente, llegadas a la Península Ibérica. La descripción de Hispania de sus productos y de su posibilidad de comercio en la Expositio totius mundi et gentium (79), testimonio de mucho valor por tratarse de un comerciante oriental, originario de Mesopotamia, que vivía en Tiro y que comerciaba por mar, testimonio de valor por ello, pues, los productos recordados serían vendidos en Oriente (43). La fecha de esta obra es el año 359. La mención en el Edicto sobre los precios de Afrodisias de la cita de la Bética, "desde el Oriente a la Bética" (1.88), que indica la existencia de importantes cambios de mercancía no necesariamente en el sentido de la importación; la mención del Oriente podía representar el punto de vista del redactor oriental. El aprovisionamiento de monedas en el Oriente, en el s. IV. En Conimbriga el 15% de las monedas halladas proceden del Oriente, cifra que coincide con la del resto de la Península Ibérica (44).

__________ (41) «Reflexiones histórico-arqueológicas sobre el supuesto origen africano del cristianismo hispano», II Reunió d'Arqueología paleocristiana hispánica, Barcelona, 1982,11 ss. (42) «Técnicas y maneras de construir en la arquitectura paleocristiana hispánica», II Reunió d'Arqueología paleocristiana, 71 ss. (43) J. Rougé: Expositio totius mundi et gentium, Paris, 1966, 9 ss. (44) I. Pereira et alii: Fouilles de Conimbriga III, Les monnaies, París, 1974, 244 ss.

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