Los Diagnóstico de Laboratorio y su Interpretación Clínica Los Diagnósticos de Laboratorio constituyen un elemento fundamental que debe ser tomado en cuenta por todo especialista clínico veterinario a la hora de corroborar un diagnóstico presuntivo de nuestros pacientes. Debemos tener presentes ante todo que tipo de análisis queremos realizar y cuáles muestras debemos enviar al laboratorio para tales fines. En nuestros consultorios podemos realizar algunas rutinas que requieren poco tiempo y resultan además confiables, algunas de ellas como el análisis de muestras de orina, exámenes coproparasitológicos, las evaluaciones del frotis sanguíneo, hemogramas, anibiogramas rápidos, citologías y exámenes serológicos nos brindan resultados de gran utilidad para el arribo al diagnóstico. Las pruebas más complejas se realizan en centros donde se justifica su uso debido al volumen de muestras manejado y existe una ala capacitación del personal técnico, ejemplos de éstas son. Pruebas citológicas, histopatológicas, dosajes de drogas, análisis de tóxicos, de hormonas, cultivos microbiológicos, bioquímicas sanguíneas, entre otros. ANALISIS DE ORINA Es una técnica sencilla que requiere pocos elementos para su puesta en práctica, es recomendable hacer uso de la orina dentro de un período de 24 horas para reducir la aparición de resultados falsos positivos. Entre los elementos necesarios tenemos las tiras reactivas para medir entre 8 y 10 parámetros, refractómetros para medición de la densidad, centrífuga a la hora de analizar el sedimento urinario, microscopio, tubos de ensayo y ácido nítrico o salicílico. ANALISIS DE FROTIS SANGUINEO Y CITOLOGIA BASICA Serán necesarios para estos exámenes el uso de portaobjetos, colorantes de la mejor calidad, aceites de inmersión para la microscopia, microscopios y es fundamental la presencia de personal altamente calificado para el análisis de las muestras. HEMOGRAMAS En estos exámenes se evaluarán el estado del hematocrito y recuentos celulares para lo cual es necesario un equipamiento conteniendo pipetas de dilución, cámaras para recuentos celulares, soluciones diluyentes, microcentrífugas y microscopios binoculares.

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COPROPARASITOLOGIA Comprenden una técnica muy sencilla y rápida, para su empleo solo es requerido tubos de ensayo, soluciones azucaradas, centrífugas, microscopios y atlas para comparación de fotografías de huevos de parásitos. KIT SEROLOGICOS Sirven para la detección de enfermedades como parvovirosis, Vif, Viles, entre otros. Existen entre sus variedades test que detectan antígenos y otros que detectan anticuerpos. Es recomendable seguir las instrucciones del productor. ANTIBIOGRAMAS RAPIDOS Son test que no requieren ni cultivo ni aislamiento previo y se emplea para medir la sensibilidad a los antibióticos. Se hace uso de pequeñas muestras o bien hisopados que luego son sembrados en presencia de antibióticos específicos. Las lecturas pueden realizarse entre 12 y 24 horas, permitiendo seleccionar el antibiótico correcto para administrar a nuestros pacientes. Un inconveniente que presenta éste método de análisis es que no permite conocer el agente patógeno actuante. BIOQUIMICA Para a investigación bioquímica existen en el mercado algunos equipos de bajo costo. Es necesario personal técnico que conozca el funcionamiento de los equipos, calibración, limpieza y mantenimiento; así como la remisión de las muestras al especialista para la correcta interpretación de los resultados. También son necesarios espectrofotómetro, baño termostatizado, centrífuga, kits para determinaciones y material de vidrio. UN PEQUEÑO LABORATORIO A la hora de montar un pequeño laboratorio en nuestros consultorios es necesario tener en cuenta elementos como el espacio necesario requerido, la presencia de personal técnico químico y patólogo veterinario. También será necesario mesadas de granito, una buena fuente de iluminación, bachas con canillas y presencia de agua corriente, instalaciones de gas y eléctricas apropiadas así como tener en cuenta que debemos reducir al máximo las posibilidades de que los pelos de los animales entren en contacto con los equipos. Para el correcto funcionamiento de un laboratorio de análisis clínicos veterinarios debemos tener presentes que el orden, la responsabilidad y no tirar son indispensables a la hora de poner en práctica las labores. Cada elemento debe estar en su lugar perfectamente identificada. Luego de finalizar el examen debemos guardar un tiempo prudencial la muestra previendo un uso necesario de la misma para otra determinación.

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El laboratorio debe ser dividido en áreas. Área de Recepción de muestras, de centrifugación, para trabajo con orina, para trabajo con materia fecal, para determinaciones bioquímicas, para observaciones microscópicas, para descarte de material sucio, descarte de desechos y área de lavado. Se debe usar cuadernos de uso interno para las anotaciones de los datos como la fecha, número de protocolo, tipo de determinación por protocolo con los resultados obtenidos, resultados de los estándares de control de calidad internos y días de calibración de los equipos, entre otros. Periódicamente es aconsejable realizar controles de calidad para evitar defectos inherentes al método, reactivos mal preparados, instrumental defectuoso o errores humanos en la ejecución de la técnica. Para ello puede hacerse uso de sueros testigos comerciales o preparados. Cada tubo con sangre es una mascota y debe ser tratada con extremo cuidado. Debemos evitar cambiar los nombres, tirar las muestras, evitar pérdidas, o realizar determinaciones erróneas.

TOMA Y REMISION DE MUESTRAS Toda muestra que ingrese al laboratorio deberá estar acompañada de los datos del paciente como la edad, raza, sexo y especie. La fecha de extracción de la muestra, el nombre del propietario así como la historia clínica del animal. Debe existir un sitio dentro de la clínica acondicionado para la toma de muestras que sea tranquilo y adecuado para evitar la pérdida por trastornos de conducta de nuestros pacientes. La extracción de sangre para el análisis hematológico, bioquímica sanguínea y serología se realizará de la vena yugular en los perros de pequeño tamaño y gatos; y de la vena cefálica antebraquial de perros más grandes. Antes de la toma de muestras se desinfectará el área a puncionar y se usará material descartable para la extracción. Se extraerán aproximadamente 10 cc de sangre que se emplearán en muestras de tubo con anticoagulante, tubo sin anticoagulante, tubo para glucemia y tubo para pruebas de hemostasia. Entre los tubos a emplear tenemos tubos para hemogramas y tubos para sueros. En el caso de pruebas de coagulación se encuentran en el mercado tubos de prolipopileno que pueden o no traer incorporado el anticoagulante. El EDTA es el más utilizado ya que es el que mejor preserva los detalles de las células sanguíneas, aunque puede provocar aumento del hematocrito por aumento de tamaño de los eritrocitos. Se debe agregar 50 microlitros a cada tubo y llevar a una

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estufa a 40 grados hasta que e anticoagulante cristalice en el fondo del tubo para evitar errores de dilución. En el caso de EDTA con fluoruro de potasio se utiliza para remitir muestras para el análisis de la glucemia. Para una mejor organización del trabajo se prepara diariamente baterías con tubos para reponer el faltante según se vayan utilizando. ACONDICIONANDO LAS MUESTRAS Para la realización del hemograma no deben pasar más de 2 horas después de la extracción con la muestra a temperatura ambiente, luego de éste tiempo se deben almacenar en la heladera a 4 grados. El análisis se realizará dentro de las 24 horas siguientes pues los eritrocitos sufren degeneración hidrópica lo que haría variar los parámetros. En las muestras para hemostasia el plasma será separado inmediatamente luego de la extracción por centrifugación extrayéndolo luego del tubo con ayuda de una pipeta Pasteur para colocarlo en un vial en refrigeración. Las muestras para suero luego de la extracción se transfieren a un tubo de hemólisis sin anticoagulante, se centrifuga, luego se rompe el coágulo se centrigufa nuevamente. Se coloca el suero en un vial y se refrigera la muestra que puede congelarse, no debe permanecer almacenado por más de 7 días. Para las determinaciones bioquímicas los sueros no pueden estar hemolizados o lipémicos. En estos últimos se observa una turbidez hasta el color blanco lechoso y puede deberse a la falta de ayuno por lo que se volverá a tomar una muestra con ayuno de 12 horas. Los sueros hemolizados ocasionan errores de medición. En el caso del frotis sanguíneo se realizará luego de la extracción con la muestra remanente en la jeringa. Nunca esta sangre deberá estar en contacto con el anticoagulante. Las muestras para el análisis de orina se toman por punción o sondaje de vejiga con material estéril, realizando el estudio rápidamente para evitar la transformación de los elementos constituyentes. Para el urocultivo las muestras no se tomarán de la micción, si el paciente está tomando antibióticos se suspende el tratamiento y luego de 72 horas se le práctica la nueva toma. Para el coprocultivo las muestras se tomarán durante 3 días consecutivos y se colocan en formol al 5%, por cada 95 ml de agua se agregan 5 ml de formol

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comercial al 40%. Para estudios de protozoarios se deberá recolectar materia fecal sin conservante y mantener refrigerada. BACTERIOLOGIA Para bacteriología serán usados envases de boca ancha y cierre hermético, limpios y estériles. Las muestras se toman con jeringas y agujas estériles. Las secreciones se tomarán con hisopos estériles colocándolos en tubos con medios de transporte o solución fisiológica estéril. Las muestras se refrigeran y se remiten al laboratorio en el menor tiempo posible. Para histopatología se fijan las muestras en formol al 10% tamponado. El tamaño no excederá 1 cm por 1 cm por 0.5 cm de espesor. CITOLOGIA Está indicada para evaluar masas cutáneas o subcutáneas, agrandamientos de órganos, líquidos de punción e improntas de lesiones. Será necesario una jeringa de 10 cc y una aguja de 21 G a 25 G. FROTIS SANGUINEO Siempre debe evaluarse contando con un buen extendido y una buena evaluación. El extendido debe ser delgado para que las células se observen mejor o sea se dispongan en monocapa. Los portaobjetos deben ser nuevos y dejar en alcohol para desengrasar y siempre debemos realizar dos frotis por paciente. Lo realizamos colocando una pequeña gota de sangre sobre el portaobjeto y con el borde biselado del extensor se hace contacto con la gota de sangre que por capilaridad cubrirá el extensor, luego con el extensor a 30 grados se hace correr sobre el portaobjetos extendiendo la gota de sangre. Se dejará secar al aire sin fijadores. Luego de que esté seco se tiñe con colorantes de buena calidad con Giemsa modificado. El frotis sanguíneo se utiliza para realizar el recuento diferencial de leucocitos, estimar el número de plaquetas, evaluar la morfología de eritrocitos, leucocitos y plaquetas y verificar los resultados de los conteos manuales o automáticos. Primeramente se observa con el objetivo de 10x a menor aumento para evaluar la cantidad de células, la distribución de las células, presencia de agregados, eritrocitarios, si hay presentes células muy grandes, apreciación de plaquetas, se buscan microfilarias y se selecciona el mejor lugar para la observación con aumento. Luego con el objetivo de 100x se evalúa la morfología celular, se realiza el recuento diferencial de leucocitos y se busca presencia de hemoparásitos.

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La evaluación de los eritrocitos varía en algunos casos pues cambia según la especie. Se evaluará el color, forma, tamaño, estructuras en o sobre el eritrocito y disposición de los eritrocitos sobre el frotis sanguíneo. Respecto al color buscaremos eritrocitos hipocrómicos, la hipocromacia es el aumento de la palidez central debido a la disminución de hemoglobina por déficit de hierro. Se puede encontrar en anemia Arregenerativa Microcítica Hipocrómica, no se observa en los gatos. La variación de tamaño se le llama anisocitosis pudiendo encontrar macrocitosis (células grandes) y microcitosis (células pequeñas) o ambas. Las anormalidades en la forma se denominan poiquilocitosis, en ellas se encuentran las células especuladas que presentan una o más espículas en su superficie (equinocitos, acantocitos, queratinocitos). La disposición puede darse en pilas de monedas (uno sobre otro) por el incremento de las proteínas séricas como el fibrinógeno y las inmunoglobulinas o la aglutinación resultado de una reacción antígeno anticuerpo como se produce en la anemia inmunomediada.

LEUCOCITOS Se analizan la estimación del número, morfología leucocitaria y fórmula leucocitaria. El número es analizado con objetivo de 10x contando los leucocitos en un campo de la zona monocapa, en los caninos un total de 18 a 51 leucos por campo de 10x es normal. Los cambios morfológicos en los neutrófilos pueden estar dados por neutrófilos tóxicos, hipersegmentación nuclear, entre otros. En el caso de los linfocitos estos pueden ser en algunos casos activados (luego de vacunaciones) e inmaduros (leucemias). FORMULA Los glóbulos blancos se informan como fórrmula absoluta (GB/mm3) y relativa (%) en ésta última se cuentan 100 leucocitos y se expresan en porcentaje. Si de 100 células 70 eran neutrófilos esto equivale a 70% de neutrófilos. La fórmula absoluta si tenemos un total de leucos de 10000/mm3 y en la fórmula relativa un 70% eran neutrófilos esto equivale a 7000 neutrófilos/mm3.

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PLAQUETAS En el caso de las plaquetas s considera normal observar de 8 a 29 plaquetas por campo de 100x. Se pueden hallar plaquetas grandes en animales con anemia regenerativa o pacientes con leucocitosis lo que indicaría activación de la médula.

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