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EFECTO DEL PROTOCOLO DE REGULACIÓN EMOCIONAL HEAT EN EL MANEJO DE LA IRA EN ADOLESCENTES BAJO MEDIDA DE RESTITUCIÓN DE DERECHOS Angélica María Alarcón Peña, Ángela María Correa Villegas, Edith Barreiro de Motta Konrad Lorenz Fundación Universitaria Resumen El propósito del estudio fue establecer el efecto del protocolo de regulación emocional HEAT en el manejo de la ira en adolescentes bajo medida de restitución de derechos por permanencia en calle del Albergue Infantil Mamá Yolanda, en una muestra de 18 varones en edades entre los 13 y 17 años, distribuidos de manera aleatoria en los grupos experimental y control. Se utilizó un diseño cuasi-experimental de dos grupos con medidas pre - post tratamiento, así como medidas continuas. El grupo experimental participó en seis sesiones del protocolo HEAT. No se encontraron diferencias significativas en las puntuaciones de la Escala de Dificultades de Regulación Emocional (DERS) entre los dos grupos después del tratamiento.

males aged between 13 and 17 years, randomly assigned into experimental and control groups. A quasiexperimental design with two groups pre-post treatment measures, as well as continuous measures were used. The experimental group participated in six sessions of protocol HEAT. There were no significant differences in scores on the Scale of Emotional Regulation Difficulties (DERS) between the two groups after treatment. Key Words: emotion regulation, emotion, anger, third generation therapies, adolescents. INTRODUCCION

Palabras clave: Regulación emocional, emociones, ira, terapias de tercera generación, adolescentes.

El estudio de las emociones desde la psicofisiología ha mostrado el importante papel que juegan estructuras cerebrales como la amígdala, la corteza orbitofrontal y el cuerpo estriado, entre otras, tanto en la percepción de estímulos emocionalmente relevantes como en el proceso de generación de las emociones, dando un mayor soporte al estudio de este campo desde otras disciplinas como la psicología, en donde el tema ha sido recientemente retomado, ya que es innegable la importancia que tienen las emociones en la vida diaria de los individuos y la grave afectación que producen cuando se encuentran perturbadas (Ochsner, Bunge, Gross & Gabrieli (2002); Palmero, 2003; Ochsner & Gross, 2004; Aguado, 2005; Cappadocia, Desrocher, Pepler & Schroeder 2009).

Abstract The purpose of this study was to establish the effect of emotion regulation protocol HEAT in anger management in adolescents under measure restoration of rights by remaining in street Albergue Infantil Mama Yolanda, in a sample of 18

Las emociones son consideradas fundamentales en la supervivencia de la especie, ya que median entre las exigencias del ambiente y las respuestas de los individuos. Las emociones básicas que han sido definidas para todas las culturas son el miedo, la tristeza, el asco, la alegría y la ira, las cuales parecen ser innatas y

  de gran valor adaptativo. Específicamente el concepto de ira puede ser tomado desde diferentes perspectivas: como una reacción de estrés, como sentimientos de insatisfacción con algo que ocurre en la vida, como sentimientos negativos poco saludables que están basados en creencias irracionales y como atribuciones o interpretaciones reales o imaginarias del medio o los eventos sociales (Montaña, Acosta y Gerena, 2002; Aguado, 2005). Para explicar el concepto de emoción, Gross (Gross, Richards & John, 2006; ) ha propuesto el modelo modal de las emociones, el cual es importante para poder entender el proceso de regulación emocional. Este modelo especifica una secuencia de los procesos implicados en la generación de la emoción, cada uno de los cuales es un blanco potencial para la regulación, poniendo de relieve cinco puntos en el que los individuos puedan regular sus emociones. En este sentido, el modelo modal de la emoción inicia con una situación psicológicamente relevante (externa o interna) que es atendida de diversas maneras, informando a la persona de que algo importante puede estar en juego. Cuando estas señales son atendidas y evaluadas, se desencadena un conjunto coordinado de tendencias de respuesta que involucran la experiencia, el comportamiento, los sistemas fisiológico, periférico y central. Una vez que estas tendencias de respuesta surgen, pueden ser moduladas de diversas maneras, configurando con ello respuestas observables del individuo. En términos generales, el modelo modal de la emoción implica que el sujeto está frente a una situación, presta atención a esta situación, hace una evaluación de ella y emite la respuesta

2   emocional. En lo que respecta a la regulación emocional se ha definido como un proceso mediante el cual la persona influye en sus emociones, de manera que pueda determinar la forma de experimentarlas y cómo y cuándo expresarlas dependiendo del contexto en el cual se desenvuelve. En el proceso de regulación emocional existen cinco estrategias las cuales son: selección de la situación; modificación de la situación; despliegue atencional; cambio cognitivo y modulación de la respuesta (Gross & Thompson, 2007). La selección de la situación se refiere a acercarse o alejarse de ciertas situaciones basándose en la probabilidad de producir un impacto emocional. Una vez que uno tiene una situación elicitadora de emoción, puede emplear la estrategia de modificación de la situación, la cual se refiere a modificar el ambiente local para alterar su impacto. La selección y la modificación de la situación ayudan al individuo a darle forma a ésta. Sin embargo, es posible regular la emoción sin tener que cambiar el ambiente. Las situaciones tienen muchos aspectos, y el despliegue de atención se refiere a cómo los individuos dirigen su atención dentro de una cierta situación para influir en sus emociones. Éste incluye estrategias atencionales como la distracción, enfocarse en aspectos no emocionales de la situación o cambiar la atención de la situación inmediata hacia la rumiación que se centra en las implicaciones emocionales. Aunque la situación ha sido seleccionada, modificada y selectivamente atendida aún es posible que la situación tenga un impacto emocional. El cambio cognitivo se refiere a evaluar la situación con el fin de alterar su significado emocional, tanto

  cambiando lo que uno piensa de la situación o de las capacidades de uno para manejarla. Según Ray, Wilhelm, & Gross, (2008) hay fuerte evidencia respecto a que el uso de la distracción y la reevaluación contribuyen a una más pronta recuperación en los episodios que generan ira. La modulación de la respuesta se refiere a influenciar las tendencias de respuesta una vez que han surgido (Gross & Thompson, 2007). Cuando la persona tiene dificultades para regular sus emociones, puede tener una mayor probabilidad de presentar dificultades psicológicas importantes tanto en el eje I como en el eje II, trastornos de conducta, problemas de salud física, dificultades en el ajuste social y la competencia social, lo cual implica un deterioro en las relaciones interpersonales y en el adecuado funcionamiento en la vida diaria (Gross & Muñoz 1995; Southam-Gerow & Kendall, 2002; Walden, Harris & Catron, 2003; Garrido, 2006; Gross & Thompson, 2007; Aldao, Nolen-Hoeksema & Schweizer, 2009; Cappadocia et al. 2009; Drabant, McRae, Manuck, Hariri & Gross, 2009; Sallquist et al. 2009; Velásquez, 2009; Werner, & Gross, 2009). En jóvenes en situación de alto riesgo, se ha encontrado que presentan dificultades en la regulación emocional, problemas de comportamiento en el hogar, en el colegio, comportamiento negativista desafiante, inicio temprano de consumo de sustancias psicoactivas, posiblemente debido a que desde la infancia han estado expuestos a situaciones familiares y sociales que no han favorecido el adecuado desarrollo de la expresión, comprensión y regulación emocional. Estas

3   dificultades incrementan las probabilidades de presentar problemas de conducta y de adaptación, aspectos que han sido relacionados con la permanencia en la calle (Servera, 2002; Wills, Walker, Mendoza & Ainette, 2006; Gross & Thompson, 2007; Cohn, Zeichner & Seibert, 2008; Aldao et al. 2009; Cappadocia et al. 2009). Según el último censo de habitantes de calle (Secretaría Distrital de Integración Social, 2008) existen 8.385 habitantes de calle en Bogotá. De estos el 8.4% son menores de edad y el 56.6% afirman haber iniciado su permanencia en calle desde que eran menores de edad. En este censo también se estableció que entre el 68.1% y el 80.5% son consumidores de sustancias psicoactivas como bazuco y marihuana. Como estrategia de prevención e intervención de esta problemática en menores de edad, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar cuenta con instituciones que ofrecen posibilidades para restituir los derechos a los niños que se encuentran en alto riesgo o que han iniciado la permanencia en calle. Dada la relevancia del estudio de la regulación emocional y su relación con el surgimiento de problemas psicológicos, se han diseñado estrategias de intervención encaminadas a que los sujetos aprendan a regular efectivamente sus emociones. Uno de los abordajes que se ha dado a la regulación emocional proviene de las terapias de tercera generación, las cuales se fundamentan en una visión funcionalista del comportamiento y que entre otras cosas proponen la aceptación de los eventos privados, en este caso las emociones, como parte de la experiencia vital y del logro de objetivos importantes para la vida de

  las personas (Wilson y Luciano, 2002; Luciano y Valdivia, 2006; Bach & Moran, 2008) El presente estudio resulta novedoso porque aborda la regulación emocional de la ira desde una perspectiva de la aceptación, y dado que en Colombia no hay estudios sobre este tema que muestren resultados de intervenciones exitosas con poblaciones en situación de vulnerabilidad específicamente con adolescentes que han tenido experiencia de vida en calle se espera que el abordaje clínico de esta problemática abra un espacio para la propuestas de intervención adaptadas al contexto y con abordajes recientes como la Terapia de Aceptación y Compromiso Teniendo en cuenta este panorama el propósito del estudio es establecer el efecto del protocolo de regulación emocional H.E.A.T en el manejo de la ira en adolescentes bajo medida de restitución de derechos del Albergue Infantil Mamá Yolanda, METODO Participantes La población está constituida por 24 adolescentes varones que viven en la Casa San Juan del Albergue Infantil Mamá Yolanda, en edades comprendidas entre los 12 y 17 años y que se encuentran bajo medida de restitución de derechos por situación de permanencia en calle y problemas de comportamiento. Los jóvenes provienen de familias con nivel socio económico bajo (estratos 1 y 2), y en su mayoría presentan atraso escolar; aunque actualmente se encuentran escolarizados en colegios públicos en grados entre quinto y décimo. Muestra

4   El único criterio de inclusión que se tuvo en cuenta en la selección de la muestra fue la edad, por lo tanto, en este estudio se trabajó con un grupo de 18 jóvenes en edades comprendidas entre los 13 y los 17 años, que están recibiendo atención en la Casa Hogar San Juan del Albergue Infantil Mamá Yolanda. Los principales motivos por los que se encuentran bajo medida de restitución de derechos son: permanencia en calle, consumo experimental de sustancias psicoactivas, el no contar con una red familiar de apoyo, conductas delictivas leves (hurto, daño en el bien ajeno, lesiones personales), ser menores de edad. En promedio llevan institucionalizados 5 meses y se espera que el proceso de restitución de se desarrolle entre 8 y 12 meses. La selección de los jóvenes se realizó a través del muestro aleatorio simple en donde se asignó un número de identificación para cada uno de los integrantes de la población y se seleccionó la muestra mediante una tabla de números aleatorios. Se realizaron consentimientos informados para que las familias de los jóvenes dieran su autorización para que su hijo menor de edad pudiera participar en la investigación. Para los adolescentes que no cuentan con el apoyo de su familia y por encontrarse bajo medida de restitución de derechos la defensora de familia dio la aprobación cuando autorizó la realización de la investigación. Para la firma de los consentimientos se solicitó la colaboración del psicólogo de la institución encargado de los procesos familiares en la Casa San Juan Del Albergue Infantil Mamá Yolanda, quien presentó de manera individual a cada familia los aspectos generales de la investigación y solicitó la firma de aprobación para la participación de su hijo en el proyecto De igual manera se

  diseñó un formato de asentimiento informado para los jóvenes que quisieron participar en este estudio. Para la firma, el psicólogo de la institución encargado de los procesos en la Casa San Juan Del Albergue Infantil Mamá Yolanda, citó de manera individual a los jóvenes con el fin de explicar la investigación y obtener la firma de ellos. DISEÑO Se usó el diseño cuasi-experimental de dos grupos (control y experimental) con medidas pre y post tratamiento, así como medidas continuas (Mc Millan y Schumacher, 2005). Las medidas pre y post tratamiento corresponde a la aplicación de la Escala de Dificultades de Regulación Emocional (DERS) (Gratz y Roemer, 2004). Las medidas continuas corresponde al registro de observación de cuidadores y registro de observación en sesión. MEDIDAS Variable Dependiente “Regulación emocional de la ira”: Una adecuada regulación emocional de la ira implica que la persona reconozca esta emoción y sus componentes, reconozca las situaciones, emociones, pensamientos, sentimientos que pueden desencadenar la ira y cómo manejarlas de manera efectiva, así mismo incluye que la persona tenga claros sus objetivos a largo plazo para manejar adecuadamente sus impulsos. Esta variable se mide a través de la Escala de Dificultades de Regulación Emocional DERS (Gratz & Roemer, 2004), instrumento diseñado para medir dificultades de regulación emocional e identificar las estrategias de regulación usadas. Este instrumento se escogió para la investigación debido a que es la única prueba piloteada en Colombia (Herrera, Niño y Caycedo, 2008), que

5   desde una perspectiva de la aceptación de la emoción evalúa dificultades de regulación emocional en general, y aunque esta prueba no mide específicamente ira, por ser ésta una emoción (Aguado, 2005) su regulación se puede medir con este instrumento. Esta escala cuenta con 36 ítems agrupados en seis dimensiones clasificadas de la siguiente manera: Evitación, Metas, Conciencia, Impulso, Estrategias y Claridad. También se realiza registro de observación ejecutado por los cuidadores, como una medida continua, esta implica tres categorías: 1. agresión verbal de palabra o con ademanes que incluye insultos, groserías, gritar al otro; 2. agresión física que implica pegar, empujar, morder, hacer zancadilla; 3. retar que es desafiar, provocar al otro con palabras o ademanes para iniciar una pelea. Los cuidadores deben registrar en cada uno de los adolescentes la presencia de alguna de estas conductas en el cuadro de registro; si ésta no se presenta no deben anotar nada y deben dejar la casilla en blanco. Este formato fue diligenciado por dos cuidadores, dos veces por semana durante seis semanas tanto para el grupo control como el experimental. Por último se realiza observación en sesión que consiste en actividades que retoman las temáticas abordadas en cada sesión. Para calificar el desempeño de los jóvenes se diseño un formato con valoración de 1-5. Estas actividades se realizaron a partir de la segunda sesión de aplicación del protocolo HEAT hasta la sexta sesión, para el grupo experimental y observación realizada en sesión. Variable Independiente: Protocolo de Intervención en Regulación emocional Honorably

  Experiencing Anger and Threat (H.E.A.T), el cual consta de 6 sesiones basadas en la Terapia de Aceptación y Compromiso, y está orientado a que las personas conozcan, acepten y regulen la ira. En las sesiones se abordan aspectos como: las 5 partes de la ira, la relación entre ira y control, el manejo de pensamientos generadores de ira e impulsos de ira, el perdón y esclarecimiento de valores y compromisos. PROCEDIMIENTO Para cumplir los objetivos de este estudio se utilizó la versión del instrumento de las autoras Herrera et al. (2008), quienes la pilotearon con estudiantes universitarios; sin embargo, dadas las características de la población de este estudio se realizó el pilotaje del DERS con 59 adolescentes hombres y mujeres entre 14 y 16 años, de los estratos 1 y 2, que se encuentran cursando grados 10 y 11 en el Colegio Silvino Rodríguez de la Ciudad de Tunja, obteniendo una confiabilidad de 0.79. Posteriormente se realize pilotaje del Values Living Questionnaire (VLQ-M) este instrumento hace parte del protocolo HEAT como una actividad de la sesión 6. Se realizó el pilotaje con 60 adolescentes hombres y mujeres entre 14 y 16 años, de los estratos 1 y 2, que se encuentran cursando grados 10 y 11 en el Colegio Silvino Rodríguez de la Ciudad de Tunja, diferentes a la muestra tenida en cuenta para el pilotaje del DERS. Al hacer la evaluación de la aplicación del VLQ-M se encuentra que se deben retirar del instrumento las preguntas 1, 2, 3 porque no son aplicables a la población objeto de estudio debido a que estas preguntas hacen referencia a familia y cuidado de hijos, aspectos que en la población con la que se va a trabajar no son factores constantes en

6   todos los adolescentes, ya que algunos no tienen familia y ninguno tiene hijos, todas las demás preguntas quedaron iguales. Para el registro de observación de cuidadores se realizó un entrenamiento a las personas que están a cargo de los adolescentes haciendo uso del instructivo diseñado para este fin, para asegurar el aprendizaje se realizaron juegos de roles. Las fechas para el registro se asignaron de manera aleatoria de lunes a viernes donde los cuidadores se encontraban en la casa y teniendo en cuenta la fecha de inicio de la intervención; los días sábado y domingo no se tuvieron en cuenta, ya que se encuentran otras personas al cuidado de los adolescentes. Este registro fue diligenciado por los cuidadores tanto para el grupo experimental como el grupo control. Los registros de observación fueron realizados de la segunda a la sexta sesión, como segunda actividad de la agenda programada para las sesiones. Cuando los adolescentes terminaban la actividad, se realizaba la retroalimentación y se asignaba el puntaje por su ejecución en una escala de 1-5. La observación se realizó únicamente con el grupo experimental. Se obtuvo autorización del autor del protocolo, Dr. Santanello, para su uso, traducción y adaptación a la población objeto de este estudio. Para la aplicación del Protocolo HEAT, se realizaron 6 sesiones con dos horas de duración cada una los días sábado a las 8:00 a.m, el lugar de reunión fue el Centro Vocacional del Albergue infantil Mamá Yolanda. Las actividades de cada sesión fueron dirigidas por las investigadoras, quienes distribuyeron de forma intercalada la aplicación de las

 

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mismas, de forma tal que cuando una de ellas estuviera dirigiendo la actividad la otra participaba para servir como modelo y motivar así la participación de los adolescentes. RESULTADOS Para la presentación de los resultados se presenta el análisis de las medidas pre y post obtenidas por los adolescentes en la escala de Dificultades de Regulación Emocional DERS, tanto en el grupo control como en el experimental; en segundo lugar, se presentan los resultados de los registros de conducta elaborados por los cuidadores para los dos grupos y finalmente se analizan los registros de observaciones realizadas en sesión por parte de las investigadoras Pretest-postest: escala de dificultades de regulación emocional Tabla 1. Promedio y desviación estándar en la batería DERS en el grupo control y experimental.

APLICACIÓN

GRUPO

N

PROMEDIO

DESVIACIÓN ESTÁNDAR

PRE

C

9

0.0261

0.2116

PRE

E

9

-0.1128

0.2693

POS

C

9

-0.3333

0.4852

POS

E

9

0.0619

0.2347

Los datos encontrados en la tabla 1 permiten hacer el análisis de los datos que a continuación se presentan sobre la diferencia de promedio del pre test y post test de la batería DERS en el grupo control y experimental. Tabla 2. Diferencia de promedios en el pre y post test de la batería DERS en el grupo

control y experimental. GRUPO

GRUPO

DIFERENCIA

ERRRO

TEST

PRE+C

PRE+E

0.1389

ESTÁNDAR

T

0.1142

1.22

POS+E

PRE+E

POS+C

POS+E

0.1747

0.1191

1.47

-0.3952

0.1797

-2.20*

POS+C

PRE+C

-0.3594

0.1764

-2.04*

Como se puede apreciar en la tabla 2 en la primera comparación se observa que en el pre test ambos grupos son iguales (es decir no presentan diferencias significativas) al iniciar el tratamiento (t=1.22). En la segunda comparación entre el pre y post test del grupo experimental no existen diferencias significativas (t=1.47) lo que indica que no hubo cambios en las puntuaciones obtenidas en la batería luego del tratamiento. En la tercera comparación de las medidas del post del grupo control con el experimental, se evidencian diferencias significativas y en razón a que esta diferencia es negativa, se concluye que el promedio del grupo control es más alto en la medida post test; es importante tener en cuenta que en la escala DERS puntuaciones altas indican que se tienen mayores dificultades para tener regulación emocional. En la última comparación entre el pre y post test del grupo control se encuentran diferencias significativas (t= -2.04), que indican un incremento en las puntuaciones del grupo control en el post test; tal como ya se dijo este incremento indica mayores dificultades en la regulación emocional. Con respecto al análisis de la diferencia de promedios en las subpruebas en el pre y post test del grupo control y experimental se puede

 

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afirmar que en la subpruebas de claridad, evitación, impulso y metas no existe diferencia en ninguna comparación, excepto en la comparación entre el post test del grupo control y experimental; dado que la diferencia es negativa el grupo control tiene puntuación más alta indicando mayores dificultades para la regulación emocional. Con respecto a la subprueba de conciencia ninguna comparación muestra diferencias significativas; por su parte, la subprueba de estrategias sólo presenta diferencia significativa en la comparación entre el post del grupo control y el experimental (t=2.81), indicando una puntuación más alta en el segundo grupo.

pasa el tiempo

Sujeto 1

0.59

Análisis registro cuidadores

Sujeto 2

-0.03

Sujeto 3

-0.03

Sujeto 4

0.27

Sujeto 5

0.27

Sujeto 6

-0.68

Sujeto 7

-0.33

Sujeto 8

-0.03

Sujeto 9

-0.03

de

Análisis de observaciones realizadas en sesión por parte de las investigadoras Al procesar los datos se obtuvo que la confiabilidad es alta (α= 0.81) teniendo en cuenta que fueron realizadas por dos observadores. Tabla 3. Puntaje de las observaciones realizadas en sesión por parte de las investigadoras APLICACIÓN PUNTAJE

conductas

CUIDADORES 1 0.5

PROMEDIO

0 -0.5 -1 -1.5 -2 -2.5 -3 -3.5 S29

O01

O07

O13

O20

O21

O26

O29

N05

N06

N09

FECHA EXPERIMENTAL

CONTROL

Figura 1. Promedio de observación de cuidadores por grupo El sentido de realizar observaciones por parte de los cuidadores se enfoca al registro del “durante” de la intervención y no tiene el sentido de comprobar la hipótesis. Por esto no es necesario que exista una medida antes y otra después de la intervención. Estos datos tienen más el sentido de complementar la información del pre y post ya que proporciona información del ”durante”. La figura 1 evidencia que el grupo excperimental y el control disminuyen la frecuencia de mportamientos agresivos a medida que

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En cada sesión se promediaron los puntajes obtenidos por el grupo, se obtuvo la desviación estándar la cual se debe encontrar entre 1 y -1; dado que las puntuaciones en la tabla 3 indican la desviación estándar (DE= 0.3655) se observa que esta desviación es baja, es decir todos aprendieron más o menos lo mismo y relativamente término medio. DISCUSIÓN Este estudio fue llevado a cabo con

  adolescentes que se encuentran bajo medida de restitución de derechos por permanencia en calle, población que ha sido caracterizada como de alto riesgo para presentar dificultes en la regulación emocional y por lo tanto problemas de comportamiento (Southam-Gerow & Kendall, 2002), debido a esto se decidió realizar intervención encaminada a brindar herramientas para la adecuada regulación emocional de la ira. Esto se realizó a través de la implementación del protocolo HEAT, el cual se basa en algunos métodos empleados por la terapia de aceptación y compromiso. Para poder determinar el efecto de este protocolo en los adolescentes se realizó una medida pre y post test con la Escala de Dificultades de Regulación Emocional (DERS), como medidas continuas se realizaron observaciones del comportamiento de los jóvenes durante el proceso de intervención por parte de las personas que están diariamente con ellos (cuidadores); para determinar el grado de aprendizaje de los jóvenes durante la intervención se realizaron observaciones en sesión, basadas en actividades diseñadas para este fin. El primer hallazgo de este estudio es que no se evidencian diferencias significativas en las puntuaciones obtenidas por el grupo experimental en las medidas pre y post test tomadas con la escala de Dificultades de Regulación Emocional (DERS). Estos resultados refutan la hipótesis planteada respecto a la disminución de los puntajes de las subpruebas del DERS en el grupo experimental luego de la intervención con el protocolo HEAT, y en relación con la teoría no concuerdan con los estudios exploratorios acerca de la efectividad de protocolos grupales basados en ACT en adolescentes

9   (promoción de comportamientos sexuales seguros, incremento del rendimiento ajedrecístico y disminución de comportamientos impulsivos y antisociales) revisados por Luciano, Valdivia, Gutiérrez, Ruiz & Paéz (2009) ya que éstos muestran resultados calificados por estos autores como satisfactorios. Al hacer una revisión detallada del estudio revisado por los autores anteriormente mencionados sobre disminución de comportamientos impulsivos y antisociales, se encuentra que la aplicación fue individual, lo cual podría indicar que utilizar un formato grupal en este tipo de población puede disminuir la efectividad del protocolo. Por otro lado al hacer una revisión sobre la evidencia de la efectividad del ACT, Kohlenberg et al. (2005) señalan que la mayoría de las investigaciones que han mostrado efectividad se han realizado utilizando diseños de caso único, lo que sugiere que se necesita mayor investigación sobre la efectividad de la terapia de aceptación y compromiso en formatos grupales y la realización de estudios en donde se emplee este mismo protocolo pero en formato individual, esto con el fin de evidenciar si la aplicación individual es efectiva para esta población. Otra posible explicación a este primer hallazgo en este estudio puede estar relacionada con que los participantes provienen de familias negligentes y/o maltratantes, con padres que tienen bajos niveles de educación y con vínculos distantes con ellos, aspectos que han sido relacionados con mayores dificultades en la regulación emocional (Fabes, Poulin, Eisenberg, & MaddenDerdich, 2002; Southam-Gerow & Kendall, 2002; John & Gross, 2004; Shipman, Edwards, Brown, & Jennings, 2005; Wong, Diener &

  Russell, 2008), como estas características han estado presentes en la mayor parte de sus vidas pueden requerir intervenciones más prolongadas que las 6 sesiones que propone el protocolo HEAT para modificar sus estrategias de regulación emocional. Una explicación adicional al primer hallazgo de este estudio es que los participantes probablemente no adquirieron un nivel de reconocimiento de su dificultad respecto a la regulación de la ira y las consecuencias que esto implica, a pesar de que las cuatro primeras sesiones del protocolo HEAT están orientadas a que los participantes reconozcan la emoción de la ira y las consecuencias negativas de no manejarla adecuadamente; ya que como lo consideran Wilson y Luciano (2002) el nivel de reconocimiento y disposición al cambio son factores importantes cuando se trabaja con la terapia de aceptación y compromiso; este planteamiento es reforzado con los hallazgos de Howells et al. (2005) quienes también determinaron que la motivación y el nivel de conciencia del problema son predictores de la efectividad de las intervenciones en el manejo de la ira. El segundo hallazgo de esta investigación es que el grupo experimental aumentó sus puntuaciones en la subprueba de “estrategias” en la medición post, aspecto que se refiere a las alternativas que la persona cree tener para regular las emociones de manera eficaz (Gratz & Roemer, 2004); este hecho puede estar relacionado con que en la última semana de intervención 3 de los jóvenes del grupo experimental se vieron involucrados en situaciones de evasión de la institución, recaída en consumo de sustancias y lesiones personales generadas a un compañero,

10   hechos que probablemente propiciaron una alta reactividad emocional que posiblemente bloqueó el proceso que se estaba desarrollando a través de la intervención; por otra parte, es probable que las creencias de los individuos sobre sus capacidades para producir cambios, hayan influido sobre sus procesos de pensamiento, estados emocionales y patrones de conducta aspectos que define Bandura (1994) como autoeficacia. Por lo tanto se sugiere que en posteriores replicas o ampliaciones de este estudio sobre este tema se tenga en cuenta esta variable. El tercer hallazgo de esta investigación indica que los dos grupos disminuyeron en la frecuencia de comportamientos agresivos, según el reporte de la observación realizada por los cuidadores; dado que este resultado es contrario a los obtenidos en las puntuaciones de la escala DERS de los dos grupos, es probable que la razón se deba a que se hayan presentado sesgos en la observación realizada por los cuidadores, ya que como lo afirman Kaplan y Saccuzzo (2006), aspectos como las expectativas, la experiencia en realizar registros de observación, el nivel de educación, el conocimiento que tengan respecto a la investigación, pueden afectar la precisión de las medidas tomadas. Así mismo el hecho que las medidas se hayan tomado en tiempos diferentes por cada uno de los observadores, impidió la obtención un índice de acuerdo entre observadores, lo cual hubiera podido ayudar a establecer la confiabilidad de las medidas obtenidas (Kotliarenco y Mendez, 1988). Por lo tanto se sugiere que para futuras investigaciones sobre este tema se fortalezca este aspecto metodológico realizando un entrenamiento más exhaustivo a los observadores y de ser posible que la observación sea

  realizada por personas externas a la institución. Otra posible explicación de este hallazgo puede estar relacionada con el papel que juegan las expectativas de la institución sobre la efectividad de las intervenciones que se realizan con los adolescentes, haciendo que los cuidadores pudieran haber sesgado sus observaciones para responder a estas expectativas. El cuarto hallazgo indica que los adolescentes tuvieron un aprendizaje medio de los temas abordados en las sesiones según las observaciones realizadas por las investigadoras; frente a esto se puede concluir que aunque los jóvenes adquirieron conocimientos respecto a la emoción de la ira y a la forma de regularla, esto no necesariamente se reflejó en la forma de comportarse ni en el reporte que ellos hicieron de sus dificultades de regulación emocional, como lo indica el primer hallazgo de este estudio. Un elemento que se debe considerar al evaluar este resultado es qué tan adaptativas resultan ser las estrategias de regulación emocional empleadas por los jóvenes en situación de alto riesgo (Southam-Gerow & Kendall , 2002), ya que su contexto puede favorecer el uso de respuestas agresivas en lugar de promover aquellas que son socialmente aceptables, haciendo que a pesar de conocer las estrategias adecuadas de regulación emocional, no resulte para ellos funcional emplearlas (Kellner & Bry, 1999), aspecto que se evidencia en la dinámica cotidiana que viven ellos en la institución. Frente a los resultados de este estudio se sugiere seguir profundizando en este tipo de intervenciones, basadas en terapia de tercera generación, en especial Terapia de Aceptación y

11   Compromiso, con el fin de tener mayor evidencia empírica de su efectividad en formatos grupales y en poblaciones con alto grado de vulnerabilidad, se sugiere de igual forma que para futuras aplicaciones se realice modificación a las sesiones 5 y 6 las cuales según el criterio de las investigadoras requieren de un proceso de abstracción o entendimiento complejo que en ocasiones no se logra y dificulta la realización exitosa de la sesión, el hecho de utilizar metáforas, para hacer una semejanza con aspectos de la vida cotidiana de los adolescentes dificulta la posibilidad de comprensión y de interiorización de los elementos tenidos en cuenta en las sesiones. Así mismo es importante que en nuevos estudios se realice una revisión de la historia familiar y de desarrollo del sujeto con el fin de poder conocer si las particularidades de cada uno pueden llegar a incidir en la apropiación y entendimiento de los contenidos de las sesiones de intervención. De igual forma se plantea que para la replicación de este protocolo se tenga en cuenta un estímulo que mantenga la motivación de los participantes en la investigación y así mismo que durante la aplicación del protocolo las personas que hagan la aplicación asuman un papel directivo y participativo que motive a la población de replicación a tener una participación activa en las sesiones. También se propone hacer un abordaje preventivo de la regulación emocional realizando investigaciones en las que se tenga en cuenta protocolos que estén orientados a otro tipo de poblaciones como niños en etapa preescolar (Rendón, 2007) ya que como lo han sugerido diversos autores como Lozano, González, & Carranza (2004)

  y León y Sierra (2008), es en edades tempranas donde la comprensión y la regulación emocional tienen su desarrollo y a medida que el sujeto va creciendo va modificando o adquiriendo mayores estrategias para regularse emocionalmente (Gross y Muñoz, 2007), así mismo es importante que se contemple en las intervenciones la educación emocional a los padres o red apoyo con la que cuenta el sujeto para darle mayor soporte a las estrategias adquiridas durante el proceso de intervención (Wong et al. 2008). Finalmente se sugiere continuar con la línea de trabajo en la efectividad de protocolos basados en terapias de tercera generación en especial terapia de aceptación y compromiso tanto en poblaciones que presenten el mismo tipo de vulnerabilidad que los jóvenes del estudio, como en poblaciones con características sociodemográficas y etáreas diferentes. REFERENCIAS Aguado, L. (2005). Emoción, afecto y motivación: Un enfoque por procesos. Madrid: Alianza. Aldao, A., Nolen-Hoeksema, S. & Schweizer, S. (2009). Emotion regulation strategies across psychopathology: A meta-analytic review. Clinical Psychology Review. [en línea] Recuperado el 21de diciembre de 2009 de http://www.sciencedirect.com/science? _ob=ArticleURL&_udi=B6VB84XRJ XB04089b43869484c95a75b17996 Bach, P. & Moran, D. (2008). ACT in practice. Oackland: Harbinger. Bandura, A. (1994). Self-efficacy. In V. S. Ramachaudran (Ed.), Encyclopedia of human behavior (Vol.

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