PLAN DE TRABAJO DE LA BECREA (BIBLIOTECA ESCOLAR CENTRO DE RECURSOS PARA LA ENSEÑANZA Y EL APRENDIZAJE)

CURSO 2013 – 2014

Biblioteca IES Sierra de Mijas

ÍNDICE PÁGS. 1. INTRODUCCIÓN.

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2. ÁMBITOS DE ACTUACIÓN DE LA BECREA Y ELEMENTOS NECESARIOS PARA REALIZAR LAS INTERVENCIONES.

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2.1. Ámbitos. 2.2. Elementos necesarios para realizar las intervenciones en los distintos ámbitos de la biblioteca. 3. COMPONENTES DE LA BECREA. 3.1. Análisis de la situación de la biblioteca y su contexto, considerando las intervenciones que en el centro se han llevado a cabo relacionadas con la organización y funcionamiento de la biblioteca. 3.2. Objetivos generales de mejora de la actuación de la biblioteca. 3.3. Tareas técnico-organizativas, automatización, organización de la colección y recursos humanos. 3.4. Servicios de la biblioteca. 3.5. Mecanismos e instrumentos para la circulación y difusión de la información referidos a servicios y programas articulados desde la biblioteca. 3.6. Presencia e incorporación del uso de la biblioteca a los documentos del centro. 3.7. Política documental. 3.8. Contribución de la biblioteca al fomento de la lectura. 3.9. Programa de formación básica de usuarios de biblioteca y acceso a la información y otros recursos documentales. 3.10. Programa para la formación en habilidades y estrategias para aprender a investigar e informarse. 3.11. Intervenciones relacionadas con la elaboración de proyectos de trabajo aula-biblioteca escolar; proyectos documentales y de investigación. 3.12. Apoyos de la biblioteca a planes y proyectos del centro. 3.13. Atención a la diversidad y compensación educativa. 3.14. Actuaciones para las familias y su implicación en actividades de la biblioteca escolar. 3.15. Apertura extraescolar. 3.16. Colaboración con otros sectores, organismos o entidades. 3.17. Formación y competencias del profesorado. 3.18. Seguimiento y evaluación continua de las intervenciones en el centro sobre uso de la biblioteca escolar.

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1. INTRODUCCIÓN La lectura constituye una actividad clave en la educación por ser uno de los principales instrumentos de aprendizaje cuyo dominio abre las puertas a nuevos conocimientos. En la sociedad de la información el lector, además de comprender la lectura, tiene que saber encontrar, entre la gran cantidad de información de que dispone en los distintos formatos y soportes, aquella información que le interesa. El artículo 113 de la Ley Orgánica de Educación recoge que las bibliotecas escolares deben contribuir a "fomentar la lectura y a que el alumno acceda a la información, y otros recursos para el aprendizaje de las áreas y materias y pueda formarse en el uso critico de los mismos". Por otra parte, se incide en que las bibliotecas escolares funcionen como espacios abiertos al servicio de la comunidad educativa y en colaboración con los municipios. Las Instrucciones de 11 de Junio de 2012 de la Dirección General de Ordenación y Evaluación Educativa sobre la organización y funcionamiento de las bibliotecas escolares constituyen el marco de actuación de los centros escolares para el presente curso 2012-2013. La referencia especial que hace la Ley de Educación de Andalucía trasladada a los Reglamentos Orgánicos de los centros ha de contribuir a que la biblioteca escolar tome posición en el centro educativo, convirtiéndose en un recurso estratégico que adquiera protagonismo en determinados ámbitos de desarrollo del Plan de Centro. 2. ÁMBITOS DE ACTUACIÓN DE LA BECREA Y ELEMENTOS NECESARIOS PARA REALIZAR LAS INTERVENCIONES. 2.1. Ámbitos. Estos son los ámbitos en los que la biblioteca puede conseguir cierta relevancia: •

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Selección de recursos, organización y gestión de la información y el conocimiento. La importancia y el sentido de la colección no están en ella misma en cuanto a cantidad, calidad o accesibilidad, sino en su utilidad para estimular la curiosidad y el saber del alumnado y el profesorado. Acceso y uso de la información mediante programas de educación en el uso de la información y recursos documentales de aprendizaje. Desde la biblioteca se pueden articular programas de formación de usuarios, habilidades intelectuales, competencia digital y tratamiento y uso de la información. Contribución al desarrollo de las competencias básicas y apoyo curricular a todas las áreas. Para ello es necesario incorporar el uso regular de la biblioteca escolar como recurso de apoyo para el aprendizaje y la mejora de la expresión oral y escrita del alumnado en todas las áreas. Impulso de actuaciones para el fomento de la lectura que propicien que la lectura se convierta en una práctica cotidiana y contribuya al afianzamiento de la práctica lectora y escritora. Apoyo al desarrollo de la competencia lectora en el tiempo de lectura reglado. Participación social de la biblioteca con las familias a través de la apertura extraescolar y de la promoción de programas de extensión cultural. 3

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2.2. Elementos necesarios para realizar las intervenciones en los distintos ámbitos de la biblioteca. Los elementos básicos para sostener las funciones, recursos, servicios y programas de la biblioteca al servicio del proyecto educativo son: Los servicios. Requieren un mantenimiento constante: préstamo, información bibliográfica, difusión selectiva de la información ... • Recursos humanos. La persona responsable de la biblioteca escolar y el equipo de apoyo unido al apoyo y liderazgo del equipo directivo impulsan el uso de la biblioteca. La asignación horaria y distribución de responsabilidades, trabajo colaborativo y coordinación de todas las personas implicadas es relevante. • Tiempos. Hay que contemplar los tiempos de organización y planificación que requieren el recurso bibliotecario y los tiempos de uso de la biblioteca para acceder a los servicios, para desarrollar el currículo, para actividades generales y para acciones de compensación (apertura extraescolar). La autonomía pedagógica, organizativa y de gestión del centro garantizará la dotación de cobertura suficiente a la organización y funcionamiento de la biblioteca escolar. • Los espacios. Contemplamos tanto los espacios de la biblioteca con su equipamiento e infraestructura como a las aulas en las que habrá dotaciones temporales a través de las secciones documentales de aula o libros que configuran el itinerario lector del centro. • Los programas. Desde la biblioteca se pueden articular y coordinar apoyos pedagógicos en función de los requerimientos del profesorado. Los programas fundamentales son la formación básica de usuarios, habilidades en el uso de la información y fomento de la lectura. Desde la biblioteca se ha de apoyar las demandas de asesoramiento documental y de provisión de recursos derivadas de programas o planes del centro. • La formación. Son esenciales para el docente responsable de la biblioteca y también de gran importancia para el resto del profesorado las acciones formativas relacionadas con las estrategias de utilización de la biblioteca como recurso educativo de apoyo al proceso de enseñanza y aprendizaje. •

3. COMPONENTES DE LA BECREA. Para abordar el diseño y la elaboración del plan de trabajo de la biblioteca escolar la persona responsable de la misma, junto a los miembros de la dirección del centro y en coordinación con el equipo de apoyo atendiendo al proyecto educativo, considerará los siguientes componentes y líneas sobre las que seguir avanzando: 3.1. Análisis de la situación de la biblioteca y su contexto, considerando las intervenciones que en el centro se han llevado a cabo relacionadas con la organización y funcionamiento de la biblioteca. A la hora de elaborar el plan de trabajo de la biblioteca hemos de considerar, tras un análisis detallado, en qué situación de desarrollo y uso por parte del alumnado, del profesorado y de la comunidad educativa se encuentra. Se ha de conocer esta situación para comprobar las debilidades y fortalezas de nuestra biblioteca y, consecuentemente, para tener los elementos clarificadores con los que planificar gradualmente los objetivos y las actuaciones en el tiempo, sin agobios, y afianzando cada etapa de evolución. Nuestra

biblioteca escolar empieza a tenerse en cuenta a la hora de la elaboración de 4

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programaciones y planes de trabajo, por lo que podemos decir que hemos iniciado la lenta transformación hacia el modelo que se quiere implantar. Aunque a título individual está presente en la práctica docente de algún compañero no podemos decir todavía que la biblioteca se encuentre en una etapa de complementariedad del trabajo docente. Con respecto a cursos anteriores hemos de destacar que el presente curso la biblioteca surtirá a todos los grupos de la ESO de los recursos librarios necesarios para llevar a cabo las distintas lecturas establecidas en lo que puede considerarse ya un incipiente itinerario lector del centro. Para ello ha sido necesaria una labor previa, llevada a cabo tanto por el profesorado del centro como por el equipo de biblioteca, que ha dado como resultado la creación de distintos lotes de libros que asegurarán la lectura en el centro dentro del marco normativo vigente. Mucho mayor es el cambio producido en el alumnado en relación con la utilización de la biblioteca. Cuando no hace muchos años una mayoría del alumnado abandonaba el centro no sólo sin haber utilizado la biblioteca sino incluso desconociendo su existencia, en la actualidad un amplio grupo de ellos la utiliza de manera regular y, si bien la concepción de la misma es probablemente tradicional, podemos afirmar que en el alumnado se ha producido una evolución mayor en el tema de bibliotecas que en el profesorado. Respecto al ámbito de desarrollo curricular y educación en el uso de la información y de recursos documentales para el aprendizaje, en los años precedentes hemos iniciado de manera aún poco sistematizada un programa transversal de formación básica de usuarios de biblioteca que contempla actividades relacionadas con el conocimiento de las utilidades de la biblioteca y de los recursos que ofrece para el aprendizaje y el ocio. El aumento de horas lectivas asignadas al profesorado en general y la asignación horaria establecida para el responsable de biblioteca y el equipo de apoyo de dedicación a la biblioteca imposibilitan, sin embargo, el que se pueda establecer un programa sistemático en este sentido, dado que sólo es posible llevarlo a cabo fuera del horario lectivo asignado a dicho profesorado. En relación a la contribución de la biblioteca al fomento de la lectura, hemos acometido distintas acciones de apoyo al desarrollo de la competencia lectora y su vinculación a la implementación de los proyectos lingüísticos o planes de lectura del centro. En cuanto a la infraestructura, gestión y servicios se precisa el mantenimiento e incremento de servicios de la biblioteca, la intensificación de la promoción y presencia de la biblioteca en la Web del centro y en el ciberespacio y la creación de mecanismos para hacer circular de manera eficaz la información y el conocimiento. También, entre las acciones para desarrollar la política documental, hemos iniciado la configuración de un itinerario de lectura para todo el centro. Respecto al ámbito social y de cooperación a través de las reuniones generales de tutores pretendemos atraer a las familias implicándolas a través del conocimiento de la biblioteca. Consideramos fundamental que toda la comunidad educativa del centro conozca el plan de trabajo de la biblioteca por lo que nuestras actuaciones en relación con los padres deberán llevarse a cabo fundamentalmente en el consejo escolar del centro, aunque hemos de añadir que en el presente curso se nos ha invitado a participar en la asamblea general de la AMPA del centro con el objetivo de dar a conocer el papel de la Biblioteca Escolar en el centro educativo así como las distintas actuaciones previstas para este curso. Igualmente es nuestro deseo consolidar las actuaciones ya iniciadas de colaboración con la biblioteca pública de la zona. Finalmente, es importante la presencia de la biblioteca y sus diversos usos y servicios en los 5

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documentos nucleares del centro. Se ha actualizado todo lo relativo a la biblioteca en el ROF del centro siendo necesaria ahora consolidar su presencia en las programaciones docentes, así como en el proyecto educativo del centro. El curso pasado desde la biblioteca del centro se impulsó un proceso de reflexión en torno a la competencia lingüística y a posibles actuaciones en relación con la misma. A través de un documento, presente ya en el proyecto educativo del centro, se determinaron aquellas actuaciones prioritarias que debíamos llevar a cabo para mejorar la competencia lingüística de nuestro alumnado y se impulsó su evaluación a lo largo de todo el proceso. La intención era fijar unos objetivos claros sobre los que actuar a través de unas actuaciones básicas. Para el presente curso consideramos conveniente empezar a diseñar un plan de lectura del centro en el que se recojan de manera sistematizada y consensuada las actuaciones que vamos a llevar a cabo en relación con la misma, el itinerario lector del centro así como toda la fundamentación teórica de la que debe partir esta actuación. 3.2.

Objetivos generales de mejora de la actuación de la biblioteca.

Teniendo como referente principal lo que la Ley Orgánica de Educación en su artículo 113 dice: “Las bibliotecas escolares contribuirán a fomentar la lectura y a que el alumno acceda a la información y otros recursos para el aprendizaje de las demás áreas y materias y pueda formarse en el uso crítico de los mismos. Igualmente, contribuirán a hacer efectivo lo dispuesto en los artículos 19.3 y 26.2 de la presente Ley” y tomando como punto de partida el análisis efectuado en el punto anterior establecemos los siguientes objetivos: • • • • • • • • •

Iniciar un programa de formación básica de usuarios que de manera sistematizada vaya abarcando a todo el centro. Promocionar y apoyar intervenciones relacionadas con la elaboración de proyectos de trabajo aula-biblioteca y proyectos integrados. Apoyar desde la biblioteca proyectos, planes, y actividades desarrolladas en el ámbito de las aulas y de las distintas áreas. Desarrollar actuaciones relacionadas con la atención a la diversidad. Apoyar la implementación del proyecto lector y escritor del centro. Iniciar la implementación de las secciones documentales de aula y contribuir a la planificación de actos de lectura y uso de la documentación en todas las áreas. Mejorar la infraestructura, gestión y servicios de la biblioteca. Incentivar la colaboración e implicación de las familias así como de otros organismos e instituciones. Fomentar la participación de toda la comunidad educativa en el blog de la biblioteca y dotar de contenido la sección de biblioteca en la página Web del centro. 3.3. Tareas técnico-organizativas, automatización, organización de la colección y recursos humanos.

En la biblioteca siempre hay un trabajo que ocupa tiempo, requiere cualificación y ha de hacerse con rigor, llevando a cabo una equilibrada distribución de responsabilidades y tareas entre el profesorado del equipo de apoyo. Este componente trata, por un lado, sobre los aspectos relacionados con la organización y gestión de la colección, la adecuación de espacios y los recursos materiales necesarios; y por otro lado, clarifica las responsabilidades de los recursos humanos que han de realizar tareas relevantes en el apoyo a los programas y en la estabilidad de sus servicios todas ellas recogidas en el apartado del ROF relativo a la Biblioteca y derivadas de las instrucciones de 24 de Julio de 2013 relativas a la organización y funcionamiento de las bibliotecas escolares durante el curso 2013- 2014. Durante el presente curso nuevamente un grupo de compañeros mayores de 55 años que realizarán 6

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función de atención al alumnado y profesorado que utilice la biblioteca durante varias horas del horario lectivo de apertura, dicha labor ha sido posible gracias a la disponibilidad de dicho colectivo y a que el grado de organización de los recursos no hace tan necesaria la presencia del equipo de biblioteca en las condiciones hasta ahora establecidas. 3.4.

Servicios de la biblioteca.

Los servicios van dirigidos a favorecer el acceso a la información y a los recursos disponibles en la biblioteca y están recogidos dentro del ROF del centro para su difusión y conocimiento por toda la comunidad educativa. Para la promoción lectora es fundamental el buen funcionamiento del servicio de préstamo, tanto individual como colectivo, y el acceso al catálogo en línea. La biblioteca prestará los siguientes servicios, aunque podrán ser ampliados en el caso de que surjan nuevas necesidades: lectura y consulta en sala, información general, orientación bibliográfica, recomendaciones lectoras, elaboración y difusión de boletines, exposiciones de noticias y novedades o selecciones temáticas, club de lectores , visionado de deuvedés... 3.5. Mecanismos e instrumentos para la circulación y difusión de la información referidos a servicios y programas articulados desde la biblioteca. La biblioteca escolar tiene la función de gestionar la información cultural y curricular. Para su difusión pueden utilizarse distintos medios con el objetivo de que la información llegue con fluidez a la comunidad escolar y sea efectiva. Es necesario mantener un servicio operativo actualizado en el que el blog de la biblioteca o la sección de biblioteca de la Web del centro se conviertan en un canal de información fundamental dedicado a la presentación y difusión de contenidos, programas y servicios de la biblioteca escolar y las intervenciones en lectura y escritura. Para mejorar el conocimiento y difusión del plan de trabajo anual de la biblioteca se difundirán entre el profesorado un documento que recoja los puntos fundamentales del mismo. En las reuniones de claustro, equipo técnico de coordinación pedagógica y consejo escolar del centro se informará regularmente sobre cuestiones que atañen al diseño y desarrollo del plan lector y escritor del centro y al uso de la biblioteca.

3.6. Presencia e incorporación del uso de la biblioteca a los documentos del centro. Las líneas maestras de uso pedagógico de la biblioteca deben contemplarse en el proyecto educativo, reflejarse en el reglamento de organización y funcionamiento y el plan de trabajo de la biblioteca. De estos documentos emanan las directrices generales para garantizar la presencia de las intervenciones en fomento de la lectura y uso regular de la biblioteca en las programaciones didácticas y plan lector y escritor del centro. Nuestro objetivo debe ser por tanto mantener actualizada dicha información, presente en cada uno de esos ámbitos y accesible a todos los sectores de la comunidad educativa. Durante el pasado curso se incorporaron al proyecto educativo de centro una serie de actuaciones encaminadas a la mejora de la competencia lingüística. Para el presente curso la biblioteca se ha planteado como objetivo, como ya hemos mencionado anteriormente, la elaboración de un primer borrador del Plan de Lectura o Plan Lector del centro, en el que, en nuestra opinión, además de recogerse la fundamentación teórica y el marco legal del mismo, deberían incluirse aquellas actuaciones que, una vez consensuadas, se pretenden llevar a 7

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cabo en el centro con el objetivo de mejorar la competencia lingüística. Igualmente pensamos que debe incluirse en el mismo el itinerario lector del centro. 3.7.

Política documental.

Los criterios en la selección y adquisición de libros y otros recursos documentales y la configuración del itinerario lector del centro intentan mantener una colección dinámica, adaptada a las necesidades curriculares y que satisfaga las necesidades del alumnado. La selección ha de considerar carencias, equilibrar la colección, adquirir libros para las secciones documentales de aula, impulsando, por tanto, su creación y desarrollo, y para complementar los contenidos de las áreas, aportar variedad y garantizar la calidad y pluralidad de opciones al alumnado. También contemplamos la adquisición de materiales específicos para el profesorado, para padres y madres, para los proyectos en los que el centro está inmerso y para la atención a la diversidad. Nuestro objetivo es establecer las condiciones que permitan la creación de un corpus de textos para la configuración del itinerario lector del centro. Este corpus debería ir creándose teniendo en cuenta las sugerencias y propuestas que vayan haciendo el profesorado, relacionado principalmente con el desarrollo curricular, y el alumnado, entre los que predominan las peticiones de lecturas motivadoras y de disfrute, así como las sugerencias provenientes de los demás sectores de la comunidad educativa, garantizando la presencia en la BE-CREA de un mínimo de ejemplares de los distintos documentos que se proponen cada año en el centro. En el presente curso se nos plantea el gran reto de crear distintos lotes de lecturas, partiendo de los fondos existentes, que permitan en la ESO la lectura de obras de temática y naturaleza variada, incluidas en el itinerario lector, y dentro de la normativa legal existente. La asignación de un presupuesto anual para poder cumplir ese objetivo es fundamental. 3.8.

Contribución de la biblioteca al fomento de la lectura.

La biblioteca escolar ha de contribuir a la consecución de acuerdos mínimos por parte del profesorado que generen líneas maestras de actuación en fomento de la lectura, dando lugar a la definición de una política general de actuación en este ámbito. Este marco general ha de permitir la clarificación tanto de las características de las actividades e intervenciones de carácter general ( exposiciones, celebraciones, efemérides, visita de escritores, elaboración de un blog, de un periódico, creación de grupos de lectores, visitas a periódicos, etc.), como de las decisiones relacionadas con la metodología e intervenciones circunscritas al grupo clase, con el tratamiento de la lectura que pasa necesariamente por la implicación del profesorado de todas las áreas. Partiendo de las instrucciones de 24 de julio de 2013 referentes al tratamiento de la lectura durante el curso 2013 – 2014 desde las biblioteca se ha vuelto a insistir en la responsabilidad del ETCP en lo que se refiere al diseño de las líneas generales de actuación en el tratamiento de la lectura y la escritura en el centro y en la conveniencia de empezar a esbozar un plan lector o plan de lectura del centro que nos lleve a abordar de manera sistemática y consensuada la lectura y la escritura estableciendo los principios básicos de actuación que deberán concretarse en cada uno de los distintos ámbitos del centro, alcanzando su concreción máxima en las programaciones de aula de cada una de las materias. elaborado y difundido unas líneas básicas de actuación con el objetivo de servir de punto de partida para una reflexión posterior que nos lleve a abordar de manera sistemática y consensuada en el centro la lectura y la escritura y que esperamos hayan servido a la hora de abordar ambas en las 8

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programaciones didácticas del presente curso. (INTERVENCIONES EN LECTURA Y ESCRITURA) CONTRIBUCIÓN AL ACCESO Y USO DE LA INFORMACIÓN 3.9.

Programa de formación básica de usuarios de biblioteca y acceso a la información y otros recursos documentales.

Este programa supone una intervención en y desde la biblioteca escolar con el objetivo de que el alumnado y el profesorado conozcan la colección de la biblioteca y los recursos de información disponibles, sepan cómo están organizados y cómo acceder a ellos para utilizarlos adecuadamente, sean conscientes de las posibilidades que ofrecen para complementar y ampliar sus informaciones y conocimientos, así como desarrollar habilidades de acceso y uso de la información. La biblioteca debe aportar documentos-guías para que el programa de formación básica de las personas usuarias se implemente con garantías de continuidad. Este programa debería extenderse a todo el centro, involucrando de manera activa al profesorado y haciendo protagonista del mismo al alumnado. Para ello cada año es nuestra intención elaborar una programación en la que se incluyan los objetivos propuestos, los contenidos a abordar, el alumnado al que va dirigido, y la secuenciación y evaluación del mismo así como el punto de arranque de cada nueva actuación en cursos posteriores. Durante el curso 2013-2014 desearíamos iniciar actuaciones sistematizadas en este sentido que nos gustaría llevar a cabo en 1º de ESO, aunque mucho nos tememos que un año más será prácticamente imposible hacerlo, constituyendo este punto una de nuestras principales preocupaciones en el momento actual y, sin duda, nuestro principal déficit. 3.10.

Programa para la formación en habilidades y estrategias para aprender a investigar e informarse.

Este componente se articula como un programa específico de la biblioteca escolar para todo el centro que procura intervenciones relacionadas con las competencias y actitudes para seguir aprendiendo a lo largo de toda la vida, tratamiento de la información y competencia digital. Los tutores, asesorados por el responsable de misma, serán preferentemente los que lleven a cabo en la biblioteca escolar las intervenciones para desarrollar hábitos de estudio a través de la adquisición de habilidades de trabajo, el aprendizaje de técnicas y estrategias de organización del trabajo intelectual y el aprendizaje en el uso de la documentación y la información. La biblioteca debe aportar secuencias didácticas e información sobre las etapas en el trabajo de búsqueda de información e investigación. Un programa para la formación en habilidades y estrategias para aprender a investigar e informarse requiere previamente de actuaciones relacionadas con la formación básica de usuarios de biblioteca y acceso a la información y otros recursos documentales, por lo que debe contemplarse como un objetivo a medio plazo una vez que se haya establecido y consolidado un programa básico de formación de usuarios de biblioteca.

3.11.

Intervenciones relacionadas con la elaboración de proyectos de trabajo aulabiblioteca escolar; proyectos documentales y de investigación. 9

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Si se han articulado programas básicos de formación de usuarios y desarrollo de habilidades de información y uso de la documentación, el profesorado estará en condiciones de promover la realización de proyectos de trabajo aula-biblioteca y proyectos documentales. Es fundamental que el equipo de apoyo sea el que impregne progresivamente al centro de una verdadera cultura de uso de la biblioteca escolar. Para que estas intervenciones se desarrollen es preciso contemplar una estrecha colaboración entre el profesorado y el responsable de biblioteca. Por otra parte, la acción docente ha de caracterizarse por una interacción rica entre las intervenciones en el aula y las que se realizan en la biblioteca manejando distintas fuentes de información y uso de la documentación. En esta acción la biblioteca apoya al profesorado que requiere sus servicios con el fin de que puedan desarrollar los proyectos con todos los recursos existentes. En el caso de los proyectos integrados del nivel cuarto de educación secundaria, la biblioteca sí puede articular una actuación en coordinación con el profesorado responsable de esta intervención. Esta intervención constituiría un tercer paso en las intervenciones que nos planteamos desde la BE, de aquí que quede configurado como un objetivo a medio-largo plazo que implica necesariamente la consecución de los anteriores. 3.12.

Apoyos de la biblioteca a planes y proyectos del centro.

En este componente la biblioteca tiene un doble papel de apoyo: por un lado, disponer de la documentación y recursos necesarios para la óptima implementación de los programas en el centro y, por otro, proporcionar materiales de trabajo para el alumnado y actividades para el profesorado y padres que tengan que ver con determinados aspectos de los proyectos o planes susceptibles de divulgación y fomento de la participación ( proyectos de innovación educativa de diversa temática, grupos de trabajo del profesorado, coeducación, cultura de paz, introducción de las tecnologías de la información y la comunicación, programas europeos, interculturalidad…). El responsable de la biblioteca ha de estar atento a las demandas y necesidades documentales de los responsables de programas y planes del centro. Estos responsables, a su vez, han de reconocer a la biblioteca escolar como un recurso fundamental para complementar las actividades y tareas de sus respectivos proyectos en cuanto a la provisión de documentación específica, difusión y exhibición de trabajos y conexión con otros programas se refiere. 3.13.

Atención a la diversidad y compensación educativa.

La biblioteca escolar ha de contribuir a la compensación de desigualdades, a la prevención de la exclusión y coadyuvar a la inclusión social y cultural, para ello deberá coordinarse con todos los agentes que intervengan en el proceso (orientador, profesorado, educadores sociales… ) y con el equipo directivo, pues habrá que planificar los refuerzos educativos, seleccionar los recursos librarios y no librarios para que la biblioteca escolar realice la provisión pertinente (adquisición de materiales para el alumnado de refuerzo, de altas capacidades intelectuales, con diversidad funcional) y vincular estas acciones a los programas de acompañamiento y refuerzo en horario extraescolar. ACCIÓN DE COLABORACIÓN 3.14.

Actuaciones para las familias y su implicación en actividades de la biblioteca escolar. 10

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Arbitrar estrategias de sensibilización y participación de los padres y madres en actividades relacionadas con el fomento de la lectura y el apoyo al estudio es una tarea corresponsable de la biblioteca y el profesorado con función tutorial. Desde la biblioteca deben crearse los canales que posibiliten el conocimiento por parte de las familias de los servicios que presta y la difusión de las distintas actividades que se vayan a realizar desde la misma encaminadas al fomento de la lectura. En la agenda escolar del centro se incluye una página referente a la biblioteca en la que se da a conocer la biblioteca tanto al alumnado como a los padres y madres del centro prestando especial atención a los servicios que presta y que están a disposición de toda la comunidad educativa. Igualmente en las reuniones generales de grupo-clase de 1º de ESO se va a incluir entre los puntos a tratar por el profesorado uno dedicado a la biblioteca escolar. Como novedad este curso el responsable de la Biblioteca Escolar ha sido invitado a participar en la Asamblea General de la AMPA del centro con el objetivo de divulgar entre los padres y madres del centro el papel de la biblioteca escolar concebida como centro de recursos para la enseñanza y el aprendizaje así como las principales actuaciones previstas para este curso escolar. Igualmente ha requerido su participación y colaboración con la biblioteca del centro haciéndoles ver el papel tan importante que pueden desempeñar en la educación de sus hijos también en este sentido. 3.15.

Apertura extraescolar.

La apertura extraescolar de la biblioteca puede complementar las líneas de intervención del plan de trabajo de la biblioteca facilitando el mayor número posible de servicios a toda la comunidad educativa y vinculando su actuación a programas de compensación y apoyo educativo como se ha indicado anteriormente. A pesar de ello la experiencia de los cursos precedentes desaconseja su apertura en horario no lectivo, dado que su uso fue prácticamente inexistente. Tal vez deberíamos iniciar un debate y reflexión sobre los motivos que expliquen ese escaso uso y la forma de conseguir su utilización en dicho horario. 3.16.

Colaboración con otros sectores, organismos o entidades.

Desde la biblioteca se puede desarrollar una importante labor de proyección cultural, conectando la realidad escolar con la realidad social y cultural del barrio, del pueblo, de la ciudad. Para ello, es imprescindible disponer de información y elaborar un directorio sobre la infraestructura bibliotecaria, servicios de lectura, centros culturales, librerías, etc., de la zona y, en función de un análisis realista, establecer líneas de colaboración. En los años anteriores hemos mantenido una relación directa y fluida con la biblioteca municipal de Las Lagunas, que iba desde la facilitación de las lecturas que se llevan a cabo en el centro a la biblioteca municipal para realizar por la misma, siempre que fuera posible, una provisión de fondos que permitiera atender las demandas de nuestro alumnado, hasta a la realización de actos como encuentros con autores o celebración del Día de la Lectura en Andalucía. Nuestro objetivo es incrementar dichas actuaciones y rentabilizar al máximo los recursos materiales y humanos y los espacios de ambas bibliotecas. 3.17.

Formación y competencias del profesorado.

Conocer las prácticas pedagógicas del profesorado en relación al uso de la biblioteca escolar y de la documentación debe ser el paso previo para posteriormente detectar las necesidades de formación 11

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en este ámbito. Igualmente se ha de promover la innovación y la investigación a través del trabajo cooperativo que desarrolle líneas temáticas vinculadas a los ámbitos de actuación de la biblioteca escolar. Asimismo, habría que promover estrategias de formación que procuren las lecturas profesionales y las tareas vinculadas a las actuaciones en las aulas y en la biblioteca. Como primer paso para abordar de manera conjunta la lectura y la escritura en el centro el curso pasado elaboramos el documento INTERVENCIONES EN LECTURA Y ESCRITURA, en el que se recogían de manera sistematizada una serie de actuaciones que podemos incluir en nuestras prácticas docentes para abordar la lectura y la escritura. Para el presente curso la biblioteca pretende ser el punto desde el que se inicie el tratamiento y debate de lo que va ser el Plan de Lectura o Plan Lector del Centro, en el que se recojan los principios teóricos en los que debe basarse así como las distintas actuaciones que se diseñen en el centro para mejorar la competencia lingüística y el incipiente itinerario lector del centro. Este documento, sin ninguna duda, debe servir de referencia y orientación al profesorado del centro a la hora de diseñar sus prácticas docentes e integrar en ellas las distintas actuaciones en relación con la lectura y la escritura como un instrumento más a nuestro servicio para alcanzar los distintos objetivos que nos planteamos. 3.18.

Seguimiento y evaluación continua de las intervenciones en el centro sobre uso de la biblioteca escolar.

Además de la elaboración de la memoria anual de la biblioteca, cada dos o tres años en el plan de trabajo habrá que contemplar una autoevaluación en profundidad del uso de la biblioteca. Para ello será necesario establecer una relación pormenorizada de dimensiones, indicadores y señales de avance para la autoevaluación de la biblioteca que permitirán conocer la calidad de los trabajos y abordar el informe de evaluación.

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